ACUERDO:
En la ciudad de Paraná, Capital de la provincia de Entre Ríos, a los
veinticuatro (24) días de noviembre de dos mil veintidós, reunidos los Señores
Vocales, miembros de la Cámara en lo Contencioso Administrativo Nº 1, a saber:
HUGO RUBÉN GONZALEZ ELIAS, MARCELO BARIDÓN y la Sra. Vocal ADRIANA
ACEVEDO, asistidos por el Secretario Autorizante, fueron traídas a despacho para
dictar sentencia única las actuaciones acumuladas caratuladas:
• CHAVEZ OSVALDO DOMINGO C/ CAJA DE
JUBILACIONES Y PENSIONES DE ENTRE RIOS Y ESTADO PROVINCIAL S/
CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO-ORDINARIO - Expte. Nº 1573
• GRINOVERO MARIO HUMBERTO C/ CAJA DE
JUBILACIONES Y PENSIONES DE ENTRE RIOS Y ESTADO PROVINCIAL S/
CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO - Expte. N° 1087
• GIMENEZ RUBEN DARIO C/ CAJA DE JUBILACIONES Y
PENSIONES DE ENTRE RIOS Y OTRO S/ CONTENCIOSO
ADMINISTRATIVO - Expte. Nº 1128
• SUAREZ ALFREDO C/ CAJA DE JUBILACIONES Y
PENSIONES DE LA PROVINCIA DE ENTRE RIOS Y ESTADO PROVINCIAL
S/ CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO-ORDINARIO - Expte. Nº 1126.
Practicado el sorteo de ley, resultó que la votación debía tener
lugar en el siguiente orden: BARIDÓN, ACEVEDO, GONZALEZ ELIAS.
Examinadas las actuaciones el Tribunal se planteó la siguiente
cuestión para resolver: ¿Corresponde hacer lugar a las demandas incoadas?
¿Cómo deben imponerse las costas?.
A LA CUESTIÓN PROPUESTA, EL SEÑOR VOCAL BARIDÓN Y
LA SEÑORA VOCAL ACEVEDO DIJERON:
ANTECEDENTES:
1. Osvaldo Domingo Chavez, Alfredo Suarez, Mario Humberto
Grinóvero y Rubén Dario Gimenez, demandaron a la Caja de Jubilaciones y
Pensiones de Entre Ríos, de ahora en más “la Caja” y al Estado de la Provincia de
Entre Ríos.
Sus reclamos sustanciaron originalmente por las siguientes
carátulas, todas en trámite por ante éste Tribunal:
• “Chavez Osvaldo Domingo c/ Caja de Jubilaciones y
Pensiones de Entre Ríos y Estado Provincial s/contencioso administrativo-
Ordinario” Nº 1573;
• “Suarez Alfredo c/ Caja de Jubilaciones y Pensiones de
Entre Ríos y Estado Provincial s/contencioso administrativo-Ordinario” Nº 1126;
• “Grinóvero Mario Humberto c/ Caja de Jubilaciones y
Pensiones de Entre Ríos y Estado Provincial s/contencioso administrativo-
Ordinario” Nº 1087;
• “Gimenez Ruben Darío c/ Caja de Jubilaciones y
Pensiones de Entre Ríos y Estado Provincial s/contencioso administrativo-
Ordinario” Nº 1128.
En la primera de las apuntadas -“Chavez…” - el Tribunal ordenó
acumularlas a todas al momento de sentenciar. Ver movimiento en el expediente
electrónico de fecha 03/06/2022 de la hora 11:43.
En consecuencia, expondremos al acuerdo un relato común de las
pretensiones, los hechos, el derecho, las pruebas en las que los actores y
administraciones demandadas apoyan sus respectivas posiciones, como así
también un proyecto de sentencia único para todas.
2. Los actores pretendieron en cada una de sus demandas:
• las anulaciones de la Resolución Caja Nº 6598/19 y del
Decreto P.E. Nº 2729/20 (Chavez); de la Resolución Caja Nº 2460/19 y del
Decreto P.E. Nº 582/20 (Suarez); de la Resolución Caja Nº 748/18 y del Decreto
P.E. Nº 1281/19 (Grinóvero); de la Resolución Caja Nº2461/19 y del Decreto P.E.
