Está en la página 1de 19

Civilizar.

Ciencias Sociales y Humanas


ISSN: 1657-8953
yadira.caballero@usa.edu.co
Universidad Sergio Arboleda
Colombia

Giovine, Manuel; Capdevielle, Julieta


La configuración de los sectores dominantes en el espacio social de Córdoba, Argentina
Civilizar. Ciencias Sociales y Humanas, vol. 14, núm. 27, julio-diciembre, 2014, pp. 165-182
Universidad Sergio Arboleda
Bogotá, Colombia

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=100235716010

Cómo citar el artículo


Número completo
Sistema de Información Científica
Más información del artículo Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal
Página de la revista en redalyc.org Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto
Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014

La configuración de los sectores dominantes


en el espacio social de Córdoba, Argentina*

The configuration of the dominant sectors in the social space


of Córdoba, Argentina
Recibido: 02 de enero de 2014 - Revisado: 18 de agosto de 2014 - Aceptado: 06 de noviembre de 2014

Manuel Giovine**
Julieta Capdevielle***

Resumen
Este artículo pretende, a partir del análisis de la estructura del espacio social
cordobés, caracterizar los recursos en juego –económicos y culturales– que
configuran a ciertos sectores como dominantes y, por oposición relacional, a
otros como dominados en dicho espacio. Desde el enfoque relacional al que
se adscribe, se considera que para explicar la producción social de la miseria
es necesario exhibir, al mismo tiempo, los mecanismos de producción social
de la riqueza.

Palabras clave *
Este artículo se inscribe en el pro-
yecto de investigación “Las clases y
Sectores dominantes, desigualdad, espacio social, análisis de correspondencias su reproducción en el espacio social
múltiples, capitales. cordobés (2003-2013)” dirigido por
la Dra. Alicia B. Gutiérrez y co-
dirigido por el magíster Héctor O.
Abstract Mansilla. Financiado por la Secreta-
This paper intends, based on the analysis of the structure of Cordoba social ría de Ciencia y Técnica, Universidad
Nacional de Córdoba, Argentina.
space, a characterization of the resources at stake –both economic and cultural- **
Doctorando en Estudios Sociales
that configure some sectors as dominant and, by relational opposition, some de América Latina por el Centro de
others as dominated in the said space. From the relational approach to which Estudios Avanzados de la Universi-
dad Nacional de Córdoba, Argentina.
the authors ascribe, it is considered that to explain the social production of Becario doctoral del Conicet y licen-
misery it is necessary to exhibit, at the same time, the mechanisms of social ciado en Filosofía. Adscrito a la cá-
tedra de Sociología de la Facultad de
production of wealth. Filosofía y Humanidades de la misma
universidad.
Keywords Correo electrónico:
giovine.manuel@gmail.com
Dominant sectors, inequality, social space, multiple correspondence analysis, ***
Doctora en Estudios Sociales de
capitals. América Latina, mención sociología,
por el Centro de Estudios Avanza-
dos de la Universidad Nacional de
Córdoba, Argentina. Becaria posdoc-
toral del Conicet. Profesora asistente
de la carrera de Antropología de la
Universidad Nacional de Córdoba.
Correo electrónico:
julietacapdevielle@gmail.com
166 Manuel Giovine - Julieta Capdevielle

Introducción pacio y evitar el riesgo de atribuir desigualdades


a ciertas diferencias que pueden no ser tales.
Desde diferentes perspectivas teóricas,
los grupos de poder han sido denominados de Por lo anterior, es necesario acercarse no
múltiples maneras, como: clase dominante, solo a las posiciones que ocupan los sectores
élites, ganadores, privilegiados, entre otras dominantes, sino también a las relaciones que
(Rodríguez, 2012). En general, la teoría social los distancian y diferencian del resto de los
considera como sectores dominantes a aquellos sectores que integran el espacio social.
sujetos sociales que ocupan un lugar privilegiado
–a la vez en lo económico y en lo político– dentro Así, en este trabajo se busca, a partir del
del modelo de acumulación capitalista, que se análisis de la estructura del espacio social y
vincula al control de empresas, cuyo carácter de los volúmenes de capital que introducen
puede ser muy variado (nacional, asociado mayor diferencia, caracterizar los recursos –
con el capital internacional, o bien, de carácter económicos y culturales– en juego que erigen
multinacional) (Svampa, 2005). En la actualidad, a ciertos sectores como dominantes y, por
salvo raras excepciones, el estudio de la dinámica oposición relacional, a otros como dominados.
de los sectores dominantes parece haber quedado
confinado al espacio de la economía y de la En un segundo nivel de intervención se
sociología económica, con una producción cada pretende poner en discusión la idea, tristemente
vez más voluminosa en los últimos años (Schorr, arraigada en muchos espacios, de que el estudio
Manzanelli, & Basualdo, 2012). de los sectores dominantes es “elitista”, ya que
desde esta mirada se pierde de vista la dimensión
Entre los trabajos de mayor relevancia se relacional de lo social. Así, algunas categorías
encuentran aquellos que, de forma sistemática, que procuran definir a la pobreza –como las de
realiza el grupo de sociología económica de la “marginalidad”, “exclusión”, “desposesión” y
Facultad Latinoamericana de Ciencias Socia- tantas otras– implican el desconocimiento de la
les (Flacso)1, compuesto por Daniel Azpiazu, dimensión relacional de lo social y ubican a ciertos
Eduardo Basualdo y Hugo Notcheff (1998), y sectores por “fuera” del espacio social mismo. Sin
más recientemente por Ana Castellani y Martín embargo, desde una perspectiva relacional
Schorr (2004). Dicho grupo de investigación de-
sarrolla un abordaje de las clases dominantes en […] la pobreza es un elemento constitutivo de
términos de “cúpula económica”, definición que un modo particular de acumulación de riqueza
incluye tanto a los conglomerados económicos y poder social, lo que implica que los pobres no
de origen extranjero y los grupos económicos lo- están fuera de la sociedad sino que pertenecen
cales (caracterizados por la diversificación eco- a ella y, por lo tanto, son parte del entramado de
nómica), como a las empresas transnacionales y relaciones sociales que alimentan el funciona-
las locales independientes (que se insertan en un miento de la misma (Gutiérrez, 2007, p. 103).
sector de la actividad) (Svampa, 2005).
La contrapartida dialéctica de este tipo de
Sin embargo, la conformación, composi- concepciones ha sido históricamente el denodado
ción y particularidades de los sectores de poder interés del Estado por “estudiar” y “comprender”
siguen siendo todavía difusas. Por ello es que a estos sectores que quedan al “margen” de la
en el marco del equipo de investigación del que sociedad, y esforzarse por “integrar”, “enriquecer”,
se forma parte, hemos propuesto la configura- “incluir”, “dignificar” y “civilizar” a estos grupos.
ción del espacio social2 en el cual estos grupos
están insertos. De este modo, se intenta captar Curiosamente, en este proceso se desco-
la dimensión relacional que los distingue de los noce que los sectores que detentan mayor volu-
demás sectores presentes en el mencionado es- men de capital, tanto económico como cultural,

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014


La configuración de los sectores dominantes en el espacio social de Córdoba, Argentina 167

han quedado, queriendo o sin quererlo, al repa- hora de esclarecer el proceso de reproducción
ro de la investigación social, y muchas veces a social de la riqueza, pero tampoco lo es para
cargo de la misma. abordar la reproducción social de la pobreza.

