¿POR QUÉ DEBERÍAN DE EXISTIR LAS CORRIDAS DE TOROS?

Las corridas de toros es un espectáculo que impulsa valores que trascienden en el tiempo y
que han sido heredados de padres a hijos de generación en generación. La tauromaquia es
una actividad cultural lícita que genera empleos, bienestar y recursos para miles de familias
de manera directa e indirecta.
Su objetivo no es la muerte en sí, sino la creación artística del enfrentamiento entre el poder
animal ante el valor y la inteligencia humana en la representación auténtica del círculo de la
vida y la muerte. La lidia no pretende torturar a un animal indefenso, sino más bien al
contrario consiste en hacer pelear a un animal naturalmente predispuesto para la lucha (de
ahí el nombre de toro de lidia).
Al ser expresión de la cultura popular, es parte propia de la identidad de nuestro pueblo. Su
existencia permite la conservación de patrimonios culturales de las localidades en donde se
practican, además de que han nutrido algunas expresiones artísticas como la música, la
literatura y la pintura. Intentar imponer una “moralidad ecológica” a esta tradición atenta
contra la libertad que brinda nuestra Constitución.
La tauromaquia promueve la integración de las familias, al suscitar la sana convivencia
entre sus miembros; así mismo, constituyen un elemento de unión social para individuos y
grupos de amigos que gustan de asistir a los eventos. Una corrida de toros sirve para
descargar colectivamente sentimientos negativos y agresivos, eso a su vez es sano.