Está en la página 1de 106
LENADOR JESSAQGIAME s © 10:35 Capitulo uno Capitulo uno Anna “Voy a estar muy enojada si muero entregandole sus viveres a este imbécil”, me dije a mi misma mientras agarraba la palanca e intentaba ignorar el balanceo de mi viejo hidroavion. Eso era imposible ya que la ultima caida hizo que mi estomago se reubicara en mi garganta. El cielo habia cambiado a un horrible gris oscuro hacia veinte minutos, el cual no era un buen augurio para mi, la unica piloto lo suficientemente loca para volar en esta chatarra de avion de veinte afios de mi padre. Yo deberia estar en tierra firme con mi cara en un libro, pero Jack “el imbécil” Buchanan, el mimado de la ciudad, siempre pedia que le enviaran sus viveres todas las semanas y yo no iba a esquivar mi trabajo. Era la que evitaba que se muriera de hambre, ya que él vivia en el monte, cerca de dos horas de Anchorage en avion y no era como si él pudiera ir a la ciudad para buscar cosas. Habia una pequefa villa de © 10:35 isl pesca a treinta minutos en coche desde su casa, pero yo también enviaba cosas ahi. Otra movida tipo montafa rusa hizo temblar al avion y yo luché para mantener el curso. Aese hombre, Jack, 0 el imbécil como yo lo llamaba, le sobraba el dinero. Dinero viejo. Dinero en bandeja de plata. Yo no tenia idea de por qué abandond la ciudad y vino a Alaska. La mayoria de las personas que venian aqui lo hacian por dos razones. Una, tenian espiritu salvaje en su sangre. Jack Buchanan era guapo y fuerte, tenia musculos envidiables, pero él no encajaba con los lefadores robustos que frecuentaban los bares locales todo el verano. Y ya que vivir en la naturaleza tampoco estaba en su sangre, solo quedaba la otra opcion... el resto venia aqui a esconderse. De la ley. De un ex. De lo que sea. En realidad, no importaba, pero yo sabia cuantas personas en el bosque necesitaban envios como los mios. Y no ibaa dejar que el hombre se muriera de hambre. Lo que significaba que obtuve el desafortunado trabajo de visitarlo una vez a la semana. Si pudiera dejar mi carga e irme, eso estaria bien. Pero como la mayoria de las © 10:35 personas aqui, él no tenia mucha compafiia. Aél le gustaba acercarse al avidn, decir “hola” y hablar conmigo en el tiempo que me tardaba descargar todo. A pesar de largos meses de conversaciones semanales, yo no sabia nada de él, ademas del hecho de que estaba en sus treinta, era alto, bronceado, hermoso y le gustaban los Pop-tarts con sabora S'mores. No era como si yo fuera a admitir que él era tan caliente. Su ropa siempre le quedaba demasiado bien para ser de una cooperativa local, a pesar de ser del mismo tipo que usaban todos en el area. El tenia una de esas narices griegas con unos pomulos que hacian que quisiera frotar mi cara en la suya como un gato. Aunque era discreto con el hecho de que nosotros éramos dos de las personas mas jovenes y solteras del area, yo veia como sus ojos castafos, color chocolate, siempre iban hacia mis senos y trasero cuando yo descargaba sus viveres cada semana. Mentiria si dijera que mis ojos no hacian lo mismo hacia sus partes. Yo supuse que se lo debia a todas las mujeres, tomar nota de sus grandes pectorales debajo de sus camisas de franela, las venas que iban por sus antebrazos, la piel bronceada por detras © 10:35 de su cuello. Su cabello muy castafio crecia cada semana, él necesitaba un corte. Era eso 0 él necesitaba que mis dedos se deslizaran por su cabello indomable. Queria tirar de ese cabello, queria romperle y quitarle esa camisa. Queria treparlo como si fuera un maldito arbol y que me presionara contra la pared de su cabafia y me follara hasta que no pudiera respirar. El también seria bueno. Yo no tenia duda de que él sabia como hacer que una mujer rogara por mas. Si, pensar en él moviendo su pene como un arma funcionaba para distraerme del cielo que me hacia tambalear en mi asiento. Me sali de mi fantasia sexual de ensuefio y eché un vistazo rapido al tablero. La presion se habia acumulado en la cabina, una sefial de que la turbulencia iba a empeorar. No pienses en eso, solo vuela, escuché la voz de mi padre en mi cabeza. El me ensefié a volar cuando era solo una nifia. Volaba con mi padre cuando no estaba en la escuela, desde que tenia la edad suficiente para amarrar mis propios zapatos, incluso aprendi a hacer mi tarea en el asiento de copiloto sin marearme. Obtuve mi licencia de piloto el dia que cumpli dieciocho y tuvimos una fiesta en el hangar. © 10:35 Ahora que él ya no estaba, yo tomé sus rutas, su avion, todo. Su negocio se volvio mio. Volar era lo que amaba y yo era muy buena en eso. Pero estas tormentas siempre eran una mierda. Eran duras cuando uno estaba en el suelo. En el aire... El avion cayo unos diez pies y apreté mis dientes y apreté el acelerador con ambas manos. Era hora de dejar Alaska. Ya era hora. Yo no era salvaje. Amaba las montafias y los bosques, pero era igual de citadina que mi madre al igual que amaba el aire libre como mi padre. No queria esconderme de la vida aqui. Queria vivirla. Queria ver el mundo. Explorar todo. Queria visitar cada pais que pudiera y probar comida exotica. Queria ver las luces brillantes de Nueva York y escuchar el aullido del coyote en el desierto de Arizona por la noche. Leia cada noche y hacia listas de lugares a los que deseaba ir. Yo solo tenia veinticuatro, pero mi lista ya tenia dos paginas. Ninguna de ellas podria concretar atrapada en la insignificante Alaska con los osos y los lefadores. Después de que papa murid el afio pasado, supe que era momento de irme. Estaba harta del frio, cansada de la oscuridad, cansada de tener que llevarle © 10:35 viveres a las personas. Queria estar en otro lado, en un sitio donde pudiera volar y seguir haciendo dinero mientras lo hacia. Estaba totalmente lista para largarme de aqui y la vieja casa de mi padre era lo Unico que me detenia. No podia afrontar los gastos eirme por mi cuenta sin el dinero de la venta de la casa, pero yo no vivia exactamente en un pueblo con un gran mercado de bienes raices. Asi que esperé y estudié. Para poder irme, me quedaba solo completar un semestre de mis clases por internet de universidad. Cuando me fuera de aqui, iba a tener mi licencia de piloto y un titulo en negocios. Una rafaga vino desde el este y abofeted al avion. Mantuve mi cabeza baja, enfocada en los instrumentos, el avion, el sonido del avion. Habia un instinto para volar que no todos comprendian. Intenté explicarselo a algunos de los viejos amigos de mi padre en el pueblo, pero ellos solo se rieron... de miy de la explicacion. Habia dias en que juraba que el viento me susurraba. Eran dias en que sabia hacia donde iba a soplar y sabia que una tormenta se acercaba a pesar del radar. El clima era una locura aqui arriba, y la tormenta era prueba de eso. Se suponia © 10:35 que tendria que estar a unas noventa millas al sur por algunas horas. Mas que suficiente para entrar, darle la orden de viveres a ese hombre sexy y volver. Estaba tan cerca de salir. Incluso si Buchanan decidiera comenzar algo, tendria que decirle “no, gracias”. Yo tenia objetivos. Tenia planes. Y un nuevo hombre no encajaba en ellos. Al menos no uno de aqui. Eso significaba evitar a los hombres hasta que pudiera salir de este lugar, especialmente debia evitar a los calientes de ojos oscuros y cabello descuidado. Ahora no era el momento de distraerme. Yo habia trabajado los Ultimos afios para alistarme y me iba air a los otros estados. Enamorarme de alguien era lo ultimo que necesitaba. Asi que, por supuesto y por el contrario, mis pensamientos iban hacia el imbécil de Jack y queria que él me arrancara mis jeans, me volteara en su piso y me tomara por detras. iNo! jNo! jNO! “Detente”. Me regafié a mi misma en voz alta, pero sabia que eso no ayudaria. Forcé mis pensamientos hacia el futuro. No podia enamorarme de alguien, aun menos de un mimado de la ciudad que se estaria muriendo de hambre si no fuera por © 10:36 mi. Yo necesitaba un hombre real, uno que pudiera manejarme. Asi que enamorarme estaba fuera de lo planeado. ¢Pero qué tal si Jack solo quisiera sexo caliente? Segui monitoreando la consola, revisando el altimetro. Jack probablemente seria un buen compajfiero sexual, como podria no serlo con esos musculos y una cara asi? Sonrei pensando en el sexo caliente que podriamos tener. Una noche podria ser perfecta. Seria lo suficiente para saciar mi necesidad y darle una pequefia vacacion a mi vibrador. Solo una noche, yo podria hacer eso, seguia diciéndome a pesar de que la parte racional de mi cerebro me regafiaba. Si, claro, Anna. Acababa de voltearme los ojos a mi misma cuando el avion se tambaled con tal fuerza que solté un grito. Mierda, esa tormenta era horrible. Era hora de salir de este maldito cielo. Mi capacidad de elevaci6n estaba bajando con la intensa turbulencia, algo que no era bueno para un hidroavion. La casa de Jack estaba justo cerca de un lago y sin espacio suficiente para aterrizar en tierra por los arboles. Igualmente, lo unico que podia hacer en este avion era acuatizar. © 10:36 isl Amaba ver los flotadores cortar las grises olas, pero en este clima, tanto los acuatizajes como los aterrizajes eran brutales. Aun asi, cualquier acuatizaje era un buen acuatizaje. Diablos, eso era mucho mejor que la alternativa... Me forcé a entrar de nuevo en modo de piloto automatico. Papa me habia ensefado a volar “técnicamente”, asi que hice uso de lo que sabia y enfrenté cada problema con calma. El viento golpeaba todo el fuselaje del avion y yo sabia que el acuatizaje iba a ser malo. Dios, espero que Jack no vea esto. El ya piensa que soy una incompetente. No sabia por