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Fugiado en las cosas, quiere ser dl mismo, Pero esto no se traduce ‘en querer esta ola otra posbilidad, sno precsamente en aceptar ser como posbilidad. Si, adems, aquello que define la posibili- dad, es decir, la posibilidad extrema, el limite, es la muerte, la vor dela conciencia lama laexstencia a wser-para-la-muerten, {que es como decir: ama a ser sf mismo, aser propio. La vor de la concincia llama a un trnsito: pasar de la cada ala existen- cia, de la impropiedad a la propiedad. Y la nica propiedad csencial es la muerte, porque sdlo desde ella se define el camino dela finitud. Ya esa propiedad llama laconciencia. Pero como se recordar, impropiedad no define un cardcterdefectuoso del Dasein sino una condicién inherente al mismo, De hecho, De- sin no deja de ser permanentemente esa tensin entre impro- piiedad y propiedad, tensién que a su ver lo vuelve permanen- ‘temente culpable. Ffectivamente, la vor de la conciencia nos advirte de una culpabilidad que no se concreta nunca por ha- ber hecho est 0 lo otro. En realidad, el Dasin no es culpable de nada olo que es lo mismo, es s6lo culpable por exist. Por- {que exstendo siempre ha elegdo ya una posbilidad determi nada, eleccién que traduce el sentido mismo de la posbildad (ecuérdes, de la exstencialidad) en su contrario, en una cosa en un hecho descrbible, por as dcinlo, objetivamente. Ocu- re que, cligiendo, el Davin ala vex que cumple su condicién, se niega a si mismo, porque cae en algo: se convierteen lo que hha hecho o en aquello que aparece, oculindose de exe modo st ‘condicién de epoder ser». Por exo, en cl ands, la caida (haber clegido ya siempre algo) estan constitutiva de la existenciali- dad. Por eso mismo, de este fenémeno dela concienci, incluso de ese sentimiento de culpabilidad, queda apartada cualquier pposbilidad de consideracién moral. Ser culpable tiene un sen- ‘ido ontoldgico, no moral, Por as dcielo, uno no puede dejar dese culpable y, por eso mismo, la tnica opcin posible de a ‘onciencia no puede residir en ditigise a esta 0 aquella pos lidad porque de suyo ninguna posbilidad es emejor» que ota Tall ad pedo dete den Sect ase eee irene sabia de meas sca a Hn ceca ao Sees ee lniseaiaes sua oc rs Dia areas aoa ee See ee nee aie kietecet dca snake to = oa lomsscoeae peer epemenpye See oe tae oe Ripeciereeereeneene ot a a eens aera cee era cacao a oa Tita oe a eteaeeaee itprahew hk cocay ie os es sca Sin aoe ous eas re eee ae Tas mais Enomdagin ap cao oe ae eee ae beremreprnmy een noe aoe aces Pera ees a tree Genie tnee tae cade coin ease am pep ppiiaeeipemeraracet See Sr ee Soon Se iat ines oan See id cinioo cn confuse ita bs nen, ou tl go fiers ht mace oie oo eae ee due ne coe a eee Shela dumia ton et aoe 138 wexpsocen dns. Efectivamente, la muerte se presenta en la anicipacién dela misma que es justamente lo que significa la expresion ser de final utilizada lineas mis arriba. Pero esa anticipacién, como también vimos, slo tiene lugar desde un estar ya en el ‘mundo y en una situacién fictica determinada, que es justa- ‘mente el marco en el que irrumpe la conciencia. Ast pcs, est vinculacién entre muerte y concienca,formulada fenomenols- gicamente como sresokucién precutsora, encuentra su unidad en as posblidadesexstenciales que definen el horizonte tempo- ral. Pero es significa —de abel moroso examen de los fendéme- nos de la muerte y la conciencia— que desde un punto de vist fenomenolégico a la temporalidad del Dasein sdlo se accede desde esta unidad encontrada como sresolucién precutsora, due es el modo propio en el que aparece el Dien como un todo, completo en su set, en su finitud, La eresolucin precur- sora» define I fintud del Dascin y permite acceder Fenomeno- [igicamente asu sentido, ala temporalidad. Dello dicho se podria deducir que al Dasin le resulta tapado su sentido desde el momento que se comprende a st mismo como tun yo o una substancia que ocurre en el tiempo. Esta concep cién de mismo, qu lejos de revelar una consttuciénfilosdi- ca, procede de Is comprensién més vulgar segin a cual «las c0sas —includo el yo ocurren en el tiempos, e preisamen- te la que impide pensar el sentido. Si ademas dicho sentido se bbuscara desde esa comprensin vulgar se acabarlapensando el sentido como salgos que, asu vez, tambign ca ene tiempo, por ejemplo, antes, de modo que sentido vendri a sigificar ago ast ‘como un principio 0 causa de explcacién, un va priori. Del sentido se habria hecho entonces una cosa, por més que fuera sefialada y «mds importantes, que se dferenciaria de aquello de lo que es sentido simplemente segin una cuestién de rango. Pero cuando se tata del Dasein, que como fenémeno yaa re- vvelido que no es una cosa (porque ex existencia), todo lo que Lesieyememno 139 tenga que ver cons sentido no pode aparcer a su ver como tuna realidad que fuera tematizable. Stel Daten noe algo, sentido lo sett mucho menos. Cierament, sel Dain ese fenémeno buscado (es decir el sets el sentido dl ser se mani- fesardcomo cl horzonteo fondo sobre dl cual dicho fenémeno se hace comprensible, pero sin que l mismo pueda converse cn tema”. El sentido habe de reeonocere a pari del fendéme- ‘no dl Daten, ex deci a parte de ebm aparece el Dan. de. andlisis ha resultado que el Dascin aparece como stesolucin precursors. Sumariamente, eta frmla revel una conjun- ‘in ( diferencia) entre la posibilidad ms extrema que como definicin del «poder ser» rge el proyecto de la existencia (a tnuerte) ye haberse rece ya por unas posblidadesdtermi- nadas que definen una stuaién, una tl que slo supone una ‘modificacgn da facticidad yun etablecimientocnla misma. EL Dane culpable, vlamos,—siempre calpable—, por exe ti ero exis no es mis que oa tension aludida ete exiten- Gilda (que iene que vr con la aniipacién de la mucre) yl facicidad ya cada Y no ser sentido e misma tens que ia que el Dan se maifieste como existenciay no como tuna cosa? Peo el témino stensidns se vuelve impreiso sino se reconoce cxtructralmente como aqullo que hace comprens- bela tralia de acura. Recurdese que se busca el sentido de Jn cura y que a se manifest descriptivamente ene andisis como la arculacién de wes moments (anciparse a seta do ya /en medio de). Si se abla de la tensén como sentido, dst, como se acaba de decit no vende ser un concep ad hoe {ue sunifques a modo de caus explicativa dcha arvculacién, sino la peracid de hacer relevant el fondo que haga presente dichaariculacién. Dicho en otostérminos: el sentido no srt ‘otra ona quelo que se ha encontrado ya (acura), sino la mise sma cura visa a partir decimo se ha desentrahado y aparecido como fendmena completo (esolucién precursora). Aa guées lo que posta al er del Dascin entendido como resolucién 140° werpeccen precunorsracionae con su posbildadeSélo teniendo ea lcm que lca eer propo en el poder ser, pe tomprendere ds orginalentelcrenci 5i tanoeruna aes ss ponbldades, de modo que cl Ds existe propa: mene ea velo constant aca ea posi ero en iano tale, las poniades no son, ino que proce den (nen) del pret: i como resumen propo dels on bidder (que pocaden siempre de In anicacin), como cull que ls define x su conjunc sumarament, se ha omprendido la mers exar miko hacia la muerte slo se hace poabeen a media gue cl Dan ex un er vender c de exe spor vents de done proce a posibilidad de que el Deri popimen sma, Dee mode, so serevlacoma conicin de propa porbidadn yde for. ta sefalada de quel ques define, dea mete, Peo noel Fir ded la compresi vulgar del empo sei a cual se enviend un ahora que davis noes pero que Hegre c= tal Asfconiderado, el uo esum omental como Se gh aay eid oa se ne tel acnal logue define dae de momenta y lo que permite dlasifcar ene momento actiales que ya