Los certificados de depósito y los warrants son emitidos exclusivamente por
almacenes generales de depósito, los cuales deben constituirse como sociedades anónimas y están sujetos a la supervisión de la Superintendencia Bancaria y Seguros. El objeto principal de estas empresas es brindar servicios de almacenaje y conservación de mercancías que han sido depositadas previamente. Esto facilita las transacciones comerciales, ya que el adquirente no necesita la entrega física de las mercancías, como ocurre en el derecho común, sino que basta con la transferencia jurídica mediante la negociación de un certificado de depósito de acuerdo con la legislación aplicable.
(Art. 11 inciso a y b - Res. SBS N° 040-2002) se le facilita la formalización de un
crédito con la garantía de la prenda sobre la mercadería mediante un Warrant. Los bienes depositados en un almacén general de depósito pueden ser trasladados a otro, siempre y cuando le otorgue el consentimiento previo del depositante y en su caso, el tenedor del warrant y la contratación de un seguro que cubra los riesgos derivados del transporte.
Los almacenes generales de depósito se definen como establecimientos diseñados
para recibir, almacenar, conservar o beneficiar mercancías, productos agrícolas o artículos manufacturados que el propietario no desea vender en ese momento o tiene la intención de exportar, reexportar o importar. Estos almacenes cumplen una doble función al guardar y vigilar las mercancías, al mismo tiempo que emiten títulos especiales negociables en el mercado y transferibles mediante endoso.