qué me importaba, pero eso parecia ser importante para mi, que él no me viera luchar para aterrizar al lado del agua. Si yo queria conservar mi trabajo, a mis clientes, tenia que ser considerada una mujer fuerte e independiente que volaba perfectamente. Alaska era enorme en tierra y poco densa en cantidad de personas. Un comentario malo de él en la villa de pesca cercana, y las noticias correrian. Hasta que la casa se vendiera, yo necesitaba volar para pagar las facturas. Mientras veia mi radar, sabia que © 10:36 estaba a solo una milla de mi lugar usual de acuatizaje. Seguia bajando mi altitud mientras me preocupaba que hacerlo me iba a lanzar del cielo como una piedra. Con este viento, gquién sabe como serian las corrientes de aire? Apreté mas la palanca mientras giraba un poco al oeste, luego un poco al norte, luego un poco al este para sentir la corriente de aire. Acuatizar seria mucho mas facil con el viento a mi espalda, pero en esta tormenta, el viento venia de todas direcciones. De cualquier forma que me acercara, esto iba a ser turbulento. Apunté a la zona de acuatizaje y bajé los ultimos trescientos pies de elevacion. Me tambaleé con fuerza en mi asiento, agradecida por el fuerte arnés corporal que evitaba que me golpeara la cabeza. Mis auriculares volaron después de un fuerte viento y yo intentaba ser gentil mientras manejaba la palanca y llevaba la nariz del avion hacia abajo. No podia ver una maldita cosa a través de la Iluvia y la niebla sobre el agua, pero sabia que estaba lo suficientemente lejos de la orilla. La casa de Jack estaba como un faro de luz a un cuarto de milla de mi lugar de acuatizaje y sabia que estaba en lo correcto. Los golpes y el balanceo continuaron © 10:36 mientras intentaba nivelar el avion, pero era una causa perdida. La cola iba a golpear el agua con fuerza, pero eso era mejor que si lo hiciera la nariz. Hubiera salido por el vidrio si hubiera golpeado la nariz. Agarré fuerte la palanca con ambas manos mientras el viento me empujé a solo cincuenta pies sobre el agua. Al ultimo segundo, empujé la palanca y forcé a la nariz para que subiera y la cola bajara. La cola golpeo el agua, los flotadores golpearon con mucho ruido contra el agua y mi avion se tambaleaba con violencia. Seguia ajustando el avidn mientras este atravesaba una superficie picada del lago y mis flotadores se movieron por un momento antes de quedarse quietos. Mierda. Respiré mientras desaceleraba el avi6n y giraba hacia el pintoresco puerto en la orilla. El viento era mas intenso en el agua que en el aire y tuve que acelerar mas de lo usual para llegar al lugar donde apagaria el motor. El avi6n avanz6 los ultimos cincuenta pies, mas 0 menos. Esto va a ser una gran historia cuando regrese al pueblo, pensé, pero luego me di cuenta, frustrada, que no iba a poder regresar a casa hasta que el clima se que en er aire y tuve que acelerar Mas Ue 10 usual para llegar al lugar donde apagaria el motor. El avi6n avanzo los ultimos cincuenta pies, mas o menos. Esto va a ser una gran historia cuando regrese al pueblo, pensé, pero luego me di cuenta, frustrada, que no iba a poder regresar a casa hasta que el clima se despejara. Hasta entonces yo iba a estar atrapada aqui. Con Jack. Download the Dreame App for more stories - updated daily! 00 90 Facebook ‘Twitter Whatsapp G) Scroll Down To See More 4) Release to load the next chapter © 10:36 Capitulo dos-1 Capitulo dos Jack {Donde diablos esta? Anna Jackson era una mujer delicada, pero tenia una fuerza que merecia ser reconocida. Con cinco pies de altura, mas 0 menos, ella volaba un maldito hidroavion. Era la version de Alaska de FedEx y yo confiaba en ella para realizar todos mis envios, incluidos mis malditos viveres. ~Como una mujer tan pequena volaba ese maldito avidn?Y en este clima de mierda. Mientras miraba afuera, una preocupacion se atasco en mi garganta cuando me di cuenta de que ella, capaz, tenia las agallas de arriesgarse con el maldito envio. Ya estaba oscuro, pero no era por la puesta del sol. El cielo se habia puesto de un gris asqueroso y oscuro, y el viento era tan horrible que parecia que los arboles estuvieran creciendo de lado. En esta época del afio, el sol siempre se ocultaba cerca de la media noche y apenas eran las siete. Aun no era tarde, pero estaba oscuro y con esa tormenta, yo no podia imaginarme un peor momento para estar en un avidn pequefo. isl © mm 10:36 Habia escuchado que el promedio de accidentes de ese tipo de aviones era mas alto que cualquier otro. Era obvio, con ese maldito clima. Ella, probablemente, ya estaria en camino cuando el clima cambio. éHabra regresado? Yendo adentro, recogi una radio e intenté llamar a través de la frecuencia de la villa mas cercana y llegar a la radio Anchorage para descubrir si ella estaba en camino o si estaba segura en casa. En los dias buenos habia una buena sefial. Hoy no habia respuesta, ya lo esperaba con esa maldita tormenta. Intenté en mi computadora, pero con las nubes, mi servicio satelital también estaba caido. No habia forma de enviar o recibir mensajes hasta que la tormenta acabara. Me senté en mi escritorio y pasé las paginas del portafolio de inversionistas de la pequefia empresa de tecnologia de mis primos para evitar la preocupacion. Ella era una chica grande. Sabia lo que hacia. Sabia que no valia la pena morir por mi suministro de salsa de espaguetis y papel higiénico. No. Estaria a salvo en el suelo, esperando que terminara la tormenta. Regresé a los detalles de Buchanan Technology. Mis primos habian comenzado © 10:36 la firma hacia dos afos y la habjan hecho crecer exponencialmente, algo que esperaba. Yo estaba en mi propio negocio en ese entonces y vi, estando en la ciudad, como construyeron todo desde abajo. Todos decian que los Buchanan tenjan cabeza para los negocios. Como escucharon que yo habia vendido mi compajfiia y que el trato fue lo suficientemente grande para llegar a los circulos de negocios y, por supuesto, a la familia, ellos querian que me les uniera. Pero yo vendi y me fui. No estaba listo para regresar al mundo real, ala maldita carrera interminable, y se lo dije también a todos los malditos que me llamaron para reclutarme. Si yo decidiera retomar el negocio de la tecnologia, la compafiia de Natalie y Ben seria mi primera eleccion. Regresar a Seattle era algo grande y no iba a acelerar mi deci: in. Yo habia dejado la ciudad y toda esa mierda atras por una razon. Esa razon no habia cambiado. Quizas estuviera listo mafiana, quizas necesitase un poco mas de tiempo. Hablando de tiempo. Miré por la ventana, miré la lluvia golpear de lado. El trabajo no era efectivo como distraccion. No dejaba de pensar en Anna, la mujer exasperante con sus geniales botas, © 10:36 sus jeans apretados y sus pechos perfectos que intentaba siempre esconder bajo esas camisas de manga larga que, sin embargo, mostraban cada curva. Ella era terca como los mil demonios y cada semana se rehusaba a dejar que le ayudaraa descargar el avidn. Siempre decia que no queria que se arruinara mi manicura. Oh, carifo, era lo que yo queria ronronear en su oido, tu eres /o tinico que quiero follar... Nunca logré acercarme lo suficiente para decirle eso; ella nunca parecia interesada y yo no iba a follar a una mujer que no lo deseara. Estaria mintiendo si dijera que su reaccién no me dolia un poco. Las mujeres me han querido por toda mi vida, practicamente, se arrojaban a mis pies, pero eso solo era porque sabian que yo era rico. Por eso Victoria habia pretendido haberse enamorado de mi. Yo dejé que sucediera. Incluso fui el imbécil que le pidid que se casara conmigo. Intenté olvidar ese asunto, no queria recordarlo. Habia pasado mas de un afio desde que mi vida se convirtio en una tormenta de mierda cuando descubri que Victoria me habia estado mintiendo. Mas de un afio de haberme mudado a Alaska. © 10:36 Amaba las vistas virgenes, las personas toscas, la tranquilidad. En esta época del afio, a mediados de agosto, el clima era calido, los dias eran largos y casi perfectos. Pasaba horas escalando y explorando el bosque; algunos dias, la brisa era fria como para usar una chaqueta, pero la luz del sol duraba casi veinte horas. Mi madre vino a visitarme después de un mes de haberme asentado. Incluso ella se enamoro de mi pequefia casa, el lago, el viento en los arboles y los animales salvajes que se acercaban a la orilla a beber agua. No se quedé mucho, solo lo suficiente para asegurarse de que estaba bien y lo suficiente para encontrar a Anna. Mi madre insistid en que yo necesitaba contacto humano y comida fresca, asi que contraté la compafnia de Anna para que me trajera comida una vez a la semana. Yo estaba seguro de que mi madre lo hizo porque penso que Anna era hermosa y esperaba, en secreto, que me enamorara de ella. Fue una ironia que pasara en realidad. Anna era hermosa y tenia curvas en los lugares correctos. Era honesta, trabajaba con tenacidad y era dura como las ufias. éPodria enamorarme de Anna? Probablemente. Pero yo no le importaba una © 10:37 mierda, a ella no le importaba mi dinero ni nada. Me entregaba mis viveres cada semana y me dejaba una ereccion que parecia estar totalmente enfocada en ella. Mientras caminaba, observaba ocasionalmente la ventana por encima del lavabo de mi cocina y miraba hacia el puerto. La tormenta habia empeorado tanto que no podia ver tan lejos; la Iluvia y el viento hicieron que la hermosa vista fuera gris. Pero luego lo vi. Su avion parecia una anomalia, estaba a cincuenta pies sobre el agua. La linea de blanco en el gris resaltaba como un pulgar adolorido, lo mismo que la posicion del avion. jMierda, se va a estrellar de frente! Sin pensar ya habia salido por la puerta; la lluvia y el viento me golpearon apenas crucé al porche. No me importaba. Ella estaba a poco tiempo de estrellar su maldito avion y yo sabia que haria todo lo posible por salvarla. Incluso saltar en el agua congelada del lago para sacar su trasero de ese maldito avion. Mientras avanzaba a toda velocidad hacia el puerto, vi cuando ella logro subir la parte delantera del avion en el ultimo segundo posible. Calmate, Maverick, pensé mientras sentia un poco de apreciacién en mi pecho. isl © mm 10:37 La parte trasera del avion golpe6 lo suficientemente fuerte para que lo escuchara desde donde estaba, a cientos de pasos de distancia. Eso tuvo que doler, pensé mientras aumentaba la velocidad. La rabia surgid, estaba enojado de que ella se hubiera subido a su avion en una tormenta como esta. Mi maldito envio no valia su vida. Pero ella era demasiado genial, dijo una voz en mi cerebro, mientras empujaba mis piernas a ir mas rapido. De repente me senti estUpido por mi supuesto heroismo; Anna no me necesitaba. Ella podia manejar esta mierda por si sola. Mi pene salté de solo pensarlo, pero yo segui corriendo. Se detuvo con fuerza en el puerto mientras yo me acercaba a las escaleras. Bajé rapidamente para alcanzarla y casi me caigo por mi esfuerzo. Corri a su puerta, la abri de golpe, agarré sus dos brazos y grité: “;Qué diablos estabas pensando? jPodias haber muerto!”