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GEORG LUKACS EL JOVEN HEGEL y los problemas de la sociedad capitalista "Traduccién espafiola de MANUEL SACRISTAN SEGUNDA EDICION EDICIONES GRIJALBO, S. A. Barcetona-México, D. F. 1970 CAPITULO UI pNTACION Y DEFENSA DEL IDEALISMO op FUNDAM (Jena, 1601-1803) BEng n Ja que anuncia st intencién de En I © tras a Jena, He a carta a Schelling © anun ha rd iter ee ito. romantico, . 2 como centro de] movimien' tico, no estih = a ents oor mornento en, que Hegel escribia aqueli 78 td todo justficad 1 roméatico con el que Schelling tuvo estrechas rt ade tp izclviendo poco a poco. La revista de la escuelg pit: nes Sol Athendum de Schlegel, habia dejado de publicarse; Jas 14%” i fan ai fs tensas; la disolucién del mar ‘lings habfan sido cada vez més tensas; del mentee Sehalng seeicdm Selegel yCazoine, y el nuevo mateimonig mse objetiy, Sendoles un acento personal. A la llegada de Hegel, Jena habia ie de ser el centro del movimiento roméantico. Iojado filoséfica: Fichte. En 1798-99 estall6 sobre la cabeza de Fichte la dis llamada del ateismo, como consecuencia de la cual Fichte tuvo que dime iltima vez a los romanticos con Fichte y con Schelling contra un enemigg comin, La partida de Fichte de Jena, la imposibilidad de solucionar de contribuyé a acelerar Jas futuras Iuchas filoséficas, aunque sin duda al guna sus causas eran tan profundas que las amistosas relacioncs persona fegel expresa SU temor al “trafago literario” qq Tena B ‘2 carta, i" unidad del a Tse atin entre [os tedricos capitales de la escuela romantica, Friedrich Schlegel i ibuyeron adem dizar las tensions o(°, de “Schelling, contribuyeron ademas a agudizar las tensiones Pero, ademés, la cindad habia perdido otra importante personaidag de su edtedra de Jena y trasladarse a Berlin. Aquel choque unis por palabra en amistosa conversacidn las'diferencias que fueron. surgiends les no habrian podido eliminarlas, sino sélo diferir la crisis, 1, Ex paren pe HEGEL EN LA SEPARACION DE SCHELLING ¥ FIcHTE. deat tt de todo, Hegel legé a Jena en un momento dramitico del op rae ie cotta clasica alemana: el momento en que Schelling © a filosofia de Fichte, el momento de la consciente fundacion del idealism ob eti ‘5 objetiv 2 : cidad en esta ocasion, (eth que se presenté por vez primera a le publ folleto de Cart no pueden eg la traduecién y el comentario anénimos a considerarse presentacién piblica del fil ido Le fuerza de extraordinaria importancia P sido la fuerza decisiva en aquel momento. EI j 246 dido y expresad 7 compren y 0 claram Thre _ ge bo CORE gue fue Hegel el que qi MM ee pany 217 co $e verlo, habia rebasado ya lag yogeasitncia 7s de sin $1) dicho claramente en’ su ye iciones de pj ceelli nels “Lo no oe 1 “Vorerin, ichte 218, de orrito “Differenz des erage ite? 18 €© que, Fn ee ey acmeate pichteschen und Sop 4Recuerdg P*°Pi0 sf josophie tea, af ne inmediato de . hellingsehy n Previo] ie POCO, por eje 0S sist ste i resifones idealistas de Eschenmayer coor! respuesta come * tt made extamene ogi os Ey p00 einer roid, lism lens jo con oN . bice2 Escasay 0 procedi ome de 1799) habia Publicado al Propio Kacy 2° aiios atte) este je 967", contra 1a Doctrina de la ciencia fichteana i Conocida +, (7 . Ha: i ido pensar, y sin d st ‘oma de habia pod + y sin duda habj 2 aquel te Tas que interpretar consecuentemente hia Pensado, gue momenta ho Tas ee al recente Ta filosofia fait’ 8° habia ic Ee ee onset” de Kant cota af at dt. es ‘concepeiones V¥ as de los demas antianos. P, eta”, contra aS de Kant terminaba con aquella situacién Poco clara ero la declara. cifrege fuera del marco de este libro el exponce ay aferenciacion. Nos bastari con aludir " detalladamente dicha ma, En primer lugar, al brevem lente a cho de que el vie} os Momentos de jp mis 7 el viejo Ie radamente contra la separacién entre ¢f espitit y : i protests apa. aMprensiva que fuera en general su declaracidn, Kany PO" poco rfectaniente cuenta de que estaba en presencia de una filosofi Pimente muleva y N10 de wna interpretacién de la suya, Bete os comPe- ‘ oP a. Este motive wt ty importancia porque se repetira —muiatis mura © motivo tiene u ndis— ‘i y Se fa i en la ny ere Fee x Scheling, En cambio muy craderiin tei posicion de Hegel en la filosofia clisica alemana el que en su discusié postheling contraponga clara + iscusin ncillamente su filosofi ee met ol anicuads, o sea que on Hegel no se prac aan repetido motivo de la exposicién de un nuevo punto de vista como mea interpretacin de una filosofia anterior, a En segundo lugar, y para facilitar una mejor comprensin de las pos terioes diferenciaciones surgidas en cl ideatismo alemén, hay que fee tacar que Kant ha protestado en su declaracién contra la introduccién de problemas de contenido en la forma fichteana de la “filosofia tras. cendental”, en la Doctrina de la ciencia. En plena coherencia con sus concepeiones generales, aunque sin duda también en una contradiccién (para él siempre inconsciente) con las tendencias dialécticas de su propia “filosofia trascendental”, Kant sostiene que la légica pura tiene que abs- traer plenamente de todo contenido, Veremos que precisamente la intro- duccion de problemas de contenido en la légica seré un elemento muy esencial de la ldgica dialéctica hegeliana. Precisamente por esa introduc cién pudo superar Hegel conscientemente la anterior légica formal. Pero Hegel ha sido el primero en hacerlo de un modo