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LOS INDIGENAS DE CORDOBA

BAJO EL REGIMEN COLONIAL


(1570-1620)

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Felisa Josefina Piaña de Cuestas
LOS INDIGENAS DE CORDOBA BAJO EL REGIMEN COLONIAL
1570-1620
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© Primera edición, 1992
Edición del autor *p 501
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Tapa: Pablo Cañedo

LOS INDIGENAS DE CORDOBA


BAJO EL REGIMEN COLONIAL

Dirección General de Publicaciones


-
(1570 1620)
de la Universidad Nacional de Córdoba
-
Córdoba República Argentina

Con el aval de la
Facultad de Filosofía y Humanidades
de la Universidad Nacional de Córdoba

I.S.B.N. N" 950-330050-9

Queda hecho eí depósito que marca la Ley 11,723


Derechos Reservados.
Printed in Argentina - Impreso en la Argentina

L
A Raúl, Sergio y Cesar Cuestas

Para que Andrés Cachimchilin, aquel "indio atre-


vidoy gian cimarrón", hoy pueda encontr ar lazos
de solidaridad más amplios que ios de entonces .
AGRADECIMIENTOS

Muchas hansido las personas y las instituciones que, en el transcurso de seis


años, han colaborado con sus comentarios, sugerencias y apoyo constante.

Ante todo debo un agradecimiento especial al Dr. EnriqueTandeter, Director de


esta Tesis, en quien encontré una permanente guía y respaldo para mi trabajo.

El Profesor Roberto Miaíello y el Dr. Eduardo Gomez Molina revisaron los


borradores relativos al marco geográfico; y otro tanto hizo la Profesora Marta
Otonello con losborradores sobre las estrategias de reproducción de la población
indígena. Con cariño agradezco a la Dra. Ana María Lorandi los diálogos man¬
tenidos sobre la condición de la población nativa en la antigua Gobernación del
Tucumán.

El Consejo Nacionalde InvestigacionesCientíficas y Técnicas otorgó sucesivas


becas, que facilitaron la continuidad de esta investigación. La Dirección y el
personal del Archivo Histórico de la Provincia de Córdoba, rodearon de amabili¬
dad y generosidad la consulta de sus documentos. Profesores y estudiantes de la
Escuela de Historia de la Universidad Nacional de Córdoba, estimularon el
trabajo.

El mejor y máscálido de losincentivos surgió de mi esposo e hijos. Mirar juntos


y en la misma dirección permitió que disfrutara con la tarea emprendida.

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PROLOGO

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El presente trabajo es un estudio sobre el surgimiento de la sociedad colonial
en una de las regiones más meridionales del Virreinato del Perú: el distr ito de la
ciudad de Córdoba, dependiente de la Gobernación del Tucumán; y comprende el
período en que la encomienda tiene el monopolio de la mano de obra indígena
Tal como lo indica su título, el enfoque está centrado en la población nativa
Esta perspectiva, lejos de parcializar el análisis, ha hecho las veces de hilo
conductor en la reconstrucción de una etapa formativa y poco conocida
t En 1563, una Real Cédula creaba la "Gobernación del Tucumán, Juries y
Diaguitas", colocándola bajo la jurisdicción de la Audiencia de Char cas, Sus
límites quedaron bien demarcados sólo hacia el oeste y el suroeste, donde la
Cordillera de los Andes y los términos de la región de Cuyo daban comienzo al
Reino de Chile.
Diez años después, al fundar la ciudad de Córdoba, don Jerónimo Luis de
Cabrera extendía el territprio hacia el sur, buscando una salida al Atlántico para
contratar con los Reinos de Castilla. Desde entonces sus gobernantes llevaron el
titulo de "Gobernador del Tucumán, Juries, Diaguitas y Comechingones".
El Tucumán estaba ubicado en los confines del Virreinato del Perú; y en 1612,
el virrey Marqués de Montesclaros, recogiendo la opinión de sus predecesores, la
definía como una "tierra tan a trasmano".
Por esa época, no sólo las ieguas de tierra alejaban a la Gobernación de los
centros políticos de Lima y Charcas. El proceso de su conformación colonial
también había seguido caminos diferentes, y dentro del conjunto virreinal mos¬
traba algunos anacronismos. Cuando Montesclaros escribía aquellas palabras, el
sistema del servicio personal continuaba siendo la forma de tributo de los indios
de encomienda.
Los recursos de su territorio no alcanzaban para subsidiar a lasarcas reales,por¬
to que la Provincia del Tucumán nunca fue considerada como un actor importante

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Y extracción colonial,el trabajoen los obrajes textiles, la tasa, los tributos,la amenaza
dentro del proyecto toledano. El afianzamiento del orden colonial estuvo en de los territorios indígenas todavía no conquistados, son temas constantes.
manos de sus encomenderos; y ni la Audiencia ni el virrey manifestaron intención Si bien están referidos al Virreinato en general, y en pocas ocasiones hacen
alguna por incorporar el territorio a la reorganización que en 1572 se había mención privativa a la Gobernación del Tucumán, han sido importantes para
introducido en el Virreinato. nuestro tema. Los españoles que se afincaron en Córdoba habían hecho sus
Como parte integrante de la Gobernación del Tucumán, la jurisdicción de experiencias anteriores en territorios más próximos a la sede virreinal, y siempre
Córdoba es un buen ejemplo de ese mosaico de formas coloniales que confor¬ miraban como paradigma los éxitos económicos y sociales de sus compatriotas en
maban el Virreinato del Peni, cuya silueta no se resume solamente por las ca¬ el Perú.
racterísticas que presentaban sus regiones centrales. Si los memoriales de virreyes nos entregaron un marco general de referencias
Alejado de los centros virreinales, y excluido de las grandes estrategias del sobrelas políticas coloniales pensadas y ejecutadas en el Virreinato, la correspon¬
Estado español, el distrito se integró activamente en las rutas comerciales que dencia de la Audiencia de Charcas nos fue circunscribiendo cada vez más a
desde el Atlántico se dirigían hacia el Potosí. nuestra delimitación geográfica
En pocos años, los conquistadores que habían llegado a la región sólo "con su Hay en ellas noticias de los conquistadores que recorrieron el Tucumán,
capa y espada", pudieron mostrar una prosperidad cuya base estaba en el trabajo de informes sobre la conducta de encomenderos y gobernadores, descripciones
los indígenas de las Sierras de Córdoba. Las prácticas del cuerpo social giraron en
geográficas, detalles de las expediciones militares, testimonios sobre la situación
torno a dos principios que los españoles sintetizaron con claridad: "¡a tierra sin
indígena,datossobreel sistema tributarioy referencias a la vida civil y eclesiástica.
indios no se puede sustentar", y "aquí no hay otra cosa de que echar mano". Losdetalles más valiosos correspondieron a las últimas décadas del siglo XVI,
Aún cuando forma parte del Virreinatodel Perú,eldistrito presenta realidades
por el clima ideológico en el que surgieron. En ese lapso pareciera haber existido
diferentes, legislaciones disímiles, y hasta una cronología que no responde a los en las autoridades virreinales una necesidad de reconocer el estadode su distrito,
ritmos de las zonas andinas.
para elaborar seguidamente un proyecto que replanteara las relaciones entre
Por otra parte, el proceso de extinción de las formas organizativas prehispáni-
indígenas y españoles. Tal vez uno de los ejemplos más claros al respecto sea la
cas es más rápido que en otras regiones. De allí que, a pesar de haber buscado con carta al rey del oidor Matienzo.
insistencia las continuidades indígenas dentro de la vida colonial, casi impercep¬ A fines del siglo XVI y comienzos del XVII se originó una profusa correspon¬
tiblemente hemos ido centrando nuestro análisis en las rupturas. dencia de los gobernadores y cabildos del Tucumán. Localizadaactualmente en el
Archivo de Indias, fue publicada por Roberto Levillier, al igual que la de la
Audiencia de Charcas y los memoriales de los virreyes.
Con la gobernación de Ramirez de Velazco se inició un período de afianza¬
Los alcances de esa ruptura histórica se reflejan en la documentación que miento y consolidación del sistema colonial. Ese proceso, que requirió de defini¬
hemos utilizado. En cada una de ellas el relato está en manos exclusivas de los ciones en lo social, político y económico, se realizó a costa del surgimiento
españoles; y los nativos, aunque fueron el sostén del sistema colonial en la región, permanente de disputas entre las esferas de poder. Los problemas principales se
son habitualmente hombres anónimos. formularon en torno a la manera de integrar la sociedad indígena a la española: la
Las fuentes impresas procedentes de la administración española son particu¬ servidumbre, la perpetuidad de las encomiendas, las tasas y tributos, los reparti¬
larmente abundantes para el período que llega hasta 1615. Comprenden un mientos, fueron permanentes ejes de discusión. Los conflictos se plantearon en¬
abanicode documentación originada en losdistintosnivelesdel gobierno colonial. tonces entre la autoridad civil y religiosa por una parte, y entre gobernadores y
Desde memoriales de virreyes, que nos informaron sobre el estado general del cabildos por otra.
reino a su cargo, hasta las Actas Capitulares y el Libro de Mercedes de Tierras de La información que obtuvimos de esos relatos elevados al rey, al Consejo de
Córdoba, que nos introdujeron en las preocupaciones casi cotidianas de sus Indias, o a la Audiencia de Charcas, permitió armar un cuadro bastante aproxi¬
habitantes, a veces muy alejadas de los grandes ejes políticos diseñados desde mado sobre producciones regionales, conflictos jurisdiccionales, actividades de
Lima o Charcas. los religiosos, desórdenes climáticos, epidemias, sublevaciones indígenas, etc.
Los memoriales de los virreyes sintetizan las noticias más importantes del Las probanzas de méritos y servicios de los conquistadores también contribu¬
territorio a su cargo, explicando las consecuencias de las líneas de acción fijadas, yeron en la construcción de nuestro tema. Nos referimos a las publicadas en dos
y aconsejando sobre la continuación de la obra de gobierno. Las formas de