. Ella estaba palida, lo mas palida que la habia visto nunca y sus pupilas estaban dilatadas a casi negro. Respiraba a un ritmo rapido y desarticulado, claramente afectada por el acuatizaje forzoso y por la tormenta. Aflojé mi agarre en sus brazos y acerqué mis manos a su cara, a su cuello, lo unico de © 10:37 isl piel que podia alcanzar y acaricié su frio y humedo rostro. La Iluvia me azoto y entroa la cabina. Anna qued6 empapada en segundos. Pero tocarla me hizo concentrar y levanté su cara para que me mirara, enfocandome en ignorar sus labios perfectos. “gEstas bien? ,Anna?”. Ella parpadeo lentamente como si estuviera confundida antes de que sus ojos se enfocaran en mi y se llenaran con fuego. “4Qué diablos, Jack? Estas empapando la cabina. jMi maldita consola esta empapada! Sal de mi maldito camino”. Se saco el arnés y se levant6 de su asiento, cerro la cabina y fue hacia la parte trasera del avion. Quedo empapada al instante. Ignorando el clima, reviso los flotadores, probablemente buscaba el dafo y luego fue hacia el ancla, la cual se habia enganchado a uno de ellos. Luché por unos segundos y casi se cae al agua antes de que yo la sostuviera sin casi ningun esfuerzo y la moviera a un lado. Anna dijo algo colorido, pero yo pretendi no escucharla por el viento. Con un movimiento rapido, desenredé la cadena y viel ancla caer al agua. Volteé y la vi abriendo la carga y sacando unos contenedores. © 10:37 jElla seguia intentando entregarme mis malditos viveres! Me movi para alejarla del avion. “jMueve tu trasero adentro, idiota! En caso de que no lo notaras, hay una maldita tormenta y estas empapada. jVamos!” Estaba a pulgadas de su cara, le grité y vi cémo su barbilla resaltaba desafiante. “Vine aqui para entregarte tu mierda, Jack. No voy a dejar que se arruine por un mal clima”. Ella paso a mi alrededor para llegar al contenedor, pero yo le bloqueé el camino. Cerré la carga, giré la manija para asegurar la puerta y me volteé. Estaba super enojada; su cabello rubio estaba por todas sus mejillas y frente. Mi pene vibraba en mis jeans mojados, sabiendo que se iba a quedar aqui durante la tormenta y que iba a discutir todo el dia; me agaché, coloqué mi hombro en su estomago y la levanté sobre mi. “;Bajame!”, grito ella mientras intentaba liberarse. No escuché sus protestas, solo aceleré el paso mientras me acercaba a la casa. Su trasero estaba cerca de mi cara y podia sentir sus senos mientras tocaban la tela mojada de mi espalda. Mi pene se endurecidé mientras trotaba mas rapidamente. Yo la © 10:37 queria en mi casa. Habia fantaseado por mucho tiempo sobre tenerla dentro, desnudarla de sus ropas y... Esto no era exactamente lo que tenia en mente. Entré a la casa y tiré a Anna en el sofa antes de salir a buscar los dos contenedores llenos de comida que sabia que eran para mi. Sin saber cuanto tiempo fbamos a estar encerrados aqui, no queria arriesgarme a que la poca comida que teniamos se arruinara. Cuando hube guardado todo, regresé para encontrarla acurrucada en el sofa, blanca como una sabana. Sus piernas estaban recogidas debajo de ellay ella estaba mirando al vacio. Volteé a la chimenea; a pesar de que era agosto, recolecté madera para prender el fuego. Ambos estabamos empapados y si yo tenia frio, entonces ella debia estar congelandose. También necesitaba tiempo para calmar la furiosa ereccion que presionaba dolorosamente mis jeans mojados. Ver su cuerpo claramente definido por las ropas mojadas no ayudaba, ni ver sus pezones a través de la tela de su camisa. éNo se puso un sujetador adrede? Una vez que el fuego tuvo vida, la © 10:37 rs furiosa ereccion que presionaba dolorosamente mis jeans mojados. Ver su cuerpo claramente definido por las ropas mojadas no ayudaba, ni ver sus pezones a través de la tela de su camisa. éNo se puso un sujetador adrede? Una vez que el fuego tuvo vida, la escuché maldiciéndome mientras se levantaba. Me sonrei a mi mismo, sabiendo que haberla manejado asi habia lastimado su ego. “Maldita sea, no me puedo quedar aqui. No puedo hacer esto”, ella estaba hablandose a si misma mientras iba directo ala puerta. Dios, era terca. Solté las piezas extra de madera en la caja y fui hacia donde estaba, justo en frente de ella. Mi corpulento tamajfio se alzaba sobre su pequefia figura; mi mano estaba sobre su cabeza impidiendo que abriera la puerta. Tomo solo unos cuantos segundos darme cuenta de que todo mi torso estaba presionado contra ella, desde su trasero hasta sus hombros. Mis pectorales presionaban su cuello, mi ereccion estaba claramente en su espalda baja. Mierda. ™@) Check out more stories at m.dreame.coml © 10:37 Capitulo dos-2 “No vas a volar asi”, dije. “No soy estupida. Por supuesto que no voy a volar asi, pero me sentaré y esperaré en el avidn a que termine la tormenta”, respondio Anna. Volted a verme y ambos nos dimos cuenta de mi error; mi ereccién presionaba su estomago y ambos jadeamos. Ella se despego de la puerta y yo presioné mi espalda contra ella, actuando como si mi pene no se hubiera presentado. “En serio, Jack, jsuelta la maldita puerta!” Lo dijo intentando moverme de la puerta, pero termind resbalandose en sus botas mojadas. Su trasero cay6 en el piso de madera pulida de mi cabaifia y luego ella logro arrodillarse. Me gustaba en esa posicion, arrodillada, con sus labios rosados a pulgadas de mi cuerpo. A mi pene también. Maldicién, no iba a tranquilizarse pronto. No con pensamientos sobre ella abriendo mis jeans y agarrandome para ponerme en su boca. La ayudé a levantarse agarrando su mufeca. No habia forma de que se quedara de rodillas. © 10:37 “4Sentarte en el avidn, Anna? 4En serio? éPor qué diablos querrias eso cuando tienes una casa perfecta aqui y un fuego calido?”. Por supuesto, con ella de pie yo tuve una mejor vista de sus duros pezones y me pregunté como sabrian, como se sentirian en mi boca. Mis rodillas se doblaron un poco; el pulso de mi pene casi me tumbaba. Solo un vistazo a sus pezones y me volvia loco... Aclaré mi garganta y despegué mis ojos de la tela que cubria su pecho. “No puedo quedarme aqui, contigo”. “~Por qué no?”. Mi enojo salid, real y frio como el maldito metal. “~Crees que no puedo controlar mis manos? ¢Tienes miedo de mi?”. “No”, respondio ella y dio un paso atras, levantando su cara para mirarme directamente. “No seas ridiculo”. “Vi ese acuatizaje, casi mueres”. Castigarla era mejor que imaginarla desnuda si no podia tocarla y saborearla. Abri mis brazos para cubrir toda la puerta y su mirada furiosa encontro la mia. Ella bajo sus ojos un poco y se sonrojd, claramente molesta de que haya visto su espectacular acuatizaje. “No se suponia que vieras eso”, murmuro Anna y se volted. Mojaba con agua la madera del piso con cada paso, pero todo © 10:37 lo que yo podia observar era como sus jeans empapados se pegaban a su redondo trasero. “Lo hice y me asust6 demasiado. Te vas a quedar aqui esta noche. No hay otra forma. Voy a desarmar tu avion si tengo que hacerlo” Aliviado, ya que parecia que ella habia aceptado que no iba a dejarlaira sentarse en esa chatarra helada que llamaba avion, fui a la cocina a buscar una toalla. Anna estaba parada en frente de la chimenea cuando regresé y se la entregué. “Ahora sécate, vas a arruinar mi piso”. Ella giro y miro sus botas. “jEstas preocupado por tu piso?” Me tiro la toalla y fue directamente hacia a la puerta. “Olvidalo. Eres imposible. Me voy a esperar dentro del avion". Bloqueé su camino antes de su tercer paso. “No estoy seguro de si deberia darte una nalgada por ese comentario o por ser tan temeraria con tu vida”. La rabia me superaba y me acerqué a Anna, apenas a un aliento de distancia de su cara. Mis ojos se enfrentaron a sus ojos verdes, retandola a que abriera su boca de nuevo. Ella no tenia idea de quién era yo. Yo fui el CEO de una compafia multimillonaria. La vendi por miles de © 10:38 millones de dolares. Nadie me hablaba de la forma en que lo hacia ella. Y algo de su fuego hizo que despertara una parte dentro de mi. Por primera vez desde que me alejé de Victoria y sus mentiras, senti algo mas que una fria indiferencia por el mundo. La apatia mientras la rabiosa que tenia se derriti delante puso sus manos en su cadera y me “gNalgada?”