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Hacia la configuracién del plano del sentido y sus categorias EVGUENIA VucHEVA Universidad de Sofia San Clemente de Ojrid 1. ORJETIVOS El objeto de este artculo es el plano seméntico del sentido, que junto con el plano deta designacicn y el plano del significado conforma ta naturaleza unitaria de Ie actividad dol hablar. Como principal punto de partida en nuestro trabjo utilizaremos el marca te6- rico de Eugenio Coseriu (1981: 269-86), que presenta, en nuestra opinin, una con- cepeién may slay justficada para la descripcién no solo de la estructura de las lenguas, sino también del hablar como actividad humana universal. Las bases tsricas dde esta concepeidn remiten a las ideas flosoficas de Arstteles sobre la unidad entre actividad, dinamicidad y producto que Humboldt aplica a la lengua para formular su definicién clsica “Ia lengua es actividad y no producto” En toda su obra Coser si- ue Ia tiparticignaristotlica, la desarollay la aplica al lenguaje,revelando con ex eepcional coherencia su naturaleza més profunda y especitica. En su concepcisn, el lenguaje puede concebiese, por un lado, como actividad creadora, por otro, como Si ber hablar en una situacién dada (y en determinada lengua) y, al final, como producto 6 texto conereto. Paralelamente a estos tes puntos de partda que —como ya hemos sefalado— explican la esencia ms intima del lengua, el autor introduce otro crite ro mis, de importancia cardinal para el estudio te6rico del lengusje. Patiendo de las caracteristicesuniversales del hablar como actividad humana, Coseri seal que esta sctividad es realizada por todo hablante individualmente segan las téenias histGricas del hablar (as lenguas). Ast concebido, el lenguaje se estructura en tes niveles, el ‘universal, el histérico y el individual, alos que corresponden ts tipos de contenido linguistico, a saber: la designacién, el significado y el sentido. En lo que concieme al nivel individual y su contenido lingUistico, aqut nos proponemos dos abjlivos: 3 ‘Sobre ns anes lice eogias d aconcepsi de Coser Ease Kanchi (1995: 28 Moenia 11 (2005), 177-195 18 EVGUENIA VUCHEVA 4) Esbozar la configuracign de este plano semintico, by) Establecer las categorfs que le corresponden y que vamos a llamar catego~ ras del sentido, 2. ELENUNCIADO: UNIDAD ONTOLOGICA DEL PLANO DEL SENTIDO En el plano seméntico dl sentido podemos aceptar que la principal unidad on- ‘oldgica es el enunciado, Antes de pasar a su definicién, recordaremos que en la lin listica del texto se utlizan Tos téminos texto y discurso, prefiriendo, como sefala Fakalieva (1995: 236) aquel principalmeme para el anisis de las manifestaciones escritas del lenguaje y este para referirse al hablar en sus realizaciones espontineas, DDadas las detimitaciones entre ambos términos que se dervan de la configiracin te- Srico-metodol6gica de los tres niveles del hablar’, nos inclinamos a considerar el tex- ‘@ como producto y el discurso como activided. Con todo, independientemente de las oreferencias personales de los investizadores por uno 0 por otro términa, lo comin entre ambos es que los dos pertenecen al nivel individual del hablar, cue, por lo tanto, puede Hlamarse no solo plano del sentido (desde el punto de vista de su contenido), si- ho también, y con igual razén, plano del texto 0 plano del discurso, Por eansiguient, 0s parece ligico admit que el enunciado perenece al plano del texto o del discurso, Mas atin, si tatamos de establecer una analogia con la posiién de Bondarko (1987: 5) sobre la enunciacién como “unidad minima en euyos marcos se realiza el funcio namiento de los elementos lingisticos en el discurso”,diremos que el enunciade es la unidad minima en cuyos marcos se realiza el acto de habla, Adonis, senda el discur- fo en su esencia més genuina un fenémeno socal, el enunciado puede concebirse, como sefala Fakaieva (1995; 236-7), como 1) tipo especial de actividad social en Jos marcos de la interaecion socal, 2) wansformacién de la experiencia humana en sistema de signifieados que ga- rantizan la interaceiGn socal y estin presentados en la lengua, 3) norma concreta de interaccién social Por todo ello se deduce un hecho sustancial: detris del enunciado como uniad del discurso se halla determinado acto social. Con respecto a esta cuestisn, Ferrara (19986: 63) sefala que es muy corriente escuchar un comentario sobre lo que alguien La noc “catepriag