La academia ha producido un volumen Problema de investigación y método


considerable de investigaciones acerca de “la
pobreza”, sus modalidades de reproducción y las En este apartado se intenta dar cuenta de
diversas maneras en las cuales estos colectivos cómo se concibe al espacio social, poniendo
actualizan los distintos capitales que poseen. In- especial énfasis en su dimensión relacional.
vestigaciones que además de ser poderosamente La manera en que se comprende al espacio
esclarecedoras, muestran de un modo desgarra- social tiene origen en el marco teórico que guio
dor los efectos de la dominación social. la presente investigación, pero también en la
metodología y la técnica de análisis de los datos
Por otro lado, no es mucho lo que se ha que se emplearon para la construcción de este
dicho acerca de los sectores que por oposición a primer momento objetivista del espacio social.
los anteriores se podrían designar como “ricos”, Así, este modo de entender el espacio social
“poderosos”, “centrales”, “dignos”3. Y, no tiene implicaciones ontológicas, metodológicas
obstante, investigar a los sectores de poder es y epistemológicas (Baranger, 2012), lo que ha
de fundamental importancia para explicar cómo redundado en particularidades técnicas como
se reproduce el orden social4 desigual. veremos más adelante.
A continuación se propone, en una prime-
Dimensión relacional de lo social
ra instancia –en el apartado “Problema de inves-
tigación y método”– reflexionar sobre la forma
Las formas de apropiación de la riqueza,
en que se concibe al espacio social, poniendo
especial énfasis en su dimensión relacional. Así en el mismo contexto estructural, se conectan
mismo, se explicita los supuestos teórico-me- con el aumento de la pobreza. En definitiva, la
todológicos que guiaron su construcción. En la explotación y el empobrecimiento de un gran nú-
última parte de esta sección, se aborda las for- mero de trabajadores se traducen en el enriqueci-
talezas y debilidades de la técnica utilizada y de miento de un número muy limitado de personas.
la base de datos secundaria. En este marco, y tomando como referencia a An-
tonio Cattani (2008), se afirma que la reproduc-
Posteriormente, se analiza la conformación ción de la pobreza no se da con independencia de
del espacio social cordobés y los principales la reproducción social de la riqueza5.
rasgos de los sectores dominantes. Al interior
de los mismos se describe dos grandes grupos Las corrientes dominantes en las ciencias
o fracciones, los sectores medio dominante y sociales tropiezan con dificultades materiales y
los alto dominante, lo que permitirá dar cuenta barreras ideológicas para generar conocimiento
de las desigualdades que operan en los sectores sobre los ricos y los muy ricos. El principal
de mayor poder y las especificidades que inconveniente material se debe al hecho de
distinguen a los altos dominantes. que el acceso a los datos es impedido por el
sigilo que protege a las grandes fortunas. Las
Así, este artículo aporta a la explicación barreras ideológicas se definen por el criterio de
de las relaciones de poder asociadas a las que la pobreza es un problema, mientras que la
condiciones objetivas de aquellos que ocupan riqueza no lo es, y por la concepción errónea
las posiciones dominantes en el espacio social. de que estudiar a los ricos significa ser elitista e
El estudio de los sectores de poder y de sus identificarse con la “causa de los ricos” (Pinçon,
singularidades no es una cuestión menor a la 2004, citado por Cattani, 2008, p. 206).

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014 ISSN 1657-8953


168 Manuel Giovine - Julieta Capdevielle

Se ha instalado la idea de que los pobres Aceptando que la pobreza y la riqueza


son el gran obstáculo de las sociedades actuales, no son cuestiones dadas, sino consecuencia de
ocultando así el hecho incontrastable del relaciones históricas, objetivadas y simbólicas,
problema de la acumulación del capital y de podríamos preguntarnos: ¿cuáles son las condi-
poder en un polo. Se estudia a los pobres con ciones estructurales –e históricas– que permiten
la mayor rigurosidad, se realizan estadísticas, la existencia de agentes y mecanismos que per-
análisis, encuestas y todo tipo de acercamientos petúan la riqueza en nuestro contexto?
a los territorios donde viven los pobres, sin
contar con ellos, sin consultarles, ya que se les En este sentido, los supuestos teóricos
considera “objeto de estudio”. Las academias, que guiaron la construcción del espacio podrían
los Estados y las corporaciones multinacionales considerarse en torno a los siguientes ejes: a) la
han reunido bibliotecas enteras para tratar riqueza no se produce/reproduce de manera in-
de responder qué hacer con los pobres. En dependiente de la producción/reproducción de la
cambio, son raras las investigaciones sobre los pobreza; b) en esa producción/reproducción re-
ricos, sobre las formas de vida en los barrios lacional intervienen múltiples niveles de agentes
privados, los modos de hacer de los ejecutivos sociales (de manera consciente o no) con distin-
y las trabas que crean aquellos a la sociedad tos recursos objetivos y simbólicos y con diver-
(Zibechi, 2011). sos niveles de implicación y compromiso y c) al
ser producidas/reproducidas por medio de prác-
Reflexiones epistemológicas y me- ticas concretas, las condiciones de pobreza son
todológicas. susceptibles de modificarse, a partir de la posibi-
lidad de develar las estructuras, los agentes y sus
prácticas, y los mecanismos de su producción/
Desde una perspectiva sustancialista6 la
reproducción (Gutiérrez, 2012).
pobreza y la riqueza son propiedades intrínsecas
de toda conformación social, y solo basta con
observar detenidamente la conformación de Para abordar a los sectores dominantes y
dominados desde el análisis del espacio social y
ciertas propiedades en cada una de sus variantes
de los capitales en juego de un modo relacional,
culturales, para captar esencialmente la manera
se hizo uso de métodos de estadística descriptiva
en que la pobreza y la riqueza se manifiestan.
multidimensional y de un software específico
(SPAD 5.0 de DECISIA). El software prevé la
En oposición a esta mirada sustancialista, se aplicación conjunta de métodos factoriales y
sostiene que la pobreza y la riqueza son construc- de clasificación –análisis de correspondencias
ciones que surgen de forma relacional en el espa- múltiples (ACM) y métodos de clasificación–,
cio social por medio de la apropiación de diversos tomando como base la información captada
tipos de bienes, materiales o simbólicos, que oca- por la Encuesta Permanente de Hogares
sionan diferencias y desigualdades que finalmente (EPH)7. A tal fin, se efectuó un análisis de los
serán naturalizadas, eufemizadas y legitimadas datos de la EPH en el tercer trimestre de 2011
como universales en el plano simbólico. recurriendo a técnicas multivariadas acordes
para la construcción del sistema de relaciones
Por tanto, no se puede hablar de una po- de aquel espacio, su estructura y las posiciones
breza “en sí” o de una riqueza “en sí”, sino más existentes (considerando como unidades de
bien de la distribución diferencial de ciertos re- análisis tanto a agentes individuales como a
cursos que introducen, en el espacio social, dis- hogares seleccionados en la muestra).
tinciones que, mediante la dimensión simbólica
se consolidan como desigualdades duraderas y Una vez caracterizadas las regiones de este
transferibles en tanto son reconocidas por todos espacio y a partir de métodos de clasificación,
los sectores sociales. se armaron cuatro clases8 o sectores (en tanto

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014


La configuración de los sectores dominantes en el espacio social de Córdoba, Argentina 169

posiciones próximas en el espacio social); esto en juego una metodología apropiada para su
es, la conformación de una tipología de estos construcción. Para ello se creó un espacio plu-
agentes que tomó en cuenta, simultáneamente, ridimensional con posiciones definidas en fun-
un grupo de indicadores relevantes para el ción de un sistema de coordenadas cuyos valo-
problema planteado. Para la construcción de este res se corresponden con diferentes propiedades
espacio, se seleccionaron variables disponibles pertinentes, y donde los agentes se distribuyen
en la EPH conforme su reformulación temática en dos dimensiones, según el volumen global
de 2003 (instalación de la modalidad continua del capital y de acuerdo con la estructura de su
de la EPH, tercer trimestre de 2003). patrimonio (Bourdieu, 1990).

