Me Gritaron Negra

¡Negra!
Tenía siete años apenas, Negra
apenas siete años, ¡Negra!
¡Qué siete años! Negra soy
¡No llegaba a cinco siquiera! ¡Negra!
De pronto unas voces en la calle Sí
me gritaron ¡Negra! ¡Negra!
¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! Soy
¡Negra! ¡Negra!
¿Soy acaso negra?, me dije Negra
¡SI! ¡Negra!
¿Qué cosa es ser negra? Negra soy
¡Negra!
Y yo no sabía la triste verdad que aquello escondía. De hoy en adelante no quiero
¡Negra! laciar mi cabello
Y me sentí negra, No quiero
¡Negra! Y voy a reírme de aquellos,
Como ellos decían que por evitar –según ellos–
¡Negra! que por evitarnos algún sinsabor
Y retrocedí Llaman a los negros gente de color
¡Negra! ¡Y de qué color!
Como ellos querían NEGRO
¡Negra! ¡Y qué lindo suena!
Y odié mis cabellos y mis labios gruesos NEGRO
y miré apenada mi carne tostada ¡Y qué ritmo tiene!
Y retrocedí
¡Negra! NEGRO NEGRO NEGRO NEGRO
Y retrocedí… NEGRO NEGRO NEGRO NEGRO
NEGRO NEGRO NEGRO NEGRO
¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! NEGRO NEGRO NEGRO
¡Negra! ¡Negra! ¡Neeegra!
¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! Al fin
¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! Al fin comprendí
AL FIN
Y pasaba el tiempo, Ya no retrocedo
y siempre amargada AL FIN
Seguía llevando a mi espalda Y avanzo segura
mi pesada carga AL FIN
¡Y cómo pesaba! Avanzo y espero
Me alacié el cabello, AL FIN
me polveé la cara,
y entre mis entrañas siempre resonaba la misma Y bendigo al cielo porque quiso Dios
palabra que negro azabache fuera mi color
¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! Y ya comprendí
¡Negra! ¡Negra! ¡Neeegra! AL FIN
Hasta que un día que retrocedía, retrocedía y qué iba ¡Ya tengo la llave!
a caer
¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! NEGRO NEGRO NEGRO NEGRO
¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! NEGRO NEGRO NEGRO NEGRO
¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! NEGRO NEGRO NEGRO NEGRO
¡Negra! ¡Negra! ¡Negra! NEGRO NEGRO

¿Y qué? ¡Negra soy!

¿Y qué?
¡Negra!
Sí
¡Negra!
Soy
POEMA GUITARRA
LLAMA CAJON -
Nicomedes Santa Cruz
Guitarra llama a cajón,
Cajón a la voz primera.
Escuchen con atención,
¡aquí está la Marinera...!
La Marinera de Lima
tiene influencia afro-hispana,
la “primera de jarana”
en copla o cuarteta rima.
Inicia el toque la prima
pero es más lindo un bordón.
Aún no entra la canción
porque, como requisito,
antes que el cantor dé un grito
guitarra llama a cajón.
Los que escuchan hacen palmas
y se cuadran las parejas,
por lo general son viejas
—mejor aún si son zambas—.
Tan sólo mueven las gamas
y un poquito la cadera.
Todo esto mientras se espera
pues nadie baila sin canto.
Sigue llamando entretanto
cajón a la voz primera.
El canto inicia el paseo
con un saludo en el cruce,
media vuelta los conduce
a otro cruce y al careo.
Tras lateral contoneo
vuelta y trocar posición...
Como dicha operación
se da al fin de cada estrofa,
en vez de bailar por mofa
escuchen con atención.
Como quien sudor enjuga
un momento se reposa,
prosigue la Resbalosa
y viene después la Fuga:
El bailarín se apechuga,
ella sube la pollera.
Como peruana bandera
blanco y rojo, dos pañuelos
dicen en airosos vuelos
¡aquí está la Marinera...!
POEMA GUITARRA
LLAMA CAJON -
Nicomedes Santa Cruz
Guitarra llama a cajón,
Cajón a la voz primera.
Escuchen con atención,
¡aquí está la Marinera...!
La Marinera de Lima
tiene influencia afro-hispana,
la “primera de jarana”
en copla o cuarteta rima.
Inicia el toque la prima
pero es más lindo un bordón.
Aún no entra la canción
porque, como requisito,
antes que el cantor dé un grito
guitarra llama a cajón.
Los que escuchan hacen palmas
y se cuadran las parejas,
por lo general son viejas
—mejor aún si son zambas—.
Tan sólo mueven las gamas
y un poquito la cadera.
Todo esto mientras se espera
pues nadie baila sin canto.
Sigue llamando entretanto
cajón a la voz primera.
El canto inicia el paseo
con un saludo en el cruce,
media vuelta los conduce
a otro cruce y al careo.
Tras lateral contoneo
vuelta y trocar posición...
Como dicha operación
se da al fin de cada estrofa,
en vez de bailar por mofa
escuchen con atención.
Como quien sudor enjuga
un momento se reposa,
prosigue la Resbalosa
y viene después la Fuga:
El bailarín se apechuga,
ella sube la pollera.
Como peruana bandera
blanco y rojo, dos pañuelos
dicen en airosos vuelos
¡aquí está la Marinera...!