del endo” ode Conary (1992: lenin “ategorts lingo” lo teminos suegoie del design eid", en lai con los ues plans de estructura del habla. BON Meese Vachera (2000) Ya heros destiesio que en nese concep sobs arte imensional det hablar segumos flames postu edrins de Coser (198 273). se le tives el habla (universal, hisincn einidu y Tos aspects en que puede exfocse(eomo se {vad como sabe y como producto gue, prt pepo dl ingen lnc su st, hn Tego a converse en una de ox panto Se referencia ms citados els tron de ng dens, 25), quien ulin, a lad dt de significado” yas HACIA LA CONFIGURACION DEL PLANO DEL SENTIDO 19 YY SUS CATEGORIAS “hizo” en una conversacién, con descripeiones como “aeaparador, dominante, mani pulante, agresivo, amistoso, halagador, ete. hecho que, lo sumo, comprucbs la di ‘mensiGn social del acto discursive, Si debemos precisa la nocign de enunciado, aiaditemos que en é se presenta «en Forma eoncenrada el contenido del plano individual del hablar, es deci, aquel con- teaido especifico que Hamamos “sentido”. Coser (1992: 96) define este contenido de a siguiente forma El sentido, que se tansnite en el dicuts, eso wdicho» oo el devin especial eontnidolinglisico que se express mediante la desgnacin ye sig nifiada, pero en un discus individual a mas allt de ino, y que cotesponde 2 lis asides, inteneiones 0 suposicions dl habla Evidentemente, el enuneiado es producto de fa designacidn y del significado y leva el sello de la inteneién comunicativa del hablante en una situaciéa dada. Es por cello que podemos interpreta (y no entender) lo dicho no solo como significado siistico,uilizado para designae determinado referents extralingistico, sino también incluso ante todo— como testimonio de la actitud del hablante que evidencia sus intencionesy resuelve tareas concretas en los marcos de determinada situaciéa com nicativa, Por consiguiente, la intepretacin adecuada del sentido va anclada al entor- ro contextual del enunciado que suele especificarse como contexto verbal, situacio- nal y sociocultural [Nuestra insistencia en fa adecuada interretacin y no en la comprensisn del sentido se entenderé mejor su recurrimos a los argumentos que plantea Arutjunova (1988: 6): Al tzar la distineién ene palabras descripaivas y palabras no descrpti- vas, Ia autora seRala que el andlisis de las palabras descriptivas “tira hacia la sem sca y el de las no descriptivas, hacia In pragmética, para concluir luego que el enter imicnto del significado descriptivo se basa en la competencia semintica de Tos hhablantes, mientras que pars entender los significados no descriptivos los hablantes ulizan su competencia pragmética. En este caso, subraya N. D. Aruljunova, es mis ‘oportuno hablar no de “entender” el significado de las palabras, sino de “interpretar 16", porque nosotros entendemos el significado de las palabras, pero interprets su. uso en el texto y el texto mismo, ‘Croemos que en este punto debemos elucidar una cuestign fundamental que tate a la esencia simblia del enunciado, que de hecho es significante con reacién a la actitud del hablante en una sitacién comunicaiva conereta. Con tal motive recor- daremos kt observaeién de Benveniste (1966: 127), formulada acerca de ls unidades TingUfsticasy sus rasgos distinivos: 1 context asia aurea no slo Js entra espaciotemporales, sno tabi, com sefala Lyos (1977: #27, la aegpacin tla gue ace tno el hablane como el oyent Se alas Is cnvenciones,crencns¥ presupusios inporantes qe se oan por senados po Tos miembros ela comunidad bla ss ual perteneen agus 180 EVGUENIA VUCHEVA ‘Cuando se dice que un clement Hngstico, cor o exten ene un se tio, se eninde que este elemento posce Ia propiedad de se ini ecto a determina sentido ‘Creemos que, aunque referda a I oracin, la abservacién aducida tiene la va- lidez. de postulado universal porque es aplicable a todos los medios expresivos que uilizamos en el proceso de comunicacin (tanto verbles como no verbales) y pore explica su funcién simbilica. En nucsto caso conereto, sis corolarios son de sum importanca, ya que aclaran los preceptos te6ricos que deben seguirse para compren- ser la naturaleza simbsica del enunciad, 3. CARACTERISTICAS PRINCIPALES DEL ENUNCIADO. Del hecho de que el significado de to dicho (el qué) representa fa base material para buscar la intenciin (el porqus) y In finalidad (el para qué) de lo dicho, © sea, para interpretaradecuadamente el sentido del enunciado, emerge la necesidad