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Artículo 202° CP Usurpación
Artículo 202° CP Usurpación
CICLO: IV
2022
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Resumen
El delito de usurpación (modelo base) está tipificado en nuestro actual código penal en el
artículo 202, el mismo que está considerado dentro de los delitos contra el patrimonio, tal como se
desarrolla dicha información en el apartado sobre el bien jurídico tutelado, ya que sabemos que el
interés fundamental que el Estado pretende proteger con la tipificación de los comportamientos
El primer inciso del artículo 202 del código penal el que, para apropiarse de todo o parte
de un inmueble, destruye o altera los linderos del mismo, indica las primeras acciones por las
cuales se realizará el delito bajo comentario. El segundo inciso del artículo 202 del código penal
eI que, por violencia o amenaza, engaña o abusa de confianza, despoja a otro, total o parcialmente,
de la posesión o tenencia de un inmueble o del ejercicio de un derecho real, esta segunda modalidad
bien inmueble ajeno; dañando el bien jurídico tutelado que es el uso y disfrute de la posesión,
requiriendo que se encuentran tipificadas distintas conductas, sin embargo, para su cumplimiento
basta la realización de una de ellas, de tal forma que puede ser usurpar la posesión de una persona
mediante la violencia, la amenaza, el engaño, el abuso de confianza, turbe la posesión, entre otros.
doctrina para la Sala Penal de Apelaciones de la Corte Superior de Justicia de Tumbes y las demás
Cortes Superiores de los Distritos Judiciales. Vale decir que a pesar de parecer obvias las
consideraciones prescritas por el código penal, más específicamente las del inciso 2 del artículo a
analizar (202 C.P.), se demuestra que las instancias de justicia pueden incurrir también en error.
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Introducción
una propiedad o de un derecho que legítimamente pertenece a otro, es una apropiación indebida
el art. 202 del Código Penal el que prescribe su pena: "Será reprimido con pena privativa
1.- El que, para apropiarse de todo o parte de un inmueble, destruye o altera los linderos
del mismo.
2.- El que, por violencia, amenaza, engaño o abuso de confianza, despoja a otro, total o
4.- El que, ilegítimamente, ingresa a un inmueble, mediante actos ocultos, en ausencia del
oponerse”.
Vale mencionar que el presente trabajo sobre la usurpación está dirigido a todo público
interesado en el tema, ya sea para brindarles conocimientos o para reafirmas o dilucidar los ya
existentes del lector. Está orientado a brindar la máxima información posible sobre el delito
Índice
Resumen.......................................................................................................................................... 2
Introducción .................................................................................................................................... 3
Índice............................................................................................................................................... 4
Definición ........................................................................................................................... 7
Legislación ...................................................................................................................................... 8
usurpación ................................................................................................. 14
de usurpación ............................................................................................ 17
Inciso 1 ...................................................................................................... 23
Inciso 2 ...................................................................................................... 23
Inciso 3 ...................................................................................................... 23
Inciso 4 ...................................................................................................... 23
La consumación ................................................................................................................ 24
Inciso 1 ...................................................................................................... 24
Inciso 2 ...................................................................................................... 24
Inciso 3 ...................................................................................................... 24
Inciso 4 ...................................................................................................... 24
Jurisprudencia ............................................................................................................................... 24
Vistos ........................................................................................................ 24
Fundamentos de hecho:............................................................................. 24
III. Del trámite del recurso de casación planteado por el representante del
Decisión .................................................................................................... 34
Conclusiones ................................................................................................................................. 36
Bibliografía ................................................................................................................................... 37
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Marco teórico
Definición
lo ajeno. Se trata de un delito que se comete apoderándose ilegítimamente (la mayoría de los casos)
Según Sebastián Soler, “es manifiesto que aun cuando la usurpación presente cierta
semejanza con el hurto, el diverso modo de comisión impone una figura distinta de estos hechos,
porque la forma de apoderarse de un inmueble no puede ser la substracción. Los inmuebles, dicece
inmueble” como aparece en algunas legislaciones del extranjero. El Derecho Penal peruano ha
recreado, a partir del Código Penal de 1991, la figura de la usurpación inmobiliaria cuando el
sujeto activo haciendo uso -de manera dolosa- de la violencia, amenaza, engaño o abuso de
confianza despoja, destruye linderos o turba la posesión pacífica que tiene su víctima -poseedor-
funciones. En esta última acepción se trata de un ilícito que está ubicado sistemáticamente en el
Código Penal peruano como un delito contra la Administración Pública, específicamente cometido
pública sin tener los requisitos legales para hacerlo. Mientras que el delito de usurpación de
específicamente lo que se protege es la “posesión pacífica” que deben ejercer las personas cuando
adquieren (en forma onerosa o gratuita) un bien inmueble; es decir, que ninguna persona puede
ingresar, de manera violenta, a los predios considerados ajenos para ejercer una posesión que no
le corresponde.