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colecciones documentales, la de Roberto Levillier, y la de José Toribio Medina. Capitulares; y en años recientes, Carlos Luque Colombres dirige la transcripción
Las probanzas proporcionaron datos de valor para la geografía y algunas e impresión de algunos periodos, En el texto del presente trabajo hemos utilizado
características externas de los indígenas. Se pudo seguir a través de ellas las rutas las siglas "AM " para referimos a la edición de 1882;y "AC.", para la impresa en
e itinerarios de las expediciones, conocer el número de miembros que las com¬ 1974.
ponían,obtener datos sobe la resistencia que presentaron los nativos,descubrir las La Gobernación del Tucumán carece hastael momento de una crónica conocida
relaciones ínter-étnicas que ios ligaban, y trazar un cuadro sobre las formas de dedicada a la historia de su descubrimiento y conquista. En el Archivo Histórico
asentamiento aborigen y las características de su sistema productivo de la Provincia de Córdoba un acta notarial fechada el 17 de abril de 1593, da
De las probanzas de méritos y servicios más notables por la información que se cuenta que Mateo Rosas de Oquendo, vecino de Santiago del Estero, hace
pudo extraer de ellas, podemos mencionar las de Tristán de Tejeda, Juan de donación al gobernador Ramirez de Velazco de una "Descripción, conquista y
Nodar, Juan Nuñez de Prado y Alonso de la Cámara. allanamiento de las Provincias del Tucumán". El escribano señala que la obra consta
Con el Libro de Mercedes de Tierras y las Actas Capitulares de Córdoba, nos de 300 hojas;y aunque está dirigida al Condestable de Castilla, como su autor está
pudimos introducir de lleno en las informaciones locales de la administración imposibilitado de viajar para solicitar la impresión, otorga poder' para que el
española. A partir de estas fuentes impresas, las inferencias sobre la vida colonial gobernador haga los trámites correspondientes. La obra se halla extraviada hasta
en el distrito se volvieron más simples y directas. A diferencia de las probanzas de nuestros días.
méritos y servicios, no encontramos aquí la obligación del escribiente de realzar En cambio, en las crónicas sobre el Virreinato del Peru se encuentran algunas
hazañas guerreras españolas. Sus preocupaciones eran más prácticas, como referencias a la Gobernación del Tucumán, casi siempre relacionadas con las
precisar la ubicación de las tierras otorgadas en merced; y cotidianas, como el "entradas" que más impresionaron a los contemporáneos por las expectativas que
abasto o la defensa de la ciudad. crearon. Tal el caso de las expediciones de Diego de Rojas o las de Pedro Gonzalez
El Libro de Mercedes de Tierras es un importante corpus documental del de Prado.
Archivo Municipal de Córdoba. Su valor para nuestro tema residió en la posibili¬ Diego Fernandez es el más explíci tode los cronistas dela época,y posiblemente
dad de reconstruir, a partir de sus datos, los primeros pasos de la colonización su relato sobre el descubrimiento del Tucumán sea el más exacto de todos. En
española en la región, y las formas de asentamiento del periodo prehispánico e tanto, Pedro Cieza de Leóny Pedro Gutierrez de SantaClara noson tan específicos,
hispánico. ya que dedican pocos párrafos a este tema Lo mismo sucede con Antonio de
Teniendo como base la información proporcionada por este Libro de Mercedes Herrera.
nos aproximamos al paisaje de la jurisdicción, localizamos encomiendas, elabora¬ Ruy Diaz de Guzman, autor de la primera crónica rioplatense, incluye men¬
mos una toponimia aborigen, y pudimos reconstruir en buena medida el sistema ciones a ¡as expediciones de Diego de Rojas y Fr ancisco de Aguirre, así corno a la
colonial de apropiación de tierras y de mano de obra indígena, tierra de los comechingones. Sus noticias poseen un mayor valor documental que
La publicación de su transcripción in extenso fue realizada por el profesor las de los cronistas anteriores, puesto que residió en la ciudad de Santiago del
Aurelio Tanodi, y en adelante figurará en las notas de referencia con las siglas Estero a partir de 1602.
"LM" Durante los siglos XVII y XVIII losmiembros dela Compañía de Jesús, a través
Las Actas Capitulares de la ciudad es otro corpus documental del Archivo de comentarios fragmentarios y cronistas, fueron dejando testimonios sobre la
Municipal de Córdoba. A diferencia de! Libro de Mercedes abarca todo el arco historia de su orden religiosa. En todos los casos, la importancia de esas fuentes
temporal de nuestro tema, y sus asuntos son tan variados como los que absorbían radica en buena medida en la particular preparación intelectual de sus autores y
diariamente a los habitantes europeos del distrito. en la agudeza de sus observaciones.
Sus datos contribuyeron a la construcción de una relación histórica de los La llegada de los jesuítas a Córdoba coincide con el inicio de un período de
hechos y preocupaciones más importantes del gobierno de la ciudad: utilización consolidación religiosa en el Virreinato a través de los Concilios de Lima, ¡as
de la mano de obra indígena,articulación de los territorios aborígenes y españoles, directivas dadas por la Iglesia peruana sobre las doctrinas indígenas y las dis¬
sublevaciones, discusionessobre elacatamiento a normas emanadas de losniveles cusiones en torno a la restitución de los caudales aborígenes que debían realizar
superior es de la administración española, noticiassobre expediciones punitivas a conquistadores y encomenderos. Esta última cuestión, que aparece en forma
las zonas aún no conquistadas, cobro de tributos, abasto de la ciudad, etc. permanente en las crónicas jesuíticas, permitió conocer objetivos y métodos de
A fines del siglo pasado Luis Santillán Velez inicia la publicación de las Actas evangelización indígena, y los entretelones del enfrentamiento con el poder laico

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Las Cartas Anuas de la Provincia jesuítica del Paraguay, a la que perteneció el al rey—, la fundación de nuevas ciudades en los territorios conquistados, hizo que
distrito de Córdoba, proporcionaron a nuestro trabajo datos concretos, como en la práctica losnotarios fueran designados por las autoridades locales.Este es el
cantidad de sacerdotes y habitantes españoles, formas de trabajo del indígena, caso de Córdoba en las dos primeras décadas de su fundación, donde los escri¬
características y métodos de la evangelización, descripción del hábitat de los banos fueron nombrados por los gobernadores o tenientes de gobernadores.
nativos, etc La larga función notarial en la tradición española convirtió a los notarios en
Las crónicas oficiales de la Compañía de Jesús conforman una lista amplia, personajes de relieve en la vida de las ciudades. Su firma otorgaba validez a los
entre las que se cuentan las redactadas por Juan Pastor, Pedro Cano, Nicolás del documentos oficiales y privados. Esta raigambre en las costumbres hispánicas se
Techo, Pedro Lozano, José Guevara, y Pierre Charlevoix Por cierto, ninguno acentuó con la obligación de guardar los registros de escrituras para entregarlos
dedicó una obra específica a la historia de la Compañía en Córdoba o en la región a sus sucesores en el cargo, puesto que losdocumentos probatorios no perdían su
del Tucumán; en cambio, todos tienen como tema general a la Provincia jesuítica efecto con el transcurso de los años.
del Paraguay. De esta forma, las costumbres y la ley hicieron pasar por los registros notariales
De los nombrados anteriormente, Pedro Lozano es el que concentró nuestra gran cantidad de actos de la vida cotidiana: testamentos y codicilos, dotes y
atención por la abundancia documental de su trabajo, y porque en sus escritos "se tutorías, poderes, donaciones, ventas, inventarios de bienes y capitulaciones
halla todo cuanto hubiera podido pedirse en su época sobre crítica de fuentes", matrimoniales, para nombrar sólo una parte de ellos.
según indica Esteve Barba. Todos estos contratos entre particulares abundan en informaciones sobre las
Cronista oficial de la Compañía de Jesús para la Provincia del Paraguay, relacionessociales entre españoles e indígenas;así como sobre la producción local,
residente por muchos años en Córdoba, tuvo a su disposición los archivos de la en la que la mano de obra nativa tuvo un papel fundamental
Orden y examinó los de Santiago del Estero, Tucumán y Salta. Sus descripciones En el período 1573-1620, la población cordobesa exigió las funciones de un solo
geográficas son uncompendiode los conocimientoslogradosporlosjesuítashasta notario público para su jurisdicción Losescribanos que se sucedieron en el cargo,
1750 Junto a su afición por los archivos, Lozano se distingue también
por ser un consignaban los originales de los documentos que pasaban por sus manos en el
investigador de la naturaleza. Registro notarial número 1. Iniciado el 16 de marzo de 1574, abarca hasta 1620 la
Si bien su producción histórica es amplia, para los fines trazados en esta cantidad de 26 tomos
investigación interesaron dos obras en especial: "Historia de la Compañía de Enla jurisdicción de la ciudadde Córdoba,y a partir de su fundación, la justicia
Jesús en la Provincia del Paraguay", e "Historia de la Conquista del Paraguay, fue ejercida en primera instancia por alcaldes ordinarios y alcaldes de la Herman¬
Río de la Plata y Tucumán". dad. Los primeros con derecho a sentenciar y los segundos actuando sólo en la
No obstante el valor de toda la documentación impresa que hemos men¬ instrucción. La segunda instancia se ventilaba ante los gobernadores; en tanto que
cionado hasta aquí,la base fundamental de información sobrela que se asentó esta la tercera instancia se realizaba ante la Audiencia de Charcas
investigación se encontró en las fuentes inéditas del Archivo Histórico de la Durante las primeras décadas, la actividad judicial de la ciudad tuvo un eje
Provincia de Córdoba, de incuestionable valor. temático acorde a las acciones principales desarrolladas por los conquistadores:
La administración de la justicia y el registro de los actos civiles y comerciales, pleitos sobre encomiendas de indios, sucesorios, y actividades comerciales. Las
dio origen a una abundante documentación que refleja detalladamente las rela¬ relaciones sociales entre españoles y aborígenes se encuentran también aquí bien
ciones sociales y económicas de la época. documentadas.
Dos son las series que se inician en el siglo XVI: los protocolos de escribanos Los testimonios más valiosos de esta serie se encontraron en los traslados de
y
los expedientes judiciales. títulos de encomiendas diseminados en los pleitos, habida cuenta que el Libro de
Los protocolos notariales conforman uno de los grupos documentales
mejor Registro de Encomiendas de la ciudad no ha llegado a nuestros días .Agreguemos
conservados, debido a la importancia probatoria que poseían las escrituras en la a estos, dos visitas realizadas en 1598 y 1616-1617, que permitieron obtener un
vida española y a la continuidad del oficio de escribano, según lo panorama general sobre la población indígena del distrito.
establecía la
legislación hispánica. Una tradición peninsular que tuvo sus raíces en el derecho Las fuentes judiciales del período se localizan en la Escribanía número 1,
romano, de donde pasó a la España Visigoda. comprendiendo en total 50 legajos. Al igual que las actas notariales, los documen¬
Si bien la ley de 5 de agosto 1564 de Felipe II prohibió a las tos están redactados en escritura procesal. En el texto del presente trabajo las
autoridades
españolas en América nombrar escribanos —jurisdicción que le estaba reservada referencias a ambas series documentales se inician con las siglas "AH P.C",

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correspondientes al Archivo Histórico de la Provincia de Córdoba, repositorio al de acción delos grupos conquistadores, sus objetivos, sus mtas y conflictos conlas
que pertenecen.. otras esferas de poder de la administración colonial Resultaron asi un marco de
Junto a las series mencionadas anteriormente, y que se constituyeron en el eje referencia indispensable para comprender el procesoque se inicia en el siglo XVI .
central de información, utilizamos otros dos repositorios que si bien no poseen En 1944, Alice P.Canabrava proponía otro eje de investigación,que centraba su
para nuestro tema un acervo testimonial semejante al del Archivo Histórico de la atención en el comercio rioplaíense y su conexión con el Potosí, Los estudios sobre
Provincia, proporcionaron datos complementarios. el periodo colonial en nuestra región se beneficiaron con el nuevo enfoque, y en la
Por una parte, la colección documental del Institutode Estudios Americanistas, década de los 60 Ceferino Garzón Maceda y Carlos S. Assadourian inauguraron
reunida por Monseñor' Pablo Cabrera, y que en las notas de referencia figura con los trabajos sobre la dinámica interna de losmercados regionales que se relaciona¬
las siglas "I E.A ". Por último, el Archivo Nacional de Bolivia, citado como ban con la ruta atlántica. Recientemente, Zacarías Moutoukias y Jorge Gelman
"A N.B " en las mencionadas notas, donde se localizaron algunos expedientes insistieron sobre la importancia de las condiciones internas en el conjunto de ese
judiciales y Reales Cédulas. j espacio virreinal. Muchas de las preguntas que nos hicimos al comenzar el
presente trabajo, y buena parte de sus respuestas, fueron guiadas por estas
investigaciones.
El punto de partida de este trabajo se construyó sobre un importante número I Señalemos por último, dentro de la historiografía colonial, la tradición inves-
de conocimientos previos, resultado de la labor de más de una generación de ÿ tigariva que ha centrado su atención en las zonas nucleares del Virreinatode! Perú
investigadores Lejos de pretender hacer un inventario, es necesario poner de Ese marco más general, nos orientó sobre los factores a tener en cuenta en las
relieve aquellas líneas de análisis en las que hemos asentado nuestro estudio. generalizaciones explicativas. En la medida en que presentaban análisis históricos
Señalemos en primer lugar la producción historiográfica que sobre el distrito análogos, trabajos como los de Steve Stem y FranklinPease sirvieron de base para
de Córdoba se desarrolló en la primera mitad de este siglo la construcción global de nuestro tema.
Los arqueólogos han estado menos pendientes de las Sierras Centrales que de
otras áreas prehispánicas; y éste es un déficit que lamentamos, por los datos que
podrían proporcionar sobre la población indígena a! momento dela conquista. Sin En el texto que presentamos se ha seguido un criterio histórico- cronológico,
embargo, compete a esos especialistas las primeras preocupaciones científicas analizando el proceso de surgimiento de la sociedad colonial en la jurisdicción de
sobre la historia de los aborígenes en la Provincia de Córdoba, y la incorporación Córdoba en sus etapas sucesivas, y buscando explicaciones funcionales o estruc¬
de la documentación histórica en las investigaciones sobre la región turales
La lista de autores es larga, así como sus numerosas publicaciones. Mencione¬ Hemos recurrido a una descripción amplia de la sociedad, teniendo en cuenta
i
mos entre ellos a Felix F. Outes, Salvador Canals Frau y Aníbal Montes, quienes la frecuencia de los comportamientos en los miembros que la componen . Cada uno
compulsaron permanentemente las fuentes arqueológicas con los documentos de ios hechos individuales o historias cotidianas introducidas en el texto, es
escritos. representativo de un tipo de práctica social donde locuantitativo está implícito; y
Unapartado especial merece la obra de Antonio Serrano, cuya temática abordó la selección del ejemplo, ha surgido de la relación entre la iniciativa personal y la
asuntos de lingüística aborigen, descubrimiento y conquista de la región, o bien necesidad social del grupo al que representa
trabajos de síntesis como "Los Comechingones", donde coincidieron fuentes El estado de los conocimientossobre el período colonial temprano en la extensa
arqueológicas e históricas. Gobernación del Tucumán, nos da la certeza que el tema que ahora nos ocupa no
De igual importancia son los estudios de Aníbal Montes, en especial su está terminado.
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"Nomenclador Cordobense de Toponimia Autóctona", que fue la base indiscu¬ No obstante que muchos factores externos no están aún definidos, creemos
tible para la localización de pueblos indígenas,encomiendas y mercedes de tierras. haber llegado a un punto en el que las líneas generales sobre el surgimiento de la
Otra línea de investigación está constituida por los trabajos de ManuelLizondo sociedad colonial en el distrito pueden ser establecidas
Borda y Roberto Levillier, referidos a la historia de la Gobernación del Tucumán,
elaborados también durante este período rico en la búsqueda documental,
Ambos autores, basados en una importante cantidad de fuentes, muchas de
ellasprocedentesdel Archivode IndiasdeSevilla,analizaron las lineasprincipales

