Está en la página 1de 17
boletin de antropologia ee DE héctor tejera gaona** durkheim y los fundamentos tedricos e histéricos de la antropologia funcionalista* El papel det pensamiento de Emile Durkheim en la construccién de las principales naciones teérico-me- todolégicas de la antropologia funcionalista es de suma importancia, Por tanto, el estudio de su pensa- miento resulta esencial si pretencemos establecer los fundamentos teéricos e histéricos que dan lugar a esta corriente antropoldgica. Asi, hemos considerado preciso comenzar con tres aspectos que engloban, en términos generales, los elementos que dan lugar ala sociologia funcionalista. En primer lugar, tenemos la relacién que Durkheim establece con sus precurso~ res tedricos, es decir, fos antecedentes tedricos del funcionalismo; en segundo lugar, el contexto histé- rico que envuelve y ejerce su influencia en el pensa- miento del socidlogo francés; y en tercer lugar, las principales nociones tedricas del pensamiento durkheimiano. Durkheim y sus precutsores teéricos: Saint- Simon, Comte, Spencer y la polémica con Marx A pesar de la dificultad de enumerar el acervo de influencias recibidas por Durkheim en su prolifico desarrollo tedrico, es posible considerar algunas Ii- neas te6ricas generales que forman parte primordial de su concepcién. En términos generales, el proyecto durkheimiano se inserta en los postulados de la filo- sofia positiva que, elaborada en contra de Tos racio- naalistas franceses y del pensamiento hegeliano, surge en Francia bajo la figura de Augusto Comte y, en + texto que aqui se presenta forms parte de un ensayo mis amplio, sobre la antropologia funcianalista, bajo fa coorinacinn de Br. Héctor Diaz-Polanca ** Investigadordel Cenzo delnvestigacin para lainteprac iin Socal (Cils). Mexico, Alemania, en los enunciadas elaborados por Schel- ling.’ Es evidente que Saint-Simon, figura determi- rnante en la constitucién del pensamiento positivo, es un autor decisivo en la sociofogfa durkheimiana, pero al ser igualmente la base del pensamiento socialista, su papel parece haber sido relegado.” Al respecto, es preciso mencionar los esfuerzos realizados por Durkheim por demostrar que fos fundamentos del pensamiento positive se encuentran en la obra de Saint-Simon. Algunos historiadores del pencamiento sociolégico tienden a relegar al conde francés y reco- nocer dnicamente a Comte como el “padre del posi- tivismo” y atin, niegan su influencia en el propio pensamiento durkheimiano porque el saintsimonis- ‘mo, al contener una doble vertiente, “contamina” fa pureza del pensamiento positivista del cual se ali- menta la sociologia burguesa. El positivismo enuncia que la sociedad es producto de leyes naturales, mientras que la filosofia negativa la considera como resultado de la obra histérica def hombre. Aun la vertiente idealist, a Ja manera de " ara lox ponsadores dela revolucidn Francesa la raztin, dba ser agua para gobernat ia realidad, mediante la reeoneliaidn entre ambas; lo cual, solamente peda lograrse mediante la tansforme: ion de la segunda. Hegel por su pare, abre en Alemania [a posibiidad de que filesoficamente seertiqueel orden etablecido afilosoffe negativa ce Hegel reconstiuye 3 posibilidadde ealizae Lrazén. En electa, como afiima Marcuse: "La ralizacion no €3 lun hecha sino una tarea. La forma en que los objetes aparece Iimediatamente 20 es aun ss verdadera forma, Lo que esta simple- mente dado es, en primera insancia, nepativo, distino de sus ‘potencialidaes reales, Se welveséloen el proceso de superacién de esta negotividad, de mode que el nacimiento de la verdad Fequiere la muerte deun estado detenranado del se, Eloptimisma, fle Hegel esté hasado en la concepcién destructive de lo dado" Herien Marcuse, Razdn y Revolucion, €4. Alanaa, Madtid 1972, 37, Salrayads estes, Alvan Govidnes, La sociologia actual: renavacién y ertica, Ed ‘Alianza, Machi, 1979. p. 347. 70 BOLETINDEANTROPOLOGIA AMERICANA ® 10, Hegel, la formula como un desplegamiento del espi- ritu. A pattir de las diferencias anteriores, la principal ‘oposicién entre positivismo y teorfa dialéctica quedé establecida ya que el primero “contradecia dicecta- mente el punto de vista de la teoria social dialéctica de que la sociedad es irracional, precisamente por estar regida por leyes naturales.’ Estas dos vertientes del pensamiiento de fo social constituyen, al aumentar las contradicciones sociales que acompanan a la consolidacién del capitalismo, los ejes tedricos que gufan la polarizacion del pensamiento social y los proyectos sociales alternativos de la burguesia y el proletariado. La teoria contradictoria de Saint-Simon, en la que encontramos dos vertientes de! pensamiento social posterior, el positivismo y el socialismo ut6pico, son el resultado de la época de transicién histérica en que se desarrolta su pensamiento." En efecto, el pen- samiento saintsimoniano, a la vez que se opone a las, fuerzas del ancien régime, pretende establecer un proyecto de cooperacién entre las nuevas fuerzas sociales que se originan de manera concomitante al S Hetben Marcuse, Razin y Rewoluciin, Op. it, p. 334 Un analsis mas detenido de la relacion ene el pensamniento sainsimaniano y los acontecimientos histérivos en que se inscribe ‘puede encontrase en: Hector Diaz Polanco, fas teoras anwapo oqieas. Fl Evoluciannsm, Editorial Linea, México, 1983, p11 vy sigs. DICHEMARE 1904 establecimiento del régimen industrial capitalista. La ‘economia, constituye la base para establecerel orden positivo, mediante una nueva moralidad