Cabe aclarar que, desde la óptica analítica Para elaborar este espacio pluridimensional
que se adoptó, el espacio social tiene preexisten- se eligió como método principal el ACM, el mismo
cia lógica pero también ontológica a las clases. que aplica Bourdieu en La distinción (2000). El
Ello, como bien lo señala Baranger (2012) apo- sociólogo francés pone especial atención en esta
yándose en Espacio social y génesis de las clases metodología por su carácter superador respecto de
de Bourdieu (1990), tiene implicaciones ontoló- los análisis de correlación bivariados. El ACM es
gicas, en tanto el sistema de relaciones objetivas una herramienta de análisis multivariado, como
que constituye el espacio social es real; epistemo- bien lo explica Baranger (2012).
lógicas, en la medida en que es posible construir
y conocer ese espacio y metodológicas, pues su- Respecto de este giro técnico, se rescatan
ponen un camino o proceso en el conocimiento a continuación algunos aspectos que se
de dicho espacio que prima facie lo involucran. vinculan con el ACM: si el ACM es de carácter
descriptivo o explicativo y en consecuencia
Fortalezas y debilidades de la técnica. si podemos comprenderlo como un modelo.
Por intermedio de estos debates se intentará
Ahora bien, como se mencionó, asumir el introducir las potencialidades y limitaciones de
espacio social como relacional significa poner la técnica para el uso que haremos de ella.

Gráfica 1.
Espacio social Gran Córdoba 2011 en el plano de los ejes 1 y 2

 
Fuente: elaboración del grupo de investigación con base en la EPH-Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014 ISSN 1657-8953


170 Manuel Giovine - Julieta Capdevielle

El espacio construido por el ACM es él se proyectan las variables activas como


multidimensional (cuenta con tantas dimen- ilustrativas, y también los individuos.
siones como categorías de variables hayamos
considerado) y tiene como una salida posible En este contexto, “el espacio factorial
la representación en un plano de dos factores creado por el ACM es isomórfico respecto al
principales, que son los que el programa estima espacio social al que representa, y comparte con
para proyectar en el plano los demás factores este la propiedad de ser un espacio continuo”
que intervienen en la conformación del espa- (Baranger, 2012, p. 140). Aquí cobra importancia
cio social (gráfica 1). El espacio representado preguntarse si este es un método descriptivo o
en dos dimensiones es una figuración plana de explicativo. Hay muchos que han reparado en
un espacio pluridimensional de relaciones entre que el método es puramente descriptivo, en la
categorías de variables. medida en que no permite establecer relaciones
de tipo unicausal o multicausal.
El análisis considera: a) un conjunto de
variables activas, que serán las que conforman Por el contrario, Bourdieu va a sostener
de modo efectivo el espacio social, b) un que el uso que él hace del instrumento le brin-
conjunto de variables ilustrativas, simplemente da un carácter eminentemente explicativo en
proyectadas en el plano una vez generado el un sentido particular, en tanto que la técnica
espacio y c) la potencialidad de representar a posibilita establecer correlaciones entre las
los individuos en el espacio creado a partir de posiciones de los agentes, en términos de con-
las variables activas. diciones objetivas, y las tomas de posición,
que tienen que ver con las construcciones
El software permite construir clases, simbólicas que estos hacen del mundo social.
por el método de clasificación jerárquico Así Bourdieu (2001), producto de un proceso
ascendente. A partir de allí, se utilizó el resul- en el empleo de la técnica, termina arguyen-
tado del software como principio heurístico9 do que esta ofrece una herramienta poderosa
para la captación de los volúmenes y estruc- para la formulación de hipótesis explicativas
tura de capital y, de este modo y como señala del espacio social. “La eficacia explicativa
Baranger (2012) “atendiendo al peso de las del análisis de correspondencias se advierte
demás relaciones que ‘arrastra’ consigo cada con claridad en el hecho de que la corres-
relación e identificando las proximidades y pondencia entre el espacio de las posiciones
diferencias en el espacio social construido y el espacio de las tomas de posición es casi
establecer las clases como sectores del espacio perfecta” (p. 127).
en los que se comparte propiedades similares”
(p. 145)10. La base de datos secundaria
(Encuesta Permanente de
Recapitulando, el ACM es una técnica de Hogares):
análisis de datos que opera con una multiplicidad limitaciones y modificaciones.
de variables al mismo tiempo, generando un
espacio pluridimensional donde las variables A modo de cierre de este apartado episte-
que presentan mayor desviación relativa serán mológico y metodológico se busca dejar plan-
las que introducen superior dispersión en el teado, por un lado, una serie de limitaciones de
espacio. Una manera de representar ese espacio la EPH, en tanto base de datos secundaria. Por
es un gráfico (gráfica 1) con dos factores otro, algunas de las modificaciones que se rea-
principales que se erigen en función de las lizaron a la misma, que estuvieron guiadas por
variables que más dispersión introducen. Sobre nuestra perspectiva teórica.

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014


La configuración de los sectores dominantes en el espacio social de Córdoba, Argentina 171

En primer lugar, la naturaleza intrínse- nuevo referente de hogar (RH) y modificación


ca de una fuente secundaria cuantitativa como de las relaciones filiales en función del nuevo
la EPH, la hace evidentemente no apta para la RH.
operacionalización de categorías teóricas que
impliquen información de tipo cualitativo. En La modificación de la autodesignación
este sentido, el concepto de clase social –que del jefe de hogar11 por la del RH, abarcó a un
es forzoso adoptar por el hecho de utilizar 25 % de los casos y se realizó siguiendo un
fuentes secundarias de información– se cir- conjunto de criterios teóricos y en función de
cunscribe a considerar solo las prácticas prin- los objetivos de investigación del equipo de
cipales (prácticas económicas y educativas investigación12.
fundamentalmente) que definen una “posición
social” con abstracción de las prácticas políti- Así, la elección del RH procuró en pri-
cas, ideológicas, etc., que también constituyen
mer lugar escoger un agente en función de la
determinaciones propias de las clases sociales
mayor disponibilidad de capitales y de su in-
(Torrado, 2007).
serción en el mercado ocupacional para que
ilustrara el conjunto de capitales de que dis-
Por otro lado, como asevera Torrado pone el hogar. Por ello, se buscó dentro del
(2007), otras de las principales críticas atribui-
hogar un referente cuyas características hi-
bles a las fuentes secundarias –ya sea el Sistema
cieran viable “enclasarlo” como representan-
Estadístico Nacional o la EPH– es la imposi-
te del hogar según ciertos criterios prestable-
bilidad de identificar a los propietarios de los
cidos y no según la autodesignación arbitraria
medios de producción en una sociedad dada.
del hogar13.
A partir de los datos del censo de población o
de los censos económicos es imposible cono-
cer con precisión al conjunto de los propietarios Se priorizó a agentes activos por sobre
de los medios de producción, ya se trate de la inactivos; ocupados por sobre desocupados;
propiedad jurídica o de la propiedad económica con mayor nivel de ingreso total individual
(control) de las unidades productivas, y mucho percibido en ese mes; con mayor nivel edu-
menos factible aun establecer diferenciaciones cativo y con mayor antigüedad laboral en la
jerárquicas en su seno (las que son extraordina- ocupación principal. Así mismo, las variables
riamente significativas desde el punto de vista “edad” y “si tiene hijos a cargo” también fue-
de la producción capitalista). Dicho en otras pa- ron de importancia. Luego de designar a los
labras, de acuerdo con las estadísticas que pro- nuevos referentes de hogar se procedió a la
porciona el Estado, la clase capitalista no existe modificación en la relación de parentesco.
y la propia imposibilidad de fijar distinciones Con ello se pretendió que todas las relaciones
internas constituiría una prueba palmaria de de parentesco reflejaran nuevamente las rela-
ello (Torrado, 2007). ciones filiales, pero ahora respecto del nuevo
referente del hogar14. Una vez elegidas las va-
Al mismo tiempo, estas fuentes secunda- riables activas, y designados los nuevos refe-
rias tampoco permiten dar cuenta de la acumu- rentes de hogar, estuvimos en condiciones de
lación de tierra y/o viviendas, ya que solo inda- construir el espacio social cordobés.
gan sobre el régimen de tenencia de la vivienda
en uso. Es decir, no permiten identificar con El espacio social y sus desigualdades
plenitud la acumulación de capital económico
de los diversos agentes. Al interior del espacio social se optó, en
una primera etapa, por identificar fundamen-
Las modificaciones realizadas a la base talmente cuatro clases estadísticas15 (gráfica 2)
de datos de la EPH fueron dos: selección del para el Gran Córdoba16.

