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Foro 3.

ARTÍCULO 1
¿Por qué Honduras es un País Pobre?
Por: Marco Coello Publicista

Se dice que Honduras es un país democrático (derechista). Pero su comportamiento

hace pensar que es un país “socialista”.
En el siglo 21 se define el grado en que un país es socialista por la relación entre
su Producto Nacional Bruto (PNB) y el gasto del gobierno. En Honduras el PNB es
L. 300 billones y el gobierno gasta L. 164 billones. Por tanto 164 entre 300 es igual
al 42%. Honduras es un país 42% socialista.
En cambio, USA: 21%, China 13%, Chile 11%, Cuba 40%, Costa Rica 14%, México
11%, El Salvador 9%, Guatemala 9%. Fuente: Banco Mundial: Info.

Este gasto exagerado del gobierno tiene muchas consecuencias, casi todas
negativas. Pero lo más grave y el factor que más aumenta la pobreza, es que el
85% de este gasto, el gobierno lo destina a sueldos. O sea que todo el dinero de los
impuestos (12%) se va en pagar activistas políticos, activistas de todos los partidos,
viejos, nuevos e inventados, y burócratas. Con la notable excepción de algunos
maestros de ciencias, soldados y policías, el resto de los empleados del gobierno
solo tienen un objetivo: Justificar su puesto haciéndole más difícil la vida a todos los
que los rodean, especialmente a los ciudadanos que desean poner un negocio.

Esta es la razón porque la que no hay, y no habrá nunca, con este modelo
económico, carreteras nuevas, hospitales nuevos, medicinas en los hospitales,
escuelas nuevas, calles nuevas de doble altura, puertos nuevos, ciudades nuevas,
edificios nuevos, internet barata para todos. Hay alrededor de 400,000 empleados
entre gobierno central y municipalidades. Por otro lado, solo hay 1.3 millones de
empleados privados. De los 8 millones de hondureños, 4 millones son menores de
18 años y 1 millón está en USA que con sus remesas, trabajo y sufrimientos son los
que mantienen a nuestros gobiernos corruptos e ineficientes. En resumen, 2.3
millones de hondureños mantenemos a los otros 5.7 millones. Por ello, de cada 5
que trabajamos, 2 días son para mantener a otros que ni conocemos.

¿Por qué se mantiene a través de más de 30 años este estado de cosas? Porque
la única clase social que ha tenido éxito total y ha salido de la pobreza en los últimos
30 años es la clase política. El sueño de dejar de ser pobre y llegar a la clase media,
media alta y clase alta se le ha cumplido a casi todos los políticos y activistas de
todos los partidos. Han creado un sistema magnífico y perverso: Amparados en el
concepto de “democracia”, se han apoderado de todos los poderes del Estado y han
hecho y seguirán haciendo todo lo que les dé la gana para mantener sus privilegios,
con total impunidad y en nombre de beneficiar a los más pobres, con la complicidad
de los sindicatos, las iglesias, y sobre todo, de la ignorancia económica de la
población y de sus líderes de opinión.

La segunda gran causa de nuestra pobreza es la demografía, por ser Honduras un

país donde el 50% de la población es menor de 18 años. La única manera como
estos jóvenes no se van a convertir en delincuentes es con ciertos de miles de
empleos y educación práctica para optar a mejores empleos. Esto solo no va a
suceder, sino que el problema se va a agravar porque no hay suficiente creación de
empresas pequeñas, que son las únicas que, en todas las economías del mundo,
producen el 75% de los nuevos empleos. Pero esto es imposible por la enorme
cantidad de leyes y obstáculos que existen para la creación de nuevos negocios.

La tercera gran causa de la pobreza son las leyes laborales socialistas, con las que
es extremadamente difícil y caro despedir a un empleado. Estas leyes que datan
desde los años 80s son de corte socialista europeo, y en nombre de la protección
de los derechos del trabajador, tienen el efecto contrario: Por su culpa nadie contrata
al millón de hondureños desempleados, que son los verdaderos hondureños más
pobres. Si a esto le sumamos el salario mínimo más alto de Centroamérica y
Latinoamérica, comprendemos porqué la industria del banano y sus 80,000 empleos
se fueron de Honduras para Panamá, Nicaragua y Costa Rica para nunca regresar,
y así lo harán las maquilas que se irán a países como Nicaragua donde el salario
mínimo es de $ 225 v. $ 350 en Honduras y la energía es más barata. Las leyes
laborales de Honduras solo han producido una cosa: Desempleo.

