Dios, no pediré nada lujoso. ¡Así que, por favor, déjame tener una esposa!

¡Por favor déjame

casarme con una mujer amable con buen sentido! No quiero a una mujer que menosprecia a su
esposo y cría a su hijo como si fuera un extraño. ¡Por favor, dame una compañera adecuada!

Mi fuerte deseo se escapó de mi boca.

Las dos se sorprendieron, pero este fue un asunto muy importante para mí.

A pesar de haber hecho todo lo que pude, los resultados se habían torcido y tuve que sufrir varios
contratiempos. ¡Así que por favor concédeme este deseo a mi lastimoso yo, Dios!

Mientras oraba frenéticamente, Anjie y Olivia también comenzaron a orar a mi lado.

Como se esperaba, ellas no expresaron sus deseos.

Me pregunté qué desearían las dos.

No tenía idea de la oración de Anjie, pero probablemente tenía que ver con el matrimonio ya que
para eso era el santuario. En cuanto a Olivia, me pregunté si ella se acercaría más a alguien que no
fueran los inútiles de Greg y Brad.

No, espera, había poca esperanza. Como Julián y Jilk también eran inútiles, solo quedaba Chris
como candidato.

Lo que sea, mientras Olivia sea feliz, entonces cualquiera está bien.

Solo quería que el país se salvara.

Volví a pensar en mi deseo.

Si es posible, haz que su pecho sea grande, y una cintura estrecha también estaría bien.

¡Sería incluso mejor si fuera un poco juguetona! Honestamente, quiero una adulta amorosa que
pueda mimarme y.

Al escuchar mi oración de imparable deseo, Anjie y Olivia me tiraron de las orejas y me arrastraron
con vergüenza.

¡Esperen! ¡Aún no termino! ¡Todavía hay más que quiero decir!

La cara de Anjie estaba toda roja.

¿Q-Qué estás diciendo delante de una niña, idiota?

La cara de la joven doncella del santuario también estaba roja.

Eso fue bastante lindo ¿No? No, no quise decir eso en un sentido retorcido. Me pareció precioso
que una chica fuera tan pura.

Lo suficientemente pura como para avergonzarme de mis propios deseos.

Olivia se disculpó con la doncella del santuario.

Lo siento. Por favor, olvida lo que acabas de escuchar.

Pero la niña contestó, U-Umm, está bien. ¡Me sorprendió mucho, pero haz lo mejor que puedas!

¡Cierto! Haría mi mejor esfuerzo. Haría mi mejor esfuerzo en la búsqueda del matrimonio.

Agité la mano hacia la sonriente doncella del santuario, y descendimos la escalera. Finalmente, los
tres regresaron al lujoso crucero.