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Orientación Universitaria

Nombre: Christopher Inoa Mendez.


Matricula: 1-22-5350
Carrera: ISCI

Tema: Enfermedades de Transmisión Sexual.

 Clamidia: La clamidia es una enfermedad de transmisión sexual común.


Es causada por la bacteria Chlamydia trachomatis. Puede infectar a hombres y
mujeres. Las mujeres pueden contraer clamidia en el cuello del útero, el recto o
la garganta.
Usted puede contraer clamidia durante el sexo oral, vaginal o anal con alguien que tiene
la infección. Una mujer también puede transmitir clamidia a su bebé durante el parto.
Si usted tuvo clamidia y fue tratado en el pasado, puede re-infectarse si tiene relaciones
sexuales sin protección con alguien infectado.
La clamidia es más común en personas jóvenes, especialmente mujeres. Es más
probable que usted se contagie si no usa siempre un condón, o si tiene múltiples parejas.
En general, la clamidia no presenta síntomas, por lo que puede no darse cuenta que la
tiene. Las personas con clamidia sin síntomas pueden infectar a otros. Si usted tiene
síntomas, éstos pueden aparecer varias semanas después de tener relaciones sexuales
con una pareja infectada.
Los síntomas en las mujeres incluyen:
 Flujo vaginal anormal, que puede tener un fuerte olor
 Sensación de ardor al orinar
 Dolor durante las relaciones sexuales
Si la infección se propaga, es posible presentar dolor abdominal bajo, dolor durante las
relaciones sexuales, náuseas o fiebre.
Los síntomas en los hombres incluyen:
 Secreción del pene
 Sensación de ardor al orinar
 Ardor o picazón alrededor de la abertura del pene
 Dolor e inflamación en uno o ambos testículos, aunque esto es menos común
Si la clamidia infecta el recto puede causar dolor rectal, secreción y/o sangrado tanto en
hombres como en mujeres.
La clamidia se diagnostica con pruebas de laboratorio. Su médico puede pedirle una
muestra de orina. En mujeres, a veces se utiliza un hisopo de algodón para obtener una
muestra de la vagina para detectar clamidia.