de deseribie cl caricter de cada una de las dimensiones salads: A) En cl enunciado la designacin se presenta como referencia a la realidad cextralingistica, pero no simplemente como adecuncicn temitica y congruencia, sin ala ver, como adecuacidn sitacional (referencia a las caractersticas dela sitwacion Conctela) y como adecuacién social (referencia a las telaciones que existen entre los interlocutor). By Desde el punto de vista del significado lingUistico, el enunciado no es simplemente la configuracin de la designaci6n segin las normas establecidas en una lengua, es decir, no se reduce a la oraeiGn ( las oraciones) correctamente consttuida En otros términos, el enunciado no es la oracién misma, porque, como sefala Escan dell Vidal (2003: 48), Ia “oracién es un tipo de estructura gramatical, abstracta, no realizada” en tanto que el “enunciado, en cambio, es Ia realizacién eonereta de una ‘oracidn emitida por un hablante conereto en unas cicunstancias determina” Aqut debemos recordar que el enunciado no siempre coincide con la oracién, aunque para mayor comodidad en los anliss de los aetos de habla los contextos ver- bales se simplifican y en consecuencia se utlizan ls fronteras de la oracin, La tora dle Jos actos de habla da un paso decisivo en la distncién entre oraciny acto ce habla {que resulta de suma importancia para selarr el estatto del enunciado, Conrad (1985; 352), plantea de forma muy clara y eoneisa esta distineién; “el tipo de oraciGn y el ode acto lingistico de ninguna manera son entidadesidéaticas, y un mismo aeto de hhabla puede serreaizados mediante oraciones distinas”. La consoeuencia fundamen tal que deriva de estas consideraciones es que la oraci6n no puede concebirse como unidad de realizacidn de un acto de habla. En la mayoria de los trabajos de pragmsiica se subraya expresamente este hecho. Ferrara (19984: 31) afirma al respect: HACIA LA CONFIGURACION DEL PLANO DEL SENTIDO 181 Y SUS CATEGORIAS ninguna uidad lingUtsca comesponde necesaranent a fa jeeueién de un ato fe habla, por eosiguiente as fronteras de a orsign son inelevantes para as: Tamiento de os ates de habla, Odviamente, se impone la necesidad de ir més allé de la oracién, hacia el enunciado como entidad lingistica en que se realiza el acto de habla. Conoebido asi, como unidad minima del discurso en cuyos marcos se manifiesta el acto de habla, enunciado puede enfocarse ante todo como la eleccién concreta de los medios y su ‘organizacin finalista con vistas a In adecuacién del acto de habla y de los propésitos, {que se planea cl hablante en una stuacign conereta do interacciGn humana, La delimitacién entre enunciado y oracién no es nueva para a tora del len guaje, pero indudablemente se impone como cuestin fundamental para precsat las bases tericas y metodol6gicas en la delimitacn de los res niveles del lenguaje y en la descripcin de sus respectivos contenides. Distinciones de este tipo se encuentran en Strawson (2000: 371}: no solo oraciones diferentes, incluso opuests, en sgntieado esin comclacions fas, de una manera oa com el mismo estado de cosas posible, sino que una y a misma oracn no smbigaa est corelaionads, de ura manera or, com hos estados de cosas diferentes y en algunos esos mutuamente incompatbes [Barwise & Perty (2000b: 631) formula al respecto dos aclaracionessustanci les, a saber: 8) Una oracion como Yo estoy sentado puede wtlizarse para hacer tantos enn iados como hablantes y momentos de tiempo haya para proferila, ) La oracide tiene un “significado” fijo, pero los diferentes enunciados des cribirin eventos distintos. Es decir, los diferentes enunciados tendrén “interpretacio- es" distintas. Esperamos que haya quedado claro que la oracign y el enunciado se conciben como dos entdades distinta. Sin embargo, volvemos a insistir en ello, con Ia delin lucién teGrica y metodolégica de los tres planos del lenguaje podemos justiticar tal listinciGn y contemplar Ia oracin como unidad del plano del significado y el enun: ciado como unidad del plano del sentido, Pero atin nos parece necesario extender las bases tedrcas de nuestra concep- cid para protegemos de todo riesgo de conclusiones forzadas 0 intitivas. Por lo tan- to recutrremos a los argumentos que expone Duerot (1999: 178-81), fundamentando la necesidadl de establecer una igurosadistineién entre “la frase” y “el enunciado” in dependientemente de las diticultades que ello presentara para la ifadicién