ORFEBRERIA PRERROMANA ARQUEOLOGIA DEL OROORFEBRERIA PRERROMANA ‘Arqueologfa del Oro Casa del Monte Tulio-Agosto 1991 —_— Biblioteca Bi virtual Comunidad de MadriaDentro del programa de exposicionesdsciado por la Consejeta de Cultura para exe ao Te Lega ahora el uno ae, decade ala Orebrerta Prertomana, que prende of cer una completa panorimica de estaimporane actividad y de su siuifeadasocioecond- rico y cultural a to arg de es tres mil aos, desde el inicio dela meaurga hasta ef cambio de Era ‘No cabe duda que una expsiion dedicada a a orfebreria en a antigiedad tne un indudabe interés, no sdlo por la propia sgnifcacin de a materia prim, el oo, sno tam bit por las cireunstancias que han ensue en no pocesocasones ls hllazgos de ste tipo de pias. Ambo elemenios, materia prina yciranstancias del hallazg, determinan cl concept de sono a partir de agi elconiunto de pezas que integra la expsicion aparece envueto en la bruma del fantasia y el mister. Indudablement se trata de obje- (as argueolgicos, pero tambifn son obras de rte y umpoco podemos olvidar que para sus orgnarias poseedrestenlan wn sigifiado expec y mascendene. Debemos pues hui del magico halo dl esro para analiza desde muy diversas Spica eas objets eine temaracercaros al significado profurdo que encieran En exe sentido laexpascin persgue, ante todo, eduar al vistante para que com prenda que las objets expuestos son contenedoresdeinormacién hstrca, ayo valor no reside en el metal del que stn hechos, sino en lo que representa como documents his- trea irepeibles, l tempo que nos peritenrerearacs en la contemplacgn de wna sere de joes cuyos ses atsticasycaidad técnica ponen de manifesto el elevado nivel cul- tury derefnamieno de quires las elaborarn yauienes las poseyeron Por timo, resehar que la matrilizacon de esta muesira ese fro de una erecha colaboracin ene insiuciones de muy dsinto ambi, ex, utordmico, municipal y prvado, sn cuyo concurs no habia sido posible su oganiacin. En est sentido hay que reseiar el marco de colaboraion que ya viene sendo habitual entre la Caja de Madrid y la Consejeri de Cultura, por cuanto wa vez ms ha hecho posible que exaexposiion sea tuna realidad tangible. Estey no otro debe ser el esprit que presda ls relaciones entre todas ls instituciones para lograr que nuestro Patrimonio Histico sea més y mejor cono- ido, rica via raiment fcaz para poderoconservary tansnt alas generacionsfu- tures Jsime Terceiro Lomba Ramén Espinae Gallego Presideme de Consjero de Cultura de (a Caja de Madrid 4a Comunidad de MadridLas aratersicsfsio-quimias de ro, sobre tod su bile inlerabilded,uni- as a su presencia en la nauraezaen forme nats, le convnieron desde encode la mah ext ina pr arate je suri, de preg r- ‘uals. Su apariciénen algunos yecimienas faneraris cacoticoses il exponent det ele- ado valor simbdlico que osenaba ya entonces. No parece, al cabo defo minis, que restr civzacién haye modifedo un dpice un significado que parece immutable l paso el tempo camo sndnimo de riquez y poder. EL concepto que en la amigiedad se tenia de la Peninsula Ircarecuerdainevia- biemente al miico ET Dorado, que incentiv la penetacién espaiota en América muchos siglo desputs, Esta idea nos ta transien las eworesclscos en sus deseripcions y co- rmentaras sobre a Pninsla; beste como muesra eva referencia de Estab: “en nnguna parte de! mundo se ha encontrado hoy ni oro wi pla ni cobre ni hiro en leaded y calidad, (G.I, 146,) ‘La Peninsula Iria fue en laamgedd una tera legendaria