ferom, que sn © aque venrin. Por dsingir ee sent xen de fo, deat habria que decir que dealguna mane nunca ser ac, Sino sempre fro. Pogue futuro ena ee permanente ex far del Davin hacia pode se bac ur posta des que slo se cumplirin como posbildad exema en la ruc, Deca maners ex fio sentido dl Da pore lDavinse compre viniendo hacia ism, Pero el fat fo no deja de ser ete permanente regres del sin hacia ‘smo, hacia mismo st pnd se), xe eres hace pl porque l Darina csr eden en media en (uel Dain cs tarbien yy ala ver pasado, Hl Dane vei doses sido, pro slo puede set sido en a media en gue cx enidero El pasado proce dl fru. Yel presente, por di LaysenyeLrimro 141 ‘mo, iumpe desde ea tens, En realidad, si se elude la nor ‘malzada comprensién del empo como una suesn iimiada en a ques insriben lon acontecimientos, l presente procede ‘ela tensién entre pasado y fututo pero, sabre rodo, de est ie timo. En efecto, ctando digo evoya hacer un viajes se expresa tun futuro no menos que cuando digo eviajs. Este presente, dlescrito en sf mismo no dice nada de lo que estoy realmente haciendo, Si se quisiera describ como tl presente exta-tem- poralmente, el dnico resultado dara en selar slo que al fuien, por ejemplo, yo, et seneado en el siento de un coche ‘ode un avin, ose encuentra andando, ero de esa desripcion justo se habriaecapado el fenémeno en custién. Si se piensa {qe ejemplo no es el mas adecuado porque el sentido de vae jar leva implicio un certo sentido de faruro,piénsese en la fccin més elemental que se pueda, como por ejemplo ponerse "nor zapatos. «Yo me pong unos patos realmente significa “yo me habré puesto unos zapatos, por ejemplo, para sar ala Cale a comprar un peiédico, que traert buenas © malas not- ‘day, o para encontarme con alguien queido © dteado. EL presente «me pongo unos zapatos, dscrito slo como presente, } teniéndoloen cuenta slo como tl se reduce a una descip- Cin rival dela que, por cometa que seal desipein see ‘apa todo lo que lea implicit, Ast, lo que leva implicito el presente s decir aquelo por lo ual ocurre dicho presente, se fencventaausente yprocede del fururo. ‘Ala articlaci de futur, pasado y presente lama Heide- ger la emporaidad, Pero se hace preciso atender arias cues- tones. La primera, al orden: l futuro aparece dentro de la ari calacién con una peoridad, porque ademas el fururo nunca dlesaparece, En realidad, el significado dela muere estriba en ‘quedare sin facaro, de ai que mientras exist el Dasein sem re tenga futuro. Ea segundo lugar, pasado no tiene el signifi ‘ado vial de algo que ano est abl. Sa significado es ieral- mente, slo que ha sdos, pero de ninguna manera lo que ha 142 wepecone ser rs ee re penser ee ete ea ie mene eee era ec arene ran ener eect eee ese en See rreean re meer geist peop ees eer nee Ee ener re as eee eens ee arian eee | Seema aires eee snere ae ee tie eee ee estar Sateen eerie Repco ree an nee tne er eee ee ena iansinyetmiewro 143 temporidad, qu se enende como una de os sexsi til tempo, Estes de que encontaa enol pan dept dae eles encontrar al final y define a pau paseo cer elvami deleeren gene Yee endo, fica des teva decent como lo opucto +f banca, qe Save parmancnte concen ens mismo, deo de Peo Su opscn de nuevo se ace reo wetralo~ n0 cons Gye capes algun pars que sora a nueva fla us Guyas k subanc pore Din operaciones seman Feros como camino para entender quel sigafeado dese tania se dea de un Seto prev, saber de ie S Sci se sume qu ee signa de obtanca ue dexivo tn a formacén del concpo va flxco dl emp, se omprobart que est devaada amen ssiucon de na fou por ov, De ee modo, por medio de cucu Is imestigacn se vend ajo, porque objeto no eras tu age sine comprender seid de dicho alg. He amen, el concep valgarde empo we forma a puri del Spit de ance tengo sag gue dae ye pero que a la vez es permanente en relacién con dicho discurrir. {Tremor pues ince ceva leificmente «btn Gia soprent ss enende como aque scestn donde cada cosa cue, Pero en x aponimaionexiencil a tepore Idad Sey empo se desmarea de sence comprensign ss tana Ena oben no e esta eid al concep ula de tempo que por ene etambin la bate del cones cent core oa concep euler medic hae impracon Ble snlapobidad de la medina ven bo posi Iida dee ennfcacon, En realidad la ena ha partido de considera compe como gy que esi presente ea thable, de modo ue deat piers hacer i obj: medio prosupone pre par par la matcn general dl nvr {or inclo pata pode hablar de sanivero epi gene Y Cempo gence) En Sry tomo ereoede respeo 4 a: vensién y se mucstra el tiempo como temporalidad, que ¢s ‘como fenomenoldgicamente aparece. Pera para eo fue necesz- so desarrolla un andlsis del Dain, que es donde pudo descu- brine ese sentido preontolégico perseguido por la ontologia fundamental. ¥ es ese sentido preontolégico el que permite apartar del sentido del ser el significado de substancia. Pero andlisis del Dasein no ha legado a s final. El paso ‘que se ha dado ha redescubiert la estructura de la cura a otra Iz. Por ast decrl, al comienzo de la segunda seccién, ya en busca del sentido, el fendmeno dela cura se hizo més transpa- ‘ente evando se profundizé hasta alcanzat un significado com- pero de Daten, De dicho significado, resumido en esa descrip- tiva férmula de «resolucién precursors, se llega fijar por vez primera el sentido de la cura como temporalidad. Peto el andli- sis no puede dejar de lado que todavia se trata del sentido del serdel Darn y que éte es un ente que se puede comprender ‘(mismo de dos modos:impropia y propiamente. Para se con- secuentes, el siguiente paso tendsfa que consstr en comprobar el resultado descubiero a emporalidad, bajo cada uno de esos ddos modos, De hecho esto permitiia reconocer una suerte de ‘emporalidad simpropiae yuna temporalidad «propia». Natual- ‘mente que no se trata de dos cosas distntas, pero si del recono- encuentra su equivalente en la regunta «significa sets, que vale como a pregunta deaf lesa, incluso dela que inicia Heidegger. Como ya vimos sin embargo, en Ser y tiempo &teno habla de metaiic, sino de ‘ontologia (a saber, de contologa fundamentals), y no pregunta por el ser, ino pore sentido del sex. Pero resulta en realidad ‘an ditnt a cuesti de la ontologia fundamental dela cues- tin de la metasica tl como se arab de presenta, es deci, como diferencia ene lo dich y elder y no ene la cost y la idea) Ea efecto, la ontologia fundamental se constiuy6 en Ser 1 tiempo a paste de la euestiin del Dasin, y ene se exp, ‘nds ld de su analiica, como el ager mismo (el Da) dela di ferencia, a saber, entre lo ene, as cosas y aquello que noe ni pede sr ent, el ser. No se encuentra aqut implica también Ia dferenciaenrelo dicho (as oss, lente) yeldece! Dain significa ala postr, lugar cracterzableambiguamente como ‘orlugr también como cruce, peo en ningtin caso identifica ign, entre ent y ser. Dede este punto de visu, y slo desde Sst, puede dct Heidegger l final de su escrito Qué meut- flica?, que la metafsia eel Deen mismo, el acontcimiento fundamental del Dain’. Pero exo se entenderfa mal i ademsis se dedujeraque al Dasen le ocurtenotosacontecmienos, uno delos cine es a mafia, Mas bien, habria que imiarse 3 en- tender que le meta se acomecimientoy nada mis. Justa MLAMEAFISICA 165 mente, nada més. Ast estarfamos en posicién de entender por {qué la metafsica tampoco es algo que simplemente se pueda superar, porgue en cierto modo su superacin, su liquidacion, ‘constituria el expediente para liquidat el Dasin, sa, reduc la diferencia, que es justamente quello contra lo que se defen de, y por eso se clabor, la filosofla de Heidegger 3: Metafisica més all de la ontologia fundamental Para entender adecuadamente a relacién entre metafscay on- tologia fundamental —y aq se esd