lingbistica En su opinisn, Ia frase es un abjeto teéico, Jo que signitiea que para el Fngbista no pertenece al dominio de lo observable, sino que es una invencién de la gramétiea, Lo ‘que puede considerase como observable ese) enunciado, “entendido como la mani- festacidn particular, como la ocurencia hic er nune de una frase. Si dos personas di- ferentes dicen Hace buen rempo o una misma persona lo dice en dos momentos dife- remes, estamos ante dos enunciados diferentes. “Asfdefinido —como fragmento del 182 [BVGUBNIA VUCHEVA, discurso—, el enunciado debe ser distinguido de la frase, que es una construcigin del linguista que permite dar cuenta de los enunciados", Segdin Ducrot en la base de la ciencia lingUistica ests la decisién de reconocer en los enunciados, realizado hie et ‘mune y todos diferentes entre sf, un conjunto de emtidades abstractas, las frases, cada una de las cuales es susceptible de manifestarse en una infinidad de enunciados. El autor recalearepetidamente que la separacién entre frase y enunciado no reside en una diferencia empirica entre ambas entidades, una de las eusles seria de orden perceptive y la otra de orden intelectual. La distincia consste en una diferencia de estatuto me- todol6gico y por Io tanto permite que las dos unidades sean investigadas escogiendo dlistntos puntos de vista En efecto, las aclaraciones metodoligicas que hemos aducido confirman cate- _s6ricamente la necesidad (y la conveniencia) de delimitar el nivel del significado y el nivel del sentido como dos planos semintcos distintos. Pero ante todo reafirman nuestra idea de que en toda lengua la oracida representa una estructura semintica ahs- iracta es decir, un signo lingustico cuyo referente extralinghistio es, a finde cuen- tas, la tcticacscursiva que el hablanteelige para realizar un acto social conereto. Y cl énunciado, que se erige en unidad de otro nivel, no es simplemente li ealizacign de una oracién conereta, sino, ante todo, fa manifestacin linghistica de la setitud social del hablante que utiliza las oraciones como instrumentos de su tities discursiva, ©) Segtin los criteios de adecuacién temitica, el enunciado rele los cono: «imientos del individuo sabre el mundo (su competenciaenciclopédiea y temstia) D) Segtin los eriteris de adecuacién situaciona, el enuncindo refleja la expe: rencia del hablante en distintas stuaciones comunicativas (su competeniasituacio ral. ) Sepin los criterios de adecuscién social, el enunciado refleja la experiencia social del hablante en su (ato con interlocutor de diferentes estatutossociocultura- les (su competencia soci). F) Desde el punto de vista dela eomunicacin, detrs del enunciado como acto de habla trasluce la intencién comunicativa conereta,determinada por las necesidades individuals del hablante y ajustada a los parimetrossituacionales y sociales de la si- ‘uacicn comunicativa, {G) Desde ol punto de vista del hablante, el enunciado es Ia interpreta indi Vidual de fa realidad y reflejano solo sus proptsites comunicatives, sino también la cleccin tética de medios ingUsticos y no lingsteos que él fa hecho para conse: {gir estos propdsitos. Para el oyent el enunciado transmite Ia intencién comunicativa de su interlocutor, pero ademis revela su personalidad como necesidades,intereses, estauto social, estado de dnimo, ete. 1H) Desde el punto de vista semsintico, el contenido del enunciado es su sentido ‘concrete, Cabrfa puntulzae que esta es Ia causa por In que eonsideramos el enancia: 4do como principal unidad del plano del discurso y unidad minima de sentido. HACIA LA CONFIGURACION DEL PLANO DEL SENTIDO 183 Y SUS CATEGORIAS Con ello queremos decir que, teniendo en cuenta los parimetros cogaitivos, pragmaticos y comunicativas que hemos enumerado, el sentido es una entidad pol ‘dimensional. Por tanto, puede interpetarse univocamente solo sobre la hase de un ‘enuncfado conereto, que tiene un propésite concreto, se profiere en una situacié con- ‘rola por un hablante conereto y va destinado a un oyente conereto, 4, ENUNCIADO Y SENTIDO Con el fin de ilustrar ms niidamente las relaciones entre el enunciado y el sentido, podemos decir que la relacién enunciado-sentido del plano individual es ‘déntica Ia relacién oraciGn-sigificado del plano histrico del hablar. Un apoyo muy sdldo a esta afirmacién encontramos en la oposicién signiicaciGn-semtido que Ducrot (1999: 184-5) induce paralelamente a la oposicién frase-enunciado. Acla