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la. PARTE:

LAS VISPERAS DE LA CONQUISTA:


¡¡ EL ESPACIO Y LOS HOMBRES

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CAPITULO I

EL MARCO GEOGRAFICO

Dos grandes regiones geomorfológicas se distribuyen en el territorio de la


actual Provincia de Córdoba: las planicies y las montañas Mientras que en las
primeraspredomina el modelado climático, en las segundas sobresalen las formas
estructurales, no obstante el efecto de los procesos hídricos (".

La zona montañosa es parte del antiguo macizo central argentino, que fue
dividido en bloques por la actividad tectónica del terciario. Abarca una superficie
de 430 km, de largo y 110 km. de ancho, y posee distintos nivelesaltitudinales que
oscilan desde los 650 m. a los 2.200 m s.n.m

Hacia el norte las sierras presentan un relieve más redondeado y complicado,


pero también más accesible al paso del hombre Las elevaciones parecieran estar
disgregadas en medio de ios sedimentos de la llanura chaqueña, con una altura
máxima de 1.000 m.s.n.m y con quebradas transversales que siguen una dirección
de oeste a este El conjunto está consti tuído casi exclusivamente por granitos, y se
encuentra rodeado por pequeños bolsones y por la planicie oriental

1) Las descripciones geomorfológicas, climáticas, hídricas y de recursos vegetales y animales que


siguen, son tomadas de: L Brackebusch (1875); H N. Lucero Michaut y J Olsachcr (1981); E.J. Methol
(1958); Papadakis (1956); F PastoreyE.J Methol (1953);M RíoyL Achaval(1904);M Sayago(1969);
yj Vazquez, R MiatelloyM Roqué(1979)

23
Hacia eí sur, y separado de las sienas del norte por el valle tectónico de General
Mitre-Sarmiento, encontramos el cuerpo principa! Las expediciones españolas del siglo XVI recorrieron los valles en forma
reiterada;especialmente aquéllas que, como la de Mejía Miraval, tenían por objeto
Está integrado por tres cordones montañosos, que forman la unidad de mayor el empadronamiento deindios. Lasencomiendas y mercedesde tierras se concen¬
extensión y altura de la región. Se trata de las Sienas Occidentales, las Sierras traron también sobre ellos, en procura de suelos fértiles y mano de obra indígena.
Grandes y las Sienas Chicas, compuestas de bloques longitudinales divididos por
valles que siguen una dirección norte-sur. La otra región geomorfológica es la de las planicies. Si bien nuestro interés no
se centra en ellas, puesto que la acción colonial del período se desarrolla particu¬
Todo el conjunto está surcado por una red de drenaje superficial, que se larmente en la zona serrana, es necesario hacer una breve mención a sus ca¬
constituye en el agente erosivo más impor tante Mientras en el norte, donde hay racterísticas principales, sobre todo si tenemos en cuenta que la ciudad de
menos precipitaciones, hallamos cursos temporarios que apenas alcanzan a pene¬ Córdoba —base geográfica de la conquista española de las sierras—, se funda en
trar en la llanura, en el cuerpo principal se originan cursos permanentes y más sus límites-
caudalosos
En general, se trata de tierras bajas que rodean al sistema montañoso de las
A través de los bloques longitudinales que constituyen las Sierras de Cór doba, sierras, cuya altura máxima se encuentra en los piedemontes (600 m.s.n.m.), en
podemos distinguir la coexistencia de diferentes unidades geomorfológicas que tanto que la mínima se halla en las cuencas sedimentarias (90 m.s.n.m.).
permitieron la utilización de variados recursos renovables, tanto en el período
prehispánico como en la época colonial. —
Las planicies occidentales —bolsones y llanuras > poseen actualmente un
clima árido y semi-árido, con salares y una vegetación xerófila arbustiva y
La penillanura —renovada durante el terciario y cuartario—,es la unidad que herbácea,
predomina en la región. El basculamiento y el ascenso dio origen a diferentes
niveles altitudinales, llegando en e! cordón central a las mayores alturas en los Las orientales, en cambio, se introducen en la zona montañosa a través de los
cerros los Gigantes (2 370 m.) y Champaquí (2.790 m,). piedemontes, para rematar en valles y pampas. Más húmedas que las anteriores,
incluyen depresiones lacustres como las de Mar Chiquita y San Antonio, que
Entre los 1.500 y los 2 000 ms.n.m., surgen en medio de las sierras superficies conforman cuencas sedimentarias de poca pendiente y escaso drenaje.
llanas con vegetación herbácea xerófila. Son las llamadas "pampas", como las de
Pocho, Olaen, Achala y San Luis. Su geografía ofreció a la población prehispánica
numer osos lugares de asen tamiento:yaseaenlasquebradasmáshúmedasy mejor
protegid as de los vientos, comoen los abrigos rocosos de lasalturas, que sirvieron Desde el punto de vista climático, las Sierras de Córdoba se encuentran dentro
para las actividades estacionales de la caza y la recolección B, de la zona templada, que adquiere características continentales por su situación
geográfica mediterránea.
Otra unidad geomorfológica de interés está representada por los valles, ya que
en ellos se asentó el grueso de la población indígena. Casi todos de origen Si bien la región se ubica en su mayor parte en la isoterma media de los 16
estructural, siguen el rumbo de las cadenas montañosas principales. Los más grados, a partir de los 2.000 m.s.n.m, desciende a la de 10 grados.
importantes son los de Guasapampa, Salsacate, Nono, Punilla y Calamuchita, de
suelos llanos y fértiles y regados por corrientes de agua permanentes. E!sistema orográfico esen este caso el modificador del conjunto de condiciones
atmosféricas, a tal punto que determina la existencia de mesoclimas, todos aptos
para la actividad del hombre.

Las precipitaciones se concentran en el semestre cálido —deoctubre a marzo—


2) Tal es el caso de la Pampa de Olaen, donde las excavaciones arqueológicas revelan la existencia de
"paraderos" al aire libre (A R. Gonzalez, 1949).
y especial en el verano, con lluvias frontales originadas en masas de aire cálido
en
procedentes del norte y noreste. Losvientosdel cuadrante occidental sonescasos.
24
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Desde la localidad de Obispo Trejo hacia el sur—que corresponde a la provincia
Todo ello hace que las laderas montañosas orientales presenten mejores condi¬
fitogeográfica del espinal—, elalgarrobo (Prosopisspp ) es elgénero fisonómicamente
ciones de habitabilidad, no sólo por su mayor humedad, sino también por sus dominante, junto al mistol y al quebracho blanco.
pendientes más suaves. A través de valles y bolsones esta vegetación de llanura penetra en la región
montañosa hasta los 1.000 m. de altitud, salvo los cardonales, que se encuentran
El sistema orográfico determina además la existencia de dos vertientes: la sólo hasta los 600 m.s.n.m.
oriental y la occidental. Sus características generales y la ubicación de las cuencas,
explican la persistencia de las rutas prehispánicas y las relaciones interétnicas En efecto, muchasde estas especies vegetales de la llanura las encontramos en
las Sierras de Córdoba en el piso de vegetación denominado "bosque serrano",
La vertiente oriental posee los nos más importantes por su caudal y extensión. ubicado entre los 500 y los 1.350 m„ de altitud. En los faldeos se dan además el
Los cursos de agua nacen en las quebradas de las montañas, atraviesan los valles molle, el coco y el quebracho serrano (Schinopsis hankesna).
y se lanzan a las planicies, para desagriar en las depresiones . Forman tres cuencas
principales: la de Mar Chiquita al norte, ladel Paraná al centro, y lade La Amarga A ese nivel sólo hay una zona con paisaje diferente, la ubicada al norte de la
al sur
Pampa de Pochoy norte de Tuiumba y proximidades de San Francisco del Chañar
Son los palmares de Trilhfinax campestris.
La vertiente occidental, en cambio, posee cursos de menor caudal y longitud y
precipitaciones escasas Los de la zona norte, que desaguan en la depresión de las Es necesario indicar que gran parte de la vida económica de las sociedades
Salinas Grandes, son temporarios. Hacia el sur se nota un aumento en las indígenas prehispánicas se desarrolló en tomo a este piso de vegetación
corrientes, pero siempre con cursos cortos.
Entre los 1,300 y 1700 m. de altura encontramos el "matorral serrano", llamado
también "arbusta! de altura o romerillal". Su vegetación actual se compone princi¬
Las distintas condiciones climáticas de nuestra región, regidas por procesos palmente de romerillo (Heierolhalamus alienus), carqueja (Baccharis articúlala) y romerito
meteorológicos y características geomorfológicas, se manifiestan en la vegetación. (Eupalorium buntiíoiium). Es posible que la abundancia de esas especies sea una deri¬
vación de factores antrópicos como el pastoreo.
La flora serrana, integrada por elementos pertenecientes a distintas corrientes
floristas, se agrupa en pisos de vegetación según los niveles alütudinales, la En lascumbres y planicies elevadas, así comoen los faldeos altos,se desarrolla
orientación geográfica, y la latitud. el piso denominado "pastizales y bosquecillos de altura", casi siempre expuesto a los
vientos. Este es el espacio de los paraderos indígenas que mencionáramos en
Al igual que en la breve descripción geomorfológica anterior, es necesario páginas anteriores
referimos también a las especies arbóreas dominantes que caracterizan a las
llanuras, en razón de la interpenetración que presentan ambas regiones

En las planicies del oeste, centro y norte, la provincia fitogeográfica chaqueña


muestra un estrato arbóreo superior, con especies como el quebracho colorado
(Schinopsis lorentzii), quebracho blanco (Aspidospeirna quebracho blanco), algarrobo La fauna de las sierras posee características generales similares a la flora: gran
negó (Prosopis nigra), algarrobo blanco (Prosopis alba y P chilensis), y mistol (Zizyphusn
variedad relacionada a las distintascondiciones ecológicas y aporte de especies de
mistol). Enel estrato arbustivo —compuesto tanto por arbustos como por árboles de la región chaqueña pampeana y andino patagónica.
porte arbustivo—, abundan el tala árbol (Cellistaia), la tusca (Acaciaaroma), el espinillo
(Acada caven), el chañar (Geoflroea decorticans), y el piquillin (Condalia nicrophylia).. En el piso de "bosque serrano" las especies más interesantes son la comadreja
> picaza (Didelphis azarae), el zorro pampeano (Dusicyon gimnocercus), el gato montés (Felis
Las llanuras del oeste, de menor precipitación, presentan una vegetación más geofíroyi) y el puma (Feiis concolor). A esta enumeración habría que agregar una gran
baja; en tanto que en las zonas semi-áridas y cálidas se extienden los cardonales diversidad de aves

