Está en la página 1de 46

María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.

Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría


Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Zapopan, Jalisco, a la fecha de su presentación.

C. JUEZ DE DISTRITO EN MATERIA ADMINISTRATIVA Y


DE TRABAJO EN TURNO EN EL ESTADO DE JALISCO
PRESENTE

MARÍA ZENAIDA CHÁVEZ LÓPEZ y MARÍA CONCEPCIÓN VERÓNICA


PLASCENCIA LÓPEZ, mexicanas, mayores de edad, medias hermanas y
ocupantes de la ramada ubicada en los bienes nacionales otorgados en Destino y,
en consecuencia, administrados por el Gobierno Municipal de Puerto Vallarta,
Jalisco, localizados en la Playa Boca de Tomates, en el municipio de Puerto
Vallarta, Jalisco, tal y como nos lo reconocen las Autoridades Responsables, en el
Acta de Inspección número PFPA/21.3/2C.27.5/012-16, de fecha 10 de febrero de
2016; acreditando además nuestro interés legítimo con el que comparecemos ante
ese Honorable Juzgado de Distrito, como ocupantes de la ramada inspeccionada,
con el original y las copias simples de las Licencias Municipales números 12518,
128345, 081314 y 097909, de fechas 24 de abril de 2009, 08 de mayo de 2006, 27
de abril de 2004 y 09 de mayo de 2003, respectivamente, así como el original de
la Autorización Municipal Oficio número A-31, Expediente 100-19/993, de fecha 31
de marzo de 1993, todas otorgadas en su momento por el Gobierno Municipal de
Puerto Vallarta, Jalisco, en favor de nuestro difunto padre, el señor Eduardo
Chávez Enríquez, así como la copia respectiva de su Acta de Defunción número
415 de fecha 20 de mayo de 2012; señalando como domicilio convencional para
oír y recibir todo tipo de notificaciones, la finca marcada con el número 999 Interior
18, de la calle Marina Vallarta, en la Colonia Residencial Las Margaritas, en el
municipio de Zapopan, Jalisco, C.P. 45130; y autorizando para esos mismos
efectos a la C. Maribel Sánchez Tirzo y, en los más amplios términos, de
conformidad al artículo 27 de Ley de Amparo, a los CC. Lic. Juan Pablo Arana
Santillán y Lic. Carmen Aurora Cabrera González; ante Usted comparecemos
para:

EXPONER

Con el carácter antes mencionados y como titulares de un Derecho Legítimo, con


fundamento en lo dispuesto por los artículos 1º, 5º, 14, 16, 103 fracción I y 107
fracciones I y VII de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y los
artículos 1º fracción I, 2º, 4º, 5º, fracción I, 11, 33, fracción IV, 114, todas sus
fracciones, 115, 116, 146, todas sus fracciones, 147, 149, y demás relativos de la
Ley de Amparo vigente, venimos a demandar en nombre propio el Amparo y la
Protección de la Justicia Federal.

Para tal efecto, sujetándonos a las formalidades prescritas en el artículo 108 de la


normativa de marras, hacemos los siguientes señalamientos:

I. NOMBRE Y DOMICILIO DE LOS QUEJOSOS:

Página 1 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

MARÍA ZENAIDA CHÁVEZ LÓPEZ y MARÍA CONCEPCIÓN VERÓNICA


PLASCENCIA LÓPEZ, mexicanas, mayores de edad, medias hermanas y
ocupantes de la ramada ubicada en los bienes nacionales otorgados en destino y,
en consecuencia, administrados por el Gobierno Municipal de Puerto Vallarta,
Jalisco, localizados en la Playa Boca de Tomates, en el municipio de Puerto
Vallarta, Jalisco, tal y como nos lo reconocen las Autoridades Responsables, tanto
en la Orden de Inspección número PFPA/21.3/2C.27.5/012(16)00297, de fecha 08
de febrero de 2016, como en el Acta de Inspección número
PFPA/21.3/2C.27.5/012-16, de fecha 10 de febrero de 2016; acreditando además
nuestro interés legítimo con el que comparecemos ante ese Honorable Juzgado
de Distrito, como ocupantes de la ramada inspeccionada, con el original y las
copias simples de las Licencias Municipales números 12518, 128345, 081314 y
097909, de fechas 24 de abril de 2009, 08 de mayo de 2006, 27 de abril de 2004 y
09 de mayo de 2003, respectivamente, así como el original de la Autorización
Municipal Oficio número A-31, Expediente 100-19/993, de fecha 31 de marzo de
1993, todas otorgadas en su momento por el Gobierno Municipal de Puerto
Vallarta, Jalisco, en favor de nuestro difunto padre, el señor Eduardo Chávez
Enríquez, así como la copia respectiva del Acta de Defunción número 415 de
fecha 20 de mayo de 2012; señalando como domicilio convencional para oír y
recibir todo tipo de notificaciones, la finca marcada con el número 999, Interior 18,
de la calle Marina Vallarta, en la Colonia Residencial Las Margaritas, en el
municipio de Zapopan, Jalisco, C.P. 45130; y autorizando para esos mismos
efectos a la C. Maribel Sánchez Tirzo y, en los más amplios términos, de
conformidad al artículo 27 de Ley de Amparo, a los CC. Lic. Juan Pablo Arana
Santillán y Lic. Carmen Aurora Cabrera González.

Respecto del interés legítimo con el cual comparecemos, es importante mencionar


que la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, estableció que
las características que permiten identificar al interés legítimo son: a) Si prospera la
acción, ello se traduce en un beneficio jurídico en favor del accionante; b) Está
garantizado por el derecho objetivo, pero no da lugar a un derecho subjetivo; c)
Debe existir una afectación a la esfera jurídica del particular; d) El titular del interés
legítimo tiene un interés propio y distinto de otros gobernados, consistente en que
los actos de la administración pública, que incidan en el ámbito de ese interés
propio, se ajusten a derecho; e) Es un interés cualificado, actual y real, y no
potencial o hipotético, por lo cual se le estima como un interés jurídicamente
relevante; y f) La anulación del acto de autoridad produce efectos en la esfera
jurídica del gobernado.
Situaciones que se ajustan al caso de que se trata, toda vez que, al ser ocupantes
de la ramada inspeccionada desde el año de 1993, primero, a través del interés
legítimo que mantuvo nuestro Padre hasta el 28 de abril de 2010, cuando se
publicó en el Diario Oficial de la Federación el Acuerdo por el que se destina al
servicio del H. Ayuntamiento Constitucional de Puerto Vallarta, la superficie de
39,378.94 metros cuadrados de zona federal marítimo terrestre, ubicada en el
kilómetro 4.0 de la carretera al aeropuerto de Puerto Vallarta, frente a la Playa de
Boca de Tomates, Municipio de Puerto Vallarta, estado de Jalisco, y
posteriormente de forma legítima, hasta la fecha, continuando con tal ocupación
las suscritas con posterioridad a su muerte, siempre esperando las
determinaciones del Gobierno Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco, respecto de la
administración de los bienes nacionales de que se trata, tal y como más adelante
se demostrará. Apoyan nuestra postura la siguiente Jurisprudencia y Tesis que a
la letra establecen lo siguiente:

Página 2 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Época: Décima Época


Registro: 2007921
Instancia: Pleno
Tipo de Tesis: Jurisprudencia
Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación
Libro 12, noviembre de 2014, Tomo I
Materia(s): Común
Tesis: P./J. 50/2014 (10a.)
Página: 60
INTERÉS LEGÍTIMO. CONTENIDO Y ALCANCE PARA EFECTOS DE LA
PROCEDENCIA DEL JUICIO DE AMPARO (INTERPRETACIÓN DEL ARTÍCULO
107, FRACCIÓN I, DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS
MEXICANOS). A consideración de este Tribunal Pleno de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación, el párrafo primero de la fracción I del artículo 107 de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, establece que tratándose de
la procedencia del amparo indirecto -en los supuestos en que no se combatan actos o
resoluciones de tribunales-, quien comparezca a un juicio deberá ubicarse en alguno
de los siguientes dos supuestos: (I) ser titular de un derecho subjetivo, es decir,
alegar una afectación inmediata y directa en la esfera jurídica, producida en virtud de
tal titularidad; o (II) en caso de que no se cuente con tal interés, la Constitución ahora
establece la posibilidad de solamente aducir un interés legítimo, que será suficiente
para comparecer en el juicio. Dicho interés legítimo se refiere a la existencia de un
vínculo entre ciertos derechos fundamentales y una persona que comparece en el
proceso, sin que dicha persona requiera de una facultad otorgada expresamente por
el orden jurídico, esto es, la persona que cuenta con ese interés se encuentra en
aptitud de expresar un agravio diferenciado al resto de los demás integrantes de la
sociedad, al tratarse de un interés cualificado, actual, real y jurídicamente relevante,
de tal forma que la anulación del acto que se reclama produce un beneficio o efecto
positivo en su esfera jurídica, ya sea actual o futuro pero cierto. En consecuencia,
para que exista un interés legítimo, se requiere de la existencia de una afectación en
cierta esfera jurídica -no exclusivamente en una cuestión patrimonial-, apreciada bajo
un parámetro de razonabilidad, y no sólo como una simple posibilidad, esto es, una
lógica que debe guardar el vínculo entre la persona y la afectación aducida, ante lo
cual, una eventual sentencia de protección constitucional implicaría la obtención de
un beneficio determinado, el que no puede ser lejanamente derivado, sino resultado
inmediato de la resolución que en su caso llegue a dictarse. Como puede advertirse,
el interés legítimo consiste en una categoría diferenciada y más amplia que el interés
jurídico, pero tampoco se trata del interés genérico de la sociedad como ocurre con el
interés simple, esto es, no se trata de la generalización de una acción popular, sino
del acceso a los tribunales competentes ante posibles lesiones jurídicas a intereses
jurídicamente relevantes y, por ende, protegidos. En esta lógica, mediante el interés
legítimo, el demandante se encuentra en una situación jurídica identificable, surgida
por una relación específica con el objeto de la pretensión que aduce, ya sea por una
circunstancia personal o por una regulación sectorial o grupal, por lo que si bien en
una situación jurídica concreta pueden concurrir el interés colectivo o difuso y el
interés legítimo, lo cierto es que tal asociación no es absoluta e indefectible; pues es
factible que un juzgador se encuentre con un caso en el cual exista un interés legítimo
individual en virtud de que, la afectación o posición especial frente al ordenamiento
jurídico, sea una situación no sólo compartida por un grupo formalmente identificable,
sino que redunde también en una persona determinada que no pertenezca a dicho
grupo. Incluso, podría darse el supuesto de que la afectación redunde de forma
exclusiva en la esfera jurídica de una persona determinada, en razón de sus
circunstancias específicas. En suma, debido a su configuración normativa, la
categorización de todas las posibles situaciones y supuestos del interés legítimo,
deberá ser producto de la labor cotidiana de los diversos juzgadores de amparo al
aplicar dicha figura jurídica, ello a la luz de los lineamientos emitidos por esta
Suprema Corte, debiendo interpretarse acorde a la naturaleza y funciones del juicio
de amparo, esto es, buscando la mayor protección de los derechos fundamentales de
las personas.
Contradicción de tesis 111/2013. Entre las sustentadas por la Primera y la Segunda
Salas de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. 5 de junio de 2014. Mayoría de
ocho votos de los Ministros José Ramón Cossío Díaz, José Fernando Franco
González Salas, Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, Luis María Aguilar Morales, Sergio A.
Valls Hernández, Olga Sánchez Cordero de García Villegas, Alberto Pérez Dayán y

Página 3 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Juan N. Silva Meza; votó en contra Margarita Beatriz Luna Ramos. Ausentes: Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena y Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo
de Larrea. Secretario: Javier Mijangos y González.
Tesis y/o criterios contendientes:
El sustentado por la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, al
resolver el amparo en revisión 366/2012, y el diverso sustentado por la Segunda Sala
de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, al resolver los amparos en revisión
553/2012, 684/2012 y 29/2013.
El Tribunal Pleno, el seis de noviembre en curso, aprobó, con el número 50/2014
(10a.), la tesis jurisprudencial que antecede. México, Distrito Federal, a seis de
noviembre de dos mil catorce.
Esta tesis se publicó el viernes 14 de noviembre de 2014 a las 9:20 horas en el
Semanario Judicial de la Federación y, por ende, se considera de aplicación
obligatoria a partir del martes 18 de noviembre de 2014, para los efectos previstos en
el punto séptimo del Acuerdo General Plenario 19/2013.

Época: Novena Época


Registro: 205021
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Tipo de Tesis: Aislada
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Tomo I, junio de 1995
Materia(s): Administrativa
Tesis: XX.6 A
Página: 475
LICENCIAS DE FUNCIONAMIENTO DE GIROS MERCANTILES. PARA
ACREDITAR EL INTERES JURIDICO, NO ES NECESARIA LA REVALIDACION DE
LAS. Es inexacto que la falta de refrendo anual de la licencia de funcionamiento del
establecimiento comercial, traiga como consecuencia la falta de validez de ésta, y que
por ello el quejoso no haya demostrado que el acto reclamado afecte a su interés
jurídico, en razón de que, para acreditar éste tratándose de giros reglamentados, no
es necesario que la licencia que se exhibe se encuentre al corriente en sus refrendos
anuales, toda vez, que dicha omisión acarrearía únicamente la imposición de una
sanción de carácter administrativo, pero de ninguna manera es motivo de cancelación
o privación de su validez.
TRIBUNAL COLEGIADO DEL VIGESIMO CIRCUITO.
Amparo en revisión 130/95. Manuel Huerta Rivera. 20 de abril de 1995. Unanimidad
de votos. Ponente: Ángel Suárez Torres. Secretario: Víctor Alberto Jiménez Santiago.

II. NOMBRE Y DOMICILIO DE TERCEROS PERJUDICADOS:

- El Gobierno Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco, con domicilio conocido en


la ciudad de Puerto Vallarta, Jalisco.

III. AUTORIDADES RESPONSABLES.

Identificada como Ordenadora:

• La Delegada de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente en el


estado de Jalisco, con domicilio conocido en la Ciudad de Guadalajara,
Jalisco.

Identificadas como Ejecutoras:

• Los Inspectores de la Delegación de la Procuraduría Federal de Protección


al Ambiente en el estado de Jalisco, de nombres: Gerardo David Tapia

Página 4 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Hernández y Martha Patricia Gutiérrez De La Garma, con domicilio


conocido en la Ciudad de Guadalajara, Jalisco.

IV. ACTOS RECLAMADOS.

De la Autoridad identificada como Ordenadora:

ÚNICO. La emisión de la Orden de Inspección número


PFPA/21.3/2C.27.5/012(16)00297, de fecha 08 de febrero de 2016, otorgada para
el efecto de que las Autoridades Responsables identificadas como Ejecutoras,
lleven a cabo la visita de inspección en la ramada que nos encontramos ocupando
e impongan alguna medida de seguridad en caso de que durante la inspección
exista riesgo inminente de desequilibrio ecológico o daño o deterioro grave a los
recursos naturales, casos de contaminación con repercusiones peligrosas para los
ecosistemas, sus componentes o para la salud pública o resulte inminentemente
necesario la imposición de la medida de seguridad para resguardar los elementos
del hecho infractor o impedir la continuidad de la infracción o probable delito, al
encontrarse dirigida de manera impersonal y sin considerar la situación jurídica de
los bienes nacionales, a pesar de que la Autoridad Responsable contaba con
información de manera previa respecto de la situación jurídica de los bienes
nacionales de que se trata y de que las suscritas somos las ocupantes de la
ramada inspeccionada localizada en tales bienes nacionales.

De las Autoridades identificadas como Ejecutoras:

PRIMERO. El levantamiento del Acta de Inspección número


PFPA/21.3/2C.27.5/012-16, de fecha 10 de febrero de 2016, en cumplimiento a la
ilegal Orden de Inspección número PFPA/21.3/2C.27.5/012(16)00297, de fecha 08
de febrero de 2016.

SEGUNDO. La determinación personal que efectuaron, en supuesto ejercicio de


sus atribuciones y facultades como Inspectores de la Delegación de la
Procuraduría Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco, al
imponer como medida de seguridad la clausura total temporal de la ramada que
nos encontramos ocupando, para el efecto de que no se lleve a cabo ninguna
actividad en el lugar inspeccionado, sin fundar y motivar debidamente sus
atribuciones y facultades para esos concisos efectos y sin motivar debidamente su
proceder, en cuanto a la imposición de la medida de seguridad, considerando que
se trata de bienes nacionales en DESTINO y, por lo tanto, bajo la administración
del Gobierno Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco.

ANTECEDENTES DE LOS ACTOS RECLAMADOS

1. Desde el año de 1993, nuestro difundo Padre, el señor Eduardo Chávez


Enríquez y todos los que integramos la familia formada por él, nos encontramos
ocupando la ramada localizada en los bienes nacionales donde fueron ejecutados
los actos reclamados a las Autoridades Responsables;

Página 5 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

2. Con fecha 29 de abril de 2010, se publicó en el Diario Oficial de la Federación el


Acuerdo por el que se destina al servicio del H. Ayuntamiento Constitucional de
Puerto Vallarta, la superficie de 39,378.94 metros cuadrados de zona federal
marítimo terrestre, ubicada en el kilómetro 4.0 de la carretera al aeropuerto de
Puerto Vallarta, frente a la Playa de Boca de Tomates, Municipio de Puerto
Vallarta, estado de Jalisco; bienes nacionales donde se encuentra la ramada que
estamos ocupando, primero conforme el interés jurídico que tuvo nuestro Padre y
posteriormente con base en el interés legítimo que el Gobierno Municipal de
Puerto Vallarta, Jalisco, nos ha reconocido;

3. Con fecha 08 de febrero de 2016, se emitió la ilegal Orden de Inspección


número PFPA/21.3/2C.27.5/012(16)00297, por parte de la Autoridad Responsable
identificada como Ordenadora;

4. Con fecha 10 de febrero de 2016, se levantó el Acta de Inspección número


PFPA/21.3/2C.27.5/012-16, por parte de las Autoridades Responsables
identificadas como Ejecutoras; y

5. Es el caso que, durante el desahogo de la visita de inspección en materia de


impacto ambiental, las Autoridades Responsables identificadas como Ejecutoras,
determinaron sin sustento legal alguno y sin una objetiva motivación, la clausura
total temporal de la ramada que nos encontramos ocupando, principalmente por
carecer de autorización en materia de evaluación del impacto ambiental para la
instalación de la ramada de que se trata, a pesar de que la ramada tiene instalada
más de 22 años en el lugar, como más adelante se demostrará y que no hemos
causado afectación ambiental alguna probada.

Con lo anterior, se están violando gravemente nuestros derechos fundamentales,


como ocupantes de la ramada inspeccionada, al imponerse una medida de
seguridad sin el fundamento y la motivación suficiente y aplicable al caso de que
se trata, ya que se dejaron de considerar la totalidad de las disposiciones legales
que regulan la ocupación del sitio y las condiciones por las que se encuentra la
ramada instalada en el lugar inspeccionado, cometiéndose con esto actos
flagrantes que afectan nuestros derechos personales y violentan nuestros
derechos fundamentales.

Finiquitado lo anterior, es por lo que, ante Usted comparecemos y:

MANIFESTAMOS

QUE BAJO PROTESTA DE DECIR VERDAD, RESPECTO DE LOS HECHOS


NARRADOS SON CIERTOS, NOS CONSTAN Y CONSTITUYEN LOS
ANTECEDENTES DE LOS ACTOS RECLAMADOS Y SON FUNDAMENTO Y
MOTIVACIÓN DE LOS CONCEPTOS DE VIOLACIÓN QUE MÁS ADELANTE SE
DESCRIBEN.