Finalmente, la deuda externa (contraída para pagar sueldos de gobierno), la artificial

paridad del lempira que solo beneficia a los políticos, todo nos lleva a la absurda
delincuencia hermana de la total impunidad y al final, a la falta de esperanza.
Por todo esto y más, somos y seguiremos siendo un país pobre.

Este artículo fue publicado originalmente el 14 de julio de 2013, en el diario nacional

“La Tribuna”, pero está tomado de: https://www.eleutera.org/por-que-honduras-es-
un-pais-pobre/
ARTÍCULO 2
Causas de nuestra pobreza.
Por: Benajamín Santos

Son muchas: internas y externas, personales y colectivas, divinas y humanas. Solo

vamos a mencionar algunas.

1. La pereza. Me consta que la gente que tiene trabajo trata de rendir lo menos
posible, siempre que cobre completo y puntual su sueldo. He visto en el campo que,
si alguien en una semana gana para comer dos, no vuelve al trabajo la siguiente
semana y, aunque no en la misma forma, lo mismo se ve en el trabajo de oficina.
Hubo un sociólogo que atribuía esa conducta a la desnutrición, lo mismo decía de
la costumbre del hondureño de apoyase con un pie en la pared mientras conversa
o hace alguna actividad que se lo permita. Frecuentemente se destaca nuestra
pereza en comparación con la actividad de otros países centroamericanos. Yo
explico que los salvadoreños son activos, porque el territorio es pequeño y tienen
que dedicarse al comercio, actividad más dinámica que la agricultura.

2. El conformismo. Dios me creó pobre, porque los ricos ya vienen contados.

¿Quién se esforzará en salir de la pobreza si con eso va a contrariar la voluntad de
Dios? A mis alumnos les consta que paso en una campaña permanente en contra
de la costumbre tan arraigada de echarle la culpa a Dios de lo bueno y de lo malo
que nos ocurre, como si Dios en vez de crear gente inteligente y dotada de voluntad
hubiera echado al mundo títeres para manejarlos a su gusto. Al nacer traemos quién
más quién menos las facultades físicas y psicológicas para ser autores de nuestro
propio destino.

3. Falta de moral y de respeto a la ley. La búsqueda de una vida fácil, lleva a

muchos a caer en la corrupción y en otros delitos por violación a la ley. ¿De dónde
hemos sacado los hondureños que lo que es de todos y para todos, es de quien se
lo apropie primero desde los cargos públicos? Quien lo hace cree que ha
demostrado ser vivo y que los demás son tontos, por ese camino se han saqueado
los recursos del Estado y se han echado a perder las instituciones creadas para el
servicio colectivo. Los ejemplos abundan: el antiguo Banco Nacional de Fomento,
el Banco Municipal Autónomo, BANADESA, el Seguro Social, el Instituto de
Formación Profesional, la Empresa Nacional de Energía Eléctrica, HONDUTEL y
dejo de contar. Ahora el Estado está invirtiendo cantidades enormes de dinero en la
persecución de los culpables, aumento del presupuesto para la seguridad y el orden
público sin que los resultados no tengan la contundencia que esperamos sin negar
que algunos avances se han logrado. Si todos respetáramos las normas morales y
como complemento el respeto a la ley, otro gallo nos cantara. Por el contrario, la ley
y su aplicación se somete a las conveniencias políticas, e intereses personales.
4. El temor y la complicidad. El temor es un sentimiento generalizado en la
población hondureña. Temor a la autoridad porque venimos de una larga tradición
de injusticias, arbitrariedades y de complicidad con la delincuencia. Quienes se
dedican a cobrar la extorsión a todos los negocios en un día y hora determinada lo
saben. Nadie se atreve a denunciarlos, por temor a ser víctimas de una acción
criminal y porque, aunque no se crea, en algunos casos determinados policías en
patrullas son cómplices.

5. La dependencia. No se trata de proclamar la independencia nacional al estilo del

siglo 19. En general nuestras leyes son copiadas de otros países casi sin ninguna
adaptación. Así fue siempre como cuando copiamos el Código Civil de Chile que a
su vez lo había copiado del Código de Napoleón, con el Código de Comercio que
trajimos de México o del Código del Trabajo que trajimos de Colombia o la
legislación penal que adoptamos y no adaptamos tomándola de España. ¿Es malo
copiar leyes de países más desarrollados? No necesariamente, pero debería de
haber un proceso de adaptación al contexto económico-cultural de Honduras.
Desde el último cuarto del siglo pasado se habla más de interdependencia para
subrayar que los problemas actuales requieren la coordinación de los estados a
nivel regional y mundial. Nada decimos de la dependencia en materia penal,
monetaria y tecnológica.

Tomado de: https://www.latribuna.hn/2019/02/23/causas-de-nuestra-pobreza/