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SITUACION SOCIAL Y ECONOMICA DE LA ERMITA DE SANTA Mania DE Guaoatupe (1574-1750) Maria del Carmen Soto Balderas* urante los seis afios que fui 0 eae del Archivo Histo fico de ta Basilica de Guadalupe, llevé a cabo la clasificacién y ordenacion del acerva, asi como diversas investigacio- nes relacionadas con Ia historia del santuario, Entre ellas, se encuentra una ‘en (a que brindo un panorama general sobre la situacion de ta ermita, antes de su ereccién como Colegiata en 1750, basindome en informacién que proviene del mismo acervo, Mucho se ha comentado sobre el silencio documental que guardan las fuentes histdricas sobre ta ermita del Tepeyac, donde no existe alguna refe- rencia fehaciente sobre el culta a Santa Marla de Guadalupe posterior a las apariciones meneionadas en ¢l Nican Mopahua, ocurridas en 1531, La mayor parte de los estudios efectuados por impartantes investigadores sobre el te coinciden en que ta importancta de este culto surgié a partir de ta segunda mitad del siglo xvi, encon- trindose sus origenes en eb aho de 1555 cuando, segin ta crénica de Juan Bautista,’ fue presentada la imagen en Tepeyacac. con Fecha del viernes 6 de diciembre, como lo menciana e| Cadice Aubin? Entre los cranistas que coinciden con este fechamiento fiquran Francisco Cervantes de Salazar, como primer autor que menciona a Tepeaquilla y su santuario en sus Didlogos latinos, dedi- cados al arzobispo Alonso de Montufar, quien dio.un gran impulso al culto des- | Luis Reyes Gareia, {Cémo te canfuindes? gAcoso no sanids conquistados? Anales de Juan Bautista, México, Centro de Investigaciones y Estudios Superiares en Antropoiogis Sorial-Bibtloteca Lorenta Bouturini-tasigne y Nacional Basilica de Guadalupe, 2001, p. 161 # Rodtiga Martinez Barats, "Tepeyac en la coniquista de México: problemas histariograficos”, en Tepeyae. Estudios Historicas, México, Universidad del Tepevac, 2000, p. 77, 167 pués de adjudicarlo @ a jurisdiccidn episcopal, y Bernal Diaz del Castillo, quien asocia el real del conquistador Gonzalo de Sandoval con Tepeaquilia y Su Santuario durante la tamade fa citz- dad de México-Tenachtitian, Pero quien figura como personaje fundamental en el andlisis sobre ta apa- rielin de este culto es precisamente el arcobispo Montifa, a quien acusaban el dein y cabildo de ta catedral de México de aprovecharse de las benefi- clos supuestamente destinados a la ermita. Ef una carta enviada al rey Felipe | el 14 de febrero de 1561, dande se quejan de esta situacidn, se mencio- nan algunas noticias interesantes sobre ¢! estado que quardaba el santuario: * tha comprada unas minas muy ticas que tienen necesidad coma tas demas de beneficio de azogue y de esclavos € ingenias para moler metal y por que esto no se puede hacer sin costa de mucha moneda y la renta deste arzobispado ¢s muy poca, ayuda 4 aks, Historio, caja 4, exp. 3, fs 1-2 168 se de muchas partes para ello lo mejor que puede, “Tambien se aprovecha para bene- ficio desta mina de otra suerte no digna cierto de pretado que sucle dara algunos mineros ricas azcque, 3 unos Un quintal, a otras dos, rogandoles que beneficien toda el metal que pudieren de Sus minas y le acudiesen con la plata que sacaren, so color de que era limosna para la ermita de Nuestra Sefora de Guadalupe y para hacer ta custodia del sacramento, y de toda ello, que seran mas de dos mil pesos, no ha habida la custodia, ni la ermita un real, antes:desto y de todo lo demas ‘se ha aprovechado..."? Otro expediente menciona las entra~ das yla celebridad de la ermits y agreaa: “En el afio de 1876, el Sp Pedro Moya de Contreras dice que el intenta que el Sr. Montifar tuvo en ta funda- clén de la iglesia y casa de Nuestra Sefiora de Guadalupe fue que se distri- bulese la renta y limosnas que tuviese, quitados costos y gastos en casar hutr- fanas, De las limosnas se habian de sacar todos los afos seis dates para sels huérfanas de a 300 pesos que son 1800 al aho, sefal que ya en aquel tiempo era célebre Guadalupe, pues tenia tantas jimosnas, y esto era el aflo de 1576 a fos 45 de ta Aparicién. Dice el St. Moya, que esto lo hace para a