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Capítulo 1

Sabían que somos unas personas que le gusta retar a la vida y ser más inteligente que ella
obvio que lo sabía porque es algo que corre en nuestra sangre, de ser arriesgada, peligrosa y
poderosa.

Nos gusta romper la reglas y avece cumplida, nos gusta revelando para que el mundo
reconozcas lo que somos y hay otras que no y a esa persona que tal vez este leyendo esto le
aconsejo que si es tímida no lo sea porque es mejor hacer locura en nuestra corta vida, si
quieres besa a alguien pues halo , si quieres grita en el medio de la calle halos, no te quede
trancada por el miedo de lo que los demás te juzgues porque al final ellos no tiene ni voz ni
voto en tu vida y la única que lo tienes eres tú.

Eso lo aprendí cuando le declare a mis padre que era lesbiana, obvio que ellos no lo tomando
bien e intentando varias vece en cámbiame y se cien por ciento hételo pero en un lado no
quería decepciónalo pero también tenía que aceptad lo que soy con esa idea ellos terminaron
tomar todo normal.

Me asomo en la ventana y se podía ver la luna con las estrellas a su alrededor adorando su
belleza, soy feliz como soy y hay mucha persona que me juzgas por como soy, algunos dicen
que soy una chica rara, otros que soy un mal ejemplo para sus hijos y mucha cosa más pero
como a mí me da igual ellos; empezaron a decir que soy una chica mal educada y no puedo
decir que no.

Mi familia tampoco aceptad mi forma de ser que hasta a mis padres le prohibieron que cuando
este con ello me comportara de esa manera y es que mi familia siempre ha sido reservada y
correcta yo soy la rarita, ustedes saben que siempre hay un bicho raro y una oveja negra en la
familia pues yo soy las dos según ello pero a mí no me molesta todo lo contrario a mí me
alagan cuando dicen eso.

Veo mi teléfono y tengo un mensaje de mi hermana cual dice que baje que dentro de media
hora llega mi tía con su esposo.

Mi tía es el orgullo de la familia y no entiendo el por qué si es como la otra oveja negra de la
familia, con tan solo veintiocho años ha tenido más de siete marido y no se cuanta aventura
pero lo de la aventura nadie saber exentó yo pero igual ellos dicen que lo que pasa que todavía
no ha conseguido su verdadero amor, que estupidez verdad.
Me acerco a mi armario, me pongo una sudadera y un short, bajo la escalera descasa y es algo
que me gusta desde que era una niña aunque mi madre siempre ha estado detrás de mí para
que me ponga unos zapatos. Llego hasta la mitad de las escaleras porque veo a mi hermana
Meredith parada con su carita roja.

– ¿Y se puede saber qué te pasa?

–Que ha llegado mi tía con su nuevo esposo –pongo los ojos en blanco.

–okey ¿pero qué pasa con eso?

–Que es todo un guapetón hasta se puede decir que parece un actor de telenovela hermanita.
–empezó a salta y a chilla.

–Deja tu estupidez por un momento y bajemos ya.

Le agarro la mano y empezamos a baja, entramos a la sala y veo a mi tía de espalda y a su


querido nuevo esposo. Mi hermana se sienta a lado de mis padres y ellos me miran.

–Santa virgen María dame paciencia, yo no te dije Makay que no estuviera descasa mi niña. –
me regaña mi madre.

Mi tía se voltea y se viene encima mío para dame un abrazo.

–Mi sobrina favorita como te he extrañado– se separa y empieza a detállame. – cómo has
crecido pequeña ya eres toda una mujer.

–Gracia tía y usted está... más vieja. –ella me fulmina con la mirada.

–Makay. –me regaña mi madre.

–Tranquila Essie que sola la pequeña may está bromeando.

Me alejo de ella, la verdad es que odio a mi tía con toda mi alma por mucha cosa que ha
pasado y una es que toda mi familia adora mi tía pero se olvida de mi madre.

Me siento en el otro lado a donde está el señor bigote el gatico de mi hermana. Una vez todo
sentado miro a mi nuevo tío, a pena que lo veo me quedo sorprendida porque no es el mismo
estilo que siempre tiene los esposo de mi tía.

Ellos son rubio este pelinegro, ellos tiene los ojos verde y este negro y ellos son blanquito este
es moreno. Creo que por fin mi tía encontró a su verdadero amor... creo.

–Mis niñas le he traído unos regalos de Grecia esta monísimo.

–Que nos trajiste titi. –dice mi hermana en forma infantil.

Siempre he dicho que mi hermana siempre ha sido retrasada menta.

Mi teléfono suena y veo que es un mensaje de Leanne. Que decía que en media hora ya estará
en mi casa. Levanto la mirada cuando escucho risa de todo y era que mi tía le dio a mi papá
una camisa más bella pero ello dice que es fea.

–Esto es para ti May.

Agarro la caja que me da, cuando la abro veo a mi tía la cual está sonriendo o mejor dicho
aguantando la risa mientras yo estoy furiosa.
–May que tedio titi. –me quedo callada.

–Makay hija tu hermana te está preguntando algo, respóndele. – vuelvo a quédame callada.

–Makay tu madre te dijo algo. –mi padre me regaña.

–Sobrinita que pasa, te gusto tanto el regalo que no puedes decir nada.

Iba a decir algo hasta que veo un mensaje de Leanne, me levanto con una sonrisa y le
respondo.

–Pues si tía puedo hablar tan solo estaba buscando la forma de decirte… educadamente las
gracias.

–Pues adelante mi niña dilo.

–Okey–me le acerco tanto a su cara que le paso la lengua por su boca. –Verte a la mierda
Lucia.

–¡Makay ¡

Salgo corriendo de la sala hasta la puerta, la abro y veo a Leanne, la agarro la mano y me la
llevo hasta su camioneta.

–no pregunte solo sube y vámonos.

Subimos y empiezo a busca el bolso que siempre dejo con ropa por si acaso pasa algo así
como ahora. Lo consigo y me empiezo a cambia de ropa, una vez termino de ponerme las bota
le doy un beso a Leanne en la boca.

Leanne es mi novia desde ya hace un año pero ante era mi mejor amiga, ella fue la primera en
enterase que era lesbiana y ella ya lo era pero sin dame de cuenta ella se estaba enamorando
de mi pero yo no de ella. Solo le tengo un gran aprecio, la quiero y la adoro por esa razón
cuando me dijo que estaba enamorada de mí y quería ser algo que una siempre amiga no le
pude decir que no.

Y es que no soy de tener pareja, odio las relaciones y no es que le tengo miedo sino que no
sirvo para eso. Pero por ella soy lo que quiera hasta forma una familia y es porque no le quiero
romper el corazón, siempre le he dicho que la causa de que se termine esta relación será
cuando ella me termine porque no soy lo suficientemente valiente para terminare.

La miro y esta guapa con ese vestido rosado de encaje, su cabello rubio suelto que le llega
hasta los codo y es que su familia le ha prohibido córtaselo y desde que tiene memoria nunca
se lo ha cortado, pero su cara estaba molesta. Me acerco para dale un beso pero me lo
esquiva.

–se puede saber que tiene y si es por lo que paso hace rato...