resultante de la jerarquizacién de funciones, La jerarquizacién permitird el consenso necesario para el funciona- miento arménico de la sociedad. EI orden positive es, entonces, el orden industrial, cuya organizacién solamente sera posible mediante la jerarquizacién. Este aspecto lo encontraremos, con ciertas modifica- ciones, en el proyecto de las corporaciones ideaco por Durkheim. En contraposicién al pensamiento saintsimoniano, Auguste Comte, secretarto del renegado conde fran- cés, fundard en et espiritu el orden positivo, transfor mando la base econémica del orden social en una base moral. De esta forma, el proyecto de reorganiza- ci6n social que encontraremos en algunos de los postulados elaborados por Durkheim, expresa las tensiones en las posiciones entre ambos pensadores. Para Comte, las "anomias sociales”, una de las preo- Cupaciones fundamentales en la sociologia durkhei- miana, no hacen necesarios cambios en la estructura social, sino Gnicamente en la moral. Comte considera al desorden social como resultado de la anarquia espiritual. Asi, mientras que el conde francés propone una reorganizaci6n social, su secretaria, al despren- derse de la economia politica y considerar a la socie- dad como producto de leyes naturales, propane so- metimiento al status quo, descartando la posibilidad de accién de los hombres sobre las condiciones de su propia sociedad, Si Saint-Simon expresa en su pensamiento algunos elementos de contradiccion, de oposicién entre razén y realidad, Comte, por su patie, propone el acatamiento del hombre ala *natu- talidad” de to social La influencia de Saint-Simon y Comte en la forma- cién del pensamiento de Emile Durkheim parece responder, tanto a los acontecimientos histéricos, como al ambiente intelectual y social que dichos acontecimientos generaron, Talcott-Parsons y Raymond Aron consideran pre- dominante la influencia de Comte en Durkheim, haciendo a un lado las proposiciones de corte saint- simoniano que encontramos en sus principales obras, fundamentalmente en De Ja Divisién del Trabajo Social y en E! suicidio, Quizd las mismas causas que provocan exigir a Comte como el fundador de la sociologia, puedan trasladarse al énfasis realizado por los autores mencionadas a considerar ab positi- vista francés como el pensador mas importante, sino ‘es que el Unico, en el desenvolvimiento tedrico de Durkheim. Es probable que la posterior hegemonia del pensamiento durkheimiano en la sociologia y la antropologia burguesas de Francia, Inglaterra y Esta dos Unidos, haya hecho necesario desechar la ver- tiente socialista que Durkheim retomo de Saint- Simon. Por lo demas, creemas necesario aclarar que, 5 Vase ina, panigraln dos de éste mismo capitulo, TEIERAGAONA de ninguna manera, consideramos a Durkheim un socialista ut6pico. Simplemente creemos que no es posible analizar unilateralrmente su pensamiento con- siderando exclusivamente, la vertiente comtiana. Para Alvin Gouldner, Emile Durkheim “fue un comtiano desasosegado”.* En efecto, por una parte, fencontramos en su pensamiento una gran similitud con algunas de las principales preocupaciones del secretario de Saint-Simon. Asi, por ejemplo, el pro- blema del consenso social es central en el pensa- miento durkheimiano. Para Raymond Aron este pro- blemc es aspecto fundamental de la fidelidad que guarda Durkheim a los postulados de Comte,” sin ‘embargo, por otra, hallamos un rechazo implicito 0 explicito del socidlogo a muchos de dichos postula- dos. En términos generales, ademas del énfasis en el mantenimiento del orden sotial, otras de las preocu- paciones que encontramos en Ia obra de Durkheim retomadas del pensamiento comtiano son las siguien- tes: en primer lugar, fa conviccién de que la sociedad presenta una tendencia a! orden y, por lo tanto, los conilictos sociales solamente hacen necesarios cier- tos “reajustes” en el sistema social pero, de ninguna manera, una transformacién radical de Ia estructura social existente; en segundo lugar, que al reajuste social es posible mediante la creacién de normas morales acordes a las nuevas circunstancias que han sido provocadas por el desarrollo de la division det trabajo. En tercer lugar, tanto Durkheim como Comte asignan a la sociedad un papel predominante; en efecto, si Comte pugna por una “sabia resignacion” de los individues al status quo, por su parte, Durk- heim, a través de su concepcién sobre los hechos sociales," considera inevitable la subordinaci6n de los individuos a la sociedad Para Raymond Aron las ideas *socialistas” de Durkheim son similares a las de Comte.’ Sin embargo, este autor no parece tomar en consideracién las fuen- tes de los que ambos construyen su sociologia; Saint- Simon. A pesar de no coincidir con Alvin Gouldner cuando afirma que la sociologia durkheimiana pre- tende tender un puente entre Marx y Comte," a partir © Alvin Gouliner, t2sociologia actual: rnovacidn y rics, op. ip. 386 7 Raymond Aron Las elas del pensamientosocoligco, Tome Ef, Siglo XX, Buenos Aires, 1976. p. 85. 4 Véase na, parigalo tes de ete capitulo, * Raymond Aron, Las etapas del pensamentosocildpco, op. ct, p88 wTaWwin Couldne, ta socioogia actual: enovacén y crea. {it P. 300. ste apinicn e compara por Iving Zein en 80 bra idelogie y Teoria Sociologia, ES. Amott, Buenos ‘ites, 1979p. 41. Sim embargo, la pasicién de Josep, Liobera on respec Ia elacion stables ere el mares y Is teoria socilogiea durkneimiana, conkiderando gue Durkheim wetende esablecer la hegemonia de su pensamingo en dew ‘mento del marismo, parece mas adecuod si tomamsosencuent poruna pare, ls citeasefectuada por Duke defo que ‘nlenderta como el matetiaismo hstrio y por ota, de no omiderr 3 Mare mis que como un simple “economists” Al ‘especto ver ina, es exe mismo pardgrato. DURKHEIM V LOS FUNDAMENTOS TEORICOSE HISTORICOS... 