 Herpes Genital: El herpes genital es una infección frecuente de


transmisión sexual causada por el virus del herpes simple. El contacto sexual es
la principal vía de propagación del virus. Después de la infección inicial, el virus
permanece inactivo en el cuerpo y puede reactivarse varias veces al año.
El herpes genital puede provocar dolor, picazón y llagas en la zona genital. Pero es
posible que no tengas ningún signo ni síntoma. Si estás infectado, puedes contagiar, aun
cuando no tengas llagas visibles.
El herpes genital no tiene cura, pero los medicamentos pueden aliviar los síntomas y
reducir el riesgo de infectar a otras personas. Los preservativos también pueden ayudar
a prevenir la propagación de una infección por herpes genital.
La mayoría de las personas infectadas con el virus del herpes simple no saben que lo
tienen porque no presentan signos o síntomas, o porque estos son muy leves.
Cuando se presentan, los síntomas pueden aparecer entre dos y doce días después de la
exposición al virus. Si experimentas síntomas de herpes genital, estos pueden incluir lo
siguiente:
 Dolor o comezón. Es posible que experimentes dolor y sensibilidad en la zona
genital hasta que la infección desaparezca.
 Protuberancias rojas pequeñas o ampollas blancas diminutas. Es posible que
aparezcan unos pocos días o semanas después de la infección.
 Úlceras. Se pueden formar úlceras cuando las ampollas se rompen y exudan o
sangran. Las úlceras pueden provocar dolor al orinar.
 Costras. La piel formará costras a medida que las úlceras cicatrizan.
Durante un brote inicial, es posible que tengas signos y síntomas similares a los de la
gripe, como ganglios linfáticos hinchados en la ingle, dolor de cabeza, dolores
musculares y fiebre.
Las llagas aparecen en el lugar en el que la infección ingresó al cuerpo. La infección se
puede diseminar al tocar una llaga y después frotarse o rascarse otra zona del cuerpo,
incluidos los ojos.
Los hombres y las mujeres pueden tener llagas en las siguientes partes del cuerpo:
 Glúteos y muslos
 Ano
 Boca
 Uretra (el tubo que permite que la orina drene desde la vejiga hacia el exterior)
Las mujeres también pueden tener llagas en las siguientes partes del cuerpo:
 Zona vaginal
 Genitales externos
 Cuello del útero
Los hombres también pueden tener llagas en las siguientes partes del cuerpo:
 Pene
 Escroto
El herpes genital es diferente según la persona. Los signos y síntomas pueden reaparecer
de vez en cuando durante años. Algunas personas experimentan muchos episodios por
año. No obstante, en muchas personas los brotes son menos frecuentes, a medida que
pasa el tiempo.
 Gonorrea: es una enfermedad de transmisión sexual (ETS) que puede
infectar tanto a los hombres como a las mujeres. Puede causar infecciones en los
genitales, el recto y la garganta. Es una infección muy común, especialmente en
las personas jóvenes de 15 a 24 años.
Causada por una bacteria de transmisión sexual que infecta tanto a hombres como a
mujeres. La gonorrea afecta con mayor frecuencia la uretra, el recto o la garganta. En
las mujeres, la gonorrea también puede infectar el cuello de la matriz.
Síntomas
 Dolor y ardor al orinar.
 Aumento de la frecuencia o urgencia urinaria.
 Secreción del pene (de color blanco, amarillo o verde)
 Abertura del pene (uretra) roja o inflamada.
 Testículos sensibles o inflamados.
 Dolor de garganta (faringitis gonocócica)
Cuando la gonorrea no se trata, puede ocasionar problemas de salud graves y
permanentes tanto en los hombres como en las mujeres. En las mujeres, la gonorrea sin
tratar puede causar la enfermedad inflamatoria pélvica (EIP).
Para reducir el riesgo de gonorrea, haz lo siguiente:
 Usa un preservativo si tienes relaciones sexuales. Abstenerse de tener relaciones
sexuales es la forma más segura de prevenir la gonorrea. Pero si decides tener
relaciones sexuales, usa un preservativo durante cualquier tipo de contacto
sexual, incluido el sexo anal, oral o vaginal.
 Limita el número de parejas sexuales. Estar en una relación monógama en la que
ninguna de las dos personas tiene relaciones sexuales con otra persona puede
reducir el riesgo.
 Asegúrate de que tú y tu pareja se hagan la prueba de infecciones de transmisión
sexual. Antes de tener relaciones sexuales, háganse la prueba y compartan los
resultados entre ustedes.
 No tengas relaciones sexuales con alguien que parezca tener una infección de