spuntando a una coinc- dencia, por més que a sea problemtica— no basta con decit ‘quel Dasin etna nocin metafsca (w ontoégica) ene sen- fido en el que hablamos de nociones (Conceptos) mateméticos © bioldgicos. En la exposicién de Heidegger, ya desde Ser tiempo, se introduce un término —Dascin— con el fin no de claborar un coneepeo leno de significado, sino de apuntar a ‘una stuacién original, anterior al significado. Poe lo tanto, no se produce nada, nin hecho ni un concepto, sino que mis bien se reconoce una stuacén en la que se ests aunque, como consecuencia de un determinado hibito que obliga a penstt todo segin el exquema rclacional sujeto-objeto, esta situacén ‘no aparezc ni se manifiste como tal y resulteolvidada Para entender lo que s ext dciendo aqut, aprovechando algin té- mino ya recién uilizado, de sujeto» sf se puede decir ques una nocién ontolégica 0 metafsic, resultado de una determinada ‘daboracién conceptual, mieneras que con Dasein —como vie ‘mos mus ariba— se apunta mis bien hermenéuticamente a un corigen, Pero también se entenderia mal, desde la perspectva de ‘ste significado de metafsica que se comicaza aemplearexplici- ‘tamente inmediatamente después de Ser tiempo, que con lo de corigen se volvieraa entender un sindnimo de eprincipiow, a par- tir del cual se derivaria una serie de consecuencia. Porque asi 166 we1sccen ‘considerado, principio» no dejra de st, su ver algo desi ‘ado; por ast dil, puesto depuds. Y est satido del depuds resulta crcial para caractrizar el mismo sentido del Das en Gieeo modo, todo viene despus todo, formulado en tzmi- fos kantancs, 4 perio, de modo que nada pueda sr inte preable come a prior (principio, fandamento, e..). Nada x {ep a nada mma por medio del cual dice que enada hay a excepciin deo ent, dels coi. Ceramente ea sd lo aque se tata cx deo ent, de as cess Ves ya en el medio de é- {as donde se puede exablecer una divisién —que no una dife- rencia— seg la cl hay algo anterior, « priori —sala idea fence a la cova 0 el sujeto frente al objeto—, que funciona como dmbito dela verdad feeme al despa posterior de las ‘cons. Es también en el medio de étasen el que se puede est blecer una diferencia entre lo Bsco-materaly lo meafisico © esprit, en definitiva, ene lo sensible y lo suprasensibl, peto de modo que en exe caso lo metaisico 0 supraensible no dara de ser una parcela de lo que hay, de To ene, pero no quello queer dfrencadetodo em. Macar ea diferencia lo que legiimariapropiamente hablar de metaisia, mis allt del so escolar yhasea osc de a tradcién. Peo metafico en este sentido mata, es dei, mis alld de todo ene, slo [puede sr lo que mo cs ni puede legar ase ene. Ya eso, como fe acaba de suger, slo le cabe el nombre de «nada. Se prec san, de todos modes, algunas aclaracones. La primera de els, {que con el témino snada-no s ed planteando de nuevo la ‘ij oporicin liga (incluso oncldgicamenteentendida tor davia en la Lica de Hegel entree ery la nad, ni mucho ‘menos lalgicita entre lo leno (que iene agin elemento) lo vacio (que no teneninguno), porque s se trata de oposicén, fra no ela que queda etablecida ente el ser y la nada, sino ote la nada y To ent; la segunda aaracin se deriva directa ‘mente de la primer: en realidad, lejos de oponerse a er, sada vendrla a funcionar como otro nombre para el témino ser muanerarisicn 167 sobre todo cuando ée se encuentra ya para dsplazarse de su ‘uso radicalmente contaminado por su interpretacion éntica, es decir, por la larga tradicién que ha entendido el ser como un. lente, por més que fuera un ente més verdadero (a idea) in- ‘luso ms valioso (Dios); la tercera aclaracién, de naturalera ‘mds complicada, nos obliga a teleer lo ya dicho a propésito de Sery tiempo y debe ser introducida por medio de una pregunta: ‘por qué Heidegger introduce la nada como cuestién en su es- ‘tito :Qué x mezaftica? de 1929, es deci en la estela de Sery tiempo? :Qué obliga ata convocatoria? En realidad, la preg ta puede reiterarse en estos téminos: :por qué la pregunta por la metafisica después de 1927, cuando impliciamente habria squedado resulta la cuestién de la metafsica por inapropiada 0 superada? (Se pretende solamente recuperar un sentido més “original dela metaisica? Lo que ocuste, mis ben, como quedé sefialado, es que se intenearecuperar un sentido de origen que sea tal, es decir, que aparezca como tl y no como una imposi- cin que, si cabe, muchas veces es hasta impostura. Yes a ese origen al que se sefila como Dasein, es decir, como Da-seim {que no ex algo inventado ni construido, sino, como dijimos ‘mds arriba, reconocido. Pero si cuestareconocer el Dasein por {que no se presenta como algo obvio es porque su evidencia no cla de un ente. Cirtamente, desde el comienzo de Serytiem= ‘po se habla del cardcter de ente que tiene el Daten, pero tam cose dice que sa un ente. Ese cardctr se deriva de la forma ‘de considera todo, cualquier cosa, sea cual sea, como ent, si iguiendo el eriterio de lo que aparece como extenso” o incluso Sélo como pensamiento, pero que tiene de todos modos tna Adeterminacin éntica (as, la rer cogitans cartesiana no dejria de ser también, en algin sentido, ente). Dicho en otros ttmi- ‘nos apuntaraque el Dain es un ent sigifiaal mismo tiempo hhaberlo econocido ya, por ejemplo, como el hombre, lo que significa que en realidad no se ha reconocido al Dasin sino {que se lo ha interpretado por medio de una idea preva (la de hombre) Como también se spans ms aba en realidad, tao cora pepe, Ser tone se desaralla con prope Sit de deota laden de quel qc primera via pede Sparecercomo ene Dain neni como hombre) al Yared dese dxmonie se pudeler como quel De- Irn. que pci un ete en raid acaba recoocindose Some ese Pe sein ya vin tn x algo ue sins pueda aparece, x deci modo en que aparece una cos. Sa Irunifotaen es de eter onto lo que aq Sigfcs ‘iia con dies poor a mete (Sfrenia devo ete qe también, in enw tos rail como diferencia ecu difrencia, Enendido de forma may smplfeada eo srs como deci, por una pare quel cuctin dela ditenia no se dl ser (ino liners) Jambi sldaramente, que el Dein cslacifeencia es de- Jie liga dela diferencia no mera a cere nt coronal, No, sabre oo, oreo sl se ented que fay una cftenca entre algo, gue cs nt, goo ques Tama ce pore con ese pe devia eerie aia mem onc de snc Dain, Ps bien, eo que I teas mds ara lam saga que como ambien dijo ha fais que cracezarlo is en como enorogam, porque = ‘ot ne el borat fd de compen co {uso pegs como sso, S en sound secon Sry nempe cio seni err como temporada —o Gu: fandamentlmente sue decir ference permanente Citron eis del emo, de modo que cca misma repre Sentacgndescsin, qu rests del comprensin dl em fo como una com (present) que sicde as (pado) a fc suederd oa Gua) — ye Dan leg arrears as fac s su seni, no como et, sino com el mismo se fiir come i fren, no cbs ya como auado de eo Ainingureencalnene ere ol Dain yu senti. O di leon mance scabe tal ditincin en un momento deri sao del ands pero nos concn, porlo menos ante te queda abe Y la mcf que eel acoecietofae damental del Dein ene ya qu ver drectmente con di ferenia queen Sry temp todavia nombrs omo tempore Uday cn Quer rfc como ano doe, “Tener que aber dad una ca par ga age debe propiamente aca deuce que dee day de aque Surge, en gas dl gan resultado postin que fnalmente sl dors elem ep ns ir dnt por eempl: el excl stop ona rads hail mee tala lo qu er lo mismo, una lamada ala tenn para que vc rere ae loin en histori dlr ‘ofa de etn, Kane Arnel, Dear Hegel Ene, porque mean no exe dcrnapreenada a mado de Et deniaquya a resco odor ss problem, prciamente haces dstbarnordedancte ena tees ow cia gue staan dee ifeenes perspec I ead (de a que fndamentalment ean ua reldad nasal yuna feae Tied Kintcic)saon ws