consciente y programs: 1 MEGA, Engels, Schelling und die Ojfenbarung (Schelling y In Revclacén). En I, vol. 2, pag. 186, , ste Druckschriften, pag. 3. Por abreviar cftaremos = Hegel como “Diferencia”. empre este escrito de 248 FUNDAMENTACION ¥ DEFENSa ppy, PEALISMG op tico. En Kant, Fichte y Schelling —como también légica formal queda sin tocar y sin criticay jttnto al tico en nacimiento. De ahi nacen las AS divers, 6 mis agudamente cuanto mis crece Ja imPortancia qe! conten inconssentementeintoducido, eens te su aplicacién a terrenos nuevos mis numerosos, Schelling es completamente solidatio eo: Fichte a de Kant, Los dos consideran entonces que la Paracion, cs alge inevitable y stl para el ulterior desaee de ja es irrelevante observar que tanto Fichte como Schelli,,, nueva filosofia como algo que en modo alguno estg conely®, ©®ns; mis bien que todo se encuentra atin cn Marcha, y qi2°5 am filossica no ha terminado todavia. Una eon de Fignt® afio 1799 da cumplido testimonio de esto. Esta escrj Sch declaracién de Kant. Fichte habla de cémo 42t4, 5 nog Puen" entender el nuevo desarrollo de Ia filosofin “iy Afiade a con P% ine! interesante observacién que alude —“proféticamente™ p joven Hegel: “zQuién sabe dénde esth Ya trabajando [ys cabeza que intentaré rebasar los prineipios te I y mostrar las incorrecciones YS insotic Cielo la gracia de que, cuando ; Omg ce gurar categéricamente que se trata de estériles sutil jaeremos [alusién a frases de la declaracién a> Kan haya entonces uno de nosotros... que prueb lezas en’ 1 13 G. ela n brimientos 0, si no puede hacerlo, Icy acepte agra 08 dese nombre.”® Ya los proximos afios mosttaron eat Fichte no eng”. tealizar ese voto, 8; et Tas diferencias entre Fichte y Schelling emperaron Yi a as mente la cabeza durante esos afios. Al pr mana eve, mad Principio ello ocurtig personales y técnicas sobre diversos Proyectos comunes de = : za ahora entre los dos un largo y detallado epis tolario destinado 3 superar los malentendidos y restablecer Ia vieja aTinOD Ha cree b* depurado Ia filosofia heme” de'sus “destices materia @ creado un idealismo Puramente subjetivo, Pero el subjetivismo filoséfic le Fichte tiene un cardcter muy Peculiar. Por su misma consecuencis , . ig. 165. Fihes Bretuechiel (Eyisolaio de Fichte), Berlin, 1925, vol. 1h, pie! nle a UN AgNOsticism nica de Fichte. Antes a] comleto, 1 ile jon an el agnosticismo kantiano, J, ine Ri mie ace, desde luego, de aquel mog radi seiil 008, Lo beer afirmar la cognoscibilidad qe'etalmeniy gate no Fichte considera que ¢| cot steno 46 con la consciencia 0s sth ci om mn ap es ic ? “e 10 ue es plenamente Fpgnoscible para ect hombre grants Denar off ‘din Fic Se Im; A tamiorss filosolia. Segtin Fichte, el Yo ja Cteado 's que la suprema 1, jet je conocer el mundo entero, ; aa ae eld por el Yo no existe ni pue ie eat sof, fuer se ee ata ambigua y contradictoria Concepcign del nada, le C amiento de Fichte el lugar de Ia “consciencig Ue ocx, al per, kantiana, pero al que no debe Contraponenege™ Senetal” de {ilos0! mings mundo ajeno, independientemente € ne COMO ooutte on Kail qo de la cosa en si, Vichte prepara ¢] ar obheseible, ningin an propia filosofia no sea ma idealismo ‘oh, i surg gel iealismo subjetvo. Basa eon adeno gitepcion del Yo en una diveccion atin mie 34% oon ficadora, basta con convertir el “crear” que en Fich ne idealista siveaco (poscion del mundo) en un erear yingctFishte sprealiamo objetivo. Ello ccurre en el Sree FOR spn Mrelismas de Schelling y, mis tarde, en la Ra de Hepa tdemtalen Ta fksofia de Fichtereslza vn importante taba galing y para Hegel también desde otro punto ae yeeeHen® pan ip que hace a Ja deduccidn sistomitica do Ins eategnn ts, SOP Poe flenen en Kant 1m carieter tan idealsacnh eve cores! Fiche’ Boe ea Kant tin mis estaloridas empiriicamente que hig Pe roege la tabla de categoria de la Wigica tradicional atade gh duda, una serie de nuevas interpretaciones de sus Conexiones, pero sin plan- tear siquiera el problema de una deduccién de las unas a partir de las otras. El planteamiento tipico de la critica kantiana —“Hay juicios sinté. ticos a priori; ¢eémo son posibles?”— muestra hasta qué punto ha coneebido Kant las eategorias.y sus conexiones como algo dade (hare bién en esto, es visible Ta oscilacién de Kant entre el materials yu idealismo.) Para Fichte, en cambio, las categorias surgen de la aetiolat del Yo que pone el mundo: de la posicién y contraposiciin de Yo 9 No-Yo; asi surge ya en Fichte la triada dialéctica de tesis, antitesis y sintesis, Consecuentemente se refnerza en Fichte el “aspecto activo” de la filo- sofia clésica alemana de que habla Marx en su primera tesis sobre Feuer. bach, aunque sin duda en Fichte sobre la base de una transiciin al idealismo puro, ya sin veleidades materialistas como en Kant, Para Kant, § actividad moral del hombre es el tinico campo en el que éste rompe el undo fenoménico y participa del mndo realmente existente, ef mundo X 72 esencia, La estructura ‘de la ética kantiana tiene, en cambio, cot "el ments metodolégicas para la epistemologia de Fichte: Ia posiciin del tumndo por el Yo es en Fichte una “accién activa”. te visible “ necesidad del conflicto entre Kant y Fiche es ya claramente qacioN ¥ DEFENSA DEL IDEALISMO Ong ery 9 FUNDAMEN * rmeros FaSe0s aaadee Broseramente, Fichyg artiendo de es0S Pojpio que lo que esta haciendo eg lleva, M Dig, jertamente, al prir | Ia filosofia kantiana, mas Consecuentem