rando que la eleccién de Tos términos es completamente arbitraria y no remite a su ‘empleo en el lenguaje ordinario o en Ia tradicién filosica, el autor relacionaelsigni- Ficado (la significacién) con el earieter semintico dela oracién (la frase) reservando cl término sentido para la caracterizacin semantic del enunciado. Ente el sentido y la sigificacida Ia diferencia esta ver no es solo de estatuto metodol6gico, sino tam- bin de naturaleza y va mis alli de Ia diferencia metodolégica. Fijando este eriterio ‘aicional —que, sin embargo, resulta de suma importancia para su concepcién—, Duerot se propone la tarea (jy la cumple byillantemente!) de “rebatr la concepeida habitual segin la cual el sentido del enunciado es Ia significacién de la frase salpi- ‘mentada eon algunos ingredients tomados de Ta situacin de discurso”. El autor se nigga eategéricamente a considerar Ia significacién como parte del sentido —aunque coniesa que no puede justificar esta negativa— y prefiere representarl como 1 conjumo de instuceiones dadas a as personas que tienen que interpreta ls tnueiados dela fas, isiaceones qo eslablacen las maniobas que se han de realizar para asociar un sentido estos enuciados. [En su esencia la tesis de Ducrot confirma nuestra concepeién de las relaciones rutuas y las interdependencias que subsisten entre las unidades del nivel histsrico y del nivel individual de lenguaje. En el aspectoteérico podemos admitir que existen relaciones semnticas sucesivas que en sus manifestaciones coneretas cumplen la fun cin simblice con respecto al eslabdn subsiguiente de Ia cadena, a saber — Entre la oraci6n y su significado: la relacin significant-significado en el Signo linguistic, _— Ente el producto de la relacin oracin-significado, o el signoFinguistic, y enunciado: la relaciGn signo-referente, — Batre el enunciado y su sentido: relacién significante-signficado en el sig- 184 EVGUENIA VUCHEVA, Ente el producto dela relacin enunciado-sentido, o el signo comunicativo, yl actitud diseursiva la selec signo-referente — Fire la aettud discursiva y Ia actitad social en determinada situscin: fa ‘lac significante-significado en el signo social Con la especificacn de las relaciones escalonadas ene el significante y el Signiticado en el signo, por un lado, y entre el signo y el referente, por otro lado, ‘remos sugerido la idea de que ls relaciones entre las unidades de los diferentes nive- hes del hablar se dan de manera sistematica y todas ellas van destinadas a la realiza cin de Ia comunicacién, que en su esencia es una actividad social. Para dar una ex FHicacién coherente de Ia cadena comunicativa hemos sepuido las distinciones teri- ‘xs ene signo y referente que establece Todorov en Ducrot & Todorov (1980: 121- 5). El propdsito que nos plantesbamos conssta en distingur cuidadosamente las 1e- Ihciones entce el significant y significado de las relaciones entre signo y referente Asi llegamos a a conelusién que el signo de un escal6n (es decir la relacin orgniea ‘re significantey significada) se converte de hecho en “elemento sigiticativo" con respecto a un referente de oto nivel para erear, de esta forma, un signo nuevo, que, sl vez, actin como “clemento significativa” con respecto a un referente del subsi- _uienteescalén, y asf sucesivamente Esperamos haber puesto en evidencia los pasos principales que se siguen desde «l punto de vista seméntico en el proceso comunicativo. Todos ellos resultan relevan- tes para admitir que en este aspecto a comunicacién humana es un proceso de crea- ci6n, de uiizacién y de interpeetaciGn de signos destinados 2 cumplir Is funcién co- ‘municativa del lenguaje. Afadiremos solo que Coseriu (1977; 27-31), define el len- {tuije como actividad ereadora de “expresin con significado”, o de “contenido y ex- resin al mismo tiempo”. Paralelamente a esta consideracién “intalingufstiea” aqut sugerimos una interpretacion que va mis alld del signo lingstico y se extiende hacia tn dominio ms amplio de signos en el cua se sitia la comnicaci6n humana Las distineiones que hemos bosquejado podrian ser iustradas en el siguiente ‘esquema que refleja los campos de ls actividades en que se crean,utilizan e interpre tan los signos de los distintos niveles del hablar: Plano Rite Piano inaidual ‘Signo linglistico iano comanicativo Signo socal Actividad eogaitiva Actividad dicuriva Actividad social 1 Onicisn =i naa - TW Seige | |W Rerea ‘Vi Asad eat Com todo lo dicho