transmisión sexual. Si tu pareja tiene signos o síntomas de una infección de
transmisión sexual, como ardor al orinar o una erupción o llaga genital, no
tengas relaciones sexuales con esa persona.
 Considera la posibilidad de hacerte exámenes de detección de gonorrea con
regularidad. Se recomiendan exámenes de detección anuales para las mujeres
sexualmente activas menores de 25 años y para las mujeres mayores con mayor
riesgo de infección. Esto incluye a las mujeres que tienen una nueva pareja
sexual, más de una pareja sexual, una pareja sexual que tenga otras parejas, o
una pareja sexual que tiene una infección de transmisión sexual.
 También se recomienda que los hombres que tienen relaciones sexuales con
hombres, así como sus parejas, se sometan a exámenes de detección regulares.
Para evitar contraer gonorrea nuevamente, abstente de tener relaciones sexuales hasta
que tú y tu pareja hayan terminado el tratamiento y hasta después de que los síntomas
hayan desaparecido.
 VIH y Sida: es un virus que afecta al sistema de defensas del
organismo, llamado sistema inmunológico. Una vez debilitado por el VIH, el
sistema de defensas permite la aparición de enfermedades. Esta etapa avanzada
de la infección por VIH es la que se denomina Síndrome de Inmuno Deficiencia
Adquirida (sida). Esto quiere decir que el sida es un conjunto de síntomas
(síndrome) que aparece por una insuficiencia del sistema inmune
(inmunodeficiencia) causada por un virus que se transmite de persona a persona
(adquirida).
El VIH es una infección de trasmisión sexual. También puede trasmitirse por el contacto
con sangre infectada y por inyectarse drogas ilícitas o por compartir agujas. Además,
puede trasmitirse de madre a hijo durante el embarazo, el trabajo de parto o la lactancia.
Sin medicamentos, es posible que pasen años hasta que el VIH debilite el sistema
inmunitario hasta el punto de avanzar y convertirse en SIDA.
No existe cura para el VIH o SIDA, pero los medicamentos pueden controlar la
infección o prevenir el avance de la enfermedad. Los tratamientos antivirales para el
VIH redujeron la cantidad de muertes por SIDA en todo el mundo, y las organizaciones
internacionales están trabajando para aumentar la disponibilidad de medidas de
prevención y de tratamiento en países con pocos recursos.
Los síntomas del VIH y del SIDA varían, según la etapa de la infección.
Algunas personas infectadas por el VIH desarrollan una enfermedad parecida a la gripe
en un plazo de 2 a 4 semanas después de que el virus entra en el cuerpo. Esta
enfermedad, conocida como infección primaria (aguda) del VIH, puede durar unas
pocas semanas.
Estos son algunos de los posibles signos y síntomas:
 Fiebre
 Dolor de cabeza
 Dolor muscular y articular
 Erupción
 Dolor de garganta y llagas dolorosas en la boca
 Ganglios linfáticos inflamados, principalmente en el cuello
 Diarrea
 Pérdida de peso
 Tos
 Sudores nocturnos
Estos síntomas pueden ser tan leves que es posible que ni siquiera los notes. Sin
embargo, la cantidad de virus en el torrente sanguíneo (carga viral) es bastante alta en
este momento. Como resultado, la infección se propaga más fácilmente durante la
infección primaria que durante la siguiente etapa.
El acceso a mejores tratamientos antivirales ha reducido ampliamente la cantidad de
muertes por SIDA en todo el mundo, incluso en países de bajos recursos. Gracias a
estos tratamientos que salvan vidas, la mayoría de las personas con VIH en los EE. UU.
no desarrollan SIDA en la actualidad. Sin tratamiento, generalmente, el VIH se
convierte en SIDA en unos 8 a 10 años.
Cuando aparece el SIDA, existe un daño grave en el sistema inmunitario. Será más
probable que se presenten enfermedades que normalmente no se manifiestan en
personas con un sistema inmunitario sano. Estas enfermedades se conocen como
"infecciones oportunistas" o "cánceres oportunistas".
Los siguientes pueden ser los signos y síntomas de algunas de estas infecciones:
 Sudores
 Escalofríos
 Fiebre recurrente
 Diarrea crónica
 Ganglios linfáticos inflamados
 Manchas blancas persistentes o lesiones inusuales en la lengua o la boca
 Fatiga persistente, sin causa aparente
 Debilidad
 Pérdida de peso
 Erupciones cutáneas o bultos
 VPH: La infección por el virus del papiloma humano es una infección viral
que comúnmente causa crecimientos en la piel o en las membranas mucosas
(verrugas). Existen más de 100 variedades del virus del papiloma humano.