n*ctg” fe al fin Jetra). Pero To que surge: meng". te hasta el final Ine Kant, mismo {erro poaia reconaeer como propia, filosoffa que, Fichte y Schelling tiene cierto parecido oon to Ta elie de. Schelling, os desde el principio. diven oy EI punto de eta de Fichte es el activismo revolucionarig qg'y, eq, Fiehte. La tiles onto del idealismo aleman. No es casual que 1_°%a n elem 1 defensa de Ia Revolt Di Tan. le Ung 1, We n entre asmutado on cert, ostén escritas en defensa ¢ rer gins FT Teelacion, Ademés, Fichto see Fe cesa ¥ del tivamente mucho tiempo fiel a esas concepeiones, fin dy durante ratory ogel contra 1a moral y le filosfia del” der! Poe terior polémice 4 amos més detalladamente de algunas qe cc @ Fichte podvemoy 0771900 publica Fichte Der geschlossene Hans © ; fio : . : fietado En el ai ora}, on el que, por ejemplo, Benjamtera ta cs fe a rnin Con [Bl eatade coon tardio de Ie politica econdmica de Robespicrre, grit ha vis i xprest, pes, de una forma alemana, ide” eae ie rig fe revliconeria en fuerza renovadora age re capaz de revoluefonarlo todo. Aparte del hombre —que,natrainet se identifica para Fichte con el hombre moral el fantasma kontiany Shoko nonmenon— no hy para Fiehte realidad alguna. El mun “@ naturaleza en concreto, no es mas que un pasivo campo de accijn ‘del se oala de Schelling erece, en cambio, de la crisis general de er, cimiento del conocimiento de Ja naturaleza que tiene lugar en la época, Schelling se sitda en las files de aquellos “entusiastas de la naturale de los que ha hablado Marx en una carta a Ruge,* aludiendo a Feuerbach, Schelling no realiza al principio una ruptura consciente con Fichte, igual que éste no lo ha hecho con Kant; también Schelling cree ~y seguramente con menos consciencia de las diferencias que Fichte en sy tiempo— que esta representando el verdadero “espiritu” de la Doctring de Ia ciencia, Por todo eso tardan ambos en desprenderse del fundamente kantiano; veremos mas tarde que Schelling no ha rebasado nunca en algunos puntos decisivos determinadas limitaciones del planteamiento kan- tiano, Pero esta comunidad de punto de partida en la filosofia kantiana se diversifica mucho de acuerdo con las respectivas tendencias de desarro- Ilo interno de ambos pensadores. Mientras que para Fichte la.Critica de la razén préetica es el modelo metodoligico de todo el sistema de la filosofia, en el caso de Schelling el motivo kantiano que aparece en pri- mer término es una reinterpretacién idealista-objetiva de la Critica del juicio, Cierto que el sentido en el que Fichte y Schelling “depuran” Kant de sus inconsecuencias es casi el mismo, pero, en cambio, el con tenido de la ulterior elaboracién se contrapone diametralmente en ambos casos, La coincidencia consiste en que ambos mantienen en lo posible la construccién filos6fica, el planteamiento de Kant, Pero lo que en Kant “in agnosticismo subjetivista se desarrolla en Schelling en el texren? “ Marx a Ruge, 13 de marzo de 1843, en MEGA, I, vol. 1, 2° parte, pas. 508 ) a rAP Ee ° ‘vo. El punto de parti HELLINg opjetive, Dartida metodgleas Fete ye iste sohellingiana se encuentra ey, on Ogico 5] OE eee oe Peed onde at en su Hi arte. Plicacion a |g Vida go tPetemos oratet Y “ny gegin la cual Schell etica ap tld ator girecoio” ae Schelling proced tod de fa diroplica necesariamente una mayor : 8 reform, la nla explicitactOn y la dedhveypr etidad ype. fi jocion no se habia desarro}} de oS NINACT( b ON DE soy ¢ lad 8 Categoria le las {9.0 explicita de antinomias necesatiae. Ka t mis ques ile cas salon simplemente la autodisolucign dial Contradiccién pat jg all de cso no podia haber para Kart’ del m fot Bejones,ningtin conociiento sobre ly a eta unidad oe otttar ido. El dinico punto en el que, segin Ky de Lacon adit fe ks mto con fa esencia real, el mundo de la a el hombre tiedad cont mds alld de toda contradictoriedad, Pang guys eRcue go! ro, la contradiccién es ya un motor metorsttt & eambie Hem Suse el sistema de Tes categrn clio con eae de A iriada dialéctica fichteana un elemento objet ing asa yaa hacer deo isi ° de Ta estructura del esto aparece el siguiente problema: 764; . vate consimaree ese conocimiento? Para Kent pate qué érgano Pento necesario esta dado por las vivencias de la ne ‘chte, el funda. mricia moral, etc.). Precisamente extrapolando este'yrig moralidad (con. demeaecign activa”, principio fundamental de eu tach Lege Fiche se aquerdo con el fundamento moral de toda este ante milano hoya la existencia de todo objeto independiente del home? FMe nia; para Fichle, pues, se hace una tivialidad cei co piidad del conocimiento del mundo, puesto que eae reget’ de Ie wat hombre (puesto por el Yo): es el autotonennicn geet pone el mundo. que Para Schelling se plantea, en cambio, el problema del conocimiento del mundo objetivo externo, ante todo de la naturaleza. Y ello de un modo que recoge todos los argumentos agnésticos indicados por Kant en la Critica de la razdn pura por lo que hace al conocimiento de lo que lama mundo fenoménico. Lo que importa a Schelling es, por tant, legar a un modo superior de conocimiento, a un modo que garantice y funde el cono- Gimiento adecuado de la realidad. objetiva, de la esenci. del mundo objetivo, partiendo de aquella teoria kantiana del conocimiento que lleva ala antinémica del conocimiento del mundo fenoménico, En el célebre parigrafo 76 de la Critica del juicio ha formulado Kant la exigencia —para él, como 'es