mara los fieles devotos de la casa de Guadalupe @ que con mas fervor a favorezcan, No se si por aquel tiempo: se diria otra tanto de otra Imagen, y esto se dice de una, cuya devocion parece no pudo venir de Espafta “donde no vemos imagen de donde esta se pude sacar. Dire que entonces: tenia la Virgen posesiones. “El alo de 1573, se presentan los mayordamos pidiendo que tos albaceas de un fulano Basurto que muri avia 3 aiios, entregasen una imagen que dejd en su testamento a la casa y ermita de Nuestra Sefiora de Guadalupe. Con que 169 ¢lafio de 1570, ya era célebre (a casa y ermita y se te dejaban leqados. “Una cuenta de un administrador de la ermita de Nuestra Sefiora de Guadalupe desde To. de Noviembre de 1640 hasta el 15 de Enero de 1642, S0la Se reduce ¢l cargo a 35 pesos de los corridos de un censa, ya 14 pesos que le entrego et sacristan de la limos- fa que se recogié en la iglesia. La data se reduce @ 181 pesos 2 reales de su salario de un afio, 2 meses y 15 dias. “Murié el Se. Montifar, sein Gil Gonailez el 3 de Marzo de 1569. La Bparicidn fue el 12 de Diciembre de 1531, con que a los 37 afios, ya tenia ia iglesia rentas y limosnas cuantiosos y por consiguiente era célebre Nuestra Sefiora de Guadalupe.™* Por este tiempo, quien se encontra- ba como vicario de la ermita era el padre Antonio Freire, que ocups e! cargo hasta 1570, Los documentos del Archivo Histonco de la Basilica de Guadalupe {anaa) registran en su serie de Testa- mentarias, donaciones destinadas a * ann, Historia, caja 1, exp, 12,1 F. V0. fabrica material y espiritual, como fo demuestra un testinionio auténtica de una eseritura de censo a favor de la ermita de cien pesos de renta sobre las casas principales de Martin de Aranguren, mayordomo del arzebispa fray Juan de Zumarraga, en 1562, Antes de esta eseritura se ee que Gabriel Saldivar, mayordomo \ administrador, se Bresenté el.7 de octubre de 1567 ante Ruy Diaz de Mendoza, alcalde ordinario de México, diciendo que dicha ermita jposeia un censo de mil pesos de prinei- pal sobre las casas grandes que fueron de Aranguren, Existe ademas una copia del testa~ mento de don Sebastian Tomelin, hecho en Puebla e! 4 de abril de 1572, ante el escribano Hernan Sanchez, quien dispone se den 20 pesos de limosna al hospital de Nuestra Senora de Guadalupe y otras 20 a su iglesia. | mismo expediente menciona que en Tepeyac existia un hospital desde 1566, fundado por el foledano mas rico de México, Alonso de Villaseca, primo de Francisco Cervantes. de Salazar, quien habla dado al santuario una imagen de Ia Virgen en platas Entre las series importantes existen~ ‘tes en el acervo dacumental de} mac sobre los antecedentes de la Colegiata, se encuentran las cajas referentes a ‘Obras Pias, conocidas como las tunda~ clones de bienes con un fin benéfica espiritual material en fas que se inclu~ yen cofradfas, mandas, aniversarios, dotaciones para huérfanas, conventos ¥ hospitales, entre otros. Gracias a estos expedientes se conoce un panorama general de su existencia, de sus funda dores, la aplicacion de arrendamientos, Sus administradores y la localizacion de cada una, ya que se cuenta con las eserituras de fundacién, inventarios noticias de los informes dejados por sus propios administratlores sobre e] estado en que se encantraban. Muchas de ellas s¢ destinaron al culto y veneracién del santuario, en cera, vino, hostias, aceite, misas y leta~ nias, hospitales como el de San Lazaro, * ayes, Testementarias, caja 1, sn exp vestimenta y sustento para los pobres, nombramiento'y dotaciin de huerfanas y misicas que servian en las ceremo~ nias y demas festividades, asi coma para las fiestas anuales a la Virgen de Guadalupe, San Miguel y el Santo Jutbileo. En otros casas, los dincros eran destinados 3 la fundacién de archico- fradias como la del Santisimo o la de San Miguel, 0 bien a conventos como ef de San Lorenzo de ta ciudad de México. Entre los principales fundadores de ‘estos legados plas se encuentran don Juan Gonzalez de fa Fuente -sus dine- fos se asignaron para dos misas cada semana y para el nombramiento de huérfanas en 1642- y dofia Catalina Collado de Calderén -su obra pia paga- ba