Legislación
dicha protección penal lo realiza en todos los sentidos posibles, se puede considerar. En términos
persona, física o jurídica. En el ámbito legal, el patrimonio significa algo así como el conjunto de
relaciones jurídicas pertenecientes a una persona, que tienen una utilidad económica y, por ello,
son susceptibles de estimación pecuniaria, y cuyas relaciones jurídicas están constituidas por
sobre una cosa. En otras palabras, la propiedad es el poder directo e inmediato sobre un objeto o
bien, por la que se atribuye a su titular la capacidad de disponer del mismo, sin más limitaciones
que las que imponga la ley. Es el derecho real que implica el ejercicio de las facultades jurídicas
más amplias que el ordenamiento jurídico concede sobre un bien. (Romero, 2019)
derecho real vigente, según las reglas del Código Civil peruano, y precisamente las formas como
uno adquiere un derecho real (por ejemplo, un bien inmueble o predios) es por medio de la
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“propiedad”, es decir, por ejemplo, mediante una compraventa; y en segundo lugar, uno puede
ejercer la titularidad de un derecho real mediante la posesión del terreno. (Romero, 2019)
El que, para apropiarse de todo o parte de un inmueble, destruye o altera los linderos del
mismo
El inciso primero del artículo 202° del Código Penal indica las primeras acciones por las
cuales se realizará el delito bajo comentario, en este caso será “destruir” o “alterar” los linderos
del bien inmueble. Roy Freyre nos dice: “Los términos o lindes son las señales naturales o
artificiales, pero siempre de carácter material, que tienen como finalidad servir de demarcación
permanente a los linderos de un predio. Pueden ser: cercos de piedras o de adobes, alambradas,
mojones, estacas, arboles, etc. No interesa si estos objetos materiales están ubicados en forma
Por lindero debe entenderse que es toda señal natural o artificial que sirve para establecer
los límites de un bien inmueble. Sin embargo, consideramos que los linderos siempre tienen que
ser de carácter natural, cuya finalidad es de servir de demarcación territorial permanente a los
límites de un terreno. Pueden ser por ejemplo cercos de piedra o de palos, de adobes, de
alambrados, de mojones, de estacas, de árboles, etc. No interesa si estos objetos materiales del
delito están ubicados en forma continua o discontinua, siempre que cumpla su objetivo
demarcatorio territorial. Como la acción del agente de destruir o alterar está dirigida al lindero del
bien inmueble, hay quienes sostienen que el objeto material de aquellos delitos es el lindero, sin
embargo, la destrucción o alteración del lindero solo es un medio para atacar el verdadero objeto
material del delito cual es el inmueble invadido. Los linderos no es el bien jurídico protegido de
este delito, sino más bien el medio comisivo del mismo. (Sánchez)
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Los verbos rectores del tipo penal son destruir que significa deshacer, inutilizar algo, en
este caso serán los linderos de un bien mueble, con la intención de acrecentar el bien propio,
perjudicando así al dueño del inmueble colindante. Por “destrucción” ha de entenderse como la
desaparición física total de los linderos, según las medidas perimétricas fijadas en su plano
descriptivo; si estos son considerados como bienes muebles, su destrucción puede dar lugar al tipo
penal de daños, cuando la conducta no viene seguida con un ánimo apropia torio y, esta intención
ha de exteriorizarse cuando el agente luego de destruir los límites materiales del inmueble procede
a su ocupación624. Otro verbo rector es el alterar los linderos que implica la conducta de cambiar
de posición, es decir, mover el lindero de su posición original hacia la parte interna del inmueble
colindante.
Para Peña Cabrera Freyre, “en lo que respecta a la alteración de linderos, ello implica que
el autor debe modificar de forma intencional su posición y/o ubicación originaria, para de esta
forma poder ocupar un espacio territorial que legamente no corresponde. La alteración consiste en
cual presupone que el autor sabe cuáles son los límites jurídicamente reconocidos. Ello evoca de
nuevo la escasa fiabilidad que a veces tienen los datos regístrales, muchas veces trazados sobre
vagas indicaciones.
EI que, por violencia o amenaza, engaña o abusa de confianza, despoja a otro, total o
Esta segunda modalidad típica puede ser disgregada, a su vez, en los siguientes supuestos
El despojo de la posesión
ejercicio de un derecho real. Los medios para despojar son violencia, amenaza, engaño o abuso de
servidumbre debe producirse bajo los supuestos de violencia, amenaza, engaño o abuso de
delito de usurpación, el despojo de los supuestos antes mencionados; de ninguna manera cabe
imponerse una sentencia condenatoria, máxime cuando nuestro ordenamiento civil, faculta al
perjudicado a recurrir a la vía interdictal para recuperar la posesión que venía ostentando. Para que
uso de la parte del agente de la violencia o amenaza, destinados estos al despojo del bien.