. “Nalgada", repeti, imaginando su redondo trasero sobre mi regazo. Jugaria con su vagina, por supuesto. Y obviamente no le daria nalgadas verdaderas, ni muy fuertes. Solo lo suficiente para que se retuerza, gima y ruegue por mas. “Estas loco, Jack Buchanan”. “Ten cuidado con lo que dices, sefiorita. Jackson. No conoces la mitad de mi historia, asi que no presumas de que la sabes”, “ZAsi que tu eres el cavernicola grande y malo que me dara nalgadas? éPor decir lo que pienso?”. Sonrei y bajé mis ojos a sus labios. “Por esa boca inteligente, si. Si fueras mia, yo te desnudaria en mi regazo y te haria correr con una mano mientras te doy nalgadas con la otra”. Mis fosas nasales se abrian mientras veia como sus ojos se iban amis © 10:38 labios. Ella dio un paso atras, pero estaba ya demasiado herida en su orgullo como para retroceder mas. Lo vi en su postura, en la intensidad de sus ojos; y todo mi cuerpo zumbo con adrenalina, con lujuria, con la necesidad de conquistar todo ese fuego y hacerlo mio. “Tu eres el niflo bonito que no puede manejar su vida, que huye del mundo escondiéndose aqui en el bosque. Eres un cobarde, Jack y tienes miedo de mi. Tienes miedo de una mujer que vive y toma oportunidades”. “Arriesgar la vida en esa tormenta no fue tomar una oportunidad, Anna. Eso fue casi un suicidio”. “He estado volando desde que fui lo suficientemente mayor para caminar. Yo sé lo que hago”. Cada semana cuando ella me traia los viveres, siempre evitaba mis comentarios, hacia bromas sobre mi madera mal cortada, sobre mi incapacidad para perfeccionar el arte de la pesca. Yo no era un chico de Alaska, nacido y criado aqui, pero, maldicién, yo lo hacia bien para un nativo de Seattle que nunca habia estado en el bosque. Sus comentarios alimentaban esa inseguridad, al saber que yo no pertenecia aqui 0 a Seattle © 10:38 o aningun lado. Asi que exploté. Caminé hacia adelante, empujandola hasta que estuvo contra la pared de madera. “Hmm, no. No tienes idea de lo que estas haciendo”. “Pudrete”. Sus ojos estaban encendidos y ella tenia las manos en pufios a los lados y sus nudillos estaban blancos. Su camisa mojada estaba por encima de sus duros pezones y eso fue todo lo que pude hacer para no inclinarme y tomar uno de ellos en mi boca. Me incliné lo suficiente para rodearme con el aroma de Iluvia y de mujer. Acercandome, le susurré al oido, me aseguré de que mis palabras fueran calientes y pesadas para su carne. “No. Creo que te follaré”. Anna se balance6 hacia mien una reaccion que no estaba seguro de que ella controlara. En un movimiento calculado, yo incliné mi cuerpo hacia ella; mi pene presionaba su cadera. Ella suspiro y me miro. “No te entiendo, Jack. {Qué quieres de mi?” “Quiero esa boca inteligente, princesa, en todo mi cuerpo. Quiero follarte. Aqui mismo, ahora mismo”. Crei que me golpearia con fuerza, pero en vez de eso, Anna casi me arranca el cabello en su intento de jalarme para © 10:38 besarme. No fue un pico casto, fue un beso lleno de meses de deseo aguantado y mucha frustracion. Nuestras bocas se movieron con fuerza y no me preocupé por ser gentil. Yo era salvaje y ella también lo era. Nos tomamos a la vez como animales; nos rompimos la ropa, nos jalamos el cabello y nos pellizcamos la piel. Mordimos nuestros labios mientras nuestras lenguas se enfrentaban y finalmente, finalmente, yo movi mis manos para romper su camisa; los botones cayeron al piso de madera y yo saqué esa tela de su cuerpo. Jesus, no tenia sujetador. Sus senos eran perfectos, pequefios, turgentes, con pezones de un rosa palido. “¢Siempre sales sin sujetador o solo cuando vas a volar?”. Respiré, levanté mis manos y masajeé esos suaves globos. Su piel estaba humeda y fria, pero era hermosa y sedosa. Queria enterrar mi cabeza entre ellos y respirar. Queria sostenerlos juntos y pasar mi pene entre ellos. Queria correrme por esa piel palida y marcarla, poseerla. Sus ojos se cerraron y su cabeza se fue hacia atras. Pellizqué sus pezones y le provoqueé un suspiro. “Mirame. Quiero ver tus ojos mientras te toco”. isl © mm 10:38 Lentamente, ella abrio sus ojos, eran de un verde oscuro y tormentoso y parecian estar desenfocados. Pasé mi mano por su cintura y desabroché sus pantalones, bajandolos por sus caderas curvilineas. Me arrodillé ante ella para desnudarla. Me detuve solo un segundo para verla; sus piernas palidas brillaban en la luz brillante de mi cabafia. Miré arriba y coloqué mis pulgares en sus bragas de seda rosada. Lentamente, muy lentamente, saboreé el momento en que las bajé por sus muslos. Cuando iban por sus tobillos, miré hacia arriba, el cuerpo de una diosa que estaba ante mi. Me arrodillé a sus pies y senti que algo en mi interior se liberaba, algo que no habia liberado por mucho tiempo. Yo la queria. Dios, yo queria esto... a ella, por mucho tiempo. Me levanté y Anna se movio para desabrochar mis pantalones, pero encontré la misma resistencia que encontré con el de ella. Nota para mi mismo, no deberias usar jeans la proxima vez que te embarques en una mision de rescate que pudiera terminar en sexo salvaje. Ella desato parte de su frustracion, de © 10:38 su ansiedad, en mis pantalones y dejo marcas rojas en mis muslos y donde sus ufas arafaron mis piernas. No me importaba una mierda. Yo solo queria que mi pene estuviera dentro de ella. Sin poder esperar, la ayudé y me quité el resto de la ropa mas rapidamente de lo que hubiera pensado que fuera posible. Tan pronto como me saqué mis jeans y mi ropa interior, tomé un condon del ropero mas cercano, me lo puse y me acerqué una vez mas hacia ella. Que dios me salve, yo queria estar dentro de ella. Levantando mis manos, las enredé en su cabello humedo mientras sus pequefias manos empujaban mis caderas. Ella se paraba de puntillas para besarme y yo me di cuenta lo pequefia que era. Mi pene le llegaba por encima de su estomago. Ella era pequefia, tan pequefia que podia levantarla como una pluma y follarla en cualquier posicién que quisiera. Esto iba a ser divertido. La empujé hacia la pared, acomodando su cabeza con mi gran mano para que no se golpeara con fuerza. No queria que tuviera un dolor de cabeza. Yo queria que le doliera su vagina. Esa era una seccioén totalmente diferente de su anatomia. © 10:38 Ella acerco sus labios a los mios y nos enfrentamos de nuevo. La levanté con un movimiento rapido y, como si hubiera sido practicado, ella rodeo mis caderas con sus piernas. Su vagina estaba justo en frente del calor de mi pene y ambos gemimos lo suficiente como para que se escuchase a través del viento y la lluvia. Manteniendo una mano en su cabello, jalé su cabeza hacia atras mientras deslicé la otra lentamente por su hombro, por la curva de su cintura hacia su trasero. La apreté ahi y la mantuve lista para mi beso y luego bajé mi mano, pasandola por su trasero para probar su nucleo femenino y luego deslicé dos dedos dentro de ella en una penetracion lenta. Caliente. Humeda. Perfecta. “Jack”. Ella gimio mi nombre, sus caderas se sacudian mientras la trabajaba con mis dedos en su interior. Amaba el sonido de mi nombre en sus labios y queria escucharlo de nuevo. De nuevo. Besé su mandibula. Su cuello. La follé con mis dedos hasta que sus muslos se pusieron tiesos y ella intenté forzar el ritmo, intent6 montar mi mano. “Estas demasiado mojada para mi, Anna’, le dije en su cuello mientras avanzaba © 10:38 < Capitulo dos-2 & hacia su oreja. Mordi su ldbulo y ella gimio. “Quiero deslizar mi pene dentro de ti, llenarte. Hacerte mia”. “Jack, deja de hablar. Solo follame”. Mientras ella intentaba morder mi oreja, su espalda se arqueo en la pared. El movimiento coloc6 su caliente humedad directamente encima de mi pene, que se estremeci6 al contacto. “Tu deseo es mi comando, princesa”. Tomé la oportunidad y bajé ambas manos a su cuerpo para abrir sus nalgas, abrir los labios de su vagina y entrar con un movimiento fluido, luego utilicé mi agarre en ella para llenarla con mi pene. =) Check out more stories at m.dreame.com| 00°90 Facebook ‘Twitter Whatsapp @ Scroll Down To See More We've sent you 50 Coins to your wallet = Vw Y Ww © 10:38 Capitulo tres Capitulo tres Anna El me bajo, me penetro fuerte, rapido y exactamente como queria. El tamafio de su pene me tomo por sorpresa. Grufi mientras me ensanchaba y me llenaba como nunca. Exhalé mientras Jack gemia con un sonido que me parecio salvaje y territorial. Estabamos totalmente quietos mientras yo movia mis caderas e intentaba acomodar su pene, que habria sido mucho para mi si no hubiera estado tan caliente. Si no hubiera estado tan humeda para él. éPor qué él? Si, él era grande y hermoso y demasiado complicado para una chica como yo. Peroa mi cuerpo no le importaba una mierda eso. Mi cerebro se derritio la primera vez que me beso. Pero este anhelo, ,este deseo? Esta necesidad desesperada de que me llenara, de que me besara? De que se moviera. Dios, necesitaba que se moviera ahora. “Dios, Jack. Muévete. Féllame”. Mordi su hombro en una demanda silenciosa. El habia despertado meses de lujuria, deseo y © 10:39 necesidad contenida. Yo estaba hambrienta de él, como un animal que acababa de despertar de una larga hibernacion. Lo necesitaba duro, rapido y caliente. El levanto una mano hacia mi cabello y jal, moviendo mi cabeza para que pudiera mirarlo a los ojos. Ese movimiento dominante hizo que mi vagina se apretara en él y yo gemi, totalmente perdida en él. “~Me quieres, princesa? ~Necesitas mas?” “Si”. Dios, si. Date prisa, maldita sea. Mi cuerpo me traiciona, pensé mientras me entregué a las penetraciones expertas de Jack. Sus manos no eran menos peligrosas que su pene, las cuales utiliz6 para