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'Año II, N s 2 otoño 1991. Director: Carlos Auyero A 50.000.

Debate entre Chacho Alvarez, Alfredo Bravo, G. Estévez Boero y G. Fernández Meijide

Hannah
CeDInCI Arendt:
Pensar a
la intemperie
Un dossier sobre su vida
y su obra

ESCRIBEN JO R G E R U LLI • LU IS PR IA M O • JO S E N U N • CELSO LAFER


GERARD LEBRUN • SA N TIA G O KOVADLOFF • C L A U D IA H ILB * HORACIO
G O N ZA LE Z • N IC O LA S C A SU LLO • A U G U STO C O N TE * A R IE L COLOMBO
C O R N ELIU S C A ST O R IA D IS • CARLOS BROCATO • CARLOS A U YER O * CAR­
LOS ALTAMIRANO • ALVARO ABOS
S U M A R I O
¿Es viable el fren te de centroizquierda?
4 Cornelius Castoriadis
Respuestas falsas, preguntas mal planteadas 42
Horacio González
De Cámpora a Firmenich 8 Una réplica
44
Carlos A ltam irano
Otra izquierda 46
Una en tre vis ta con Jorge Rulli
El francotirador 14 Alvaro Abós
Una tragedia tropical 49

CeDInCI
A riel Colombo
El suplicio de Tántalo 16 N icolás Casullo
Tratado sobre las esferas celestes
(y blancas)
52
Carlos A lberto Brocato
El militarismo consentido 19 Marcos Novaro
¿Nuevos escenarios políticos? 54
José Nun
Cartas a un amigo con el que
(a veces) discuto (I)
23 Julio Sevares
Disciplina y fragmentación 57
Dossier Hannah Arendt: Pensar
a la in tem p erie 60
Una conversación con H.A.
29
T res visiones sobre H.A.
Celso Lafer: H. A. y Martin Heidegger
106.3 FM Gerard Lebrun: ¿Dónde podríamos encontrar el
mundo público ideal de H-A?
32
Claudia Hilb: H. A. En ía brecha

Hannah Arendt - La banalidad del mal


José Nun - Peores que los nazis
Jorge Luis Borges - 22 de julio de 1985 36
Luis Priamo
El oscuro cristal de una campana
39
¿Quiénes serían los actores de este mina votando en blanco, no sabe­
eventualespacio nuevopolíticoofren- mos. Es un riesgo. Ante ese riesgo,
te? Concretamente, ¿con quiénes nosotros salimos a decir: bueno, cre-
armaría? 3 que hemos aprendido de mu-
errores, creemos que no pode-
Alvarez: Democracia Popular, el So­ tener dogmatismos, se cayeron

¿Es viable el frente de


cialismo Democrático, el Socialismo todos (por lo menos para nosotros) y
Popular, el Socialismo Auténtico, no vamos a intentar crear un espacio con
sabemos todavía si el Partido Intran­ mayorsocialización del poder. De he­
sigente y la Democracia Cristiana, cho en Democracia Popular lo esta­
nosotros, el Grupo de los Ocho. Per mos intentando hacer con una carta
lo importante es no instalar esto com orgánica que incluye a los grupos so­
una sumatoria de partidos o de gri ciales con posibilidad de opinar en la
pos, que daría una impresión todavía conducción del partido aun cuando

centroizquierda? de mucha heterogeneidad, y grupos y


partidosque no escapamos a la crisis
de representatividad que tiene gran
parte de la dirigencia política. Sí po­
demos escaparle a eso o pelearle a la
crítica en mejores condiciones si esto
tiene unaformade movimientoplural,
de movimiento que se va construyen­
haya afiliación. Por supuesto que
intentos y son papeles,
s va a ir? Esto tendrá que
a práctica que hagamos
desde adentro. A pesar de que la si­
tuación es difícil por las razones que
apuntaban, también es única, o por lo
menos muy especial. Hay una de­
do en baseaun sistema de ideas, con manda. Hay algunas cosas nuevas:
una forma más abierta que la tradicio­ mucha delagenteque emprende es­
■ La crisis galopante que atraviesa Argentina, la defección de los parti­ Bravo: Me resultadifícil hablar de es­ nal de los partidos políticos y en el ta tarea tiene muchos años de políti­
dos mayorltarlos, la calda en la credibilidad de los discursos y de la cla­ te tema, porque tengo que hacerlo cual losgrupos, estructuras y partidos ca, años de haber hecho cosas, de
se políticos ha planteado un tema acuciante que ha ganado ya la calle. Es desde el punto de vista de un partido ceden parte de su identidad en la con­ haber asumido como buenos deter­
la posibilidad de un nuevo espacio político al que se suele denominar, con ALVAREZ: que tiene casi cien años y que desde formación de una nueva. minados principios y como erróneas
la comodidad de las etiquetas, “el frente de centroizquierda”. Las eleccio­ hace aproximadamente cuatro años determinadasconductas. Eso hay que
nes de 1991 han tornado urgente el tema y todos los interrogantes que el “Tenemos mucha está construyendo una unidad que ¿Esta idea de nuevo espacio podría esperar que haya servidode aprendi­
mismo suscita: contenidos, procedimientos, componentes, preferencias credibilidad en el tema de buscarecrear el partido socialista úni­ incluir otros actores que no sean es­ zaje. Hay mucho de la actitud de la
temáticas, viabilidad de este posible discurso ante el escepticismo de las co. A veces el mercantilismo electoral trictamentepartidos políticos, grupos gente que está armando este frente,
mayorías, e tc .. la corrupción, pero poca en y la coyuntura empañan lo que signi­ partidarios o grupos desgajados de movimiento o como terminemos lla­
Sobre estos temas y otros que el azar de la conversación suscitó, ver­ fica una unidad; en nuestro caso, partidos, comopor ejemplo organiza­ mándolo, que es nuevo y diferente, y
sa la mesa redonda que LA MIRADA convocó y que se transcribe a con­ el tema económico porque afortunadamente vamos superando ciones sociales o personalidades in­ no por revolucionario sino, yo diría,
tinuación. Participaron de ella el diputado Carlos Chacho Alvarez, del la gente nos ve lejos del etapas mediante el conocimiento, la dividuales? por reflexivo, y por mirar los errores

CeDInCI
Grupo de los Ocho, Alfredo Bravo, dirigente del Socialismo Democrático, integración y ese amasado de cosas
el diputado Guillermo Estévez Boero, del Socialismo Popular, y Graciela poder." que nos hace conocer a la gente que Fernández Meijide: Sí,
Fernández Meijide, dirigente de la Asamblea Permanente por los Dere­ no está en estas tratativas. El mo­ cual todos apuntamos. Cuando nos Alvarez: Lo nuevo es que existe una
chos Humanos y de la Democracia Popular. mento no es el mas indicado, hay una estamos encontrando en la marcha idea de movimiento... de frente. Eso
BRAVO: serie de inconvenientes que a veces de los ferroviarios, en la marcha de me parece básico, sin darle las con­
do las secundarias (pero que segura­ “El momento electoral es el traban las mejores aspiraciones y los los docentes, somos sensibles a los notaciones que tuvo el movimiento
mente van a ser importantes), y reci­ mejores proyectos. pedidosde losjubilados, sabemos de peronista, que construyó, de arriba
biendo lo que la gente también apor­ peor momento posible para las ollas populares que hay y que jus­ hacia abajo, la ¡dea de movimiento
te a este espacio. Y todo esto tiene ¿Por qué el momento no es el indi­ tamente esta segmentación infernal plural. Tiene, como ingrediente defi-
que ser pensado a largo plazo.
crear un nuevo espacio cado? es porque los partidos tradicionales nitorio de lo nuevo, la convergencia
político, pero no hay otra no dan cuenta, cae de cajón que es­ de tradiciones y sensibilidades políti­
Alvarez: Es difícil que alguien, en un Bravo: Para una proyección, debe- te espacio debería apuntar a ir hilva­ cas quefueron culturalmente antagó­
momento preelectoral, conteste a es­ oportunidad." ríamostenermayortiempo... Lostiem­ nando toda esta segmentación, que nicas durante cuarenta años de vida
ta preguntadiciendoquequiere cons­ pos nos están acotando. Si nosotros es lo que se queda afuera de las res­ política del país. Esto ya marca un
truir un frente para las elecciones. decimos, 'Vamos a hacer una elec­ puestas de los partidos tradicionales, punto decisivo, que es lo que marca­
Más cuando en el país hay un espacio ESTEVEZ BOERO: ción abierta para determinar los can­ en este gobierno y en el anterior. ba Graciela respecto de la posible
vacante, desde el punto de vista so­ didatos", tenemos que pensar que se unidad entre el socialismo democráti­
cial, político, ideológico y democráti­ “La gente va a votar contra nos encima en el tiempo con las elec­ Hay una experiencia cercana, la co y peronistas, por ejemplo. Lo nue­
como un espacio político permanen­ co, cada vez más amplio. Ello tras­ el bochorno. V nosotros ciones de setiembre, y nos demanda un partido que en un momento deter­ vo tiene quever con laformacomo se
te, orgánico, con una perspectiva de ciende la voluntad nuestra, que es la un esfuerzo antes y un esfuerzo pos­ minado fue como la soldadura de dis­ construye y con quienes lo compo­
futuro o, por el contrario, más coyun- capacidad de construcción que ten­ podemos canalizar esa terior. Es un peso enorme y gravoso, tintoscomponentes, elPartido Intran­ nen. La experiencia del Pl fue una ex­
turalmente, con unaperspectivapun­ gamos para hacer posible esta inten­ difícil de resolver. sigente, al que vimos estallar en muy periencia situada casi exclusivamen­
tual, con relación a ios comicios? cionalidad política. Todos los que te­
oleada." poco tiempo sin poder definir una te en la recusación ideológica o en el
nemos unavoluntad explícitadecons­ Alvarez: Hubiera sido mejor transitar identidad. ¿Cuál sería la novedad de ocupamiento de un espacio ideológi­
Fernández Meijide: Nosotros lo con­ tituir este frente estamos pensando una práctica común y que lo electoral estenuevoespacioen relaciónaaquel co en la Argentina, casi residual a la
cebimos como una cosa más perma­ en unaconstrucción a mediano plazo FERNANDEZ MEIJIDE: fuera el resultadode esa síntesis pro­ fracaso? Argentinadel 73. Aquéllosque se ha­
nente que esta coyuntura, porque si que pueda llegar a disputar el poder "En el campo ético, será el ducida, no en el momento electoral, bíanquedadosin el peronismoo sin la
no, no tenoria senuoo. Democracia en el país. Sedan las condiciones pa­ sino en algo no electoral. Entonces, . Fernández Meijide: Hay unacircuns- izquierda violentacomo paraguaspa­
Popular se llama “por el frente social". ra que esto lo pongamos en marcha valor testimonial de estaríamos juntos en la calle, juntos tanciadiferente al momento del creci­ ra su acción política descubrían en el
Apareció como partido nuevo con la en esta coyuntura, que es una coyun­ nuestras presencias lo que hablando con la gente, en prácticas miento del Pl. Es que dos partidos, Pl una forma de reencauzar su prác­
intencionalidad de crear una herra­ tura preelectoral. No es el mejor mo­ compartidas, con contradicciones sal­ peronista y radical, que tradicional­ tica militante. Pero más situados para
mienta para construir un espacio al­ mento, porque las coyunturas electo­ nos va a diferenciar de dadas. En términos de una práctica mente llevaron una cantidad de votos atrás que para adelante, más situa­
ternativo al bipartidismo. Es impensa­ rales muchas veces terminan ses­ común más consolidada, la presen­ y demás, han gobernado, defraudan­ dos para recomponer una memoria
ble hacerlo exclusivamente para una gando los contenidos más mercantili- otros discursos." cia en lo electoral hubiera sido la con­ do a buena parte de la ciudadanía. que había sido derrotada que para
coyuntura electoral. A un partido que zados de la política. Nosotros, por secuencia natural de ese trabajo pre­ Cuando el Pl creció, estaba todavía plantear una cosa nueva en la Argen­
tiene un año de vida y de construc­ más que hayamos peleado mucho vio y no tendríamos las dificultades por verse qué iba a pasar. Esta sería tina. El sucesivo fracaso de tos go­
ción, una coyuntura electoral lo pone por demostrar que no estamos conta­ que seguramente vamos a tener en lo una diferencia. Además, en el caso biernos radical y peronista permite
en movimiento, para lo cual se ha te­ minados por los vicios que hoy tiene que comúnmente se llama el armado del Pl hubo una conducción muy per­ pensar lo nuevo, con menos elemen­
nido que preparar especialmente en la política, no estamos exentos de de una lista electoral. sonalista, decisiones muy personalis­ tos residuales, con menos anclaje en
este momento, cuando la construc­ ello. Pero, de lacapacidad quetenga­ tas, el poder no se socializó. Esto, tal tos pasados y con unavoluntadde sa­
ción siempre es lógico que sea más a mos hoy para armar este frente elec­ Fernández MeIJide: Hay dos instan­ vez, nos haya hecho aprender cosas lir al cruce de las prácticas y las con­
largo plazo. Bueno, asumimos esta toral con otros ingredientes y desde cias: una, la intencionalidad de crear aquienes emprendemos esto. Prime­ ductas políticas que han terminado
coyuntura, pero me parece que. co­ otra perspectiva distinta a como se este espacio convergiendo desdedis- ro, mirar esta realidad nueva de una degradando, justamente, laacciónpo­
mo está el país, debemos pensar en concibe la política hoy, creo que de tintos lugares; lo otro son las cosas población (lo dicen todas las encues­ lítica hoy. Si logramos concretar este
un futurodonde se junten las distintas esa misma capacidad surgirá la pro­ prácticas de resolución, que no son tas) que a esta altura del partido está espacio estaremos produciendo un
culturas políticas acordando las co­ yección y la virtualidad de este espa­ poca cosa y a las cuales nos tira esta enojada, porque la defraudaron y no hecho bastante impactante frente a lo
sas más básicasy después discutien­ cio como sentido de construcción. necesidad de enfrentar una elección. sabe qué va a hacer, y a lo mejor ter- que son las prácticas tradicionalesde
la política en la Argentina. Esto tiene ética. ¿En qué medida este nuevo articulación se dan los fenómenos
que ver con cómo loconstruyamos: lo espacio incluiría la denuncia ética y más perversos de la corrupción. Si
metodológico también es sustantivo. en qué medida ustedes ven comopo­ uno analiza cuáles fueron tos casos
A la política hoy hay que producirla y sible escapara esa especie de recha­ de corrupción más importantes en es­
después hay que explicarla. No es el zo de la sociedad hacia los discur­ tos últimos tiempos, verá una articula­
espacio que tiene un discurso ideoló­ sos, que en la calle se nota tan fuer­ ción perversa entre la clase política
gicamentediferente sino que también temente? que emergió con la democracia en el
se construye de forma diferente. Por '83 y tos grupos de poder. Si acepta­
eso hacía mucho hincapié en lo meto­ Fernández Meljide: Escribía hace po­ mos esa cultura de la resignación de
dológico, en los procedimientos, en co el ex fiscal Aníbal Ibarra que “es que así como estamos hoy no pode­
las relaciones entre nosotros. Si re­ inútil que se hagan leyes para perse­ mos hacer política porque no tene­
producimos la desgradacíón de las guir a los corruptos, más serviría que mos aparato, no tenemos estructura,
culturas políticas en crisis o podemos una cantidad de funcionarios, inclu­ no tenemos recursos, no tenemos
recrear una relación distinta en tes yendo al presidente, dieran ejemplo empresarios poderosos, ésa es la
componentes de este nuevo movi­ de honestidad". Habremostenido ma­ muerte política de un espaciodistinto.
miento. Esto va a ser el desafío. En yor o menor repercusión, pero todos
cuanto a la incorporación de otro tipo quienes estamos tratando de cons­
de práctica, de referentes sociales, es truir este nuevo espacio tenemos una advierte una tensión entre una idea
un tema que hay que verlo en térmi­ trayectoria y hemos dado un testimo­ del frente centrado fundamentalmen­
nos de proceso. En la Capital Federal nio. Nos hemos exigido. Jamás he­ te en la prédica ética, o bien un fren­
tesllamadosentrecomillas movimien­ la discusión
mos ocupado un despacho conforta­ te que desarrolle contenidos ideológi­ de un modelo,
tos sociales son absolutamente pre­ ble. En nuestro caso, el testimonio de cosy queremitaeltema ético al ejem­ canalizar.
carios o inexistentes. La protesta ba­
rrial, la organización comunitaria, lo
vida será el capital político mayorque
vamosa ofrecer. No sé si lagente ten­ PREGUNTAS plo testimonial de los líderes. El tema
es crucial porque faltan cinco meses
W pezamos a abusar Una herra­
mienta que
que hadado la sociedad comoformas drá discernimiento para advertirte o para las elecciones y la gente no se
autónomas de organización de la po­ estará tan furiosa que ni siquiera lo A CHACHO va a contentar con un debate sobre lo
estamos pareciendo
demasiado a los Alba-
hay que pro­
mover po
lítica no son tan sustantivas como pa­ advertirá, pero ése va a ser, más allá que habría que hacer: ello hay que parte de la gente es la participación.
ra decir: la política se puede hacer
cargo de eso, o la política puede arti­
de 1o ideológico, nuestro capital fun­
damental.
ALVAREZ hacerlo de inmediato, independiente­
mente de que la referenciagenéricaa
monte... Para colmo to­
ma estos temas la derecha, que lega­ En el mundo de hoy, un nuevo mode­
cularse con eso. No es que la crisis lizatodo el sistema, lasconcepciones lo no está definido, hay que rearmar­
ntretodaslaspreguntasacercadel la gente es cuestionable, ya que hay más autoritariasy reaccionarias, pero lo absolutamente todo y las adhesio­
afecta a la políticay hay una sociedad
vigorosaque se expresa por otros ca­
nales. Hay una crisis de representati-
Alvarez: Hay una suerte de desafío
utópico para los años '90, una utopía
quizá más austera y menos heroica
E
Frente queda una que todavía no
se ha hechoy que está dirigidaal
ChachoAlvarez: ¿el Grupo de los
gente que está esperando una pro­
puesta concreta de orden político,
haygente máspreocupadapor la co­
aparece como bastión de lucha con­
tra la corrupción. Eltemade lacorrup­
ción tiene que estar ligado al cuestio-
nes que va a tener realmente yo creo
que van a ser muy limitadas porque
son propuestas que se van en expe­
vidad y una debilidad orgánicaque se que la de la década del 70, que se Ochoestá dentro o fueradelpero­ sa ética y hay gente que no entiende rimentación, que tratarán de salvar
da en todos tes sectores de la socie­ namiento de un modelo global, al fun­
emparenta mucho con la cruzada an­ nismo? nada o que ya renunció a entender cionamiento de un modelo económi­ errores de modelos anteriores que
dad. La política debe potenciar una ticorrupción: el desafío de constituir nada de política.

CeDInCI
co, político y social y a la posibilidad hoy están de capa caída en todo el
presencia más organizada de esas unadirigencia lo más autónoma posi­ La contestación es muy clara: es­ mundo. No son ideas fuerzas. La idea
cosas nuevasque estamos exigiendo Fernández MeIJide: La ética es im­ de -a partir de conductas distintas-
ble de los factores de poder. En la Ar­ táfuera. Yanoformamos parte del construir otro modelo. Lo que es real fuerza es la honestidad, la ¡dea fuer­
y pidiendo, porque si existieran esos gentina esa posibilidad estátotalmen­ Partido Justicialista. Es una de­ portante pero no se acaba ahí. Si no­ es que vamos a tener menos credibi­ za es la justicia, el no manoseo de la
movimientos sociales, esas referen­ te obturada. El mundo político piensa cisión nuestra pero también de sotros saliéramos solamente con el lidad en esta coyuntura cuando ha­ independencia del Poder Judicial, la
cias sociales con más envergadura, que nosotros estamos condenados a ellos: nosenosinvita, comoseha­ temade laética, necesitaríamos unos blemos de qué economía queremos, participación de la gente, el respeto
tendríamos que hacer muy poco, ten­ ser una minoría testimonial y que es cía antes, a participar de ninguna cuantos santos... (risas). Yotampoco porque la gente nos va a ver muy le­ de los derechos, la transparencia de
dríamos nada más que darle un mar­ imposible que alguna vez lleguemos actividad del partido. Ya no tene­ soy amiga de hablar de “la gente”, jos todavía del poder. Vamos a tener
co político a eso. porque sé que hay gente que está la administración. Todas éstas son
a tener posibilidad de disputar el po­ mos nada que ver. menos credibilidad en grandes temas ¡deas fuerzas porque la fuerza le vie­
der. Ellos consideran que sin fuertes muy cómoda en esta situación, hay y podemos tener más credibilidad en ne de la gente. La gente en estos
Bravo: Lo importante es la metodolo­ articulaciones con tes grupos de po­ Uno no puede dejar deacordarse gente que -como vos decías- ya tiró temasdonde se involucra nuestraper­ temas está decidida, y si ve que
gía, porque es la única forma de pre­ der económico, sin una inserción im­ del antecedente de Cafiero en la la toalla y gente como uno, en el me­ sona, nuestra conducta. Y ahí hay un alguien puede garantizar eso, puede
sentarse ante la opinión pública de portante en el establishment, es im­ provincia de BuenosAires: se fue jor sentido del término, que entra en la piso de legitimidad para discutir lo cumplir con eso, la gente lo va a apo­
manera diferente. Pero esto también posible crecer y ser representativo en delpartido, mostró sufuerzaelec­ vida política partidaria a contrapelo otro. En estos momentos el tema de yar. Tenemos una posibilidad detener
implica la construcción de toda una esta sociedad. El inmenso desafío toraly, después, volvió. ¿Nopue­ de lo que es la posición hoy, porque cómo procesamos nuestras historias,
nueva cultura. Y esto implica no sola­ dice: ¿qué hago paracambiar esta si­ un espacio serio, en setiembre. Des­
que tenemos es romper esa suerte de depensarseque ustedes estén in­ nuestra militancia, nuestro compro­ de mi punto de vista, no hay desarro­
mente el análisis de la memoria de los fatalismo de que estamos condena­ tentandohoyrepetiresaexperien­ tuación? No solamente desde el pun­ miso, está muy jugado en esto y tiene
hechos ocurridos sino también de la to de vista de la corrupción sino tam­ llado el clamor de un nuevo modelo,
dos a ser una sumatoria de grupos ciaal unirse al Frente? que ser referencia para oxigenar la de otra formulación. Hay sí un recha­
forma de encarar esta nueva conjun­ que pueden aspirar a tener el 7%, el bién desde el punto de vista de qué política, en cuanto a la entrada a la zo de lo más negativo. No cedamosel
ción que se está creando, y en la cual 8%, el 9% de los votos, pero nada No, deninguna manera. Cafierose democraciaqueremos, de qué tipode política de los jóvenes que empiecen
no tenemos mayores diferencias, por estado queremos, de qué tipode eco­ manejo de esa ¡dea fuerza agregán­
más. Ahí está el tema, ese escepticis­ fue porque Herminio Iglesiasy su a ver que ésta es otra forma de hacer dole contenido, es decir, no le agre­
lo menos hasta este momento. Es de­ mo del que ustedes hablaban juega a gente le bloqueaban toda posibili­ nomía tiene que hacerse para dar las política no por lo que decimos, por guemos limitaciones para el acceso a
cir, está toda la intención, y esa inten­ favor nuestro, porque ese escepticis­ dad de lucha interna en el partido. soluciones que todos estamos que­ volver a construir una idea macro de esas ¡deas fuerzas de la gente. De­
ción nosotros la acompañamos. Pero mo también le está dando la espalda Nuestrocaso estotalmentedistin­ riendo desde nuestras casas, como qué país queremos, sino porque nos mos ese debate para demostrar que
también tenemos que producir hacia a los aparatos políticos, a esta forma to: nosotros nos vamos porqueya habitantes comunes. vean a nosotros haciendo política de somos nosotros quienes podemos
adentro toda una revisión. Y esto es lo perversa de articulación entre lo polí­ no tenemos nada que ver con lo manera muy diferente a tes Grosso, plantear con honestidad y con clari­
que marca una diferencia con los de­ tico y lo económico y también está que ahora es el partido y, mucho Alvarez: El tema de la honestidad po­
ne un límite fuerte, porque el fracaso tos Toma, tos Jesús Rodríguez, tos dad, sin complicidades, la canaliza­
más. Aquí no se trata solamente de condenando a los hombres políticos menos, con el proyecto de país Nosiglia, etc. ción de esas ¡deas fuerzas.
hacer una coyuntura electoral, aquí que han utilizado la políticapara acre­ que defiende. Las diferencias son del ciclo del estado prebendarte está
hayque tener presente de qué mane­ de fondo. y estuvo asociado a niveles de co­ Estévez Boero: Nosotros no tene­
centar ventajas personales. Eslagran rrupción. El liberalismo pudo avanzar En el marasmo de la actual situación
ra esta coyuntura electoral nos ha oportunidad que tenemos: una socie­ mos mucho tiempo para generar co­ argentina la derecha está utilizando
agrupado y nos puede proyectar más muchísimo por las pocas probabilida­ sas, sino que tenemos que canalizar
dad muy desencantada, muy defrau­ des de demostrarque ese estado, co­ sin remilgos el tema de la lucha anti­
dada,.que no se la convence con apa­ mo estaba constituido, podía seguir las que están en la sociedad y darle corrupción. ¿En qué medida el posi­
ratos,que va á ser difícil de manipular funcionando. Aparte de la desacumu­ fuerza, orientándolas. El problema de ble frente se diferenciaría del lengua­
Resulta obvio lo difícil que es armar por losgrandessistemaspublicitarios lación económica, el tema de la co­ la honestidad es esencial. En las pró­ je que puede levantar hoy un Bussi,
un nuevo proyecto político, un nue­ y que permite a una fuerza política rrupción jugaba un papel central en ximas elecciones, la gente va a votar un Albamonte o un De la Rúa?
vo espacio, en un momento en que la con bases éticas muy claritas, no dis­ esto. Una gran idea que podría ser en contra del bochorno, en contra de
política tiene una credibilidad tan cursivas sino donde cada uno pueda debatida en términos ideológicos tie­ la frivolidad. Este va a ser el voto ma­ Fernández Meljide: ¿Cuál es la dife­
baja, en un momento en que hay en testimoniar a partir de su propia mili- ne el límite, el techo concreto, de que sivo. La gente va a votar en contra del rencia entre Albamonte y cualquiera
la sociedad un reflujo hacia posicio­ tanciay su propia conducta, unadife­ en Argentina está siendo ejecutada bochorno de Aerolíneas, no en contra de nosotros, o entre De la Rúa y cual­
nes conservadoras, hacia la privaci­ renciación nítida. Comparto el tema por delincuentes comunes, por ma- de laprivatización. No hay conciencia quiera de nosotros, o entre Bussi y
dad, hacia el abandono de lo público, de que 1o ético, la lucha contra la co­ fiosos. O sea, que tanto la crisis del muy clara sobre privatizar o no priva- cualquiera de nosotros? Estos seño­
una gran desconfianza hacia la retó­ rrupción, es una de las banderas fun­ estado prebendarte como la reformu­ tizar. Lo que sí hay conciencia es de res se han preocupado, en distintas
rica de los discursos políticos. Un dantes para construir este espacio, laciónde la actividad estatal y lapriva­ que la privatización es bochornosa, circunstancias, en mantener a la cla­
elemento que parecería ser crista­ pero creo que está en la dirección que tización, están ligadas al tema de la es fraudulenta, es deshonesta y tie­ se política. Cuando atacan a la co­
lizador en este momento de la so­ apuntaba antes: en la construcción corrupción. Por eso creo que el tema nen que ir presos todos tos que han rrupción, lo que están intentando es
ciedad, galvanizador de la socie­ política como espacio autónomo de de la corrupción es un tema fuerte, lo participado en ella. Esto está en el se­ saldar su posición dentro de la clase
dad, es la denuncia ética, la cruzada tos grupos de poder. Porque en esa que pasa es que hay que incluirlo en node la sociedad y es lo que nosotros política. La ponemos a salvo, y man-
PERFILES POLITICOS Noparece insensatoobservar que
las cosas son como las observó Das­
A Cámpora nohaysencillamente dón­
de ponerlo en el presente, porque no
la un ajetreo momentáneo, una pasa­
jera realidadque los políticos asumen
tragedia era insoportable. No podía
ser enteramente leal a ese poder pa­
hiell Hammett, y menoscomo las ima­ existen en el presente ninguna de las para atravesar una “etapa". Cámpora ra el que lo habían designado. Pero
ginó HannahArendt. Habermas, siem­ razones progenitoras del fenómeno no Supo qué hacer. Declaró absurda, tampoco podía asumir la figura del
pre agudo e implacable, señalaque la político encuyocentrose situaratran­ escierto, la situación que lo llevó a ser traidor frente al hombre que trabajo­
poítica no puede ser idéntica a una sitoriamente. ¿De qué se trataba? el más leal y el más traidor en un cor­ samente desplegaba las redes en las

De Cámpora meraconversación entrehombresque


confían entre sí y proceden en co­
mún, "comunicativamente”. Al con­
trario, losprocesos comunicativoses­
tán sometidos a una coerción invisi­
ble, que Arendt no entendería por
quedar atrapada en unavisión clásica
de la praxis, inherente tan sólo a la li­
Era Cámpora un político convencio­
nal, un peronista extraído del "interior
profundo" de la provincia de Buenos
Aires, acaso un "conservador popu­
lar”. De profesión, odontólogo y con
unacarrerapolíticacerrada. Unafuga
de la cárcel de Ushuaia en el año
1957 puede figurar como módico pro­
to lapso de tiempo. Pero también qui­
so volver a ser el de antes; el de antes
a aquel tiempo en que le decían “da-
le, dale” en las calles y en el cual él
mismo decía cosas que no debían
agradar a quien lo había ungido. Si la
política es la permanente reinvención
de una biografía, a él le había pasado
cuales él estaba incluido. Era impen­
sable ser libre, pero una voz sorda,
colectiva, se lo pedía en la calle. Era
difícil estar totalmente determinado
por otro, a pesar de que todo su len­
guaje y toda su conciencia le hacían
ver esa inclusión determinista como
un logro, como una alegría o un servi­

a Firmenich bertad y excluyeme de los procesos


económico-administrativos. Haber-
mas, curiosamente, siempre es criti­
cado en nuestro medio intelectual,
por lo mismo que él le critica a Han­
nahArendt. Esdecir, es vistocomo al­
guien que no percibe los condiciona­
mientos de violencia que hay en la
digio de una vida po^demás previsi­
ble.
. Los acontecimientos lo supera­
ron, pero-podríamos decir-, ¿aquién
no superan losacontecimientos? Pre­
cisamente de eso tratan las diversas
versiones de la política. Algunos polí­
ticos actúan, o lesgusta actuar, como
lo máximo a lo que un político puede
aspirar. A partir de allí se dedicó a
desmembrar ese momentode excep-
cionalidad, prefiriendo pensarlo co­
mo algo increíble. Unafantasíainsos-
tenible.
En efecto, había sido "superado
por las circunstancias". Y toda políti­
cio. El, que estaba tan cerca de la na­
talidad política -lo que H. Arendt lla­
ma natalidad política-, debía conven­
cerse de que su situación era la del
"hombre muerto", al que se le permi­
te el usufructo de todo porque en rea­
lidad no importaba nada.
Otro es el caso de Firmenich. No
— Por H oracio G onzález ■ proclamada comunicación sin coer­ si nunca pudiesen ser superados por ca, toda razón, toda crítica y toda po- da un céntimo por el ingenuo. Al con­
ciones. Por lo menos, no es así en es­ los acontecimientos. Pero ya habla- liticidad, consistiría precisamente en trario, cree que no se cometen erro­
nión, los buceadores de imágenes a partir del Mal. Para Weber, ni hay te caso. remosde Firmenich. EncuantoaCám- verse siempre desbordado por una res por ingenuidad sino por mal cálcu­
colectivas. Mientras tanto, tal como lo inocentes ni el bien deja de ser una Pero el hecho de que hayaviolen- pora, no se podía creer que estuviese trama histórica que se complace en lo, por descuidoobjetivo. "Eramos im­
emplea Arendt, no se trata de marke­ emanación posible de las fuerzas vio- cia en el interior -digamos así- del asentado sobre una situación falsa, escapar de nuestra comprensión. Su berbes, despuésdetodo, éramosmuy
ting -bueno fuera- sino de una ago­ hecho político puede combinarse de quehr............. ida prestada.
nía interior que repentinamente se diversas maneras con el hecho de
hace pública y define, como con el que el actor político es concebido co­ estructura
flash de un fotógrafo, a los sujetos. Firmenich", desde mo ¡nocente o distraído, como en el
Este flasheo tiene un gesto que se comienzo de las grandestragedias. Y
proyecta en dirección a la eternidad. aquí quiero introducir la anunciada de él un tío, padre
Si uno es político, piensa Arendt, no ideasobre los perfiles políticosque vi­ cho a libertades o autonomías que
puede evitar ese terrible sentimiento. mente corresponderían mos con nuestros propios ojos. Diré relación paternal o filial direct
Toda política, todo político, encierra lio. No será éste el caso, pero aún qui­ “Cámpora hará fácil la cosa. concede? Cuando se desarme

CeDInCI
un proyecto de eternidad. Sin embar­ siera observar una cuestioncilla más ilusión parental, esaantropologí
go, esta vieja dama weimariana (co­ Un río subterráneo e respecto del pensamiento arendtia- mitiva, sólo quedaban dos caminos.
mo la llama leprofesseurLebtun, que irreversible reúne a no, cuya condición aristocrática salta Uno, consistía en declarar absurda la
probablemente no considera las des­ a la vista. Mary Me Carthy, la novelis­ construcción intelectual que se había
pectivas opiniones de Arendt sobre la Firm enich y a Videla en ta norteamericana que se convirtió en forjado. El otro, consistía en declarar­
política alemana de los años '20) no albacea de Hannah Arendt y que pu­
podría ser tan tozuda de querer res­ lo q u e nin g u n o d e ellos blicó su último libro, The Life of the
taurar una imagen tan estatuaria y debería querer ser: Mind, se trenzó hace algunos años
tu colectivo. Pera una historia siem­ olímpica de la libertad. Libertad no es en una polémica con Lidian Hellman
pre nos entrega compactas figuras. igual a la eternidad que se busca, si­ chivos emisarios. respecto de ciertos temas acucian­
Podemos llamarlas individuos. Y aun­ no a la natalidadque siempre se reci­ tes, como el feminismo y la violencia
que sean "hombres típicos en situa­ be tenue y fugaz. Todos podemos te­ política. No recuerdo bien los térmi­
cionestípicas", aún notenemos cura­ ner un momento así. Esta señora, nos que ambas usaron en el debate,
do nuestro pensamiento del hábito de adusta profesora de la Universidad perosílaimpresiónquemecausó. Li-
buscar en un buen drama biográfico, de Cornell, eterna exilada (¿de qué llian Hellman actuaba como si estu­
un rastro ejemplar del momento que eternidad hablamos?), pensaba que viera representando, también, a su
atravesamos. Tengo a ese hábito por hay un trasfondo de ingenuidad en la pareja, el novelista Dashiell Hammett.
una muestra de sensibilidad política, conciencia individual. Su idea ético- Mary Me Carthy representaba, no se
tan buena como otra que usted, lec­ antropológica, creo, es queel hombre podía evitar pensarlo, a Hannah Ar­
tor, pueda apreciar con el mismo em­ es ingenuo frente a las grandes tra­ endt. Y entonces, era como si dos
peño que yo le dedico a ésta. Hannah mas de la historia. Comparte esta "grandes”, Arendt y Hammett, se con­
Arendt, que hace del pensamiento idea con alguien que tanto se le pare­ frontaran a la distancia, simbolizando
político una manifestación irrepara­ ce, otro pensamiento aristocrático co­ esa confrontación dos posiciones to­
ble de la conciencia (por eso la impor­ mo el de ella: el de Marguerite Your- talmente diferentes en la cultura nor­
tancia que le otorga al perdón, para cenar. También para Yourcenar las teamericana. Para Hammett, la esen­
desarmar el predominio de la fatali­ pequeñas criaturas de la política ha­ cia de la realidad es la asociación en-
dad histórica), llama revelación a la cen el mal con ingenuidad. Mejor que trecrimeny política; el laberintode las
capacidad de los hombres para mos­ todos hagan cosas buenas, es cierto. pasiones hace sospechosa de asesi­
trarse en la acción. Con Hannah Yourcenar y Arendt no profieren sen­ nato cualquier fundación o proceso
Arendt, nunca el pensamiento remo­ tencias como "bien, sé mi mal", pues político; la investigación de la ilegali­
to de las religiones mundiales tuvo una cosa es el bien y otra muy distin­ dad de fondo que caracterizatoda ac­
una transcripción tan decididamente ta es el mal. Podemos apreciar la dis­ ción social sólo puede encararla un
laica que preservase sus temas fun­ tancia que hay respecto de pensa­ detective solitario y escéptico, mime-
damentales, como la iluminación per­ mientoscomo el de William Blake, au­ tizado necesariamente con el mal,
sonal, lacaída, el milagro, la profecía, tor de las palabras entrecomilladas para no ser tomado por idiota, o por
lagloria, el castigo... No megusta ese de la frase anterior. Y podemos tam­ inocente, lo cual sería lo mismo. Para
pensamiento, pero es imposible no bién preguntarnos si el otro gran pen­ Arendt, la esencia de la realidad es la
encantarse con él. Suele encantar­ samiento político contemporáneoque capacidad de iniciar procesos políti­
nos loque no nos gusta, lo cual no de­ parte de una reflexión sobre el mal, cos a través de la facultad humanade
ja de ser un buen dilema del hombre como lo es el pensamiento de Max establecer metas comunes y expec­
¡lustrado. Weber, no revela una superioridad tativas dialógicas compartidas. La vio­
Pero lo que quería decir es que la evidente respecto de conceptos co­ lencia es radicalmente exterior al po­
ideader'perfil"político es muy suges­ mo la "inocencia del mal", al predicar der, definido por ser un tesoro per­
tiva; más difícil de lo imaginable. De­ que nadie eso nadiedebe ser inocen­ dido, un arcón secreto de libertades
cididamente, sería odioso tener un te y que una reflexión activa debe lle­ comunes que sólo las grandes revo­
perfil, en el sentido con que usan es­ gar al núcleo de todo problema políti­ luciones pueden resucitar por un mo­
te término los diagramadores de opi­ co, cual es el del surgimiento del bien
debería querer ser: chivos emisarios. dialogamos con los fundamentos que
Chivos emisariosson los hombresfu­ se nos escapan de nuestra propia ac­ I N D A G A C I O N E S
gaces y débiles que no pertenecen a ción, queda abolido. Y así, en un la­
las corrientes verdaderas del conflic­ mentable movimiento de esta dialéc­
to. Cuando se está por debajo de la tica a pistón, Menem queda converti­
objetividad de la historia y la concien­ do en el acto de supresión final del
cia permanece incompleta, atontada chivo emisario. Representa la socie­
o irreverente, precisamos encontrar
alguien que expíe por nosotros esas
fallas. Se llegaentonces a la cifrafun­
damental de este pensamiento cris­
tiano trascendentalista, implacable y
tiránico: todos- somos culpables. No
hay lugar para criaturas libres. Aquí,
unpensamientoquedeotro modose­
dad culpable. Es un producto necesa­
rio de la historia, el lifting final de la
verdad que no queríamos compren-
El pensamiento político de Firme­
nich es un intento impresionante para
confirmar fo peor de la sociedad ar­
gentina. Lo que queríamos decir en
Otra izquierda
ría liberador, y que consistiría en no esta vuelta que dimos por la señora
declarar tan sólo que el Mal son los Arendt hasta desembocaren las figu­ -------------------------------------------------------------------- Por Carlos A lta m ira n o --------------------------------------------------------------------
Otros, es interpretado como un rosa­ rasdramáticas de laconcienciade los
rio de necesidades: Necesidad del inmediatos añospasados, esque nun­
torturador, Necesidad del torturado, ca es fácil desprenderse de la nece­ dos del trotskismo, del marxismo-le­ tes de muchas de las señales de refe­
Necesidad del error pagado con la dadque hace culpable a laconciencia ninismo o de ese maoísmo que so­ renciatradicionales de la identidad de
muertedel político, Necesidad de una colectiva. Este pensamiento es muy brevive residualmente,todos ellosen­ izquierda.
historiaque reclama'sociológicamen­ atractivo. Tiene siglos y se ha elabo­ tregados al apoyo a Saddam Hussein N o dejemos en m anos d e los Sensibilidad crítica respecto del
te" que algunos contingentes huma­ rado en los numerosos confesiona-. en nombre del antimperialismo. Los poderosos los criterios de curso cada vez más conservador que
nos cubran la cuota estipulada de ob­ ríos de la humanidad. La verdadera otros núcleos allí apostados y que no adoptó la vida política y económica
jetividad, mensurable en muertesobli- valentía no es reconocerlo, sino de­ respondían al espíritu de beligeran­ definición d e lo real y lo argentina tras la restauración del es­
gatorias. Entonces, así como Cám- clarar que, a pesar de que existe, es cia, no ejercían ninguna gravitación. tado de derecho, no se reconoce, sin
pora ni siquierafue un chivo emisario, necesario que haya castigos y culpa­ Asi, en el reducido escenario de las posible, reservándonos pa ra
embargo, en el mensaje de la izquier­
porque su condición política estaba bles individuales. Así resuelve Bor- inmediaciones del Congreso, esatar­ nosotros el consuelo d e los da visible ni en la ideología compacta
forjada por una ilusión imposible de ges el tema de la inocencia del mal y de se podía comprobar, casi experi­ y dominadora que lo anima. De ella
ser alojada en la historia necesaria, del culpable individual, con una vi­ mentar, una realidad de alcance más grandes conjuros. podría decirse, también, que en estos
Firmenich expulsa cualquier inocen- brante prueba de que la lucidez pue­ general: la presencia de una sensibi­ añosha deambulado, sueltao anexa­
ciade la historia. Siempresupimosto­ de caminar de brazos con el agnosti­ al espacio vacante de otra izquierda lidad política, llamémosla así, virtual­ da a la opción liberal democrática del
do o llegamos tarde con nuestra ver­ cismo histórico. Firmenich, que no en la vida política nacional. Me refie­ mente disponible e inarticulada. radicalismo (esto es, el alfonsinismo),
dad. El drama histórico, que consiste quiso ser Cámpora, no puede com­ ro a la concentración convocada para Una sensibilidad política: prefiero a la promesade la redención populis­
en un esfuerzo supremo en el cual prenderlo.* expresar el rechazo a la participación este nombre para un área de fronte­ ta (esto es, el peronismo), o al Partido

