Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Proyecto Con Lobos y Caperucitas.
Proyecto Con Lobos y Caperucitas.
GRADO: A-B-C
FUNDAMENTACIÓN:
La alfabetización es el primer paso para ingresar a la cultura escrita y el camino para llegar a
ser un lector y escritor competente. Aprender a leer y escribir requiere de la enseñanza
planificada y del acompañamiento del docente respetando los tiempos de cada estudiante. Se
aprende a leer y escribir, leyendo y escribiendo, debido a la PANDEMIA COVID-19 tenemos que
re pensar los tiempos de nuestros alumnos que serán acompañados en casa junto a sus
familias, por lo que se pretende adecuar este proyecto a la distancia sin perder el hilo de
aprendizaje para lograr que cada uno pueda plasmar lo aprendido.
Usaremos las redes sociales para realizar la lectura de los cuentos, enviando videos, audios a
cada familia así trabajamos en forma conjunta siendo un grupo unido para desarrollar este
hermoso proyecto.
JUSTIFICACIÓN:
En nuestra comunidad los niños no tienen un acercamiento cotidiano con la literatura y están
ávidos del contacto con los libros. Disfrutan de la escucha de la literatura por parte del
docente, como también de la manipulación de libros y la lectura por si mismos de cuentos e
historias tradicionales que despiertan su imaginación y creatividad. Este proyecto busca que el
niño sea participe y generador de historias, formándose como lector de literatura, adquiriendo
el hábito de la lectura, reflexionando sobre lo leído y creando un pensamiento crítico.
PROPÓSITOS:
OBJETIVOS:
CONTENIDOS:
Láminas de las agendas de los cuentos con los nombres de los autores y tapa del libro, leídos
durante todo el periodo.
Se pedirá a los varones que construyan al lobo con materiales reciclables y las nenas
construirán la vestimenta de caperucita en muñecas.
PRODUCTO FINAL:
EVALUACIÓN:
Clase n°1
Se les explicará a los alumnos que vamos a trabajar con un proyecto de cuentos con lobos y
caperucitas de diversos autores.
Escucharé las anticipaciones de los alumnos ¿Por qué el cuento se llamará de esa manera?
Luego la docente leerá el cuento o proyectará el video. Pediré que presten mucha atención. Al
finalizar la escucha.
Dialogaremos:
Con el dictado a la docente completa el cuadro en el afiche. El mismo tendrán los alumnos en
volantes.
Cuarto momento: dibujarán a los personajes en hojas blancas y a cada personaje deberán
escribir los nombres.
Clase n°2
Segundo momento:
Luego de leerlo conversan acerca del cuento y analizan conjuntamente si había datos en el
cuento que ellos ya habían anticipado. Se trata de evaluar si han comprendido el mismo.
Cuarto momento:
Clase n°3
El maestro lee otra versión de Caperucita Roja. El docente les cuenta a los niños que encontró
otro cuentode Caperucita Roja. Al finalizar la lectura comentarán acerca de las variaciones que
hayan encontrado entre el cuento de PERRAULT y DE hnos GRIMM. Como son muchos datos
para comparar el docente propone escribir en otro afiche las variaciones del cuento y armar un
cuadro con el fin de apuntar las diferencias que han encontrado.
Segundo momento: Registrar en el cuadro las diferencias que se han encontrado entre ambos
cuentos. Luego la copiarán en el cuaderno. Descripción del lobo y caperucita
CAPERUCITA ROJA
PERRAULT GRIMM
LOBO
PERRAULT GRIMM
Se pedirá a los alumnos que escriban en sus cuadernos un listado de los alimentos que llevaba
Caperucita a su abuelita.
Clase n°4
Primer momento: lectura del cuento LOS TRES CERDITOS. El docente comenzará leyendo el
cuento. Previamente les comenta a los alumnos/as que seguirá leyendo cuentos donde
aparecen unos personajes que ustedes ya conocen en otras versiones.
En el corazón del bosque vivían tres cerditos que eran hermanos. El lobo siempre
andaba persiguiéndolos para comérselos. Para escapar del lobo, los cerditos
decidieron hacerse una casa. El pequeño la hizo de paja, para acabar antes y poder
irse a jugar.