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014 ISSN 1657-8953


172 Manuel Giovine - Julieta Capdevielle

Gráfica 2.
Dendrograma de la clasificación jerárquica ascendente para los primeros cuatro factores.
Particiones para cuatro clases, siete y diez fracciones. Espacio social Gran Córdoba 2011

 
Fuente: elaboración del grupo de investigación17 con base en la EPH-Indec.

En un segundo momento, se subdividió En relación con el eje horizontal, co-


el espacio en dos grandes sectores: dominantes rrespondiente al segundo factor del espacio
y dominados. Luego de ello se introdujo una social, de derecha a izquierda, se observa un
segunda diferenciación al interior de los sectores aumento del capital cultural reflejado por la
dominantes entre altos dominantes (aquellos curva que describen las titulaciones, que co-
que detentan el mayor volumen de capital mienzan con primario incompleto en el cua-
económico) y medios dominantes (aquellos que drante cuatro y finalizan en el cuadrante uno
detentan un gran volumen de capital cultural con universitario completo. Por el contrario,
institucionalizado y donde no tienen primacía los valores más extremos del capital econó-
de capital económico)18. mico se encuentran a la derecha del espacio
social, ya sea por ser los inferiores o los supe-
En la gráfica 1, correspondiente al espa- riores, en el cuadrante cuatro el primer decil
cio social para el tercer trimestre de 2011, en de ingreso per cápita familiar y en el segundo
sentido vertical ascendente (factor 1) se observa cuadrante el décimo decil.
un incremento en el volumen del capital eco-
nómico expresado por el ingreso per cápita fa- Como se observa en la gráfica 1, no
miliar que va del primer decil en el cuadrante se puede comprender la dispersión de las
cuatro, hasta el décimo decil para el segundo variables que configuran el espacio social
cuadrante del espacio social; y del capital esco- atendiendo solo a los sectores dominantes,
lar que va de primaria incompleta en el cuarto sino que se vuelve necesario leer los datos
cuadrante del espacio social al primer cuadrante en clave relacional, comprendiendo que las
con universitario completo. dispersiones solo son posibles en la medida

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014


La configuración de los sectores dominantes en el espacio social de Córdoba, Argentina 173

en que existan sectores que detenten un mayor En términos de “calificación ocupacional”


volumen de capital que otros sectores del se observa la categoría “no calificado” como una
espacio social. categoría fuertemente asociada a los sectores
bajos dominados, 5,57 de valor test (VT). El
Los dominantes y dominados del principal ámbito laboral de estos sectores es la
espacio social “ocupación privada” apareciendo como “rama
de actividad” las categorías de “construcción”
Como ya se adelantó, en la conformación para los hombres, con un 49 % de los casos y
del espacio social se generaron cuatro clases “servicio doméstico” (46,5 %) y “comercio”
que hemos dividido en dos grupos. A los que (29,8 %) para las mujeres.
se encuentran en el sector superior del espacio
social y en consecuencia reúnen el mayor En cuanto a la variable “nivel educativo”19,
volumen de capital, se los llamó sectores se constata que el sector bajo dominado está
dominantes del espacio social. Este grupo reúne fuertemente asociado al “primario incompleto”.
el 40 % de la muestra (gráfica 2). Por otro lado, El “nivel educativo” más alto alcanzado por
están los que poseen un menor volumen total el referente es el “primario” (para la variable
de capital, expresado en el factor 1, que hemos “máximo nivel de estudio alcanzado” se observa
denominado los dominados del espacio social y el 47,3 % de los casos), y un alto porcentaje
que son el restante 60 % de los casos. declara no haber terminado este nivel (el 43,4
% de esos casos).
Al interior de estos dos grandes grupos
también se construyeron divisiones. En el caso A la izquierda de este sector, se encuentra
de los dominados del espacio social, se hallan el sector medio dominado con 45 % de la
los sectores bajos dominados, que constituyen población en estudio. En términos de ingreso
un 15 % de los casos y se encuentran en peo- per cápita familiar este sector halla su valor
res condiciones (gráfica 2), y el sector medio modal en el tercer decil, con 21,8 % de los
dominado. casos, siendo que el rango entre el segundo y
el cuarto decil reúne un 56,8 % de los casos.
En relación con el ingreso per cápita En términos de ingreso total familiar (62,4 %
familiar el sector bajo dominado tiene un de los casos) se advierte una concentración en
68,7 % de sus referentes en el primer decil de el cuarto, quinto y sexto decil, con valor modal
ingreso. Si bien el ingreso per cápita familiar es en el sexto decil de ingreso. Ello también daría
un buen indicador de ingreso, pues considera a cuenta de hogares numerosos, lo que se puede
todos los miembros del hogar, esta situación se verificar en la variable “cantidad de miembros
manifiesta con igual fuerza en variables como por ambiente exclusivo” asociada a este sector
el ingreso total familiar con un 45,2 % de los en la categoría de 1,5 a 2 personas por ambiente
casos en el primer decil de ingreso y el ingreso exclusivo.
de la actividad principal, con un 48,4 % de los
casos en el primer decil. Esta diferencia entre En lo concerniente a la “calificación ocu-
el ingreso per cápita familiar, el ingreso total pacional” este sector aparece fuertemente aso-
familiar y el ingreso de la actividad principal ciado a la calificación “operativa” (con un VT
nos está sugiriendo familias numerosas, como de 9,03) y con menor asociación (VT de 2,94)
se puede observar en la variable “cantidad de a la calificación “no calificado”. En lo que res-
miembros por ambiente exclusivo” que aparece pecta a la rama de actividad, para los hombres
ligada fuertemente al sector bajo dominado en aparece con una fuerte unión a la “industria ma-
su “categoría más de tres personas por ambiente nufacturera” (25,7 % de los casos y 6,94 de VT),
exclusivo”. y le siguen con menor asociación, “logística”,

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014 ISSN 1657-8953


174 Manuel Giovine - Julieta Capdevielle

“construcción” y “comercio” (14,5 %, 16,2 % principal, mientras que los hombres lo hacen
y 16,1 % respectivamente). En el caso de las solo en un 18 % de los casos.
mujeres, aparece fuertemente la categoría “ser-
vicio doméstico y sociales” (33,7 %) y le siguen En lo concerniente a “máximo nivel
“comercio” e “industria” (20,7 % y 16,9 % res- educativo alcanzado”20 por el RH, se concentran
pectivamente). las categorías en “universitario” (47,7 % de
los casos) y “terciario”21 (34,2 % de los casos)
En cuanto al “nivel educativo”, se observa para los medios dominantes, presentándose en
que el sector medio dominado posee un 51 % de el caso de las RH-mujeres (43 %) un mayor
los casos en el nivel “secundario”, siendo que el porcentaje de “terciarios” que en los hombres
64,6 % de los que tienen el secundario, lo tienen (25 %). El 60 % de los RH declaran haber
incompleto. finalizado el nivel de estudios en cuestión.