CeDInCI
de la Argentina en el conflicto del Gol­ ras discontinuasy mezcladas, que no Intransigente. En fin, no creo que el
jóvenes", dice ahora. Ser joven es "problemaético". Podemosllamarpro­ fo decidida por el gobierno del doctor se ordena en torno aúna ideología (si términocentroizquierdasea pertinen­
una dificultad que hay que atravesar blema ético a la posibilidad de decir Menem. Quienes concurrieron no só­ damos a este término el sentido de un te para definir la identidad de esta
hasta reunirse, lo más pronto posible, constantemente: esto pudo no haber lo para reclamar el retorno de los bar­ discurso global y sistemático) e iden­
con la objetividad de las cosas. "Yo sidoasí. Lo otro es la sustitución de la cos argentinos que simbolizaban esa tificadle únicamente por un conjunto Al hablar de espacio vacante no
creo que hubo un cambio de circuns­ conciencia ética, no hístorioista, por la participación, sino también para ma­ de valores y aspiraciones referidos a quiero ser injusto con quienes, desde
tancias políticas internacionales del conciencia objetivante, autocrítica. nifestar su oposición a una guerra la vida pública. Algunos de esos valo­ distintos puntos del mapa político, se
año 72 y 73..." Esos cambios eran Así, para Firmenich, todo lo que pasó que se anunciabapavorosa (sobreto­ res provienen de latradición de las di­ esfuerzan por construir y ofrecer po­
tan determinantes para no cometer tiene sentido y el descuento de los do para los pueblos de la región), se versas familias históricas de la iz­ los de agregación de otra izquierda,
errores, que bastaría percibirlos para errores esautomático. Comotodoob- vieron obligados a deambular sorte­ quierda argentina; otros, de incorpo­ capaz de atraer y conferir gravitación
quedar protegido. Quien así no lo ha­ jetivista, obedece a los esquemas su- ando lasdiferentestiendasdeconsig- ración más reciente, entran en corto­ política a esa sensibilidad dispersa e
ce, o lo hace tardíamente, debe "auto- marísimos de la razón machacante. nas beligerantes montadas por los circuito con certidumbres y principios inarticulada. En realidad, simpatizo
criticarse". ¿Cuál es el deber de la Toda muerte es llamada por la histo­ partidos que, hoy por hoy, ocupan el deesamismatradicióntacontecimien- con algunas de esas tentativas, y, so­
conciencia que enlaza con la verdad ria. Un muerto es un “convocado”; un campo visible déla izquierda política. tos de las dos últimas décadas, den­ bre todo, con algunas de las figuras
luego que ésta pasó ante sus ojos? dato que confirma laverdad de un de­ Comoenotrasoportunidades, un sec­ tro de un horizonte que no fue sólo el que se hanpropuesto redefinir el cam­
La autocrítica, movimiento central de sempeño político. Pensamiento stali- tor flotante -que en ocasiones suele de la experiencia nacional, han sido po de las alternativas progresistas en
la conciencia que va marchando al nista, sin duda; lo que puede sañalar- ser el más numeroso- no hallaba su operadores activos de esa incorpora­ la Argentina. Tarea en absoluto sen­
paso de la verdad, pero detrásde ella. se no para poner rótulos, sino para lugar entre los exponentes organiza­ ción, al mismo tiempo que disolven- cilla, en un momento en que nada
La ingenuidad no es posible, pues confirmarque este pensamiento exis­
ella sólo consiste en no conocer el te, es una concavidad producida por
mecanismo pesado, la ruedaa crema- la historia contemporánea y no sólo
llerade la verdadobjetiva. Un error es por ella. "Creo que la Nación Argenti­
apenas una verdad a destiempo. Pa­ na toda, requiere, necesita, se debe a
ra conjurarlo, basta ajustar los relo­ si misma y le debe al mundo una au­
jes, ponerse en hora. tocrítica como nación”, dice Firme­
Si se le pregunta a Firmenich có­ nich a Jesús Quintero. ¿Quién toma
mo comenzó su vida política, la res­ esa autocrítica, en que confesionario
puesta será que eso"requiere unaex­ arrodillan las naciones la admisión
plicación más sociológica que perso­ colectiva de sus pecados? Sí, sin du­
nal". Es decir, no hay natalidad políti­ da, Firmenich llega aquí al verdadero
ca, porque no hay un momento previo punto de honor de este pensamiento.
de inocencia, de no-saber. Sólo hay La autocrítica ni siquiera es un acto
sociología, objetividad, individuosva­ de la conciencia individual. Debe ser
ciados en una realidad sustancial, ex­ de la "Nación Argentina". Sueño ce-
terior. Unpensamientoasí nuncapue- sarista del pensamiento católico de
de tolerar la hendija que hay entre lo derecha y del hegelianismo staliniza-
personal y lo histórico global. Al con­ do. No apto para "pobrecitos dirigen-
trario, considera que son almas frági­
les las que no aceptan esta pesadez No es desacertado, en estavisión
"sociológica" de la historia, los que de Firmenich, declarar luego que to­
podrían tratarlo, aun a él en caso de dos son chivos emisarios. No hay por
que hubiera muerto, “como un pobre- qué escandalizarse, porque en reali­
cito dirigente que fue llevado a la dad no está diciendo que está de
muerte". acuerdo con Videla, sino que hay un
Esta visión de las cosas no deja río subterráneo irreversible en su tur­
lugar a lo que, en la sociedad argén bulenta objetividad, que los reúne a
tina, luego, fue considerado como el los dos en lo que ninguno de ambos
manifestaciones de corrupción en la te de latradición. La acusación que la xado un sector de esa sensibilidad de mientos colectivos desde fines del si­ través de duras porfías ideológicas y rar el barco al mismo tiempo, con el
esfera pública no ha hecho más que persiguió, ladeque se había plegado izquierda que no encuentra su regis­ glo pasado. En muchos países la cla­ políticas, la crítica socialista a las in­ propósito de fijar, más que grandes
añadir otra fuente de malestar gene- al discurso alfonsinista -y de la que tro en la escena política. Pero el pro­ se obrera ingresó en la escena de la justicias históricas del capitalismo. metas, una agenda para el compro­
tanto provecho sacó Menem-, no te­ yecto mismo de una nueva opción se acción organizada, social y política­ Ninguna otra cultura política, por lo miso y la acción política.
nía otra verdad que la de señalar esa esterilizaría si terminara concebido mente, bajo la guía de partidos que demás, ha sido tan sensible y tan ac­
tentativa. Y si el candidato finalmente como la continuación por otros me­ tiva contraalgunas de las vergüenzas Dos palabras, por último, sobre
triunfante hubiera intentado, una vez glo a esa matriz. Y las diferentesfami­ de la civilización occidental, como el otra noción a la que se ha vuelto co­
dios -honrados, democráticos, com­ rriente apelar: lade utopía. Parece di­
llegado a la presidencia, permanecer bativos- de aquella matriz ideológi­ lias de la izquierda argentinatambién colonialismo, el racismo, el nazismo...
agenda común de reivindicaciones. fiel a algunas de las pocas y vagas —•x - " — 'asaeseconjuntodoctrina- Pero si la izquierda socialista no fícil desecharla si con ella sólo se
co-cultural definitivamente dislocada. quiere hacer referencia a la imagina­
Más aun: los tiempos de crisis suelen fórmulas que había enunciado pre­ Se tendría la ilusión de que remite a rio, través de codificaciones quiere estancarse, cultivando la me­
ser fértiles en aspirantes a encabezar viamente y evocaban el populismo iden la interpretación orto­ moria de los buenos viejos tiempos o ción que es necesaria para captar al­
suelo firme -el campo nacional y po­ ternativas y potencialidades de un
el descontento, que puede articularse justicialista, los resultados hubieran pular-, cuando la sociedad argentina doxa, sea asociada más o menos la­ aguardando que una próxima marea
parece más difícil que representarse bajo el signo de diferentes fórmulas sido igualmentecatastróficos. (Novoy xamente con el discurso nacional-po- de la historiaconfirme las previsiones proceso social, cuando ellas son to­
el futuro en otra forma que no sea el necesita ser pensada nuevamente y davía confusas o indiferenciadas, no
políticas e ideológicas, como lo prue­ a detenerme en la gestión del doctor sus conflictos menos que nunca se del pasado, es decir, si quiere mante­
bael éxitode variosfuncionarios déla Menem ni en la dirección que le dio a nerse viva y colaborar en la formula­ abordadas aún por la práctica política
prestan a la reducción de las catego­ y excluidas del campo de visibilidad
de la sociedad nacional-o bien, sim­ últimadictadura militar en más de una su conversión: todo es demasiado rías dualistas de la sociología popu­ Al repensar en las expectativas ción y el impulso de alternativas de­
plemente, en la forma de una deca­ provincia. Una izquierda que quiera ostensible y nada podría agregar a lo lista. que animaron históricamente a los mocráticas al reordenamiento con­ del discurso dominante. Desde este
dencia sin fin- y cuando, por ello mis­ obrar como un factor de innovación mucho que ya ha sido escrito, con es­ movimientosde orientación socialista servador en curso, debe innovar sus punto de vista se puede decir que to­
mo, más necesario se hace que una social y política progresista debe ser píritu más o menos analítico o de de­ A la necesidad de repensar y re­ ¿cómo apartar la reflexión del dato instrumentos de análisis y sus pers­ do movimiento que aspire a gravitar
nueva voluntad colectiva se organice algo más que un instrumento de re­ nuncia. Si algo quedaba por decir no formular la propia identidad en un len­ clamoroso de que nuestro presente pectivas políticas. Difícilmente pueda como factor de innovación social y
en torno a la esperanza de que otro cepción y transmisión pública de las desde fuera, sino desde dentro del no es el futuro anticipado por Marx y hacerlo si no se arriesga a interroga­ política, sobre todo cuando debe na­
curso es posible. guaje teórico y político nuevo no es­ vegar contra la corriente, está asisti­
reivindicaciones, listo para animarlas peronismo, lo han dicho Mario Wein- capan tampoco las tradiciones de la de que los sucesivos marxismos -en­ ciones de fondo, si sólo sigue la vía
con la promesa de que se pasará del feld y. sobre todo, Arturo Armada, en tre ellos, los que terminaron por des­ cautelosa de la adaptación y la acu­ do por cierto espíritu utópico.
izquierda socialista. Los socialistas
Pero, aun apreciando los esfuer­ peor al mejor de los mundos cuando el último número de la revista Uni­ no acaban de llegar al mundo: lo quie­ plazar al Tercer Mundo la tierra pro­ mulación, yuxtaponiendo simplemen­
zos que aquí y allá se llevan a cabo se acceda al poder. Ahora bien, no dos. Debe convenirse en que difícil­ te, sobre un núcleo doctrinario que Sin embargo, no es éste el único
ran o no, están asociados a un pasa­ metida-, no escaparon a las réplicas sentido en que suele emplearse la
con ese propósito ¿cómo ignorar el creo que ese algo más pueda extraer­ mente alguien escribiría en ninguna do cuyos lastres dejarán de ser un de una historia que seguía, siempre, permanece duro como el granito, pro­
hecho de que por ahora no son un se de las matrices ideológico-cultura- publicación no peronista, por temor a posiciones recién adquiridas (como apelación a la utopía en el últimotiem-
obstáculo sólo si son abiertamente otro curso? No creo que sea necesa­ po. Al reclamarla o proponerla se evo­
centro reconocible de iniciativa políti­ les del pasado. quemarse en el infiernode los gorilas, encarados, no sobrevolados. Tam­ rio enumerar e insistir en aconteci­ la democracia, el pluralismo o la par­
ca, que sus ¡deas han generado poco lo que Armada ha escrito no ya sobre ticipación). No creo que hayaotro ca­ ca también la referencia a un progra­
bién allí hay un patrimonio de valores mientos que nunca, como en las últi­ ma de cambio total o a un modelo glo­
o ningún debate al margen de los ya En los últimos años hemos asisti­ Menem, sino sobre el peronismo.) que necesitan liberarse de las ramas mas dos décadas, han revelado tan mino incluso parareconocer a Marx lo bal de sociedad alternativa que esti­

Otra
allegados, enfin, que no han alcanza­ do casi sin respiro a la disolución de secas de un imaginario de raíz deci­ abrumadoramente formas de opre­ que enseñó a pensar en relación al
do una visibilidad pública significativa muchos de los datos que, por déca­ mundo social: no es necesario enca­ mule y oriente la acción práctica. A la
monónica. sión social y política que no habían manera de una idea-fuerza, puede
aun en el ámbito que, hipotéticamen­ das, estuvieron inscriptos como reali­ nacido del modo capitalista de pro­ denarse a las ambiciones de la cien­
te, les es más afin? No creo que sea dades duras y normales del horizon­ cia marxista para hacerlo. importar menos su realizabilidad, que
Esos valores nacieron en oposi­ ducción, sino de la empresa revolu­ su capacidad de catalizar la voluntad
suficiente el pasodel tiempo para que te político. Para bien o para mal -es ción a la apropiación burguesa de las cionaria destinada a superarlo y rea­
las cosas lleguen a ese punto, aun­ y la energía colectivas. Ahora bien,

izquierda
decir, como quiera que se los juzgara ideas de libertad e igualdad, apropia­ lizar la sociedad libre de antagonis­ Para volver, entonces, al tema ¡ni­ una utopía que se enuncia como tal

CeDInCI
que también haya una cuestión de y explicara- se contaba con ellos o, al ción que hacía de la ciudadanía un mos. (Es verdad que hay creyentes dal: otra izquierda. Losproyectosdes­
tiempo. Porque, digámoslo aunque menos, se partía de su irrefutable fac- tinados a echarla a andar y conferirle -y me refiero a la que se invoca en
privilegio de clase ordenado en torno dispuestos a sostener que la empre­ discursos con pretensión política-,
sea obvio, más allá de los signos que ticidad. Uno de esos datos actual­ a los derechos de la propiedad. Lacrí­ sa sólo ha sufrido algunos desvíos, o visibilidad como opción política, acti­
favorecen la aparición de nuevos ejes mente en disolución es el de la fase vando movimientosy coaliciones con confiesa de antemano su debilidad.
tica y la lucha contra el sistemade de­ que no hemos conocido más que ver­ Porque una utopía no puede ser in­
de alineamiento político (esa sensibi­ nacional-popular del peronismo. La sigualdades que surgía entrelazado siones adulteradas -el estalinismo- vocación reformadora, no irán muy le­
lidad que no encuentra su lugar en el disgregación, en otras palabras, de lo de la doctrina, intacta en su verdad. jos si se configuran como bastiones, ventadacomotal a voluntad, amenos
con el capitalismo tomaron diversas que sólo se piense en una forma del
sistema de los partidos existentes, la que fue durante mucho tiempo la co­ vías doctrinarias y políticas, antes de La paz sea con ellos: nada los sor­ más flexibles y tolerantes, del tradi­
erosión que han sufrido las expectati­ munidad imaginaria de integración de cionalismo ideológico, más aptos pa­ ensueño intelectual: si existe y es ac­
que la obra de Marx -y sólo después prenderá realmente, los cursos más tiva social y políticamente, no es utó­
vas proyectadas en el radicalismo y sus diferentescomponentes sociales de su muerte- se convirtiera en el fo­ imprevistos hallarán siempre, y más o ra preservar que para refundar identi­
en el peronismo, los efectos de dislo­ y de las tendencias que, en su inte­ dades. Es decir, si no aparecen en pica para sus adherentes, no sólo se­
co de inspiración dominante del pen­ menos rápidamente, su lugar en la re­ ñala una meta deseable, sino tam­
cación de una crisis que no es sólo rior, han rivalizado por imprimirle un samiento socialista. Esa obra unía al presentación imperturbable de la mar­ confluencia con un nuevo espacio de
económica, sino también cultural y sentido político particular a esa cons­ ¡deas abierto a los desafíos del pre­ bién posible y aun imperativa. Anun­
análisis crítico del capitalismo dos cha objetiva de la historia. Enseguida ciar un proyecto político bajo el signo
moral, etc.), los proyectos que bus­ telación común, no por imaginaria me­ ideas que tendrían gravitación decisi­ podrán volver la mirada sobre los he­ sente, un presente cuya evolución,
can implantar una fuerza que active y nos eficaz. Aun en los días del gobier­ más allá de los estragos dramáticos de la utopía supone tener ya un pie, si
va en la expansión del marxismo co­ chos “buenos", es decir, los que recla­ no los dos, fuera del ámbito de creen­
organice los impulsos al cambio pro­ no de Alfonsín, la oposición que ejer­ El fin de la fase nacional-popular mo doctrina. Por un lado, la idea del ma y permite la integridad de la fe: que ha producido y produce en las
gresista de la sociedad argentina no ció el peronismo activó mucho de ese condiciones de vida de la mayoría de cia que la misma utopía debe produ­
no anuncia ni equivale al fin del pero­ "fin último", meta de las luchas del ¿acaso no hay mil signos de que la cir para movilizar la voluntad y la pa­
pueden contar, finalmente, sino con fondo de su identidad histórica, que nismo como fuerza política: el mundo presente en que coincidían una cau­ dominación social sigue reinando en los argentinos, no es nada sencillo de
la voluntady el acierto para extraer to­ no ha tenido una sino varias inflexio­ anticipar. Hablo de un espacio que sión políticas. La fuerza del “socialis­
nos ha ofrecido en este siglo ejem­ salidad histórica puramente objetiva las sociedades que se titulan demo­ mo científico" no fue ajena a que se
das las posibilidades de esos signos nes, desde la derecha a la izquierda, plosde mutaciónde movimientosque, y unafinalidad ético-política: la socie­ cráticas?) funcione más comoterreno común de
favorables. Ninguna ley del desarro­ todas ellas inscriptas en la tradición. búsqueda intelectual y política, aun­ declarara antiutópico, a que afirmara
tras la erosión de sus modalidades de dad reunificada, estructuralmente no extraer sus credenciales de validez
llo social garantiza desde el exterior identidad tradicional, hallaron nuevos conflictiva y sin categorías privilegia­ No creo que haya ningunasabidu­ que tenga múltiples focos, antes que del conocimientoobjetivo del proceso
—u objetivamente, como suele decir­ Al hablar de su disolución actual marcos para la integración de sus fi­ das por efecto de la supresión de la ría ni lucidez, sin embargo, en la pers­ como laboratorio de una nueva ideo­
se- la suerte de esa empresa. no me refiero exclusivamente a laver­ logía. Una ideología -a menos que histórico. (Cuando se habla de las
las. El tiempo dirá cómo sale el pero­ propiedad privada, y en laque el pro­ pectivadel creyente despechado que utopías de los añossetenta-conden-
sión que de ella dan el presidente Me- nismo-si sale y qué sale-de este pe­ blema del poder político se extingui­ sólo halla posible extraerde este siglo bajo este nombre sólo se indique un
En este sentido, no estoy seguro nem y su gestión. En realidad, basta­ conjunto compartido de valores y as­ sadas en la imagen de la Revolu­
ríodo crítico-disolutivo. Tampoco pre­ ría, tras un período revolucionario, unbalance unívocoy puramente som­ ción-, se suele olvidar, independien­
de que la imagen del espacio vacan­ ba no obstinarse en la fe a cualquier tendo afirmar que la identidad nacio­ con la extinción gradual del estado. brío, apto para la resignación, la me­ piraciones-, tiende a funcionar como
te no resulte algo traicionera. Puede precio para saber, desde mucho an­ un saber global acerca de la socie­ temente del juicio que setenga sobre
nal-popular vaya simplemente a ex­ Por el otro, la idea -íntimamente en­ lancolía y la adaptación cínica a la po­ ellas, que no eran utópicas para quie­
alimentar, en efecto, la idea de un si­ tes dejulio de 1989, que no sólo el ac­ tinguirse. Más verosímil es pensar tretejida con la primera-, del proleta­ lítica de los poderosos. Basta no ser dad, fijando sus estructuras mayores,
tio que ya está allí, aguardando un tual presidente, sino ninguno de los identificando su campo de fuerzas y nes se entregaron a su realización
que permanezca, cultivada comodis- riado, esdecir, la representación de la fanático para apreciar la gama de de­ efectiva.)
ocupante, cuando en realidad se tra­ candidatos verosímiles del peronis­ curso residual por núcleos políticos clase obrera como agente histórico rechos que los movimientos obreros asignando a cada actor un papel y un
ta de un ámbito que aún debe ser mo gobernaría -ni podría gobernar- colocados en posición subalterna, de la redencióngeneral, positivamen­ (entre ellos, los que asumieron la re­ destino. Ahora bien, en una fase co­ Se me ocurre que en momentos
efectivamente producido -y produci­ inspirado en el repertorio nacional- dentro o fuera del peronismo. No es te destinada a encarnar la promesa ferencia al fin último como horizonte mo la actual, en que las representa­ como el actual, en que el privatismo
do mediante ideas e iniciativas-, en populista. Ya la renovación cafierista improbable que sus exponentes in­ del fin último". de sus propias luchas y certidumbre ciones macrosocialesdelpasadoapa­ depredador y la definición burguesa
tanto hoy existe más bien como vir­ era una tentativa de salir suavemen­ cluso sean convocadosperiódicamen­ de la propia identidad), lograron ins­ recen cada vez más desconectadas del orden social parecen imponerse
tualidad. te y se les atribuya un lugar en la divi­ No pretendo reducir el pensamien­ cribir en las sociedades modernas, al­ de un proceso agresivo y despiadado como lo único real, más necesario
sión electoral del trabajo, cuando ha­ to de Marx a la clave de esas dos cer- terando reglas que provenían de la ló­ de desestructuración y erosión del te­ que nunca es, más bien, afirmar que
Es verdad que allí y cada vez más ya que pelear el voto con uñas y gica de la organización capitalista e jido económico, social y cultural cono­ la esperanza de que las cosas pue­
por todas partes está el campo social dientes. caso, más que uno de los profetas so­ introduciendo modificaciones en la cido, sería necesario ser menos am- den ser de otro modo no remite a un
de las demandas y de las luchas, en ciales en que fue pródigo el siglo XIX. distribución del poder social, incluso biciososy no apurargrandes síntesis. gran Fin, lejano e inverificable, sino a
primer lugar las de quienes a diario Sería impensable que una pro­ Pero su obra sería igualmente impen­ dentro de la fábrica. Más aun: si laso­ Las dificultades para ordenar un dis­ la política de este mundo, a un hori-
son expulsadosde laciudadaníaefec- puestacon vocación política, que bus­ sable sin ellas y más impensable aun ciedad contemporánea no es -al me­ curso a la vez global y unitario-que
tiva y de los derechos más elementa­ que el contacto y la reunión de los im­ sería el itinerario histórico del marxis- nos, no lo es en todas partes- el rei­ hoycontendría el riesgo de anularan- posibilidades por medio del análisis y
les por la acción de la crisis pulsos reformadores hoy desarticula­ no indisputado del individualismo po­ tes que de estimular la reflexión-pue­ la deliberación común. No dejemos
políticas que, una tras otra, dos o dispersos en la socieoad nacio­ bas contribuirían -conjugadas en un sesivo que hoy reaparece entre noso­ de tener su contrapartida en ese es­ en manos de los poderosos los crite­
biernos del radicalismo y del peronis­ nal, fuera indiferente a los efectos del discurso que entendía descifrar las tros como última palabra del progre­ pacio o terreno común de discusión y rios de definición de lo real y lo posi­
mo han empleado para intervenir so­ procesocrítico-disolutivo de lacomu­ tendencias objetivas de la sociedad so, ello se debe a la gravitación que de búsqueda. La tarea probablemen­ ble, reservándonos para nosotros el
bre ella. La proliferación inédita de las nidad populista. A ella ha estado ane- moderna- a inspirar grandes movi­ adquirió a lo largo de este siglo, y a te se parezca a la de navegar y repa- consuelo de los grandes conjuros.♦
¿CUANTO TENGAMOS LA~^

R G E L L I
D e la revolución a la ecología

El francotirador duros que siguieron a la contrarrevolución libertadora,


lideres históricos de aquella mítica Juventud Peronista que
transforma en otra cosa... En el pero­
nismo hubo un tiempo para la Fe y pa­
las represiones. Pasó más años en prisión que en ra creer en el cambio social. Que al­
n mapa vivo de tantos castigos, el último de los cua- gunos traten de revivir hoy ciertos ar­
o, fue el más duro. Jorge Rulli ya pasó los cincuen­ dores produce vergüenza ajena.
ta años (nació en 1938) y acumula unas cuantas contradicciones. Una de Cuando un ser vivo se pudre, se pu­ pesino. El miedo de muchos porque lia interna me involucraron pese a to­ desgarrado. Estoimplicavolveracreer
ellas es el contraste entre sus barbas blancas de patriarca y su rostro ju­ dre nomás, y eso no tiene arreglo. Y mos que un abuelo sea recuperado
esta propuesta nuestra implique vol­ do, y hasta me espantaron desde una en la posibilidad y en la necesidad de de un geriátrico para sus nietos o pa­
venil y vivaz, que conserva la frescura de aquella adolescencia transcu­ los que se quedaron pegados me te­ ver al pasado (que se encuentra tam­ perspectiva de lo personal. De modo ayudarse a sí mismo, en descreer del
rrida en Palermo y en los cien barrios porteños. Duro cuestionador de la moquese pudren también, y esotam­ ra su huerta, o un niño del asilo o de
poco tiene arreglo por más que dis­ bién en el editorial), pertenece a la que este presidente rasurado que ha Poder y a la vez desarrollar el propio la calle para una familia. Si consegui­
yectoria muy particular. Hace clase política, su ruptura con el peronismo es visceral, pero su actividad mismamentalidad mágicaque presu­ optado por los Alsogaray, los Neus- poder personal; consiste en echar
en tareas sociales están febril hoy como en sus épocas de militante. ¿Có­ curseen y tiren piedras. Yo prefiero mos que uno de lostantos míseros re­
treintaañosorganizabarevoluciones. pone que el pasado es malo y el futu­ tadt, los Born, los Alchurrón, etc., po­ raíces en la tierra para hacernos por cupere algo de la dignidad perdida y
Hoy organiza huertas en los balco­ mo conciliar su prédica transgresora con su carácter de funcionario? los malandras y los cínicos a los disi­ ro bueno. Esto parece una ecuación sibilitó un desarrollo de nuestro larva­ fin americanos y de ese modo reco­
Porque Rulli, sorprendentemente, ocupa un cargo oficial de rimbomban­ dentes tardíos y aprovechados. Al se transforme en un pobre que pueda
nes, para decirlo con un esquematis­ de góndola de supermercado, y con­ do estado de derecho sin duda me­ ger la vieja herencia para alentar ám­ luchar por sus derechos, habremos
mogrosero. ¿Cómo esposible seme­ te designación: coordinador general de la Unidad de Proyecto para el De­ menos son más humanos, en un sen­ siderando nuestras perspectivas co­ nos riesgoso para la seguridad perso­
sarrollo de la Agricultura Urbana y la Autosuficiencia Alimentarla, depen­ tido nefasto, porque son viscerales. bitos de comunicación y de fiesta, de cumplido con impecabilidad nuestra
jante periplo? mo país, bien podríamos asegurar nal. Sin embargo, muchos de los que trueque y de ayuda mutua. Sigo cre­ misión en esta hora.
Fue un largo camino y también diente de la Subsecretaría de Agricultura... Etapas decisivas en el perlplo De ellos, uno se puede precaver: los que todo pasado fue mejor... ¿Cuál lo acompañaron sin pruritos en el Me- yendo en la necesidad del cambio,
una prolongada búsqueda. Un largo de Rulli fueron las enseñanzas de Rodolfo Kusch, las experiencias reco­ otros son definitivamente tramposos. sería entonces el temor de volver nemóvil, reniegan hoy de él y de sus pero creo que lo deben protagonizar
gidas en Europa, la autocrítica profunda de la que dio cuenta, Junto a En- Usted no ignorará que personas que
esfuerzo de pensary repensar al país atrás? Por otra parte, ¿por qué se nos nuevos asociados. He concurrido a las gentes mismas, los últimos y des­ no lo estiman mucho lo critican por­
y a nosotros mismos. No se pueden var El Kadri, en el libro, escrito a cuatro manos, Diálogos en el exilio En susplanteos hay un fuerte conte­
nido libertario, ético, pero ¿no algún critica si (atarea de buscar soluciones diversos actos, incluidos los de la de abajo, desde lo hondo. Todo lo de­ que a su discurso radicalizado usted
hacer las mismas cosas cuando el (1984), su opción por la ecología, su traumático retorno. De estas búsque­ al desempleo es una tareadel gobier­ CGT Azopardo y los de CTERA, y en más es efímero y nos condujo a los
das polémicas da cuenta el diálogo que Rulli mantuvo con LA MIRADA. elemento conservador? agrega su carácter de funcionario de
país no es el mismo. Aquello por lo no y por supuesto no nuestra, que so­ todos los oradores afirmaban que es­ desvaríosy a las pesadillasy a los ho­ este denostado gobierno. ¿No cree
que luchábamos terminó para siem­ Según cómo se vea eso de con­
servar algo, porque en realidad el sis­ mos alternativos y nos movemos en taban allí reunidos los estafados, los rrores de estos últimos treinta y cinco quehaycontradicciones entre ambos
pre. Lo mataron las oligarquías y los atardecer y mientras el solteñíade ro­ Mientras no surjan esos hombres, yo la periferia del sistema? En las últi­ que votaron por la revolución produc­ años. Y puedo asegurar que invierto planos?
tema de ajuste neoliberal lo barre o lo

CeDInCI
militares y también, por qué no, los jo las aguas del Sangro, me sentí de­ pienso que conviene soslayar el cam­ mas elecciones lagentevotó masiva­ tiva. ¿No imaginaban que había en la la misma pasión en mi trabajo de hoy Sí, sin duda que las hay; opera­
desvarios del proceso revolucionario. finitivamente un hombre de América, po de la política por razones mínimas ha barrido todo o casi todo, y la trans­
nacionalización de la economía y de mente a favor de candidatos que ex­ plaza gente que no votó por tales co­ que en el de ayer... Porque el desafío mos en los límites, en lasfronteras de
En una situación terminal importa só­ casi un indio. Allí nació el proyecto de sanidad. Allí se extravían todavía presaban políticas neoliberales y se sas?, ¿o acaso pretendían legitimar es el mismo: desarrollar el valor de la estructura de un estado que se re­
lo la gente que se aterra a la tierra y la que hoy desarrollo: volver a la tierra, muchas buenas intenciones y como la cultura hace que seamos mucho
más colonia del Imperio hoy que la dio de ese modo la espalda a toda una su propia torpeza? Pareciera que los hacer un mundo nuevo. pliega más cada día y que resigna
cultura. Los otros, con la banderita descontaminarla y repoblarla. en una alquimia infernal muchos se historiada luchas sociales. Nosotros, que se equivocaron ayer tienen hoy muchas cosas que nosotros siempre
confederada en la campera de jean, transforman en sus contrarios. De allí Puerto Rico de los años '50 por la que
activábamos entonces en las calles ahora, les enseñamos apenas a so­ derecho a voz y los que acertaron ¿Cómo se pasa de los sistemas gto- consideramos que le son inherentes.
se disponen a emigrar en cuanto sea Desde laperspectiva desupropio tra­ ese caleidoscopio de historias e ideo­ brevivir en lacrisis a los que son capa­ ayer deben ser condenados o mar­ balizantes, totales, a lo pequeño, a lo Y en esos límites nos hemos consti­
posible. Vivimos un naufragio y en bajo socialpero también desde su ex­ logías que conforman un cambalache de Buenos Aires. Yo pretendo sí, re­
cuperar elementosculturales, porque ces de ponerse de pie y de luchar en ginados hoy como lo fueron ayer. Lo autónomo? tuido a lo largo de los últimos años co­
medio de la catástrofe les enseño a periencia de veterano militantey acti- discepoliano donde todo se desacra- esa dimensión de lo cotidiano donde leo en un reciente número de Línea Se pasa por un acto de extrema mo un equipo sumamente autónomo
nadar a los que quieren sobrevivir. vistaydesdesusactuales ideas, ¿qué liza y tiene precio. Es en buena medi­ creo que lo que alguna vez llamamos
Revolución y hoy denominaría ape­ se decide lo por venir. donde Blas Alberti dice que el 14 de compasióny también deextremacom­ queeconómicamentedependedefon­
Son tantos que no puedo pensar en le sugiere hoy la palabra política? da la herencia del proceso militar y el nas como un horizonte del cambio mayo marcó una frontera entre el prensión de nuestros propios límites. dos provinciales. El proyecto nos per­
ayudar a los otros ni me dan las fuer­ ¿Para qué sirve? genocidio. Los que recomenzaron a Pero, ¿la gente no votó...? ¿Acaso pueblo y el antipueblo. Este, me te­ Así se pasa del nivel global a descu­ tenece, lo hemos gestado a lo largo
zas, ni puedo dejar de sentirme un po­ ¿Para qué sirve? Para muy poco. hacer política en los '80para“abrir es­ global, se encuentra, para nosotros,
en el pasado, aunque nos lo propon­ no se habría traicionado el mandato? mo, es un pensamiento extendido. brir que paracambiar el mundo debe­ del tiemposumando la experienciade
co ajeno a la suerte del barco que se Satisface la necesidad de juego de pacios democráticos' se aprovecha­ No, yo no creo en traiciones. Es Muchos fuimos excluidos de la con­ mos primero cambiar nosotros. Lo cada uno de sus integrantes, expe­
hunde. Pienso más en lo que pueden una parte de los sectores medios, ca­ ron de la desaparición de toda una gamos en lo por venir. Quiero decir
que el proceso de cambiosen nuestra posible que la ideadatraición sea una fianza de nuestros amigos cuando, pequeño puede ser definitivamente riencias realizadas en diferentes paí­
hacer de sí aquellos que sobrevivan. da vez menos. Y da de comer a mu­ generación de militantes y activistas. consigna movilizadora pero en ver­ ganados por el entusiasmo de los hermoso y paradigmático y sólo en­ ses de Europa y de América Latina y
chos marginalizados, cada vez más. Seaprovecharon,también, de un pue­ América es en verdad un sumergirse
y un redescubrirse en sí mismo. Por dad no es sino una estupidez dema­ más, decidieron sumarse a la fiesta tonces se multiplicarán en otros y en en diferentes ámbitos provinciales,
¿En qué medida tuvo que ver en su Es hoy el campo de lo demoníaco en­ blo ausente afectado por oscuros sen­ gógica, y unos pretendidos dirigentes aquella del retorno del peronismo y cada unocon su propio sello, y de ese convillerosy con productores rurales,
transformación la experiencia euro­ mascarado donde los buenos fraca­ timientos de culpa y de derrota. Y eso me defino indianista. El concepto
de historia en cuanto imagen lineal no deberían persistir en explicar los aportar su propio barniz progresista. modo ayudará a que el desenvolvi­ en cooperativas agrícolas y en ba­
pea, su exilio en España, Italia, y es­ san porque no son capaces de seguir bueno, esas cosas se pagan. acontecimientos en base a sucesivas Supongo que mi mirada los incomo­ miento se produzca. En esto trabaja­ rrios urbanos y semiurbanos, hasta
pecialmente en Estocolmo? la espiral de apuestas del todovale, ni semejante a la de un ferrocarril, con
su vanguardia adelante que conquis­ traiciones. La verdad es que nadie daba. Ahoraque están devuelta, sien­ mos y no es nada fácil, porque nos descubrir que los males son siempre
Mi experiencia europea me ayu­ tampoco se han transformado toda­ ¿ Y la palabra militancia ? traiciona sino a las expectativas que to mucha pena porque pecaron de formaron para otra cosa, y porque en los mismos: el desarraigo y la des­
dó, definitivamente, a reconocerme, vía en guerreros impecablescapaces La militanciano exista. Hay sí ope­ ta el futuro y sus furgones de cola
atrás, que van a la rastra del proceso nosotros en él depositamos, y ése es candidez tardía y les resulta difícil este camino de redescubrir lo peque­ trucción de la autoestima. Más alláde
porquepude verme desde el otro lado de desbaratar ese espacio de lo ne- radores profesionales y además hay de cambios, nos es absolutamente nuestro problema y no el problema perdonarse. ño es preciso aprender a borrar la im­ los límites que nos posibilita el traba­
del espejo. Recuerdo cuandocon Hu­ su conducta, con su volun- bienintencionados contumaces. Pero ajeno. Hoy, vivimos el tiempo del Pa- del otro. Yo quisiera remontarme a la portancia personal, para aceptar la jar desde el estado, operamos como
go Chumbita fuimos a ver en Madrid pensamiento iluminado. la candidez tiene un limite y luego se chacuti anunciado por los amautas, interna del '87, cuando el pobrerío Siguiendo con la búsqueda de ge­ importancia del gesto y el compromi­ una organización no gubernamental,
la ópera Evita. El estaba indignado y donde el mundo conocido se vuelve conspiró contra el cafierismo hasta nealogías, en lo que usteddicese po­ so en la acción como si fuera ese denominada “Reconciliarnos con la
yo profundamente ensimismado. Aca- cabeza abajo. Llegará sin embargo el •donde Federalismo y Liberación ca­ dría rastrear, además de lo libertario nuestro último día. También en esto Tierra". De ese modo podemos com­
babade llegar a Europay se me había tiempode un nuevoorden y se impon­ recía de punteros y hasta de unida­ tan presente en lajuventudperonista está presente la experiencia con Ro­ prometernos intensamente en el tra­
dado la oportunidad de experimentar drá una nueva conciencia ambiental des básicas. La gente que en esos de la resistencia, las ideas de Kusch, dolfo Kusch, con el maestro y el ami­ bajo social. Sin embargo, la estruc­
cómo nos ven desde la óptica de lo que está hoy apenas en esbozo. Por días fue llevada a votar en los autos elbudismoy unapizca de las tradicio­ go. Hemos desarrollado un modo tura del estado sigue siendo muy im­
colonial. Y sentía la íntima alegría del eso, también, me defino ecologista. de los renovadores y votó por Me- nes antitabáquicas y antialcohólicas transmisibledereaprenderelestaren portante para legitimar formas de au­
Fanón de mi juventud y de los desve­ Hace poco, el editorial de un diario nem, demostró una decisión y una de los primeros socialistas. ¿Está de América, un modo de reconciliarnos todefensa culturales que están pre­
los insurreccionales: el enfrentamien­ importante me castigó duro porque, voluntad muy fuertes. Lejos de mí es­ acuerdo? con la tierra, una manera de hallar lo sentes en los barrios más pobres. Es
to al colonialismo conlleva inevitable­ según ellos, lagente quierepleno em­ tá pensar que si hubiesen hecho lo Hoy puedo recuperar mis más pu­ fundante que se nos escapaba. En el casode las huertas vergonzanteso
mente la muerte del colono y el rena­ pleo asalariado industrial y no comer contrario les habría ido mucho mejor, ros sentimientos libertariosde la ado­ muchos sentidos nuestro trabajo es los conocimientos de medicina popu­
cer como hombre descolonizado. gracias a que produzca alimentos en pero registro un esfuerzo digno tal lescencia, porque he concluido que de raíz kuschiana, un trabajo de bús­ lar ocultos o inconfesos. No significa
El final de esa aventuraeuropea lo las terrazas de las casas. El argu­ vez de mejor causa, pues el candida­ nuestra idea de revolución era unili- queda de su América Profunda. Y en lo mismo, evidentemente, legitimar­
hice seis años después al llegar a la mento es tramposo porque haciendo to de entonces se paseaba rodeado neal, ajenaal espíritu americano e im­ ese camino no importan los frutos de los desde la Subsecretaría de Agri­
aldea italiana y reconstruir la antigua una huerta para saciar el hambre o de los Rousselot, Brito Lima, Ottala- plicaba necesariamente el asalto al la acción, no importan los resultados cultura que desde una organización
historia de mi familia. Durante unos mejorar la calidad de vida no ahuyen­ gano, etc., y no ocultaba sus vincula­ Poder y la lucha armada. Son hoy, to­ obtenidos, importa sí lo que haga­ ecologista como es la nuestra. Y
meses fui allí un italiano más y tal vez tamos la posibilidaddeque hayaquie- ciones con los carapintadas. Yo ob­ das ellas, ideas de desván. Organizo mos, el compromiso, el trabajo, la pa­ muchos de los éxitos que hemos ob­
con tantos o mayores ancestros que nes industrialicen al país y procuren servaba ese proceso desde afuera, huertas y más que huertas, espacios sión, la acción misma. Y si cada día tenido en las zonas periféricas, entre
el común para sentirme hijo de esa empleo. En otros lugares se combi­ puesdesdeel gobiernode Isabel con­ de reciprocidad y de solidaridad, por­ procuramos uno más que reaprenda ellos que una de las partícipes del ta­
tierra. No traicioné ese sentimiento, nan armoniosamente un modo de tra­ sideré que era una forma de crimen que trabajo con lo humano, recons­ a dialogar con sus plantas o que rea­ ller de plantas medicinales se asu­
pero andando en sus senderos bajo fabril moderno con la persisten­ moral continuar siendo peronista, pe­ truyendo la autoestima de las gentes prenda a amasar el pan en la casa o miera como curadora en el barrio en
gados de la historia de los míos, cia de formas de autoconsumo cam- ro el tema y los personajes de aque- y reorganizando el tejido social hoy a fabricarse el jabón, o si consegui­ que vive, se deben aestasdos manos
BUSCANDO RESPUESTAS to del lugary del tiempo en que se de­
sarrollan, y surgen espontánea e ines­
¿Usted siente la necesidad de inser­ peradamente: llegado cierto punto la
tar su trabajo social, sus proyectos despolitización implica unacargasub-
concretos, en algún tipo de marcopo­ jetiva que se hace insoportable y que
lítico?