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26
En los pastizales y arbustales de altura se nota una influencia andino pa¬
En general, el territorio de la Provincia de Córdoba es pobre en aguas superfi¬
tagónica: vizcachas de las sierras (Lagoslomus maximus inmoliis), perdices (Nolophrocta
penllandii) y algunas especies de Tiránidos. ciales, y éstas tienen una distribución irregular. Su sistema hidrográfico está
definido por las sierras y el relieve de ¡as planicies circundantes, las primeras
En las altas cumbres el cóndor (Vullur griphus) es la especie andina que debió ser poseen las precipitaciones más abundantes y en ellas nacen los ríos de caudal
más importante en la vida indígena, por las representaciones pictográficas que de variable por su régimen pluvial.
él se encuentran.
Pedro Lozano, cronista religioso residente en Córdoba por muchos años,
confirma esta característica de los recursos hídricos durante el período colonial:

"... Bañan toda esta jurisdicción diversos ríos, que por lo


común son de poco caudal; pero en tiempo de lluvia atajan a
los caminantes porque crecen con furia.. " 0>
El clima y los recursos naturales renovables en el siglo XVI
La época invernal,en cambio, es seca. En junio de 1585, las actas del cabildo nos
informan que Gonzalo Martel de Cabrera, dueño de un "herido de molino", no
Las características geomorfológicas y climáticas, los recursos hídricos, ve¬
puede moler el grano para el abasto de la ciudad por la falta de agua; y agrega que
getales y animales, dejan trascender lo que la geografía posibilita o dificulta a los los vecinos que poseen chacras río arriba dejan sin suficiente caudal al río Hl.
grupos humanos.
Sin embargo, si nos atenemos a los datos proporcionados por las cédulas de
Enese sentido, la estructura geográfica de las Sierras de Córdoba es elelemento
encomienda y el Libro de Mercedes de Tierras de Córdoba, pareciera que el
estable sobre el que los hombres de la región elaboraron sus experiencias.
sistema hidrográfico del siglo XVI es más importante que el actual. En esos
documentos encontramos referencias permanentesa lagunas, ciénagas, aguadas y
Sin embargo, desde 1570 a nuestros días, se ha producido una variación en el vertientes que hoy no existen. Las mencionesde algunos cronistas religiosos sobre
clima y en los paisajes, en muchos casos debido a la actividad antrópica y a la las crecientes, que a veces arrasan con hombres y ganados, parecen reforzar esa
diferente percepción del espacio que tienen indígenas y conquistadores.
suposición (ií.

Recordemosal respecto que los europeos introducen nuevos animales domes-


En cambio, las tormentas de piedra y granizo —que aún hoy azotan al cintorón
ticables, junto a la modalidad típicamente española del pastoreo de carácter
verde de la ciudad de Córdoba—, parecen ser también en aquella época una
extensivo. Agreguemos a ello la práctica de la agricultura comercial con la constante periódica. Tal vez sea por ello que en 1616 el Cabildo propone organizar
incorporación de nuevos cultígenos; y la tala indiscriminada del bosque serrano. festejos para el día de San Pedro Mártir, por ser abogado de truenos, rayos y
Los efectos de esta percepción del espacio se dejan sentir hoy en la flora y la
fauna. Los más visibles son la erradicación de parte de la vegetación autóctona,
reemplazada por las especies leñosas del soto-bosque y la lenta extinción de la
llama y la vicuña.
3) Lozano, 1843-1875, 1: 189
4) Acta Capitular de 16/6/1585 (A.C, 1: 552).
Las característicasclimá ticas y los componentes fundamentales delos recursos
5) Cir Carta Anua del Províndal Pedro de Oñate, de 1617 (en: Leonhardt, 1927-1929, XX: 64-107). De
natorales renovables con que cuenta nuestra región en el siglo XVI, tienen algunos igual manera, un expediente judicial de 1617indica la virulencia de algunos fenómenosmeteorológi-
rasgos diferentes de losactuales.La documentaciónhistórica de los primeros años cos, esta vez en reladóna inundadones en el pueblo de Soto (AHPC, cscrib, 1,leg. 38, exp 6). Por otra
de la conquista y las referencias arqueológicas así lo testimonian. parte, Aníbal Montes, en dos de sus trabajos etnohistóricos, insiste sobre la mayor humedad de la
región en el siglo XVI, utilizando también los datos sobre fauna y flora disponibles (Montes, 1950-57:
42; y 1944: 5-6).

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i
tempestades, ya que "todos los años en muchas partes de los términos desta ciudad cae El Libro de Mercedes también infor ma sobre la existencia de bosques en las
piedra granizo y rayos y otras tenpestades" <0 planicies próximas a la ciudad:muchasde lasconcesiones establecen el uso común
de maderas en las tierras otorgadas. Cuando en diciembre de 1573 Jerónimo Luis
En estrecha relación con fenómenos climáticos, nuestra región sufre a menudo de Cabrera otorga tierras a Blas de Rosales, Diego Caceres y Geronimo Vallejo, en
el flagelo de algunas plagas, particularmente de langosta, que cada tanto hacen su zonas aledañas al río de la ciudad, hace constar en el documento que la merced
aparición no sólo en la jurisdicción de Cór doba, sino también en todo el Virreinato implicaque"..Josmontes$eancomuneseleñaemaderasdellosqueayeoviereadelante.."
del Peni. El cronista Bernabé Cobo dice sobre el tema: (10)

'La langosta. es muy perjudicial, como es en el reino de Pedro Lozano, que incluye en sus obras los conocimientos geográficos ob¬
Chile y provincia de Tucuman, y Santa Cruz de ¡a Sierra, a tenidos por la Compañía de Jesús hasta 1750, dice que los árboles "...son en partes
donde a tiempo se ven en tanta muchedumbre, que parecen de mediana estatura, como es en las jurisdicciones de Santiago, Rioja, Córdoba, Santa Fé
nublados y talan los sembrados. Asi las langostas como las y Buenos Aires. .." <n).
cigarras son vianda familiar a muchas naciones deindios. Los
de la provincia de Tucuman se vengan del daño que suelen De las especies arbóreas propias del bosque de llanura, hay particularmente
recibir delaslangostas,cogiendocuantaspuedeny hinchendo dos en las que es necesario detenerse por su importancia en la vida indígena
dellas después de secas las trojes que tenían preparadas para prehispánica y aún durante el período colonial: el quebracho y los algarrobos.
las semillas de que los defraudaron estas bestezuelas, y dellas
van comiendo entre año" m. Sobre el primero, Lozano vuelve a informarnos:
En 1586, el cabildo de Córdoba decide designar —por sorteo—, un santo que "Del guayacan o palo santo hay varias especies, dos tiene
proteja a la ciudad y su jurisdicción de la plaga de langosta que desde cinco años la provincia del Tucuman; el uno que llaman quebrahacha,
atrás la viene castigando. La elección recae en San Tiburcio y San Valeriano Unos por su rara dureza que resiste a los instrumentos más
años antes, en 1574, otro tanto había ocurrido con una plaga de gusanos en las acerados...sus flores son blanquiscas, que tiran a leonado,
chacras de la ciudad; en esa oportunidad, fue Santa Olalla la encargada de color propio de su palo y ojos como una lengua, la segunda
combatirla <®1. especie, llaman tarco en Tucuman..." (11).

El Libro de Mercedes y las Actas Capitulares de Córdoba, indican la existencia


En el siglo XVI, las dos terceras partes de las planicies de la provincia están de numerosos bosquecillos de "quebrahacha" en los valles y cañadonesde la región
cubiertas con una vegetación leñosa.Nicolás del Techo, relatandolaentradade los serrana en los siglos XVI y XW, utilizados en la construcción edilicia del período
sacerdotes misioneros Alonso deBarzana y Francisco Angulo a Córdoba,dieciséis
años después de la fundación de la ciudad nos dice que " .estos caminaron por En cuanto a los algarrobos, nuevamente es Lozano quien resume la utilidad de
bosques dilatados llenos de tigres..." l", estos árboles:

"...y de muchos [arboles1 es grande la utilidad de sus


maderas, como de las lanzas, sauces, algarrobos, de que hay
6) Ada Capitular de 18/4/1616 (A C., V: 429)
7) Bernabé Cobo, 1956: 339
8) Las ritas en: A.C, i: 618 y 151-153 respectivamente Aún cuando no sea posible obtener un
reconocimiento db las oscilaciones climáticas en el período que nos ocupa, la documentación 10) LM :14-15.
histórica sobre el tema aporta algunos datos interesantes, que son incluidos en el Cuadro nro. 1 11) Lozano, 1843-1875,1:215.
9) Nicolás Del Techo, 1897,1, XXVII: 137 12) Lozano, 1843-1875, 1:218.

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infinitos en k provincia de Tucuman, que con su dulcísimo
fruto dan provision de bastimentos para todo el año a k gente
pobre

En 1658, el viajero Acarette du Biscay menciona la existencia de bosques de


algarrobos en el camino de Córdoba a Santiago del Estero, "...cuyo fruto sirve para
hacer una bebida que es dulce y picantita y que sube a ¡a cabeza como el vino" M.

En cuanto a la fauna, las investigaciones arqueológicas indican la existencia de


otras especies para el período prehispánico, muchas de ellas extinguidas en la
actualidad en nuestra región: en las pampas y valles rebañosde guanacos y suris,
y ciervos pequeños y con cornamentas. CAPITULO n
Su abundancia permitióa loshabitantesautóctonos la práctica de unsistema de LA POBLACION INDIGENA
caza especializada, así como la domesticación de la llama.Las pictografías que se
han conservado hasta nuestros días poseen numerosas representaciones de gua¬
nacos, ñandúes, pumas, venados y águilas tI!).

Una cualidad constitutiva se manifiesta con claridad en los límites humanos de Las fuentes españolas y la historiografía que se han ocupado de la población
las Sierras de Córdoba: a pesar de las variaciones estacionales y de los distintos indígena en las Sierras de Córdoba, reconocen lacoexistencia durante el siglo XVI
pisos ecológicos que pueblanlas sierras, en el siglo XVI la región montañosa ofrece de dos etnías en su territorio: comechingones y sanavirones
a los habitantes —ya sean indígenas o españoles—, recursos renovables variados
y relativamente estables. Los primeros representarían el grupo agrícola más antiguo de la región
serrana;entantoquelos segundos, cultivadores másavanzados tecnológicamente,
Por otra parte, los contactos permanentes entre los habitantes de las regiones habrían iniciado su entrada en épocas próximas a la conquista española.
circunvecinas y los de las Sierras de Córdoba en el período prehispánico, y las
rutas que convergen en nuestra jurisdicción durante la etapa colonial, señalan que Algunas décadas antes de la fundación de la ciudad de Córdoba, la documen¬
la estructura geográfica permite con facilidad la circulación de los grupos huma¬ tación histórica ya hace referencia a los comechingones.
nos.
Lacitamásantigua pertenece aun miembro dela expedición de Diego de Rojas
(1542-1543). Nos referimos a Pedro Gonzalez de Prado, quien en una información
de servicios hecha en el Cuzco en 1548, los define como "gente barbara e muy
belicosa".
13) lozano, 1843-1875,1:243.
14) Du Biscay, 1943: 58 En 1556, el capitán Rodrigo de Palos, testimoniando en la informaciónjud icial
15) la Relación que Pedro Sotelo Narvaez escribe al Licenciado Cepeda, Presidenie de la Audiencia, a sobre las probanzas de servicios de Francisco de Aguirre, vuelve a referirse a la
comienzos de la década de 1580,confirma la exislenria de esas especies faunísücas ("Relación délas tierra de los comechingones.
provincias de Tucumá n para el ilustre señor licenciado Cepeda, presidente de la RealAudiencia de i
la Plata", en: jimenez de la Espada, U: 143-153)
Por su parte, c! tema tie las pictografías indígenas de las Sierras de Córdoba, es tratado por varios Unos años después, Alonso Diaz Caballero, en carta al rey fechada el 21 de
autores; a los ya clásicos trabajos de G A Gardner (Gardner, 1924, 1925, 1930 y 1931), agreguemos enero de 1564, desde Potosí, expresa:
los más recientes de Hebe D Gay (Gay, 1953) y de Eduardo Berberián y Axel Nielsen (Berberián y
Nielsen, 1985)