por sus riguezas de todo tip, fundamentalmente en meals prciasos, lo que hizo de ella un enclave pivie- indo en fas ras comerciales de entones. Las city references clésicas no dejan lager 4 das en cuanto al papel dela Peninua en el rico comercial mediterrinen durante el 1 milena aC, testmonio qu se an io ftcando a medida que hallzgas csuaesy ‘excwvaciones arqueolicas han ido exumando toda una serie de piezas y counts de oF- {ebrera que corraboran deforma tangible lo que pada parecer apron un exces lerario ‘apoyado en a fans del autor, Desde la impecable seniler dela ademas ealcolcas ‘asa ls magnfcasjyas theres, pasando polos expéndidos cuencos de Vilena, las bra- 2zaetes del bronce final extreme, l ina orfbreriaorenaizat, las diademas cs- ‘reas oes bla reas del verti ceric, toda ela son, en deiitva, mudotes- ‘moni dels relacionescultaraes de mus pasedo y pari exencil de nuestra Historia, La exposicion ya qu e evidente que eta bun destnados a fusion del meal pare sure Ieborain. Ota coxa es determint la prope dad de sts conjuntos. Sie oo no se deposits elas tumbas, al menos como norma general, €$ lgico pensar que debid 0 sv alto valor se transmiticra ent aquells personas 0 grupos aque tuieran alge posibildad su aes, pot derecho o por fuerza En uno w oro caso, ini- arian un sociedad esatfiada y en compe- tencia pore poder eflejado en la acumalacin de rigueza, El hecho de que esta riquza se cocultepodra ser sniomatico de una situaion politica inestable, Sin embargo, el sistema pa- Feoe que furlong sn mayors cambios lo 0 de varios sige, hasta que los coloizadores el Sur peninsular afianzan su poi, as todo, eto no provos grandes convusiones ino Ia progssiva sustuein de los centos de po- der econémio y por tanto una nue orient inde los intercambios comerciales La organizacionartesanal evo afetada pr el aumento de le produecn. Aunque tenemos realmente poos datos sobre I actividad meta Tati en fs pobadoscotamos muy etieme- mente con un hallazgo de excepein: el taller metargico del pobiaa de Pea Negra, Alican- te, Se trata de a habitacin de planta rectan falar en euyo interior se stuaba un horn de {undicén compueso por un anil de ria de 6 cm de dimeto, Elintsior del recinto se en- eonttbs lingo d= esto relacionados con Ia actvded del aller, sin embargo, e el exterior se habia acumulado una escombrers format por ceizs, arbones, sores y unos 30 fr menos de moles ara fant espada, pnts Lara yhachas. E taller de Pea Negra es el primero que co- rnocemox dedido a una actividad especial. da con exclusion de ors cotidianas. Durante el Bronce Antiguo y Medio lt metalursia ea una sxtivdad que eproctcaba dentro de las uni des de obtain en donde se documentaban asimismo las lores eaconadas cn asus tenca, Todo ello parece inier que algunos po- Uados de certo tamafi,o de especial riqueza pox su siuacion ceean a recurs mizeraes, tenianeapacidad sufcente para mantener un taller mtaligendecardter permanente yar tesans especilizadas a tiempo completo. Sin embargo I figura dl ofere, ome especial ta del trabajo del oro, no aparece todavia df rida en el retro arqucoigico. Orfebres y ‘rons rian un misma persona, como pa rece poder desprenderse del depbsito de Cabe- 0 Brazale de Supaj. Miseo Arqucligco Nason Fao: 1. A. Gare Cato, 2 de Arays compuesto por numeroses peas de desecho en broacey un ingot de oo Sila mayoria de as piezas mete de este mo- mento pueden interpretarse como objetes de Iujo, presto, eeremoniao prada, parece co- herent pensar qué la figura