V.- PRECEPTOS CONSTITUCIONALES VIOLADOS: Los artículos 1º, 5º, 14, 16,
25, 27 y 115 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, mismos
que a la letra determinan lo siguiente:

Página 6 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Artículo 1°.- En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozarán de
los derechos humanos reconocidos en esta Constitución y en los tratados
internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, así como de las
garantías para su protección, cuyo ejercicio no podrá restringirse ni suspenderse,
salvo en los casos y bajo las condiciones que esta Constitución establece.
Las normas relativas a los derechos humanos se interpretarán de conformidad
con esta Constitución y con los tratados internacionales de la materia
favoreciendo en todo tiempo a las personas la protección más amplia.
Todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación
de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de
conformidad con los principios de universalidad, interdependencia,
indivisibilidad y progresividad. En consecuencia, el Estado deberá prevenir,
investigar, sancionar y reparar las violaciones a los derechos humanos, en los
términos que establezca la ley…

Artículo 5°.- A ninguna persona podrá impedirse que se dedique a la profesión,


industria, comercio o trabajo que le acomode, siendo lícitos. El ejercicio de esta
libertad sólo podrá vedarse por determinación judicial, cuando se ataquen los
derechos de tercero, o por resolución gubernativa, dictada en los términos que
marque la ley, cuando se ofendan los derechos de la sociedad. Nadie puede ser
privado del producto de su trabajo, sino por resolución judicial. …

Artículo 14.- … Nadie podrá ser privado de la vida, de la libertad o de sus


propiedades, posesiones o derechos, sino mediante juicio seguido ante los
tribunales previamente establecidos, en el que se cumplan las formalidades
esenciales del procedimiento y conforme a las leyes expedidas con anterioridad al
hecho. …

Artículo 16.- Nadie puede ser molestado en su persona, familia, domicilio,


papeles o posesiones, sino en virtud de mandamiento escrito de la autoridad
competente, que funde y motive la causa legal del procedimiento. …
La autoridad administrativa podrá practicar visitas domiciliarias únicamente
para cerciorarse de que se han cumplido los reglamentos sanitarios y de
policía; y exigir la exhibición de los libros y papeles indispensables para comprobar
que se han acatado las disposiciones fiscales, sujetándose en estos casos, a las
leyes respectivas y a las formalidades prescritas para los cateos. …

Artículo 25.- Corresponde al Estado la rectoría del desarrollo nacional para


garantizar que éste sea integral y sustentable, que fortalezca la Soberanía de la
Nación y su régimen democrático y que, mediante el fomento del crecimiento
económico y el empleo y una más justa distribución del ingreso y la riqueza, permita
el pleno ejercicio de la libertad y la dignidad de los individuos, grupos y clases
sociales, cuya seguridad protege esta Constitución. …
Bajo criterios de equidad social y productividad se apoyará e impulsará a las
empresas de los sectores social y privado de la economía, sujetándolos a las
modalidades que dicte el interés público y al uso, en beneficio general, de los
recursos productivos, cuidando su conservación y el medio ambiente. …
La ley alentará y protegerá la actividad económica que realicen los particulares y
proveerá las condiciones para que el desenvolvimiento del sector privado contribuya
al desarrollo económico nacional, en los términos que establece esta
Constitución.

Artículo 27.- La propiedad de las tierras y aguas comprendidas dentro de los


límites del territorio nacional, corresponde originariamente a la Nación, la cual
ha tenido y tiene el derecho de transmitir el dominio de ellas a los particulares,
constituyendo la propiedad privada. …
La nación tendrá en todo tiempo el derecho de imponer a la propiedad privada las
modalidades que dicte el interés público, así como el de regular, en beneficio social,
el aprovechamiento de los elementos naturales susceptibles de apropiación, con
objeto de hacer una distribución equitativa de la riqueza pública, cuidar de su
conservación, lograr el desarrollo equilibrado del país y el mejoramiento de las
condiciones de vida de la población rural y urbana. En consecuencia, se dictarán
las medidas necesarias para ordenar los asentamientos humanos y establecer

Página 7 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

adecuadas provisiones, usos, reservas y destinos de tierras, aguas y bosques,


a efecto de ejecutar obras públicas y de planear y regular la fundación,
conservación, mejoramiento y crecimiento de los centros de población; para
preservar y restaurar el equilibrio ecológico; para el fraccionamiento de los
latifundios; para disponer, en los términos de la ley reglamentaria, la organización y
explotación colectiva de los ejidos y comunidades; para el desarrollo de la pequeña
propiedad rural; para el fomento de la agricultura, de la ganadería, de la silvicultura y
de las demás actividades económicas en el medio rural, y para evitar la destrucción
de los elementos naturales y los daños que la propiedad pueda sufrir en perjuicio de
la sociedad. …
En los casos a que se refieren los dos párrafos anteriores, el dominio de la Nación es
inalienable e imprescriptible y la explotación, el uso o el aprovechamiento de los
recursos de que se trata, por los particulares o por sociedades constituidas conforme
a las leyes mexicanas, no podrá realizarse sino mediante concesiones, otorgadas por
el Ejecutivo Federal, de acuerdo con las reglas y condiciones que establezcan las
leyes, salvo en radiodifusión y telecomunicaciones, que serán otorgadas por el
Instituto Federal de Telecomunicaciones. …

Artículo 115.- …
Fracción V.- Los Municipios, en los términos de las leyes federales y Estatales
relativas, estarán facultados para: …
b) Participar en la creación y administración de sus reservas territoriales; …
d) Autorizar, controlar y vigilar la utilización del suelo, en el ámbito de su
competencia, en sus jurisdicciones territoriales; …

Aunado a lo anterior, es importante mencionar que se nos causan serios agravios


y se afectan nuestros derechos fundamentales, en virtud de que, no obstante que
las Autoridades Responsables, en el ámbito de su competencia, tienen la
obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos
humanos de conformidad con los principios de universalidad,
interdependencia, indivisibilidad y progresividad, especialmente el derecho a
la seguridad jurídica, libre profesión y aprovechamiento lícito de los bienes
nacionales, las Autoridades Responsables, tanto la Ordenadora como las
Ejecutoras, fueron omisas en respetarlos. Para reafirmar nuestro planteamiento,
transcribimos los siguientes criterios jurisprudenciales, que a la letra establecen lo
siguiente:

Época: Décima Época


Registro: 2002264
Instancia: PRIMERA SALA
Tipo Tesis: Jurisprudencia
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Localización: Libro XV, diciembre de 2012, Tomo 1
Materia(s): Común Constitucional
Tesis: 1a./J. 18/2012 (10a.)
Pág. 420
[J]; 10a. Época; 1a. Sala; S.J.F. y su Gaceta; Libro XV, Diciembre de 2012, Tomo 1;
Pág. 420
CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD Y DE CONVENCIONALIDAD (REFORMA
CONSTITUCIONAL DE 10 DE JUNIO DE 2011). Mediante reforma publicada en el
Diario Oficial de la Federación el 10 de junio de 2011, se modificó el artículo 1o. de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, rediseñándose la forma en la
que los órganos del sistema jurisdiccional mexicano deberán ejercer el control de
constitucionalidad. Con anterioridad a la reforma apuntada, de conformidad con el
texto del artículo 103, fracción I, de la Constitución Federal, se entendía que el único
órgano facultado para ejercer un control de constitucionalidad lo era el Poder Judicial
de la Federación, a través de los medios establecidos en el propio precepto; no
obstante, en virtud del reformado texto del artículo 1o. constitucional, se da otro tipo
de control, ya que se estableció que todas las autoridades del Estado mexicano
tienen obligación de respetar, proteger y garantizar los derechos humanos
reconocidos en la Constitución y en los tratados internacionales de los que el

Página 8 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

propio Estado mexicano es parte, lo que también comprende el control de


convencionalidad. Por tanto, se concluye que en el sistema jurídico mexicano actual,
los jueces nacionales tanto federales como del orden común, están facultados para
emitir pronunciamiento en respeto y garantía de los derechos humanos reconocidos
por la Constitución Federal y por los tratados internacionales, con la limitante de que
los jueces nacionales, en los casos que se sometan a su consideración distintos de
las vías directas de control previstas en la Norma Fundamental, no podrán hacer
declaratoria de inconstitucionalidad de normas generales, pues únicamente los
órganos integrantes del Poder Judicial de la Federación, actuando como jueces
constitucionales, podrán declarar la inconstitucionalidad de una norma por no ser
conforme con la Constitución o los tratados internacionales, mientras que las demás
autoridades jurisdiccionales del Estado mexicano sólo podrán aplicar la norma si
consideran que no es conforme a la Constitución Federal o a los tratados
internacionales en materia de derechos humanos.
PRIMERA SALA
Contradicción de tesis 259/2011. Entre las sustentadas por el Primer y Segundo
Tribunales Colegiados, ambos del Trigésimo Circuito. 30 de noviembre de 2011.
Mayoría de tres votos. Disidentes: Guillermo I. Ortiz Mayagoitia y José Ramón Cossío
Díaz. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretario: Jesús Antonio Sepúlveda
Castro.
Tesis de jurisprudencia 18/2012 (10a.). Aprobada por la Primera Sala de este Alto
Tribunal, en sesión de fecha dieciocho de enero de dos mil doce.

Época: Décima Época


Registro: 2002861
Instancia: TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA ADMINISTRATIVA DEL
SEXTO CIRCUITO
Tipo Tesis: Jurisprudencia
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Localización: Libro XVII, febrero de 2013, Tomo 2
Materia(s): Común, Administrativa
Tesis: VI.3o.A. J/2 (10a.)
Pág. 1241
[J]; 10a. Época; T.C.C.; S.J.F. y su Gaceta; Libro XVII, Febrero de 2013, Tomo 2;
Pág. 1241
PRINCIPIO PRO HOMINE Y CONTROL DE CONVENCIONALIDAD. SU
APLICACIÓN NO IMPLICA EL DESCONOCIMIENTO DE LOS PRESUPUESTOS
FORMALES Y MATERIALES DE ADMISIBILIDAD Y PROCEDENCIA DE LAS
ACCIONES. El principio pro homine y el control de convencionalidad se
encuentran tutelados por el artículo 1o. de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos, a partir de la entrada en vigor de su reforma publicada en el Diario
Oficial de la Federación el 10 de junio de 2011. El principio pro homine es aplicable
en dos vertientes, a saber, el de preferencia de normas y de preferencia
interpretativa, ello implica que el juzgador deberá privilegiar la norma y la
interpretación que favorezca en mayor medida la protección de las personas.
Por su parte, el "control de convencionalidad" dispone la obligación de los
juzgadores de interpretar las normas relativas a los derechos humanos, de
conformidad con la Constitución y con los tratados internacionales de la materia,
favoreciendo la protección más amplia a las personas. Sin embargo, su aplicación
no implica desconocer los presupuestos formales y materiales de admisibilidad y
procedencia de las acciones, pues para la correcta y funcional administración de
justicia y la efectiva protección de los derechos de las personas, el Estado puede y
debe establecer presupuestos y criterios de admisibilidad de los medios de defensa,
los cuales no pueden ser superados, por regla general, con la mera invocación de
estos principios rectores de aplicación e interpretación de normas.
TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA ADMINISTRATIVA DEL SEXTO
CIRCUITO
Amparo directo 381/2011. Mónica Sabrina Balderas Herrera. 29 de marzo de 2012.
Unanimidad de votos. Ponente: Manuel Rojas Fonseca. Secretario: Juan Carlos
Carrillo Quintero.
Amparo directo 55/2012. Santiago Marín Domínguez. 26 de abril de 2012.
Unanimidad de votos. Ponente: Miguel Ángel Ramírez González. Secretaria: Adriana
Carmona Carmona.

Página 9 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Amparo en revisión 92/2012. Síndico Municipal del Ayuntamiento del Municipio de


Puebla y otros. 24 de mayo de 2012. Unanimidad de votos. Ponente: Miguel Ángel
Ramírez González. Secretaria: Adriana Carmona Carmona.
Amparo directo 62/2012. Santiago Marín Domínguez. 7 de junio de 2012. Unanimidad
de votos. Ponente: Manuel Rojas Fonseca. Secretaria: Ana Laura Gutiérrez Sauza.
Amparo en revisión (improcedencia) 201/2012. 23 de agosto de 2012. Unanimidad de
votos. Ponente: Miguel Ángel Ramírez González. Secretaria: Margarita Márquez
Méndez.

Además, no se debe de dejar de considerar que los actos que se reclaman,


también violentan disposiciones previstas en Tratados Internacionales de los que
México es parte, así como determinaciones en los que se prevén diversos
derechos humanos.

La Convención sobre la Protección del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural de


fecha 23 de noviembre del año 1972, resultante de la Conferencia General de la
Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura,
en su 17ª Reunión celebrada en París, Francia, del 17 de octubre al 21 de
noviembre de 1972; Convención que fue aprobada por la Cámara de Senadores
del H. Congreso de la Unión del Estado Mexicano en fecha 22 de diciembre de
1983, según Decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación el 23 de enero
de 1984, cuyo instrumento de aceptación firmado por el Lic. Miguel de la Madrid
Hurtado, entonces Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos en
fecha 24 de enero de 1984, depositado ante el Director General de la
Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura el
día 23 de febrero de 1984, y que para su debida observancia en los términos de la
fracción I del artículo 89 de nuestra Carta Magna, el Decreto de Promulgación del
Convenio para la Protección del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural adoptado
en noviembre de 1972, fue publicado en el Diario Oficial de la Federación en fecha
miércoles 02 de mayo de 1984, el estado mexicano se obligó en su oportunidad a
cumplir con las disposiciones establecidas en dicha Convención, especialmente
las siguientes:

(i) Artículo 4.- Cada uno de los Estados Partes en la presente Convención reconoce
que la obligación de identificar, proteger, conservar, rehabilitar y transmitir a las
generaciones futuras el patrimonio cultural y natural situado en su territorio, le
encumbre primordialmente. Procurará actuar con ese objeto por su propio esfuerzo y
hasta el máximo de los recursos de que disponga, y llegado el caso, mediante la
asistencia y la cooperación internacionales de que se pueda beneficiar, sobre todo en
los aspectos financiero, artístico, científico y técnico.

(ii) Artículo 5.- Con objeto de garantizar una protección y una conservación eficaces
y revalorizar lo más activamente posible el patrimonio cultural y natural situado en su
territorio y en las condiciones adecuadas a cada país, cada uno de los Estados Partes
en la presente Convención procurará dentro de lo posible:
a) Adoptar una política general encaminada a atribuir al patrimonio cultural y natural
una función en la vida colectiva y a integrar la protección de ese patrimonio en los
programas de planificación general;
b) Instituir en su territorio, si no existen, uno o varios servicios de protección,
conservación y revalorización del patrimonio cultural y natural, dotados de un
personal adecuado que disponga de medios que le permita llevar a cabo las tareas
que le incumban;
c) Desarrollar los estudios y la investigación científica y técnica y perfeccionar los
métodos de intervención que permitan a un Estado hacer frente a los peligros que
amenacen a su patrimonio cultural y natural;
d) Adoptar las medidas jurídicas, científicas, técnicas, administrativas y financieras
adecuadas, para identificar, proteger, conservar, revalorizar y rehabilitar ese
patrimonio; y

Página 10 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

e) Facilitar la creación o el desenvolvimiento de centros nacionales o regionales de


formación en materia de protección, conservación y revalorización del patrimonio
cultural y natural y estimular la investigación científica en éste campo.

CONCEPTOS DE VIOLACIÓN

PRIMERO. Es preciso señalar que el acto que se reclama de la Autoridad


Responsable, identificada como Ordenadora, denominada Delegada de la
Procuraduría Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco, causa
evidentes afectaciones a nuestra esfera jurídica y graves violaciones de nuestros
derechos humanos, al haber emitido la ilegal Orden de Inspección número
PFPA/21.3/2C.27.5/012(16)00297, de fecha 08 de febrero de 2016, sin establecer
debidamente el lugar o zona que debía de inspeccionarse, sin dirigir
expresamente el acto de molestia a nuestras personas, a pesar de contar con la
información previa para ello y, en consecuencia, sin dirigir el acto de autoridad a
quien realmente se encuentra facultado para conocer las posibles violaciones a la
legislación ambiental cuyo cumplimiento se pretendió verificar; en efecto, los
artículos 162 de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al
Ambiente y 63 de la Ley Federal de Procedimiento Administrativo, claramente
determinan lo siguiente:

Artículo 162.- Las autoridades competentes podrán realizar, por conducto de


personal debidamente autorizado, visitas de inspección, sin perjuicio de otras
medidas previstas en las leyes que puedan llevar a cabo para verificar el
cumplimiento de este ordenamiento.
Dicho personal, al realizar las visitas de inspección, deberá contar con el documento
oficial que los acredite o autorice a practicar la inspección o verificación, así como la
orden escrita debidamente fundada y motivada, expedida por autoridad competente,
en la que se precisará el lugar o zona que habrá de inspeccionarse y el objeto de
la diligencia

Artículo 63.- Los verificadores, para practicar visitas, deberán estar provistos de
orden escrita con firma autógrafa expedida por la autoridad competente, en la que
deberá precisarse el lugar o zona que ha de verificarse, el objeto de la visita, el
alcance que deba tener y las disposiciones legales que lo fundamenten.

Luego entonces, considerando que la Autoridad Responsable identificada como


Ordenadora, determinó efectuar una visita de inspección en materia de impacto
ambiental en:

De lo transcrito se desprende, puntualmente, que la Autoridad Responsable tenía


conocimiento exacto de forma previa a la emisión de la referida Orden de
Inspección, la localización del sitio donde se ordenó la realización de la visita de
inspección en materia de impacto ambiental, lo que hace suponer que tenía pleno
conocimiento del lugar, la existencia de la ramada, sus dimensiones y las
personas que ahí nos encontrábamos ocupando la misma, situación por la cual,
resulta inexplicable y hasta ilegal, el motivo por el que la mencionada Orden de
Inspección que por esta vía se cuestiona, fue dirigida de firma impersonal, esto es,
sin hacer mención de las personas o la entidad pública que pudieran tener interés

Página 11 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

jurídico o legítimo alguno en la realización del acto de molestia, tal y como puede
apreciarse del contenido de la misma Orden de Inspección número
PFPA/21.3/2C.27.5/012(16)00297, de fecha 08 de febrero de 2016, que de su
texto puede leerse lo siguiente:

Situación que vulnera nuestros derechos fundamentales, en virtud de que la


Autoridad Responsable identificada como Ordenadora, se encuentra emitiendo
una orden de molestia en la vía administrativa, sin cumplir con los extremos
legales de lo que se entiende por debida fundamentación y motivación, ya que, por
un lado, del acto administrativo de que se trata, se puede apreciar que la
Autoridad Responsable tenía de forma previa, pleno conocimiento de la ubicación
del lugar, la existencia de la ramada y de las actividades de ocupación que ahí
estábamos efectuando, por lo que, emitir un acto de autoridad como lo es una
visita de inspección, de forma impersonal, esto es, sin hacer mención de las
personas físicas o entidades públicas que pudieran tener interés en las
consecuencias del acto de molestia, cuando la Autoridad Responsable cuenta con
información previa de quien o quienes se encuentran realizando las actividades
que motivan la emisión de la Orden de Inspección de mérito, es más que evidente
que resulta un acto administrativo que atenta contra el principio de la buena fe y la
legalidad que todo acto administrativo debe guardar, entendidos estos como:

Principio de buena fe: La autoridad administrativa, los administrados, sus


representantes o abogados y, en general, todos los partícipes del procedimiento
administrativo municipal, deberán realizar sus respectivos actos procedimentales
guiados por la buena fe, el respeto mutuo y la colaboración. Ninguna regulación del
procedimiento administrativo puede interpretarse de modo tal que ampare alguna
conducta contra la buena fe procesal.