71 del anélisis de la influencia saintsimoniana en la teoria sociolégica durkheimiana efectuado por Gouldner, es posible establecer las diferencias sustan- iales que encontramos entre Comte y. Durkheim. ‘Adems de que, como hemos mencionado ante- riormente, Durkheim considera a Saint-Simon como el fundador del positivismo, la diferencia mas impor- tante entre Durkheim y Comte es la siguiente: para Comte la divisién del trabajo desintegra la cohesién social, en contraposicién Durkheim considera que de dicha divisién surge una nueva solidaridad, la orgénica, que suple a aquella generada por la simili- tud de valores y normas morales; es decir, la que denomind como solidaridad mecdnica. En efecto, coma lo demastré en uno de sus principales estudios, EI Svicidio, una excesiva solidaridad mecénica podia ser la causa de un aumento en las corrientes suicidé- genas. De esta manera, a diferencia de Comte, la organizacién moral no necesariamente debe de opri- mir a los individuos. Si Comte pugna por una organi- zacién férrea de la sociedad, lo que le lleva a una concepcién autoritaria del Estado, Durkheim aboga por una organizacién que medie entre el individuo y el Estado. Por lo anterior teivindicard a las organi- zaciones de tipo gremial, denominadas corporacio- nes 0 grupos profesionales. En realidad, Durkheim pretende establecer un punto medio entre fa libertad individual y el sometimiento a la saciedad al conside- rar normal cierto grado de debilidad en las normas morales. Comte, por el contrariv, desea el someti- miento sin mediaciones del individuo al orden social En Giltima instancia, la diferencia fundamental entre ambos pensadores radica en que, mientras para Comte la divisién del trabajo anuncia, parafraseando a Saint-Simon, una etapa critica, para Durkheim la diferenciacion en las funciones sociales produce un nuevo tipo de unidn social, una nueva solidaridad ‘que paulatinamente se extenderé por toda la sociedad dando término a [os conflictos sociales. Paradéjicamente, las diferencias entre Comte y Durkheim surgen de Saint-Simon. Sin embargo, esto es comprensible si tomamos en cuenta que Comte retom6, por no decir que plagié, algunos enunciados de Saint-Simon, relegando otros. Tanto Saint-Simon ‘como Durkheim consideran a la divisién del trabajo como fundamento de una nueva moralidad que eegu- lard las relaciones sociales. Si Saint-Simon sustent6 la nueva moral en el orden industrial, Durkheim la fundamenté en la solidaridad orgénica que, como veremas, es resultado de la division del trabajo. Por fo demas, ambos conciben al contlicto social como consecuencia de un desajuste entre la moral social y las nuevas circunstancias sociales, producto del ‘nuevo orden industrial. El elemento comin a ambos ¥-que permitiria el nuevo orden social que debe im- plantarse en la sociedad se sustenta en la jerarquiza- cién de los individues. En los postulados saintsimo- niianos la jerarqufa se estableceré de manera “natu- ral", através de las diferentes actividades que realicen os hombres con el advenimiento del sisterna indus- 72 BOLETIN DE ANTROPOLOGIA AMERICANA ® 10, trial, Durkheim, por su parte, considera que las apti- tudes “naturales” de cada individuo deben ser el Criterio central para la asignacién de su puesto en la sociedad. De ahi que proponga la erradicacion de la herencia. La herencéa asigna posiciones a los indivi- duos que éstos no han adquirido en base a dichas “aptitudes”. Por dltimo, Durkheim, comparte con Saint-Simon una visién similar def progreso social. Para ambos, las leyes del progreso son independientes de los individuos y éstos, en altima instancia, deben acatar- las y someterse a ellas. Sin embargo para Saint-Simon dicho acatamiento proviene del establecimiento del positivismo, mientras que Durkheim lo funda en los hechos sociales que se imponen y someten al indivi- duo al orden social.” Es precisamente el instituir a la sociologia como la ciencia que estudia los hechas sociales, lo que separa a Durkheim de fos pensadores anteriores. En efecto, Durkheim establece que el andlisis de lo social debe partir de éste mismo Ambito, mientras que sus antecesores, fundamentalmente Comte, lo remitia al estudio de las “etapas de pensamiento”. Es poor ésta raz6n que la explicacién de los mecanismos de fa evolucion social en Durkheim tiene una amplia similitud con la elaborada por Herbert Spencer quien, a finales det Siglo XIX, habia adquirido una amplia reputacion como uno de los pensadores més signifi- cativos de la época. La especializacién, producto de la agregacidn de segmentos sociales, que permite una mayor cooperaci6n entre tas instituciones sociales es un elemento comin al sistema tedrico de Durkheim y Spencer y es, precisamente, el énfasis del primero enel aspecto cooperativo lo que lo permite minimizar el conflicto social y la anomia.” Igualmente, la causa del desarrollo social es similar en la concepcién de Jos dos autores, ya que ambos la explican a partir de la agregacian de segmentos sociales. Sin embargo, Durkheim considera que éste hecho, por sf sélo, no es suficiente, Asf, introduce los conceptos de volu- ” Come afirma Rayerond Aran, “si SaintSimon y sus seguidores realizan una critica de fa herencia, Durkheim parece encontrar fn esta misma impugnacién una confimacion