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Carlos Gherardelli - Canales
Carlos Gherardelli - Canales
Capı́tulo 1
Introducción
Se utilizará en este apunte preferentemente el Sistema Internacional de unidades (SI). Sin em-
bargo y debido a que existe aún mucha literatura técnica como manuales de operación, diseño,
etc. donde se utilizan otros sistemas de unidades será necesario revisar también estos sistemas de
unidades. Como en todo sistema de unidades, en el SI existen magnitudes básicas de las cuales
se derivan todas las maginutes necesarias. En la tabla 1.1 se encuentran tabuladas alguna de
las magnitudes básicas del SI, su unidad y el sı́mbolo utilizado para representarlas. La tabla 1.2
muestra algunas magnitudes derivadas importantes para la mecánica de fluidos.
Dado que el tamaño real de las cantidades fı́sicas cubre una amplia variedad, se utilizan prefijos
para designar múltiplos y fracciones decimales de las distintas magnitudes como se muestra en
la tabla 1.3. En el SI se usan, por lo general, variaciones de 10±3 . La relación que existe entre
1
El espacio intermolecular es del orden de 10−6 y 10−7 mm para los gases y lı́quidos respectivamente en
condiciones normales de presión y temperatura. El número de moléculas por mm3 es del orden de 1018 en los
gases y 1021 en los lı́quidos
2
Se supone que el fluido es un continuo
1.1 Sistema de Unidades 2
Tabla 1.1: Unidades del sistema internacional de unidades (SI) de algunas magnitudes básicas.
Tabla 1.2: Unidades del sistema internacional de unidades (SI) de algunas magnitudes derivadas.
1 min = 60 s
1 h = 60 min = 3600 s
1 d = 24 h = 1440 min = 86400 s
1 Hz = 1/s
1N = 1 kgm/s2
kgm 1 kg
1 P a = 1 N/m2 = 1 2 2
=1
s m ms2
kgm 1 kg
1 bar = 105 N/m2 = 105 2 2
= 105
s m ms2
kgm 1 kg
1Pas = 1 N s/m2 = 1 =1
s m2 ms
kgm kgm2
1J = 1W s = 1N m = 1 2 m = 1 2
s s
kgm m kgm2
1W = 1 J/s = 1 N m/s = 1 2 =1 3
s s s
Relación Peso–Masa
C. Gherardelli U. de Chile
1.2 Propiedades de los Fluidos 3
El peso w es la fuerza con que un cuerpo es atraido hacia la tierra por la acción de la gravedad
g.
w =m·g
En el SI g = 9.81 m/s2 .
1.2.1 Densidad, ρ
Definición
Densidad de Lı́quidos
∆V = V0 βp ∆T ,
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1.2 Propiedades de los Fluidos 4
V = V0 + ∆V = V0 (1 + βp ∆T )
como
m m
ρ= =
V V0 (1 + βp ∆T )
y
m
= ρ0
V0
⇒
ρ0
ρ= (1.2)
1 + βp ∆T
∆V = βT V0 ∆p
V = V0 − ∆V = V0 (1 − βT ∆p) .
Desarrollando se obtiene
ρ0
ρ= . (1.3)
1 − βT ∆p
Combinando las ecuaciones 1.2 y 1.3 se obtiene la dependencia de la densidad tanto con la
presión como con la temperatura para los lı́quidos
ρ0
ρ= . (1.4)
(1 + βp ∆T ) (1 − βT ∆p)
Los gases son altamente compresibles en comparación a los lı́quidos. La relación más sencilla que
permite relacionar variaciones en la densidad con variaciones de la presión p y la temperatura
T es la ecuación de estado para gases ideales o perfectos
p = ρ · Rg · T (1.5)
⇒
p
ρ=
Rg T
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1.2 Propiedades de los Fluidos 5
R
Rg = .
P Mg
En muchas aplicaciones prácticas es posible suponer que los gases se comportan como gases
ideales. Sin embargo, para presiones muy elevadas y temperaturas muy bajas la ecuación 1.5
es poco precisa. El comportamiento real de los gases se describe introduciendo un factor de
corrección denominado factor de compresibilidad Z en la ecuación de estado de la siguiente
manera:
p = Z ρRT
de donde
p
ρ=
Z RT
Cuando un gas se comprime (p ↑) o expande (p ↓) la relación que existe durante este proceso
entre la presión y la densidad dependerá de la naturaleza del proceso. Por ejemplo, si éste se
realiza a temperatura constante (proceso isotérmico) se obtiene
p
= cte.
ρ
p
= cte. ,
ρk
donde k = Cp /Cv depende de cada gas. Para gases ideales se tiene que R = Cp − Cv .
El aire es una mezcla compuesta de nitrógeno, oxı́geno, monóxido de carbono, gases nobles y
contiene por lo general vapor de agua. La cantidad máxima de vapor de agua que puede contener
el aire depende de la presión y la temperatura. Si el aire contiene ésta cantidad máxima se dice
que el aire esta saturado. La densidad del aire húmedo se puede determinar mediante la siguiente
relación:
pd
ρh = ρs 1 − 0.377 ϕ (1.6)
p
donde ρs es la densidad del aire seco, ϕ la humedad relativa, pd la presión de saturación del
agua y p la presión atmosférica local.
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1.2 Propiedades de los Fluidos 6
⇒
1
v= .
ρ
m3
.
kg
El peso especı́fico se define como el peso por unidad de volumen y se relaciona con la densidad
mediante la siguiente relación:
γ =ρ·g
La gravedad especı́fica es la razón entre la densidad del fluido y la densidad del agua a alguna
temperatura especificada (por lo general se utiliza T = 4◦ C).
ρ
SG =
ρH2 O,4◦ C
1.2.5 Compresibilidad
dp
Ev = − [P a] .
dV /V
Como m = ρ V se obtiene
dp
Ev = .
dρ/ρ
Como se mencionó anteriormente, los lı́quidos son en la práctica muy poco compresibles. Gases
sometidos a bajas presiones también pueden ser considerados como incompresibles. Para gases,
y dependiendo de la naturaleza del proceso, Ev se puede determinar de la ecuación de estado.
Para un proceso isotérmico y considerando un gas ideal se obtiene Ev = p y para un proceso
isoentrópico Ev = k p.
Una consecuencia importante que se desprende de la compresibilidad de los fluidos es que una
variación pequeña de la presión se expande o propaga en forma de una onda longitudinal en
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1.2 Propiedades de los Fluidos 7
el fluido con una velocidad finita. La velocidad con que se propaga esta onda se denomina
velocidad acústica o velocidad del sonido c, que para una compresión isoentrópica, es decir sin
fricción y sin transferencia de calor, es
s
dp
c= .
dρ
A partir de esta formulación general se pueden deducir las siguientes relaciones para lı́quidos y
gases.
Lı́quidos. Si se desprecian los cambios de temperatura que se producen en una compresión
isoentrópica diferencial dp, es decir dT = 0, se obtiene, a partir de la ecuación 1.1, la siguiente
relación
dρ
≈ βT · dp ,
ρ
de donde
1
dp ≈ .
βT ρ
⇒
s s
dp 1
c= ≈ .
dρ βT ρ
de donde
dp p
= cte · k · ρk−1 = · k · ρk−1
dρ ρk
pk
= = pvk = RT k.
ρ
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1.2 Propiedades de los Fluidos 8
Si un liquido, como agua o bencina por ejemplo, es dejado en un recipiente abierto a la atmósfera,
éste comienza a evaporarse. La evaporación ocurre como efecto del movimiento de las moléculas
en el fluido. Algunas moléculas que se encuentran en la superficie del lı́quido poseen suficiente
cantidad de movimiento para vencer las fuerzas cohesivas y escapar a la atmósfera. Si el mismo
recipiente es sellado y se extrae el aire que queda sobre la superficie del lı́quido provocando un
vacio, se generará una presión debido a las moléculas que escapan del fluido. Cuando se alcanza
el equilibrio, es decir que el número de moléculas que sale es igual al número de moléculas
que entran al fluido, se dice que el vapor esta saturado y la presión que el vapor ejerce sobre
la superficie del lı́quido se denomina presión de vapor. La presión de vapor depende de la
temperatura (actividad molecular) y aumenta con ella. Cuando la presión sobre un lı́quido,
que se encuentra a una temperatura dada, es igual a la presión de vapor del lı́quido ocurre
la ebullición. Para la mecánica de fluidos éste es un punto de importancia ya que, como se
vera más adelante, en fluidos en movimiento las presiones involucradas pueden llegar a ser muy
pequeñas, incluso debajo de la presión de vapor, lo que genera ebullición. Este fenómeno se
denomina cavitación. Las burbujas producidas en la ebullición pueden viajar a zonas de mayor
presión donde colapsan con suficiente intensidad como para producir problemas operacionales
y/o estructurales.
1.2.8 Viscosidad
Para que exista movimiento de un cuerpo a través de un fluido (flujo externo) o para el
movimiento de un fluido dentro de un canal o tuberı́a (flujo interno) se debe ejercer una fuerza
que sobrepase la resistencia ofrecida por el fluido. La magnitud de la resistencia ofrecida por el
fluido es una resistencia a la deformación y estará determinada por la velocidad de deformación
como por una propiedad del fluido denominada viscosidad. En la práctica se utilizan dos tipos
de viscosidad:
a) viscosidad dinámica µ
b) viscosidad cinemática ν
Viscosidad dinámica, µ
Entre dos placas paralelas de igual superficie y separadas por una distancia b se encuentra un
fluido homogéneo a temperatura constante (Fig. 1.1). A la placa superior se le aplica una fuerza
F por lo que ésta se mueve con una velocidad U . La placa inferior permanece quieta. Dado
que el fluido en contacto con una superficie tiene la misma velocidad que la superficie, el fluido
entre las placas se deforma generando un perfil de velocidades lineal entre las placas. La fuerza
F resulta ser proporcional a la velocidad de la placa superior U , a la superficie de las placas A
e inversamente proporcional al espesor del fluido b
AU
F ∝ .
b
AU
F =µ .
b
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1.2 Propiedades de los Fluidos 9
δa = U · δt
⇒
U
δβ = δt
b
de donde
δβ U
= β̇ = .
δt b
La formulación presentada para el flujo completo entre las placas también es aplicable a un
elemento diferencial de fluido, como el que muestra la Figura 1.2,
∆u u2 − u1 u1 + du − u1
τ = µ lim =µ =µ
∆y→0 ∆y dy dy
⇒
du
τ =µ
dy
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1.2 Propiedades de los Fluidos 10
[µ] = P a · s .
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1.2 Propiedades de los Fluidos 11
Figura 1.4: Dependencia de la viscosidad aparente µap con la velocidad de deformación para un
fluido no Newtoniano.
Viscosidad cinemática, ν
m2
[ν] = .
s
1. la cohesión molecular y
2. de la rapidez de transferencia de cantidad de movimiento molecular.
En los lı́quidos predominan las fuerzas cohesivas entre las moléculas y como éstas decrecen con
la temperatura la viscosidad también decrece con la temperatura (Fig. 1.5).
La actividad molecular da origen a la viscosidad en los gases. Como ésta aumenta con la
temperatura, la viscosidad también aumenta con la temperatura.
En la literatura es posible encontrar diversas relaciones empı́ricas que dan cuenta del efecto de
la temperatura sobre la viscosidad como por ejemplo las siguientes:
Gases
3/2
T0 + TS T
µ ≈ µ0 · ·
T + TS T0
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1.2 Propiedades de los Fluidos 12
µ = D eB/T
donde D y B son constantes empı́ricas particulares para cada lı́quido y T la temperatura abso-
luta.
La dependencia de la viscosidad con la presión se hace manifiesta solo a altas presiones. Para
la mayorı́a de los lı́quidos la viscosidad aumenta con la presión en forma exponencial por lo que
se utiliza la siguiente relación para representar esta dependencia
µp ≈ µ0 · eα p
1 dµp
α= .
µT dp T
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13
Capı́tulo 2
Estática de Fluidos
F~ · n̂
p=
A
N
[p] = [F/A] = ≡ Pa
m2
bar ≡ 105 P a
lbf
psi = = 6.8948 · 103 P a
in2
lbf
psf = = 4.7880 · 10 P a
f t2
Los instrumentos que miden presión no lo hacen, por lo general, directamente si no que entregan
la diferencia de presión del fluido (presión absoluta) y la presión del medio o atmosférica. Esta
diferencia se denomina presión diferencial, relativa o manométrica ⇒
A pesar de que la presión atmosférica no es constante de un lugar a otro, ésto no tiene mayor
influencia para muchos propósitos en ingenierı́a. Existen casos, sobre todo cuando se trabaja
con gases, donde es necesario considerar la presión absoluta. La figura 2.1 muestra gráficamente
la relación que existe entre la presión absoluta y relativa para niveles superiores e inferiores a la
presión atmosférica.
Como se mencionó anteriormente la presión se utiliza para indicar la fuerza normal a una super-
ficie por unidad de superficie. Para analizar como varı́a la presión en un punto con la orientación
de la superficie analizaremos el esquema de la figura 2.2.
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2.2 Campo de presiones 15
X δx δy δz δx δy δz
δFz = pz δx δy − ps δx δs cos θ − ρ g=ρ az .
2 2
δy = δs cos θ y
δz = δs sin θ .
Reemplazando se obtiene
δy
py − ps = ρay
2
δz
pz − ps = ρ(az + g) .
2
Dado que lo que interesa obtener es la presión en un punto se aplica el lı́mite cuando δy, δx, δz →
0 resultando
py = ps ,
pz = ps .
Este resultado es independiente del ángulo θ el cual fue además, elegido en forma arbitraria. Lo
anterior indica que la presión en cualquier punto de un fluido en reposo o en movimiento tal que
no existan esfuerzos de corte, es independiente de la dirección
⇒
px = py = pz = p
Si el fluido esta en un movimiento tal que existen esfuerzos de corte, los esfuerzos normales no
serán, por lo general, iguales en todas las direcciones. En estos casos se define la presión como
el promedio de los esfuerzos normales mutuamente perpendiculares en un punto, es decir
px + py + p z
p= .
3
Sabiendo como varı́a la presión en un punto de un fluido con la dirección se requiere saber cómo
varı́a ésta entre un punto del fluido y otro, para lo cual se analiza la figura 2.3 en donde se ha
realizado un desarrollo de Taylor de primer orden para la presión a partir del centro de la figura
y en todas las direcciones. La fuerza resultante en la dirección y es
∂p δy ∂p δy
δFy = p − δx δz − p + δx δz
∂y 2 ∂y 2
∂p
δFy = − δx δy δz .
∂y
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2.2 Campo de presiones 16
∂p
δFx = − δx δy δz
∂x
y
∂p
δFz = − δx δy δz − γ δx δy δz .
∂z
∂p ∂p ∂p
δ F~ = − ı̂ + ̂ + k̂ δx δy δz − γδx δy δz k̂
∂x ∂y ∂z
δ F~ ∂p ∂p ∂p
= f~ = − ı̂ + ̂ + k̂ − γ k̂ .
δx δy δz ∂x ∂y ∂z
δ F~
= −∇p − γ k̂ .
δx δy δz
−∇p − γ k̂ = ρ~a ,
−∇p − γ k̂ = 0 .
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2.2 Campo de presiones 17
∂p
= 0,
∂x
∂p
= 0,
∂y
∂p
= −γ .
∂z
Estas ecuaciones nos dicen que la presión no depende de las coordenadas x e y. Por lo tanto, si
nos movemos sobre un plano horizontal paralelo al plano x − y la presión no cambia siempre que
haya continuidad en el fluido como se muestra en la figura 2.4. Vemos también de esta figura
que la distribución de presiones es también independiente de la forma o tamaño del recipiente
que contenga el lı́quido. La ecuación según k̂ puede escribirse, por lo tanto, como una ecuación
diferencial ordinaria
dp
= −γ (2.1)
dz
Figura 2.4: Variación de la presión hidroestática con la presión y forma del recipiente.
Fluido incompresible
p2 − p1 = γ(z2 − z1 )
p1 − p2 = γ(z2 − z1 ) = γ h
p1 = p2 + γh .
De la ecuación anterior se desprende que la presión puede ser expresada como una altura de
columna de lı́quido
p 1 − p2
h=
γ
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2.2 Campo de presiones 18
(a) Variación de la presión entre dos nive- (b) Distribución de la presión atmosférica
les de profundidad distintos. y la hidroestática con la profundidad.
h representa la altura de una columna de lı́quido de peso especı́fico γ que produce un diferencial
de presion p1 − p2 .
Cuando se tiene una superficie libre es conveniente utilizarla como plano de referencia. La
presión que actúa sobre este plano de referencia se denomina presión de referencia p0 .
p = p0 + γh
donde h se mide desde la superficie libre hacia abajo como indica la figura 2.5(b). p representa
en este caso la presión total o absoluta, la presión relativa resulta prel = p − p0 = γ h. Vemos
que la presión p0 se distribuye en forma contı́nua mientras que la presión relativa aumenta con
la profundidad. La presión total puede por lo tanto ser analizada como la superposición de una
distribución uniforme de presiones de magnitud p0 y una distribución de presiones que aumenta
en forma lineal con la profundidad.
Fluido compresible
Integrando la ecuación 2.1 para gases y considerando un gas ideal en reposo, es decir que se
cumple la ecuación de estado para los gases ideales, se tiene
dp gp
=− .
dz RT
Zp2 Zz2
dp g dz
=−
p R T
p1 z1
Zz2
p2 g dz
ln =− .
p1 R T
z1
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2.3 Fuerzas hidroestáticas sobre superficies sumergidas 19
Se ve que se debe explicitar como varı́a la temperatura del gas con la elevación. Si se supone,
por ejemplo, que para el rango z1 , z2 T = T0 = cte. (condición isotérmica) se tendrá
g(z2 − z1 )
p2 = p1 exp − .
R T0
La variación de la temperatura en la atmósfera terrestre con la altura varı́a en los distintos
estratos de ésta como indica la tabla 2.1. Para la tropósfera y hasta una altura de 11 km
(valor que depende de la ubicación geográfica y de la estación del año) se puede suponer que el
gradiente de temperatura es constante y dado por
dT
= −0.0065K/m
dz
⇒
T = T0 + β z
donde β = −0.0065 K/m. Reemplazando y resolviendo la integral a partir del nivel z = 0 donde
p = patm y T = Tatm se obtiene
g/Rβ
βz
p = patm 1 −
Tatm
Como una forma de standarizar los resultados de cálculos y experimentos, donde intervienen
parámetros atmosféricos, se define una atmósfera standart, es decir una atmósfera para la cual
se fija la temperatura, presión, densidad y otras propiedades del aire al nivel del mar (z =
0). Existen principalmente dos definiciones que se denominan Atmósfera Normal y Atmósfera
Standart. Los valores de T, p, ρ para z = 0 para la Atmósfera Standart son
patm = 101325 P a
Tatm = 15◦ C
Para fluidos en reposo sabemos que la fuerza resultante es perpendicular a la superficie, ya que
no existen esfuerzos de corte, y que la presión aumenta en forma lineal con la profundidad.
Se analizará en esta sección las fuerzas que se ejercen sobre superficies planas y curvas que se
encuentran sumergidas en un fluido. Se verán además los conceptos de empuje y estabilidad en
la flotación.
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2.3 Fuerzas hidroestáticas sobre superficies sumergidas 20
Para una superficie plana cualquiera, como la que se muestra en la figura 2.6, que se encuentra
sumergida en un fluido e inclinada en un ángulo θ con respecto a la horizontal, se requiere
determinar la fuerza resultante, que actúa sobre la superficie, y su punto de aplicación.
A una profundidad arbitraria h, la fuerza que actúa sobre un elemento diferencial de área dA es
dF = γ h dA
La integral es el momento de primer orden del área A con respecto al eje x y puede ser escrito
como
Z
ydA = yc A ,
A
donde yc es la coordenada y del centroide, o centro de masa o de gravedad, medida desde el eje
x que pasa por O. FR resulta por lo tanto
FR = γ A yc sin θ = γ hc A = pc A .
| {z } |{z}
hc pc
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2.3 Fuerzas hidroestáticas sobre superficies sumergidas 21
Cabe hacer notar que la magnitud de la fuerza es independiente del ángulo θ y depende sólo del
peso del fluido y la profundidad del centroide del área bajo la superficie libre.
La coordenada y de la fuerza resultante, yR , se puede determinar realizando la suma de momentos
alrededor del eje x
Z Z
FR y R = y dF = γ sin θy 2 dA .
A A
y 2 dA
R
A
yR = .
yc A
La integral del numerador es el momento de inercia de segundo orden1 Ix con respecto al eje
formado por la intersección del plano que contiene la superficie con el de la superficie libre x
⇒
Ix
yR = .
yc A
Ix = Ixc + A yc2 ,
donde Ixc es el mometo de segundo orden del área c/r a un eje que pasa por el centroide y
paralelo al eje x. Reemplazando se obtiene
Ixc
yR = + yc .
yc A
Como Ixc /yc A > 0, se ve que la fuerza resultante no pasa por el centroide sino que se encuentra
desplazada hacia abajo.
Análogamente para la coordenada x se obtiene
Z
FR xR = x dF ,
A
de donde
R
x y dA
A Ixy
xR = = .
yc A yc A
Ixy es el producto de inercia c/r al eje x e y. Utilizando el teorema de ejes paralelos se obtiene
Ixyc
xR = + xc .
yc A
1
El momento de inercia de un área con respecto a un eje particular se define como la suma de los productos
obtenidos al multiplicar cada elemento infinitesimal de ella por el cuadrado de su distancia al eje, es decir, es una
función de la ubicación del área con respecto a un eje.
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2.3 Fuerzas hidroestáticas sobre superficies sumergidas 22
En superficies curvas la fuerza elemental o por unidad de área varı́a su dirección ya que la presión
sigue siendo perpendicular a la superficie en todo punto de ésta. Si bien es posible realizar
una integración a través de la superficie de las fuerzas diferenciales de presión esto puede ser
muy complejo y tedioso. Es preferible separar las fuerzas en las correspondientes componentes
perpendiculares. Suponiendo una superficie curva sumergida como la de la figura 2.7, donde el
plano x − y es paralelo al plano de la superficie libre y el eje z es perpendicular a éste plano y
apunta hacia abajo, tendremos que las fuerza sobre un elemento diferencial de área según el eje
x es
dA cos θ es la proyección del área dA sobre un plano formado por los ejes y − z perpendicular
al eje x, es decir dA cos θ = dAx .
Fx = ρ g zc,x Ax .
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2.3 Fuerzas hidroestáticas sobre superficies sumergidas 23
Fy = ρ g zc,y Ay .
Fz = ρ g V
donde V es el volumen de lı́quido que se encuentra sobre la superficie. Vemos que Fz es igual
al peso del lı́quido que se encuentra sobre la superficie. En el desarrollo anterior se omitió la
presión que existe sobre la superficie libre ya que ésta actúa a ambos lados de la placa por lo
que su efecto neto es nulo.
Empuje estático
δE = (p2 − p1 ) δA = γ |h{z
δA} = γ δV .
δV
E =γV .
Se ve que la fuerza de empuje es igual al peso del fluido desplazado por el cuerpo. Realizando
un balance de momentos se determina que el punto de aplicación de la fuerza es el centro de
masa o centriode del volumen del fluido desplazado
1
Z
x̄ = xdV .
V
V
C. Gherardelli U. de Chile
2.3 Fuerzas hidroestáticas sobre superficies sumergidas 24
∆W = E = γ V .
Wa = W − ∆W = W − E = W − γ V .
W − Wa
V = .
γ
Este volumen es, para cuerpos totalmente sumergidos, igual al volumen del cuerpo, de donde es
posible determinar la densidad media ρc de el o los materiales de que esta compuesto el cuerpo
W
ρc = ρ.
W − Wa
2.3.4 Flotación
Si la fuerza de empuje que experimenta un cuerpo en un fluido es igual a su peso, éste flotará si
parte de su volumen está sobre la superficie y se encontrará suspendido si está completamente
sumergido. La condición de equilibrio es por lo tanto para ambos casos
E=W.
Estabilidad en la flotación
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2.4 Fluido en Movimiento 25
empuje. Esto se debe a que el punto de aplicación de la fuerza de empuje está asociado al
centro de gravedad del lı́quido desplazado y éste se desplaza al cambiar el volumen desplazado.
Analizando la figura 2.10 vemos que el punto de aplicación del empuje cambia desde punto B
a B 0 pero el punto de aplicación del peso se mantiene en C. Si el punto M , que se denomina
Metacentro y que es el punto de intersección de una lı́nea vertical que pasa por B 0 y la lı́nea
vertical original, se encuentra sobre C, se crea un momento restaurador y el cuerpo se encontará
por lo tanto en un equilibrio estable. La distancia M C se denomina altura metacéntrica. Por
lo tanto si
La distancia M C se obtiene de
γ Iyy
MC = −l.
W
−∇p − γ k̂ = ρ~a .
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2.4 Fluido en Movimiento 26
Esta ecuación se cumplen cuando el fluido está en movimiento, lineal o rotatorio, tal como
si fuera un cuerpo rı́gido. Las componentes de esta ecuación, para un sistema cartesiano y
suponiendo k̂ vertical hacia arriba, son
∂p
− = ρ ax
∂x
∂p
− = ρ ay
∂y
∂p
− = γ + ρ az .
∂z
La superficie libre generada es una superficie de equilibrio, por lo que la fuerza total ejercida
sobre las partı́culas de fluido es normal a la superficie en todo punto de ésta. Lo anterior indica,
y dada la curvatura terrestre, que la superficie que se genera sobre un lı́quido que sólo esta
sometido a la aceleración de gravedad tiene la forma de un casquete esférico. Este fenómeno
es, sin embargo, despreciable a escalas pequeñas, donde se puede considerar que la superficie es
plana, y sólo es posible de apreciar en supericies muy grandes como los océanos.
Considerando el recipiente de la figura 2.11, el cual está sometido a una aceleración constante
~a = ay ̂ + az k̂ con ay = a cos α y az = a sin α. El diferencial de presión en un pto cualquiera y, z
es
∂p ∂p
dp = dy + dz .
∂y ∂z
Reemplazando
dp = −ρ ay dy − ρ(g + az )dz .
l
h a
b
z
y
a
Figura 2.11: Lı́quido sometido a una aceleración lineal constante.
Esta ecuación se puede integrar conociendo la presión p0 en un punto. A lo largo de una lı́nea
de presión constante, como la superficie libre por ejemplo, se tiene que dp = 0 por lo que
dz ay a cos α
=− =−
dy g + az g + a sin α
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2.4 Fluido en Movimiento 27
o
a cos α
tan β = ,
g + a sin α
donde β es el ángulo que adquiere la superficie libre y las superficies isobáricas del lı́quido. Se ve
que la presión varı́a en forma hidroestática en el lı́quido. La variación en altura h que adquiere
el lı́quido entre un extremo y otro del recipiente se puede obtener de
a cos α
h = l · tan β = l ,
g + a sin α
dp
= −ρ(az + g) .
dz
Se ve que la presión varı́a en este caso en forma lineal con la profundidad pero bajo la acción
combinada de az y g. Si el fluido cae en caı́da libre entonces az = −g y se tendrá
dp
=0
dz
de donde vemos que la presión será, en todo el lı́quido, igual a la presión que rodea el fluido.