–No, no es eso Makay es por esto.

Me enséñala su teléfono el cual tenía una foto mía a donde salgo en el medio de las pierna de
una morena y me empiezo a reí y es que me acuerdo que la pase de maravilla en esa fiesta
pero lo mejor fue que no solo estuve en las pierna de esa morena sino de varia.

–De que te ríes, te parece gracioso lo que ves. Makay sé que desde comenzamos esta relación
me pediste que no te pusiera mucha fe en ti y lo intento de verdad pero no aguanto que la
gente se ría de mi cara y hable de mí y meno quiero que se entere mis padres de lo que me
está haciendo, por eso quiero que me prometa que esta va hace la primera y última vez que
me lo hacer o dejamos esto hasta aquí.

Se acuerda que le dije que no era lo suficientemente valiente para terminare pues ya ustedes
sabrá cuál será mi respuesta.

₰₰₰₰₰₰₰₰₰₰₰

Desde que llegamos a la fiesta ha sido todo un infierno para mí, pues no me imaginaba que
estuviera la mitad de mis ligues. Estoy como loca buscando a Leanne quien se ha desaparecido
de mi vista, ya me quiero ir pero si no le digo a ella voy a tener otro problema.

En camino a la cocina veo a una pelirroja que la conozco muy bien, ella me mira y empieza a
acercase hacia mí con una sonrisa coqueta pero yo me alejo muy rápido. Este lugar es un
peligro para mí ya que estoy del uno al diez de borracha estoy en el siete y es mejor irme ante
que alga una locura.

Veo a Paul mi mejor amigo quien está hablando con Grace mi mejor amiga y ellos están
hablando con Leanne. Me le acercó y le beso el cuello, ella voltea inmediato y me besa
mientras yo voy subiendo mi mano desde su muslo hasta su entrepierna.

– Te voy a extraña kay. – así es como me llama ella.

Esta es la fiesta de ultimo año ya a partir de hoy comenzamos la universidad, Leanne se ira a
Italia para visita a la familia esta vacaciones después regresara.

–Prométeme que no vas a ser ninguna locura Makay mientras no esté aquí, prométemelo.

–Te lo prometo. – le doy un beso y me empiezo a aleja.

Salgo de la casa pensando cómo voy hace este verano, Leanne se va pero tengo que seré fiel.
Sé que puedo cumplir esa promesa pero no si la poder aguantar tanto tiempo, ahora más que
mi tía está aquí; todo se volverá una guerra entre ella y yo. Con mi tía viví unos de mis peores
años de vida pero eso no fue lo peor si no que nadie quería cree lo que decía, prefirieron a su
niña perfecta que a la pequeña que se quería volver el orgullo de la familia ahora no quiero
sabe nada de ellos.

Mi mamá me ayudado en realiza mis metas es por ella que odio más a mi tía, por todo el daño
que le ha hecho pero mi madre me ha hecho prometerle que no iba hace nada encontrar de
ella, pero las gana no me falta quisiera verla caer, destruida y que no pueda salir de su propia
pesadillas.

Miro la carretera y no veo ningún carro, a mi derecha e izquierda pero no veo a nadie estoy
sola no se en donde me metí. Sigo caminando y a lo lejos veo una pandilla prefiero alejarme
pero creo que me vieron porque me está siguiendo. Empieza a llamarme y conozco a uno, es
Jean un es enamorado de Leanne y me odia y mucho.

Unos de los chico me agarra pero yo me suelto, otro me pega y yo le respondo, es así que se
empieza una pelea callejera pero se termina ante de empezar cuando Jean saca una navaja y
eso es mi límite de enfréntame, el cómo me quiere ver muerte pero una camioneta se para en
el medio de la pandilla de Jean y de mí.
Espero que sea Leanne o unos de los chicos pero no porque esa camioneta se ver muy cara
para ser uno de ellos así que espero que baja el quien esté ahí. Pero nunca me espere a ver a
mi nuevo tío salir de ahí, tiene una cara que acojona a uno pero no me mira a mí sino a la
pandilla de Jean, voltea y me mira.

–Sube ya a la camioneta.

Obedezco pero no ante de mira de como agarra a dos de la pandilla de Jean y le rompe la nariz
mientras que al otro le dobla el brazo, me mira a mí y sé que está molesto por no seguir sus
órdenes así que subo de una vez cuando lo algo él está subiendo. Nos alejamos pero yo miro
atrás donde está la pandilla de Jean los cuales están en piso inconsciente.

Miro al nuevo marido de mi tía y esta serio viendo la carretera, ¿Qué demonio él hace aquí?
¿Cómo me encontró? Y ¿Por qué esta tan molesto?

– ¿Por qué esta aquí, como me encontraste?

–Vi el regalo que te dio Lucia y tu madre me pido que te trajera. –su voz es más amagada que
su cara.

Ya va, ¿el vio el regalo que me dio mi tía?

–Pero eso no responde la pregunta de cómo me encontraste. –me pongo un mejor ángulo
para verlo mejor y vuelvo y repito que su cara me acojona demasiado.

–Meredith me dijo sobre una fiesta y que tal vez te iba encontrar ahí.

A la mierda con Meredith, no puede tener la boca callada en ningún momento. Me volteo para
mira la ventana y cierro los ojos buscando la manera de sobrelleva esto día que mi tía va a
estar aquí.

– ¿Por qué eso chico te estaba a punto de lastimarte? –su voz me sorprende.

–Porque uno de eso me odia por quitarle a la chica que le gustaba o mejor dicho que le gusta.
–sonrió recodando cunado Leanne lo rechazo.

El pobre está a punto que lloraba y suplicaba para que le diera una oportunidad pero lo peor
fue cuando se enteró que lo rechazo por mí, por una mujer, por una vagina y no por una polla.

Llegamos a la casa y soy la primera en baja, entro sin espera a nadie pero lo bueno es que la
casa tiene toda la luz apagada eso significa que están durmiendo todos, entro a mi habitación
quintándome toda la ropa solo me quedo con la íntima.

Pero cuando me voy a quita el sostén mi teléfono suena y descubro que es Leanne que está
súper molesta por irme sin avísala, me acuesto escribiéndole que me sentía mal y quería irme
pero no quería que ella se perdiera la fiesta por mí y con eso me creer.

Siempre he dicho que yo debía nacer hombre porque me queda mejor ese papel pero por algo
el destino lo decidió así. Bajo de la habitación hasta la cocina para toma un vaso de agua pero
nunca esperé ver lo que estoy viendo.
Lo juro por las vírgenes que le reza todos los días mi madre que quería irme pero ese sonido
que soltaba no ayudaba, que como se movía empeoraba todo, que verlo así solo así que bajara
la mano hasta mi parte pero me detengo sabiendo que está mal, que ellos está haciendo algo
que pudiera ser algo peor.

Y es que aquí en la cocina en la encimera estaba mi tía abierta y en el medio su nuevo marido
folladora de una forma sin poder explicar pero cuando estaba a punto de habla el me mira y
siento que todo se para, que ellos terminaran se irán y yo poder tomar mi vaso de agua como
es debido.