Dentro de los sectores dominantes del Por su parte, el sector alto dominante
espacio social, en el primer cuadrante del reúne a un 13 % de la población en estudio, y
espacio social está el sector medio dominante, se ubica en el segundo cuadrante del espacio
que representa un 27 % del total de los casos social. Este sector se caracteriza por sus
y completa el 72 %. El ingreso per cápita altos ingresos, ingreso per cápita familiar de
familiar de este sector es también difuso, con décimo decil (44,6 %) y noveno decil (24,3
un valor modal en el octavo decil (23,8 % de %) principalmente, siendo el décimo decil
los casos) y una concentración en el séptimo, de ingreso per cápita familiar la categoría de
octavo y noveno decil de un 64,4 % de los variable con más asociación al sector (15,8
casos. Se puede notar que el ingreso total de VT). El mismo cuenta con un ingreso total
familiar se encuentra con una distribución familiar entre el octavo decil y el décimo decil,
similar, y el ingreso de la actividad principal y un ingreso de la actividad principal aglutinado
se concentra en el octavo y noveno deciles. En fuertemente en el décimo decil (65,8 %) y
consecuencia, las colaboraciones de los demás noveno decil (20 %). Lo que evidencia no solo
integrantes del grupo familiar, y a su vez, un alto nivel adquisitivo, sino que ese nivel es
grupos familiares no tan numerosos; de ello alcanzado sobre todo por el RH.
podemos dar cuenta por medio de la asociación
a la clase de la variable “cantidad de miembros La calificación ocupacional predominante
por ambiente exclusivo” en su categoría de 0,5 en este sector es la “profesional” (58,3 % de
a 1 persona por ambiente. los casos), siguiéndole rezagada la calificación
“operativa” y “técnica” con el 20 % de los
La calificación que prevalece en el sector casos cada una. Este sector se caracteriza
medio dominante es la “técnica”, con un 53,5 % principalmente por la “jerarquía ocupacional”
de los casos y una asociación al sector de 11,22 de “dirección” (VT de 9,65). Aparece
de VT. Este sector se caracteriza principalmente también el “ámbito laboral” “estatal” (VT de
por las ramas “servicios sociales y salud” (VT 3,94), siendo uno de los sectores con mayor
de 7,1) y “enseñanza” (VT de 3,26). Por lo proporción de empleados del Estado (34,8
general son “empleados u obreros” (VT de %). Es menester aclarar que en el caso de los
5,01), muchos de ellos de “ocupación estatal” RH y sus cónyuges, la proporción de hombres
(24,3 % de los casos y VT de 3,25), lo que empleados del Estado es levemente superior
también se muestra en la asociación que presenta que en los medio dominante (18 % contra 26
“administración pública” y “servicios públicos” %), en cambio para las mujeres esta relación
(VT de 2,74) a este sector. Las mujeres trabajan aumenta considerablemente (29 % en los medio
en un 26 % en el sector estatal como actividad dominante contra 45 % en los alto dominante).

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014


La configuración de los sectores dominantes en el espacio social de Córdoba, Argentina 175

Por último, este sector presenta una sector alto dominante ocupan, en su mayoría,
proporción similar a la de los medio dominante cargos directivos con una asociación a la cate-
en el nivel “universitario” (alrededor del 50 %) y goría de actividad de “patrones”; propia de una
en el nivel “posgrado universitario” (menor al 3,2 estructura patrimonial afiliada a ser “propieta-
% en ambos casos). Donde aparecen diferencias rios de grandes empresas” y “propietarios de
significativas es en el nivel “terciario” (34,2 % medianas empresas”. Los medio dominante se
de los medio dominante contra un 13,8 % de los ligan a una jerarquía de “trabajadores asalaria-
alto dominante) y en el nivel “secundario” (2,8 dos”, en establecimientos medianos a grandes,
% de los medio dominante contra 14,8 % de los en el área de la salud y la educación principal-
alto dominante). Donde se nota verdaderamente mente.
las disimilitudes entre estos sectores es en la
terminalidad; prácticamente el 80 % terminó el Por último, en relación con el “nivel edu-
nivel de estudio que declara como “último nivel cativo”, si bien ambos sectores están asociados
de estudios alcanzado” (79,8 %) en los alto al nivel “superior o universitario completo”, en
dominante, contra los medio dominante donde el caso del sector medio dominante hay un fuer-
apenas el 60 % finalizó ese nivel. te vínculo con la categoría “superior universi-
tario incompleto”, no siendo así para el sector
Los sectores dominantes en el espacio alto dominante.
social cordobés
Conclusiones
En este apartado se describen los atribu-
tos cardinales de los sectores dominantes del A través de una fuente de datos secundaria
espacio social cordobés. Como se mencionó, cuantitativa como la EPH y del ACM se
al interior de estos se establecieron dos grandes desarrolló el momento objetivista del espacio
grupos o fracciones: los sectores medios domi- social cordobés para el tercer trimestre de 2011,
nantes y los altos dominantes. centrando el análisis en las relaciones y recursos
que dan cuenta del volumen y la estructura del
Las diferencias primordiales entre capital de las unidades domésticas. En este
los sectores altos dominantes y los medios contexto se presenta a los sectores dominantes
dominantes se observan sobre todo en términos desde una mirada relacional.
de: ingreso, características de la ocupación y
nivel educativo. Para ello, la utilización de una técnica
relacional de construcción del espacio social
Mientras que en el sector alto dominante permitió posicionar a las unidades domésticas
el ingreso en sus diversas modalidades en una compleja red de relaciones. Estas uni-
(ingreso de la actividad principal, ingreso dades domésticas posteriormente se agruparon
total individual e ingreso per cápita familiar) por sectores y se determinaron las principales
se concentra en el décimo decil, en el sector asociaciones con las categorías de las variables
medio dominante aparece principalmente en el consideradas en el espacio (activas como ilus-
octavo y noveno decil. trativas), lo que hizo posible distinguir a los do-
minados de los dominantes en el espacio social.
Respecto a las características de la ocupa- Finalmente, al interior del grupo dominante, se
ción del RH, en el caso de los alto dominante se enfocó la mirada en dos grandes sectores: los
observa una asociación con la calificación “pro- medio dominante y los alto dominante.
fesional” contra una asociación con la califica-
ción “técnica” de los sectores medio dominan- Como demostramos en el artículo, las
te. En términos de jerarquía, los referentes del diferencias al interior del grupo dominante del