Nº548/20 (Gimenez);
• los otorgamientos a cada uno de ellos de la pensión al
mérito artístico a las que se consideran acreedores;
• los pagos retroactivos de los beneficios demandados
desde que fueron pedidos con más sus intereses y hasta sus efectivos
abonos.Refirieron ser artistas folkloristas y haber obtenido el premio al
reconocimiento a la trayectoria autoral por sus aportes a la cultura popular
otorgado por SADAIC.
Dijeron que Fiscalía de Estado equiparó en numerosos
precedentes, el premio que les fuera otorgado a los establecidos por la ley 7849,
por lo que en las fechas que indicaron en cada una de las demandas solicitaron a
la Caja la pensión al mérito artístico y acompañaron sus respectivas currículas y
antecedentes.
Transcribieron e interpretaron los artículos 1° y 2° de la ley 7849
y concluyeron que para ser acreedores al beneficio en cuestión no era necesario
que la convocatoria que antecedió al premio tenga que haber sido nacional.
Entendieron suficiente haber obtenido un primer premio provincial para satisfacer
los requisitos de ley.
Señalaron que la administración jubilatoria está vinculada a un
precedente por el que otorgó el beneficio -Satler Santiago concedido por Decreto
2154/06-; pese al cual y por las resoluciones que en cada demanda identificaron
les fueron negados sus pedidos sin fundamento legítimo.
Citaron lo que la administración manifestó como motivo de las
desestimaciones a sus solicitudes, el que se limitó -dijeron- a un cambio de
criterio.
Negaron que la administración haya fundado en causa legítima la
modificación de su valoración para otorgar la retribución por ellos reclamada.
Afirmaron desconocer por que a otros artistas, cuyo detalle efectuaron, les fue
otorgado el beneficio y a ellos no.
Cuestionaron que por tratarse de pensiones graciables, los
beneficios que reclamaron admitan interpretación restrictiva. Se apoyaron en
jurisprudencia del Superior Tribunal de Justicia.
Denunciaron violación al principio de igualdad de trato, en tanto
idéntico premio concedido a otros artistas en similares condiciones a las propias,
los habilitó para que se les haya otorgado la pensión que a ellos les fue negada.
Transcribieron el dictamen de Fiscalía de Estado Nº 331/04 en el
que auspició, en otro caso, equiparar el reconocimiento otorgado por SADAIC al
previsto en la ley 7849 y considerarlo apto a los fines de evaluar el cumplimiento
de los extremos exigidos por la norma para acceder a la pensión.
Señalaron que ambas demandadas -Caja y Estado Provincial-
incurrieron en conductas opuestas y contradictorias con sus propios actos
administrativos anteriores.
Fundaron en derecho, reservaron caso federal suficiente para
ocurrir por ante la instancia extraordinaria llegado el caso que la ordinaria
desoiga sus peticiones, detallaron la prueba y peticionaron por la prosperidad de
sus demandas.
3. Presidencia decretó admisible los procesos de Chavez, Suarez,
Grinóvero y Gimenez por movimientos de fechas: 09/12/21 de la hora 7:37;
12/04/21 de la hora 7:00; 27/08/20 de la hora 11:13 y 25/09/20 de la hora
8:07; en cada uno de los expedientes electrónicos, respectivamente.
4. En todos los procesos los actores optaron por ordinario.
5. Contestaron demandas de modo conjunto, Fiscalía de Estado
por la administración y la Caja.
Formularon las negativas de estilo.
Circunscribieron el debate a un examen de procedencia del
beneficio en términos de legalidad y desestimaron cualquier valoración
demeritadora de las aptitudes artísticas de los actores.
Subrayaron que los premios otorgados a los demandantes no
reúnen las condiciones exigidas por la normativa que instituyó la pensión que
solicitaron.
Concretamente -dijeron- los galardones que obtuvieron los
actores no son “primeros” premios en las condiciones y con los alcances exigidos
por la ley y su reglamento para acceder al beneficio.
Descartaron que los “premios reconocimiento” que acreditaron
constituyan “primeros premios” exigidos por la normativa de aplicación.
Desarrollaron que el adjetivo “primero” jerarquiza un orden y remite a un
concurso, compulsa y/o competencia, que es lo que exige la ley para ser acreedor
de la pensión.