Analizaremos ahora el caso de un fluido que se encuentra en un recipiente el cual gira con una
velocidad angular constante ω como se muestra en la figura 2.12. Dado que estamos suponiendo
que no hay movimiento relativo entre las partı́culas del fluido, cada partı́cula de fluido tendrá
la velocidad angular ω y el lı́quido se estará moviendo como un bloque. La aceleración de
una partı́cula situada a una distancia r del eje tendrá una aceleración rω 2 en dirección radial.
Utilzando coordenadas cilı́ndricas tenemos
∂p 1 ∂p ∂p
∇p = r̂ + θ̂ + k̂
∂r r ∂θ ∂z
y
ar = −rω 2 ,
aθ = 0 ,
az = 0 .
∂p
= 0,
∂θ
C. Gherardelli U. de Chile
2.4 Fluido en Movimiento 28
∂p
= −γ .
∂z
dp = ρrω 2 dr − γdz .
ρω 2 2
p= r − γ z + cte .
2
Se ve que la presión varı́a con la distancia al eje y que para un radio constante la presión varı́a en
forma hidroestática en la dirección vertical. Las superficies isobáricas se obtienen de la condición
dp = 0
⇒
dz r ω2
=
dr g
de donde la ecuación de la superficie resulta
ω2 2
z= r + cte .
2g
Vemos que las superficies isobáricas, y por lo tanto la superficie libre, tiene la forma de un
paraboloide de revolución o en dos dimensiones una parábola. Se puede ver además que la
forma de la curva es independiente del fluido. El valor de la constante se puede determinar de
la condición para r = 0 donde z = zmin ⇒ cte = zmin .
ω2 2
z= r + zmin .
2g
C. Gherardelli U. de Chile
2.4 Fluido en Movimiento 29
La ecuación anterior se puede expresar en función del nivel del lı́quido en reposo h por la siguiente
relación
ω2
z =h+ (2r2 − r02 )
4g
de donde
ω 2 r02
zmin = h −
4g
y
ω 2 r02
zmax = h + .
4g
C. Gherardelli U. de Chile
30
Capı́tulo 3
Cinemática de Fluidos
T = T (x, y, z, t)
~ =V
V ~ (x, y, z, t)
~ = d~r .
V
dt
~ |. Si las propiedades de un flujo, en todos los puntos
La rapidez es el módulo de la velocidad |V
del espacio, permanecen invariantes en el tiempo, se dice que el flujo es permanente. En caso
contrario se llama no–permanente. Un campo de velocidades permanente estará dado por
~ =V
V ~ (x, y, z) .
y del tiempo. De esta manera se obtiene información del flujo en términos de qué pasa
en un punto fijo del espacio en un tiempo t cuando el flujo pasa por él. Este método de
descripción se denomina descripción Euleriana. La velocidad queda representada por el
campo de velocidades dado por
~ =V
V ~ (x, y, z, t) .
2. El segundo método, denominado Lagrangiano, analiza una partı́cula genérica del flujo para
analizar y caracterizar el flujo. En esta representación la posición x, y, z no son fijas sino
varı́an en el tiempo. Las coordenadas espaciales serán por lo tanto funciones del tiempo
y de una posición preescrita xo , yo , zo en un instante to . Para la velocidad se tiene por lo
tanto
~ =V
V ~ (x(t), y(t), z(t), t) .
~ × d~r = 0 ,
V
~ . De
donde d~r es el desplazamiento diferencial de una partı́cula fluida que tiene una velocidad V
la ecuación anterior resulta
dx dy dz
= = , (3.1)
u v w
Como se menciono en el capı́tulo 1 un fluido es una substancia que se deforma al aplicar sobre
ésta un esfuerzo de cizalle. Debemos esperar por lo tanto que una partı́cula fluida se encuentre
sometida a movimientos de traslación, rotación, deformación lineal y angular como se muestra
en la figura 3.1. Este tipo de movimientos esta asociado a variaciones complejas de las diferentes
componentes de la velocidad (u, v, w) en todas las direcciones. Lo anterior nos indica que, en
general, (∂Vi /∂xj ) 6= 0 ∀i, j. Analizaremos ahora cada uno de estos efectos por separado y su
relación con la variación de la velocidad según los distintos ejes coordenados.
C. Gherardelli U. de Chile
3.1 Velocidad, Rotación, Deformación 32
Traslación.
El movimiento mas sencillo al cual se puede encontrar sometida una partı́cula fluida es el
movimiento de traslación. En la figura 3.2 se muestra una partı́cula que viaja con una ve-
locidad constante desplazándose desde su posición original una nueva posición dada por los
puntos O0 A0 C 0 B 0 .
Deformación lineal.
Analizaremos la deformación lineal según el eje x, como se muestra en la figura 3.3. Nos interesa
por lo tanto analizar la variación de la velocidad según el mismo eje, es decir (∂u/∂x). Como
se muestra en ésta figura, y debido a la diferencia de velocidad existente entre las lı́neas OB y
AC el elemento de fluido se deforma en un tiempo δt. La variación del volumen resulta
∂u
δV = δx δyδzδt .
∂x
C. Gherardelli U. de Chile
3.1 Velocidad, Rotación, Deformación 33
1 d(δV ) (∂u/∂x)δt ∂u
= lim = .
V δt δt→0 δt ∂x
El cambio de volumen, por unidad de volumen, según todos los ejes es la superposición de los
cambios según cada eje y por lo tanto igual a
1 d(δV ) ∂u ∂v ∂w ~.
= + + =∇·V
V δt ∂x ∂y ∂z
Rotación.
La velocidad angular de la lı́nea OA, ΩOA , de la figura 3.4 queda definida por
δα
ΩOA = lim .
δt→0 δt
∂v
∂x δxδt ∂v
tan α ≈ δα = = δt ,
δx ∂x
⇒
∂v
ΩOA = .
∂x
δβ ∂u
ΩOB = lim = .
δt→0 δt ∂y
C. Gherardelli U. de Chile
3.1 Velocidad, Rotación, Deformación 34
1
Ωz = (ΩOA + ΩOB )
2
1 ∂v ∂u
= − . (3.2)
2 ∂x ∂y
Se puede observar de la ecuación 3.2 que la partı́cula fluida rotará en torno al eje z como un
cuerpo rı́gido, es decir sin deformación, sólo si ∂u/∂y = −∂v/∂x. En otro caso la rotación
estará asociada a una deformación. Se ve además que cuando ∂u/∂y = ∂v/∂x la rotación en
torno al eje z es cero.
Para los otros ejes se obtiene
1 ∂u ∂w
Ωy = − ,
2 ∂z ∂x
1 ∂w ∂v
Ωx = − .
2 ∂y ∂z
~ = 1∇ × V
Ω ~.
2
ω ~ =∇×V
~ = 2Ω ~.
Deformación angular.
Se ve de la figura 3.4 que las derivadas ∂u/∂y y ∂v/∂x pueden causar, además de la rotación
de la partı́cula, una deformación. La tasa de deformación angular de una partı́cula se mide
por la rapidez de cambio del ángulo que se forma entre las lı́neas OA y OB. Si OA gira a un
velocidad angular distinta a OB la partı́cula se esta deformando. Para el plano xy de la figura
la deformación xy resulta
1
xy = (ΩOA − ΩOB )
2
1 ∂v ∂u
= + .
2 ∂x ∂y
C. Gherardelli U. de Chile
3.1 Velocidad, Rotación, Deformación 35
Las componentes de la diagonal de éste tensor representan la deformación lineal por compresión
y/o tracción en los distintos ejes vista anteriormente y esta dada por
∂vi
ii = .
∂xi
Se verá mas adelante cómo este tensor de esfuerzos está relacionado con los esfuerzos normales
y de corte.
Velocidad
Haciendo un desarrollo de Taylor del campo de velocidades y despreciando los término de orden
2 y superiores se obtiene
!
∂vi
vi (~x, t) = vi (~xo , t) + ∆xi ∀i, j .
∂xj ~
xo
El primer término del lado derecho de la ecuación anterior representa la traslación por lo que el
segundo debe representar la rotación y la deformación. En forma matricial la ecuación anterior
queda
u(~x) u(~xo ) ∂u/∂x ∂u/∂y ∂u/∂z ∆x
v(~
x ) = v(~
x ) + ∂v/∂x ∂v/∂y ∂v/∂z ∆y .
o
w(~x) w(~xo ) ∂w/∂x ∂w/∂y ∂w/∂z ~x ∆z
o
∂vi
La matriz ∂x j ~
se puede dividir en dos matrices, una antisimétrica, que representa la rotación,
xo
y otra simétrica, que representa la deformación, de la siguiente manera:
1 ∂u ∂v 1 ∂u ∂w
0 2 ∂y − ∂x −
∂u/∂x ∂u/∂y ∂u/∂z 2 ∂z ∂x
∂v/∂x ∂v/∂y ∂v/∂z = − 12 ∂u ∂v
− ∂x 0 1 ∂v
− ∂w
∂y 2 ∂z ∂y
∂w/∂x ∂w/∂y ∂w/∂z
1 ∂u ∂w
− 2 ∂z − ∂x − 2 ∂z − ∂w
1 ∂v
∂y 0
∂u 1 ∂u ∂v 1 ∂u ∂w
∂x 2 ∂y + ∂x 2 ∂z
+ ∂x
1 ∂u ∂v ∂v 1 ∂v ∂w
+ 2 ∂y + ∂z +
∂x ∂y 2 ∂y
1 ∂u ∂w 1 ∂v ∂w ∂w
2 ∂z + ∂x 2 ∂z + ∂y ∂z
Recordando los resultados de la mecánica del sólido, donde sólo se consideran movimientos de
traslación y rotación, la velocidad esta dada por
~~x = V
V ~~x + Ω
~ × ~r ,
o
C. Gherardelli U. de Chile
3.2 Aceleración 36
Vemos que este resultado es un caso particular de la ecuación para un fluido donde no existe
deformación.
3.2 Aceleración
La velocidad de una partı́cula cualquiera será una función de la posición asi como del tiempo
~ =V
V ~ (~r, t) .
d~ d~
~a = V (~r, t) = V (x, y, z, t) .
dt dt
~ ∂x ∂ V
∂V ~ ∂y ∂ V ~ ∂z ∂ V ~
~a = + + +
∂x |{z}
∂t ∂y |{z}
∂t ∂z |{z}
∂t ∂t
u v w
~ ~ ~ ~
! !
∂V ∂V ∂V ∂V
~a = u+ v+ w + .
∂x ∂y ∂z ∂t
| {z } | {z }
aceleración aceleración
convectiva local
• Aceleración convectiva: representa el hecho de que una propiedad asociada a una partı́cula
fluida puede cambiar debido al movimiento de ésta de un punto en el espacio a otro.
∂u ∂u ∂u ∂u
ax = u+ v+ w + ,
∂x ∂y ∂z ∂t
∂v ∂v ∂v ∂v
ay = u+ v+ w + ,
∂x ∂y ∂z ∂t
∂w ∂w ∂w ∂w
aw = u+ v+ w + .
∂x ∂y ∂z ∂t
~
∂V
~a = + V~ ·∇ V ~.
∂t | {z }
operador
C. Gherardelli U. de Chile
3.3 Sistemas y Volúmenes de Control 37
~ · ∇ es un operador matemático, que en el caso de la ecuación anterior se encuentra operando
V
~ . De lo anterior se puede decir que
sobre la velocidad V
∂() ~
+ V · ∇ ()
∂t
es también un operador que opera sobre la velocidad. Este operador se denomina derivada
material, sustancial o total y se representa por
D()
.
Dt
⇒
~)
D(V
~a = .
Dt
El concepto de derivada total es aplicable a distintos parámetros del flujo y no solo a la acel-
eración. Para la temperatura T (x, y, z, t) por ejemplo, que se diferencia de la velocidad por ser
un campo escalar, la derivada total resulta
DT ∂T ~ · ∇T
= +V
Dt ∂t
Dp ∂p ~
= + V · ∇p
Dt ∂t
Como cualquier materia el comportamiento de un fluido es gobernado por un set de leyes fı́sicas
fundamentales, las cuales son expresadas por relaciones matemáticas. Las ecuaciones básicas
que gobiernan el movimiento de un fluido son
• Conservación de la masa
• Conservación de la energı́a
Además de estas leyes fundamentales existen relaciones secundarias como ecuaciones de estado,
dependencias de propiedades del fluido con la temperatura, etc.
Análogamente a lo que se vió para la descripción del movimiento de una partı́cula la aplicación
de estas leyes pueden ser aplicadas a un fluido principalmente mediante los conceptos de Sistema
o Volúmenes de Control.
C. Gherardelli U. de Chile
3.3 Sistemas y Volúmenes de Control 38
A
VC
R III
II
I
B t+dt
t
Sistema
Figura 3.5: Volumen de Control y Sistema en t y t + dt.
1
Cualquier parámetro que es dependiente de la masa se dice que es un parámetro extensivo. Un parámetro
que es independiente de la masa se dice intensivo.
C. Gherardelli U. de Chile
3.3 Sistemas y Volúmenes de Control 39
!
R
d ηρdV
dN DN
V S =
=
dt Sistema dt Dt S
! !
R R R R
ηρdV + ηρdV − ηρdV + ηρdV
III II t+∆t I II
t
= lim
∆t→0
∆t
! !
R R
ηρdV − ηρdV
DN
II t+∆t II
t
= lim
Dt S ∆t→0
∆t
! !
R R
ηρdV ηρdV
III t+∆t
I t
+ lim − lim
∆t→0
∆t ∆t→0
∆t
El segundo término representa la cantidad de N que atraviesa la superficie delimitada por ARB.
Si ∆t → 0 la relación se transforma por lo tanto en el flujo de N por la superficie ARB. El
tercer término representa análogamente la cantidad de N que entra en el volumen de control.
⇒Los dos últimos términos dan el flujo neto de N , por unidad de tiempo, que atraviesa por la
superficie de control.
~ · dA.
El flujo de masa a través de dA es ρ V ~ Multiplicando por η se obtiene
unidades de N masa
η ~ · dA
ρV ~
masa unidad de tiempo
que representa el flujo de N por unidad de tiempo que pasa a través de dA. El flujo neto de N
que pasa a través de la superficie de control es por lo tanto
Z
~ · dA
η ρV ~
SC
C. Gherardelli U. de Chile
3.4 Conservación de la masa / Ecuación de Continuidad 40
DN ∂
Z Z
= ηρdV + ~ · dA
η ρV ~
Dt S ∂t
VC SC
DN ∂
Z Z
= ηρdV + ~ · dA
η ρV ~
Dt S ∂t
VC SC
| {z } | {z }
variación no variación
permanente convectiva
DN
Z
= ~ · dA
η ρV ~
Dt S
SC
En el desarrollo anterior se supuso que el volumen de control estaba fijo c/r a la referencia
(ı̂, ̂, k̂) por lo que V~ se mide c/r al volumen de control ⇒DN/dt es un efecto observado desde
el volumen de control, por lo que todas las velocidades y derivadas c/r al tiempo son c/r al
volumen de control.
Si el volumen de control se encuentra en movimiento con una velocidad uniforme V ~V C la velocidad
que se debe utilizar, el en teorema de transporte de Reynolds, es la velocidad relativa al volumen
de control. Si V ~ es la velocidad del flujo, c/r a un sistema de referencia fijo, entonces la velocidad
relativa al volumen de control será W ~ =V ~ −V ~V C ⇒
DN ∂
Z Z
= ηρdV + ~ · dA
η ρW ~
Dt S ∂t
VC SC
Dm
=0
Dt S
N =m
η=1
C. Gherardelli U. de Chile
3.4 Conservación de la masa / Ecuación de Continuidad 41
∂
Z Z
ρdV + ~ · dA
ρV ~ =0 (3.3)
∂t
VC SC
∂
Z Z
~ · dA
ρV ~ =− ρdV . (3.4)
∂t
SC VC
Esta ecuación nos dice que la cantidad de masa que pasa por la superficie de control es igual a
la disminución por unidad de tiempo de la masa que ocupa el volumen de control.
Si el flujo es permanente (∂/∂t = 0) se tiene
Z
~ · dA
ρV ~ = 0,
SC
es decir, la masa que entra al volumen de control es igual a la masa que sale.
~ · dA
El término ρ V ~ representa el flujo másico a través de dA. El flujo másico a través de una
superficie cualquiera A es
Z
ṁ = ~ · dA
ρV ~ [kg/s].
A
~ · dA
El término V ~ es el flujo volumétrico a través de dA. El flujo volumétrico que pasa a través
de una superficie cualquiera A se denomina caudal Q y es
Z
Q= ~ · dA
V ~ [m3 /s].
A
Q = V̄ A
ṁ = ρ Q = ρ V̄ A
Velocidad media
C. Gherardelli U. de Chile
3.4 Conservación de la masa / Ecuación de Continuidad 42
y
x
z
v
x 2 ) dy dz
(ru - (ru ) dx
u (ru+ x 2 ) dy dz
(ru) dx
dy
w dz
dx
Volumen diferencial
∂ ∂ρ
Z
ρdV = δx δy δz
∂t ∂t
VC
∂ρ u
δx δy δz
∂x
∂ρ v
δx δy δz
∂y
∂ρ w
δx δy δz
∂z
∂ρ ~ =0
+ ∇ · ρV
∂t
C. Gherardelli U. de Chile
43
Capı́tulo 4
Dinámica de Fluidos
~ =V
V ~ (s, t) ŝ ,
dado que la velocidad es tangente a la lı́nea de corriente. El vector unitario ŝ es, sin embargo,
una función tanto de s como n, es decir, ŝ = ŝ(s, n). La aceleración de la partı́cula esta dada,
por lo tanto, por
~
DV D(V ŝ) DV Dŝ
~a = = = ŝ + V .
Dt Dt Dt Dt
~
DV ∂V
∂ŝ
= V ŝ + V V .
Dt ∂s ∂s
∂ŝ δŝ n̂
= lim = ,
∂s δs→0 δs R
∂V V2
~a = V ŝ + n̂ .
∂s }
| {z |R{z }
componente componente
paralela a ŝ normal a ŝ
∂p δs ∂p δs ∂V
p− δnδy − p + δnδy − γδsδnδy sin θ = ρδsδnδyV
∂s 2 ∂s 2 ∂s
y
ds d
z g p 2) dn
ds ) dn
dy
ds
y
x (p- n (p+ ps 2 q dz
q
ds s
n dn dz q dn
y dy
dnd
dWn
s ) dW dn ) ds
pd 2 q p 2
n
(p- s
(p+
dW s
Línea de
corriente
∂p ∂V
−γ sin θ − = ρV .
∂s ∂s
Se ve que para que exista movimiento debe existir un desbalance entre las fuerzas causadas por
la presión y el peso. Analizaremos a continuación la ecuación anterior a lo largo de la lı́nea de
corriente. El diferencial de la presión es
∂p ∂p
dp = ds + dn .
∂s ∂n
Sobre una lı́nea de corriente se cumple que n = cte de donde resulta dn = 0, por lo que
∂p dp
= .
∂s ds
C. Gherardelli U. de Chile
4.1 Dinámica elemental 45
∂V 1 dV 2
V =
∂s 2 ds
y
∂z dz
sin θ = = .
∂s ds
dz dp 1 d(V 2 )
−γ − = ρ .
ds ds 2 ds
Eliminando ds obtenemos
1
−γdz − dp = ρd(V 2 )
2
o
1
dp + ρd(V 2 ) + γdz = 0 .
2
dp 1 2
Z
+ V + gz = C , (4.1)
ρ 2
donde C es una constante de integración. Las ecuaciones anteriores son válidas sólo sobre una
lı́nea de corriente. Se ve que para poder integrar el primer término de la ecuación anterior es
necesario conocer la relación existente entre la densidad y la presión.
Fluido incompresible.
La ecuación anterior se denomina ecuación de Bernoulli (1778) y tiene implı́citas las siguientes
hipótesis
• flujo permanente,
• flujo incompresible,
La última de estas hipótesis significa que la constante de integración será diferente entre una
lı́nea de corriente a otra. La ecuación de Bernoulli dice que para un flujo sin roce la energı́a total,
que es la suma de la energı́a cinética, la energı́a potencial y la energı́a de presión, se mantiene
C. Gherardelli U. de Chile
4.1 Dinámica elemental 46
constante. Se ve que la ecuación de Bernoulli, escrita en esta forma, tiene unidades de presión.
La constante C de la ecuación de Bernoulli se denomina presión total pT , es decir
1
pT = p + ρV 2 + ρgz .
2
Por lo tanto, la presión total se mantiene constante sobre una lı́nea de corriente en un flujo ideal
(µ = 0). Vemos además que la presión total esta compuesta por
1 2
ρV = presión dinámica,
2
p = presión estática y
p V2
+z+ = cte .
ρg 2g
Fluido compresible
Si suponemos ahora que el fluido es un gas ideal podemos utilizar la ecuación de estado de los
gases ideales para expresar la dependencia de la densidad con la presión y la temperatura. De
la ecuación de estado se obtiene
p
ρ= .
RT
dp 1
Z
RT + gz + V 2 = C ,
p 2
1 2 p1 1
V1 + gz1 + RT ln = V22 + gz2 .
2 p2 2
C. Gherardelli U. de Chile
4.2 Cantidad de movimiento lineal 47
k p1 V12 k p2 V22
+ + gz1 = + + gz2 .
k−1 ρ1 2 k−1 ρ2 2
Esta ecuación es equivalente a la ecuación para un flujo incompresible salvo por el factor (k/k−1)
que multiplica la presión y por el hecho de que las densidades son distintas.
Haciendo un desarrollo análogo al realizado en el punto anterior pero ahora según n̂ se obtiene
dz ∂p ρV 2
−γ − = .
dn ∂n R
Esta ecuación indica que la variación en la dirección del flujo de la partı́cula esta acompañada de
una combinación apropiada del gradiente de presión y el peso en la dirección normal a la lı́nea
de corriente. Si la partı́cula se mueve por una trayectoria recta (R → ∞) la presión varia en
forma hidroestática. Si por ejemplo despreciamos la gravedad o consideramos un flujo horizontal
obtenemos
∂p ρV 2
− = ,
∂n R
que nos dice que la presión aumenta si uno se aleja del centro de curvatura, dado que n̂ apunta
hacia adentro del centro de curvatura y el término del lado derecho de la ecuación es positivo.
Para un s constante se tiene que ds = 0 y por lo tanto (∂p/∂n) = dp/dn. Por lo tanto, si
multiplicamos la ecuación anterior por dn e integramos a través de las lineas de corriente con
ds = 0 se obtiene
dp V2
Z Z
+ dn + gz = cte. normal a la lı́nea de corriente.
ρ R
V2
Z
p+ρ dn + ρgz = C .
R
Esta ecuación nos dice que cuando una partı́cula viaja sobre una lı́nea de corriente curva (R < ∞)
se requiere una fuerza neta adicional con dirección hacia el centro de curvatura para vencer los
efectos centrı́fugos asociados a la curvatura. Esta fuerza o diferencial de fuerza adicional es
proporcionada por la presión. La presión será, por lo tanto, mayor en la parte externa que en
la parte interna de la curvatura.
La segunda ley de movimiento de Newton para un sistema diferencial queda expresada por
D
dF~ = ~ ).
(dmV
Dt
C. Gherardelli U. de Chile
4.2 Cantidad de movimiento lineal 48
DV~
dF~ = dm = dm~a = ρd∀~a
Dt
~
!
∂V
~ ·∇ V ~ .
= ρd∀ + V
∂t
Como se vió anteriormente las fuerzas externas que actúan sobre un elemento de fluido, en
ausencia de esfuerzos de corte, esta dada por
dF~ = −∇p − γ k̂ d∀ ,
~
!
∂V
~ ·∇ V~
−∇p − γ k̂ = ρ + V
∂t
1 ~
∂V
− ∇p − g∇z = + V~ ·∇ V~. (4.3)
ρ ∂t
Una de las restricciones más fuertes en la ecuación de Bernoulli es que es aplicable sólo a una
lı́nea de corriente, es decir, la constante es en general distinta entre una lı́nea de corriente y otra.
Aplicando la ecuación de Euler para un flujo permanente se obtiene
1
~ ·∇ V~.
− ∇p − g∇z = V
ρ
El término del lado derecho de la ecuación anterior se puede desarrollar de la siguiente forma
!
2
~ =∇ V
~ ·∇ V
V ~ × (∇ × V
−V ~ ).
2
Según una dirección arbitraria de movimiento d~r, es decir, realizando un producto punto entre
la ecuación anterior y d~r se obtiene
!
dp V2
+d + gdz = 0 .
ρ 2
C. Gherardelli U. de Chile
4.2 Cantidad de movimiento lineal 49
1
p + ρgz + ρV 2 = cte. ,
2
que es equivalente a la ecuación de Bernoulli. Como la dirección d~r del desplazamiento fue
elegida en forma arbitraria, se puede decir que la ecuación obtenida es válida en cualquier parte
del fluido. Lo anterior indica que si el flujo es irrotacional (∇ × V~ = 0) entonces la ecuación de
Bernoulli es válida entre cualquier par de puntos del fluido y no sólo sobre una lı́nea de corriente.
Se ve que la cantidad de movimiento es una propiedad extensiva cuya propiedad intensiva aso-
~ . Aplicando el teorema del transporte de Reynolds se obtiene
ciada es la velocidad V
D
Z
F~sis = ~ ρdv
X
V
Dt
sis
⇒
∂
Z Z
F~ = ~ ρdv + ~ ρV
~ · dA
~
X
V V (4.4)
∂t
VC SC
Esta ecuación nos dice que la variación en el tiempo de la cantidad de movimiento lineal de un
sistema es igual a la variación temporal de la cantidad de movimiento lineal del contenido del
volúmen de control más el flujo neto de cantidad de movimiento a través de la superficie de
control y es además igual a las fuerzas externas que actúan sobre el volúmen de control. Esta
ecuación es válida para un sistema inercial.
Las fuerzas que actúan sobre el volumen de control se pueden subdividir en fuerzas de superficie
F~s , como la presión y los esfuerzos de corte por ejemplo, y en fuerzas másicas F~m como por
ejemplo el peso.
⇒
∂
Z Z
F~ = F~s + F~m = ~ ρdv + ~ ρV
~ · dA
~ .
X
V V
VC
∂t
VC SC
Se debe tener presente que las ecuaciones anteriores son ecuaciones vectoriales cuyas correspon-
dientes componentes escalares son
∂
Z Z
~ · dA
~ ,
X
Fx = uρdv + u ρV
∂t
VC SC
C. Gherardelli U. de Chile
4.2 Cantidad de movimiento lineal 50
∂
Z Z
~ · dA
~ ,
X
Fy = vρdv + v ρV
∂t
VC SC
∂
Z Z
~ · dA
~ .
X
Fz = wρdv + w ρV
∂t
VC SC
~V C con
Considerando un volumen de control, que se desplaza con una velocidad constante V
respecto a una referencia inercial, se tiene que
∂
Z Z
F~ = ~ ρdv + ~ ρW
~ · dA
~ .
X
V V
VC
∂t
VC SC
~ =W
V ~ +V
~V C .