del artesano tuvo un valor coizable, y su actividad se dsaro aba & tempo completo, su manutencin de- penderia del eso dela poblacién trabajando 4 ls drdenes dela persona 0 sector gingente «que eral que, en defntiva,dsponis de a pro- iuesdn, Aqui reside I conexion que jsitea mantener la denominacién de adepésitos de fundidon» para esos hllazgos que hemos st- do comentando,pueso que ellos consituen ia riqueza aumulada y oct para hacer uso de ella en el momento necasario, No es posible ceplat como tadionalmete se vena hacen do, que ests conjuntos furan la propiedad de un orfebre, pues su poses le daria acceso a una poscidn que no parece habere comtespon- did en la sociedad. El aspecto cronolic dela proc de oro duran el Bronce Final en tema toa de- butido debi ola falta de contextos y asc Giones pura a mayeria dels halazosconoc dos. Las bases de su estudio se an centro tr icionaimente, con obliguda excusividad, en ‘una serie de pralelos ipoldpens con otra pro decions europeas que se ciractrizan au vez por las mismas carenciase iefnicions, por Uo qu nos enconramos en un elo de fel sada Espor tanto prematuro,o cuanto menos artes ado, etablecerun cronolgia absolut con los datos actuals. Dado qu 1s nico datos fia- bles con que contamos son los de carter €o- sco, y lnc referencia cronolica segura viene de los asentamientosfenicios dela cost, expondé la odenacin temporal dels hallaz- gosde oro espafioles en un orden inves a hae Bitual, esto es, empezando por los mis recien- tesycereanos a presencia fen La seouencia estariaencabezada por el depts to de Belmez compuesto por un brzalte con decoracién inca, base de tringalos v rom bos, yun amasijo de piezas a meio func. En «ste amagij se ha podido identifcar un peque- fio colgante en forma de Stora, de orien in- Aldablemente orentalzante, yun ingote en forme de hogaza de pan. Est tipo de ingote en ‘rose ha doeamentado en una oeultacin de or- febre encontrada en Etta (Grecia) yfechadn endl siglo vitaC, nite las téeics introducidas en la Peninsula por los colonizadoes est la de la filigrana Consist bisicamente en a decoracion del su perfce de la joya mediante la soldadura de f- nos his de oo. Pues bien, en el conocido bra- Zalete portugus de Cantonha (Guimarses, Bra- 8) eptrece un decoracin en fligrana que de- nota indadables contacts co as tecnica feni- «as, Este brazalete est formado por dos grue- sos aos, deorados con iniiones a base de tringuos y roms, entre hs que se sia uma pieza devorada con mokiurasy pias. Esta pe 22 es un documento fehacene de la costae dad, en un momento determinado, de os pos y t6nicasreprsentados por los torques de Sa ‘rajas,Berzocana, Senhora de Guia, ee, los brazaletes del tipo Viena. Ninguna de’ estas piezas puede tuarse muy alejd del conjunto de Belmez puesto que ks patrones compost- 0s de las decoacionesinisas som may simile (Ora pieza que denota igualmente alin contac- to con los conizadores es un discn de proce- encia desconcid que presenta en los exre- muna incpeite decoracién en fiirana ‘Ago mis alejado en el tempo hay gue situar elbrazalete de Aleut, La ténica de verter oro fundido para conforma los extremosy units varillas que conforman cuerpo parece bastan- te primi Cerrando la serie hay que situa el conjunto de Bodonal dela Sir Dos de los extremos ricos que formuban parte del conjunto presen- tan una decoracdnincisa algo menos compleja ‘que aque preseatan los torques. Los paraleos tipoldicas con piezas franceses ¢ irtandesss apunian un momento aiguo, qué