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"toda esta cordillera desde la ciudad de la Plata va hasta El grupo comechingón pareciera representar una base agrícola antigua, rela¬
el estrecho de Magallanes que son mas de 500 leguas , Yo he cionada con los huarpes y otros pueblos de la zona cuyana. Si bien no llegan a
andado gran parte dello y en todo lo que yo he andado ay conformar una etnía notoriamente diversificada de las otras circundantes, presen¬
metales de oro y plata; y a la una falda della a la mar del sur tan características propias, elaboradas durante su período de asentamiento en la
es Chile y a la otra es TucumanyCanoy Caria y Contechin- región l:o>.
gones y la noticia que dizen de Cesar,.." n6).
Esos rasgos diferenciales hacen que, a partir déla jomada de Jerónimo Luis de
Gran parte de la cartografía del siglo XVI, así como numerosos conquistadores Cabrera, los gobernantes del Tucumán lleven el título de "Gobernador del Tucumán,
en sus probanzas y cartas, además de cronistas como Cieza de León, incluyena los Juries, Diaguitas y Comechingones".
comechingones entre sus datos íl7),

Los sanavirones también son mencionados en documentos anteriores a la


fundación de 1573. El más antiguo es la carta de Jerónimo Gonzalez de Alanis,
fechada en Chuquisaca en 1566 y dirigida al Licenciado Vaca de Castro En la En la misma época, un erudito en la búsqueda documental de los repositorios provinciales, Pablo
misma, informa que Francisco de Aguirre "piensa poblar unpueblo en la provincia de Cabrera (Cabrera, 1929), comienza a definir con mayor precisión el territorio de ambos grupos
los sanabirones.." m étnicos. Los pueblos comechingones se localizarían en la Sierra de Achala y la región de los
Algarrobales (actual Soto) hasta Yacanta, extendiéndose hasta la jurisdicción de La Punta y la
provinda de los olongasta en La Rioja
Según el mismo autor, los sanavirones habrían estado ubicados en la linea divisoria de las jurisdic¬
En general, la historiografía contemporánea coincide en señalar como área de ciones de Santiagodel Estero y Córdoba,para la fecha déla fundadón deesta última. Empujados por
dispersión para el grupo comechingón a las Sierras de Córdoba con sus llanuras los chiriguanaes, debieron abandonar su hábitat original junto a las márgenes del río Dulce, para
inidar una penetradón gradual en la región oomechingona (Cabrera, 1931).
próximas, y a los valles de Concarán en las serranías orientales de San Luis,
En la década de los años cuarenta, Salvador Canals Frau vuelve a retomar el tema de los pobladores
prehispánicos de nuestra región, establedendo estrechas reladones raciales y lingüisticas entre los
Los sanavirones, por su parte, se habrían ubicado en un territorio menos grupos huarpe y comechingón, y extendiendo a estos últimos hada el oeste, hasta la parte puntana
extenso: el que corresponde actualmente al sur de Santiago del Estero y norte de déla Sierra de los Comechingones (Canals Frau, 1944)
Los estudios de Canals FrauylosdeAníbalMontes,ambos coetáneos, siéntanlos precedentesde una
Córdoba <w
nueva visión del tema étnico serrano y las bases para las investigadones contemporáneas.
En efecto, Aníbal Montes, basado en sus investigadones arqueológicas esr el yacimiento "Deodoro
Roca" de la región de Ongamira, reconoce a ios comechingones como los primeros portadores de la
agricultura que se introdujeron en la zona serrana (Montes, 1956)
Según el mismo autor, los sanavirones, ubicados al sureste de la actual provinda de Santiago del
Estero y al noroeste de Córdoba, se habrían introducido hasta las Sierras de San Luis en épocas
16) La información dePedro Gonzalez de Prado, las probanzas de servicio de Franciscode Aguirre y la
próximas a la conquista española Portadoresde una cultura superior, habrían traído la agricultura
carta deAlonso Diaz Caballero, en: Levillier, 1919-1920, 1: 1-67,461-468 y 427-432, respectivamente
con regadío, las represas de agua de lluvia, La cerámica grabada, la cestería y los textiles (Montes,
17) En cuanto a la cartografía, cfr, mapas de Van Doet (1585), Orteüus (1587), Mercator (1587), Piandus 1958)..
(1592), De Bry (1592), Van Legeren (1595), Wytfliet (1597) y Linschoten (1598), entre otros (en: 20) Las característicasdelasentidadesétnicas durante el siglo XVI que esbozaremos a continuadón,son
Maurtua, 1906; y Nordenskiold, 1889) sólo de tipo general Si bien a cierto que sería necaario un aludió arqueológico sistemático de los
La mendón del cronista Cieza de Leónsóbrelos comechingones, en:C!eza de León, 1909,cap CCV1I1
yacimientos prehispánicos para definir culturalmente a los grupos étnicos serranos, una visión de
18) La carta deJerónimoGonzalezde Alanis, en: J.X Medina,XXX:287yss Esnecesariohacernotarque,
conjuntodelos aludios realizados nos permite en nuatro caso acceder a un reconocimientoinidal
parala fecha deesa carta, los españoles ya hablanrecorridola actual Provinda de SantiagodelEstero (Cfr. AR Gonzalez, 1943 a:54).

ámbito originario de los sanavirones—, e induso realizado fundadones en ella
19) Estas afirmadones fueron inidalmente hechas por Felix F Outes (Outes, 1910-1911) Unos años
Las escasas invatigaaona arqueológicas corrapondienta a asentamientos del período prehis-
pánicotardío,ofrecenalgunosdatosútilasobrelapobladónindígena:lamayoríadeelloscoindden-
después, Franasco de Apando (Aparido, 1925),basándose en sus investigadones arqueológicas
que daban un tipo de cultura uniforme para toda la región—, indica como área de dispersión del
— ta con los tatknonios de los documentos española.
Una parte considerable de las invatigaaona se concentra en dos rcgiona bien definidas en las
pueblo comechingón a la zona comprendida solamente por las serranías de Córdoba y San Luis, serranías, que según los datos disponible, debieron admitir por sus características geográficas un
considerando como despobladas a las llanuras del este. peso pobladonal ma yor Nos referimos a los valla de Punilla y Calamuchita, ubicados en la zona
central y sur rapectivamente.
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Estos últimos son descriptos como hombres altos y de cabeza redonda. Dueños El cronista Pedro Lozano atribuye a los comechingones viviendas en cuevas,
de técnicas agrícolas, al penetrar a las Sierras de Córdoba reemplazan a sus ubicadas en las zonas más ásperas de la siena Por su parte, los hallazgos
predecesores los cazadores nómadas. Las pictografías del Cerro Colorado los arqueológicos nos hablan de habitaciones semi- subterráneas de planta rectangu¬
muestran como guerreros que defienden su territorio en formación cenada ai). lar; y un pleito de 1594, entre vecinos encomenderos del Valle de la Campana,
menciona la existencia de "hoyos" como vivienda m'.
La descripción de Pedro Gonzalez de Prado sobre las "guazabaras" que les dan
los comechingones concuerda con esas representaciones pictóricas: los indígenas Las investigaciones lingüísticas reconocen dos grupos comechingones: camia-
—dice el conquistador—, atacan a los españoles de noche, en escuadrón de más de resy henias. Los primeros se ubican en ia región meridional de las sierras, desde
quinientos, "puestos en buena orden de guerra". Los Gigantes hasta las últimas estribaciones de la Sierra de Comechingones
Mientras que en la zona septentrional se encontrarían los henias, ocupando la
En la misma fuente encontramos otra característica claramente distintiva del Sierra Chica y la llanura entre las serranías del norte y las Salinas.
grupo: todos los testigos españoles coinciden en describirlos como "indios barba¬
dos" 03 En algunos documentos del siglo XVI los comechingones suelen estar diferen¬
ciados en "serranos" y "algarroberos", en referencia a camiares y henias respectiva¬
mente. ,
A fines de ese siglo, en las laderasoccidentales de la Sierra de Comechingones
Las investigador!es restantes corresponden a las localidades de Soto, Pampa de Olaen, Ongamira, y en el Valle de Conlara, los españoles encuentran parcialidades de esa etnía a las
valle del rio Copacabana, y a un sitiodeladudad de Córdoba;a lo que debemos agregar los estudios
sobre pictografías y figuras antropomorfas en arcilla, característica de la región que denominan paseos, xaulates —o savaletas— y andasis. La información de
De los documentos españoles de la primera década de la conquista del territorio, existen dos que servicios del capitán Juan de Nodar de 1577, los describe como indígenas que
debemos destacar, por la descripdón que hacen de las pobladores aborígenes. Uno de ellos, siembran maíz y legumbres y "andan bien vestidos".
conoado como "la Reladón Anónima" de 1573, es atribuido a Jerónimo Luis de Obrera ("Reladón
de la tierra nueva que don Jerónimo de Obrera, gobernador de Tucumán, descubrió en aquella
provincia", en: Jimenez de la Espada, II: 140-141) y al que en adelante denominaremos Reladón de Hacia el sur, los comechingones parecen haberse extendido a las zonas próxi¬
1573; en tanto que el otro, es la reladón sobre la provincia del Tucumán enviada al Presidente de la mas de llanura, en especial junto al curso del Rio Quinto M
Audienda de La Plata, por Pedro Sotelo Narvaez (op.dt.) En lo concerniente al tipo radal de los
pobladores prehispánicos de lasSiexras de Córdoba, la opinión casi unánime de los diversos autores
durante décadas fue de que aquellos pertenecerían al stock humano andino —"Andidos", en las 23) Pedro Lozano, en su Historia de la Compañía de Jesús 0, III, cap XXVI: 518), refiere la recorrida

clasificadonesdeEickstedt (1934) eimbelloni (1937) ,aunque tal adjudlcadónse fundamentaba en
razones deorden geográfico y cultural antesque en dalos osteológicos concretos. La puesta a prueba
hecha en 1606 por el sacerdote Juan Romero y el hermano Juan Toledano, a "los algarrobales de
Córdoba, provincia áspera y montuosa, cuyos moradores vivían en cuevas como fieras. "
de tal concepto, llevada acabosobrecolecdonesóseasrelativamente amplias, yaplicandomodernos Teniendo en cuenta que los informes en los que se basó el cronista, proceden de un período en el que
métodos de análisis estadístico multívariado, ha demostrado la inexactitud de aquella repetida el dominio español ya se había consolidado en la región —postrimerías del siglo XVI—, cabe
afirmación. Duranteel último lustro, varios trabajos especializados handemostrado laexistencia de preguntarnos si en realidad a lo que Lozano está haciendo referencia, es a grupos que huían hacia
situaciones que juzgamos de alto interés para nuestro trabajo, entreotras: 1) que los indígenas de las zonas inaccesibles. Como veremos másadelante, los documentos dela época son fecundos en quejas
Sierras de Córdobaformaban parte de un conjunto cercanamente vinculado, en loracial, con losdel de los encomenderos sobre la evasión de ios indígenas a regiones aiejadas del asiento españoL
titoral paranaense porunlado,yconlaregiónpreandinacuyanaporelo!io(Marcelino y Colan Ionio, Agreguemos a esto que la arqueología nos indica la utilización de abrigos rocosos para actividades
1985);2) que en e] marco de todos los grupos aborígenes que poblaron el territorio argentino, ios de estacionales como la caza, durante el período prehispánico tardío En cuanto a los hallazgos
las Sierras de Córdoba tuvieron la relación biológica más cercana con los huarpes de San Juan arqueológicos de habitaciones semi-subterráneas, di Gonzalez, 1943 d. En tanto que el pleito que
(Marcelünoy Colantonio,1989),hecho que vendría a confirmar,siquiera eneste aspecto, la existencia se menciona entre vecinos del Valle de La Campana, en: AHPC, escr 1, leg. 4, exp 11 Por su parte,
del grupo "Huarpe-Comechingon" postulado por Canals Frau en 1944; y 3) que los habitantes Rui Diaz de Guzman, en Del Descubrimiento, población y conquista . , dice que Francisco de
prehispánicos délas Sierras de Córdoba no fueron radalmente ándldos,sino, en realidad,pámpidos Mendoza llega "a los comechingones, que sonunos indios na torales déla provincia de Córdoba que
algo andinizados (Marcellino y Colantonio, 1990). 11 viven bajo de tierra en cuevas, que apenas aparecen sus casas por afuera" (De Angelis, 1: 77).
21) A. Montes. 1956 y 1958. Por último, la Reladón de 1573 antes mendonada, informa que "son bajas las casas que la mitad de
22) En añas la al tora que tienen está debajodela tierra y entran a ellas como a sotanosy esto hacenlo para el abrigo
posterioresj otros documentos hispánicos insisten en esa característica En el registro de por el tiempo frío y por falta de madera que en algunos lugares por allí tienen"
indios de 9/2/1602, se anotan dos indios del pueblo de Cavisacale déla encomienda de Cristobal de
Caceras; en ambos casos se consignan como señas particulares la expresión "el qual es barbado" 24) La inforxnadón de servidos dd capitán Juan de Nodar, en: J.T. Medina, XXV : 102-106 Una mendón
(AHPC, Reg. 1, tomo 15, protocolo de la fecha). a estos indios de las pamps, en: AHPC, escr 1,leg 105, exp 5.