El suplicio
La gente necesita que algún sec­ se traduce en conflictos que el poder
no puede ni reprimir ni asumir.
tor del espectro político sea capaz de En un país en el que mueren alre­
expresar losmovimientossocialesque dedor de cincuenta niños de menos
surgen desde la base. El peligro es de cinco años por día. en la mayor
que sea laderecha quien canalice es­ parte de loscasos por causas que po­
ta nueva efervescencia. Yo vivo a dia­ drían haberse evitado, ¿quién puede
rio esta angustia porque trabajo en reestablecer la confianza, es decir,
zonas marginales donde los que no una relación esperanzada entre el

de Tántalo
optaron por las sectas religiosas lo hi­ presente y el futuro? A Cavallo le pre­
cieron por la Ucedé o por Rico, o son ocupa el futuro pero desde un ángulo
delincuentes. Nadame recuerdaaquel muy particular. En realidad, la cues­
pueblo con el que trabajábamos en tión que propone resolver su política
las décadas de los '50 y los '60. Esta no es la del futuro, sino la del equili­
es unagente inerme, enfermada iner- brio. Las medidasquegiran alrededor
midad, muchas veces prostituida, de la convertibilidad intentan asegu­
otras veces sin historia ni identidad, rar un equilibrio fiscal absoluto con
generalmente discapacitada por las Por Ariel Colombo------------------------------------------- una estrategia de autoatamiento por
políticas asistencialistas y por el lava­ ley. La cuestión radica en que hay
do de cerebro de las sectas. Taba­ una inconsistencia temporal entre la

L
quismo, alcoholismo, violencia fami­ no sea una realidad o, al menos, no estabilidad y la reforma del estado,
liar para vengar que sea la mujer la atraviese una etapa de mayor madu­ dado que las políticas antiinflaciona­
que a través del trabajo doméstico ración y reconocimiento público, te­
acerque un peso a lacasa. Pero siem­ Al centroizquierda lo niendo en cuenta que la reorientación
rias destinadas a generar confianza
en los inversores son socavadas por
pre hay entre ellos algunos con la mo­ frena el mismo de la gestión alfonsinista data de 1987 la reducción del gasto e inversión pú­
ral más entera, con capacidad de y que el perfilamiento presidencial de blicos, las privatizaciones y la desre­
ayudarse a sí mismos. Sobre ellos problema que se ha Menem se remonta a 1988? ¿No de­ gulación, reformas que incrementan
nos apoyamos. En otras épocas hu­ propuesto resolver: la bería a estas alturas de los aconteci­ el déficit público potencial o futuro (el
bieran sido los líderes naturales, aho­ mientos mostrar una mayor densidad cual está representado por todas las
ra suelen ser personas aisladas, gol­ falta de confianza de la ideológica y operatividad política? demandas y funciones que el estado
peadas por amargas experiencias,
sociedad en las dejade satisfacer o desempeñar). En

CeDInCI
que ocultan lo que saben y tratan de as iniciativas de cen- Nos descarto que en ese espacio
troizquiérda apuestan a un espacio un marco en el que los grupos econó­
pasarinadvertidasy minimizar susa- prácticas políticas. social que potencialmente tendría al micos locales y los acreedores exter­
social que consideran vacante o sub­ centroizquierda como principal inter­
representado políticamente. Derivan­ nos no sólo se resisten a financiar el
Si hubiera un modo de darle a es­ locutor y vocero, los encargados de tránsito entre el corto plazo y un futu­
tos hombres una proyección hacia la do de esta constatación una hipótesis darle encarnadura, delimitando sus
de trabajo que consiste en articularse ro hipotético en el cual gracias a las
política sería positivo, pero me inte­ fronteras y abriendo las instancias reformas tendríamos los beneficios
rrogo si acaso permitirían los opera­ en torno a una opción electoral en lo para el debate y la elaboración de
inmediato pero en la perspectiva de de un capitalismo competitivo y autó­
dores políticos abrir un espacio para acuerdos, seorienten másporelcálcu- nomodel estado, sino que además se
esta realidad confusa y caótica. Ha­ una estructura partidaria de nuevo ti­ lo respecto de cómo quedarán ubica­
po que exprese un proceso de sínte­ disputan los excedentes sociales y
ce mucho que me planteo concertar dos dentro de una alianza, que por los despojos del estado, Cavallodeci­
entendimientos o abrir espacios de sis entre los múltiples reagrupamien- una racionalidad que les indique que
tos y tradiciones. dió adoptar una posición de equidis­
mutua comprensión entre lo alternati­ los costos de no cooperar decidida y tancia respecto de tales sectores y
vo que se desarrollacasi fueradel sis- Alegan que las condiciones para abiertamente son mayores que los de
construir una alternativa a los parti­ despejar cualquier duda en relación
temay losquedan su batalla adentro, mantenerse aislados o demorando al déficit público y a la emisión mone­
algo así como un entendimiento entre dos tradicionalmente mayoritarios es­ especulativamente la materialización
tarían dadas: la opción gubernamen­ taria. Para ello se anticipó a las debi­
extraparlamentarios e izquierda en del consenso. lidades de la voluntad estatal frente a
versión europea. Pero no he tenido tal por una modernización conserva­ Sin embargo, esto es válido sólo
dora y excluyente, la distorsión auto­ las presiones sociales y privadas de
mayor éxito. Me parece que ocurre lo hasta cierto punto. No existe una pre­ manera que cualquier defección en
mismo que en el 71 cuando tratába­ ritaria de las prácticas institucionales, sión o activación popular que presio­
la crisis de la política y el déficit de re­ tal sentido sea objetivamente imposi­
mos de forjar una complementación ne en una misma dirección, y en con­ ble en el futuro. Agotadas las prome­
revolucionaria entre los niveles de presentación que registra el sistema secuencia ninguno de los protagonis­ sas de estabilizar la estabilidad, el mi­
masas de la JP con las formaciones de partidos, la disolución de las viejas tas puede estimar cuáles son efecti­
identidades, el salvajismo del ajuste nistro cedió otro pedazo de lasobera-
especiales. No bien descubrieron es­ vamente sus intereses, y si bien están nía (en este caso soberanía moneta­
tas últimas que podían tener sus pro­ neoliberal y la destrucción de las con­ dispuestos a aceptar la apuesta igno­
diciones de vida, la pérdida de auto­ ria) a cambio de impedir de antemano
pias JPs domesticadas y a las órde­ ran las chances asociadas a sus es­ cualquierfuga inflacionaria haciaade­
nes. nos pusieron a nosotros sus ca­ nomía y capacidad de regulación es­ trategias ni pueden controlar su racio­
tatal respecto de los poderes de fac- lante. Lo hizo con el apoyo directo o
ñones y desarrollaron su liderazgo nalidad. Es decir, al no haber un con­ indirectodel partido único del ajuste e
político desde la boca de sus fusiles. senso previo ni una movilización de ilusionó a una parte de la sociedad.
Por supuesto que así terminó todo. Ni Aunque existen factores igualmen­ masas que otorgue un marco de refe­ Pero el mercado es la antítesis del
Firmenich, ni Vaca Narvaja ni Perdía, te conocidos que juegan en contra es rencia común, el proceso de articula­
autoevidenteque la situación objetiva futuro. Si en reemplazo del estado las
son otros. Son los mismos de siem­ ción carece de calculabilidad, y nin­ que decidirán serán en adelante las
pre. También en estecaso me parece del país ofrece posibilidades estraté­ gún jugador puede saber por antici­
gicas para viabilizar un experimento leyes impersonales y automáticas del
absurdo interpretar todo a través de la pado cuáles son sus intereses. El mercado ¿para qué hace falta la polí­
óptica de la traición. Y como el pero­ que una en un mismo proyecto lasde-
mandas de consolidación democráti­ egoísmo es, aquí, irracional. tica como producción de sentido y
nismo ha pasado de ser el hecho mal­ Me inclino a preguntarme, más elaboración colectivadel tiempo? Ca­
dito de Cooke a ser meramente una ca con las de transformación social.
maldición para el país, me temo que Dependiendo mucho, entonces, de la bien, si el centroizquierda, como Tán­ vallo no responde a lademandade fu­
aquella historia se repita aunque en voluntad y calidad de los protagonis­ talo, no estará condenado a enfren­ turo, simplemente la liquida en di­
tas, y de la ubicuidad y habilidad que tarse a problemas que no puede solu­ rección a una sociedad amoral en la
pequeño, en laversión paupérrima de puedan demostrar en una paciente
lo que es hoy el país. Por ello conside­ cionar ni tampoco dejar de plantear­ que el consenso político sería tan in­
tarea de articulación indudablemente se, a aceptar que la situación está necesario como imposible. La libera-
ro como muy importante priorizar en compleja.
estos diálogos, y en este abrirse a madura pero más allá de su alcance, lización de los mercados-que ningún
Ahora bien, aceptando que en tér­ que sus metas son ineludibles pero análisis ha podido demostrar como
nuevos espacios sociales y cultura­ minos de un balance general las con­
les, a otras experiencias políticas, in­ también inasibles. Como no es la pri­ más eficiente en la asignación de re­
diciones son favorables para reiniciar mera vez que ocurre en los últimos cursos que el estado- es en Argenti­
cluso a otras identidades que renue­ una construcción de centroizquierda
ven el aire viciado que se nos obliga a cuarenta años, vale la pena interro­ na una manifestación másde la hiper­
o de izquierda democrática, ¿cómo garseporqué este sector progresista, trofia de la política que de un consen-
respirar desde hace tanto tiempo. explicar el hecho de que la misma ya flanqueado por el reduccionismo cia­ so previo por el cual se haya declara-
zo está delegada a los representan­
da al postulado neoliberal acerca de
que la discrecionalidad política esta­
tes del pueblo que. en base a un man­
dato independiente, son losque inter­
surgimiento de los partidos de masas
y el montaje de los estados keynesia-
nos de bienestar.
NI LEALES NI REBELDES
blece unjuego nocooperativo entre el pretan de acuerdo al interés general Pero aun cuando estuvieran pre­
estadoy el sector privado e impide un los interesesparticulares, y remitenal sentes todas las condiciones para
contrato permanente, por ejemplo, en futuro la solución de las contradiccio­ viabilizar esa reforma instítucionai y
relación a la tasa de crecimiento déla nes que puedan existir entre unos y políticade lademocracia, laparticipa-
cantidad de dinero. Para los neolibe­ otros. Pero, ¿qué pasa cuando los ti­ ción no es una meta que pueda por sí
rales el estado es unafuenteconstan­ tulares de la representación y esa misma movilizar a nadie, sino una
te de ineficiencia, y lasóla posibilidad misma función han caído en el des­ consecuencia indirecta o un subpro­
de que pueda intervenir ya genera crédito? ducto de la movilización por otros ob­
ineficiencia. El mercado, y no la de­ El centroizquierda esboza una par­ jetivos. De manera que es insoslaya­
mocracia, es la que asigna y distribu­ te de la respuesta cuando alienta la ble la otra parte de la respuesta, las
ye óptimamente los recursos. profundizaoión de la democracia co­ ¡deas que pueden darle vida a la pa- -
mo requisito de su estabilidad. Al pro­ . ticipación. Las luchas populares con­ ---------------------------------------------------------Por Carlos Alberto Brocato
tra el empobrecimiento, contralapres-
directa en la adopción, gestión y con- tación de servicios públicos costosos ■ “ La producción de armamento y el ejército son el modelo de todo des­ que en la última chirinada la sociedad
En un contexto en el que el merca­ y deficientes, contra el deterioro de perdicio de materias primas y de la fuerza de trabajo humana, de toda bru­
do deroga al futuro y el pasado ya no rios a los usuales de representación-, se cubriera de mensajes solemniza-
las condiciones de trabajo, contra la talidad hacia la naturaleza y el hombro, aun cuando no se los haga esta­ dores y disuasivos sobre la "inque­
gobierna a las identidades políticas, pérdida de los ingresos y el desem­ llar, se los abrase, defolie o tirotee. Pero los bloques están de acuerdo en Sólo la complicidad, de brantable decisión de las Fuerzas Ar-
la libertad entendida como autono­
mía personal que opera temporal­
mente tampoco tiene porvenir. Sin
patrones de reconocimiento anticipa­
dos por los cuales pueda responder­
do" y de que la voluntad popular no
será burlada. Se trata de un recurso
paraofrecer confianza, comunicando
El suplicio pleo, son absolutamente legítimas e
indispensables. Pero en un encuadre
neoliberal de ajuste salvaje y de re­
conversión excluyeme no indican un
que el armamento es uno de los medios de subsistencia más Importan-

guando vemosque el estado gasta mucho másde lo que debería, uno


la clase política y la
aquiescencia de la
sociedad civil explican
madasde defender el sistema demo­
crático y la Constitución". Emblemas
y liturgias. Ningún cuerpo ni función
del estado-nación se inviste de tanto
la promesade un comportamientoco­ rumbo y carecen mas bien acciones se pregunta, por ejemplo, por qué los países latinoamericanos necesitan ritual, de tanta tediosa simbología.
se a la pregunta qué es uno para sí
mismo y para los otros, no hay auto­
nomía posible. Las personas no pue­
den saber cuáles son sus necesida­
herente y garantizando que el pueblo
pueda por sí mismo anticipar un futu­
ro aunque no sea el mismo o idéntico
para todos. La institucionalización de
de Tántalo de retaguardia destinadas a retrasar
lo inevitable. No han asimilado aún a
la reconversión productiva y a la re­
forma estatal como demandas pro­
ejércitos, si no hay enemigos..."2
publicana quesignifica la existencia y
funcionamiento de tribunales milita­
la extensión del
pensamiento militarista.
Más aún, se comprende, cuando se
trata del sofocamientode un devaneo
decuartelqueocasionamuertes. Aun­
que se acompañe de signos de estu­
des de largo plazo salvo si compar­ instancias de democracia directa, ta­ pias a las que hay dar, sin embargo, res en tiempos de paz.
ten, es decir, neutralizan, la incerti­ les como la consulta popular directa pidez y astracanada, que es necesa­
otro contenido y significadoconcillan­ Cuando la Fuerza Aérea cedió en rio disimular para no deslucir el pate­
dumbre a través de una identificación en el proceso de formación y sanción do el imperativo de la modernización concesión el servicio de rampa y el
colectiva según la cual se perciben de las leyes, hasta puede desplazar tismo de la gran escena bélica (es­
con los valores de la modernidad. free shop del aeropuerto de Ezeiza, pectáculo mass mediático) ni ensom­
como idénticos en el tiempo y, a la el eje gravitacional de la regulación Me parece que justamente en es­ hubo señalamientos públicos punti­
vez, detectan la validez o legitimidad de las relaciones sociales hacia el sis­ brecer el mito de la subordinación y
te punto es donde se evidencia el dé­ llosos sobre la falta de antecedentes lealtad de los represores. El mito que
de sus intereses inmediatos. tema político, reservando para el es­ ficit del centroizquierda. Y también de las compañías que se presentaron se ajó en los tres fragotes anteriores.

CeDInCI
Si no sé si mis necesidades cam­ tado, el mercado, los acuerdos multi- creo, aunque uno no es quien para como licenciatarias. Nadie impugnó,
biarán y, de acuerdo a quéy en qué di- Llegó el momento, pues, de acicalar­
sectoriales, la integración regional, hacertamaña recomendación, que la empero, la excrecencia feudocorpo- lo. Los que ayer ultimaron a compa­
rección, no puedo establecer los cos­ funciones de regulación subsidiarias otra parte de la respuesta hay que rativa por la cual un espacio y un ser­
tos que puedoasumir ahora paraobte­ y subordinadas. En este sentido, in­ triotas en situación de prisioneros in­
buscarla en los impactos y condicio­ vicio civiles eran "cedidos" por milita­ defensos hoy se calzan impávidos,
ner beneficios en el futuro, y vicever­ novaciones de tal envergadura pro­ nes que generará el mismo proceso res. ¿Por qué, contra toda lógica de­
sa. Esta dificultad en una democracia ducirían efectos sólocomparables con ríos dieron cuenta de la sentencia del para enterrar con pompa al compañe­
de modernización y sus patrones de Consejo Supremo de las Fuerzas Ar­ mocrática y uso mundial, los aero­ ro caído, el uniforme rojiazul que par­
liberal se resuelve delegando. La de­ los que en su momento provocaron la eficiencia, productividady competen­ puertos y la aviación civil están en la
finición de los intereses de largo pla­ extensión del sufragio universal, el madas contra los carapintadas, me­ ticipó en la revolución de nuestrosan­
cia. Si este proceso se caracterizapor nudearon las críticas democráticas a Argentinabajotutelacastrense?¿Por tepasados. Mito y utilería. Es el cruce
liberar fuerzas de trabajo y expulsar­ los fundamentos. En éstos se exalta­ qué no se hizo público que la comi­ paródico de la historia de hace dos si­
las hacia el desempleo y la miseria, e ba el genocidio pasado, se hacían sión que trabajó en el Ministerio de glos con la crónica de hace una dé-
intensificar el uso del capital y de tec­ consideraciones políticas sobre elgo- Defensaentre 1984 y 1986 abandonó
nologías, ¿por qué no articular las lu­ bierno anterior y el actual, y se reivin­ el intento de que lacorporación devol­ N¡ militares "leales" a la Constitu­
chas democráticas de igualdad a las dicaba la acción de los "amotinados" viera el control y usufructo (catorce ción ni “subordinados" al poder políti­
demandas (¿socialistas?) poruña ma­ del 3 de diciembre en lo que concier­ millonesde dólares anualespor tasas co. Falta mucho para que los haya, y
yor disponibilidad personal de tiem­ ne a "defender el honor de las Fuer­ aéreas) de los aeropuertos? sólo podrá haberlos si se lleva a cabo
po?Si la modernización puede ser re­ zas Armadas y su prestigio mancilla­ Los ejemplos de este tipo podrían la reestructuración de la institución, a
orientada por un estado activo en la do". Ningún demócrata, sin embargo, multiplicarse sin límite. la que se renunció antes de iniciarla?
regulación impositiva de la tasa de cuestionó públicamente la afrenta re­ Cómo sorprenderse entonces de Sólose puede obtener, bajo estascir-
ganancia y de inversión según crite­
rios de justicia distributiva, ¿por qué
no pensarque los beneficios entérmi­
nos de cantidad y calidad de bienes
pueden ser la condición necesaria
para independizar progresivamente
las condiciones de vida y el tiempo li­
bre del trabajo? ¿Acaso no está pre­
sente en la sociedad el reclamo por
una mayor autonomía individual res­
pecto del estado y del mercado y, a la
vez, comunicándose invisiblemente
con las demandas de futuro, de certe­
zas, de sentido? ¿Es impensable una
sociedad en la que gracias aun fuer­
te incremento en la productividad pue­
da retrasarse la entrada al mercado
laboral y adelantar la salida, lograr
que trabajen todos pero menos, y li­
berar un mayor tiempo personal para
un ejercicio más pleno de la libertad?
Independientemente de que el
centroizquierda se haga cargo o no
de estos interrogantes, deberá identi­
ficar las ideas que reintroduzcan el fu­
turo como factor de certidumbre y es­
peranza, de lo contrario su autocon-
fianza será una humareda en un día
radiante y Tántalo nos seguirá alu­
diendo desde su paradojal destino.*
cunstancias, la liturgia de la subordi­ moderno (regular y permanente, con le ha impuesto como costumbre, re­ inscribirían en virtud de una reforma te simplismo como infantil la insisten­ denigradorade la personalidady tritu­
nación, siempre y cuando el poder servicio militar obligatorio, en 1902) sulta imposible pensar alternativas global. Discutir, por ejemplo, un ejér­ cia con que apelan a la alegoría del radora de la autonomía pensante, se
político acepte las pretensiones de hasta la década del '40, hubo secto­ de fondo para disminuir el poder mili­ cito exclusivamente de "profesiona­ ■quirófano” para fundamentarlo. hará cada vez más irrazonable y arbi­
autonomía corporativa y satisfaga las res de la sociedad civil que cuestiona­ tar y, a la vez, desmilitarizarse la pro­
les" (supresión del s.m.o.) sin relacio­ ¿Cuántas veces les hemos escucha­ traria a medida que la fuerza militar,
demandas ideológicas,comunesam- ron su existencia, además de recha­ pia sociedad. Lacomplacencia milita­ nar esa modificación con, entre otros do pontificar: “Yo no me operaría en como en el caso argentino, vive déca­
bas a todas las facciones. Es el go­ zar el enrolamiento anual compulsi­ rista no significa mero asentimiento aspectos, a) la reducción de los efec­ un quirófano democrático, en_donde das sin rozar siquiera la guerra y
bierno legítimo el que debe subordi­ vo. El mito "sanmartiniano" lo organi­ resignado ante las conductas milita­ tivos y reubicación-reasignación de el personal subalterno se pusiera a acentuando su carácter parasitario.
narse. En caso contrario, no encon­ za la clase dominante argentina a res, sino también incapacidad de dis­ los emplazamientos, y b) la reformu­ discutir la orden del cirujano en el mo­ Cuanto más ociosa sea la vida militar
trará "leales’ para reprimir a los patri­ principios de este siglo para recubrir laciónde un dispositivode defensaal­
cernir el carácter militar (autoritario) mento de la operación..."? Parece respecto de su función bélica, la "dis­
cios "rebeldes" de esta época. Sólo le ■patrióticamente" lafunción resociali- de lasconductas socialescualesquie­ ternativo (seguridad compartida re­ burla, pero éste es el nivel de razona­ ciplina militar" se hará, y el propio mi­
prestarán la simulación homeopática, zadoray represivaque necesitaba de ra. Carecemos por completo como gional, por ejemplo), constituye, más miento de nuestros prusianosdel sub­ litar la hará inconscientemente, más y
cuya represión a desplazamiento mí­ las FFAA. Por un lado, había que dis­ sociedad del hábito, común en otros que una controversia vana y fastidio­ desarrollo. Nadie les ha informado más formalista, afrentosa y alucinan­
nimo pondrá en ridículo al poder polí­ ciplinar a los inmigrantes obreros que países, de debatir sin ataduras lapro-sa, unatípicacoartada pro militarista. que ladisciplina ciega y vejatoria es y te. Hacer sonar los tacos, tener la ra­
tico y lo socavará. Al fin, hundiéndose contagiaban con su rebeldía a los na­ blemáticade laguerray la paz; los be­ De ese modo, se escuchan fantasías ha sido siempre indispensable, des­ ya del pantalón impecable, gritar las
entre órdenes de mando que el tiem­ tivos y, por el otro, controlar las emer­ neficios y perjuicios de los armamen­ queprevienen sobre un presunto"ejér­ de luego, para que los subordinados órdenes más insulsas hasta desgas­
po caricaturiza y con las que los ofi­ gencias sociales de la época, tanto el cito de mercenarios" (¿I) a que con­
tos y de las industrias bélicas; la legi­ cumplan órdenes de cuya razón tarse, se convierten en actos de ser­
ciales en ropa de campaña chotean naciente movimiento sindical como el timidad ética o el despropósito de duciría la supresión mencionada, sin vicio, en actividad autojustificatoria,
entre mate y mate, acabará nego­ desarrollo de las capas medias urba­ gastar en soldados lo que no pode­ que falte por ahí el que aporta la ima­ otorgadorade sentido aúna vida-pro­
ciando lo que no debe negociarse en nasy suburbanas que, atravésdel ra­ mos gastar en salud, educación, vi­ gen escalofriante de una "tropa de fesión infructuosa. Lo secundario y ri-
una república y aparecerá ante toda dicalismo "abstencionista", cuestiona­ vienda; la conveniencia o desventaja gurkas". Puede parecerpueril, pero el il pasa a justificar la existencia del
la sociedad pactando con la institu­ ban el orden oligárquico. Sin embar­ de las disciplinas rígidas, las regula­modo (o latécnica) de aislar los distin­ litar. En nombre de esa "disciplina",
ción castrense. Esta fue la suerte de go, como hemos visto, la oligarquía ciones jerárquicas, las lealtades cie­tos aspectos, independientementede oficial humillaal quetiene el borce­
Alfonsín. Laastucia de Menem, un ar- no consiguió imponer este mito a la gas. La crítica de la institución cas­ las estridenciasaque conduzca, exhi­ guí deslustradoy otro más allá llega a
tilugio de jugador de truco, nouna es­ totalidad de la sociedad civil. Esta ta­ trense es la más fecunda escuela de be hasta ahora eficacia: disuade o causarle la muerte a un soldado por
trategia para consolidar la democra­ rea ideológica se completará en los democracia para las conductas so­ asustaa muchas personas de menta­ extenuación y castigo sin que se les
cia, es haber pactado antes. '40, cuando con el peronismo surge el ciales y políticas. Seríaocioso indicarlidad progresista, refuerza el mito de turbe demasiado la conciencia. Ni el
La complicidad militarista por afi­ mito político de que las FFAA, o un aquí lo que esa crítica induciría a re­la impracticabilidad de toda reforma y oficial es un "perverso" ni la orden
nidad autoritariadel peronismo node­ "sector" importante de ellas, acompa- mover de las estructuras y procedi- aparta a la mayoría del intento de re­ constituye un "exceso", como lo pre­
mientoscaudillescos de nuestros par­ flexión serena sobre los militares. En tende la complacencia militarista pa­
tidos/ La complacencia militarista de una sociedad en que los grupos anti­ ra disimular el vínculo institucional.
la sociedad argentina no es, en este militaristas prácticamente no existen Es el efecto de una estructura organi-
sentido, más que el síntoma cultural y en la que los medios de masas se zacional y de valores y creencias ins­
de su tradicional autoritarismo. cuidan de que ninguna persona anti­ tituidos.5
militaristase exprese en ellos, escom­ están convencidos, acaten jerarquí­ El "espíritu de casta" comienza a
prensible que los sofismas más gro­ as cuyo mérito (escalafonario o fac- conformarse en las escuelas milita­
La reform a m ilitar seroscirculen al parque se obstruyen cional) no reconocen y arriesguen su res. La preocupación dominante en

CeDInCI
los análisis consistentes. En la Ar­ vida por causas en la que no creen o que se tos forma no es tanto el rigor
Resulta imposible abordar aquí, gentina sólo hay tribuna para la pro­ cuya injusticia les repugna. Esta es la profesional o el nivel técnico como la
aun sintéticamente, los distintos as­ testa antigolpista y la denuncia de la esencia concreta, histórico-social, de cohesión social, la lealtad institucio­
pectosque engloba una reformade la Doctrina de la Seguridad Nacional. la presuntanecesidad universal y abs­ nal y el espíritu de cuerpo. Se tos mol­
institución castrenseque lahagacom­ Una de las cuestiones más mitifi­ tracta de la "disciplina" castrense tal dea como casta-élite que debe salva­
patible con la democracia. Me referi­ cadas es la de la “disciplina militar". como la conocemos, brutal y degra­ guardary enorgullecerse de sus"dife­
ré por consiguiente a ciertas cuestio­ Hasta los militares democráticos, se­ dante, en el estado-nación moderno y rencias”; ese culto de estamento me­
nes esenciales. Pero es indispensa­ gregados de la institución por ese ca­ sus guerras de dominio. Para que un dieval tos hace aferrarse a sus privile­
ble remarcar la importancia de la glo- rácter pero imbuidos de los valores y militar esté convencido de esa nece­ gios y considerarlos legítimos. El co­
balidad de la reforma, y no sólo por creencias que conforman la “subcul­ sidad, hay que eliminar de su educa­ ronel Agustín P. Justo, director en ese
obvias razones lógicas, sino porque tura militar", consideran que la disci­ ción todo análisis psicológico, socio­ entoncesdel Colegio Militar, lesdecía
lo más habitual es polemizar sobre plina no puede democratizarse, o que lógico e histórico-político que contra­ a tos nuevos subtenientes en diciem­
determinadoscambiosaislándolosdel su democratización afectaría la ope­ ríe los clisés que sostienen el mito. bre de 1920: “Entrados a formar par­
contexto militar diferente en que se ratoria militar. Es tan sintomático es- Esta disciplina, que fue siempre te del cuerpo de oficiales, es decir, de
be confundirse con el consentimiento ñarán al pueblo, o lo acaudillará, en de la estructura y el rol social de los denuncia por los delitos de lesa hu­
militarista por inconsecuencia demo­ su camino hacia la liberación nacio­ militares, no puede pensar una modi­ manidad que allí se ventilaban. Este
crática del radicalismo. La amalgama nal. La totalidad del "campo popular* ficación radical de la corporación y de panoramade carenciasse ve agrava­

y Pensamiento militar
produce un equívoco; pero también adopta esta ilusión, que la llamada sus relaciones con la sociedad. Con­ do. por último, por la abdicación que
del ilusorio antagonismo resulta un "izquierda nactonal" (Ramos, Puig- sidera que es imposible, que todo ra­ la izquierda orgánicaargentina ha he­
malentendido. Ni una cosa ni la otra. grós, Hernández Arregui) eleva ateo­ zonamiento en ese sentido es utópi­ cho del antimilitarismo socialista clá­
Ambos conforman, en rigor, los mati­ ría; el PC la acuna hasta la última dic­ co, estéril, impracticable... Este es el sico. El ejemplo más penoso de este
ces más representativos del arco de- tadura. Era la mistificación comple­ efecto psicológico y cultural. Es el pe­ abandono es su oposición a que se
mocrático-popular argentino, inclui­ mentariaque se necesitaba paradisol­ so histórico-cultural de estafalacia in­ suprima el servicio militar obligatorio. / "W ' a revoluciónse inicióen el ColegioMilitaren añosde funciones) por perteneceral CEMIDA"(coro­ (coro- ■Har» veinte afine sn íníhió»
dos los más progresistas y de izquier­
da, pues éstos tampoco son incom­
patibles con la complacencia milita­
rista de la entera sociedad argentina.
ver los focos de conciencia antimilita­
rista que existían en la sociedad civil.
A partir de allí la sociedad argenti­
na no sólo acepta sino que profesa el
ternalizada lo que lo lleva a la impo­
tencia, al desinterés, al descreimien­
to irónico.
A la sociedad civil argentina le han
Una de las fuentes de esta compla­
cencia militarista reside en el dogma-
ilusión probablemente más pueril de
L la madrugadadel 6de setiembrede 1930. En
esa época yo era cadete del segundo año
nel (r) HoracioP. Ballestee, Páglna/12,4 deenero de
1990).
.....al llegar el teniente general José F. Uriburu. je­ "La ¡dea de la abstención política de las fuerzas
fedela revolución, se nos hizoformarenel campode armadas, típicamenteliberal unavez aseguradala vi­
estas corrientes: el de que, cuando
Esta haaprendido, a paso lerdo, ade­ axiomade laexistencia"natural'de la triturado aquel antimilitarismo que en­ estalle la Revolución, el ejército, co­ deportes de la institución y se nos arengóexplicán­ gencia de las instituciones liberales, se convertía en
sembarazarse de su fluctuante rela­ institución militar; tenemos unafrase- gendró lúcidamente el liberalismo de­ mo en el Petrogrado de 1917, se par­ dosenos lo que ocurríae Invitandoa quienes, por ra­
zonesfamiliareso personales, no deseabanmarchar y socialistas. Lasizquierdas nuncacondbie
ción con el golpismo y hoy es posible cilla imbécil que lo expresa: "Nacieron mocrático (Alberdi, el más crítico de tirá en mitades... En nombre de esta mitieronlaacciónmilitarencaminadaagene
decirque mayoritariamente lo conde­ con la Patria”. El arco democrático ar­ todos) y continuaron las corrientes mimesis ahistóricay milenarista, con­ conel Colegio, quedieranunpasoal frente. Sólocua­
tro o cinco cadetesentre más de cuatrocientos lo hi­ den social superior al existente. Poreso se condena­
na. Pero siguecreyendo que eso es el gentino sostiene: “El golpismo es per­ anarquistas y socialistas de la Argen­ tribuyen a mantener el obsoleto, inú­ cieron. Los demás nos incorporamos al movimiento, rona vivir fuera del procesohistórico, a ser revoluci
militarismo. Nuestracomprensión de­ nicioso, pero la Institución es indis­ tina moderna. Esa crítica aguda de la til y embrutecedor servicio militar has­
mocrática media sostiene que el mili­ pensable". Dicho de otro modo: nin­ institución castrense no fue nunca ta el fin de los tiempos. de ellas, sino por espíritu de cuerpo y porque no ig­ berales se derrumban, las fuerzas armadas se co
tarismo es el "exceso" de la función guna sociedad puede existir sin fuer­ mayoritaria en la sociedad argentina, No se trata de que nos pongamos norábamos el tremendo desorden imperante en el viertenen sumade ideología, políticay profesionalis­
militar. Si de ésta pudiera eliminarse zas armadas. ¿Cuál es el efecto de pero el hecho deque existiera ayuda­ a discutir si es posible empíricamen­ país" (Alvaro Alsogaray, Clarín, 6 de setiembre de mo al servicio del nacionalismo popular revolucio­
el genocidio último y el golpe que lo esta certidumbre ideológica que, con ba al conjunto a tener una visión más te que laArgentina resuelvade un día 1990). nario o está todo perdido" (Rodolfo Puiggrós, Histo­
precedió, el conjunto de nuestra so­ el tiempo y la repetición de ella que •Elcoronel JuanJaimeCesiofue sancionadopor ria critica de los partidos políticos argentinos,
advertida e independiente. Hoy ese para otro la eliminación de las FFAA. BuenosAires, Hyspamérica, 1986, t II, pp. 185-186y
ciedad volvería a afirmar que el servi­ realizan los dirigentes políticos y el foco de irradiación ha desaparecido. Este es por logeneral el trucoque nos un Tribunal de Honor duranteel último gobierno mili-:
tar conla prohibición del uso del uniformey del título 199).
cio militar es la mejor escuela para establishment, se ha internalizado en Los ciudadanos democráticos care­ proponen sus apologistas "democrá- de su grado por 'haber antepuesto su condición de
que nuestros hijos se hagan hom- laconciencia media argentina? La im­ cen de un punto de referencia crítico ciudadano a su situación de militar’, sin que a los or­ Uticos" (teniente coronel Carlos Smith, setiembre
potencia civilista, la resignación. El para confrontar sus opiniones sobre ganismosdel Poder Ejecutivonacional selesocurrie­ 1918).
argentino medio protesta, se indigna, el militarismo. Escuchan unasolacam- ner el carro delante del caballo. Lo se nadaparareparar esta injusticia..., Loscoroneles "Las Fuerzas Armadas son la columna vertebral
La com placencia las condena por el genocidio y el gol­ pana, o un solo registro de campa- que importa resaltar es que si la so­ AugustoRattenbach, José Luis Garcíay CarlosGaz- déla República.... Lapatrianoes hijadélospolíticos,
m ilita ris ta pismo, pero no se atreve a ir a fondo ciedad, y en particular los sectores cón,al asumirel presidenteMenem, fueroncesantea- sino de la espada" (general Larcher, secretario de
en el cuestionamiento, no posee con­ En la primera de las últimas cuar­ democrático-populares, no se libera dos de la Escuelade Defensa Nacional (luegode 14 Guerra, 3 de junio de 1960).
Desde la fundación del ejército ceptos ni hábito de análisis respecto teladas (semana santa), tanto los de esta losa mítico-axiomáticaque se
versión. Les interesa que se restaure Es indispensable recordar, para
la imagen de la institución, su presti­ concluir, que los reglamentos milita­
gio. No les preoucupacentrar el recla­ res, los privilegios sociales, los meca­
mo en la propia conciencia o razón o nismos estamentalizadores, etcéte­
en el consenso de la comunidad hu­ ra, han sido aprobados en su mayoría
mana a la que pertenecen; no es allí por parlamentos civiles. Un militaris­

Cartas a un
donde buscan la justificación de sus mo tan prolongado y extendido como
acciones ni la han buscado. ¿Cómo el argentino, al igual que cualquier
es posible, se insistirá, que no acep­ otro de similar naturaleza, no podría
ten siquiera que matar a un prisione­ ser explicado como desenvolvimien­
ro es vituperable aun desde el "honor to autónomo de la institución. Nopue­
militar"? Esta salpicadura se resolve­ de existirsin la coautoria de las clases
rá no mencionándolao negándola; no dominantes, ¡a complicidad de ¡a so­

amigo con el que


debe hacerse mención pública del ciedad política y la complacencia de
hecho. No es la conciencia ética lo la sociedadcivil. La reforma militar en
que está en juego, sino el prestigio la Argentina supone esta triple articu­
institucional. Y éste puede restañar- lación. Depende de los avances y re­
trocesos en los tres factores conflu­
creto, una declaración oficial, un ho­ yentes, y la relación de fuerzas de­
menaje protocolar. Para la ética, se terminante en que se resume su inte­
trata de una parodia; para la moral racción. La institución castrense no

(a veces) discuto
corporativa, tiene su lógica. Cuando puede ser considerada, en este sen­
los valores sufren semejante inver­ tido, untador propiamentedicho, pues
sión y, por ejemplo, la "disciplina mili­ no se ve que tenga otra dinámica que
tar" es un parámetro más importante la reproducción de su cristalizado mi­
que los "derechos humanos", escom­ litarismo, propensión realimentadora
prensible que un oficial se irrite por­ de toda institución. Por eso, de un go­
que no encuentra bien alineada a la bierno que le concede a los militares
tropa pero pueda presenciar y/o justi­ un papel decisivo en el diseño de la
ficar cómose tortura. Es imposible, se "reforma militar", lo mínimo que pue­

I
comprende, introducirurr razonamien­ de decirse es que está parodiando la
to ético en este simulacro de moral función del estado. El simulacro con­
que es la moral estamental de los mi- lleva, a la vez, una estafa a la so­
un conjunto de hombres de bien que, crática. ¿Qué visión del mundo social ciedad.*
guiados por un ideal superior, tienen y de los derechos humanos y civiles
mayores responsabilidades y cum­ pueden tener personas que, por sa­