algo des plazado con respect als demas depos. Ast pues, las peclirdades tnicas, morfl6- gies y decorativas de esa prodoccin paesen indicar un espacio de tiempo no muy ampli para la aparcin, desarrollo extinction delaBraue dela Torcla Madrid. Miseo Municipal de Medd Ft: J. Lowa orfebrera epresentada en la mayoria de fos d= pésitos del Bronce Final, en un momento en el «que las relaciones exterires, tanto stlénticas como mediterneas,alcanzan su momento de apogeo. El affanzamiento de fa posicin econdmica de Jos asentamientos fnicos de la costa produce toda una serie de transformaciones polices y Sociales que tienen como resultado, en el caso ela orfebrri, la riplda suttuidn de lst os caracteristios indigenas por pezas en ma- Yor conexién con el reperterio orientalizante ‘mediterrineo, Bibliografia Aono Gora, M. 19 Ore el Bros Fen ‘eld os, Er Aa Obl, ‘wet Views de ais, Tad Pre ey — TIE Bae Fy Peo rane Etre uy Nis alten Ps, Ay Run Gave, Me emer ke Pe Neg eh scone de Ben i ej, ‘ews XX Congas Nacional de Aro, Calin de Po Ru Gar, M8: ee ep gad en Ui ‘imosarojps 1 sa, ET Seo de Poon, con 18 Nepcn y oe cate At y Mee ‘eric ais eld Bes, Trees de Pr ora 8 — 1 Ory pln, Aas comers y xt ep der ex el Brome Fl del Oxide pre, Eps, Ting For, Hane a Pf pl Pee. SOL ee Je Bone Fil, El per nen ie, BO es Eps Pere, Mops de rade Argue ‘Soe, W. 1 Der Bree Pd yon ie (A att, Madde Mine, 17 ‘sa 1 M1 Ble li, econ Anu ‘epesen Epi 3 AT Excercise Cae Redondo Ina, Avan, Alcete,Orfebreria orientalizante Ferando Feriader Gi Lamamos sorientlzamte» en Argucoogia'a ‘aquel period cultural durante el cul tuvo tue git a legada a Ta Peninsula de los pueblos dl Mediterrineo Oriental, que venan a nuesta tierra en busa sobre todo de metaes, cob, plata, estafo, a cambio de los cules nos dese Ton elementos materiales yculturses que hice- ron evelucionar el cur de nuestra historia, pues de la mano de ellos, feito, greg, nos Aremos integrand en el mareoeconémio yc tural meterino, Estos eontacos no eran nuevos. Se venan pro Auciendo desée el Neoitco, 3000 aos antes, se hablan mateo con carter md o menes esporidico a lo largo de las Edades del Cobre } del Bronce, Pero séo ahora, afnales de este iitimo peiodo, empezar a tratarse de contas- tos sistemitios y de intecambis verdader mente eficaces, pues irtamente lo fuera, des- de el punto de vista cultura, los elementos que qui os dejron, aunque sa intodsein no fuera un objetivo intencionado no fuera al me= 108 un objetivo prirtaro, sin algo puramen te accidental, desprend de a dindmice pro pia de las actividades comerciales, que eran el ‘nico fin realmente pesegudo, y derivado de Ja simple presencia del hombre con su bagaje es pita Por mecioefectiamente de fenicis y priegos, Hegarén hasta nosotros, a partir quizé de 1100 .C., como nos dicen ss fuentes esrits, eto sobre todo a partir del silo Vit, como Consttarepeidament Ia Argucolgi, inven: clones tan trascendentale coma el torn de al farero, el wo de iro ylaesrtura, Y una re- ligion nue, por primera vez con doses pexso- rales, cuyos nombres yrasgesconocemos.