levantarme y bajarme sobre este. Ibaa tener marcas ahi luego, pero por ahora, dios, esto era demasiado bueno. “No voy a dejartela facil esta vez, princesa. Aguanta...", me dijo mientras mordi mi labio y me agarré a sus hombros, aguantandome porque él era lo Unico en mi mundo. Toda mi existencia se reducia a su aroma, a su calor, a sus penetraciones fuertes y calientes que me Ilenaban hasta que me dolian. Me aguanté para no flotar a la deriva. Estaba fuera de control, girando, luchando por aire. © 10:39 Me tomo unos momentos registrar sus palabras en mi cerebro lujurioso. ¢&sta vez? jEsta seria la Unica vez! Apenas tuve tiempo de pensar cuando él empujo de nuevo y me robo el pensamiento. “Adelante, Jack”, lo reté mientras apreté sus hombros con mas fuerza. En respuesta, él flexiond esos tensos musculos y caderas para empujar su pene adentro y afuera con mas rapidez. Todo su tamafo se deslizaba, su grueso pene me llegaba al fondo, empujando mi Utero con cada penetracion y solo su grosor era suficiente para callarme. Yo me dejé ir y él también. Me miro como si fuera la unica cosa que existiera en su mundo. Mordi mi labio y él me vio hacerlo. Si yo gemia, 61 me escuchaba. Si yo cerraba mis ojos porque me sentia abrumada, necesitada y fuera de control, él siempre me traia de vuelta y me exigia que lo mirara. El queria poseerme, verme. Nunca me senti como al hacerlo en ese momento, como si fuera la Unica persona en el mundo que importaba. El fuego crepitaba en sus ojos, dominantes, frustrados y posesivos. Cada conversacion que tuvimos salié ala superficie mientras me empujaba contra la pared y vi algo entre nosotros que no habia © 10:39 visto antes. Con el paso de las semanas y los meses, esta tension se habia ido creando entre ambos. Mantuve su mirada, no queria ceder y mirar a otro lado mientras me follaba, mientras sus ojos de chocolate brillaban y su mandibula se prensaba. El pene de Jack me penetro sin piedad y por mi lado, yo me deleité en su ferocidad, en su naturaleza tosca y apenas controlada que tenia. El era todo hombre, fuerte y demandante y yo me derreti por instinto, amaba como su tacto dominante y posesivo me hacia sentir. Querida. Segura. Femenina. Poderosa. Hermosa. No habia duda de que mafiana iba a estar adolorida, pero eso no me importaba. No tenia idea que me gustara tan fuertemente, pero con Jack, era... primitivo. Caliente. Perfecto. Mordisqueé y chupé su cuello, sus labios, su maldita y hermosa mandibula. Lo reclamé con mi boca mientras él me reclamaba con su pene. Renuncié a mi cuerpo por él, demasiado asombrada para creer que este lado de él era real, tan crudo, salvaje y demandante. Como si leyera mis pensamientos, Jack © 10:39 se rio a través de su respiracion forzada. “4No esperabas esto de un chico citadino, cierto, princesa?”, Cada una de sus palabras fue resaltada con una penetracion. Mantuve su mirada por medio segundo antes de cerrar los ojos y gemir. No me importaba si escuchaba, si él sabia lo que me hacia. No podia esconder mis respuestas de él. No solo podia verme, verme en realidad, sino que también podia sentirlo con las paredes de mi vagina abriéndose para él. Las embestidas de Jack casi me hicieron venir ahi mismo, pero yo igualmente arqueé mi espalda para frotar mi clitoris en la dura pared de su abdomen. El paso mis rodillas por sus brazos y me abrio totalmente, me empujo a la pared para poder colocar su cuerpo en contra del mio. Yo estaba totalmente al borde y sus grufidos se impregnaron en mi cuerpo y en mi cabeza, y me empujaron del borde. Eran demasiado sensuales, demasiado honestos. El sonaba como un hombre que apenas podia aguantar y, demonios, eso era caliente. Mis ufias se clavaron en sus hombros, en su espalda, en su cuello y mis dedos jalaron de su cabello. “Mas”, comandé. isl © mm 10:39 Sus largas y duras manos fueron hacia mis pezones y los apretaron con fuerza mientras yo usaba la pared como soporte. Si, ese era lo mas que yo queria. Todo llegé a un momento culmine y mi espalda se enderezo contra la pared de manera involuntaria. El movimiento hizo que Jack fuera hacia atras, forzandolo a sostenerme por debajo de mis caderas. Me di cuenta, medio segundo antes de que sucediera, de que este nuevo angulo permitiria a Jack alcanzar mi punto G, y lo hizo. El golpeo ese conjunto sensible de nervios mientras mis gemidos y llantos se volvieron imposibles de comprender. Mis ufas arremetieron contra él mientras yo perdia la capacidad para pensar. Arafié sus pectorales, sus biceps. Estaba perdida en la espiral del orgasmo que no podia detener. El grufiido de placer de Jack me advirtid que las paredes de mi vagina y mis llantos incoherentes hicieron que él se liberara. Yo apreté mis musculos internos una y otra vez, empujandolo al fondo para poderlo hacer llegar al orgasmo. Mientras su frente caia sobre mi esternon, sus manos agarraban la pared para sostenerse. El me follé con mas fuerza, golpeo mi punto G, froté mi clitoris con su duro cuerpo y nos corrimos juntos © 10:39 isl en una rafaga de llantos y exclamaciones guturales. El pene de Jack se sacudia con tanta fuerza que me forzo a gritar de nuevo cuando mi carne sensible reacciond; mi climax se extendid. El beso gentilmente mi pecho, mis pezones desnudos, el valle entre mis pechos, mientras me llenaba; salid mas de lo que esperaba. Yo solté un suspiro pesado y satisfecho, uno que le dijo a Jack lo complacida que estaba. Me hubiera enojado conmigo misma por eso, excepto que él también solté uno. Sonrei y coloqué mis brazos alrededor de su cuello para llevar mi boca a su oreja. "Bueno, eso fue una sorpresa’. El sonrid y sus manos agarraron mis caderas una ultima vez. Me levanté de su pene, pero mi sexo protests y lo apreté mas. Ambos gemimos mientras él continuaba moviendo su pene dentro y fuera de mi. Me senti vacia... y seguia caliente. ~éC6mo diablos iba a querer mas sexo después de eso? Cuando él me dejo en el suelo, ambos nos quedamos mirando. El me habia desnudado, pero yo no tuve tiempo de mirar. Demonios, él valia la pena. Era musculoso desde su amplio pecho hasta sus caderas. Sus piernas eran gruesas y fuertes. Queria © 10:39 frotar mi cuerpo con el de él como si fuera un gato, pero me sostuve en la pared fria y me mantuve ahi. Habia sentido esos musculos en un gran contraste con mis curvas femeninas. Su cuerpo tenia tantas contracciones junto con el mio que cada una de ellas me calentaba. Cuando yo crei que Jack seria suave y débil, él me mostro que era fuerte y estaba en control. Me habia revelado un lado de él que no esperaba, y queria ver mas de ese lado. Me sali de mi ensimismamiento cuando me di cuenta de que Jack me estaba mirando también. Sus ojos miraban la piel de mi cara, mis senos, mi est6mago, mis caderas... mi sexo. Lo senti de nuevo y vi su duro pene, atin cubierto con el condén Ileno. Como si leyera mi mente, él se lo quito y lo tiré a una pequefia papelera debajo de su mesita. Me habia follado y ni siquiera habiamos salido de la sala de estar. gjEso me hacia un genio 0 una perra? Mirando su duro cuerpo, yo me dije genioy le dije a la nifia buena llena de culpa que se callara. Las chicas buenas no podian disfrutar tanto. Las chicas buenas no podian follar a Jack Buchanan. Jack se aclaro la garganta y sus ojos castafios oscuros encontraron los mios. © 10:39 isl Esos no eran los ojos enojados a los que estaba acostumbrada. Ahora veia en ellos intensidad, necesidad, deseo y estaban totalmente enfocados en mi. Mis rodillas casi se sacudian al reconocerlo. El comenzé a tocarme lentamente; un brazo me acariciaba la piel mientras avanzaba. Cuando lleg6 a mi espalda, su mano bajé rapidamente a mi trasero. Escuché un grufido de apreciacion y sabia que le gustaba lo que veia. “Eso es por haberme asustado”. Luego, su dedo paso entre mis muslos y a través de la humedad que aun me cubria. “La proxima vez no sera tan rapido”, me susurr6 en mi oido y senti escalofrios por mi columna. “Voy a aprenderme cada curva de tu hermoso cuerpo y voy a hacerte correr con mas fuerza. Una vez no es suficiente. Luego, después de memorizarte de pie a cabeza me voy a divertir un poco”. Por primera vez en mi vida, estaba aturdida y en silencio. Totalmente callada. Mi boca solo se abria y mis dientes ocasionalmente chocaban cuando intentaba formar oraciones. Jack sonreia, hizo un sonido ligero y alegre mientras tomo mis manos y me llevo a la habitacion. Apenas tenia energias para registrar los paneles © 10:39 oscuros, un lujoso sillon y una ventana importante. Estaba demasiado aturdida para hablar, mucho mas para pensar, mientras él me besaba con gentileza. éGentileza? Yo podia aceptar que él fuera fuerte y salvaje, spero Jack siendo gentil? No sabia qué pensar y no podia resistirme. El me empujo sobre el suave edredon y los cielos grises tormentosos nos daban la unica luz para ver, mientras él se acomodaba en la cama como un animal salvaje acosando a su presa. Demonios, él era muy musculoso. 