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El segundo poder social fue el más afectado: la nobleza, dejando de fungir como
autoridad máxima de sus territorios a tener que reconocer al monarca como poder
superior, en el caso español, la guerra de sucesión fue fundamental, ya que los reyes
católicos lograron conseguir el reconocimiento de la alta nobleza al ofrecer
recompensas a sus adeptos.
Como tercer poder social aparecen las ciudades, estas habían desarrollado propias
jurisdicciones en contraposición al poder nobiliario rural, donde se alzaba y establecía
una elite letrados y comerciantes con un fuerte localismo e identificación con la ciudad,
finalmente el poder real lograra penetrar mediante el establecimiento de funcionarios
reales que lograran establecer el control de la justicia, administración y finanzas de la
ciudad.
Durante este trabajo el autor identifica a los distintos límites del poder real, estos
siendo:
Por un lado las obligaciones derivadas del propio oficio de reinar, que posicionaban al
rey como garante de los fines últimos de la sociedad (ley divina y moral), como el
respeto de los equilibrios tradicionales que se daban en la sociedad del Antiguo
Régimen (justicia).
Además el rey no podía avanzar por sobre la propiedad de los súbditos, sobre sus
derechos obtenidos previamente mediante un pacto o contrato reconocido por el derecho
de las gentes: los privilegios concedidos en virtud de un servicio prestado o por prestar;
los derechos adquiridos por sentencia; los derechos adquiridos por herencia. La
capacidad de acción del rey era limitada de este modo en el plano de los mecanismos
jurídico-jurisdiccionales.
Luthz bajo una lógica funcionalista, plantea que en base a las precondiciones o
caracteres previos se puede explicar los motivos de los sucesos venideros, en este caso
la ruptura reformista.
En el capo de lo social:
En el campo de la economía:
En el campo de lo cultural:
- Otros factores pudieron hacer subir los precios en Europa sin que sea obligado el
aumento por el oro de América.
El alza de los precios también tuvo repercusiones en Europa ya que si los precios
subieron fue porque, por todas partes, hay mas oro y plata.
17. y 18. HILTON. DOBB. Estudio sobre el desarrollo del capitalimo (feudalismo a
capitalismo)
Este fue uno de los mayores conflictos europeos de la Edad Moderna y se dará
principalmente en territorio alemán. Esta guerra tiene distintas causas de carácter
político, económico o confesional, pero principalmente se debe a la división religiosa en
el seno del Imperio, resultado de la Paz de Augsburgo de 1555.
Ante medidas favorables a la nobleza católica y anti protestantes por parte del nuevo
rey de Bohemia y Hungría, se formó un bando (reunido en Praga) en su contra, que
envió un memorial de protesta y arrojaron a dos regentes católicos por la ventana del
palacio real el 23 de mayo de 1618. El movimiento se fue contagiando a distintos
estados donde se armaron ejércitos que apoyaban la rebelión. Contra quienes se fue
formando un bando imperial. La muerte del emperador Matías en 1619 fue el paso
definitivo a la guerra.
En 1620 hubo un importante avance por parte de los católicos que derrotaron a tropas
protestantes, apoyados por el ejército español → Generando una reacción católica y
absolutista sobre los territorios conquistados.
En 1625 España se tenía que enfrentar a varios enemigos: Francia; Países Bajos e
Inglaterra
2° Periodo 1630-1648
Esta vez la amenaza vino del rey de Suecia quien contaba con un importante ejército
bien armado. Desde 1630 que desembarcó en Pomerania se fue expandiendo hacia
regiones del noroeste de Alemania, que luego sería apoyado y subsidiado por Luis XII.
→ En 1631 en la Batalla de Breitenfeld se da una de las más importantes victorias
protestantes derrotando al ejército de Tilly. Permitiendo la expansión sueca hacia el
centro y oeste de Alemania. → En 1633 forma la Liga de Heilbronn con unos príncipes
protestantes del centro oeste. Esta década comienza con victorias para el bando
protestante y avances territoriales de Suecia, bloqueando caminos a España.