Precisaron el que, a su juicio, es el criterio del Superior Tribunal
de Justicia en el precedente “Hiraldo de Viscay María c/ Estado Provincial y Caja
de Jubilaciones y Pensiones de Entre Ríos s/demanda contencioso
administrativa”: el primer premio debe ser obtenido en una convocatoria de
alcance nacional o provincial, pero siempre en un concurso como premisa.
Dijeron que si bien SADAIC es una de las instituciones que la
normativa reconoce como autoridad otorgante del premio habilitante para la
pensión, los entregados a los actores lo fueron sin concurso, sin compulsa; de ahí
que no pueden ser considerados “primeros premios” y en consecuencia no
cumplen con la condición, que calificaron de inexorable, exigida por la ley y su
reglamento para titularizar la pretensión que solicitaron.
Admitieron que durante años y hasta el año 2018, la
administración equiparó el “premio reconocimiento a la trayectoria autoral”
otorgado por SADAIC al “primer premio” previsto por la normativa como requisito
de inexcusable cumplimiento para acrecer a la pensión al mérito artístico. Por tal
motivo, los artistas referidos en los escritos de demandas, fueron beneficiados.
Historiaron los antecedentes en los que se concedió el beneficio.
Detuvieron el análisis en la posición de Fiscalía de Estado en el caso Perez, previo
a Satler, y la decisión graciable del ejecutivo provincial de otorgarle la pensión.
Explicaron que el criterio consistente en equiparar el premio a la trayectoria anual
de SADAIC con un galardón nacional se originó en el referido caso Perez.
Repasaron los cuatro casos en los que la administración concedió
el beneficio graciable siguiendo el criterio de equiparación antes descripto, para
informar que a partir de una consulta genérica del presidente de la Caja, Fiscalía
de Estado emitió dictamen auspiciando un cambio de criterio.
Enfatizaron que todos los casos que la administración resolvió con
posterioridad a la modificación de la perspectiva de la abogacía estatal, fueron
denegados; por lo que descartaron cualquier conculcación a la igualdad ante la
ley.
Consideraron que la fuerza vinculante del precedente es relativa y
que la administración bien puede separarse de sus decisiones anteriores.
Ponderaron que los administrados no adquieren derecho alguno al precedente.
Entendieron que el derecho aplicable fue, previo al cambio de opinión,
incorrectamente valorado. Citaron jurisprudencia del Tribunal en apoyo a la
posición.
Justificaron la modificación en el análisis que propiciaron desde
2018 en adelante en que el requisito exigido por la ley de “primer premio” para
acceder al beneficio supone una compulsa, circunstancia no verificada en los
casos de los actores a quienes se les reconoció sus trayectorias.
Refirieron al debate parlamentario que precedió a la ley 7849, en
el que los legisladores claramente instituyeron la pensión a quienes obtuviesen
primeros premios en competencias.
Defendieron la interpretación restrictiva de la norma dada la
naturaleza no contributiva del beneficio. De ahí que desestimaron lecturas
extensivas del texto de la ley. Refirieron a que tal criterio es de consuno en los
tribunales del fuero al enjuiciar jubilaciones no contributivas.
Agregaron en el expediente “Grinóvero…” que el actor no atacó de
modo preciso, concreto y suficiente el decreto que desestimó su petición -N°
1281/19– por lo que no fue debidamente impugnado y arribó a la instancia
jurisdiccional firme y consentido.
Se opusieron a parte de la producción probatoria de los actores,
ofrecieron la propia, introdujeron cuestión federal suficiente para ocurrir por ante
la vía extraordinaria si la ordinaria desecha sus posiciones y peticionaron por el
rechazo de las demandas.
6. Los actores contestaron los traslados de las respuestas de
demandas ordenados por Presidencia en sus respectivos expedientes por
movimientos electrónicos de fechas 28/03/22 de la hora 7:00 (Chavez); 2/08/21
de la hora 17:02 (Suarez); 9/12/20 de la hora 8:01 (Grinóvero); 3/03/21 de la
hora 7:35 (Gimenez).
En todos, señalaron que a un cantante que identificaron por su
nombre artístico le concedieron la pensión con posterioridad a que a ellos la
solicitaran.
7. En el expediente “Suarez…” se convocó a audiencia preliminar,
la que se efectuó en fecha 10/11/21 a la hora 11:00 en la que se establecieron
los hechos no controvertidos y controvertidos y se depuró la prueba. Se tuvo por
incorporada la documental que arrimaron cada una de las partes.