CeDInCI
plen funciones más trascendentales berse integrantes de una corpora­
que la mayoría de sus conciudada­ ción, se saben a la vez amparadas
nos, porque deben amalgamar hom­ por un régimen procesal particular en
bres de todas las procedencias a fin el que, al mejor estilo medieval, serán -------------------------------------------------------------------PorJosé Nun-
de moldear en nuestros soldados el juzgadas por sus pares y gozarán por
alma argentina". Están aquí la supe­ ende de la benevolencia de éstos en con la planificación -y, además, la tradición y
rioridad sobre losciviles, el espíritu de todo delito que afecte el prestigio de las costumbres- es uno de los mecanismos cla­
casta, el mesianismo, el mandatomís­ la institución? ves para la coordinación de un sistema econó­
tico de la patria. Después, a través de La expresión más aguda de la es- Donde se habla, entre otras cosas, de mico eficiente: un mercado bien estructurado
una práctica social cerrada, aislados tamentalización que examinamos es estimula las iniciativas descentralizadas y el es­
de la sociedad, celosos de la cohe­ la "moral militar". Típica moral esta­ la economía de mercado, del píritu innovador, ajusta y corrige los precios,
sión y prestigio de grupo, es lógico en­ mental, es lo contrario de la ética uni­ hambre en la India, de la reforma anima la competencia, responde a las preferen­
tender que antepondrán su lealtad al versal que sustenta la sociedad civil. cias del consumidor, etc. El problema, por lo
ejército a la que deben a la sociedad; agraria en Taiwán, del despegue tanto, no es mercado o gobierno. El problema
Esta apela a la conciencia del sujeto, es ‘cuánto mercado"y "cuánto gobierno' en ca­
siendo fieles al ejército creen que sir­ a la razonabilidad ética; aquélla se chileno y -to d o el tiempo- da lugar específico. Ó, como te repetí hasta el
ven a la nación. basa en el llamado "honor", en las re­ cansancio la otra noche, el verdadero asunto es
La socialización del militar, como glas del honor establecidas por el es­ de la Argentina. todo lo que encubre la fetichización del merca­
la de todo sujeto, se vertebra en dis­ tamento al que se pertenece. La mo­ do en las circunstancias actuales de la Argenti­
cursos y prácticas. Los barrios para ral del hombre de armas no es un Los franceses llaman esprit de l'escalier a na (y no sólo de ella). Lo cual tampoco quiere
militares, por ejemplo, que comenza­ emergente de su conciencia sino de ese duende con el que uno a veces se topa al decir que cuando hablo de “gobierno" o de "in­
ron a difundirse en la década del '20, irse, después de haber tenido una discusión. Es tervención estatal" esté pensando en el sector
la institución. Por ello su parámetro el que te reprocha: "pero, cómo no se te ocurrió
acentúan el aislamiento, que se ex­ primordial no es lo justo o lo injusto Por eso me gustarla partir de algo en lo que público anquilosado y prebendalista que sopor­
decirle esto o aquello, cómo es posible que te tamos y que ayudaron a construir muchos de
tiende a sus familias, y los priva de desde una perspectiva ética univer­ olvidaras de los argumentos tales y cuales...". creo que vamos a coincidir: colocar hoy el
pluralismo cotidiano, los encapsula. asunto en términos de una oposición excluyen- los que ahora lo critican: hoy y aquí, sin una
sal, sino la lealtadque la acción guar­ Bueno, la cuestión es que este personaje me transformación profunda del estado son difícil­
Hay que aplicar a estosbarrios el mis- da con los miembros pertenecientes estaba, esperando la otra noche al salir de tu te entre el mercado y la intervención estatal
(ese parche que baten tantos “comunicadores mente imaginables intervenciones que resulten
al estamento. Esa lealtad es el valor casa, luego de nuestra trenzada sobre el mer­ sociales" bien pagos) es simplemente un dispa­ consistentes y eficaces —la cuestión es quié­
laridad del militar en las escuelascas­ fundamental que el militar salvaguar­ cado, las privatizaciones y el neoliberalismo. rate. Por un lado, ya mucho antes del auge ac­ nes son los que pueden hacer esta transforma­
trenses. Reformar, democratizar la da en sus acciones y dichos, porque Sé, por experiencia, que el duende puede ser tual del neoliberalismo no había ninguna nación ción y cómo y para qué—. Pero no quiero per­
institución supone corregir estas es­ es el valor fundamental de la institu­ ■un poco mentiroso; pero no siempre. Por eso der el hilo de mi argumento.
estas líneas, con las que quiero ordenarme las en el mundo sin moneda y sin precios y que no
tructuras en las que se va constitu­ ción. Mantener la unidad de los inte­ recurriese -en mayor o menor medida- a me­
yendo la "subcultura militar”, no sola­ grantes del estamento está por enci­ ideas, contarte algunas cosas que no te dije y. canismos de mercado para reclutar y asignar
mente disponerles otro discurso edu­ ma de toda valoración de los medios de paso, tratar de convencerte. su mano de obra y para hacer circular sus bie­
cativo. Tampoco se trata de suprimir Me dirás que me tomo nuestras charlas de­ nes de consumo. (Como sabés, en 1917 los
que se utilicen para cada acto, y sal­ masiado a pecho. Pero no es exactamente eso.
los privilegios más conocidos, sino vaguardar el prestigio del estamento bolcheviques intentaron infructuosamente su­
Es, más bien, que me estimulan a poner sobre primir todo esto: fue tal el caos que siguió que
también aquellos que ni siquiera han o corporación es el fin a que debe di­ el tapete ciertas premisas mayores de nuestros
sido objeto del más mínimo debate y muy pronto tuvieron que dar marcha atrás.) Por
rigirse toda acción. Así es la moral del planteos, que son precisamente las que hoy otra parte, tampoco hay nación alguna que
que contribuyen aforjar esa subcultu­ honor estamental, propia de toda or­ -cuando más taita haría- casi no se discuten prescinda de la regulación e intervención esta­
ra o mentalidad. Por ejemplo, la ba­ ganización cerraday autoritaria, y por en un país que anda tan enloquecido por la co­ tales en la economía. Esto vale, por supuesto,
rrerainfranqueable y antidemocrática ello mismo, según sus vaivenes y cir­ yuntura. Y no me retiero sólo a "los otros". Fijáte para todos los países capitalistas, al punto que
que separa a la suboficialidad de la cunstancias, se parece inevitablemen­ que, durante años, la mayor parte de la izquier­ -como ha escrito un afamado economista nor­
oficialidad e impide toda movilidad te a la “ética de mafia" y muchas ve­ da estuvo confortablemente instalada en la idea teamericano- si en estos países uno eliminase
social interna; esotro de los mecanis­ ces se confunde con ella. de una planificación omnisciente que resolvería al capitalismo, el estado seguiría existiendo,
mos que instila en los oficiales el sen­ Toda lasociedad argentina puede todos los problemas (algún día). Y ahora que la por muy distinto que fuera; pero, en cambio, si
timiento de pertenecer a una élite. Ni decirles que cometieron actos abe­ realidad hizo estallar esta creencia, no es mu­ uno eliminase al estado, el capitalismo no dura­
hablar de los tribunales militares en rrantes, pero los militares pueden se­ cho lo que tiene para oponerle a la incesante ría ni un día.
tiempos de paz, privilegio inadmisible guir sosteniendo que deben ser rei­ prédica neoliberal y a su endiosamiento simétri­ Para ser prolijo (y aunque ya te lo dije per­
en una sociedad igualitaria y demo­ co del mercado, que va a traernos todas las so­ sonalmente), agrego entonces que también a
vindicados en su lucha contra la sub- luciones (algún día). mí me parece indispensable el mercado. Junto
mercado". (Alguna vez sería bueno que charlá­ de los asalariados norteamericanos cayó en forma impositiva que amplíe el número de con­ mente, tampoco hay suficientes incentivos co­
ramos más largo acerca de estos procesos de más de un 15%, después de haber crecido sos­ tribuyentes y permita así rebajar (o no aumen­ mo para que la gente haga estas cosas de ma­
selección y de sus efectos. Las dictaduras de tenidamente desde la posguerra? ¿O que. en­ tar) ¡os gravámenes para los más poderosos; nera voluntaria, es el estado quien tiene gue to­
Europa del Este, por ejemplo, se decían socia­ tre 1973y 1983, el número de pobres subió un mantener tasas de interés positivas y un tipo de mar a su cargo la producción y/o protección de
listas pero también se llamaban a sí mismas 54%,? (Esta última tendencia continuó y se cambio estable que favorezca las exportacio­ los bienes públicos. El problema es cómo se
democráticas. No obstante, hizo carrera la ne­ acentuó después pero no tengo a mano cifras nes (de las que saldrán las divisas para pagar define cuáles lo son y qué tratamiento concreto
fasta denominación "socialismos realmente más recientes, salvo la muy abrumadora y ac­ la deuda); abrir las economías; promover las in­ deben recibir. Aquí fue donde hice intervenir mi
existentes’ - y no "democracias realmente exis­ tual de 32 millones de pobres en el país más ri­ versiones extranjerasy asegurar firmemente el argumento en favor de la democracia participa-
tentes’-, con toda la enorme carga negativa co del mundo.) Tampoco me acordé de men­ derecho de propiedad; privatizar las empresas tiva, que tampoco te sonó pertinente: sigo pen­
que esto liberó en el mundo entero contra la cionarte la otra noche un resultado notable de públicas (mas recursos para los acreedores); y sando que es a la comunidad misma (y no a los
palabra socialismo, poniéndonos paradójica­ la prédica neoliberal: desde los años 50, el 1% desregular, especialmente el mercado de tra­ técnicos o a los políticos profesionales) a la
mente a la defensiva a quienes nunca apoya­ más rico de la población norteamericana había bajo. En una palabra, la "economía de merca- que le corresponde resolver qué cosas deben
mos a esas dictaduras. De paso, este mismo venido recibiendo anualmente, en promedio, de estar al alcance de todos por igual y de qué
ejemplo ilustra bien que no se trata necesaria­ un 8% a un 9% del total de los ingresos decla­ Vos te preguntarás para qué me tomé el tra­ manera.
mente de imaginar usinas conspirativas dedica­ rados al fisco; pero, entre 1981 y 1986, este bajo de listarte recomendaciones que ya cono­ Sé que vas a contestarme que descubro la
das a la fabricación de palabras oportunas: porcentaje dio un salto impresionante y llegó a cemos de sobra. Fue para recordarte de dónde pólvora, que hasta los neoliberales más recalci­
hasta donde me acuerdo, lo de “socialismo casi un 15%. Y toleráme una constatación más, provienen porque aquí, desde el presidente trantes reconocen hoy en día que el estado de­
realmente existente" fue un invento de Rudolf que confirma hasta dónde es una pura falacia hasta tantos que fungen de economistas en tos be ocuparse de bienes públicos como la educa­
Bahro para estigmatizar, desde la izquierda, al encubridora ésa de contraponer "mercado"y medios, ponen cara de ser pensadores origma­ ción. la salud, la justicia y la seguridad. Sólo
stalinismo alemán. Pero, como digo, mejor de­ “gobierno" o “intervención estatal": a pesar de lísimos cuando repiten estas soluciones que les que, muy claramente en los casos de la educa­
jar este tema para una próxima.) toda la retórica de los años '80, no sólo no dis­ han enseñado. Cuando estudiábamos filosofía ción y de la salud, se trata de un reconocimien­
Esa identificación entre capitalismo y "eco­ minuyó el gasto público como proporción del en el secundario -¿te acordás?- nos explica­ to tramposo, de una verdad a medías, porque
nomía de mercado"ganó una espectacular y PBI en los siete principales países de la OECD ron que, para los griegos, la prudencia ocupaba los que dicen eso no piensan en serio que, en
bastante sorprendente saliencia en los últimos ese ancho espacio que se extiende entre las las circunstancias presentes, sean un bien pú­
diez o quince años, por motivos muy concretos sino que en 1989 era incluso 1/10 más alto que ideas universalesy la práctica, que es siempre
en 1976. Lo que pasa es que cambió la compo­ blico ni la buena educación ni la buena salud.
y de la mano del nuevo auge que ha adquirido sición de ese gasto, que era lo que realmente el reino de lo particular y de lo contingente. Lo Para gozar de ellas (y, crecientemente tam­
la economía neoclásica, sospechosamente más suave que puede decirse de tales epígo­ bién, de sistemas de seguridad o de previsión
convertida en la verdad científica. De esto no estaba en juego. Tanto que si algo explica el nos es gue son unos soberanos imprudentes y
crecimiento que tuvo la economía de los Esta­ que funcionen) cuentan mucho menos con el
habíamos hablado; y, para poder hacerlo, con­ que su imprudencia la está pagando la mayoría estado que con las empresas privadas, es de­
viene que empecemos por distinguir entre lo dos Unidos bajo Reagan no es el librejuego de del país. Como, por lo demás, Menem cree que
fuerzas del mercado cir, con el mercado. Dicho de otro modo, la
que pasó en los países capitalistas avanzados la imprudencia es una virtud, el año pasado no buena educación o la buena salud van dejando
y en aquellos que no lo son. En tuvo ningún empacho en reco­ de ser bienes públicos y el acceso a ellas que­
esos países, creo que intervi­ nocer que nos estaba embar­ da restringido, cada vez más, a quienes pue­
nieron en esto sobre todo dos cando, por su cuenta, en un dan pagarlas.
fenómenos, que se manifesta­ vuelo sin paracaídas. No, Juan, no te confundas: ya te oigo reivin­
ron con mucha mayor fuerza en dicando tu libertad de mandar a tus hijos a un
Estados Unidos y en Inglaterra colegio privado o de contratar el plan de salud
gue en Alemania, Japón o que se te ocurra. Yo no ataco tu derecho a ha­
Intuyo tu réplica: si yo mismo cerlo, aunque no estoypara nada seguro de
Uno fue la aceleración del reconozco la indispensabilidad que te sentirías tan tentado de usarlo si el go­

CeDInCI
proceso de transnacionalización del mercado, ¿por que estable­ bierno brindase aquí buenos servicios. (Acabo
de las gram cer culpas por asociación? Des­ de leer un estudio sobre Suecia que muestra
desde los a negada de sus eventuales orí­ que, a diferencia de lo que hoy ocurre en los
seriamente genes y aun de su intencionado Estados Unidos y -ni digamos- aquí, el estado
control de le de salud de los chicos de familias ubicadas en
nales y los hizo más y m sesgo terminológico, eso que se
narables desde el punto llama la “economía de mercado" el decil más bajo de la escala de ingresos no
ta financiero. En este contexto, todavía puede ser una buena presenta diferencia alguna con el de los chicos
la crecientepropaganda an propuesta - y hasta la mejor, si que pertenecen al decil más alto.) Lo que inten­
tatista y en favor de la “eco, no la única, a la que podemos to plantearte es otra cosa: no únicamente el
mía de mercado’ comenzó acudir. El otro día me dijiste al­ mercado es un mal mecanismo para la provi­ probar algo espeluznante: en esos lugares no

Cartas a un
cobrar cada vez mayor sentido go por el estilo; y yo te contesté sión de bienes públicos sino que las mismas había una particular escasez de alimentos (de
específico: se trataba de elimi­ eso de que si mi abuela tu- prácticas neoliberales han precipitado una de­ hecho, en términos de volúmenes disponibles,
nar todas las trabas al más libre a un trolley y cuatro ruedas gradación pavorosa de los existentes en el 1974 fue un año record para Bangladesh); la
desplazamiento posible del ca­ á un tranvía. Pero el duende país. Como la repeticiónproduce acostumbra- cuestión era quiénes podían acceder a ellos.
pital dentro y fuera de las fron­ comentó que no fue una miento, no estaría de mas preguntarles a los Más cerca nuestro: ¿faltaban acaso alimentos
teras nacionales. (La g,
Golfo trajo a primer pía
so paradigmático de es
tad plena de mercado:
buena respuesta porque daba
por sobrentendido precisamente
lo que debía haber desarrollado.
Veamos si consigo hacerlo en
que le echan todas las culpas al intervencionis­
mo estatal (que aquí las tiene y muchas, no me
malentiendas) porqué curioso milagro los ma­
yores deterioros que registran la educación o la
amigo con el que en 1989, cuando ocurrieron los llamados esta­
llidos sociales? ¿Faltan hoy, cuando tanta gen­
te (criaturas incluidas) come salteado? Estoy
de acuerdo en que se trata de casos límites;
mercio de armas que no se sujeta a regulación salud públicas en los últimos quince años han pero precisamente por eso le quitan espacio a

(a veces) discuto
dio el enorme déficit del Que el mercado pueda ser una buena cosa correspondido a los momentos en que el la retórica y ayudan a pensar. (Para que no te
alguna. ¿Leiste que Irán, por ejemplo, ni siquie­ puesto federa!, uno de cuyos principa
ra durante la guerra se vio obligado a interrum­ significa ni que sea la mejor o más impor­ manejo de tos negocios públicos quedó en equivoques, también estoy convencido de que
nos fue la industria militar (y resisto la tentación tante de las cosas ni tampoco que no exija es­ manos de los paladines de la "economía de una intervención estatal sin controles democrá­
pir sus compras de armas a Occidente?) de explotar ahora este dato). Por k>demás, ya
El otro fenómeno tuvo que ver con el consi­ tructuras y regulaciones adecuadas a cada mercado". ticos puede llegar a ser tan perniciosa como el
que queremos parecemos al primer mundo, contexto. Es obvio, por ejemplo, que los 32 mi­ mercado: todo indica que, en China, por ejem­
derablepoder relativo que, desde los años 50, ¿por qué no se dice que, en varias de sus na­ llones de pobres norteamericanos o los 9 o 10

I
habían logrado en el "primer mundo" los traba­ ciones, el gasto público pasó de un promedio plo, una serie de políticas públicas desastrosas
jadores y sus organizaciones, a favor de la con­ millones de pobres argentinos van a sentirse - y que no se podían criticar- fue la responsa­
solidación del así llamado estado benefactor del 10% del producto total en los años '20 a menos contentos con el mercado que el 1% de Desemboco así en uno de los dos temas ble de que, en el período 1958-1961, se murie­
cerca de un 30% en tos '60 y a más del 50% en la población de los Estados Unidos o de la Ar­ por cuyo olvido más me criticó el esprit de l’es- sen de hambre entre 23 y 30 millones de per­
(otro nombre que ideológicamente se las trae): los '80?
si la crisis de los años 30 fue allí básicamente gentina que vio crecer exponencialmente sus calier. Aun allí donde el mercado funciona bien sonas. Leiste bien: el equivalente a toda la po­
La situación de áreas periféricas como la ingresos gracias a estas prácticas neoliberales. -es decir, donde más se acerca a su modelo blación argentina de la época.)
una crisis de subconsumo, resultado del exce­ nuestra tiene características propias que, de to­
sivo poder que hablan concentrado en sus ma­ Los voceros del 1 % dirán, sin duda, que los teórico-, la oferta y la demanda pueden equili­ Pero, ¿hay que esperar, acaso, que la gen­
dos modos, están siendo inscriptas también en dictados de la ley de la oferta y de la demanda brarse a niveles que no sean aceptables desde te comience a morirse de hambre para interve­
nos los capitalistas, la de los años '70 estuvo el marco ideológico libre-empresista del centro, son siempre correctos; y los representantes de
signada por una sensible caída de la tasa de el punto de vista de las necesidades sociales. nir? Vemos todos los días cómo el mercado es
difundido por la ortodoxia académica, por las esos marginados tendrán razón en contestarles Y te va a costar discutírmelo porque ésta era ¡a perfectamente capaz de operar aquí sin sobre­
ganancia, que los patrones atribuyeron a ese burocracias internacionales, por los medios de que el mercado no tiene por qué ser el único gran preocupación de los propios economistas
apreciable fortalecimiento que había experi­ comunicación, etc. Aquí algunos de los impul­ saltarsepor la existencia de tasas altísimas de
criterio de evaluación y que los niveles de bie­ clásicos, empezando por Adam Smith; y más desempleo y de subempleo; o concentrando
mentado el sector trabajo. El remedio obvio, sos más importantes vinieron de la necesidad nestar colectivo y de equidad social brindan en todavía de los liberales humanistas, como John sus ofertas en la cuarta parte de la población
entonces: la desregulación, el cercenamiento de que saldásemos una monstruosa deuda ex­ esto pautas de medición muchísimo más justas Stuart Mili. En cambio, dejó de serlo para los que se apropia de las tres cuartas partes del in­
de los padrinazgos estatales que habían redu­ terna (que, a la vez. ha beneficiado a muchos y apropiadas. mentores intelectuales de la arremetida neoli­ greso nacional; o asignando recursos cuantio­
cido la capacidad disciplinadora del capital y prósperos personajes, estudiosjurídicos y gru­ Porque éste es el núcleo de la cuestión: ni beral que soportamos: deliberada y sistemáti­ sos a actividades no productivas como la espe­
que habían puesto en crisis a las finanzas pú­ pos económicos locales) y, como siempre, de una sociedad puede ser reducida al mercado ni camente, los economistas neoclásicos han ex­ culación financiera, en un país que hace más
blicas; en una palabra, el retorno decidido a una afanosa búsqueda de buenos negocios. éste es un mecanismo sin limitaciones muy se­ cluido de sus análisis el problema de la distri­ de quince años que dejó de crecer. Lo cual no
una "economía de mercado", más aparente que De ahí eso que ahora se llama el “consenso rias. La más conocida hace a su incapacidad bución del ingreso porque suponen que, en to­ resulta para nada extraño cuando uno com­
de Washington", del que participan, entre otros, paraproveer bienes públicos. Cuando te men­ do caso, se resuelve solito y por arrastre. prende eso que vos te negabas a aceptarla
Los datos disponibles sobre los Estados el Congreso norteamericano, la Reserva Fede­ cione este tema me dijiste que no lo entendías; No cabe duda, creo, de que hoy es un impe­ otra noche: que, más allá de los sofismas, las
Unidos dan muy buen testimonio del sentido y ral, el Banco Mundial y el FMI (que lo imple- así que insisto. El ejemplo más banales el del rativo moral absoluto que la gente no se muera relaciones de mercado son siempre, en el fon­
de la eficacia de estas estrategias. No los lleva­ menta a través de sus condicionalidades}; aire que respiramos: no lo podés vender en el de hambre. Pero esto no rige, Juan, para el do, relaciones de poder; y que fetichizarlas, co­
ba conmigo cuando te decía en tu casa que es­ nuestros países deben reducir su déficit fiscal mercado porque no tenés manera de restringir mercado: el que quiere comer tiene que pagar. mo ahora se hace, es un modo de conseguir
tábamos hablando de luchas por el poder y vos (se cuenta que, aun antes de ponerse a traba­ su consumo sólo a los que te lo compren. Pasa Si te fijás en algunas de las mayores hambru­ 2ue los más poderosos estén cada vez más ti­
me pedías que no simplificase. ¿Sabías, por jar, cualquier misión del FMI recomienda dismi­ lo mismo con la construcción de un faro o de nas de este siglo, como la de Bengala, en res de cualquier atadura. A lo mejor asi te
ejemplo, que entre 1973y 1987 el ingreso real nuir el gasto público a la mitad); hacer una re­ un muelle: les sirve a todos. Y como, normal­ 1943, o la de Bangladesh, en 1974, vas a com- quede más claro por qué te sostenía yo que, en
la Argentina, el problema pirncipal no son hoy bién ahí fue decisiva la acción del gobierno, falsas dicotomías que propagan los neolibera­
los pobres: el problema principal son los ricos. que apostó al cobre cuando pocos creían que les que, al releerla, me da un poco de miedo de
se recuperaría e hizo tortísimas inversiones en que vos mismo puedas caer en ellas. Por eso
el sector: la apuesta les salió, elprecio del mi­ mercado^no quiere decir atacar al mercado si­
neral aumentó en el mundo y fue al cobre que
¿Pero, al menos, nos conducirá esto a un se debió la mitad del gran crecimiento de las no a su fetichización. De igual manera, soste-
crecimiento que, con el tiempo, podrá volverse exportaciones chilenas en la década del '80.
más equitativo? ¿Se trata de un costo que no Además de que la dictadura de Pinochet tuvo haya que reformarlo, liquidando canonjías y
hay mas remedio que pagar, después de tantos una ventaja excepcionalísima y nada casual: dispensas que desde hace tiempo han adquiri­
descalabros? Es el otro tema que reivindicó el recibió mucho financiamiento externo en las do dimensiones realmente bochornosas: todo
duende, casi a los gritos. Desde luego, nadie etapas iniciales de su programa de ajuste y no depende de la filosofía que guíe esta reforma,
está en condiciones de predecir el futuro (¿te al final de él, como nos prometen a nosotros.) de cómo se la lleve adelante y de cuáles sean
leí el pensamiento?); pero esto no impide que los sectores y actividades que se busque forta-
podamos hacer algunas conjeturas más o me­
nos plausibles. Si te interpreté bien, la tuya es Vos ya conocés de sobra el núcleo de mi
que las fuerzas del mercado, con algunos co­ ¿Sabés qué pasa, Juan? Los mercados no posición: sin la movilización y sin la participa­
rrectivos y contrapesos, tienen por si mismas la nacen solos ni operan en el vacío. Son siempre ción activa de la gente no veo posible que se
potencialidad necesaria como para sacarnos organizados por los gobiernos y ya esto les da genere aquí un proceso de crecimiento que be­
adelante. Yo, francamente, no lo creo. La expe­ características peculiares; pero, además, res­ neficie a fas grandes mayorías y que permita
riencia de los primeros países capitalistas, que ponden en sus comportamientos a tradiciones una consolidación de largo plazo del liberalis­
se industrializaron asi, no es repetible porque culturales especificas y ejercen sus electos so­ mo democrático. Por eso, Juan, si algo quise
desaparecieron las condiciones que la volvie­ bre actores concretos, con orientaciones que mostrarte en esta carta es que hablamos todo
ron viable. Más todavía: hace mucho que estas son propias del contexto en que se han acos­ el tiempo de relaciones de poder y que el pro­
condiciones no existen ni siquiera en esos paí­ tumbrado a moverse. Esto es justamente lo blema de fondo es mucho más político que
ses. Te transcribo el final de un articulo recien­ que no tienen en cuenta los modelos económi­ económico. Esto explica que nuestros ministros
te del americano Paul Samuelson, Premio No­ cos neoclásicos, que trabajan con variables y de economía fracasen pero siempre en la mis­
bel de Economía: “Las democracias deben de­ no con actores históricamente determinados. ma dirección: ¿no es curioso que llevemos una
jar fuera de la circulación a cualquier Herbert Te doy un ejemplo. Supongamos que se abre punta de años sin que alguno haya tenido que
Hoovero Margaret Thatcherque permita que la totalmente la economía y que entran productos irse porque, aunque sea por una vez, se equi­
ideología del siglo XIX inhiba la capacidad del más baratos y de mejor calidad que los locales, voco en el vuelto a favor de los de abajo?
gobierno para una estabilización macroeconó- como parece que va a ocurrir. Sin duda, el mer­ Una vez me dijiste que, en estos temas, no
mica". A la estabilización macroeconómica cado enviará de inmediato sus señales. Pero, había que pecar de ingenuo. Por casualidad,
agrególe el crecimiento y está hablando de no- ¿cómo van a serprocesadas? ¿Los empresa­ hoy encontré en el diccionario el origen de la
rios locales harán mayores inversiones, capaci­ palabra: viene del latín y significa "noble, gene­
No es casual que en los lugares de desarro­ tarán a su mano de obra, introducirán innova- roso". En este país donde el realismo de los vi­
llo más tardío haya sido cada vez más determi­ vos nos ha traído al lugar en el que estamos
nante el componente estatal: a nadie que co­ (para negocio de los vivos, claro) no seria, des­
nozca un poco de historia se le ocurriría poner pués de todo, tan mala ¡dea ser dos veces in­
como ejemplos de "economías de mercado" genuo: la primera, para decir eso que nadie di­
los casos clásicos de Alemania o de Japón. ce -que, hasta ahora, no hay ninguna nación

CeDInCI
Tampoco a estas gemas de la posguerra que en el mundo en la situación de la Argentina que
son las áreas industrializadas del sudeste de haya podido revertir su atraso o su decadencia
Asia. Contra las mentiras que suelen difundirse en condiciones razonables de equidad aplican­
entre nosotros, si se deja a un lado Hong Kong do las recetas neoliberales, y la segunda, para
(cuyo status es muy particular), en laiwán, en cuestionar en estos términos el supuesto prag­
Corea del Sur y en Singapur el proceso de de­ matismo que tantos se adjudican, como si vi­
sarrollo fue manifiestamente liderado por el es­ niesen logrando efectos prácticos positivos que
tado. No sólo esto: nunca escuché que nues­ confirmaran la verdad de sus doctrinas (salvo
tros "comunicadores"de moda le contaran al que, como sospecho, muchos le digan pragma­
público que, en Taiván y en Corea del Sur, se tismo a eso que antes llamábamos simplemen­
llevaron a cabo reformas agrarias muy comple­ te oportunismo). Creo que son ingenuidades
tas que eliminaron definitivamente a los terrate­ necesarias para abrirle paso a la elaboración
nientes (ni Singapur ni Hong Kong tenían sec­ de alternativas concretas. No te hablo -ya esta­
tor rural). Esta combinación de gobiernos pode­ vengan al país aunque no sean las que más le mos grandes- de voluntarismos románticos. Te
rososy de reformas agrarias integrales, ade­ gusten a cada empresario en particular. (Aparte hablo de luchas duras, de apuestas fuertes, de
más de franquearle el paso a una industrializa­ de que, por todo lo dicho, no creo que la solu­ programas debatidos y apoyados por públicos
ción formidable, contribuyó a que se pudiese ir ción pase por una apertura indiscriminada de la amplios, que sepan todo el tiempo de qué se
mejorando la distribución del ingreso, al punto economía.) trata porque es a ellos que les incumbe y son
que, hoy en día, el 10% más encumbrado de la ellos y sus genuinos representantes quienes
población de esas zonas sólo saca la mitad de tienen que decidir y que controlar lo que se
la tajada que reciben sus pares de las principa­
les naciones de América Latina ("¿ Y Chile?", La carta se hizo más larga de lo que espe­
como insistías en tu casa. Te señalo que tam­ raba. Y lo peor es que están tan arraigadas las Chau, Juan, y hasta dentro de unos días.-
D O S s R D O S S I E R

-Comprendo su razonamiento.
-¿Cuál es la diferencia entre la -La mayoría de los filósofos sien­

Hannah Arendt
filosofía y su trabajo en lateoría po­ ten hostilidad hacia la política, con al­
lítica? gunas excepciones, como Kant. Hos­
-La expresión "filosofía política", tilidad que es muy importante en ra­
que trato de evitar, está cargada por zón de esecontexto, yaque no es una
la tradición. Siempre tengo cuidado cuestión personal, está en la cosa
de no olvidar la tensión que existe en­ misma. Es en la cuestión política co­
tre filosofía y política, o sea entre el mo tal que reside la hostilidad. Yo no
hombre entanto que filósofoy el hom­ quiero participar de esa hostilidad,
bre en tanto que ser obrante. Esaten­ quierotomar en cuenta la política con
sión no existe en la filosofía de la na­ ojos puros de toda filosofía.
Pensar a la intemperie turaleza. El filósofo se sienta frente a
la naturaleza igual que el resto de los
hombres y cuando toma la palabra lo
-Volvamos, si le parece bien, al
tema de la emancipación. ¿Se le
planteó ese problema?
hace en nombre de toda la humani­ -Sí, es natural qué asi sea. En
dad. ¡Pero no se es neutro frente a la realidad, y a riesgo de que me tome
política! ¡Desde Platón ello es imposi- por antigua, siempre he pensado que
blel existen determinadas actividadesque

Una conversación
a importancia quista. En los Es­

L de H a nnah tados Unidos es­ con Hannah Arendt


CeDInCI
Arendt en el cribió su obra ca­
pensamiento político pital, Lo s oríge­ no convienen a las mujeres, que no ciertos puntos quedan fijados. Su­
de nuestros días crece nes d e l to ta li­ les van. Por ejemplo, dar órdenes. La pongamos que uno tiene muy buena
mujer debería evitar esas situaciones memoriay puede recordartodo loque
sin pausa. Su nombre tarism o, pu­ si pretende conservar sus cualidades piensa. Dudo mucho, conociendo mi
femeninas. No sé si tengo razón. Yo pereza, que pueda escribirlo todo. Lo
y su obra son cada b lic a d a en me heconformado, no sé si conscien­ que importa es el proceso del pensa­
vez más citados, los 1951, y el te o inconscientemente, a esa opi­ miento mismo. Cuando puedo domi­
nión. El problema en cuanto tal no ha narlo, estoy contenta y cuando puedo
estudios sobre su fi­ resto de sus li­ juagado para mí ningún papel. En transcribirlo adecuadamente al terre­
realidad, he hecho siempre aquello no de la escritura, estoy doblemente
gura se multiplican y bros. Fue ami­ i tenía ganas de hacer. satisfecha. Volviendo a su pregunta
-Su trabajo está orientado ha­ sobre la influencia que es posible
su influencia tanto en ga de Walter Ben­ cia el conocimiento de las con- ejercer, ello es, si me permite ser iró­
dicionesquedeterminan laac- nica, una cuestión masculina. Los
medios intelectuales como ja m ín , de H er- ción y el comportamiento po­ hombres siempre quieren influenciar,
sobre los públicos más vas­ mann Broch, de Kart líticos. ¿Ellos tienden a ejer- cosa que yo veo, en ciertaforma, des­
de el exterior. ¿Ejercer influencia, yo?
tos y en general, en la prácti­ Jaspers y, en los Esta­ No, lo que quiero es comprender y
cuando otras personas también com­
ca y la teoría políticas, au­ dos Unidos, de W. H. Au- prenden, siento entonces una satis­
faccióncomparable al sentimiento que
menta a medida que caen las den, Robert Lowell y Mary Me se experimenta al regresar a un lugar
familiar.
certezas y se desploman las re­ Carthy, quien finalmente fue su alba- -¿Le satisface la escritura, la
cetas tranquilizadoras. cea. Murió de un ataque al corazón en redacción?
-A veces sí, a veces no. No escri­
Johannah Arendt nació en el seno su departamento de Riverside Drive, Nue­ bo si no he elaborado previamente
mis materiales. Sé exactamente lo
de una familia ju d ía en Konisberg, capital de la va York, en 1975. que voy a escribir.
-Su trabajo está actualmente
Prusia oriental, en 1906. Se graduó en Heidel- Traducciones castellanas de los libros de centrado sobre la teoría, la acción
y el comportamiento políticos. He
berg en 1929 con una tesis sobre San Agustín. Hannah Arendt se han publicado en España. encontrado en su corresponden­
Fue discípula de Martin Heidegger, a quien la En editorial Taurus, Los orígenes d e l totalita­ cia con el profesor Israelí Scholem
un punto particularmente Intere­
unió una relación sentim ental durante varios rism o, La c ris is de la república, Sobre la re­ sante. Usted le escribió que "en mi
juventud no me interesaba ni la po­
años. En 1930 se casó con el escritor Gunter volu c ió n y La c o n d ic ió n hum ana. En Lumen lítica ni la historia”. Señora Arendt,
usted abandonó Alemania en 1933
Stern, huyó a París en 1933y a los Estados Uni­ (largamente agotado) Eichm ann en Jerusa- porque era judía. Tenía entonces
26 años. ¿Hubo una relación de
dos en 1941. Su segundo esposo fue Heinrich lén y en Gedisa, H om bres en tiem pos o s c u ­ causa-efecto entre esos aconteci­
Blücher, antiguo dirigente de la Liga Esparta- ros. mientos y su preocupación por la
política y la historia?
D O S S D R

-Evidentemente. En 1933 era im­ semita, la mayoría no en relación con­ contrado en otra situación, se hubie­ nas que han adoptado otra lenguaco­ -¡Es diferente! En ese aspecto,
posibledesinteresarse. Hacíayatiem­
po que no era posible. Yo me había
migo sino con otras muchachas, so­ ran comportado de otra manera. Pe­ mo la suya. No es mi caso. Continúo Una conversación no puedo replicar. Si se piensa que
bre todo judías orientales, yo tenía la ro entonces pensaba que lo sucedido hablando el inglés con pronunciado sólo se puede escribir sobre este te­
puesto a leer atentamente los diarios
y me había formado una opinión. Sin
consigna de levantarme, abandonar integraba la esencia de ese oficio, el acento. con Hannah Arendt ma en tonos patéticos... Mire, hay
laclasey regresaracasa. Enseguida, de los intelectuales. Hoy creo que en -¿Esos casos de olvido de la gente que aun setoma a mal el hecho
embargo, no me afilié a ningún parti­ mi madre redactaba una queja escri­ aquello tuvo que ver esa característi­ lengua materna, usted creeque son deque yo pueda reír. En cierta mane­
do, ni tampoco experimenté la nece­ ta al director y el incidente se cerraba. ca de tener opinión, de elaborar ¡deas la consecuencia de un rechazo? ra, los comprendo. Por mi parte, estoy
sidad. Desde 1931 estaba convenci­ Tenía un día franco, lo que era algo a propósito de todo. Mire, nadie le re­ -Con frecuencia. Mire, lo que fue convencida de que Eichmann fue un
da de que los nazis terminarían to­ formidable. En cuanto a frases o con­ procharía a un hombre haberse he­ decisivo para mí no fue el año 1933. payaso. Leí su interrogatorio policial,
mando el poder, había conversado ductas antisemitasde otros niños, de­ cho nazi para salvar y dar de comer a Lo decisivo fue el día en que oímos son3.600páginas y muchas, muchas
mucho de ese tema con otras perso­ bíadefendermesolay ni siquiera men­ su familia. ¡Pero muchos de aquellos hablar de Auschwitz. veces reí a carcajadas. Son reaccio­
nas. Pero sólo fue al emigrar que me tar el tema a mis padres. En casa intelectuales realmente creyeronI ¡Al­ -¿Cuando fue? nes que la gente ha interpretado mal.
ocupé de ello en forma sistemática. ía reglas de conducta que permi- gunos por pocotiempo, pero el hecho -En 1943. Primero no lo creimos. Y sin embargo, es posible que yo me
-Yaqueestaba convencida des­ conservar la dignidad y estar pro- es que muchos intelectuales alema­ Pese a que mi marido y yo estimába­ ría tres minutos antes de mi propia
de 1931 de que los nazis llegarían nes elaboraron teorías sobre Hitler, mos a esos asesinos capaces de to­ muerte. ¿Es eso el tono? Es cierto, mi
aI poder, ¿no sintió la necesidad de -Usted estudió sucesivamente teoríasmuy interesantesITeoríasfan­ do. Pero aquello no lo creíamos, en tono suele ser irónico. En todo caso,
oponerse a ello adhiriendo a un Marburgo, Heidelberg y Fribur- tásticas, apasionantes, sofisticadas y parte porque estabafuerade toda ne­ el tono está asociado a la persona.
partido? ¿O pensaba que ello no con los profesores Heldegger, que planeaban muy alto, más allá de cesidad militar. Mi marido, que ha he­ Cuando me acusan de haber acusa­
tenía ya sentido? Bultmann y Jaspers. Sobre todo fi­ las divagaciones habituales. Los inte­ cho ciertos estudios militares, me de­ do al pueblo judío, se trata de una
-Podría haber tenido sentido. Pe­ losofía perotambién teologíay grie­ lectualescayeron víctimas de lat ram­ cía, ¡no hagas caso, no pueden haber mentira. Pero en lo que hace al tono
ro no tenía esperanza en ello. go. ¿Cómo hizo esa elección? pa de sus propias construcciones. llegado a eso! Y seis meses después, con el cual escribo, en eso no entro.
-¿Su compromiso político data -También me lo pregunto. Sim­ -¿Es por eso que quiso sepa­ lo debimos creer porque tuvimos las ¿Qué puedo hacer? No puedo ir por
de un hecho determinado? plemente, la filosofía se impuso en rarse de esos medios comprome­ pruebas. Ese fue el auténtico trastor­ ahí diciendo: ¡no me han comprendi­
-Podría hablar del 27 de febrero . Desde los 14 años. tiéndose en un trabajo político? no en nuestras vidas. Hasta ese mo­ do, he aquí la verdad sobre mis esta­
de 1933, día del incendio del Reichs- -¿Por qué? -Sí. El aspecto positivodela cosa mento nos decíamos: y sí. tenemos dos de ánimol Sería ridiculo.
tag, y de los arrestos ilegales que se -Había leído a Kant. Pensaba: si era el siguiente: tenía una certidum­ enemigos. ¿Por qué un pueblo no -Quisiera volver sobre un testi­
produjeron esa mismanoche. Los de­ estudio filosofía, estoy perdida. No bre que formulaba en esa época con puede tener enemigos? Pero aquello monio que usted dio de sí misma.
tenidos fueron a parar a campos de no amara la vida. Tenía que una frase: "Si me atacan como judía, eraotracosa. Era como si frente a no­ Dijo: “Jamás amé en mi vida a un
concentración o los sótanos de la la necesidad de la que le ha- debo defenderme como judía". No en sotros se abriera un abismo. Y no ha­ puebloo a una colectividad, ni a los
Gestapo. Para mi aquello fue un cho­ ís: comprender. tanto que alemana, ciudadana del blo del número de víctimas, hablo de alemanes, ni a los franceses, ni a
que tremendo y a partir de aquel mo­ -Aparte de Kant, ¿recuerda mundo o en nombre de los derechos la fabricación sistemática de cadáve­ los americanos, ni a la clase obre­
mento me sentí responsable. Tomé otras lecturas? humanos. Ahorabien, ¿qué podía ha­ res, en fin. no necesito extenderme ra. No amo sino a mis amigos, soy

