Está en la página 1de 6

2.

Nariz humana

La nariz humana es la extremidad más externa de la cara. En ella se


encuentran las fosas nasales y es el primer órgano del sistema respiratorio.
También es el órgano principal del sistema olfativo. La forma de la nariz está
determinada por los huesos nasales y los cartílagos nasales, incluido el tabique
nasal que separa las fosas nasales y divide la cavidad nasal en dos. Por
término medio, la nariz de un hombre es más grande que la de una mujer.

2.1 La función principal de la nariz 

es respirar, y la mucosa nasal que recubre la cavidad nasal y los senos


paranasales realizan el acondicionamiento necesario del aire inhalado
calentándolo y humedeciéndolo. Los cornetes nasales, en las paredes de las
cavidades, desempeñan un papel importante en este proceso. El filtrado del
aire por los pelos nasales en las fosas nasales impide que las partículas
grandes entren en los pulmones. Los estornudos son un reflejo para expulsar
de la nariz las partículas no deseadas que irritan el revestimiento de la mucosa.
Los estornudos pueden transmitir infecciones, porque se crean aerosoles en
los que las gotitas pueden albergar agentes patógenos.

Otra función importante de la nariz es el olfato, el sentido del olfato. El área


del epitelio olfatorio, en la cavidad nasal superior, contiene células
olfativas especializadas responsables de esta función.
La nariz también participa en la función del habla. Las vocales nasales y las
consonantes nasales se producen en el proceso de nasalización. Las
cavidades huecas de los senos paranasales actúan como cámaras de sonido
que modifican y amplifican el habla y otros sonidos vocales.
Existen muchos procedimientos de cirugía plástica de la nariz, conocidos
como rinoplastias, para corregir varios defectos estructurales o cambiar la
forma de la nariz. Los defectos pueden ser congénitos, o ser el resultado de
trastornos nasales o de un traumatismo. Estos procedimientos son un tipo
de cirugía reconstructiva. Los procedimientos electivos para cambiar la forma
de la nariz son un tipo de cirugía estética.
2.2 Estructura
Varios huesos y cartílagos forman el marco óseo-cartilaginoso de la nariz y la
estructura interna. La nariz también está formada por tipos de tejido blando
como piel, epitelios, membranas mucosas, músculos, nervios y vasos
sanguíneos. En la piel hay glándulas sebáceas y en la membrana mucosa hay
glándulas nasales.  Los huesos y cartílagos brindan una fuerte protección para
las estructuras internas de la nariz. Hay varios músculos que participan en los
movimientos de la nariz. La disposición de los cartílagos permite flexibilidad a
través del control muscular para permitir que se modifique el flujo de aire.
2.3 Función respiración
La nariz es el primer órgano del tracto respiratorio superior del sistema
respiratorio . Su principal función respiratoria es el suministro y
acondicionamiento, mediante el calentamiento, hidratación y filtrado de
las partículas del aire inhalado.21 El vello nasal en las fosas nasales atrapa
partículas grandes impidiendo su entrada a los pulmones. 2
Los tres cornetes nasales colocados en cada cavidad proporcionan cuatro
surcos como conductos de aire, a lo largo de los cuales el aire circula y se
mueve hacia la nasofaringe.47 Las estructuras internas y las cavidades,
incluidos los cornetes y los senos paranasales, forman un sistema integrado
para el acondicionamiento del aire que se respira por la nariz. Este
funcionamiento también incluye el papel principal de la mucosa nasal, y el
acondicionamiento resultante del aire antes de que llegue a los pulmones es
importante para mantener el entorno interno y el funcionamiento adecuado de
los pulmones.  La turbulencia creada por los cornetes y meatos optimiza el
calentamiento, humectación y filtración de la mucosa.  De este modo, estas
estructuras del tracto respiratorio superior proporcionan un papel protector
importante en el paso del aire a las estructuras más delicadas del tracto
respiratorio inferior.
El estornudo es una importante acción refleja protectora iniciada por la irritación
de la mucosa nasal para expulsar partículas no deseadas a través de la boca y
la nariz.  El estornudo fótico es un reflejo provocado por diferentes estímulos,
como luces brillantes.  La nariz también puede proporcionar información
sensorial sobre la temperatura del aire que se respira. 
Se ha planteado la hipótesis de que las variaciones en la forma de la nariz
posiblemente se adapten a las diferencias regionales de temperatura y
humedad, aunque también pueden haber sido impulsadas por otros factores,
como la selección sexual. 53

Sentido del olfato

Las células que recubren la nariz involucrada en el olfato se muestran aquí.