Pero el sigue sin decirle nada a mi tía y me sonríe, creo que ahora si me volví loca pero que
aumente el rimo y alga que mi tía grite pero le tapa la boca con beso que me sube la calentura
lo empeora todo.

Y saber que es lo malo es que no deja de mírame y es cuando me doy de cuenta que solo
traigo puesto es una braga roja de encaje y un sostén del mismo coloro siento que estoy en un
sueño pero que él se levante y agarre por el cuello a mi tía y aumente el rimo pero sin despega
la mirada de mi es la prueba suficiente de saber que no es un sueño.

Cuando creo que mi tía llega al orgasmo es cuando salgo corriendo a mi habitación, entro
cerrando la puerta y yo pegada bajando poco a poco hasta llega al piso. Respiro y voto el aire
intentando calma mi respiración que esta mas agitada que nunca.

Me acuesto en mi cama e intento no pensar en lo que vi pero cuando cierro los ojos es como si
no me hubiera ido todavía y creo que fue la primera ver que sueño con un hombre.
Capítulo 2

–Mamá enserio no quiero ir.

–Makay vas a ir porque no te voy a deja sola aquí. –ella hecha un panqueque en un plato.

–Es que no quiero ver a esa familia de hipócrita.

– ¡Makay! –se voltea y me regaña con la mirada.

–Lo siento mamá pero no quiero que ande diciendo que soy imperfecta y ella todo lo que
significa la perfección más que sabiendo que es pura mentira.

–Si es verdad Makay pero es la boda de tu tía y ante de un falso rumo de porque no viniste
quiero que valla con la frente en alto como una de la chica que a admitieron en la mejor
universidad de esta ciudad.

–Para que si aun así no seré suficiente para ellos. –digo mientras robo un panqueque.

–Makay solo serán dos meses que ellas van a estar aquí, Marc no ha querido paga un hotel ya
que dice que después de casase se irán a vivir donde está su empresa principal y tu tía le
parecer una buena idea.

–Obvio que ella le va a parecer buena idea con tan solo complacer a su nuevo marido…
¿Mama?

–Sí.

–Tú crees que Lucia en serio encontró a su verdadero amor, ósea creer que en realidad si se
enamoró esta vez. –deja de hacer de lo que está haciendo para respóndeme la pregunta.

–Para ser sincera hija, ella ayer era otra persona con y sin él parecía que había cambiado y no
era como si estuviera actuando ya que cada vez que hablaba con ella sobre él sus ojos
agarraba un brillo que no se lo he visto con ninguno pero no estoy segura.

–Para mí sigue siendo la misma Lucia desde siempre. –lo digo recordado por el regalo de ayer.
–pero si te apoyo que se ver diferente ahora.
Nos quedamos callada, estoy con ella en la cocina cocinado el desayuno pues es ella quien lo
está haciendo yo solo miro y tal vez robándome algunos panqueques que no son míos. Ella
quiere que vaya a la boda de mi tía pero yo no quiero pero ella no quiere que nuestra familia
hable cosa que no es.

–Mamá y si me quedo con Grace.

–Makay ya…

–Buenos Días. – esa voz amagada y ronca hacer que mi cuerpo tiemble recodando lo de ayer.

–Buenos días Marc. –le contesta mi madre mientras termina de saca los últimos panqueque.

El busca un vaso de agua mientras me mira y yo intento esquivarla porque solo me recuerdo el
sueño que tuve. Mi madre sale porque Meredith la llama y él deja el vaso en el fregadero y
puedo ver su brazo lo cual esta rajuñados.

–No le has dicho nada a tu madre de lo que viste ayer verdad. –dice sin verme.

–Tranquilo que no me interesa lo que hacer Lucia pero si le recomiendo que para la próxima lo
alga en otra parte.

– ¿Cuál es el odio que se tiene las dos? –se voltea y me vuelvo a pregunta si en verdad mi tía se
enamoró, sus ojos negro se encuentra con los míos.

–No es tu incumbencia así que no meta las narices donde no te llamaron. –me volteo para
llévame el desayuno.

–Tranquila que mi nariz no se meterá en ningún asunto tuyo. –se aleja no ante de pégame con
su hombro y susurrándome algo. –porque tal vez quiera meterse en algo rojo.

No me digas que dijo lo que dijo.

Pues si te digo que lo dijo.

Que idiota. Salgo de la cocina intentando llega a mi habitación pero no quiero pasa por el
comedor sé que mi madre lo va a entender pero los otros no, y no quiero da explicaciones del
por qué no me voy a sentar a comer con ellos.

Entro a mi habitación y busco mi ordenador para seguir escribiendo el informe que me pidió
la universidad ya que entre en la facultad de periodismo, quiero escribir sobre lo que está
pasando en realidad en el mundo el cual nadie le da interés.

–May. –toca mi puerta pero no espera que yo le diga que pase sino que pasa así como si nada.

–Que paso Meredith. –le digo sin despega la vista del ordenador.

–Mi tía pidió una reunió familia. –ella se queda analizando mi habitación.

–Y que quieres que alga.


–Que baje Makay. –lo dice de forma irónico.

–Lo siento pero no me interesa lo que vaya a dice Lucia.

–Enserio no entiendo el odio que le tienes a la tía si ella no te ha hecho nada malo. –cierro el
ordenador.

–Ni lo entiende y nunca lo vas a entender así que si no es mucha molestia puede salir de mi
habitación. –ella llega hasta la puerta hecha una furia.

–Y limpia de una vez esta asquerosa habitación que parecer un basurero Makay. –le tiro una
caja pero ella sale ante.

Veo mi habitación y esta vez le doy la razón a Meredith ya que está hecho un desastre pero es
mi desastre. Me acuesto viendo el techo el cual tiene dibujado las constelaciones, empiezo a
nombra cada una hasta quédame dormida.

Tengo que corre, tengo que escápame, no puedo dejar que me atrape ese hombre. Por qué mi
tía trajo a ese horrible hombre y lo dejo solo conmigo ¿Por qué? Me escondo en la habitación
de mis padres pero escucho como poco a poco se acerca.

–May donde esta niña bonita.

No, no soy bonita y ni quiero serlo.

–Ya dejemos de juga la escondiste y empecemos a juaga un juega más divertido.

Me tapo la boca para que no escuche mis llantos pero creo que no lo tape bien ya que me
encuentra.

Me despierto agitada, veo a donde esto y recuerdo que me quede dormida. Me levanto pero
escucho que me están llamando pero no quiero baja, así que me siento en una esquina de mi
habitación a donde pega los rayo de la luna, ni se cuanta hora dormí solo ser que no quiero
moverme.

A brazo mis piernas mientras miro a la nada, no quiero llora pero siento que en cualquier
momento las lágrimas van a salir. Mi teléfono suena pero no soy capaz de agarrado, siento que
alguien hable la puerta pero no quiero sabe quién es.

–Makay hija. –siento que se acerca pero no la miro. –hija tuviste otro sueño de eso ¿verdad? –
algo con la cabeza un sí. –hay mi niña ven paraca. –ella me abraza y yo me aferro a ella como si
fuera la única cosa que me protegiera de cualquier mal.