Fontán Balestra, nos dice: “La acción consiste en despojar del in- mueble a su tenedor o
poseedor. El concepto de despojo da la idea del hecho en relación con la persona a la que se
desplaza. El des- pojo se caracteriza por una doble consecuencia: de una parte, el poseedor, el
Balestra puede ser calificado de parcial desde dos puntos de vista: por uno de ellos se atiende a la
extensión de acto de des- pojo; por el otro se toma en cuenta la parte limitada del bien que se posee
u ocupa. El primer supuesto se da cuando alguien que habita la totalidad de un inmueble es privado
del ejercicio de su derecho sobre parte de él; lo segundo, cuando la ocupación del inmueble es
parcial, por ejemplo, una habitación de la que el ocupante es expulsado o respecto de la cual se le
Para Roy Freyre, “el presupuesto del despojo es la existencia de una posesión, tenencia, o
ejercicio de alguno de los derechos reales ex- presamente mencionados en la ley, recaído sobre un
bien inmueble por naturaleza. Nuestra ley, a diferencia de lo que ahora ocurre en el correspondiente
texto argentino reformado, no indica en qué consiste la acción ejecutiva del despojo, debiendo
expulsando a sus ocupantes. A falta de limitación expresa, deberá entenderse que el despojo puede
el ejercicio de un derecho real del sujeto pasivo. De este modo, se entiende al despojo desde dos
perspectivas:
es decir, se entiende por despojo a todo arrebato, total o parcial, que realiza una
Ambos conceptos tienen el objetivo que la posesión es ilícita desde que es producto
de una conducta típica (despojo). De ello, podemos deducir que la realización del
-como producto del derecho de propiedad- del ejercicio de un derecho real sobre
o ya sea, expulsando del bien inmueble a la víctima. El despojo puede ser sobre la
“totalidad” del bien inmueble perteneciente al sujeto pasivo, sin embargo, el tipo
penal también en tiende que el despojo puede ser en “una parte” del inmueble. En
punto, ya que el estado de desposesión que crea no puede ser imputado como
La violencia puede recaer tanto sobre las personas o constituir una fuerza sobre las
cosas. A esto se debe, que el bien tutelado sea el goce pacífico de la posesión de un
posesión son los que coactan derechos del poseedor, tales como pueden ser el hecho
de cortar cables de energía eléctrica u obturar caños de agua corriente, para que el
sujeto pasivo no reciba los fluidos; una obra nueva hecha en otro predio que impida
despojo tiene que ser en forma directa al real y actual posesionario del inmueble.
La violencia se debe entender como la fuerza física que se ejerce sobre la persona suficiente
para vencer su resistencia. Con respecto a la violencia, podemos decir, al igual que Salinas Siccha,
que está representada por la fuerza material que actúa sobre el cuerpo de la víctima para arrebatarle
ejercerse contra los bienes. Fontán Balestra nos dice: “La violencia ejercida sobre las cosas, debe
recaer sobre las resistencias destinadas a impedir la ocupación de inmueble. Sin embargo, a
diferencia de lo que ocurre en el robo, habida cuenta de que el delito puede consistir en despojar
concepto de los actos que obligarán a la víctima a emplear violencia para poder continuar
cuanto a sus efectos, con una relación como la que media entre robo y hurto, sino que puede, en
muchos casos, de- terminar la atipicidad: por ejemplo, realizar acampada en un terreno particular,
o pasar por un terreno ajeno, son conductas que, sin ser plenamente lícitas, no tienen carácter
delictivo, sino que a lo sumo posibilitan el ejercicio de acciones civiles orientadas a restablecer la
Por su parte, la amenaza es el anuncio del propósito de causar un mal a otro. Por amenaza,
debe entenderse el anuncio de un mal o perjuicio inminente para la víctima, cuya finalidad es
comunidades campesinas en la medida en que pende sobre ellos el anuncio tácito de un mal que
En la circunstancia típica básica del artículo 202° del Código Penal por violencia o
a) En primer lugar, debemos entender que la violencia o amenaza tiene que realizarse
A nuestro juicio, ese ha sido el mensaje del legislador penal de 1991 al incorporar
de advertir que la violencia o amenaza no puede cometerse una vez que el autor
esté ya en posesión del inmueble -en este caso no interesa cómo es que el autor ha
es para repeler el ataque realizado por quien también se siente “dueño” del
actos de ingreso propinado por otro dueño, porque eso ya sería campo del Derecho
Civil, del derecho de reales. Por ello, debe quedar plenamente acreditado en el
usurpación- no haya estado en posesión previa del inmueble, y que más bien ha
constitutivo del tipo debe ser usado como un medio para lograr el despojo (acto
donde no concurre ninguno de los de los me- dios mencionados, por lo tanto, el
b) En segundo lugar, está claro que el concepto de “amenaza” solo pue de realizarse
entre personas, ya que sería muy descabellado pensar que se pueda amenazar a un
del legislador patrio en el inciso 2 del artículo 202° del Código en cuanto a los
inmueble o del ejercicio de un derecho real, debemos entender que la violencia que
realiza el sujeto activo solo se puede realizar sobre las personas, ya que el “engaño”
o el “abuso de con fianza” solo se puede dar entre personas; es decir, que el engaño
-por ejemplo- solo puede recaer o generar error en otra persona, difícil- mente
mismo podría decirse de la confianza que solo admite su existencia entre personas.
de que esta recaiga sobre las cosas la vía civil se encontraría expedita;
usurpación mediando violencia contra las cosas, queda claro que la vía
así, la vía penal que al culminar el pro- ceso de ser el caso impondrá una
sanción que afectará la libertad del ser humano, por tanto, resulta la más
gravosa.
usurpación
El legislador penal peruano no solo ha reprimido el uso de la fuerza física vis absoluta
como medio o modalidad básica para configurar el delito de usurpación inmobiliaria, sino que
también ha reprimido penalmente, por ejemplo, el uso de destrezas o de engaño como medios
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intelectuales o de imaginación del sujeto activo para alcanzar igualmente la consumación del delito
en comento.
materiales como psicológicos, con los que se logra que la víctima caiga en error. Sobre el concepto
de engaño para el delito de usurpación, Sebastián Soler nos dice: “El engaño puede ser ardid,
bastando que sea una simple mentira de la cual se vale el sujeto para inducir en error. La mención
de este medio puede dar lugar a confusiones con el delito de estafa, especialmente porque la ley se
refiere no solo a posesión y tenencia, sino a los derechos reales de uso, usufructo, habitación,
servidumbre y anticresis. La diferencia entre uno y otro debe encontrarse en que el engaño lesiona
aquí a la posesión o tenencia, es un medio para lograr el hecho de apoderarse del in- mueble,
privando del goce del derecho; pero no del derecho mismo. Esta diferencia, única que vemos
posible, muestra que la inclusión del engaño en la figura de la usurpación es algo equívoca, ya que
por medio de la incriminación de la estafa reciben sanción, y más severa, todo ardid que determine
un perjuicio patrimonial. Para que no exista estafa será necesario que el engaño sea determinante
de la entrega material del inmueble; pero que en nada perjudique el derecho del sujeto, solo
materialmente despojado”.