8. A su vez, en el expediente “Chavez…” y por movimiento de
fecha 7/07/22 de la hora 15:40 el actor desistió de solicitar informes a la Caja
sobre la concesión de cuatro beneficios al mérito artístico ya que la abogacía
estatal había acompañado los antecedentes requeridos en ocasión de contestar
demandas.
9. Acto seguido en el expediente “Suarez…” y por movimiento de
fecha 11/11/20 a la hora 7:00 se declaró la cuestión de puro derecho. En los
actuados “Chavez…”; “Grinóvero…” y “Gimenez…” se siguió igual talante por
movimientos de fechas 25/07/22 de la hora 7:00, 21/04/21 de la hora 10:39 y
28/04/21 de la hora 7:00, respectivamente.
10. Alegaron las partes. Según constancias obrantes en cada uno
de los expedientes electrónicos, los actores, la abogacía estatal y la Caja lo
hicieron en las fechas y horarios que en cada caso se indican:
todas en trámite por ante éste Tribunal:
• En “Suarez…” el actor lo hizo el 15/11/21 a la hora
17:15; mientras que Fiscalía de Estado hizo lo propio el 18/11/21 a la hora 12:58
y el 23/11/21 a la hora 13:09 adhirió la Caja;
• En “Chavez…” el actor alegó en fecha 28/07/22 a la hora
16:45; la abogacía estatal en fecha 29/07/22 a la hora 8:12 y la Caja adhirió el
01/08/22 a la hora 12:25;
• En “Grinovero…”, el actor lo hizo en fecha 26/04/21 a la
hora 9:12 mientras que Fiscalía de Estado alegó el 30/04/21 a la hora 10:27 y el
04/05/21 a la hora 21:08 adhirió la Caja;
• En “Gimenez…”, el actor alegó el 30/04/21 a la hora
9:07; la Fiscalía de Estado el 10/05/21 a la hora 10:37 y el 11/5/21 adhirió la
Caja a las 7:52.
Los alegatos presentados en los cuatro expedientes acumulados
son sustancialmente similares entre sí por cada parte.
Los actores, cada uno por su cuenta y a la vez coincidentes,
cuestionaron la validez del cambio en la consideración sobre lo que entiende la
administración por premio habilitante para acceder a la pensión que demandaron,
ya que -dijeron- carece de motivos para justificar la mutación. Denunciaron, una
vez más, desigualdad de trato, consistente en que a los artistas cuyos nombres
detallaron les fue concedido el beneficio previa acreditación del premio a la
trayectoria que otorga SADAIC, mientras que a ellos el mismo galardón no fue
considerado. Insistieron en que las jubilaciones deben ser apreciadas con criterios
amplios no restrictivos.
La administración, a su turno, reiteró los argumentos que
desarrolló al contestar cada una de las demandas. Insistió en que los actores no
acreditaron haber obtenido “primer premio” nacional o provincial por lo que no
cumplieron con el requisito inexcusable para acceder al beneficio. Dijo que la
redacción de la ley supone competencia y los actores no demostraron haber
competido para obtener sus reconocimientos a las trayectorias. Repitió que la
administración cambió su valoración de tales galardones otorgados por SADAIC:
antes los consideró primeros premios y desde 2018 no. Los casos en los que los
actores fundaron sus denuncias de desigualdad de trato son todos anteriores a
dicha fecha, por lo tanto solicitó sus desestimaciones.
11. Opinó el Ministerio Público Fiscal. Auspició el rechazo al pedido
oficial de desestimar la demanda deducida por Grinóvero por insuficiente
impugnación. Concentró el objeto del pleito en analizar la teoría del precedente
administrativo al que fundó en el principio de la buena fe. Sistematizó los
requisitos exigidos por la jurisprudencia del Tribunal para que el precedente
vincule a la administración. Entendió que la administración incurrió en
desigualdad de trato en el caso de los actores al haber variado de criterio
mientras se sustanciaban sus trámites y concluyó en que debe hacerse lugar a las
demandas.
FUNDAMENTOS:
12. En lo que respecta a la objeción adjetiva opuesta por la
abogacía estatal a la prosperidad del reclamo deducido por el actor Grinóvero,
sugerimos estar a lo dictaminado por el Ministerio Público Fiscal.