Reemplazando se obtiene
∂
Z Z
F~ = ~ +V
~V C )ρdv + ~ +V
~ V C ) ρW
~ · dA
~ .
X
(W (W
∂t
VC SC
∂
Z
~ +V
(W ~V C )ρdv = 0
∂t
VC
⇒
Z
F~ ~ +V
~ V C ) ρW
~ · dA
~
X
= (W
SC
Z Z
= ~ ρW
W ~ · dA
~ +V
~V C ~ · dA
ρW ~ .
SC SC
C. Gherardelli U. de Chile
4.3 Cantidad de movimiento angular 51
En esta sección se verá el momento que ejerce una fuerza con respecto a algún punto. Para esto
relacionaremos la cantidad de movimiento angular con el momento ejercido. En particular nos
interesará el momento que se ejerce sobre un eje.
Si ~r es el vector posición de un elemento diferencial de fluido, medido desde el origen de un
sistema referencial inercial, el momento con respecto a éste origen será
D ~
~r × δF = ~r × V ρdv .
Dt
D h ~
~ ρdv = D~r × V
~ ρdv + ~r × D(V ρdv)
i
~r × V
Dt Dt Dt
y como
D~r ~
=V
Dt
se obtiene
D h ~
~ ρdv + ~r × D(V ρdv) .
i
~ ρdv = V
~r × V ~ ×V
Dt | {z } Dt
=0
D h ~
~ ρdv = ~r × D(V ρdv) .
i
~r × V
Dt Dt
D h i
~ ρdv = ~r × δ F~
~r × V
Dt
D h
Z i X
~ ρdv =
~r × V ~r × F~
Dt
Sis
Como (D/Dt) es la derivada temporal que sigue al sistema (dm = cte.) se puede sacar de la
integral
⇒
D
Z h i
~ ρdv =
X
~r × V ~r × δF ,
Dt
Sis
es decir, la suma de momentos externos que actúan sobre el sistema es igual a la tasa de cambio
temporal del momento de momentos del sistema.
C. Gherardelli U. de Chile
4.3 Cantidad de movimiento angular 52
D ∂
Z h i Z Z
~ ρdv = ~r × F~ = ~ ρdv + ~ ρV
~ · dA
~.
X
~r × V ~r × V ~r × V
Dt VC
∂t
Sis VC SC
∂
Z Z
~
M ~ ρdv +
~r × V ~ ρV
~r × V ~ · dA
~.
VC = ∂t
VC SC
Esta ecuación es muy utilizada para resolver problemas que involucran turbomáquinas como
bombas, turbinas, ventiladores, compreseores, etc.. En la mayorı́a de los problemas prácticos
se requiere sólo la componente escalar de la ecuación anterior, que entrega el momento con
respecto a un eje de rotación. Las coordenadas cilı́ndricas presentan en éste caso una ventaja
~ = rVθ ,
si se coinsidera el eje z coincidente con el eje de rotación. Según z se tiene que ~r × V
donde r es la distancia al eje y Vθ es la componente tangencial de la velocidad. La componente
escalar requerida es por lo tanto
∂
Z Z
Mz = (rVθ ) ρdv + ~ · dA
(rVθ ) ρV ~.
∂t
VC SC
El torque ejercido sobre el eje de rotación o torque resistivo, es la reacción al momento entregado
por la ecuación anterior, es decir
Teje = −Mz .
donde ṁ es el flujo másico, r la posición desde el eje, y los subindices e, s representan la entrada
y salida respectivamente. El signo que acompaña a ṁ será positivo si el flujo sale del volumen
de control y negativo si el flujo entra al volumen de control. El signo que acompaña al producto
rVθ será positivo si Vθ y U , que es la velocidad de rotación del volumen de control, tienen la
misma dirección y negativo en caso contrario.
La potencia resistiva o la potencia en el eje Ẇeje se obtiene de multiplicar el torque en el eje
Teje con la velocidad de rotación ω
Ẇeje = Teje ω .
C. Gherardelli U. de Chile
4.4 Turbomáquinas 53
Como rω = U ⇒
ṁe = ṁs = ṁ .
4.4 Turbomáquinas
Las turbomáquinas son elementos mecánicos que extraen (turbinas) o entregan (bombas) energı́a
de o a un fluido respectivamente, como resultado de una interacción dinámica entre el fluido y
la máquina. Una caracterı́stica de las turbomáquinas es que el fluido nunca esta confinado en el
equipo. Las máquinas en las cuales el fluido se encuentra confinado por un tiempo determinado
dentro de ellas, se denominan máquinas alternativas.
Dentro de los elementos que entregan energı́a al fluido se pueden citar las bombas, los ventiladores
y los compresores por ejemplo. Dentro de las turbomáquinas que extraen energı́a de un fluido
se encuentran las turbinas hidráulicas, las turbinas a vapor y a gas.
La interacción dinámica entre el fluido y la turbomáquina se lleva a cabo en los álabes. Los
álabes se encuentran unidos al eje de rotación mediante el rodete.
De acuerdo a la dirección del flujo dentro de la turbomáquina, éstas se pueden clasificar en
axiales, radiales, mixtas o tangenciales. Además de la clasificación mencionada anteriormente
la turbinas se clasifican en turbinas de acción o impulsión y en turbinas de reacción:
• Las turbinas de impulsión son accionadas por uno o más chorros libres de fluido a elevada
velocidad. La transformación de energı́a de presión en energı́a cinética se realiza fuera de
la turbina y no en los álabes de ésta. La variación de presión del fluido, a través de los
álabes, es por lo tanto nula. Si no se considera la fricción y la gravedad el chorro de fluido
no sufrirá variaciones de la velocidad con respecto al álabe. Un ejemplo de éste tipo de
turbinas es la turbina Pelton (Fig. 4.3(a)).
• En las turbinas de reacción el fluido entra a la turbina a una presión elevada. La trans-
formación de energı́a de presión en energı́a cinética se produce dentro de la turbina. La
velocidad no se mantendrá constante respecto de los álabes. Ejemplo de éste tipo de
turbina son las turbinas a vapor y gas. En la figuras 4.2 y 4.3(b) se pueden observar
una turbina de a gas y una hidráulica, del tipo Kaplan, que corresponden a turbinas de
reacción.
Triángulo de velocidades
C. Gherardelli U. de Chile
4.4 Turbomáquinas 54
(a) (b)
Figura 4.2: a) Turbina a gas. Al lado derecho se ve el compresor y al lado izquierdo las tres
etapas de expansión de la turbina. b) Acercamiento a la última etapa de expansión
de la turbina
C. Gherardelli U. de Chile
55
Capı́tulo 5
Energı́a
En este capı́tulo se verán los aspectos energéticos asociados al flujo de un fluido cualquiera.
Para ésto se introduce, en una primera etapa, la primera ley de la termodinámica que establece
la ley de conservación de la energı́a. En una segunda etapa se analiza la segunda ley de la
termodinámica, lo cual permite introducir la no idealidad o irreversibilidad de un flujo y la
existencia de pérdidas de energı́a.
Q W
DE
El primer principio de la termodinámica establece que
la energı́a se conserva en todo instante, por lo que sólo
puede transformarse de un tipo de energı́a en otro.
Sistema cerrado
Para un sistema cerrado, el cual sólo puede relacionarse con el medio mediante la transferencia de
calor Q y trabajo W , la primera ley de la termodinámica queda representada matemáticamente
por
DE dQ dW
= − ,
Dt |dt {z dt }
interacción
energética
donde
Q: Calor o Energı́a neta de transición que se transfiere de un sistema a otro como resultado
de una diferencia de temperatura. El calor transferido por unidad de tiempo, Q̇ = dQ/dt,
representa todas las formas de intercambio de energı́a entre el sistema y el medio circun-
dante, que se produce a causa de una diferencia de temperatura entre ambos como por
ejemplo radiación, conducción, convección. Por convención Q̇ se considera positivo si entra
en el sistema.
W : Energı́a de transición neta hacia o desde un sistema que existe cuando fuerzas exteriores al
5.1 Primera ley de la termodinámica 56
sistema desplaza a este una cierta distancia. El trabajo transferido por unidad de tiempo,
Ẇ = dW/dt, se denomina potencia y esta compuesto por
a) el trabajo neto realizado sobre el medio exterior al sistema como consecuencia de las
tensiones en los puntos de la superficie que separa el sistema y el medio externo, a
través de los cuales existe un flujo de fluido Este trabajo se designará por Wflujo .
b) Otras formas de trabajo realizado sobre el medio. Por lo general se trata del trabajo
realizado por o sobre un eje de rotación y se representará por Weje .
Una diferencia importante entre la energı́a almacenada y las interacciones energéticas es que la
primera es una propiedad del sistema y depende por lo tanto sólo del estado actual del sistema
y no de cómo se alcanzó ese estado. Q y W son, por el contrario, funciones que dependen tanto
de los estados final e inicial como de proceso de transformación de un estado a otro. Este tipo
de funciones se denominan también funciones de lı́nea.
Si E es la energı́a almacenada en el sistema y e es la energı́a almacenada por unidad de masa o
energı́a especı́fica, se cumple que
Z
E= eρdv ,
Sis
con
V2
e= + gz + u
2
DE D dQ dW
Z
= eρdv = − .
Dt Dt dt dt Sis
Sis
D ∂ dQ dW
Z Z Z
eρdv = eρdv + ~ · dA)
e(ρV ~ = − .
Dt ∂t dt dt VC
Sis VC SC
dQ dWeje dWflujo ∂
Z Z
− − = eρdv + ~ · dA)
e(ρV ~ .
dt dt dt ∂t
VC SC
C. Gherardelli U. de Chile
5.1 Primera ley de la termodinámica 57
dQ dWeje ∂
Z Z Z Z
− ~ ~
+ ~τss · V dA + ~σnn · V dA = eρdv + ~ · dA)
e(ρV ~ .
dt dt ∂t
SC SC VC SC
El término asociado a los esfuerzos de corte se puede hacer cero eligiendo un volumen de control
adecuado tal que se cumpla ~τss · V ~ = 0 sobre toda la superficie de control (esta condición se
cumple cuando el vector velocidad es normal a la superficie de control en lo puntos donde el
flujo entra en el volumen de control). Considerando sólo la componente normal de ~τ , es decir,
~σnn , la relación para Ẇflujo se puede reescribir de la siguiente manera
Z
Ẇflujo = − ~ dA .
~σnn · V
SC
Esta ecuación es válida en ausencia de esfuerzos de corte o viscosos y para un flujo que entra y
sale de un volumen de control en dirección normal a la superficie de control. El esfuerzo normal
a la superficie de control es igual a la presión con signo cambiado, es decir, σnn = −p, por lo
que la ecuación anterior queda
!
dQ dWeje ∂ V2
Z Z
− = eρdv + ~ · dA)
+ gz + u + pv (ρV ~ .
dt dt ∂t 2
VC SC
h = u + pv .
C. Gherardelli U. de Chile
5.1 Primera ley de la termodinámica 58
Reemplazando se obtiene
!
dQ dWeje ∂ V2
Z Z
− = eρdv + ~ · dA)
+ gz + h (ρV ~ .
dt dt ∂t 2
VC SC
Si se tiene un número finito de secciones donde el flujo atraviesa la superficie de control entrando
(e) o saliendo (s) del volumen de control y si además suponemos que las propiedades del fluido
y del flujo permanecen constantes en éstas secciones, lo cual es una aproximación aceptable en
muchos casos, la integral de la ecuación anterior puede ser reemplazada por sumatorias sobre
las secciones de paso de la siguiente manera
! ! !
V2 X V2 X V2
Z
~ · dA)
+ gz + h (ρV ~ = + gz + h (ρV A) − + gz + h (ρV A) .
2 s 2 e 2
SC
ρe Ve Ae = ρs Vs As = ṁ
⇒
" #
V 2 − Ve2
ṁ (hs − he ) + g(zs − ze ) + s = Q̇ − Ẇeje .
2
Para un flujo adiabático (Q̇ = 0) y con una variación en la energı́a interna despreciable (ue −us ≈
0) la ecuación anterior queda de la siguiente manera
" #
V 2 − Ve2
ṁ (p/ρ)s − (p/ρ)e + g(zs − ze ) + s = Ẇneto .
2
ṁ 1
(ps − pe ) + gρ(zs − ze ) + ρ(Vs2 − Ve2 ) = Ẇneto .
ρ 2
C. Gherardelli U. de Chile
5.1 Primera ley de la termodinámica 59
Aplicación
V=30 m/s
h=3348 kJ/kg
Si el flujo a través de la turbina de la figura es
adiabático, es decir, Q̇neto = 0, y se desprecian los W
Turbina
cambios de altura, es decir, z1 = z2 , determine la po-
V=60 m/s
tencia a extraer de la turbina por unidad de masa de h=2550 kJ/kg
vapor.
Turbina a vapor
C. Gherardelli U. de Chile
5.1 Primera ley de la termodinámica 60
Hasta aquı́ se ha considerado que el flujo es uniforme en las secciones en que el flujo entra y/o
sale del volumen de control analizado. Si el flujo no es uniforme se introduce el coeficiente de
correción para la energı́a cinética, α, tal que
!
V2 ~ ~ αs V̄s2 αe V̄e2
Z
ρV dA = ṁ − ,
2 2 2
SC
1 1 Ẇ
p + ραV̄ 2 + ρgz = p + ραV̄ 2 + ρgz + .
2 s 2 e Q
La ecuación de Bernoulli desarrollada para una lı́nea de corriente y un flujo incompresible donde
no existen efectos viscosos es
1
p + ρgz + ρV 2 = cte
2
o entre dos puntos de una misma lı́nea de corriente se obtiene
1 1
pe + ρgze + ρVe2 = ps + ρgzs + ρVs2 .
2 2
La ecuación de conservación de la energı́a se puede aplicar también al flujo de una partı́cula
entre dos puntos de una lı́nea de corriente. Esta ecuación, en ausencia de trabajo neto (Ẇ = 0)
y para un flujo incompresible, es
(ps − pe ) 1
ṁ (us − ue ) + + g(zs − ze ) + (Vs2 − Ve2 ) = Q̇neto .
ρ 2
Q̇
(us − ue ) − = 0.
ṁ
C. Gherardelli U. de Chile
5.1 Primera ley de la termodinámica 61
p V2
+ + gz ,
ρ 2
que representan las tres diferentes formas de energı́a mecánica asociadas a un flujo no viscososo o
Q̇
sin pérdidas, se le denomina energı́a útil. Por lo tanto, la combinación de términos (us − ue ) − ṁ
representa la variación de energı́a útil en un flujo por causa de lss irreversibilidades. Como
veremos en la siguiente sección, para un flujo cualquiera, se cumple además que
Q̇
(us − ue ) − ≥0
ṁ
por lo que este término representa una disminución o pérdida de energı́a útil, es decir
Q̇
(us − ue ) − = pérdida.
ṁ
1 1
pe + ρVe2 + ρgze − ps + ρVs2 + ρgzs = ∆PR ,
2 2
donde ∆PR representa las irreversibilidades en unidades de presión. Dividiendo por ρg obten-
emos el equivalente de ésta ecuación en unidades de longitud o altura, es decir,
! !
pe V2 ps V2
+ e + ze − + s + zs = ∆HR .
ρg 2g ρg 2g
1 1 Ẇ
p + ρV 2 + ρgz = p + ρV 2 + ρgz + − ∆PR . (5.2)
2 s 2 e Q
C. Gherardelli U. de Chile
5.1 Primera ley de la termodinámica 62
Aplicación
C. Gherardelli U. de Chile
5.2 Segunda ley de la termodinámica 63
es decir la variación de la entropı́a del sistema, que es una propiedad termodinámica del sistema,
es mayor que la transferencia de entropı́a. El signo igual asociado a la ecuación anterior se refiere
un proceso de transformación, entre el estado 1 y el 2, reversible, es decir
Z 2 δQrev
S2 − S1 = .
1 T
Se define, como una medida de la desigualdad de la ecuación 5.3, lo que representa a su vez una
medida de la irreversibilidad o no idealidad existente, la generación de entropı́a, Sgen , como
Z 2 δQrev
Sgen = S2 − S1 − ≥ 0. (5.4)
1 T
Se ve que Sgen nunca será negativo, que depende del proceso de transformación y que será igual
a cero sólo en procesos reversibles.
En forma diferencial, la segunda ley de la termodinámica resulta
X δQ
dS ≥
T
o en forma especı́fica
X δQ/ṁ δq
ds ≥ = .
T T
Reordenando se obtiene
T ds ≥ δq
T sgen = T ds − δq ≥ 0 . (5.5)
C. Gherardelli U. de Chile
5.2 Segunda ley de la termodinámica 64
dS X Q̇ X X
Ṡgen = − + ṁs − ṁs ≥ 0
dt i
Ti s e
donde el primer término del lado derecho representa la tasa de acumulación de entropı́a en el
volumen de control, el segundo la transferencia de entropı́a via transferencia de calor y los dos
últimos el flujo neto de entropı́a a través de la superficie de control.
Para un elemento diferencial, la ecuación de conservación de la energı́a en ausencia de trabajo
externo, es decir Ẇ = 0, resulta
h i
ṁ du + d(p/ρ) + d(V 2 /2) + gdz = δ Q̇
o en forma especı́fica
δ Q̇
du + d(p/ρ) + d(V 2 /2) + gdz = = δq .
ṁ
De la termodinámica se sabe que
T ds = du + pd(1/ρ) .
dp
− + d(V 2 /2) + gdz = (T ds − δq) = T sgen .
ρ
Como se vió anteriormente (ecuación 5.5) el lado derecho es mayor que cero y está relacionado
con las irreversibilidades presentes, es decir, representa las pérdidas de energı́a útil.
⇒
dp
− + d(V 2 /2) + gdz = δ(pérdidas) ,
ρ
du − pd(1/ρ) − δq = δ(pérdidas)
o
Z s
us − ue + pd(1/ρ) − q = pérdidas .
e
C. Gherardelli U. de Chile
70
Capı́tulo 6
Flujo Potencial
Se analizará en éste capı́tulo un tipo particular de flujo o escurrimiento denominado flujo po-
tencial. Este tipo de flujo se denomina ası́ ya que es posible definir una función potencial φ
mediante la cual se puede representar el campo de velocidades. La condición necesaria para
la existencia de la función potencial es que el flujo sea irrotacional, es decir, ∇ × V ~ = 0. Si
bien la condición de irrotacionalidad en un flujo es difı́cil de encontrar existen, en algunos flujos,
zonas las cuales pueden ser tratadas como si el flujo fuese irrotacional. Para que una partı́cula
fluida, originalmente sin rotación, comience a rotar se requiere de un esfuerzo de corte. Como se
vio anteriormente los esfuerzos de corte τ están asociados a la viscosidad µ y los gradientes de
velocidad en la dirección normal al desplazamiento (∂V /∂n). Para fluidos de viscosidad baja,
como el aire por ejemplo, los esfuerzos de corte estarán asociados principalmente a la existencia
de gradientes de velocidad. En las regiones del flujo donde no existan gradientes de velocidad el
flujo podrá ser considerado como irrotacional. De particular interés es el estudio de flujo alrede-
dor de cuerpos sólidos inmersos en un flujo, como un perfil alar por ejemplo. Sobre la pared
del cuerpo, y por el principio de adherencia, el fluido tendrá una velocidad relativa al cuerpo
nula. A medida que uno se separa del cuerpo la velocidad del fluido aumenta aproximándose a la
velocidad de la corriente libre a partir de una cierta distancia, a partir de la cual prácticamente
no existen gradientes de velocidad. La zona cercana al cuerpo es una zona de grandes gradientes
de velocidad y por lo tanto una zona donde los esfuerzos de corte son importantes. Esta zona se
denomina capa lı́mite y será estudiada en el capı́tulo 10. En la zona fuera de la capa lı́mite los
gradientes de velocidad desaparecen y con ellos los esfuerzos de corte, por lo que el flujo puede
ser considerado como irrotacional.
VO V=VO
Capa límite
ÑxV=0
Flujo irrotacional
ÑxV=0
Figura 6.1: Flujo irrotacional y capa lı́mite sobre un cuerpo.
donde las propiedades y caracterı́sticas del flujo son independientes de una de las coordenadas
espaciales (2D).
∂Vz ∂Vy
=
∂y ∂z
∂Vx ∂Vz
=
∂z ∂x
∂Vy ∂Vx
=
∂x ∂y
Analizando éstas relaciones se ve que las componentes de la velocidad se pueden expresar medi-
ante una función escalar φ(x, y, z) tal que
∂φ
Vx =
∂x
∂φ
Vy =
∂y
∂φ
Vz =
∂z
~ = ∇φ
V
~ = ∇ · ∇φ = 0
∇·V
∇2 φ = 0
que se conoce como ecuación de Laplace. En coordenas rectangulares la ecuación anterior queda
C. Gherardelli U. de Chile
6.2 Función de corriente ψ 72
∂Vx ∂Vy
+ =0
∂x ∂y
Analizando la ecuación anterior se ve que es posible definir una función ψ = ψ(x, y), llamada
función de corriente, tal que
∂ψ
Vx =
∂y
∂ψ
Vy = −
∂x
∂ ∂ψ ∂ ∂ψ
+ − =0
∂x ∂y ∂y ∂x
∂2ψ ∂2ψ
− =0
∂x∂y ∂y∂x
de donde vemos que ψ satisface la ecuación de continuidad. Obtenemos de ésta manera nueva-
mente una reducción del número de funciones necesarias para representar el campo de veloci-
dades. Se ve además, de la ecuación anterior, que la función de corriente satisface también la
ecuación de Laplace
⇒
∇2 ψ = 0
Las lı́neas para las cuales la función de corriente es constante son las lı́neas de corriente. Difer-
enciando ψ se obtiene
∂ψ ∂ψ
dψ = dx + dy = 0
∂x ∂y
⇒
−Vy dx + Vx dy = 0
Esta ecuación representa, como se vio anteriormente, la ecuación para las lı́neas de corriente.
La variación del valor de la función de corriente, entre
dos lı́neas de corriente, esta relacionado con el cau- q
dal que pasa entre ellas. La ecuación de continuidad
aplicada a la figura queda
y2
Vxdy
dq = Vx dy − Vy dx Vydx
Introduciendo la función de corriente y1
Caudal entre lı́neas de corriente.
C. Gherardelli U. de Chile
6.2 Función de corriente ψ 73
∂ψ ∂ψ
dq = dy + dx = dψ
∂y ∂x
Zψ2 Zψ2
q= dq = dψ
ψ1 ψ1
q = ψ2 − ψ1
Se ve que la diferencia del valor de la función de corriente entre dos lı́neas de corriente es igual
al caudal volumétrico, por unidad de profundidad, que pasa entre las dos lı́neas.
Para una lı́nea de corriente se tiene que
dy Vy
=
dx ψ=cte Vx
que representa la pendiente de las lı́neas de corriente. La pendiente de las lı́neas equipotenciales,
es decir las lı́neas para las cuales φ = cte, resulta de igualar a cero el diferencial de φ, es decir
∂φ ∂φ
dφ = dx + dy = 0
∂x ∂y
Vx dx + Vy dy = 0
dy Vx
=−
dx φ=cte Vy
dy dy
· = −1
dx ψ=cte dx φ=cte
o
−1
dy dy
=−
dx ψ=cte dx φ=cte
lo cual indica que la intersección de las lı́neas equipotenciales y las lı́neas de corriente ocurre
formando un ángulo recto, es decir φ y ψ son perpendiculares entre si. Esta condición se utiliza
para representar un flujo gráficamente mediante una malla formada por las lı́neas de corriente
y las equipotenciales.
C. Gherardelli U. de Chile
6.3 Circulación 74
6.3 Circulación
La circulación se define como la integral de lı́nea, sobre
una curva cerrada, de la componente tangencial de la ds
velocidad a lo largo de la curva, es decir, V
I
Γ= ~ · d~s
V
c
c
Aplicando el teorema de Stokes se obtiene además que
Circulación.
Z
Γ= ~ ) · dA
(∇ × V ~
A
1 ∂ ∂ψ 1 ∂2ψ
∇2 ψ = r + =0
r ∂r ∂r r2 ∂θ2
1 ∂ 1 ∂Vθ
(r Vr ) + =0
r ∂r r ∂θ
1 ∂ψ ∂φ
Vr = =
r ∂θ ∂r
∂ψ 1 ∂φ
Vθ = − =
∂r r ∂θ
Flujo uniforme
El flujo más sencillo es aquel que tiene lı́neas de corriente rectas y paralelas y donde la magnitud
de la velocidad es constante. Este tipo de flujo se llama flujo uniforme.
Si la velocidad del flujo (U ) es paralela al eje x se tendrá además que Vx = U y Vy = 0. De las
relaciones anteriormente vistas para la función potencial se obtiene que
∂φ
=U
∂x
y
∂φ
= 0.
∂y
C. Gherardelli U. de Chile
6.4 Flujos simples 75
Integrando se obtiene
φ=Ux+C,
φ=Ux.
Se ve que las lı́neas equipotenciales son paralelas al eje y. La función de corriente correspondiente
al flujo uniforme se obtiene a partir de
∂ψ
=U
∂y
y
∂ψ
=0
∂x
⇒
ψ=Uy
que son lı́neas paralelas al eje x. φ y ψ se pueden apreciar en la figura 6.2(a) para un flujo
uniforme paralelo al eje x. Si el flujo forma un ángulo α c/r al eje x se obtienen las siguientes
funciones de corriente y potencial respectivamente (figura 6.2(b))
ψ = U (y cos α − x sin α) ,
φ = U (x cos α + y sin α) .
U f1 f2 f3 f4 y f4 y4
y f2
f3
y4 f1 y3
U
y3 y2
y2 y1
y1 a
x x
(a) Flujo uniforme paralelo a x (b) Flujo uniforme inclinado
C. Gherardelli U. de Chile
6.4 Flujos simples 76
Fuente y sumidero
q
Vr = .
2πr
∂φ q
=
∂r 2πr
y
1 ∂φ
=0
r ∂θ
de donde
q
φ= ln r
2π
C. Gherardelli U. de Chile
6.4 Flujos simples 77
En éste tipo de flujo las lı́neas de corriente son cı́rculos concéntricos1 como se muestra en la
figura.
y
Para éste caso se tiene que Vr = 0 y Vθ = Vθ(r) . Las
funciones potencial y de corriente que se obtiene para Vq
éste caso son y=cte
r
q
φ=Kθ
x
y f=cte
ψ = −K ln r ,
Vórtice libre.
donde K es una constante. La velocidad Vθ se obtiene de
1 ∂φ ∂ψ
Vθ = =−
r ∂θ ∂r
⇒
K
Vθ = .
r
Γ
K=
2π
donde Γ es la circulación sobre una curva que encierra el origen. La circulación será distinta de
cero ya que el origen representa una singuralidad dentro del flujo donde V → ∞. Sobre una
curva que no encierre al origen la circulación será cero (Γ = 0). Se obtiene por lo tanto
Γ
φ= θ
2π
y
Γ
ψ=− ln r .
2π
1
Dado que el flujo esta representado por un potencial de velocidades el flujo debe ser irrotacional. Esto puede
generar confusión con el tipo de flujo. Debe recordarse que la rotacionalidad esta relacionada con el cambio de
orientación de una partı́cula fluida y no con la trayectoria seguida por la partı́cula.