cada afio cien pesos por los réditos de dos mil de principal impuesto sobre el ingenio de Santa Barbara, en el valle de las Amilpas. La renta era para el gasto de cera, Vino y hostias que se gastaban en las misas de los seis cape~ lanes asistentes en el santuario de 71 Guadalupe (1677), y dofa Isabel Picazo de Hinojosa (1683), cuyo heredera, e! licericiad don Ventura Medina Picazo, impuse 7,840 pesos sobre sus casas propias en ¢! portal de Santo Domingo antes de 1708), destinando su renta para la celebracion de varias festivida- des, atiemas de imponer su capital de mil pesos sobre su casa situada en la calle de fos Donceles, cuyo rédito era para el aceite de la lampara del altar que mands construir para él en el san- tuario de Guadalupe. “men, Obras Fias.caja 1 (exps: 1-36) ie Surgen otras fundaciones como ta de los Pobres Vergonzantes (1706), que tuvo como principales administradores a Jeronimo de Valladolid y al bachiller ¥ presbiters Joseph de Lizard) y Valle, quien era ¢l mayordomo y administra~ dor de jas rentas del santuario. Don Nicolas Ruiz de Castafieda (1740), cuyos mil pesos, mas ottos mil por ani= versarios, fueron destinados para. el culto 2 Santa Maria de Guadalupe.” En cuanto a la serie de Huérfanas, existe una Memoria fechada entre 1876 ¥ 1584, aunque hay duda sobre quien era entonces capellan, Antonio Freire o Juan Wazquer de Acufa, En estas fundaciones plas se nombraba cada afio a una nifia espafola pobre y huerfana, sefalandole por dete 300 pesos de oro camun para su casamien- ‘to, la cual cobraba una vez hubiers contraido: matrimonio. El mayordoma de la ermita, que en este caso era el platero Domingo de Orona, se encarga~ lba de los bienes de la misma y entre~ gaba dicha dote elaborando los corres~ pondientes testimonios y cartas de reciba, A él le tocaba llevar 8 cabo las Visitas y fas constancias para la elec cldn de las huérfanas junto con el visi~ tador general del arzobispado, que entonces eva don Juan de Salamanca, previo edicto acerea de |a eleccidn. Par $08 afios s¢ les sorteaba en la cofradia de Nuestra Sefiora de Guadalupe y, al salir clectas las seis doncellas el dia de la Natividad (8 de septiembre), hacian la procesién piblica acostumbrada, A continuacin, eran reqistradas ante * anno, Huérfanos. caja 1. exp. sin. notario publica en los libros de ta misma cofradia, asi como en los me- moriales anteriarmente mencionados que el mismo mayordomo controlaba. Después surgia la fundacidn de duan Gonzalez de la Fuente, y el vieario fa nombraba antes de su ereccidn como Colegiata, ya que posteriormen- te el misma cabildo colegial se encar- gaba de las elecciones en sus sesiones capitulares. Los documentos régistran diversas escrituras de matrimonio leqitima como las de Diego de Nava, quien soli- cita ta limosna correspondiente por estar casada con Maria de |a Trinidad, una de las huerfanas de Nuestra Seftora de Guadalupe.” Hay expedientes como los de Bartolome Martinez Cafieque e Inés de Godoy, Benito Lopez de Rivera y Beatriz Rodriquez, asi como de Pedro de Acevedo con Catalina de lores. todos ellos registrados entre 1577 y 1580. Como se ha visto, la cofradia de ‘Guadalupe era Ia que realizaba inicial- wm mente tode ¢/ proceso y registra de huérfanas. Consultando Ia Cofradias en la subserie Indios, se loca~ liza una solicitud de limasnas para gas~ serie tos y adomos de su nueva ermita ¥ hospederia para los naturales, con fecha del 1) de enero de 1652, estando como capellan Luis Lasso de fa Vega.® Los primeros expedientes de ia serie Historia contienen diversos asuntos referentes a la administracién de los capellanes del santuario entre [a segunda mitad del sigio xv y la prime- ta del vb, y reflejan las contraversias entre los habitantes de los puctlas ale~ dafios 2 Guadalupe y los vicarios de la ermita, Tal es-¢l caso de un proceso por desidia seguido de 1601 a 1602 contra el clérigo presbitera y vicario Pedro Infante, quien dejé morir sin confesion a dos indigenas pertenecientes a la doctrina de la ermita de Tepeaquilla." A ella se encontraban sujetas las pebla- ciones de Santa Isabel, San Laurencio, San Juan y Santiago Atzacualco, que * san, Cofrodias indios:caja 1, exp, sin. * ratio, Historia, caja, exp. 2, 35 15. 