4Y ese pene? Eso logro entrar en mi? Colocando una rodilla en la cama e inclinandose sobre mi, me bes6 los labios, la barbilla, mi garganta. Sus manos pasaban por mi estomago, mis brazos, mis muslos, y su exploracién me calentd. Todos mis nervios habian despertado con nuestra furiosa sesién sexual en la sala de estar y ahora estaban atentos, felices de recibir la atencion de su boca y de sus manos. “Hmm”, penso Jack. “{Por donde comenzar?”, susurr6 mientras mordisqueaba la curva de mi cadera. Sus besos lo Ilevaron hacia dentro, hacia mi nucleo y yo gemi cuando su lengua tocd mis isl © mm 10:39 pliegues. “Mmm”, grufid en contra de mi piel sensible. “Creo que este es un buen lugar como cualquier otro”, brome6, y luego nuestros ojos se encontraron por encima de mi estomago. El me ensefié una sonrisa malvada antes de que su cara bajara y mi cabeza cayera en las almohadas, consciente, pero superada por su lengua y sus dedos mientras me hacia correr una y otra vez. =) Check out more stories at m.dreame.com! Facebook ‘Twitter Whatsapp G Scroll Down To See More (@ Release to load the next chapter © 10:40 Capitulo cuatro Capitulo cuatro Anna Me desperté. La realidad me golped antes de que abriera los ojos. jDormi con Jack Buchanan! jSoy una maldita idiota! Me senté y las sabanas se deslizaron; toda mi piel estaba expuesta. Mis pezones estaban duros. Y yo me sentia... montada. Hinchada. Adolorida y un poquito caliente. Totalmente follada, como dijo Jack anoche. Tenia que irme. Tenia que salirme de la cama de Jack. Tenia que irme de Alaska. La noche con Jack fue algo de una sola vez, un error. Tenia que irme antes de que el barco zarpara a un destino que no habia planeado. éLos orgasmos que me habia dado? Si, me podria volver adicta a ellos. El era adictivo. No era un imbécil. El solo era Jack, el tipo caliente que era salvaje y también carifoso en la cama. Atento. Original. Que se aseguro que yo me corriera primero... cada vez. No tenia idea que habia tantas posiciones, superficies y formas de tener sexo. El estaba de espaldas, con un brazo © 10:40 sobre su cabeza. Dormido, no era peligroso, pero cuando se despertara, cuando esos ojos oscuros se abrieran, me iba a atrapar. Mierda. Busqué mi ropa por la cama, pero no estaba a la vista. Sali de la cama con cuidado. No habia forma de que lo despertara. El clima habia mejorado en algun momento durante la noche y el amanecer estaba claro. Las aves cantaban afuera de su hogar y la luz atravesaba sus cortinas delgadas. Tenia que estar en el avion, dejar atras a Jack y a su pene bidnico. Si Jack fuera un superhéroe, el sexo seria su superpoder. Y yo no tenia oportunidad de ganar esa guerra. Mi cuerpo lo deseaba, incluso ahora. Peor aun, mi corazon me dolié cuando vi el asomo de barba en su cara y recordé la forma en que sus ojos me habjan mirado cuando me susurr6é promesas oscuras y erdticas. A Jack le gustaba hablar y decirme cada pequefia cosa sucia que le haria a mi cuerpo. La anticipacion era casi tan potente como la concrecién. El me habia calentado tanto anoche que apenas tenia que respirar sobre mi clitoris para que yo fuera un desastre gritando su nombre como una © 10:40 isl mujer salvaje. Si. Mi Unico recurso, si queria salvar mi cordura, era huir como una cobarde. Busqué la ropa pasando la puerta abierta de la habitacion, encontré su camisa en el piso de la sala de estar y caminé de puntillas hacia ella. Mi camisa estaba a unos pies de distancia, arrugada y humeda, y ya no tenia ni un maldito botén. Me coloqué la camisa de Jack sobre mis hombros y la abotoné. Recogi mis calcetines mojados, recogi mis jeans y me puse mis botas. Todo estaba asquerosamente mojado, pero yo solo necesitaba llegar a casa. Me preparé para escuchar la voz de Jack o sus pasos desde la habitacion, pero no escuché nada. Me escabulli hacia la puerta, giré la perilla y recé silenciosamente para que no escuchara. Mientras me escapaba por el lado sur de su casa y me acercaba a los arboles, empecé a sentir que se me apretaba el pecho y la culpa me asaltaba por escapar. E/ no merecia despertarse solo en esa cama enorme. Estuvo genial anoche. Los pensamientos inundaban mi mente y yo recordaba como se sentia el aliento caliente de Jack en mi cuello mientras me tomaba, esa vez desde atras. El cumplié su © 10:40 palabra; se aprendio cada pulgada de mi cuerpo antes de darme su pene y, al final, tuve que rogarle. Sus manos duras y masculinas me tomaron por la cintura mientras su pene me penetraba; mis nervios estaban muy sensibles mientras yo me corria de nuevo. Y de nuevo. En algun momento perdi la cuenta, algo que nunca habia hecho con otros hombres ya que no era dificil contar cero o, en ocasiones, hasta uno. Segui avanzando por el camino, atravesando el area de los arboles y dirigiéndome al agua, pero mi mente seguia en la cabafia. De repente, rememoré la barba de Jack en mi cadera. Comencé a balbucear y me tropecé con una rama mientras recordaba su barba en la piel suave de mi muslo interior. En un momento, él me susurro: “Te voy a cuidar, bebé. Esta vez, todo es sobre ti", mientras su boca atacaba mi vagina. Me habia acercado hacia si mientras yo liberaba mi orgasmo, totalmente fuera de control. Solté un grufido de apreciacion; mis rodillas estaban débiles por la cantidad de placer que me habia dado. Mi nucleo se emocionaba con solo pensar en la boca de Jack. © 10:40 Ves, por eso era que tenia que largarme de aqui, me regané a mi misma y aceleré el paso. Mantuve un ojo en la casa mientras avanzaba esperando que Jack no abriera la puerta y me viera entre los arboles. Cuando finalmente estuve lejos de su cabafia, volteé en direccion a mi avion y me encontré directamente con el maldito Jack Buchanan. “ZA donde crees que vas, sefiorita Jackson?”, pregunto. Su cara podria haber estado esculpida en piedra porque yo no tenia idea si él estaba enojado, herido o si solo era un imbécil. Reboté en su pecho, me puse derecha y lo miré mal para cubrir mi cara sonrojada. El tenia unos jeans mal puestos y nada mas, lo que significaba que su piel griega brillaba bajo el sol de Alaska. En comparacion, yo me sentia como una vagabunda, aun estando atrapada en mis ropas mojadas y en mis botas resbaladizas. Esta era la peor caminata de la vergUenza. La peor. “4De donde saliste?”, le dije. Brillante respuesta, Anna. Caminé alrededor de él para ver mi avion. Me olvidé de Jack por un momento cuando vi toda la destruccion de la ira de la tormenta que se veia claramente bajo el sol de la mafana. El flotador derecho © 10:40 estaba abollado, asi que mi bebé estaba levantado hacia un lado y apenas se mantenia a flote. Mierda. No habia ninguna forma en que pudiera despegar o acuatizar con el flotador luciendo de esa forma. Jack aclaro su garganta y yo volvi a verlo. “Sali de mi cama, que es donde estabas hace cinco minutos”. El me mird, retandome a decir... qué? “Ahi es donde deberias estar ahora mismo’. “No puedo quedarme aqui, Jack”. No tenia ni el tiempo ni la paciencia para explicarle las cosas. El era muy peligroso. Era como mi kryptonita personal y si permanecia aqui con él, me iba a quedar. En Alaska. Aqui. Viviendo en la nada. “Bueno, ahora mismo no iras a ningun lado. Parece que casi destruiste uno de los flotadores cuando acuatizaste anoche”, dijo él cuando volteé para ver mi avidn. “Me pregunto qué mas se habra soltado cuando lo sacudiste”. Mi corazon se acelero un poco al recordar lo de anoche. Sabia que habia tenido suerte, que podria haber sido mucho peor, pero también me avergonzaba mucho el hecho de recordar que Jack me habia visto acuatizar el avion. Eso solo me hizo enojar y ponerme a la defensiva. Habia © 10:40 sobrevivido. Cada acuatizaje era un buen acuatizaje, ,cierto? “Puedes tu bajar un hidroavion en una tormenta feroz? 40 siquiera volar un avion, chico de ciudad? {No? Ya lo sabia”, le respondi y me aguanté las ganas de patearlo en la entrepierna, pero luego recordé lo que él pudo hacer con lo que habia en esa entrepierna. Lo empujé fuera del camino para inspeccionar el dafo y grufi. Jack miré con curiosidad al flotador. “No soy un piloto, pero eso luce un poco arruinado”, dijo con inocencia, pero me termino de enojar. “En serio, Jack? jNo puedo volar ni acuatizar un hidroavion sin los flotadores! Tengo que llamar a otro piloto para que traiga esa parte. Estoy atrapada aqui hasta entonces”. “Puedo pensar en algunas cosas que podemos hacer para pasar el tiempo”. No pude evitar notar que sus jeans bajos me dieron un vistazo de la curva de su trasero. Vi los arafiazos en su piel dorada. Marcas que yo habia puesto. “Y luces lo suficientemente bien para comer usando mi camisa”. Totalmente sexual. El era peligroso. © 10:40 Irresistible. Y yo estaba usando su camisa; su calidez y su aroma bromeaban con mis sentidos en la ligera brisa de la mafana. “No", negué con mi cabeza. “No, no, no. No. Esto solo iba a ser una noche. Eso es todo”. El se encogié de hombros y la esquina de su boca se alz6. “Te puedo llevar al pueblo para ver si los mercantes tienen un repuesto. Hay bastante posibilidad. O puedes llamar. De cualquier forma, esto...”, él movid su mano entre nosotros, “es mas que solo una noche, princesa. Solo preguntale a tu vagina. Ella sabe”. Yo casi me muero de la risa, pero el impulso fue apenas conquistado por ese atropello. No sabia lo que él quiso decir en su comentario de mds que una noche y yo me quedé ahi, aturdida, en silencio mientras lo miraba caminar por el muelle y por el camino del bosque. Lo segui, sabia que quedarme ahi era una completa pérdida de tiempo. Una noche. Una. gEntonces por qué mis pezones se emocionaban con la idea de mas? Intenté olvidar como se sentian sus bigotes en mi seno anoche. O la forma en que se calmé cuando se corri6 por tercera vez, con su mandibula apretada y sus ojos cerrados con Wie all @ mm 10:40 seno anoche. U Ia forma en que se calmo cuando se corri6 por tercera vez, con su mandibula apretada y sus ojos cerrados con fuerza. Intenté olvidar como me habia hecho reir cuando me volted para que me sentara encima de él, estilo vaquera. O la forma en que nos habiamos sonreido después y nos quedamos dormidos entre nuestros brazos. No. Definitivamente no voy a pensar en nada de eso. ™) Check out more stories at m.dreame.com! Facebook ‘Witter Whatsapp @ Scroll Down To See More Release to load the next chapter © 10:40 