La invención de la imprenta se atribuye comúnmente a Johannes Gutenberg, un inventor alemán del

siglo XV. En la década de 1440, Gutenberg comenzó a experimentar con diferentes técnicas de
impresión y desarrolló un método para imprimir mediante tipos móviles.

Los tipos móviles eran letras individuales de metal que podían ser organizadas y reorganizadas en
una página de texto. Este método permitía a los impresores imprimir páginas de forma mucho más
rápida y eficiente que con los métodos de impresión manuales anteriores, como la xilografía y la
caligrafía.

Gutenberg también desarrolló una prensa de impresión que utilizaba una palanca para presionar los
tipos móviles contra la página de papel. Esta prensa era mucho más eficiente que las prensas
manuales anteriores, lo que permitió una producción de libros y otros materiales impresos a gran
escala.

La invención de la imprenta de tipos móviles de Gutenberg fue un avance revolucionario en la historia

de la comunicación y la difusión del conocimiento. Permitió una producción de libros y otros
materiales impresos más rápida, eficiente y económica, lo que hizo que la información estuviera
disponible para un público más amplio y ayudó a impulsar la difusión de la cultura y el conocimiento
en todo el mundo.