de [a propiedad privada, justficando ésta Unicanenie cuando su detentador Ia ha adquirido, Coa la herencia, firma Durkheim, et propietaio hha obtenido un bien matenal cuya posesibn le es inmerecida’. Raymand Avon, Las etapas del pensemiento sociokigeo, 0p. cit. ps. 89-90, Durkheim en efecto, no llega 2 realizar en ninain ‘momenta de su 062, Una cthica de la propiedad privada lo que, pporlodems,habria acercado su pensamiento social a pesiciones| de impupracién mis radical hacia la sociedad de $a Wempo, Como menciona Irving Zeitlin, i Durkheim hubiera convert dlicha ciica en un elernento cenvtal de su pensamiento, se habyia ‘acercado a las posciones socialistas de su epoca, Sin embargo, ‘carmo veremos mis adelante, precisamente una dls fnafidades ‘dela Yeoria durkheimiana fe ol de establecer un proyecto alter nativo a fas corientes de pensamiento soctalsta mis radicals, dentro de as cuales, el marismo ocupsba un lugar central. ving Zeitlin, Kdeotogia y Teor Sociologica, op. cits B. 271 % ‘Sobre los hecho: sociales, ver ina, pardgralo tercero de este capituo. ving Zeitlin, op. cit, 9. 276. OO ————— EE DICIEMBRE 1364 men y densidad social; el primero, relerido al incre- mento demografico y el segundo, al aumento de la interaccién social." Por altima, la conceptuatizacion de fa sociedad primitiva en ambos autores es muy similar. La caracterizan como una estructura com puesta por segmentos sociales. Por lo demas, Durkheim se opone al utilitarismo spenceriano que intenta establecer el orden social en estos términos. En todo caso, dicho orden parte de la misma sociedad. Ademés, rechaza la afirmacién de Spencer de que la felicidad humana ser el resul- tado del aumento de los placeres individuales. Para el sociologo francés, la felicidad humana podré obte- nerse solamente si se limitan los apetitos individuales mediante normas socialmente aceptadas."* Por cltimo, quisieramos exponer aqui algunos elementos de la posicién que asumié la sociologta de Durkheim ante Mane y el marxismo que determi- nan, como lo ha demostrado Llobera, el posterior desarrollo de la antropologia y la sociologia funciona- lista. En efecto, la oposicién que se establecié entre la sociologia durkheimiana y el marxismo tuvo como consecuencia, el rechazo del segundo como teoria cientifica del andlisis social al considerdrsele, exclu- sivamente, como una teorfa politica. Por lo anterior, se forma ua ambito académico en el cual el marxismo no tiene cabida. Ademés, |a antropologia econémica se vi6 frenada por la “falta de una tradicién en eco- nomia politica’; por eb dominio académico de los comtianos y kantianos y, por dltimo, 2 causa de la consolidacién de una visién vulgar del marxismo."* Existe Concenso entre varios autores en considerar que la teor’a sociolégica del conocimiento de Durk- heim es bastante similar a la expuesta por Marx y Engels en La Ideologia Alemana.” En efecto, Gouléner afirma que el antedicho “puente” entre Comte y Mark lo encontramos en la obra de Durkheim, Las formas elementales de fa vida religiosa. Esta vincvlacion puede sustentarse en la afirmaciGn det socislogo de que “el ser determina la conciencia’, aunque al mismo tiempo considera que Durkheim dié un con- "Emile Durkheio, De la Divsin del Trabajo Social, Ed. Shapire, Buenos Aires, 1976. 6.13. John Rex, “Emile Durkheim’ en Timothy Raison, Cos padhes undadoves dela Cencta Social. E4. Anagsama, Barcelona, 1922, 1. 133. Raymand Aron considera que lo anterior marca la ans fosmacién de Durkheim en un moras, ya que, hasa la nse ‘propesicin de la reergaeizacign social durkheimiana mediante fas cerporaciones, mas que un proyecto de transformacion eco- fndmica, es Un instumento de regulacion de las necesidades thumanas que, aceptado socialmente, permits que los horibres se Siestan satsfechos en su Smbito social. Raymond Aron, Las ‘tapas del pansamienta sociolbylc9, op. et. p. 92:93. Sin eribar §30, como veremos mis adelante. lb propia actividad politica de Durkheim, en compania desu gran amigo Jean Jautés contracice, Dor lo menos en parte, [a insistencia de Aton de considerar 3 Durkheim exclusivamente como un comano. “Joseph R.Llobera, Hacia una Historia de fas Cenc Socials, op. ci, p. 1AT-142. Ki Mars¥ . Engel “Feuerbach, Oposicion ene las concepcio- nes materilisias@ idealistas” en 1a Ideologla Alemana: Orros ‘escogedos toma | Ed. Progreso, Mosel, 1973, p. 11-81 tenido mas “rico” a éta afirmacion."* Por su parte, Llobera nos dice que la parte “fértil” dei marxismo retomiada por Durkheim se expresa en la afirmacién del sociGlogo de que: "La vida social debe explicarse no en térmings de la concepcién que de ella tengan sus participantes, sino por referencia a las causas subyacentes que escapa a la Conciencia, también creemos que dichas causas deben buscarse principal- mente en la forma como se agrupan los individuos asociados”.”” Zeitlin aboga que debe considerarse la teoria sociolégica del conocimiento en Durkheim bastante similar a la de Marx.»® No obstante, a pesar de la similitud entre Durkheim y Marx con respecto a la explicacién de los fendmenos ideolégicos, es claro que dicha explicacién se inscribe en dos teorias, con grandes diferencias tanto tedricas como politicas. En todo caso, las convergencias mas generales entre ambos, pueden ser resultado de fuentes comunes de las que retoman algunos elementos tedricos. En realidad consideramos que las diferencias te6- ricas entre los dos pensadores, son mucho mas jro- Alvin Gouldnet, La saciologia actual; renowaci6n ¥ ceive, op. city p. 360 "A. Guiddens ted), Durkin, Selec Witings, Cambridge Uni versity Press. pg. 159. en Joseph R. Uobera, Macia una Historia de lus Clencas Sociales, op. ct, p. 197 * living Zeitlin, deologia y Teoria Saciolégica, ap. cit, @. 