obvio, meramente hipotética— de un tal conocimiento. Dice Kant en ese ugar que para el conocimiento humano corriente, que se limita a subsumir fo particular bajo lo general, lo particular es siempre algo casual y accidental. Pero que con los medios de un tal conoimiet no quedan comprendidos adecuadamente ni la naturaleza como page la vida orginica, Por eso sienta entonces el postilado hipotticy to inteligencia (intellectus archetypus) para la cual no se diera est Posicién entre Jo universal y lo particular. + como pEFENSA DEL IDEALISMO OBJETIVQ oun modo revolucionarig obra felling, ha influido decisivamayt%® ly ct en otra direccién. BI desarrollo egy en este punto muy simple y ein “ulacion hipotética se hace’ . Kant ora una postulacid cam? érgano del concn ng 7 de la realidad objetiva, conn le rohension, adeeuar™ ts aleza) y el conocimiento hy iva (meuales pucden Hevarse a conse pismo TiO qual. En el Sistema del ideyit® jdentidad en ermina del modo siguiente la intuicign ae A cendental, Schelling Aer") un saber absoluto y libre, precisam oe Bate saber tiene A¥° "ie, o sea un saber en el cual no ente saber otro general de los conceptos, o sea, ingtin ge ni mediaciones en Bene inferencias ni ™ n cs eonepts, os prucbas, icion, Wa contemplacion directa; 6) aber euyo oo 0 pro. ulti intuicié ; ee inde idicnte de él, 0 sea, un saber que es al mismo tiemp independiente de Ay > cid que €8 libremente productora yp, ator} i hel Teve, Mang no sea i n heme Se jaimroducide son une y To mismo, Una tal inten Ja cual do pee cin intelectual por contraposicién a la intuiciin gon se llamar imi se. presenta como produccion ‘de su objeto, en la cua ste Ao 20 Peiniama es diversa de Jo intuido.” * Aqui encontrs mos ya completamente desarrollado el su, jjeto-objeto idéntico, el fundamenty idealis objetivo. — « del ieatiame oPfladamente de las contradiccionesinteruas de esta po san ne Suhel cuando estudiemos las diferencias y contraposiciones entre Hegel y él. Aqui nos limitaremos a indiear que, del modo dicho, Iabjetividad de la naturaleza parece @ Sche ling deducida y garantizada; Jas contradicciones dialécticas son -consecuentemente para a no s6lo con- tradicciones en el seno del conocimiento humano, contradicciones entre qeatieitded humana de conocimiento y la realidad objetiva (come son para Heep sno, ademés, contradicciones de Ta realidad objetiva misma. De saute sigue luego que Schelling, al igual que Fichte, afirma Ta supers say de les contradicciones en el conocimiento humano, y entra con elo clon “eal contraste con la filosofia kantiana, Pero como las contradic. cones tienen para él un carécter objetivo, Schelling rebasa al mismo tiempo la concepcién fichteana también por lo que hace a Ja superacién de las contradicciones. Con todo esto, la contradiccién y su superacin dialéctica se colocan en el centro de la filosofia entera. Digamos brevemente, slo para completar esa descripcién de Ja situa- cién filoséfica, que como “prueba” de la realidad y de Ja posibilidad de We eulcn elect Schelling aduce la intuici6n estética. Ya en la Cris de juco a nnera Senin de la filosofia, la reformulacién del Por co coin te ea, 8 ‘aba estrechamente relacionada con Ta estética. idealismo objetivo pet “o por im obra de Kant, habia inciado cierto ee naa obi terreno de Ta estética. Schelling eontinia ahora y concede a veces a la estética un lugar central en ¢l ® Sehelli . . ne Sing Mite lym, Susan y Aushus, 15% Eases Abe — SA SE) ~ pp Par’ PARACION . if DE so je Ja filesofia. (Sobre gate Probe jaem™® Sobre la estética de Schiller, lema Hr ydios jntentos de Schellin, eos } amiento filosoficg q de Ja a. 1 2P°Vencias naturales de Ja gy’ 8t@ndes 1, !% diay al 4, ciencias ‘losofs a ios stema de filosofia q ‘emat; n 128 rato si Ce Hllosofia de Ja 3, S'Stemating is ae bro el estudiar mas detalladam tale vis de Cis varias veces este &ran periodo rat Stas ese aleza, aludiendo a la importancia iislormacig Ia md descubrimientos de Lavoisier, 0°" erriidad (Volta, Galvani, ete .a jem, de Ia teoria de la evolucién, @ ie ateaentos de Ia Critica del j Jos P’ sna importante influencia en es: Obra 6 ttt ogo de Schelling, Las limita sme ke or ato metafisico, incluido dl Materialism agp Sui ine en 1008 esa. conmocisn Cientificomatun et de naturaleza realiza £2 esta época ¢] intente 4 in enradiciones objetivas dey yep fel flsofia de la naturalera las cana ttt loma yo Im i. Ya antes hemos aplicado al joven Sanath ie ga gasta de la naturaleza” que Mary acuii ata sustificados al hacerlo por la carta de M 7 paner id al sesundo para Ios des He Se tin sobre Selling, Bn esa carta, Mary lama g ft aia ol revés”y sigue caracerizando a Schling da ita in Sf exo pensamiento juvenil de Schelling — tener Bente: “gf de nuestro contrincante—, Ja jd i. instrumento que su imaginacién, no mig energi 5 nis mato gus el opin mis Srgao que lak ees tividad femenina, esta sincera idea juvenl de Stee an al de Santistico sueiio de adclecente, he gues Wm he pal realidad, seriedad iri. Por eso es Schelling la imagen union y defor mada de usted... .””7 En la época que ahora nos interesa, esa “sincera idea juvenil” ocupa al primer plano del pensamiento de Schelling. Naturanents ye oul s encuentran ya en él los gérmenes de sus posteriores concepions mn cionarias, pero, aunque no sea mas que por poco tiempo, éstas quedan ampliamente oscurecidas y dominadas por el entusiasmo con que procede { lundar una nueva filosofia de la naturaleza, una