Principio de legalidad: Las autoridades administrativas deben actuar con respeto a


la Constitución, la ley y al derecho, dentro de las facultades que les estén atribuidas y
de acuerdo con los fines para los que les fueron conferidas.

Lo que por supuesto, vulnera nuestros derechos fundamentales, toda vez que la
Autoridad Responsable ya había emitido con anterioridad la Orden de Inspección
número PFPA/21.3/2C.27.4/045(15)012806, de fecha 23 de diciembre de 2015,
con el objeto de realizar una visita de inspección en materia de zona federal
marítimo terrestre a la misma ramada, la cual propició el levantamiento del Acta de
Inspección número PFPA/21.3/2C.27.4/045-15, de fecha 29 de diciembre de 2015,
en la que medularmente quedo asentado lo que a continuación se lee:

Página 12 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Luego entonces, resulta más que evidente que la Autoridad Responsable


identificada como Ordenadora, tenía pleno conocimiento de las personas que nos
encontrábamos efectuando la ocupación de la ramada, motivo suficiente para que
la Orden de Inspección que por esta vía se cuestiona, se hubiese emitido
estableciendo puntualmente a la persona a la que se encontraba dirigida, con el
objeto de garantizar la validez de su actuación frente a las suscritas y no lesionar
nuestros derechos fundamentales, toda vez que, resulta inexplicable, porque la
Autoridad Responsable emitió una Orden de Inspección sin establecer la o las
personas a las que se encontraba dirigida, cuando tenía pleno conocimiento de tal
situación.

Ahora bien, suponiendo sin conceder que la ausencia de precisión en la


identificación de la persona física a la que va dirigido el acto de molestia, no sea
un requisito indispensable para garantizar la legalidad del acto administrativo de
que se trata y, por consiguiente, la legalidad del acto de molestia del que fuimos
objeto, ese Honorable Juzgado Federal no debe dejar de considerar que la
Autoridad Responsable identificada como Ordenadora, sí está dejando de tomar
en cuenta información jurídica que trasciende en el acto de autoridad que se
cuestiona.

Lo anterior es así, considerando que al tener la Autoridad Responsable


conocimiento del lugar exacto de los hechos desde el mes de diciembre del año
en curso, debió de tomar muy en cuenta la situación jurídica en la que se
encuentran los bienes nacionales donde se efectuó el acto de molestia, a fin de
garantizar la legalidad de sus actuaciones frente a las suscritas, en virtud de que
la zona federal marítimo terrestre donde se encuentra ubicada la ramada
inspeccionada y que nos encontramos ocupando la familia de nuestro difunto
Padre desde el año de 1993, fecha en la que él inició sus actividades en el sitio y
mantuvo el interés jurídico hasta el año 2010, cuando fue otorgado en DESTINO,
el 29 de abril de 2010, la zona federal marítimo terrestre de que se trata, al
Gobierno Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco, tal y como se puede observar de la
publicación en el Diario Oficial de la Federación de esa misma fecha.

Lo que significa que, la administración de los bienes nacionales de referencia,


fueron cedidos por el Gobierno Federal, por conducto de la Secretaría de Medio
Página 13 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Ambiente y Recursos Naturales, al Gobierno Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco,


en tal sentido, la Orden de Inspección que por esta vía se cuestiona, resulta por
demás ilegal y causa inseguridad legal a las suscritas, en virtud de que nos deja
en una situación de incertidumbre jurídica y vulnerables ante las determinaciones
efectuadas por la Autoridad Responsable, para hacer valer nuestros derechos
adjetivos, conforme nuestro interés legítimo como ocupantes de la ramada de que
se trata, toda vez que, desde hace varios años, considerando los derechos
subjetivos que en su momento fueron otorgados por el propio Gobierno Municipal
de Puerto Vallarta, Jalisco, a nuestro señor Padre y que desde el año 2010 se
encuentran sin resolver ante las suscritas, aún después del fallecimiento de
nuestro Padre, el señor Eduardo Chávez Enríquez, en virtud de que las
administraciones municipales no han podido determinar las condiciones jurídicas
en las que se van a regularizar las ocupaciones de las ramadas que se localizan
en la zona federal marítimo terrestre que fue otorgada en DESTINO al Gobierno
Municipal, lo que sin dudas, al no haber sido considerado por la Autoridad
Responsable identificada como Ordenadora, nos deja en franco estado de
indefensión y conculca nuestros derechos fundamentales, YA QUE RESULTA
IMPOSIBLE QUE PODAMOS CUMPLIR CON ALGUNA DE LAS OBLIGACIONES
QUE NOS REQUIERE, COMO LO ES LA OBTENCIÓN DE LA AUTORIZACIÓN
EN MATERIA DE EVALUACIÓN DEL IMPACTO AMBIENTAL POR LA
OCUPACIÓN DE LA RAMADA, EN VIRTUD DE QUE LA ZONA FEDERAL
MARÍTIMO TERRESTRE DONDE SE LOCALIZA, SE ENCUENTRA EN DESTINO
AL GOBIERNO MUNICIPAL DE PUERTO VALLARTA, JALISCO, POR LO
TANTO, ES LA ÚNICA AUTORIDAD CON FACULTADES PARA ESTABLECER
LAS CONDICIONES JURÍDICAS Y TÉCNICAS FRENTE A LAS SUSCRITAS, EN
LAS QUE SE PODRÍA REGULARIZAR LA OCUPACIÓN DE LA RAMADA
INSPECCIONADA E ILEGALMENTE CLAUSURADA.

Situaciones de derecho y de hecho que, al no haber sido consideradas por la


Autoridad Responsable identificada como Ordenadora, afectan gravemente
nuestros derechos fundamentales, ya que no existe posibilidad legal alguna ni
procedimiento o trámite administrativo realizable, en el sentido en el que nos fue
requerido, para poder regularizar la ocupación de la ramada que indebida, abusiva
e ilegalmente fue clausurada; siendo que las Autoridades Responsables se
encuentran obligadas a atender lo determinado en el Acuerdo por el que se
destina al servicio del H. Ayuntamiento Constitucional de Puerto Vallarta, la
superficie de 39,378.94 metros cuadrados de zona federal marítimo terrestre,
ubicada en el kilómetro 4.0 de la carretera al aeropuerto de Puerto Vallarta, frente
a la Playa de Boca de Tomates, Municipio de Puerto Vallarta, estado de Jalisco,
publicado el 29 de abril de 2010 en el Diario Oficial de la Federación.

En efecto, ese Honorable Juzgado de Distrito no debe dejar de considerar que la


Autoridad Responsable se encuentra incumpliendo con lo determinado en el
Principio Noveno Romano de los diversos que rigen la política ambiental en
México y, por lo tanto, a los que se encuentra sujeta su actuación administrativa,
establecidos en el artículo 15 de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la
Protección al Ambiente, y que a la letra dispone lo siguiente:

Artículo 15.- Para la formulación y conducción de la política ambiental y la expedición


de normas oficiales mexicanas y demás instrumentos previstos en esta Ley, en
materia de preservación y restauración del equilibrio ecológico y protección al
ambiente, el Ejecutivo Federal observará los siguientes principios: …
Fracción IX. La coordinación entre las dependencias y entidades de la
administración pública y entre los distintos niveles de gobierno y la

Página 14 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

concertación con la sociedad, son indispensables para la eficacia de las


acciones ecológicas; …

Y con ello, vulnerando los Tratados Internacionales de los que México es parte,
toda vez que, al dejar de considerar la situación establecida por la propia
Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, respecto de la
administración de los bienes nacionales donde se localiza la ramada
inspeccionada, está dejándonos en completo estado de inseguridad jurídica, ya
que nos está requiriendo que presentemos una autorización que, de conformidad
a las disposiciones legales y técnicas que regulan la evaluación del impacto
ambiental, nos encontramos imposibilitadas de poder cumplir, en virtud de que la
administración de la zona federal marítimo terrestre que conforman los bienes
nacionales donde se localizada la ramada que nos encontramos ocupando, se
encuentra bajo la administración del Gobierno Municipal de Puerto Vallarta,
Jalisco, al haber sido objeto de DESTINO otorgado en su favor por el propio
Gobierno Federal; situación que al ignorar jurídica y técnicamente la Autoridad
Responsable identificada como Ordenadora, al momento de emitir la Orden de
Inspección de que se trata, evidentemente nos deja en claro y total estado de
indefensión, ya que no podemos cumplir sus mandamientos en los términos por
ella requeridos, en virtud de que la ramada que nos encontramos ocupando, se
localizada en bienes nacionales cuya administración fue cedida al Gobierno
Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco, por lo que, dependemos completamente de
las decisiones administrativas que al respecto determine la Autoridad identificada
como Tercero Interesado en el presento juicio de garantías, para que podamos
proceder conforme nos lo exige la Autoridad Responsable.

En efecto, la Ley General de Bienes Nacionales al respecto establece lo siguiente:

Artículos 61.- …
Corresponde a la Secretaría emitir el acuerdo administrativo de destino de inmuebles
federales con excepción de las áreas de la zona federal marítimo terrestre y de los
terrenos ganados al mar, en cuyo caso la emisión del acuerdo respectivo
corresponderá a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales. …

Artículo 119.- Tanto en el macizo continental como en las islas que integran el
territorio nacional, la zona federal marítimo terrestre se determinará:
I.- Cuando la costa presente playas, la zona federal marítimo terrestre estará
constituida por la faja de veinte metros de ancho de tierra firme, transitable y contigua
a dichas playas o, en su caso, a las riberas de los ríos, desde la desembocadura de
éstos en el mar, hasta cien metros río arriba; …
A la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales corresponderá el deslinde y
delimitación de la zona federal marítimo terrestre.

Artículo 120.- El Ejecutivo Federal, a través de la Secretaría de Medio Ambiente y


Recursos Naturales, promoverá el uso y aprovechamiento sustentables de la zona
federal marítimo terrestre y los terrenos ganados al mar. Con este objetivo, dicha
dependencia, previamente, en coordinación con las demás que conforme a la materia
deban intervenir, establecerá las normas y políticas aplicables, considerando los
planes y programas de desarrollo urbano, el ordenamiento ecológico, la satisfacción
de los requerimientos de la navegación y el comercio marítimo, la defensa del país, el
impulso a las actividades de pesca y acuacultura, así como el fomento de las
actividades turísticas y recreativas.
El Ejecutivo Federal, a través de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos
Naturales, podrá celebrar convenios o acuerdos de coordinación con el objeto de que
los gobiernos de los estados y los municipios, en su caso, administren, conserven y
vigilen dichos bienes.

Página 15 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Dichas facultades serán ejercidas conforme a lo dispuesto en esta Ley y demás


disposiciones federales y locales aplicables, así como en aquéllas que de las mismas
deriven.
En contra de los actos que emitan los gobiernos de los estados y, en su caso, de sus
municipios, en ejercicio de las facultades que asuman de conformidad con este
precepto respecto de los particulares, procederán los recursos y medios de defensa
establecidos en la Ley Federal de Procedimiento Administrativo.

Asimismo, el Reglamento para el Uso y Aprovechamiento del Mar Territorial, Vías


Navegables, Playas, Zona Federal Marítimo Terrestre y Terrenos Ganados al Mar,
establece lo que a continuación se determina:

Artículo 22.- La Secretaría mediante el acuerdo correspondiente, destinará al servicio


de las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal, de los
gobiernos estatales o municipales, las áreas de zona federal marítimo terrestre o de
terrenos ganados al mar o a cualquier otro depósito de aguas marítimas que se
requieran usar, aprovechar o explotar.
Las dependencias o entidades de la Administración Pública Federal o de los
gobiernos de los estados o de los municipios, que para el cumplimiento de los fines
públicos a su cargo requieran se destinen a su servicio áreas de zona federal
marítimo terrestre o de terrenos ganados al mar o a cualquier otro depósito de aguas
marítimas, deberán presentar solicitud escrita a la Secretaría, precisando el área que
requieran, así como el uso, aprovechamiento o explotación que vayan a darles,
anexando croquis de localización de las mismas, así como los proyectos y planos de
las obras a ejecutarse y demás requisitos que conforme a las leyes y reglamentos
sean necesarios.

Artículo 23.- Las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal, o


los gobiernos de los estados o los municipios que cubran los requisitos previstos en la
ley y el Reglamento, tendrán preferencia frente a los particulares para usar,
aprovechar o explotar la zona federal marítimo terrestre, terrenos ganados al mar o a
cualquier otro depósito de aguas marítimas.
Cuando las áreas requeridas para fines públicos se encuentren concesionadas o
permisionadas, la Secretaría de estimar procedentes las causas que aduzcan los
solicitantes, podrá expedir la declaratoria de rescate o revocar el permiso, conforme a
lo dispuesto por la Ley.

Disposiciones legales que se encuentra desconociendo la Autoridad Responsable


al emitir una Orden de Inspección para la verificación del cumplimiento de
obligaciones en materia de impacto ambiental, cuando las actividades que se
pretenden inspeccionar se localizan en bienes nacionales que están bajo la
administración del Gobierno Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco, por lo que,
cualquier determinación administrativa se encuentra supeditada a las decisiones
que la Autoridad identificada como Tercero Interesado tenga interés de formalizar
conforme las disposiciones legales vigentes en la materia; lo que significa que, la
Autoridad Responsable se encuentra afectando nuestros derechos fundamentales,
desde el momento que ordena la realización de una visita de inspección en
materia de impacto ambiental, para verificar la situación jurídica de la ramada que
nos encontramos ocupando, cuando sabe previamente o por lo menos debería de
saberlo, que se localiza en bienes nacionales cuya administración se encuentra
cedida en DESTINO al Gobierno Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco, por lo que,
como ocupantes de buena fe en la que nos encontramos desde el año de 1993, no
podemos realizar los trámites que se nos requieren por la Autoridad Demandada,
en virtud de que los usos y destinos del bien nacional de que se trata, dependen
de las determinaciones que al respecto establezca con las suscritas el Gobierno
Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco.

Página 16 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Motivo por el cual, solicitamos de ese Honorable Juzgado Federal que se nos
otorgue el Amparo y la Protección de la Justicia de la Unión, para el efecto de que
no se impida la ocupación de la ramada que tenemos desde el año de 1993, en
los bienes nacionales otorgados en DESTINO al Gobierno Municipal de Puerto
Vallarta, Jalisco, hasta en tanto se coordinan las Autoridades Responsables y el
Gobierno Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco, para determinar los mecanismos
legales y técnicos a los que habremos de sujetarnos para regularizar conforme a
las normas vigentes en materia de impacto ambiental la ocupación de la ramada
inspeccionada por las Autoridades Responsables.

SEGUNDO. Son evidentes las violaciones en las que incurren las Autoridades
Responsables, identificada como Ordenadora y las identificadas como Ejecutoras,
y que lesionan gravemente nuestros derechos fundamentales y afectan
directamente nuestro patrimonio y bienes, con motivo de la responsabilidad civil
objetiva en la que incurren, debido a las inconsistencias legales y técnicas con las
que fue ordenada y ejecutada la medida de seguridad consistente en la clausura
total temporal de la ramada que nos encontramos ocupando en los bienes
nacionales que se encuentran bajo DESTINO, en favor del Gobierno Municipal de
Puerto Vallarta, Jalisco, lo anterior es así, en virtud de que las Autoridades
Responsables, identificadas como Ordenadora y Ejecutoras, para la imposición de
la medida de seguridad de referencia, debían de tomar muy en cuenta las
disposiciones legales que regulan este tipo de actos administrativos, a fin de evitar
a todas luces la generación de las incuestionables debilidades de forma y fondo en
las que dolosamente incurrió el personal de inspección habilitado para el
levantamiento del Acta de Inspección de referencia y que finalmente determinó la
imposición de la Clausura Total temporal de la ramada que nos encontramos
ocupando, al haberse emitido dicho acto administrativo en contundente
contravención de lo previsto por el artículo 170 fracción I de la Ley General del
Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, que a la letra determina lo
siguiente:

Artículo 170.- Cuando exista riesgo inminente de desequilibrio ecológico, o de daño o


deterioro grave a los recursos naturales, casos de contaminación con repercusiones
peligrosas para los ecosistemas, sus componentes o para la salud pública, la
Secretaría, fundada y motivadamente, podrá ordenar alguna o algunas de las
siguientes medidas de seguridad:
I. La clausura temporal, parcial o total de las fuentes contaminantes, así como de las
instalaciones en que se manejen o almacenen especímenes, productos o
subproductos de especies de flora o de fauna silvestre, recursos forestales, o se
desarrollen las actividades que den lugar a los supuestos a que se refiere el primer
párrafo de este artículo. …

De donde puntualmente puede observarse que la imposición de una medida de


seguridad en materia de impacto ambiental, se encuentra supeditada a que las
Autoridades Responsables identificadas como Ejecutoras, acrediten objetivamente
que durante el levantamiento del Acta de Inspección de que se trata,
efectivamente constataron hechos u omisiones suficientes y probados que
demuestran que existe riesgo inminente de desequilibrio ecológico, o de daño o
deterioro grave a los recursos naturales, casos de contaminación con
repercusiones peligrosas para los ecosistemas, sus componentes o para la salud
pública; situación que por supuesto en la especie no existen, ni han existido, ni
mucho menos fueron debidamente circunstanciadas por las Autoridades
Responsables identificadas como Ejecutoras, toda vez que LA AUSENCIA DE

Página 17 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

UNA AUTORIZACIÓN EN MATERIA DE EVALUACIÓN DEL IMPACTO


AMBIENTAL PARA LA OCUPACIÓN DE UNA RAMADA QUE SE ENCUENTRA
INSTALADA DESDE EL AÑO DE 1993 EN LOS BIENES NACIONALES QUE
FUERON INSPECCIONADOS, NO CONLLEVA POR SÍ SOLO QUE SE
PRESUMA QUE EXISTA RIESGO INMINENTE DE DESEQUILIBRIO
ECOLÓGICO, O DE DAÑO O DETERIORO GRAVE A LOS RECURSOS
NATURALES, CASOS DE CONTAMINACIÓN CON REPERCUSIONES
PELIGROSAS PARA LOS ECOSISTEMAS, SUS COMPONENTES O PARA LA
SALUD PÚBLICA, como absurda, exageradamente y sin motivación alguna se
encuentran determinado las Autoridades Responsables.

En efecto, la determinación para imponer la clausura total temporal emitida dentro


de Acta de Inspección de que se trata, con lo que se impide la ocupación de la
ramada de que se trata, sin que, en algún momento se haya fundado ni motivado
debidamente la circunstanciación de hechos que justifiquen la imposición de la
medida de seguridad consistente en la clausura de referencia, es una flagrante
violación de nuestros derechos humanos contenidos en los artículos 5º, 14 y 16
Constitucionales, así como los numerales 8º y 25 de la Convención Americana de
Derechos Humanos, al haberse decretado la clausura de la ocupación de la
ramada que se encuentra en los bienes nacionales, dentro de un procedimiento
administrativo que se encuentra plagado de ilegalidades e inconsistencias
jurídicas, lo que nos priva de cualquier oportunidad para defendernos, motivo por
lo que se torna arbitraria e ilegal, además que no existe motivo jurídico y técnico
válido que justifique dicha clausura, máxime que no se está ejecutando obra de
construcción alguna (tal y como se desprende de la propia Acta de Inspección), ni
existe peligro inminente para los ecosistemas. En efecto, del texto del Acta de
Inspección de que se trata, con relación al ecosistema existente en el sitio,
únicamente puede leerse lo que a continuación se detalla:

De donde puede apreciarse que no existe cargo ambiental alguno atribuible a las
suscritas, que justifique la imposición de la medida de seguridad en los términos
en que fue realizado por las Autoridades Responsables.

