Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
INCA
INCA
Ir a la navegación
Ir a la búsqueda
Para otros usos de este término, véase Inca (desambiguación).
Para ver la lista de Incas, véase Anexo:Incas del Tahuantinsuyo.
Sapa Inca
Cargo desaparecido
Banner of the Inca Empire.svg
Estandarte Imperial incaico
TupacamaruI.JPG
Túpac Amaru I
(último en el cargo)
1570 - 24 de septiembre de 1572
Ámbito Imperio incaico
• Residencia
Sapa inca (en quechua: Sapan Inka)1 o simplemente Inca (en quechua: inqa o inka
‘inca’) fue el soberano del Imperio incaico, cuyo dominio se extendió inicialmente
al curacazgo del Cuzco y luego al Tahuantinsuyo, entidad política que existió en el
occidente de América del Sur desde el siglo xiii hasta el siglo xvi. También era
usado el término Cápac inca (en quechua clásico: Khapaq Inka ‘el poderoso Inca23’).
El primer sinchi cusqueño en utilizar el título de sapa inca fue Inca Roca,
fundador de la dinastía Hanan Cuzco. El último inca en el gobierno fue Atahualpa.
Posteriormente el título fue empleado por los jefes de la resistencia a la
conquista del tahuantinsuyo, como Manco Inca o Túpac Amaru I, conocidos como Incas
de Vilcabamba.
1 Sociedad incaica
2 Elección del Inca
3 Funciones
4 Símbolos de distinción
5 Un ser sagrado
6 Lista de incas
6.1 Hurin y Hanan Cusco
6.2 Incas del Tahuantinsuyo
7 Cronología
8 Véase también
9 Referencias
10 Bibliografía
11 Enlaces externos
Sociedad incaica
Detalle de una galería de retratos de los emperadores del Perú donde los reyes
españoles (lado derecho) figuran como sucesores de los soberanos incas (lado
izquierdo). Lámina publicada en 1744 en la obra "Relación de Viaje a la América
Meridional" en la que Jorge Juan y Antonio de Ulloa fueron sus autores.
Encontramos estos reinos en tal buen orden, y decían que los incas los
gobernaban en tal sabia manera que entre ellos no había un ladrón, ni un vicioso,
ni tampoco un adúltero, ni tampoco se admitía entre ellos a una mala mujer, ni
había personas inmorales. Los hombres tienen ocupaciones útiles y honestas. Las
tierras, bosques, minas, pastos, casas y todas las clases de productos eran
regularizadas y distribuidas de tal manera que cada uno conocía su propiedad sin
que otra persona la tomara o la ocupara, ni había demandas respecto a ello... el
motivo que me obliga a hacer estas declaraciones es la liberación de mi conciencia,
ya que me encuentro a mí mismo culpable. Porque hemos destruido con nuestro malvado
ejemplo, las personas que tenían tal gobierno que era disfrutado por sus nativos.
Eran tan libres del encarcelamiento o de los crímenes o los excesos, hombres y
mujeres por igual, que el indio que tenía 100,000 pesos de valor en oro la dejaba
abierta meramente dejando un pequeño palo contra la puerta, como señal de que su
amo estaba fuera. Con eso, de acuerdo a sus costumbres, ninguno podía entrar o
llevarse algo que estuviera allí. Cuando vieron que pusimos cerraduras y llaves en
nuestras puertas, supusieron que era por miedo a ellos, que tal vez no nos
matarían, pero no porque creyeran que alguno pudiera robar la propiedad del otro.
Así que cuando descubrieron que teníamos ladrones entre nosotros, y hombres que
buscaban hacer que sus hijas cometieran pecados, nos despreciaron.5
El Sapa Inca debía ser un guerrero. Por tradición cada vez que uno moría, su
sucesor era desheredado porque las tierras, casas y siervos de su padre pasaban a
sus demás hijos. El nuevo rey debía conseguir tierras y botín para legar a sus
propios descendientes, produciéndose un proceso perpetuo de expansión
territorial.25 Cada vez que sometían un pueblo exigían al líder vencido entregar
parte de sus tierras para seguir al mando.26
Símbolos de distinción
La mascaypacha era el único símbolo de poder que otorgaba al Sapa Inca los títulos
de Gobernador del Cusco e Inca del Tahuantinsuyo (este último a partir de
Pachacútec), a modo de corona.