Me acaricia la cabeza mientras yo lucho para no llora, cada vez que mi tía aparecer todo lo que
una vez intente olvidad regresa siempre. Cuando me siento mejor me levanto a busca mi
teléfono y veo quien me estaba llamando era Leanne.

–Hija te tengo una mala noticia. –volteo inmediato.

–ahora que. –veo a mi madre la cual sigue sentada en el piso.


–Nos vamos con tu tía a la ascienda de la familia para planea todo de la boda.

–No es mala noticia mamá es una buenísima noticia ya que ustedes se van y yo me quedo
verdad, porque yo solo tengo que ir es a la boda más no ayuda a organiza.

–No.

–mamá no me digas que tengo que ir.

–No.

–Entonces. –me cruzo lo brazo.

–que Meredith tiene que quedase por las clase de veranos y no puede ir con nosotros, así que
te quedas con ella y con…

–Y con…–siento que me va a decir no me va a gusta.

–Con... –ella mira a otro lado.

–Mamá deja el suspenso y habla de una vez.

–Y con Marc. –sabía que eso iba a venir, me alejo intentado toma aire.

–No quiero mamá. –y adiós fuerza que estaba contendiendo para no llora. –Mamá no creo que
sea capaz de quédame con un esposo de Lucia. –ella se para y me abraza.

–Lo se mi niña por esa razón esperaba que te vinieras conmigo. –me alejo de ella.

–Meno quiero ver a esas personas, había aceptado la boda porque solo iba a ser un solo día
pero no pudiera aguanta dos meses pero meno quiero esta con un marido de Lucia de pues de
todo lo que ha pasado.

–Pues solo puedes es pensarlo ya que solo tienes esas dos opciones. –ella me da un beso en la
frente y se va en mi habitación.

Me deja sola y yo solo quiero es salir corriendo, busco mi teléfono y llamo a Grace para
quédame en su casa por dos meses pero ella va a viaje por un mes a España. Llamo a Paul pero
él no está aquí se fue esta mañana hacia sus abuelos.

La única que me podía salva es Leanne pero ella está en Italia, dios no quiero esta con un
marido de Lucia pero aparecer es la mejor opción pero también es la peor pero si elijo irme
con mis padres puedo hacer una locura si mi familia empieza habla sobre mí y “que mejor no
debería venir para no humillado”.

No dormir en toda la noche tan solo pensando sobre cual opción podía elegí, cuando amanece
decido cual me es la mejor. Bajo de mi habitación y salgo de la casa para ver a mis padres
despidiéndose de Meredith y el nuevo prometido de Lucia, me acerco a mi madre la cual me
sonríe y me da un abrazo muy lago.
–Solo debes llámame y me tenas en poco tiempo mi niña, te lo prometo. –la abrazo más
fuerte.

–Tengo miedo mamá pero creo que es lo mejor para poder supera esto. –le digo mientras me
limpio las lágrimas.

–Lo se mi pequeña por esa razón te dejo porque creo en ti y ser que eres lo demasiado fuerte
para superada esto tu sola.

Me alejo de ella para ver cómo se monta en la camioneta, mi padre duda sin en despedirse en
mi pero a fina no lo hacer, mi tía se acerca a mí pero yo la esquivo haciendo que se tope con
mi hermana.

Ellos arranca y se empieza aleja poco a poco, Meredith grita emocionada que se quedara solo
sin que nadie le diga nada, el nuevo marido de mi tía se va sin decir nada y yo estoy aquí
esperando no sé qué.

Me siento en el césped no sé cuánto tiempo solo ser que empieza a llover y no sé qué hacer
ahora en adelante en esto dos meses. Todo el mundo que me conozca dirán que soy una chica
fuerte, valiente y sin temeré a nada pero cuando se trata de mi tía y lo que vivir con ella hacer
que todo eso desaparezca.

–Piensa quedarte hay todo el día. –reconozco la voz y siento escalofrío.

No digo nada solo miro a la nada.

–Tú hermana está preocupada por ti así que levántate y calmara.

No algo nada solo me pierdo en mi mente.

–No vas a decir nada, parecer una niña pequeña compórtate como una de tu edad.

Que fácil suena eso ya que la única que poner fe en mí y hacer que me comporte como es
debido se acaba de ir, como ver que no le algo caso se va.

Vamos Makay levantarte y empieza a afronta tus miedo.

No sé cómo empezar.

Fácilmente.

¿Cómo?

Entrando a la casa y ver que esta vez tu tiene el control de todo, ya no eres una niña de seis ya
eres todo una mujer de diecinueve.

Siento algo caliente en mis hombros y veo que es una cobija, levanto la mirada
encontrándome eso ojos negros que ahora me da pánico. Se sienta alado mío si decir nada
solo mirado a la nada, lo bueno es que dejo de llover.

–Que fue lo que paso entre tú y tu tía para que este ahora así. –dice sin mírame.
–Ya te había dicho que no metiera las narices a donde no te llama. –mirando también a la
nada.

–Lo sé pero es raro que Meredith no sepa tampoco nada entre ustedes.

–Porque no me va a creer, porque para todo soy una mentirosa.

–Pero tu madre si te creer.

–Porque ella conoces a su rebaño y saber cuándo miento y cuando no.

–Y porque no me cuenta a mí para ver si te creo o no. –lo miro y él también me mira.

–Porque ella es tu futura mujer y le vas a creer más a ella que a una niña así que no me voy a
arriesgas a queda como una mentirosa…otra vez.

– ¿Puedo hacerte una pregunta? –vuelvo a mira a la nada.

–Ya las está haciendo idiota.

– ¿Porque ere lesbiana? –listo se acabó la hora de sentirse perdida, me levanto y lo miro.

–Porque aunque no lo crees aborrezco, le tengo miedo y odio a los hombres así que prefiero
esta con mujer que lo asqueroso de tu especie.

Me alejo de él, llego hasta la casa entro y veo a mi hermana hablando por teléfono no se con
quién. Entro a mi habitación y lo organizo para despeja la mente, es la única manera que lo
tenga organizado.

Una vez que está listo descubro que tenía una alfombra morada y peluda la cual me la pasó la
mitad de la tarde acostada chateando con Leanne la cual me informa que su familia la está
intentado comencé en estudia haya en Italia diseño.

Leanne es la chica más hermosa y espectacular que te gustaría conocer, desde niña toda la
persona que la conocí se enamoraban de ella por lo bonita y educada que era, todo le
encantaba su cabello rubio, sus ojos celeste, su boquita de corazón y sus cachete redondo y
rosadito.

A crecer su cuerpo fue formándose de una manera espectacular, su madre la metió en


modelaje ella se enamoró de ese mundo pero ella no estando en la pasarela sino que es ella
quien asía que la ropa que las modelos utilizaba y quería que todo se enamorada de su
diseños. Cuando cumplió los diecisiete le pidió a los organizadores de cada evento que la ropa
que ella iba utiliza iba se la que ella diseñaba, al principio a ellos no le parecieron lo correcto
pero quien le iba a decir no a ella.