¥ un nuevo ito fanearo, qu conleva la cremacion de los cadiveres yl intoduccfn des restos en umes cinerarias que son postriormenteen- terradas enel solo, en simples hoyos, 0 col cadas en cimarassepuleales ques cubren de tierra, dando lugar en ocasiones a tmulos mo- umentales Hay asimsmo en esta epoca un considerable de sartllo de a ciudad y sus estructura, un co- meno del urbanism, De entones datan tam- bom las primerasciudaes dela Peninsala cu yes nombres propios han legado hasta noso- itos. Ya hemos ctado a Gade, pero no cs slo ella, Tambin Onuba, y Malaka, y Seni, y Ab- era, y otras muchas por toda le costa med terrnea, hasta Emporiony Rhode, fueron fun- dadasentonces. Y no slo de la costa, sin tam- bin del interior, sobre todo ao largo de las ewencas de ls grandes os, aunque conozeenios sus nombres en menor proprein, Pero enton es fueron fundedes Caura, Arva, Nabrissa, ‘Camo, Celi, Cstulo, y muchas tas Las inivenis orietalizants fueron en teal dad tan intensas que penetraron incluso hasta muy al interior de la Peninsula, hes los pue tos de Is Meseta, que a psa de too a ha brn de tardar vais silos en aprender « ma nejar el tomo, y todavia més en utilizar la es fy a moneda, All habremos de encon sin embargo, en Medellin y Segura de Leén Badajoz), Aliseda y Sera (Carers), CCandeleda ySanchoreja (Avila), yen otros lu aes, elementos orientalizantes, eicos ets. 5, griegos, que hasta ali Hevan los activo rmetciantesmeridioals. Deentonces datan también ls primeras monar- quia hisrics, pues entonces vivid Arganto- nis, el mito rey de Tartesss, la ciudad, ain ‘cia en el mistero, que mis intensasrelacio nes mantuvo cn los pubs orientale, con ls cles se enriqecié de tl manera que pudoin- clus ofrecer ayuda als griegos de Fooea para amarallare y defenders el pig pers. Y legs a tanto el prestigi del cindd sitooda en los confines del Mediterineo, que en su teritoro habrian de localizase algunos de los trabajos de Hércles, elds green al que los fencis de Cid levantarfan un templo, asim Findolo ou Melkart, seus, como aagul, ae barn eubrendo con ls piel de lea, ¥ le ofr csr alo largo del tempo tal cantidad de x votes, que muchos afos mds tarde legarén a provcar la cdicia dels soldados cartaginses romans, En Tatesos se situ ef Jardin de las Hes des, lteter! que proporionba man zanas de or0 maravillosas que concedian la i- rmortalidad, Las guadba Ladin, el monstrue de cien cabeza, al que matara Hercules, pare levérselasy olzanzarla, como habia de matar después alos patores que cuidaban ls vias de Geryin, para rbirslas,y, embareado de ‘evo en el cuenco de oo que, para Negar, le foelitara Helos, el ol, emprender el reyseso a Oriente De ess cides, de esas tubes, deesostem- los, proceden as joyas que vem en la Expo- sicidny vamos a analiza aboraaguien su con- junio, Unas esuvieron destinadas a rear el atractiv de as mujeres de a époa, otros a dar prestanci asus inses y socerdotes, oa prestar autordad asus reyezelos, Que no nos absor: bu, por tanto, slo subelleaa formal, Esfrcé- Sirs de Loin, Baa (joe, Foo: Law Museo Arquaig de Ba.‘ones por transcendets yeapar todo su sig rifcado, personal, politico, religioso. E imag némosls acompafaas de todo lo que constitu y6 su comtexto material, marles, huevos de aestruz, cermin pintadas, broncts iris, imagenes de doses, monstrus alados, anima lessaprado,esfinges, leomes, serpents, gis, representaionesasrales, ete. Todo un mundo nuevo surgindo del raed un pueblo ind 1a, injrtado con aorts orientale, que hatin brotarleniamente une neva cultura, tan ea conada con los pueblos orintales que Ia cata de éts, alo argo del spo i a.C, se causa de su caida, para dar lugar un nuevo capitulo de nuesra historia, ade los pueblos ibis. Enlaorfeeri se oper, en este perodo orien talizante, una autétcarevolucin, un encgue- , or dni decoativa nueva para nosotes, que implica no silo el concent dela sokidur, sino también del modo de con- seguir