Por tal motivo, resulta procedente el presente juicio de garantías promovido tanto
en contra de la Orden de Inspección mencionada con antelación como el
levantamiento del Acta de Inspección de referencia y la ilegal determinación de la
imposición de la clausura decretada y ejecutada por parte de las Autoridades
señaladas como Responsables, ya que los Actos Reclamados, de manera
Página 18 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

unilateral, afectan la esfera legal de las suscritas, al privarnos de la ocupación de


la ramada que desde el año de 1993 se encuentra instalada en los bienes
nacionales de que se trata, toda vez que, la clausura decretada en el Acta de
Inspección número PFPA/21.3/2C.27.5/012-16, de fecha 10 de febrero de 2016,
encuadra dentro de la categoría de actos de trámite o instrumentales, ya que no
pone fin a la vía administrativa, en la cual, las suscritas quejosas estamos siendo
afectadas, toda vez que en relación con aquella, se actualiza el régimen
excepcional basado en la afectación a derechos sustantivos (entre los que
también ya se encuentran los denominado derechos adjetivos o difusos), de modo
irreparable, previstos en las fracciones III, Inciso b) y V del artículo 107 de la Ley
de Amparo, aplicables al supuesto contenido en la fracción II de dicho numeral,
porque producen como efecto la disminución del derecho legítimo de ejercicio y
operación de una ocupación de bienes nacionales que las quejosas ejercíamos
sobre el lugar clausurado, así como de nuestro derecho a la libertad de trabajo
que desarrollamos en el sitio inspeccionado y, además, guarda independencia del
procedimiento administrativo, ya que sus consecuencias se consumen
irreparablemente al realizarse, sin que puedan analizarse en la resolución
definitiva o resarcirse en otro momento; por tanto, contra la imposición de la
medida de seguridad de que se trata, procede el juicio de amparo indirecto.

Al respecto, cobra aplicación la jurisprudencia a que se refiere el numeral 114 de


la anterior Ley de Amparo, que hoy es el artículo 107, cuyo rubro y texto dicen:

Época: Décima Época


Registro: 2000511
Instancia: Segunda Sala
Tipo de Tesis: Jurisprudencia
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Libro VII, abril de 2012, Tomo 2
Materia(s): Común
Tesis: 2ª./.J.22/2012 (10ª)
Página: 1104
CLAUSURA PROVISIONAL DICTADA EN UN PROCEDIMEINTO
ADMINISTRATIVO SEGUIDO EN FORMA DE JUICIO. LA RESOLUCIÓN
INTERMEDIA QUE LA DECRETA COMO MEDIDA DE SEGURIDAD O
PREVENTIVA, CONSTITUYE UN ACTO DE IMPOSIBLE REPARACIÓN
IMPUGNABLE A TRAVÉS DEL JUICIO DE AMPARO INDIRECTO. La clausura
provisiona decretada como medida de seguridad o preventiva en un procedimiento
administrativo seguido en forma de juicio encuadra dentro de la categoría de actos de
trámite o instrumentales, ya que no pone fin a la vía administrativa; sin embargo, en
relación con aquélla, se actualiza el régimen excepcional basado en la afectación a
derechos sustantivos de modo irreparable previsto en la fracción IV del artículo 114
de la Ley de Amparo, aplicable al supuesto contenido en la fracción II de dicho
numeral, porque produce como efecto la disminución del derecho de posesión que el
sujeto al procedimiento y presunto infractor ejerce sobre el lugar clausurado, así como
de su derecho a la libertad de trabajo, industria o comercio que desarrolla dentro de
ese sitio, y además, guarda independencia del procedimiento administrativo, ya que
sus consecuencias se consuman irreparablemente al realizarse, sin que puedan
analizarse en la resolución definitiva o resarcirse en otro momento. Por tanto, contra
la resolución de que se trata procede el juicio de amparo indirecto.
Contradicción de tesis 483/2011. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal
Colegiado en Materia Administrativa del Tercer Circuito y el Segundo Tribunal
Colegiado en Materia Administrativa del Cuarto Circuito. 8 de febrero de 2012. Cinco
votos. Ponente: Sergio A. Valls Hernández. Secretario: José Álvaro Vargas Ornelas.
Tesis de jurisprudencia 22/2012 (10a.). Aprobada por la Segunda Sala de este Alto
Tribunal, en sesión privada del veintidós de febrero de dos mil doce.

Época: Novena Época


Registro: 170474

Página 19 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Instancia: Segunda Sala


Jurisprudencia
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXVII, enero de 2008
Materia(s): Administrativa
Tesis: 2ª./.J.4/2008
Página: 434
ORDEN DE VISITA DOMICILIARIA. AL VIOLAR DERECHOS SUSTANTIVOS NO
SE CONSUMA DE MANERA IRREPARABLE PARA EFECTOS DEL AMPARO.
Conforme al artículo 16 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos,
la facultad de control y fiscalización del Estado para verificar el cumplimiento de las
obligaciones fiscales a cargo de los contribuyentes se lleva a través de un
procedimiento administrativo, que se inicia con la orden de visita y concluye con su
calificación en la que, en su caso, puede señalarse la existencia de incumplimiento a
las disposiciones, leyes o reglamentos aplicables y, como consecuencia, la
determinación de un crédito a cargo del visitado, o la imposición de sanciones; es por
ello que el ejercicio de esa facultad no puede ser arbitrario, pues con la visita,
originada con la orden, la autoridad hacendaria puede exigir al gobernado que exhiba
libros y papeles indispensables para comprobar que ha acatado las disposiciones
fiscales, lo que no sólo causa molestia en el domicilio, sino también a la persona, a la
familia, a los papeles o a las posesiones de ésta. Así, la orden de visita no puede
desligarse del desarrollo de ésta, pues es la que le da origen y fundamento, de ahí
que no sea factible sostener su autonomía frente al procedimiento de visita, al ser
aquélla el acto que le da inicio. Ahora bien, en aplicación de la tesis 2a. CCVIII/2001
de la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, publicada con el
rubro: "ORDEN DE VISITA DOMICILIARIA. PROCEDE EN SU CONTRA EL JUICIO
DE AMPARO INDIRECTO, POR SER UN ACTO QUE AFECTA EN FORMA
DIRECTA E INMEDIATA DERECHOS SUSTANTIVOS DEL GOBERNADO
CONSAGRADOS EN LA CONSTITUCIÓN FEDERAL.", la mencionada orden debe
satisfacer requisitos constitucionales insoslayables, por lo que su sola emisión puede
causar perjuicios jurídicos al particular si se emite al margen de éstos, transgrediendo
en forma directa, inmediata y definitiva derechos sustantivos, de tal suerte que una
vez iniciada la visita domiciliaria no puede considerarse como irreparablemente
consumada la orden respectiva para efectos del amparo, en términos del artículo 73,
fracción IX, de la ley de la materia, sea que se agote en uno o varios actos y siempre
que se impugne dentro de los términos legales, en virtud de que es imposible admitir
que ese acto que pudiera afectar directamente derechos sustantivos, tuviera que
soportarlo el gobernado hasta la conclusión de la visita, no obstante su manifiesta
inconstitucionalidad, pues por más que una eventual concesión del amparo respecto
de la resolución que determinara un crédito fiscal en contra del gobernado, por vicios
en la orden relativa, diera lugar a dejar sin efecto la liquidación o, incluso,
insubsistente todo el procedimiento de fiscalización, sería imborrable la huella dejada
en la esfera jurídica de aquél por la práctica de la visita, particularmente la invasión de
su domicilio por autoridad incompetente, la molestia a la persona, familia, papeles o
posesiones, o por virtud de un mandamiento sin fundamentación ni motivación, y la
restricción de sus derechos de disposición de los bienes, papeles o posesiones y
demás derechos relacionados con la inspección. Luego, de no existir el mandamiento
o de no reunir los requisitos exigidos, el procedimiento no debe iniciarse ni
sustanciarse, y si se lleva adelante, no producirá efecto alguno.
Contradicción de tesis 75/2007-SS. Entre las sustentadas por los Tribunales
Colegiados Primero y Segundo, ambos en Materias Administrativa y Civil del Décimo
Noveno Circuito. 23 de mayo de 2007. Mayoría de cuatro votos. Disidente: Sergio
Salvador Aguirre Anguiano. Ponente: José Fernando Franco González Salas.
Secretario: Óscar Rodríguez Álvarez.
Tesis de jurisprudencia 4/2008. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal,
en sesión privada del nueve de enero de dos mil ocho.
Nota:
La tesis 2a. CCVIII/2001 citada, aparece publicada en el Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XIV, octubre de 2001, página 435.
Esta tesis fue objeto de la denuncia relativa a la contradicción de tesis 1/2008-PL, de
la que derivó la tesis jurisprudencial P./J. 2/2012 (10a.) de rubro: "ORDEN DE VISITA
DOMICILIARIA. PUEDE SER IMPUGNADA EN AMPARO CON MOTIVO DE SU
DICTADO O, POSTERIORMENTE, EN VIRTUD DE QUE SUS EFECTOS NO SE
CONSUMAN IRREPARABLEMENTE AL PROLONGARSE DURANTE EL

Página 20 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

DESARROLLO DE LA DILIGENCIA RESPECTIVA AL TRASCENDER A LA


RESOLUCIÓN QUE DERIVE DEL PROCEDIMIENTO DE FISCALIZACIÓN."

Registro: 188561
Instancia: Segunda Sala
Tesis: Aislada
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XIV, octubre de 2001
Materia(s): Administrativa
Tesis: 2ª.CCVIII/2001
Página: 435
ORDEN DE VISITA DOMICILIARIA. PROCEDE EN SU CONTRA EL JUICIO DE
AMPARO INDIRECTO, POR SER UN ACTO QUE AFECTA EN FORMA DIRECTA E
INMEDIATA DERECHOS SUSTANTIVOS DEL GOBERNADO CONSAGRADOS EN
LA CONSTITUCIÓN FEDERAL. De una interpretación sistemática de lo dispuesto en
los artículos 42, fracciones III y V, 43, 44, 45, 46, 46-A, 47 y 63 del Código Fiscal de la
Federación, se advierte, por un lado, que uno de los medios con que cuenta la
autoridad fiscal para comprobar el cumplimiento de las disposiciones fiscales es la
visita domiciliaria, la cual debe ordenarse a través de mandamiento escrito que
satisfaga determinados requisitos constitucionales y legales, e inicia con la asistencia
de los visitadores designados en el lugar y fecha señalados, y termina con el
levantamiento de un acta final, en la que los auditores asientan los hechos u
omisiones que conocieron, la que al igual que las actas parciales que hayan
elaborado, son analizadas y calificadas con posterioridad por la Secretaría de
Hacienda y Crédito Público para, en su caso, determinar un crédito fiscal y, por otro,
que por la serie de actos concatenados con que esa visita se desarrolla, implica un
procedimiento, siendo la orden el acto que le da sustento, y de no existir el
mandamiento o de no reunir los requisitos exigidos, aquél no debe iniciarse ni
sustanciarse, y si se lleva a cabo no producirá efecto alguno en contra del visitado e,
incluso, podría dar lugar al fincamiento de responsabilidad para la autoridad que lo
practique. En estas condiciones, resulta evidente que la orden de visita domiciliaria,
como acto de autoridad que causa molestias al particular, es susceptible de afectar
en forma directa e inmediata sus derechos sustantivos consagrados en la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, como lo es, entre otros, el de
la inviolabilidad de su domicilio previsto en el artículo 16 de ese Ordenamiento
Supremo, por lo que puede ser impugnado a través del juicio de amparo indirecto en
términos de lo dispuesto en el artículo 114, fracción II, párrafo primero, de la Ley de
Amparo.
Amparo en revisión 2509/98. Mandujano y Mendoza, S.A. de C.V. 27 de octubre de
2000. Unanimidad de cuatro votos. Ausente: Sergio Salvador Aguirre Anguiano.
Ponente: Juan Díaz Romero. Secretario: Armando Cortés Galván.

De igual forma es procedente el presente concepto de violación, debido a que las


Responsables claramente violan nuestros derechos humanos consistentes en la
certidumbre, certeza jurídica y debido proceso, ya que, si bien es cierto se giró una
Orden de Inspección con el propósito de verificar el cumplimiento de obligaciones
en materia de impacto ambiental y, en su caso, ejecutar una clausura si existieran
motivos suficientes que así lo acreditaran, también lo es que, del contenido del
Acta de Inspección número PFPA/21.3/2C.27.5/012-16, de fecha 10 de febrero de
2016, ese Honorable Juzgado Federal podrá constatar que nunca se acreditaron
los motivos que justifican la imposición de la medida de seguridad de referencia,
por lo que, desconocemos cuales son las circunstancias por los que las
Autoridades Responsables identificadas como Ejecutoras, determinaron llevar a
cabo la clausura total temporal de la ramada, la cual se encuentra instalada en los
bienes nacionales inspeccionados, desde el año de 1993, siendo entonces el
Juicio de Amparo, nuestra única opción para impugnar tan arbitrarios y abusivos
actos de autoridad que nos causan un agravio personal y directo.

Por otra parte, deviene ilegal la Orden de Inspección número


PFPA/21.3/2C.27.5/012(16)00297, de fecha 08 de febrero de 2016, y por
Página 21 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

consiguiente también son contrarios a derecho los actos de ejecución efectuados


por los inspectores Responsables dentro del Acta de Inspección aludida con
antelación, en virtud de que, del texto de la Orden de Inspección se desprende
que los inspectores comisionados tenían la facultad expresa y delegada para
imponer alguna de las medidas de seguridad previstas en el artículo 170 de la
legislación sustantiva, como lo es la clausura total temporal de la ramada; sin
embargo, tal facultad se encuentra limitada y regulada dentro del propio orden
legal, esto es, únicamente para el caso de que, durante la inspección, se
determine que existe riesgo inminente de daño o deterioro grave de los
ecosistemas, por ende, no puede justificarse la imposición de medida de
seguridad alguna para otro caso diverso a los expresamente contemplados en la
Orden de Inspección, como en el caso resulta la ausencia de autorización en
materia de impacto ambiental para la ocupación de la ramada.

Aunado a lo anterior, ese Honorable Juzgado Federal debe constatar que la propia
Orden de Inspección se contradice con lo antes referido, en razón que el objeto de
la visita radica precisamente en lo siguiente:

Siendo que del contenido del Acta de Inspección aludida, no se desprende ningún
elemento que justifique el proceder de las Autoridades Responsables, esto es, la
existencia de elementos objetivos, tangibles y probados que justifiquen la
imposición de una medida de seguridad como lo es la clausura total temporal de la
ramada que estamos ocupando, ya que la ausencia de una autorización en la
materia, resulta insuficiente para esos concisos efectos, lo que provoca
incertidumbre y ambigüedad respecto del cumplimiento del objeto de la inspección
y el alcance esperado con el mismo, situación que constituye una clara
transgresión a las fracciones II, V y VIII del artículo 3º de la Ley Federal del
Procedimiento Administrativo, lo que transcendió a la ejecución del acto
administrativo que se ilustra con el contenido del Acta de Inspección aludida, al
permitir una actuación claramente irregular de los inspectores Responsables, que
sin contar con elementos objetivos y peor aún, sin contar con previa autorización
ni facultades expresas previstas en la legislación aplicable, para imponer medidas
de seguridad en los ecosistemas costeros ubicados en zona federal marítimo
terrestre, determinaron con base en una simple omisión administrativa, la
existencia de las condiciones previstas en la norma sustantiva para justificar lo
determinado en la ilegal Orden de Inspección, olvidando que nos encontramos en
un régimen de facultades expresas y limitadas para las autoridades, donde solo
pueden actuar en el marco de la Ley o, en el caso concreto, lo que la Orden de
Inspección expresamente les autoriza hacer, de ahí que, si la Orden de Inspección
facultó a los inspectores para imponer medidas de seguridad solamente SÍ
DURANTE LA PRÁCTICA DE LA INSPECCIÓN, SE DETERMINA QUE EXISTE
RIESGO INMINENTE DE DAÑO O DETERIORO GRAVE DE LOS
ECOSISTEMAS, es evidente que solamente en esas circunstancias, podrían verse
legitimados para imponer la clausura, por tanto, al haber ejecutado la Orden de
molestia e impuesto la medida de seguridad, de la forma en que lo hacen, es
decir, en una ramada que se ubica en bienes nacionales que se encuentran
administrados por la Autoridad Tercero Interesado, sin considerar tal circunstancia

Página 22 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

en la fundamentación y motivación de la actuación, pero además, sin que del Acta


de Inspección se desprendan las causas o razones por las cuales se determinaron
que durante la inspección se constató la existencia de un riesgo inminente de
daño o deterioro grave de los ecosistemas, es inconcuso que las actuaciones de
las Autoridades Responsables resultan ilegales, contraviniendo los requisitos
exigidos por el artículo 170 párrafo primero y fracción I y 170 Bis de la Ley General
del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, al no haber observado las
reglas contenidas en el artículo 56 del Reglamento de la Ley General del Equilibrio
Ecológico y la Protección al Ambiente en Materia de Evaluación del Impacto
Ambiental, que obligan a la autoridad a fundar y motivar las medidas de seguridad
que impongan y apreciar las condiciones y plazos de las mismas, lo que no
tampoco aconteció

Efectivamente, como podrá constatar ese Honorable Juzgado Federal del


contenido de las constancias que en calidad de pruebas se exhiben, las
Autoridades Responsables identificadas como Ejecutoras, en ningún momento
establecieron las acciones a las que debía de sujetarse el levantamiento de la
medida de seguridad, no los plazos para realizarlas, toda vez que lo asentado en
el Acta de Inspección en ese sentido, resulta por demás contradictorio y hasta
cuestionable, ya que como puede leerse, los Inspectores actuantes determinaron
lo siguiente:

De donde puntualmente puede observarse que fatídicamente se condiciona el


levantamiento de la medida de seguridad impuesta, al cumplimiento de una
obligación que deviene, por un lado, improcedente, ya que no es posible efectuar
el trámite de evaluación del impacto ambiental de obras y actividades ya
existentes, por tratarse de un medio de regulación preventivo y, por el otro, resulta
contradictorio, en virtud de que si los propios Inspectores reconocen que a través
de una exención en materia de evaluación del impacto ambiental es posible
regularizar la ocupación de la ramada, entonces porque determinan
subjetivamente que existe riesgo inminente de desequilibrio ecológico o daño a los
recursos naturales.