El mediano construyó una casita de madera. Al ver que su hermano pequeño había
terminado ya, se dio prisa para irse a jugar con él.
-Ya verán lo que hace el lobo con sus casas -riñó a sus hermanos mientras éstos se
divertían en grande.
El lobo salió detrás del cerdito pequeño y él corrió hasta su casita de paja, pero el
lobo sopló y sopló y la casita de paja derrumbó.
Casi sin aliento, con el lobo pegado a sus talones, llegaron a la casa del hermano
mayor.
Los tres se metieron dentro y cerraron bien todas las puertas y ventanas. El lobo
sopló y sopló, pero no pudo derribar la fuerte casa de ladrillos. Entonces se puso a
dar vueltas a la casa, buscando algún sitio por el que entrar. Con una escalera
larguísima trepó hasta el tejado, para colarse por la chimenea. Pero el cerdito mayor
puso al fuego una olla con agua. El lobo comilón descendió por el interior de la
chimenea, pero cayó sobre el agua hirviendo y se escaldó.
Escapó de allí dando unos terribles aullidos que se oyeron en todo el bosque. Se
cuenta que nunca jamás quiso comer cerdito.
En el espacio de intercambio, preguntaré sobre el lobo, sus diferencias y sus parecidos con los
demás cuentos que ya fuimos leyendo. Lo conversado será plasmado en otro papel afiche.
Clase n°5
Leeré a los alumnos el cuento, luegoespacio de intercambio entre lectores, pregunta sobre
esos lobos, sus diferencias y parecidos con el del cuento de Caperucita, podrían anotar los
conversados en otro papel afiche.
En el final la mamá y los siete cabritos bailan. ¿Por qué? Es conveniente releer fragmentos que
confirmen lo que los niños dicen o que sirvan también para modificar interpretaciones que no
se apoyan en el texto.
La mamá de estos cabritos se ocupa muy bien de enseñarles a cuidarse del lobo. ¿Cómo hace
este lobo para engañar a los cabritos si ellos le hacen caso a su mamá? Releer las
recomendaciones de la vieja cabra antes de salir de la casa.
¿Cómo era la voz del lobo? Localizar en el texto de qué modo, con qué términos se caracteriza
(áspera, ronca,…)
¿Qué hace el lobo para que su voz se suavice? Suavizar su voz no es lo único que hace el lobo
para lograr engañar a los cabritos, ¿Qué otras cosas hace? Releer las acciones que lleva
adelante el lobo con el propósito de engañar a los cabritos.
Esta cabra no es una madre cualquiera. Les voy a releer algunos pasajes para ver qué
advierten ustedes sobre esta madre: Seleccionaré algunos pasajes para releer. Érase una vez
una cabra que tenía siete cabritos y que los quería como las madres quieren a sus hijos.(…) ¡Ay,
lo que tuvo que ver! (…) Buscó a sus hijos, pero no los halló en ninguna parte. Gritó sus
nombres, uno por uno, pero nadie respondía, hasta que al fin, cuando llamó al más joven,
surgió una débil voz… (…) ¡Imaginaos cómo lloró ella por sus pobres hijos! Finalmente salió
llorando de la casa y el joven cabrito la siguió… (…) ¡Santo Dios! –pensó- ¿Será posible que mis
pobres hijos, que el lobo se tragó como cena, estén aún con vida?
¿Qué les hace pensar estos pasajes? Si los chicos conocen ya otros cuentos de lobos —u otros
personajes atemorizantes— y madres que recomiendan a sus hijos cuidarse de ellos, pueden
establecerse relaciones interesantes. Comparar estos fragmentos.