Algunos tipos de infección por el virus del papiloma humano causan verrugas y
otros pueden causar diferentes tipos de cáncer.
La mayoría de las infecciones por el virus del papiloma humano no derivan en cáncer.
Sin embargo, algunos tipos del virus del papiloma humano genital pueden causar cáncer
de la parte inferior del útero que se conecta a la vagina (cuello del útero). A otros tipos
de cáncer, entre los que se incluyen el cáncer de ano, pene, vagina, vulva y parte
posterior de la garganta (orofaringe), se los relacionó con la infección por el virus del
papiloma humano.
Estas infecciones a menudo se transmiten sexualmente o a través de otro tipo de
contacto de piel con piel. Las vacunas pueden ayudar a proteger contra las cepas del
virus del papiloma humano que tienen mayor probabilidad de causar verrugas genitales
o cáncer de cuello del útero.
En la mayoría de los casos, el sistema inmunitario del cuerpo vence una infección por el
virus del papiloma humano (VPH) antes de crear las verrugas. Cuando aparecen las
verrugas, estas varían en apariencia según el tipo de VPH que esté involucrado:
 Verrugas genitales. Estas aparecen como lesiones planas, pequeños bultos en
forma de coliflor o pequeñas protuberancias en forma de tallo. En las mujeres,
las verrugas genitales aparecen principalmente en la vulva, pero también pueden
aparecer cerca del ano, en el cuello del útero o en la vagina.
 En los hombres, las verrugas genitales aparecen en el pene y el escroto o
alrededor del ano. Las verrugas genitales rara vez causan molestias o dolor,
aunque pueden causar comezón o tener sensibilidad.
 Verrugas comunes. Las verrugas comunes aparecen como bultos ásperos y
elevados y generalmente se presentan en las manos y los dedos. En la mayoría
de los casos, las verrugas comunes son simplemente antiestéticas, pero también
pueden ser dolorosas o susceptibles a lesiones o sangrado.
 Verrugas plantares. Las verrugas plantares son bultos duros y granulosos que
generalmente aparecen en los talones o la parte delantera de las plantas de los
pies. Estas verrugas pueden causar molestias.
 Verrugas planas. Las verrugas planas son lesiones planas y ligeramente
elevadas. Pueden aparecer en cualquier parte, pero los niños suelen tenerlas en la
cara y los hombres tienden a tenerlas en el área de la barba. Las mujeres tienden
a tenerlas en las piernas.
La infección por el virus del papiloma humano ocurre cuando el virus entra al cuerpo,
por lo general a través de un corte, una abrasión o un pequeño desgarro en la piel. El
virus se trasmite principalmente por contacto de piel con piel.
Las infecciones genitales por el virus del papiloma humano se trasmiten mediante las
relaciones sexuales, el sexo anal y otros tipos de contacto de piel con piel en la región
genital. Algunas infecciones por el virus del papiloma humano que causan lesiones
bucales o en las vías respiratorias superiores se contraen a través del sexo oral.
Si estás embarazada y tienes una infección por el virus del papiloma humano con
verrugas genitales, es posible que tu bebé contraiga la infección. En raras ocasiones, es
posible que la infección cause un tumor no canceroso en la laringe del bebé.
Las verrugas son contagiosas. Se pueden propagar a través del contacto directo con una
verruga. Las verrugas también se pueden propagar cuando alguien toca algo que ya
estuvo en contacto con una verruga.
 Ladillas: Los piojos púbicos, comúnmente llamados "ladillas", son
pequeños insectos que se encuentran en la región genital. Son un tipo de piojo
diferente a los piojos de la cabeza y del cuerpo. Los piojos púbicos, que miden
1/16 pulgadas (1,6 milímetros) o menos, tienen un cuerpo parecido al de un
cangrejo pequeño.
La manera más común de contagiarse piojos púbicos es a través de las relaciones
sexuales. En el caso de los niños, los piojos púbicos pueden hallarse en las pestañas o en
las cejas y pueden ser indicio de abuso sexual. Sin embargo, es posible contagiarse
piojos púbicos después de compartir ropa, sábanas o toallas con una persona infestada.
Los piojos púbicos se alimentan de sangre, y sus picaduras pueden provocar una
picazón intensa. El tratamiento supone aplicarse cremas y lociones de venta libre para
matar a los parásitos y sus huevos.
Si tiene piojos púbicos (cangrejos), puede experimentar una picazón intensa en la región
genital. Los piojos púbicos pueden propagarse a otras áreas con vello corporal grueso,
que incluyen:

 Piernas
 Cofre
 axilas
 barba o bigote
 Pestañas o cejas, más comúnmente en niños
Los piojos púbicos se transmiten con mayor frecuencia durante la actividad sexual.
También puedes contagiarte piojos púbicos con sábanas, mantas, toallas o prendas
contaminadas.
Las personas que padecen otras infecciones de transmisión sexual tienen mayor
probabilidad de tener piojos púbicos.
En general, las infestaciones de piojos púbicos pueden tratarse con una loción o con un
gel para matar piojos. No obstante, estas infestaciones algunas veces conllevan otras
complicaciones, como las siguientes:
 Manchas en la piel. Es posible que aparezcan manchas azules claras donde se
han estado alimentando continuamente los piojos púbicos.
 Infecciones secundarias. Si te rascas las picaduras de los piojos y te queda la piel
en carne viva, estas heridas pueden infectarse.
 Irritación de los ojos. Los niños que tienen piojos púbicos en las pestañas
pueden padecer un tipo de conjuntivitis aguda.
Para evitar el contagio de piojos púbicos, evita tener contacto sexual o compartir ropa
de cama o prendas con una persona infestada. Si recibes tratamiento contra los piojos
púbicos, todas las parejas sexuales deberán tratarse.
 Sífilis: La sífilis es una infección bacteriana que suele transmitirse por
contacto sexual. La enfermedad comienza como una llaga sin dolor,
generalmente en los genitales, el recto o la boca. La sífilis se transmite de
persona a persona a través del contacto con estas llagas por la piel o las
membranas mucosas.
Después de la infección inicial, la bacteria de la sífilis puede permanecer inactiva en el
cuerpo durante décadas antes de volverse activa de nuevo. La sífilis temprana se puede
curar, algunas veces con una sola inyección de penicilina.
Sin tratamiento, la sífilis puede dañar gravemente el corazón, el cerebro u otros órganos,
y puede poner en riesgo la vida. La sífilis también puede transmitirse de la madre al
feto.
La sífilis se desarrolla por etapas, y los síntomas varían con cada etapa. Sin embargo, las
etapas pueden superponerse y los síntomas no siempre se presentan en el mismo orden.
Se puede estar infectado de sífilis sin notar ningún síntoma durante años.