Ella es la otra persona que me anime a seguir adelante, ella saber todo lo que pasen en mi
infancia aunque no odia como tal a mi tía pero si la desteta. Veo la hora y eran la cinco, rayo
Makay no ha comido nada desde ayer.
Bajo encontrándome a mi hermana enrollándose con un chico de cabello castaño, pero no me
interesa ella puede hacer lo que quiera con su vida. Entro a la cocina buscando mi frituras y
pan con mi mermelada pero no lo consigo.

–Meredith me puedes decir que paso con mi fritura y mi mermelada. –ella se separa del chico
y lo reconozco inmediato.

–Lo de tu fritura nos la comimos Johann y yo disculpa no sabía que era la tuya, lo de tu
mermelada creo que la agarro Marc.

–Primero como no vas a saber que la fritura son mía ya que la tuyas te la comiste ya, segundo
porque no le dijiste a Marc que esa mermelada era mía y por último ¿qué hace Johann Persson
aquí?

–Pues no quise irme a España con mi familia y preferí quédame.

–Y lo de la mermelada yo le dije pero no me hizo caso que quería que hiciera.

–Que me llamara para dejarle la cosa clara de cómo son las cosa de esta casa, por dios
Meredith empieza a utiliza el cerebro aunque sea un día quieres.

Ella me ignora y vuelve a besa a Johann, veo que quedo una bosa de mi fritura se la quitó y me
la llevo a mi habitación y después me dirijo a la habitación que aseguró está quedándose el.
Toco la puerta pero nadie responde así que no me importa que esté haciendo pero entro.

Todo el lugar huele a algo intenso pero rico no sé qué es ya que esté habitación nunca huele
así. Lo busco con la mirada pero no lo encuentro así que creo que está en el baño, lo bueno es
que cuando empecé a aborrece a los hombre mi cuerpo ya no tiene esa timidez ni meno la
vergüenza de ver a un hombre desnudos.

–Mira imbécil que sea la última vez que…–y se me pedio la voz ya que no la encuentro en
ninguna da parte.

Ahí estaba el desnudo desde la cabeza hasta los pies sin nada puesto ni el puto paño pero lo
malo no es eso sino que no puedo despegar la mirada y es que dios mío qué es lo que estoy
viendo.

– ¿Ultima vez que? –se cruza los brazo.

Pero por las vírgenes que le rezan mi madre juraría que estoy más caliente desde que lo vi
follando a mi tía. Todo su cuerpo es… es… es ¿de verdad?

Raciona Makay recuerda que eres lesbiana y esto no te in-te-resa… ¿pero eso no es el tatuaje
que tienes tú en el trasero?

–Makay no vas habla. –miro para otro lado.

–Te puedes poner un jodido paño por favor. –él se me acerca.

–Para que, lo que yo sé es que te da asco los hombres entonces esto no te tiene que afectar. –
agarra mi mano y la pone en su pecho y la otra más abajo.
Dios mío.

Si dios mío pero esto no se le hacer una chica.

Pero si soy lesbiana.

Lesbiana o no, no -se –ha-cer.

Lo miro a los ojo dándole entender que no me afecta pero el mueve las dos mano mía para ver
un efecto en mí. La que estaba en su pecho la empieza a baja haciendo un recorrido, la otra la
mueve de adelante hasta atrás.

Se pega más a mí y siento su calentura corporal, ninguno despega la mirada ya que no le voy a
da el gusto que vea que me hacer algún efecto así que soy yo que sigo mi recorrido y el control
en mis mano.

El frunce el ceño pero ante de decir que pareciera molesto parecía más como si digiera en su
mirada que era una amenaza. Así que su mano también hacer un recorrido y es ahí cuando
siento pánico y terror, me alejo rústicamente con lagrima en los ojos.

– ¿Makay?

–Es…te

– ¿Estas bien? –el intenta acercase pero yo retrocedo rápido con miedo que me alga algo.

–Que sea la última vez que agarra algo que no es tuyo, es eso lo que vine a decirte así que. –
me doy la vuelta para salir. –Adiós.

Salgo rápido con los ojos a punto de llora, entro a mi habitación, intentado que los viejo
recuerdo no regrese pero es en mando.

Siento su mano por toda parte y su boca también quiero aléjame pero él es más fuerte que yo,
yo soy solo una niña y el un hombre con más fuerza. Quiero grita pero mi llanto no me deja.

Tiro todo lo que está en mi cuarto haciendo que vuelva a ser un desastre, me tiro en mi cama
llorando. Que estúpida soy a pensar que podía escapa de lo que tanto el intentado olvida, esta
es la peor idea creo que me era mejor irme con mi madre.

¡Mi madre!, le prometí que iba hacer fuerte, debo serlo por ella y por Leanne. Busco una
sudadera y me pongo mis zapatos deportivos, salgo de mi habitación encontrándome con
Meredith la cual me pregunta a donde voy pero la ignoro.

Salgo de la casa y empiezo a trota, me pongo mi audífonos escuchando Juice Wrld – legends. Es
la mejor manera de olvidad lo de mi infancia, corre significa para mi es que estoy dejando atrás
lo que acabo de recordad.

No se cuanta hora pasa pero siento que mis pierna ya no da más, me siento en el césped o
mejor dicho me acosté en el césped. Veo la estrella y empiezo a nombra cada constelaciones
¿por qué lo algo? pues ni yo ser porque lo algo solo es que me tranquiliza demasiado.
–Mira, mira que me encontrado. –reconozco la voz pero no me muevo.

–Que sorpresa encontraste Lilly.

–La que está sorprendida soy yo y a la vez alegre.

– ¿Por?

–Porque no te veo con la pegajosa de Leanne si no sola y alegre porque puedo esta un ratico
contigo a sola.

A dios si se entera Leanne.

Me levanto para verla bien y es que Lilly siempre fue una de las chicas más sexy que el
conocido. Con su cabello pelirrojo natura tan lago pero no tanto como Leanne, con esos ojos
felinos verdes que te volviera loca o mejor cuando se pone intenso cuando está en acción.
Tiene unas curvas de infecto y solo dios sabe que se puede hacer con ese culo que tiene, más
esos senos grande y perfecto.

–Pero aunque no esté Leanne aquí sabe que soy solo de ella.

–Lo sé. –se agacha y empieza acercase lentamente. –pero no va a saber nada ya que tú vas a
tener tu boquita cerrada y yo la mía también. –hace un puchero que solo hacer que me dé
gana de morder ese labio tan canoso.

– ¡Makay!

Listo estoy muerta.

Prometo que pensé que era Leanne pero cuando veo quien es como si dios me ayudarle a no
comente nada que después me arrepintiera.

– ¿Quién es el Makay?

Mi salvador.

–El nuevo esposo de mi tía. –me levanto rápido ante que quiere hacer una pregunta o una
propuesta.

Me monto en la camioneta sin mira atrás y meno responde cada vez que me llama. Suspiro
sintiéndome orgullosa de mi misma por no hacer una estupidez o mejor dicho a no caer en la
tentación. Volteó para mirado y tiene la misma cara de siempre como si estuviera molesto con
la vida.

–Gracia.

–No es por nada, pero que quería esa chica.

–Fue una de mis…–busco una palabra para clasificada. –Pues fue una aventura de tres meses
pero ya nada que ver.

