Instituto Noreste

El rol de la mujer y el hombre en la actualidad

Materia: Sociología

Maestra: Martha Calderón

Presenta: Adriana Isabel Rodriguez Quinteros

Escobedo, Nuevo Leon, diciembre de 2022.

 Desde que nacen, entre hombres y mujeres ha existido una clara diferencia
por su condición biológica. Sin embargo, las diferencias en comportamiento,
pensamiento, ocupaciones y prioridades se atribuyen a la influencia cultural,
educativa y parental la cual asignó, al igual que muchas otras culturas, roles
específicos para ambos sexos.

La mujer ha sido instruida, desde el inicio de la civilización, para las tareas

domésticas, pocrear, cuidar y educar a sus hijos, en cambio con los hombres ha sido
para ser proveedores y protectores del hogar. Estos roles ubican a las mujeres en una
posición de inferioridad respecto a los varones y limitan sus habilidades y
conocimientos así como su autonomía y libertad.

También se fomentaron los estereotipos: la feminidad es para las mujeres y la

masculinidad para hombres; ellas deben ser sumisas y abnegadas y ellos fuertes y
dominantes; la maternidad es su esencia de ser mujeres; ellos llevan dinero a casa y
descansan.

Sin embargo, desde hace poco más de medio siglo empezó a rechazarse esta
cultura tradicionalista. El paso del tiempo, los avances científicos y tecnológicos,
aunado a los movimientos feministas y de derechos humanos, permitió un papel más
importante para la mujer, provocando cambios que han favorecido una distribución
equitativa de las tareas domésticas, de crianza y laborales.

Ahora las mujeres tienen la posibilidad de trabajar y obtener altos puestos,

estudiar hasta obtener posgrados, decidir si rechazan la maternidad o si la aceptan en
el momento apropiado para ellas, expresar sus opiniones y desestimar los estereotipos.
Puedes ser madres y esposas o jefas y líderes, tener hijos sin matrimonio o relación
sexual de por medio.

El rol del hombre perdió su sustento; tienen que atravesar esta revolución de
creencias y costumbres, aceptando su estatus en la sociedad y reajustando lo que han
conocido por masculinidad; hace cincuenta años, la imagen de los hombres era
bastante clara: hombre trabajador, padre fuerte y disciplinado, poco involucrado en la
familia.

Es por eso la importancia de la adaptación y construcción de una nueva

masculinidad positiva, respetuosa, tolerante y equitativa, para lograr realmente un
cambio perdurable. Dar paso a la creatividad, las emociones y las relaciones sociales.
El estereotipo tradicional no parece tener ya un lugar en el mundo y debe plantearse la
necesidad de crear uno nuevo.

Algunos hombres se sienten atacados ante esta transformación social, pero

sobre todo descolocados y desplazados, pues todo para lo que fueron educados se ha
desvanecido, ya no son necesarios; son cambios muy rápidos que les causa presión y
el sentimiento de perder privilegios, lo cual genera frustración, confusión e
impotencia hacia su nuevo rol.

Si bien queda camino por recorrer en la búsqueda de un nuevo rol masculino

auténtico y más aceptación en el rol femenino, es evidente el avance que se ha
conseguido. Es importante tener presente que al ser los roles de género pautas de
comportamiento construidas socialmente, es posible modificarlas. Por ello es
fundamental la educación de las niñas y los niños, en el ámbito de la igualdad y la
equidad, tanto en hogares como en centros escolares.