La nariz también desempeña un papel importante en el sistema olfativo.
Contiene una zona de células especializadas, las neuronas receptoras del
olfato, responsables del sentido del olfato (olfacción). La mucosa olfativa de la
cavidad nasal superior contiene un tipo de glándulas nasales
denominadas glándulas olfatorias o glándulas de Bowman que contribuyen a la
olfacción. Los cornetes nasales también contribuyen a la función olfativa,
dirigiendo el flujo de aire hacia la región olfativa.

2.4 Fosa nasal


Las fosas nasales son dos cavidades óseas separadas por un delgado tabique
nasal sagital, comunicadas con el exterior por los orificios nasales o narinas, y
situadas por encima de la cavidad bucal.
Mucosa
El interior de las fosas nasales está tapizado por una membrana mucosa, que
se divide en mucosa respiratoria y mucosa olfativa.

 La mucosa respiratoria (antiguamente pituitaria roja) recubre la


mayor parte de la fosa nasal y contiene células ciliadas y células
caliciformes que secretan moco. El moco forma una capa superficial
donde quedan atrapadas las partículas extrañas, que son
arrastradas por el movimiento de los cilios hacia la faringe para ser
eliminadas. Además esta mucosa sirve para humedecer y calentar el
aire respirado.

 La mucosa olfativa (antiguamente pituitaria amarilla) o epitelio


olfativo, está situada en la parte superior de las fosas nasales y
contiene las neuronas receptoras olfativas, donde reside el sentido
del olfato.

2.5 Función
Durante la respiración nasal, el aire entra por las fosas nasales que son los dos
orificios, cubiertos de vellosidades y con células que secretan moco. Tras la
entrada del aire en las fosas nasales, las partículas de mayor tamaño son
filtradas en las vellosidades y quedan atrapadas en la mucosidad. El aire se
calienta y se humedece gracias a numerosos capilares que se encuentran en el
espesor del epitelio interior de las fosas nasales.

ANATOMIA

Las fosas nasales muestran dos orificios anteriores llamados narinas, situadas


en la base o superficie inferior de la nariz, que representan la comunicación con
el exterior para la entrada o salida de aire. Muchos mamíferos presentan por
debajo y detrás unos pelos gruesos, largos y rígidos llamados vibrisas.

2.6 Anatómicamente, estas fosas nasales tienen:

 Pared medial, que se denomina tabique nasal, compuesto por tejido


óseo (la lámina perpendicular del etmoides, vomer) y compuesto por
tejido cartilaginoso (el cartílago septal).
 Pared lateral, presenta los llamados cornetes nasales superior y
medio, que son unas prominencias óseas pertenecientes al
hueso etmoides, y un cornete inferior, un hueso que es un hueso
aparte que se articula al ungis y al etmoides en su apófisis
unciforme. Estos cornetes nasales están en intima relación con los
senos paranasales y contiene la desembocadura de cada uno de los
senos en los diferentes canales (meatos superior, medio e inferior).
 Meato superior: (Entre cornete superior y medio) Desemboca celdas
posteriores del seno etmoidal y esfenoidal
 Meato medio: (Entre cornete medio e inferior) Desemboca celdas
etmoidales anteriores y medias, seno frontal, seno maxilar
 Meato inferior: (Entre cornete inferior y piso nasal o porción palatina del
maxilar y lámina horizontal del palatino) Desemboca el conducto
nasolagrimal
2.7 Histología

Las fosas nasales están recubiertas internamente una


membrana mucosa formada por: un epitelio seudo estratificado cilíndrico ciliado
con células caliciformes, que se encuentra adherido al hueso, es decir, recubre
todo el tabique y todas las cavidades y salientes de estas fosas nasales, así
como también recubre el interior de los senos paranasales.