hasta agut podemos coneluir que como unidad del nivel in sividual del hablar el enunciado es un signo comunicativo complejo cuyo significante HACIA LA CONFIGURACION DEL PLANO DEL SENTIDO Iss Y SUS CATEGORIAS cs l contenido del enunciado, es decir, el julcio,o la imerpretai6n individual de la situacién concreta. Y su significado, que no puede existr fuera Ue su relaci6n con el significant, es a conducta social del hablante en la situacin dada, Para justifcat esta conclusion recurrremos a la explicacién de Todorov, en Duerot & Todorov (1980: 122), quien subsaya que el punto més discutido de la teria del signo se refiere a la naturaleza dl significado, Para cla relaiGn entee significante y significado es una relacion entre presencia y ausencia, es decir, la diferencia radical entre signiicante y significado consiste en la presencia de lo sensorial en el signficante y la ausencia de lo sensorial en el significado. Por tanto, el significado no existe fuera de su relacibn con el significante —ai antes, ai después, nien otra parte— . Es por ello que ambos conceptos son inconeebibles el uno sin el oxo, Por consiguionte, examinado en los marcos de la estructura general de 10 ni: veles semnicos del hablar, el enunciado con su sentido ocupa en la direccién que Dimitrova (1995: 15) define como “problemitica de investigacién que sigue la Tinea palubra-oracidn-(ext [t. esp. E.V.J" la posicién de significante con respecto al acto Social dela linea de los respectivossignificados concepto-juicio-acto. Aunque de ma ‘era muy esquemmitca, ambas cadenas explictan los contenidos que se sitfan detrés tad discursiva, tales como “respuesta emocional", “pregunta mordaz”, “pregunta ‘oportuna J inoportuna”, “respuesta adecuada / inadccuada”, “peticién cons”, “pre _gunta descortés", "nogativa grosera”, conciemen a estas cardterstcas adiionales de las estategias comunicativas La afectividad es una reaccién espontines ante objetos ‘muy variados (el tema del enunciado, los participants, la situacién misma, ee.) que sobrepasa el Ambito tanto de las categoras légico-valrativas como el de las intencio- rales, Por tanto, se presenta como una categoria de carcterafectivo-valorative que se da conjuntamente con las dems eategorias del nivel individual ya que depende del temperamento del hablante, de su estado de dnimo, de la espontaneidad de sus reac cones: un enunciado puede ser oportuno, pero a la vez grosero; coms y con; per- tinente, pero mordaz, ete. Las caractristcas stuaconales del enunciado integran ta subeategoria pert rnencia, que relacionamos con lt adecuacia stuacional de enuneiad",y ls sociales, Ta subeategoriacortesta, que se refiere a su adecuacin socal’, En nuestra opinién, 10, comin de la pertinencia y la cortesfaes que ambas caacterizan ls estrategias com atvas; lo diferente lo encontrar en su orientacisn, a saber: la adecuacién situa ional remite a la esencia de Ia estrategiaelegida,y la adecuaci6n social, al modo en, for mbjos de pragma se cepts que, sgn sla Karaguioaova (200: 167-8), reo nocer fos os (o ea aii el hala ha To ue dic) en interpretacon es equiparsble a teconee I potent enciado con respec al context ragntico. Lyons (1977 40-1 tine tein comaniaeln fe, por analogs al tino de Ma- liek coma fea, prs sobraya que muchas de pusasexpesiones sven para exalec™¥ Ianene un senteno de solidrady de benestr soci. Partendo dels encepcin de Leech, ‘Artivnova & Paducheva (98S: 27) considera gue et principio de covtsapotnece no solo af {sfonde a combncacon verbal, sino tambiga a tedo ip de interaecién humans Juno con 1s os {ultos del prinsipo de cooperacdn, ric (1988: 222-),rsconace In ens de os posts tsttigs, seialeso morales ene Tos ue considera tabi el posto de cone. Laka (198) ‘Stables les minor de corsa, sclarando que ets “no son meramete ings, sino qe use aplicaateas rmaccones omar operas” 190 ‘que se realiza esta estrategia, es decir, a a eleccién de la téetiea discursiva. Por todo esto, tenemos los suficientes motivos para admitir que el contenido del entnciado es determinado por la estrategia comunicativasituacional,y su parte material, por la tie ica sosial discursiva. Para justficar esta esis recuritemos a la eonsideracidn del problema de la libertad de eleccién, que planteaJespersen (1947: 160-7) en relacin con la funcién social del lenguaje Desde ef momento cn qe v emplea el lengua ons natural area soa, f indvduo en todos fos puntos esnciales est igo alas costes y