293, DURKHEIM LOS FUNDAMENTOS TEORICOS EHISTORICOS.... 73 fundas que cualquier similitud que se pretenda esta blecer entre ambos. Durkheim se opone a cualquier transformacién social, sobre todo, si en ésta interviene la lucha de Clases. Ademds, la lucha de clases expresa para el socidloge una anomia social producto de “desajus- tes” en el sistema social; por contrapartida, Marx considera a dichos desajustes (crisis socio-econdmi- cas) como inherentes al modo de produccién capita- lista, solamente superables mediante el estableci- miento de otro modo de producci6n. Establecimiento que solamente era posible mediante la lucha de cla- ses. Ademis, contradiciendo sus postutados funda- mentados, el sociclogo francés consideré normal*" lo que e7a general a una sociedad” minimizando, de esta forma, los contlictos sociales de su época al considerarlos como una etapa de ajuste social ya que existia, nosdice el pensador, una ausencia de normas sociales ante las nuevas condiciones creadas por el establecimiento de la division del trabajo. Las diferencias tedricas que encontramos entre el sistema durkheimiano y el marxista provienen, en Sobre las condiciones sociopoliticas de ta éeace, véase inka, pardgrafo tes de este capitulo. ° Irving Zeitlin, ideology y Teorta Sociolégiea, op. cit, pp. 283 y wos, 74 BOLETIN DE ANTROPOLOGIA AMERICANA © 18 primer lugar, de los proyectos sociales a los que ambos se inscriben. Si uno, el marxista, considera posible la modificacién social por medio de la praxis, el durkheimiano se encuentra dentro de la filosofia de corte positivista. En efecto, Durkheim subsume los individuos al status quo al constituir la teoria de los hechos sociales. Los hechos sociales no pueden ser modificados por la accién social. El rechazo de Durk- heim a cualquier teor‘a del cambio social, se enmarca en el Enfasis del socidlogo por la solidaridad social, que contiene implicitamente, el problema comtiano del “orden’.” En segundo lugar, del intento de Durk- heim por establecer su hegemonia teérica en el pen- samiento social de su época. Contraponiendo al mar- xismo como sustento de los movimientos sociales que acontecen en Francia, tacha a éste de economicista 0, de plano, como una visién voluntarista sin ningin fundamento cientifico.™ Para Durkheim el marxismo, que é! llama materialismo histérico, sustentaba la “teorla del reflejo" de los sistemas ideoldgicos que, como sabemos, es resultado de equivocos en la inter- pretacidn de 10s postulados marxistas sobre la rela- cin entre conciencia y vida material. Por lo que se refiere al economicismo de! marxismo, es cierto, como afirma Llobera, que Durkheim y sus seguidores confundieron lo,econémico al hacerlo andlogo a las \écnicas de produccién, en vez de utilizarlo en su connotacién marxista; es decir, como fuerzas produc- tivas y relaciones de produccién. Dicha analogia leva a Durkheim a afirmaciones como que la religion ** Como saberos, fas bases ideotdgicas del problema del orden Social, encuentran su base en las reaccionesfoscficas que surgen ‘con posterioidad ala Revolucin Francesa, que plantean desde €l retorno al estado feudal como {ue el caso de De Bonaid ¥ Maise—-como Ia flosofia hegeliana sobre la Razén y el Fstado, Este comente romintico-conservadora alimenta el pensamiento de Saint-Simon y Come, » 5 evidente que no puede sustentarse eb descosocimiento de Durkheim de la abra'de Marx: sabre tod. por si amistad con Jaurés que el propio Marcel Mauss recalea en la introduccién 3 Ja obra de Ourkheim, El Sociatisma, Marcel Mauss, “Inreduc: ‘ga Emile Durkheim, €! Socialismo, Ed, Shapite, Buenos Aires, 1972. p37. fn todacaso, la ullizacin de textos y declaraciones politicas vulgarizadoras del marxismo, muy probablemente se haya inscrto en el intento de Durkheim por descalificar lacie tified del marxsmo. Cle. Joseph R.Llobera, Haciauna Historia de as Ciencias Sociales, op. cit, p. 123. Un claro ejemplo de lo que Durkheim consideraba como “materialismo histérico™ ‘puede encontrarse en su obra Las formas elementals de fa vida ‘aljgiosa cuando, al hablar dela géness del hecho social eligioso afrma: “Hay que euidarse, pues, de ver en esta teria un simple rejuveneeimiento del materialismo hisérico; esto seria equivo- arse singulaemente sobre avesto pensamiento. Al mostrar que 1a religion es una cosa esencielmente social, de ningin modo _pretendemos decir que ella se mite 3 traduct, en ato lenguaye ‘as formas materiales de Ia sociedad y sus necesiades viales inmediatas, Sin duda considerames evidente el hecho de que Ia vida social depende ge su sustato y leva su marca, del misma ‘moda que Ia va mental del individuo depende del enctfalo y hasta del organismo entoro. Pero la concieneia colectiva es aig ‘mas que un simple epifentmeno de su base morlldgica, del mismo modo que la conciencia individual es otra cosa que la simple florescencia de sistoma nervioso”. Emile Durkheim, Las ‘ormas elememiales de la vida religisa, Ed. Shapire, Barcelona, 1967. p. 435. Subrayados nuestros. DICIEMBRE 1904 seria para el materialismo historico un reflejo de tas técnicas de produccién. Francia y los acontecimientos socioeconémicos del altimo cuarto del Siglo XIX Durkheim elabora su teoria social cuando la lucha de clases en Francia muestra cada vez més tangible- mente las contradicciones propias al sistema de pro- duccién