Scratch: aprendiendo

a programar en las
escuelas

Fuente: https://scratch.mit.edu/ 12/07/2017

Scratch es un entorno de programación que tiene mucho éxito en

el ámbito de la educación escolar. Actualmente existen más de 23
millones de proyectos elaborados con esta herramienta
compartidos en su sitio Web.

Qué es Scratch y qué podemos hacer con él

Scratch fue desarrollado por el MIT Media Lab y desde su lanzamiento en mayo de 2007, este lenguaje
de programación sigue cautivando a docentes de todo el mundo que lo usan en sus clases, logrando
gran popularidad en muy poco tiempo.

Scratch es un lenguaje de programación visual orientado a objetos, es decir, se crean objetos a los
que se les añade el programa que describirá su comportamiento. Al hacer interactuar los objetos unos
con otros, se pueden crear historias propias, juegos y animaciones.

Dado que Scratch es un software libre y gratuito que no se necesita licencia de uso, se emplea mucho
en instituciones educativas y en los propios hogares, lo que también ha propiciado una comunidad en
línea donde se comparten creaciones con todo el mundo. El desarrollo y mantenimiento de esta
herramienta se sufraga con subvenciones y donaciones.

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 Scratch: aprendiendo a programar en las escuelas

Los bloques de Scratch: programar, diseñar y ejecutar

En la dirección: https://scratch.mit.edu/download podemos acceder a la versión descargable de
Scratch 2, pero también se puede trabajar directamente sobre la web de Scratch, en la nube, sin
necesidad de instalar nada. Desde: https://scratch.mit.edu/projects/editor/?tip_bar=home se puede
empezar a escribir los programas y ver cómo se ejecutan en el mismo entorno.

Como ya se ha mencionado, el funcionamiento de Scrach se basa en objetos, también llamados

sprites. Los objetos se pueden customizar aplicándoles un disfraz a partir de una imagen, y actúan
siguiendo unas instrucciones que es el programa. Un objeto se puede mover, saltar o relacionarse con
otros objetos en un escenario que también se puede diseñar, pero para ello, el programa se “encaja” a
partir de unos bloques gráficos formando pilas, los scripts. Al hacer doble clic sobre el programa,
Scratch ejecuta la orden.

Scratch ofrece infinitas posibilidades: se pueden usar variables, dibujar figuras, componer música,
hacer simulaciones, construir escenarios, diseñar personajes... También es posible ejecutar
movimientos básicos o programar interacciones más complejas entre los objetos aplicando bucles,
condicionales, etc.

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Para trabajar en la nube y ver los proyectos de otros estudiantes, es necesario registrarse previamente
en la web, y una vez que se tiene una cuenta de usuario, ya es posible acceder a todas las herramientas
necesarias para programar en Scratch.

Por qué Scratch es bueno para los pequeños

Scratch está diseñado especialmente para niños y niñas de entre 8 y 16 años, pero la realidad es que
hay millones de personas de todas las edades y condiciones en todo el mundo creando proyectos con
Scratch desde sus propios hogares, escuelas, museos, bibliotecas, etc.

Al programar proyectos de Scratch, los jóvenes, además de trabajar de manera colaborativa, aprenden
a pensar de forma creativa y razonan aplicando, sin darse cuenta, el pensamiento computacional que
consiste en: descomponer, identificar patrones, pensar en abstracto y crear algoritmos para dar con
una solución.

La habilidad para crear programas de ordenador es una parte importante de la alfabetización de la

sociedad actual. Cuando la gente aprende a programar en Scratch, aprenden importantes estrategias
para resolver problemas, diseñar proyectos y comunicar ideas.

Nota: si quieres saber más, en la página oficial de Scratch hay muchas secciones de ayuda y preguntas
frecuentes dirigidas a padres y educadores donde se resuelven dudas y enseñan a dar los primeros
pasos con la aplicación (https://scratch.mit.edu/)

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