reels ‘igntes de a comunidad... Per, de ox lado, la consti ejersida por lt Jenguatampoco es munca completa, por In razéa de que solo en algunos panos esti absoltamente establecido el uso linghsticn en forma que no pada sate ‘ado... En innumerable casos la persona gue ha de ure lengua ene una ‘opcidn —entze un nero de sinitnos may eereanoso ete isn constuc. ‘tones dea frase por vt de Ia cul so prefine or est, ora allay se een cuenta este o2quel matiz del pensamieno, J El modo de hablar de cada ‘ual esti constantementefactuando srs y alan cite ls exigencias def o- ciedad y la expres individual de nuestasnecesidades momentiness. Evidentement, el problema de fa Iibertad est relacionado en la misma medida ‘on a adecuacién situacionaly con la adecuacién social del enunciado: la titica dis coursiva se relacona con la libertad en fa eleccén de los medios inglisticos mediante los cuales ha de realizarseefieazmente la estralegia comunicativa,primeramente es cogida y determinante con respect la tetia diseursiva, en eada caso coneret. LAT RDEPENDENCIA DE LOS TRES PLANOS DEL HABLAR La conclusién que acabamos de formular nos permite estableer las correspon: sdencias formales y de contenido entre ls res planos del hablar y sus Fe ‘dades ontol6gieas en dos perspectivs principales — Como eleccién finalista de un aeto de habla conereto pata realizar determi- nada estrategia comunicativa Piano Piano nari TEnaniado ‘Orson Ei ldo pes] tate omnia Avpestienconictnes de | formas, neu expe Toricyseingea | tu psa orem aod es desicuewb ce) spa | — adeceacion clonal won aden, (penienipocaie = fetid ys conc) z = propa trate peer HACIA LA CONFIGURACION DEL PLANO DEL SUS CATEGORIAS, it — Como eleceién finalist de tctica discursiva para realizar la estrategia co municativa previamente escogida Tae Pi naa [rio mes Tei ‘nunca ‘Oracin Tatepeetacon des elaine soils ‘Gaia devorsva (expen coves ‘0c coopera) ss cor von Ay aon amigns. (Gmetad eres, nodes y 5 come os). Porfevor accra tere - ‘vo exhort, Los distintos modos oracionales en los que podria realizarse el propésito de A ‘en la situacn presentada seria Eat ia Taman le puertz | “eee Por favor puedes abrie? ‘Moscow dw ommopui? Por favor abre! Moss me. omsopul Pinas abrir? ‘le onwopia su? Te importa brie? Bice omeoper? Hazel fort Teeunea | Vey abe! How emaopul ‘Abies, verdad? Fla we onnopuaa? Como ninguna actividad humana se realiza sin realizarse de algtin modo, es decir, como no hay actividad siesta no se efectia realmente, ast las dos eadenas que hemos eonsiruido se encuentran en relaci6n de dependencia mutwa y constituyen una entidad indivisible, Constiuidas en dreccién del contenido hacia la forma ambas ca ‘dens iste el cardcter multidimensional del hablar, la unidad orgéniea entre finali- dad y medio que representa este, el papel del Ienguaje como medio destinado a expre- sr muchos y muy variados contenidos, afin de cuentas, la genuina esencia del hablar ‘camo medio de interaecién humans, En conclusion, sefilaremos que las categoria del sentido —a diferencia de las categarias del significado, que podemos considerar como instrumentos de la designa- cién en una lengua conereta— se manifiestan como instrumentos de Ja designacion Los moos oracionaes del apa presentan as frmulas qu se lian para “lcci a sn gap algo” sein Gelert ea. 9885012) 92 EVGUENIA VUCHEVA conereta en un “contexto actual referencia”, Mediante estas categories los hablantes exteriorizan su aetitud valorativa ¢ interpretadora ante la realidad extralingiistica, la situacin sociocultural eancreta, los papeles sociales de los paticipantes, sus caacte stcas individuales, las relaciones interpersonales,siguiendo las normas de Ia ade- ‘acid situacional y social que caracterizan el proceso comunicativo. 1. CONCLUSIONES En el marco te6tico global de las eategorias del hablar, esbozado en Vucheva (2000), hemos sugerido algunas distinciones de cardcter te6rico y metodoldgico en el amo heterogéneo y polidimensional de las eategortas del hablar que menudo se ‘eterminan de lingistiea, sin mas. Dicho término nos parece muy general porque no revela la naturtlera de todas las catogorias del hablar y tampoco es aplicable a mu- chas de elas. {La concepeién del hablar como unidad tridimensional que hemos adoptado como panto de parida para situat las eategorfas bisias en los respectivos plans se ‘mintcos justifica el téemino de cazegorfas del hablar que sugerimos como denom- nacién genérica