concepcin unites y dialéctica de todos los fendmenos naturales. Con este estado de dnimo chelling presenta a veces incluso formulaciones casi material chaza frectentemente con pasin el exacerbado espiritualismo de les i Ht de los que tan cerca esté en otros respectos. Como no a ied Near para’ tratar el asunto por extenso, nos limitaremas a Ito a 1a raagHtés sobre Schelling en mi libro Die. Zerstirung der Vernunt (El ol tazén), cap. 2, Aufbau-Verlag, Berlin, 1954. n MEGA, 1, vol. be ‘arx a Ludwig Feuerbach, 20 de octubre de 1843, et Parte 2, pig. 316, I >» NDAMENTAGION Y DEFENSA DEL IDEALISMO Onjenyy, FUNDAMENTA 251 5 ‘eis En cl afio 1799, Schelling, en oposicién Novalis, ha tenido, segin Ta expresion de Friedrich Shi de Novalis, he su viejo entusiasmo por Ja inrcligiosidad, © nuevo ataque escribe la “Confesién epictirea de Heinz Wider, ademis, oe 1s versos caracteristicos de ese pocma; ciremos ue me he aclarado mai “rater es [a tien verdad, defensa y consejo de todos, padre justo de todas las cosas, clemento de todo pensar, principio y fin de todo saber, desprecio lo invisible, me atengo a lo manifiesto, , a lo que puedo oler, gustar y sentir, , en lo que puedo hurgar con todos los sentidos, al espig, ejemplo de ello. rin ‘lism, sol a Pose? i Greo que el mundo existe eternamente, y que jamas dejar de ser pudriéndose on st mismo,s Esta profesién de materialismo es resuclta y apasionada, decirse que haya sido pensada clara y consecuentemente. Buss a} nhisms tiempo que hace su profesién de ateismo, el Heinz Widerpose de Schelling dice que sin duda vive sin religion, pero que si debiera cleuir ines clegins la catélica, Del mismo modo aparecen en el poema numeros0s motivn, misticos tomados de la filosofia de Ja naturaleza de Béhme. : Por esas pocas observaciones el lector tiene principio habia profundas diferencias entre la de Schelling. Pero estas diferencias seguian esco todo por su comin lucha contra los kantianos filosofia en el lugar mismo al que la habia llev cia” se burla Hegel de ese tipo de kantiano, mula esa burla con una comparacién mt “Del mismo modo que se ha decretado ya muchas vece évolution eat fini, asi también ha proclamado Reinhold ya muchas yee varios fines de la revolucién filos6fica, Ahora acaba de d ii finales...” ° Afiadiendo esta sentencia de He; citada sobre la declaracién de Kant, {ilosético de lucha en el q aliados en razén de las ho de Schelling Pero no Puede que apreciar que de filosotia. de Pict naidas para ambos, yl que querian mantener la ado Kant, En ea “Dit Hablando’de Reinhold y caracteristica: en Francia la‘ stilidades comunes, La j sobre sus propias tendencias, contribuide mucho, como es natural, diferencias. Esa’ falta de claridad de catactereado Tan Felien oS forma de expresarse, Hegel ha Dice on oy lista y justamente ese nevlen de ev eueiia cabo ante el pq u llistoria de , la filosofia: “Schelling ha llevado a Piblico su propia formacioe filoséfica, La sucesién de sus 5 Plit toc. eit, vol. 1, yg > rst Drache A 28 &5 286, HEGEL EN LA SEPARACION DE N DE sc pare TELLIN gb NG y «9g es al mismo tiempo we 4108 pres ta su PrOgresivo Teanga fe sy a stil y 7¢Prtenido kantiano con los que ompeg ima del pee j Safie® * | com de las partes elaboradas de Ja {1023 1 ni it fae ios de su formacién filosf 10 Giyet805 "9 ha trabajado ni elaboradg os scl fundamento, nt que cada ve e tit dent dejanee Yo fichtean gal lover grandes | Eta nota alimo objetive, Sem, Qt@slormeng 108 “agntico del idealis . Jetivo. Schelling ha esctite.. wero ‘como mero complemento de la Docirina de 1, f, cien@l® Fichte estaba precisamente trabajandy po f ponie, fea. doctsina a Ia moral, el derecho, oc? bb jjusién de un acuerdo completo en cua gmb05 Pyoracion de terrenos diversos, en 18 CP tysiones empiezan a arruinarse cjstematica de Schelling. A la publica a ica,” 10 ni a a ent 7 ha parti into, ere tame aparece | Sohelling sigue una larga nine, Silema del ndental de Scheling 1S ie arga discusién epistolar que an ase ruptra completa, Todavia en la obra siguierte —1 he termina con Is Fzems der Philosophie (Exposicién demi sistem qo eile mines SI Schelling sigue ciertamente hablando de l flee vi ua] ta filosofia transcendental como de dos aspentoe 4 © Bate sks na carta del 19 de noviembre de 1800 de oes seem wae de la cioncia como algo completo al lado dey cee pac omlemento, Ia iosoffa de la naturalera, Dice Schelings “Eee mraituar aparte lo que se refiera a la doctrina de la ciencia; gate oe un pera auténomo, en el que no hay nada que cambiar ni que havers een perfecta y tiene que estarlo siempre por su propia naturaleza, Pero doc. we de la ciencia no es filosofia como tal... La doctrina de ke dee procede de un modo ‘meramente 16, ico, no tiene que ver nada absoluta- te con la realidad.” * Schelling est, pues, muy lejos todavia de penne muna ruptura, y considera la Doctrina de la ciencia como el fundamento inconmovible de su propia filosofia, ‘También Fichte leva al principio la discusién de un modo muy pre- cavido; tampoco él desea una ruptura con su aliado mas importante y més dotado, Pero desde el principio protesta contra la independencia que tobra la naturaleza en el sistema de Schelling, En una carta del 15 de noviembre de 1800, un fragmento de cuya respuesta por Schelling hemos citado ya, Fichte dice que la “autoconstruccién de la naturaleza” de que habla Schelling (es decir, su concepcién idealista objetiva de la objet vidad de las categorias naturales) es