nore dip en pl wba rg eis no el en nen «que mucho mis que un problema wiio que pura enone hos noi, beac tien sma line origi del roi cr deinen a dbname dts nc eens cain el tenia, puede «st modo parecer. «Metis cc nombre parce dani on ded acl wee aca del que Esl ean coms pro nt praca ons ps der en msc que aq sigs en su dient gu ia prt dl propio aparece! deaparecer dl jeg de pe- seni asec que auclocn que conseel emp, Con ‘irado dete cn perpecia el empo aqal tia la propia meas, ede cre de dos plo que munca po Akin ser denon La metaficacaecetieada 2 pride Kame rons es dee mii Yreeonocbe (por emo entre empo cg), sa Yincamente nia costa, pro clya manieacion es imposible y cy conocimiento rel impratcable, Feo por 180° wexoeccen x0 mismo, est unidad —lo desconocido— puede recibir el nombre de ser, porque representa el continuado fracaso en el aque ya se estd pero que no cabe siquiera reducir a concepto, a cconocimiento, zEs la metaflsica, entonces, un conocimiento? ‘Aqu{ es mds bien el tiempo, pero que resulta anterior ala dua- lidad, constitayendo la ralz comin, eso desconocido.Y esa me- tafsica no es ya conocimiento, sino acontecimiento. Pero por ‘10 mismo serd también reconocida en Heidegger por medio de otro nombre, cai identifiable con ella: «verdad ‘5. La metafcica y la verdad: acontecimientoe historia La caracterzacin de la metafisca como acontecimienco y no ‘como conacimiento presupone dos cosas: que la diferencia entre seryente/en el mismo ser—no es un producto del en- ‘tendimiento sino rasgo fundamental del propio se, y que la ‘euestin dela verdad tampoco se juega en el émbito cognosci- tivo o linghistico, sino que es ago previo, aquello que preisa- ‘mente caracteriza al acontecimiento en cuanto tal, Pero ambas cuestiones se encuentran relacionadas con la idea de que la me- taflsia eso la palabra que describe el gestae del propio Da- seins en definitiva, la palabra que nombra su constitucién. Y constitucién, como vimos, esa diferencia. ¥ esa diferencia, en- tendida también como raigo del ser y no del entendimiento, define la consttucién de la verdad. ero con esta incerpretacin se da la vuelta ala comprensién ‘metaflsica moderna de la verdad, para Ia eval verdad» define s6lo un ado, el de a idea o el pensamiento(subjetvidad), que secaracteriza, frente al dela cosa (objeto), por presentar siempre la misma determinacién, cl mismo arpecto. En efecto, para esta compres, la verdad esl sempre presente, la presencia misma, ‘que no es propia del ser de las coms, sujeto a nacer y perecer —a devenie—, sino alo que no cambia es decir al se, entendido en miamerariica 181 tun sentido metafico escolar Es esta concepcién la que srve de apoyo ala tess Linguistica de la verdad como adecuaciny con- formidad entre el enunciado y la cos. La verdad, en definitva, es el se, cuyo limite es el no-ser, que se identifica con las cosas ysu devenr. Esta concepcién hace del verdad algo rvialmente mmetafsico: en efecto, verdad es lo que se encuentra mde ald de las cosas, en la idea, en el sentido que lo interpreta el platonis- ‘mo (como lugar, cosmos, mundo o posicién ideal), 0 n el suje- toen el sentido que lo interpreta Ia modernidad, es deci, como subjetvidad logica y pensamiento. «Metafsica» y verdad ga ran aqui, en esta wivial concepcién —trvials no quiere decir algo carente de importancia, sino més bien algo no problem4- tico— el mismo significado, porque metafsica pasa a delimitar ¥ defini el lugar de la verdad. zPero tiene la verdad lugar? Para- ‘dgjicamente, para que la verdad tenga lugar, es decit, para que ‘cur, no puede ocupar un lugar ni por lo eanto set esa pos cid metafisica caracterizada por la permanente presencia, Ocurrt» presupone cierto movimiento y, por «50, también <éerta negatividad: solo puede ocurri (acontecer) lo que no es, pero de modo que ese no-ser sea relevantey no meramente ago accidental y pasajro. En efecto, nose trata del que todavia no espero llegar ser, en cuyo momento el no-ser se vuelve ire levante. Porque en esos cass se tata igualmente de la. evil aencién alas cosas que ocurren, cuyo aparecer lena y deshamba de tal modo que eclipsa esa trscendencia y movimiento que, por asf deciso, las deja sabrevenit, En esos casos, en definitiva, nil siquiera tenemos la verdad sino sdlo cosas verdaderas. Por otra parte, gacazo hay cosas no verdaderas? Toda cosa, desde el ‘momento en que es, es verdadera por el simple hecho de que aparece. En realidad, la dstinién entre verdad yfilsedad tiene {que ver mds con un juego lingUistico que con el ser propio de las cosas. Pero no porque la falsedad, o mejor, el fundamento de la flsedad, no sea relevante, sino porque no se atiende a su di- rmensin consttutiva. La verdad como juego lingistico-con- 142 wspecom cep en emo sefalad, clo dvvado. La verdad, san come jogo o lucha ete aparece no-apareet she aeacadererdlfandamene de lo verdadero ylo aso ore met sgn ena misma encrursdel scontciieno dear enna meica ‘Nerds no efi una pos sin einer morinien- to dllogar aparece cual son coniayetes anol que (eae deca como el velamieno y ocaamien. Po wea dercncubrimicno es inkeretes encima Heevencenbicno, om se sta ms arb, no sd Fein lo mas cane, gal qed waco es propia ety lo ques pce ver de lac tumbien propio iSin quo se pede er-—nunca se puede comemplar na SeSTe ows ado yendmenor igi, ene cna Hae e mime modo, del dence propio enc Tiesto, come alg que lo scompaa pemanenerent, vrapeaote, Pus ban siahoranombramsel dene Sane yen a palabra see ye encimien severe mt ratuclin por dein com pla nad, meet mis poxmos de entender que a diferencia inera Srattry nad, quien pace ctendene om ant d eee tics pede reconocer ambien como cl com (Stith El acomecimieno ola verdad ol et, per slo Wein djad as el evil sic que Wei er Tarsencisy psc. Y precamente porque co ha io dese vere nen posi de mere er mis ae wr delo queen Sry tony sean snide EL edt src wed dl se ague bio 0 pci de Jee ddd ocumepropiamete et interna derencin ene sn pr mio ese = Ieee a cos fas imerpcacin de a verdad debe ver ented inde come une mura ora sobre a verdad, como un dex re eda tole acra dela verdad. La que se pude KAMETAICA 183 lamar compres tokio fundamenea dea verdad, ue no emis qu su selzacn pre-ontcgca, sein indy cone demons de vein aan ps ered, qa ea ralad hin de la yrdad une om pot ps legis que fer En lon excrtordeen orn slow afi, sobre odo los dos opine laos repectivamente Dela Sep inant De crc edad llr ns aachante aqula beads souociaa en Sr temp como ‘pregunta por ol stile dl se ” Del sentido ase ba dicho algo maevo. Con ellos pede seconde de nuevo por qué tela depen via ete fe clan ca ii ca, Cane obra puede mercer ea clifcactn peo ea sls Adectada sae entender que ve labora jstimentea pati de Tamera Yor qudaros corer guest enendemos aque hny dos seid de metas y que Heeger ein © dlsnona dl endo cla pare rex u propio sao © cor semeane, No ay en shal inecion gna depo Serva los sigue de defender a determina tora so bree ser sabe la verdad, Hideger hace flail cal Sita pian gue no drs oi whee lo oto, sino gue aende alo qu ayy lo que say lo sconoce “icramene con el nombre con que Func hire ‘mente— bajo el sming ser (do que hye, slo que). Yes ‘eonocindo lo queay cdc ee props cua do puede ierpero como cece, Per eu oblige dearest Create reg heen eal ae pore jramente de Sey sempasedexaiainpoibiad de end, mia entender y hablar in prssporto. Tabi ‘ul obliga alr ua expesion qs acaba dent Gsm dactain pei: citrcameat, Vineland tbs sclaracionsse pur decir que ss aun deci presapes- toque es uramente dah, Pero co equi s dec que gun pope ieduitiec inerocile eel a pes 184 wsmeccen como sores en xpi Sry tempo dedes Indu, Sis ez que eomprendemos algo tenemos yan sified previo del sr quel bacnoe erate como tl (Porn previ) En edad, x