Sífilis primaria
El primer signo de sífilis es una pequeña llaga, llamada chancro. La llaga aparece en el
lugar por donde la bacteria entró a su cuerpo. Mientras que la mayoría de las personas
infectadas con sífilis presentan solo un chancro, algunas personas presentan varios de
ellos.
El chancro generalmente se presenta alrededor de tres semanas después de la
exposición. Muchas personas que tienen sífilis no notan el chancro porque generalmente
es indoloro y puede estar escondido dentro de la vagina o el recto. El chancro sanará por
sí solo en un plazo de tres a seis semanas.

Sífilis secundaria
Pocas semanas después de la recuperación del chancro original, puedes experimentar
una erupción que comienza en el tronco, pero que acaba cubriendo todo el cuerpo,
incluso las palmas de las manos y las plantas de los pies.
Esta erupción generalmente no produce comezón y puede estar acompañada de úlceras
similares a verrugas en la boca o en el área genital. Algunas personas también
experimentan pérdida de cabello, dolores musculares, fiebre, dolor de garganta e
inflamación de los ganglios linfáticos. Estos signos y síntomas pueden desaparecer en
pocas semanas o aparecer y desaparecer repetidamente durante un año.

Sífilis latente
Si no recibes tratamiento para la sífilis, la enfermedad pasa de la etapa secundaria a la
etapa oculta (latente), durante la cual no tendrás síntomas. La etapa latente puede durar
años. Es posible que los signos y síntomas nunca regresen o que la enfermedad avance a
la tercera etapa (terciaria).

Sífilis terciaria
Aproximadamente del 15 % al 30 % de las personas infectadas con sífilis que no
reciben tratamiento tendrán complicaciones conocidas como sífilis terciaria. En la etapa
tardía, la enfermedad puede dañar el cerebro, los nervios, los ojos, el corazón, los vasos
sanguíneos, el hígado, los huesos y las articulaciones. Estos problemas pueden ocurrir
muchos años después de la infección original no tratada.

Neuro sífilis
En cualquier etapa, la sífilis puede propagarse y, entre otras cosas, causar daños al
cerebro y al sistema nervioso y al ojo.