La última operación bélica fue otra invasión sueca de Bohemia. con el ataque a Praga en
1648, tomaron y saquearon la ciudad lo que dio cuenta de la fuerza del ejército sueco.
Guerra en los Países Bajos → Va a concordar con la segunda fase de la guerra de los 30
años.
La derrota en la batalla naval de Dunas (1639) significó para los españoles una
reducción de su poderío naval en el mar del norte. De este modo se incrementa la
superioridad naval neerlandesa y el aislamiento marítimo de los Países Bajos españoles.
→ EN 1643 los franceses van a tener una victoria en la batalla de Rocroi, logrando un
dominio sobre Alsacia, Lorena y Tréveris desarticulando el camino español
(comunicación con el norte de Italia) facilitando los posteriores avances franceses y
neerlandeses. → Según Ribor la paz se va a dar por el agotamiento de las partes
llegando a negociaciones en 1646. → En enero de 1648 se firma un tratado que
reconoce la independencia de 7 provincias del norte de los Países Bajos, estableciendo
la división definitiva. El sur católico (10 provincias) seguía perteneciendo a la
monarquía española.
22. Smit. La revolución en los países bajos. (independencia de los países bajos)
Revolución de los países bajos: Smit define el concepto de Guerra interna como “todo
recurso a la violencia dentro de un orden político para cambiar la constitución, sus
dirigentes o su política” (Smit 1981: 32). Esta se centra en la utilización de la violencia
y en el modelo de sociedad conflictiva que concibe al orden social como un equilibrio
de poder precario continuamente en duda, que sin embargo afirma que la aplicación de
la violencia es una desviación respecto de las normas anteriormente compartidas (Smit
1981). Según el autor, este enfoque aplicado a la Revolución neerlandesa ayuda a
comprender la naturaleza de las relaciones de poder, a identificar los grupos de poder en
pugna y a tener en cuenta las posibilidades del gobierno para reprimir una guerra
interna, limitando su atención a la estructura política, las cuales en ocasiones se
encontraban en conflicto.
Con respecto a la estructura política de los Países Bajos el autor dice que resulta difícil
afirmar la existencia de una comunidad moral. Ya que a lo largo de los siglos XV y XVI
los reyes se encargaron de reunir una serie de provincias neerlandesas muy diferentes
entre sí en base a lo económico y político, pero nunca las había unificado. De esta
manera los Estados Generales no tenían un cuerpo representativo nacional con
anterioridad a la revolución. Así estos Estados Generales fueron el resultado y no una
precondición de la revolución. Ya que con anterioridad las provincias patrimoniales no
lo veían como un cuerpo nacional representativo. Es así que las únicas corporaciones
que podían presentar una conciencia primitiva de unidad y sentido nacional, y que tal
vez llegaron a conformarse como comunidades morales con normas definidas fueron las
provincias tomadas individualmente. Sin embargo, el autor reconoce que los verdaderos
focos de poder eran las dinastías nobles y las ciudades. Situaciones que quisieron ser
aprovechadas por el poder real para su centralización, que no obstante los estados
provinciales aparecieron redes de obstrucciones, sabotajes y luchas contra agentes del
gobierno central. Así el gobierno carecía de un aparato burocrático y recaudador de
impuestos propio, viéndose forzado a dejar en mano de los estados muchas funciones
administrativas. De esta manera el autor caracteriza al sistema político de los Países
Bajos con una estructura laxa en la que abunda la desconfianza social, el orgullo de la
autonomía y las inquietudes económicas y xenófobas locales y en donde la cooperación
cedía con facilidad ante la amenaza de una acción cuasi legal a todos los niveles (Smit
1981). Siendo la inestabilidad de la estructura política una de las precondiciones
principales para la Revolución de los países Bajos. Para el autor, también va a ser de
importancia la situación socio-económica como precondición de la Revolución de los
Países Bajos. Lo que hace Smit es ver como el desarrollo socio-económico general
afecta el comportamiento político de los tres constituyentes principales: la nobleza, la
población de las ciudades y el príncipe. La nobleza, dice el autor, no se vio afectada con
la misma intensidad en todas partes por fenómenos económicos como la inflación.