un autoengafo, una ilusién, Y eserb "Algo dverso es la realidad de la naturaleza, Esta aparece en I fist traseendental como algo hallado, y completo y consumado; y ello (halls ‘a. primera idealismo ‘tenth i, © Geschichte der Philosophie (Historia de_ta filoslia, ed, Glocknes), vol, Bt: 647. Precisamente Ia. seecion dedicada a Schelling procede en. muehts puns los cursos de Hegel en Jena el afi 1806, Por exo Ta earacterizacin 3 i é& época de la Re oltece Hegel indiea al mismo tiempo las concepciones de éste en Ie por tuptura de ambos, * Fiehtes Briefe, loc. cit, vol. II, pag. 295. —_ PUNDAMENTAGION ¥ DEEENSA DEL IDEALISMO On Lay, 256 " in propias leyes, sino sein leyen inmanentes de Ja) no sein propias yes, sno sein, eye inmanents py “eieneia, que mediante une fina abstraceiin hae, y ibis Le tiene naturalnente. (precisamente porque abstrag ql a Jeza, tiene : \ nature ) que poner la naturaleza como absolute, para cong ligencia) 4 yaa si misma mediante una ficeisin,.™ et leu se coustruya a sb mmando la ruplura es ya inevitable, Pichte formula la aie wuando la ruplura es ya le, thie Forma Ia saane maucho mis encrgico y geosero, Fn gi eatin el 3 ie cOmNOst ono ¢! contenido: Ooen Tice que Jo cognoscible no esti sino “alo aqui, en esta pequeria region de la conscienei sible, una naturaleza”. Con eso queda claramente expresada Ja separucion entre ol ig subjetivo y el objetivo, Fihte niga a a filosofia dea natn Schelling todo derecho a prescntarse ni siquiera como parte de ka Jy de la cienci, a pretender una independencia ni siquiera elute aferra al principio de que toda realidad externa no es mas wn mento de la posicién soberana del Yo y de que, por tanto, la Jy, de la ciencia abarca el ambito entero del saber, Hemos visto que Schelling ha llevado la dice menos resuclto que Fichte. Sus vacilacioncs apare ridad si tuviéramos aqui tiempo para analizar detalladament epistelario, Pero lo tinico que nos interesa en este Iibry ne Hegel. Recordaremos al lector que Hegel ha anunciado, 2° $1 Hegada a Jena —pero con la intencién de pasar antes ny po p pase 0 larg rada en Bamberg— en una earia de 2 de noviembre de 1200" EL 15 noviembre Fichte escribe su dura critica del Sistema del idealismo try cendental, un paso de la eval acabamos de citar. Se ha pectit 1 puesta de Schelling a Hegel, pero como éste lego a Jena, nil sus ple Haj tetngeret? le 220} rela sumamenie verosimi Ie ieee ay seein la cua dicha respuesta de Schelling ha conte mucho a aeclerar Ta Megada de Hegel a Jena. Fl motivo tenia que estar relacio. Fado con Ia discusiin en curso ‘con Fichte. Los nein! siguicntes eon firman, en efecto, la hipétesis, legel, que hasta entonees no habia pro- ducido mis que fragmentos, aparece ahora con uce extraordinariamente intense. En Diferencia’” ¥en el otofio esti Oetring cerian conn ing sy 4 tempo. de ns. la res. tivo, el Krivische Journal da, Ang, °l étBano de lucha del idealisms obje- En esta revista Hi los caminos de la f filossfico, A ; Critica de Filosofia), feo abierta y ‘enérgicamente la division de ungue ol ides va etapa del desarrollo ado_ya en los eseritos ins, COMO nueva filosofia. Y es Hegel cuanto los grandes ensayos de la y “Uber die wissenschaftl- — os fed ne : ANGI ten des N, i ndlungsart Naturreg 25 Mey, en Bi el derecho natural]) chy (Soh, Lng ae ntlicrs ero idealismo sujet Mien, ne log io del on Fichte mismo, sing 2" el gi eilane ey ssl Pigs, principales Tepresentantes mbigy on Hoge Mpg stan 1,0" ge la 6900 0 £€2, sobre tgy con 8 tig Kany, Psa vista. breves, de la Fevista, agy 7°00 Frigg O80 ig Con, Heng tiedy tia dg oh Tog tas, N A i le , jeg Literaria de Erlang fog Teh is! > Hogg jer’ -Bouterwek, etc. Hosotig lg eet ine todos esos campos Hegre] a ang m ueva Y superior etapa q lam ge conocer al piiblico 0 pelling. Por eso es muy co) Sd esos esctitos polémicos Jp ferent P helling) y el subjetivo (Kant Jacobi, entre i en recidad de rendimiento, qo Fseabi fy * “a dealismo subjetivo, su estallidg. gl nenciag vary ibles contradicciones, ¥ Para mostray gf C8 con Jeg Pome ee az de resoly, 2° mismo tien ® PPOpiag objetivo es cape solver, de Un modem? tien todos ls problemas dela filynt® ee 3 tes Al hacer esto Hezel no sometg™ critica | mca © siquiera la apunta, A Jo sumo, el lector act {ost de un ban que Hegel esta dando a una tendencia, que corresponde ™mAs a la conn se Ngiana filosdfica que a ta de Schelling. Continuacign de su pre Todo esto queda suficientemente claro por 5; lapolémica, Pero goudl es la actitug ¢ Hegel ats Iie durante sus primeros ajios de Jena, © indepen dientement a le necesariamente resulta de la polémica? C5, materi no es posible dar na. Tespusta Satisfactoriamente le : nocemos ninguna manifest S100 Tecusatoria, ni si Mier eriptat No co. sie Schaling que sa anterior a taps aie on ue ys wraleda 2 Wurzburg). Sélo entre 1803 y ‘git empieza a maifet en Hegel una aguda critica, ante todo, de los discipulos Schelling, y, en segundo término, cont, i ra. Schelling resibe luego en la Fenomenologia iol ex a principio: el primer balance sath Schl ex ye amet Y detinityo, Ha sido, pues, Hegel en los. primeros afog de Jena un petidario imemdicional de Schelling? 