Sífilis congénita
Los bebés nacidos de mujeres que tienen sífilis pueden infectarse a través de la placenta
o durante el parto. La mayoría de los recién nacidos con sífilis congénita no presentan
síntomas, aunque algunos experimentan una erupción en las palmas de las manos y en
las plantas de los pies.
Los signos y síntomas posteriores pueden incluir sordera, deformidades dentales y nariz
en silla de montar, donde colapsa el tabique nasal.
Sin embargo, los bebés que nacen con sífilis también pueden nacer prematuramente,
morir en el útero antes de nacer o morir después del nacimiento.
Consulta con un médico si tú o tu hijo presentan secreciones, llagas o erupciones
cutáneas inusuales, particularmente si se producen en la zona de la ingle.
La causa de la sífilis es una bacteria llamada Treponema Palladium. La vía más común
de transmisión de la sífilis es a través del contacto con la llaga de una persona infectada
durante la actividad sexual. La bacteria entra en el cuerpo a través de cortes o abrasiones
menores en la piel o las membranas mucosas. La sífilis es contagiosa durante sus etapas
primaria y secundaria, y a veces en el periodo latente temprano.
Con menos frecuencia, la sífilis puede contagiarse a través del contacto directo con una
lesión activa, como al darse un beso. También puede transmitirse de la madre al bebé
durante el embarazo o el trabajo de parto.
La sífilis no se puede contagiar por usar el mismo inodoro, bañera, ropa o utensilios
para comer, o desde las perillas de las puertas, piscinas o jacuzzis.
Una vez curada, la sífilis no recurre por sí sola. Sin embargo, puedes volver a infectarte
si tienes contacto con la llaga de sífilis de una persona.
Enfrentas un mayor riesgo de adquirir sífilis si haces lo siguiente:
 Participar en relaciones sexuales sin protección
 Tener relaciones sexuales con múltiples parejas
 Eres un hombre que tiene sexo con hombres
 Estás infectado con el VIH, el virus que causa el SIDA
Sin tratamiento, la sífilis puede causar daños en todo el cuerpo. La sífilis también
aumenta el riesgo de infección por VIH y puede causar problemas durante el embarazo.
El tratamiento puede ayudar a prevenir daños futuros, pero no puede reparar ni revertir
los daños que ya han ocurrido.
En la etapa avanzada de la sífilis, pueden aparecer protuberancias (goma sifilítica) en la
piel, los huesos, el hígado o cualquier otro órgano. Las gomas sifilíticas suelen
desaparecer después del tratamiento con antibióticos.
La sífilis puede causar una serie de problemas en tu sistema nervioso, incluidos:
 Dolor de cabeza
 Accidente cerebrovascular
 Meningitis
 Pérdida auditiva
 Problemas visuales, incluida la ceguera
 Demencia
 Pérdida de sensibilidad al dolor y a la temperatura
 Disfunción sexual en los hombres
 Incontinencia urinaria
Pueden incluir dilatación e hinchazón de la aorta, la arteria principal del cuerpo, y de
otros vasos sanguíneos. La sífilis también puede dañar las válvulas cardíacas.
Los adultos con sífilis de transmisión sexual u otras úlceras genitales tienen un riesgo
estimado de dos a cinco veces mayor de contraer el VIH. Una llaga de sífilis puede
sangrar con facilidad y proporcionar una manera sencilla para que el VIH entre en el
torrente sanguíneo durante la actividad sexual.
Si estás embarazada, puedes transmitir la sífilis al bebé por nacer. La sífilis congénita
aumenta considerablemente el riesgo de aborto espontáneo, muerte fetal o muerte del
neonato a los pocos días del nacimiento.
No existe una vacuna contra la sífilis. Para ayudar a prevenir la propagación de la sífilis,
sigue estas sugerencias:
 Abstenerse o ser monógamo. La única manera segura de evitar la sífilis es evitar
(abstenerse de) tener relaciones sexuales. La siguiente mejor opción es tener
relaciones sexuales mutuamente monógamas, en las que ambas partes de la
pareja solo tienen relaciones sexuales entre sí y ninguna de ellas está infectada.
 Usar un preservativo de látex. Los preservativos pueden reducir el riesgo de
contraer sífilis, pero solo si estos cubren las llagas de la sífilis.
 Evitar las drogas recreativas. El mal uso del alcohol u otras drogas recreativas
puede inhibir el juicio y derivar en prácticas sexuales inseguras.
Si las pruebas muestran que tienes sífilis, debes informar a tus parejas sexuales
(incluidas las parejas actuales y a cualquier otra pareja que hayas tenido en los últimos
tres meses a un año) para que puedan hacerse la prueba. Si están infectadas, pueden
recibir tratamiento.
La notificación oficial y confidencial de la pareja puede ayudar a limitar la propagación
de la sífilis. La práctica también dirige a las personas en riesgo hacia el asesoramiento y
tratamiento adecuado. Y como puedes contraer sífilis más de una vez, la notificación a
la pareja reduce el riesgo de reinfección.
Las personas se pueden infectar con sífilis y no saberlo. En vista de los efectos mortales
que frecuentemente tiene la sífilis en el feto, los funcionarios de salud recomiendan que
todas las mujeres embarazadas se realicen un análisis para detectar la enfermedad.
 Tricomoniasis: La tricomoniasis es una infección de trasmisión
sexual común provocada por un parásito. En las mujeres, la tricomoniasis puede
provocar secreción vaginal con mal olor, picazón genital y micción dolorosa.
Los hombres que tienen tricomoniasis, por lo general, no tienen síntomas. Las mujeres
embarazadas que tienen tricomoniasis pueden correr un mayor riesgo de tener a sus
bebés prematuramente.
El tratamiento de la tricomoniasis consiste en tomar un antibiótico: metronidazol
(Flagyl), tinidazol (Tindamax) o secnidazol (Solosec). Para evitar infectarse
nuevamente, todas las parejas sexuales deben recibir tratamiento al mismo tiempo.
Puedes reducir el riesgo de infección si utilizas preservativos correctamente cada vez
que tengas relaciones sexuales.
La mayoría de las personas con tricomoniasis no presenta signos ni síntomas. No
obstante, los síntomas pueden aparecer con el tiempo. Cuando aparecen signos y
síntomas, son diferentes en los hombres y las mujeres.
En las mujeres, los signos y síntomas de tricomoniasis incluyen lo siguiente:
 Una cantidad abundante de una secreción vaginal delgada y, a menudo, con olor
desagradable, que puede ser de color trasparente, blanco, gris, amarillo o verde
 Enrojecimiento, ardor y picazón en los genitales
 Dolor al orinar o al tener relaciones sexuales
 Molestia en la parte inferior del estómago
En los hombres, la tricomoniasis pocas veces ocasiona síntomas. Sin embargo, cuando
estos aparecen, suelen ser los siguientes:
 Picazón o irritación dentro del pene
 Sensación de ardor al orinar o luego de eyacular
 Secreción proveniente del pene
Un protozoario de una célula, un tipo de parásito diminuto denominado Trichomonas
vaginalis, causa la tricomoniasis. El parásito se transmite entre las personas durante el
contacto genital, incluido el sexo vaginal, oral o anal. La infección puede transmitirse
entre hombres y mujeres, entre mujeres y, a veces, entre hombres.
El parásito infecta el tracto genital inferior. En las mujeres, esto incluye la parte exterior
de los genitales (vulva), la vagina, la abertura del útero (cuello del útero) y la abertura
urinaria (uretra). En los hombres, el parásito infecta el interior del pene (uretra).
Se desconoce cuál es el tiempo que transcurre entre la exposición al parásito y la
infección (periodo de incubación), pero se cree que oscila entre 4 y 28 días. Incluso sin
síntomas, tú o tu pareja pueden contagiar la infección.
Los factores de riesgo para la tricomoniasis incluyen los siguientes:
 Múltiples parejas sexuales
 Antecedentes de infecciones de trasmisión sexual
 Haber tenido tricomoniasis anteriormente
 Relaciones sexuales sin preservativo
A las mujeres embarazadas que tienen tricomoniasis les puede ocurrir lo siguiente:
 Dar a luz antes de tiempo (de forma prematura)
 Tener un bebé con bajo peso al nacer
 Trasmitir la infección al bebé cuando este pasa por el canal de parto
Tener tricomoniasis causa irritación en la zona genital que puede facilitar el ingreso al
cuerpo de otras infecciones de trasmisión sexual o su trasmisión a otras personas. La
tricomoniasis también parece facilitar la infección con el virus de la inmunodeficiencia
humana (VIH), virus que causa el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA).
Final del Trabajo.

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