C. Gherardelli U. de Chile
6.5 Superposición de Flujos 78
Doblete
La combinación de una fuente y un sumidero, de igual
intensidad, separados por una distancia infinitesimal
y
r1
origina lo que se denomina doblete. Para la fuente y
r2
el sumidero, separados por una distancia 2a la función q r
q1 q q2
de corriente esta dada por -q x
q a a
ψ = − (θ1 − θ2 ) .
2π
Fuente y sumidero.
q 2ar sin θ
ψ = − tan−1 .
2π r2 − a2
qar sin θ
ψ=− .
π(r2 − a2 )
El doblete se obtiene haciendo tender a → 0 y q → ∞ de tal forma que el producto (qa/π) sea
constante. Para este caso se obtiene que
r 1
→
r2 −a2 r
Y=cte
de donde
k sin θ
ψ=−
r
donde k = qa/π se denomina intensidad del doblete.
El potencial de velocidades asociado al doblete resulta
k cos θ
φ= .
r
Lineas de corriente.
Como se mencionó anteriormente los flujos potenciales están gobernados por la ecuación de
Laplace. Esto significa que se pueden combinar diferentes flujo potenciales para formar otros
de interés. Otro punto que se debe recordar es que a través de una lı́nea de corriente no existe
flujo por lo que puede ser considerada como una pared sólida. Lo anterior indica que si se logran
combinar distintos tipos de flujo de tal manera que una lı́nea de corriente tenga la forma de un
cuerpo particular, se puede analizar analı́ticamente el flujo que se establece alrededor del cuerpo.
Este método se denomina superposición. A continuación se verán algunos ejemplos simples de
superposición.
C. Gherardelli U. de Chile
6.5 Superposición de Flujos 79
⇒
q
ψ = U r sin θ + θ,
2π
q
φ = U r cos θ + ln r .
2π
En algún punto del eje x (negativo) la velocidad de la fuente se anulará con la del flujo uniforme
y se formará, por lo tanto, un punto de estancamiento. Para la fuente se tiene que Vr = q/2πr
por lo que el punto de estancamiento es tal que en x = −b, U = q/2 π r ⇒
q
b= . (6.1)
2πU
1 ∂ψ q
Vr = = U cos θ +
r ∂θ 2πr
∂ψ
Vθ = − = −U sin θ
∂r
C. Gherardelli U. de Chile
6.5 Superposición de Flujos 80
k sin θ
ψ = U r sin θ −
r
y
k cos θ
φ = U r cos θ + ,
r
donde k es la intensidad del doblete. Para que el cuerpo que se genera con esta superposición
sea un cilindro se debe cumplir que ψ = cte para r = a, donde a es el radio del cilindro. Sobre la
superficie del cilindro, o sobre la lı́nea de corriente que representa el cilindro, se cumple además
que Vr = 0 ∀ θ
⇒
1 ∂ψ k
Vr = = U− 2 r cos θ = 0 ,
r ∂θ r
de donde
k
U− 2 =0
r r=a
k = U a2 .
y = cte
Reemplazando en ψ y en φ se obtiene
!
a2
ψ=Ur 1− 2 sin θ ,
r
!
a2
φ=Ur 1+ 2 cos θ .
r
Lı́neas de corriente para un
cilindro.
C. Gherardelli U. de Chile
6.5 Superposición de Flujos 81
Vθ,máx = Vθ (θ = ±π/2) = 2 U .
1
ps = po + ρU 2 (1 − 4 sin2 θ)
2
Integrando la presión ps sobre el manto del cilindro se puede obtener tanto la fuerza horizontal
o arrastre y la fuerza vertical o sustentación a la cual está sometido el cilindro. Para este caso,
y dada la simetrı́a del flujo que se genera en torno al cilindro como se puede ver de la figura,
ambas fuerzas tendrán un valor cero.
!
a2 Γ
φ = Ur 1 + 2 cos θ − θ
r 2π
respectivamente, donde Γ es la circulación. Se puede ver que para r = a, ψ = cte por lo que el
cuerpo generado es, al igual que el caso anterior, un cilindro de radio a. La diferencia es que el
cilindro generado por esta superposición se encuentra girando en el sentido de giro del vórtice
libre. La velocidad tangencial sobre la superficie (Vθ,s ) toma ahora el siguiente valor
∂ψ Γ
Vθ,s = − = −2U sin θ + .
∂r 2πa
La forma que adquiere el flujo, y por lo tanto la forma que tienen las lı́neas de corriente, dependen
de la intensidad del vórtice. La posición de el/los puntos de estancamiento en la superficie de
cilindro se encuentran imponiendo la condición Vθ = 0
⇒
Γ
sin θestanc. =
4πU a
En la figura 6.3 se muestran las diferentes posibilidades que se pueden presentar, de acuerdo al
Γ Γ
valor de 4πU a . Se ve que si 4πU a > 1 entonces el punto de estancamiento no se encuentra sobre
el cilindro ya que sin θestanc. > 1 no tiene solución.
C. Gherardelli U. de Chile
6.5 Superposición de Flujos 82
Figura 6.3: Lı́neas de corriente y puntos de estancamiento para diferentes valores de (Γ/4πU a).
La fuerza por unidad de longitud que se desarrolla sobre el cilindro se obtiene integrando ps
sobre el cilindro. Dada la simetrı́a vertical del flujo sobre el cilindro el arrastre es cero. La
sustentación, por unidad de longitud, resulta
FS = −ρ U Γ .
Se puede apreciar que la fuerza de sustentación apunta, para éste caso, hacia abajo y que depende
de la densidad y velocidad del flujo libre y de la circulación alrededor del cilindro. Si Γ = 0
entonces se tendrá que FS = 0. Para un cilindro girando en el sentido de giro del reloj, la fuerza
de sustentación apuntará hacia arriba.
C. Gherardelli U. de Chile
6.6 Aplicaciones 83
6.6 Aplicaciones
C. Gherardelli U. de Chile
6.6 Aplicaciones 84
C. Gherardelli U. de Chile
6.6 Aplicaciones 85
C. Gherardelli U. de Chile
6.6 Aplicaciones 86
C. Gherardelli U. de Chile
87
Capı́tulo 7
Flujo Viscoso
Sobre un elemento diferencial de fluido actúa una distribución de esfuerzos según todas las
direcciones como se muestra en la figura 7.1. Esta distribución de esfuerzos se agrupa en un
tensor denominado tensor de esfuerzos σ̄ ¯:
z s
zz
tzy
tzx tyz
txz syy
txy
tyx y
sxx
x
σxx τxy τxz
¯
σ̄ = τyx σyy τyz .
τzx τzy σzz
El elemento genérico de este tensor es τi,j donde el subı́ndice i representa la normal al plano
asociado con la tensión y el subı́ndice j representa la dirección de la tensión. Por convención se
adopta la siguiente convención de signos:
• La normal a la superficie es positiva hacia afuera del volumen que encierra la superficie.
1
Los fluidos no pueden por lo general soportar esfuerzos de tracción.
7.2 Ecuaciones de movimiento / Ecuaciones de Navier-Stokes 88
• Una componente de la tensión es positiva cuando tanto el vector que representa la superficie
sobre la que actúa la tensión como la tensión misma tienen sentidos coincidentes, es decir,
ambos positivos o ambos negativos.
Se cumple además que τi,i = σi,i que representa la componente de esfuerzos normal al plano i.
Se puede demostrar que este tensor es simétrico, es decir
τxy = τyx
τxz = τzx
τzy = τyz
⇒
σxx τxy τxz
¯
σ̄ = τxy σyy τyz
τxz τyz σzz
Se puede demostrar también que la suma de las tensiones normales es una invariante, es decir,
no depende de los ejes del sistema coordenado (x, y, z en este caso). Se define
1
σ̄ = (σxx + σyy + σzz )
3
como la tensión volumétrica que es un escalar. Para el caso de fluidos ideales o no viscosos se
tiene que σxx = σyy = σzz que se definió la presión como el negativo de la tensión normal, es
decir
σ̄ = σxx = −p .
Para el caso de fluidos viscosos se define la presión termodinámica como la tensión volumétrica
con signo cambiado, es decir
σ̄ = −p
Para determinar las ecuaciones de movimiento para un fluido viscoso se analizará el elemento
diferencial de la figura 7.2 donde se han considerado solo las fuerzas según la dirección y.
Realizando un balance de fuerzas y desarrollando se obtiene el siguiente sistema de ecuaciones
para todas las direcciones:
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7.2 Ecuaciones de movimiento / Ecuaciones de Navier-Stokes 89
tzy dz
(tzy+ z 2 ) dy dx (txy- txy dx
x 2 ) dy dz
syy dy
(syy- syy dy
y 2 ) dx dz dz
(syy+ y 2 ) dx dz
z
y
dx
x
dy
tzy dz
(txy+ txy dx
x 2 ) dy dz (tzy- z 2 ) dy dx
¯ = f (¯) .
σ̄
Fluidos de Stokes
Se define un fluido de Strokes al fluido que comple con las siguientes condiciones:
3. las propiedades del fluido son independientes del sistema de referencia utilizado.
Fluido Newtoniano
¯
Se define un fluido Newtoniano como un fluido de Stokes lineal, es decir, las componentes de σ̄
¯
son funciones lineales de las componentes de .
Bajo las condiciones anteriores la relación que se obtiene es la siguiente:
¯ + pI¯¯ = 2µ¯ + λ∇ · V
~ I¯¯
σ̄ (7.4)
donde
1
• −p = (σxx + σyy + σzz )
3
• µ (viscosidad dinámica) y λ (segundo coeficiente de viscosidad) son constantes de propor-
cionalidad.
C. Gherardelli U. de Chile
7.2 Ecuaciones de movimiento / Ecuaciones de Navier-Stokes 90
De acuerdo a la ec. 7.4 el elemento genérico para los esfuerzos de corte esta dado por
!
∂vi ∂vj
τij = µ + .
∂xj ∂xi
∂Vx ∂Vy
τxy =µ +
∂y ∂x
∂Vx ∂Vz
τxz = µ +
∂z ∂x
∂Vy ∂Vz
τyz =µ +
∂z ∂y
Para un flujo con un perfil de velocidades según un solo eje (x) se obtiene
∂Vx
τxy = µ
∂y
∂Vx
σxx + p = 2µxx + λ (7.5)
∂x
Sumando las tres componentes y recordando que σxx + σyy + σzz = −3p se obtiene
2
λ=− µ.
3
Reemplazando el resultado anterior en la ec. 7.4 se obtiene finalmente
2
¯ = 2µ¯ −
σ̄ ~
p + µ∇ · V I¯¯ . (7.6)
3
| {z }
componente normal
de la deformación
En notación indicial la ecuación anterior queda:
2
~
σij = 2µij − p + µ∇ · V δij (7.7)
3
~ = 0) o es uniforme (V
Si el flujo esta en reposo (V ~ = cte) se recupera lo visto en el capı́tulo 2:
σij = −pδij .
∂Vi
σii = 2µ −p.
∂xi
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7.2 Ecuaciones de movimiento / Ecuaciones de Navier-Stokes 91
Reemplazando el tensor de esfuerzos obtenido (ec. 7.6) en el sistema de ecuaciones 7.3 y con-
siderando que
∂ ∂
[%]δij = [%] ,
∂xj ∂xi
se obtiene
!
∂Vi ∂Vi ∂ ∂ 2
ρ + Vj = ρgi + (2µ¯) − ~
p + µ∇ · V .
∂t ∂xj ∂xj ∂xi 3
Como
!
1 ∂vj ∂vi
ij = +
2 ∂xi ∂xj
se obtiene finalmente
! " !#
∂Vi ∂Vi ∂ ∂Vj ∂Vi ∂ 2
ρ + Vj = ρgi + µ + − ~
p + µ∇ · V (7.8)
∂t ∂xj ∂xj ∂xi ∂xj ∂xi 3
La ecuación de continuidad para un flujo incompresible esta dada por la siguiente relación
~ = 0.
∇·V
Veremos a continuación como se modifican las ecuaciones de Navier-Stokes bajo esta condición.
Para esto desarrollaremos la componente x (i = x) del segundo término del lado derecho de la
ec. 7.8:
" !#
∂ ∂Vj ∂Vi ∂ ∂Vx ∂Vx ∂ ∂Vx ∂Vy ∂ ∂Vx ∂Vz
µ + = µ + + + + +
∂xj ∂xi ∂xj ∂x ∂x ∂x ∂y ∂y ∂x ∂z ∂z ∂x
2
∂ 2 Vx ∂ 2 Vx
∂ Vx ∂ ∂Vx ∂Vy ∂Vz
= µ
2
+ + + + +
∂x ∂y 2 ∂z 2 ∂x ∂x ∂y ∂z
| {z }
~ =0
∇·V
" #
∂2Vx ∂2V x ∂2V x
= µ 2
+ 2
+ 2
= µ∇2 Vx .
∂x ∂y ∂z
C. Gherardelli U. de Chile
7.3 Flujo turbulento 92
⇒
" !#
∂ ∂Vj ∂Vi
µ + = µ∇2 Vi .
∂xj ∂xi ∂xj
Realizando un desarrollo análogo según los otros ejes coordenados y reemplazando en las
ecuación 7.8 se obtienen las siguientes ecuaciones escalares:
!
∂u ∂u ∂u ∂u ∂p ∂2u ∂2u ∂2u
ρ +u +v +w =− + ρgx + µ + 2 + 2 , (7.9)
∂t ∂x ∂y ∂z ∂x ∂x2 ∂y ∂z
!
∂v ∂v ∂v ∂v ∂p ∂2v ∂2v ∂2v
ρ +u +v +w =− + ρgy + µ + + , (7.10)
∂t ∂x ∂y ∂z ∂y ∂x2 ∂y 2 ∂z 2
!
∂w ∂w ∂w ∂w ∂p ∂2w ∂2w ∂2w
ρ +u +v +w =− + ρgz + µ + + . (7.11)
∂t ∂x ∂y ∂z ∂z ∂x2 ∂y 2 ∂z 2
~
!
∂V
~ ·∇ V~ ~.
ρ + V = −∇p + ρ~g + µ∇2 V (7.12)
∂t
En esta sección se verán las ecuaciones de Navier-Stokes para un flujo turbulento. Un flujo
turbulento se caracteriza por un movimiento aleatorio de las partı́culas fluidas con un compor-
tamiento aleatorio de las variables del flujo como la velocidad, los esfuerzos de corte, etc.. Este
tipo de flujo se representa o modela por el valor medio (A) de la variable A más una fluctuación
(A0 ). Para la velocidad por ejemplo lo anterior queda expresado por
V =V +V0
donde
tZ
0 +T
1
V = V (x, y, z, t)dt .
T
t0
tZ
0 +T
0
1
V = (V − V )dt
T
t0
C. Gherardelli U. de Chile
7.3 Flujo turbulento 93
t +T tZ
0 +T
0
1
Z
= V dt − V )dt
T
t0 t0
= V −V =0,
En la ecuación anterior se debe reemplazar Vi = Vi + Vi0 . Por ejemplo, el término Vx (∂Vx /∂x)
queda
" #
∂(Vx + Vx0 )
Vx (∂Vx /∂x) = Vx + Vx0
∂x
∂Vx ∂V 0 ∂Vx ∂V 0
= Vx + Vx x + Vx0 + Vx0 x
∂x ∂x ∂x ∂x
Realizando todos los reemplazos y tomando la media temporal sobre toda la ecuación (se propone
hacerlo como ejercicio) se obtiene:
! !
∂Vx ∂Vx ∂Vx ∂p ∂V 0 ∂V 0 ∂V 0
ρ Vx + Vy + Vz = − +ρgx +µ∇2 Vx −ρ Vx0 x + Vy0 x + Vz0 x .(7.14)
∂x ∂y ∂z ∂x ∂x ∂y ∂z
Como las perturbaciones promedio son cero se obtiene finalmente:La media a la ecuación anterior
queda
C. Gherardelli U. de Chile
7.3 Flujo turbulento 94
Comparando la ecuación anterior con la ecuación 7.9 se puede ver que la existencia de fluc-
tuaciones en la velocidad genera esfuerzos en el fluido y estos afectan la velocidad media del
flujo. Estos esfuerzos se denominan esfuerzos aparentes o de Reynolds. Considerando todas las
direcciones se obtiene un tensor de esfuerzos denominado tensor de esfuerzos aparente:
0 0 0
σxx τxy τxz (Vx0 )2 (Vx0 Vy0 ) (Vx0 Vz0 )
0 0 0 0
¯ = τyx σyy τyz = −ρ (Vy0 Vx0 ) (Vy0 )2 (Vy0 Vz0 )
σ̄ .
0 0 0
τzx τzy σzz 0 0 0 0 0 2
(Vz Vx ) (Vz Vy ) (Vz )
Lo anterior se puede interpretar también como que el esfuerzo total en un flujo turbulento se
compone de un valor medio, asociado a la viscosidad del fluido, más una fluctuación, asociada
naturalmente a la turbulencia existente en el flujo, es decir:
τ = τ + τ 0. (7.21)
DVi 1 ∂p 1 ∂ T
=− + gi + τji + τji . (7.22)
Dt ρ ∂xi ρ ∂xj
C. Gherardelli U. de Chile
7.4 Aplicaciones 95
7.4 Aplicaciones
C. Gherardelli U. de Chile
7.4 Aplicaciones 96
C. Gherardelli U. de Chile
7.4 Aplicaciones 97
C. Gherardelli U. de Chile
87
Capı́tulo 8
Dado que el número de problemas que se puede resolver en forma puramente analı́tica es pequeño,
la gran mayorı́a requiere algún grado de resultados empı́ricos o experimentales. Lo anterior es
particularmente cierto en el ámbito de la mecánica de fluidos, cuyo desarrollo ha dependido
fuertemente de resultados experimentales. Por otro lado los resultados obtenidos en forma ex-
perimental deben ser lo más generales posibles y extrapolables a situaciones fuera de las condi-
ciones “ideales” en las que se realizaron. El análisis dimensional ofrece un método para reducir
problemas fı́sicos complejos a su forma funcional mas simple antes de obtener una respuesta
cuantitativa acerca del problema. Permite, por lo tanto, tener una visión general del problema
y las variables (adimensionales) relevantes involucradas.
En el corazón del análisis dimensional se encuentra el concepto de similitud o semejanza. En
términos fı́sicos, la similitud se refiere a alguna equivalencia entre dos fenómenos diferentes.
Por ejemplo, bajo algunas condiciones particulares hay una relación directa entre las fuerzas
que actúan sobre un avión de tamaño real y aquéllas que actúan sobre un modelo a escala que
se prueba en el túnel de viento de un laboratorio. La pregunta es naturalmente, cuales son
esas condiciones que hacen equivalente el estudio y extrapolables los resultados de un modelo a
escala. En términos matemáticos, la similitud se refiere a una transformación de variables que
llevan a una reducción en el número de variables independientes que especifican un problema.
Aquı́ la pregunta natural es, qué tipo de transformación es necesaria hacer y en cuanto se pueden
reducir el número de variables independientes. El análisis dimensional es una herramienta que
responde éstas preguntas. Su utilidad principal radica en la capacidad de representar en forma
más reducida la forma funcional de relaciones fı́sicas involucradas en un fenómeno dado. Un
problema que en un principio puede parecer complejo, puede a veces resolverse con un esfuerzo
pequeño a través del análisis dimensional.
Como ejemplo de lo anterior consideraremos el problema de determinar la caı́da de presión por
unidad de largo ∆pl , que se produce a lo largo de la tuberı́a lisa por efecto de la fricción. Dentro
de las variables geométricas y fı́sicas que se esperarı́a que influyeran en la caı́da de presión se
encuentra el diámetro de la tuberı́a, la velocidad del flujo y la viscosidad y densidad del fluido.
Se puede establecer por lo tanto una relación funcional f de la siguiente forma:
∆pl = f (D, ρ, µ, V )
Extraer de esta información la deseada función f que relacione las variables independientes con
la dependiente es, incluso para este caso sencillo, prácticamente imposible. Además de esto las
dificultades experimentales, como por ejemplo, variar la densidad manteniendo la viscosidad
constante, no son despreciables e incluso pueden llegar a ser imposibles de solucionar.
Dpl Dpl
(a) (b)
Dpl Dpl
V,D,m= constante
V,D,r= constante
r m
(c) (d)
Figura 8.1: Relación entre la caı́da de presión con las distintas variables independientes.
Salta a la vista que esta forma de proceder, tanto desde un punto de vista práctico como
económico, no es apropiada . En este caso la relación funcional entre la variable dependiente
(∆pl ) y las variables independientes (D, V, ρ, µ) se puede expresar en función de dos grupos de
variables sin dimensión, denominados grupos adimensionales, de la siguiente forma:
D∆pl ρV D
2
=φ .
ρV µ
Una primera ventaja de este proceder es que se redujo el número de variables de cinco a dos.
Un experimento para determinar φ requerirı́a solo la variación del grupo adimensional ρV D/µ
para determinar el valor de D∆pl /ρV 2 . Los resultados se pueden representar mediante una sola
curva universal (figura 8.2) que será independiente del tamaño de la tuberı́a, del fluido utilizado
y además del sistema de unidades utilizado y será, por lo tanto, extrapolable a otras condiciones
distintas a las del experimento.
Este tipo de análisis es lo que se denomina análisis dimensional y las bases para su aplicación
se encuentra en el teorema Π de Buckingham, que se describe a continuación.
C. Gherardelli U. de Chile
8.1 Teorema Π de Buckingham 89
DDpl
2
rV
rVD
m
Existen varios métodos para determinar los grupos adimensionales involucrados en un fenómeno
dado, partiendo desde el simple tanteo, lo cual involucra o supone un gran conocimiento del
fenómeno y una gran experiencia en análisis dimensional, hasta metodologias mas sistemáticas
que aseguran el número adecuado de grupos adimensionales y que estos sean independientes. A
continuación se describirá uno de esos métodos denominado método de las variables repetidas.
El método de las variables repetidas se divide en una serie de pasos a seguir independiente del
fenómeno a analizar. Estos pasos son los siguientes:
1. Determinar variables involucradas. Este es el punto más difı́cil dentro del análisis
dimensional y es de vital importancia que todas las variables involucradas sean incluidas.
Esto requiere, por lo tanto, un conocimiento mı́nimo del fenómeno a estudiar. Es aconse-
jable incluir variables de las cuales no se esta seguro sobre su pertinencia. Un desarrollo
posterior, por ejemplo experimental, mostrará si es posible eliminarla o no. Dentro de
C. Gherardelli U. de Chile
8.2 Obtención de grupos adimensionales 90
las variables, y dependiendo por supuesto del tipo de fenómeno, se deben incluir vari-
ables geométricas como diámetros, largos, etc., propias del fluido como la densidad, la
viscosidad, etc., efectos externos como gradientes de presión y cualquier otra variable que
se estime necesaria. Para mantener el número de variables en un mı́nimo las variables
elegidas deben ser independientes entre sı́, es decir, ninguna variable debe poder formarse
como una combinación de las demás variables.
2. Expresar las variables en términos de sus dimensiones básicas. Para los problemas
tı́picos de la mecánica de fluidos las dimensiones básicas pueden ser F , L, T o M , L, T .
Estos dos sets de dimensiones se encuentran relacionados mediante la segunda ley de
Newton por la relación F = M LT −2 .
7. Verificar que los grupos obtenidos sean adimensionales. Dado que es fácil cometer
un error al determinar los grupos adimensionales es recomendable verificar la adimension-
alidad de los grupos reemplazando las dimensiones de cada variable del grupo y verificando
que sea adimensional. Es recomendable también realizar en esta verificación en términos
de M , L, T , si las dimensiones básicas utilizadas en los puntos anteriores fueron F , L, T
o viceversa.
8. Formar la relación funcional entre los grupos Π. Con los números adimensionales
determinados se puede escribir la relación funcional entre ellos de la siguiente forma:
Π1 = φ(Π2 , . . . Πk−r )
C. Gherardelli U. de Chile
8.2 Obtención de grupos adimensionales 91
Ejemplo
Determinar los grupos adimensionales necesarios para describir el fenómeno de caı́da de presión
por unidad de largo ∆pl que se produce a lo largo de la tuberı́a lisa por efecto de la fricción.
∆pl = f (D, ρ, µ, V ).
∆pl = F L−3
D=L
ρ = F L−4 T 2
µ = F L−2 T
V = LT −1
3. Del punto anterior se puede ver que las dimensiones básicas involucradas son tres. Dado
que el número de variables involucradas es 5 (∆pl , D, ρ, µ, V ), y utilizando el teorema de
Buckingham, se obtiene que el número de grupos adimensionales Π es igual a 2 (5-3).
4. Como tenemos tres dimensiones básicas involucradas se deben elegir tres variables a repetir.
Estas variables deben contener entre ellas todas las dimensiones básicas y ser independi-
entes entre sı́. Se eligen D, ρ, V como variables repetidas.
5. Los grupos adimensionales Π se forman con las variables repetidas y cada una de las demás
variables:
Π1 = ∆pl Da V b ρc
Π2 = µDa V b ρc
1+c=0
−3 + a + b − 4c = 0
−b + 2c = 0
C. Gherardelli U. de Chile
8.2 Obtención de grupos adimensionales 92
∆pl D
Π1 =
ρV 2
1+c=0
−2 + a + b − 4c = 0
1 − b + 2c = 0
µ (F L−2 T )
Π2 = = = F 0 L0 T 0
ρV D (L)(LT −1 )(F L−4 T 2 )
µ (M L−1 T −1 )
Π2 = = = M 0 L0 T 0
ρV D (L)(LT −1 )(M L−3 )
∆pl D µ
2
=ϕ
ρV ρV D
Como los grupos Π son adimensionales, estos se pueden reordenar y en particular se pueden
invertir. Por ejemplo Π2 se podrı́a escribir como
ρV D
Π2 =
µ
∆pl D ρV D
=φ ,
ρV 2 µ
que es la relación mencionada anteriormente. Veremos mas adelante que el grupo adimen-
sional (ρV D/µ) es un grupo adimensional importante en la mecánica de fluidos.
C. Gherardelli U. de Chile
8.3 Grupos adimensionales de importancia en la Mecánica de Fluidos 93
Cabe mencionar que los grupos adimensionales, determinados mediante el método de las va-
riables repetidas, dependen de las variables elegidas como variables a repetir. En el ejemplo
anterior se eligieron ρ, V y D y se obtuvo la relación
∆pl D ρV D
2
=φ .
ρV µ
De haber elegido, por ejemplo, µ, V y D como las variables repetidas se obtiene la relación
∆pl D2 ρV D
= φ1 .
µV µ
Ambas relaciones llevarı́an a la misma función para ∆pl , sin embargo, las funciones φ y φ1
son distintas. La discusión anterior permite concluir que no existe un set único de números
adimensionales Π para un problema dado. Visto desde otro punto de vista, el análisis dimensional
solo asegura la cantidad de números adimensionales necesarios para representar un problema
pero no su unicidad.
