La teoría de la ventaja absoluta señala que un país deberá
especializarse y exportar aquello que sabe hacer mejor que el resto. Ya que tiene una ventaja sobre el resto de países con los que comercializa
Mientras, la teoría de la ventaja
comparativa hace referencia no sólo a exportar aquel bien en el que un país es más productivo, sino llama a especializarse y exportar aquellos bienes o sectores que son más productivos con respecto a otros de forma interna. Es decir, teniendo en cuenta las características del país.
La gran diferencia entre ambas es el
punto de apoyo en el que han de basarse. Mientras que Adam Smith y la ventaja absoluta señalan que una nación sólo debe centrarse en aquello que es capaz de hacer mejor que los demás, de una forma más productiva, menor coste, mayor conocimiento y eficiencia
Estas teorías liberales están
relacionadas con el libre comercio y la ineficacia de aranceles. Desde este punto de vista, los aranceles son vistos como elementos que transgreden la productividad y eficiencia
Ya que obligan a los países a pagar
más caros ciertos bienes que importándolos serían más baratos que producirlos, y donde el factor productividad juega un papel importante. El libre mercado promueve la supervivencia del mejor bien en el mercado. Intentan demostrar así que con el comercio internacional el bienestar de los países aumenta.