En efecto, basta la lectura simple que se realice del Acta de Inspección, para
constatar que, en momento alguno se precisaron los motivos o razones por los
cuales se determinó la existencia de algún hecho o acto se pudiera considerar
como de riesgo inminente de daño o deterioro grave a los ecosistemas o la salud
de la población, mucho menos que ello se verificara en el ecosistema costero
inspeccionado, sino por el contrario, los inspectores se limitaron a ejecutar de
manera autómata y arbitraria la ilegal Orden de Inspección, imponiendo la
clausura total temporal, sin dar mayor razonamiento que lo contenido en la propia
Orden de Inspección y la descripción que hicieron de la ramada y el ecosistema
colindante, extralimitándose en sus facultades conferidas en el acto de molestia,
ya que no basta que la orden de molestia haya expresado que los inspectores
Página 23 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

tuvieran autorización de imponer una clausura, sino que es necesario llevar a cabo
la valoración de las circunstancias de hecho y de derecho para determinar la
viabilidad de la clausura y colocación de sellos, sin reconocer la legalidad de la
Orden, ya que como se dijo, carecen de facultades los inspectores para adoptar
estas medidas, en virtud de que solo por disposición legal, las autoridades pueden
obrar en consecuencia y si quien signó la Orden de Inspección, restringió las
facultades de los inspectores a los bienes nacionales, entonces ninguna
sustentación jurídica se encuentra de tales actuaciones para investir de funciones
y facultades diversas a los inspectores, para que adopten las medidas de
seguridad, aún de carácter precautorio, toda vez que los hechos que fueron
circunstanciados son ambiguos y dejan de considerar las particularidades en las
que se encuentran los bienes nacionales donde se localiza la ramada
inspeccionada e ilegalmente clausurada, por lo cual, los inspectores reo carecían
de facultades legales y competencia para decretar e imponer la medida de
seguridad consistente en la clausura total temporal de la ramada que nos
encontramos ocupando, situación que se hizo manifiesta al momento de cerrar el
Acta de Inspección, lo que no fue obstáculo para clausurar la ocupación de la
ramada, afectando con ello nuestros derechos fundamentales. Apoyan los
argumentos de las suscritas las siguientes Tesis de Jurisprudencia que a la letra
determinan lo siguiente:

EQUILIBRIO ECOLÓGICO Y PROTECCIÓN AL AMBIENTE. EL ARTÍCULO 170,


FRACCIÓN I, DE LA LEY GENERAL RELATIVA, QUE FACULTA A LA
AUTORIDAD ADMINISTRATIVA PARA IMPONER UNA CLAUSURA TEMPORAL,
PARCIAL O TOTAL, NO TRANSGREDE LAS GARANTÍAS DE LEGALIDAD Y
SEGURIDAD JURÍDICA CONTENIDAS EN EL ARTÍCULO 16 CONSTITUCIONAL.
La potestad concedida a la Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y
Pesca, en el referido precepto, para ordenar la clausura temporal, total o parcial, de
fuentes contaminantes, así como de las instalaciones en que se manejen o
almacenen especímenes, productos o subproductos de especies de flora o de fauna
silvestre y recursos forestales o se desarrollen actividades que impliquen un riesgo
inminente de desequilibrio ecológico, de daño o deterioro grave de los recursos
naturales o de contaminación con repercusiones peligrosas para los ecosistemas, sus
componentes o para la salud pública, no transgrede las garantías de legalidad y
seguridad jurídica, consagradas en el artículo 16 de la Constitución Federal. Ello es
así, porque el precepto impugnado no genera incertidumbre a los gobernados ni
permite actuaciones arbitrarias de la autoridad, ya que las circunstancias que dan
origen a la imposición de la clausura temporal, total o parcial, se encuentran definidas
en la propia Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente,
específicamente en su artículo 3o., donde se precisan los conceptos de
contaminación, desequilibrio ecológico, ecosistema y recurso natural, parámetros que
acotan el ejercicio de esa facultad discrecional, cuya finalidad es la preservación y
restauración del equilibrio ecológico, así como la protección al ambiente en el
territorio nacional. Además, el hecho de que en el artículo combatido se conceda a la
autoridad administrativa un margen de discrecionalidad para determinar el riesgo,
daño o deterioro graves y las repercusiones peligrosas que producen las actividades
de los particulares, y con base en ello la procedencia de una clausura total o parcial,
no significa que se permita la arbitrariedad, pues su actuación siempre se encuentra
sujeta a los requisitos de fundamentación y motivación.
Amparo en revisión 3002/98. Campamento Activo Potrero Redondo, S.A. de C.V. 15
de febrero de 2000. Unanimidad de nueve votos. Ausentes: José de Jesús Gudiño
Pelayo y Juan N. Silva Meza. Ponente: José de Jesús Gudiño Pelayo; en su ausencia
hizo suyo el proyecto Sergio Salvador Aguirre Anguiano. Secretaria: Andrea Nava
Fernández del Campo.
El Tribunal Pleno, en su sesión privada celebrada hoy veintinueve de mayo en curso,
aprobó, con el número LXXXV/2000, la tesis aislada que antecede; y determinó que
la votación es idónea para integrar tesis jurisprudencial. México, Distrito Federal, a
veintinueve de mayo de dos mil.

Página 24 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

CLAUSURA. SERA LEGAL LA DECRETADA EN CONTRA DE UNA OBRA EN


CONSTRUCCION, SI PREVIAMENTE SE ACREDITO SU PELIGROSIDAD O SE
DIO OPORTUNIDAD AL AFECTADO DE SER OIDO. Si la autoridad considera que
una construcción pone en peligro los bienes, la integridad física o la vida de terceras
personas, podrá ordenar la clausura de la obra; sin embargo, previamente a su
ejecución, deberá recabar un dictamen por medio del cual se advierta la peligrosidad
de la edificación o en su caso seguir un procedimiento en el que se dé oportunidad al
propietario o poseedor de ser oído; de lo contrario la clausura resultará contraria a las
garantías consagradas en los artículos14 y 16 constitucionales.
CUARTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA ADMINISTRATIVA DEL PRIMER
CIRCUITO.
Amparo en revisión 914/96. Enrique Abrego Nava. 30 de abril de 1996. Unanimidad
de votos. Ponente: David Delgadillo Guerrero. Secretario: Ramón E. García
Rodríguez.

En efecto, la propia legislación sustantiva determina lo siguiente:

Contaminación: La presencia en el ambiente de uno o más contaminantes o de


cualquier combinación de ellos que cause desequilibrio ecológico.

Contaminante: Toda materia o energía en cualesquiera de sus estados físicos y


formas, que al incorporarse o actuar en la atmósfera, agua, suelo, flora, fauna o
cualquier elemento natural, altere o modifique su composición y condición natural.

Contingencia ambiental: Situación de riesgo, derivada de actividades humanas o


fenómenos naturales, que puede poner en peligro la integridad de uno o varios
ecosistemas.

Desequilibrio ecológico: La alteración de las relaciones de interdependencia entre


los elementos naturales que conforman el ambiente, que afecta negativamente la
existencia, transformación y desarrollo del hombre y demás seres vivos.

Impacto ambiental: Modificación del ambiente ocasionada por la acción del hombre
o de la naturaleza.

Por lo que, al no existir del Acta de Inspección aludida elemento circunstancial


alguno que acredite fehacientemente la presencia en el ambiente de uno o más
contaminantes o de cualquier combinación de ellos que cause desequilibrio
ecológico, o la presencia de cualquier materia o energía, que al incorporarse o
actuar en la atmósfera, agua, suelo, flora, fauna o cualquier elemento natural,
altere o modifique su composición y condición natural, o una situación de riesgo,
derivada de actividades humanas o fenómenos naturales, que puede poner en
peligro la integridad de uno o varios ecosistemas o la alteración de las relaciones
de interdependencia entre los elementos naturales que conforman el ambiente,
que afecta negativamente la existencia, transformación y desarrollo del hombre y
demás seres vivos o la modificación del ambiente ocasionada por la acción del
hombre o de la naturaleza que ponga en riesgo inminente el ecosistema donde su
ubica la ramada de referencia, evidentemente NO EXISTEN ELEMENTOS
SUFICIENTES PARA ACREDITAR DEBIDAMENTE LA MOTIVACIÓN DE LA
MEDIDA DE SEGUDIDAD IMPUESTA POR LAS AUTORIDADES
RESPONSABLES.

Motivo por el cual, solicitamos de ese Honorable Juzgado Federal que se nos
otorgue el Amparo y la Protección de la Justicia de la Unión, para el efecto de que
no se impida la ocupación de la ramada que se localiza en el sitio inspeccionado
desde el año de 1993, considerando que se trata de bienes nacionales otorgados
en DESTINO al Gobierno Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco, hasta en tanto se
coordinan las Autoridades Responsables y el Gobierno Municipal de Puerto
Vallarta, Jalisco, para determinar los mecanismos legales y técnicos a los que

Página 25 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

habremos de sujetarnos para regularizar, conforme a las normas vigentes, la


ocupación de la ramada inspección y de acuerdo a las disposiciones vigentes que
regulan la evaluación del impacto ambiental.

TERCERO. Causa serios agravios a las suscritas el hecho de que el personal de


inspección de la Delegación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente
en el estado de Jalisco, haya realizado diligencia de inspección el 10 de febrero de
2016, levantándose Acta de Inspección aludida con antelación, la cual resulta
ilegal en todo su contexto, en razón de que viola los principios de legalidad y
seguridad jurídica de las suscritas, toda vez que, los inspectores actuantes no
determinaron conforme a los artículos reglamentarios previstos en los artículos 3°
y 4° del Reglamento para el Uso y Aprovechamiento del Mar Territorial, Vías
Navegables, Playas, Zona Federal Marítimo Terrestre y Terrenos Ganados al Mar,
que constataron que se trababa de una ramada localizada en Zona Federal
Marítimo Terrestre y Terrenos Ganados al Mar, como se determinó puntualmente
tanto en el lugar de inspección como en el objeto establecidos en la multicitada
Orden de Inspección, así como en lo referente a las personas físicas o entidad
pública a la que se debió de dirigir dicho acto de molestia, tal y como ha quedado
precisado en líneas anteriores, para estar en condiciones de suponer, constatar,
asegurar o inclusive determinar que la ramada en la que se realizó la visita de
inspección se localiza la zona federal marítimo terrestre y terrenos ganados al
mar.

En efecto, del contenido del Acta de Inspección ya mencionada en líneas


anteriores, se puede constatar que, resulta evidente que las Autoridades
Responsables identificadas como Ejecutoras, tampoco determinaron de manera
correcta la zona federal marítimo terrestre y los supuestos terrenos ganados al
mar, ya que los inspectores comisionados no utilizaron ningún método científico ni
tecnológico, ni mucho menos contaban con información o documentación oficial
alguna con la que pudieran precisar que efectivamente la ramada inspeccionada
se localiza en bienes nacionales, ya sea zona federal marítimo terrestre o terrenos
ganados al mar o ambos.

Lo anterior es así en virtud de que del contenido del Acta de Inspección aludida
únicamente se desprende lo siguiente en ese sentido:

De donde se puede apreciar que sin ningún documento, fundado y motivado,


conforme las disposiciones que determinan el procedimiento de medición de la
zona federal marítimo terrestre y los terrenos ganados al mar, las Autoridades
Responsables identificadas como Ejecutoras, dieron por hecho que la ramada se
encuentra localizada en bienes nacionales, circunstancia que por supuesto afecta
nuestros derechos fundamentales, toda vez que, en ningún momento se midieron
los veinte metros desde la pleamar más alta hacia adentro (tierra firme), nunca se

Página 26 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

tomó en cuenta cual era la pleamar máxima (de lo más húmedo de la marea), y de
ahí hacia tierra firme, nunca se determinó lo que son los terrenos ganados al mar,
dada las características del lugar donde se encuentra la ramada; aún,
considerando que los inspectores actuantes dieron constancia de la existencia de
vegetación de manglar, la que por supuesto no nos encontrábamos afectando de
ninguna manera.

Lo anterior, considerando que ante la ausencia de método alguno para establecer


que efectivamente se cumple lo determinado en la Orden de Inspección, en el
sentido de que el lugar a inspeccionar se encuentra tanto en zona federal marítimo
terrestre como terrenos ganados al mar, constituye una violación inminente a los
principios de seguridad jurídica y legalidad, toda vez que el acto de molestia no se
ajustó a lo previsto en los artículos 3° y 4° del Reglamento de la Ley en la materia
anteriormente referido, porque, si bien los inspectores consideraron de facto que la
ramada se encontraba en bienes nacionales, también lo es que nunca hacen
alusión alguna a circunstancia tecnológica o científica determinada que permita
demostrar que durante la inspección, constataron que la pleamar máxima
existente y medible durante treinta días consecutivos en una época del año en que
no se presenten huracanes, ciclones o vientos de gran intensidad y sea
técnicamente propicia para realizar los trabajos de delimitación, permita hacer
constar que efectivamente se trata de una ramada localizada en la zona federal y
terrenos ganados al mar, como alude la Orden de Inspección de forma precisa y
con antelación; además, es importante mencionar que nunca se tomó en cuenta la
necesidad de delimitar la zona federal marítimo terrestre, esto es, de
circunstanciar si se trataba de un área que en un plano horizontal presenten un
ángulo de inclinación de treinta o menos grados, ni se refirieron si se trataba de un
frente de costa que tuviera playa o si presentaba formaciones rocosas o
acantilados, siempre y cuando la inclinación en dicha franja no fuese de treinta
grados o menor en forma continua.

Los inspectores actuantes, una vez que supuestamente determinaron que se


encontraban en la zona federal marítimo terrestre y los terrenos ganados al mar de
la playa Boca de Tomates en el Municipio de Puerto Vallarta, Jalisco, nunca se
preocuparon por acreditar durante la diligencia como es que se cercioraron o
constataron que efectivamente se encontraban en la zona federal marítimo
terrestre y terrenos ganados al mar, como asegura la Orden de Inspección
aludida, lo que es ilegal, en virtud de que no existe disposición jurídica que así lo
establezca y elemento de juicio en el que se hayan respaldado las Autoridades
Responsables y, por consiguiente, que justifiquen su proceder, para que se les
permita obrar y actuar en dichas circunstancias, en virtud que tal conducta viola el
principio de legalidad que debe regir la actuación de la Administración Pública
Federal, siendo las Autoridades Responsables los primeros obligados en respetar
la Ley, por lo que, si el artículo 3° Reglamentario, estatuye que la zona federal
marítimo terrestre se deslindará y delimitará considerando la cota de pleamar
máxima observada durante treinta días consecutivos en una época del año en que
no se presenten huracanes, ciclones o vientos de gran intensidad y sea
técnicamente propicia para realizar los trabajos de delimitación, es evidente que el
personal de inspección de las Autoridad Responsable, al momento de iniciar un
acto de molestia en el que asegurar de facto que se localizan en zona federal
marítimo terrestre y terrenos ganados al mar, deben de acreditar cuales fueron los
elementos científicos y tecnológicos o documentos oficiales emitidos por autoridad
competente, con los que se apoyaron para delimitar la zona federal marítimo
terrestre y los terrenos ganados al mar, a que hace alusión tanto la Orden de

Página 27 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Inspección como en Acta de Inspección cuestionadas, para dar certidumbre a las


suscritas y demostrar fehacientemente que la inspección se realizó en dichos
bienes nacionales, lo que estaban obligadas las Autoridades Responsables para
acatar dicho mandato de Ley.

Por ende, resulta absurdo y hasta ilegal que la Delegación de la Procuraduría


Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco, soporte su actuación
en una Orden de Inspección que desde su emisión determina de facto que se trata
de zona federal marítimo terrestre y terrenos ganados al mar, sin soportar
mediante elementos alguno como fue que constataron tal hecho y, en su caso,
como fue que no consideraron que se trata de bienes nacionales que se cedieron
en DESTINO al Gobierno Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco, a partir del
Acuerdo que fue publicado en el Diario Oficial de la Federación el 29 de abril de
2010, para tomar en cuenta tal consideración al momento de plantear las
obligaciones en materia de impacto ambiental que la ramada que ocupamos debe
de cumplir.

En efecto, al efectuarse los actos administrativos cuestionados, sin cumplir con lo


señalado en los artículos anteriormente referidos y suponer que en nada se afecta
nuestros derechos fundamentales, que no se haya observado durante treinta días
consecutivos en una época del año la superficie en estudio para determinar si se
estaba o no en un terreno con la denominación de “Zona Federal Marítimo
Terrestre” o “Terrenos Ganados al Mar”, tal y como lo marca el Reglamento
invocado con anterioridad, los actos administrativos, al afirmar de facto que se
trata de dichos supuestos, equivale a decir que no importa que no se respete la
Ley para tomar dichas determinaciones, lo que por supuesto deviene ilegal a todas
luces.

Motivo por el que, debe resultar para ese Honorable Juzgado Federal más que
evidente, el hecho de que deviene ilegal el desahogo de la visita de inspección
realizada el pasado 10 de febrero de 2016, en la ramada que nos encontramos
ocupando, ya que no se cumple con lo previsto en los artículos 3° y 4° del citado
Reglamento, además de que, de dicha Orden de Inspección y Acta de Inspección,
no se desprenden elementos legales, científicos, tecnológicos o circunstanciales
que acrediten que los inspectores actuantes cuentan con los conocimientos
técnicos o la experiencia suficiente para poder asegurar con certidumbre que se
trata de bienes nacionales, sin necesidad de realizar medición o establecer
referencia oficial alguna al respecto, lo anterior, tomando en cuenta que de tales
documentos no se advierte que los servidores públicos que desarrollaron la
diligencia se hayan ostentando con dichas capacidades, en virtud de que solo
hicieron referencia a su identificación como inspectores, y no como técnicos en
topografía o técnicos especialistas, para determinar de facto que efectivamente se
encontraban en terrenos considerados como zona federal marítimo terrestre y
terrenos ganados al mar.

Cobran sentido legal los anteriores argumentos, al tenor de lo dispuesto por los
artículos 3º y 4º del Reglamento para el Uso y Aprovechamiento del Mar
Territorial, Vías Navegables, Playas, Zona Federal Marítimo Terrestre y Terrenos
Ganados al Mar, que puntualmente establecen lo siguiente:

Artículo 3.- La zona federal marítimo terrestre se deslindará y delimitará


considerando la cota de pleamar máxima observada durante treinta días consecutivos

Página 28 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

en una época del año en que no se presenten huracanes, ciclones o vientos de gran
intensidad y sea técnicamente propicia para realizar los trabajos de delimitación.

Artículo 4.- La zona federal marítimo terrestre se determinará únicamente en áreas


que en un plano horizontal presenten un ángulo de inclinación de 30 grados o menos.
Tratándose de costas que carezcan de playas y presenten formaciones rocosas o
acantilados, la Secretaría determinará la zona federal marítimo terrestre dentro de
una faja de 20 metros contigua al litoral marino, únicamente cuando la inclinación de
dicha faja sea de 30 grados o menor en forma continua.
En el caso de los ríos, la zona federal marítimo terrestre se determinará por la
Secretaría desde la desembocadura de éstos en el mar hasta el punto río arriba
donde llegue el mayor flujo anual, lo que no excederá en ningún caso los doscientos
metros.

En efecto, en el Acta de Inspección de fecha 10 de febrero de 2016, se advierte


que los inspectores federales asentaron que para la geo-referenciación de las
coordenadas se utilizó lo siguiente:

Lo que hace evidente que nunca se efectuaron actos tendientes a determinar la


zona federal marítimo terrestre, tomando en cuenta la pleamar máxima,
únicamente se tomaron lecturas de la ubicación geográfica de las diferentes áreas
que conforman la ramada, por lo que, ante la ausencia de método alguna
empleado para determinar que el lugar objeto de la inspección se trataba de una
zona federal marítimo terrestre y terrenos ganados al mar, no cumplió con los
requisitos que establecen los artículos 3° y 4° del Reglamento para el Uso y
Aprovechamiento del Mar Territorial, Vías Navegables, Playas, Zona Federal
Marítimo Terrestre y Terrenos Ganados al Mar.