Efectivamente en su demanda, pretendió concretamente la
anulación de la actividad jurídica administrativa que le resultó desfavorable a sus
intereses y se hizo cargo y criticó las razones con las que defendió su posición.
Lo contrario, a nuestro juicio, nos lleva inexorablemente a incurrir
en un exceso de rigor formal, cuando la ley no exige fórmulas sacramentales para
expresar las censuras que los administrados dirigen a las decisiones de la
administración que los desfavorecen.
13. La primera de las cuestiones comunes a resolver consiste en
dilucidar si la distinción que les otorgó a los actores la Sociedad Argentina de
Autores y Compositores de Música, en adelante SADAIC, denominado “Premio
Reconocimiento a la trayectoria autoral” por sus aportes a la cultura popular;
categoriza o no dentro de los galardones que habilitan al destinatario a solicitar la
pensión al mérito artístico.
Repasemos. El premio en cuestión -reconocimiento a la trayectoria
autoral otorgado por SADAIC- lo acompañan todos los actores conforme el
siguiente detalle:
• Chavez en la página 3 de la documental incorporada al
expediente electrónico en fecha 31/08/21 a la hora 11:42;
• Suarez en la página 13 del expediente 1866547
ingresado a estos actuados informáticos el 24/09/20 a las 13:34;
• Grinóvero en la página 9 del expediente 10070988-
182626-PGR subido a estos actuados informáticos el 06/07/20 a las 12:10;
• Gimenez en la página 33 de la documental 2
incorporado a estos actuados informáticos el 22/12/20 a las 08:38.
La ley que instituyó la pensión, Nº 7849 (B.O. 16/03/87) exige
que en su artículo 1° que el postulante acredite haber obtenido “… un Primer
Premio Nacional discernido por los Organismos Culturales de la Nación y
SADAIC".
Su reglamento -decreto Nº 2966/87 modificado por su par Nº
881/9, publicados en el diario oficial entrerriano de fechas 2/07/87 y 1/04/91- en
lo que aquí interesa, especificó en su artículo 1° que: "Son organismos
nacionales, la Secretaria de Cultura de la Nación, el Fondo Nacional de las Artes y
la Sociedad Argentina de Autores y Compositores (SADAIC).- Los premios
comprendidos en la presente Ley son aquellos convocados para músicos,
escritores y artistas plásticos del país."
Su artículo 2° incluyó dentro de los premios comprendidos los
otorgados “... por la Dirección de Cultura de la Provincia de Entre Ríos que hayan
sido convocados o se convoquen para la participación de músicos, escritos y
artistas plásticos de todo el país.”
El primer método a utilizar para subsumir el premio obtenido por
los actores con el previsto en la norma y así analizar y concluir si cumple o no
con uno de los requisitos habilitantes para obtener el beneficio, es el de la
interpretación gramatical.
Así nos los indica el C.C.C. en su artículo 2. Obsérvese que toda la
actividad jurídica de la administración enjuiciada en la especie fue facturada con
posterioridad a la entrada en vigencia del C.C.C. -1/08/15 Ley 27077 B.O.N.
19/12/14– por lo que sus reglas de interpretación de la ley son plenamente
aplicables, sin perjuicio que la Corte Federal desde antaño viene enseñando que
la primera directriz hermenéutica para interpretar la ley es su letra, máxime si
como ocurre en el caso, su análisis literal revela claramente su sentido. (1)
El resultado de la auscultación gramatical es franca y
abiertamente negativo a los intereses de los actores.
Premio a la trayectoria autoral no es un primer premio. Acierta la
abogacía estatal al ponderar, lógicamente, que un primer premio supone un
concurso previo que consagra y distingue a su triunfador. Justamente, el artículo
1° de la ley 7849 utilizó el participio del verbo “discernir”, “discernido”; cuyo
significado es distinguir, en el caso del resto de los participantes por haber sido
evaluado como el mejor. (2)
Los certificados esgrimidos por los actores para reclamar las
pensiones que pretendieron no dicen haber sido otorgados como el resultado de
un concurso. Tampoco lo afirman Chavez, Suarez, Gimenez y/o Grinóvero ni
menos aún, surge razonablemente de la lectura de sus textos. No hubo aporte
probatorio que acredite la realización de una compulsa nacional que haya
culminado con el galardón en cuestión.