sigfcado previo de ser surge yade un Roraone aparentement no seconnble o deiguradament tmeonocble ee horzome eel demarcad por Gre, 0 lo {fro lo mime, lnstuacion en aq, admis de hablar por Medio de minos acerca de cont de Gaya a coms nde ms lyse formula na prognta epics por os Props eins deemiadon, na pregunta que clina ex Tracer mula pensada por Patn gue die a: qué es se elsif ey Gue contnaen Artes con tna nveigacn aera de te igicden can ts de tno arcade eas cons nombradat por gulls tr tov determinadom sino act de lo eminot en curs). Pus bien, por medio de ox pregunta, dela que psteriormen- {rch doc, eambinel ago de las cos, de modo gue {ras psn ser tambinagullo Bajo local on compre ds rigmando(esinando) no una sin la forma dese des tons fat wma de ts sf que se pce reconoer como Koran, pr de manera gnc ea hi pee ne Alvida aunque sea pore evi procedimiento de suponer apes ao sen, eo es mann ip ipuiment cl empoescusamente como sori sin eparat eect tio cm caramet dcr ga een ool mann wh oni {on edad, prs nso cl aconecmicno: nto pro io acomecimicnr. Peo spropion agnosia sl we hte ppl sin on mp mle a gh ac ihe gue prams habla de io propio y sein lg pro- Fin por impla, dc ea ole oo lode mir ala diferencia Ae aque, exe qu To hagamos de deena manera ‘ther que oxo cA exo eB En definite a enendidoy ‘ereslopropio, Deducide quem cambio, que ss epoca le WiAMERHHCA 185 Precedieron otras y le seguirin otras implica situarse en la pers: Pectiva detivada de que el tiempo, entendido como historia, es eterno, una linea continua e indeinida. Ciertamente, tarea de |a flosofia de Heidegger Fue denunciar esa linea o continuo ili ‘mitado® que surge de un olvido fundamental, y2cas0 necesa- Fio: que wer se volvié relevante por medio de una pregunta y que esa relevancia se sostuvo propiamente como «lo que hay, «cuando lo que hay es ya siempre algo sobrepasado al nombratlo pensatl, es decir el fenémeno, que se caractetiza porque se ‘manifesta precisamente oculindose, De ser justos con la in- terpretacidn de Heidegger, se podria decie que época slo hay tuna, y ques lama shistoriae, esto es, la historia 0 wa metalic ‘av. En definitiva, no hay épocas, sino slo wna época. CCualquier intento por entender ciertas esucesiones+ como las que aparecen formuladas en algunas publicaciones, como vetemos més adelante, seg lat cuales hay una shistoria del ser» —que comienza con la determinacién del ser como pis y culmina como voluntad de pader—, como un proyecto deo losofia de la historian; en definiiva, entender la frm heide- igeriana shistoria dl se» como material o concepto para una Filosofia de la historia no s6lo constcuye un error en lo relative a laa filosofade..» (para Heidegger no habria ni ilosofla de ceo ni de lo otro y resulta tan derivada una filsofia de a his- toria como una filosofia de la naturaleza o una flosofla del ate), sino también en lo relativo ala propia féemula shistoria del ser. Porque esta expresién revela una peligrosa ambige- ‘dad, como ya se sefialé", que reside en entender que hay algo asi como un desplegue, un desarrollo, en el sentido més trivial ue denota el término shistorias, de algo asi como el set. Ast entendldo, el ser seria algo que se shistorian. ¥ la cuestién clave consist en que historia del ser» tiene que serentendido como ‘sens, como ser que cuando se hace relevante —comienzo de la filosofia— es destino (Gechick) y por eso mismo, shistorias (Gechiehte) en el sentido aludido mis ariba, como aconteci- 186 wspeccmn ‘miento. En cierto modo, la expresinshistoria del ser» resulta redundant, o bien supone un rodeo para entender el érmino ter como lg gin ig 9 a de es rao geno hay open. sino que nos precede como horizonte, como sent- td. Ser lo que fue pensado en Grecia, es deci el acese lve de alge qu ye conta ah asin de que 1th, hay sempre ya algo dado). Po eso arbult, cas siempre en ‘Dastr smplementinaton proyecto de Hedges jotencién de que en 4 se intent restablecer el vcjo proyecto dic able dds a concen de ge 7 no te oe oyecto, como si eso pudira sr algo abandonabe. En reli Earl proyern de Hedger ena ms conra et sable It qs bil rc, pra nf media gu fier por reconocer qué hay o se da bajo el término ser» se trabajasimultineamente por el desmontae de un sobreenendi- do, Ova incerpretacion equvocada qu se deriva de lo recién ‘icho consist en entender qu en a larga historia del ser—una dees scones ie eb lola metafile tuna poca, precedida por otra ya la que continua ota (en Aa sande cas,apovectandocetatermielogia a m= ‘Side Heidegger a gran spoca del er que vena asalvaros, definitivamente de los male de la meas) ‘Despads de lo que se ha dicho hasta aqut sobre a metafsca ‘yu ambigedad, se puede incentar entender ea jegaheideg- feviana en otro sentir cieamente, el téminoshistorin en So semvido ms habitual aude a certasucesn y recoreido, que ‘rel menos relevane paral ques es diciendo, Pero también tiene oar sentido qu justia su aaricin lado justamen- te dl de metals, Esl sentido de strinsitow. En realidad, de fete imo sentido se rescata,segin ya vimor, el derivado de Fisvoras cuando la historia dja de se rinsito como paso = tructaral eden ane, es dei, cuando deja de sr limite, para ‘converte en Hinca en la que el wdesy el ear sein simple- nents puntos indstingublese indistncos, es cuando surge Niamensisica 187 habia compresn de his comoline gue desde un pa sado, pasando por el presente, tend hacia un futur, Es can de, por a di, Lhieca we eels ue ppone on Sea ind emp gts re de ‘al 7 monde ene aldo sreapa ues nadie ha viso cal tempo infin, en a que una se Eat» gue sis aspen « oa ga ‘mute puede conver a empo info ents eos he Ils con qu fs labo de pene scene ona Gin? La ponble epacnde Heeger nao de cos aban akc de ennoemene pots hay ae eae ‘Leapoqne we mp Deans guinea iene Soa dale meerl infin quel fae ores pone Iscusinfndaenal ede mas bien ence fon isqeehreunirs pecjeamesstlececnpontagl ha formula un ntpree el coninue mien saa sted dds un cr enbegs, epee eae de ene prindpa, ena linen aye nce I edn mi de link de mre, porque del ntng oe Bimabiend Incr pane ga des cnomrass fur de alguna grandam formulas nl mated, way tare bre doo mca vee ‘iden wr tamer con lnk: Dobe tx concep dee sida semer ul qu oie iu al lis dl w wpe it nd ge transforma os pox Fenometlogiene ebied oder modonatpesemacondelinfetel a elo iodiconiy nb ciarase Lesage 1s dena on mis cone da pale pose coe noose do quo sos dees fue es prsamots dead Toque dno reteset io, ques culo aly fines pc as eae cima pedal de erm Ea aap ds ‘Mocs dl see cl uc por aes loca ts Bat 188 wmpecomn J laa en el props nial de Ser omy. Peso Se iN decried ome de entender scion de transit, 6, La metafcica y la ehistoria del ser» no de los abajo mis nobles de Heidegger —sepur- Shred imported ern pedoe™ gp eh mene merece (rca neni demon deco) el nombre Ber hpi Yom Ei daca eh tre los afios 1936 y 1938, seguramente en eres los a Sit des desu tae pro rp tenet in exis plana la coc de a storia en tminos tris. Telsto de un oxge, al qu se da el nombre de pri thet amienaor yun supesto final de ae oigen, al gue se Imo ao comieton Ed ear gue ge eeu. Si tvaimen hae Fabled nuevos comico sno = Be qic entender e-prnery orn o opls ie Aefntan a menionadashinorn del ser, dese punto Mid cami ci dn peer tio,sn embargo slo se pad deecar una gra qelo oc pe Beds om hyo gta me deg ra mediante un nombre para eleprier comic ota igws prac so comer, Por ico oe [abr oc comicnzo-no ex naa, porque no hay con Tena. Queda decaredo, en conscseni, qu noo fo titnzos refi alguna gua que pera cinco lo ed pensanicnto moderne habia lamado «topo queen Tesend lo de cotror remita a una historia 0 época venidera. Eomenide > ahora despus de xa aac, sf see puede Gerunds igre dead Chor qe hay yon a gu ed, lene, es