El engaño tiene zonas fronterizas por el abuso de confianza ya que ambos tienen en común
que son medios de destrezas intelectuales provocados por el autor; sin embargo, debemos precisar
que la diferencia entre ambos estriba en lo siguiente: que en el abuso de confianza la condición es
que, previamente, tiene que haber una relación necesariamente de permanencia -ya sea familiar,
amical, profesional, laboral- entre el imputado y el agraviado para que precisamente se produzca
Mientras que en el engaño no tiene que existir necesariamente una relación previa entre las
partes involucradas, sino que el engaño pue- de producirse en el mismo momento en que el
imputado conoce por primera vez a la víctima por cualquier circunstancias, el engaño se trataría
mismo - producto del engaño que tendría que ser idóneo y suficiente- se retira por ejemplo de su
propio terreno para que el imputado “ingrese” -si se quiere con permiso o anuencia del propio
agraviado, es decir, sin mediar ningún tipo de violencia o amenaza- al referido bien inmueble y
tome posesión ilegal del mismo. Debemos aclarar que el engaño como medio para alcanzar la
patrimonial. El abuso de confianza debe ser entendido como aquella situación en la cual el agente
mantiene una determinada relación con el sujeto pasivo, sea esta de naturaleza laboral, contractual,
familiar, etc., la cual es aprovechada para lograr la desocupación del sujeto pasivo del bien
inmueble. Roy Freyre nos dice que “el abuso de confianza consiste en que el autor logra
de la posesión del inmueble por no haber tomado precauciones contra un malhechor que aparentaba
merecer fe”.
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Para saber que se entiende por tenencia o simple detentación, debemos recurrir al artículo
897° de nuestro Código Civil, que prescribe lo siguiente: “no es poseedor quien, encontrándose en
e instrucciones suyas”.
Como establece la doctrina, una cosa es la posesión y otra cosa es la mera tenencia; en la
posesión una persona ejerce ánimo de señor y dueño sobre un bien sobre el cual no tiene la
propiedad, mientras que un mero tenedor reconoce la propiedad de alguien más sobre el bien, el
cual cuida o disfruta de él, como en el derecho de usufructo, el usufructuario es un mero tenedor.
Son meros tenedores además del usufructuario, el acreedor prendario quien tiene en su poder la
prenda como garantía, pero reconoce el dominio del deudor sobre la prenda, el secuestro quien es
solo el encargado de guardar la cosa, el usuario y la persona que tiene los derechos de habitación.
persona. Una persona que ejerce la mera tenencia sobre un bien ya sea mueble o inmueble no
puede adquirir el dominio del bien por prescripción adquisitiva de dominio, por ejemplo, el
arrendatario también es un mero tenedor del bien arrendado, pues al can- celar la mensualidad del
Es decir, por la tenencia una persona tiene el ejercicio efectivo de uno o más atributos del
derecho de propiedad sobre un inmueble, sin podérsele presumir como propietaria, pues ella ya
como ocurre en la fórmula de la posesión mediata o inmediata, sino la de un detentor que no siendo
decisorio que corresponde al poseedor. Allí radica la principal diferencia entre posesión y tenencia
para nuestro sistema jurídico, aun cuando en doctrina la polémica entre los seguidores de los
citación que surge a consecuencia de una relación laboral entre el propietario y la persona que
cuida el inmueble denominado comúnmente “guardián”. Aquí el guardián quien tiene la posesión
contratante como propietario y poseedor mediato del inmueble. La posesión queda por entero en
el propietario que ostenta una posición de autoridad respecto del servidor, que es un subordinado
o dependiente.
Esta frase significa que si el despojo puede producirse o materializarse cuando la víctima
contrato válido. Los derechos reales aparte de la posesión que pueden afectarse con el delito de
usurpación por el despojo, son también la pro- piedad, el usufructuó, el uso habitación, la
Finalmente, en cuanto a los otros derechos reales que la ley penal también hace mención-
tenemos que la Sección Tercera del Libro V del Código Civil establece que son derechos reales
Sección Cuarta establece que son derechos reales de garantía: la prenda, la anticresis, la hipoteca,
el derecho de retención. Al respecto, teniendo en cuenta que el bien jurídico protegido en el delito
de usurpación es la posesión, se debe tener presente que la vulneración “del ejercicio de un derecho
real” que establece el Código Penal, debe estar relacionado con la posesión.
En la doctrina nacional, podemos citar a Alonso Peña Cabrera Freyre, quien nos dice: “El
injusto típico in examine importa un menor desvalor en comparación del comportamiento anterior;
primero, porque no se produce la desocupación -total o parcial-, del bien inmueble por parte del
sujeto pasivo, no obstante advertirse también el empleo de violencia o amenaza. La modalidad
en cuestión importa únicamente la realización de actos de perturbación del normal use y disfrute
del ius possesionis por parte autor”.