–Por qué…
–Porque tengo novia y le prometí no engañada.

Pero creo que como se enteró que Lilly que Leanne no está aquí se puede entera varia y así si
se vuelve un riesgo para mí.

El ya no dice nada más y yo tampoco, veo la ventana viendo que ya la mitad de la gente está
cerrada en su casa. Pero veo jóvenes con barriles de cerveza, otros con varia botella en las
manos y me pregunto si ya llego el fin del mundo para que todos los jóvenes de esta ciudad
estén llevando tanto alcohol a un solo lugar.

¿Me pregunto dónde será ese lugar?


Capítulo 3

¡Ja ¡adivine donde era el lugar, quien se lo iba a imagina y que estúpida era de verdad. Yo
Makay McGregor como no iba a suponer que iba hacer en mi casa por dios.

Apena Marc estaciono frente mi casa descubrimos que la fiesta era aquí, a parecer estaban
todo los jóvenes de esta ciudad. Iba a matar a Meredith ya qué aseguro fue su idea, en un lado
es normal que alga una fiesta hoy sábado pero que no avisada para nada es normal.

Baje de la camioneta hecha una furia, entra a la casa buscando a Meredith pero había tanta
persona que me fue difícil diferenciada hasta que la encontré en el patio metida en la piscina
con Johann.

– ¡¿Meredith Isabel McGregor Tavalas se puede saber qué es esto?! –ella volta el trago que se
había tomado.

–O rayo. –ella se voltea lentamente. – ¡Hermanita¡ a donde estaba te estaba buscando. –ella
se sale de la piscina y todo los hombre pone su atención en ella o mejor dicho en su cuerpo. –
cuando te fuiste corriendo te iba a decir que iba hacer una fiesta e invierte a todos.

–Si no me digas ya que apena llegue descubrí que estaban todos los jóvenes de la ciudad.

–Si ya lo sabe entonces porque te molesta.

–Eres una descarada Meredith. –suspiro ante de habla. –Meredith a quien le pregúntate que
podía hacer una fiesta.

–Pues a nadie.

– ¿Por qué?

–Pues mis padres no están así que a quien le voy a pregunta, Makay enserio tantán veces que
me dice que utilicé el celebro y tú ni lo utiliza.

Si no fuera mi hermana ya la había matado.

–Meredith aquí no estaba tu hermana Mayor. –algo zona más fuerte la última palabra.

– ¿Y?

Enserio estoy que la ahogo en la piscina o mejor algo que le cambie ese celebro inútil.

–Sabe has lo que quieras.

Salgo del patio y subo a mi habitación el cual está el señor bigote acostado en mi cama, cuando
ahí fiesta él siempre se mete aquí para esconderse de la multitud de adolescentes. Me acuesto
a su lado con mi ordenador para termina el informe pero con esa música no puedo hacer nada.

Así que me acuesto a nombra otra vez las constelaciones que tengo el mi techo, cuando voy a
menciona el cinturón de Hurón aparecer el nuevo marido de Lucia en mi habitación.
–Qué quieres.

–Saber por qué te habías ido con lágrimas en tus ojos. –enserio que este hombre es curiosa
hasta los hueso.

–De verdad que esa nariz tuya es muy inquieta. –me levanto de la cama para mirado.

–En realidad sí. –él se acerca y todo mi olfato se activa por el olor de su colonia.

–Saber por esta vez te voy a decir pero solo esta vez. –se sienta a lado mío.

–Soy todo oído. –enserio este hombre a veces me da escalofrió pero no creo que sea en la
parte mala.

–Cuando tenía siete un hombre abuso de mí y es algo que todavía no supero, por eso cuando
me tócate sentí miedo y recordé lo que había pasado hacer tiempo, es todo.

Lo pude decir sin hacer que sonara que me afectada pero en realidad si me afecto.

Vamos Makay que tú eres fuerte.

–Y eso tiene una parte que ver con Lucia verdad. –todo mi cuerpo se paraliza.

–Este…–miro mi mano.

–Makay quiero la verdad. –volteo ha mirado.

–Cuál es tu empeño en saber todo. –el no despega la mirada de mí.

–Porque desde que vi ese regalo sentí que Lucia estaba ocultándome algo.

El regalo.

– ¡Pues pregúntale a tu prometida y no a mi¡ –levanto un poquito la voz.

– ¡Sé que ella no me va a decir nada! –él también me levanta la voz.

– ¡Ay qué triste! –me levanto para salir de mi habitación.

– ¿Adónde vas?

–Afuera ya que no quiero seguir hablando contigo. –el me jara el brazo ante de salir.

–A no, me vas a decir ahora que fue lo que te hizo Lucia.

Pero yo forcejo haciendo que caigamos en el piso pero yo encima de él, pero el nota algo ya
que sus ojos negros agarra un brillo que no tengo explicación y me voltea haciendo que ahora
es el quien está encima mío.

No me gusta esta posición ya que solo me recuerda cosa mala. El agarra mis brazo y lo súber
haciendo presión para no moverlas, el sonríen y lo juro por los santo que le reza mi madre que
cuando me suelte le voy a partí esa boca para que no vuelva a sonreí.
–Ahora no tienes escapatoria.

–Suéltame y aléjate de mí.

–No, ahora quiero que me digas porque Lucia y tú se odia tanto.

Me quedo callada.

–Makay habla.

No hablo la boca para nada.

–Enserio te vas a queda callada. –le sonrió sin despega los labios. –okey.

Cuando creo que he ganado y espero que se levanta hacer todo lo contrario, el baja la cabeza
hasta mi cuello, pasa primero la nariz y después la lengua juro que nuca he sentido lo que sentí
en este momento.

– ¿Qué hacer? –algo todo lo posible para que mi voz no suene tan afectada.

–Haciendo que hables. –el levanta la cabeza para mírame.

–Y crees que eso va a funciona.

–Si porque ya lo está haciendo. –me muerdo el labio y el baja la mirada hasta ahí.

–No eso sí que no. –digo sabiendo que fue lo que le paso la mente.

–Pues habla Makay antes que lo alga. –él se empieza acerca lentamente.

–Enserio Marc eso si no. –el ignora lo que digo. –Marc por favor eso si no.

–Makay se te está acabando el tiempo. –me vuelvo pero que alga presión con su cuerpo no me
ayuda.

–Rayo ante de compórtate como el hombre que eres parecer más un adolecente.

–Lo sé pero creo que es la única forma que puedo hacerte habla. –el me mira con una sonrisa.

–Marc enserio no lo hagas ya que le prometí a Leanne que no la iba a engañar así que por
favor no lo algas para cumplir mi promesa.

–Pues si no habla esa promesa la vas a romper.

Rayo que algo le digo o dejo que me bese, cuál de las dos cosas es peor. Que le diga lo que me
hizo Lucia o que rompa la promesa que le hice a Leanne.

–Okey te voy a…–ante que termine la frase el me besa.

Lo peor es que yo respondo, saborea mi labio, mi lengua, joder sabe lo que está haciendo. El
me suelta una mano y la empieza a baja recorriendo mi cuerpo, yo me suelto de la otra y lo
agarro de la mandíbula para poder tener el control, el me agarra de la cintura haciendo que
me acerque más a él y con fuerza ya que habíamos comenzado lento pero ahora es más
rápido.

