Está en la página 1de 3

Comunicación Política en la Localidad

La comunicación política es un concepto relativamente joven; el vocablo se empezó a


utilizar en la década de los cincuenta, pero sus antecedentes se manifiestan desde que el
hombre comenzó a vivir en grupo y se presentaron relaciones de poder en la
convivencia, como afirma Wolton (1998) cuando dice que es tan vieja como la política,
que nace con los primeros intercambios que los hombres tienen entre sí en la
organización, consolidación y desarrollo de la ciudad. La comunicación y la política han
sido elementos fundamentales para el desarrollo del hombre, ya que ambas han ayudado
a la organización del Estado y al desarrollo de sus potencialidades políticas, económicas
y sociales. Así, a través del tiempo, el hombre ha desarrollado la política valiéndose de
la comunicación con la finalidad de convencer e influir en los ciudadanos para la
aceptación de un modelo económico, político y social, en el cual se sigan ciertas
normas, valores y principios del sistema político imperante. De esta forma, el origen de
la relación entre comunicación y poder se encuentra a partir de los inicios del hombre y
su proceso de organización social. De hecho, ya Herodoto narraba la organización del
imperio señalando la existencia de lo que se conoce como los ojos del rey, quienes “eran
informadores independientes de la autoridad. Esta experiencia recuperada por los
romanos y por la cultura occidental es el primer testimonio sobre los mecanismos que,
para el buen gobierno de la comunidad, se empleaba a fin de conocer la opinión y las
noticias que circulaban por el territorio”
Los inicios de la comunicación política pueden encontrarse prácticamente desde la
ciudad-estado con las aportaciones de Platón y Aristóteles en los momentos gloriosos de
la retórica en las plazas públicas, pasando por la República romana y el Estado-nación,
hasta llegar a la época actual, donde aparece el término de comunicación política. Al
respecto, Wolton señala que: “tiempo atrás, muchísimos vocablos habían designado a
esa actividad dedicada al intercambio de discursos políticos, pero las más de las veces
fue recibiendo una connotación poco laudatoria, y hasta crítica, sobre todo en el siglo
xx, en que el comunismo y el nazismo identificaron comunicación política con
propaganda (1998: 28). Los primeros estudios sobre comunicación política aparecieron
en el momento en que se empezaba ya a reconocer el poder de los medios masivos de
comunicación en la influencia y manipulación de los individuos. Lasswell impulsó la
investigación sobre las posibilidades de la guerra psicológica contra Alemania en 1927;
Pakard se centró en el estudio del poder de los persuasores ocultos
Meyenberg (2018) considera que la comunicación política tiene tres protagonistas:
políticos, periodistas y opinión pública, quienes intercambian mensajes de acuerdo con
su propia visión e interpretación de la información. Por eso mismo, se manifiesta de
manera razonable la postura de la autora, debido a que la cobertura de las noticias va a
tender a reproducir las versiones e interpretaciones que se van a generar por los actores
mencionados, incluso se caracteriza por la democracia contemporánea, que se encargará
de determinar el contenido que se difunde a través de la opinión pública de los medios
de comunicación, contribuyendo a definir la agenda pública. Incluso Meyenberg (2018)
agrega la opinión pública como la expresión de lo que piensan los distintos grupos de la
sociedad, en relación con lo que sucede en el entorno que se desenvuelven. De igual
forma, la opinión pública puede ser considerada como una medida de la cual se deriven
los resultados de los diversos aspectos presentes en la vida política o los distintos
colectivos sociales sobre temas de interés. Aquí podemos tener presente temas del nivel
de gobierno, situación económica y las evaluaciones de las instituciones, definiendo
tendencias de la forma de pensar y el comportamiento de la sociedad. Incluso, los
medios
de información son el espacio donde se hace presente el resultado o movimiento de la
interacción de la comunicación política y estos mismos cuentan con la capacidad de
decidir qué información de la realidad va a convertirse en noticia, con el fin de tener un
lugar en el espacio público
La política y la comunicación son dos realidades muy vinculadas, sobre todo en las
sociedades democráticas, donde los políticos necesitan transmitir sus mensajes sobre
propuestas o sobre actuaciones a la sociedad o donde los ciudadanos plantean a través
de diferentes mecanismos sus iniciativas para la construcción de las polis. Tanto el
mensaje político como el mensaje ciudadano constituyen un tipo de mensaje persuasivo,
ya que busca la realización de una acción por parte del destinatario. Además, los
políticos necesitan de mecanismos que les permitan analizar el estado de la opinión
pública en determinados momentos, como en las campañas electorales.
Conocer el marco conceptual de las diversas teorías sobre comunicación política, las
herramientas personales y digitales para comunicar mejor el mensaje político, el marco