Durante los años de desarrollo de la mecánica de fluidos se han identificado un sin número
de grupos adimensionales de relevancia. El entender el significado fı́sico que estos encierran
permite tener una visión mas acabada de los distintos fenómenos. Las variables que generalmente
intervienen en los distintos fenómenos son la presión y la velocidad del flujo, la viscosidad,
densidad y tensión superficial del fluido, aceleración de gravedad, la velocidad de propagación
del sonido, etc.. Dentro de las fuerzas que influyen en un flujo se encuentran por ejemplo las
fuerzas debidas a la inercia, la viscosidad, presión, tensión superficial y compresibilidad. La razón
entre cualquiera par de estas fuerzas genera grupos adimensionales. Por ejemplo, de la segunda
ley de Newton las fuerzas inerciales son F = ma. La masa se puede escribir como m = ρ∀ y
como el volumen ∀ tiene dimensiones de longitud, se obtiene que m ∝ ρL3 . Análogamente, se
obtiene que a ∝ V 2 /L. Por lo tanto la fuerza de inercia será
V2
F ∝ ρL3 = ρV 2 L2 .
L
du V
Fuerzas viscosas = τ A = µ A ∝ µ L2 = µV L.
dy L
Haciendo la razón entre las fuerza de inercia sobre las fuerzas viscosas se obtiene el grupo
adimensional llamado número de Reynolds Re:
Fuerzas de inercia ρV 2 L2 ρV L
Re = = = ,
Fuerzas viscosas µV L µ
donde L es una dimensión caracterı́stica descriptiva de la geometrı́a del flujo. Este número fue
introducido por Reynolds quien estudiaba la transición entre los regı́menes laminar y turbulento
C. Gherardelli U. de Chile
8.4 Semejanza 94
para el flujo en una tuberı́a. Para este caso la dimensión caracterı́stica es el diámetro del tubo
D, de donde
ρV D
Re = ,
µ
que es igual al grupo adimensional encontrado en el ejemplo desarrollado anteriormente. Lo
anterior indica que la caı́da de presión en una tuberı́a lisa depende del número de Reynolds
∆pl D
= φ (Re) ,
ρV 2
ρV L fuerzas inerciales
Reynolds, Re De importancia en la
µ fuerzas viscosas
mayorı́a de las aplicaciones
p fuerzas de presión
Euler, Eu Aplicaciones donde la
ρV 2 fuerzas inerciales
presión o las diferencias de
presión son de interés
ρV 2 fuerzas inerciales
Cauchy, Ca Aplicaciones donde la com-
Ev fuerzas de compresibilidad
presibilidad del fluido es im-
portante
V fuerzas inerciales
Mach, M Aplicaciones donde la com-
c fuerzas de compresibilidad
presibilidad del fluido es im-
portante
ρV 2 L fuerzas inerciales
Weber, W e Aplicaciones donde la
σ fuerzas de tensión superficial
tensión superficial es impor-
tante
8.4 Semejanza
C. Gherardelli U. de Chile
8.4 Semejanza 95
condiciones que deben ser satisfechas para que los resultados de un fenómeno obtenidos en un
laboratorio mediante un modelo a escala sean aplicables a un prototipo a escala real. Dicho
de otra manera, cuales son las condiciones a satisfacer para que la función entre los números
adimensionales, obtenida para el modelo, sea la misma que para el prototipo. Para que se
cumpla la similitud entre un modelo y un prototipo debe existir:
• Semejanza geométrica. El modelo debe ser una versión a escala lo más detalladamente
posible del prototipo.
• Semejanza cinemática. Dos flujos son cinemáticamente semejantes cuando las velocidades
en puntos equivalentes tienen la misma dirección y la razón entre las magnitudes de la
velocidad y la aceleración es constante para todo el flujo, es decir,
Vm
= constante,
Vp
am
= constante.
ap
Ejemplo
F ρV D
2 2
=φ .
ρV D µ
Remodelo = Reprototipo
C. Gherardelli U. de Chile
8.5 Semejanza basada en las ecuaciones que gobiernan el fenómeno 96
ρV D
= Rep .
µ m
2.57 · 0.30
Rep = = 4.91 · 105 = Rem
1.57 · 10−6
⇒
νm 1.46 · 10−5
Vm = Rem = 4.91 · 105 = 47.8 m/s
Dm 0.15
F F
=
ρV 2 D2 modelo ρV 2 D2 prototipo
El éxito del análisis dimensional depende fundamentalmente de la selección adecuada de las vari-
ables involucradas en un fenómeno dado y tiene, por lo tanto, un cierto grado de incertidumbre.
Las conclusiones con respecto a la semejanza entre dos fenómenos que de el extraigan, incorpo-
ran, por lo tanto, este grado de incertidumbre. Este nivel de incertidumbre disminuye con la
experiencia que se tenga acerca de los fenómenos estudiados.
Una forma más rigurosa para determinar las condiciones necesarias bajo las cuales dos flujos
sean semejantes es utilizar las ecuaciones diferenciales y las condiciones de borde que gobiernan
el flujo. Dos fenómenos fı́sicos serán semejantes si las ecuaciones diferenciales y las condiciones
de borde que los gobiernan tienen la misma forma adimensional. En este caso, la semejanza
dinámica se obtiene al igualar los coeficientes adimensionales, para el modelo y el prototipo, de
las ecuaciones y las condiciones de borde.
Como ejemplo de lo anterior se analizará el caso de un flujo bidimensional, laminar, permanente
e incompresible en un plano xy donde la gravedad actúa según el sentido negativo de y. La
ecuación de continuidad para este caso es:
∂u ∂v
+ =0 (8.1)
∂x ∂y
C. Gherardelli U. de Chile
8.5 Semejanza basada en las ecuaciones que gobiernan el fenómeno 97
!
∂v ∂v ∂p ∂2v ∂2v
ρ u +v =− − ρg + µ + . (8.3)
∂x ∂y ∂y ∂x2 ∂y 2
La adimensionalización de las ecuaciones anteriores se realiza dividiendo todas las longitudes por
una longitud caracterı́stica L, las velocidades por una velocidad de referencia V∞ y la presión
por ρV∞2 . Una caracterı́stica importante de estas magnitudes es que son constantes. Lo anterior
∂u ∂ (V∞ u∗ ) V∞2
∗ ∂u
∗
u = (V∞ u∗ ) = u .
∂x ∂ (x∗ L) L ∂x∗
V∞ ∂u∗ V∞ ∂v ∗
+ = 0, (8.4)
L ∂x∗ L ∂y ∗
!
ρV∞2 ∂u∗ ∂u∗ ρV 2 ∂p∗ µV∞ ∂ 2 u∗ ∂ 2 u∗
u∗ ∗ + v ∗ ∗ =− ∞ ∗ + 2 + ∗2 , (8.5)
L ∂x ∂y L ∂x L ∂x∗ 2 ∂y
!
ρV∞2 ∂v ∗ ∂v ∗ ρV 2 ∂p∗ µV∞ ∂2v ∂ 2v∗
u∗ ∗ + v ∗ ∗ = − ∞ ∗ − ρg + 2 2 + . (8.6)
L ∂x ∂y L ∂y L ∂x∗ ∂y ∗ 2
2 /L
Dividiendo la ecuación de continuidad por V∞ /L y las ecuaciones de Navier-Stokes por ρV∞
se obtiene
∂u∗ ∂v ∗
+ = 0, (8.7)
∂x∗ ∂y ∗
!
∗ ∂u∗ ∂p∗ ∂ 2 u∗ ∂ 2 u∗
∗ ∂u µ
u + v∗ ∗ =− ∗ + + ∗2 , (8.8)
∂x∗ ∂y ∂x ρV∞ L ∂x∗ 2 ∂y
!
∗ ∂p∗ ∗ ∂2v ∂ 2v∗
∗ ∂v ∗ ∂v gL µ
u + v = − − 2 + + . (8.9)
∂x ∗ ∂y ∗ ∂y ∗ V∞ ρV∞ L ∂x∗ 2 ∂y ∗ 2
De la ecuaciones anteriores se ve que dos flujos serán semejantes si las ecuaciones diferenciales
anteriores son idénticas para ambos casos. Lo anterior se cumple si los grupos µ/ρV∞ L y gL/V∞ 2
tienen el mismo valor. Analizando estos grupos se ve que corresponden al número de Reynolds y
el número de Froude. Por lo tanto, los flujos serán dinámicamente semejantes si tanto el número
de Reynolds como el número de Froude son iguales.
Las ecuaciones anteriores son aplicables en el caso donde las fuerzas volumétricas, representadas
por la gravedad, son importantes. Este es el caso del estudio del arrastre sobre superficies
parcialmente sumergidas, que corresponde al caso de cascos de embarcaciones marı́timas.
En los casos donde las fuerzas volumétricas son despreciables, las ecuaciones diferenciales cor-
respondientes no incluirán el término ρg y, por lo tanto, la semejanza dinámica entre dos flujos
se obtiene si el número de Reynolds es igual para ambos flujos.
C. Gherardelli U. de Chile
98
Capı́tulo 9
Reynolds utilizó un montaje como él de la figura 9.1, donde variando la apertura de la válvula
se puede regular el caudal volumétrico que pasa por el tubo, y por lo tanto la velocidad del flujo.
Introduciendo un filamento de tinta en la corriente principal del flujo le permite visualizar los
distintos regı́menes de escurrimiento que se obtienen para distintas velocidades.
Laminar
Tinta
Transición
Turbulento
D
Reynolds caracterizo los distintos tipos de flujo mediante un parámetro adimensional, llamado
número de Reynolds, que representa la razón entre las fuerzas de inercia y las viscosas
fuerzas de inercia ρV 2 /L ρV L
Re = = 2
=
fuerzas viscosas µV /L µ
donde L es una longitud caracterı́stica del escurrimiento. En ductos ésta longitud es el diámetro
hidráulico DH definido por
A
4 · (área de paso) 4A
DH = = .
perı́metro mojado P
Para un tubo de sección circular y que se encuentra lleno de fluido el diámetro hidráulico es
igual al diámetro del tubo ⇒DH = D.
Reynolds determino los siguientes rangos para los distintos tipos de flujo
Los valores lı́mites no son exactos y dependen de muchos factores del flujo como de factores
externos. Sin embargo, éstos valores son aceptados para realizar cálculos en ingenierı́a.
En ésta sección se analizarán las pérdidas en ductos debidas a la fricción, que se llaman pérdidas
regulares, y las debidas a cambios puntuales en las condiciones del flujo como por ejemplo un
cambio de dirección, una reducción o expansión en el área de paso del flujo, elementos externos
como filtros, válvulas , etc.. Estas últimas se denominan pérdidas singulares.
La pérdida de energı́a por fricción es la energı́a que se utiliza para vencer los esfuerzos de corte
existentes en el sistema. De un análisis dimensional resulta que
ρV D L e 1 2
∆PR = φ , , ρV
µ D D 2
L ρV D e 1 2
∆PR = f , ρV
D µ D 2
L 1 2
∆PR = f ρV
D 2
La ecuación anterior es válida tanto para un flujo laminar como turbulento. La diferencia reside
en como evaluar el factor de fricción f .
Para un flujo laminar se determina que
64
f=
Re
C. Gherardelli U. de Chile
9.2 Pérdida de Carga 100
C. Gherardelli U. de Chile
9.2 Pérdida de Carga 101
Se puede ver que para un flujo laminar el factor de fricción no depende de la rugosidad relativa.
Para flujos turbulentos los valores de f han sido determinados experimentalmente y se encuen-
tran representados en forma gráfica. El gráfico más utilizado es el diagrama de Moody que se
muestra en la figura 9.2. Las variables de entrada de éste gráfico son el número de Reynolds y la
rugosidad relativa e/D o su inverso D/e. En éste diagrama es posible distinguir tres zonas que
representan los tres tipos de flujo (laminar, transición, turbulento). En la zona de transición
no es posible, por lo general, determinar el factor de fricción. La zona turbulenta presenta 2
subregiones
Como se puede apreciar de la figura, éstas dos zonas se encuentran separadas por la lı́nea
punteada. La curva inferior, en la zona turbulenta, representa el factor de fricción para tuberı́as
lisas, es decir tuberı́as para las cuales e = 0.
Además de las representaciones gráficas existentes para determinar el factor de fricción existen
actualmente las siguientes relaciones matemáticas para los distintos tipos de flujo:
flujo laminar
64
f= ,
Re
tubo liso
1 p
√ = 0.86 ln Re f − 0.8 .
f
Para el flujo turbulento se cuenta con la ecuación implı́cita de Colebrook, dada por
1 e/D 2.51
√ = −2.0 log + √
f 3.7 Re f
o
1 e/D 2.51
√ = −0.86 ln + √
f 3.7 Re f
y la ecuación explı́cita de Swamee y Jain dada por
0.25
f=h i2 .
e/D 5.74
log 3.7 + Re0.9
1 Ẇ L 1 2 1
p1 + ρV12 + ρgz1 ± −f ρV1 = p2 + ρV22 + ρgz2 .
2 Q D 2 2
C. Gherardelli U. de Chile
9.3 Sistema de tuberı́as 102
Además de las pérdidas regulares o por fricción los elementos adicionales existentes en todo
sistema de tuberı́as, como por ejemplo válvulas, codos, expansiones, etc., introducen pérdidas
energéticas adicionales. Los fenómenos de disipación energética, que tienen lugar en éstos el-
ementos, son tan complejos que sólo pueden ser determinados, en forma efectiva, experimen-
talmente y se representan mediante un factor de pérdida singular k. La pérdida de carga se
representa, al igual que en el caso de pérdidas regulares, como una pérdida de la energı́a cinética
del fluido mediante la siguiente relación
1
∆PS = k ρV 2 .
2
Los valores de k para los distintos elementos pueden ser encontrados en forma de gráficos o
tablas. En la figuras 9.3(a) y 9.3(b) se muestra a modo de ejemplo los gráficos para determinar
k para un codo y una expansión respectivamente.
Las pérdidas singulares se pueden expresar también como un equivalente en largo de tuberı́a
1 Leq 1 2
∆PS = k ρV 2 = f ρV ,
2 D 2
de donde
kD
Leq = .
f
Es decir, que longitud de tuberı́a produce la misma pérdida de carga que el elemento considerado.
D y f corresponden a los valores para la tuberı́a que contiene el elemento de pérdida singular.
En la mayorı́a de los sistemas de tuberı́as existe más de una tuberı́a, las cuales pueden variar en
diámetro, longitud, material, etc.. Estas se encuentran además distribuidas tanto en serie como
C. Gherardelli U. de Chile
9.3 Sistema de tuberı́as 103
en paralelo. Si bien los mecanismos que gobiernan el flujo en éstos sistemas son los mismos que
lo hacen para una tuberı́a simple, la cantidad de variables e incógnitas a definir hacen que la
complejidad para resolver estos circuitos sea mayor.
Q1 = Q2 = Q3
Tuberı́as en serie
y
∆PR,AB
¯ = ∆PR,1 + ∆PR,2 + ∆PR,3 ,
donde los ∆PR,i dependerán de las condiciones de flujo en cada tramo i. Para éste tipo de
sistemas existen los siguientes 3 tipos básicos de problemas de los cuales se derivan problemas
más complejos.
Ejemplo
Por el sistema de la figura 9.4 deben circular 0.002 m3 /s de agua a 10◦ C. La tuberı́a tiene un
largo total de 20 m con una rugosidad media de e = 0.26 mm. Los codos son todos iguales y
tienen un coeficiente de pérdida k = 1.5 cada uno. El coeficiente de pérdida de la entrada y la
salida de la tuberı́a es 0.5 y 1.0 respectivamente. Se pide determinar el diámetro D del tubo.
Se supone que los estanques son suficientemente grandes como para que el nivel de la superficie
(1)
ke
2 m
D
(2)
kc
ks
se mantenga constante. Un balance de energı́a entre ambas superfices de los estanques entrega
la siguiente ecuación
1 1
p1 + ρV12 = p2 + ρV22 + ∆PR + ∆PS
2 2
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9.3 Sistema de tuberı́as 104
L1 2 X 1 2
ρg(z1 − z2 ) = f ρV + k ρV
D2 2
1 L X
ρg(z1 − z2 ) = ρV 2 f + k .
2 D
V2 20
9.81 · 2 = f + 6 · 1.5 + 0.5 + 1.0 .
2 D
Q 0.002
V = =
A πD2 /4
2.55 · 10−3
V = .
D2
ρV D VD 2.55 · 10−3 D
Re = = = 2
µ ν D · 1.307 · 10−6
1.95 · 103
Re = . (9.2)
D
e 2.6 · 10−4
= , (9.3)
D D
donde e debe ser expresado en metros. Las ecuaciones 9.1, 9.2 y 9.3 más una forma (diagrama
de Moody, ecuación de Coloebrook) para determinar f a partir del número de Reynolds y la
rugosidad relativa, representan el sistema de ecuaciones a resolver.
Los caminos para resolver éste sistema de ecuaciones son
• asumir un valor para f , resolver la ecuación 9.1 obteniendo un valor para D, recalcular
un nuevo f a partir del número de Reynolds y la rugosidad relativa e iterar hasta que el
sistema converja.
• asumir un valor para D, calcular f a partir de 9.1 y de la forma gráfica o funcional utilizada
para determinar f , comparar los resultados e iterar con D hasta que el sistema converja.
C. Gherardelli U. de Chile
9.3 Sistema de tuberı́as 105
Utilizando el segundo de los caminos (dado que de ésta manera se evita resolver la ecuación
de quinto orden) se asume D = 0.05 m. De 9.1 se obtiene f = 0.068. De 9.2 y 9.3 se obtiene
Re = 3.9 · 104 y e/D = 5.2 · 10−3 con lo cual del diagrama de Moody se obtiene f = 0.033 lo cual
es distinto al valor obtenido anteriormente por lo que se debe modificar el valor de D. Iterando
se obtiene finalmente
D ≈ 0.045 m = 45 mm .
Ejemplo
Petróleo crudo es bombeado a través de Alaska por una tuberı́a de 799 millas de longitud y
4 f t de diámetro. El caudal máximo es de Q = 2.4 millones de barriles diarios lo que equivale
a 117 f t3 /s. Determine la potencia necesaria para cumplir con los requerimientos. Datos:
e = 0.0015 f t, µ = 8 · 10−5 lbs/f t2 , γ = 53.7 lb/f t3 .
La ecuación de balance de energı́a, expresada en términos de longitud, para éste sistema es
p1 V12 p2 V22
+ + z1 + H B = + + z2 + ∆HR
γ 2g γ 2g
L V2
HB = ∆HR = f
D 2g
Reemplazando se obtiene
9.312
HB = 0.0125 1.05 · 106 ·
2 · 32.2
HB = 17700 f t
f t lb 1 hp
Ẇ = 1.11 · 108 ·
s 550 f t lb/s
Ẇ = 220000 hp .
Se ve que éste valor es excesivamente alto y no puede ser aportado por una sola bomba por lo
que se requieren varias bombas para lograr el objetivo.
C. Gherardelli U. de Chile
9.3 Sistema de tuberı́as 106
donde n es el número de ramas del sistema. Otra forma de ver lo anterior es que por cualquier
camino cerrado que se recorra a partir de un punto la pérdida de carga debe ser cero. Por
continuidad se debe cumplir además que
Q = Q1 + Q2 + . . . + Qn .
Las incógnitas en las ecuaciones anteriores son los caudales que fluyen por cada rama Qi y la
pérdida de carga entre los nudos ∆PAB ¯ . La cantidad de fluido que recorre cada rama depende de
la resistencia al flujo en la rama en relación con la resistencia en las otras ramas. La resolución
de sistemas de dos tubos en paralelo es relativamente simple. Para sistemas con más de dos
ramificaciones la complejidad aumenta debido a que existen más incógnitas que ecuaciones. Para
éste tipo de sistemas se han desarrollados varios métodos iterativos de solución como por ejemplo
el método de Hardy–Cross. La solución de éste tipo de sistemas queda fuera del alcance de estos
apuntes por lo que no se tratará.
9.3.3 Ramificaciones
Ejemplo
Para el circuito mostrado en la figura 9.5 determine el flujo que se establece en cada una de las
ramas si el factor de fricción tiene un valor 0.02 en cada rama.
C. Gherardelli U. de Chile
9.3 Sistema de tuberı́as 107
A
z1=100ft B
z2=20ft
L1=1000ft
L2=500ft
D1=D2=D3=1ft
C
z3=0
L3=400ft
Supondremos que el flujo fluye desde el estanque A a los estanques B y C. Por continuidad se
obtiene por lo tanto que
Q1 = Q2 + Q3
V 1 A1 = V 2 A2 + V 3 A3
V 1 = V 2 + V3 . (9.4)
Aplicando la ecuación de balance energético entre los puntos A y B y entre los puntos A y C se
obtiene
L1 1 2 L2 1 2
ρgzA = ρgzB + f1 ρV1 + f2 ρV
D2 D2 2
y
L1 1 2 L3 1 2
ρgzA = ρgzC + f1 ρV1 + f3 ρV .
D2 D2 3
El sistema de ecuaciones a resolver esta conformado por las ecuaciones 9.4, 9.5 y 9.6. Sustrayendo
la ecuación 9.5 de la ecuación 9.6 se obtiene
q
V3 = 160 + 1.25 V22 .
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9.4 Flujo no permanente en tuberı́as 108
que tiene como soluciones V2 = 21.3 f t/s y V2 = 2.88 f t/s. La primera de las soluciones es
una solución introducida al elevar al cuadrado en el paso anterior por lo que la solución válida
es la segunda, es decir V2 = 2.88 f t/s. Reemplazando y resolviendo las demás velocidades
resultan V1 = 15.9 f t/s y V2 = 13.02 f t/s. Con éste resultado el valor de los caudales por las
distintas ramas resulta Q1 = 12.5 f t3 /s, Q2 = 2.26 f t3 /s y Q3 = 10.2 f t3 /s. Si al comienzo de
la resolución se supone que existe un flujo de B a C el sistema de ecuaciones obtenido no tiene
solución real.
El golpe de ariete es un fenómeno que aparece en tuberı́as causado por una obstrucción repentina
parcial o total al paso del flujo. Esto puede suceder por ejemplo al cerrar una válvula en forma
rápida, con la detención de una bomba, etc.. En estos casos el lı́quido no se comporta como
incompresible ni la tuberı́a como rı́gida. La interacción de los cambios de cantidad de movimiento
y las fuerzas aplicadas hacen que el fluido se comprima ligeramente y que la tuberı́a experimente
deformaciones. Lo anterior puede llevar a cambios de presión significativos y a un flujo oscilatorio
del fluido dentro de la tuberı́a, fenómeno que se llama golpe de ariete.
Velocidad de propagación a
C. Gherardelli U. de Chile
9.4 Flujo no permanente en tuberı́as 109
Figura 9.6: Velocidad de propagación de una onda de presión para un volumen de control esta-
cionario y para uno que se mueve con la velocidad de la onda.
Desarrolando las ec. anteriores y despreciando los términos de orden ∆2 y superiores se obtiene
ρA∆V + (V + a) (A + ∆ρ + ρ∆A) = 0
∆p = −ρ a ∆V
que se denomina ec. de Joukowsky. Esta ecuación relaciona el cambio de presión con el cambio
de velocidad experimentado por el fluido y la velocidad de propagación de la onda en el fluido.
El signo negativo indica que ∆p y ∆V tienen sentidos opuestos.
Las condiciones alteradas (p + ∆p, ρ + ∆ρ, etc.) se mantienen en el volumen de control después
de que la onda lo atraviesa completamente. La onda se refleja al final (o inicio) del tubo
produciéndose un flujo ondulatorio.
Combinando la ecuación de continuidad y de cantidad de movimiento e imponiendo la condición
V a se obtiene
∆p ∆ρ ∆A
2
= + . (9.7)
ρa ρ A
∆ρ ∆p
= .
ρ Ev
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9.4 Flujo no permanente en tuberı́as 110
Considerando una respuesta elástica del material de la tuberı́a se puede relacionar el cambio de
sección ∆A con el cambio en la presión ∆p mediante el módulo de elasticidad E del material
dado por
∆σ
E=
∆
∆A ∆r
∆ = =2
A r
donde r es diámetro del tubo. Para una pared delgada (e r) resulta que
pr
σ=
e
donde e es el espesor de la pared. Para cambios pequeños de r y e se tendrá por lo tanto que
r
∆σ = ∆p .
e
∆σ (r/e) ∆p (2r/e) ∆p
E= ≈ = .
∆ ∆r/r ∆A/A
∆p ∆p 2 r∆p
2
= + ,
ρa Ev eE
de donde
s
Ev /ρ
a= , (9.8)
1 + De EEv
C. Gherardelli U. de Chile
9.4 Flujo no permanente en tuberı́as 111
Línea de
energía total
H V=V0
L
Figura 9.7:
Explicaremos el ciclo de movimiento que se produce en un ducto como el de la figura 9.7 cuando
la válvula se cierra repentinamente. Se despreciarán en esta explicación los efectos viscosos.
En t = 0 la válvula se cierra completamente en forma a
instantánea. El lı́quido que se encuentra inmediata- Dp
mente contiguo a la válvula se frena hasta tener una
velocidad igual a cero. Por conservación de energı́a,
tubería
la presión aumenta en ∆p. Este fenómeno se repite y
V=V0 expandida
propaga aguas arriba por la tuberı́a. El lı́quido detrás
de la onda de presión queda comprimido y la tuberı́a
expandida. V=0
0 ≤ t ≤ L/a
En t = L/a la onda llega al depósito y se produce un a
desbalance de fuerzas en la entrada del tubo. En el Dp
tubo la presión se reduce a la presión del depósito y la
velocidad cambia de dirección, es decir fluye del tubo
tubería
al recipiente. Este fenómeno se propaga aguas abajo a
V=-V0 expandida
la velocidad a. En t = 2L/a la onda llega a la válvula.
En ese momento la velocidad en todos los puntos del
tubo es −V0 y la presión es la presión original p. V=0
L/a ≤ t ≤ 2L/a
Como la válvula se encuentra cerrada la velocidad ”au-
menta“ hasta tener un valor cero y la presión se reduce
Dp
en ∆p. Esta onda de baja presión viaja aguas arriba a
con velocidad a. Detrás de la onda el lı́quido se en-
tubería
cuentra expandido y la tuberı́a contraida. Si la presión V=-V0 contraida
detrás de la onda se reduce por debajo de la presión
de vapor parte del lı́quido se evaporará produciéndose
el fenómeno de cavitación. V=0
2L/a ≤ t ≤ 3L/a
C. Gherardelli U. de Chile
9.4 Flujo no permanente en tuberı́as 112
Para determinar las ecuaciones que describen el movimiento en el golpe de ariete se utilizan las
ecuaciones de cantidad de movimiento lineal y continuidad. Como variables independientes se
considerán el tiempo t y la posición x, ⇒V = V (x, t), p = p(x, t), A = A(x, t).