Es más, consultada la página oficial de SADAIC advertimos que la
entidad convoca a su concurso anual, que supone una disputa sometida a un
reglamento y conducida y decidida por un jurado que discernirá cual de las obras
participantes es a su juicio la mejor y en consecuencia la distinguirá con el primer
premio. (3)
Desde la perspectiva analizada, estimamos que la actividad de la
administración enjuiciada no merece reproche alguno. El “premio al
reconocimiento a la trayectoria”, decididamente, no se subsume en el concepto
“primer premio” previsto en la ley como primer requisito para acceder al beneficio
al mérito artístico.
14. Los actores censuran una interpretación estricta de la norma
que impide al premio que han obtenido “encajar” perfectamente y sin crujidos en
la prognosis de la ley. Por el contrario auspician otra más amplia que los
comprenda, ya que -afirman- sus derechos son previsionales y la hermenéutica a
utilizar para subsumirlos normativamente ha sido tradicionalmente generosa.
En términos civiles, pretenden que la subsunción tenga en cuenta
el resto de las pautas valorativas que indica seguir el artículo 2 del C.C.C.: “…. las
finalidades de la ley, las leyes análogas, las disposiciones que surgen de los
tratados sobre derechos humanos, los principios y los valores jurídicos, de modo
coherente con todo el ordenamiento”.
En dichos de la Suprema Corte: "la exégesis de la ley requiere la
máxima prudencia, cuidando que la inteligencia que se le asigne no lleve a la
pérdida de un derecho, o el apego a la letra no desnaturalice la finalidad que ha
inspirado su sanción, pues es regla de interpretación de las leyes dar pleno efecto
a la intención del legislador, computando la totalidad de sus preceptos de manera
que se compadezcan con el ordenamiento jurídico restante y con los principios y
garantías de la Constitución Nacional. Ese propósito no puede ser obviado por los
jueces con motivo de las posibles imperfecciones, toda vez que no debe
prescindirse de la ratiolegis." (4)
15. Las normas que la regulan -ley 7849 y reglamentos 2966/87
y 881/91- nos indican que la pensión al mérito artístico constituye una
subvención estatal, un beneficio no contributivo incluido dentro de las
competencias denominadas de fomento de determinadas actividades, propias de
la administración.
Las facultades por las cuales el Estado Nacional promueve
actividades u objetivos se encuentran presentes en el preámbulo de la
Constitución Nacional –“promover el bienestar general”– y su texto las asignó al
Congreso de la Nación Argentina -artículo 75 inciso 18, otrora 65 inciso 16:
“proveer lo conducente a la prosperidad del país …” - y es por todos conocida
como la cláusula del progreso.
La vastedad del abanico temático abarcado por el estímulo estatal
permitió a la jurisprudencia de la Corte Suprema y a la doctrina incluir dentro de
sus fronteras a la actividad cultural y particularmente al reconocimiento de
quienes son sus hacedores por medio de pensiones vitalicias o subvenciones del
erario público. (5)
Nuestra provincia, en consonancia con la matriz nacional, ha sido
fecunda al programar en su texto constitucional estímulos estatales de lo más
diversos (6), entre los que se incluyó y en lo que aquí interesa a la cultura. La
definió en su artículo 26 como derecho fundamental y comprometió al Estado a la
promoción, protección y difusión del folclore.
Las pensiones al mérito artístico constituyen concreciones del
aliento oficial a la actividad cultural en cuanto promueve a las personas físicas
realizadoras de la música vernácula.
Presupuestariamente, son subvenciones del tesoro no
contributivas y sin contraprestación alguna (7), destinada a particulares
beneficiarios directos de la redistribución de la renta fiscal. Se financian mediante
aportes del tesoro de la provincia.
No son beneficios jubilatorios en la medida en que las jubilaciones
y pensiones previsionales diseñados por la Constitución Provincial son
contributivas.
Las letras de los textos regulatorios de ambos institutos son
sumamente claras al respecto y despejan cualquier duda sobre la naturaleza
jurídica del beneficio.