paca (epics coins) econoc : nol gue sir quese vy abla de sto comien: MIAMEDISCA 189 cl trnsito de Grecia, caracerzabe en términos generales como |a posicién de la fnid y el limite ala Modernidad, carscert zable en términosigualmente generale como la posicién de la infinieu, la mentada sucesin ilimitada, Pero eso es todo lo que hay en rorno ala figura de ese trinsito, porque tanto le que aqul se ha llamado Grecia como Modeidad son igualmence «meta fsicar. Som precisamente lo que Heidegger llama la maf «as, ineludiblemente comprensble como shstrias, per, svn por mor demo planemicmo dea eicroe lo que sin mis ya se encuentra dado ydejado aris. Es certo que n-el planteamiento de los Bimigecontinuamente se habla de lua esuperacén de la metafsca, pero no tanto como tna ope. ‘acin que ls flésofos—comenzando por Heidewger_- pudie- ‘an leva cabo, cuanto como un movimiento interno a a cosa misma, ala propia metafisica. En términos del propio Heideg- {8% no siempre afortunads, del sprimer comienao» es propio 1a epregunta por el ser de lo enten; del soto comienzo» serfs propio la «pregunta porla verdad del ser. La sontoogla funda. ‘menab, esa formula empleada en Ser tiempo para nombrata lafilosofi, seria la encargada del ténsito dade el inal del epi ‘mer comicnzov al soto comicnzo»,y de ese modo ella misma la ontologis fundamental— se superara. En relacién con ‘sto ilkimo ya se ha dicho algo: la ontologia Fundamental ext ah y se propone con el fin de desaparecer justamente cuando hhaya esclaecido su propia constitucién y hasta su tuo, Pero ‘en clacin con lo propio de cada uno de los comienzos la iz de lo dicho asta aqut en este capitulo sobre la meafica ge puede decir en realidad que slo el primer comienzo sea la mee tafsca y que, en consecuencia, lo propio del segundo sea otra ‘co? En realidad, cambign seg lo que s ha visto hasta ag, «asi se posta decir lo contrario, pues sha introducide lacus. tin de la metafsca justamente como aquello alo que subyace, Y ¢ descubribleen ela la verdad del ser, porque por vendad ‘tambien se ha entendido algo orginal, pero en el serio orig 190 woo%ccen ee roc ee etcetera cin Bg eee reser eetaceionaciacte soo eee ee oe pees eee . Sree _ SSR eee Sepals ee ee eed oe Siclerec ete cpclenrahrnt a pore ieee er cree a fe eee aera eee ee eae _ SS eee Grameitiet pense teeta a ses “here ee pe Sees eae Se ee ere laren MiAMEDIscA 191 i 1a forma de dentvara mefica, emendida como ser deo ems yl que ex fram imple n eoea cia ep ina ew cna tia "eons propo finden como fina so at find no pu a simplemente eendenc cone a Samana sino mit decbamene como idler age peracin del mea ax, pase por un tone ad ead Iemodea mean, queselilocon que seat tna etito mdi «Qué megs de 1500 Fa cx fc dap dela cabana aon a fos deisvos, como lor extn sabe Nc ne abc dos hasta 1961, ol Cate bee bumanime® ned pa depend ue mera bree pp aes cat per ambien cea deeds Haida! pevase For ls mea, atadendo una inmoducciedecate re elise vce a hablar del Dain gual qucendl certo bce humanismo, gua queen ls Beni Acasa pa tarsobre qué tara ta no-obaqu era nerear ee ica snuncécomolaeguna obra misinporernda Ber, depts de Sey temps. Ino cones prope aod, uc anuncin tn con tats dedscous denen «el Din. Po ahora ent hoon dee se en ay comic, em mal inode no cn nee anunclar alg nto yverideo sno ul eecon el pop de desta go vis. Geramente co praupune eer mes de wasirmacin que bien emeni,no ante ame una com prot sno mis bien deci ralnctsce at onset cua, mi al dels inespreacién geese) gue ice alas eoasindiingublsc mercies ae fica ambien pens la com, ang de ce penamien bier comprenin y deteminasion combjoes H Book, eos Beni ng de sur ala ied he sie lin delicacies esse se Yose bie un nombre en a br ina de 1936-1938 un se 192, weoecoen ue para incerpreacién munca debe superar su cadcer Frovklonal, bajo pena de converte en un tino jado en foro alls pudirhacerdoctina, como qin lace de Dios cborando una eolog, 0 del jo, caborndo una opal una plop incio una hater decencias fumanas se nora es rip Sen ctasnc since cae nombre cscon el propio de eon ene earcerexocrurmente povsiona fin demo feichzarlo suponer que por medio dela efx Ssbrel mismo comicon na nueva fsa en Heidegger que Semis crcesaraoqueslamaen logue segundo eg geo Es verdad que muthos pais del stor Heidegger son oponables dela imporncs evoadoray del cardcte conc: dota eemino, com sil importante fora laplabra.Agulen tvs nas pare de qu a pasbra se ences a en io ‘odo para desechala como el com que no dja de ener que tercon que le interpreted de ota, no menos deci- Yar Pars empeat con aquclla que proce del lengua dela Dmologia, pero ue se pens de nnn, come everday. Ta ica mio yor a ene de Sery Hemp y que atc una evan propia, aunque Tiga 2 Send de werd: Licg adil por mot- str de slo por I pasa vlan, pro que seguramente Conesponde joss 0 furs po a conn que pede in traci pr el erin sl eninde com eu de una fcr 6 ena vena, e dec, ce huecoo ano que a brine Tie ve). Términos rods cll que se encuentran en laste del trimplimiento deo que Heidegger io pensar en 1927 come sel dele Un sentido come dij, gue por mor dela pro Pia flosofa que se pone en marcha con Sey Hempa pee xa Fremendcnio: como sindnimo deer —una er eso fade su vein puamente ontolgia y mealies aunque von cm ya pura 0 tenga que xine de oma manera for gempl, come ceyoe—con sy rego tambien como Miamensica 195 rigs Ess avertecias, dels que se poaprescind relmene se lyers con stcacién en lgat de covert ls nombres en protagonists del pensamiento nen Gta inten Gin negative de reaver acerca de una comprension de la flsofiaidenticada con nombres yconceptos Hades. Ene caso de Heideyge, listo dl que muchas vee nica not Sia que se ene procee del eco ds palabras des que sev Ii el peligro ex micho mayo sobre todo se tene on cuca que pare desu tara consi endesmontar el eislado valor Ae unos signifcados ou, st substan xpi, value tadcone fin de poder reconoersu sentido. Ene modo, 50 propa tara Hsia puede entender a eta a: ade des mmonur sursivamente sus propiostrminos lease Dac, or ejemplo, peo no pars denuncialo como eons, sine Para sella permanente provsionalidad y haa prectiedad Ae cualguier palabra la ora de rigs en trina verdadero La verdad, y exo dene que ver también con el zmino regs ni surge ni depende de un ino, peo no porque a vet sexua cos muy important einclso iaccesbl par sen grashumanas, sino pores epcio de juego coincide come propio del nombrat Y xo previo pude crcevats como ‘intaducibles, que pot ota pate cla mejor carci ane pain cin er Ene adc son sempre signficados, que coreaponden a cous determina ds, dhe en el marco de lacion quel dec queen mismo einraductble. Se pude vlumbrar en eta open ‘cid inoducda (osraddcbleradacbl) una rlacion dec siva para entender ambi acest dea verdad que elgo gue no puede apuecer encanto a pero ques acomece. ez acomtece se poe dci ene iar ajo la forma da atiene Gia al modo en que sha explcalo el ucg de ash, coma enter en el que secur a cna del muro ya cia de In aberara, del van Ec center eel que resulta nota bee dei no reducible nt un lado n'a ou, pore perma nece como limite no superable. De ahi su intraducbiidad, Det ‘mismo modo que no se puede decir lo que hay entre slo que se dice» y aquelo de lo que se dices, porque en esa tierra de nadie (inis bien, de nada) sdlo habita el decir, que es como decir nada, Sobre este horizonte puede vislumbrarse alo que ledeg ger teserva para la comprension del lenguaje, a diferencia de las lenguas, convertidas a esos sistemas o graméticas por medio de las cuales casi se ha suplido el abla. El lenguaje se vincula ala verdad, a la abereua, ala luz y aconeece, acontece como habla antes de que intervenga la lengua y su gramética. De cara a en- tender qué sentido tiene Eregnis en