1. El que con “violencia” turba la posesión de un inmueble.- La violencia, es la
acción ejercida en contra de otra persona, trasgrediendo su integridad corporal o
física y psíquica de la persona, está representada por la fuerza material que actúa sobre el
cuerpo de la víctima para turbar la posesión de un inmueble.
2. El que con “amenaza”, turba la posesión de un inmueble.- La amenaza está
representada por el anuncio del mal grave que actúa sobre la víctima para que esta no se
oponga a los actos perturbatorios por parte del sujeto activo. La amenaza debe ser
inminente, requiere que el mal que se anuncia, debe ser inmediato, ya que de ser a futuro,
el agente no cumple con las exigencias del tipo penal.
La turbación posesoria debe contener dos requisitos para su configuración típica: en primer
lugar, que el agente no tenga la intención de despojar, sino solo la de incomodar una legítima
posesión de otro sujeto; y en segundo lugar, que esta incomodidad sea constante y persistente en
el tiempo por parte del sujeto activo.
El que, ilegítimamente, ingresa a un inmueble, mediante actos ocultos, en ausencia del
oponerse.
Los actos ocultos son entendidos como la ausencia del poseedor, sin la necesidad de
que este se encuentre presente. Por tanto, la usurpación por actos ocultos se configurará con la
intención de poseer el bien de forma ilícita y la finalidad de apropiarse de dicho inmueble. A
los actos ocultos también se les denomina usurpación clandestina, la cual consiste en realizar
de modo furtivo o escondido la usurpación; en sí, la realización del acto no se da a conocer y
es casi imposible de percibirlo. Al respecto, Ramiro Salinas añade lo siguiente: (Torre, 2018)
“Es claro que el ingreso clandestino no requiere otra modalidad comisiva como es la
violencia, amenaza o fraude, simplemente se sanciona el aprovechamiento que hace el agente
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El delito de Usurpación solo puede ser punible a título de dolo. “Tanto los artículos 202°,
203° y 204° del Código penal para cerrar la tipicidad de la conducta se requiere previamente la
verificación del aspecto típico subjetivo de acuerdo a la estructura finalista de la teoría del delito;
es decir, se exige la presencia del dolo -consciencia y voluntad del agente- en todos los supuestos
típicos de los articulados antes. (Reátegui, j, Espejo, C, 2016, pág. 85). (2017)
El elemento subjetivo del delito de usurpación dependerá de la modalidad que prevén los
cuatro incisos del artículo 202° del Código Penal, esto es, apropiación, despojo, turbación o
desposesión.
Inciso 1: En este primer inciso del artículo 202° del CP, el agente actúa con conciencia y
voluntad de alterar o destruir los linderos de un inmueble, se produciría la concurrencia del tipo
subjetivo de usurpación al acreditar el ánimo de apropiarse de un bien ajeno.
Inciso 2: De tratarse del segundo inciso del artículo 202° del Código Penal, el ánimo sería
el de despojar mediante violencia, amenaza, engaño o abuso de confianza. En esa línea, a fin de la
determinación del dolo, los medios de prueba aportados deberían acreditar el empleo de alguno de
los medios para efectuar el despojo de la posesión o propiedad a los agraviados.
Inciso 3: Cuando se configura por la violencia, amenaza, engaño o abuso de confianza que
realiza el usurpante, quien procede a despojar a otro total o parcialmente de la posesión o tenencia
de un inmueble o del ejercicio de un derecho.
Inciso 4: Desde la tipicidad subjetiva, en el delito usurpación en el numeral 4, tiene como
finalidad despojar a la víctima de su predio pues el sujeto activo actúa con dolo utilizando estos
actos subrepticios, muchas veces valiéndose de documentos que le dan la apariencia de poseedor
o que cuenta con un título que supuestamente respalde un derecho real por tanto, este supuesto
penal es más amplio que los numerales 1,2 y 3 del artículo 202.
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La consumación
Inciso 1: En caso de este delito se consuma cuando el agente logra apropiarse de todo o
parte del inmueble vecino. (Requejo, 2021)
Inciso 2: Se trata de un delito de resultado y de efectos permanentes contra la propiedad
inmueble. La consumación se dará cuando se despoje de la posesión o tenencia de un inmueble o
del ejercicio de un derecho real, a quien lo tenga legalmente.
Inciso 3: En este delito queda consumado cuando se ha alterado la posesión pacífica del
agraviado, limitando su ejercicio. Es un delito instantáneo.
Inciso 4: La comisión delictiva se configurará cuando el agente ingrese al inmueble de
forma ilegitimita y utilice los actos ocultos para esconder o simular una apariencia legal que no
acredita su posesión, encontrándose esta nueva situación de hecho sancionado.
Jurisprudencia
resolución del diecisiete de noviembre del dos mil once, obrante a fojas quinientos nueve, en el
extremo que confirmó la resolución del diecinueve de septiembre del dos mil once, de fojas
Ernesto David Gamboa Dios, por el delito contra el Patrimonio, en la modalidad de Usurpación,
en agravio de Aurelia Acuña Suárez, interviene como ponente el señor Juez Villa Stein. (2014)
Fundamentos de hecho:
1.1. Que, el encausado Gamboa Dios fue procesado penalmente con arreglo al nuevo
Contralmirante Villar, mediante requerimiento del cinco de abril de dos mil once -folios uno a
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diecinueve-, formuló acusación en su contra, como autor del delito contra el Patrimonio –
Usurpación, en perjuicio de Aurelia Acuña Suárez, previsto en el inciso 2, del artículo 202 del
Código Penal, y como autor del delito contra la administración pública, en la modalidad de abuso
Villar, previsto en el primer párrafo del artículo 376 del Código Penal.