Yo a veces me pierdo. ¿De quién se está hablando en los siguientes pasajes? Vuelvo a leer y
ustedes me avisan cuando lo adviertan. Se pueden ir registrando en el pizarrón a medida que
se van localizando. Tenerlos presentes permite localizarlos rápidamente en una futura
situación de escritura. (…) el malvado a menudo se disfraza (…) el monstruo se los había
tragado enteros (…) con ellas llenaremos la barriga de esta bestia malvada
Los lobos de los cuentos se parecen entre sí y a veces también son un poco diferentes. Les voy
a releer otros pasajes para ver qué advierten sobre este lobo: (…) Pero el lobo lo amenazó: –Si
no lo haces, te comeré. Entonces, asustado, el molinero le blanqueó la pata. (…)Pero quien
entró era el lobo. Aterrados, ellos intentaron esconderse… (…) Pero el lobo los descubrió a
todos y, sin vacilar, abrió sus fauces y se los tragó uno tras otro…. (…) Cuando el lobo hubo
satisfecho su voracidad... (…) Cuando llegaron al prado, hallaron al lobo echado al pie del árbol
y roncando tan fuertemente que hacía estremecer sus ramas… Es conveniente mirar en la
biblioteca o en catálogos para verificar las afirmaciones o hacer una encuesta a otros lectores
para averiguarlo.
Había una vez una cabra que tenía siete cabritos, a los que quería tanto como cualquier
madre puede querer a sus hijos. Un día necesitaba ir al bosque a buscar comida, de modo
que llamó a sus siete cabritillos y les dijo: -Queridos hijos, voy a ir al bosque; tened cuidado
con el lobo, porque si entrara en casa os comería a todos y no dejaría de vosotros ni un
pellejito. A veces el malvado se disfraza, pero podréis reconocerlo por su voz ronca y por sus
negras pezuñas. Los cabritos dijeron: -Querida mamá, puedes irte tranquila, que nosotros
sabremos cuidarnos. Entonces la madre se despidió con un par de balidos y, tranquilizada,
emprendió el camino hacia el bosque. No había pasado mucho tiempo, cuando alguien
llamó a la puerta, diciendo: -Abrid, queridos hijos, que ha llegado vuestra madre y ha traído
comida para todos vosotros. Pero los cabritillos, al oír una voz tan ronca, se dieron cuenta
de que era el lobo y exclamaron: -No abriremos, tú no eres nuestra madre; ella tiene la voz
dulce y agradable y la tuya es ronca. Tú eres el lobo.
Entonces el lobo fue en busca de un buhonero y le compró un gran trozo de tiza. Se lo comió
y así logró suavizar la voz. Luego volvió otra vez a la casa de los cabritos y llamó a la puerta,
diciendo: -Abrid, hijos queridos, que vuestra madre ha llegado y ha traído comida para
todos vosotros. Pero el lobo había apoyado una de sus negras pezuñas en la ventana, por lo
cual los pequeños pudieron darse cuenta de que no era su madre y exclamaron: -No
abriremos; nuestra madre no tiene la pezuña tan negra como tú. Tú eres el lobo. Entonces el
lobo fue a buscar a un panadero y le dijo: -Me he dado un golpe en la pezuña; úntamela con
un poco de masa. Y cuando el panadero le hubo extendido la masa por la pezuña, se fue
corriendo a buscar al molinero y le dijo: -Échame harina en la pezuña.
El molinero pensó: «Seguro que el lobo quiere engañar a alguien», y se negó a hacer lo que
le pedía; pero el lobo dijo: -Si no lo haces, te devoraré.
Entonces el molinero se asustó y le puso la pezuña, y toda la pata, blanca de harina. Sí, así
son las personas.
Por tercera vez fue el malvado lobo hasta la casa de los cabritos, llamó a la puerta y dijo:
-Abridme, hijitos, que vuestra querida mamá ha vuelto y ha traído del bosque comida para
todos vosotros.
Los cabritillos exclamaron: -Primero enséñanos la pezuña, para asegurarnos de que eres
nuestra madre.
Entonces el lobo enseñó su pezuña por la ventana y, cuando los cabritos vieron que era
blanca, creyeron que lo que había dicho era cierto, y abrieron la puerta. Pero quien entró por
ella fue el lobo. Los cabritos se asustaron y corrieron a esconderse. El mayor se metió debajo
de la mesa; el segundo, en la cama; el tercero se escondió en la estufa; el cuarto, en la
cocina; el quinto, en el armario; el sexto, bajo el fregadero, y el séptimo se metió en la caja
del reloj de pared. Pero el lobo los fue encontrando y no se anduvo con miramientos. Iba
devorándolos uno detrás de otro. Pero el pequeño, el que estaba en la caja del reloj,
afortunadamente consiguió escapar. Una vez que el lobo hubo saciado su apetito, se alejó
muy despacio hasta un prado verde, se tendió debajo de un árbol y se quedó dormido.
