El Bosque de los susurros

Había una vez un bosque oscuro y misterioso llamado "El bosque de los
susurros". La gente del pueblo evitaba pasar cerca de él, ya que se
contaban muchas leyendas de desapariciones y sucesos extraños. Pero
un grupo de amigos decidió adentrarse en el bosque para desafiar sus
miedos y demostrar que las historias eran solo cuentos de terror.
Comenzaron su caminata temprano en la mañana, siguiendo un
sendero que se adentraba en el corazón del bosque. El silencio era
absoluto, solo se escuchaban los crujidos de las hojas secas bajo sus
pies. Sin embargo, a medida que avanzaban, comenzaron a oír extraños
susurros que parecían venir de todas partes.
De repente, uno de los amigos desapareció sin dejar rastro. Los demás
comenzaron a buscarlo, pero se dieron cuenta de que estaban perdidos
y que el bosque parecía tener vida propia. Los susurros se volvieron más
fuertes y comenzaron a escuchar risas macabras y a ver sombras que
se movían entre los árboles.
Cada vez se sentían más y más acosados por la oscuridad y el misterio
del bosque, hasta que un monstruo con aspecto de árbol gigante
apareció delante de ellos. Aterrorizados, intentaron huir, pero el bosque
parecía no querer dejarlos ir.
Finalmente, lograron encontrar el camino de regreso al pueblo, pero
nunca pudieron olvidar lo que habían visto y escuchado en "El bosque
de los susurros". Desde ese día, se convirtió en una leyenda viva en el
pueblo, y nadie volvió a adentrarse en ese lugar oscuro y misterioso.