17a menciona e| documento. La denuncia €5 presentada cl 25 de septiembre de 1601 y el auto se prolonga hasta el 9 de febrero de 1602, cuando don Juan de Salamanca, tesorero y vicario gene- ral de la Iglesia de México, pronuncia Ja sentencia condenando al presbitera a suspender su officio como cura par un aflo, ademas de una pena de 30 pesos de aro comin repartidos entre los qas~ tos dei juzgado, una obra pia (para cosas necesarias a la Cangregacién de la Compatia de Jesds), el fiscal, ef notario public y el intérprete de ta audiencia arzobispal, Juan Bautista, Este documenta, que narra todo el proceso con el interrogatorio de testigos a favor y en contra, da a conocer otros. dates importantes de lugares adyacen- tes al Tepeyae y las actividades de los habitantes que pertenecian a fa doctri- fa, 108 preparatives para a fiesta de Nuestra Seflora de Guadalupe, jos metlios a los que recurrian los indigenas tn casos de enfermedad o de peligro de muerte, ademas de conocer como se Ile~ vaba un proceso contra un clerigo y las penas a las que se le sometia. Por otra parte, conviene resaltar (a funcién que realizaban los mayordomos yadministradores de la ermita como res- ponsables del control de los bienes, posesianes y donaciones dadas por via testamentaria, destinatas 3 obras pias, eleceiones de hutrfanas y capellanias. Por ejemplo, se encuentra ef nombra~ miento de Gabriel Arias Riquelme, efec— tuado el 15 de enero de 1603, quien daba cuenta de las limosnas, rentas, pagos, cobranzas y fianzas de todo lo perteneciente 2 la misma durante el periodo del presbitero, capelian y vicario Juan Vazquez de Acufa, Estas funciones se encuentran refigjadas como en ct siguiente expediente de 1606, estando como mayordoma don Juan Gutiérrez, quien solicito el siguiente testimonio: “Juan Gutiérrez, presbitera mayor- domo de la ermita de Nuestra Sefiora die Guadalupe, digo que el reverendisi- mo arzobispo don fray Garcia de 0 aakan, Historia, eaja 1, exp. 3, fo Mendoza, debajo de cuya disposicion fallecié por clausula de su testamento declard tener en su poder de la dicha ermita diez mil pesos y para que se cobren de sus bienes tengo necesidad de que Juan de Cardenas, notario pilblieo en cuyo poder esta el testa- mento de! dicho arzobispo me de ta dicha cléusula autorizada en pilblica forma con pie y cabeza, a yuestra seforia suplica se me de (a dicha clau- sula que yo estoy puesto de pagarle sus derechos y pido justicia Pero el santuario necesitaba dinero para su fabrica material y el administra dor registraba con detalle las limosnas y donaciones, asi coma fos pagos a los alarifes, entalladores y doradores, como lo demuestran los documentos relacio- nados con ta construccién de la iglesia del Artesonado, cuya descripcian mas completa se localiza en la obra del padre Francisco de Florencia: La estrella del norte de México. Para su construc cidn se recolectaron jimasnas que abar- caron los alrededores de Tepeaquilla y 175 atros lugares lejanas como el puerta de Acapuleo, al que se menciona en un escrito fechado el 31 de anoste de 1613. En él enicontramos una peticion presen tada por el administrador y bachiller Miguel Gentil, dirigida a! doctor don Juan de Salamanca, chantre y juez pro- visor oficial y vieario general de ta Santa Iglesia y arzobispado de México, donde expresa [a falta de la entrega de las limosnas reeoleetadas por Antonio Pérez en dicho puerta, quien no habia Historia, caja 1, exp. 34.6 enviado la cuenta recaudada desde que se le concedié ei permiso para pedir Jimosna. 