CeDInCI
conciencia de que no podía continuar -La Filosofía de las visiones del cer concretamente en mi calidad de en detalles. Auschwitz no debió suce­ Incapaz de otra forma de amor. Te­
como mera espectadora, aunque la mundo de Jaspers, aparecida en judía? Mi necesidad de organizarme der. Ni siquiera hoy podemos llegar a niendo en cuenta que soy Judía, se­
conciencia de que la única salida po­ 20. Al mismo tiempo que leí aque- me llevóal sionismo, único movimien­ dominarlo. Al margen de eso, nuestra ría precisamente el amor por los ju­
sible era la huida de Alemania estaba , leí mucho a Kierkegaard. to que entonces estaba sólidamente vida en los Estados Unidos fue dura, díos lo que me parecería sospe­
ya clara en mí. Yo no era entonces -Cuando usted dejó Alemania organizado. éramos pobres, vivíamos de subsi­ choso". Quiero formularle esta pre­
sionista, aunque había sentido la in­ 1933, fue a París donde trabajó -Usted permaneció en Francia dios. Pero éramos jóvenes y también gunta: el hombre, en la medida en
fluencia del sionismo sobre todo en una organización que enviaba hasta 1940, cuando se trasladó a fuimos felices. Pero, Auschwitz. Eso que es capaz de obrar políticamen­
relación a la crítica o a la autocrítica Jóvenes y niños judíos a Palestina. los Estados Unidos, donde vivió te, ¿no tiene necesidad de ligarse a
que el sionismo practicaba en el seno ¿Qué puede decirme de ello? primero en Chicago y ahora en Nue­ -Su libro sobre Eichmann fue un grupo, de una relación que pue­
del pueblo judío. En 1933, Kurt Blu- -Yo venía de una actividad pura- va York. Quisiera preguntarle si us­ objeto de violentas discusiones, da llamarse en cierta manera de
menfeld, el jefe de la organización mante universitaria y aquel año de ted siente la ausencia de la Alema­ especialmente desde posiciones amor? ¿No cree usted que su acti­
sionista berlinesa, me ofreció partici­ 1933 tuvo para mí una influencia de­ nia prehltleriana, esa Alemania que judías. Sobre todo, lo que ha es­ tud pueda ser políticamente esté­
par en un trabajo de contrapropagan­ cisiva. ¡No debimos esperar a que ya no existirá más. Cuando viene a candalizado es la manera con la ril?
da, consistente en relevar todas las Hitlertomara el poder para saber que Europa, ¿es consciente de lo que que usted se refiere a la pasividad -No. Le diré que es precisamente
acciones antisemitas encurso enAle­ los nazis eran nuestros enemigos! subsiste y, correlativamente, de lo de los judíos ante los asesinatos la otra actitud la que es estéril. Perte­
mania. Ello era de una evidencia absoluta que ya está irremediablemente per­ masivos de los nazis e Incluso a la necer aun grupo es un hecho natural.
-¿Su arresto tuvo que ver con desde hacfapor lomenoscuatro años, dido? colaboración, o casi complicidad, Se pertenece a uno o a otro grupo por
para cualquier persona cuerda. Tam­ -¿La Alemania prehitleriana? No de algunos consejos de ancianos el hecho mismo de nacer. Pero perte­
-Sí. Pero fui muy afortunada por­ bién sabíamos que una gran parte del tengo ninguna nostalgia. En cuanto a judíos. ¿La hiere a usted la crítica necer a un grupo en el segundo sen­
que conseguí ser liberada a los ocho pueblo alemán marcharía tras él. Por lo que queda, queda la lengua. según la cual su libro está despro­ tido que usted lo dice, a saber, orga­
días, ya que hice amistad con el fun­ >no podemos hablar propiamente -¿Tiene para usted mucha Im­ visto de todo amor por el pueblo ju­ nizarse, es otra cosa. Esa organiza­
cionario de la policía judicial que me un shock en relación a 1933. portancia? dío? ción supone una relación con el mun­
arrestó. Entretanto, la organización -¿Quiere usted decir que el -Enorme. Siempre luché para no -Usted mismo, al formularme esa do. Lo que es común a quienes se or­
me había enviado un abogado, pero shockde 1933 consistió en que los perder mi lengua materna. Siempre pregunta, se hace eco de mis críticos. ganizan es lo que ordinariamente se
lo rechacé porque preferí confiar en acontecimientos de 1933 pasaron mantuve una cierta distancia tanto Jamás he reprochado al pueblo judío llama intereses. La relación directa y
las palabras de aquel funcionario que de ser hechos políticos a ser he­ frente al francés como al inglés en el sufaltade resistencia. Quien lo ha he­ personal que puede llamarse amor
me prometía liberarme, cosa que su- chos personales? que escribo ahora. cho ha sido el procurador israelita se­ existe naturalmente, de la manera
-No sólo ello. O bien, sí, en un -Quería preguntarle justamen­ ñor Haussner, durante el proceso a más intensa, en el efectivo amor y en
-¿Luego usted dejó Alemania? sentido. A partir de dejar ei país, todo te eso, ¿escribe en Inglés? Eichmann. un cierto sentido en la amistad. Allí,
-Sí, pero mi partida fue por vías lo político pasó también a ser algo —Sí, pero mantengo unaciertadis- -Los reproches se dirigen al una persona está concernida de una
clandestinas, ya que el proceso se­ personal. Pero en otro sentido, lo im­ tancia. Hay una diferencia increíble “tono” en que usted escribió el II- manera directa e independientemen­
guía su curso, y no podía abandonar portante era que una gran cantidad entre la lengua materna y cualquier te de su relación con el mundo. Por
el país legalmente. de amigos también se alineaban. ¡El otra, lo cual se resume en la siguien­ eso, individuos pertenecientes a las
-En la correspondencia que ya problema personal no era sólo lo que te cuestión: recuerdo algunos poe­ organizaciones más diversas pueden
he citado, señora Arendt, usted hacían los enemigos, sino los ami­ masen alemán, están presentes en lo entablar entre ellos relacióneseleamor
menciona como superflua una ad­ gos! Sucedía entonces en esa ola de más hondo de mi memoria, in the o amistad. Si se confunden lascosas,
vertencia que le hace Scholem, se­ uniformidad que crecía espontánea­ back of my mind. Es imposible repro­ sise trastorna el concepto de amor, el
gún la cual usted jamás podrá olvi­ mente y que notenía quever con el te­ ducir la naturalezade esa relación. La resultado es desastroso.»
dar su pertenencia al pueblo judío. rror, que un vacío se formaba alrede­ lengua alemana es lo esencial de lo
Usted escribió entonces: “Siem­ dor de nosotros'Vo vivía en un medio que he conservado.
pre consideré mi judeidad como un intelectual, y eso no sucedía en otros -¿Incluso en las peores épo-
dato real e Indiscutible de mí vida y medios. Por eso dejé Alemania bajo
nunca he deseado cambiar o des­ el imperio de una idea: ¡nunca más! -Siempre. Me decía: ¿Qué ha­
conocer hechos de ese género, In­ ¡Nunca más me afectará ningunaotra cer? ¡No es la lengua alemana la que
cluso en mi infancia". A ese res­ historia de intelectuales! Creo que si se volvió loca! Y además, nadapuede
pecto, quisiera hacerlealgunas pre­ los judíos alemanes y los intelectua­ reemplazarla. Es verdad que se pue­
guntas. Usted nació en Konisberg les judíos alemanes se hubieran en- de olvidarla. Hay ejemplos de perso­
D O S S I □
Hannah Arendt
Tres visiones
sobre Hannah Arendt En la brecha1
------------------------------------------------------------------------ P or C laudia H ilb-------------------------------------------------------------------------

Se publican a continuación obra de Arendt. El segundo tenido intensa circulación. “Yo tengo una metáfora (...) que nunca publiqué, que siempre guardé pa­
ra mí. Lo llamo pensar sin barandas. En alemán, ‘Denken ohne Gelander'.
tres trabajos sobre Hannab artículo pertenece a Gerard Le- Finalmente, incluimos un tra­ Es decir, cuando uno sube o baja las escaleras siempre puede agarrarse
de la baranda para no caerse. Pero hemos perdido estas barandas. Esto
Arendt. El primero pertenece a brun, filósofo francés radicado bajo de la argentina Claudia es lo que me digo. Y es también lo que trato de hacer.”2
Celso Lafer, brasileño, quien hace m ucho en Brasil, país Hilb, anticipo de un libro de

E
estudió con ella en Comell y es donde la obra de la autora de próxima aparición en Buenos
ción de nuestro tiempo, se revela a la
autor de varios libros sobre la La condición humana ba Aires. vez como condición humana: la bre­
cha entre el pasado y el futuro.
“Tiene dos adversarios: elprime­
ro lo empuja desde atrás, desde los
orígenes. El segundo le cierra el ca­
Hannah Arendt ¿Dónde podríamos mino hacia adelante. Elpelea contra
ambos. Por cierto, el primero lo apo­

CeDInCI
encontrar el mundo público ideal ya en la lucha contra el segundo ya
y Martin Heidegger de Hannah Arendt?
- de creer que si
ésa era su ambición, Hannah Arendt
puede descansar en paz. No creó nin­
que quiere empujarlo hacia adelante,
y del mismo modo lo apoya el segun­
do en su lucha contra elprimero em­
guna escuela; no hay, en sentido es­ pujándolo hacia atrás. Pero esto sólo
— ----------------------- Por Celso Lafer------------------------------- -------------------------P or G erard Lebrun------------ -------------- tricto, arendtianos, y probablemente es asi teóricamente. Ya que no sólo
no pueda haberlos. Su pensamiento, están allí los dos adversarios sino
annah Arendt tenía poco más visitó intermitentemente en sus si bien se orienta siempre hacia las también él mismo, ¿y quién conoce
omo observaCelso Lafer, el campode la política, para Hannah Arendt, no

H
realmente sus intenciones? Sea co­

C
de 18 añoscuando conoció a muchosviajes a Europa, a pesarde es ni el de la razón pura (Platón) ni el de la razón práctica (Kant). Quien mismas preocupaciones, es en oca­
i Heidegger. Se dedicó a él las decisivas diferencias perso­ siones caótico, muchas veces exce­ mo fuere, su sueño es que alguna
permanezca en esta alternativa,nunca se representará el actuar en su vez, en un momento de descuido -y
_ J con pasión, en una relación nales, políticas y filosóficas que los especificidadpolítica; no veráque lo esencial es el hechode queyo actúoentrelos sivo; es conocidoel abusocon que ci­
amorosa que perduró, aunque muy separaban. ta a otros autores, las torsiones a las para ello haría falta una noche más
otros y con los otros. No es de sorprender, pues, que la esenciade lo político fue oscura quela que hubonunca-aban-
amainadamente, hasta el final de la Intelectualmente, Hannah A- perdida desde la Antigüedad. Hay un vínculo entre la muerte de la Ciudad, que somete los textos de Kant o los
década del '20. A comienzos de : rendtooincidecon Martin Heidegger hechos de la revolución americana, donará de un salto la línea de comba­
comunidad de los hombres libres, y el nacimientode la libertad" entendida como tey quegracias a su experiencia en el
1930, la simpatía de Heidegger por en cuanto al entendimiento de la alacena de la "voluntad" individual. despertando la legítima furia de kan­
el nazismo los apartó... Se reen­ función del lenguaje como preser­ tianos e historiadores. Y, pese a ello, combate será erigido enjuez de la lu­
De ese desconocimiento de lo político, uno de los mejores indicio? es la cha entre sus dos adversarios."
contraron en 1949, en el primer vación y revelación. De allí su per­ importanáaquelosmodernosdanal conceptodesoberanía. Laconstitucióndeuna es sin duda uno(a) de losteóricos po­
viaje de Hannah Arendt a Europa manente interés por la literatura y comunidad política es así resumida en la solución del siguiente problema: ¿cómo líticos de este siglo más unánime­
después de la guerra. En ese en­ su encanto con la poesía y los transformar a los hombres en súbditos obedientes?Y lo político, desde entonces, mente reconocidos y de quien ha po­ Alrededor de esta parábola de
cuentro. Heidegger confesóque ella poetas. A Heidegger, Hannah A- dido afirmarse que "hay en ella una vi­ Kafkase desarrolla el prefacio que in­
esconcebidoya seabajola égidadelaVerdadqueseimpone(el Estadohegeliano), troduce a la lectura de Between past
había sido la pasión de su vida, la rendt debe su visión de la relación ya sea como un campo de fuerzas que una fuerza superior debe dominar (el sión del hombre social y político tan
fuente inspiradora de su trabajo y el entre el ser y la temporalidad, que Leviatán de Hobbes)... Estas dos concepciones tienen al menos en común el abarcadora como las de Hobbes, He- and futura: slx exerclses in politl-
ímpetu que lo habían llevado a es lo que explica su entusiasmo por gel. Mili y Marx".3 cal thought.5 En sutránsito se van di­ tiempo deja de ser ese flujo ininte­ sión de actor, de comenzador, ancla­
objetivodeneutralizaro desuperarla anarquíadeprincipiodela sociedadcivil. Vale bujando en filigrana temas centrales
escribir Ser y tiempo y Kant y el Ser y tiempo. No aceptaba, sin decir queambassuponen la negaciónradical de la Ciudad(polis). Laposibilidadde Este reconocimientotieneporob- rrumpido. Comienzo de un comienzo, da en su capacidad de acción y de pa­
problema de la metafísica. De allí embargo, la preocupación exclu­ jeto no tanto sus conclusiones o sus de la obra de Arendt: la acción, el jui­ dice Arendt, poniéndolo en palabras labra, que el hombre se revela en su
que todavía haya en ella un espacio público en el cual los hombres intenten cio, el comienzo, la libertad. Y sobre
su vergüenza. Esta no era sólo siva de Heidegger con la historia convencerse unos a otros, de aplanar sus divergencias, de decidir en común, esta postulados, sino, sobre todo, su mis­ de San Agustín; ecos de otros pasa­ singularidad en un mundo encomún.’
política, como pensé, cuando le del ser, que lo obnubilaba para la idea noes tomada más en serio (siquiera por Rousseau). Suponiéndose que esta ma tarea de pensar. En su libertad, su todo, cómo pensar en esta brecha en­ jes de La condición humana, de la Para que hubiera un principio fue el
pregunté a Hannah Arendt en Cor- historia humana, y, por lo tanto, tenaz originalidad de pensadora sin tre pasado y futuro; los tiempos son capacidad del hombre de comenzar hombre creado. Es en tanto gastador
nell, cuál había sido la actitud de para un existencialismo abierto, barandas, su alerta constante ante lo oscuros por cierto, pero no son sólo algo nuevo, anclada en la condición de lo inesperado, de lo "infinitamente
Heidegger cuando ellos volvieron a como el de Hannah Arendt en rela­ que el acontecimiento nos hace pen­ opacidad. La rotura en el flujo tempo­ humana de natalidad. El hombre co­ improbable", es porque es capaz de
verse después de la guerra, ción a temas como los de la sar, aquello que ha echado una luz di­ ral estambién irrupción luminosa, con­ mo comenzador: “(Initium) ergo ut es- acción -y actuar, en su sentido origi­
habiéndome ella respondido, en­ comunidad, el diálogo, la amistad, ferente sobre lo impensado, lo oculto dición de posibilidad de la luz. set, creatus est homo, ante quem nu- nal, remite a comenzar-que el hom­
tonces, que él estabaavergonzado. la pluralidad, la natalidad y la ac­ o lo nuevo. Arendt no nos dice quéde­ En esta parábola, señala Arendt, llus fuit" (para que hubiera un inicio bre erige, posee, un mundo en común
Había otro componente, de natu­ ción. Mientras tanto, sólo se dis­ bemos pensar; tan sólo nos enseña el pasado no es. como en la mayoría fue creado el hombre, antes del cual con los hombres. "Sólo la acción es
raleza personal, en ese estado de puso efectivamente a hacer una cómo debemos hacerlo. de las metáforas, un pesoque el hom­ no hubo nadie), dice San Agustín en prerrogativa exclusivadel hombre; no
espíritu y que contemplaba lo que crítica profunda a Heidegger, sobre Múltiples temas atraviesan su bre carga sobre sus espaldas y del su filosofía política. Este comienzo no hay bestia ni dios capaz de acción, y
representara, para la joven Han­ todo al segundo Heidegger, cuyo obra, dispuestos por logeneral enfor­ que debe desembarazarse para se­ es lo mismo que elcomienzo del mun­ sólo la acción depende enteramente
nah, lasdificultades de unarelación rechazo a la voluntad, a criterio de ma de pares opuestos: libertad y libe­ guir hacia adelante; por el contrario, do; no es el comienzo de algo sino de déla presencia constante de otros.8"
amorosa secreta con su profesor, Hannah Arendt, le impedía percibir ración, verdad de hecho y verdad lo empuja hacia el futuro, aquello que alguien, él mismo un comenzador. Capacidad siempre renovada, co­
casado y padre de familia. las posibilidades de la política y de científica, revoluciónfrancesa y revo­ simultáneamente lo impulsa hacia el Con la creación del hombre, el princi­ mienzo de un comienzo, con cada
"Las grandes pasiones, como la acción, en aquello que vino a ser lución americana, política y filosofía, pasado. Desde el punto de vista del pio del comienzo entró en el mundo nuevo nacimiento es dado al mundo
las obras maestras, son raras", The Life of the Mind, más precisa­ vita activa y vita contemplativa, traba­ hombre, el tiempo no es un flujo con­ mismo, lo cual no es sino otra mane­ de los hombres un nuevo comenza­
escribió Balzac en una frase que mente en 1974, cuando revió los jo y acción. Hábito aristotélico, bro­ tinuo: está interrumpido en el medio, ra de decir que el principio de libertad dor. Es la condición humana de nata­
Hannah Arendt usó como epígrafe textos de sus "Gifford Lecturas” y meaba Arendt.4 Pasión del pensa­ allí donde está "él"; ese lugar no es el se creó con la creación del hombre y lidad la que parece ofrecer la resis­
en su ensayo sobre la escritora estaba cerca de que Heidegger a miento por abrir brechas, por instalar­ presente, es una brecha que "él", con tencia última a la reducción del actor
dinamarquesa Isak Dinesen. De allí los 85 años, viejo y próximo a su se en ellas, para desde allí interrogar­ su resistencia, hace existir. Es sóloen Comienzode un comenzador, na­ al homo fabero al animal laboraos; es
su lealtad a Heidegger, a quien, muerte, no la leería más. se sobre aquella que, siendo condi- tanto que "él" abre una brecha que el cimiento de un actor. Es en su dimen­ en ellaque reside el límite del proyec-
después de ese primer encuentro,
D 0 s S E fí

o totalitario. Los orígenes del totall-
arismo culminacon la mismacitade
San Agustín; la capacidad de comen­
tienda un puente, o se instale en la
tensión de esta distinción entre vita
activa y vita contemplativa, entre ac­
misteriosa que la facultad de comen­
zar, la facultad del Juicio".”
Basándose en una lectura sin du­
(...) esta brecha fue colmada por lo
que desde tiempos de los romanos
hemos llamado la tradición. Nadie ig­
nora que esta tradición se fue des­
gastando con el avance de la edad
juzgar, con las cuales pensar; las for­
mas del pasado ya no nos brindan
una regla para acoger el aconteci­
miento. El totalitarismo se ha inserta­
LOS HECHOS
do en la brecha, poniendo en eviden­
zar se identifica políticamente con la ción colectiva y acción individual, en­ da asaz libre de la Crítica del juicio moderna. Cuandofinalmente se que­ cia nuestra orfandad: la lógica totali­

CONCRETOS
ibertad del hombre. Cada nuevo na­ tre la publicidad del mundo y el se­ de Kant, el juicio aparece en Arendt bró el hilode la tradición, la brecha en­
cimiento desafía al proyecto totalita­
rio;con cada nacimiento comienza un
Tres visiones creto del yo retirado del mundo.
En La vida del espíritu Arendt
como actividad reflexiva, es decir no
subsumida aúna regla sino partiendo
tre pasado y futuro dejó de ser una
taria ofrece un escape suicida a la
pérdida del mundo común, al aisla­
condición particular de la actividad miento del animal laboraos.
comenzador. 'Initium ut esset homo
creatus est, dice Agustín. Este co­ sobre vuelve sobre la parábola kafkiana:
“Toda nueva generación, todo nuevo
de lo particular para tender hacia su
universalización. El juicio debe juzgar
del pensar y unaexperiencia reserva­
da al pequeño número de aquéllos
Debemos aprender a pensar en
esta brecha, convertidos en pensa­ "Desarrollo del cooperativismo
mienzo es garantizado por cada nue­ ser humano, debe, al tomar concien­ ante cada acontecimiento sin dispo­ (coordinación con Fundación San José,
vo nacimiento; estecomienzo es, des­ Hannah Arendt cia de que se halla inserto entre un ner de una regla general bajo la cual
que tenían por ocupación esencial el
pensar. Se tornó una realidad tangi­
dores sin barandas; no se trata de re­
mendar el hilo de la tradición, mucho
argentino-brasilero comofactorde In­
tegración". conla FundaciónParquede
BefoHorizonte, Brasil).
de luego, cada hombre.'8 pasado y un futuro infinitos, descubrir ampararse; si, situados en la brecha ble y un problema para todos; lo cual menos de edificar artefactos moder­ Alta Tecnología de Pelrópolis (Brasil).
Seguimos a Arendt en su lectura de nuevo y trazar afanosamente el entre pasado y futuro podemos con­ significa que se transformó en un he­ nos que oculten el abismo. Sólo de­ Programa de investigación "La conta­
Programa de ejecución simultánea ten- minación hidrica en la cuenca Matanza-
de la parábola kafkiana: la inserción camino del pensamiento .12 También cebir la voluntad como aquella facul­ cho de importancia política."17 bemos preocuparnos "por cómo mo­ dienlealaintegraciónycomplemenlación
de “él" en el flujo temporal no puede aquí encontramos la idea de comien­ tad que tiende hacia el futuro, que po­ La ruptura del hilo de la tradición Riachuelo" (International WaterTribunal,
vernos en esta brecha -la única Amsterdam, Holanda).
ener por efecto una mera interrup­ zo asociada a la natalidad, también ne un límite -en su acción- a la inde­ nos ha dejado desmunidos. Hemos gión en laque tal vez algún día pueda duye módulos de formación,Comodón
ción; el choque de las dos fuerzas, su en estos pasajes aparece la idea de terminación y a la multiplicidad del fu­ perdido las categorías con las cuales aparecer la verdad."18 ♦
combate allí donde "él" se ha consti­ un comienzo que no tiene su fin ins­ turo, el juicio aparece como la facul­ Programadeformación"Munidpfoyplani-
tuido en brecha debe resultar en una cripto en sí mismo. "En esta brecha tad que pone un límite a la indetermi­ "ProyectoParqueecológlcodeLanús", ficación descentralizada" (junio-
diagonal, una tercera fuerza. Mien­ entre pasado y futuro encontramos nación y a la multiplicidad del pasado, Buenos Aires. Estudio, desarrollo del noviembre. 1991).
tras que las dos fuerzas en combate nuestro lugar en el tiempo cuando y que brinda a la decisión un suelo anteproyecto y campaña de difusión y
-el pasado y el futuro- son ilimitadas pensamos, es decir, cuando tenemos desde donde disponer lavoluntad. Li­ movilización popular parala transforma­ Programa "Centrode estudios y capaci­
en su origen y poseen su punto de lle­ la suficiente distancia del pasado y el brados como estamos a la ausencia ciónde30 hectáreassubutilizadasporel taciónparael trabajosocial" (San Isidro,
gada allí donde se enfrentan, esta futuro para confiarnos la responsabi­ de reglas trascendentes que nos indi­ ferrocarril, ubicadas en pleno centro de BuenosAires),
diagonal resultante tendrá un origen lidad de descubrir su significado, de quen cómo actuar, roto el hilo de la Lanús,enunparquepúblicoparamásde
eneste choque, pero será ilimitada en asumir el papel de árbitros qjueces tradición, el juicio nos preserva de la 600.000vecinos. "Instituto de Medio Ambiente y Habitat
su fin. "Esta fuerzadiagonal, cuyo ori­ de los distintos asuntos, sin fin, de la omnipotenciade la voluntad.16 La ape­ Popular" (IMAHP).
gen es conocido, cuya dirección está existencia humana en el mundo, sin lación al seosuscommunis, al "poner­ ’ Estetexto retomaalgunasde las ideas desarrolladasenel prefacio "Programa de formación y centro

CeDInCI
dada por el pasado y el futuro, pero llegar jamás a la solución final de los se en el lugar-potencial-del otro" es­ al libro El resplandor de lo público - en torno de Hannah Arendt, que vecinal comunitario", en Monte Chin­
cuyo fin último se halla en el infinito, enigmas, pero siempre dispuestos a tá señalando en Arendt un espacio de "Instituto de Participación Popular" (IP-
aparecerá próximamente en Editorial Nueva Sociedad. gólo, Buenos Aires. Prevé la construc­ PAM).
es la metáfora perfecta para la activi­ aportar nuevas respuestas alas cues­ reabsorción de la soledad del pensar ’ "On HannahArendt", discusión de Arendt con ungrupode intelec­ ción de lasedede la Unión Vecinal Villa
dad del pensar."'0 tiones suscitadas sobre el ser y la comunidad del actor. El juicio se tuales en ocasión del coloquio realizado sobre su obra en noviembrede Ofeliayeldesarrollodesubprogramasde
Partimos de la acción y nos en­ todo esto.”13 Eljuicio, apoyado muestra como aquella facultad que 1972en Toronto, y publicadoen M. Hill (ed.), Hannah Arendt: the reco- "InstitutodeIntegracióndeAméricaLatina
contramos con el pensar. La condi­ otra facultad que es el asume la brecha entre pasado y futu­ capacitación de agentes de desarrollo y Relaciones Internacionales" (IIALRI).
very of the public world, St. Martin's Press, 1979, pp. 336-337. comunitarioy formaciónde agentespar­
ción humana había separado vita instala en esta t ro, en tensión entre vita activa y vita ’ Bemard Crick, "Onrereading theOrigins of Totalitarianism", Social amédicos.
activay vita contemplativaa fin de es­ tía que su prop contemplativa. Retornemos al texto Research 44/1. Spring 1977, p. 126. "GrupodeEstudiodelasCulturas Popu­
tudiar las dimensiones de la primera, seaasí quedeb de Kafka: no hemos de ceder al sue­ ‘"Siemprequeempiezoalgo-no megusta saber demasiadoquées­ lares" (GECUPO).
y había mostrado como el mundo mo­ timos párrafos de La vida del espíri- ño de elevarnos por encima de los toy haciendo-, siempreempiezodiciendo"Ay Bnosonlo mismo". Por su­
derno tendía a someter la acción al dos antagonistas, a ese viejo sueño puesto que esto me viene directamente de Aristóteles." "On Hannah Revista "Habitar al sur" (publicación
mperio del homo fabery del animal nos encontramos con aquella misma de una región suprasensible fueradel Arendt", en: M. Hil (ed.), op. cit., p. 338. Programa'Desarrollosocioeconómicode técnico-institucional abierta a la pro­
laboraos. Y, sorpresivamente, culmi­ cita de Agustín, y en los que Arendt espacio y del tiempo; debemos estar ‘Citoaquí laversión francesa(p. 16). El prefaciose intitula"Labréche Epuyén(Chubut)"(riego,agroganaderia, blemáticay laparticipacióndemovimien­
naba en una frase de Catón: nunca se anuncia un segundo libro, frustrado dispuestos a instalarnos en la brecha, entre le passéet le futur", y el librofuepublicado bajoel título La crise de ordenamientoterritorial,formaciónyasis­ tossocialesyentidadesnogubernamen­
está más activo que cuando no se ha­ por su muerte, en el que se ocuparía a ser abismoy diagonal. "Durante lar­ la culture. Coll. Idées Gallimard, 1972. tenciatécnica). tales).
ce nada, nunca menos solo que cuan­ de “otra facultad mental no menos gos momentos de nuestra historia • The Human Condition, Chicago, University of Chicago Press,
do se está solo. Dejaba así abierta la 1958, p. 177.
pregunta de si no sería finalmente la y formas cooperativas de producción" folletostécnicos).
actividad de pensar -que suponía­ de la vitaactiva, distinguiendola acciónde la fabricación, producción in­
mos adscripta a la vita contemplati­

O
tencional de y de la labor, merareproducciónde
va- la que podría salvaguardar la ca-
oacidad de acción -dimensión cen­
tral, específicamente humana, de la , Madrid, Taurus. 1974, p. 580.
vita activa-, la que ofrecería un punto e la Culure, pp. 22/23.
de anclaje a la libertad, a la capacidad respecto. Arendt señalaque "lo que a mí me interesó de la Vita
de comenzar, o porqué no, a la huma­ Activafueel que lanocióncontrariadecompletaquietud"eratanabruma­

DE UN
nidad del hombre." La acción, recor­ dora, que en comparacióncon elladesaparecían todaslas otras diferen­
demos, ya era concebida en La con­ cias entre las distintasactividadesde la VitaActiva (...). Fui consciente,
dición humana como incapaz de sinembargo, dequepodíaver estacuestióndesdeunaperspectivatotal­
abrazar su fin, su finalidad: "La razón mentedistinta, y a fin de mostrar mis dudasfinalicéel estudio sobrelavi­
por la cual nunca podemos predecir da activa con una curiosa frase que Cicerón adscribía a Catóny quede­
con seguridad el resultado y fin de cía: "nunca(...)". La vida del espíritu, Madrid, Centrode Estudios Cons­
una acción es simplemente que la ac­ titucionales,1984, pp. 17-18.
ción no tiene fin". La acción de pen­ ’■La vida del espíritu, p, 240.
sar. y el pensar como interrupción,

PROYECTO
” La vida del espíritu, pp. 239-240. Yo subrayo C.H.
como comienzo, tal vez sea así como ’■No abordoaquí la distinciónde lasfacultades del espíritu, y enpar­
debemos situarnos aquí. La vida del ticular entre el pensar y el juicio, ya queesto exigiría una larga exégesis
espíritu abre con la misma frase de de los textos en cuestión. Paraello remitoal esclarecedor articulode Mi-
Catón con la que cerraba La condi­ chael Denneny, "The privilege of ourselves: Hannah Arendt on judging",
ción humana: singulares paralelos enM. Hill (ed.). op. cit, e incluidoen El resplandor delo público-en tor­
entre la acción y el pensar-natalidad, no de Hannah Arendt (ver nota 1).
comienzo, ausencia de fin-. Y una ” La vida del espíritu, p. 496.
distinción central: la acción sólo es

ABIERTO
'■Véase Denneny. op. cit.; también el ensayode R. Beiner en Han­
posible en un mundo compartido; el nah Arendt - Lecturas on Kant's política! phllosophy, The University
pensar es la actividad solitaria del yo of Chicago Press, 1982.
consigo mismo. Será la facultad del " "La bréche entre...", en Crlse de la Culture, p. 25.
juicio la que casi subrepticiamente • Ibid., p. 25.
0 s s E R

La banalidad ocasión del imperialismo británico; tos


ingleses rechazaron este procedi­
nía carácter meramente accidental el
que fuese él quien lo hubiese hecho,
FUNDACION
del mal
miento como medio de mantener su y no cualquier otro, por cuanto, a fin

DEL
dominio en la India. Esta expresión de cuentas, alguien tenía que ha-
tiene la ventaja de deshacer el prejui­
cio según el cual actos tan monstruo­ Desde luego, para las ciencias
sos solamente pueden cometerse políticas y sociales tiene gran impor­
contra una nación extranjera o una ra­ tancia el hecho de que sea esencial
za distinta. Es notorio que Hitler co­ en todo gobierno totalitario, y quizá
■Por Hannah Arendt- menzó sus matanzas colectivas con­ propio de la naturaleza de toda buro­
cediendo la “muerte piadosa" a los cracia, transformar a los hombres en
pero en realidad mucho más simple “enfermos incurables", y que tenía la funcionarios y simples ruedecillas de
que el examen de la interdependen­ intención de continuar su programa la maquinaria administrativa, y, en
de exterminio desembarazándose de consecuencia, deshumanizarles. Yse

SUR
cia entre la irreflexión y la maldad, es
la cuestión referente al tipo de delito los alemanes "genéticamente lesio­ puede discutir larga y provechosa­
cometidoporEichmann, un delito uná­ nados" (con enfermedadesde los pul­ mente sobre el imperio de Nadie, que
nimemente considerado sin prece­ mones y el corazón). Pero prescin­ es lo que realmente representa la for­
dentes. Elconceptodegenocidio, acu­ diendo de este hecho, resulta eviden­ ma de administración política conoci­
ñado con el explícito propósito de tipi­ te que tal tipo de matanzas puede di­ da con el nombre de buro-cracia. Pe­
ficar un delito anteriormente desco­ rigirse contra cualquier grupo, es de­ ro es preciso comprender con toda
nocido, aun cuando es aplicable al cir, el criterio selectivo depende úni­ claridad que la administración de jus­
caso de Eichmann, no es suficiente camente de ciertos factores circuns­ ticia únicamente puede prestar aten­
para abarcarlo en su totalidad, debido tanciales. Cabe concebir que en el ción a estos factores en cuanto cons­
a la simple razón de que el asesinato sistema económico basado en la au­ tituyen circunstancias modificativas
nalidad del mal lo hago solamente a tomación que puededarse en un futu­ de la responsabilidad criminal, cual,
un nivel estrictamente objetivo, y me masivo de pueblos enteros no carece
de precedentes. La expresión “ma­ ro no muy distante, quizás aparezca por ejemplo, en el delito de robo se to­
limito a señalar un fenómeno que, en

CeDInCI
tanzas administrativas" parece más la tentación de exterminar a aquellos ma en cuenta la situación económica
el curso del juicio, resultó evidente. cuyo cociente de inteligencia esté de­ del acusado, sin que por ello quede el
Eichmann no era un Yago ni era un conveniente. Esta expresión nació en
bajo de cierto nivel. robo, en sí mismo, justificado, y sin
Macbeth, y nada pudo estar más lejos
desús intenciones que "resultar un vi­ I fue En Jerusatén este problema no
adecuadamente estudiado, debi­
borrarlo, ni mucho menos, del articu­
lado del código. Cierto es que la mo­
llano" al decir de Ricardo III. Eich- do a que es muydifícil encuadrarlo en derna psicología y sociología, por no
manncarecíade motivos, salvo aque­
llos demostrados por su extraordina­
ria diligencia en orden a su personal
Lunes 22 de ju lio de 1985 el ámbito de lo jurídico. Allí escucha­
mos las afirmaciones de la defensa,
en el sentidode que Eichmann tan só­
hablar ya de la moderna burocracia,
nos han habituado grandemente a no
atribuir responsabilidad al ejecutor de
progreso. Y en sí misma, tal diligencia lo era una “ruedecita" en la maquina­ determinado acto, en virtud de tal o
no era criminal; Eichmann hubiera si­ Por Jorge Luis Borges ria de la Solución Final, así como las cual determinismo. La validez de es­
do absolutamente incapaz do asesi­ afirmaciones de la acusación, que tas aparentemente más profundas ex­
nar a su superior, para heredar sucar­ ■ Mientras se desarrollaba el Juicio oral a los ex comandantes, Jorge Luis Borges concurrió
a una de las audiencias de la Cámara Federal. Al día siguiente, publicó un artículo, aquí repro­ creía haber hallado en Eichmann al plicaciones del comportamiento hu­
go. Para expresarlo en palabras lla­ verdadero motor de aquella máquina. mano es muy discutible. Pero, en
nas, podemos decir que Eichmann, ducido, en el diario Clarín. Fue uno de los últimos textos de Borges que se conocieron y no ha
sido recogido hasta ahora en ningún volumen. Sorprendentemente, el escritor argentino utili­ Por mi parte, a ningunade las dosteo­ cambio, no cabediscutirque sobre su
sencillamente, no supo¡amás lo que rías di mayor importancia que la que base sería imposible elaborar un pro­
hacia. Y fue precisamente esta falta za un concepto, el de la Inocencia del mal cuyo parentesco con una Idea básica de Hannah
Arendt es claro. ¿Coincidencia? ¿Alguna forma de filiación común? les otorgaron tosjueces, por cuanto la cedimiento judicial, fuese de la clase
de imaginación lo que le permitió, en teoría de la ruedecilla carece de tras­ que fuere, y que la administración de
el curso de varios meses, estar fren­ cendencia jurídica, y, en consecuen­ justicia, considerada según los crite­
te al judío alemán encargado de efec­ e asistido, por primera y última vez, a un juicio oral. Ocurrió un 24 de diciembre. Llevaron a todos los presos a cia, poco importa determinar la mag­ rios de estas teorías, es una institu­
tuar el interrogatorio policial en Jeru- Un juicio oral a un hombre que había sufrido unos una sala donde no habían estado nunca. No sin algún nitud de la función atribuida a la rue­ ción muy poco moderna, por no decir
salén, y hablarle con el corazón en la cuatro años de prisión, de azotes, de vejámenes y asombro vieron una larga mesa tendida. Vieron manteles, da Eichmann. El tribunal reconoció, anacrónica. Cuando Hitler dijo que
mano, y explicándole una y otra vez de cotidiana tortura. Yo esperaba oír quejas, denuestos y platos de porcelana, cubiertos y botellas de vino. Después como es lógico, en su sentencia, que amanecería el día en que, en Alema­
las razones por las que tan sólo pudo la indignación de la carne humana interminablemente so­ llegaron los manjares (repito las palabras del huésped). el delito juzgado únicamente podía nia, seríaconsiderado como “una ver­
alcanzar el grado de teniente coronel metida a ese milagro atroz que es el dolor físico. Ocurrió al­ Era la cena de Nochebuena. Habían sido torturados y no ser cometido mediante el empleo de güenza” tener la profesión de jurista,
de las SS, y que ninguna culpa tenía go distinto. Ocurrió algo peor. El réprobo habla entrado ignoraban que los torturarían al día siguiente. Apareció el una gigantesca organización buro- quizás hablaba, harto consecuente­
él de nohaber sido ascendido a supe­ enteramente en la rutina de su infierno. Hablaba con sim­ Señor de ese Infierno y les deseó Feliz Navidad. No era cráticaquese sirvierade recursosgu- mente, de su sueño de instaurar una
riores rangos. Teóricamente, Eich­ plicidad, casi con indiferencia, de la picana eléctrica, de la una burla, no era una manifestación de sí mismo, no era un bernamentales. Pero en tanto y en perfecta burocracia.
mann sabía muy bien cuáles eran los represión, de la logística, de losturnos.del calabozo, de las remordimiento. Era, como ya dije, una suerte de inocencia cuanto las actividades en cuestión La sentencia de muerte no fue
problemas de fondo con que se en­ esposas y de tos grillos. También de la capucha. No había constituían undelito-tocual.comoes inesperada, y casi nadie estaba en
frentaba, y en sus declaraciones pos­ odio en su voz. Bajo el suplicio, había delatado a sus ca­ ¿Qué pensar de todo esto? Yo, personalmente, des­ lógico, era la premisa indispensable a desacuerdo con ella; pero lasituación
treras ante el tribunal habló de "la maradas; éstos lo acompañarían después y le dirían que creo del libre albedrío. Descreo de castigos y de premios. la celebración del juicio- todas las cambió cuando se supoque los israe­
nueva escalade valores prescrita por no se hiciera mala sangre, porque al cabS de unas "sesio­ Descreo del infierno y del cielo. Álmafuerte escribió: ruedas de la máquina, por insignifi­ litas la habían ejecutado. Las protes­
el gobierno (nazi)". No. Eichmann no nes" cualquier hombre declara cualquier cosa. Ante el fis­ Somos los anunciados, los previstos. cantesque fueran, se transformaban, tas duraron poco, pero procedían de
era estúpido. Unicamente la pura y cal y ante nosotros, enumeraba con valentía y con preci­ Si hay un Dios, si hay un punto omnisapiente; desde el punto de vistadel tribunal, en orígenes diversos y fueron formula­
simple irreflexión -que en modo algu­ sión los castigos corporales que fueron su pan nuestro de y antes de ser, ya son, en esa mente, autores, es decir, en seres humanos. das por personas de prestigio e in­
no podemos equiparar a la estupi­ cada día. Doscientas personas lo oíamos, pero sentí que los judas, los pilatos y los cristos. Si el acusado se ampara en el hecho fluencia. El argumento más común­
dez- fue lo que le predispuso a con­ estaba en la cárcel. Lo más terrible de una cárcel es que de que no actuó como tal hombre si­ mente empleado fue que los hechos
vertirse en el mayor criminal de su Sin embargo, no juzgar y no condenar el crimen sería
quienes entraron en ella no pueden salir nunca. De este o fomentar la impunidad y convertirse, de algún modo, en su no como un funcionario cuyas funcio­ de Eichmann difícilmente podían ser
tiempo. Y si bien esto merece ser cla­ del otro lado de los barrotes siguen estando presos. El en­ nes hubieran podido ser llevadas a objeto de castigo humano, y que ca­
sificado como "banalidad", e incluso cómplice.
carcelado y el carcelero acaban por ser uno. Stevenson Es de curiosa observación que los militares, que abo­ cabo por cualquier otra persona, ello recía de sentido imponer la pena de
puede parecer cómico, y ni siquiera creía que la crueldad es el pecado capital; ejercerlo o su­ equivale a la actitud del delincuente muerte por delitos de tal magnitud, lo
con la mejor voluntad cabe atribuir a lieron el Código Civil y prefirieron el secuestro, la tortura y
frirlo es alcanzar una suerte de horrible insensibilidad o la ejecución clandestina al ejercicio público de la ley, quie­ que, amparándose en las estad Esti­ cual era desde luego verdad, en cier­
Eichmann diabólicaprofundidad, tam­ inocencia. Los réprobos se confunden con sus demonios, ran acogerse ahora a los beneficios de esa antigualla y casdecriminalidad-que señalan que to sentido, salvo en cuanto no podía
bién es cierto que tampoco podemos el mártir con el que ha encendido la pira. La cárcel es de busquen buenos defensores. No menos admirable es que en tal o cual lugar se cometen tantos implicar que aquel que había asesi­
decir que sea algo normal o común. hecho, infinita. haya abogados que, desinteresadamente sin duda, se de­ o cuantos delitos al día-, declarase nado a millones de seres humanos SedeCentral: Joaquín V. González 2889 (1842) Lanús, BuenosAires » 240-4488
No es en modo alguno común que un De las muchas cosas que oí esatarde y que espero ol­ diquen a resguardar de todo peligro a sus opresores de que él tan sólo hizo lo que estaba ya debiera escapar al castigo, precisa­ Sede BuenosAires: Cochabamba449 (1150) Capital Federal» 361-8549
hombre, en el instante de enfrentarse vidar, referiré la que más me marcó, para librarme de ella. estadísticamente previsto, y que te- mente por esto. En esferas de impor- FAX: 54-1-802.06.11 Télex: 18348CEMOSAR
A