20 be sido eu nade, Schlng fe ait Perfodo mera “diplomacia”, meta “tactia"? To primera opinién Se encuentra en Jas yi ulgares historias de la filosofia. La ami 3 en cuentra, por ejemplo, en Stirling, el cual busca en el Hegel de los pri- ‘ ig. 662. Sobre Stir ing gd: H. Stcling, The Secret of Hegel, Edimburgo, 1908, pig. 6. Sobre Sisk ie —que, dicho sea ae oe ke uno de Jos primeros ith atid ‘Epistol ‘ite Hegel a Kant ef ine iwicios de Marx y Engels en te Beclin, 1950, le “4 vol. IV, pags. 70 y 304, Carta de Marx a Engels del 23 de mo) 168 y del 4 de abril de 1870, F tom Heoen.—17 258 PUNDAME: TAGION Y DEFENSA DLL IEALISMO On yy Ivo 5 cierta “astucin”, cierto “eileylon ing, El lector sabe, por nuestra exposi ar Schelling, FI Iector + Kaiba iG : cién . e que la primera interpretacion fi am All afte, atbioa onl de legar'a, Jena Hegel habia conse efecto, que y ath lo ole 10 ae que en la euestion tral a 7 jg do tien obj r encima de In de elling. También hemos neuentra po n pesar de sit meron tiempon de J we Theler fragment)? 4 iloséficos de Hey ui smentarig, apni Moat tiers rico de Schelling al apuntar en un Hiteecien fg see ra problemas de In dial Fea Yi Ini importante de la flosofin heyeliana, la crencicne de mis ede 6 siempre fuera del horizonte aiid adh ites Chitica de Filosofia Hegel prot ¢ io de Schelling tiene completa razén, sider partidario ol sirl los demés de Pero esto no significa que Stirl ing, vy rec a i interpretado correclamente In actitud a gel Tespec o de She los comienzos del periodo de Jena, Stirling hag Py con Hegel jo 7 Franz Mehring eriticd con gracia irénica en Erich Schmidt por jy pretacidn de éste do Ins relaciones del joven Lessing ean Voltsires gt ventas” atribuyen a los grandes poctas y pensadores del Pasado Iq aja paicologfa del profesorcillo ambicioso ante el poderoso catedriticg ny Tarlo ~Ia psicologia con fa eval ellos mismos Han hecho sm Propia cartons suveritaria, Pero un Lessing o un Hegel se difereneian x "un profeest Schmidt o de un profesor Stirling no sélo intelectualmente, en calidad humana, , El fragmento de sistema de F ranefort muestra que en algunas Cues. tiones fundamentales dela dialéctiea Hegel habia Megado yaa clade] sobre su método especifico antes de encontrarse con Schelling. Pero sale en algunas cuestiones fundamentales, Lo que no significa que en el mo. ento de la Iegada a Jena estuviera ya pl na y sistemiticamente pensada jamente hegeliana dé la dialéctica, ni muche menos, por tanto, realizada sistematica ¥ conerctamente. No hablemos ya de cuestio. Nes tan importantes sistematicamente como, por ejemplo, la relacién entre Bién y Filosofia, Hemos visto (eft, pigs. 224 ss.) que en cl periodo de Francfort Hegel hacia desembocar la filosofia en la religion, es decir, que {ef en el comportamiento religioso del hombre le culminacién de la filo. sofia, Y pronto veremos de ya en su primer escrito de Jena adopta una potieién nueva ante esta euestion, posicién que luego ira desarrollindose cada. vex mas sistemiticamente hae la Fenomenologia, Pero incluso al Gonsiderar In primera redaccion de sus ideas sobre la Iégicn —Ia lamada Jenenser Logile (Logica de Jena}—, tendremos que admitie que junto a claras exposiciones de problemas que serin decisivos para la estructura de su posterior logica (por ejemplo, paso de la cantidad a la cualidad), hay avin mucho material que Hegel rechazarg lcitamente ya en la redac- enomenologia dialéct mete oh 8 en eel rc IMey, cion de la 7 woe: ispecialmente en la Cuestién, decisiva para legel, de la deduce i en dialéctica de las cate sorias a partir del movi- mienlo de sug contradiccione: : : : * inmanentes, hay en la Logica de Jena wna telativa oscuridad, inc ci NS en comparacién con la situation de coos pro: as Rosenkranz, Pags, 169 8. decisivos para el joven Hegel, con un — ~ “A SEP Ay f RACION pp Scttenays ag a finales del periodg ELLING y corr, logica : Cela relanee, 8 l filossticg me” €5 textes, “ctin rege encuentra de J, Flew em’ pee tote be ena, La ye CHTE 959 a al y Logica dialéctica, o] Cstablecimig Precisg Aistineig ioca, se encuentra sin duda ya pn THO de suc iPiGn entre Promis a un nivel de clarida M aensigitiO alcanzar en toda su y; ‘ Ja doctrina esta atin en germe, niteria Schelling Por cs0 no es casual que en 1, Prime "95 hegclianos is De orbitis planetarum —, a fase de J, , gu tosis i que nt? &Pisodio impact YOM exeenss Jesu vida—, Hegel no Publique mag que cee t*seendente Pion de ue combate Tas ontradcsiones y gq get! poli PE I oa tivo, desarrolla con gran claridad sug roping «i**ias del idealien: ox en el campo de la filosofia de ta caries °Ctpciones specigh nei tradicciones, pero se absticne de exponer cone ttindo de aquellas trio y ol m8todo dl idealism objetivo, ef Y details en siciones a un nivel muy general, Wr se limita a daresay ¢oom” Al mismo tiempo que elabora “xP. oon gran energia y constancia, en sy, 8, Hegel 7 su propio sistema. Pero todos’ sus proven 2 mManuscritos, por rebaia no piensa —ni entonces ni mf, a, irredan €n tales. Y Hoge} posteriores trabajos publicados miline Dastarfos fot" 10s bocetos, Fin ess eetos, pero critica, revisa y reforma constantem nt Ty sa dichos os tica de los mismos. Precisay ente la. estructura sistema. tructura filoséfica muestra unto se hallaben eecion de la es. to fluido sus concepciones s, ones feat sofia. Hemos citado la frase de Hest formé filoséficamente “a la vista del patho" de filosofar impresionara por algiin tie bajo, en dura lucha por la estructura pero no hay duda de que era un mod fundas conviciones filosdficas, La primera fase del peiodo de Jena es, pues, para Hegel una poca de experimentacion, aunque sin duda a un nivel superior ol dee Esta superiorided de nivel selta inmediatamente'a