y ajustabe a la esencia de todas las categorias. Porque en efecto los {tes tipos de eategorfas —de la designacin, del significado y del sentido— son cate gorias de} hablar. También, atonigndonos a la observacién de Lyons (1977: 284) de ‘que el término categoria significa predicaci6n y en la filosofia aristotlica las catego~ rigs eran las distintas maneras, 0 modos, por las que podian hacerse predicaciones de las cosas, podemos decir que las categorias del hablar son eategorias de la predica- cin, “Todas ellas caracterizan el hablar, pero lo hacen desde perspectiva distntas Dicho de la forma mis sucinia, la distincién ene los res tipos radia en los content dos especficos los tres planos del hablar que no existe sino a través de sus unidades bisicas, a saber: el juicio, la oracién y el enunciado. Es por ello que podemos admitir ‘que las categorias de la designacién son categortas del juicio, las eategorias de signi- ficado son categoria de la palabra y la oraciGn, y las categorias del sentido son cate~ _gorfas del enuncindo (0 del discutso). En lo que respocta alas eategortas que hemos situad en el &mbito del sentido, podemos decir que lo extalingistico participa en ells no tan solo como conocimien= toy conceptualizacién (como adecuacién referencial y adecuaci6n lgica), sino como sctitud del hablante adoptada —gracis al conocimiento y a experiencia que tiene tn la interpretacin de la realidad extafinguistic, es decir como estrategia premedi- {ada referencialy lépica, en vitud de las condiciones especifics de la stuacion co municativa). Por lo tanto, las ettegoras del sentido no son propiamentelingisticas 5 etidenin cone aca referencia lo enon ea Van Dijk (1989: 55), quien ow tna pra conereat a stuacion somata dese el panto de vista sociocultural, o Io qu define también somo entexto coment HACIA LA CONFIGURACION DEL PLANO DEL SENTIDO 193 YY SUS CATEGORIAS ‘aunque se dan en el hablar y se expresan con significados linguistics. Son ms bien te carieter valorativo e iniencional, ya que implican necesariamente un contenido aicional de indole cognitiva, psicolégica y social. Y lo mis esencial: el sentido espe- citico que se quiere expresary se expresa con medios lingisticos en las innumerables, ‘itaciones de comunicacin interhumana, a su vez, desarrolla y enriquece las posibi- Tidades del sistema Hingtitico en virtud de su uilizaci6n para ulteiores designacio- nes, determinadas por las nevesidades sociales de la comunidad sociocultural. En este sentido, podrfamos consentr con la parifrasis de la formula clisiea “nihil est in lin. {gua quod non rus fuert in oratione”,utlizada por Benveniste (1966: 131), y des- plegarla en tod sw perspectiva: nada hay en la lengua que antes no haya sido enun- ado; nada hay en el enunciado que antes no haya sido necesidad humana, Esta es, en hess opin la nica dreccién en Ia que se puede busear Ia raz6n para estudiar Ia aetvidad del hablar y la base ideoldgica para concebir el hablar como un conjunt tr ‘imensional, dindmico y a Ta vez unitario, de las necesidades humanas, universles, histricas e individuals Las distineiones que hemos propuesto revelan la configuracién general del plano del sentido, destacando el contenido, el earéetr y la func discursiva que co- rresponden a la principales categorias del enunciado: nc Conisnido | Conpsencla [Categorias ~—[ — Carder | Felon. Refereneial | Cognitive Adecuacion | égico-mental | Coneensi® iat referencia discursiva ‘ingaso | Taioniea | Comesion Miotice | Tonto —| Ties dns Sopiad co avai Temitca Probablidad Uésteo: | dein competensia Toathas tendice ‘a Nein rragmiico | Dicusia | Pegut/Royprsa | enim | Aso comico EE en Orde Sinnciont | Perimacia | vaaive | SSEmSer [sacar Ta aero —| Aan sc stv ‘mln atesvtsa | Atv, [REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS AnuTiiNova, N.D.& E, V PADUCHEVA (1985): H. JL Apyowona; EB. Taayens. “er Pas potixens 1 xareropni aparaarie", n Hosoe« 2apyGexevoi unceucmune, 16 Mociza, 342, [= “Fuentes, problemas yeatgoeas dela pragmatic”. En Novoe » x rubecoi lingstib 16,342] 194 EVGUBNIA VUCHEVA, ARUTIUNOVA, ND, (1988): H. 1 Apyrovions, Tams asunvoutssnavena: Oyen. Colne, ‘avon. Mocks, Naysa. (= Tipos de significados lingcos: Evaacion. Antec niet. Hecho. Mosed: Nauka] Austin (1998): How to do things with word, Te. exp. Cémo hacer cosas eo las paras. ‘Comp. 5.0. Vinson. Barcelona: Pais Baawise, J. J. 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