El oscuro cristal
de una campana
----------------------------------- Por Luis Priamo-------------------------------------

tinos desde el poder y los medios de antimperialistas gratuitas a loscomu-


comunicación respecto de la sobera­ nistasyfilocomunistaslatinoamerica-
nía, la guerra y sus responsables, a

E
partir de 1982. Malvinas fu e una epifanía En segundo lugar la decisión del
histórica para los gobierno admite tácitamente que la
ocupación del 2 de abril y la guerra
2. argentinos, una posterior no fueron acontecimientos
condensación de impostergables para la defensa de

CeDInCI
En primer lugar la decisión del go­ nuestra soberanía nacional, como pu-
bierno es la más cínica confesión de experiencia colectiva a la blicitaban los yingles patrióticos obs­
que Malvinas fue siempre un bluff, cenos del '82 -vg. "La soberanía no
una carta retórica para jugar cadavez que todavía le debemos un se negocia"-envueltos en la bandera
que hiciera falta agitar el nacionalis­ desbrozamiento minucioso. argentina. Si hoy, después de la gue­
I tratamiento que mo con fines de política interna. Co­ rra, es posible volver a la situación an­
dispuso la administración justicialista mo ahorael imperativo categóricopa­ terior por decisión soberanade ungo­
triótico expreso es hacer negocios bierno republicano legítimo, tanto la
para la cuestión Malvinas pone las -negocios privados, por supuesto-,
cosas en su lugar por primera vez ocupación militar de las islas, como el
más que ideología, la “causa" se plie­ rechazo de la resolución 502 de las
desde la guerra: la soberanía deberá ga y acomoda debajo de una"campa­ Naciones Unidas y la guerra poste­
subordinarse a los negocios. Así fue na de cristal’.* Todos los 2 de abril se
siempre hasta 1982 y todo iba bien. Al rior, fueron decisiones políticas cuyo
menos nunca vi llorar a nadie por su le rendirán honores, tanto a ella como fundamento real no fue la defensa de
a sus héroes, y quizá se multiplique la nuestra soberanía nacional.
soberanía perdida, ni vi que nadie se retórica patológica elaborada en los
juramentara por las "irredentas", ni servicios publicitarios castrenses, que
que saltara de entusiasmo patriótico haconvertido a laderrotade Malvinas
cuando algún nacionalista fanático en un episodio más de nuestra inde­
clavaba una bandera argentina entre pendencia nacional-Vilcapugioy Ayo-
las piedras de las islas -más bien El bluff de las "irredentas" fue
causaba gracia, según recuerdo-; y huma, o algo así-, pero nada más. Ya inaugurado en 1946 por el gobierno
no será un motivo de fricción irritante del general Perón bajo el slogan "Las
estoy seguro de que muchísimos ar­ y perturbador con los Estados Uni­
gentinos, antes del 2 de abril de aquel Malvinas son argentinas". Hasta ese
año, necesitaban una llamada aclara­ dos, sobre todo, ni brindará banderas momento el tema se agitaba en pe-
toria al pie de página cuando apare­
cía la palabra kelpers. En fin, más
vale así: si fuera cierto que para el
pueblo argentino las Malvinas son sa­
gradas, estaríamos en vísperasde un
levantamiento popular contra el go­
bierno. Pero a mi modo de ver no hay
peligro.
No estoy en contra de la iniciativa
del presidente Menem. Me parece
mucho más razonable que su prédica
vehemente contra la "desmalvlniza-
ción" (neologismo antipacifista bas­
tante maloliente, por cierto) durante la
campañaelectoral. Entoncestemíque
su gobierno impusiera el viejo nacio­
nalismo oportunista y la restauración
de la hipótesis de conflicto, perofeliz­
mente no fue así. Sin embargo, este
súbito giro del peronismo volviendo al
status anterior al conflicto como si na­
da hubiera ocurrido, es una vuelta de
tuercaa la manipulacióndescerebran-
te que se ha operado sobre los argen­
impostura, es decir la justificación po­ menos me habría demostrado a mí Hoy el Poder dispuso tapar con
lítica y ética de la invasión. El consen­ mismo que era consciente de mis de­ una"campana de cristal" el tema de la
so compulsivo que la Junta logró en rechos al disenso y la objeción de soberanía mientras se negocia a toda
tos días posteriores al 2 de abril, el conciencia frente al estado. Y no fue velocidad la recomposición de rela­
arreo a las islas de toda la dirigencia así. Igual que tos belicistas con quie­ ciones con el Reino Unido. Los me­
política, social y religiosa de mayor nesdiscutía, a tos que no se les pasa­ dios de comunicación, incluso aque­
representatividad nacional y la firma ba por la cabeza reconocer ese dere­ llos que hace pocos meses llenaron
del acta de recuperación en Puerto cho a sus compatriotas (aunque sí se páginas enteras con el asunto del
Argentino, junto con la movilización lo reconocían a tos pacifistas ingle­ trasbordador inglés, parecen muy de
posterior de numerosos cuadros par­ ses, por la única razón oportunista de acuerdo con la política del presidente
tidarios de primer nivel mendigando
apoyo al desembarco en el exterior,
comprometieron a todas las organi­
El o scu ro que servían a la “causa" oponiéndose
a la Tatcher), yo tenía incorporada la
represión.
Menem. Los "piratas ingleses" desa­
parecieron de nuestraprensa. La Tat­
cher vuelve a ser la Señora Marga-
zaciones políticas argentinas para
sostener la conspiración de encubri­
miento que hoy se completa bajo la c ris ta l de Entre tantas otras cosas, Malvi­
nas enseñó a tos argentinos hasta
qué punto el Terror, al paso que se
reth Tatcher. Los mismos que apoya­
ron el dislate de abril de 1982 en nom­
bre de la unidad nacional, vuelven to­
"campana de cristal".
una cam p an a consolida, crea en tos sometidos el
mórbido y secreto deseo de plegarse
al Poder o de justificarlo. Aunque no
do afojas cero bajo el manto de la uni­
dad nacional. Por otra parte, se tiene
la impresión de que la gente del pue­
se vea directamente amenazada, tu blo está para cualquier cosa, menos
vida te parece, cada vez más, un re­ la guerra; que ya no quiere oír ni ha­
Durante él conflicto de Malvinas gato de tos dioses: discrecional y en blar de la soberanía; que ya escuchó
se manifestó con claridad la naturale­ cualquier momento revocable. Cuan­ bastante y se equivocó demasiado,
za compulsiva y amenazante que tie­ do los olímpicosse vuelven hacia vos de modo que la “campana de cristal"
ne entre nosotros el concepto de pa­ como si fueras un ser humano y te puede ser hasta un alivio. En suma, el
tria; marcial, antes que cívico. Nunca convocan en nombre del Destino Co­ Poder ya tomó decisión y nadie pro­
como entonces detrás de la Patria, mún contra el Enemigo de la Patria, testa. Sea; en todo caso, por venir de
En este sentido el status colonial de resy de allí surgida. Se nos impuso, y la Patria y reintegrarnos un sus símbolosy suscánticos, estuvoel con una mínima chance de credibili­ un gobierno que se perfiló belicista,
queños grupos (Forja, por ejemplo), Terror en estado puro. La Patria erael dad (y la “causa" Malvinas se mani­ esta solución es la más razonable.
pero no existía entre las masas. Uno Malvinas se asemeja al del Peñón de aunque fuera Perón quien la impusie­ cracia estable y sana- no s¿
de los tres principios doctrinarios del Gibraltar, en España, y al de la base ra, la cuestión Malvinas quedó en los so en su primer tramo, sino Terror, y laguerrafue un crimen en su festó eficaz en este punto), aquella Sin embargo, la llaga Malvinas segui-
gobierno peronista, el de soberanía estadounidense de Guantánamo, en límites de la experiencia abstracta, gundo: el proyecto era prolongar la nombre: en nombre de la Patriacomo perversa y subprepticia tentación de rá allí, por más que latapen. Comoto­
Cuba: apropiación de territorio ajeno mental, para el conjunto del pueblo dictadura al punto más alejado posi­ Terror. En consonancia, la simple servidumbre jubilosa encuentra su do brote stoótico no fue más que un
política, se asentó principalmente so­ emoción que se despierta con la mú­ cauce. La guerra de Malvinas, mani- síntoma. Está en nosotros reconocer­
bre la reivindicación soberana de las que no afecta la soberanía nacional argentino. Y así no se conforma un ble del infinito, y el desembarco en
islas, y su campaña propagandística, ajena. En todos estos casos la forma mito. En rigor, nadie puede inducir vo­ Malvinas fue un putch desesperado sica de Aurora y la visión de labande­ puladacon patrioterismo compulsivo, lo y tratarlo, o confiar en la tapadera
exhibida como prueba del férreo an- particular de ocupación colonial no luntariamente un mito social, aunque en esa dirección. Sin embargo, de to­ ra azulyblancaondeante, sentimiento slogans y mentiras, nos ofreció la de la "campana de cristal" y dejarlo
justifica el ejemplo de la fuerza para lo envuelva en la bandera de la Patria dos los crímenes cometidos durante primitivo y "natural" que el populismo oportunidad de presenciar ese repug­

CeDInCI
timperialismo de la Nueva Argentina, asigna a las masas y elogia como sa­ nante maridaje masivo de ocasión
atravesó la sociedad de arriba a aba­ recuperar el territorio usurpado, co­ y sea un líder popular auténtico y ca- el Proceso, éste ha sido el que menos
mo demostró Carlos Brocato en un rismático. Del mismo modo, nadie esfuerzo le costó disimular a sus res­ biduría nacional innata, hizo terroris­ entre verdugo y víctima. (•)Cuandoestanotafueescrl-
jo. Por allí abajo andaba yo, en la es­ mo patriótico y colaboró con el crimen tiene al deseo de irrealidad. Lo que lo
cuela primaria, y me acuerdo bien del ensayo memorable publicado hacia puede eliminarlovoluntariamentecon ponsables, y hoy Malvinas es uno de tatodavía seutilizabanIndlstinta-
bombardeo. Era simple publicidad na­ el fin de la guerra en la revista Nueva la persecución o el silencio coercitivo los focos de impostura más escanda­ en muchísimos argentinos. Malvinas alimenta es la insoportable humilla­
cionalista, antimperialismo retóricodi­ Presencia. cuando el mito es verdadero. losos que alimenta nuestra vida co­ demostró que la inocencia de ese ción de saber, entre otras cosas, que panadecristal1/ el paraguaspara
Esafue. precisamente, la esencia Si la cuestión Malvinas fuera sen­ lectiva. sentimiento es, asimismo, irrespon­ mientras la "gesta" se apoyaba con disimular la eliminación del tema'
rigido al mercado interno de opinión sabilidad civil y seguidismo ciego si entusiasmo algunos "héroes'vendían Malvinas fue una especie de epi­ soberanía en las negociaciones
para soldar, como suele decirse, al del bluff: tratar a la cuestión Malvinas tida como algo visceral e imposterga­ En el juicio a la Junta Militar el fis­ con los Ingleses sobre Malvinas.
Pueblo con la Patria. Y eso fue todo: como si fuera decisiva para nuestra ble por el pueblo argentino, la expe­ cal Moreno Ocampo justificó el de­ no reserva razón y reflexión para du­ las donaciones patrióticas de tos ni­ fanía histórica para tos argentinos;
dar de lo sagrado cuando se lo pre­ ños argentinos en tos kioscos. unacondensación de experienciaco­ Ahora seImpusoel paraguas, pe­
efeméride, desfiles, propaganda ma­ soberanía nacional, cuando en ver­ riencia de la derrota no habría produ­ sembarco del 2 de abril como res- ro preferí dejar la campana por­
siva; lo demás siguió igual. Perón te­ dad no lo es. La reivindicación era y cido esta mezcla patética de confu­ puestaobligadaalaprovocación ingle­ sentan comogarantía de verdad sim­ lectiva extraordinaria a la que todavía que es de sugestión más verda­
nía perfectaconciencia de que la pre­ sigue siendo justa, pero como reivin­ sión, mala conciencia, culpa, asco, sa en el episodio del ballenero argen­ plemente porque es sagrado. le debemos un desbrozamiento mi­ dera. El paraguasproponela Idea
dicación de integridad territorial. A mi vergüenza y deseos de olvidarlo to­ tino que originó el conflicto -cuando 7. nucioso; un nudo lleno de iluminacio­ de protección: mientrasse nego­
sencia colonial inglesa en las islas no nes sobre nuestro sentido de la histo­
perturbaba a su gobierno. Era mani­ juicio, en aquel como si fueradel bluff do, que domina largamente la actitud lo más probable es que fuera lo con­ cia, la soberanía estaría protegi­
está el origen de la mistificación mal- colectiva, aunque muy pocos se atre­ trario-. Este planteo, por extensión, 6. Los pacifistas no pudimos expre­ ria, sobre la consistencia y naturaleza da de la lluvia y el sol, a cubierto
pulador, pero no estúpido, de modo sarnos públicamente. No había espa­ de nuestros mitos nacionales, sobre delaIntemperieparatiempos me­
que siguió haciendo negocios con los vinense con su doble rostro: por un la­ van a decirlo públicamente porque justifica la guerra posterior, desplaza jores. La campana de cristal, en
do, “causa" nacional absoluta, impos­ ahora no sólo la Patria nos conmina, el debate sobre la responsabilidad Los medios de comunicación de cio donde hacerlo ni garantías públi­ la percepción de nuestra identidad y
ingleses mientras nos llenaba de Pa­ masas nos aplastaron con belicismo cas que protegieran ese derecho. tos prejuicios ideológicos que la ve­
tria la cabeza. tergable y sagrada; por el otro, mera sino los muertos y los mutilados de la política de la Junta al terreno pura­
retórica propagandística. Esta con­ guerra. Por el contrario, habríagalva- mente militar y clausurael examen de y desinformación, que tos belicistas Tampoco a mí se me ocurrió nunca lan, sobre nuestra relación con el Po­ exposición. La soberanía como
Porque ésa es la simple verdad no sólofestejaban y creían al pie de la reclamárselo a los que apoyaban el der y su capacidad de manipulación,
que el bluff nacionalista encubrió pa­ tradicción profunda, asumida sin críti­ nizado el sentimiento nacional, la"cau­ la corresponsabilidad de todos los fósil valioso,celesteyblanco,con
ra utilizar: la expropiación colonial de ca, es la que explica, a su vez, la am­ sa", y estaríamos másdispuestosque partidos políticos argentinos en la letra, sino que defendían como ver­ desembarco y la guerra cuando pole­ sobre la suplencia efectiva que los un cartellto donde los visitantes
bigua relación con el tema Malvinas nunca a expulsar a los ingleses. Y es­ aventura y la guerra. Pensar que de­ dad probada en cada polémica. Más mizábamos. Por supuesto, no habría medios de comunicación de masas pueden leer explicaciones des­
Malvinas no afectó nunca nuestra so­ tarde, esamismacredulidad militante obtenido ningunaconsecuenciaprác­ practican en nuestrasconciencias res­
beraníanacional. Afectóy afectanues- que siempre fue predominante entre to no es asi. Sin embargo, la perspec­ trás de ese encuadre jurídico noestu­ criptivas, fechas y datos históri­
la gente que heconocido: una mezcla tiva nacionalista irracional que permi­ vo la mano del gobierno es ilusorio, y les sirvió para autoexculparse con la tica quecorrigiera la situación, pero al pecto de lo real. cos diversos.
tra integridad territorial, ya que las is­ excusa del "engaño". Hasta hoy no
las pertenecen a nuestro territorio, decelo patriótico entrecínico y autén­ tió el consenso a la ocupación y la creer que este regalo a la defensa de
peronuncaturbó lavidapolíticade los tico -aunque siempre solemne, por­ guerra no fuecriticaday aún subsiste. los ex comandantes se debió única­ hemos visto publicada la foto de un
argentinos y el desenvolvimiento del que al medio está la Madre Patria- y mente a la debilidad del gobierno ra­ soto combatiente argentino muerto.
desinterés profundo, cuando no des­ dical respecto de la corporación mili­ Para tos ciudadanos de este país
estado nacional. Ni siquiera hoy. des­ Malvinas fue una guerra sin cadáve­
pués de una guerra y con la isla con­ pectivo. Es decir, algo intrascenden­ tar es erróneo.
te, no sustancial ni decisivo, tratado El apoyo “patriótico" de la dirigen­ res. Nadie pensó entonces en esa
vertida enfortaleza. Si así fuera, lo re­ manipulación grosera de tos medios
pito, el gobierno del doctor Menem no como si fuera sagrado. Una especie El desembarco del 2 de abril tuvo cia cívica republicana argentina a la
de juego de mentira-verdad que no como objetivo central la legalización invasión y la guerra, la obliga hoy a porque la manipulación ya era un há­
sería soberano y la recuperación de bito asumido, y nadie lo piensa hoy ni
las islas debería plantearse imposter­ tuvo consecuencias trágicas mien­ de la dictadura del Proceso frente al exculpar políticamente a tos militares
tras se mantuvo en el plano de la re­ pueblo para blanquear sus crímenes responsables y hacerse cargo, con quiere pensarlo porque Malvinas es­
gablemente. Pero no es así, y el go­ torba en la memoria y la conciencia.
bierno justicialista, en representación tórica, pero que resultó letal cuando y prolongar su reinado. Fue un zarpa­ ellos, de la mentiray la impostura. Na­
Galtieri y sus secuaces lanzaron la zode aventureros basadoen uncálcu- die menciona, por ejemplo, el recha­ El mayor deseo colectivo, a su res­
de los argentinos, puede volver a ne­ pecto (y no creo equivocarme en lo
gociar con Gran Bretaña la reanuda­ "gesta" con el apoyo irresponsable de lo que los días subsiguientes revela­ zo inmediato y violento de la resolu­
ción de relaciones diplomáticas y co- toda la dirigencia política, social y re­ ron erróneo: la neutralidad servicial ción 502 de las Naciones Unidas por más mínimo con esta afirmación sin
mercialesde estado soberano a esta­ ligiosa argentina, salvo honrosas y de la administración Reagan y la pa­ parte de lacancillería argentina. Nun­ pruebas), es el deseo de irrealidad,
do soberano. Para decirlo de un mo­ contadísimas excepciones. sividad del gobierno británico, su re­ ca fue recusado,que yo sepa, desde de que todo haya sido un mal sueño.
do sumario y simplificado: la libertad A mi modo de ver, Malvinas suce- signación a negociar la soberanía an­ 1982 hasta hoy; ni siquiera por los po­ El breve espacio de tiempo que duró
de los argentinos nunca estuvo com­ te el hecho consumado. En síntesis, líticos argentinos que manifiestan su el conflicto y el carácter mediado de
prometida o determinada por la usur­ Nos advino. Llegó a nosotros a través si la "Operación Virgen del Valle" re­ respeto principista a las normas de su experiencia rea/-periodística, ra­
pación colonial de las islas. Los ingle­ de slogans patrióticos repetidos has­ sultaba exitosa, a los militares no los convivencia internacional. Este golpe dial y televisiva-facilitan el olvido, y la
ses han hurtado y ocupado una parte ta el aturdimiento, de mapas y foto­ bajaba ni Cristo. El argumento de la de amnesia se comprende cuando masividad de la adhesión belicista
del territorio argentino, pero no colo­ grafías, pero desde el exterior. No fue derecha para exculparlos de sus crí­ advertimos que la crítica al rechazo (“al fin de cuentas no fui el único bolu-
nizan al pueblo argentino ni usurpan una reivindicación experimentadaco- menes de lesa humanidad -esto es, de la resolución 502 significa poner do que se dejó engrupir...") justifica la
su poder político con esa ocupación. mo necesidad por las masas popula­ que libraron una guerra para salvar a en la picota a la esencia misma de la mala conciencia. Esto es lo que sos-
G O L F O P E R S I C O
Reflexiones sobre dos guerras (II)

Respuestas falsas,
problemas mal planteados
b es- en héroe. Tal es la similitud del cado, estos mismos franceses segui­
fanatismo religioso con bs sistemas rían siendo siervos de lagleba y esta­
Castoriadis, uno de los paranoicos: vencedor, Dios os ha he­ rían condicionados porlagracia. Poco
cho triunfar; vencido, Dios os ha con­ importa: el gobierno se ha preocupa­
más polémicos cedido la aureola de mártir. Los efec­ do poco de este bello resultado. Es
intelectualesfranceses, tos habrían sido casi equivalentes si deCir: algunos días después del de-
hubiéramos permitido que Saddam sencadenamiento de las hostilidades,
fundador de la revista gobernara Kuwait. Los occidentales más de dos tercbs de los mismos
Socialisme ou estuvieron y siguen estando cogidos franceses aprobaban la guerra. Este
barbarie, publicó este en una trampa en gran parte fabrica­ cambio brusco no puede ser debido a
ebemos rechazar la da por ellos mismos, armando a Sad­ una reflexión suplementaria ni a la ar-
cuestión de si teníamos o no que ha­ artículo en el diario dam, dejando pudrir la cuestión pa­ tificialidad de los sondeos. Es triste

CeDInCI
cer la guerra, dado que no está claro L ibération, en pleno lestina, etcétera. Ahora crean una si­ decirlo: la gente se ha apresurado a
el carácter del conflicto, los motivos tuación cuyos efectos abominables ponerse de parte del ganador, fasci­
reales de unos y otros y bs efectos desarrollo del conflicto se dejarán sentir durante decenios. nada por el gran pene norteamerica­
posibles de los resultados previsibles. bélico en el Golfo. Es característico que algunos in­ no. aerotransportado y electrónico.
Saddam Hussein se ríede los pa­ telectuales árabesque hasta hoy cre­ El conflicto ya ha sobrepasado en
lestinos y del Corán. Se ha acordado íamos penetrados por los valores de gran medida el caso de Iraky Saddam
de éste y de aquéllos cuando le ha la crítica y de la reflexión, partbipen Hussein. Se está transformando en
convenido encontrar aliados, tras las ahora activamente en una mixtifica­ un enfrentamiento entre unas socie­
reacciones vblentas a la anexión de El petró leo no es la ción de la historia árabe, en la que los dades sobre lasque la influencia de la
Kuwait. La conquista de Kuwait res­ ca u sa prin cip al árabes son, desde hace 13 siglos,
ponde estrictamente a fines territoria­ imaginería religiosa sigue siendo te­
les, financierosy de poder. Si lasfron- blancas palomas y todos sus males naz e incluso se refuerza reactiva­
Los occidentales también dicen les son infligidos por la colonización mente, y las sociedades occidentales
teras de Kuwait son artificiales, tam­ que no podía permitirse el crecimien­
bién lo son las de Irak y las de todos occidental. ¿EsacausadeWall Street que se han librado, mal que bien, de
los demás países de la región. En to desmesurado del potencial de Sad- que han sido dominadosdurantecua­ esta imagineríaperoque se han reve­
1980, Saddam no atacó a Irán para li­ dam, so pena de verlo controlar direc­ tro siglos por sus correligionarios tur­ lado incapaces de transmitir al resto
berar a los palestinos sino paraagran­ ta o indirectamente (dictando los pre­ cos? ¿Es el imperialismo occidental del mundo otra cosa que no sean las
dar su territorio y sus recursos, y para cios) gran parte de los recursos mun­ lo que explica que actualmente ten­ técnicas de la guerra y la manipula­
hacerse armar hasta los dientes por diales de petróleo, dominar el Orien­ gan dominados unos a los kurdos, ción de laopinión. Debido a estainca­
los occidentales y los soviéticos. No te Próximo, atacar a Arabia Saudí y/o otros a bs bereberes y bs árabes pacidad, las dos parles están en tela
representa a los pobres contra fos ri­ Israel. Pero si manejáramos la hipóte­ mauritanos a los negros de su país? de juicio. Lo que a nosotros nos im­
cos. Domina un país naturalmente sis de un Irak aplastado, habríamos Los palestinos siguen siendo bs per­ porta esque el estado actual de nues­
rico al que ha arruinado para armarse instalado una superpotencia regional dedores. A nivel de los estados, laso­ tras sociedades las hace ineptas pa­
y mantener un régimen de terror. Cor­ todavía más temible, Irán, y Siria se­ lidaridad árabe es una burla. Todos ra ejercer una influencia distinta de la
ta a sus oponentes en pedazos y ata­ ría una amenaza mucho mayor, con bs gobiernos árabes no sólo se ríen material. Una sociedad consagrada
ca con gases a la minoría kurda. Só­ sus objetivos dirigidos hacia Líbano y de los palestinos, sino que tienen un al culto del consumo y al zapping te­
lo los izquierdistas están dispuestos a sus cuentas pendientes con Israel, interés absoluto en que la cuestión levisivo no puede corroer la influencia
olvidar todo esto, porque Saddam Los fines reales de la guerra de palestina no se resuelva. Israel no antropológicadel Coráno del hinduis-
completa con acierto la colección de Estados Unidos conciernen muy po­ quiere devolver bs territorios y no los mo. Unos ciudadanos apáticos, acu­
verdugos (Stalin, Mao, Castro, Pol co, contrariamente a lo que se dice, al devolverá nunca voluntariamente. rrucados en su pequeño mundo pri­
Pot) que siempre han defendido con petróleo: por encima de los 25 dóla­ Los occidentales son incapaces vado, dejando el poder en manos de
res el barril, otras fuentes de energía de comprender (mientras ellos mis­ las oligarquías políticas, económicas,
Los occidentales hablan de dere­ se convierten en rentables a medio mos estaban sumidos en él hace só­ culturales, de los aparatos de los par­
cho. Curiosa idea la de defender el plazo. Expresan esencialmente su vo­ lo tres decenios o tres siglos) lo que tidos y de los medios de comunica­
derecho y los derechos del hombre puede ser un nacionalismo con tras­ ción, no ofrecen ejemplos a imitar ni
luntad (muy miope) de imponer su or­ fondo religioso (tanto para bs israelí­
junto a Assad y el rey Fahd. También den. Este pasa por el aplastamiento incitan a reflexionar a unos pueblos
hablan del derechointernacional. Ese de Irak. Supongamos que se realiza es como para los árabes). que, perdidos en el mundo moderno,
derecho indefinidamente elásticoque se crispan a causade su identidad et-
estabay sigue estando dormido cuan­ este aplastamiento. Su resultado en norreligiosa.
do se trata de Cisjordania, de Líbano, la región, yen todos los países musul­ De la reprobación Entonces, ¿qué debemos hacer?
de Chipre, de Granada y de Panamá. manes (excepto Turquía por el mo­ a l entusiasm o ¿Debemos cambiar de pueblo? Es
Nadie está contra la autodetermina­ mento), será un caos todavía mayor. evidente que no. ¿Debemos cambiar
ción de los kuwaitíes. Por consiguien­ La idea de que una Conferencia Inter­ Algunos días antes del desenca­ al puebb? El puebb debe cambiarse
te, también debemos pedir la autode­ nacional podría regular cualquier co­ denamiento de las hostilidades, los a sí mismo. A este cambio podemos
terminación de bs palestinos, de bs sa, es un cuento para niños. El odio y sondeos afirmaban que más de tres contribuir todos y cada uno, en parti­
kurdos (masacradosaconcienciapor el resentimiento de las poblaciones, cuartos de los franceses considera­ cular y en nuestro entorno, cada vez
Saddam. por bs iraníes y por nues­ no sólo árabes sino musulmanas (ver ban que "ninguna causa, por justa que podamos hablar. Sin llegar a este
tros aliados bs turcos), de las gentes aquí Pakistán), serán a partir de aho­ que sea, justifica el recurso a la gue­ cambio, sólo tendremos falsas res­
de Timor y de unos cuantos bálticos, ra paroxísticos. Pase, serán lo que rra". Posición monstruosa: si este be­ puestas a unos problemas mal plan­
armenios... pase, Saddam serátransformado-ya llo principio hubierasido siempre apli­ teados.*
CARTAS AL DIRECTOR C A R T A S A L D I R E C T 0 R

Dos cosas más me quedan.algam.ás


difíciles. Mi Iibrito, respondiendo a mi estilóles

Una réplica duro, rrtuy duro. También le pega a alguien que


Jirmaurrartlculo en LA MIRADA. Me refiero a
Portantierpr Debo decir que yo no me confronto,
sólo con políticas. Confronto fundamentalmente
con conductas. Y en este orden guardo -¿por
qué no llamarlo por su nombre?- un verdadero
rencor hacia quienes, ya hombres grandes,
rio
nte
ro
incitaron a los chicos, y un poco a todos, a
levantar los pendones del mayor revolucioná­
dselo. Y luego, no sólo sin más ni más, sino sin
algún mea culpa e incluso con provechos
i políticos y de notoriedad, se pasaron a o t a '
Buenos Aires, febrero de 1991 alcanzado me impulsa a trasmitir algunos de las dos biografías diferentes que la revista ■posición. A mi modo de ver, cuando se alcanzó
comentarios que me interesaría que conocieran tiene la virtud de reunir. el nivel de maestro se generan obligaciones
al menos Nun, Abraham, González, Abós, Hay quien viene del marxismo o de las que nadie puede eludir.
Sarlo, Brocato y obviamente vos. cercanías de él, y estará viviendo los muchos Lo segundo es el artículo de Brocato. Lo
Carlos Auyero Y esto en especial por cuanto acabo de golpes que la hora nos propina a todos los que, sigo desde las páginas de Nueva Presencia y
terminar y pienso imprimir en pocos días un puntos más puntos menos, hemos colocado a si bien siempre he discrepado con él, lo re­
Iibrito dedicado a hablar de lo que propicio esa ideología en un lugar importante de nuestro conozco como un escritor lúcido y agudo Pero
Querido Carlos: como un nuevo proyecto político." Siento signifi­ pensar y nuestro actuar. Pero es verdad que yo yo no hubiera escrito una nota sobre los
Había comprado un ejemplar de LA cativas diferencias con ustedes, no de posición no he sido, ni soy, marxista, ni me he movido entretelones de la DC„ del Partido Intransi­
MIRADA y luego se lo regalé a Emilio Máspero. pero sí de actitud anímica o existencia!. Y me gente, de los “8", o de Democracia Popular.
Más tarde no volví a encontrar otro. Lo pedí he preguntado mucho acerca de su porqué. Y hay quien viene de duras militancias, Hace años que casi no tengo diálogo con Hebe
incluso a Roque Bellomo, sin éxito. El día antes ¿Porqué Casullo escribe una nota tan seguramente de diferentes calidady tiempo, en Bonafini, y supongo que dice de mí cualquier
de salir de vacaciones me llegó una carta tuya hermosa sobre la incerteza y mi Iibrito pretende lasjuventudes peronistas. Y eso también disparate. Pero sigo considerándola en “mi"
agregando un ejemplar. Tuve así la satisfacción estar lleno de ellas? ¿Soy realmente un superfi­ significa arrastrar mucho dolor y mucha incerti­ frontera. Los organismos de Derechos Huma­
de traerlo conmigo. cial metido a escribir unas líneas no sólo dumbre. Tampoco ahí tuve yo que ver, más allá nos ya saben cómo manejarse con Hebe; no la

CeDInCI
Lo primero que me nace es la más sincera modestas sino también improvisadas? Cuando de la honda simpatía que siempre me suscitó llaman y basta. Las cosas se hacen entre todos
felicitación. Reunir un conjunto de notas de repaso el artículo de Horacio González me ese movimiento y del orgullo de haber sido los demás, sin madres. Lo que no impide que el
tanto nivel, en el marco de una posición pregunto si tengo derecho a escribir lo que padre de alguien que se jugó entero ahí día de la Marcha de la Resistencia nos demos
cercana o paríante y alcanzar a publicar todo escribo cuando son tan superficiales mis adentro, a quien llamo nuestro héroe y nuestro una vuelta, por razones afectivas e históricas. Y
eso en una buena edición, es, hoy sobre todo, lecturas y tanta mi ignorancia o mi falla de punto. Pero meterse adentro y desmenuzarlas.
una verdadera epopeya. A vos y a todos los reflexión acerca de demasiadas cosas. Señalo en mi libro que ese duro dolor que la
que participaron, mi reconocimiento militante. Pero intentemos algo. Hay dos circunstan­ vida me deparó, tuvo una contrapartida; y fue el Pero hay algo más y mucho más grave y
No he leído la revista íntegra. Pero lo cias que en mí son importantes y distintas a la haber sido desde el vamos un adversario sin discrepante. Los chicos y las chicas, Brocato,
resuello de la dictadura militar; haberme distin­ eran héroes y fueron mártires. Es sólo una
U N G E U G IP O L F S/LLfJ Q U E tE N G O E N F R E N T E . guido de tal modo de la mayoría de la dirigencia hipocresía creer en un discurso neutro de los
F U E /Z rE .C O M O S /E L G U /E U f K F F B F E H P E S E A F F /e S E . del país; tener muy en claro qué es aquello que derechos humanos, donde todos somos
no quiero de ninguna manera; y hoy vivir el iguales. No es verdad. Cada sector tiene sus
enfrentamiento a Menem con la misma deci­ héroes, sus mártires. Y el que no tiene "sus" es
sión, fe y ganas de pelea que años atrás porque no tiene un "su", o sea no sabe dónde
dediqué a luchar con la dictadura. Y ello no está parado. Esto no quiere decir consentir lo
obstante que allá por el '84 Menen me inspiró que uno cree que es equivocado. No. Pero no
una particular simpatía -sin conocerlo- al punto todos somos iguales.
que no pocos recuerdan cuando hablaba de la Las Madres de Hebe cometen errores, sin
fórmula Menem-Alende; y que lo apoyé en duda. Pero ¿quién los califica alegremente?
1989, de lo cual, dicho sea de paso y aun ¿Yo?¿Usted, Brocato?¿Olos enemigos? Todo
cuando parezca una paradoja, no estoy en padre o madre militante a quien ‘le desapare­
absoluto arrepentido. cen" un hijo, llega de un modo u otro a alguna
Y no señalo en el libro, pero se los digo a forma de transustanciación. Y eso en sí es
ustedes, que la caída del "socialismo real", con hermoso y además salvador, porque semejante
todo lo que me dolió como a tantos, me trajo a dolor no se cura sin sublimaciones. En la fusión
la par sosiego. Porque habiendo militado ideológica puede haber, sí, una cierta des­ tuvieron una inmensa intuición. La de que su
muchos años en la DG„ si bien en la linea que menos, casi un puñado, murieroh eñ enfrenta­
mesura. No en la existencial, o sea en la que Patria se acababa como tal. Eso sólo se podía mientos. Los demás, los desaparecidos, fueron
creí de avanzada -primero en la llamada lleva a valorar o aun sobrevalorar al hijo. defender con las armas. Y a la vez era una
Izquierda Cristiana y luego en Humanismo y asesinados como prisioneros inermes. Y padres
Identificarse y solidarizarse plenamente con lo garantía que a través de las armas también se y militares - y estos últimos mejor aún que
Liberación, del cual soy hoy secretario que el hijo era y con lo que hizo en función de lo
general-, el ser parte de una agrupación que de perdía. Pero la intuición la tuvieron. nosotros, ¡o digan o no lo digan- saben que los
que era, es natural y rico. Enloquecerse, en Y. por último, la violencia la aprendieron de chicos no eran ni violentos ni asesinos; los
una u otra forma era antimarxista o no marxista, cambio, puede ser dañino.
me producía una permanente frustración intima. nosotros, de los milicos que se la mostraron tuvieron en sus manos y ellos como nadie
Confieso que siempre he admirado a quien durante años, hasta cuando lo sacaron al viejo verificaron que un pequeño grupo se entregó y
La referida caída, con razón o no, me ha librado es capaz de morirpor sus ideas. Y, diría, de un colaboró; la mayoría sólo cantó cuando ya no
de esa sensación y me lleva a la convicción, lado y de otro. Aunque una vez más, y obvia­ lllia a punta de bayoneta; los radicales cuando lo
algo primaria pero convicción al fin, acerca de echaron a Frondizi, los peronistas y los frondizis- resistía las torturas, y grupo bien importante, los
mente, no como iguales. Quiero y admiro más, más valientes, ésos no hablaron nunca. Eso es
una frase que alguna vez te escuché decir, mucho más, al capaz de morir por las ¡deas que tas cuando lllia: y todos cuando no fuimos
Carlos, o sea "a mi izquierda la pared". Y es capaces de crear canales medianamente coraje, Brocato, el que seguramente yo no
me parecen nobles y buenas. Que nuestros tengo y, presumiblemente, usted tampoco.
verdad, hoy no le cedo a nadie estar más a la hijos fueron mal conducidos, por canallitas am­ atractivos para la juventud. Como tampoco
izquierda que yo, siempre desde luego que somos capaces de hacerlo ahora, ya que se nos Perdón. No quería decir tanto. Pero sale
biciosos e ideológicamente más que dudosos,
podamos ponernos de acuerdo, ¡o que no es es verdad. Pero es igualmente verdad que a la llena la boca de críticas y odios contra Menem y
posible, acerca de qué es izquierda. Polémica Una vez más, mi solidaridad con la revista.
mayoría de ellos les costaba mucho la violen­ sus políticos pero a la hora de organizamos Ojalá siga saliendo y ojalá en el próximo número
que, de todos modos, hoy es más libre y rica cia, y en sus noches había pesadillas de sudor políticamente para derrotarlo, ahí nos detienen alguien tenga algo que decir de mi Iibrito.
q En virtud de lo dicho, sean ustedes por la muerte que se soñaba. Y sin embargo una candidatura, una figuración, un juicio, una Aunque sea para despedazarlo. Un abrazo.*
seguían y seguían, y no se iban. Por ellos. Por
magnánimos con las “certezas" de mi Iibrito. Y sus ideologías. Por su modo de sentir a la patria Finalmente, en cuanto a lo que padres,
sepan que lo escribí también, y mucho, pen­ Augusto Conte
y a su pueblo. Por los amigos que habían caído madres y enemigos saben, digamos
sando en ustedes; los unos y los otros. o que iban a caer. Ypor si esto fuera poco, y madres saben qué ocurrió con sus • Hoja de ruta, BuenosAires, 1991,
/ 47

;4 ' ' fí - .& (/ M E ■' ' /V E" ' '*“0 • 'S En segundo lugar, diremos que
tratados y monografías aspiran a ser
probatorios de la razónque tosasiste.
Son trabajos de tesis y quieren, siem­

El ensayo
pre, demostrar algo. El ensayo, en
cambio, antes que la índole objetiva
de tos hechos, se interesa en plasmar
el impacto que tales hechosprovocan
en la sensibilidad de quien escribe y
tos analiza, procurando, sobre todo,
atestiguar la magnitud de ese im-

en el espejo El ensayo jamás disimula su ca­


rácterde mediación: esfranca, expre­
samente, elocuencia, opinión de al­
guien sobre algo. No es éste el caso
de la monografía y el tratado. Ambos
pretenden develar, ante todo, la índo­
le del asunto que los ocupa y sólo en
muy rezagada instancia, las emocio­
nes de quien de él se encarga y acer­
----------------------------------------------------------- Por Santiago Kovadlojf------------------------------------------------------------ ca de él escribe. Si ello es posible o
no, constituye otra cuestión. Pero lo
cierto es que ésa y no otra es la inten­
zonable suponer que, para redactar tales trabajos como obras de ficción ción de tratadistas y autores de mo­
versos, haga falta ser un escritor... en prosa bastara parajustificar su en­ nografías.
li? reflexión sobre un Otro de esos giros, menos habi­ rolamiento en las filas del ensayo. Tambiénesfrecuente verificarque
tual pero no menos burdo, es el de Quien domina una especialidad y así como a tratados y monografías se
género literario es también “filósofo y escritor", aplicado sin tem­ lo evidencia por escrito no por ello es tos llama ensayos, a éstos, cuando
blar por quienes presumiendo saber un escritor. La identidad literaria pro­ son breves, suele designárselos artí­
una lección de cómo de qué hablan, despliegan su elo­ viene del relieve estético del lengua­ culos, tomando encuenta, únicamen­
elegir la convivencia cuencia de espaldas al hecho harto je y ello es siempre independiente de te y a la ligera, lo restringido de su ex­
evidente de que, por lo menos desde la idoneidad profesional que se mani­ tensión y el hecho de que, casi siem­
y no la hegemonía, la Platón en adelante, la filosofía ha fiesta en tal o cual materia o del cono­ tos tecnicismos, y la impersonalidad que fuera de nosotros no haya nada
pre, pueda leérselos, antesque en un de tos planteos ganó en poco tiempo más que nuestras proyecciones sino
participación y no querido ser, ante todo, un enunciado cimiento abstracto que se posea de libro, en diarios y revistas.
literario. las reglas propias de tal o cual géne­ estatutodesaber. Sinembargo, elvo- porque, cuanto hay, sólo gana signifi­
Las fronteras, en este orden de