Lo anterior, porque de facto se determinó que se trataba de tales bienes


nacionales, sin tomar en consideración documento oficial alguno o realizar
mecanismo de medición legal y técnico permitido conforme a la Ley, ya que sólo
tomó en consideración la ubicación de la ramada durante el desarrollo de la visita
de inspección, no obstante que los citados preceptos reglamentarios establecen
que la zona federal marítimo terrestre se deslindará y determinará considerando la
cota de pleamar máxima observada durante treinta días consecutivos en una
época del año en que no se presenten huracanes, ciclones o vientos de gran
intensidad y sea técnicamente propicia para realizar los trabajos de delimitación;
que la zona federal marítimo terrestre se determinará únicamente en áreas que en
un plano horizontal presenten un ángulo de inclinación de treinta grados o menos;
tratándose de costas que carezcan de playas y presenten formaciones rocosas o
acantilados, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales determinará la
zona federal marítimo terrestre dentro de una faja de veinte metros continua al
litoral marino, únicamente cuando la inclinación de dicha faja sea de treinta grados
o menor en forma continua. Consecuentemente, al no advertirse del Acta de
Inspección que se hayan acatado los requisitos que prevén los referidos preceptos
reglamentarios para deslindar, delimitar y determinar que efectivamente el acto de
molestia se efectuó en terrenos considerados como zona federal marítimo
terrestre y terrenos ganados al mar, como lo determina previamente la Orden de
Inspección de que se trata, es evidente que la circunstanciación del Acta de
Inspección no es suficiente, como lo pretende sostener de facto el personal de
inspección de la Delegación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente
Página 29 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

en el estado de Jalisco, en la referida Acta de Inspección, para determinar que


conforme los conocimientos en la materia de los inspectores federales y los
equipos o medios electrónicos empleados durante la inspección para determinar la
ubicación geográfica de la ramada, se encontraban en zona federal marítimo
terrestre y terrenos ganados al mar, como lo asegura la Orden de Inspección de
forma previa, toda vez que para llevar a cabo una visita de inspección a fin de
verificar si las obras o actividades objetos de la misma, están sujetos a la
evaluación del impacto ambiental, al encontrarse en una zona federal marítimo
terrestre y, por ende, solicitar a su ocupante la autorización correspondiente en
materia de impacto ambiental, es necesario que con anterioridad se haya
efectuado el deslinde, delimitación y determinación de dicha zona federal y no que
ello se determine de facto en el momento mismo de la diligencia de inspección,
como en el caso ocurrió, dejándonos en total estado de indefensión.

Por otra parte, con base en los artículos 10, 14 y 15 de dicho Reglamento, que
establecen que para considerar que una superficie pueda ser determinada
jurídicamente como zona federal marítimo terrestre o terrenos ganados al mar,
debe existir un trabajo de deslinde previo, realizado por la Secretaría de Medio
Ambiente y Recursos Naturales, deslinde con el cual se integra el catálogo e
inventario zona federal marítimo terrestre, terrenos ganados al mar o cualquier
otro depósito de aguas marítimas, es por simple lógica jurídica determinar que, sí
resultan aplicables los artículos 3° y 4° del citado Reglamento en la legalidad del
desahogo de la inspección de que se trata, toda vez que la propia Autoridad
Responsable identificada como Ordenadora, al momento de emitir la Orden de
Inspección, determinó y aseguro que la visita de inspección se realizará en la zona
federal marítimo terrestre y terrenos ganados al mar señalados en el preámbulo
del documento, en tal sentido, resulta debidamente fundado nuestro argumento en
el presente concepto de violación, ya que, los artículos 10, 14 y 15 del Reglamento
para el Uso y Aprovechamiento del Mar Territorial, Vías Navegables, Playas, Zona
Federal Marítimo Terrestre y Ganados al Mar, a la letra establecen lo siguiente:

Artículo 10.- El gobierno federal a través de la Secretaría, establecerá las bases de


coordinación para el uso, desarrollo, administración y delimitación de las playas, de la
zona federal marítimo terrestre, terrenos ganados al mar, o a cualquier otro depósito
que se forme con aguas marítimas, solicitando al efecto la participación de los
gobiernos estatales y municipales, sin perjuicio de las atribuciones que este
Reglamento otorga a la Secretaría de Comunicaciones y Transpones y otras
dependencias competentes. Cuando por la naturaleza del proyecto se haga necesaria
la obtención de más de una concesión, permiso o autorización que corresponda
otorgar a la Secretaría, ésta instrumentará los mecanismos que permitan que su
estudio, trámite y resolución se realicen de manera conjunta. Si para la realización del
proyecto se requiere el otorgamiento de concesiones, permisos o autorizaciones
además de por la Secretaría, por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes u
otra dependencia, se deberá establecer la coordinación necesaria a fin de facilitar su
resolución simultánea.

Artículo 14.- Corresponde a la Secretaría realizar, mantener y actualizar los trabajos


técnicos necesarios para el levantamiento topográfico, deslinde y amojonamiento de
la zona federal marítimo terrestre y de los terrenos ganados al mar o a cualquier otro
depósito de aguas marítimas.

Artículo 15.- Con base en los trabajos a que se refiere el artículo anterior, la
Secretaría integrará el catálogo e inventario de la zona federal marítimo terrestre,
terrenos ganados al mar o cualquier otro depósito de aguas marítimas.

De los referidos numerales se advierte que el Gobierno Federal, a través de la


Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, establecerá las bases de
Página 30 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

coordinación para el uso, desarrollo, administración y delimitación de las playas,


de la zona federal marítimo terrestre, terrenos ganados al mar, o de cualquier otro
depósito que se forme con aguas marítimas, solicitando al efecto la participación
de los gobiernos estatales y municipales, sin perjuicio de las atribuciones que tal
Reglamento se otorgan a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y otras
dependencias competentes; que corresponde a la Secretaría realizar, mantener y
actualizar los trabajos técnicos necesarios para el levantamiento topográfico,
deslinde y amojonamiento de la zona federal marítimo terrestre y de los terrenos
ganados al mar o a cualquier otro depósito de aguas marítimas; y que con base
en los referidos trabajos, la Secretaría integrará el catálogo e inventario de la zona
federal marítimo terrestre, terrenos ganados al mar o cualquier otro depósito de
aguas marítimas.

Por lo anterior, resulta más que evidente que, llevar a cabo una visita de
inspección para verificar el cumplimiento de obligaciones en materia de impacto
ambiental de obras y actividades que se localizan en la zona federal marítimo
terrestre y terrenos ganados al mar, es indispensable que las Autoridades
Responsables cuenten con los elementos de juicio y de valor suficientes, que
permitan otorgar certidumbre jurídica y técnica al gobernado, respecto de cómo
fue que se determinó que la ramada inspeccionada se encontraba en terrenos
que constituyen zona federal marítimo terrestre y terrenos ganados al mar, desde
el momento en que se emitió la Orden de Inspección, a fin de dar certeza jurídica
y legalidad al actuar de los inspectores habilitados para esos concisos efectos, ya
que resulta ilógico inspeccionar terrenos que no se han delimitado previamente
con estas características.

Motivo por el cual, solicitamos de ese Honorable Juzgado Federal que se nos
otorgue el Amparo y la Protección de la Justicia de la Unión, para el efecto de que
no se impida la ocupación de la ramada que existe desde el año de 1993, en los
bienes nacionales otorgados en DESTINO al Gobierno Municipal de Puerto
Vallarta, Jalisco, hasta en tanto se coordinan la Autoridad Responsable y el
Gobierno Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco, para determinar los mecanismos
legales y técnicos a los que habremos de sujetarnos para regularizar, conforme a
las normas vigentes, la ocupación de la ramada en materia de evaluación del
impacto ambiental, contrario a lo absurda, contradictorio e imposible de realizar,
conforme lo ordenado por las Autoridades Responsables.

Comprobamos lo antes expuesto con las siguientes:

PRUEBAS

1. DOCUMENTAL PÚBLICA. Consistente en el original de la Orden de Inspección


número PFPA/21.3/2C.27.5/012(16)00297, de fecha 08 de febrero de 2016,
emitida por la Delegada de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente en
el estado de Jalisco.

2. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consiste en el original del Acta de Inspección


número PFPA/21.3/2C.27.5/012-16, de fecha 10 de febrero de 2016.

Página 31 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Documentos con los cuales acreditamos la existencia de los principales Actos


Reclamados en la presente demanda.

3. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en la copia simple del Acta de


Defunción número 415, Libro 3, Oficialía 01, de fecha 20 de mayo de 2012, del
Municipio de Puerto Vallarta Jalisco, a nombre de Eduardo Chávez Enríquez.

4. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en el original del Acta de Nacimiento


número 174, Libro 1, Oficialía 02, del año 1982, del Municipio de Puerto Vallarta
Jalisco, a nombre de María Zenaida Chávez López.

5. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en la copia certificada del Recibo de


Licencia Anual número 12518, de fecha 24 de abril de 2009, emitido por la
Hacienda Municipal del Honorable Ayuntamiento de Puerto Vallarta, Jalisco.

6. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en la copia simple del Recibo de


Licencia Anual número 128345, de fecha 08 de mayo de 2006, emitido por la
Hacienda Municipal del Honorable Ayuntamiento de Puerto Vallarta, Jalisco.

7. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en la copia simple del Recibo de


Licencia Anual número 081314, de fecha 27 de abril de 2004, emitido por la
Hacienda Municipal del Honorable Ayuntamiento de Puerto Vallarta, Jalisco.

9. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en la copia simple del Recibo de


Licencia Anual número 097909 de fecha 09 de mayo de 2003, emitido por la
Hacienda Municipal del Honorable Ayuntamiento de Puerto Vallarta, Jalisco.

10. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en el original del Oficio Número A-31,


Expediente número 100-19/993, de fecha 31 de marzo de 1993, en el cual se
concede Autorización para la Operación de Venta de Cerveza acompañada con
los Alimentos, emitido por el Presidente Municipal del Honorable Ayuntamiento de
Puerto Vallarta, Jalisco.

Documentos con cuales acreditamos nuestro interés legítimo, con relación a la


ocupación de la ramada que desde el año de 1993 tiene nuestra familia, primero
bajo el interés jurídico de nuestro difunto Padre.

11. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en el original del Oficio número DEL-


JUN-064/2010, expediente UNICO, de fecha 17 de marzo de 2010, por medio del
cual el Delegado Municipal del Honorable Ayuntamiento de Puerto Vallarta,
Jalisco, certifica que Eduardo Chávez Enríquez, es propietario de la ramada
conocida como “EDUARDO’S” y quien tiene el giro de Restaurante con Venta de
Mariscos y Cerveza Destapada, en Playa Boca de Tomates, por más de 20 años.

12. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en el original de la Constancia de


Identificación, Oficio No DEL-JUN-099/2011, de fecha 26 de septiembre de 2011,
emitida por el Delegado Municipal del Honorable Ayuntamiento de Puerto Vallarta,
Jalisco, en favor del señor Eduardo Chávez Enríquez.

13. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en el original de la Constancia de


fecha 28 de octubre de 2011, emitido por el Presidente, Secretario, Tesorero y
Presidente del Consejo de Vigilancia, respectivamente, del Comisariado Ejidal del
Ejido Las Juntas, del Municipio de Puerto Vallarta, Jalisco.

Página 32 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Documentos con los cuales acreditamos el interés jurídico que en su momento


ostentó nuestro Padre, con relación a la ocupación de la ramada de referencia, así
como nuestro interés legítimo de la actual ocupación que tenemos de la misma.

14. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en el original del Memorándum de


Pago de fecha 19 de marzo de 2010, emitido por Dirección de Planeación Urbana
del Honorable Ayuntamiento de Puerto Vallarta, Jalisco.

Documento con el cual demostramos la congruencia del uso del suelo de la


ramada que ocupamos, con las disposiciones en materia de desarrollo urbano
aplicables al Municipio de Puerto Vallarta, Jalisco.

15. DOCUMENTAL PÚBLICA. Consistente en el original de la Orden de


Inspección número PFPA/21.3/2C.27.4/045(15)012806, de fecha 23 de diciembre
de 2015, emitido por la Delegada de la Procuraduría Federal de Protección al
Ambiente en el Estado de Jalisco.

16. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consiste en el original del Acta de Inspección


número PFPA/21.3/2C.27.4/045-15, de fecha 29 de diciembre de 2015.

Documentos con los cuales acreditamos plenamente que las Autoridades


Responsables ya tenían de forma previa, pleno conocimiento de la ocupación que
tenemos de la ramada inspeccionada.

17. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en la copia simple del Acuerdo por el


que se destina al Servicio del Honorable Ayuntamiento Constitucional de Puerto
Vallarta, la superficie de 39.378.94 metros cuadrados de Zona Federal Marítimo
Terrestre, ubicado en kilómetro 4.0 de la carretera al aeropuerto de Puerto
Vallarta, frente a la playa de Boca de Tomates, Municipio de Puerto Vallarta,
Estado de Jalisco, emitido mediante el Diario Oficial de la Federación el 29 de abril
de 2010.

Documento con el cual demostramos la imposibilidad jurídica en la que nos


encontramos con relación a la regulación de la ocupación de la ramada en materia
de impacto ambiental, al encontrarse ubicada en bienes nacionales que fueron
DESTINADOS al Gobierno Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco; situación jurídica
que indebidamente pasa por alto la Autoridad Responsable identificada como
Ordenadora.

18. DOCUMENTAL PRIVADA: Consiste en el original del Acuse del escrito


presentado en la Oficialía de Partes del Honorable Ayuntamiento Constitucional de
Puerto Vallarta, de fecha 09 de junio de 2010, por el que, en su momento solicita a
la Autoridad Tercero Interesado, su determinación respecto de la ocupación de la
ramada inspeccionada.

19. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consiste en la copia simple del Oficio número


PMPVR/2259/2010, de fecha 26 de junio de 2010, emitido por el Presidente
Municipal y Síndico Municipal del Honorable Ayuntamiento Constitucional de
Puerto Vallarta, Jalisco, dirigido al Jefe de la Unidad de Ecosistemas y Ambientes
Costeros de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

Página 33 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

20. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consiste en la copia simple del Oficio número


SGPA-DGZFMTAC-6169/10, de fecha 05 de noviembre de 2010, emitido por el
Director General de Zona Federal Marítimo Terrestre y Ambientes Costeros de la
Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

Documentos con los cuales se acredita que tanto el Gobierno Municipal de Puerto
Vallarta, Jalisco, como la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales,
reconocen la existencia de la ramada que nos encontramos ocupando y la
necesidad de establecer un mecanismo de regularización de las mismas, en
términos de las disposiciones aplicables vigentes.

21. DOCUMENTAL PRIVADA: Consiste en la copia simple del Memorándum


descriptivo, de la Solicitud de Concesión, emitido por el Arquitecto Felipe de Jesús
D´Parra, a nombre de María Zenaida Chávez López del mes de febrero de 2016.

Documento con el cual demostramos el inicio de los documentos técnicos


necesarios para regularizar la ocupación de la ramada de referencia.

22. TECNOLÓGICA: Consiste en las impresiones en blanco y negro de las


fotografías de la ramada inspeccionada.

23. DOCUMENTAL PRIVADA: Consiste en la copia simple del Plano de la


delimitación de la zona federal marítimo terrestre de la ramada inspeccionada.

24. DOCUMENTAL PRIVADA: Consiste en el original del Acuse del escrito


presentado en Oficialía de Partes Honorable Ayuntamiento Constitucional de
Puerto Vallarta, de fecha 11 de febrero de 2015, con motivo de la situación actual
que prevalece respecto de la ocupación de la ramada inspeccionada y clausurada.

25. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en la copia simple del Oficio número


067/00/RU-LP18/RG-0215-10, del Expediente número 1758-10, relacionado con el
Dictamen de Uso del Suelo, emitido por la Dirección de Planeación Urbana del
Honorable Ayuntamiento de Puerto Vallarta, Jalisco, de fecha 25 de marzo de
2010.

Documento con el cual demostramos la congruencia de la ramada con los usos


del suelo establecidos para la zona de que se trata.

26. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en la copia simple de la Identificación


Oficial de la suscrita, María Zenaida Chávez López, con número de folio
0514050101474 emitido por el Instituto Federal Electoral en el año 2013.

27. DOCUMENTAL PÚBLICA: Consistente en la copia simple de la Clave Única


de Registro de Población (CURP), a nombre de María Zenaida Chávez López, con
número de Folio 078344380, Clave: CALZ821011MJCHPN00, de fecha 18 de
enero de 2001.

28. PRESUNCIONAL. En sus dos aspectos, LEGALES Y HUMANOS, en todo lo


que nos favorezca.

29. INSTRUMENTAL DE ACTUACIONES. Consistente en todas las actuaciones


que conformen el presente Juicio de Amparo, en todo lo que nos beneficien.

Página 34 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

30. CONFESIONAL FICTA. Consistente en las aceptaciones que realicen las


Autoridades Responsables a través de la rendición de sus Informes Previos y
Justificados.

Ante usted C. Juez de Distrito, atentamente le formulamos el siguiente:

CAPITULO DE SUSPENSIÓN

Conforme a lo dispuesto en los artículos 125, 128, todas sus fracciones, 131, 132,
136, 138, todas sus fracciones, 139 y demás relativos de la Ley de Amparo,
solicitamos se nos otorgue la suspensión oficiosa de los actos reclamados, para el
efecto de que las Autoridades Responsables suspendan o dejen sin efectos la
medida de seguridad consistente en la clausura total temporal de la ramada, para
el efecto de que se nos permita su ocupación, hasta en tanto se resuelve en el
fondo el presente juicio de garantías, toda vez que, con su proceder se
contravienen las disposiciones anteriormente referidas de nuestra Carta Magna,
así como las disposiciones de la Ley General de Equilibrio Ecológico y la
Protección al Ambiente y su Reglamento en Materia de Evaluación del Impacto
Ambiental, la Ley General de Bienes Nacionales y el Reglamento para el Uso y
Aprovechamiento del Mar Territorial, Vías Navegables, Playas, Zona Federal
Marítimo Terrestre y Terrenos Ganados al Mar, así como la Ley Federal del
Procedimiento Administrativo, de aplicación supletoria a las anteriores, afectando
con ello de forma irreversible el patrimonio e intereses de las suscritas, así como
los derechos de ocupación de la ramada que desde 1993 ostenta nuestra familia,
en virtud de que, de continuar los efectos de la medida de seguridad impuesta de
forma ilegal por las Autoridades Responsables, se causarán daños y afectaciones
irreversibles o de difícil reparación a las suscritas y nuestros bienes, por lo que,
dicha suspensión deberá de surtir efectos hasta que se dicte la sentencia de fondo
en el presente juicio de garantías. Robustece lo anterior la siguiente Tesis emitida
por los Tribunales Colegiados de Circuito, misma que a la letra establece:

Registro No. 221885


Localización:
Octava Época
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Fuente: Semanario Judicial de la Federación
VIII, septiembre de 1991
Página: 91
Tesis Aislada
Materia(s): Común
ACTOS FUTUROS, INMINENTES Y CIERTOS, SUSPENSION DEFINITIVA
PROCEDENTE.
Incurre en un error el juez de Distrito al negar la suspensión definitiva solicitada
apoyándose en que los actos reclamados "tienen el carácter de consumados" si no
advierte que existen otros actos que se reclaman y que son futuros, inminentes y
ciertos.
TRIBUNAL COLEGIADO DEL VIGESIMO CIRCUITO
Incidente en revisión 555/90. Miguel E. Selvas Costa. 14 de febrero de 1991.
Unanimidad de votos. Ponente: Ángel Suárez Torres. Secretario: Casto Ambrosio
Domínguez Bermúdez.