capitalista. El movimiento de la Comuna de Paris en 1871, se conjunta con el freno al rapido desarrollo del capitalismo a partir de 1873, afio que marca et inicio de la llamada "Gran Depresién”. La confianza y optimismo que caracterizan al. primer cuarto de fa segunda mitad del Siglo XIX se esfuma ante la crisis y la recesién consiguiente que anuncia, ademés, la entrada del capitalismo a su fase monopé- lica e imperialista. Estos acontecimientos matcan el derrumbamiento de la ideologia del progreso y el retorno a la insisten- cia en la necesidad del orden social del cual, Durk- heim serd uno de sus principales te6ricos. EI panorama sociopolitico en que se inscribe la sociologfa durkheimiana es sumamente complejo. La inestabilidad politica de Francia, se conjunta a la reorganizaciOn de las relaciones capitalistas. El tercer cuarto del Siglo XIX presenta un proceso de expansion generalizado" dentro de! cual, el ferrocarril juega un papel fundamental. Sin embargo el dltimo cuarto del Siglo se distingue por una crisis de superproduccién y subconsumo relativos; es decir, una crisis propia- mente capitalista en contraste a las anteriores como la de 1947 que presentaba, todavia, un cardcter marcadamente agricola, ‘A partir de la segunda mitad de! Siglo XIX, asi mos a la consolidacién de la clase obrera, sobre toda, en Inglaterra y Francia. Aparentemente, el proletariado participa del desarrollo econémico que se gesta en ée perlodo. Sin embargo, esta participacién se sus- tenta en los salarios a destajo y los incentivos produc- tivos, los que no afectan las ganancias de la crecien- temente fortalecida burguesia industrial. Por lo de- més, las propias condiciones de vida de la clase obrera hacen dudar de una efectiva mejoria en su modo de vida, como fo demuestran elocuentemente descripciones como las de Engels y Marx, En efecto, las jornadas de 15 0 16 horas son comunes; la explo- tacién de las mujeres y los nifios un hecho cotidiano y la seguridad laboral minima. Esta situaciGn general al coniinente europeo, provoca un aumento en fas huelgas que, en Francia, es significativo a partir de 1864, momento en que se derogan las leyes en contra de la asociacién que databan de la Revolucién fran- cesa y que, posteriormente, habian sido apoyadas por Napolesn. * Guy Paimade, La época de la burguesi, Siglo XXI eds. Mésico, 1981. p. 56, * Guy Palmade, 12 época de la burguesta, op. clits m. 143, TERA GAONA ‘Los trabajadores de las industrias minero-metalar- gicas encabezan los movimientos huelguisticos que tendrdn su auge en 1865-66 y 1869-70. Este periodo, que marca el fin del gobierno de Napole6n Ill, mues- ta el creciente descontento de la clase obrera. Sin embargo, e! proletariado no presenta una organiza- cién politica madura, ya que con rasgos utépicos en sus programas de accion es, por tanto, ambivalente en cuanto su enirentamiento con la burguesia.*” No obstante, acontecen los sucesos de la Comuna; que marcan significativamente el devenir del panorama politico de Francia, La fuerte represién desatada en contra de este movimiento (aproximadamente 200,000 victimas y 7,500 deportados) destruyen las posibilidades de organizacién del proletariado en los Proximos anos. En efecto, una década después, la desestructuracién del movimiento obrero es patente si observamos que en Francia encontramos, por lo ‘menos, seis tendencias partdistas. Al ado de fos anarquistas y blanquistas cuya lucha politica se sus- tenta en los principios de Babeuf, hallamos al Partido Obrero Francés, con Jules Guesde y Paul Lafargue a ta cabeza; los posibilistas de Brousse, el Partido Obrero de Allemande y los Sindicalistas, completan Ja amplia gama de movimientos obreres que encon- tramos en la Francia de los 80's Los efectos de 1a Comuna de Paris y el inicio de {a crisis capitalista se conjuntan con la gran debilidad politica del gobierno de la Tercera Republica, para empobrecer la atméstera social de Francia durante el Ultimo cuarto del Siglo XIX. En realidad, ante la derrota del movimiento socialista, los peores enemi gos de la Republica aparecen, paradéjicamente, en la propia burguesia con tendencias bonapartistas y crleanistas que apoyada por la oficialidad militar pretende relornar a la monarquia. La gran debilidad de! gobiemo republican se refleja en la crisis politica provocada por Boulanger, quien fue minisiro de Guerra hasta 1869 y en el llamado “caso Dreyfus’, A partir de las graves pérdidas que sufren un sinnimero de pequefios ahorradores por la quiebra della "Societé du Canal de Panama’ y de otros hechos de corrupcién, como el det yerno del presidente Grevy, Boulanger adquiere popularidad a causa de su supuesta lucha en contra de la corrupci6n y de su nacionalismo exacerbado. Adems, el ministro es fuertemente apoyado por la prensa derechista y ob- tiene financiamiento de grupos con intereses monar- quicos, Ante el peligro de que Boulanger presente su candidatura simultaneamente en todos los distritos electorales, fos republicanos realizan reformas en el sistema de eleccién a cargos publicos. igualmente se pretende actuar legalmente en contra del militar y sus seguidores. Ante esta situacin, Boulanger huye a Bélgica donde se suicida en 1891. Asi, el movi- miento boulangista se resquebraja por completo. Sin ® Guy Palade, op. ci. p. 203, DURKHEIM Y LOS FUNDAMENTOS TEORICOS E HISTORICOS... 