∂pA ∂A dV
pA − pA + δx + p δx − γ A δx sin θ − τ0 π D δx = ρ A δx
∂x ∂x dt
dV 1 ∂p f V |V |
+ + g sin θ + =0
dt ρ ∂x 2D
dV ∂V
=
dt ∂t
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9.4 Flujo no permanente en tuberı́as 113
∂V 1 ∂p f V |V |
+ + g sin θ + = 0. (9.9)
∂t ρ ∂x 2D
∂ ∂
− (ρAV ) δx = (ρAδx)
∂x ∂t
V ∂A 1 ∂A V ∂ρ 1 ∂ρ ∂V
+ + + + =0
|A ∂x {z A ∂t} ρ ∂x ρ ∂t ∂x
| {z }
1 dA 1 dρ
A dt ρ dt
⇒
1 dA 1 dρ ∂V
+ + =0
A dt ρ dt ∂x
El término A1 dA
dt está relacionado con la elasticidad de la pared del tubo y la velocidad de
deformación. El término ρ1 dρ
dt está relacionado con la compresibilidad del lı́quido.
Se puede demostrar que
1 dA D dp
=
A dt e E dt
donde D, e y E son el diámetro del tubo, el espesor de la pared del tubo y el módulo de
elasticidad o módulo de young del material del tubo respectivamente. Por otro lado tenemos
que
1 dρ 1 dp
=
ρ dt Ev dt
Reemplazando se obtiene
1 Ev D dp ∂V
1+ + =0
Ev E e dt ∂x
| {z }
1/ρa2
⇒
1 dp ∂V
+ = 0.
ρa2 dt ∂x
Desarrollando la derivada total de p y despreciando las derivadas espaciales con respecto a las
∂ ∂
derivadas temporales, es decir, ∂x ∂t , se obtiene finalmente
∂p ∂V
+ ρa2 = 0. (9.10)
∂t ∂x
Las ecuaciones 9.9 y 9.10 representan las ecuaciones de movimiento para el golpe de ariete. Estas
ecuaciones deben ser resueltas en forma numérica.
C. Gherardelli U. de Chile
9.4 Flujo no permanente en tuberı́as 114
En ésta sección se analizará el flujo oscilatorio producido en una tuberı́a. Se supondrá que el
flujo es incompresible y que las tuberı́as son inelásticas. Consideraremos sólo el caso más sencillo
para el cual se supone que los efectos viscosos son despreciables.
Para el tubo en U de la figura, la ecuación de Euler
para un flujo no permanente y para un sistema coor-
denado que sigue el tubo, queda (2) V
z
1 ∂p ∂z ∂V ∂V z=0
+g +V + = 0. posición de
ρ ∂s ∂s ∂s ∂t (1)
equilibrio
Integrando enrte 1 y 2 se obtiene V
l
p2 − p1 V 2 − V12 2 ∂V
Z
+ g(z2 − z1 ) + 2 + ds = 0 .
ρ 2 1 ∂t
Tubo en U sin roce
∂V
Como p1 = p2 y V1 = V2 , ∂s es independiente de s por lo que
Z 2 ∂V ∂V
Z 2 ∂V
ds = ds = l.
1 ∂t ∂t 1 ∂t
Reemplazando obtenemos
∂V
g(z2 − z1 ) = −l .
∂t
Por otro lado y analizando la figura se tiene que g(z2 − z1 ) = 2gz y de la definición de velocidad
∂V d2 z
∂t = dt2 por lo que se obtiene la siguiente ecuación diferencial
d2 z 2g
+ z = 0,
dt2 l
C. Gherardelli U. de Chile
116
Capı́tulo 10
Capa Lı́mite
Un cuerpo que este inmerso en un flujo experimenta una fuerza resultante debido a la acción
entre el flujo y el cuerpo. Esta es la fuerza resultante de los esfuerzos de corte en la pared del
cuerpo (τw ) y de los esfuerzos normales a la superficie. La resultante de las fuerzas en dirección
horizontal se denomina Arrastre (D) y las fuerza con dirección vertical se denomina Empuje o
sustentación (L).
La magnitud de estas fuerzas dependerá de la forma que tome el flujo alrededor del cuerpo y por
lo tanto de la forma del cuerpo, de las condiciones del flujo y de la posición relativa del cuerpo
con respecto al flujo. La figura 10.2 muestra el flujo alrededor de 3 cuerpos con distinta forma.
Separación
Capa límite Capa límite
(a) Placa plana delgada. (b) Cuerpo aerodinámico. (c) Cuerpo obstructor.
La influencia sobre el flujo para el caso de la placa plana delgada paralela al flujo es mı́nima y
las lı́neas de corriente tenderán a ser paralelas a la placa. Alrededor de un cuerpo aerodinámico
el flujo que se establece es tal que las lı́neas de corriente se cierran detrás del cuerpo. Alrededor
de un cuerpo obstructor por el contrario, las lı́neas de corriente no son capaces de cerrarse detrás
del cuerpo generando detrás de este lo que se conoce como estela.
10.1 Desarrollo de la capa lı́mite 117
La figura 10.3 muestra el flujo alrededor de una placa plana paralela al flujo para distintos
números de Reynolds. Se puede ver de esta figura que a medida que aumenta Re disminuye la
región donde los efectos viscosos son importantes y por lo tanto también su influencia en el flujo
externo.
Efectos viscosos
despreciables
Re=Ul/n=0.1 u<0.99U Efectos viscosos
Efectos viscosos despreciables Efectos viscosos
importantes Re=10
importantes
y y
l l
Capa Límite x Capa Límite x
u<0.99U
Líneas de corriente
desviadas levemente
Líneas de corriente desviadas
U U
considerablemente U U
y l
Efectos viscosos
despreciables Efectos viscosos
7 Capa Límite importantes
Re=10
x
d<<l u<0.99U
Líneas de corriente
inalteradas
U
U
Figura 10.3: Flujo alrededor de una placa plana para diferentes Re.
Se denomina Capa lı́mite a la región alrededor de un cuerpo en la cual los efectos viscosos (τ ) no
son despreciables. Como se vio anteriormente los esfuerzos de corte están asociados a gradientes
de velocidad por lo que en la capa lı́mite los gradientes de velocidad no son despreciables. Se
debe recordar que las partı́culas fluidas en contacto con un cuerpo tienen la misma velocidad del
cuerpo. Lo anterior indica que existe una diferencia de velocidades entre el contorno del cuerpo
y el flujo libre lejos del cuerpo. Fuera de la capa lı́mite se puede considerar el flujo como ideal.
En este capı́tulo se verá, en una primera parte, el desarrollo teórico-empı́rico de las ecuaciones
que gobiernan el flujo dentro de la capa lı́mite sobre una placa plana delgada paralela al flujo. En
una segunda parte se analizarán los efectos que la curvatura de los cuerpos produce sobre el flujo
y su influencia en la interacción dinámica entre el flujo y el cuerpo (lease sustentación y arrastre).
Se considerará, para efectos de estos apuntes, que el flujo es incompresible y permanente.
La figura 10.4 muestra el desarrollo de la capa lı́mite sobre una placa plana inmersa en un flujo
para un número de Reynolds elevado. δ es el espesor de la capa lı́mite, es decir, es el lı́mite de
la región donde los esfuerzos de corte no son despreciables. El número de Reynolds se define
como:
ρU x
Re = . (10.1)
µ
C. Gherardelli U. de Chile
10.1 Desarrollo de la capa lı́mite 118
En una primera parte se desarrolla la capa lı́mite laminar (x pequeño → Re pequeño). En esta
región el flujo es laminar por lo que las partı́culas se encontrarán sometidas a esfuerzos de corte
laminar y no existirá mezcla entre las capas. El espesor de la capa lı́mite δ aumenta con x
debido al flujo que entra en esta región desde la corriente libre. Como Re es una función de la
posición x sobre la placa, éste aumenta con x. Lo anterior indica que para una placa dada y
una velocidad de la corriente libre U dada siempre se alcanzará el régimen turbulento siempre y
cuando la placa sea lo suficientemente larga. Por lo tanto, si la placa es lo suficientemente larga,
existirá un punto de transición (en realidad existe una zona de transición) donde el régimen se
torna turbulento. La aparición de un régimen turbulento esta asociado a un aumento notable
en el espesor de la capa lı́mite. En esta región las partı́culas estarán sometidas a deformaciones
en todas direcciones y existirá mezcla o difusión entre las distintas capas del fluido.
Partícula
fluida
En la zona cercana a la placa las velocidades relativas entre el flujo y la placa son pequeñas
generando una zona donde el flujo es laminar. Esta región se denomina sub-capa laminar. Se
puede ver también de la figura 10.4 que las partı́culas que pasan fuera de la capa lı́mite no se
encuentran sometidas a deformaciones y, por lo tanto, tampoco a esfuerzos de corte.
En cuerpos curvados existe una aceleración de las partı́culas fluidas en la parte anterior del
cuerpo hasta el punto de mayor espesor (lı́neas de corriente se juntan). Pasado este punto el
flujo se desacelera (lı́neas de corriente se abren) y aumenta la presión. Si la curvatura del cuerpo
es muy grande, y dependiendo de las condiciones del flujo, se puede generar un flujo inverso y lo
que se denomina desprendimiento de la capa lı́mite (sección 10.6). Detrás del cuerpo se generará
un zona denominada estela (Fig. 10.5).
Capa límite
Cuerpo
Pto.de Zona de
desprendimiento torbellinos o estela
C. Gherardelli U. de Chile
10.2 Espesor de capa lı́mite 119
Hasta aquı́ se ha definido la capa lı́mite como la región del flujo donde los esfuerzos viscosos, y
por lo tanto los gradientes de velocidad, son importantes. Ya que la aproximación de la velocidad
del flujo entre el cuerpo y el flujo libre es asintótica, no existe en realidad un lı́mite determinado
para definir el espesor de la capa lı́mite. Debido a lo anterior se ha definido (en forma arbitraria)
el espesor δ como la distancia a la pared donde la velocidad es igual a un 99% la velocidad de
la corriente libre (Fig. 10.6).
u(y)
d=d(x)
Otra forma de definir la capa lı́mite es considerar el hecho de que la existencia de un gradiente
de velocidades en la región cercana al cuerpo tiene como consecuencia una disminución tanto
del caudal másico como de la cantidad de movimiento del flujo que pasa por esta región si se le
compara con un flujo no viscoso. Este tipo de definición elimina la arbitrariedad de la definición
anterior. Se define el espesor de desplazamiento δ ∗ (ec. 10.3) como la distancia a la que habrı́a
que desplazar el contorno del cuerpo si se supone que no existe roce pero se mantiene el caudal
másico real.
Z∞
∆q = (U − u)dy = δ ∗ U (10.2)
0
⇒
Z∞
u
∗
δ = 1− dy . (10.3)
U
0
y y
U U
u(y)
d
A
d*
x x
C. Gherardelli U. de Chile
10.3 Capa lı́mite laminar 120
Se define el espesor de cantidad de movimiento Θ (ec. 10.5) como la distancia a la que habrı́a
que desplazar el contorno del cuerpo suponiendo que no hay roce pero se mantiene el flujo de
cantidad de movimiento del flujo viscoso (Fig. 10.7), es decir:
Z∞
2
ρU Θ = ρ u(U − u)dy (10.4)
0
⇒
Z∞
u u
Θ= 1− dy . (10.5)
U U
0
y
U
x
Figura 10.8: Espesor de cantidad de movimiento Θ.
δ = δ(x)
δ ∗ = δ ∗ (x)
Θ = Θ(x)
Las ecuaciones que gobiernan el flujo viscoso en la capa lı́mite son las ecuaciones de Navier
Stokes. Consideraremos en el siguiente desarrollo un flujo bidimensional, permanente y laminar.
Las ecuaciones de Navier Stokes para este caso son
!
∂u ∂u 1 ∂p ∂2u ∂2u
u +v = − +ν + 2 , (10.6)
∂x ∂y ρ ∂x ∂x2 ∂y
!
∂v ∂v 1 ∂p ∂2v ∂2v
u +v = − +ν + . (10.7)
∂x ∂y ρ ∂y ∂x2 ∂y 2
C. Gherardelli U. de Chile
10.3 Capa lı́mite laminar 121
∂u ∂v
+ = 0. (10.8)
∂x ∂y
2. (δ ∗ /x) 1.
3. (Θ/x) 1.
4. v u.
∂ ∂
5. ∂x ∂y .
Alguna de éstas aproximaciones son solo válidas para números de Reynolds altos (Re > 1000).
Introduciendo las hipótesis anteriores el sistema de ecuaciones se reduce a
∂u ∂u 1 ∂p ∂2u
u +v =− +ν 2 , (10.9)
∂x ∂y ρ ∂x ∂y
∂u ∂v
+ = 0. (10.10)
∂x ∂y
Para la variación de la presión con x se puede suponer que el flujo de la corriente principal
∂p
impone su distribución de presiones dentro de la capa lı́mite, es decir, ∂x dentro de la capa
∂p
lı́mite es igual al ∂x existente fuera de la capa lı́mite, el cual se puede determinar mediante un
análisis de flujo potencial. Lo anterior indica que para una placa delgada, donde las lı́neas de
corriente son paralelas a la placa y por lo tanto no existe una variación de la velocidad y por lo
∂p
tanto tampoco de la presión (ec. 4.2) el término ∂x = 0.
Las condiciones de borde, necesarias para resolver el sistema de ecuaciones, son u = v = 0 para
y = 0 y u → U cuando y → ∞.
De un análisis dimensional se puede determinar que el número de Reynolds (Rex ) es del orden
de magnitud de (1/δ 2 ), es decir
1/2 1/2
νx ν
δ∝ =x
U Ux
⇒
δ −1
∝ Rex 2 . (10.11)
x
Blasius resolvió las ecuaciones simplificadas de Navier Stokes para el caso de la placa delgada
∂p
(donde ∂x = 0) encontrando que la constante de proporcionalidad de la ecuación anterior es
4.96 ⇒
δ −1
= 4.96 Rex 2 . (10.12)
x
C. Gherardelli U. de Chile
10.3 Capa lı́mite laminar 122
δ∗ −1
= 1.73 Rex 2 . (10.13)
x
Θ −1
= 0.664 Rex 2 . (10.14)
x
∂u
τw = µ
∂y y=0
Se puede apreciar que el esfuerzo de corte decrece con x debido al aumento del espesor de la
capa lı́mite δ.
Como resolver las ecuaciones de Navier Stokes analı́ticamente es prácticamente imposible, salvo
en casos muy simplificados, se debe tener una forma alternativa de resolver el problema en forma
aproximada. Una forma de resolver este tipo de problemas es aplicando la ecuación de cantidad
de movimiento sobre un elemento diferencial de capa lı́mite como se el que muestra la figura 10.9
y realizando aproximaciones sobre el perfil de velocidades tanto dentro como fuera de la capa
lı́mite.
y
d d+dd
dx
x
x x+dx
Las fuerzas externas según x que actúan sobre el elemento diferencial de la figura 10.9 son
(fig. 10.10):
dp 1 dp
dFx = pδ − p + dx (δ + dδ) + p + dx dδ − τw dx . (10.16)
dx 2 dx
Reordenando se obtiene
dp
dFx = − δ + τw dx . (10.17)
dx
C. Gherardelli U. de Chile
10.3 Capa lı́mite laminar 123
(p+ 21 dx
dp
dx)dd
dd
pd
(p+ dx
dp
dx)(d+dd)
dx
twdx
Esta fuerza neta debe ser igual al flujo neto de cantidad de movimiento que sale del volumen de
control (fig. 10.11), es decir,
Zδ
dp d
− δ + τw dx = ρu2 dy dx + U (ρV dx − ρU dδ) . (10.18)
dx dx
0
V
U n
u n
n
dx
Zδ
δ δ
d
Z Z
ρu dy − ρV dx + ρU dδ − ρu dy + ρu dy dx = 0, (10.19)
dx
0 0 0
La ecuación 10.21 se denomina ec. integral de la cantidad de movimiento de von Karman. Para
el caso de la placa placa delgada, donde (dp/dx) = 0, se cumple que U = cte., es decir, U 6= U (x)
C. Gherardelli U. de Chile
10.3 Capa lı́mite laminar 124
por lo que se puede introducir dentro de la derivada y la integral en el segundo término del lado
derecho de la ecuación 10.21. ⇒
Zδ
d
− τw = ρ(u2 − U u)dy . (10.22)
dx
0
τw d 2 dU dΘ dU
= U Θ + δ∗U = U2 + (δ ∗ + Θ) U . (10.23)
ρ dx dx dx dx
τw dΘ
= U2 . (10.24)
ρ dx
Integrando τw sobre toda la superficie se obtiene el arrastre que el fluido ejerce sobre el cuerpo.
En forma general, para calcular el espesor de la capa lı́mite sobre una placa plana que se
encuentra inmersa en un flujo laminar, incompresible y permanente se debe:
1. utilizar el gradiente de presiones (dp/dx) determinado para el flujo exterior a la capa lı́mite.
2. Definir o aceptar una forma razonable del perfil de velocidades dentro de la capa lı́mite.
Ejemplo
Determinar el espesor de la capa lı́mite que se genera sobre una placa plana delgada suponiendo
que el perfil de velocidades dentro de la capa lı́mite es cuadrático.
El perfil de velocidades debe tener la siguiente forma
u = αy + βy 2
⇒
2
y y
u = 2U −U .
δ δ
C. Gherardelli U. de Chile
10.4 Transición a la turbulencia 125
δ 1
= 5.48 Rex2 .
x
Este resultado es del orden de un 10% mayor al obtenido en forma analı́tica por Blasius.
Análogamente se obtiene para el espesor de desplazamiento la siguiente relación
δ∗ 1
= 1.835 Rex2 ,
x
resultado que es del orden de un 6% superior al resultado de Blasius. Las diferencias exis-
tentes entre ambas soluciones son atribuibles a que la solución de la ecuación de von Karman
supone un perfil de velocidades de forma conocida y por lo tanto es solo una solución aproxi-
mada. La figura 10.12 muestra distintos perfiles tı́picos de velocidad utilizados para resolver la
ecuación 10.22 ası́ como la solución obtenida por Blasius.
Lineal
Cúbico
Sinusoidal
Parabólico
Los resultados presentados hasta aquı́ son válidos para la capa lı́mite laminar. Estos resulta-
dos concuerdan con mediciones experimentales hasta el punto donde la capa lı́mite se torna
turbulenta.
Dado que el número de Reynolds, parámetro principal que gobierna la transición a la turbulencia,
es una función de la posición relativa sobre el cuerpo, siempre es posible alcanzar el régimen
turbulento en la capa lı́mite, independiente de la velocidad del flujo libre U y del fluido. Para
el caso particular de la placa plana basta con que ésta sea lo suficientemente larga.
La transición a la turbulencia depende de varios factores como
C. Gherardelli U. de Chile
10.4 Transición a la turbulencia 126
2. rugosidad de la superficie,
3. curvatura de la superficie,
5. vibración de la placa.
Para una placa plana y delgada la transición ocurre para un rango de la coordenada x tal que
2 · 105 ≤ Rex ≥ 3 · 106 . La figura 10.13 muestra el efecto del número de Reynolds en el espesor de
la capa lı́mite sobre una placa lisa. Se ve que para Re = 3.2·105 el espesor aumenta rápidamente
y se puede considerar este valor de Reynolds como crı́tico para la transición a la turbulencia.
Como Re es función de x se puede determinar la posición x a lo largo de la placa en que más
probablemente aparecerá la transición a la turbulencia.
Figura 10.13: Variación del espesor de la capa lı́mite con el número de Reynolds local para el
flujo sobre una placa plana.
La figura 10.14 muestra el efecto de el grado de turbulencia de la corriente libre sobre la transición
para un flujo sobre una placa plana. Las lı́neas de este gráfico representan los lı́mites entre los
distintos tipos de flujo y por lo tanto la curva inferior representa la variación del número de
Reynolds crı́tico con el grado de turbulencia de la corriente libre U 0 /Ū .
La rugosidad de la superficie de la placa producirá un adelantamiento del punto de transición
si se le compara con una superficie lisa (pelotas de golf). La transición a la turbulencia conlleva
también una variación notable del perfil de velocidades dentro de la capa lı́mite como se puede
observar en la figura 10.15.
C. Gherardelli U. de Chile
10.5 Capa lı́mite turbulenta 127
Figura 10.14: Efecto del grado de turbulencia de la corriente libre sobre la transición para el
flujo sobre una placa plana.
Transición
Turbulento
Laminar
Figura 10.15: Variación tı́picas del perfil de velocidades para distintos tipos de regı́menes.
La estructura de la capa lı́mite turbulenta es muy compleja, irregular y aleatoria. No existe, por
lo tanto, una solución exacta para el flujo en ésta zona por lo que se recurre a aproximaciones
C. Gherardelli U. de Chile
10.5 Capa lı́mite turbulenta 128
y validación experimental.
Utilizaremos la ecuación de von Karman deducida anteriormente, donde u representará la media
temporal de la velocidad, es decir, u = ū.
Blasius encontró que para Re ≤ 107 y una superficies lisa se cumple
1/4
ν
τw = 0.0225ρU 2 . (10.25)
Uδ
1/7
y
u=U . (10.26)
δ
Reemplazando las ecuaciones anteriores en la ec. de von Karman y desarrollando para una placa
plana delgada se obtiene
δ −1
= 0.376 Rex 5 . (10.27)
x
1
ν
5 4
δ ∗ = 0.0463 x5 , (10.28)
U
ρU 2
τw = 0.0288 1 . (10.29)
Rex5
Integrando sobre toda la placa es posible determinar la fuerza de arrastre debida a la fricción
Df
ZL
Df = bτw dx , (10.30)
0
área A
z}|{
bL
Df = 0.036 ρU 2 1 . (10.31)
Rel5
1
Df = CDf · ρU 2 A (10.32)
2
C. Gherardelli U. de Chile
10.6 Separación / Efecto del gradiente de presión 129
Df
CDf = 1 2
. (10.33)
2 ρU A
− 15
CDf = 0.072 · Rel . (10.34)
Turbulento
desarrollado
Turbulento
Transición
Figura 10.16: Coeficiente de arrastre CD para una placa plana paralela al flujo (Recrit = 5 · 105 ).
Las ecuaciones que aproximan las distintas zonas del gráfico son
1.328
CDf = Re0.5 flujo laminar
l
0.455 1700
CDf = (log Rel )2.58
− Rel transición con Rex,c = 5 · 105
Hasta ahora se ha analizado el flujo en la capa lı́mite sobre una placa plana delgada, donde
∂p
consideramos que no existe variación de la presión en la dirección del flujo, es decir ∂x = 0. Lo
C. Gherardelli U. de Chile
10.6 Separación / Efecto del gradiente de presión 130
anterior debido a que se supone que el gradiente de presión en la capa lı́mite es igual al gradiente
de presión existente fuera de la capa lı́mite y que como la placa es delgada las lı́neas de corriente
son paralelas a la placa por lo que no existe variación de la velocidad y por ende de la presión
fuera de la capa lı́mite.
Para cuerpos distintos a una placa plana delgada existe una variación (magnitud y sentido)
de la velocidad de la corriente libre alrededor del cuerpo y por lo tanto una variación de la
∂p
presión ⇒ ∂x 6= 0. Como el flujo tiene que “abrirse” para que pase el cuerpo en la parte anterior
de estos se producirá un aumento de la velocidad y una disminución de la presión. Pasado el
punto de máximo espesor del cuerpo el flujo se expande nuevamente disminuyendo la velocidad
y aumentando la presión. Una consecuencia importante de la existencia de un gradiente de
presión es lo que se conoce como separación de la capa lı́mite.
La disminución de la presión en la dirección del flujo se denomina gradiente de presión favorable.
El aumento de presión en la dirección del flujo se denomina gradiente de presión adverso ya que
tiende a frenar el flujo. Por otro lado, los esfuerzos de corte existentes dentro de la capa lı́mite
tienden también a frenar el flujo. Las partı́culas fluidas tienden a fluir a regiones del flujo
donde el gradiente de presión sea menos adverso, generando de ésta manera la separación de
la capa lı́mite. Detrás de la zona de separación se produce una reestructuración del flujo que
comúnmente se conoce como estela. Como efecto de la separación se produce un aumento notable
en el arrastre y una baja en la sustentación.
El punto de separación se caracteriza por tener una velocidad y un gradiente de velocidad nulo
en la pared como muestra la figura 10.17.
Capa límite
u=0
tw= u =0
y y=0
La ecuaciones de Navier Stokes para la capa lı́mite en la superficie del cuerpo, donde u = v = 0,
es
!
1 dp ∂2u
=ν . (10.35)
ρ dx ∂y 2 y=0
dp
Para el caso de un gradiente de presión favorable, es decir, dx < 0 se cumple que
!
∂2u
< 0. (10.36)
∂y 2 y=0
Al alejarse de la pared del cuerpo y a medida que y → δ se cumple que u → U por lo que
∂u
∂y disminuye con y. Lo anterior indica que no habrá un cambio en la curvatura del perfil de
C. Gherardelli U. de Chile
10.6 Separación / Efecto del gradiente de presión 131
dp
Para el caso de un gradiente de presión adverso, es decir, dx > 0 se cumple que
!
∂2u
> 0. (10.38)
∂y 2 y=0
2
Cerca del borde la la capa lı́mite sin embargo, se sigue cumpliendo que ∂∂yu2 < 0. Esto indica
que existe un cambio de la curvatura (punto de inflexión) del perfil de velocidades entre y = 0
e y = δ. De lo anterior se concluye que para que exista la separación debe existir un gradiente
de presión adverso. Esta es una condición necesaria pero no suficiente. La separación produce
además de un aumento en el arrastre una disminución de la sustentación pudiendo llegar a
situaciones extremas como la pérdida total de la sustentación (stall).
En la capa lı́mite turbulenta las partı́culas fluidas tienen mayor cantidad de movimiento que
en una capa lı́mite laminar (esto se puede ver en la diferencia entre los perfiles de velocidad
existentes en ambas situaciones) y por lo tanto pueden resistir mejor un gradiente de presión
adverso y, por lo tanto, resiste mejor la separación. Analizado desde otro punto, si se adelanta
la transición a la turbulencia de la capa lı́mite, se retardará la separación de ésta influyendo
positivamente en el arrastre (menor) y la sustentación (mayor). Lo anterior puede ser visto en
la figura 10.18 donde, para una misma velocidad de la corriente libre, se ha producido mediante
un alambre en la parte anterior de la esfera la transición adelantada a la turbulencia en forma
artificial (fig. 10.18(a)) produciendo un retraso en la separación de la capa lı́mite.
Figura 10.18: Desprendimiento de la capa lı́mite sobre una esfera con y sin generadores de
vórtices.
Este fenómeno se utiliza en la práctica por ejemplo en pelotas de golf y en algunos perfiles alares.
C. Gherardelli U. de Chile
132
Capı́tulo 11
Flujo Compresible
En éste capı́tulo se considerarán los efectos de la compresibilidad del fluido sobre las carac-
terı́sticas del flujo. Los efectos de la compresibilidad se ven reflejados por ejemplo en una
variación brusca de las propiedades del fluido, como por ejemplo la densidad y la presión, a-
celeración del flujo en ductos divergentes, etc.. Dado que los efectos de la compresibilidad de
los lı́quidos son despreciables en comparación a los efectos de la compresibilidad de los gases se
considerará sólo el flujo de gases. Además se supondrá que los gases se comportan como gases
ideales.
Dado que una variación de la densidad esta asociada a una diferencia o variación de la temper-
atura y/o la presión será necesario utilizar en el análisis las distintas relaciones termodinámicas
existentes para un gas ideal.