legislativo que afecta al ámbito de actuación y los modos que se han utilizado para una
manipulación del mensaje político son claves para poder analizar los mensajes políticos
o asesorar a un candidato en campaña electoral.
Desde hace mucho tiempo la comunicación política constituye una importante
herramienta de relacionamiento entre los gobernantes y los gobernados. Primero fue el
contacto directo entre electores y elegidos, cuando los candidatos requerían de un
balcón y una plaza llena para comunicar sus ideas, convencer al electorado y obtener su
apoyo. Por supuesto que ese mecanismo iba acompañado de medios de comunicación
masivos como la prensa escrita y la radio.
Posteriormente fue la televisión la que cumplía esa función y los ciudadanos/as tenían la
opción de escuchar los debates políticos para en función de ello optar por una postura
política. Si bien todos esos recursos y medios cumplen aún una función trascendente en
la comunicación política, hay otra herramienta de reciente factura que influye de manera
significativa sobre la opinión de electores y ciudadanos/as. Nos referimos a las
denominadas redes sociales en las que supuestamente todos los actores tienen la
oportunidad de comunicar sus mensajes o ideas a los demás.
Las redes sociales se han convertido en el inicio de la tercera década del siglo XXI en
uno de los medios más eficaces de comunicación política, puesto que su influencia
moviliza masas, provoca caídas de gobiernos, determina resultados electorales y
consultas plebiscitarias, determina comportamientos patrióticos y nacionalistas,
comportamientos xenofóbicos, homofóbicos y de muchas otras fobias, lo que da cuenta
de su enorme relevancia. Muchos de los que utilizan las redes sociales para hacer
comunicación política e incidir en determinados comportamientos, recurren a bases de
información (Big Data) que dan cuenta de las preferencias de la población en cuanto al
mercado de consumo, ideas políticas, necesidades y aspiraciones. Información que se
obtiene de bases de datos que guarda el sistema.
Se debe dejar claro que el contenido de la comunicación política es rico en enseñanzas
para precisar el funcionamiento de las instituciones, ya que permite que los ciudadanos
se forman una idea de éstas, las cuales nacen de una presentación del sistema político a
través de los discursos de los hombres políticos. Si los políticos no manifestaran sus
acciones a través de mensajes dirigidos hacia la población, ésta no tendría conocimiento
sobre lo que hacen. En una democracia, se lucha por derechos, libertades y
cumplimiento de las reglas establecidas para el buen funcionamiento del sistema
político. En una monarquía o regímenes totalitarios, las decisiones del gobernante se
toman arbitrariamente, sin consultar a la población.
Por el contrario, en la democracia se da espacio a la participación de los ciudadanos
para la toma de decisiones; se confrontan las opiniones y la población toma parte de ese
debate de posturas sobre las ideas expuestas, para que juntos, población y gobierno,
generen un consenso sobre lo que mejor convenga a ambas partes. No hay democracia
sin considerar a la opinión pública, pues es inseparable de un proceso comunicacional,
tanto en su constitución como en su expresión. Lo quere flejen por medio de los
sondeos será considerado por los gobernantes para la toma de las decisiones y el actuar
político. La importancia de la comunicación política en las democracias radica en el
derecho de réplica de la opinión pública respecto a las acciones que políticos y
candidatos realizan, al tiempo que permite la realimentación, la respuesta de los
mensajes que emiten los gobernantes a los gobernados.
Por ello, cuando hablamos de comunicación política lo hacemos dentro del campo de la
democracia. En la elección de nuestros gobernantes, dentro del sistema democrático, la
comunicación política juega un rol importante, desde el momento en el que los partidos
políticos presentan a sus candidatos, el desarrollo de la campaña electoral, la difusión de
la información por parte de los medios de comunicación, los debates entre los políticos,
las propuestas de campaña, la imagen del candidato, la crítica de los periodistas, hasta
llegar a la formación de la opinión pública respecto a estos acontecimientos.
En este sentido, Habermas (1986) define a los espacios públicos de comunicación como
categorías para comprender las contradicciones de las democracias formales y los
mecanismos de control que las limitan. Un espacio público será el escenario en el que se
presenten los diferentes actores de la comunicación política para exponer sus puntos de
vista; en él se observan las confrontaciones de las opiniones, la forma de llegar a
acuerdos y las decisiones que se toman por la mayoría, al mismo tiempo que refleja los
avances y problemas que una democracia tiene.
https://www.scielo.org.mx/pdf/interdi/v9n24/2448-5705-interdi-9-24-232.pdf
https://biblio.flacsoandes.edu.ec/libros/digital/58449.pdf
https://www.udima.es/es/comunicacion-politica-122.html
https://www.redalyc.org/pdf/676/67618934007.pdf

También podría gustarte