El Inca era divinizado, tanto en sus acciones como sus emblemas. En público portaba
el topayauri (cetro), ushno (trono áureo), suntur páucar (pica emplumada) y la
mascaipacha.9 En ceremonias religiosas le acompañaba una llama blanca (considerada
sagrada), la napa, cubierta con una gualdrapa roja y adornada con orejeras de
oro.27 Además se habla de que portaban el llauto.
Un ser sagrado
Era considerado una divinidad y representante del Estado.28 Llamado «hijo del Sol»,
Intichuri, y «benefactor de los pobres», Huaccha Khoyaq. Viajaba sentado en un
trono de madera llevado por cargadores de andas (ushnu) porque como dios no podía
caminar. Siempre iba acompañado de sus sirvientes. Cambiaba sus ropas 4 veces por
jornada, era servido por su hermana y jóvenes nobles, solía comer en soledad o
acompañado por su hijo preferido. Todo lo que el Inca Sapa tocaba se guardaba con
extremo cuidado y se quemaba un día determinado del año. En su presencia el súbdito
debía inclinarse llevando un peso sobre su espalda, en señal de sumisión29. Nadie
podía mirarlo a los ojos, alzar la cabeza o hablarle sin permiso.30 La gente común
no podía pronunciar su nombre como el de cualquiera.31 Cuando pasaba por un pueblo
la gente iba a las montañas y desde ahí le ofrecían coca, frutos y otros regalos.
Si no tenían nada, se arrancaban las pestañas y las arrojaban en dirección al
monarca.30
Estaban agrupados en Hurin Cuzco, «Bajo Cuzco», y Hanan Cuzco, «Alto Cuzco». La
capital incaica estaba dividida en esas dos mitades separadas por el camino
Antisuyo y que las poblaban parcialidades que se disputaban el poder político.44
Los primeros gobernantes eran Hurin, pero acorde al cronista Martín de Murúa,
cuando el Sapa Inca Cápac Yupanqui murió, aparentemente envenenado por su concubina
Cusi Chimbo, hija del sinchi o «señor» de Ayarmaca, que llegó a ser su segunda
esposa. El momento fue aprovechado por los conspiradores encabezados por Inca Roca,
que atacaron el palacio de Inticancha, depusieron a los Hurin e instalaron a los
Hanan como monarcas.45 Finalmente, se llegaría a un equilibrio. Los Hurin
conservaron el poder religioso, de propiedades y tesoros comparables al secular.
Los asuntos políticos, cívicos, económicos, sociales y militares quedaron para el
Sapa Inca Hanan, pero esto no significa que entre ambos se formara una diarquía.9
Incas del Tahuantinsuyo
Según Juan de Betanzos la Capaccuna fueron Manco Cápac, Sinchi Roca, Lloque
Yupanqui, Mayta Cápac, Cápac Yupanqui, Inca Roca, Yáhuar Huácac, Huiracocha Inca,
Pachacútec Inca Yupanqui, Amaru Inca Yupanqui, Túpac Inca Yupanqui, Huayna Cápac,
Huáscar y Atahualpa.46 Ha sido excluido Tarco Huamán, sucesor de Mayta Cápac,
porque fue depuesto al poco tiempo por su primo Cápac Yupanqui.47 Este último era
tan temido que el sinchi de Ayamarca le envió a su hija.48 Otro fue Inca Urco, hijo
favorito de Huiracocha Inca, huyó con su padre cuando los chancas atacaron y cuando
su hermano Cusi Yupanqui se hizo con el poder intentó reclamar sus derechos, siendo
vencido y ejecutado.49 Amaru Inca Yupanqui o simplemente Inca Yupanqui, fue el
heredero de Pachacútec. Según algunas fuentes llegó al trono pero su carácter débil
y pacífico llevó a su derrocamiento y reemplazo por su hermano Túpac Inca Yupanqui.
A pesar de eso, él fue siempre leal a su hermano.50 Según otras, fue co-gobernante
con su padre, pero su mal desempeño hizo que fuera relegado por su hermano menor.15
También se afirma que los nobles jamás aceptaron a Amaru y después de su
proclamación lo depusieron por alguien más afín.51
Expansión del Imperio incaico (1438-1527).