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014 ISSN 1657-8953


176 Manuel Giovine - Julieta Capdevielle

espacio social (al menos en esta primera apro- posiciones en el que los agentes se distribuyen
ximación objetivista) se dan en función de tres en él, en una primera dimensión, según el vo-
dimensiones principales: el ingreso, las carac- lumen global del capital que poseen y, en una
terísticas de la ocupación y el nivel educativo. segunda, según la composición de capital; es
Mostrar categorías de variables asociadas a es- decir, de acuerdo con el peso relativo de las dis-
tos sectores fue de trascendental importancia tintas especies en el conjunto de las posesiones
para explicar sus disimilitudes (tanto respecto (Bourdieu, 1990). De esta forma, el espacio so-
de los sectores dominados como dentro de los cial se caracteriza por la existencia de diferen-
dominantes) y establecer las desigualdades que cias sociales, por el acento en la desigualdad li-
los distinguen en el espacio social en términos gada a la distribución de recursos eficientes (los
objetivos. capitales) y con ello, la cuestión del poder como
constitutivo de la sociedad (Cragnolino, 2011).
Como se adujo, investigar a los sectores
de poder es necesario para explicar cómo se 3
“En los países de América Latina se
reproduce el orden social y los mecanismos de suele estudiar mucho más la producción social
dominación/dependencia en su conjunto. Sin de la pobreza que de la riqueza. De tal forma,
embargo, queda pendiente reconstruir a través suelen también ser mucho más frecuentes los
de un trabajo de tipo cualitativo las estrategias estudios sobre las condiciones de educación de
de reproducción social que los sectores los excluidos que los que abordan las formas y
dominantes despliegan, y sus vínculos con el oportunidades educativas de los más ricos. La
resto de las clases y fracciones de clases, para ausencia de estudios sobre la producción social
analizar así la dinámica de las clases sociales. de la riqueza y la educación es un serio límite
para un análisis riguroso de la exclusión educa-
En síntesis, es menester considerar las tiva, a la cual, está asociada. No es posible com-
distintas dimensiones de esas relaciones de prender la producción social de la miseria si no
poder: por un lado, las asociadas a las condiciones se entienden los mecanismos de producción
objetivas que permiten visualizar relaciones social de la riqueza, aspectos que, en el campo
de fuerza y conflicto y, por el otro, las que se educativo adquieren particular relevancia. Una
enlazan con sus manifestaciones concretas, en excepción a esta observación puede hallarse
prácticas, interacciones, representaciones y en las investigaciones de Tiramonti & Ziegler
discursos (Gutiérrez, 2012). (2008) y en las de Almeida & Nogueira (2002)”
(Gentili, 2010, pp. 20-21).
Notas
4
Para Bourdieu (2006) “una de las pre-
1
Flacso es una institución creada en 1974 guntas más fundamentales a propósito del mun-
cuyo compromiso radica en la construcción de do social es la de saber por qué y cómo ese
sociedades y sistemas políticos democráticos. mundo perdura, persevera en el ser, cómo se
Para consultar más sobre esta organización ver: perpetúa el orden social, es decir, el conjunto
http://flacso.org.ar de las relaciones de orden que la constituyen”
(p. 31). Remarca con ello lo que considera
Siguiendo las contribuciones de Pierre
2 una de las tareas centrales de la sociología el
Bourdieu se entiende a dicho espacio social “descubrir las estructuras más profundamen-
como un espacio que define acercamientos y te enterradas de los diversos mundos sociales
distancias sociales; en él no se pueden igno- que constituyen el universo social, así como
rar las diferencias objetivas fundamentales los ‘mecanismos’ que tienden a asegurar su re-
(Cragnolino, 2011). El espacio social se cons- producción o su transformación” (Bourdieu &
tituye así como un espacio pluridimensional de Wacquant, 2008, pp. 30-31). De esta manera,

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014


La configuración de los sectores dominantes en el espacio social de Córdoba, Argentina 177

liga a la sociología la función de sacar a la luz trucción de este espacio, se seleccionaron va-
las formas de dominación/dependencia que re- riables disponibles en la EPH (algunas de las
producen la vida social. mismas son: ingreso, situación de ocupación,
categoría ocupacional, nivel educativo, núme-
5
Aunque las ciencias sociales en Améri- ro de miembros del hogar, cantidad de habita-
ca Latina hayan producido estudios sistemáti- ciones, tipo y particularidades de la vivienda).
cos sobre los sectores dominantes, aún existe “Nuestra perspectiva, como toda construcción
un déficit explicativo acerca de los orígenes teórica, conlleva necesariamente la conforma-
y la gestión de las fortunas, sobre el modo de ción de una metodología y una instrumentación
existencia social de los muy ricos, y sobre los técnica pertinente para la construcción de in-
vínculos entre los diferentes grupos sociales, en formación empírica. Concretamente, implica
otras palabras, sobre las dimensiones relaciona- la utilización del Análisis Multidimensional de
les entre los dos polos: riqueza y pobreza. La Datos desarrollado por la escuela francesa de
riqueza sustantiva posee una legitimidad mis- Analyse des Données, en particular el Análisis
tificada, y el efecto de poder derivado de ello de Correspondencias Múltiples (ACM) y los
define condiciones concretas en las relaciones Métodos de Clasificación” (Gutiérrez & Mansilla,
entre clases antagónicas (Cattani, 2008, p. 206). 2013, p. 3).

6
Las formas sustancialistas de concebir 8
En la perspectiva teórica en que se ubica
al poder encuentran su raigambre en pensarlo la presente investigación, las clases sociales son
reificado en las propiedades materiales: enten- el conjunto de agentes que ocupan posiciones
derlo como un “poseer”, una cierta capacidad semejantes y que, situados en condicionamien-
de “consumo”, una modalidad de “capital” o la tos similares, tienen todas las probabilidades de
pertenencia a ciertos grupos, sin comprender tener disposiciones e intereses análogos y de
que las desigualdades subyacentes exigen un producir, por lo tanto, prácticas y tomas de po-
proceso de legitimación de las diferencias para siciones semejantes (Bourdieu, 1990, p. 284).
que estas sufran la alquimia que transforma lo Sin embargo, cabe remarcar que como las dis-
cuantitativo en cualitativo y de este modo se posiciones y conductas que las convertirían en
constituyan en desigualdades. Esta operación un verdadero grupo existen solo como “proba-
simbólica solo es posible en la medida en que bilidades”, debemos denominar a estas no cla-
estas diferencias sean reconocidas por la mayo- ses reales sino clases probables, clases teóricas
ría de los agentes como valiosas. En este marco, o clases en el papel. Así, las clases sociales son
los estudios que dan cuenta de los sectores do- una construcción realizada por el investigador
minantes como grupos específicos sin mostrar a partir de la distribución desigual de los dis-
en qué medida ellos forman parte de esta alqui- tintos recursos sociales, y, más precisamente,
mia, no hacen más que sustancializar las dife- a partir del volumen y estructura del capital
rencias que denuncian, al modo de los estudios (económico, cultural, social y simbólico) y de
sobre el capital humano que muestra Bourdieu su trayectoria, considerados en términos re-
(1987). lacionales (Bourdieu, 1990). A su vez, en la
constitución de esas clases, no solo es necesario
7
La EPH es un programa nacional de considerar los vínculos objetivos identificables
producción permanente de indicadores socia- en un espacio social concreto, sino que también
les cuyo objetivo es conocer las características es esencial dar cuenta de las relaciones simbó-
socioeconómicas de la población. Es realizada licas que ellas mantienen entre sí, duplicando
en forma conjunta por el Instituto Nacional de de ese modo, la disponibilidad diferencial de
Estadística y Censos (Indec) y las direcciones los recursos y con ello, los nexos de fuerza y
provinciales de estadística (DPE). Para la cons- de lucha. Analizar entonces la dinámica de la