1
pv = p = RT
ρ
p = ρRT
RG
R=
M
Energı́a interna. Para un gas perfecto la energı́a interna especı́fica u es una función solo de
la temperatura, es decir, u = u(T ). Diferenciando u y suponiendo que la temperatura T y el
volumen especı́fico v como variables de estado para representar u se obtiene
∂u ∂u
du = dT + dv
∂T v ∂v T
11.1 Relaciones termodinámicas para un gas ideal 133
du ∂u
= .
dT ∂T v
gas
ideal
∂u du
↓
Cv = = .
∂T v dT
Integrando la ecuación anterior entre dos puntos es posible determinar la variación de la energı́a
interna u debida a una cambio de temperatura
u2 − u1 = Cv (T2 − T1 ) .
h = u + pv .
Para un gas ideal o perfecto se cumple que u = u(T ). Introduciendo la ecuación de estado en la
ecuación anterior se obtiene
h = u(T ) + RT = h(T ) ,
de donde es posible apreciar que la entalpı́a de un gas ideal es solo función de la temperatura,
es decir, h = h(T ). El calor especı́fico a presión constante Cp se define como
gas
ideal
∂h dh
↓
Cp = = .
∂T p dT
Al igual que para la energı́a interna, la relación anterior se puede utilizar para determinar el
cambio de entalpı́a debido a un cambio de temperatura
h2 − h1 = Cp (T2 − T1 ) .
dh = du + R dT
dh du
= +R
dT dT
Cp = Cv + R
C. Gherardelli U. de Chile
11.1 Relaciones termodinámicas para un gas ideal 134
Cp − Cv = R .
Dado que R > 0 se desprende que Cp > Cv . Se define el coeficiente isoentrópico k como la razón
entre Cp y Cv
Cp
k= ,
Cv
de donde
k
Cp = R,
k−1
1
Cv = R.
k−1
Entropı́a. Para analizar la variación de entropı́a existen básicamente las siguientes dos rela-
ciones
1
1. T ds = du + p d ρ ,
1
2. T ds = dh − ρ dp.
T2 p2
s2 − s1 = Cp ln − R ln .
T1 p1
C. Gherardelli U. de Chile
11.2 Número de Mach / Velocidad del sonido 135
V
M= .
c
Tomando un volumen de control que envuelva el pulso podemos aplicar la ecuación de con-
tinuidad y cantidad de movimiento para determinar la velocidad de propagación c. Aplicando
la ecuación de continuidad se obtiene
ρAc = (ρ + δρ) A (c − δV ) .
ρ δV = c δρ .
−cρc + (c − δV )ρc = δp
⇒
δV
ρδV = .
c
Combinando los dos resultados anteriores se obtiene
s
δp
c= .
δρ
C. Gherardelli U. de Chile
11.2 Número de Mach / Velocidad del sonido 136
Para fluidos incompresibles se cumple que c → ∞, lo que implica que una variación de la presión
del flujo en algún punto de éste se propaga instantáneamente a todo el fluido.
A parte de las clasificaciones vistas hasta aqui (flujo ideal, uni-, bidimensional, permanente, no
permanente, etc.) la compresibilidad agrega una nueva posibilidad que queda caracterizada por
el valor del número de Mach. El gráfico 11.1 muestra la variación de la presión con el número
de Mach para el caso de un flujo incompresible y un flujo compresible. De este gráfico se puede
ver que para valores de M inferiores a 0.3 la solución incompresible es idéntica a la compresible.
Para un valor de M = 0.4 la diferencia entre ambas soluciones es del orden de un 4 %. Por lo
tanto, un flujo de gases se puede considerar como incompresible si M < 0.3. Lo anterior nos
entrega la siguiente clasificación de acuerdo al número de Mach:
2.0
1.20
1.8 Solución
1.15 Compresible
1.6 1.10
p0/p
1.05
1.4 0.30 0.35 0.40 0.45 0.50
1.2 Solución
Incompresible
1.0
0.0 0.1 0.2 0.3 0.4 0.5 0.6 0.7 0.8 0.9 1.0
M
Figura 11.1: Efecto del número de Mach en la presión para un flujo compresible e incompresible
C. Gherardelli U. de Chile
11.2 Número de Mach / Velocidad del sonido 137
Supongamos que una fuente estacionaria inmersa en un fluido produce pulsos de presión a
intervalos de tiempo ∆t. Si el fluido se encuentra en reposo (V = 0) las ondas se propagarán en
forma de cı́rculos concéntricos como muestra la figura 11.2(a) (en tres dimensiones se tiene por
supuesto esferas concéntricas).
Si el fluido tiene un movimiento uniforme relativo a la fuente, con una velocidad menor que la
velocidad del sonido, es decir, V < c, los circulos no serán concéntricos, si no que sus origenes se
encontrarán desplazados, pero si estarán completamente inmersos dentro de un pulso producido
con anterioridad, como muestra la figura 11.2(b).
Para el caso lı́mite cuando V = c el pulso de presión generado será incapas de viajar aguas
arriba de la fuente, generándose un plano sobre el cual no es posible detectar la presencia de la
fuente ni del pulso de presión (figura 11.2(c)). Esta zona se denomina zona de silencio. La zona
donde si es posible detectar la existencia de variaciones de la presión se denomina zona activa.
V<c
t=0
t=0
dt dt
2dt
2dt
V=c
t=0 V>c t=0
dt dt zona
2dt activa
fuente
2dt
zona de
zona de zona silencio
Alta concentración
de ondas de presión
silencio activa Cono de Mach
Figura 11.2: Expansión de ondas de presión en un fluido para distintas velocidades del fluido
Si la velocidad del flujo es mayor que la velocidad del sonido, es decir, V > c, las esferas viajarán
a una velocidad mayor que lo que su velocidad de expansión por lo que ya no se encontrarán
unas inmersas en otras. En éste caso se genera una superficie tangencial cónica denominada
Cono de Mach (figura 11.2(d)). La zona activa estará en este caso restringida al volumen dentro
del cono. La superficie del cono es una región con una alta concentración de ondas de presión
y por lo tanto una región a través de la cual existen variaciones bruscas en las propiedades de
los fluidos. Como se verá más adelante este fenómeno es equivalente a lo que ocurre a través de
una onda de choque.
C. Gherardelli U. de Chile
11.3 Flujo compresible unidimensional 138
ṁ = ρ A V = cte.
Para un flujo incompresible, ρ = cte, una variación de A implica una variación inversa de la
velocidad V . Veremos a continuación que éste resultado no es siempre aplicable a un flujo
compresible.
De la segunda ley de Newton para un flujo sin roce se obtuvo en capı́tulos anteriores que
1
dp + ρ d(V 2 ) + ρg dz = 0 .
2
Despreciando dz frente a los otros dos términos se obtiene
1
dp + ρ d(V 2 ) = 0 .
2
Desarrollando se obtiene
dp = −ρV dV
⇒
dp dV
2
=− . (11.1)
ρV V
ln ρ + ln A + ln V = cte ,
C. Gherardelli U. de Chile
11.3 Flujo compresible unidimensional 139
o
dV dρ dA
− = + . (11.2)
V ρ A
dp 2
dA
2
1 − M = . (11.4)
ρV A
dA dV
=− 1 − M2 . (11.5)
A V
dρ dA M 2
= . (11.6)
ρ A (1 − M 2 )
De la ecuación 11.5 se puede ver que si un flujo es subsónico (M < 1) la velocidad y el área
de paso cambian en direcciones opuestas. Es decir si A aumenta la velocidad V se reduce. Se
tiene además que la presión aumenta. Este resultado es equivalente al obtenido para un flujo
incompresible.
Si el flujo es supersónico (M > 1) se tiene que un cambio en el área de paso del flujo en una
dirección tiene como efecto un cambio de la velocidad en la misma dirección y un cambio de
la presión en la dirección opuesta. Por lo tanto si A aumenta la velocidad V también aumenta
y la presión disminuye y si A disminuye la velocidad disminuye y la presión aumenta. Este
resultado es opuesto al caso de un flujo incompresible. El origen de éste comportamiento se
puede encontrar analizando la ecuación 11.6. Para un flujo subsónico la densidad y el área
de paso varı́an en la misma dirección y para un flujo supersónico éstos varı́an en direcciones
opuestas. Como el flujo másico es constante ⇒ρAV = cte, y suponiendo un ducto divergente
donde dA > 0, para un flujo subsónico dρ > 0 por lo que la velocidad V debe disminuir para
mantener el flujo másico constante. Para un flujo supersónico tendremos que dρ < 0 por lo que
la velocidad debe aumentar para mantener el flujo másico constante.
Flujo subsónico Flujo supersónico
M <1 M >1
dA > 0 dA > 0
dV < 0 dV > 0
dp > 0 dp < 0
dA < 0 dA < 0
dV > 0 dV < 0
dp < 0 dp > 0
C. Gherardelli U. de Chile
11.3 Flujo compresible unidimensional 140
dA A
=− 1 − M2 ,
dV V
dA
de donde para M = 1 se cumple que dV = 0. Lo anterior implica que el área asociada a M = 1 es
un mı́nimo o un máximo lo cual se puede presentar en la práctica mediante dos combinaciones
que son un ducto convergente–divergente o un ducto divergente–convergente. De un análisis
de los objetivos (tobera o difusor) de éste tipo de elementos muestra que solo la combinación
convergente–divergente es válida.
Garganta
M<1 M>1
M=1
Si el flujo que entra por la sección convergente de la tobera es subsónico, éste aumentará su
velocidad hasta la garganta. Si en éste punto se alcanza la condición sónica, es decir, M = 1, el
flujo seguirá acelerando en la sección divergente. Si el flujo que entra en la tobera es supersónico
la velocidad de éste disminuirá en la sección convergente y si se alcanza la condición sónica en
la garganta el flujo seguirá desacelerando en la sección divergente. En éste caso el elemento
actuará como difusor.
Las condiciones del flujo en la garganta se denominan condiciones crı́ticas y se distinguen gen-
eralmente mediante un superı́ndice ∗, es decit, T ∗ , p∗ , ρ∗ , A∗ , etc.. Las toberas y difusores son
diseñados para satisfacer, dadas las condiciones del flujo inicial, las condiciones requeridas a la
salida.
En el cálculo de flujos compresibles es común utilizar como referencia el estado termodinámico
de estancamiento que es el estado que se alcanza al frenar un fluido mediante un proceso sin roce
y adiabático (isoentrópico) hasta el reposo (V = 0). Las propiedades del fluido en éste estado
se denominan propiedades de estancamiento. Si el proceso de frenar el flujo no es adiabático las
propiedades de estancamiento no serán las mismas para todos los puntos del flujo. Estas últimas
se denominan propiedades de estancamiento local. Los parámetros del flujo y las propiedades
del fluido en el punto de estancamiento se designan con un subindice o, es decir, To , po , ρo etc..
C. Gherardelli U. de Chile
11.3 Flujo compresible unidimensional 141
k po p V2
− − = 0.
k−1 ρo ρ 2
kR V2
(To − T ) − =0 (11.7)
k−1
| {z }
2
Cp
V2
Cp (To − T ) − =0
2
o
V2
ho − h − = 0.
2
To k−1 V2
=1+ .
T 2 kRT
To k−1 2
=1+ M .
T 2
⇒
T 1
= k−1
. (11.8)
To 1 + 2 M2
C. Gherardelli U. de Chile
11.3 Flujo compresible unidimensional 142
y
" # 1
k−1
ρ 1
= k−1
. (11.10)
ρo 1 + 2 M2
Estas tres ecuaciones permiten relacionar T , p y ρ en cualquier punto de una tobera convergente
divergente con las condiciones de estancamiento. Se puede ver además que al aumentar M tanto
T como p decrecen, lo que significa que tanto temperaturas como presiones bajas están asociadas
a númeroas de Mach altos.
Si las condiciones a la salida de la tobera son tales que se alcanza la condición M = 1 en la
garganta cualquier disminución posterior de p no afectará el flujo en la sección convergente, en
particular el flujo másico no se verá afectado. Bajo éstas condiciones se dice que el flujo se
encuentra estrangulado.
Las siguientes ecuaciones relacionan las condiciones en la garganta, suponiendo M = 1 en ella,
con las condiciones de estancamiento:
k
p∗ 2
k−1
= ,
po k+1
T∗ 2
= .
To k+1
k+1
k−1
" #
1+ 2 2(k−1)
A 1 2 M
∗
= . (11.11)
A M 1 + k−1
2
Las relaciones 11.8, 11.9, 11.10 y 11.11 se pueden ver gráficamente en la figura 11.15.
En la sección anterior se supone que el flujo es adiabático y sin roce o isoentrópico. En condi-
ciones reales la restricción más fuerte es la no existencia de fricción. La existencia de fricción
produce, en un flujo adiabático, un aumento de la temperatura del fluido debido a lo cual la
entalpı́a de salida será mayor que la que se alcanzarı́a en un flujo isoentrópico. Dado que la
función de la tobera es convertir la entalpı́a del flujo en energı́a cinética, la existencia de fricción
claramente introduce ineficiencias al sistema. Lo anterior se representa en el diagrama h − s de
la figura donde a partir de las condiciones de entrada p1 el flujo se expande hasta la presión p2 .
C. Gherardelli U. de Chile
11.3 Flujo compresible unidimensional 143
Para un flujo isoentrópico las condiciones de salida quedan representadas por el punto 2. Para
un flujo real sin embargo las condiciones de salida son las condiciones correspondientes al punto
20 . El rendimiento de una tobera esta dado por
V 2 /2 real V 20 /2 real
η= 2 2 = 2 2 .
V1 /2 + (h1 − h2 ) isoentr. V1 /2 + (h1 − h2 ) isoentr.
Por lo general la energı́a cinética del fluido a la entrada es despreciable con respecto a (h1 − h2 )
por lo que el rendimiento se puede escribir como
V 2 /2 real
η= 2 .
(h1 − h2 )
Dibuje un diagrama T −s para ambos casos. Datos: ρ = 1.23 kg/m3 , k = 1.4, R = 286.9 J/kgK,
Tatm = 15◦ C, patm = 101 kP a (abs).
Para determinar el flujo másico se debe utilizar la siguiente relación
ṁ = ρ A V = cte
ṁ = ρg Ag Vg .
donde la incognita es Mg . Para determinar Mg se cuenta con la relación para las presiones.
Además se sabe que si la presión en el ducto pd es mayor o igual que la presión crı́tica p∗ ,
C. Gherardelli U. de Chile
11.3 Flujo compresible unidimensional 144
p∗ = 0.528 p0 .
Las condiciones de estancamiento son para este caso iguales a las condiciones ambientales ya
que se puede suponer que lejos de la entrada a la tobera la atmósfera se encuentra en reposo, es
decir, T0 = Tatm , p0 = patm y ρ0 = ρatm
⇒
de donde se obtiene
M = 0.587 .
ρg = 1.04 kg/m3
y
" #
Tg 1
= 1.4−1
15 + 273 1+ 2 0.5872
Tg = 269 K .
⇒
√ q
Vg = 0.587 286.9 · 1.4 · 269 = 193 J/kg
Vg = 193 m/s .
C. Gherardelli U. de Chile
11.3 Flujo compresible unidimensional 145
Por lo tanto
ṁ = 0.0201 kg/s .
ρg = 0.780 kg/m3
Tg = 240 K.
⇒
√
Vg = 1 · 1.4 · 286.9 · 240 = 310 m/s .
ṁ = 0.0242 kg/s.
Q=0
Se denomina Flujo de Fanno al flujo de un gas ideal
compresible, no isoentrópico (s 6= cte) y adiabático en
un ducto de sección constante como el de la figura. La
(1) (2)
ecuación de continuidad es
A VC. A
ṁ = ρ A V = cte .
Flujo de Fanno
ρ V = cte .
Despreciando la diferencia de cotas entre los puntos 1 y 2 y como el flujo es adiabático y no hay
trabajo externo, es decir Q̇ = Ẇ = 0, se obtiene
V22 V2 V2
h2 + = h1 + 1 = h + = h0 ,
2 2 2
C. Gherardelli U. de Chile
11.3 Flujo compresible unidimensional 146
h − h0 = Cp (T − T0 ) .
donde se consideró al pto. (1) como referencia. Combinando las últimas dos ecuaciones el flujo
de Fanno queda representado en un diagrama T − s, para unas condiciones de estancamiento
(T0 ), un tipo de gas (Cp , R) y unas condiciones iniciales (T1 , p1 , s1 ) dadas, por lı́neas como la
que se muestra en la figura 11.4. Estas lı́neas se denominan lı́neas de Fanno.
línea de
T Fanno
ds =0
dT
Ta a
sa s
Figura 11.4: Diagrama T − s para el flujo de Fanno
De la relación
dp
T ds = dh −
ρ
y considerando un gas ideal y que ρ V = cte de donde
dρ dV
=−
ρ V
se obtiene
ds Cp Cp 1
= −R + .
dT T V2 T
C. Gherardelli U. de Chile
11.3 Flujo compresible unidimensional 147
Para el punto (a) de la lı́nea de Fanno se cumple que ds/dT = 0 de donde obtiene
Cp Cp 1
0= −R 2
+
Ta Va Ta
⇒
p
Va = R Ta k ,
es decir, la velocidad en el punto (a) de la curva es igual a la velocidad del sonido o el número
de Mach es igual a 1, M |a = 1. Como la temperatura de estancamiento es igual para todos
los puntos de la lı́nea de Fanno lo anterior significa que la temperatura en (a) corresponde a la
temperatura crı́tica T ∗ . La parte de la curva que se encuentra sobre el punto (a) corresponde a
un flujo subsónico y la parte bajo el punto (a) a un flujo supersónico.
La segunda ley de la termodinámica dice que para un flujo adiabático con roce la entropı́a debe
aumentar. Sobre la lı́nea de Fanno lo anterior indica que un flujo solo puede desarrollarse hacia
el punto (a) de la curva. Un flujo subsónico es, por lo tanto, acelerado por la fricción hasta un
valor máximo posible de M = 1. Un flujo supersónico es desacelerado a causa de la fricción
obteniéndose valores inferiores del número de Mach. Más adelante se verá que mediante una
onda de choque es posible que un flujo supersónico se transforme en un flujo subsónico. Un flujo
subsónico, sin embargo, jamás podrá convertirse en un flujo supersónico.
T
T0
Flujo
M<1 subsónico
Ta
M=1
M>1 Flujo
supersónico
sa s
Se analizará cualitativamente a continuación como varı́a el flujo con el largo del ducto para el
caso subsónico y supersónico. Para un flujo subsónico y un ducto de largo l1 se tiene que si el
flujo en l1 no ha alcanzado el estado sónico (M = 1), es decir M (l1 ) < 1, entonces el flujo saldrá
del ducto subsónicamente a la presión externa como un chorro libre. Suponiendo que el ducto se
alarga se puede alcanzar M = 1 a la salida. Si el ducto se alarga por sobre ésta condición y dado
que el flujo no puede seguir aumentando su velocidad se producirá un reajuste (disminución)
en el caudal másico del flujo de tal forma de reestablecer la condición sónica a la salida. Lo
anterior indica que para un ducto dado existe un caudal máximo que puede pasar por el ducto
y éste se obtiene cuando M = 1 a la salida. En éste csao se dice que el flujo esta estrangulado.
Un reajuste del flujo significa en el diagrama T − s que el flujo cambia de una lı́nea de Fanno a
otra.
Para un flujo supersónico a la entrada de un ducto de largo l1 se tiene que si M > 1 a la salida
se produciran ondas de choque fuera del ducto para ajustar la presión del chorro con la presión
ambiente. Alargando el ducto se alcanzará la condición M = 1 a la salida y el flujo estará
estrangulado. Un aumento posterior de l llevará a que se produzcan ondas de choque dentro del
C. Gherardelli U. de Chile
11.3 Flujo compresible unidimensional 148
Flujo
subsónico
M<1 M=1
l1
l*
l3
tubo generándose de ésta forma un flujo subsónico que acelera hasta reeestablecer la condición
sónica a la salida.
Flujo
supersónico
M>1 M=1
l1
l*
l3
πDτw
dp + d(ρV 2 ) = − dx
A
4 τw
dp + d(ρV 2 ) = − dx .
D
Como
d(ρV 2 ) = ρV dV + V d(ρV ) = ρV dV
⇒
4
dp + ρV dV = − τw dx .
D
C. Gherardelli U. de Chile
11.3 Flujo compresible unidimensional 149
f 1 2
τw = ρV
4 2
y reemplazando se obtiene
1f
dp + ρV dV = ρV 2
2D
⇒
dp f 1 2 dx 1 d(V 2 )
+ ρV + ρ = 0.
p p2 D 2 p
Introduciendo la ecuación de estado para gases ideales, la ecuación para la velocidad del sonido,
la definición del número de Mach, la ecuación de conservación de la energı́a para un gas ideal la
ecuación anterior se puede escribir como
1 − M 2 d(M 2 )
dx
h i =f .
1+ k−1
M2 kM 4 D
2
Esta ecuación se puede integrar entre dos secciones de un ducto. Por lo general se utiliza el
estado sónico (M=1), independientemente si éste exista en la realidad, como referencia para la
integración, es decir,
M
Z =1 Z ∗
l=l
1 − M 2 d(M 2 )
dx
h i = f .
1+ k−1
M 2 kM 4 D
M 2 l
f¯(l∗ − l) k+1
" #
2
1 (1 − M 2 ) k + 1 2 M
= + ln . (11.12)
D k M2 2k 1 + k−1
2 M
2
Los valores de la función se encuentran en forma de tablas y gráficos para el aire. La ecuación
anterior es aplicable entre dos puntos cualesquiera (1) y (2) de un ducto de la siguiente forma
Para las demás propiedades del flujo se obtienen las siguientes relaciones para un flujo de Fanno
k+1
T 2
= ,
T∗ 1+ k−1
2 M2
#0.5
k+1
"
2
V 2 M
= ,
V∗ 1 + k−1
2 M
2
ρ 1 + k−1
2 M
2
= ,
ρ∗ k+1
2 M
2
C. Gherardelli U. de Chile
11.3 Flujo compresible unidimensional 150
#0.5
k+1
"
p 1 2
∗
= k−1
,
p M 1+ 2 M2
k+1
p0 1 2 k−1 2
2(k−1)
∗ = 1+ M .
p0 M k+1 2
Q=0
Se denomina Flujo de Rayleigh al flujo de un gas
perfecto compresible, isoentrópico (s = cte) y no
adiabático (Q̇ 6= 0) en un ducto de sección con- (1) (2)
stante como el de la figura.La ecuación de cantidad
A VC. A
de movimiento aplica al volumen de control es
p1 A1 + ṁV1 = p2 A2 + ṁV2 + 0
(ρV )2
p+ = cte . (11.13)
ρ
Utilizando la ecuación de estado para gases ideales la ecuación anterior se puede escribir como
(ρV )2 RT
p+ = cte .
p
Como el producto ρV es constante para el flujo de Rayleigh la ecuación anterior relaciona, para
un flujo dado (R), la presión con la temperatura. Combinando ésta relación con la segunda
ecuación vista anteriormente para la entropı́a se puede gráficar el desarrollo del flujo en un
diagrama T − s obteniéndose curvas como la que se muestran en la figura.
línea de
T Rayleigh b dT
ds
=0
ds =0
dT
Ta a
M= k 1 M=1
sa s
Figura 11.8: Diagrama T − s para el flujo de Rayleigh
C. Gherardelli U. de Chile
11.3 Flujo compresible unidimensional 151
ds Cp V 1
= + .
dT T T T V
V − R
lo que indica que el número de Mach en el punto a es uno, es decir, Ma = 1. Para el punto b se
cumple que dT /ds = 0 de donde
r
1
Mb = .
k
Dado que k > 1 para todos los gases, el flujo en el punto b debe ser subsónico.
La ecuación de conservación de la energı́a para el VC. es
" #
V2 V2
ṁ h2 − h1 + 2 − 1 + g(z2 − z1 ) = Q̇ + Ẇ .
2 2
dh + V dV = δq = (Q̇/ṁ) .
dV δq 1
= .
V Cp T (1 − M 2 )
De la ecuación anterior se puede ver que para un flujo subsónico (M < 1) un calentamiento del
flujo (δq > 0) produce una aceleración del flujo (dV > 0) y que un enfriamiento (δq < 0) produce
una desaceleración del flujo (dV < 0). Para el caso supersónico se verifica un comportamiento
inverso, es decir, δq > 0 ⇒dV < 0 y δq < 0 ⇒dV > 0. Este comportamiento se puede determinar
también a partir de la gráfica para las lı́neas de Rayleigh ya que para un flujo sin roce la entropı́a
aumenta si δq > 0 y disminuye si δq < 0. Cabe hacer notar además que entre el punto b y a de
la curva de Rayleigh que al calentar el flujo (δq > 0) se produce un descenso en la temperatura
de éste.
Efectuando un desarrollo equivalente al realizado para el flujo de Fanno es posible determinar
las siguientes ecuaciones
p1 1 + kM22
= ,
p2 1 + kM12
!2
T1 M1 1 + kM22
= ,
T2 M2 1 + kM12
C. Gherardelli U. de Chile
11.4 Ondas de choque 152
T d q<0
d q>0 a
d q>0
d q<0
s
Figura 11.9: Diagrama t − s para el flujo de Rayleigh
k k
k−1 k−1
" # " #
2 2
(p0 )1 p1 1 + 2 M1
k−1
1 + kM22 1+ 2 M1
k−1
= = · .
(p0 )2 p2 1 + k−1 2
2 M2
1 + kM12 1+ k−1 2
2 M2
p 1+k
= ,
pa 1 + kM 2
2
T M (1 + k)
= ,
Ta 1 + kM 2
k
(p0 ) 1+k 2 k−1 2
k−1
= · 1+ M ,
(p0 )a 1 + kM 2 1+k 2
h i
T0 2(k + 1)M 2 1 + k−1 2 M
2
= ,
(T0 )a (1 + kM 2 )2
ρa V M 2 (1 + k)
= = .
ρ Va 1 + kM 2
Una onda de choque es una onda de presión o acústica de intensidad finita, es decir, las varia-
ciones en la propiedades del flujo se manifiestan en un entorno muy cercano al frente de onda.
Para efectos de éste capı́tulo se considerará que éste entorno es tan pequeño que se considerará
como una discontinuidad en el flujo. Se verá que las ondas de choque se encuentran sólo en flujo
supersónicos.
C. Gherardelli U. de Chile
11.4 Ondas de choque 153
Lo anterior permite suponer que la sección de la onda, a través de la cual pasa el flujo, es
constante (A = cte, que a través de la onda el flujo es adiabático (Q̇ ≈ 0) y que el roce con la
pared es despreciable (τw = 0).
Fanno De lo anterior se desprende que el flujo a través de un
T
y onda choque plana debe cumplir tanto con las condi-
ciones para el flujo de Fanno y el flujo de Rayleigh. Si
se dibujan las curvas de Fanno y Rayleigh que pasan
por el estado del fluido antes (x) de la onda de choque
x Rayleigh
se tendrá que el punto de salida (y) de la onda debe
estar con la otra intersección de las curvas como se
s muestra en la figura.
