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Si habéis conseguido descargar Windows 7 o estáis en ello, como es mi caso, pronto llegará
el momento de su instalación. Si el ordenador en el que queremos instalarlo dispone de una
unidad óptica de DVD no tendremos más que grabar la imagen de disco descargada y
arrancar el ordenador con ella.
Pero, ¿qué pasa con aquellos ordenador que no disponen de DVD? Es el caso de muchos
ultraportátiles y otras máquinas que ya no vienen con ella. Si no disponemos de un lector
externo, siempre podemos utilizar un disco USB. Por ello, os queremos explicar como
preparar y utilizar este disco para instalar Windows 7.
¿Todo listo? Pues vamos a ello. Lo primero es conectar el disco USB a nuestro ordenador.
Una vez detectado este, abrimos la línea de comandos (recordad Inicio » Ejecutar » cmd) y,
desde ella, ejecutamos la aplicación diskpart. Aquí debemos tener cuidado, pues vamos a
jugar con las particiones y los discos y, si nos equivocamos, nos podemos cargar todos
nuestros datos. Un poco de ojo bastará para no hacer nada mal.
La aplicación diskpart nos permite crear particiones en nuestros discos. No es la única, pero
es suficientemente sencilla y está disponible en ambos sistemas. Una vez arrancada,
debemos comprobar cual es el nuestro disco USB con la orden list disk, que nos mostrará
una lista de todos los conectados a nuestro ordenador.
select disk 1
clean
Una vez vacio, es el momento de crear una partición, con
select partition 1
active
format fs=fat32
assign
exit
Ya estamos listos para copiar todos los datos al USB. Para ello, debemos, en primer lugar,
montar la imagen ISO como otra unidad, lo cual podemos hacer con alguna aplicación
como Virtual CD-ROM Control Panel o con Daemon Tools. Ya está todo listo para la
copia. Suponiendo que la unidad de DVD es la D: y la unidad del disco USB es la E:
ejecutaremos la siguiente orden (cambiarlas en caso necesario):
Ya tenemos nuestro disco USB listo para instalar Windows 7. Solo debemos reiniciar el
ordenador y modificar las opciones de arranque de la BIOS para que lo haga desde este,
una opción que variará dependiendo del fabricante de nuestro ordenador y que, muchas
veces, puede seleccionar directamente durante el arranque.