Es de estimarse que, de la suspensión provisional oficiosa y en su caso la


definitiva de los Actos Reclamados, se desprende la contraposición de dos

Página 35 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

grandes derechos públicos, como son el ejercicio de atribuciones y facultades para


el otorgamiento de permisos, concesiones, autorizaciones o licencias para la
realización y ejecución de cualquier tipo de obra o actividad pública o privada,
instalación de infraestructura, proyecto o construcción en materia de impacto
ambiental, y los de seguridad jurídica, debido proceso y ocupación lícita de bienes
nacionales, de donde se puede determinar que, si bien es cierto, ambos derechos
son prioritarios en el desarrollo nacional, también es cierto que dichos derechos
tienen un orden de exclusión, es decir, no se puede otorgar el derecho para la
realización de cualquier actividad, en los bienes nacionales, sin la anuencia de
quien administra dicho bien, como en el presente caso resulta ser el Gobierno
Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco, con lo cual se están violando gravemente los
derechos fundamentales de las suscritas, como ocupantes de buena fe,
pacíficamente y sin desconocimiento de la Autoridad identificada como Tercera
Interesada, responsable de la administración de los bienes nacionales donde se
encuentra la ramada que tenemos en ocupación; aunado a que, de seguirse
permitiendo a las Autoridades Responsables la imposición de medidas de
seguridad sin cumplir con los mínimos requisitos de legalidad, no se estará
garantizando que en la realización de tales actos administrativos, se esté actuando
con el más fiel apego a las disposiciones legales que regulan tales supuestos, de
tal suerte que, al ordenarse de forma oficiosa la suspensión provisional y en su
caso la definitiva, no se causa daño o perjuicio alguno en contra de la colectividad
o persona alguna, y sin embargo, de no suspenderse la posible continuación de
los actos reclamados, al estar los mismos mal planeados o emitidos en
contravención a las disposiciones legales anteriormente referidas, con su
ejecución se causarán graves y mayores daños a las que aquí nos encontramos
compareciendo, mismos que podrían resultar totalmente irreversibles; aunado a
que las Autoridades Responsables estarían obligadas a demostrar la legalidad de
sus decisiones y la medida de seguridad impuesta o, en su defecto, la ejecución
de medidas para revertir las afectaciones irreversibles al patrimonio de las
suscritas y nuestros intereses. Da luz y cobra fuerza lo anterior con la siguiente
Jurisprudencia misma que a la letra establece:

Registro No. 200136


Localización:
Novena Época
Instancia: Pleno
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
III, abril de 1996
Página: 16
Tesis: P./J. 15/96
Jurisprudencia
Materia(s): Común
SUSPENSION. PARA RESOLVER SOBRE ELLA ES FACTIBLE, SIN DEJAR DE
OBSERVAR LOS REQUISITOS CONTENIDOS EN EL ARTÍCULO 124 DE LA LEY
DE AMPARO, HACER UNA APRECIACION DE CARACTER PROVISIONAL DE LA
INCONSTITUCIONALIDAD DEL ACTO RECLAMADO. La suspensión de los actos
reclamados participa de la naturaleza de una medida cautelar, cuyos presupuestos
son la apariencia del buen derecho y el peligro en la demora. El primero de ellos se
basa en un conocimiento superficial dirigido a lograr una decisión de mera
probabilidad respecto de la existencia del derecho discutido en el proceso. Dicho
requisito aplicado a la suspensión de los actos reclamados, implica que, para la
concesión de la medida, sin dejar de observar los requisitos contenidos en el artículo
124 de la Ley de Amparo, basta la comprobación de la apariencia del derecho
invocado por el quejoso, de modo tal que, según un cálculo de probabilidades, sea
posible anticipar que en la sentencia de amparo se declarará la inconstitucionalidad
del acto reclamado. Ese examen encuentra además fundamento en el artículo 107,
fracción X, constitucional, en cuanto establece que para el otorgamiento de la medida

Página 36 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

suspensional deberá tomarse en cuenta, entre otros factores, la naturaleza de la


violación alegada, lo que implica que debe atenderse al derecho que se dice violado.
Esto es, el examen de la naturaleza de la violación alegada no sólo comprende el
concepto de violación aducido por el quejoso, sino que implica también el hecho o
acto que entraña la violación, considerando sus características y su trascendencia. En
todo caso dicho análisis debe realizarse, sin prejuzgar sobre la certeza del derecho,
es decir, sobre la constitucionalidad o inconstitucionalidad de los actos reclamados,
ya que esto sólo puede determinarse en la sentencia de amparo con base en un
procedimiento más amplio y con mayor información, teniendo en cuenta siempre que
la determinación tomada en relación con la suspensión no debe influir en la sentencia
de fondo, toda vez que aquélla sólo tiene el carácter de provisional y se funda en
meras hipótesis, y no en la certeza de la existencia de las pretensiones, en el
entendido de que deberá sopesarse con los otros elementos requeridos para la
suspensión, porque si el perjuicio al interés social o al orden público es mayor a los
daños y perjuicios de difícil reparación que pueda sufrir el quejoso, deberá negarse la
suspensión solicitada, ya que la preservación del orden público o del interés de la
sociedad están por encima del interés particular afectado. Con este proceder, se evita
el exceso en el examen que realice el juzgador, el cual siempre quedará sujeto a las
reglas que rigen en materia de suspensión.
Contradicción de tesis 3/95. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados
Tercero en Materia Administrativa del Primer Circuito y Segundo del Sexto Circuito.
14 de marzo de 1996. Unanimidad de nueve votos. Ausentes: Juventino V. Castro y
Castro y Humberto Román Palacios por estar desempeñando un encargo
extraordinario. Ponente: Olga María del Carmen Sánchez Cordero de García Villegas.
Secretario: Marco Antonio Rodríguez Barajas.
El Tribunal Pleno, en su sesión privada celebrada el ocho de abril en curso, aprobó,
con el número 15/1996, la tesis de jurisprudencia que antecede. México, Distrito
Federal, a ocho de abril de mil novecientos noventa y seis.

Es importante manifestar que la suspensión resulta procedente en el caso que nos


ocupa, debido a que no va en contra del interés público, ya que, si bien es cierto la
realización de cualquier tipo de actividad, acarrea beneficios a quienes desarrollan
tal actividad, también lo es que la clausura total temporal de las mismas, no se
puede efectuar de manera caprichosa y ventajosa, sin apegarse a los derechos
fundamentales de seguridad jurídica y legalidad, así como observando plenamente
las disposiciones ambientales establecidas para esos concisos efectos, esto es,
sin contar los elementos de juicio que sustente el proceder de las Autoridades
Responsables, por tal motivo, es procedente la medida cautelar solicitada, ya que
de permitirse la continuidad de los efectos de los actos reclamados, se continuará
violando gravemente los derechos y garantías individuales de las suscritas, como
ocupantes de buena fe y con pleno conocimiento del Gobierno Municipal de
Puerto Vallarta, Jalisco, Autoridad Tercera Interesada que ostenta la
administración de los bienes nacionales donde se localiza la ramada que
ocupamos y que arbitraria e ilegalmente fue clausurada por las Autoridades
Responsables, ocasionándonos un perjuicio considerable en nuestro bienes, los
cuales serán de difícil o irreversible reparación.

Más aun, considerando que, con el otorgamiento de la medida cautelar solicitada,


no se afecta el orden público y el interés social, en virtud de que el Gobierno
Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco, Autoridad Tercera Interesada, tiene pleno
conocimiento de la ocupación de la ramada que desde el año de 1993 ostenta
nuestra familia, cuando se le otorgó a nuestro difunto Padre la autorización
respectiva para esos efectos. Y desde entonces se encuentra instalada y
habilitada para los uso que le fueron permitidos lícitamente por dicha Autoridad
Tercera Interesada, hasta el año 2010, cuando se le otorgó el DESTINO de los
bienes nacionales donde se ubica la ramada, siendo que desde entonces se han
hecho esfuerzos para regularizar las ocupaciones de las ramadas que se localizan
en la zona federal marítimo terrestre de la playa Boca de Tomates, en el Municipio
Página 37 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

de Puerto Vallarta, Jalisco; por lo que, es evidente que tales ocupaciones no se


efectúan de forma clandestina, ilegal o dolosamente, para merecer el ilegal
proceder de las Autoridades Responsables. Apoyan la presente solicitud de
suspensión de los efectos de la medida de seguridad ordenada y ejecutadas por
las Autoridades Responsables, la siguiente Tesis de Jurisprudencia que a la letra
determina lo siguiente:

SUSPENSIÓN EN EL JUICIO DE AMPARO. NO PROCEDE CONCEDERLA


CONTRA EL EJERCICIO DE LAS FACULTADES DE COMPROBACIÓN
PREVISTAS EN EL ARTÍCULO 42 DEL CÓDIGO FISCAL DE LA FEDERACIÓN. Es
improcedente conceder la suspensión solicitada contra la ejecución de los actos de
fiscalización previstos en el referido precepto legal que, en ejercicio de las facultades
de comprobación, ejerzan las autoridades fiscales, pues su finalidad es verificar que
los gobernados han cumplido con las disposiciones fiscales y, en su caso, determinar
omisiones o créditos fiscales, así como comprobar la comisión de delitos fiscales y
para proporcionar información a la autoridad hacendaria, en virtud de no satisfacerse
el requisito contemplado en la fracción II del artículo 124 de la Ley de Amparo,
consistente en que no se afecte el interés social, ni se contravengan disposiciones de
orden público. Lo anterior es así, pues la sociedad está interesada en la prosecución
y conclusión de estos procedimientos administrativos, a efecto de que el Estado
pueda hacer frente a las necesidades colectivas.
Contradicción de tesis 159/2009. Entre las sustentadas por el Décimo Quinto Tribunal
Colegiado en Materia Administrativa del Primer Circuito y el entonces Tercer Tribunal
Colegiado del Décimo Tercer Circuito, ahora Tribunal Colegiado en Materias de
Trabajo y Administrativa del mismo circuito. 3 de junio de 2009. Cinco votos. Ponente:
Sergio Salvador Aguirre Anguiano. Secretaria: Armida Buenrostro Martínez.
Tesis de jurisprudencia 84/2009. Aprobada por la Segunda Sala de ese Alto Tribunal,
en sesión privada del diez de junio de dos mil nueve.

Lo anterior, tomando en cuenta que las Autoridades Responsables, principalmente


las identificadas como Ejecutoras, prejuzgaron que su actuación se encontraba
debidamente fundada y motivada, por la sola circunstancia que tanto la Orden de
Inspección como el Acta de Inspección, mencionaban en su texto que fueron
emitidas conforme a las diversas disposiciones en la materia y permitiendo la
imposición de medidas de seguridad, sin embargo el orden público implica muchos
más aspectos que los pretendidos por las Autoridades Responsables, mismos que
dejaron de atender como era necesario; en efecto, se olvidaron del análisis
ponderando de la apariencia del buen derecho, la que ahora invocamos para que
se nos otorgue la suspensión de los actos reclamados, con la intención de que ese
Honorable Juzgado Federal, so pretexto de asegurar la legalidad y el estado de
derecho en el presente juicio de garantías, considere que la clausura total
temporal impuesta por las Autoridades Responsables identificadas como
Ejecutoras, cuya medida cautelar solicitamos para que cesen los efectos de tales
actos ilegales, obedeció a una orden indebidamente fundada y motivada, por parte
de la Autoridad Responsable identificada como Ordenadora, al estimar como
cierta previamente la existencia de una infracción administrativa, dando por hecho
que se infringieron las normas que se invocaron en los actos administrativos
impugnados, a pesar de que en la citada Acta de Inspección no se señaló
expresamente que la ocupación de la ramada clausurada causara daños al medio
ambiente o afectara el equilibrio social; lo cual, claramente resulta contrario a lo
previsto en lo dispuesto por los artículos 128 y 138 de la Ley de Amparo, en razón
de que el objetivo o fin que debe perseguirse con tal suspensión, es la de
preservar la materia del amparo, es decir, preservar los derechos afectados con
los Actos Reclamados, consistente en la ocupación de la ramada que desde el
año 1993 ostentamos en familia, y de la cual, en su momento se contaron con las
licencias municipales respectivas, lo contrario, implicaría infringir los derechos

Página 38 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

contenidos en el artículo 5º Constitucional, así como 11, apartados 1 y 2, 2.1, 25 y


26 de la Convención Americana de los Derechos Humanos, así como los artículos
2.2, 3, 6 y 11.1 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y
Culturales.

Por lo anterior, debe de concederse la suspensión provisional solicitada, para el


efecto de permitir la ocupación de la ramada, sin que ello conlleve un derecho
permanente y definitivo de posesión, ya que se deberá de regularizar ante el
Gobierno Municipal de Puerto Vallarta, Jalisco, tal ocupación de la ramada, cuya
actividad en sí misma no afectaba al equilibrio ecológico ni dañaba al medio
ambiente, ya que se trata de una ocupación de una ramada localizada en bienes
nacionales; aunando a que las Responsables no precisaron que con tal ocupación
se haya o esté causando algún daño al ecosistema, por lo que, al realizarse una
debida valoración de la apariencia del buen derecho y el peligro de la demora,
acorde con lo previsto en los artículos 128, 129 y 138 de la Ley de Amparo, debe
concluirse por ese Honorable Juzgado Federal, que procede concedernos la
suspensión de la clausura impuesta, en virtud de que, si bien conforme a lo
manifestado en la Orden de Inspección, se autorizó al personal de inspección a
imponer medidas de seguridad, ello no era suficiente para estimar que procedía la
clausura total temporal de la ocupación de la ramada de que se trata, ya que se
dejaron de considerar los aspectos relacionados con la administración de los
bienes nacionales a cargo de la Autoridad Tercera Interesada, así como la
ausencia total de debida fundamentación y motivación de la determinación de la
imposición de la medida de seguridad de referencia; en tal sentido, es evidente
que los que procede es concedernos la suspensión solicitada, de los contrario, se
infringiría el interés general y el orden social, en primer lugar, porque todas las
leyes (en sentido amplio) participan en mayor o menor medida de esas
característica, pero no toda la actuación de las Autoridades Responsables se
encuentran apegadas a ello y, en segundo lugar, en razón de que conforme a los
artículos de la Ley de Amparo antes citados, resulta imprescindible analizar los
grados de afectación a ese interés social y orden público, respecto de la distinta
naturaleza del objeto especifico de los ordenamientos, frente a la causación a las
suscritas de los daños y perjuicios de difícil reparación, de ahí que, no es
suficiente que exista una norma que prevea la clausura como medida de
seguridad, para que se nos niegue la suspensión solicitada, toda vez que es
necesario que ese Honorable Juzgado entre al estudio de la apariencia del buen
derecho, debiendo ponderar si la clausura de que se trata efectivamente se
encuentra apegada a derecho, a fin de determinar si verdaderamente la actuación
de las Responsables tienen como finalidad proteger y velar por el cumplimiento de
las normas en materia de impacto ambiental, como presumen, considerando
principalmente si su actuación se encuentra apegada a las facultades expresas
previstas en los diversos ordenamientos que regulan su actuación.

Contrario a lo estimado por las Autoridades Responsable al momento de imponer


la medida de seguridad, no se vulneraría el interés social ni el orden público,
precisamente porque su actuar encontraba sustento y justificación en el propio
ordenamiento que presumieron las Autoridades Responsables se podía vulnerar
con la ocupación de la ramada; y por esa razón, es claro que procede otorgarnos
tal medida cautelar, más aun cuando la actuación de la Responsable en la emisión
de la Orden de Inspección, era producto de una interpretación incorrecta de la Ley
General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, con relación a su
Reglamento, que la llevaron a estimar que las suscritas incurrimos en una
presunta infracción a la ley, en su concepto, al no haber tramitado la autorización

Página 39 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

de evaluación de impacto ambiental, lo que dio origen a la clausura total temporal


de la ramada. Apoya en lo conducente la siguiente referencia jurisprudencial que a
la letra estipula lo siguiente:

SUSPENSIÓN EN EL JUICIO DE AMPARO INDIRECTO. LA APARIENCIA DEL


BUEN DERECHO NO PUEDE INVOCARSE PARA NEGARLA. Para otorgar la
suspensión, sin dejar de observar los requisitos exigidos por el artículo 124 de la Ley
de Amparo, vigente hasta el 2 de abril de 2013, basta con comprobar la apariencia del
buen derecho invocado por el quejoso, de modo que sea posible anticipar que en la
sentencia de amparo se declarará la inconstitucionalidad del acto reclamado; análisis
que debe llevarse a cabo concomitantemente con el posible perjuicio que pueda
ocasionarse al interés social o la contravención a disposiciones de orden público,
acorde con la fracción II del precepto legal citado. En congruencia con lo anterior, no
puede invocarse la apariencia del buen derecho para negar la suspensión de los
actos reclamados, al considerar de manera preliminar que el acto reclamado en el
juicio de amparo es constitucional, debido a que esa aplicación no es acorde con su
naturaleza ni con la finalidad de la suspensión pues, incluso, cuando se introdujo esa
institución en la reforma constitucional de 6 de junio de 2011, se hizo para que fuera
tomada en cuenta sólo en sentido favorable, es decir, para conceder la suspensión de
los actos reclamados; además, su otorgamiento se sujeta a los requisitos
establecidos para tal efecto, sin que sea factible negarla con un análisis superficial del
acto reclamado, ya que se estaría aplicando una consecuencia no prevista en la ley,
aunado a que dicho análisis corresponde realizarlo al resolver el fondo del asunto. No
es obstáculo para arribar a esa conclusión, la circunstancia de que se lleve a cabo un
análisis similar para conceder la medida cautelar, ya que ello obedece a que
precisamente la finalidad de la suspensión es asegurar provisionalmente el derecho
cuestionado, para que la sentencia que se dicte en el proceso principal no pierda su
eficacia, sin que esa decisión se torne arbitraria, pues en todo caso deben
satisfacerse los requisitos establecidos para su otorgamiento; máxime si se toma en
cuenta que la Ley de Amparo prevé mecanismos para asegurar que las partes en
litigio no sufran un daño irreparable al otorgarse la suspensión de los actos
reclamados, aplicando la apariencia del buen derecho, lo que no podría garantizarse
al quejoso si se negara la medida cautelar aplicando esa institución en sentido
contrario y la sentencia que se dictare fuera favorable a sus intereses.
Contradicción de tesis 260/2013. Entre las sustentadas por el Primer Tribunal
Colegiado de Circuito del Centro Auxiliar de la Segunda Región, con residencia en
San Andrés Cholula, Puebla, y el Cuarto Tribunal Colegiado del Octavo Circuito,
actual Tribunal Colegiado en Materias Penal y de Trabajo del Octavo Circuito. 8 de
enero de 2014. Cinco votos de los Ministros Sergio A. Valls Hernández, Alberto Pérez
Dayán, José Fernando Franco González Salas, Margarita Beatriz Luna Ramos y Luis
María Aguilar Morales. Ponente: José Fernando Franco González Salas. Secretario:
Juan Pablo Gómez Fierro.
Tesis y/o criterios contendientes:
Tesis VIII.4o.15 K, de rubro: "SUSPENSIÓN EN EL AMPARO. SI AL ANALIZAR SU
PROCEDENCIA SE ADVIERTE LA PROBABLE CONSTITUCIONALIDAD DEL ACTO
RECLAMADO DEBE NEGARSE LA MEDIDA SOLICITADA EN APLICACIÓN,
CONTRARIO SENSU, DEL PRINCIPIO DE LA APARIENCIA DEL BUEN
DERECHO.", aprobada por el Cuarto Tribunal Colegiado del Octavo Circuito, actual
Tribunal Colegiado en Materias Penal y de Trabajo del Octavo Circuito, y publicada
en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XXI,
mayo de 2005, página 1565, y
El sustentado por el Primer Tribunal Colegiado de Circuito del Centro Auxiliar de la
Segunda Región, con residencia en San Andrés Cholula, Puebla, al resolver el
recurso de queja 94/2013.
Tesis de jurisprudencia 10/2014 (10a.). Aprobada por la Segunda Sala de este Alto
Tribunal, en sesión privada del veintidós de enero de dos mil catorce.
Nota: Por resolución del veintiocho de abril de dos mil quince, el Pleno en Materia de
Trabajo del Séptimo Circuito declaró procedente pero infundada la solicitud de
sustitución de jurisprudencia 1/2014 derivada de la solicitud de la que fue objeto el
criterio contenido en esta tesis, toda vez que estimó innecesario modificar la presente
tesis jurisprudencial al tenor de las razones expuestas en la solicitud respectiva.