Capitulo cinco Capitulo cinco Jack Conducir al pueblo fue tenso, por decirlo de alguna manera. Yo queria darle unas nalgadas a Anna por intentar escaparse. ¢Qué diablos fue eso? gTuvimos una gran noche juntos y ella queria irse sin decir adios? Mientras yo agarraba el volante, mis pensamientos se iban a la noche anterior, recordando mis tres orgasmos potentes e increibles. Perdi la cuenta de los de ella y ni siquiera intenté suprimir el sentido de satisfaccion primitivo y muy macho que tenia al saber que trabajé su cuerpo como un maestro, la hice correrse una y otra vez hasta que estaba sumisa en mis manos, hasta que me dio todo. Encajabamos perfectamente. Estabamos bien juntos y eso me sorprendié mucho. Es cierto, la tensién entre nosotros en los Ultimos meses no era enojo, era una quimica a fuego lento que decidio hervir anoche. Definitivamente, habia algo entre nosotros, algo mas que solo sexo. Pero ella intento abandonarte, imbécil. i © 10:40 La ropa estaba seca, no habia nada que pudiera hacer sobre su camisa y, la verdad, no queria. Amaba el hecho de que estuviera usando la mia. Intenté mantenerme ocupado haciendo café y el desayuno en la mafiana, pero nada ayudo. Ella era como un iman y yo no podia evitar desearla. Incluso ahora sabia que sus bragas estaban en la secadora y que ella no tenia sujetador; yo podia ver de reojo sus senos rebotar en cada bache del maldito camino sucio hacia el pueblo. éTenia idea del efecto que causaba sobre mi? Luego de unos minutos en camino, Anna se inclind en su asiento y respiré hondo. “Lamento haber intentado irme esta mafiana sin despedirme. Es que es... complicado. Yo no quiero una relacion. No quiero nada que me impida irme de Alaska. No lo tomes personalmente’, afadio ella mirando de reojo en mi direccién. Me animé con su comentario. Irse de Alaska. “jA donde iras si te vas de Alaska? {No tienes familia aqui?”, le pregunteé, enfocandome en el camino de lodo. “No, mi padre murié el afio pasado”, murmuro Anna con tristeza. “Pensé que lo sabias ya que él hacia la entrega de los © 10:40 isl viveres antes que yo. Ya no tengo raz6n para quedarme aqui, ademas de nuestra casa. He intentado venderla, pero nadie la compra. Una vez que se venda, me iré de aqui", me dijo ella, con su mirada en sus dedos entrelazados en su regazo. “No sabia lo de tu padre. Lo siento”, dije y permiti que el silencio nos cubriera por un segundo. “Gracias”, susurro ella y ambos nos quedamos en un comodo silencio por el resto del viaje. Sin embargo, mi cerebro no se apago y pensaba en esta hermosa y feroz mujer que queria irse de Alaska. Que queria dejarme y correr hacia el caos y el ruido del que yo estuve escapando el ultimo afio. Alaska, mi cabafia en el medio de la nada, se habia vuelto un hogar para mi. Pero mientras yo intentaba, sin éxito, ignorar ala apasionada mujer a mi lado, me pregunté cuanto mas duraria eso si ella se iba de Alaska y me dejaba atras. Cuando llegamos a la zona comercial, Anna caminaba emocionada; mi ropa en ella estaba toda enrollada de manera adorable. Es muy facil complacerla, me maravillé mientras iba detras de ella. Mis pensamientos se desviaron a Victoria, a las © 10:40 manicuras y los constantes peinados, a las carteras de miles de délares, a la bebé. iNo! No recuerdes eso, Buchanan. Concéntrate. Olvidé ese recuerdo y el dolor que vino con este al comenzar a ver la tienda. Agarré una canasta en la puerta y avancé hacia el primer anaquel. Agarré unas cosas que sabia que necesitaba, cosas que no necesitaba pagarle a Anna para que me entregara. Mantequilla de mani, papel higiénico, revistas, lo usual. Yo no sabia lo aburrido que era Alaska hasta que vivi aqui por unos meses. Ahora nunca subestimaba el valor de una buena revista. Escuché la voz de Anna como una campana detras del mostrador. Ella hablaba de una forma gentil y familiar, como si conociera a la persona. Mientras me acercaba, la escuché preguntarle al vendedor sobre su artritis. El] hombre mayor también le hizo preguntas y comenzaron a intercambiar chismes sobre otras personas del pueblo. Para cuando yo llegué al mostrador, habia afiadido solo otro objeto a mi canasta y sonrei en anticipacion a la reaccion de Anna. Ella volted, me vio acercarme y sus ojos fueron de mis botas a mis antebrazos © 10:40 que estaban expuestos por mis mangas enrolladas. Sus ojos miraban todos los lugares correctos y yo sonrei cuando su mirada encontro finalmente la mia solo para hacerle saber que me habia dado cuenta. “{Bueno, tuviste suerte?”, le pregunté mientras me inclinaba sobre el mostrador. El vendedor me sonrio con amabilidad, era un hombre mayor con piel de pescador, aspera y desgastadaa. “Lo siento, sefor, pero no tenemos el flotador que ella necesita. Tendra que ser enviado desde Anchorage y eso tomara unos dias”. Anna grufid, claramente disgustada por el giro de los eventos. Mordi mi labio para evitar sonreir, pero no lo logré. “Parece que estamos atrapados por la semana, seforita Jackson. gHay algo que necesites? He escogido algunas cosas, pero puedes agregar lo que necesites a la canasta”. Justo en ese momento, Anna mird dentro de la canasta y sus ojos cayeron en la gran caja de condones que habia colocado encima. Ella puso sus ojos en blanco e hizo un ruido para nada femenino con su garganta. Me reia mientras ella se iba por los anaqueles de comida y yo colocaba mis cosas en el mostrador. © 10:41 Mientras apilamos las bolsas de bienes basicos en la parte de atras de mi camioneta, escuché sonar el estomago de Anna. Me regafé a mi ismo cuando me di cuenta de que ella no habia comido mucho. Preparé el desayuno, pero ella apenas mordisqueo un pedazo de tostada. No se quejo, pero yo sabia que ese no era su estilo. Ella era un desafio, un enigma que estaria forzado a descubrir hasta que confiara en mi para que la cuidara. Queria esa confianza. Queria hacerla sentir lo suficientemente segura para que se quejara, para que despotricara, gritara y llorara, pero yo sabia que tenia que ganarme ese lugar en su vida. Victoria me habia entregado todo en bandeja de plata y me hizo creer que me amaba. Pero yo era mas inteligente que antes y sabia que el corazon de una mujer tenia que ganarmelo. El hambre también brotaba de mi estomago y me giré hacia ella. “Deberiamos ir al café rapido y buscar algo de comida antes de regresar”. Ella asintid y caminamos, hombro con hombro, hacia lo unico que parecia un restaurante en este pequefo pueblo insignificante. Solo servian unas cuantas cosas y todas eran excelentes. Aprendi la © 10:41 primera vez que vine a no preguntar qué tipo de carne estaba en el plato. Nunca era res. Algunas veces era alce y otras, reno. Cuando entramos, todos voltearon a vernos y cuando vieron a Anna, varios se acercaron a preguntar como estaba. No a mi. Aella. Anna respondié con respuestas graciosas, con gentileza y algunas bromas. Yo senti un ligero nudo en mi pecho cuando la vi rodeada de estas personas que, obviamente, se preocupaban por ella. Y ella se preocupaba por ellos. éEntonces por qué se estaba yendo? Pregunto por las esposas, hijos y nietos de todos, por dolores y achaques. Todo el pequefio café hablaba mientras nos sentabamos, y de nuevo senti una ligera punzada por el sentido de comunidad, de amistad. Yo habia estado aqui antes, pero era el forastero y no habia recibido ese tipo de recepcion. Y esto seguia. Paso bastante tiempo desde que habia estado con otras personas, mucho menos con un grupo que de verdad se cuidara entre si. Lo extrafiaba y esto me sorprendio mucho. Pasé ajfios en salas de juntas corporativas, construyendo mis equipos, logrando lo que parecia una tarea imposible. Amaba ese aspecto de la construccion de isl © m10:1 algo desde la nada. A la vez, permiti que una mujer, una mujer, ya lo entendia ahora, que apenas conocia, me destruyera y me hiciera dudar completamente de mi mismo. Con Anna, nunca me detenia para pensar lo suficiente como para dudar de mi mismo. Ella hizo que me soltara, me hizo ser espontaneo y estar un poco fuera de control. Me hizo sentir vivo y me desafio de una forma que Victoria nunca lo habia hecho. Me perdi en mis pensamientos mientras Anna le decia a una de las ancianas que la ayudaria a mover algunos muebles cuando fuera luego a entregar viveres. Mas tarde, un viejo atraveso el café y comenzo a hablar con sus amigos acerca de como todos habian ayudado a otro residente a levantar un techo la semana anterior. Muy pocos vivian en este pueblo y, sin embargo, todos se ayudaban de cualquier forma que pudieran. éAsi era antes en Seattle? ¢Lo habia olvidado? La niebla que cubria mis emociones se levanté como si la necesidad de aislarme fuera menor mientras me sentaba al lado de esta mujer y de sus vecinos. Un poco de las ganas, que temia que Victoria hubiera © 10:41 aplastado, regres6 a la vida mientras me empapaba en la atmosfera amable y solidaria de este grupo unido de personas que se habia conocido por afios. Anna se alejé de sus amigos, de sus compaferos de pueblo y se enfocd de nuevo en mi. Mi aliento se calmo un poco al ver sus ojos verdes mientras se enfocaban en mi. Ella sonrié y ordend para ambos cuando vino la mesera. “{Qué?", pregunté cuando yo no dejaba de mirarla. “{No te gustan los hot dogs de reno?”, Encogi ligeramente los hombros. “Nunca los he probado”. Ella sonrié y sacé una servilleta del dispensador que estaba en la mesa siguiente, al lado del pimentero y el salero. “Te encantaran. Son mis favoritos”. En mi vida anterior, eso nunca hubiera sucedido, una mujer ordenando por mi. En esta vida, yo comencé a darme cuenta de que no habia forma de evitar el comportamiento impetuoso de Anna. Ella era completamente impredecible y eso me encantaba. Me hacia sentir vivo. Eso me impulso a preguntar de nuevo. “gPor qué vas a irte de Alaska? {No lo extrafiaras?”, pregunté. Quizés preguntarle © 10:41 en un café Ileno de amigos no era el mejor lugar, pero yo queria saberlo. gPor qué dejaria atras a todos los que conocia y amaba? Sabia por qué habia dejado Seattle, épero Anna? Era diferente. Ella pertenecia a este lugar. Estas personas no eran solo conocidos 0 empleados, eran amigos y vecinos. Familia. Ellos se preocupaban por ella. Anna tomo un momento y espero para responder, cuando la mesera trajo nuestras bebidas. “Mi madre murio cuando yo tenia cuatro, un accidente en una motonieve, por si te lo preguntas. No la recuerdo, pero papa estaba loco por ella. El y yo entregabamos viveres y paquetes por todos lados cuando ella muri. El me enseié a volar y ese avion en tu muelle era de él. Murio hace un afo, como te dije. Murié mientras dormia. El doctor dijo que fue un ataque al corazon”. Ella se tomo otro momento y pausé, claramente afectada por el recuerdo. Consideré saltar y disculparme, pero comenz6 de nuevo a hablar. “Después de la muerte de papa, yo comencé a pensar, ‘{cual es el punto? éSabes? {Para qué quedarme aqui haciendo © 10:41 esto cuando no tengo una razon para quedarme?’ Finalmente podria irme de aqui. Ir a ver el mundo. Comenzar un nuevo negocio en un lugar nuevo. Podria hacer mucho", finaliz6 ella; sus ojos estaban nublados. “He estado tomando clases de negocios y administracion por internet para tener mi titulo. Espero que cuando finalmente me vaya, pueda comenzar mi propio negocio volando con turistas. Incluso manejar un pequefo aeropuerto, pero sin el dinero de la venta de la casa de papa, no puedo irme atin. Espero que pronto”, ahadio Anna. Casi sonrid, pero luego parecio recordar que esta sesion fue gracias a que yo pregunté. Estaba aturdido. No me habia dado cuenta de que ella estaba tan ansiosa por irse, que habia pensado tanto en su plan maestro. Universidad. Vender su casa. Esos eran grandes riesgos para alguien sin un sistema de respaldo y sin una familia que la contuviera. Yo solo asumia que ella era una chica de veinticuatro afhos que sofaba con las luces de la gran ciudad. Y aqui me encontraba, equivocado y callado como un maldito arbol. Sacudi mi cabeza y aclaré mis pensamientos. Tosi hasta que, por fin, encontré mi voz; me sentia como el imbécil © 10:41 mas grande del mundo. “Anna, lo siento. No tenia idea de que fuera asi. Por favor, perdoname por ser un imbécil”, me incliné y acaricié su mano. Ella la retird y senti un pequefio dolor en mi pecho por su rechazo. “Si, bueno, cual es tu historia, Jack? éCd6mo termin6 un chico de la ciudad como tu en la nada, en Alaska, escondiéndose del mundo?” Los ojos de Anna me alumbraban con curiosidad y comencé a hablar antes de poder filtrar mis palabras. Respiré hondo y decidi decirle todo. No me importaba lo que las personas pensaban antes, pero ahora yo queria que Anna supiera la verdad. Necesitaba que me comprendiera. “Bueno, hace poco mas de un afo vendi mi ultimo negocio y me mudé aqui desde Seattle. Gané una buena cantidad de dinero, pero lo perdi casi todo con mi ex. Ella me dijo que iba a tener un bebé... pero me mintio”. Pausé y respiré hondo. Miré a Anna para ver si estaba sonriendo porque habia sido tan estupido para permitir que Victoria se aprovechara de mi, pero en vez de eso vi el mismo arrepentimiento en su cara que yo habia sentido cuando ella me conto su historia. No © 10:41 isl me estaba juzgando, atin no. “Su nombre era Victoria. Estabamos saliendo, ella se embarazo y yo siempre quise ser padre, asi que...” “Te casaste con ella”. “jEstupido, cierto?”. Pasé mis manos por mi cabello y fui a los detalles asquerosos. “Estuvimos casados por casi un afio cuando su ex aparecié un dia demandando un examen de paternidad y cien mil ddlares”. “Oh, dios". Sonrei, pero sabia que el humor no llego a mis ojos. “Bueno, yo no sabia si dios tuvo que ver en eso, pero el examen se realizo y yo ya no era el padre. Perdi a mi hija y a mi esposa en un dia con un imbécil corredor de inversiones que le habia presentado en una fiesta corporativa”. “Cielos, Jack. Ella era una perra. Lo siento mucho”. “Lo peor fue que yo vendi mi negocio para poder estar con ella y con el bebé, compre todo lo del bebé, incluso compré un ‘coche de papa’ para el asiento del bebé. Yo amaba a esa nifia. Jack Buchanan, el gran hombre de negocios billonario lo dejo todo por un bebé. Su madre era dificil y para serte honesto, yo no la amé como debia. Pero yo hice lo correcto y luego descubri © 10:41 que... ella estuvo engafandome y el bebé no era mio”. Mi respiracion se entrecorto y tomé un gran trago de mi gaseosa para lad. Las pequefias manos de Anna cruzaron esconder mi momento de deb la mesa verde laminada y agarraron con fuerza las mias. “Jack, lo siento mucho. No tenia idea. Yo soy la imbécil por ser siempre una perra contigo. No puedo creer que nunca me lo dijeras, incluso cuando te molestaba todo el tiempo...", sus ojos se nublaron de nuevo y yo alcé mi mano para acariciar su mejilla. “Esta bien, en serio. Mereces saberlo y es hora de decirselo a alguien. Vendi mi negocio y vine a la cabafa para unas vacaciones. No me fui. Me enamoré de Alaska y no he estado en casa desde entonces. Sigo mintiéndome a mi mismo y a todos los demas. Le dije a mi familia que me quedaba aqui porque no estaba listo para ir a trabajar con mis primos y porque Alaska es muy relajante. Pero eso es mentira. No estoy listo para enfrentar mis recuerdos en Seattle”. Las palabras salieron de mi boca y yo senti un gran alivio cuando la verdad, por fin, fue dicha. Mi madre era la Unica que lo sabia y estoy seguro de que era por eso que © 10:41 isl ella contraté a Anna para que me entregara mis viveres. {Estaba jugando a ser casamentera? Bueno, ella va a enojarse cuando se entere que la mujer de mis suefos va a dejar Alaska. Si, esta mujer, esta pequefa mujer luchadora que escupe fuego era la que yo deseaba. Nos sentamos en un silencio amistoso, antes de que Anna se enderezara, un poco incémoda de nuevo. “Jack... spor qué nunca hiciste ningun movimiento? Todas esas veces que te entregué tus cosas, yo sabia que estabas interesado. Al menos en mis tetas y en mi trasero”, afiadio ella con una sonrisa. “Los hombres son directos aqui, pero tu nunca hiciste nada. Es por eso que asumi que estabas castrado", se rio ella, pero solo para cubrir la inseguridad que vi en sus ojos. “Tu no necesitas a nadie, Anna. Pude notarlo. Eres hermosa, demasiado hermosa", afadi mientras la miraba directamente. “No necesitas a nadie para ayudarte a volar un avion, descargar contenedores pesados, cortar madera... todo. Eres completa y yo confundi eso con desinterés, asi que no hice ningun movimiento”, terminé de decir mientras me © 10:41 inclinaba en el asiento gastado. “Si hubiera sabido lo caliente que eras te hubiera llevado a la cama la primera vez que te vi". Ella se sonrojo y no quiso mirarme a los ojos. Jugueted con sus cubiertos y mordio su labio, todo mientras miraba hacia abajo. “Tengo que hacer todo eso porque ahora estoy sola. Quiero hacerlo todo? Si, pero solo para saber que puedo hacerlo. {Qué si quiero hacerlo todo sola para siempre?” Ella nego con su cabeza. “No, no quiero”. {Qué estaba diciendo? {Ella queria alguien que la cuidara? gElla queria que yo la cuidara? “ZQué te hizo... cambiar de opinion anoche?”, pregunto ella con timidez, lo que me sorprendio. gAnna? ¢Timida? “Pensé que ibas a morir, que ibas a chocar tu avion en el lago helado. No sé qué sucedio, Anna, pero me despertaste. He estado dormido por un tiempo y algo en ti me hizo cambiar”. Ella levanté su mirada y sus ojos eran suaves y redondos. Esta conversacion estaba cambiando mucho para tenerla con hot dogs de reno. “Ademas, me di cuenta de que iba a molestarme mucho si morias antes de que pudiera ver las tetas perfectas que siempre intentas esconder debajo de esas camisas manga @ 10:41 Anna jadeo, sacando el sorbete de su bebida y tirandolo directamente a mi cara. Ella sonrié mientras yo me levanté de mi asiento y la saqué del suyo. Dejé de reirse y se dejo llevar. “Bueno, sefior Buchanan”, la voz de Anna entro en mi oido. “Creo que tenemos algunos dias hasta que las partes del avion Ileguen. Podriamos regresar a tu casa y aprovechar lo mas que podamos”. “Vamos a pedir esos hot dogs de reno para llevar”. Apenas recuerdo el viaje a casa. Todo lo que podia pensar era en aprovechar lo mas que podamos. ™@) Check out more stories at m.dreame.com! 00 O Facebook ‘Twitter Whatsapp G Scroll Down To See More Release to load the next chapter © mm 10:42 Capitulo seis Capitulo seis Anna Cuando regresamos a la cabana, apenas pudimos entrar antes de sacarnos nuestra ropa y entrelazar nuestros labios en pura lujuria. Por dos dias enteros, Jack y yo nos aprovechamos totalmente de la circunstancia. Si habia alguna otra parte de la cabafia para tener sexo, Jack no la conocia. Nosotros follamos contra las paredes, contra el piso; me doblo en los mostradores de granito en su cocina. En un momento, en el segundo dia, nosotros intentamos arrastrarnos a la habitacion, pero solo llegamos a la alfombra del pasillo. Incluso lo hicimos en varias posiciones que no recordaba del Kamasutra: doblada por encima del mueble en su habitacién principal, echada en el hermoso banco de piedra en la ducha, a horcajadas encima de él en el escritorio de su estudio, en el columpio que tocaba el agua. Estaba desgastada, pero siempre hambrienta de mas. Todo el tiempo estaba en un estado de éxtasis constante, con un orgasmo encima

También podría gustarte