acusación -conforme se advierte del acta del veintitrés de junio de dos mil once, obrante a fojas
1.3. Seguido el juicio de primera instancia, se dictó el auto del diecinueve de septiembre
de dos mil once –véase folios doscientos sesenta y tres y cuatrocientos veinticinco-, que declaró
de oficio el sobreseimiento de la causa por la supuesta comisión del ilícito penal contra el
escritos de folios doscientos sesenta y nueve y doscientos setenta y tres. Dichos recursos fueron
concedidos mediante auto del veintinueve de septiembre de dos mil once, de folios doscientos
ochenta y ocho.
de la Corte Superior de Justicia de Tumbes, emplazó a las partes a fin de que concurran a la
audiencia de apelación de auto, que se realizó el quince de noviembre de dos mil once -véase fojas
trescientos dieciséis-, la misma que se continuó el día diecisiete de noviembre del mismo año,
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fecha en la que el Tribunal de Apelación cumplió con emitir y leer en audiencia pública la
resolución cuestionada, tal como se aprecia a fojas trescientos veinte y quinientos nueve. (2014)
Gamboa Dios, por la presunta comisión del delito contra el Patrimonio, en la modalidad de
Usurpación, previsto en el artículo 202, numeral 2 del Código Penal y declaró nula la citada
resolución en cuanto resolvió sobreseer la causa contra el procesado Ernesto David Gamboa Dios,
por la presunta comisión del delito contra la Administración Pública, en la modalidad de abuso de
autoridad, contenido en el artículo 376 del Código Penal, en agravio de Aurelia Acuña Suárez y la
III. Del trámite del recurso de casación planteado por el representante del
ministerio público
3.1. Leído el auto de vista, el señor Fiscal Superior formuló recurso de casación
correspondiente mediante escrito de los folios cuatrocientos ocho, en el extremo que confirmó el
sobreseimiento en el proceso que se le sigue a Ernesto David Gamboa Dios, por la presunta
202, numeral 2 del Código Penal; sin embargo, fue desestimado conforme es de verse de la
resolución del doce de diciembre del dos mil once, de fojas cuatrocientos cincuenta y cinco.
3.2. Mediante escrito del veintidós de diciembre del dos mil once, de folios cuatrocientos
cuarenta y nueve, el accionante interpuso recurso de queja contra la aludida resolución, y mediante
Ejecutoria Suprema del cuatro de junio de dos mil doce, de folios quinientos veinticuatro, se
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declaró fundado dicho recurso y se ordenó que la Sala de Fallo conceda el recurso de casación
3.3. Cumplido el trámite de traslado a los sujetos procesales por el plazo de diez días, esta
Suprema Sala Penal mediante Ejecutoria Suprema del doce de diciembre del dos mil trece -de
folios trece del cuaderno formado en esta Instancia-, en uso de su facultad de corrección, admitió
3.4. Se realizó la audiencia conforme se aprecia del folio diecinueve del cuaderno formado
3.5. Deliberada la causa en secreto y votada en la fecha, esta Suprema Sala Penal cumple
con emitir la presente sentencia, cuya lectura se llevará a cabo en audiencia pública, el quince de
mayo del dos mil catorce, a las ocho horas con treinta minutos.
Fundamentos de derecho:
1.1. Del ámbito de la casación: En el auto de calificación del doce de diciembre del dos mil
trece, obrante a fojas trece del cuaderno formado en esta Suprema Instancia, se subraya como
a la que se refiere el delito de usurpación, y que es ejercida por el agente infractor, debe recaer
1.2. Los agravios admitidos que invoca son: El casacionista amparó su recurso en la causal
contenido en el inciso 3, del artículo 429 del Código Procesal Penal, específicamente para
establecer si la resolución importa una errónea interpretación de la ley penal, toda vez que:
a) considera que la Sala Penal ha incurrido en error al interpretar el tipo penal previsto en
el artículo 202, inciso 2 del Código Sustantivo, pues estableció que debe interpretarse
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restrictivamente el delito de usurpación, estableciendo que “el empleo de violencia debe estar
orientada hacia la propia víctima a fin de doblegar su voluntad, es decir, que la violencia a la que
alude el artículo 202º del Código Penal, debe ser entendida como violencia física empleada sobre
las personas (…); por tanto, cuando la violencia es empleada sobre las cosas, ya sea por la rotura
de cerraduras de puertas, de ventanas, de linderos, entre otros, ello converge sólo en un medio para
del distrito Judicial de Moquegua – 2005, que establece: “Que en el despojo, la violencia del agente
infractor puede ser ejercida contra los bienes o la persona, y que no necesariamente debe
202º, inciso 2 del Código Penal, debe ser ejercida contra la persona o contra el inmueble que se va
c) Por último, se debe enfatizar que se pretende una correcta interpretación del derecho
necesario esclarecer cual debe ser el criterio que se adopte al momento de calificar un hecho como