Muy poco después volvió del bosque la vieja cabra. Pero ¡ay!, ¡qué escena tan dramática
apareció ante sus ojos! La puerta de la casa estaba abierta de par en par; la mesa, las sillas y
los bancos, tirados por el suelo; las mantas y la almohada, arrojadas de la cama, y el
fregadero hecho pedazos. Buscó a sus hijos, pero no pudo encontrarlos por ninguna parte.
Los llamó a todos por sus nombres, pero nadie respondió. Hasta que, al acercarse donde
estaba el más pequeño, pudo oir su melodiosa voz: Mamaíta, estoy metido en la caja del
reloj.
La madre lo sacó de allí, y el pequeño cabrito le contó lo que había sucedido, diciéndole que
había visto todo desde su escondite y que, de milagro, no fue encontrado por el lobo. La
mamá cabra lloró desconsoladamente por sus pobres hijos.
Luego, muy angustiada, salió de la casa seguida por su hijito. Cuando llegó al prado,
encontró al lobo tumbado junto al árbol, roncando tan fuerte que hasta las ramas se
estremecían. Lo miró atentamente, de pies a cabeza, y vio que en su abultado vientre, algo
se movía y pateaba. «¡Oh Dios mío! -pensó-, ¿será posible que mis hijos vivan todavía,
después de habérselos tragado en la cena?» Entonces mandó al cabrito que fuera a la casa a
buscar unas tijeras, aguja e hilo. Luego ella abrió la barriga al monstruo y, nada más dar el
primer corte, el primer cabrito asomó la cabeza por la abertura y, a medida que seguía
cortando, fueron saliendo dando brincos los seis cabritillos, que estaban vivos y no habían
sufrido ningún daño, pues el monstruo, en su excesiva voracidad, se los había tragado
enteros. ¡Aquello sí que fue alegría! Los cabritos se abrazaron a su madre y saltaron y
brincaron como un sastre celebrando sus bodas. Pero la vieja cabra dijo:
-Ahora id a buscar unos buenos pedruscos. Con ellos llenaremos la barriga de este maldito
animal mientras está dormido.
Los siete cabritos trajeron a toda prisa las piedras que pudieron y se las metieron en la
barriga al lobo. Luego la mamá cabra cosió el agujero con hilo y aguja, y lo hizo tan bien que
el lobo no se dio cuenta de nada, y ni siquiera se movió.
Cuando el lobo se despertó, se levantó y se dispuso a caminar, pero, como las piedras que
tenía en la barriga le daban mucha sed, se dirigió hacia un pozo para beber agua. Cuando
echó a andar y empezó a moverse, las piedras de su barriga chocaban unas contra otras
haciendo mucho ruido. Entonces el lobo exclamó: ¿Qué es lo que en mi barriga bulle y
rebulle? Seis cabritos creí haber comido, y en piedras se han convertido.
Al llegar al pozo se inclinó para beber, pero el peso de las piedras lo arrastraron al fondo,
ahogándose como un miserable. Cuando los siete cabritos lo vieron, fueron hacia allá
corriendo, mientras gritaban:
Actividades extras
En el cuaderno escribimos las siguientes palabras del texto ordenándolas de la más corta a la
más larga:
CHANCHITOS
CHIMENEA
CASITA
MAYOR
LOBO
MEDIANO
HERMANOS
LADRILLOS
JUGUEMOS EN EL BOSQUE
Una Dos Tres Cuatro Cinco Seis Siete Ocho Nueve Diez
letra letras letras letras letras letras letras letras letras letras
LOS LOBOS
PEGA DEBAJO DE CADA LOBO EL TÍTULO DEL CUENTO AL QUE
PERTENECE
CAPERUCITA ROJA
RECORTÁ Y PEGÁ LA RESPUESTA DEL LOBO CORRESPONDIENTE A
CADA EXCLAMACIÓN DE CAPERUCITA.