en sere, po millaes, los peques cor- pauls, de hasta un par de dims de mil ‘mode difmetro, con os cuales unas veces se relenatin superices plans pevamente del nites, una especie de bard, como en La Aliseda,y otras incluso se trazarin Figura, ys2 ibaa con al perfec y seguridad qu se posi decorar pers enters mediante ua ‘sin de motiosrepetds. Se ine, porta to, capsid sucene para manejary fier 1 Coral, Cans, Sv, Ayuanint de Sei, Foo: J. A. Garcia Cast,0s prémalos tanto en masa, como dé manera inivdualzada, uno por no, lo que causa to- via mayor adniracin. Sienel manejo del granulo el ofebr de Evo ‘ase equipara qua al de La Aliseda, en lo que nati supera a ést es en etratamiento dela fe ligranay, tenia introducida también en nues- tra Peninsula por los maestros orienlalizanes, Jo mismo que ef saledos, mediante lo cuales Tas piezasadqueren un aspecto que parece mis propio del tejdo que de un objeto metiin. ‘Ambas oftecen una muestra tarda, ya con it fujos prego, peo de una bellezaimpresionan- te en Javea (Alicante). De oira nueva ténica es preciso todavia hablar cn este momento, del «repojado. Consist en Ta decoracin de una lamina de metal, por me- tio de un punzin de boa redoda, af presi- nar sobre una superficie blanda. Es el medio {que se ha empleado, pr ejemplo, en as placas de Sera Segura de Leén, complement do cone! granuado para mejor delimit as ca- ‘eras humana y animale. ‘Todas estas nuevas teenies decoratvas pode- ‘mos veras lterarfrecuentemente con detalles srabados, conseuidos a bese de punzény cn- Cel, ya pars enguerer oros moivs, ya para consis lls solos, como ls veiames ene period anterior y las sepuitemos viendo en los postrione, pues es téenica que no dejaré mune ade utiizarse, Como seguir utizndose la fundicién, pero hora va la cera perdi, que permit fo on- sein también de joys hueess, pero n0 a tase de liminssoldadas 0 envolviendo un ni- cleo, como ctébames anteriomente, sno for- ‘mand objetos de una sol ieza. Dees modo se realizan, por ejemplo, los ecanelabros» de Lebrija (Sei), as llsmados para daraenten- der que son objets pensads como poriadores de hz, Debieronperiencer a alin templo y servir e soporte otras tana luernas 0 que- rmaperfumes que dierantestimonio dela presen- cia viva dela divinida, Deciamos al principio que ahora se habs ent- quecido también de manera notable el reperto- to formal de yas, muchas de ls cuales han Hegado pretcamente sin vaiaion hast mues- tros dias. Pus ahora vemos efesivamente apa- recer dese los ails, meallonesy ots tpos Y no fue és evidenteente un eas0 sini. Hasta nosatos han egado también los sucess de Sagunto, manos de los cartagineses, y ls posteriores de Numancia, po os mismos roma os, cai un siglo mas trde, Los dos empara- dos en razones polities, como tanta sexes, pero en los que, en cualquier caso, el saquco a dos indigenes fue ingreiente y conseeuenca inevitable, sino determinants YY ciertamente el expolio de unosy ots, a jue poo que nos dicen os propos hstorado res romano, fe total, Se basaba ene pin pio de que las guerras debian mantener asf misma, No importaba que foesen gueres de ccongisa, ¥en Roma seri celebrada entosis- ticamente por la multtud la yuelta de fs ene rales vctorososcatgados de botin, Mis de 12,00 bas de oro se Hevaron silo en la pr- mera ita del siglo aC, n forma de joys, ‘ajay coronss. Pero ya aie, cuando prep raban la invasion de Tali, los cartagineses ha bian arrancado todo fo que habian pod de los paitanos, eexpoiando no slo su erro, sino también