75 ‘embargo, un ano después, ta crisis politica reaparece al darse a la luz pablica las circunstancias que habtan provocado la quiebra de la Societé du Canal de Panam&, pues muchas personalidades se encontraban envueltas en fraudes al interior de la misma Estas conmociones en la opinién publica, que repercuten en las elecciones de 1893, van acompana- das de un aumento del antisemitismo, a partir de que la prensa imputa a los judios el hacer negocios a costa de Francia, y de un creciente descontento de la clase obrera, que se refleja en el mayor nimero de diputados socialistas elegidos. EI descontento ge- neralizado se concentra en las circunstancias que rodean al juicio del oficial Dreyfus. En 1894, se acusa a Dreyfus de haber proporcio- nado informacion militar a Alemania. La derecha y el ejército encuentran en esta acusacién, un ejemplo tepresentativo de la accién de los judios en contra de Francia. El ejército proporciona informes supues- tamente confidenciales que, al tiempo se descubren falsos y, con ellos, se comprueba la culpabilidad de Dreyfus. Los simpatizantes del oficial seguros de su inocencia, encuentran en la izquierda apoyo en con- tra de las acusaciones de un ejército derechista. A pesar de que en 1896 se demuestra la inacencia de Dreyfus, no sera sino hasta 1898, cuando Emile Zola escribe una carta abierta al presidente de la Repabli- ca, que se reabree! debate sobre el juicio. La revisién del juicio, situa al ejército francés en una posicién sumamente incomoda ya que reabrir el juicio imptica poner en duda la rectitud det ejército, impugnacién que las altas esferas militares tasladan al naciona- lismo francés. Atacar al ejército es hacerlo a la patria y Zola es condenado por ofensas al ejército. En este periodo, se producen grandes manifestaciones en favor 0 en contra de la reapertura del juicio. Las organizaciones nacionalistas y derechistas como es el caso de la Ligue des Patriotes llevan a cabo una serie de manifestaciones, que contraponen a las rea~ lizadas por los trabajadores franceses, intentando detener la reapertura del juicio. Dicha reapertura es inevitable ante las pruebas contundentes de la inocen- cia de Dreyfus, y la evidencia de que muchas de éstas habian sido falsificadas para condenarlo. Sdlamente hasta 1899, Dreyfus es indultado. A grandes rasgos, este es el clima politico y eco- némico que encontramos en Francia en el periodo que abarca desde 1870 hasta 1900, Por lo general se refiere al desarrollo del capitalismo en general, los paises europeos pasan de la politica del laissez faire al inicio del proteccionismo arancelario, de la libre competencia industrial a la constitucién de los mono- polios y, por iltimo, al comienzo a partir de 1885- de la carrera colonialista Son estas circunstancias sociopoliticas las que acomparian la construccién de la sociologia durkhei- miana. Las profundas transformaciones y conflictos sociales que se expresan en todos los campos de la sociedad europea, son aspectos que directa o indirec- tamente aparecen como preocupaciones importantes 76 BOLETIN DE ANTROPOLOGIA AMERICANA ® en el prayecto sociolégico de Durkheim. €l pensador francés fue ms sensible a su contexto social, que aquellos que se encontraban imbuidos, todavia, en la ideologfa del progreso. Los problemas de la normalidad y la patologia social que ocupan un lugar central en el pensamiento sociol6gico de Durkheim, se conjugan con saintsimo- rnismo de corte reformista. De esta forma, es posible comprender las coincidencias que, durante su vida, Durkheim mantuvo con Jaurés, a quien el socidlogo. francés habia conocido en la Escuela Normal Superior Y a quien une una estrecha amistad en el transcurso de los afos. Jaurés preconizaba el democratismo reformista y, por tanto, el interés de Durkheim porque las modificaciones sociales beneficiaran !a sociedad burguesa en su conjunto, hacia muy similares las posiciones politica de Durkheim enfatiza la ausencia de instituciones que medien las relaciones tanto entre fos individuos y el Estado, como entre los obreros y los patrones. La anomia social que se manifiesta en los conflictos de la sociedad francesa hace necesaria -afirma Durk+ heim~ la creacién de un nuevo orden moral, a partir de la reorganizacién social. Sin embargo, dicha reor- ganizacién hace regresar a Durkheim a las posiciones de_pensadores tradicionales como es el caso de De Bonald y De Maistre, para quienes los valores, tas tradiciones y las instituciones eran fundamentales para el orden social. El proyecto moral de Durkheim es en un primer momento, un intento de estrechar los lazos de solida- ridad social partiendo de la reorganizacién de las funciones econémicas de los individuos. En un se- gundo momento, como veremos proponeal igual que Comte, un fortalecimiento de las normas morales. Tanto su obra De /a Divisi6n del Trabajo Social como EI Suicidio encontramos la insistencia en que la orga- nizacién econdmica de la sociedad de su tiempo es causa de conflictos morales en la misma. Si la moral “es todo lo quees fuente de solidaridad, lo que fuerza al individuo a contat con su projimo, a regular sus movimientos en base a otra cosa que los impulsos de su egoismo, y la moralidad es tanto mas sélida cuanto mas numerosos y fuertes son esos lazos™ la forma anormal de la divisi6n del trabajo se refiere, precisa- mente, a la crisis industrial y comercial, las quiebras de las empresas y el aumento de las huelgas. Al igual ue Saint-Simon, Durkheim propone que la sociedad se regule mediante una organizacién racional. La division del trabajo debe generar esponténeamente tuna nueva moral y, para esto, es necesario que las funciones sociales se establezcan de una manera “natural”. Base de las concepciones