Iglesia de Cristo Reformada de Alejandría

¿Deberíamos Dar El Deta?

Angelo Valle hace 3 años
Cuando era niño, mis padres me enseñaron a dar el diez. La palabra diezmo simplemente
significa "décimo". Y así, fui entrenado para dar a Dios el diez por ciento de lo que gané
porque todo le pertenece a Él, y que este dar era un acto de adoración. Mi esposa y yo
practicamos esto, y estamos entrenando a nuestros hijos de la misma manera. En el
cristianismo, hay una variedad de opiniones sobre el diezmo. Individuos como John
MacArthur y John Owen dicen que el diezmo ya no es necesario para los creyentes, pero
todavía están obligados a dar a la iglesia. Sin embargo, cifras como R.C. Sproul y Joel
Beeke argumentan que el diezmo es obligatorio para el cristiano.

¿Deberíamos Dar El Deta?

¿Quién tiene razón? Nunca es bueno para nosotros aceptar las cosas simplemente porque
siempre lo hemos hecho. Tal mentalidad está en la raíz del error farisaico (tanto pasado
como presente). Así que nuestro objetivo será considerar brevemente esta misma
pregunta: ¿Requiere Dios que los cristianos den el diezmos?

El contexto de la queja de Cristo contra los fariseos en Mateo 23:23-24 es útil para
responder a esta pregunta. Jesús no argumenta en contra de los fariseos por el diezmo. De
hecho, les dice que deberían haber seguido adelante con los asuntos más importantes de la
ley "sin descuidar a los demás". (Matt. 23:23 ESV) En otras palabras, Jesús está elogiando
el diezmo. Pero, ¿es esto simplemente el Señor Jesús afirmando un Antiguo Pacto o una
práctica mosaica, o está afirmando para el creyente la necesidad de diezmar? Creo que
ambas partes en este debate verían este pasaje como importante pero secundario.
Debemos recordar que el cristiano no solo tiene el Nuevo Testamento como su libro, sino
que la Biblia está compuesta tanto por el Antiguo como por el Nuevo Testamento.
Cuando consideramos el Antiguo Testamento en esta discusión, las personas que a
menudo rechazan el diezmo dirán que la práctica del diezmo es simplemente parte del
pacto del Mosaico y, por lo tanto, es innecesaria para el creyente. Sin embargo, el diezmo,
al igual que las preguntas sobre el mantenimiento del sábado, no comienza con Moisés. En
el patriarca Jacob encontramos que él diezla a Dios. Jacob le dice a Dios en Génesis 28:22:
"y esta piedra, que he puesto como pilar, será la casa de Dios. Y de todo lo que me das, te
daré una décima parte completa". (ESV) John Currid, erudito del Antiguo Testamento,
escribe, aquí en el voto de Jacob encontramos "un compromiso de por vida con Yahvé en el
asunto del diezmo". Jacob probablemente aprendió esta práctica de su padre, Abraham,
que dio diezmos a Melquisedek en Génesis 14:18-20. Ahora el acto de Abraham también es
especialmente perspicaz para nuestras consideraciones. Abraham, el padre de los fieles,
dio a Melquisedec, un precursor de Cristo. Si el diezmo era solo para los días de Moisés,
¿por qué Abraham practica esto cientos de años antes de que nazca Moisés?

Al mirar a través del corredor de la historia, encontramos el diezmo que existe más allá de
Israel. El diezmo se practica entre los griegos, los romanos, los asirios y los egipcios.
Además, el diezmo era la norma de la iglesia primitiva, como se ve en la iglesia antigua,
como se puede encontrar en esa antigua instrucción guiada llamada "El Didache". También
encontramos la práctica en la iglesia primitiva entre figuras titánicas como St. Agustín y
Juan Crisóstomo.

A la luz de estos hechos, creo que el diezmo se requiere del cristiano hoy en día. Dios nos
manda que demos sacrificada y fielmente por el cuidado y la preservación de la Iglesia.
Aunque el diezmo en sí exige el diez por ciento, este porcentaje debería funcionar como
nuestra guía mínima. Pero aún más, estamos llamados a ser dadores alegres, no solo dando
de nuestra abundancia, sino dando sacrificando. El Señor nos ha dado todo en Su Hijo,
ciertamente podemos honrarlo con lo que Él nos ha dado. Porque sabemos que en este
glorioso acto de obediencia Dios dice: "Trae el diezmos completo al almacén, para que
pueda haber comida en mi casa. Y por lo tanto, ponme a prueba, dice el SEÑOR de los
ejércitos, si no te abro las ventanas del cielo y derramo para ti una bendición hasta que no
haya más necesidad". (Malachi 3:10 ESV)
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Categorías: Historia de la Iglesia, Artículos de noticias diarios, Devocional, Matthew

Etiquetas: dar, dinero, diezmos

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