us templos,oblgando a oos los pariculares a enregarie su oro y su plats. ¥ es fecuente la mencdn de fs ecto que se irigen ato cual ciudad, no ya pare cong tarla, sino, iteralmente, «para saquearl» A este ambiente de insegridad politica podria Aber también que el nimero ce allazeos sea menor en este perodo, Lo que no quire decir que no exstan. Hay incluso tesoros espectact Tares. En la Exposiiin podemos contemplar el ‘eneontrado have pos as en un ga impr «is del érmino municpal de Maiena (Sevilla) Lo compone un conjunto completo de joyas de adoro personal, torques, dadema, braaltes, cenidor, pulser, fibula, ano y ells Dit mosque no falta nada, Y todo de ro. Y en jo yas de calidad, en as que curiosamente no hay éjemplareshuecos. Todas son maczas, aungue en su mayor pare estén trabajadasa base di Tos, pero gruesos, lo que facta que las piezas sean slidasy poean al mismo tiempo I Hex bilidad necesaria para poder ser emodamente utilizes, Sucede sto sobre todo on el torques, una pe 22 impresionant, de los trenzads al aie realizaa con un perfecto dominio de fa ten- «a, introduid en este period, y con ejempla- ‘emis atguos que (ste de Maina, en Jv (Alicante), pero riens Hamatvs. Mis fs que los de torques sam os ils de los braaletes, dos peas precios en forma de serpents que rptan ao largo del bro, ue de qu, vias Hevabin 2 veces as m= rads en ss danza quis. Estécosiuida cad uno por dos ios soueads,unifcados en cabera cola, encogias ambas, decoraas con incsoes y eniquecidas en su da con inet jones de vidro poletom, hoy perdido Con punz6n y eineel esti deorado también el cintur, una Himina sumamente fina y ese cha, pensada sin duda para adaptarse, comple rmentada con alin crdin que lo gustare, cintur femenina. Como se adoparia su mi fecal pulser, lisa, maa, yas frente, jetaa alguna tira, a cadema, Es sts formada por piezas similares as del tesoro de Evora, pero sustitido aqui el granu lado orintalizante por un simple roquetado en serie, lo mismo que las bellotas que penden de ella, éstas st huecas en su mayora, Se trata, sin duds, de que sonaran al moverse, qu para impone silencio. Y es que las bellotas estén, co las serpintes,cargadas de sentido simb lico, Snel rato dela enna, labol sagrado Ge Zeus, desi el que habla se dig a os morales en el susurar dl viento, Huezas también tenian que ser fs ebullase, pies contenian en su interior sustancas migi- «as para defender, sobre todo os nifios,deles- piu magn, En el unio finamente un gui Iaotraimagen de Zeus, :Pudo prtenecer elt soro a und sicerdotia? Podemos imaginaa, ingpirads en la estatuara del Cerro de los San 10s, seta, inconmovibe, con toda la eraveded desu cargo relejada en erst, Algo mis que ‘un imple more ‘Aste conjunto de joys de Mirena left la fihula, que por su caracterctico se presenta setuamente en fa muestra del Plazo Gras de Venecia,y res vases de plata, uno de ellos detipo heleistico, como los brazaletes,expuestos cde manera permanente en ls als del Museo ‘Arqueokigco de Sev ‘Un tesoro muy similar aeste de Maitena ha sido alla reientemente en La Puebla dels i- fantes, en lz misma provincia de Sela. Aun- aque son joyas en general de peor calidad, st contenido es el mismo, La nice diferencia sig- rifcativa se presenta en la diadema, desorada gui con motives figuradesen algunos lugares. ‘Su mayor interés adic, sin embargo, ena pre- seca de dos monedas pnts que nos eyedan «sitar el escondrijo en es pea de lckasen- te cartagineses yromanos. Los torques del tipo de hilo entrelazados