36
I

De todas formas, tal vez su rasgo más distintivo para el objetivo de este trabajo,
En épocas de la conquista española, la zona de influencia sanavirona se debe
sea la imagen que los relatos de los españoles nos han dejado de ellos: la
haber constituido en una región de frontera, lugar de contacto de dos grupos
belicosidad y la defensa tenaz de su territorio a5). étnicos diferentes, Un espacio geogr áfico compartido, en el que el movimiento de
los pueblos sanavirones se ve favorecido en su avance por la conquista hispánica
(25)

En cuanto a los sanavirones, parecen representar una tradición cultural dife¬


rente.
La Relación de 1573 describe a los habitantes de esa zona como pueblos
labradores, asentando sus caseríos y sementeras junto a los cursos de los ríos de
Originarios de la actual Provincia de Santiago del Estero, sobre las riberas del la región norte de Córdoba Sus vestimentas indican una industria textil desarro¬
Dulce, hacia el siglo XVI comparten ese territorio con otros grupos étnicos, como llada, y los índices poblacionales mayores parecen señalar una agricultura más
juries y yuguitas 061 . avanzada que la de los comechingones a".
Los pueblos asentados junto al Dulce y el Salado, experimentan movimientos
poblacionales continuos. Las migraciones son pr ovocadas por la inestabilidad del
curso de! Río Dulce y las permanentes invasiones de tonocotés y lules, originarios
Según indican los informes hispánicos, durante el siglo XVI son doslas lenguas
del Bermejo m.
habladas en las Sierras de Córdoba: la comechingona y la sanavirona.
Tal vez una de esas migraciones haya motivado la entrada de los sanavirones
La primera, al parecer más generalizada y de raigambre más antigua al
a las Sierras de Córdoba. En épocas posteriores —a mediados del siglo XVI—, no
momento de la conquista, posee varias formas dialectales.
es de descartarla correlación que enesa penetración paulatinapuede haber tenido
la conquista española en Santiago del Estero.
A fines de ese siglo el misionero Alonso de Barzana, de la Compañía de jesús,
se queja amargamente de esta situación:
Nada indica que el movimiento de algunas poblaciones sanavironas hacia
nuestro territorio tenga las connotaciones de una conquista militar. Las dos etnías
tienen niveles organizativos y tecnológicos semejantes; y las consecuencias de ese
"...pero para enseñanza del distrito de los indios de
Córdoba, que son muchos millares, no hemos sabido hasta
movimiento migratorio hacia el sur se aprecia en la adopción de procedimientos
agora con que lengua podran ser ayudados,porque son tantas
agrícolas un poco más avanzados y en el aprendizaje de la lengua de los recién las que hablan,porque a media legua se halla nueva lengua...era
llegados, menester mas de ocho o nueve lenguas distintas..." 0<".

No obstante la existencia de distintos dialectos comechingones, estos pueden


ser reducidos a dos formas, que mencionáramos en párrafos anteriores: la henia y
la camiare.

25) Cfr La Probanza de méritos y servidos de Pedro Gonzalez de Prado (op rit,), y las referendas a
rebeliones de tribus serranas y algarroberas, como la de 1594, a espaldas del Valle de Calamuchita
(en: AHPC, escr. 1, leg 7, exp 15)
28) Como veremos en capítulos posteriores, los conquistadores establecen relaciones
261 Los yuguitas, estrechamente reladonados a los sanavirones, son poblaciones agrícolas quebasan su políticas particu¬
ÿ lares con la etnía sanavirona, al utilizarlos como intermediarios en los pueblos comechingones
alimentación en los cultivos de maíz, zapallos y frijoles, en la recolección de! algarrobo y en la cria i
dominados
de guanacos y ñandúes Relatando la entrada de Diego de Rojas a la región, Gonzalez de Pradodice
29) Coíncidente con esa descripción, es la de Pedro 5otclo Narvaez (op. rit.) y la carta de Alonso de
que en la provindd de los yuguitas hallan mucho maíz, algarroba, chañar y "ovejas", por lo que la
expedidón permanece un año en ese territorio (op, rit.) Barzana de 1594 (ver nota siguiente).
30) Carta de Alonso de Barzana al P. Juan Sebastian, su Provincial, de 8/9/1594 (en: Jimenez de la
27) A Serrano, 1933-34
Espada, II: UI-LX1X).

38
39
" ..esta parcialidad se llama Chicunin, los
La primera, utilizada por los indígenas del norte delas sierras, resulta ser
más a las tierras e indios de Chicurtsacate:
híbrida por sus contactos con huarpesy diaguitas. El dialecto camiare, en tanto, sanabirones le pusieron Chicunsacat; lo que llaman aora Poyosacat tiene por nombre
habla desde el Valle de Punillahasta la Sierra delos Comechingones hacia el
se
natural Mosso, los sanabirones le pusieron aquel nombre Poyosacat" ou.
OI) sur
espacio
Al parecer, la lengua sanabirona y sus portadores,precedieron en poco
La lengua sanavirona, de mayor unidad que la
comechingdna, se de tiempo a los conquistadores españoles.
desde el Valle de Punilla hacia el norte hasta Sumampa, abarcando extiende
también la
región de Los Porongos y Mar Chiquita

En los primeros años de la conquista es la más utilizada


entre los indígenas de La población indígena y sus estrategias de reproducción
la ciudad de Córdoba y sus alrededores. Por otra
parte, los sanavirones actúan
como intérpretes en las probanzas de los pleitos,
transmitiendo las informaciones
de los dialectos locales comechingones al quichua; siendo esta Las cifras aportadas por los españoles, algunas descripciones, y las cédulas
de
última una lengua
entendida por los escribanos del período. de las
encomienda de los primeros años del dominio colonial, nos acercan al tema
densidades poblacionales indígenas en vísperas de la conquista Es de advertir
I.a función de indígenas "aliados" que cumplen los continuación, podrían estar
sanavirones muchos de
ellos entran con los españoles en el proceso de conquista de las — que ios datos numéricos de las fuentes que citamos a
referidas al número de aborígenes tributarios, y no a totales de población-
Sierras de
Córdoba—„y la dificultad para entender losdialectos comechingones,hace en
que de los
numerosas cédulas de encomienda la toponimia y la onomástica local sea vertida A comienzos de 1573, Jerónimo Luis dé Cabrera envía a la provincia
a la lengua sanavirona. comechingones una expedición al mando de Lorenzo Suarez de Figueroa,
cuyo
1 aborígenes, y determinar el sitio de la
objetivo es empadronar las poblaciones
En 1590-91 se dirime un pleito entre los encomenderos futura fundación
Juan Alvarez de
Astudillo y Francisco Perezde Aragón, por los pueblos delValle de Cantapas. En
el mismo, el cacique Cobilnauan'del pueblo de Mantalahalon, dice
que no sabe \ A su regreso, Suarez de Figueroa dice haber encontrado una tierra muy
"que aya otro pueblo que se llame Atanzacat, e que los españoles deven de averie
puesto \ poblada donde se podría fundar una ciudad, a la que servirían "mas de veinte mil
nombre de Atanzacat, e que en su lengua Ibrnanhenen como en la zanabirona zacat,eque indios en veinte y treinta leguas de distrito" 03>.
no tiene otro nombre mas de Atanhenen. .. "
•<

La Relación de 1573 se hace eco de ese informe, abundando en detalles:


En 1598 algo similar responde el cacique Mocasdel pueblo de Cochanhen, en
el pleito entre Luis de Abreu de Albornoz y FranciscoLopez Correa, j "...por las cuales se caminó mas de otras cincuenta leguas
por derechos !

en longitud y en ellas se hallaron por visita que se hizo,


31) Varios pierios de fines del siglo XVI, informan sobre esas variaciones dialectales
Por ejemplo, el 32) AHPC, escr 1, leg. 3, exp 9; y escr 1, leg 6, exp 1
cacique Codtonos, del Valle de Salsacate, es conocido con el nombre Chuchuacan "en lengua de La distribución geográfica de las terminaciones "sacat" y "charava" de la toponimia y onomástica
Saldan"; otro arique, Tunguisnaguan, es conocido en otros dialectos con los nombres de
Uchichin,
Valtanaure, y Amlimcharava, siendo el nombrado en primer término "superfecta lengua" (AHPC, —
loca! que significan en lengua sanavirona "pueblo" y "arique" respectivamente—, fueron
utilizados por algunos autores para determinar la extensión geografía de los sanavirones
en el
escr 1, leg 1, exp. 4) En otro expediente del año 1594, referido también al Valle de periodo prehispánico (Cfr. Montes, 1950-57)
Salsacate, un
Sin embargo, creemos que el empleo indiscriminado de ambos sufijos por parte de los españoles,
testigo indígena señala que Tululunave "es el nombre en lengua delos camiares" y que en la en
del testigo, se dice "Talasnavan" propia ha provocado confusiones en cuanto a la extensión
especial en cédulas de encomienda y en pleitos,
HValle de Calamuchita muestra en la toponimia y la onomástica otras características; de la lengua y sus portadores en esa etapa
por ejemplo, en la
a través del uso del sufijo "auleta" (AHPC, esa 1, leg 1,
exp 4) Un análisis de las relaciones interétnicas entre sanavirones y españoles ayudará sin duda
Por su parte, Aníbal Montes señala que las regiones norte y noroeste delas sierras clarifíación del tema lingüístico
muestran a través
de sus topónimos una influencia quichua y diaguita, cuyos agentes de transmisión fueron 33) La información de méritos y servicios de Lorenzo Suarez de Figueroa, en: Levillier, 1919-20, 1:
433-
probable¬
mente los sanavirones (Montes, 1950-57) 460,

40 41

í,
|L «
muchos de vista y otros por información, mas de seiscientos En los 35.000 km.2 de superficie que abarcan, las Sienas de Córdoba presentan
pueblos deindios que en aquella serraníay valles queen medio
de ella ha y están poblados; en los cimles hecha con diligencia
aspectos variados, donde alternan alturas abruptas, altiplanicies, quebradas,
valles y superficies redondeadas. La adaptación a esa diversidad geográfica
-
¡a pesquisa y por ¡as lenguas y cuenta que de cada población origina formas disgregadas en los asentamientos.
se pudo entender, se hallaron a ver casi treinta mil indios..." El autor de la Relación de 1573, cuando describe las características de ios
poblados, señala con precision los aspectos de su distribución espacial:
El cronista Pedro Lozano no se aleja mucho de esta última cifra, al afirmar que
en 1587 la jurisdicción de Córdoba tiene "mas dequarenta milindios devarias naciones "las poblaciones tienen muy cercanas unas de otras, que
y lugares diferentes" M. por la mayor parte a legua y a media legua y cuarto y a tiro
dearcabuz y a vis ta unas de otras están todas Son ¡os pueblos
Los cálculos no parecen exagerados, si tenemos en cuenta que en 1586, en un chicos, que el mayor no tendrá hasta cuarenta casas y ha
concierto para construir la acequia que suscriben el cabildo de la ciudad y Pedro muchos de a treinta y a veinte y a quince y a diez y a menos,
de Soria, los vecinos se comprometen a aportar,en tres meses, la cantidad de 3 .300 porque cada pueblo de estos no es mas de una parcialidad o
indígenas como mano de obra U51, parentela..."
.