Página 40 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Los anteriores planteamientos son fundados. Para evidenciar lo anterior, conviene


tener presente lo previsto por el artículo 128 de la Ley de Amparo que señala:

Artículo 128. Con excepción de los casos en que proceda de oficio, la suspensión se
decretará, en todas las materias, siempre que concurran los requisitos siguientes:
I. Que la solicite el quejoso; y
II. Que no se siga perjuicio al interés social ni se contravengan disposiciones de orden
público.
La suspensión se tramitará en incidente por separado y por duplicado.

Así, en el caso a estudio se satisface los requisitos establecidos en el artículo


antes transcrito, toda vez que, la suspensión la solicitamos las suscritas como
parte agraviada, quienes acreditamos nuestro interés suspensional y la
consecuente afectación a éste.

En términos generales, por perjuicio al interés social se entiende la ofensa que se


hace a los derechos de la colectividad y por contravención al orden público se
entiende la infracción de leyes que establezcan tales derechos a favor de la
sociedad.

La Suprema Corte de Justicia de la Nación ha establecido que se afecta el orden


público y al interés social, cuando de concederse la suspensión se prive a la
colectividad de un beneficio que le otorgan las leyes o se le infiera un daño que de
otra manera no resentiría. En este sentido es oportuno tener en cuenta que, para
otorgar la suspensión de amparo, el juzgador debe ponderar en forma simultánea
la apariencia del buen derecho, con la posible afectación que pueda ocasionarse
al orden público o al interés social con la suspensión del acto reclamado.

En relación con la apariencia del buen derecho, el Pleno de la Suprema Corte de


Justicia de la Nación sustentó la Jurisprudencia P./J. 16/96, consultable en el
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta correspondiente al mes de abril
de 1996, página 36, que dice:

SUSPENSION. PROCEDENCIA EN LOS CASOS DE CLAUSURA EJECUTADA


POR TIEMPO INDEFINIDO. El artículo 107, fracción X de la Constitución General de
la República, establece como uno de los requisitos para la procedencia de la
suspensión del acto reclamado en el amparo, el de tomar en cuenta la naturaleza de
la violación alegada; esto es, el juzgador deberá realizar un juicio de probabilidad y
verosimilitud del derecho del solicitante, que podrá cambiar al dictar la sentencia
definitiva, pues el hecho de que anticipe la probable solución de fondo del juicio
principal, es un adelanto provisional, sólo para efectos de la suspensión. Tal
anticipación es posible porque la suspensión se asemeja, en el género próximo, a las
medidas cautelares, aunque es evidente que está caracterizada por diferencias que la
perfilan de manera singular y concreta. Sin embargo, le son aplicables las reglas de
tales medidas, en lo que no se opongan a su específica naturaleza. En este aspecto
cabe señalar que son dos los extremos que hay que llenar para obtener la medida
cautelar: 1) Apariencia de buen derecho y 2) Peligro en la demora. La apariencia de la
existencia del derecho apunta a una credibilidad objetiva y seria que descarte una
pretensión manifiestamente infundada, temeraria o cuestionable, lo que se logra a
través de un conocimiento superficial, dirigido a lograr una decisión de mera
probabilidad respecto de la existencia del derecho discutido en el proceso; el peligro
en la demora consiste en la posible frustración de los derechos del pretendiente de la
medida, que puede darse como consecuencia de la tardanza en el dictado de la
resolución de fondo. En síntesis, la medida cautelar exige un preventivo cálculo de
probabilidad sobre el peligro en la dilación, que no puede separarse de otro
preventivo cálculo de probabilidad, que se hace sobre la existencia del derecho cuya
tutela se solicita a los tribunales. Consecuentemente, si toda medida cautelar
descansa en los principios de verosimilitud o apariencia del derecho y el peligro en la

Página 41 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

demora, el Juez de Distrito puede analizar esos elementos en presencia de una


clausura ejecutada por tiempo indefinido, y si la provisión cautelar, como mera
suspensión, es ineficaz, debe dictar medidas que implican no una restitución, sino un
adelanto provisional del derecho cuestionado, para resolver posteriormente, en forma
definitiva, si el acto reclamado es o no inconstitucional; así, el efecto de la suspensión
será interrumpir el estado de clausura mientras se resuelve el fondo del asunto, sin
perjuicio de que si se niega el amparo, porque la "apariencia del buen derecho" sea
equivocada, la autoridad pueda reanudar la clausura hasta su total cumplimiento. Lo
expuesto anteriormente se sustenta en la fracción X del dispositivo constitucional
citado, que establece que para conceder la suspensión deberá tomarse en cuenta la
naturaleza de la violación alegada, lo que supone la necesidad de realizar un juicio de
probabilidad y verosimilitud del derecho esgrimido, con miras a otorgar la medida
cautelar para evitar daños y perjuicios de difícil reparación al quejoso y conservar viva
la materia del juicio, si con ello no se lesionan el interés social y el orden público, lo
cual podrá resolver la sensibilidad del Juez de Distrito, ante la realidad del acto
reclamado, pues si el perjuicio al interés social o al orden público es mayor a los
daños y perjuicios de difícil reparación que pueda sufrir el quejoso, deberá negar la
suspensión solicitada, ya que la preservación del orden público y el interés de la
sociedad están por encima del interés particular afectado.
Contradicción de tesis 12/90. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados
Segundo y Tercero en Materia Administrativa del Primer Circuito. 14 de marzo de
1996. Unanimidad de nueve votos. Ausentes: Juventino V. Castro y Castro y
Humberto Román Palacios por estar desempeñando un encargo extraordinario.
Ponente: Guillermo I. Ortiz Mayagoitia. Secretaria: Angelina Hernández Hernández.
El Tribunal Pleno, en su sesión privada celebrada el ocho de abril en curso, aprobó,
con el número 16/1996, la tesis de jurisprudencia que antecede. México, Distrito
Federal, a ocho de abril de mil novecientos noventa y seis.

Asimismo, con relación a la apariencia del buen derecho, como elemento


indispensable de ponderación para la suspensión en el amparo, la Segunda Sala
del más alto Tribunal del país sostuvo la siguiente Jurisprudencia:

SUSPENSIÓN. PARA DECIDIR SOBRE SU OTORGAMIENTO EL JUZGADOR


DEBE PONDERAR SIMULTÁNEAMENTE LA APARIENCIA DEL BUEN DERECHO
CON EL PERJUICIO AL INTERÉS SOCIAL O AL ORDEN PÚBLICO. El Tribunal en
Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en la jurisprudencia P./J. 15/96,
de rubro: "SUSPENSIÓN. PARA RESOLVER SOBRE ELLA ES FACTIBLE, SIN
DEJAR DE OBSERVAR LOS REQUISITOS CONTENIDOS EN EL ARTÍCULO 124
DE LA LEY DE AMPARO, HACER UNA APRECIACIÓN DE CARÁCTER
PROVISIONAL DE LA INCONSTITUCIONALIDAD DEL ACTO RECLAMADO.",
sostuvo que para el otorgamiento de la suspensión, sin dejar de observar los
requisitos exigidos por el artículo 124 de la Ley de Amparo, basta la comprobación de
la apariencia del buen derecho invocado por el quejoso, de modo que sea posible
anticipar que en la sentencia de amparo se declarará la inconstitucionalidad del acto
reclamado, lo que deberá sopesarse con el perjuicio que pueda ocasionarse al interés
social o al orden público con la concesión de la medida, esto es, si el perjuicio al
interés social o al orden público es mayor a los daños y perjuicios de difícil reparación
que pueda sufrir el quejoso. Conforme a lo anterior, el juzgador debe realizar un
estudio simultáneo de la apariencia del buen derecho y el peligro en la demora con la
posible afectación que pueda ocasionarse al orden público o al interés social con la
suspensión del acto reclamado, supuesto contemplado en la fracción II del referido
artículo 124, estudio que debe ser concomitante al no ser posible considerar
aisladamente que un acto pudiera tener un vicio de inconstitucionalidad sin
compararlo de manera inmediata con el orden público que pueda verse afectado con
su paralización, y sin haberse satisfecho previamente los demás requisitos legales
para el otorgamiento de la medida.
Contradicción de tesis 31/2007-PL. Entre las sustentadas por los Tribunales
Colegiados Décimo Quinto en Materia Administrativa del Primer Circuito y Segundo
en Materia Civil del Séptimo Circuito. 21 de octubre de 2009. Mayoría de tres votos.
Ausente: Mariano Azuela Güitrón. Disidente: Margarita Beatriz Luna Ramos. Ponente:
Sergio Salvador Aguirre Anguiano. Secretaria: María Estela Ferrer Mac Gregor
Poisot.

Página 42 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

Tesis de jurisprudencia 204/2009. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto


Tribunal, en sesión privada del once de noviembre de dos mil nueve.
Nota: La tesis P./J. 15/96 citada, aparece publicada en el Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo III, abril de 1996, página 16.

En efecto, de continuar con la clausura de que se habla, evidentemente se


producirá a las quejosas daños y prejuicios de difícil reparación que no podrían ser
resarcidos ni aun obteniendo sentencia favorable en el juicio de garantías, ya que
esa limitación de nuestro derecho, no podría ser resarcida como consecuencia del
tiempo que trascurra para el dictado de la sentencia de fondo.

Por esos motivos, se debe de estimar que en el presente caso, se reúnen los
requisitos previstos en el artículo 107 Constitucional, 128 y 131 de la Ley de
Amparo, para el otorgamiento de la medida cautelar, con motivo de que la está
solicitando la parte quejosa y como ya se explicó, no se sigue perjuicio al interés
social ni al orden público; además que de negarse la medida cautelar se causarían
daños y perjuicios de difícil reparación a las quejosas, como lo dispone el artículo
139, primer párrafo, de la misma Ley.

Es oportuno citar las Tesis IV.3º.A.13 A, del Tercer Tribunal Colegiado en Materia
Administrativa del Cuarto Circuito que dicen:

SUSPENSIÓN PROVISIONAL EN CONTRA DE UNA CLAUSURA TEMPORAL.


PARA SU CONCESIÓN DEBE VERIFICARSE EL CUMPLIMIENTO DE LOS
REQUISITOS PREVISTOS EN EL ARTÍCULO 124 DE LA LEY DE AMPARO Y
DEMOSTRARSE LOS PRESUPUESTOS JURÍDICOS Y FÁCTICOS DE LA
APARIENCIA DEL BUEN DERECHO Y EL PELIGRO EN LA DEMORA. Tratándose
de una clausura temporal y su ejecución, dada la trascendencia y consecuencias que
conlleva en vinculación con el bien jurídico tutelado precautoriamente, es dable que
para el ejercicio de un correcto arbitrio en materia de suspensión, después de
verificarse el debido cumplimiento de los requisitos que establece el artículo 124 de la
Ley de Amparo, observar los presupuestos contenidos en la jurisprudencia P./J.
15/96, emitida por el Pleno del Máximo Tribunal de la nación, que se titula:
"SUSPENSIÓN. PARA RESOLVER SOBRE ELLA ES FACTIBLE, SIN DEJAR DE
OBSERVAR LOS REQUISITOS CONTENIDOS EN EL ARTÍCULO 124 DE LA LEY
DE AMPARO, HACER UNA APRECIACIÓN DE CARÁCTER PROVISIONAL DE LA
INCONSTITUCIONALIDAD DEL ACTO RECLAMADO.", como son, la apariencia del
buen derecho y el peligro en la demora. Ello si se toma en cuenta, como principio de
prueba, además de las manifestaciones hechas por el quejoso bajo protesta de decir
verdad y los conceptos de violación, una apreciación preventiva de tales
argumentaciones jurídicas con vista en la documental exhibida, en la que consta la
orden y ejecución de la clausura temporal, pero se omite destacar los datos que
revelen la instauración de procedimiento administrativo alguno que precediera al
dictado de la propia resolución y a las supuestas visitas de inspección que, según
aquélla, constituyen el motivo del acto de autoridad, y que presupuestarían el
otorgamiento de la garantía de audiencia. Así, resulta necesario el asomo anticipado
a la constitucionalidad del acto, sólo para efectos de la suspensión, puesto que, de
permitirse la consecución de la clausura, podría dejarse sin materia la Litis
constitucional y permitirse la actuación arbitraria de las autoridades fuera de
procedimiento legal, aspecto en el que, evidentemente, está interesada la sociedad a
fin de preservar el estado de derecho en el país.
TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA ADMINISTRATIVA DEL CUARTO
CIRCUITO.
Queja 29/2004. Bar de Max, S.A. de C.V. 26 de febrero de 2004. Unanimidad de
votos. Ponente: Jorge Meza Pérez. Secretaria: María Inocencia González Díaz
Nota: La tesis P./J. 15/96 citada, aparece publicada en el Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo III, abril de 1996, página 16.

SUSPENSION. PARA RESOLVER SOBRE ELLA ES FACTIBLE, SIN DEJAR DE


OBSERVAR LOS REQUISITOS CONTENIDOS EN EL ARTICULO 124 DE LA LEY

Página 43 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

DE AMPARO, HACER UNA APRECIACION DE CARACTER PROVISIONAL DE LA


INCONSTITUCIONALIDAD DEL ACTO RECLAMADO. La suspensión de los actos
reclamados participa de la naturaleza de una medida cautelar, cuyos presupuestos
son la apariencia del buen derecho y el peligro en la demora. El primero de ellos se
basa en un conocimiento superficial dirigido a lograr una decisión de mera
probabilidad respecto de la existencia del derecho discutido en el proceso. Dicho
requisito aplicado a la suspensión de los actos reclamados, implica que, para la
concesión de la medida, sin dejar de observar los requisitos contenidos en el artículo
124 de la Ley de Amparo, basta la comprobación de la apariencia del derecho
invocado por el quejoso, de modo tal que, según un cálculo de probabilidades, sea
posible anticipar que en la sentencia de amparo se declarará la inconstitucionalidad
del acto reclamado. Ese examen encuentra además fundamento en el artículo 107,
fracción X, constitucional, en cuanto establece que para el otorgamiento de la medida
suspensional deberá tomarse en cuenta, entre otros factores, la naturaleza de la
violación alegada, lo que implica que debe atenderse al derecho que se dice violado.
Esto es, el examen de la naturaleza de la violación alegada no sólo comprende el
concepto de violación aducido por el quejoso, sino que implica también el hecho o
acto que entraña la violación, considerando sus características y su trascendencia. En
todo caso dicho análisis debe realizarse, sin prejuzgar sobre la certeza del derecho,
es decir, sobre la constitucionalidad o inconstitucionalidad de los actos reclamados,
ya que esto sólo puede determinarse en la sentencia de amparo con base en un
procedimiento más amplio y con mayor información, teniendo en cuenta siempre que
la determinación tomada en relación con la suspensión no debe influir en la sentencia
de fondo, toda vez que aquélla sólo tiene el carácter de provisional y se funda en
meras hipótesis, y no en la certeza de la existencia de las pretensiones, en el
entendido de que deberá sopesarse con los otros elementos requeridos para la
suspensión, porque si el perjuicio al interés social o al orden público es mayor a los
daños y perjuicios de difícil reparación que pueda sufrir el quejoso, deberá negarse la
suspensión solicitada, ya que la preservación del orden público o del interés de la
sociedad están por encima del interés particular afectado. Con este proceder, se evita
el exceso en el examen que realice el juzgador, el cual siempre quedará sujeto a las
reglas que rigen en materia de suspensión.
Contradicción de tesis 3/95. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados
Tercero en Materia Administrativa del Primer Circuito y Segundo del Sexto Circuito.
14 de marzo de 1996. Unanimidad de nueve votos. Ausentes: Juventino V. Castro y
Castro y Humberto Román Palacios por estar desempeñando un encargo
extraordinario. Ponente: Olga María del Carmen Sánchez Cordero de García Villegas.
Secretario: Marco Antonio Rodríguez Barajas.
El Tribunal Pleno, en su sesión privada celebrada el ocho de abril en curso, aprobó,
con el número 15/1996, la tesis de jurisprudencia que antecede. México, Distrito
Federal, a ocho de abril de mil novecientos noventa y seis.

Para demostrar la veracidad de los argumentos anteriormente descritos, desde


estos momentos solicitamos se nos tengan ofreciendo en calidad de PRUEBAS
para la carpeta incidental que con motivo de la presente solicitud de suspensión se
inicie, las siguientes:

INSPECCIÓN OCULAR de las Documentales Públicas y Privadas que se


describen en el Capítulo de Pruebas de la presente demanda y que en su
momento se exhibieron para hacer constar los conceptos de violación que
sustentan la misma.

Para tales efectos, solicitamos se lleve a cabo la INSPECCIÓN OCULAR de


dichos documentos y se exhiban en copias debidamente certificadas por ese
Honorable Juzgado en la carpeta suspensional de que se trata.

Por lo anterior, a Usted C. Juez de Distrito respetuosamente le:

Página 44 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

PEDIMOS

PRIMERO. Se tenga por presentada y admitida la presente Demanda de Amparo,


en la cual solicitamos el Amparo y la Protección de la Justicia Federal, por actos
violatorios a nuestros derechos fundamentales, así como tener por autorizados a
los profesionistas que mencionamos en los términos del artículo 27 de la Ley de
Amparo y señalando domicilio para oír y recibir notificaciones y autorizada para
esos concisos efectos.

SEGUNDO. Se conceda de forma oficiosa a las suscritas la suspensión


provisional y, posteriormente la definitiva, respecto de los actos reclamados a las
Autoridades Responsables y se requiera a las mismas el Informe Previo
correspondiente.

TERCERO. Se admita la presente Demanda, ya que reúne todos y cada uno de


los requisitos que establece la Ley de Amparo, asimismo, se solicite a las
Autoridades Responsables sus Informes Justificados y se señale fecha para la
celebración de la Audiencia Constitucional, previo desahogo de las pruebas que
nos encontramos ofreciendo.

CUARTO. Se corra traslado de la presente demanda al Ministerio Público Federal,


en ejercicio de la representación social.

QUINTO. Se dicte sentencia en la cual se conceda a las suscritas, el Amparo y la


Protección de la Justicia Federal sobre los actos reclamados y se expida en
nuestro favor y costa, copia simple y certificada del auto en que se admita la
presente demanda y del auto que determine sobre la suspensión provisional de los
Actos Reclamados.

ATENTAMENTE

MARÍA ZENAIDA CHÁVEZ LÓPEZ MARÍA CONCEPCIÓN VERÓNICA


PLASCENCIA LÓPEZ

ACEPTAMOS EL CARGO CONFERIDO

Página 45 de 46.
María Zenaida Chávez López y María Concepción Verónica Plascencia López.
Demanda de Amparo Indirecto vs Delegación de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente en el estado de Jalisco.

LIC. JUAN PABLO ARANA SANTILLÁN


CÉDULA PROFESIONAL FEDERAL No. 5479195

LIC. CARMEN AURORA CABRERA GONZÁLEZ


CÉDULA PROFESIONAL FEDERAL No. 2441218

Página 46 de 46.

También podría gustarte