el momento en que co- imienga a representa un papel rlevante, resulta decisivo com- prender ese cardcter de intraduciblidad que también nos aprxina ligula de verdad, ds 2a vera como En los Beinige cur Philosophie, ese largo escrito no publica- do las reserva a las que se acaba de aludir son tan importantes ‘como el supuesto desarrollo del que trata la obr Porque para ‘emperar lo escrito no tata de algo ni pretende presentar algo objetivo, sino que ms bien trata de lo sa-temsticor mismo, de looque no es tema ni puede aparecer como tal. esto seo llamé yen Ser tiempo el sentido», porque justamente no aparece. Ciertamentc, se paria de que era cl sentido del ser, que 8 apa- tecié como tema de la filosofia a resultas de hacese algo rele- vance. El destino de la filosofia reside en ese conflicto interno entre atender a lo que no es tema, que nunca puede ser algo el ser y hacer tema de ello como consecuencia de esa.aten- én, convrtindolo en wel ser, ya tratable, por ejemplo, por la Ontologies. Como vimos, ya el titulo de sontologla funda- mentale pretende una desactivaci6n de la ontologia que surge ddeaquel conflico, y lohace por medio dl término Dasein. En certo modo, lo que mienta la palabra Ereignises el resultado de la transformacién de aquello que Heidegger pens6 bajo Dasin. Repirese en que dicha transformacin del Dain es resultado del propio planteamiento dela obra Sory tiempo y no de una rectifcacin echa despues, desde Ia altura de una nueva pose cién, :Y cul ex ca eansformacin? En certo sentido, ya fue Amunciada: del andlisis del Dein sree que ée, ms que e ene que pret se, se reels como el propo sees dct, como cl eruce ene que en general puede dare cl aparecerj, por exo ‘mismo, ls coms. Dicho en otros términos: que del ais del Daicin lo que realmente rests fue el descbrimiento berme- néatce de que més que un ents, Daten era exclusiva y propia- mente el Da, el gat. Beto no un lugar epi se eniende, por cjemplo, cl espacio, + dein, como marco previo en el qu se Sedan ycolocan las coss, sino como lugar que surge ana con Ia propia cosa A modo en que l bri una ventana no sen csuentra primero el espacio vac en el que legos en inser- biendo ariculadamente ls cosas que seven através —el ilo y a tierra os edificio el mar—. sino que dichas cosas surgen 2 brie la lide la ventana, asl puede ser plésticamente en- tendido exo que aqut se lama Da, Pero por eso se dijo lo de shermenéaticor o.que se pueda dee sobre el Dain no pro: cederé del descubrimiento de wna stuaciin objetiva ni de un tstado de dnimo subjetivo —una vivencia— porque i objetva nisubjetvament eencontaré nada, Ast Dano puede sr en- rendido tampoco como un lugar, por ejemplo el lugar de la ‘ventana —caso que se ha taldo aqut sélo como ejemplo del desarrollo de esa explicaciin— porque eles gars, sendo lo mis concreto, no se presentan como cosas. En realidad, lo que ppodamos decir que es una cosa resulta macho m4s de una in- terpretacién que del hecho de dercar algo objetivo, La cues {dn hermentutca del Dain no deja deal ala impoibli- dad objetivadelascoss Por lfilosofa, como hermenéutca, ‘no puede sr una eiencia que lo nica que persigucra fra la reduccién de toda manifestacin, que es denatutlezafenome- nolgico-hermenéutia, a objeto delimitado y tatable. Més bien, al revs, debe tratar de redescubrir lo fenomenoligico- hhermenéutico en la acostumbrada forma de ver cada cosa como ‘objeto, Esto resulta esencial para entender el propésito de los Beierge precisamente como continuacién de Ser y tiempo. Ast se entiende también que la particula Da, del término Da-scin, constituye el mejor expediente para interpreta la proximidad de a luze (Lichnung), el sacontecimiento» (Ereignt) ye ssen- tidos (Sinn) como nuevos medios para interpretar la cuestién de la everdads (aléheia) mas all de su versin cosificada y ob- jetiva, A saber, para inerpretarla como cruce entre verdad y cor, memoria y olvido, enfin, luz y oscuridad. La esencia de la verdad, se podrd decease el claro, la luz, donde la propia verdad desaparecey se ocula, ustamente cuando se presenta lo due ellaabre. Toda extainterpretacin surge seguramente del Iejano comentario 2 aque fragmento B 123 de Heréclito, que deck: sla phisis ama ocultases. Heidegger, atadiva: como la verdad, Da fragmento de Hericlito puede infertse la cuestién que gla csatransicidn que se llama Beitrige que resulta también tuna decsin en rorno al sentido de la metafsca: puede decine else Tras todo lo que e ha formulado en ests linea, la pre- sgnta tiene que ser acogida con reservas dado que ya se a di Tucidado una interna relaci6n, completamente decisiva, entre el anuno del decir y el propio del ser. Pr otra pat, a qué sr nos referimos aqul? En realidad, Heidegger tendria que decir que ser no hay mas que uno y que ni squier, al modo de Arste- les, se dice de muchas maneras, aunque se encuente siempre fen uns stuacién de de-cisén, siempre en la hermenéutica si tuacién de aparccer como scr de lo ente o como verdad, en el sentido indicado. Pero se trata de lo mismo. «Decirse el ser», ss que decilo, pues no es algo, no e siquicra cuestin extra. linguistic, al modo en que en muchos lugares puede leerse que la cuestdn del ser en Heidegger es antepredicatva, sino exen- cialmente lingisia, siempre que lo de lingistico se entienda aqut como lo propio de lenguaje a diferencia de ls lenguas, {que ya aparecen siempre como lenguas modernas. Es deci, siempre que se entienda que el lenguaje es lo que tiene que ver con el decir y ocurre como habla y no como sistema de signos. “Decirse el ser implica que no hay diferencia entre un sujeto due dice y eté de un lado y un objeto que se encuentra del otro lado para ser dicho, Tiene que ver también, decisivamente, con que el hombre no es quello que se enfrentaal ser por medio de ‘un instrumento Hamado razén y una operacién lamada len- sguaje. Tiene que ver, sobre todo, con que eso que se llama, «hombre» (ran), lejos de er un ente, por privilegiado que sea, cs Dascin, de modo que —y as se dice el ser— de aparecer lo hhard como sentre» 0 como sabismos, entendiendo por eto n0 Ia esatoldgica imagen de una superficie a cuyo lado se encuen- ‘ra un sitio sn fondo, sino mis bien que en losin fondo se da cl propio ser a cosa. En efecto, ese centres exel Da al que me vengo refriendo, la abertura ue no se puede cerrar. Pero e505 también el tempo, si de su sentido se elimina el ital signifca- do de sucesién ininterrumpida para quedarse con el més limi- tado de acontecimiento en el que secruzan los éxtass, el Futu- to, el pasado y el presente, pero también luz y oscuridad. “Decirse el ser» supone también entender, fuera de ese signifi «ado cientfico, lo que significa chistorias, ex deci, «Geichich- ze», que no deja de ser el otro nombre para lamar al aconteci ‘miento cuando en su medio ocurte una oposicién fundamental centre los hombres y los dioss, la tierra y el cielo, Por exo wde- irs el ser» (légas es la historia, pero no la historia del ser como ‘quien entende el ecortdo de algo, recorrdo que se podea ob- var (dejar de conta). De a historia (del ser), as entendida, no se puede prescindit, o, paradéjicamente, se prescinde cuando simplemente se historia al modo habitual. La historia es el acontecimiento de ese sentres, de ese Da, también de ese eruce artculado en el que se revel la finitud, el lugar donde la aber- ‘ura —y por eso el cirre—es posible. Por eso donde es posible tambien la relacin entree ser del hombre y else. Ciertamen- 198 wupeccen te, ast, exe Da no es sélo el nombre para cada posible lugar, para cada edondes, cada «aqui y alls, sino también para cada ventoncess y cada «cuando», pero de modo que «aqu y calls, sentonces» y «cuandos no sean meras coordenadas for- males para sieuar algo, sino