Las leyes de sucesión fueron establecidas por Túpac Inca Yupanqui, mantenida por la
Cápac ayllu, institución formada por sus descendientes.52 También estableció una
ceremonia para la concesión del título de auqui a los jóvenes miembros de la
familia real.53 Era el equivalente a príncipe y entre ellos el gobernante elegía a
su heredero, que debía ser el hijo concebido con la esposa principal.54 Esta última
era denominada Mama-ocllo, mientras que una coya era una secundaria y una chipa-
coya como concubina. Los nobles eran llamados ñusti (hombres) o ñusta (mujeres).55
Prácticamente todos los Inca (miembros de la familia real) eran auqui los varones o
coya las féminas.54
Desde los años 1980 ha mejorado bastante la estimación cronológica sobre los Sapa
Incas, que como todo pueblo sin escritura, es inexacta y mezclada con leyendas.64
Las fechas más apoyadas actualmente se basan en investigaciones y comparaciones y
son siempre aproximadas.65 Tres décadas antes, se había empezado a considerar que
el incanato habría comenzado en torno a 1450.66 José Antonio del Busto en su Perú
incaico estableció una distinción entre los Incas legendarios e históricos aunque
de forma poco clara. Federico Kauffmann Doig (Manual de arqueología peruana), Carl
Grimberg (Historia Universal), Henry Pease García (Los Incas) y Geoffrey
Barraclough (Atlas de la historia universal) estiman que el imperio duró menos de
un siglo.67 Un período muy corto de tiempo para el nivel de expansión y desarrollo
que consiguió el Tawantinsuyo, lo que hace destacar aún más las reformas que
realizó Pachacútec al asumir el poder.68 En cambio, el antropólogo peruano Luis
Lumbreras se contradice, en algunos estudios señala que el incanato comenzó hacia
143069 pero en otros señala que duró 250 años hasta su conquista.67
Todas las fechas anteriores a la llegada de los españoles son difíciles de calcular
y defender porque los incas no registraban sistemáticamente el paso de los años.70
El arqueólogo estadounidense John Rowe toma como base las crónicas de Cabello
Balboa,71 pero él mismo critica los años que el cronista da por resultar en
reinados demasiado prolongados; su crónica es un «continuum mítico-histórico» y el
Curacazgo de Cuzco debe considerarse mayormente mítico.72 Posteriormente, comparó
la crónica con datos arqueológicos.73 La fundación de Cuzco debió producirse en
algún punto entre el 1200 y el 1300, siguiéndose un periodo de Sapa Incas míticos
hasta Cápac Yupanqui, a partir de él los monarcas son de más probable existencia
hasta Huiracocha y Pachacútec, que son los primeros históricos.72 De hecho, la
primera fecha exacta que acepta Rowe es 1438, durante la invasión de los chancas y
el derrocamiento de Huiracocha Inca por Pachacútec.70 Sin embargo, se niega a
fechar la entronización del depuesto.72
La historiadora María Rostworowski afirma que Pachacútec reino por cuarenta años.81
Él se habría asociado a sus hijos Amaru Yupanqui y Túpac Yupanqui por cinco o seis
y catorce o quince años respectivamente. Posteriormente, este último habría
gobernado solo por diez más.8
Cronología basada en las obras Suma y Narración de los Incas de Juan de Betanzos
(1551) y El Señorío de los Incas de Pedro Cieza de León (1880).83
Orden Inca Reinado Orden Inca Reinado
I Manco Cápac 1240-1260 VII Yahuar-huaccac 1360-1380
II Sinchi Rocca 1260-1280 VIII Uira-cocha 1380-1400
III Lloque Yupanqui 1280-1300 IX Pachacutec Yupanqui 1400-1440
IV Mayta Ccapac 1300-1320 X Tupac Yupanqui 1440-1480
V Ccapac Yupanqui 1320-1340 XI Huayna Ccapac 1480-1523
VI Inca Rocca 1340-1360 XII Inti Cusí Hualpa 1523-1532
Cronología según O imperio dos incas: no Perú e no Mexico del brasileño Domingos
Jaguaribe en 1927 (nombres según autor).94
Orden Sapa Inca Reinado Orden Sapa Inca Reinado
I Manco Capac 1118-1147 VIII Viracocha-Inca 1370-1410
II Sinchi Roca 1147-1178 IX Pochacutec 1410-1450
III Lloque-Iupanqui-Capac 1178-1215 X Amaru Yupanqui 1450-1480
IV Mayta Capac 1215-1256 XI Tupac-Yupanqui 1480-1496
V Capac Yupanqui 1256-1296 XII Huayna-Capac 1496-1515
VI Yahuar Huacac 1296-1337 XIII Inti-Hualpa 1510-1519
VII Inca Roca 1337-1370
Referencias
Bibliografía