Por otra parte, ya en 1566 Gerónimo Gonzalez de Alanis había escrito al


Licenciado Castro, dándole cuenta que el valle donde se apresó a Francisco de En general, los sistemas adaptadvos de la población prehispánica de lassierras
Aguirre estaba "todo poblado". La misma impresión tiene unos años después el muestran una cierta homogeneidad, con algunas diferenciaciones regionales
gobernador Gonzalo de Abreu, cuando informa al rey que ha tenido "certidumbre basadas en el uso más intenso de un recurso renovable sobre otro. En todos los
de gran suma de indios" 06). casos, el habitat disperso facilita el acceso a conjuntos ecológicos diversificados, y
j la yuxtaposición de acdvidades.
Antes de finalizar el siglo XVI, las estimaciones de la época hacen variar entre
12 000 y 15,000 el número de indígenas encomendados 07). En efecto, en el piso de vegetación del bosque serrano, los aborígenes poseen
sus asentamientos permanentes; en tanto que el piso del arbustal de altura, es el
espacio desdnado a la domesticación de la llama, Las actividades de la caza, en
Es probable que la "certidumbre de gran suma de indios" que tienen los conquis¬ cambio, se desarrollan en los pastizales y bosquecillos de altura y en las llanuras
tadores, surja de la impresión que causan a las primeras expediciones españolas bajas del este
los patrones de asentamiento indigenas.
Las poblaciones se encuentran en los valles, junto a los cursos de agua, y
desarrollan una economía agrícola asentada en el cultivo del maíz. Esta actividad
34) Pedro Lozano, 1734-1755, tomo I,libro i,cap V: 19 y 14S Nicolásdel Fecho repite ta cifra, indicando: se complementa con la caza —a veces especializada—, la recolección, y la domes¬
"CuandoCordoba fue edificada, se contaban en sus inmediaciones cuarenta mil indios guerreros de ticación de la llama
los cuales, en el año 1600, ocho mil ataban sujetos a la ciudad., " (Del T echo 1897, 1,libro 2, cap. XV)
35) Acta Capitular de 7/6/1568 (A C., i: 61 1-612)
36) El informe de Gonzalo de Abreu al rey, de fecha 10/4/1574, en: Levillier, 1920: 48-49
37) Pedro Sotelo Narvaez en su carta al rey de 1582, indica 12 000 indígenas de encomienda (op. til);
En cuanto a la distribución geográfica de la población, el perfil transversal de
igual cifra señala el gobernador Juan Ramirez de Velazco, en carta de 5/1/1596 (Levillier, 1920, 1: las Sierr as de Córdoba indica aquellas zonas que posibilitan una mayor' concentra¬
315-323) ción de habitantes: en los faldeos este y sur, donde la región montañosa termina
J uan Canelas Albarran eleva la cifra a 15 000 indígenas de encomienda para el año 1586 (Manuscrito suavemente en una angosta planiciede píedemonte,oen pequeños cerros aislados
3178, Biblioteca, Nacional de Madrid, citado por Angel Rosenblat, 1945) Sobre el tema de las
estimaciones pobladonales indígenas, resulta interesante el trabajo de Jane Pyle (Pyle, 1976);
que se hunden en las pampas; y en el norte, donde las sierras degradan en otra
asimismo, el trabajo critico elaborado por Gaston G. Doucet (Doucet, 1987) en torno a 13 publicación altiplanicie irregular de relieve desordenado, surcada por valles longitudinales
de Luis A Gonzalez Rodriguez (Gonzalez Rodriguez, 1984) es de particular importancia para la intermontanos
utilización de las fuentes hispánicas que hemos citado

42 43
Esta presunción es confirmada por las cédulas deencomienda de los primeros que "...por ser paraje mas calido se benian a el ¡os indios de laPunilla a senbrar Agregan
años de la conquiste. La localización de los pueblos que están contenidos en ellas, además que en las rocas próximas al curso de agua, una gran cantidad de mor teros
muestran tres regiones que se destacan por sus concentraciones demográficas eran utilizados para la molienda de la quinoa y el maíz <w.
indígenas: hacia el sur, los valies de los ríos Tercero y Cuarto; en la zona central, i

el Valle de Punilla; y hacia el norte, la vertiente oriental de las sierras 0!>. En la región norte delas sierras, el cacique Coloopan del pueblo de A tanhenen,
describe de esta manera el acceso a los cursos de agua de cada uno de los poblados
de la zona:

el pueblo de Cantapas bebe de un río que viene de hazia


la sierra de Salzacate que se llama Chíhmi Los indios de!
La documentación histórica y la información arqueológica, hacen continua cacique Chabalanaguan, señor de Punanquinahalo beben de
referencia a poblados de dimensiones pequeñas, con límites territoriales a veces un arroyo que se llama Chulumpaca que pasa cerca de
poco claros Cantapas y que se junta con el rio que viene de Salsacate que
pasapor él pueblo deHulumany vierte en el pueblo deTulian,
Al tratarse de una región semi-árida, el manejo de los recursos hídricos y los donde los yndios del dicho pueblo de Tulian sienbran sus
conocimientos tecnológicos de la población, tienen consecuencias directas en las chucaras en el arena donde se consume el dicho rio " H1).
formas organizativas que adoptan sus habitantes.
En toda la extensión de las Sierras de Córdoba, las pequeñas aldeas que
conforman los asentamientos permanentes de su población indígena se ubican
En ese sentido, no todos los nichos ecológicos de las Sierras de .Córdoba
sólo en el fondo de los valles, próximas a los cursos permanentes de agua,
permiten un asentamiento permanente. En una zona con pocas precipitaciones
anuales y cursos de agua no voluminosos, sus pobladores deben concentrar los
En esta región semi-árida, la intensidad del sistema de obtención de alimentos
cultivos en las riberas de los ríos para aprovechar la humedad natural.
depende de la tecnología aplicada en la utilización de los recursos hídricos.

Esta dependencia del medio geográfico es mencionada por los caciques de Los documentos hispánicos hacen referencia a dos métodos para la captación
Saídán en un pleito del año 1586, En efecto, cuando deben explicar la posesión de de aguas de superficie: por inundación, y a través de "jagüeyes". Ambas formas de
tierras que les pertenecen pero que no cultivan habitualmente, manifiestan que control del agua sustituyen parte de la fuerza humana, permitiendo incrementar
como ellos no tienen regadíos, necesitan buscar chacras en diferentes partes, según la provisión de alimentos.
"cómo van los años", para poder recoger comidas 0,1.
El riego por inundación, facilita a los habitantes indígenas la utilización de los
Algunas décadas después de la conquista, los indios más viejos del Valle de sedimentos del desborde de los ríos, para fertilizar las chacras, Aún con sistemas
Punilla recuerdan que acostumbraban cultivar junto al arroyo Culanpacaya, ya de cultivos anuales —que parecen haber sido la tónica en la región—, los desvíos
del curso naturalde agua a través de obstáculos, favorece la renovación de la capa
superior del suelo junto a sus márgenes Ha.

38) En el norte, los habitantes de la zona de Quilino son encomendados a Jerónimo Luis de Cabrera; en 40) AHPC, esa 1, leg. 72, exp 2
la cédula respectiva se mencionan un total de 29 pueblos, en un diámetro aproximado de 6 leguas 41) AHPC, esa. 1, leg 3, exp 9 Le misma información es brindada en el pleito mencionado, por el
(AHPC, esa, 2, leg 8, exp. 3) cacique Cobilnahuan y el indígena Santulhian, del pudrió de Mantalahalon.
En cuanto a la zona sur, el acta capitular de 29/10/1573, indica que "ay nezesidad de señalarle 42) Un sistema de riego por inundadón, de características similares aldenuestra zona, es analizado por
términos e jurisdizion por hazia la parte del sur, do ay la mayor can tidad de los repartimientos de Lautaro Nuñez (Nuñez, 1978),ensu estudiosobre el valle de Tarapacá, en el norte de Chile. Por otra
yndios que sirven y an de servir a los vezinos desta dicha ziudad. " (A C ,1: 68-70) parte, los benefidos resultantes de la aplicodón de estos tipos de tecnología hidráulica, son
39) AHPC, esa, 1, leg, 1, exp 10 descriptos por Esther Boserup (Boserup, 1984)

44 45
El sacerdote jesuíta Alonso de Barzana —en la carta a la que hiciéramos
El encomendero Pedro de Mojica puntualiza que en esta región, las represas de
referencia en páginas anteriores—, al describir las formas de obtención de alimen¬
tos de la población indígena, confirma el uso de estas prácticas sobre los recursos
agua llovediza son "hechas a mano" m.
hidricos:

"...el modo de vivir de todas estas naciones es el de ser A través déla combinación deactividades y dela útilización diferenciada delos
labradores. Sus ordinarias comidas son niaiz, lo cual siem¬ distintos pisos ecológicos, cada uno de los poblados obtiene los productos alimen¬
bran en mucha abundancia; también se sustentan de gran¬ tarios y manufacturados que sus miembros necesitan
dísima suma de algarroba, la cual cogen por ¡os campos todos
los años al tiempo que madura y hacen della grandes deposi¬
Los valles —donde se dan cosechas anuales de maíz, quinoa,zapallo y a veces
tas; y cuando no llueve para coger rnaiz o el rio no sale de
frijoles—, se trabajan con un sistema de barbecho corto. El aumento de los cursos
madre para poder regar la tierra, pasan sus necesidades con
de agua durante la estación húmeda provee a la fertilización de los suelos, y
esta algarroba..." (ul.
permite el uso intensivo de las chacras ubicadas junto a arroyos y ríos.

Sin embargo, la produc ti vidad agrícola no es suficien te; y los meses de invierno
En la zona norte de las sierras, el agua de lluvia o los manantiales suelen quedar suelen convertirse en épocas de escasez Los habitantes indígenas recurren en¬
represados de manera natural en algunas depresiones del terreno. Para las tonces a la recolección y a la caza; ambas actividades son de carácter extensivo y
poblaciones indígenas de la región estos jagüeyes adquieren una importancia habitualmente producen la dispersión estacional de los miembros del poblado.
vital; y algunos de ellos son descriptos en las probanzas de los litigios.

