El respeto es una cualidad o valor que consiste en la consideración y
valoración que tiene un individuo hacia las otras personas, hacia una idea o una institución. El respeto incluye actitudes como acatar ciertos códigos de protocolo o de conducta, mostrar tolerancia hacia las opiniones o el accionar diferente, adherirse a ciertos lineamientos éticos o morales y valorar los intereses ajenos. Es uno de los valores fundamentales. Debe darse entre las personas para garantizar la armonía social y suele estar relacionado con el concepto de reciprocidad, es decir, es algo que debe entregarse de manera mutua.
El respeto implica un trato cordial y respetuoso entre las personas y supone
aceptar y comprender las similitudes y las diferencias con los demás individuos, sus comportamientos, creencias, opiniones y actitudes.
Como lo debemos aplicar:
Respeto al prójimo: respetar los derechos de los demás y tratarlos con
educación. Respeto a la naturaleza: cuidar la naturaleza y no dañarla. Respeto a la autoridad: seguir las normas que dicta la autoridad. Respeto a las leyes: obedecer lo que manda la ley. Respeto a los padres: tratar a los padres con respeto y obediencia. Respeto a los valores: seguir los valores que dictan las normas morales. Respeto a las buenas costumbres: respetar las costumbres que se siguen en el lugar al que se va. Respeto a las normas sociales: comportarse de acuerdo a lo que marca la sociedad como respetuoso Respeto a los animales: no maltratar a los animales, ni abandonarlos, por el contrario, cuidarlos y protegerlos. Respeto a uno mismo: respetar las creencias y valores propios.