2.8 Flujo nasal de aire


El volumen de aire que pasa en un solo sentido por las fosas nasales es en
condiciones normales de 6-8 litros/minuto. Durante la inspiración la corriente de
aire puede alcanzar una velocidad de hasta 12-18 metros/segundo.5
Durante una respiración tranquila, el flujo de aire que pasa a través de las fosas
nasales es de tipo flujo laminar. Si el flujo laminar se mantuviera, el contacto
entre el aire y la mucosa respiratoria se vería reducido, empeorando los
intercambios de calor, de humedad y de partículas.
2.9 Acondicionamiento nasal de aire
Gracias a la mucosa, la corriente de aire sufre unos cambios fundamentales, es
filtrada calentada y humidificada.
Este aire es filtrado, dejando en la fosas nasales las partículas que son dañinas
para la laringe y la tráquea. Este filtro puede ser muy útil para la prevención de
alergias y procesos asmáticos.
Este aire es calentado, penetra dentro de las fosas nasales a la temperatura
ambiente, que puede ser muy fría y mediante el contacto con la mucosa. El aire
inspirado adquiere la temperatura corporal que es necesaria para que no dañe
a la laringe, la tráquea y los pulmones. De esta forma se previenen procesos
inflamatorios o infecciosos del aparato respiratorio. Durante el calentamiento
del aire inspirado se produce el ciclo nasal. En los humanos el ciclo
nasal es ultradiano. Los vasos sanguíneos de cada fosa nasal aumentan su
tamaño hinchándose y luego decrecen.
Existe una relación entre la función termorreguladora de la piel y la
permeabilidad nasal, ante el frío se produce una vasodilatación de la mucosa
nasal que disminuye la entrada de aire, lo contrario sucede ante el calor. 789
La irritación de las fosas nasales es la que desencadena el reflejo
del estornudo que puede resultar en la excreción de mucosidad o mocos.

2.10 MOCO
El moco (del latín mucorocus infimus) es una sustancia compleja, viscosa y
adherente de origen biológico producida por las células caliciformes del epitelio
cilíndrico que cubre la superficie de los órganos expuestos al ambiente externo
como método de protección. Se produce en el tracto
respiratorio, digestivo, reproductor, ocular, nasal, ótico y laríngeo
El moco (o mucosidad) es producido por un tipo especializado de células,
las células caliciformes, en el retículo endoplasmático y en el aparato de Golgi.
Segregado por las membranas mucosas, está compuesto por una mezcla
de glicoproteínas y de proteoglicanos, tiene altas concentraciones
de anticuerpos y varias funciones protectoras en el organismo. El moco,
producido por una célula caliciforme, es secretado a la luz del túbulo en
cuestión por exocitosis y diluido con agua con el fin de revestir
el epitelio expuesto a acciones nocivas presentes en los tubos digestivos o
respiratorios.2 Una de sus funciones más importantes consiste en mantener
húmedo el epitelio (en particular el de las vías aéreas) y evitar su desecación.
COMPOSICION
El moco se compone principalmente de agua (95%).
Contiene sales, lípidos (ácidos grasos, fosfolípidos y colesterol)
y proteínas (lisozimas, inmunoglobulinas, defensinas, factores de
crecimiento y factores trefoil). Su viscosidad se debe a la proteína mucina.

BIBLIOGRAFIA

1. Bansil, Rama; Turner, Bradley S. (enero de 2006). «Mucin structure, aggregation,


physiological functions and biomedical applications» [Estructura de la mucina,
agregación, funciones fisiológicas y aplicaciones biomédicas]. Current Opinion in
Colloid & Interface Science 11 (2006) (en inglés) (elsevier) 11: 164 - 170. ISSN 1359-
0294. doi:10.1016/j.cocis.2005.11.001. Archivado desde el original el 8 de agosto de 2017.
Consultado el 15 de junio de 2017.
2. ↑ Laboratorio de Biología - IFSC.
3. ↑ American Psychiatric Association (APA), M. B. First, A. Frances & H. A.
Pincus/Juan José López-Ibor Aliño y Manuel Valdés Miyar. (2001). Manual
diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales. 4a. ed. texto revisado.
Elsevier/Masson: España. ISBN 978-84-458-1087-3. http://www.eutimia.com/dsm4/

También podría gustarte