El Tribunal Superior, mediante resolución del diecisiete de noviembre del dos mil once,
obrante a fojas quinientos nueve, confirmó la resolución de primera instancia, en el extremo que
Dios, por la presunta comisión del delito contra el Patrimonio – Usurpación, en agravio de Aurelia
Acuña Suárez, al considerar que: “Este Colegiado Superior expresa que efectivamente, en diversos
artículo 202, inciso 2) del Código Penal, (…) debe ser entendida, como la violencia física empleada
sobre las personas, implicante a un despliegue de energía, para anular la capacidad de decisión y
resistencia de la víctima o de las víctimas; por tanto, cuando la violencia es empleada sobre las
cosas, ya sea por la rotura de cerraduras de puertas, de ventanas, de linderos, entre otros, ello
converge sólo en un medio para hacer efectivo el despojo; siendo que bajo este parámetro, no toda
conducta resulta reprochable penalmente, pues cuando se produce un conflicto de intereses, como
en el presente caso, los que se consideran afectados tiene un abanico de posibilidades en la vía
argumentos expuestos por los impugnantes, en el sentido que el imputado para despojar de la
posesión a la agraviada, empleó la violencia física contra la cerradura de la puerta del local que
poseía, estos no se enmarcan dentro de los alcances del delito de usurpación, contenido en el
casación establece que existe interés casacional para el desarrollo de doctrina jurisprudencial por
la causal prevista en el inciso 3, del artículo 429º del Código Procesal Penal, el mismo que guarda
conexidad con el inciso 4, del artículo 427º del mismo cuerpo legal, a efectos de establecer si el
tipo penal de usurpación, contempla como medio comisivo la violencia ejercida sobre los bienes
y las personas o únicamente a las personas, para la confi guración del despojo del derecho de
posesión, tenencia o ejercicio de un derecho real sobre el inmueble; para ello se efectuarán algunas
precisiones a fi n de uniformizar los criterios divergentes de los Magistrados que conforman los
delitos de abuso de autoridad, en agravio de Aurelia Acuña Suárez y del Estado –Municipalidad
a que el día veintinueve de abril del dos mil diez, siendo las ocho horas con treinta minutos, con
disponiendo que los bienes que se encontraban al interior del inmueble sean guardados en la
de la agraviada Aurelia Acuña Suárez, quien era posesionaria del inmueble en mérito a un contrato
de alquiler con la comuna con una antigüedad de doce años aproximadamente y pese a tener
conocimiento de su domicilio real nunca recibió notificación alguna sobre la acción realizada.
4.2. Conducta que es subsumida por la parte acusadora en el inciso 2, del artículo 202 del
Código Penal, que al momento de la realización de los hechos materia de imputación rezaba:
“Artículo 202.- Será reprimido con pena privativa de libertad no menor de uno ni mayor
de tres años:
1. El que, para apropiarse de todo o parte de un inmueble, destruye o altera los linderos
del mismo.
2. El que, por violencia, amenaza, engaño o abuso de confianza, despoja a otro, total o
en el inciso 2, del artículo 202 del Código Sustantivo, contempla como medio comisivo la violencia
ejercida sobre los bienes y las personas o únicamente contempla a las personas como pasibles de
recibir la violencia, para la configuración del despojo del derecho de posesión, tenencia o ejercicio
4.4. Siendo así, este Supremo Tribunal precisará conceptos relativos al tipo penal de
usurpación; en primer lugar, el bien jurídico tutelado es el pacífico y tranquilo disfrute de un bien
otro derecho real sobre el mismo, en este último caso, siempre implica que la víctima esté en
posesión del inmueble. Si no hay posesión o simple tenencia comprobada objetivamente no hay
delito de usurpación; asimismo, debe tenerse presente que: a) el sujeto activo, puede ser cualquier
persona, incluso el verdadero propietario del bien inmueble, en el supuesto que haya entregado en
posesión de su inmueble a un tercero y después haciendo uso de los medios típicos de usurpación
despoja o perturba el tranquilo disfrute de aquel tercero sobre el inmueble; b) el sujeto pasivo,
puede ser cualquier persona con la única condición que al momento de la ejecución del delito, esté
gozando de la posesión mediata o inmediata o tenencia del inmueble o en su caso, gozando del
ejercicio normal de un derecho real, lo cual implica necesariamente posesión o tenencia sobre el
ocupación de impedir la ocupación del inmueble total o parcialmente, por parte del sujeto pasivo;
puede darse, por consiguiente, desplazando al tenedor, poseedor o ejercitador del derecho real que
se trate, del lugar que constituye el inmueble u oponiéndose a que aquél continúe realizando los
actos propios de su ocupación, tal como los venía ejecutando; pero para que la acción de despojo
resulte típica tiene que perpetrársela por alguno de los medios taxativamente enunciados en la ley.