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014 ISSN 1657-8953


178 Manuel Giovine - Julieta Capdevielle

reproducción social, supone, en primer lugar, lia tiene un sustrato biológico ligado a la sexua-
captar su “sentido objetivo”, es decir, la cons- lidad y a la procreación, constituyéndose en la
trucción del espacio pluridimensional de posi- institución social que regula, canaliza y confie-
ciones donde se insertan las distintas clases de re significados sociales y culturales a estas ne-
agentes (en el sentido estadístico y como una cesidades. Su función de reproducción incluye
estructura de relaciones objetivas) y, en segun- tres dimensiones: la reproducción biológica, la
do lugar, dar cuenta de los “sentidos vividos” reproducción cotidiana y la reproducción so-
y de las prácticas específicas que esos agentes cial” (Jelin, 1984). En cambio, el hogar/unidad
ponen en marcha (Gutiérrez, 2007). doméstica tiene como eje, la realización de pro-
cesos de producción, distribución y consumo ne-
“Tratar de captar las reglas del juego de
9
cesarios para el mantenimiento y reproducción
la divulgación y de la distinción según las cua- de sus integrantes corresidentes. Como plantea
les las clases sociales expresan las diferencias Jelin, el ámbito doméstico se delimita por el
de situación y de posición que las separan, no conjunto de actividades comunes o compartidas
implica reducir todas las diferencias y menos ligadas al mantenimiento cotidiano de un grupo
aún la totalidad de esas diferencias, comenzan- social corresidente, que se conforma y cambia en
do por su aspecto económico, a distinciones relación con las demás instituciones y esferas de
simbólicas, y tampoco es reducir las relaciones la sociedad. Esto implica tomar distancia de los
de fuerza a puras relaciones de sentido; es optar planteamientos naturalistas y dualistas que hacen
por acentuar explícitamente con fines heurísti- referencia al ámbito doméstico como una esfera
cos y a costa de una abstracción que debe mos- aparte y en los que se identifica lo doméstico con
trarse como tal, un perfil de la realidad social lo privado, en contraposición con el ámbito pú-
que a menudo pasa inadvertido o que, cuan- blico del poder y producción social.
do se lo advierte, deja de mostrarse como tal”
(Bourdieu, 2002, p. 141). 12
La investigación colectiva tiene como
objetivos: a) explicar y comprender la articu-
“En nuestro enfoque, se encuentra im-
10
lación entre la dinámica de la estructura del
plícita una perspectiva ontológica que hace des- espacio social del Gran Córdoba en el decenio
aparecer el problema de la existencia o no de 2003-2013 y las principales estrategias de re-
clases remplazándolas por la existencia real del producción social, y b) consolidar una perspec-
espacio de relaciones –en este sentido conserva tiva teórica y metodológica para el análisis de
la idea marxiana de relaciones objetivas inde- los procesos de reproducción de la desigualdad
pendientes de las conciencias y voluntades in- y la dominación sociales. Se espera, en el se-
dividuales– pero sin renunciar a la idea de clase gundo momento de la investigación, a través
en tanto diferenciación social de los agentes que del trabajo cualitativo, reconstruir trayectorias
ocupan distintas posiciones en aquel espacio. laborales, educativas y habitacionales, indivi-
Así, no se trata de dar cuenta de clases sociales duales y familiares, representativas de las dife-
predefinidas sino de reconstruir la estructura del rentes posiciones sociales. Es decir, se procura
espacio social para identificar en él a conjuntos dar cuenta de las estrategias de reproducción
de agentes que ocupan posiciones semejantes social, en tanto “conjunto de prácticas feno-
–condiciones de existencia homogéneas–” menalmente muy diferentes, por medio de las
(Gutiérrez & Mansilla, 2013, p. 2). cuales los individuos y las familias tienden, de
manera consciente o inconsciente, a conservar
Aunque a lo largo del trabajo utilicemos
11
o a aumentar su patrimonio, y correlativamente
indistintamente los términos familia y hogar/ a mantener o mejorar su posición en la estructu-
unidad doméstica, en rigor nuestra unidad de ra de las relaciones de clase” (Bourdieu, 2000,
análisis es esta última. Por un lado, “la fami- p. 122). Constituyen un sistema integrado y los

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014


La configuración de los sectores dominantes en el espacio social de Córdoba, Argentina 179

factores que permiten explicarlas y compren- siderando el censo nacional de poblaciones ho-
derlas son: el volumen y la estructura del capital gares y vivienda 2010 contaba con 1.454.536
de la familia, los instrumentos de reproducción habitantes.
disponibles, el estado de la relación de fuerzas
entre las clases y los hábitos incorporados. Para 17
Esta información se construyó en el
un análisis exhaustivo sobre las discusiones en marco del trabajo realizado por el grupo de in-
torno a este concepto en las ciencias latinoame- vestigación, del que los autores del artículo for-
ricanas de las décadas de 1970 y de 1980 ver mamos parte, y del proyecto de investigación
Gutiérrez (2004a, 2004b, 2005). titulado: “Las clases y su reproducción en el es-
pacio social cordobés (2003-2013)”. Este pro-
13
Ello no implica que no se hayan con- yecto está financiado por SeCyT-UNC, dirigido
siderado posteriormente las modificaciones he- por la Dra. Alicia B. Gutiérrez y codirigido por
chas, y estudiado consecuentemente cuáles eran el magíster. Héctor O. Mansilla.
los principales criterios de autodesignación del
jefe (donde las correlaciones principales se aso- 18
En el espacio social construido se cons-
cian a variables de género, ingreso, situación tata que las principales distinciones se pueden
ocupacional, etc.) pero hemos decidido no ex- establecer entre capital cultural institucionali-
tendernos en este punto porque escapa a los ob-
zado (último nivel alcanzado) y variables que
jetivos de este artículo.
se asocian al ingreso. Por otro lado, cabe aclarar
que la dimensión política no ha sido conside-
Por ende, si se optó por modificar la con-
14
rada en la construcción del espacio social por
dición de referente del que fuera autodesignado
cuestiones que se vinculan a las características
por el hogar como jefe a su hijo, porque el au-
de base de datos secundaria, como se especificó
todesignado como jefe era un hombre inactivo-
con anterioridad en la sección “La base de datos
jubilado, con más de 65 años y su hijo era activo,
secundaria (Encuesta Permanente de Hogares):
mayor de 25 años, pues bien, también debieron
limitaciones y modificaciones”. Sin embargo,
modificarse las relaciones de parentesco, de
se espera poder tomarla en cuenta en una etapa
modo tal que el que antes era designado como
jefe quedara con la categoría de madre o padre. cualitativa ulterior.

“Así, componer la estructura del espa-


15
19
La variable comprende las categorías
cio social consiste, en un primer momento, en “sin instrucción”, “primario incompleto”, “pri-
poner en juego simultáneamente un conjunto mario completo”, “secundario incompleto”,
de variables activas e identificar sus múltiples “secundario completo”, “superior universitario
relaciones. En un segundo momento, a través incompleto”, “superior universitario completo”
de la aplicación de métodos de clasificación – y “educación especial”. La educación prima-
en nuestro caso métodos de clasificación jerár- ria en Argentina comienza a partir de los seis
quica ascendente (CJA)– es posible dar cuenta años de edad y consta de seis o siete años según
de diferentes clases sociales (sobre la base de decisión de cada jurisdicción, y la educación
clases estadísticas) e identificar las relaciones secundaria consta de seis o cinco años según
existentes entre las posiciones próximas y las cada jurisdicción lo determine. Se divide en dos
propiedades que las caracterizan” (Gutiérrez & ciclos: un ciclo básico, de carácter común a to-
Mansilla, 2013, p. 3). das las orientaciones y un ciclo orientado, de
carácter diversificado según distintas áreas del
La EPH se realiza para el aglome-
16 conocimiento, del mundo social y del trabajo.
rado Gran Córdoba. Este abarca a la ciudad Para más información consultar: http://portal.
de Córdoba y a un conjunto de localidades del educacion.gov.ar/sistema/la-estructura-del-sis-
departamento Colón, al norte de la misma. Con- tema-educativo/

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014 ISSN 1657-8953


180 Manuel Giovine - Julieta Capdevielle

Esta variable es semejante a la de “ni-


20
Bourdieu, P. (1999). Meditaciones Pascalianas.
vel educativo” en sus categorías, pero discrimi- Barcelona: Anagrama.
na entre niveles “terciario”, “universitario” y
“posgrado universitario”. A su vez considera al- Bourdieu, P. (2000). La distinción. Madrid:
gunas divisiones para el nivel medio. Para ma- Taurus.
yor información consultar: http://www.indec.
mecon.gov.ar/ftp/cuadros/menusuperior/eph/ Bourdieu, P. (2001). Las estructuras sociales de
eph_disenoreg_t3_2011.pdf la economía. Buenos Aires: Manantial.