lo que surge del algo mismo tal televante para este sdecitse el sera distncién entre espacio y tiempo, incluso entre sustantivo —nombre— y verbo? ;O no focurre en el Da, segin el reigns, una coincidencia, que por cierto no tiene nada de mezcla, que se revela como la pura dife- rencia, es decir, no como la diferencia entre el sery el ente ino comola diferencia en cuanto tal, como el lugar dela diferencia? Es eo todavia merafsic? «Merafisicas es un nombre hermenéuticamente ambiguo, se dijo al principio. En todo caso, como tambin se efialé mis arriba, no designa objeto ni cema alguno, sino que més bien es [a forma de interpreta algo que se presenta. Si con el nombre slo se mienta aquello que se presenta y se interpreta como fe- -némeno, pero no como tema, «metaisica serfa un nombre vie lido pars sefialr exe ventres yes historia, Pero si emetafisica» vale también como el nombre que ha renunciado a su caricer |hermenéutico para expicar un tems, haciendo de ese tema algo traducible, entonces ciertamente rerula invlido, La metaisi- ‘a, ast, nes el acontecimiento, no es el Dasen (die Gvchiche, sino la tematizacién del ser y su correspondiente shistorian (Hisorie). Desde donde se hace esa tematizacién y para que ‘Aqui se entra ya en el dmbito en el que Dasein —nombre ori- ginal— fue nombrado como substancia,sujeto, ran, esprit con vistas al tempo ya su sucesién, pucs la substancia, a di- ferencia del Dasein, no es silo algo compacto, cerrado en sf ‘mismo y auténomo, sino por eso mismo algo que tiene que perdurar en el tiempo, ilimitadamence. La substanca, ciera- ‘mente, no muere, de ahi que se volviera comprensible como infinitud, aunque fuera infinieud procesual por medio de la uamenrisca 199 continuada transformacién de sf misma. Pero Daten no es substancia aunque ambas palabra aludan a una metafisica (di ferencia) que en el primer cao se quiere decir original, yen el segundo seguramente también, aunque su interpretacign mucs- tre otro resultado, Pues bien, esa ambigledad de la metafsica —y con esto se recoge algo ya introducido— es con la que guarda relacin la ambigtiedad del «primers y «otro» comienzo. Pero para volver Sefialar que no se trata en un caso de sa metfisica (Grecia y ka Modernidad) y en el otro de ela historia del srs, que sera algo as{como e nuevo pensamicnta critic, pr medio del cual cabe juzgar todo lo que ha pasado. «La historia del ser» —expresién despistante sino se atiende a lo dicho— no piensa una cosa nueva, sino a la metafsica, de modo que aparezca su propio ovigen, que es también aquello que a dispens6 de simplemente reconocer tn fendmeno para converte en teria sobre el set en doctrina. Sdlo en este sentido se puede entender que haya superacién de la metafsica, que en consecuencia habed que en tender mejor como retrocero hacia la misma. Por los afios en que fueron esritos los Beene, entre 1936 y 1938, eguramence cuando se pensaban a cera distancia los Jnternos resultados de Ser ysiempo, la interpretaién de la opo- sicidn entre sprimer comienzo»y «oto comienzo» resulta siva para entender a Heidegger y lo que se llama su filosofia. Porque una interpretacn meramente temporal de esa relacién (oposicién) en el trivial sentido cronolégico —hasta aqut ha hhabido una cosa ya partir de agut sobrevendré otra— hace de Heidegger, y de la obra en cuestién, en el mejor de los esos un imal fildsofo de la historia (en el peor, simplemente un charla- ‘n), También, slo de sotto se entiende como «nuevos y se lee 2 la luz de los tiempos politics de aquellos aos, adquiere un ‘atiz mis renebroso, Porque dela lectura de la obra, cuya dedi- cacién més expicta se dirige a pensar el interno vinculo entre lo queen Sery tiempo se llamé «Daseins y el téemino «Eregni», bij el trasfondo de la metafsica, no se sigue que haya ni rasto de esto, excepto desafortunadas expresiones que pudieran dar Tugara leccuras exrafias ala flosofla. Ciertamente de su lecura fiel puede resultar una ciertaimposibilidad de laflosfla mis ‘ma, pero como el carécter que mejor le conviene: la imposibili- dad de dectse asi misma —esewdecite el ser»— bajo el peli- sro de aparecer como obrefloxifice yen consccuencia, poner a In filosofia en un estado positive del que consttutivamente ca- rece, De la lectura de ls Being, a veces laberintica y toreura- da, se revea lo peligroso que puede resultar decir algo asi como shistoriae 0 aser,y se revel tambicn el decepeionante resulta- do de que no es posible un nuevo discursoflossfic, por mis {que 0 no excluya ensayos de pensamienco que seguramente, sinsaberl, ain guardan una deuda con la metafsica mas trivial, quella que se sliifca en su pensamicnto de a sucesi6n ili tad, del infnito, La filosofia —y eso marca los Beitnige— slo tiene un cometido: pensar lo que quiera darse en lamar ola fi- nituds. De ahi que en el momento en que Heidegger piensa, ‘también tenga que pensar la infinieud, porque entretanto aque I, la fniud, se ha vuelto ala infnitd, y eso hay que explicaro, Hay que explicar la historia de la metafisica, Por eo la cuestién «Grecia» va 2 ocupar un puesto relevance, més all del que ya tenia, en esta nueva tarea, de modo que ahora pueda distinguit- se entre una inerpretacin que hace de Grecia simplemente el obvio precedente de la modetnidad 0, por el contario, una car opuesta.En ambos caos se trata de una interpretacdn (en el primero, supuesta yno explicia en el segundo, una por ha- ‘xt de lo que yas dio cuenta Hldectin)y hace del historia de la metafisia algo liigioso en si mismo. Cuestin clave residiré en a continuidad o discontinuidad entre Grecia y la Moderni- dad. En el trayecto de Heidegger se reconstruye como historia dela metafisicaunacontinuidad quese interpreta exclusivamente desde delance, desde el final, desde lo que Heidegger entiende bajo el nombre «Nictsches. Con ello se describe completa- Niawesisica 201 mente el recorrido de lo que se ha llamado «primer comicnzo. Pero al lado de éste (no después, como sotro comienzo») apare- ‘ce —sin posblidad de al reconstruccién cronoldgica, no rele- ‘vante para el caso— Grecia, o, mejor, una interpretacién que ‘conduce directamente del Dascin, incluso como es entendido cen los Beiege, al final de Heidegger, del que resulta pensa- ‘miento decisivo la cuestén de a coa. Tal vez aqut, en esta con- vergencia entre lo que en un momento del trayecto se llamé Daseiny Ereigns,y el pensar (y poetizat la cosa, si seencuentre tun cierto final de Heidegger 7. Metaicey onoteologia Fl programa de una revisin dela metafisia, bajo la férmula de tuna edestruccidn de a historia de la ontologi,formaba parte del proyecto" «Ser y tiempos. Es muy posible que el mismo proyecto fuera ya resultado de esa revisién de la metafisica y ‘que la palabra adestruccins, lejos de signifiar la liquidacién de un eificio construdo,sigificara tomar distancia con vistas ‘una revision desde fuera. Pero ese wdesde fuera se hizo inme- diatamente problemitico, porque para Heidegger muy pronto se hizo evidente que dela metafisica no se sale como resultado de una decisién, en primer lugar, porque la metafscaes el lu- far que se habia y el horizonte desde el que se piensa todo, en que se inscribe todo, Preisamente, todo. La férmula wdes- ‘rucciéne esconde asf un cardterradicalmente revolucionario: se trata de ada la vueltav a donde se est, Sila actividad de la Filosofia, en tiempos, Fue caracteriada como «poner el mundo al revésy mientras tanto ese mundo —despus del idalismo y de sus replica epigonales: matrialismo, positivism, vitalis- ‘mo— pasé a ser el de a metafsica, lo que la filsofia tiene que poner ahora al revés es ala propia metafsica. La metafsica, se nos estédiciendo desde antes de Ser y siempo, no es slo es

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