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Uno de esos medios para consumar el despojo es la “violencia” o fuerza física que el agente
despliega sobre las personas para vencer la resistencia que oponen o impedir la que pueden oponer
a la ocupación que aquél procura, pero también comprende la fuerza que despliega sobre los bienes
4.5. Dicha opinión es compartida por los Jueces del distrito judicial de Moquegua, quienes
de junio de 2005, incluso sostuvieron que: “la violencia también puede darse sobre las cosas que
posee la víctima aun cuando en el momento del despojo este no se encuentre presente, pues la
violencia en estos casos está constituida por los actos que realice el agente para evitar que la
víctima recobre su posesión (…), y sostener lo contrario equivaldría a que el agente busque el
momento propicio en que la víctima no se encuentra presente para realizar el acto de desposesión,
con lo cual se produciría la impunidad permanente del delito”. En la misma línea, los señores
Jueces Superiores, que participaron en el Pleno Jurisdiccional Nacional Penal, que se realizó en la
ciudad de Arequipa, el 17 de noviembre del 2012, concluyeron que una interpretación sistemática
del artículo 202, inciso 2 del Código Sustantivo, referido a los delitos contra el Patrimonio, informa
que los actos de violencia se pueden dar tanto sobre la persona como sobre la cosa, asimismo que
la realidad social informa que el delito de usurpación se produce en noventa por ciento de los casos
cuando el posesionario o tenedor del inmueble no se encuentra presente. Añade, que una cabal
interpretación del principio de prevención especial y general exigen decisiones judiciales con
mensajes sociales claros que se orientan a disuadir el delito de usurpación que tiene un índice
querido excluir la violencia contra los bienes en la usurpación en la modalidad de despojo, hubiera
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utilizado la frase “violencia contra las personas”, tal como lo consignó en el artículo 188 del
Código Penal. Además, se indicó que la fuente del artículo 202 del Código Penal peruano es el
Código Penal argentino, cuya doctrina y jurisprudencia pacíficamente acepta que la violencia
puede ser sobre las personas y las cosas, finalmente, sostiene que dicha interpretación es acorde
con los principios de lesividad y fragmentariedad, toda vez que: i) lo que ocurre en la realidad, da
cuenta que la gran mayoría de usurpaciones en el Perú empiezan con una agresión sobre la cosa;
accionar, por la violencia sobre la cosa genera concurso de delitos, como: daños, lesiones, incendio
y otros estragos, entre otros. Es más, acredita una amenaza sobre la salud y tranquilidad a la
persona, no se va esperar una lesión corporal, para recién considerar vulnerado el principio de
lesividad.
4.6. En ese sentido, si lo que se busca criminalizar mediante la tipificación del artículo 202
del Código Penal, son conductas violentas realizadas para despojar de la posesión al sujeto pasivo,
el restringir el medio comisivo a la persona física que posee el bien inmueble no armoniza con la
finalidad de la norma, pues permitiría que aquel que destruye las puertas o seguros del acceso al
inmueble para despojar de la posesión del mismo quede fuera del alcance punitivo de la norma
penal, cae en el absurdo de no considerar como parte para el despojo de la posesión a quien
destruye la puerta de ingreso, el candado, las cerraduras, etc., bajo el pretexto de que la violencia
para despojar de la posesión solo puede ser ejercida contra las personas. Por lo tanto, este Supremo
Tribunal considera que debe entenderse que aún antes de la modificatoria legislativa, la violencia
a la que hace referencia el inciso 2, del artículo 202 del Código Penal, puede ser ejercida contra
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las personas como contra los bienes integrantes del inmueble de modo que con ella se despoje de
4.7. Finalmente, en el caso que nos ocupa, el Tribunal de Apelación de Tumbes afirma que
el empleo de la violencia debe estar orientada hacia la propia víctima, a fin de doblegar su voluntad,
es decir que la violencia a la que alude el artículo 202 del Código Penal debe ser entendida como
la violencia física empleada sobre las personas, para anular la capacidad de decisión y resistencia
de la víctima o de las víctimas; por tanto, sostiene que el encausado al emplear violencia física
contra la cerradura de la puerta del local, no se enmarca dentro de los alcances del delito de
usurpación, contenido en el artículo 202, inciso 2 del Código Penal, por lo que sobreseyó la causa.
Ello implica que el Juzgador de Segunda Instancia, no consideró como violencia empleada para
despojar de la posesión del inmueble el que se rompiera la cerradura del inmueble, lo cual importa
una errónea interpretación del inciso 2, del artículo 202 del Código Sustantivo, por lo tanto, resulta
Decisión
que es ejercida por el agente infractor, debe recaer sobre la persona o contra los bienes, conforme
consecuencia:
II. NULO el auto de vista del diecisiete de noviembre del dos mil once, de fojas quinientos
nueve, en el extremo que confirmó el auto de primera instancia del diecinueve de septiembre del
dos mil once, de fojas trescientos noventa y siete, en el extremo que declaró de oficio el
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sobreseimiento a favor del encausado Ernesto David Gamboa Dios, por el delito contra el
III. NULO el auto de primera instancia del diecinueve de septiembre del dos mil once, de
fojas trescientos noventa y siete, en el extremo que declaró de oficio el sobreseimiento a favor del
encausado Ernesto David Gamboa Dios, por el delito contra el Patrimonio – Usurpación, en
Tumbes y las demás Cortes Superiores de los Distritos Judiciales, consideren ineludiblemente
Suprema, de conformidad con el inciso cuatro, del artículo cuatrocientos veintisiete del Código
S.S.
VILLA STEIN
PARIONA PASTRANA
BARRIOS ALVARADO
NEYRA FLORES
CEVALLOS VEGAS
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Conclusiones
Bibliografía
Castillo Padilla, M. E., & Loja Arevalo, M. (2014). La Violencia Ejercida Contra El Bien Como
Despojo, Vulnera El Principio De Ultima Ratio Del Derecho Penal. Iquitos. Obtenido de
https://repositorio.unapiquitos.edu.pe/bitstream/handle/20.500.12737/4359/Maria_Tesis_
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usurpacion/
de https://lpderecho.pe/analisis-actos-ocultos-violencia-delito-usurpacion/
Romero, J. L. (2019). La nesecidad de una decuada interpretacion del bien juridico protegido en
Sánchez, J. R. (s.f.). Codigo Penal Comentado Volumen 1 (Vol. 1). Lima, Perú: EDITORA Y
2022
Torre, B. L. (2018). Criterios del Juez en la aplicación del numeral 4, articulo 202 del delito de
usurpación distrito judicial Lima Este 2018. Los Olivos, Lima, Peru.