la vista eon eo: se eomparan los hocetos de Tena eon los de Prancfort. En Frveloc trataba de discusién ensayistica de diversas. problemas importantes @ profunda conexién sistemitica in. tematica no se presentaba consciente ino. Los bocetos de Jena son en cambio day pee’ MY stipes noe ©, medi con erin De gam Schelling se +S Posible que este modo ‘mpo al joven Hegel, pesado en dl tra, clon sistematica de su; rm 8 concepeione lo de trabajar contrario a sus mas pro- terna de las concepeiones; pero la sis y metodolégicamente en primer térmi: desde el primer momento bocetos de sistema; este gran progreso puede apreciarse incluso al ver cémo se encontraban atin en estado fluido los fun- damentos metodolégicos de Ja sistematizacié m1 sus apuntes intimos de la segunda mitad del periodo de Jena, Hegel ofrece interesantes visiones de su taller mental de la época. Rosenkranz ha Publicado esos apuntes con el titulo de Hegels Wastebook (Notizbuch) [Wastebook (Cuaderno de apuntes) de Hegel]. Es caracteristico de os modernos estudios hegelianos el que hayan decidido ignore ova mente esta publicacién de Rosenkranz igual que su exacta fecha {ats 1806). Dilthey analiza estos apuntes como si fueran concepeones gene le Hegel durante todo el periodo de Jena, y no dice ni da rastr ADAAIENTAGION Y PEFENSA DEL IDEALASueg onsen, PuNDAA ae lo Rosenkranz, Hering ¥a incluso mg je Dilihey el haber “publicadas ‘de Dilthey el hal cades™ a i‘, ia al principio mismo del periodg (i 2Pin hig mentos con sin poco de atenera "a hoa esos Frag nim e comprension del zeal desarvoty 4°8 peg dione sobre el método de trabajo tienen ye te Hogg Fque yeti Henado i lavidad ai ete Pe tien rept el mod sles anterior yan tie agi an cttmnos a las correctas fechas dadas Por Rosenkyy, filo i putes, NOS at eieion relrospectiva una caracterizacign matt’, i cle ost ean expititual y del modo de trabajo de Hegel en ie ! situacisn es y de " : it dated de Jena, Aducizemos algunos de los paste 2 Pi Ke «dave es querer preservarse de ersores, El mig w ro me enrores cs 1a comodidad connatural al error absolutan’, tear ie a tiene error activo alguno; como no sea, por ejent® Past ratio se le ceha agua. Entonces si que se pone fast ile si Sefer vuelve Toca, penetra en otro mundo, No Puede seguir siengy the Pero éste no es el caso del hombre. El hombre es sustancia, ¥ seed op. a si mismo, Alo qe hay que renunelar es a esa petreidad.?, vie La plasticidad, la capacidad de recibir formas... es la verde) si pué de entender Ia cosa, Jo cual ocurre después de aprenderig a, de verdad encima de ella.” Este paso est comentado con much, ‘se por otro que le precede inmediatamente. Hegel dice en al: “Para eles tuna ciencia es necesario no dejarse confundir por los principle tier pls son generals y no slenifican_gran cox. Todd! pares LP sélo posee la significacién de los principios el ‘que domine ye parti Muchas veces, ademés, los principios son malos, Los Principos ent e gpneciencia de la cosa, y Ja cosa es muchas veces mejor que la conscienyg Hay que ponerse a estudiar. AI principio la conseientis, bie querer comprender paso @ paso y tener demostrado Paso a p arrojar el libro, Inego seguir leyendo como en duermevela, y remit consciencia —o sea su individualidad— lo que es dificil.” 38 Leyendo atentamente esas observaciones se ve claramente que Heel est caracterizando su modo de trabajo en una crisis de transicién, Tiene minar la correccién de las concepciones ante el entero sistema de las particularidades de la realidad, Y se aferra tenazmente al principio de no aceptar como firmes y correctos mas que los fundamentos generale que salen bien parados de esa interaccién del conocimiento con las par Heularidades o individualidades, “La cess es muchas veces mejor que lt Frsciencia”: ésta es la clave de todo el modo de filosofar del joven Hegel. mee toma realmente en serio la idea schellingiana del mundo - que el unitario que abarca a la naturaleza y la historia; més en = Propio Schelling, el cual ha formulade cada afio esta idea © a ‘ Hoering Pag. aa” wenkran, pags, 199 Ss. 537 s3.; Dilthey, vol, 1V, pégs. 195 si Het! * Rosenkranz, Pig. 545, EN LA SEPARACION DE j cape oe mer SCHELUING Y rent 261 en wna divers forma abstracta. Hegel quiere aproune tn gues? coco en Ia comprensiin de todas las particularidades, ee posesion de un metodo que le garantice este com: de las particularidades, no aceptari cl principio erie co i: aan a cs tec, Jo pondrit a la prucba de lox Font a las atic a a Eo f arrejera eu cuanto comprenda que as ecaplica Tas patienlaridades, ste enti” de Heyl 10 3, Fodicido muchas molestias @ aus exégel burgueses, os e ha Pixtal de su_especifica forma de dialéctica, Mas tarde uma donde estin Tos Nimites de Hegel en este sentido, Aqui ym deat a este SEO fundamental de su filosofar, no silo saFi? Fredo el primer momento en todas sts dimensiones la dife- most amiento y el de Schelling, sino también para aclal le el primer momento habia dif pens 3 en ae ide que Fencia Teac] —a pesar de que dl , concepeiones de algunas cuestiones hisic ha asumido cnseguida una actitud negativa y 10+ est ue Hee pot Wge las respect vas © ae cias Cmte OO etivo— nO . ‘smo oD] ideale ino que, como experimentado, ha puesto a prueba las dos Cas de esas diferencias, para convencerse practicamente de su correc- vm o de su nulidad. , cio estos mismos apuntes caracteriza atin m. claramente la

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