CeDInCI
el acatamiento. Tan frecuente como estas dos (y ro. Es decir que no siempre escribe cablo ensayo no se extinguió. Usur­ cación humana en virtud del modo co­
por el mundiltode las letras un nutrido cosas, nunca son del todo claras ni pado por quienes no vacilaban en de­ mo el entendimiento, igualmente hu­
repertorio d» imprecisiones y desa­ como muchas más que hoy soslayo) bien quien bienentiende de algo aun­ perdurables pero así como un cuento
es lafórmulaquesupone caracterizar que esfrecuenteque bienentiendade nostar lo que él implicaba originaria­ mano, lo dispone.
ciertos terminológicos tan absurdos corto no se confecciona con tos mis­ mente, sobrevivió como designación No por desatendida esta verdad
que; sindejar de ser lamentables, son con eficacia a alguien cuando lo defi­ algo quien escribe bien. mos ingredientes que un cuento largo
ne como "escritor y ensayista". El tratado y la monografía nada de propuestas del todo ajenas a su es novedosa. Ya era vieja en tiempos
al mismo tiempo divertidos. ni apenas son menos páginas, de naturaleza. ¿Porqué? Yo no advierto de Descartes aunque Descartes la
Se trata de expresiones y de fór­ Quiero detenerme en esta última esencial comparten con el ensayo. igual manera un artículo no es un
tontería porque no creoque en el pre­ Ante todo, porque de tos dosprimeros más que un dejo de hipocresía inte­ haya negado, haciendo oídos sordos
mulas que pasan de boca en boca y ensayo aunque pueda compartir con lectual en esa abusiva expropiación reclamos de su coetáneo, el
de pluma en pluma sin que el menor juicioso universo de las convencio­ sólo se requiere, literariamente ha­ él las efímeras columnas de un pe­
nes literarias haya género más gol­ blando, que estén escritos correcta­ del nombre. Llamar ensayo, justa­ Francisco Sánchez, quien a tos
atisbo de conciencia critica afecte su riódico. mente ensayo, a un enunciadoque se cuatro vientos pregonaba que nada
libre tránsito. Entre ellas, una de las peado por la incomprensión que el mente. Ello equivale a decir que no En el artículo, la intención infor­
ensayo. tienen porqué estar bellamente escri­ quiere apodíctico y probatorio es pre­ se sabe. Y si a tal verdad se la sigue
más usuales es la de "escritor y poe­ mativa espreponderante y la línea ar- tender disimular, entre los pliegues marginando de la enseñanza es, en
ta", entendidos como títulos comple­ Bautizado hace cuatro siglos por tos para ser lo que anhelan ser. Un gumental suele perfilarse rehuyendo
quien supo hacer de él la expresión ensayo, en cambio, debe ser elo­ de la humildad terminológica, una so­ gran medida, porque su aceptación
mentarios de un mismo autor. Se im­ el hechizo de toda digresión. Un ar­ berbia sin límite que no es otra cosa implica reconocer la imposibilidad de
pone, pues, reivindicar a los afecta­ magistral de un temperamento, ve­ cuente en su forma porque sólo así tículo no puede serconjetural, intimis-
mos hoy que su nombre se malem- será lo que debe ser: la expresión de que deseo de abarcar el saber homo­ disociar el valor de cualquier enuncia­
dos por error tan difundido recordan­ ta, divagador o confesional, requisi­ logándolo al propio discurso. do de la relatividad propia del juicio.
do, con modestia, que si bien no se plea aplicado a la designación de tra­ un temperamento empeñado en tras­ tos que, a la inversa, forman parte del
tados y monografías; como si el solo lucir, a propósitode algún asunto, sus Pero además, si el género y el El ensayo, precisamente, es soli­
puede pretender que todos los que condimento ineludible del ensayo. nombresubsistieron, fue también por­ dario de esta convicción. La ejerce y
escriben sean poetas es bastante ra­ hecho de que no se pueda caratular dudas, convicciones y emociones.
que no faltaron, por suerte, quienes, la promueve porque su pasión esen­
remontando lacorriente del descrédi­ cial es la convivencia y no la hegemo­
to, supieron infundirle vida, en conso­ nía. Aspira a ser escuchado y, por
Si todas estas confusiones nancia acabada con las enseñanzas ello, a no dejar de escuchar. Aspira a
vieran incidencia sobre el mo del gran Montaigne, su fundador ofi­ tener sólo algo de razón a fin de que
entender el problema de laverdad po­ cial. Así, ciertos ingleses memora­ nadie pueda acapararla por entero.
co importarían. Pero la tienen; por bles como Richard Steele, Joseph Su afición más íntima, por lo tanto, es
eso se imponedesbaratarlas y no por Addison y Samuel Johnson y, ya en el matiz. Cultivándolo se desentiende
afición bizantina a convertir lo irrele- nuestro idioma y en la primera mitad de tos significados que se postulan
vante en cosa monumental. del siglo XIX, el deslumbrante Maria­ portadores de sentido total y ajenos,
Si el ensayo pudo ser blanco del no José de Larra quien, cediendo al por ello, a la contradicción. Su com­
desprestigioymateriadetamañacon­ prejuicio dominante, llamó articulo a prensión, en consecuencia, deman­
fusión es porque se acabó creyendo, lo suyo cuando en verdad era ensayo da una actitud vigilante por parte de
especialmente a partir del enfatuado y ensayo del mejor. quien lo lee, y no la entrega extática y
siglo XVIII, que en términos de saber sumisa del hechizado. Invita a la par­
rea! sobre el hombre y el mundo, el ticipación viva en la producción de
estilo constituía una traba antes que sentidos y no al acatamiento servil
un don; un obstáculo y no una facul­ Lahistoriacambiacon menosfre- que exige la obediencia. Vale la pena
tad. Despojar al lenguaje de connota­ cuencia de argumento que de prota­ tenerlo en cuentaen función de lo que
ciones subjetivas -se pontificó-equi- gonistas. Lodigo porque se insiste -y sigue. Y lo que sigue atañe a otra cu­
valía a ponerlo en correspondencia se insiste desde hace mucho- en ha­ riosa y tensa relación que mantiene el
plena con la verdadera naturalezade cernos creer que el saber es certeza ensayo. Me refiero a su vínculo con
tos hechos investigados. El ensayis­ y no suposición. Se trata de la tenaz tos llamados géneros de ficción y, en
ta, tenue bordador de impresiones, persistenciade un empeño cuatrove­ especial, con la novela.
debía ceder su atalaya al tratadista, ces centenario: el de concebir al len­ Así como la monografía y el trata­
hombre de ciencia cabal, ya que con guaje comocorrelatocumplido del lla­ do tienden a fagocitar al ensayo, a di­
éste el lenguaje alcanzaba su más al­ mado mundo objetivo. ¡Cómo si el solverlo en el senode su propia nece­
ta connotación descriptiva y el cono­ mundo dicho objetivo no fuese, siem­ sidad expositiva, usurpándole, sin em­
cimiento su instancia más afortunada pre,en lo quetienede inteligible, obra bargo, el nombre y jactándose luego
entérminos de rigor. Proliferaron, así, de una trama simbólica! Y ello no por­ de ser lo que no son, así se tiende, en
lasendaopuesta, acontraponerdrás- IV tan de ser novelistas porque tienen al­ pera su auténtico semblante de cre­
ticamente la prosa de ensayo a la de
ficción, alegando que la índole de es­ No se trata de negar lo que salta
go para contar! Ya se sabe lo que va
del dicho al hecho y por eso es prefe­
encia; allí donde las opiniones pro­
pias se ponen de manifiesto como
p E T R 0 P 0 L I s
ta última sería creadora mientras la a la vista, a la manerade aquellos cor­ rible matizar la contundencia de los segmentos -y sólo como segmen­ 1942
de la primera no rebasaría el árido tesanos que Hans Christian Ander- juicios con el soplo refrescante de la tos- de una verdad más general y
suelo de lotrillado estando, en conse­ sen retrató alabando las vestiduras cautela y una pizca de humor y de es­ trascendente, irreductible al monopo­
cuencia, despojada de toda connota­ inexistentes del rey que iba desnudo. cepticismo. lio personal.
ción imaginativa. Una cosa, por supuesto, es el ensayo Sea cual fuere el género, si de ar­ Además, en su despliegue narra­

Una tragedia tropical


Esdecir que si en sucontacto con y otra la novela. Que difieren es indu­ te se trata, al escribir se busca, ante tivo, el lenguaje del ensayo tiene, es­
el artículo, la monografía y el tratado, dable y de eso me ocuparé ensegui­ todo, seducir. Y seduce quien es ca­ tratégicamente hablando, aspiracio­
el ensayo ha padecido los trastornos da. ¿Pero se oponen? ¿Se trata, co­ paz, mediante su palabra, de infundir nes dialógicas; mientras que las de la
propios de la simbiosis, en su aproxi­ mo algunos quieren, de dos especies a lo que dice el valor de lo cautivante. novela son monológicas. Por eso el
mación a la novela y el cuento, en inconciliables o, más bien, de dos Razóntendrápues, escribiendo, quien ensayo es un géneroantimítiooy no lo
cambio, ha sufrido los efectos de una miembros diferentes de un mismo or­ manipule con talento la flauta de Or- es, en cambio, la novela. La novela
severa discriminación y de una con­ ganismo? feo y el que no... y el que no, como re­ triunfa en su propósito seductor si de­
traposición constante. La pregunta ¿Es uno -el ensayo- obra de la cuerda la deliciosa estrofa infantil, muestra que, para que haya realidad
que cabe es por qué. fría razón, y la otra-la ficción- hija de “una prenda tendrá". en sentido eminente, basta que al Por Alvaro Abós
Quienes desde la ficción se ubi­ una pasión visceral y ardienteque en­ Ladiferencia primariaentre nove­ mundo se lo veatal como el tótem dis­
can en la orilla del repudio, argumen­ tronca entera en el sueño antes que la y ensayo no radica, por lo tanto, en cursivo lo propone. El ensayo deman-
tan en contra del ensayo con igual en la diurna realidad? ¿Es el ensayo el magnetismo que la primera, a dife­ da. a su turno y en forma constante, la
contundencia que los objetivistas de fruto especial de la voluntaria disposi­ rencia del segundo, debe ejercer so­ participación polémica del lector en la

E
la ciencia pero en sentido inverso. ción a construirlo y la novela, por el bre sus lectores. Tan envolvente ha gestación de lo verosímil. Sólo así estuvo allí diez días, camino al con­ el divorcio con Friderike) llegó a Bra­
Sostienen los abanderados más in­ contrario, resultante del caudaloso, de ser un ensayocomo una novela, si puede alcanzarse la dimensión más greso del PEN Club en Buenos Aires. sil en 1940, pero en 1941 regresó a
transigentes del cuento y la novela incontenible arrebatamiento de una de veras es un ensayo. Pero ha de íntima del encanto conceptual: a tra­ El país lo habíafascinado.y se prome­ Corrió hasta elfin del Nueva York para una estadía de seis
que la calidad artística del ensayo es fatídica necesidad poco menos que serlo a su modo y no al de aquélla, vés de la persuasión. El lector de no­ tió volver, escribir sobre aquella tierra mundo para erigir una meses. Allí vivía Friderike con las dos
nula; que no se trata de un género inconsciente? puesto que de otro cantar se trata. velas goza si es subyugado por las adorable. hijas. Más allá de los vaivenes senti­
destinado a proponernos un mundo Polarizarse será siempre para mí El novelista triunfa cuando sabe páginasque recorre, si se disuelve en Había abandonado hacía poco su fortaleza contraía mentales, el escritor y Friderike te­
personal propio sino a comentar el echarse a perder. Yo creo que esta abolir, en el curso de la lectura, la pre­ ellas como en los vapores de unadro- casa en Salzburgo para establecerse nían una inextinguible relación inte­
que otros han creado; a no pronun­ en Londres. Judío vienés, pacifista, barbarie y la destrucción. lectual, humana. El redactaba su au­
drástica segregación es fruto de la vención crítica de su lector, atrapán­ ga extasiante. El lector de ensayos
ciarse jamás desde el fervor elocutivo obstinadacegueracon que el dogma­ dolo hasta imponerle como verosímil, disfruta si logra sostenerse en el tem­ amigo y discípulo de Romain Rolland Pero allí lo aguardaba la tobiografía. Ella lo ayudaba. Los tres,
de la metáfora sino desde la asepsia tismo se mira en el espejo que lo des­ y exclusivamente verosímil, su propia blor de ese téte-á-téte incesante ges­ y de Freud, los nazis habían incluido incluida Lotte, convivieron en casa de
lógica y demostrativa impuesta por el miente. No hay géneros creadores si­ palabra. El buen novelista alcanza su tado por laconfrontación, que es roce sus libros en las piras literarias. La po­ muerte. Friderike. Eran adultos, personas ra­
apego a la literalidad. De este modo y no obras creadoras. Hay hombres y meta cuando su mundo narrativo ab­ electrizante, entre su estremecida lu­ Idomingo22de licía austríaca lo hostigaba. A pesar zonables. ¿Acaso ambas mujeres no
acaso sin saberlo, los impugnadores mujeres que, como buenos vástagos sorbe el potencial perceptivo del lec­ cidez y la del escritor. febrero de 1942, un escritor austríaco del exilio, él, comootros escritores de querían al mismo hombre?
del ensayo se hacen eco de quienes, del rey Midas, tienen el don de trans­ tor, logrando que ese mundo se des­ Estas distinciones, insuficientes de sesenta años y su segunda espo­ habla alemana, tardó en condenar El dudó. ¿Quedarse o regresar al
con feudal irracionalidad, reservan el como todas las distinciones, no aspi­ sa y secretaria, llamada Charlotte Eli- abiertamente a Hitler, aun cuando Brasil? Su viejo maestro Romain Ro-
mundo de los hechos para un género formar en arte todo lo que tocan, y pliegue como dominante a través de

CeDInCI
otros que no lotienen por másquefre­ la conmoción afectiva que desenca- ran a establecer jerarquías sino, tan zabeth Altmann, de treinta y cinco, se Klaus Mann, que publicaba en Bruse­ lland, desde el sur de Francia, repro­
y el de la fantasía para otro, sin posi­ suicidaron tomando veneno en un las Sammlung, la revistada los escri­ padre judío, era decidida, tenaz, inte­ baba aquella huida haciaelsur: "Nues­
bilidad de reconocer lo más obvio: el cuenten con devoción la casa de los sólo, a recordar singularidades. Son lectualmente brillante. Ella también
milagros. No es la religión la que ha­ El ensayista, por su parte, triunfa útiles, estimo yo, para advertir en qué chalet de la rúa Gongalvez Dias, en tores exiliados, lo urgía para que co­ tros viejos países -le escribía- son
hondo, hondísimo entrecruzamiento Petrópolis, suburbio de Río de Ja- laborase en aquellaspáginasdecom­ escribía aunque dejó de lado sus am­
entre ambos en todos los géneros. ce al creyente sino éste a la religión. donde la conciencia del lector esca­ dosfuerzasigualmente poderosasson biciones para dedicarse a apuntalar nuestra tierra nutricia. No podemos
Así queda el ensayo entre dos fue­ Del mismo modo que no es el apego pa al letargo de la costumbre y se sin embargo distintas. Y a impedir, bate. Esegesto hubiera bastado para olvidarlos. No lo veo instalado en Bra­
El escritor, exiliado del nazismo, que su editor, Kipenberg, que perma­ la carrera del marido. Tenía dos hijas sil. Es tarde ya para que echemos raí­
gos: por insolvente para ocuparse de al género el que implica aptitudes aviva y se excita y se sumerge en el mediante el reconocimiento de sus de su primer matrimonio, a las que él
la realidad, lecierra laciencia su puer­ creadoras sino la índole del vínculo goce profundo de la comprensión méritos respectivos, que una y otra había publicado hacía pocos meses necía en Alemania, viera vedadatoda ces profundas. Y, sin raíces, somos
un ensayo titulado Brasil, país del circulación a los libros del autor vie­ quiso como propias. una sombra...”
ta en las narices; por insolvente para que con él se entabla. ¡Más de un compartida; en la intensidad sensual vez se vean sepultadas por el despre­ Charlotte era una oscura huérfa­
cumplir con las exigencias de la ima­ exaltado anda por ahí creyendo que de la inteligencia. Allí donde se des­ cio y la incomprensión que promue­ futuro: lanzado en múltiples idiomas, nés. Y éste se aferraba a su público, A pesar de todo, él y Lotte volvie­
llevaba vendido cien mil ejemplares a su lengua. na polaca, una hoja al viento en el hu­ ron al país en el que elegirían morir
ginación, lo expulsa de su campo la sabe expresar ideas porque le gusta morona el valor absoluto conferido a ven siempre las dicotomías y los ver- racán de aquella Europa devastada.
ficción. escribir ensayos, y más de dos se jac­ una verdad fragmentaria y ésta recu­ ticalismos.* sólo en su versión portuguesa. El libro Finalmente.se produjoel Anchluss seis meses después.
era un canto de fe en el Brasil, consi­ y debió abandonar sus hesitaciones. Nunca tuvo estatura intelectual. De
derado un faro de humanismo en el El exilio era la única alternativa. personalidad opaca y salud frágil (era 4. Sin quererlo, el escritor se vio
mundo arrasado por el totalitarismo y Cuando arreciaron los bombar­ asmática), su único aporte intelectual envuelto en las querellas políticas bra­
la destrucción. deos sobre Londres, comenzó a pen­ al hombre que amaba fue su trabajo sileñas. Gobernaba Getulio Vargas.
Había sido un escritor muy popu­ sar en aquel lejano país sudamerica­ como dactilógrafa. El creyó que, si la Tras haber sido en los años treinta el
lar en todo el mundo durante el perío­ no que tan bien lo había acogido en dejaba, ellasucumbiría.Ungedultdes jefedel movimiento antioligárquico, li­
do de entreguerras. Lo recibieron en 1936. Partió primero hacia Nueva herzens se llama la novela que escri­ beral y cuasizquierdista, su largo ejer­
Brasil como a un huésped ilustre. El York. A Estados Unidos estaban aflu­ bió en aquellos años, Impaciencia cicio del poder lo había convertido en
gobierno le dispensaba un trato pre­ yendo muchos intelectuales exiliados: del corazón en la traducción caste­ uncaudillodecuñomussoliniano. Pe­
ferencia! y la prensa seguía sus pa­ los Mann (Thomas, Heinrich, Klaus), llana. Pero el título en inglés, Beware ro, de acuerdo a la particular idiosin-
sos con curiosidad. Para eludir el ca­ Alfred Doblin, Bertolt Brecht, Franz of pity, o en francés, Le pitié dange- cracia brasileña, aquelladictadura-el
lor carioca, él y su mujer habían alqui­ Werfel, Cari Zuckmayer. reuse son ilustrativos. La piedad ha­ Estado Novo- apenas se advertía
lado aquella casita veraniega. Petró­ cia aquel ser desamparado estaba en tras lacordialidad de los gestosy cier­
polis es una población risueña, situa­ 3. Pero había otra razón que lo el fondo de la encrucijada sentimental ta sagacidad de los modos políticos.
da en las estribaciones de la serranía forzaba a ir hacia el sur: su dualidad del escritor austríaco. El vienés, obsesionado por el horror
que enfrenta la bahía de Guanabara. sentimental. En 1935 había roto con La separación de Friderike no fue racial europeo, creía ingenuamente
La vegetación es exuberante y el cli­ Friderike Von Winternintz, su esposa fácil. La nuevapareja (secasarontras que la armonía visual entre negros y
ma dulce, con noches frescas. Por al­ durante veinte años, colaboradora in­ blancos era indicio de libertad y res­
go el emperador don Pedro II había cansable y estrecha de su trabajo in­ ■oUSANA X LOt peto humanos. Para la conciencia
hecho construir en esa comarca su telectual, administradora y alma tute­ desgarrada de un escritor de habla
residencia de estío, y de aquellos lar, una mujer de fuerte carácter que alemana, abrumado de culpa por­
majestuosos jardines -un Versailles galvanizaba sus íntimas debilidades. que la patria de Goethe hubiera en­
en el trópico- provenía el nombre de Ella misma, que permaneció en Salz­ gendrado aquellos monstruos de la
la localidad. “Si el paraíso existe -ha­ burgo hasta el Anchluss mientras él razón, América Latina era latentación
bía dicho Magallanes cuando pasó marchaba a Londres, sugirió al mari­ de la utopía. Un error se encadenaba
por allí- debe ser algo parecido a do que tomara una secretaria y esco­ a otro error. No veía la miseria de la
gió a una muchacha polaca: Char­ realidad, ni la opacidad del presente,
¿Qué sucedió aquel domingo de lotte Altmann. ni la anemia del futuro. Ni iba a pere­
verano en ese escenarioedénico, don­ El terminó enamorándose de la cer Europa ni Brasil era la orilla sal­
de la tragedia europea parecía un secretaria. El drama explotó en Niza, vadora. Unas décadas después,
fantasma remoto e irreal, donde el con la apariencia de un banal vaude- Brasil (toda América Latina), ese faro
exilio era tamizado por la cordialidad ville: Friderike los encontró en posi­ de humanismo, iba a ser arrasado por
y la esperanza? ¿Qué sombras ha­ ción comprometida, junto a la máqui­ formas no menos aberrantes de to­
bían oscurecido aquel paraíso? na de escribir. talitarismo, por los demonios de la
Las dos mujeres no podían ser tortura y el terror. Han pasado
2. El primer contacto del escritor más diferentes. Friderike, de buena cincuenta años desde aquel febrero
con el Brasil databa de 1936, cuando posición económica, católica hija de de Petrópolis. Brasil sigue siendo,
Las quejas se tornan una letanía. nal. ¿A qué hora lo toman? Están
Escribe a Roger Martin du Gard, en el acostados. ¿Qué se dicen en el últi­
sur de Francia: “Llevo una vida distin­ mo momento? ¿Hacen el amor? ¿Se
ta a la suya. Sin el alimento de discu­ acarician? ¿Se despiden?
siones ni diálogos. No hay país más El lunes, los criados llegan a laca­
agradable que Brasil, lo que faltan sa, comienzan a trabajar. Sólo a las
son libros, amigos de mi calibre espi­ cuatro y media de la tarde, extraña­
ritual, conciertos..." dos por el largo sueño de los amos,
A Friderike: "Todo será diferente abren la puerta del dormitorio y des­
después de la guerra. Nuestra vejez cubren los cadáveres.
será vivida con ansiedad y dificulta­ Unade las primeras personas que
des". Y agrega: "Mi desgracia, en es­ acude, junto a policías y periodistas,
tos tiempos, es mi antigua fuerza: es Gabriela Mistral, cónsul de Chile
en Río, que también vive en Petrópo­
prever con nitidez". lis y frecuenta a la pareja: "Entré al
A la viuda del poeta Max Herr- dormitorio y me quedé allí nosé cuán­
mann Niesse: "No te imaginas qué to tiempo, inmóvil. En las dos Cami­
aislados estamos. Aún no me con­ las, una junto a la otra, estaban los
vertí en misántropo, pero no soporto dos; el maestro, con su hermosa ca­
las reuniones numerosas ni la charla beza apenas alterada por la palidez.
ligera. No podemos participar en es- La muerte violenta no dejó huella,
tosdivertimentosdespreocupadossin dormíasin su eternasonrisa pero con
una sensación de vergüenza al saber dulzura y serenidad. El murió pri­
lo que pasa en Europa". mero. Ella vio el fin de aquella vida, lo
Lahistoriaesunatrampa. Europa, retuvo por la cabeza con el brazo de­
el viejo hogar espiritual, devino unida recho, su rostro dirigido hacia el del
y vigorosa, el nazismo es un recuerdo marido. El rostro de ella estaba defor-
lejano. Alemania no sucumbió. Por el
ma del entusiasmo an­ contrario, ha renacido con tanto em­
tinazi. El lúgubre judío puje como la lengua germánica que 12. Claudio de Souza, que tenía
vienés que lo visitó a fi­ unificaa un neoestadode ochenta mi­ importantes conexiones con el go­
nes de 1941 llevaba ya llones de seres libres. El mundo no bierno, consiguió que no se hicieran
la muerte en el alma. las autopsias. El procedimiento fue
acababa en 1942, como creyó el sui­ muy irregular. No se supo con certe­
Un testigo narró así el cida de Petrópolis. La historia es un ■ za la hora de la muerte, ni cuánto pa­
encuentro: "Bernanos túnel dividido en segmentos ciegos. só entre la muerte de él y la de ella,
5. Brasil, país del lo acogió conmovido y Por momentos, parece insondable­
futuro había sido mal aunque ladiferencia en el rigor mortis
mente oscuro, sin salida. Y sin em­ certificó que él partió primero.

CeDInCI
acogido por los inte­ abatido^ sin esperanza, bargo, la luz alumbraba en un recodo,
lectuales del país. Se El gobierno decretó honras espe­
sospechaba que el li­ allí, a pocos pasos. Qué corto es el ciales. Los cuerpos fueron enterra­
lleno de pensamientos espacio de unavida, qué insuficiente. dos en el cementerio de Petrópolis,
bro eraun encargodel Aunque parezca eterno. Aunque pa­ tras una ceremonia religiosa oficiada
gobierno, con fines de reciera eterno en esa burbuja de de­ por el rabino Henrique Lemle. Un año
propaganda. El viejo 6. En los últimos sesperación que latía bajo el cielo ra­ después, conforme la tradición he­
recelocontrael extran­ meses, la desesperan- diante de Petrópolis, ese paraíso em­ brea, fueron inauguradas las lápidas
jero, la envidia hacia za crecía: el pesimis- ponzoñado. de mármol. Allí se conservan aún
el triunfador que ago­ mo por la situación hoy, casi en ruinas, sin flores. El cui­
taba miles de ejem­ política, las fantasías 8. Febrero del '42. Comienza el dador del pequeño camposantotiene
plaresmientras los es­ de que la guerra pu- Carnaval en Río. Música, erotismo una vaga idea de quién está enterra­
critores nativos tenían que costearse alcanzarlo aun en el confín do allí: "Un escritor que se mató con
americano (Estados Unidos, tras Hi­ desatado. La pareja observa fascina­
la edición de sus libros, le granjeócrí­ da aquella explosión vital. Sus ami­ su mujer...", recuerda.
ticas más o menos veladas. La iz­ roshima, había entrado en belige­
quierda brasileña, en lascatacumbas rancia; se hablaba de que podía ha­ gos brasileños, el diplomático Clau­ 13. No todo había sido premoni­
de la oposición, no entendía el drama ber submarinos nazis en el Atlántico dio de Souza y su editor Abraháo ción de derrota en el chalet de la rúa
de aquel elegante desterrado que al­ Sur). Su cumpleaños número sesenta Koogan los invitan a presenciar el Gonqalves Días. Sobre el escritorio
morzabacon el caudillo y era recibido aportó un gramo de melancolía: en­ desfile de escolas do samba en la quedó, redactada de puño y letra del
en los salones oficiales. Lo que para traba en la vejez. ¿Quién era final­ Praga Onze y el fastuoso baile de dis­ suicida, este texto, que llevaba portí-
mente? Un escritor de moda, un bió­ fraces del Teatro Municipal. Aquel tulo “Declaración": ‘Antes de dejar la
el escritor era cortesía debida al due­ vidaporvoluntadpropiay libre, conmi
ño de casa, para los brasileños era grafo (género menor), un narrador año, Orson Welles, reciente triunfa­
olvidable. dor con Citizen Kane, estaba allí fil­ mente lúcida, meimpongo una última
besamanos ("Ni siquiera leí Brasil, obligación: dar un cariñoso agradeci­
país del futuro. Lo condené por puro Mientras elcrepúscuto incendiaba mando una película. La pareja se ex­
la vegetación lujuriosa, yacía tendido cusa a mitad del festejo y se dirige ha­ mientoa este maravillosopaís quees
sectarismo, al bulto", confesaría mu­ Brasil, quemeprodigó, a miy a mi tra­
chos años después Jorge Amado). en un sillón de la galería, con la muer­ cia la terminal de autobuses para re­
te mordiéndole el corazón. Los sue­ tornar a Petrópolis. En el camino, los bajo, tan gentily hospitalariaguarida.
El escritor vienés seguía deslum­ Cada día aprendí a amar a este país
brado por la belleza natural del país ños de gloria habían exaltado su ado­ rodea ungrupode máscaras: la Muer­ pero en lugar alguno podría recons­
pero no conseguía reconstruir su ruti­ lescencia. La vida se había escurrido te, con su capa negra, danza alrede­ truir mi vida, ahora que el mundo de
nade trabajo. Intentótrabajar en un li­ y hoy aceptarse, sorber el trufo amar­ dor de ellos que observan en silencio, mi lengua estáperdidoy mi hogar es­
bro sobre Balzac, pero sus manuscri­ godel fracaso, era lo único que hubie­ demudados por la alegoría. piritual, Europa, autodestruido. Des­
tos y apuntes habían quedado en ra asegurado la paz. Quizá sobrevi­ pués de sesenta años se necesitan
Londres. Acarició la ¡dea de una bio­ viese una página, un adjetivo lumino­ 9.Quedabalaconcienciaparates­ fuerzaspococomunespararecomen-
grafía de Montaigne -releía sin pau­ so. ¿La literatura no es, como la vida, timoniar. Los ojos siempre abiertos
un misterio inescrutable? ¿Acaso hasta el fin. Es la conciencia laque da
sas los ensayos sobre la muerte y el aquellamínimavictoriacontra eltiem- sentido al dolor. Pero, ¿y si la con­
suicidio-. Pero lasbibliotecas brasile­ po no justificaría tanto esfuerzo? ciencia se torna un peso intolerable? recta conducta, decidí que
ñas eran muy pobres. La soledad lo Dormir, qué descanso. Y siempre era mejor concluir una vida en la que
abrumaba, aunque fuera la soledad 7. Y el remordimiento por haber Montaigne: sólo quien sepa la labor intelectual fue la más pura
luminosa del paraíso tropical. arrastrado a Lotte, aquel ser desvali­ alegría y la libertad personal el más
Fue a visitar a Georges Berna- do. Y la culpa por sobrevivir, por ha­ En algún momento de aquel mes preciado biensobrela tierra. Saludo a
nos, el inconformistacatólico francés berse salvado de la suerte de tantos de febrero toman ladecisión final. Co­ todos mis buenos amigos. Que les
exiliado en Barbacana, una pequeña millones de hermanos. Escribe a Fri- mienza una larga y minuciosa prepa­ sea dado ver la aurora de esta larga
ciudad de Minas Gerais. El contraste derike, en Nueva York: "Pasará mu- ración. El planificó la muerte con el
entre ambos no podíaser mayor. Ber- detallismo con el que redactaba sus En esas líneas arrojaba al enemi­
biografías. Se debe hacer testamen­ go, aun sin nombrarlo, el peso moral
nanos, monárquico, anticlerical, era del acto irremediable, y de esa mane­
unpolemista nato. En su villorrio brasi­ to, prever las contingencias heredita­ ra hacía su apuesta final. Estratage­
leño había formado un círculo de tiende. Perder el hogar es algo te­ rias, acóadicionarlosmanuscritosque ma de tantos suicidas. Sin ir más le­
acólitos en el que manteníaviva la lía- rrible..." se editarían póstumamente, despa­ jos, la utilizaría doce años después el
propio Getulio Vargas. Ocupaba el con Salta, de pie junto a Perón, para dad, respete a las viejas compadrito,
gobierno en 1954, reconvertido a la un par de tortolitos, de Londres no, de negro de mierda, leéte el Martín Fie­
democracia, escrupuloso observante SEÑAS DE IDENTIDAD Liverpool, pasa a trasmitir desde el rrogringo bruto, virgen santa es anar­
de laconstitución federal. Pero eraja­ comando en jefe, ¿no te animás a lle­ quista, iluminan el histórico convento,
queado por un demagogo reacciona­ varme a un hotel?, Santo Domingo no se puede comparar con Caruso,
rio, Carlos Lacerda, y tos militares le también es América, partidariosdel ti­ yira, yira, ni me hable de política crio­
eran hostiles. Al borde mismo del gol­ rano prófugo, alta en el cielo, ¿será lla, pelecharon tos taños, creo en su
pe de estado, la noche del 24 de
agosto, Getulio, en su dormitorio del
Palacio Catete, se disparó un tiro en
Tratado sobre las esferas ruso el submarino?, mirási Mandrake
se hubiese dedicado al afano, los
vendepatrias, ella era laque tenia co-
palabra, ¿son rusos o judíos?, cuidó­
te de ese turro, me lo anotaen la libre­
ta, tucumanocabeza, patriasí colonia
un papel que rezaba: "Dejo a la saña jones, el cura gaucho era zurdo, las no, toca Canaro, Bafa, Hormiga Ne­
de mis enemigos el legado de mi
muerte... Larespuestadel pueblo lle­
gará más tarde". Al día siguiente, las
celestes (y blancas) pardas son difíciles, el Che está en
Tucumán, a las veinte y veinticinco,
en mis tiempos costaba diez guita, y
gra, y Rassano y Lepera, carta de Ita­
lia, hacían falta tos milicos, una mano
atrás y otra adelante, éste es un país
al vtojo líder muerto. El ejército lasd?s° entonces dijo Atoé, se le salió el tro- de bendición, no se paga el aguinal­
ley, por el retorno definitivo del gene­ do, y entonces cerré tos ojos, tos
persó. El papel era apócrifo. Lo había ral, una reunión en la parroquia, Anto- apreté muyfuerte, medí vuelta y bus­
redactado un edecán. ------------------------------------------- P o r Nicolás Castillo ------------------------------------------ nioni, y entonces llegó Fidel, ése es qué la ventana para mirarlaglicinaen
colorado, ¿te compraste el diafrag­ el patio. No me joda, dije.
14. El suicida de Petrópolis murió ma?, aquéllos erangobiernos, tosbol- El hombre no parecía escuchar-
tres veces. Lo mataron, primero, sus ches no mojan nunca, qué quiere de­
proptosfantasmas. Segundo, susene­ cir Conintes, frene amigo, grité, tírele Me aproximé al recipiente, lafuria
migos: en 1980, Albert Speer recor­ agua, apague eso. El hombre me se había calmado. La sustancia o lo
daríaen sus memorias que "el gobier­ contempló impertérrito, ni piedad ni que maldita cosa fuese se enfrió de
no de Berlín saludó con alegría aquel desdén había en sus ojos. Me ofreció pronto, se aglomeró, hasta transfor­
fin, merecido para aquel enemigo del un negro y lo encendí. Como si no tu­ marse en una masa blanquecina del
nacional-socialismo...". En tercer lu­
gar, sus compañeros. La decisión fa­ viese ganas de hablar, y menos con­ tamaño de mi mano.
tal fue criticada por muchos exiliados migo. Yo sólo vine a preguntarle por El hombre levantó tos ojos como
antinazis como una claudicación. En la crisis de lo político y del sistema si recién me viese.
una carta a Friderike, desde Califor­ simbólico de representatividades te­ —Después vinieron las muertes,
nia, Thomas Mann, tras aclarar que niendo en cuenta tos marcos demo­ ésas ni imágenes dejaron.
“siento sincero luto por el hombre ex­ cráticos y el agotamiento del modelo Debajo de la campera sentí una
traordinario cuyo nombre usted usa", la vereda, al taño que largaba la pulpo ción, por qué te fuiste Derrida si va­ de Estado social, dije, tratando dedis- excitacióndeviejostiempos, micabe-
escribió estas palabras impías: "¿No para gritar hay vienen los tanques por mos regresando cubiertos de polvos za proyectaba y calculaba a mil kiló­
conocía sus responsabilidades ante Salguero, Videla Balaguer pidiendo de estrellas, empanizados en ideas Pero me di cuenta de que ni si­ metros por hora.
luminosas, copulando sobre las ca­ quiera él podíacontrolar la retorta,so­ —Sería interesante examinarla,

CeDInCI
cientos de miles de seres, sobre tos sangre desde Córdoba, los zapatos
que su abdicación tendrá un efecto de Evita en la Comisión Investigado­ deras de las mutaciones y hasta que­ segarla, apagar esa ebullición rojiza discutirla en un seminario permanen­
arrasador? ¿Y tos abandonados por ra, una cinta de Madrid escuchada en riendo asesorar a diputados. que volvió a cobrar bríos, a brotar en te. Usted también intervendría, por
el destino, para tos cuales el exilio es la cocina de un bar-minutas y el coci­ Estonotienesentido, dije. El hom­ diademas fugaces, tonos amenazan­ supuesto.
mucho más duro que para él, el cele-' nero que tapa la olla para escuchar bre me miró socarronamente como si tes, pequeñosfogonazos, formas que —¿Examinar qué?
brado, el protegido de las necesida­ mejor, la revolución de Trotsky y tos hubiese esperado la pobreza de mi se disipaban a una velocidad increí­ —El masacote. ¿No se da cuen­
des materiales? ¿Será que conside­ caminos de la libertad entre Rastros y reacción silábica. El aire en la pieza ble. una pieza con seis camas y dos ta? Mostrárselo a los investigadores,
raba a su vida como un affaireprivée, Corin Tellado, Plaza Once en el 64, estaba espeso y el hombre tambori­ colchones, ése ya votó dos veces, tu a tos asesores, a tos candidatos. Ma­
diciendo simplemente arréglense, yo tos textos del Che en número dos de leaba sobre la mesa una suerte de ri­ abueloerade AdolfoAlsina, tosporta­ ñana hay un coloquio sobre nuevo
me voy? ¿Será que tenía el derecho la revista que el imprentero nos fía, el tual indio. Si piensa decir algo origi­ ron al sur, hablá en cristiano, la nona discurso político, se podría conseguir
de dejar al enemigo común la gloria himno nacional con tos bancos y tos nal, mejor córtela, escuché que me llora con Magaldi, calíate galerita, hoy financiación importante, llevara lacá­
de saber que nuevamente alguien escritorios en el medio de avenida In­ advertía, porque otra vez danzaban arribaron a puerto, gaita de mierda, tedra. Es como un sueño, o una pesa­
abandonó la lucha ante su férrea de­ dependencia frente a tos hidratantes, las figuras en el recipiente, ahora de correntino señor, el genovés se ahor­ dilla.
cisión de rehacer el mundo?" Siete y una bruma que cubre el recipiente y manera frenética, casi insoportable, có, cortóle el empacho, vino esca­ Me daba cuenta de que la cues­
añosdespués, Klaus Mann se suicidó el hombre que sonríe como si él tam­ lascenizas se contorneaban de luces pandode la mafia, oíd mortales, te los tión era pactar de cualquier manera.
en Europa. Su padre, Thomas Mann, bién desde lejos hubiese visto las y sombras, como un calidoscopio sin prestan en la biblioteca socialista, la El hombre insinuó una sonrisa
ni siquiera fue al entierro. final ni principio donde nada podía rusita escupe sangre, muera el pelu­ irónica. Luego cerró los ojos como si
Los mártires, reflexionaría Albert Observe, dijo, como si no hubiera apresar pero veía tos mapas del Billi- do, madrecita querida, que quiera ha­ hubiese escuchado undisparate. Vol­
Camus, tienen que elegir entre ser ol­ tenido confianza en lo que vi, pero ken con vacas y espigas de maíz, bitar suelo argentino, son turcos los ví a mirar la piedra y ya no estaba. En
vidados, ser ridiculizados o ser utiliza­ ahora las figuras calcinadas sobre la Corbatta avanzando por la raya, el de arriba, pobrecito el angelito, coco­ el plato de cobre no había nada.
dos. Que se tos comprenda, eso plancha al rojo me mostraban extra­ carro del lechero, las sinfonías de liche farabute, entró en la universi­ En la calle ni frío hacía.♦
nunca. Sólo Romain Rolland, el viejo ñas siluetas, bordes en perpetua me­ Beethoven saliendo por la ventana,
maestro, atrapado en la Francia de tamorfosis, agujeros y sinuosidades Vito Nervio en continuará, el Extranje­
Vichy, fue piadoso: "...Es la última en un juego vertiginoso, el informe a ro, Alfredo Palacios ya lo había exigi­
desgracia que podía esperar. Pare­ las bases, el modo de producción do, dos licuados sin leche, y vos sos
cía tan fuerte, tan seguro de sí. Corrió asiático, algunas páginas de trópico virgen todavía pero tu novio se quedó
hasta el fin del mundopara ponerse al de cáncer, las alas del movimiento, en Azul, dejáte de joder con el muro
abrigo. Allí lo esperaba la muerte. Po­ teoría del imperialismo, cuanto peor de Berlín, ¿y así me decíscortamos y
bre Stefan Zweig'.* mejor, laof icialidad joven, la montaña hasta siempre?, dieciocho años de
mágica, lumpen burguesía, lo que le lucha hermano, viste como reparten
pasó a Vandor, contradicción princi­ leche los comandos, tu abuelo levan­
pal, el manual de Mariguela, Rayuela tó esta casa cuando enfrente era un
de noche esperándola, Padilla a la descampado, Carrizo se cagó en las
zafra, en la isla las prostitutas son patas, tierrade promisión crisol de ra­
maestras, la batalla de argelia parado zas, San Diego con filtro lo probaste,
en la butaca, a las ocho en la pizzería dale gracias a diosque sos argentino,
de la estación Lanús, los estudiantes y basta dije, basta, acaso no tuvimos
de Pekín, la peronización de Althus- cielos azules, cantores de la tierra,
ser, tos límites del bonapartismo y el proyectos de desarrollo, petróleo ba­
último monólogo de Joyce hasta la re­ jo las patas, amores de estudiante,
cuperacióndemocrática, cartasdedul- obreros devanguardia, cuentistas me­
ce de leche, vía aérea de yerba mate, morables, pero era imposible: sobre
encomiendas de mocasines reforza­ el plato de cobre giraban figuras, pa­
dos, denuncias del genocidio, colo­ labras, criaturas, sonidos, y la red
quios del neofascismo en el cono sur, azul y blanca de emisoras, giro a la iz­
somos todos ciudadanos, crisis de lo quierda, el profesor Fislander, llegó
simbólico, redespliegue del Estado, con una botella de champagne en el
la muerte de Karl, volver a laconstitu­ culo, tocáte un tangoy dejáte de joder
un esquema de alternancia entre ra­ cambio de costumbres, de referentes más limitados y en condiciones más
PROVINCIAS EN CRISIS dicales y peronistas, caracterizado culturales y morales se ha extendido; desventajosas para tos “clientes". En
por lafortalezade redes clientelares y y alcanzaron el tamaño suficiente pa­ algunas provincias periféricas esta

