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El Mapa Del Coronavirus LECTURA
El Mapa Del Coronavirus LECTURA
El gráfico muestra los casos registrados en los países con más infecciones
detectadas. La escala es logarítmica (la distancia de 1 a 10 es igual que de 10 a
100) para apreciar mejor las fases iniciales del brote.
China es el país donde apareció el virus y donde se han producido más
infecciones. Pero otros países tienen ya un número significativo de casos
confirmados: Corea del Sur, Italia, Irán, Japón, Francia, Alemania y España
superaban los 200 enfermos el 5 de marzo.
El ritmo en cada país es diferente. Japón, Hong Kong, Singapur han visto crecer
las infecciones paulatinamente desde enero. En otros países como España,
Francia o Alemania, los casos se dispararon muy rápido siguiendo la estela de
Italia, que dio la voz de alarma en Europa.
La clave para frenar un brote es reducir el ritmo al que crecen los casos. Es lo que
está consiguiendo China, donde las infecciones dejaron de crecer
exponencialmente a mediados de febrero, cuando la cuarentena y las medidas de
distanciamiento hicieron efecto.
Nuevos casos confirmados por día desde el inicio del brote en Europa y fuera
La letalidad registrada por país
Ese retraso tiene otras implicaciones. Las primeras muertes por Covid-19 en
España han sido personas que no habían sido diagnosticadas. “Estas muertes
apuntan a que el virus llegó antes de lo pensado”, afirma Antoni Trilla, del
Hospital Clínic de Barcelona). El virus lleva al menos cuatro semanas
circulando sin ser detectado, en España y otros países como por ejemplo Italia.
“Si tienes una muerte cuando todavía no hay mucha transmisión, eso sugiere que
podría haber unos pocos cientos de infectados”, nos dice Kucharski. La lógica es
clara: si la mortalidad ronda el 1%, detectar un muerto implica tener unos 100
infectados hace tres semanas, que es lo que tarda la enfermedad en matar. Y esos
100 casos es probable que se hayan extendido a 300, 500 o 1.000 el día que se
produce la muerte.
Otra dificultad para medir la letalidad es que hay infecciones que no se detectan
porque ocasionan síntomas leves. Si se contabilizasen esos casos, las tasas de
letalidad bajarían. Es lo que sugiere el caso de Corea del Sur, que está haciendo
más pruebas que nadie y ahora mismo reporta una mortalidad del 0,6%. Son
buenas noticias, pero solo relativamente: aunque la mortalidad del coronavirus
fuese un tercio de lo que dicen los datos actuales, seguiría siendo bastante peor
que la de la gripe común.
Tampoco hay consenso sobre cuántos casos indetectados existen en cada país. El
epidemiólogo de la Universidad de Oxford Christopher Fraser ha
explicado que la proporción de casos sin reportar podría ser del 50%, por lo que
“la tasa de letalidad rondaría el 1%”. Coincide en eso el doctor Bruce Aylward,
de la OMS, que ha dicho a The New York Times que “no hay evidencias [en
China] de que estemos viendo solo la punta del iceberg, con 9 partes de 10
hechas de zombis ocultos que difunden el virus. Lo que estamos viendo es una
pirámide: la mayor parte está a la vista”. En cambio, el experto en virus de ARN
Adolfo García-Sastre, investigador del Hospital Monte Sinaí de Nueva York,
piensa que “existen de cinco a diez veces más infectados que lo que se está
contabilizando actualmente, lo cual reduce mucho su letalidad".
Para juzgar los datos de casos confirmados es importante saber qué esfuerzo está
haciendo cada país por detectar todas las infecciones. Las diferencias son
grandes: Corea ha hecho 3.400 test por cada millón de habitantes, Italia o Suiza
han hecho entre 500 y 600 y Estados Unidos había hecho apenas 2 por millón
cuando dejó de publicar sus datos hace unos días.