El artículo 6 del reglamento 2966/87 dispuso que “El Estado
provincial deberá remitir los fondos necesarios a la Caja de Jubilaciones y
Pensiones de la Provincia para atender los beneficios que se crean por la
Ley 7849”; mientras que el artículo 41 de la Constitución Provincial ordenó a la
H. Legislatura dictar una ley “...con sujeción a normas técnicas que tenga en
cuenta el principio de proporcionalidad entre los aportes y beneficios, el
tiempo de los servicios y la edad de los beneficiarios, sin excluir los aportes del
Estado, de las municipalidades y las comunes… ” (los destacados no son de los
originales).
Las asignaciones al mérito artístico tienen en común con el resto
de las jubilaciones y pensiones del sistema previsional entrerriano es que quienes
postulen para titularizar alguno de los beneficios deben efectuar el
correspondiente trámite por ante la Caja y será dicho organismo el que analice el
cumplimiento de los requisitos para acceder y en tal caso, los abonará. (8)
16. Al igual que el resto de la actividad jurídica administrativa del
Estado, el otorgamiento o denegación del fomento estatal está sometido a control
jurisdiccional.
Las condiciones en las que la administración legisla y ejecuta la
cláusula del progreso carece de sistematización en el derecho administrativo
local, de ahí que la jurisdicción deberá analizar al enjuiciarla, los aspectos
estructurantes y comunes a toda actividad administrativa, entre los que se
encuentran pero no agotan el tema, los que siguen:
• El el respeto por el principio de legalidad. En la ley
deben estar establecidos los estándares y requisitos a cumplir para acceder al
fomento estatal; (9)
• la razonabilidad y proporcionalidad de los beneficios
otorgados. El Estado para fomentar determinada actividad o denegar su auspicio,
deberá utilizar medios adecuados a los fines perseguidos, es decir debe adecuar
los medios legales a los objetivos concretos, de modo que los primeros no
aparezcan infundados, arbitrarios o desproporcionados; (10)
• que la administración al otorgar o denegar una
subvención no caiga en arbitrariedad, sectarismo, favoritismo, parcialidad a costa
de la colectividad; (11) la asignación del fomento debe cumplir con la igualdad de
tratamiento, la transparencia, la publicidad y la concurrencia. (12)
17. Los actores pretendieron que la administración utilice una
hermenéutica amplia al valorar el premio que obtuvieron y que presentaron como
título para acceder a la pensión al mérito artístico.
En concreto aspiraron a una interpretación que abarque un
supuesto no previsto textualmente ni en la letra de la ley ni en su reglamento.
¿Es una pretensión jurídicamente posible ?
No y por una razón de fuste.
Una ponderación del “premio a la trayectoria autoral” que lo
subsuma en la prognosis legislativa limitada a un “primer premio”, como la
requerida por los actores, violenta de modo manifiesto el principio de legalidad.
Ya concluimos que en ambos premios no hay equivalencia, dato
necesario para asimilarlos en sus consecuencias. En tales condiciones no es
posible sostener una extensión analógica que los equipare, ya que, insistimos, en
el galardón invocado por los actores no hubo -al menos a la vista- jurado,
reglamento, compulsa, orden de mérito, premiación, derecho a la impugnación y
demás caracteres del procedimiento de selección que supone el otorgamiento de
un primer premio y permita a la administración premiar al “discernido” por los
organismos que mencionan los artículos 1° y 2° de la ley y su reglamento al
conceder la pensión al mérito artístico.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación ha admitido la
extensión analógica de las pensiones similares al aquí analizado únicamente en
aquellos casos en que la reglamentación así lo había efectuado previamente (13);
de lo contrario se deja librado a la arbitrariedad de la autoridad otorgante del
premio a quién se concederá o no el beneficio a financiar con las arcas del tesoro
público.
En nuestra provincia, una interpretación extensiva del premio
exigible para titularizar la pensión al mérito artístico implicará que bastará con
que SADAIC otorgue una distinción, de la naturaleza que fuese, para que su
favorecido solicite el beneficio que deberá otorgar la Caja y abonar la comunidad
toda.
Si la administración no delimita o precisa cuales deben ser las
características del galardón habilitante para que quién lo obtenga pueda acceder
a la asignación vitalicia; tal precisión queda en órbita del organismo que lo
concede, delegación no admitida en nuestro sistema por violar los principios de
legalidad y no delegación, artículos 65 y 45 de la Constitución Provincial.