Se cumple además que el punto y se encuentra siempre a la derecha del punto x y como la
entropı́a aumenta en todo proceso irreversible se concluye que un onda de choque solo puede
producirse en un flujo supersónico y que tiene como consecuencia un flujo subsónico.
A partir de las relaciones obtenidas anteriormente para el flujo de Fanno y Rayleigh se obtiene
las siguientes ecuaciones que relacionan el flujo antes (x) y después (y) de una onda de choque.
py 1 + k Mx2
= ,
px 1 + k My2
k−1
Ty 1+ 2 Mx2
= k−1
,
Tx 1+ 2 My2
2
Mx2 + k−1
My2 = 2k 2
,
k−1 Mx − 1
py 2k k−1
= Mx2 − ,
px k+1 k+1
k−1 2k
Ty 1+ 2 Mx2 2
k−1 Mx −1
= (k+1)2
,
Tx Mx2
2(k−1)
ρy Vx (k + 1)Mx2
= = ,
ρx Vy (k − 1)Mx2 + 2
C. Gherardelli U. de Chile
11.4 Ondas de choque 154
k k
k+1 2 k−1 k−1 2 1−k
(p0 )y 2 Mx 1+ 2 Mx
= 1
(p0 )x
2k 2 k−1
k−1
k+1 Mx − k+1
(T0 )y
= 1.
(T0 )x
Las ondas de choque oblicuas son ondas de amplitud o intensidad finita cuya normal se encuentra
inclinada con respecto a la dirección del flujo. Este tipo de ondas se encuentran principalmente
en el flujo alrededor de cuerpos que viajan a velocidades supersónicas y en un cambio de dirección
cóncavo de un flujo supersónico. Las lı́neas de corriente giran, al pasar el flujo por una onda
de choque oblicua, hacia el flujo principal. Para encontrar las relación entre las condiciones del
flujo antes y después de la onda de choque se analizará la figura 11.10 donde existe un flujo
supersónico el cual es obligado a cambiar de dirección. Para ésta figura se tiene que V1 y V2
son la velocidad antes y después de la onda de choque, Vi,n y Vi,t las componentes normal y
tangencial, de la velocidad Vi , a la superficie que contiene la onda de choque, θ el ángulo de giro
de la superficie y β el ángulo en el cual se produce la onda de choque.
V2
V1 V2n V2t
b
V1n V1t
q
Figura 11.10: Onda de choque oblicua producida por un cambio de dirección del flujo.
Aplicando la ecuación de cantidad de movimiento al volumen de control, que está formado por
un tubo de corriente donde A1 = A2 se obtiene para las direcciones normal y tangencial a la de
choque las siguientes ecuaciones
2
ρ1 V1,n + p1 = ρ2 V2,n + p2
ṁV1,t = ṁV2,t
V1,t = V2,t .
ρ1 V1,n = ρ2 V2,n .
De las ecuaciones anteriores y de lo visto en la sección anterior sobre ondas de choque plana, se
desprende que
C. Gherardelli U. de Chile
11.4 Ondas de choque 155
" #
M12 sin2 β − 1
tan θ = 2 cot β · 2 .
M1 (k + cos 2β) + 2
90
choque
fuerte 90
80 M2<1
80 choque
70 fuerte
M2<1
q 70
4
60 60
M2>1 choque
b 50 choque
q 50 débil
débil 3 b
40 M1=2
40 M2>1
q 2 30 3
30 5
q 20 oo
20
q=0 1
10
10 0
1 2 3 4 5 0 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50
M1 q
Estas relaciones se encuentran graficadas el la figura 11.11. De éstos gráficos se pueden extraer
las siguientes conclusiones
2. Para un ángulo θ dado existe un número de Macha M1 mı́nimo para el cual existe solo un
ángulo β.
3. Para un θ dado, si M1 es menor que el mı́nimo para esa curva so existe un ángulo beta
correspondiente. Esto significa que la onda de choque se separa del cuerpo. Lo anterior se
puede expresar también como que para un M1 dado existe un ángulo θ lo suficientemente
grande como para producir una onda de choque separada.
C. Gherardelli U. de Chile
11.4 Ondas de choque 156
Para el flujo alrededor de un cuerpo obtuso se generará por lo tanto una onda de choque separada.
Como entre la onda de choque y el punto de estancamiento la velocidad del fluido se reduce
considerablemente existirá por lo general, una zona en la cual el choque será fuerte (M2 < 1) y
otra donde será débil (M2 > 1).
Choque
Choque M2>1 debil
fuerte
M2<1
q
q
M1
M2>1
Dado que la presión aumenta a través de la onda de choque, éstas se denominan también ondas
de compresión. Para el caso de vuelos supersónicos un aumento de la presión esta asociado
directamente a un aumento en el arrastre. Lo anterior se traduce en que los perfiles alares
supersónicos tienen un forma puntiguda con un ángulo θ pequeño.
Abanico de
expansión
V1
V
2 >V
1
En contraste con las ondas de compresión o choque, en los lugares del flujo en los que existe un
cambio de dirección convexo, es decir, el flujo gira en sentido contrario a la dirección del flujo
como se muestra en la figura, se producira una expansión del flujo (p ↓, V ↑). Si el cambio de
dirección de la superficie se concentra en un punto o esquina las lı́neas de corriente se deflectarán
hacia abajo a través de una serie de ondas de expansión oblicuas o abanico de expansión. Estas
ondas se denominan también ondas de expansión de Prandtl-Meyer debido a que fueron los
primeros en estudiar este fenómeno (1907-1908). A diferencia de lo que pasa en las ondas de
choque los cambios a través de las distintas ondas de expansión son continuos, salvo para el
punto adjacente a la esquina (A) del cuerpo. A través de una onda de expansión el número de
Mach aumenta, y la presión, la temperatura y la densidad disminuyen.
C. Gherardelli U. de Chile
11.4 Ondas de choque 157
Se analizará en esta sección las diferentes condiciones de flujo que se alcanzan en una tobera
convergente divergente cuando se varı́a la presión de descarga o contrapresión pd . El análisis se
realiza graficando la distribución de presiones p en la tobera adimensionalizada por la presión
de estancamiento p0 para diferentes valores de la contrapresión.
Para pd = p0 no existirá flujo en la tobera. Reduciendo pd por debajo de p0 comenzará el flujo.
Si pd es tal que no se alcanza el estado sónico o crı́tico en la garganta el flujo acelerará en la
sección convergente y desacelerará en la sección divergente. Esta situación queda representada
mediante la curva a del gráfico. Reduciendo pd aumentará el flujo másico ṁ que pasa a través
de la tobera e irá aumentando su velocidad. En el lı́mite se alcanzará el estado sónico en la
garganta desacelerando posteriormente en la sección divergente (curva b). El flujo másico será
el máximo posible para las condiciones de estancamiento (p0 , T0 , ρ0 ), la presión será la presión
crı́tica p∗ . La curva b es el lı́mite para la región I del gráfico donde el flujo es subsónico en toda
la tobera.
Onda de choque
plana interior
p
p0 Ondas de
a choque oblícuas
b
c
I
pd
II d
III
e Ondas de
IV expansión
g
Figura 11.14: Funcionamiento de una tobera convergente divergente fuera de las condiciones de
diseño.
C. Gherardelli U. de Chile
11.4 Ondas de choque 158
descarga pd será igual a la presión de salida del flujo y la tobera se encontrará operando bajo
las condiciones de diseño. En este caso no existirán ondas de choque. Entre las curvas d y e la
presión de salida del flujo es menor que la presión de descarga por lo que se dice que la tobera
se encuentra operando sobreexpansionada (III).
Si pd se baja por debajo de la curva e la presión de salida del flujo será mayor que la presión
de descarga y por lo tanto nuevamente será necesario un ajuste de la presión. Este ajuste se
produce fuera de la tobera mediante ondas de expansión bi- y tridimensionales. Esta región
(IV ) se denomina región subexpansionada.
C. Gherardelli U. de Chile
11.4 Ondas de choque 159
1.0 10
0.9 9
T/T0
0.8 8
0.7 7
0.6 r/r0 6
*
0.5 5A/A
0.4 p/p0 4
0.3 3
0.2 2
0.1 1
0.0 0
0.1 1 10
M
Figura 11.15: Correlaciones para el flujo compresible isoentrópico.
C. Gherardelli U. de Chile
11.4 Ondas de choque 160
0.1 1 10
5 5
*
p/p*
r/r
4 p0/p*0 4
3 3
2 V/V* 2
T/T*
1 f(l*-l)/D 1
0 0
0.1 1 10
M
C. Gherardelli U. de Chile
11.4 Ondas de choque 161
0.1 1 10
2.5 2.5
p0/p0,a
2.0 2.0
V/V*
1.5 1.5
1.0 1.0
T0/T0,a
0.5 0.5
T/Ta
p/pa
0.0 0.0
0.1 1 10
M
C. Gherardelli U. de Chile
11.4 Ondas de choque 162
1.0 40
0.8
p0,y/p0,x
30
p0,y/px
0.6
My My
py/px
20
p0,y 0.4
p0,x
10
0.2
Vx/Vy
Ty/Tx
0.0 0
1 2 3 4 5
Mx
Figura 11.18: Correlaciones para el flujo a través de una onda de choque plana.
C. Gherardelli U. de Chile
163
Capı́tulo 12
La caracterı́stica principal que diferencia el flujo en un canal abierto del flujo en un ducto cerrado
es que en el canal existe una superficie libre la cual se encuentra a una presión constante. Por
ejemplo, la presión sobre la superficie del agua en un rı́o se encuentra sometida a la presión
atmosférica y esta presión es constante a lo largo del rı́o. La implicancia fundamental de esta
caracterı́stica es que el movimiento del fluido se origina en el peso del fluido (fuerza gravitatoria)
y no la existencia o no de una diferencia de presiones, como es el caso de un ducto cerrado. La
distribución de presiones en un canal abierto es por lo general hidroestática, es decir, depende
solo de la profundidad del fluido. Las otras fuerzas de importancia en el estudio de canales
abiertos, son la fuerza de inercia y la fuerza originada por la fricción.
Además de las clasificaciones vistas anteriormente como laminar, turbulento, etc., la existencia
de una superficie libre permite clasificar los flujos en canales abiertos de acuerdo a la forma en
que varı́a su profundidad (y) a lo largo del canal (x). Un flujo se dirá uniforme si la profundidad
del flujo no varı́a a lo largo del canal, es decir, si dy/dx = 0, y no–uniforme si la profundidad
varı́a a lo largo del canal, es decir, si dy/dx 6= 0. Los flujo no uniformes se dividen además en
flujos que varı́an rápidamente, dy/dx ' 1 y flujos que varı́an lenta o gradualmente, dy/dx 1.
Como en cualquier tipo de flujo, el flujo en canales abiertos puede ser laminar, de transición o
turbulento. Esto estará determinado por el valor del número de Reynolds, definido como
ρV RH
Re = , (12.1)
µ
V
Fr = √ , (12.2)
gl
donde l es una dimensión caracterı́stica del flujo. Como se verá mas adelante, el denominador de
la ecuación anterior representa la velocidad de propagación de una onda de superficie o gravedad.
Un flujo donde F r < 1 se denomina subcrı́tico o lento. Si F r = 1 el flujo se llama crı́tico y si
F r > 1 el flujo se dice supercrı́tico o rápido. Como se puede apreciar, existe una analogı́a entre
esta clasificación y la clasificación, mediante el número de Mach, de los distintos regı́menes de
flujos compresibles. El número de Mach es la razón entre la velocidad del flujo y la velocidad de
propagación de una onda de presión a través del medio, y el número de Froude es la razón entre
la velocidad del flujo y la velocidad de propagación de una onda de superficie sobre la superficie
del flujo.
Volumen de
control
c
dy
dV
dV Fluido
y estacionario
V=0
Reordenando se obtiene
(y + δy)
c= δV . (12.4)
δy
C. Gherardelli U. de Chile
12.1 Ondas de superficie 165
δV g
= . (12.6)
δy c
Este resultado muestra que a mayor amplitud la onda se propaga a una velocidad mayor. Para
ondas de amplitud pequeña, es decir, cuando δy y la ecuación anterior queda
√
c= gy . (12.8)
l
y
0.5
gλ 2πy
c= tanh . (12.9)
2π λ
La figura 12.3 muestra resultado anterior en forma gráfica. Se ve que la velocidad de propagación
varı́a tanto con la longitud de onda como con la profundidad del fluido y es independiente de la
amplitud δy. Para los casos donde la profundidad del fluido es mucho mayor que la longitud de
onda ,y λ, que corresponde al caso de océanos por ejemplo, la velocidad c será independiente
de la profundidad e igual a
s
gλ
c= . (12.10)
2π
Por otro lado, para el caso donde la profundidad es pequeña en relación a la longitud de onda,
√
es decir, y λ, la ecuación 12.9 tiende a la ecuación 12.8, es decir, c → gy. Esta situación
que corresponde a la gran mayorı́a de los flujo en canales por lo que se seguirá utilizando en este
capı́tulo.
C. Gherardelli U. de Chile
12.2 Consideraciones energéticas 166
2
c canal bajo c= gy
gy
canal y<
<l
profundo
gl
c=
2p
y>
>l
l/y
Figura 12.3: Velocidad de propagación de una onda de superficie en función de la longitud de
onda.
En esta sección se realizaran algunas consideraciones energéticas sobre el flujo en canales. Para
ello consideraremos un tramo de un canal como el que se muestra en la figura 12.4. Se supondrá
que el perfil de velocidades es uniforme en cualquier sección del canal. La pendiente del fondo
del canal o solera (S0 = (z1 − z2 )l) se supondrá constante y pequeña.
Línea de
energía hL
2
V1
2g V2
2
2g Pendiente
Sf
y1 Pendiente
S0 y2
z1 z2
l
Un balance de energı́a en unidades de longitud entre dos secciones del canal resulta
p1 V12 p2 V22
+ + z1 = + + z2 + h L , (12.11)
γ 2g γ 2g
donde hL representa las pérdidas de energı́a. La diferencia de cota entre 1 y 2 se puede expresar
como z1 −z2 = S0 l. Además, como la presión es esencialmente hidroestática en cualquier sección
C. Gherardelli U. de Chile
12.2 Consideraciones energéticas 167
V12 V2
y1 + + S0 l = y 2 + 2 + hL . (12.12)
2g 2g
V22 − V12
y1 − y2 = + (Sf − S0 )l. (12.13)
2g
Para el caso donde no hay pérdidas de energı́a (Sf = 0) y el canal es horizontal (S0 = 0) se
cumple
V22 − V12
y1 − y2 = . (12.14)
2g
La energı́a especı́fica E se define como la energı́a relativa al fondo del canal, es decir,
V2
E=y+ . (12.15)
2g
La energı́a total o altura total (energı́a en unidades de longitud) en un punto del canal será, por
lo tanto, la energı́a especı́fica mas la energı́a potencial del punto dado, es decir,
H = E + z. (12.16)
E1 = E2 + (Sf − S0 ). (12.17)
q2
E=y+ . (12.18)
2gy 2
Para un canal de ancho b constante, q se mantendrá constante a lo largo del canal, independiente
de las posibles variaciones de la profundidad y. Graficando la función E = E(y)1 para valores
constantes de q se obtiene el diagrama de energı́a especı́fica que tiene la forma del diagrama
de la figura 12.5. De esta figura se ve que para un valor dado de q, todas las curvas tienen
una energı́a mı́nima Emı́n . Este punto se denomina punto crı́tico y la profundidad y energı́a
correspondientes se denominan profundidad y energı́a criticas respectivamente. El valor de la
profundidad crı́tica yc se obtiene de
1
Esta es una función cúbica en y, con dos soluciones positivas y una negativa. Esta última carece de inter-
pretación fı́sica por lo que no se muestra.
C. Gherardelli U. de Chile
12.2 Consideraciones energéticas 168
ysub
y=E
yc
q2>q1
ysup q1
Emín
E
Figura 12.5: Diagrama de energı́a especı́fica.
dE q
=1− 3 =0 (12.19)
dy gy
⇒
!1/3
q2
yc = . (12.20)
g
3
Emı́n = yc . (12.21)
2
q √
Vc = = gyc . (12.22)
yc
Esta velocidad corresponde a la velocidad de una onda de gravedad o superficie vista anterior-
mente.
Sobre esta energı́a mı́nima, es decir, para E > Emı́n , existen dos posibles profundidades
(ysub , ysup ) en el canal. Además las curvas son asintóticas a y = E e y = 0 superior e in-
feriormente. Estos lı́mites corresponden a un canal muy profundo con velocidades muy lentas y
a un canal con una velocidad muy alta y una profundidad muy baja. Como q = V y es constante
y como ysub > ysup se obtiene que Vsup > Vsub . Por lo tanto, el punto crı́tico divide el gráfico
en una región superior donde el flujo es subcrı́tico (F r < 1) y una región donde el flujo es
supercrı́tico (F r > 1). Para el punto crı́tico se cumple que F r = 1.
El diagrama de energı́a especı́fica, E − y, es para un caudal por unidad de ancho q constante. En
un canal es posible que q varı́e a lo largo del canal, por ejemplo debido a un cambio de sección
entre dos puntos. En el diagrama de energı́a especı́fica esto se ve reflejado en el cambio de una
curva a otra. A medida que q aumenta o disminuye, la curva E − y se desplaza hacia la derecha
o izquierda respectivamente.
C. Gherardelli U. de Chile
12.3 Variación de la altura de un canal 169
Q2
E=y+ . (12.23)
2gA2
dE Q2 dA
=1− = 0. (12.24)
dy gA3 dy
Q2 B
1− = 0. (12.25)
gA3
V2
H= +y+z. (12.26)
2g
dH dhL V dV dy dz
= = + + . (12.27)
dx dx g dx dx dx
Reordenando ⇒
V dV dy
+ = Sf − S0 . (12.28)
g dx dx
Utilizando el caudal por unidad de profundidad q tal que V = q/y y diferenciando se obtiene
dV q dy V dy
=− 2 · =− · . (12.29)
dx y dx y dx
C. Gherardelli U. de Chile
12.4 Flujo permanente y uniforme 170
V dV V 2 dy
= −
g dx gy dx
|{z}
F r2
dy
= −F r2 . (12.30)
dx
dy (Sf − S0 )
= . (12.31)
dx (1 − F r2 )
k 2/3 1/2
V = R S , (12.32)
n H 0
k 2/3 1/2
Q= ARH S0 , (12.33)
n
C. Gherardelli U. de Chile
12.4 Flujo permanente y uniforme 171
donde k vale 1.0 y 1.49 para el sistema internacional (SI) y el británico respectivamente. n se
denomina coeficiente de Manning y depende del material de la superficie del canal en contacto
con el fluido. Los valores de n para distintos tipos de materiales se pueden ver en la tabla 12.1.
En muchos canales artificiales y naturales la rugosidad de la superficie del canal, y por lo tanto
el coeficiente de Manning, varı́a a lo largo del perı́metro mojado de este. Este es el caso, por
ejemplo, de canales que tienen paredes encementadas y con un fondo de piedra, el caso de rı́os en
épocas de bajo flujo la superficie es completamente de piedras y en épocas de crecidas parte del
rı́o fluye por la ladera del rı́o, compuesto generalmente por piedras, arbustos, pasto, etc. Por lo
tanto, existirá una rugosidad efectiva que debe ser una combinación de las distintas rugosidades
existentes. Una forma de solucionar este tipo de problemas es dividir el canal tantas secciones
como tipos de materiales de pared existan y analizar cada división en forma aislada. Cada una
de las secciones tendrá su propio perı́metro mojado Pi , área Ai , coeficiente de Manning ni . Los
Pi no deben incluir los lı́mites imaginarios entre las distintas secciones generadas al dividir la
superficie original.
12.4.1 Eficiencia
La eficiencia de un canal tiene relación con encontrar un área de paso A mı́nima para transportar
un caudal Q dado, con una pendiente del canal S0 y coeficiente de Manning n dados. Escribiendo
el radio hidráulico como RH = A/P la ecuación 12.33 se puede reescribir como
2/3 1/2
k A k A5/3 S0
1/2
Q= A S0 = . (12.34)
n P n P 2/3
Despejando A ⇒
!3/5
nQ
A= 1/2
P 2/5 , (12.35)
kS0
donde la cantidad entre paréntesis es constante. La ecuación anterior indica que un área de paso
mı́nima esta asociada a un perı́metro mı́nimo y por lo tanto las necesidades de excavación como
C. Gherardelli U. de Chile
12.5 Flujo gradualmente variable 172
de material, para cubrir las superficies del canal, son mı́nimas. Esto influye directamente en los
costos de construcción. Se puede demostrar que la sección mas eficiente es la semicircular. Para
otras geometrı́as, como rectangulares, triangulares, etc., también es posible encontrar diseños
óptimos.
En muchas situaciones el flujo en un canal abierto no tiene una profundidad uniforme a lo largo
del canal. Esto puede ser causado por diferentes condiciones como que la pendiente de la solera
no sea constante, que tanto la forma como la magnitud de la sección de paso varı́e a lo largo
del canal, que exista una obstrucción al flujo en el fondo del canal, etc.. De la ecuación 12.31
se puede ver que cuando la lı́nea de energı́a y la solera del canal tienen pendientes distintas se
obtiene la condición dy/dx 6= 0, es decir, la profundidad del canal variará a lo largo de este.
Fı́sicamente esto significa que existe un desbalance entre las fuerzas viscosas y las gravitacionales
en la dirección del flujo que producen una variación en la cantidad de movimiento del flujo.
Esta variación en la cantidad de movimiento esta asociada a una variación en la velocidad y,
por continuidad, a una variación en la profundidad del canal. Si la variación en la profundidad
es gradual o lenta, es decir, cuando dy/dx 1 se dice que el flujo es gradualmente variable.
Si la profundidad del flujo aumenta o disminuye depende de varios parámetros del flujo, en-
contrándose 12 configuraciones para los perfiles de la superficie libre del fluido. El signo de
dy/dx, es decir, si la profundidad del canal aumenta o disminuye, depende tanto del signo del
numerador como del denominador de la ecuación 12.31. El signo del denominador depende
claramente de si el flujo es subcrı́tico o supercrı́tico.
Para un canal dado (tamaño, forma, coeficiente de Manning, y caudal) existe una pendiente
crı́tica, S0c y una profundidad crı́tica, yc , tal que F r = 1 bajo las condiciones de flujo uni-
forme. Se define, además, la profundidad normal, y0 , como la profundidad que tendrı́a el canal
suponiendo condiciones de flujo uniforme, es decir, si dy/dx = 0. El carácter de un flujo gra-
dualmente variable se clasifica generalmente en términos de la pendiente de real de la solera, S0 ,
en relación a la pendiente necesaria para producir un flujo crı́tico y uniforme S0c , y en términos
de la profundidad y en relación a la profundidad crı́tica, yc , y normal, y0 .
La tabla 12.2 muestra las distintas configuraciones posibles para la superficie libre del fluido
dependiente de la pendiente de la solera y profundidad del canal.
Como el flujo considerado no es uniforme, la inercia del fluido aparece como un mecanismo
C. Gherardelli U. de Chile
12.6 Flujo rápidamente variable 173
mas que gobierna el flujo, además de las fuerzas gravitacionales y viscosas. En otras palabras
un balance de los efectos inerciales, gravitacionales y viscosos agregan un grado de libertad al
flujo que no se encuentra en el flujo uniforme, donde los efectos inerciales no son influyentes.
Como consecuencia de lo anterior, la determinación de si un flujo es subcrı́tico o supercrı́tico
no depende solo de si S0 < S0c o si S0 < S0c , como sucede para un flujo uniforme, sino que
depende además de la profundidad del canal en relación a la profundidad crı́tica y la normal.
Por ejemplo, para el caso de una pendiente suave, es decir, S0 < S0c el flujo puede ser subcrı́tico
o supercrı́tico. Bajo esta misma condición de la pendiente S0 el flujo solo podrı́a ser subcrı́tico
si la profundidad del canal fuera uniforme.
hL Linea de
energia
Volumen de V2
control
V1 F2
Q y2
y1 F1
C. Gherardelli U. de Chile
12.6 Flujo rápidamente variable 174
resalto es pequeña (dy/dx → ∞) y que los efectos de los esfuerzos de corte son despreciables en
esta sección.
Aplicando la ecuación de cantidad de movimiento al volumen de control de la figura 12.6 resulta
donde b es el ancho del canal. Las fuerzas que actúan en las secciones son la resultante de la
distribución de presiones en la sección, es decir
b
F = γy 2 . (12.37)
2
y12 y22 V1 y1
− = (V2 − V1 ) . (12.38)
2 2 g
V12 V2
y1 + = y2 + 2 + hL . (12.40)
2g 2g
y12 y22 V1 y1 V1 y1 V 2 y1
− = − V1 = 1 (y1 − y2 ) (12.41)
2 2 y2 y2 gy2
⇔
2
y2 y2
+ − 2F r12 = 0 (12.42)
y1 y1
y2 1
q
= −1 + 1 + 8F r12 . (12.43)
y1 2
Se ve que la razón y2 /y1 , es decir, la razón entre las profundidades antes y después del resalto
hidráulico, es solo una función del número de Froude del flujo aguas arriba del resalto (F r1 ).
La ecuación 12.40 se puede escribir de la siguiente manera
" 2 #
hL y2 F r12 y1
=1− + 1− . (12.44)
y1 y1 2 y2
2
La solución negativa no tiene sentido fı́sico
C. Gherardelli U. de Chile
12.6 Flujo rápidamente variable 175
La figura 12.7(a) muestra las relaciones 12.43 y 12.44 gráficamente. Considerando que a través
de un resalto existe disipación de energı́a, es decir, hL > 0, la zona del gráfico donde hL < 0
no puede representar ninguna situación real y carece por lo tanto de sentido. Lo anterior indica
que un resalto hidráulico solo puede producirse en un flujo supercrı́tico, es decir, un flujo donde
F r1 > 13 . El flujo después del resalto será subcrı́tico ya que (y2 /y1 ) ≥ 1 para la zona donde
F r1 > 1. La figura 12.7(b) muestra la representación de un resalto hidráulico en un diagrama
de energı́a especı́fica.
4
y2/y1
3
y
y2/y1 2
hL/y1 hL
hL/y1 1
y2
y=E
0
-1 q
0 1 2 3 4 y1
Fr1 E2 E1
E
(a) Razón de profundidades y disipación (b) Representación de un resalto
energética adimensional a través de un re- hidráulico en un diagrama de energı́a
salto como función del número de Froude especı́fica.
aguas arriba del resalto.
El hecho que exista una pérdida de energı́a a través de un resalto es de mucha utilidad en algunos
casos y puede, por lo tanto, ser un fenómeno deseado y originado artificialmente introduciendo
elementos de control de flujo en un canal dado.
3
Cabe mencionar que esta es una condición necesaria pero no suficiente, es decir, para que se produzca un
resalto el flujo debe ser supercrı́tico, pero no necesariamente en todo flujo supercrı́tico se producirá un resalto.
Lo anterior se ve de las ecuaciones que tiene como solución trivial y2 = y1 y V2 = V1
C. Gherardelli U. de Chile
ME33A – Mecánica de Fluidos
Bibliografía