Mis manos se mueven por su nuca, acariciando la piel caliente de su cuello y enredándose en
los suaves mechones de su pelo, su boca se vuelve demandante, apasionada y posesiva,
aunque no lo quiera admitir se siente absolutamente delicioso. Sus labios se mueven
agresivamente contra los míos, su lengua invade mi boca de manera sutil enviando escalofríos
de placer por todo mi cuerpo y aunque quiera tener el control no puedo.

Makay raciona.

Me separado de el para toma aire y cuando veo sus ojos raciono, mierda que estoy haciendo.
Lo empujo y salgo corriendo al baño, me siento en piso con mi espalda en la puerta,
regañándome yo misma por lo que estaba haciendo.

Por dios Makay que estabas haciendo, recuerda que eres lesbiana y te gusta Leanne, odia con
todo el alma a los hombre y aparta ese es MARIDO DE LUCIA.

Lo sé, ni entiendo porque le seguir el curso.

Suspiro y me levanto metiéndome en la bañera, abro el grifo y duro como media hora mentira
intentado no pensar en lo que acabo de hacer. Salgo con el paño en la cabeza ya que estoy
acostumbrada en sécame en el baño y salir desnuda a mi habitación para vestirme, apostando
que él no esté ahí todavía y por primera vez no me equivoco.

Makay no te vas a queda aquí ¿verdad?

Obvio que no, voy a baja para pásala bien en esta fiesta que está en mi casa.

Y también para no darle tanta vuelta a lo que paso ¿verdad?

Para eso voy a bajar.

Enserio un día de esto voy acaba loca por habla conmigo misma, una vez lista bajo. Todo la
casa tiene la luz apaga, todo está bailando, otros besándose pero todo tiene algo en común y
es que están ebrio.

Entro a la cocina y agarro una botella de cerveza pero alguien me abraza por atrás, pido a dios
que sea mi hermana que este ebria y actué como siempre lo hace pero cuando me volteo me
equivocó otra vez.

– ¡May está aquí¡

Me encuentro a una Amber muy alegre y es que el alcohol la pone así. Amber es una blanquita
muy adoraba pero lo que tiene de adorable lo tiene de loca.

–Amber claro que voy a esta aquí en Mi casa. –algo énfasis en mí.

–Yo sé que esta es tu casa amorcín.


–Ya te dije Amber que yo ya no soy tu amorcín. –le quito los brazo que me tiene alrededor de
la cintura.

Salgo corriendo de la cocina pero siento otros brazos pero esto me agarra del brazo, volteó
rápido y me encuentro a Emilia. Esta me agarra y me hacer sentarme en el sillón pero ella se
sienta encima de mí en horcada abrazándome por el cuello.

–Emilia que sorpresa.

–May por que déjate de llamarme. –Dice en medio de mi cuello.

–Emilia recuerda que soy novia de Leanne.

–Okey entonces quedémonos así por unos minutos.

Dios porque me hacer esto, yo que intento es ser fiel a Leanne.

Pero cuándo besarte a Marc se te olvido.

Yo no lo bese, el me beso.

Pero igual, no mega ahora a pedir ayudad a dios.

–Emilia y si vamos un momento a mi habitación. –ella se separa con emoción en su cara.

– ¡Sii¡

–Pero ante voy a busca algo que te tengo guardado para ti. –la bajo de mí.

–Okey pero no te tarde.

–Tranquila que no lo voy hacer. –salgo corriendo hacia el patio.

Una vez que busco con la mirada que no está ninguna de mi ex, me quito la ropa para
meterme a la piscina. Entro y me siento relajada pero siento unas manos recorriendo mis
piernas.

Hay por dios, no puedo se enserio.

Quien sale de agua es más ni menos que Lilly pero no está solo sino que la acompaña Paula.
Por qué te gusta castígame de esta manera dios, yo que intento es ser fiel y tú me hacer esto,
trayéndome a toda las mujeres que he tenido algo.

Ni hablamos de lo que paso en habitación.

¡Ay cállate!

–Creo que el destino quiere que este hoy contigo May. –dijo Lilly mordiéndose el labio.

– ¿Tú crees?

–Obvio may ya que hoy la vamos a pasa de lo súper nosotras tres. –dice Paula.

Si no estuviera de novia con Leanne juro que si estuviera hoy con ellas dos y es quién no.
Paula es una morena exótica, con el cuerpo que muchas mujeres quisiera tener, sus ojos claros
hacer que te vuelva loca porque se vuelve oscuro cuando llega la perversión.
He estado con ella en varia ocasiones y lo que es ella en la cama es otro mundo, pero vuelvo y
repito debo ser fiel por eso no voy a ser ninguna locura.

–Que piensa may, tú y nosotras solamente. –me dice Lilly en un oído sexymente.

–En una habitación oscura. –en el otro oído me susurra Paula.

–haciendo cosa prohibidas. –Lilly va bajando la mano hasta llega a mi entrepierna.

–Y pecaminosa, así como te gusta. –Paula me muerde el ovulo de la oreja para después
chuparla.

– ¿Qué opina may?

¿Qué opino?

Dios que suena muy bien pero…

–Lo siento chicas pero esta vez no se va a poder. –digo mientras le alejo la mano de Lilly.

Salgo de piscina buscando mi ropa pero no la encuentro, mi mirada ver a una personita con mi
ropa en la mano y prefiero anda así por toda la noche que perdicero a esa loca de Sarah.

Camino por toda la casa en traje baño y con una botella en la mano, escapándome de cada
chicas que he tenido algo ya que aparecer que todo se pusieron del acuerdo para venir a
verme o acósame (Ejem de Sarah y Amber) ni me acuerdo porque me enrolle con esa dos locas
o mejor dicho sicópatas.

Llego hasta las escaleras y siento otro brazo aferrándose en mis cinturas. Juro por las vírgenes
que le reza mi madre que si es otra de las chicas que vino por mí, me pego con la botella que
tengo en la mano para queda inconsciente.

Creo que es mala idea.

¿Por qué?

Porque si es Amber o Sarah y te secuestra.

Tiene razón, mejor juro que dejo de enróllame con tanta persona.

Volteo pero no es nada ni menos que mi hermana con los cachetes rojos por el alcohol.

–Maky por fin te encuentro. –sonrió por eso estúpido apodo.

–Cuanto ha tomado Meredith. –me separo de ella.

–No me llames así. –hacer un puchero.

–Cómo quieres que te llames si ese es tu nombre. –me cruzo de brazo.

–Tú sabe cómo. –me regala una sonrisa y vuelve a abrázame.

–Okey. –suspiro. –Cuanto has tomado princesa Melodí. –sonrió por recordad ese ridículo
apodo.

–Pedir la cuenta, solo ser que tengo gana de vomita.

–entonces déjame llévate al baño para que vomite. –la garro de la cintura.
–No ante que le diga a Marc y Johann que ya TE ENCONTRE. –dice gritando lo ultimo

– ¿Por qué? –digo mientras la llevo al baño.