posteriores sobre la estratificacién, a teoria de la movilidad social durkheimiana, establece por tanto que las jerarquias sociales —téase las clases sociales—ocupan cada una * Emile Durkheim, De la Owvisién del Tabalo Soclal, op. it pg, 338, DICIEMBRE 1984 su lugar, a partir de las aptitudes “naturales” o del mérito personal. La critica a la herencia, como freno a las aptitudes individuales de ocupar “puestos” 0 funciones sociales determinadas se amplia a un pro- yecto de organizacién social sustentado en la forma- in de corporaciones o agrupaciones profesionales. En Ef Suicidio, como antenormente en De fa Divi- si6n..,?” Durkheim afirma que la corporacién es la solucién a las anomalias sociales resultantes de la falta de reglamentacién, de moral, en las interaccio- nes de los individuos. Integrando a su seno a los individuos que tienen una ocupacién social similar, Ja corporacién se puede convertir en Ia instituci6n idénea para la cohesién social. La moral es la dnica forma de moderar las pasiones y egoismos individua- les ~los cuales se expresan en los conflictos sociales y la organizaci6n moral ms racional es la corpora- ion. Siendo mas eficaz que la familia o el Estado, dicha institucién genera a su interior {a interrelacion social que permite regular los conflictos sociales. La utopia corporativa durkheimiana adolece de la falta de una explicacién de los medios para llevarla a cabo. Esto no debe sorprendernos. Durkhei sual que Weber, separa de manera tajante la pol de la Ciencia. La actividad del sociGlogo debia ser proporcionar al politica un diagndstico de la patolo- Bia social. Este Gltimo utilizaria sus recursos para Emile Durkheim, € Suicidio, Ed. Shape, Buenos Aires, 1971 . 304 y Emile Durkhelm, De la Division...op. cit, p. 344, TERRAGAONA realizar las modificaciones pertinentes. El socilogo, debia entonces de presentar los “hechos” descontami- rnados de los intereses politicos. Jaurés considera necesario dar término a los togros de ta Revolucién Francesa y Durkheim, al lado del politico francés, pretende establecer la solidarided orgénica.”* Solamente en dos oc: es Durkheim se vid envuelto en actividades de indole politico; laprimera, al suscitarse el "caso Dreyfus” afiliéndose la "Liga de los Derechos del Hombre", de la cual, fue secretario en Burdeos y; la segunda, al iniciarse la Primera ‘Guerra Mundial. Durkheim particip6 activamente det nacionalismo —que incluy® a los partidos socialistas y le cost6 la vida a Jaurés— escribiendo panfletos en contra de Alemania. Durkheim muri6 antes del tér- mino del conflicto mundial, en el que perdié a su hijo, el 15 de noviembre de 1817. Las categorias de andlisis de la sociologia durkheimiana La principal preocupacién de fa sociologia durkhet miana se inscribe en la dimensién ideolégica bur- guesa del mantenimiento det orden social. La morfo- Jogia y la fisiologia social postulados por Saint-Simon para establecer una “higiene social” fundamentan la busqueda de los aspectos patolégicos del sistema social. La analogia organicista que concibe ala socie- dad como un sistema funcional de partes interrelacio- nadas se convierte, a través de la sistematizacion que de estos etementos realiza Durkheim, en la forma de conacimiento y accién que guia a ia sociologia de corte conservador. a) El problema de la solidaridad y el orden ‘Como menciona Marvin Harris, la nocién de solida- ridad social se encuentra estrechamente ligada a las tendencias conservadoras de! pensamiento social ex- presadas por Saint-Simon, Comte y Durkheim. "" Es la preocupacién por el mantenimiento del status quo trasladada al discurso cientifico. La accién de la sociologia es establecer las causas y condiciones que dan lugar a dicha solidaridad para, posteriormente, aplicar sus resultados al propio sis- tema social. Independientemente de que Durkheim nunca menciona claramente los mecanismos me- diante los cuales la sociologfa deberia de incidir sobre {os conflictos sociales restableciendo la armonta, el hecho es que su preocupacién fundamental gira en este orden de cosas. En efecto, en su primera obra, De fa Division de! Trabajo Social, el autor pretende esclarecer por una parte, cual es la relacién entre » Francisco |. Paoli, Durkheim, Ed Fdicol, México, 1980. p. 29 Marvin Paris, El desarofio de la teoria anvopolégics, Siglo XXI ditores, Madtid, 1978. p. 404. [DURKHEIM Y LOS FUNDAMENTOS TEORICOSE HISTORICOS....77 individuo y sociedad y, por otra los fundamentos y causas de la solidaridad social.” Durkheim considera que podemos encontrar una aparente oposicién entre los intereses individuales y los intereses sociales. Esta separacién parece ser el resultado de la divisién del trabajo. Sin embargo, la misma especializacion —nos dice el autor—hace mas dependientes a los individuos. Los individuos se inte- gran porque sus actividades son complementarias. ‘Oponiéndose a Comte, Durkheim considera que la divisin del trabajo no es necesariamente causa de ddisgregaci6n de lo social. En cuanto a las causas que ddan lugar a la divisiOn de! trabajo, Durkheim rechaza tanto la explicacion spenceriana de que ésta es resul- tado de una busqueda en el aumento de la felicidad, como la de Adam Smith, basada en la eficiencia productiva. La divisién del trabajo es un hecho social Y, por tanto, solamente puede ser resultado de la interaccidn social: de ta agregacion y yuxtaposicién de segmentos sociales que provoca un aumento en el volumen y la densidad material y moral de la sociedad. Es dicho incremento el que opone la teoria

También podría gustarte