Quienes mayoritariamente van a seguir teniendo el control sobre zonas rurales, para
quienes las ciudades no eran rivales. Sin embargo, las presiones económicas para Smit
van a constituir un incentivo decisivo para la revolución de una clase social que se
sentía acosada por todos los flancos. En el caso de la población de las ciudades hubo
situaciones de lazos, como el caso de las clases bajas y la burguesía cuando fueron
aumentando los agravios de estos grupos con el Gobierno. Donde los grupos de grandes
y pequeños propietarios van a tener razones para estar descontentos con políticas
fiscales y financieras del gobierno ya que se habían convertido en una fuente importante
de préstamos para el Estado. Según el autor “la política oficial del endeudamiento
incesante y la situación de las finanzas urbanas precipita a muchos patricios de ciudades
y a pequeños inversores por el camino de una firme oposición y, finalmente, de la
revolución” (Smit 1981: 53) El autor menciona que hacia la década de 1570-80 se hacía
evidente que la conciencia nacional no era lo suficientemente fuerte como para servir
como una creencia general unificadora. Sino que esta fue el resultado de una
precondición de la revolución. Filtrando de esta manera argumentos nacionales o
patrióticos en la literatura de la época, constituyendo así un elemento adicional en el
movimiento.
En cuanto a lo religioso, se va a poner en tela de juicio el monopolio de la Iglesia,
situación en la que, según el autor, la gente se alegró de ver como desaparecía el
monopolio. Contexto en el cual, hacia la década de 1570, en una fase de carácter
burgués, el catolicismo se va a convertir en sinónimo de España y de aristocracia,
mientras que el calvinismo lo va a ser de patriotismo y burguesía, “los dos hermanos
gemelos del nuevo orden de cosas” (Smit 1981: 56)
Tesis de Ch. Tilly → Este encuentra una relación entre las guerras, la coerción y la
relación entre estados a través de la guerra como elementos esenciales en la formación
de los estados. → Donde la creación de fuerzas armadas por parte de los soberanos
creaba estructuras del estado perdurables debido a que su necesidad de formación y
mantenimiento originaron la creación de organizaciones complementarias
(reclutamiento, abastecimiento, tribunales, tesorería). Esta administración (creciente
burocracia del gobierno) y los recursos financieros (necesarios para la preparación para
la guerra), se obtuvieron con mayor facilidad en las economías comerciales y ricas en
capitales. Los ejércitos permanentes responden a la necesidad de expansión del aparato
central del Estado. De modo que estaban constantemente en guerra. → Se le critica que
considere a la coerción como único elemento de unión entre gobernantes y gobernados,
así como su determinismo en que la coerción influenciaba a los factores militares y el
desarrollo del capital comercial.
21. FERNANDEZ ALBALADEJO. Veinticinco años de debate sobre la crisis del siglo
XVII
Por su parte el trabajo de Trevor-Roper parecía encaminarse más a realizar una crítica
de los supuestos marxistas que a refutar la tesis de Hobsbawm. Si a este lo que le
interesaba era la mutación decisiva que transformó al feudalismo en el siglo XVII, lo
que le preocupa a Trevor-Roper es encontrar una explicación capaz de dar cuenta de las
revoluciones que ocurren en Europa entre 1640 y 1660. Sumado a una convicción de
que no era necesario apelar a una crisis económica para explicar las revueltas, sino que
éstas podrían haber sido evitadas con reformas a tiempo. El trabajo de Trevor- Roper
estaba influido por la discusión que se registraba en la historiografía, su tesis apuntaba a
que la crisis del siglo XVII fue consecuencia de la liquidación de monarquías del
renacimiento por un estilo de gobierno distinto, el de la monarquía absoluta. La crisis se
articulaba como un rechazo de la sociedad a esta nueva forma monárquica que se
pretendía imponer y se concentraba en un visible enfrentamiento entre la Corte y cada
país. En definitiva, una posición del debate de la crisis se centraba en el traspaso de un
sistema económico a otro, mientras que otro se centraba en el traspaso de un sistema de
poder a otro.