La desnutrición crónica infantil afecta al 27,2% de los niños
menores de 2 años en Ecuador. Esta problemática repercute en
la productividad del país y tiene un impacto a lo largo de la vida de las personas. Según los datos oficiales, un 23,1% de niños y niñas menores de cinco años del territorio ecuatoriano tienen desnutrición crónica infantil o retraso en su crecimiento. La cifra es aún más alta — 28,7%— en las comunidades rurales como en las que vive John y su familia. El Ecuador debe poner fin a la desnutrición crónica. Los niños y niñas merecen el mejor comienzo en su vida. El país no puede esperar ni un segundo, ni un minuto, ni un día más. El Estado tiene que tomar acciones ya.