¿Nuevos escenarios
la concentración del voto, fue des­ ra dar lugar a procesos de asociación estrategia tiene ya un desarrollo im­
bancado en la última elección por una de sectores de intereses, activación portante instrumentadatantopor sec­
alternativa electoral presentada por de relaciones de solidaridad clasista tores políticos tradicionales como por
el ex gobernador de la dictadura, y entre los asalariados, conformación nuevas agrupactonesque han capita­
Tucumán, donde sucede algo similar; de mercados de consumo, y deman­ lizado el descrédito de aquéllas (Bus-
como a Salta, Catamarca, Chubut y da de servicios y bienes culturales si, Ulloa, Ruiz Palacios, etc.)
Jujuy, sacudidas por movilizaciones modernos. En algunos de estos cen­ La tendencia a la fragmentación
populares sin precedentes, que car­ tros los niveles de pobrezacrítica son que soportan tos partidos nacionales
comieron rápidamente las bases de menores que en las zonas rurales o en las provincias en crisis se adecúa,
las estructuras del poder provincial y en las grandes áreas metropolitanas, y en parte se debe, a esta estrategia.
sus mecanismosde integración anun­ hecho que en buena medida explica Es notable cómo en las provincias
ciando una aparentemente inevitable su éxito demográfico. Además, los donde lacrisis es más aguda, las líne­
dispersión de los votos cautivos.' Los costosy tiempos para la movilidad in­ as internas de tos partidos se multipli­
gobernadores de Jujuy y Chubut de­ terna y tos costos de instalación son can, y el nivel de enfrentamiento entre
bieron renunciar y fueron reempla­ menores que en las grandes ciuda- ellas se agudiza. El canibalismo favo­
zados por tos vicegobernadores, Tu­ rece lafragmentación de demandasy
cumán fue intervenida y los goberna­ No entodos los casos tos factores su manipulación desde el poder cen­

c
dores de Salta y Santiago del Estero económicos actúan favoreciendo su tral. El desenlace de lascrisis en Chu­
debieron enfrentar juicios políticos y crecimientoydinamismo: algunasca­ but y Jujuy es fiel expresión de esta
_________________________________________ Por Marcos Novaro--------------------------------------------------------------- duros cuestionamientos por irregula­ pitalesde provinciay centros regiona­ estrategia. Por otra parte, la aplica­
ridades y mal desempeño de sus fun- les tradicionales se caracterizan por ción del sistemade lemas (ya adopta­
"En Catamarca se vive hoy lo que el país vivió en 1982. De repente nos di­ dos por la crisis del estado y de las es­ suprolongadoestancamiento. Sin em­ do en Tucumán, Santa Cruz, San
mos cuenta de que hablamos estado viviendo siete artos sin justicia, sin tructuras políticas tradicionales. La En el caso de Catamarca, la he­ bargo, el incremento del empleo pú­ Luis, Santa Fe y Formosa, y que po­
parlamento, con la corrupción desde el estado y la prostitución en el po­ crisis fiscal y la práctica desaparición catombe sufrida por la élite de poder, blico actuó en esos casos disminu­ siblemente incorporarán La Rioja y
der" (declaración de un miembro del Frente Cívico. Marzo de 1991). de la inversión pública y la reducción fruto del simultáneo debilitamiento de yendo el nivel de desempleo y esti­ otras provincias), y del voto uninomi-
de los fondos coparticipados determi­ las redes de clientela y cooptación, y nal por circunscripción (que se pre­
tencia entre grandes estructuras polí­ naron, especialmente desde la asun­ de la putrefacción y descrédito de la senta como solución a la crisis de re-
ticas de alcance nacional (principal­ ción del actual gobierno, la incapaci­ familia tradicional y la corte de políti­ presentatividad),tambiéntiendea pro­
mente el PJ y la UCR, pero también En las provincias dad del sistema para mantener y más cos corruptos que la rodean, también fundizar esta fragmentación3 y a per­
las FFAA y los sindicatos) y una es­ aún para incrementare! empleopúbli­ muestra la debilidad de sistemas rígi­ sonalizar la representación política.
tructura económica profundamente periféricas están co provincial, las otras formas de dis­ dos, con escasos recambios parti­ El recorrido realizado por el presi­
centralizada. tribución de beneficios y, por lo tanto, dente, desde su feudo riojano hasta
on la apertura En consecuencia, las provincias naciendo nuevas la red de relaciones clientelares mon­
darios, y la insuficienciadel control de
su actual estrategia gubernamental,

CeDInCI
democrática, periféricas y sus centros urbanos de­ tos instrumentos del estado para en­
formas de tada en torno a ellos. Simultánea­ frentar las situaciones de crisis agu- es un ejemplo de cómo se encaran,
ciertos espacios políticos se renova­ bieron insertarse en la vida política mente, la crisis de los partidos nacio­ desde perspectivas reaccionarias de
ron, potenciando el proceso de demo­ nacional a través de mecanismos de sociabilidad y conflictos nales, en parte fruto del mismo proce­ este tipo, las transformaciones ope­
cratización, mientras que otros reto­ distribución de poder y recursos con inéditos que alteran so, y en parte consecuencia del cre­ Nuevas ciudades y nuevos radas en las provincias periféricas. El
maron simplementesusfunciones po­ centro en los principales distritos (Ca­ ciente descrédito de las élites dirigen­ escenarios políticos cimentó su poder sobre la base de
líticas tradicionales. Entre estos últi­ pital Federal. Buenos Aires, Córdoba la vida política tes, de su incapacidad para dar res­ unaélitetradictonaldecarácter nepo-
mos se encuentran las provincias pe- y en menor medida Santa Fe). Meca­ puestas frente a la crisis y de las frag­
riféricasy susciudadescapitales. Ellas nismos de distribución que operan a tradicional. mentaciones internas producidas por
La crisis del sistema político en tista y un extenso sistema de distribu­
las provincias periféricas también se ción de prebendas (empleo público,
se reconstituyeron a partir de 1983 través de la asignación de los recur­ violentos giros ideológicos y estraté­ vincula con la emergencia de nuevos promoción de proyectos de inversión,
como espacios de reproducción de sos fiscales (coparticipación, fondos gicos de sus cúpulas, ha abierto pro- procesos poblacionales, económicos etc.). Su control del sistema político
élites políticas locales, y se mantuvie­ no reintegrables, inversión pública, fundasfracturas entre los distintos ni­ y culturales durante las últimas déca­ provincial se consolidó a través del
ron relativamente al margen de los etc.) y de la distribución de cargos en veles de la élite política y entre ella y das, que tienen por centro sus ciuda­ establecimiento de un vínculo privile­
procesos de movilización y democra­ el gobierno central (vía las luchas in­ la sociedad. des capitales. giado con el gobierno nacional (sus
tización en curso. Por lo menos has­ ternas partidarias). En todas ellas la El serio deterioro de los mecanis­ Todas estas ciudades alcanza­ acuerdos con Alfonsín le permitieron
ta 1989, se limitaron a ser una suerte asignación de recursos públicos a tra­ mos de coparticipación de recursos ron dimensiones intermedias (perte­ obtener recursos extraordinarios pa­
de mercado electoral “cautivo” y base vés de mecanismos clientelares y la (se habrían reducido a un 50% entre necen a este rango tos centros que ra la provincia) y de la reforma cons­
de lanzamiento de dirigentes provin­ cooptación de dirigentes a través de 1989 y 1990) trajo aparejada una ma­ poseen entre 50.000 y 300.000 habi­ titucional de 1987, en la que se esta­
ciales hacia la vida política nacional. las estructuras partidarias nacionales yor penuria financiera para estas pro­ tantes) y reúnen un importante y cre­ bleció la elección de diputados pro­
Si bien se deben diferenciar pro­ han tenido gran relevancia en la for­ vincias. A raíz de la recesión econó­ ciente porcentaje de la población del mulando la actividad del comercio y tables, cámaras de comercio e indus­ vinciales por pequeños distritos (co­
vincias periféricas con cierto desarro­ mación de consenso y la reproduc­ mica y lacaída de la recaudación pro­ país. Catamarca incrementó su po­ tos servicios. tria, etc.), que consisten en manipular rrespondiéndole renovar cada dos
llo económico y sistemas políticos re­ ción de las estructuras de poder, y así pia, dependen crecientemente de blación entre 1970 y 1980 un 37,3%, las agencias municipales y provincia­ años seis bancas al de la Capital, tres
lativamente abiertos (como Chaco, continuó siendo incluso luego de la transferencias y salvatajes financie­ Formosa 55,7%, La Rioja 45%, Raw- Estrateglas políticas en los les, y más generalmente “puentear- al de Chilecito y unaa cada uno de tos
Tucumán o Río Negro), de aquellas apertura del proceso de transición ros que otorgan discrecionalmente son 79,6%, San Luis 39,1%, Ushuaia nuevos escenarios las", recurriendo a su capacidad de otros). Gracias a lo cual, en las elec­
que viven en un gran atraso económi­ democrática. El manejo del empleo las autoridades nacionales. El gobier­ 104,7%, Viedma 88,8% y Río Galle­ acceso a tos grupo de poder naciona­ ciones de ese año, el PJ recibió el
co (Misiones, Formosa, Jujuy, Chu- público por parte de estos gobiernos no nacional ha aprovechado esta cir­ gos 56,2%. En el mismo período las Las transformaciones que se es­ les. Las capitales provinciales debe­ 55% de los votos y el 75% de tos car­
but o Santa Cruz) y de las que pose­ provinciales es un claro ejemplo en cunstancia para montar un sistema grandes ciudades crecieron sólo el tán produciendo y se producirán en rán mantenerse en su situación tradi­ gos, y la UCR, con cerca del 33% de
en sistemas políticos cerrados, enca­ este sentido: en algunas provincias de “premios y castigos" a través del 20% en promedio. Esto es conse­ las sociedades provinciales periféri­ cional de aislamiento, para poder se­ las preferencias, obtuvo sólo dos di­
bezados usualmente por grupos fa­ se incrementó en alrededor del 300% cual las provincias que respetan las cuencia, al menos en parte, de que la cas, consecuencia del actual estado guir siendo manejables por tos mis­ putados. En la nueva ley orgánica
miliares y élites oligárquicas que mo­ entre 1983 y 1989, fundamentalmen­ pautas del plan de ajuste reciben fon­ población migrante de tos pequeños de ebullición, pueden adoptar direc­ mos de siempre pero sin los recursos municipal se estableció un mecanis­
nopolizan el poder (como Corrientes, te en la administración. Este es el ca­ dos para sobrevivir y las que no achi­ centros urbanos y del área rural (que ciones diversas. Una de ellas parece de antes. Por ello se apoyan en el es­ mo similar; a la primera minoría elec­
San Juan, La Rioja o Catamarca), se so, al menos, de provincias como can sus planteles y su gasto son asfi­ en este período crecieron sólo el 4%) consistir en la creciente exclusión de píritu localistay la reducción del espa­ toral le corresponde el 66% de tos car­
puede afirmar que la vida política po­ Chaco, La Rioja y Catamarca (en es­ xiadas. Consecuenciadirectadeesta ya no se dirige a lasgrandes urbes, si­ importantes sectores populares y de cio público local a un mecanismo de gos del Concejo Deliberante.
see ciertos rasgos comunes en todas ta última, por ejemplo, existían en situación es el auge de las moviliza­ no principalmente a las ciudades de sus demandas de tos circuitos políti­ distribución de servicios elementales Las constantes huelgas y movili­
ellas, y que han entrado en un proce­ 1990 alrededor de 70.000 empleados ciones sociales en estas provincias, cos. Aun los sistemas clientelares im­ que aparentemente no implican deci­ zaciones de empleados públicos y
so de crisis y transformación cuyas públicos). no casualmente encabezadas por Además del rango poblacional y plican la incorporación de tos secto­ siones políticas sino sólo gestión ad­ otros sectores evidenciaban, ya en
consecuencias electorales y estruc­ multisectoriales y coordinadoras in­ el ritmo de expansión, se pueden se­ res populares a la consideración de ministrativa, que favorecen la exclu­ tos últimos años de su gestión como
turales, aún difíciles de prever, segu­ Los efectos de la crisis tersindicales de empleados públicos, ñalar otras características comunes, tos sistemas de decisión y el recono­ sión de toda demanda "conflictiva". gobernador, que tos costos del siste­
ramente tendrán gran relevancia. sobre los escenarios la base de las clientelas electorales, relativamente recientes, que les con­ cimiento de un espacio en el que la Otra posibilidad consiste en la in­ ma de cooptación superaban tos re­
En sí mismos, dichos espacios tradicionales exigiendo soluciones a las dirigen­ fieren unadinámica política particular movilización clientelardeldemandan- corporación fragmentariade estasso­ cursos disponibles. Era evidente que
han sido tradicionalmente ignorados, cias políticas locales, que el gobierno (y que comparten con otras ciudades te encuentra “respuestas adecuadas ciedades provinciales a nuevos pro­ las demandas de las clientelas elec­
o al menos desvalorizados, tanto por Dos procesos han afectado en central ya no proporciona. La crisis, intermedias del país): han dado lugar a sus necesidades". La exclusión, en cesos políticos de corte paternalista, torales y tos sectores partidarios ali­
los grupos políticos dominantes a ni­ los últimos años estos espacios pro­ en conclusión, estaría originando el a fenómenos económicos localiza­ cambio, supone la eliminación del es­ populismos autoritarios y particularis­ neados se incrementaban a un ritmo
vel nacional, como por sus circuns­ vinciales, fundamentalmente a sus debilitamiento de redes de tutelaje e dos (aprovechamiento de un recurso pacio político donde se realiza el in­ tas que reproducirán con rostros re­ mayordel que el estado podía satisfa-
tanciales opositores. Factores deter­ ciudades capitales, alterando las for­ integración de los sectores populares natural,ventajascomparativaspor ubi­ tercambio. novados, y aun incrementarán, la si­
minantes de este relegamiento han mas tradicionales de sociabilidad po- urbanos respecto de los órganos po­ cación respecto de vías de comunica­ La creciente exclusión de deman­ tuación de marginalidad, desigualdad Como solución, desde el gobier­
sido la existencia de un estado cen- líticos e institucionales de gobierno. ción, concentración de productos pri­ das marcha acorde con las estrate­ y subordinación a que se hallan so­ no nacional ha impulsado la ruptura
tralizador de recursos financieros y En primer lugar, estos espacios Esto ha afectado tanto a provin­ marios de su entorno, promoción in­ giasde los actores políticosy sociales metidas actualmente; posiblemente de las redes clientelares, al menos las
de autoridad política, lafuerte compe- | se han visto particularmente afecta­ cias como el Chaco, en cuya capital dustrial, etc.); la movilidad social y el dominantes a nivel local (familias no­ restableciendo vínculos clientelares de acceso masivo, a través de la re-
ducción del empleo y el gasto público cracia, la autonomía y la igualdad. La las afecta especialmente sino porque gen de la población, sino, fundamen­
(La Rioja tiene más de 33.000 em­ gravedad de la crisis, en cuanto a los en ellas lacorrupción tiene nombresy talmente, orientar la acción colectiva
pleados actualmente, de los cuales, efectos sobre las relaciones de soli­ visibilidad, porque la apacible vida a la expansión de nuevas áreas de
de acuerdo con el plan de ajuste, de­ pueblerina hace tiempo viene siendo igualdad. En toda actividad política
berían cesantearse unos 15.000) y sos públicos, etc., vuelve ilusorio pen­ modificada por un crecimiento urba­ de carácter democrático, una condi­
tanto en La Rioja como en otras pro­ sar en una respuesta espontánea de no importante, nuevas actividades, y ción de la participación es que las de­
vincias que atraviesan graves crisis este tipo. Su avancedependeráde un la conciencia de la necesidad de lo­ sigualdades sean negadas, ya que
políticas, se impulsa la introducción conocimiento adecuado de las ten­ grar la autonomía del poder central y ninguna áreade acción puede consti­
de la ley de lemas, un sistema que en dencias operantes en estas socieda­ la democratización de los órganos de tuirse sinocomoasociación entreigua­
estecontextopermitiráconformar ma­ des y de la capacidad para dirigir las poder local. les. Desarrollar áreas de igualdad su­
yorías legislativas con minorías elec­ acciones colectivas hacia la expan­ pone la articulación en un sistema de
torales cada vez más irrepresentati­ sión del proceso de democratización. Salvando la cuota de utopismo equivalencias, de las pautas y los va­
vasy excluir de toda representación a lores de distintos movimientos de in­
amplias franjas del electorado,4 a lo racterización, es dable pensar que en tereses, por el cual todos los miem­
que se agrega la creciente fragmen­ cia son un terreno adecuado para de­ este tipo de ciudades la presencia bros de una sociedad y no sólo los
tación en los partidos a nivel provin­ sarrollar estrategias de este tipo, así protagónica de la "sociedad civil" y la partícipes del área de acción, adquie­
cial. Actualmente, laprovincia enfren­ como lo son una serie de ciudades in­ relativa transparencia de las relacio­ ren ¡guales derechos a pronunciar
ta no sólo huelgas reiteradas de em­ termedias que comparten sus carec­ nes sociales posibiliten una multiplici­ sus demandas y constituirse como
pleados públicos y masivas moviliza­ dad de formas comunitarias, la aper­ actores. La expansión de esta dimen­
ciones en su ciudad capital, sino la lu­ es más rápidamente superable que tura a nuevasformas de sociabilidad, sión igualitaria, fundamental parauna
cha despiadada entre cuatro líneas en los grandes centros urbanos, exis­ que van desde el tratamiento de nue­ estrategia de democratización de las
internas en que se ha fracturado el ten importantes potencialidades eco­ vos temas de conflicto (medio am­ experiencias políticas a nivel local,
partido oficial. nómicas no aprovechadas y rasgos biente, aprovechamiento racional de
--------------------------------------------------------------- PorJulio Sevar
permite, desde nuestro punto de vis­
políticos y culturales dinámicos. En recursos, planificación del desarrollo) ta, el reconocimiento de una dimen­
Una consecuencia de estas frac­ estasciudades, además, puedenope- a nuevas formas de "la política" (par­ sión imaginaria de los derechos, que
turas es el simultáneo incremento de ciertas condiciones que favorez­ ticipación másdirectade los interesa­ El ministro cuenta con un buen se aproximará nueva instancia
los coloca en la base de la vida políti­ equipotécnico, apoyo políticode' sec­
las incorporaciones de “asesores" y can la selección de las autoridades y dos en la definición de proyectos, ca democrática. del ajuste infinito.
personal de gabinete en el gobierno faciliten la gestión de gobierno, la búsqueda de más transparencia de tores del gobierno y la oposición, y
provincial y del cruce de denuncias una débil base en el empresariado. El plan de un Capitalismo y disciplina
identificación de los problemas y el lasrelacionespolíticas, reconocimien­ La diferenciación de estas áreas
por mal desempeño de las funciones esbozo de posibles soluciones. La to del espacio público como lugar de Frente a él se encuentren una gobierno
de igualdad no será un efecto espon­ parte del gobierno y los trabajadores,
públicas entre diversos funcionarios existencia de un espacio disponible ■expresión de la sociedad", relativiza- táneo de la misma crisis, pero tal vez En laeconomíaargentina, elcom-
de la misma administración. La diri­ para el desarrollo de nuevas formas ción del poder de la burocracia esta­ uno de los procesos más positivos
especialmente los estatales. desprestigiado y portamiento de los agentes económi­
gencia local se ve crecientemente Otros sectores, como los ban­ cos significativos conduce, desde ha­
de participación y responsabilidadco­ tal y partidaria, etc.). que ella inaugura en las provincias es queros, los acreedores externos y el en crisis debe enfrentar
acorralada entre las necesidades del lectiva es favorecida por el hecho de la emergencia de ciertas estrategias ce décadas, aun círculo perverso de
aparato político prebendario y la des­ que la mayoría de los habitantes y to­ Una estrategia política que apun­ cuyo objetivo no consiste exclusiva­ omingoCavallo empresariado que puede ser afecta­ a un tiempo el embate involución en la producción, la inver­
legitimación frente a la sociedad. dos los activistas sociales se cono­ te a potenciar las dispersas expresio­ ha lanzado una do por su política no hacen todavía sión y los niveles devida. En este con­
mente en el logro de demandas espe­ de trabajadores y grupos

CeDInCI
cen entre sí. Rawson, Jujuy, Cata- nes de la crisis en este sentido, debe cíficas, sino que se constituyen en blitzkrieg con la que piensa alcanzar una oposición frontal, pero aguardan texto algunos sectores minoritarios
En conclusión, la personalización marca y muchas otras ciudades se plantearse como objetivo no sólo el los objetivos cruciales que desvela­ agazapados algún traspié y el posible económicos. mejoran su situación mientras la ma­
formas de institución de espacios pú­ ron a muchos ministros por genera- derrumbe del plan y del ministro.
y heterogeneización del sistema de movilizan, y no sólo porque la crisis logro de las reivindicaciones que sur­ blicos de reconocimientoydebate.de yoría retrocede o, como sucede con
cooptación de dirigentes alineados y Como ya lo había demostrado gran parte del sector empresario, no
creación de nueva formas de la polí­ -Estabilizar los precios en el largo Domingo Cavallo es brillante, audaz e
de consenso electoral a nivel provin- tica, de nuevas identidades, etc. La crece en la medida que podría hacer­
plazo y equilibrar lascuentasfiscales, impiadoso. Con su programa intenta lo en otras condiciones.
tarea de convertir estos espacios en reduciendo el gasto y la evasión im­ dar un giro en la administración de la
tencia de una fuerte centralización y áreas de igualdad consistirá en el En las economías ordenadas, ri­
concentración del poder político y los positiva. economíaargentinaque.detener éxi­ cas o pobres, el círculo virtuoso está
amojonamiento y articulación de sus -Racionalizar la administración to, beneficiará a algunossectorespro­
procesos de toma de decisiones en elementos en una estrategia que con­ garantizado por la regulación estatal,
otros niveles: antes bien, lo que se pública comenzando por el despido ductivos preferentemente vinculados con diversos grados de autoritarismo
temple los valores de la autonomía, la masivo de trabajadores. a la exportación y dejará en la calle a
concentra no hace sino agudizar la participación y la equidad.* según el caso, o la hegemonía de al­
descomposición de la vida social y -Reordenar el aparato productivo mucha gente. gún sector productivo que por sus ca­
política en aquellos espacios donde mediante la apertura. Si el programa explota, lo cual no racterísticas difunde su dinamismo al
se constituían las demandas colecti­ Para cumplirestos propósitos ne­ es difícil considerando las resisten­ resto de la sociedad.
vas (aunque más no fuera en forma cesitará disciplinar al mercado y lo­ cias sociales o la dificultad de mante­ En laArgentina, el estado haaban-
clientelista) y de las estructuras esta­ • Resulta arriesgado prever grar que los empresarios no aumen­ ner clavado el tipo de cambio y los donado progresivamente toda capa­
bles de los partidos (reemplazados cambios electorales en este mo­ ten los precios y los trabajadores no precios internos, la sociedad volverá cidad de regulación e inclusive fue lle­
crecientemente por esquemas inor­ mento. Sin embargo, de acuerdo a reclamen salarios. a conocer lainflación descontroladay vado a la quiebrapor dilapidar el diñe-
gánicos de alianzas inestables entre un estudio realizado en febrerode
líderes de diversos niveles). Es por 1991, se estima que seproducirán
ello que la crisis del partido oficial en cambiosimportantesenlastenden­
las provincias periféricas no necesa­ ciasdevotoenseisprovincias(San­
riamente significará el debilitamiento ta Fe, Tierradel Fuego, Entre Ríos,
de la estrategia oficialista a nivel na- Misiones, Salta y Tucumán), y los
resultados son inciertos en otras
cinco (Catamarca, Chaco, Chubut,
El Presidente ha impulsado, has­ Jujuyy Río Negro).
ta ahora con escaso éxito, la forma­ ' En un estudio reciente se ha
ción de lo que denomina la "Liga de comprobado que los costos deex­
los Ganadores", inspirado por el triun­ pansión del serviciode agua pota­
fo aplastante de MOPOF en Tierradel ble en el Gran Buenos Aires son
Fuego, Bussi en Tucumán y la posibi­ 94%superioresa losdeComodoro
lidad de nuevos reveses para el PJ en Rivadavia.
otras provincias. ¿Aunque esta estra- ■Para las elecciones de 1989
tegiafinalmentefracase, existeo pue­ en Formosa, el PJ presentó ocho
de surgir una alternativa de articula­ sublemasy la UCRcinco, y algosi­
ción de las protestas y los cambios milar sucedió en Tucumán donde
que se han descrito, que haga frente también se aplicó el sistemade le-
a las tendencias a la exclusión, la
fragmentación y el aislamiento? ■Elsublemaqueobtengalapri-
meraminoríadentrodeunlemaque
Ella consistiría en alguna forma también reciba la primera minoría,
de radicalización de las experiencias se quedaráconla mayoríaabsolu­
políticas populares, y la conforma­ taenloscuerposderepresentación
ción de nuevos estilos de sociabilidad popular, requiriendo para ello sólo
políticaydegestiónpúblicaque apun­ una “minoría de la minoría" de las
ten a una profundización de la demo­ preferenciasde losvotantes en un
sistemadepartidos fragmentado.
ro en subsidios improductivos, pagar
la deuda externa del sector privado y
tolerar la evasión impositiva de los
Entre los empresarios, ningúnsec-
tor tiene un papel hegemónico, pero
muchos de ellos tienen el suficiente
peso comoparadesestabilizar al con­
junto comprando divisas o remarcan­
do, algo que no podría hacer una cor­
poración gigantesca en economías
como la norteamericana o la alema­
na. A lo largo de los años, numerosos
ministros se propusieron ordenar la
economía poniendo en vereda no só­
lo a los gremios sino también a los
Un tratadista francés citado por
Jorge Vanossi (La Nación, 16-3-91)
constató que el sistema fiscal es re­
gresivos injustoporque la mayoría de
los impuestos gravan el consumo y es
desordenado porque nuncase hacon­
feccionado un programa fiscal. El de­
talle es que estos comentarios figu­
ran en un libro escrito en 1924.
Una de las primeras medidas del
ministro Cavallofue disponer impues­
tos de emergencia para cubrir el de­
sequilibrio heredadodeltandem Gon-
zález-González, prometer una refor­
ma del sistema y un fortalecimiento
de los organismos recaudadores.
generan los bruscos movimientos de
tasas, tipo decambioy bonos, locual,
junto con la posibilidad de operar con
dólares, permitirá una cierta regene­
ración del crédito, casi inexistente en
la actualidad, y reducirá los negocios
de la patria financiera.
Para los remarcadores Cavallo
reservó su programa de "premios y
castigos" y la competencia externa
mediante la apertura, ambos de muy
poca eficacia para contener los pre­
cios. Si éstos suben, provocarán un
fuerte retraso cambiado y la seguri­
dad de una nueva explosión inflacio­
naria en el futuro.
tura sólo ha provocado un efecto de­
sigual, beneficiando a algunas pocas
empresas exportadorasy perjudican­
do, sin estimular una eficientización,
a muchas que venden al mercado
interno.
Cavallo sostiene en sus libros y
exposiciones públicas que la indus­
tria debe recomponerse en base a la
exportación, para locual es necesario
reducir los salarios internos en dóla­
res y disponer insumos más baratos,
mediante la reducción arancelaria.
El programa ministerial repite las
propuestas clásicas de apertura, ma­
Pausmia ITALIA estaoos unidos
w

empresarios, pensando en la repro­


ducción del sistema y en los benefi­
cios de largo plazo.
Como parte de su proyecto de ra­
cionalización el ministro trataráde re­
ducir subsidios que no tienen resulta­
Apertura
El capitalismo argentinocreció en
tizadas con medidas complementa­
riasque. al momento de escribirse es­
ta nota, están en proyecto.
IL MESSAGGERO Newsweek
En 1984 Juan Sourrouille se pro­ dos productivos y recaudar de quie­ but not th ea trica l," M r. Soriano said k e y papé is. L a Epoca oí S a n tia g o and Pá­
puso desarrollar el capitalismo argen­ nes obtienen más beneficios para re­ base a los subsidios estatalesy a una De todos modos las consecuen­ M artedi, ifq u o tid ia n o Pa-
distribuir de acuerdo a sus objetivos fuerteprotecciónaduaneraquelebrin- cias básicas probables, de mantener­ in a telephone interview. g in a/1 2 ha denuncíalo che i g in a 12 o f Buenos A ire s , r c g u la r ly e xce rp t
tino con los capitalistas "realmente
existentes” y los invitó a participar en de política económica. Sin olvidar, dó un mercado cautivo, lo cual contri­ se el esquema, son una agudización M r. Soriano, one oí wfaose novéis a rric ie s fro m E l País. I t has becom e a soap-
de la competencia externa y una re­ m ilita d «fondamentalisti»
las decisiones. Los grupos ingresa­ claro está, que uno de los principales buyó a la inflación permanente y al became the movie " A F unny, D irty
ducción de la base operativa de mu­ stanno planificando un at­ box fo r some o f L a tín A m e r ic a ’s m ost
ron en laCasa Rosadapara presionar destinos del superávit fiscal será el atraso técnico. Durante mucho tiem­ L ittle W ar," was less d ire c t ln an a rti-
al gobierno, siguieron recibiendo sub­ pago de la deuda externa. po el sistema pudo funcionar y sobre­ chas industriasdependientesdel mer­ cle that he w rote fo r Página 12 the ié n ta lo contro un ufficiale in rcspected n o v e lis ts a n d com in e n ta to rsr—
sidios, no invirtieron y terminaron vol­ Estospropósitos encontrarán una vivir, pero los cambios en lacomposi­ cado interno. e ttiv itá per poi scatcnarsi am o ng th e m G a b rie l G a rcía M árqu ez,
teando tres ministros y un presidente. fuerte resistencia en los grupos afec­ ción técnica de la economía obligan a El programa de racionalización y
En 1989 el ministro de Bunge& tados, especialmente los que depen­ un mayor intercambio de bienes y "disciplinamiento" podrá, en el mejor
Born intentó otro programa de racio­ den de las ventas al estado: no es la servicios con el exterior y, por lo tan­ de los casos, generar un círculo vir­ fRANClA
nalización capitalista que, por conte­ primera vez que la presión empresa- to, a una mejora permanente en la tuoso de crecimiento en unafranjade
ner restricciones en el pago de la deu­ ría fulmina los intentos de reducir la competitividad. la economía, con un fuerte costo pa­
da externa, irritó a los barjcos y fue ex­ evasión o establecer sistemas que Los países industriales y otros ra los empleados públicos y casi to­ E SPAÑA
pulsado con el látigo de la corrida permitan un mejor control de los con­ subdesarrollados hicieron su adapta­ dos los que dependan del mercado « arnvisme potinque », etc. Les révéla-
cambiaría.
Ahora Cavallo intenta el mismo
tribuyentes. ción con diferentes grados de inter­
vención estatal que en algunos casos
interno, aumentando la fragmenta­
ción económica y social. tions de Pagina Doce ont court-circuité SVENSKA DAGBLADET cambió
CeDInCI
juego. Precios, estabilidad, liquidez implicaron programas de reconver­ les manauvres du conseiller. M ais cette
sión industrial. En la Argentina varias Cavallo deberá enfrentar a un re han skrev fd r fórsta num ret 26 L a in d ig n a c ió n se m ezcla con
tiempo el embate de los trabajadores affaire n’est sansdoute pas terminée: la maj 1987:
La vergüenza fiscal La fijación del tipo de cambio y el administraciones enfatizaron laincom- la tris te z a : « £ s c fe rio q u e la in ­
establecimiento de formas de desin- petencia de buena parte de la indus­ y de los grupos, económicos que ya presse s’en est emparée et s’interroge Pagina 12 a r en tid n in g dar
El primer objetivo anunciado por dexación son instrumentos destina­ tria local y la necesidad de reconver­ han demostrado un enorme éxito en sur l ’origine desfuites. Le scandale est d ig n a c ió n lle v a a p e n s a r q u e és­
frustrar cualquier propósito de disci­ saker och tin g kom m er a tt kal- te es u n p a ís m e n o s s e rio q u e
Cavallo fue el reordenamientofiscal y dos, también, a disciplinar al merca­ sión para disponer solamente una re­
la reduccióndel gasto y principalmen­ do, y su objetivo principal es justificar ducción de aranceles que, teórica­ plinamiento gubernamental, lo que las vid s in ran a namn. D e doda
t íu r k in a F a so » , d ic e desde u n a
te el aumento de la recaudación. Los las desindexaciones de salarios en el mente, debería estimular la compe­ parece mucho para un hombre con
una base social débil, ministro de un c o lu m n a de o p in ió n J o rg e L a -
empresarios y los economistas orto­ sector público y privado. Otro es pro­ tencia externa y la eficientización.
doxos se oponen a los gastos del es­ vocar una baja en la tasa de interés y Al realizarse en forma aislada y gobierno desprestigiado y en crisis na ta , de P á g in a D oce .
tado porque no quieren pagar los im­ una reducción de las "bicicletas* que fuera de cualquier programa, la aper­ permanente.* ESPAÑA
puestos para solventarlo, aunque en
los últimos años gran parte del gasto
se debió al pago de la deuda externa, E L P A IS ITALIA
originalmente privaday estatizadapor Poco tiem p o después de asum ir
Domingo Cavallo en 1982, a los abun­
dantes subsidios directos e indirectos
y a los sobreprecios pagados a la pa­
la presidencia, M enem de jó en­
treve r en unas declaraciones, p u ­
il manifestó
tria contratista. farsesco ed iró n ic o d i un a vice n d a che ave va tu tta v la tenuto
blicadas sólo en el d ia rio progre­
El gobierno radical redujo el gas­ n e ll'ln c e rte z z a p e r un g io m o in te ro i l paese e g li stessi mez-
sista Página 12 y no desm enti­
to en un 50% entre 1987 y 1989, re­ zi d i com unicazione. D a P a gin a 12, che a p re la p r im a p a g i­
cortando salarios e inversiones públi­ das, que quería fuera del E jé rcito
na con 11 tito lo «E ro e d i fango», fin o a l severo qu o tld ia n o del
cas, locual llevó a la infraestructura y al coronel M oham ed A lí Seinel-
a las instalaciones de las empresas m a ttin o L a N ació n, che s c rlv e - in un a rtic o lo d i fondo p a g i­
dín y al teniente coro ne l A ld o n a - «credevano che R ico fosse u n secondo San M a rtin » .
de servicios al estado de colapso.
Por eso las reducciones del gas­ Rico.
to son cada vez más dificultosas por
las resistencias de los trabajadores y
el peligro de seguir recortando inver­
siones, por lo cual aun los más duros
partidarios del ajuste comenzaron a
hablar de la necesidad de aumentar
la recaudación.
O GLOBO
El sistema impositivo argentino A té o m om ento, P ágina 12 tem
es uno de los más regresivos del cum prido suas promessas aos leitores:
mundo, según las estadísticas del
Banco Mundial, formando la mayor duas de suas matérias provocaram cri-
parte de sus recaudaciones con im­ ses ñas F orja s Arm adas e na Justina,
puestos al consumo y al trabajo. Las mas em compensapfio aum entaram as
recaudaciones por impuestos a las
ganancias o al capital son insigni­ vendas num País desacostumado a de­
ficantes, menores que las del impues­ nuncias. A prim eira fo i a p u b lic a d o de
to a los sellos o a los combustibles.
Además, tiene el nivel de evasión
más alto del mundo, por el incumpli­
miento de grandes grupos y de la mi­
ríada de cuentrapropistas y peque­
FRANCIA
ños comerciantes y fabricantes.
,rector. Jorge L an ata
JTt U í o n t k 0
ESCRIBE CARLOS AUYERO

c
onstruir una alternativa política

Más allá
desde la precariedad quiere
decir, al menos en Argentina,
conciliar muchas cosas a la
vez. Por ejemplo: abrir y al
mismo tiempo delimitar un
espacio de participación;
asumirlo como demanda social
y como creación política simultáneamente;
respetar el derecho a la diíerencia pero

de lo electoral
orientándolo a un necesario proceso de
síntesis; propiciar la autonomía de los
movimientos sociales sin atentar contra las
funciones de representación política;
adoptar una perspectiva largoplacista
compatible con las angustias de corto
plazo; reconocer como públicos ámbitos y
cuestiones que hasta ahora no lo son sin
caer en una mayor dependencia de! de nuestro propio espacio es parte de la
respuesta; pero no basta con invocar tales
Las dificultades que supone una opción herramientas: además hay que producirlas
independiente del "partido único del ajuste" lucha. Es que la disyuntiva no se plantea y aprender a utilizarlas.
no deben entenderse como un llamado al entre movimiento y partido, entre protesta y Nuestra misión no es solamente la de
heroísmo, a las acciones sobrehumanas o elecciones, sino entre una mala o una maximizar votos o la de hacemos
al voluntarismo. Simplemente se requiere buena relación entre ellos. Puesto de otra "competitivos"; nadie desprecia la
un paciente trabajo de articulación. manera: ¿cómo ser participativos y posibilidad de crecimiento electoral pero no
"Articular" significa recuperar una virtud casi eficaces al mismo tiempo? ¿qué tecnología es esto lo que da sentido a la construcción.
extinguida de la política: vincular sin reducir institucional responde a esta doble El propósito es impedir que los partidos del
ni distorsionar los términos de una relación. demanda? La consulta popular y el ajuste neoliberal capitalicen por su cuenta
Este es el nombre de "otra lorma de hacer derecho a revocar dirigentes en el interior las energías desatadas por los conflictos
sociales, y evitar la expropiación del poder
todos y no como actividad cerrada sobre sí generado comunitariamente que después

CeDInCI
se reimpone sobre la gente en forma de
tradicionales de la política están ausentes desempleo, empobrecimiento y
represividad. Es decir, coartar
en esta opción que intentamos desde transversalmente los mecanismos de
múltiples reagrupamientos. No hay una
escena, ni personajes, ni espectadores, ni lealtad y manipulación que permiten a los
guión. Y, menos, una teatralización con sectores dominantes sobrellevar la fractura
final previsible o conocido. Por eso no que han infrígido entre las orgánicas
puede hablarse de “actores"o de un “papel" partidarias y sus bases sociales. Por eso,
a representar. Se trata, más bien, de un reestablecer los vínculos entre las
signo, como muchos otros, que brota de condiciones vitales de los ciudadanos y su
gargantas resecas por el hambre y sed de voluntadpolítica apunta a nueva identidad,
justicia. Y que, en una conversación en y no a terciar mecánicamente en el ritual
clave -misteriosa e inaudible para el electoral.
discurso dominante- pone en cuestión la No quiero que de lo anterior se deduzca
lógica que guía al poder y hasta la propia la más mínima subestimación de los
rebeldía, obligándola a replantearse los partidos y del proceso electoral. Ya que
problemas que la movilizan. éstas son las únicas vías por las cuales la
Está sobreentendido que el legitimidad de los intereses generales, que
protagonismo del pueblo requiere de la encarnan las luchas o demandas
autonomía de sus movimientos, demandas particulares y locales, puede ser
y experiencias de autorganización; que su corroborada. Unicamente pretendía no
diversidad, espontaneidad e intermitencia perder de vista en los tiempos que se
no constituyen un problema sino una avecinan el signo profundo de la
riqueza que se valora; y que aisladas no contrucción en que se halla comprometido
acumulan en términos de un poder el sector progresista de la sociedad
alternativo. Pero su unidad debe resultar de argentina, dentro del cual se encuentra
un proceso de articulación, y no de un inexcusablemente la prueba electoral.
postulado apriorlstico. En tal sentido, existe En los meses venideros debemos
una sana prevención respecto de los cumplir con responsabilidady
legados organicistas y reduccionistas de transparencia la tarea que quienes
nuestras tradiciones políticas. Ni lo participamos en este espacio popular,
"nacional-popular" ni el "socialismo" son progresista y democrático, nos hemos
nociones desechadas, pero ya no son impuesto, advirtiendo que no nos
problematizadas desde el mito de la perdonarán -n i los poderosos ni la
comunidad organizada o de la sociedad gente- las ineficiencias o las
reconciliada, o desde la visión especulaciones que pueden
movimientista o de un sujeto histórico demorar ¡a concreción de una
privilegiado, o desde el pacto corporativo o oferta electoral que represente
la explotación de clase como única las angustias del presentey
conflictividad. también el futuro soñado. Si del
La instancia partidario-electoral no lo futuro se trata, nada es más
condensa todo. Tiene su propia esfera de importante que la vocación de
acción, como no puede ser de otra manera
trascender la coyuntura hacia una
en una sociedad compleja en la que debe
delegarse la toma de decisiones. Pero, al construcción permanente y
unitaria.*-

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