21
El denominado “nivel terciario” forma Bourdieu, P. (2002). Condición de clase y po-
parte –según lo enuncia la Ley de Educación sición de clase. Revista Colombiana de
Nacional (ley 26.206)– de la educación supe- Sociología, 7(1), 119-141.
rior o cuarto nivel del sistema educativo. Está
básicamente estructurado en torno a los insti- Bourdieu, P. (Ed.) (2006). Reproducción y do-
tutos de formación docente (c.f. ley 26.206) minación. En Campo del poder y repro-
y a aquellos que brindan capacitación técnica ducción social (pp. 31- 72). Córdoba: Fe-
superior (ver ley 26.058), así como a la ofer- rreyra Editor, Colección Enjeux.
ta educativa de otras áreas, como por ejemplo
la artística (c.f. ley 26.206). Su regulación y el Bourdieu, P., & Wacquant L. (2008). Una invi-
modo de articulación de los institutos de educa- tación a la sociología reflexiva. Buenos
ción superior no universitaria, entre ellos y con Aires: Siglo Veintiuno.
las universidades, están estipulados en la Ley
de Educación Superior vigente (ley 24.521). Castellani, A., & Schorr, M. (2004). Devalua-
Para más información consultar: http://www1. ciones y dolarizadores. La construcción
hcdn.gov.ar/dependencias/ceducacion/LES/ social de las alternativas propuestas por
ANTECEDENTES/NSnU.htm los sectores dominantes ante la crisis de
convertibilidad. Argentina, 1999-2001.
Referencias Buenos Aires: Mimeo.

Azpiazu, D., Basualdo, E., & Notcheff, H. Cattani, A. (2008). Riqueza sustantiva y rela-
(1998). El nuevo poder económico. Buenos cional: un enfoque diferenciado para el
Aires: Hyspamérica. análisis de las desigualdades en América
Latina. En A. Cimadamore & A. Cattani
Baranger, D. (2012). Epistemología y metodo- (Coords.), Producción de pobreza y des-
logía en la obra de Pierre Bourdieu (2ª igualdad en América Latina (pp. 205-
ed.). Recuperado de http://es.scribd.com/ 213). Bogotá: CLACSO; Siglo del Hom-
doc/135164350/Epistemologi-a-y-meto- bre Editores.
dologi-a-en-la-obra-de-Pierre-BOurdieu-
Baranger-D Cragnolino, E. (2011). La noción de espacio so-
cial rural en el análisis de procesos de ac-
Bourdieu, P. (1987). Los tres estados del capital ceso a la educación de jóvenes y adultos
cultural. Sociológica, 2(5), 11-17. y apropiación de cultura escrita. En M.
Lorenzatti (Comp.), Procesos de alfabeti-
Bourdieu, P. (Ed.) (1990). Espacio social y gé- zación y acceso a la educación básica de
nesis de las «clases». En Sociología y cul- jóvenes y adultos (pp. 191-209). Argentina:
tura (pp. 281-309). México: Grijalbo. Editorial Vaca Narvaja.

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014


La configuración de los sectores dominantes en el espacio social de Córdoba, Argentina 181

Gentili, P. (2010). Adentro y afuera. El derecho Gutiérrez, A. (2012). Reflexiones en torno al


a la educación y las dinámicas de exclu- análisis de redes sociales en la pobreza.
sión escolar en América Latina. En P. Sociológica, 27(76), 149-188.
Gentili, F. Saforcada, N. Gluz, P. Imen &
F. Stubrin (Eds.), Políticas, movimientos Gutiérrez, A., & Mansilla, H. (Septiembre-Oc-
sociales y derecho a la educación (Co- tubre, 2013). El espacio social y su repro-
lección Red CLACSO de Posgrados) (pp. ducción: aspectos teórico metodológicos y
9-32). Buenos Aires: CLACSO. fuentes secundarias. Ponencia presentada
en XXIX Congreso Latinoamericano de
Gutiérrez, A. (2004a). De estrategias, capitales Sociología ALAS, Santiago de Chile, Chile.
y redes: elementos para el análisis de la
pobreza urbana. En L. Mota-Díaz & A. Jelin, E. (1984). Familia y unidad doméstica:
Cattani (Comps.), Desigualdad, pobreza, mundo público y vida privada. Buenos
exclusión y vulnerabilidad en América Aires: Centro de Estudios de Estado y
Latina. Nuevas perspectivas analíticas Sociedad -[CEDES].
(pp. 17-58). México: ALAS, Facultad de
Ciencias Políticas y Administración Pú- República Argentina. Ley 24.521 de 1995. Ley
blica; UAEM, Centro de Estudios sobre de Educación Superior. Boletín Oficial
Marginación y Pobreza del estado de No. 28.204. Senado y Cámara de Dipu-
México; Universidad e Federal do Rio tados de la Nación de Argentina, agosto
Grande do Sul. de 1995.

Gutiérrez, A. (2004b), Pobre, como siempre.... República Argentina. Ley 26.206 de 2006. Ley
Estrategias de reproducción social en la de Educación Nacional. Boletín Oficial
pobreza. Córdoba: Ferreyra Editor. No. 31.062. Senado y Cámara de Diputa-
dos de la Nación de Argentina, diciembre
Gutiérrez, A. (2005). La reproducción en la po- de 2006.
breza (¿y de la pobreza?): el enfoque des-
de la perspectiva de las estrategias fami- Rodríguez, I. (2012). Capital cultural y estra-
liares. Cuestiones de Sociología, Revista tegias educativas de las clases altas de la
de Estudios Sociales, 2, 175-184. ciudad de Buenos Aires. En S. Ziegler &
V. Gessagui (Comps.), Formación de las
Gutiérrez, A. (2007). Clases, espacio social y elites. Investigaciones y debates en Ar-
estrategias: una introducción al análisis gentina, Brasil y Francia (pp. 147- 163).
de la reproducción social en Bourdieu. Buenos Aires: Manantial; FLACSO.
En P. Bourdieu (Ed.), Campo del poder y
reproducción social (pp. 9-27). Córdoba: Schorr, M., Manzanelli, P., & Basualdo E.
Ferreyra Editor; Colección Enjeux. (2012). Elite empresarial y régimen eco-
nómico en la Argentina: Las grandes fir-
Gutiérrez, A. (2011). Estrategias de reproduc- mas en la posconvertibilidad (FLACSO,
ción social. Las microprácticas y la polí- Documento de trabajo N° 22). Buenos
tica social. Capital y redes sociales. En J. Aires: FLACSO.
Vales Paz & M. Espinosa (Eds.) América
Latina y el Caribe: la política social en Svampa, M. (2005). La sociedad excluyente. La
un nuevo contexto. Enfoque y experiencia Argentina bajo el signo del neoliberalis-
(pp. 107- 134). Montevideo: UNESCO. mo. Buenos Aires: Editorial Taurus.

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014 ISSN 1657-8953


182 Manuel Giovine - Julieta Capdevielle

Torrado, S. (2007). El sistema estadístico na-


cional y la sociología: 50 años de expe-
riencia. Revista Argentina de Sociología,
5(9), 11-23.

Zibechi, R. (2011). Política & Miseria. La re-


lación entre el modelo extractivo, los pla-
nes sociales y los gobiernos progresistas.
Buenos Aires: La Vaca Editora.

Civilizar 14 (27): 165-182, julio-diciembre de 2014

También podría gustarte