de- bieron ser frecuentes en la époce, pues e teso- ro de La Puebla nos oftece tes ejemplares. Y ‘otros tes conten el de Svea (Alicante). Simi- lesa ellos putieron ser los que los romanos ans dicen haber consguido en gan nimero tras la batalla de Auringis, en 214, y seguramente ‘en muchos otros lugares de los que no tenemos noticia. Aunque, como hemos visto en Maren, han le gado hasta nosotros vasos de plat, y en gran mero, no conocemos ringuno de oro, Agu nos est, a lo sumo, dorados (Mogsn, Jaén), ‘© chapados en oro (Tvssa, Tarragona). Pero sabemos ue exisiron,y que debieron se tam- bin may abundants, jazear por los datos de las Fuentes. En la toma de Cartagena, reciente fundaci cartagnes, nos dicen que se resoge ron 276 pateras de or ¥ sabemos también que fueron uiizaos en la mesa de bods de ia hija det io Astolpas, indigena amigo de fs roma- os, que asf queria desumbrar asus invtados, aungue con ello provocara al mismo tiempo las irs el despreso de su yemo, nada menos que Viriato, el cual «apoyado en su lana y miran- do con desdén I gran cantidad de copas de pla- ta oro expucstas con motivo de us boda... ni tom6 asiento en la mesa, lena de toda dase ‘de manjares Slo cogs panes y cme, que ds tribuy6 entre los qu le acompaaban...Luego mands qu le traeran la novi, sacifcs a los doses, e modo que suelen hacerlo los tere, sent6 a fa donclla sobre el caballo y parti en sequida hacia laser.» No fue slo, por tanto, como vemos, empobre- éimiento econémioo y arttico eausado por la nueva situaciin politica en el Mediterrineo, sino también consecuencia del explo continua do de unejrcitoextranjer durante decenas de afios, pues ls guores de conguiste se verin contnuades por las cvs ere romancs de sarolladas en nuestro suelo. Ag pao Sert- rio teaniry mantener un gran eto, gracias Tesoro de Puebla de or Ifoes, Sel, Coleen particu. Foo J. A Gara Caro, al oo recbido de las ciudad indgenas que le apoyaron, y que veron en él durante agin tiempo a un posible liberador del yugo romano Y snilaeseayudas recibir, yexgitfan, més tarde los Pompeyo y César y us generale. May df, pues, en estes Greunstancis, hacer ‘ostentain personal de jyas, por mucho que & fos matios kes gstara aoa, o que a0 pss Carmen Pérez Die Me Carmen Priego ‘Alicia Rodero Riza José L. Romero Torres Guillermo Rui Vieene Manuel Santonja José Carlos Sra José M.* Soler Garcia José M. Soriano Lamazares 1M Jess Urqijo Manuel del Valle Arvalo Eloisa Wattenberg GarciaExposcin onganizada y patrocinada por la Consjeria de Cultura dela Comunidad de Madrid ta Ca de Madd. Presdete de a Conus Joaquin Leguina Presidente del Coja de Maid Jaime Treva Coneero de Calta ‘Ramin Espinar Director General Adjum dels Cs Mati ‘Angel Montero Direstors General de Patrimonio Cultural Araceli Perea Director de Obras Sxsles Juan Secanela Suirector Gener de Wells Antes Angel Sanz Depa Digest dl Cento de Estos Arquoligios 1 Patimonp Mache ‘Victor Antona Coowinacibn de Expisiones ‘Teresa Zaragora - Carlos Vilaseca (Gestion Adninitrativa Isabel Kseribano Fas Garcia Pilar Gutierrez Sonia Garcia “Teicos Antonio Ménder Pilar Mena Fernando Velasco Prensa Pape Pérez Silvia Fichtboum Sequo (Caja de Madrid. Seguros Generales Dito Expos y Catgo Fernando Lépez Cabos Fovoratas José Latova ‘Alicia Perea Unidad de Metalurgia Fisica del CENIM (cierogatias) Dios TAR, SL. ‘Trampone Prosegur, S.A. Monisje ‘Macarrén, S.A. Comes Fotomeciica Lucan Anpeesin TTR, Artes Grificas Depo Legal M.25943-1991 31fecrmiNeteoKery Evicted én