61 yicaria determina que rinda cuentas en un lapso de cuarenta dias, de fo contrario, se le aplicaria pena de exeomunién." Durante la estancia cama capellin de Juan Vazquez de Acufa, y siendo Diego Lopez de Monroy mayordomo y administrador, se registra en el archi- vo a Melchar de los Reyes como la persona encargada de traer ta piedra y la arena para la obra, con un pago de 74 pesos de ora comin el 20 de diciembre de 1609. En cuanto a su construccién y mantenimiento, se canace la participacién de los alarifes, doradores y entalladores por medio de una declaracién presentada por Alonso de Aibiz y Diego Lopez de las Navas, de) 29 de diciembre de 1609, quienes midieron y tasaron la obra que hasta entonces tenia hecha el maestro Damian de Avila, Ademas de mencionar la cantidad de ora comin invertido (cuyo monto fue de 4,032 pesos), se registra e| material utiliza do, como la piedra labrada para las paredes, tamando en consideracién la medida de lo alto de los cimientos y la mamposteria. Posteriormente aparecen noticias de otras intervenciones después de su bendicion en 1622 por el arzobispo don Juan Pérez de ta Serna, gracias a una relacion eserita entre 1640 y 1642 por cl licenciado Diego de Villegas, cura de la parroquia de Santa Catarina Martic de la ciudad de México y admi~ nistrador de fa ermita de Nuestra Sefiors de Guadalupe. En ese tiempo, el techo se aderezd y se mando darle una emplomada por Manuel y Melehor Pérez, Juan de Leon y Francisco de Luna, quienes intervinieron en el techo de! cuerpo de la iglesia, ademas de pintar y dorar toda la reja del coro. Se conoce al dorador Bartolomé de Mendoza, quien trabajé en compafia del ensamblador y entallador Diego Ramirez en uno de los retablos.'? 7 angg, Historin, caja 96 (antes), vol. 2, 60 ts. "ps, Cl caja exp. fn, 2 #8 Entre estas expedientes se detectan problemas en ta administracion de ios sacramentos por cuestiones de juris~ diccién entre Guadalupe y Santiago Tatelolco, como lo demuestra el case de Pedro Martin de Montes de Oca y otras consortes vecinos de la ermita con el guardian del territario, ! 26 de febrero de 1638, sobre la administra- cidn de los indigenas, decidi¢ndose enviar a los empadronados a su juris dicelén, Es posible detectar problemas entre los mismos pobladores de Tepe vyac, ya que en la serie Civil obra una Solicitud del 16 de diciembre de 1681, de los sefores regidores mayores Juan Antonio (fiscal), Francisco Joseph falealde), Salvador Andrés y¥ Diego Jerénimo, de natificar a Ana Cardona (mulata) para prohibirle edificar casa ‘tn el pueblo de Guadalupe por ir en contra de la real cédula que lo prohibia en pueblo de indios, a habitantes espa~ ftoles, mestizos y mulatos,’? El trabajo de los mayordomos wt intiuia las cofradias de indios Entre 1878 y 1687, sienda capellanes Alonso de Hitta y Juan de Altamirano y Villanueva, los indios de los custro pue- blos dicen “gue en una ermita ¢ iglesia principal han calocado a su costa una efigie y retrato del original por la cons fante tradici6n de que alli fue le prime- ra aparicidn y piden licencia para fundar alll una cofradia, de donde no se pueda mudar a otra parte y se obligan @ tener fa ermita con decencia, juntandose el 12 de diciembre a las cuatro de ta tarde para elegir rector, sels diputados, un mayordomo ¥ su ayudante, pudiendo ser cofrades, todos ios indias de cualquier parte, dando los hombres de entrada 4 reales y 2 las mujeres ayudando para gastos con la limosna que pudieren [..d los cofrades han de cuidar Is iglesia y casa de Novenas para que no se arrui- nen y las han de reparar con tas limos- ngs de ta cofradia® * 3 ang, Civil, caya 1, exp. sin, 2 Fr, ing, Cofredias nian, caja, exp. sf El 27 de febrera de 1679 se aproba la formacién de tas Constituciones de la Cofradia de Nuestra Sefora de Guadalupe por cuenta de los indios y el sefior pravisor y vicaria general de los indies y chinos del arzobispado de México, Francisco Jiménez Cazo. La ermita servia de sacristia a la iglesia "de {05 indins”, estando cn funcién la iglesia cor comp El Artesanada. Entre 1555 y 1556, fa ermita tuvo relevancia y una administracién com- pleja de sus casas, donaciones y bienes que recibia través de herencias desti- nadas 2 fabrica material y espiritual. Esta administracién se torné compleja al incluir el contro! de tierras, ranchos y haclendas que desaparecieron con las vicisitudes econdmicas que sufrié el cabildo con préstamos y robos, hasta la total venta de sus propiedades durante ta Reforma, * EInohistorisdora. Ponencia teida en el NV Encuentro de Antiopolagia e Historla det ‘Guartalupanisino, €| 17 de septiemiire de 2003, em la Escuela Nacional de Antropologia e Historia. 178

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