–Porque ellos me estaban ayudando a búscate, ya que te quería decir que lo siento por nunca
entenderte. –sonrió.

Aquí está mi hermana ebria.

Ella siempre cuando esta ebria se pone cariñosa y comprensible, para ser sincera prefiero a
esta Meredith que la que está siempre sobria.

Ella me abraza fuertemente como si le diera miedo de perderme, llegamos hasta el baño y
como si su cuerpo supiera que estábamos en el lugar que necesitaba, ella salir corriendo hasta
el inodoro vomitando todo y digo que todo.

Le recojo el cabello para que no sea un estorbo. Siento que la puerta la abre, volteo
encontrándome esos ojos negro que me da escalofrió, él se queda parado como si estuviera
perdido, atrás de él entra rápido Johann.

– ¿Te siente bien Meredith? –Johann le lava la boca.

–Claro que sí, porque no buscamos otra botella. –ella lo abraza.

–Johann porque no la sube y has que se acueste, no importa si te tiene que quedar durmiendo
con ella.

–Okey Makay.

El sale del bañó cargando a la revoltosa de mi hermana, ella se ríe pero dejo de escúchala
cuando por fin sale del baño. Yo también salgo rápido del baño para no quédame con el
prometido de Lucia.

Pero cuando salgo veo a Emilia con Clara y Sarah las tres junta con mi ropa.

Enserio están loca.

Cuando una de ella voltea me meto rápido al baño, pero me tropiezo con algo que hacer que
me caiga. Pero mi cuerpo no toca el piso sino un cuerpo, cierro los ojos y no lo quiero ni abrirlo
para nada.

–Makay hable los ojos.

Niego con la cabeza.

–Makay.

Dios porque me hace esto.

–Makay por favor hable los ojos. –lo algo.

Listo me voy a meter atea, ya que no me ayudas en nada.

– ¿está bien? –me muerdo el labio y niego con la cabeza. – ¿Que tiene?

–Creo que me doble el tobillo. –él se levanta rápido, me aparta y me revisa el tobillo.

–No es tan grave pero es mejor que te acueste para que no se vaya empeora.
–Si me parecer una buena idea, puedes…

–Tranquila que yo me ocupó de lo de haya fuera. –el sale del baño.

Ahora como vas a subir ya que te duele el tobillo Makay.

Ya me la ingenio.

¿Segura? Podíamos decirle a…

Ni loca.

Intento levántame pero caigo rápidamente al piso por el dolor. De un momento a otro dejo de
escucha música, tan rápido sacó a toda esa gente.

La puerta se abre y aparecer un Marc riéndose.

–De que te ríes.

–De que como puedes odia tanto a mi especie para no perdí de mi ayuda para subirte.

–Ya ves que no es mentira.

–ven para ayúdate. –el me carga.

–Mosca que tú quisiste no porque yo te lo perdí. –él se vuelve a reí.

Lo juro cuando tenga la oportunidad le voy a borra esa sonrisa de un golpe.

Esta segura que va hacer de un golpe y no de otra cosa.

Ay calla porque siempre me tiene que contradecir.

No se dime tú, ya que soy tú.

Llegamos a mi habitación y ante de sé cómo una persona civilizada y déjame en la cama, no el


me tira como si fuera basura.

– ¡Oye! Recuerda que me duele el tobillo. –lo miro a los ojos.

Pero él no me está mirando la cara si no mi cuerpo y es ahí cuando me doy cuenta de lo que
traigo encima.

–Este… Gracia por tráeme.

–No es por nada, toma esto como una muestra de que puedes confía en mí.

– Creo que tenas que intenta mas ya que no se te hará fácil.

–Ya lo sé. –se aleja hasta llega a mi puerta.

–Buena noche Marc.

–Buena noche Makay.

Primer día superado.

Más no esperado.
Es verdad este día ha sido extraño y diferente.

Pero lo bueno es que podemos con esto dos meses.

Eso espero.
Capítulo 4

–Makayyyyyyyyyyyyy.

Dios porque tiene que ser tan ruidosa.

–May levántate.

– ¿Para qué? –digo medio dormida.

–Porque ya es de día. –me vuelve para despertarme.

– ¿Y qué?

–No puedes esta todo el día en cama.

– ¿quién dijo que no?

–Lo digo yo.

– ¿Y quién eres tú?

–Meredith, tu hermana.

–Ah que bueno.

–Makay deja de juga conmigo y levántate, que mama está llamando. –me levanto rápido.

–Hubiera comenzado por ahí.

–Lo sé.

–pero…

–Pero nada, lo sabía solo quería ver cómo te desesperaba.

– ¡Meredith eso es un “pero” y yo no me iba a desespera!

Okey si me desespero.

Salgo de mi habitación hiendo directo a la sala donde está el teléfono de la casa ya que mi
mama prefiere llámanos por ahí.

Pero ante de entra miro mi alrededor y es que llevo ya una semana que estoy evitando al
prometido de Lucia; es que no entiendo porque cuando él está cerca me da escalofrió y no uno
normal sino uno que… ni se cómo explicarlo.

Veo que no hay nadie y me tiro al mueble y recojo el teléfono de la casa.

–Hello.

– ¿Mi niña como esta?

–Pues…

– ¿ha pasado algo?

–Mmm este…
– ¿Me tengo que regresa verdad?

–N...

– ¿Dios te ha hecho algo?

–ESSIE. –se queda callada. –Mama estoy bien, no ha pasado nada y no te tienes que regresar.

–¿Enserio Makay?.

–Si mama, estoy bien hasta creo que lo estoy sobrellevando muy bien.

Si sobrelleva es está evitando a Marc pues lo está sobrellenado muy bien.

Cállate que no ayuda.

–Te creo mi niña ya que siempre ha sido fuerte.

–Gracia, y como está yendo haya.

–Esto es un desastre mi niña, tu tía lucia a cambiando todo como quince veces y eso que solo
llevamos una semana no me imagino esto meses.

–Pues reza a tus vírgenes o santo que para la próxima vez te traigan una mejor hermana pero
por los momentos te toca aguántatela hasta que pase esto dos meses.

–Voy a seguir tu consejo y de una vez rezo por ustedes mis niñas y como te has llevando con
Marc.

Pues no mucho porque lo estoy evitando después de lo que paso en mi habitación.

Corrección después de que ustedes se fueron y lo que paso ese día completo.

Enserio no va a ver un día que me apoyes.

Creo que no.

–No cruzamos tanta palabra ya que siempre está cerrado en su habitación o está saliendo por
algo de su empresa.

–Ya veo, pero me alegro que has podido lleva esto.

– ¡Essie! –alguien grita atrás del teléfono.

–Mi niña te dejó ya que tu tía empezó a modifica la boda otra vez.

–okey, chao mama.

Y se corta la llamada, vuelvo a esta sola con mi mente y mi desesperación de no esta con el
prometido de Lucia.

Voy a la cocina para toma un vaso de agua, Meredith asoma la cabeza avisándome que ya se
va para el institutor. Cuando escucho la puerta cerrase es cuando raciono que:

Casa…

Sola…
Con...

Dos…

Persona...

¿ Y quien son esa dos persona?

Rayo.

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