Tal es el caso de Chochoconahal, ubicado cerca de Toco Toco —hoy Cruz del
Eje—; sobre el mismo, el encomendero Francisco Perez de Aragón dice que es
44) Los españoles reconocieron la importancia de estos jagüeyes, y en sus pleitos por la posesión de
"...sitio muy antiguo entre los naturales., porque ¡os mas pueblos della beben de jagüeyes pueblos indígenas utilizaron como elementos de juicio en las probanzas, el lugar adonde acudían a
y a tiempos les falta el agua y acuden a aquel manantial por agua..." beberloshabitantesdecada asentamiento Actualmentese pueden localizar lossitios dondeestaban
í- ubicadas estas represas por ¡as depresiones del terreno
i¡i Las referencias sobre el jagüey de Chochoconahal, en: AHPC, esa 1, leg. 3, exp 3 y exp 9 Los
jagüeyes déla zona de Conchuluca,son mencionados en ANB, Expedientes Coloniales,año 1600, nro
El cacique Pedro Chucoyanauan, del pueblo de Numantihalo, precisa que 4.
Chochoconahal no es un arroyo,sino agua "llovediza" que cae de la sierra y que está Un poco más hacia el oeste de Chochoconahal, se encontraba ¡o que los españoles denominaron
"Jagüey delasOnceMil Vírgenes". En 1598, par ordendel tenien te de gobernador Gaspar de Medina,
represada; y el yanacona Gonzalo Animis agrega que esa agua llovediza "se recoje se hace una averiguación enese sido, que incluye una lista de pueblos con sus caciques y losjagüeyes
en tinas lozas de peña", y que los pueblos comarcanos "quando les falta agua en sus pertenecientes a cada uno de ellos {AHPC, esa 1, leg 8, exp. 6, f 286 r )
jagüeyes beven de la dicho aguada". En AHPC, esa 1, leg. 6, exp. 1, hay otra información referida a un jagüey ubicado en la zona de
Nondolma Sobre el mismo, el cacique Juan Banchucla del pueblo de Nondolma, informa que "el
jagüey llamado Sacalo es el deesle testigo; el jaguen del quebebe Sarbachuctavi, Ybacslton y Yalama,
j En la zona de Conchuluca, los poblados indígenas están asentados en torno a se llama Slquisaca; y que cuando se les acava el agua van a beber del xaguen deste testigo llamado
aguadas, y cuando la sequía agota el líquido así represado van a beber a otros Sacalo"
jagüeyes de la comarca, o bien se dirigen hacia las Salinas, o a las faldas de lasierra. En la encomienda que otorgan para s( y su sucesor el fundador Jerónimo Luis de Cabrera, se hace
referencia a la existencia de dos "cequias" localizadas en ia zona de Quilino, llamadas por los
indígenas del lugar "Ybramampa " y "Aquimampa" En años posteriores a la concesión déla merced,
no se susci tó ningún pleito en tomo a esa región que nos permita conocer las características de estas
"acequias" y las formas sociales y políticas de sus pobladores. No obstante, podemos suponer que
la zona debe haber contado con una d ensidad poblacional mayor que la de sus alrededores, teniendo
43) Otro jesuíta, Nicolás del Techo, agrega sobre el tema: "allí no caen lluvias en invierno; pero bastan en cuenta que por una parte es la que se adjudica el fundad or de la ciudad; y por otra, que los recursos
las del verano y las nieblas para fertilizar las tierras" (op at., 2, XV: 263) —
hidricos que se mencionan ya se trate de cursos na tur ales deagua,odeacequias construidas por

sus habitantes , implican un aumento en la producción de cultivos

46
47
Durante los meses de diciembre y enero, cuando ya se ha efectuado Sa siembra Indudablemente,la pobladón indígena delas sierras "es gentefazi! de moverse de
de las chacras, la recolección del algarrobo reúne anualmente a los habitantes de una parte a otra". (W
diferentes asentamientos en los sitios de algarrobales.
Las prácticas utilizadas para la obtención de alimentos, no exigen un grupo
En 1592, Tristan de Tejeda, para demostrar que los indígenas del pueblo de numeroso de trabajadores. En efecto, las tareas pueden ser realizadas por pequeñas
Citon de su encomienda fueron mal empadronados, advierte que sus indios... comunidades agrícolas, que conservansu autonomía en los aspectos esenciales de
la gestión económica.
"...cogen todos los años su algarroba en el propio baile
donde tienen sus algarrobales, ic¡uando el capitán don Lorenzo Enese sentido, a la dispersión periódica que se produce durante las actividades
Juarez de Figeroa bino a empadronar esta tierra que fue por de caza y recolección, debemos agregar las estrategias de fragmentación que se
donde don Jironimo de Cabrera gobernador destasprobincias adoptan frente a épocas de escasez y de baja productividad agrícola,
iprimerfundador desta ciudad la repartió... ¡legoeldichodon
Lorenzo a! dicho valle de Soto a descubrido y enpadronallo a En 1593, en un pleito por el pueblo de Mayahen, Antonio Suarez Mejía relata
ocho o diez días del mes de enero ques quando se coxe en esta que cuando se le encomendó ese pueblo con sus tres caciques,
tierra el algarroba iasi empadrono los indios susodichos de
Zilon dendestaban" (,5) "..mvo ziertoanhos demuygransecaylos dichos caziques
del pueblo de Maya se dividieron buscando agua; unos a una
Por otra parte, durante los meses de invierno, los pastizales y bosquecillos de parte y otros a otra para escapar en vida, sefueron poco mas
altura ven establecerse a grupos disgregados de las aldeas de los valles. Durante de una legoa a una agua que hestá entre unas penhas los
un tiempo estarán ocupados en la recolección de semillas y raíces, y espedaimente quales son el cazique Abancolo y el cazique Nonguto y el
en la caza de los animales que pueblan ese nicho ecológico cazique Cantalopitm..."

Si tenemos en cuenta quelacazayla recolección noson actividades económicas


episódicas, sino que se Irata de prácticas regulares, resulta innegable su importan- Algo semejante relata Chabalanagua, cacique principal del valle de Cantapas,
ria en el sistema de obtendón de alimentos. tal vez haciendo referencia implícita a una época de escasez:

Puesto que la geografía no presenta cambios climáticos en espados reducidos, "...antes de agora solian estar juntos con los demos
los pobladores de ios valles pueden trasladarse a zonas vírgenes, optando por caziques, que están deoididos agora al presente, que por
migraciones cortas y conservando —aún en las prácticas agrícolas—, los primiti¬ muchos hechizos con que se matavanse devidio cada parziali-
vos sistemas de barbechos, largos. dad a sus chacaras y ansi se an estado hasta agora" H7).

A fines del siglo XVÍ, el cacique Cobilnahuan del pueblo de Mantalahalon


informa que: La misma estrategia de dispersión será adoptada frente a la conquista es¬
pañola, A menudo,losmiembros de las expediciones referirán las dificultades que
". el pueblo de Atanhenen no an tenido otro sitio mas de
este en que al presente están desde antiguamente, e que un
tiempo se pasaron una legua mas arriba de donde están al
presence, e que se boivieron adonde agora están por ser como 46) ta información del cadque Cobilnahuan, en: AHPC, esa 1,leg. 3, exp, 9 La referenda a lamovilidad
,

son sus tierras..." territorial es expresada por Antonio Suarez Mejla, en relaaón a la región de Nunsacate, en: AHPC,
esa . 1, leg, 2, exp 2
47) La informadón de Antonio Suarez Mejla, en: AHPC, esa 1, leg. 4, exp. 6; y el relato del cadque
45} AHPC, escr. 1, leg 4, exp 1. Chabalanaguan, en: AHPC, esa 1, leg 3, exp, 9

48 49
ÿ wj

encuentran en sus malocas, "por ser yndios que no tienen pueblos formados, sino A fines del siglo XVI, los caciques del valle de Cantapas —al sureste déla actual ¡>
devididos de uno en uno en las concavidades de las peñas donde hazen sus moradas" m. Villa de Soto—, al testimoniar en un pleito entre encomenderos, aluden a las -/j
relaciones que unen a los distintos pueblos del valle. dj, 1
Cuando los españoles entran por primera vez al valle de Salsacate, el cacique ' ü.
Tululunaure habita en las tierras llamadas Mehele, junto a otros tres caciques, De esta manera, el cacique Cobilnahuan del pueblo de Maníalahalon -comar¬
"todos de un mismo pueblo". Por temor a la irrupción hispánica se retiran más cano de Atanhenen, uno de los pueblos en litigio—, dice que los habitantes de
adelante del valle, donde hacen sus sementeras. Poco después, debido a una plaga Cantapas y Atanhenen "siempre se an tratado como parientes en amistad hazicndose
de langosta y a la consecuente escasez de alimentos, cada uno de los caciques se fiestas los unos y ¡os otros e que está apartado el uno del otro". Señala además que el
dispersa buscando comidas; y sólo retornan a su pueblo original cuando la pueblo de Chabalanahen..
algarroba y el maiz les garantizan el sustento 14,1
"está dentro del pueblo de Cantapas eque son todos unos
En el contexto de homogeneidad de los sistemas adaptativos que practican los y apellido de Cantapas y de un natural e que el cazique
del
indígenas de las Sierras de Córdoba, la lógica de la gestión económica tiene dos Chabalanaguan está atisi mismo dentro del pueblo de Canta¬
rasgos esenciales: las formas dispersas de los asentamientos, y la conformación de pas y es señor de Chabalahen "
comunidades agrícolas domésticas que funcionan como células productivas autóno¬
mas Coloopan, cacique del pueblo de Atanhenen, puntualiza la relación que une a
ambos pueblos de Atanhenen y Cantapas:
El acceso a diferentes recursos, la combinación de actividades, el habitat
disperso, y hasta la misma geografía —que por sus características no -exige "...son todos unos, .porque sienpre se an tratado por

simbiosislocaleso regionales ,explican la au tonomia económica delas pequeñas
aldeas y la ausencia de estratificaciones sociales, de especializaciones regionales y
parientes debajo del apellido de Cantapas y atisi en sus fiestas
y llantos se hallan los unos y los otros, e que estos yndios de
de sistemas políticos centralizados. Atanhenen van a settbrar juntos con los de Cantapas y los de
Cantapas sienbran junto a las chucaras de los indios de
Atanhenen e que se tratan por una parzialidad y en sus
guerras se ayudan los unos y los otros" m).
Cuando los conquistadores hispánicos deben fundamentar su posesión de un
poblado indígena, utilizan a menudo en las probanzas de los pleitos referencias a Los vínculos de parentesco cohesionan a los pobladosdispersos ante diferentes
relaciones de parentesco que unen a distintos asentamientos. Según manifiestan circunstancias. En la región habitada por el grupo étnico comechingón, la docu¬
los litigantes, "...espublico e notorio en esta tierra quesejuntan los yndios de unos pueblos mentación histórica menciona relaciones transitorias de adhesión, referidas espe¬
con otros a comer y en sus justas y cazaderos y para las gerras y pata esto tienen sus cialmente a situaciones bélicas1"1
conozidos y parientes" <50).
En una información sobre el valle de Salsacate, el encomendero Alonso de la
En efecto, las fuentes históricas señalan que el sistema de parentesco es el que Camara afirma que "toda la tierra generalmente están encadenados en parentescos y
otorga una identidad a las aldeas que se consider an como miembros deunamisma amistades y fueron faqiles en mover guerra y hazer amistades". Los testigos indígenas,
familia extensa.

51) AHPC, esa 1, leg 3, exp 9


•18)Probanas de méritos y servicios de la ciudad de Córdoba, e Instrucciones del cabildo al procurador
Hernán Mejía Miraval, de 1589 (Lcviilier, 1918: 422-459) 52) C Mállassoux sugiere distintos grados de cohesión, según las formas de obtendón de alimentos
49) Esta información es relatada par el encomendero Bartolomé Jaimes y los caciques de Panaolva, en:
practicadas por comunidades agrícolas que están unidas por lazos deparentesco (Meillassoux, 1985:
28-31 y 47).
AHPC, esa 1, leg 4,exp 11
Esto parece confirmarse en nuestro caso, al comparar los datos que poseemos sobre la región
50) AHPC, esa 1, log 2,exp 2 habitada por la etnfa comechingona, y aquélla que posee una mayor infiuenaa sanavirona

50 51
r por su parte, revelan que en la zona de Panaolva, el pueblo de Halón "apellidaba
para sus guerras a los indios de Quisquisacate y a los de la encomienda de
Mitre, con el objeto de obtener ayuda ,a>.
Juan de
Ya se trate de relaciones de adhesión temporarias, o de vínculos invocados en
forma permanente, los lazos de parentesco unen a asentamientos dispersos en
contexto espacial definido.
un

En la zona norte de las sierras, en cambio, donde la influencia sanavirona ha


introducido prácticas agrícolas más desarrolladas, los vínculos de comunidad Aún con ámbitos territoriales diferentes según las estaciones, las distancias
entre pueblos emparentados, parecen tener un carácter más ÿ
geográficas que separan a los asentamientos "de un mismo apellido" nunca son
permanente. considerables,
Cuando en 1585, el teniente de gobernador Juan de Burgos hace comparecer a
los caciques de Nunsacate, estos afirman "ser todos de la parcialidad y apellido de Según sus caciques Cháleos Vacona y Ambicama, los pueblos de Sinsacate y
Nunsacat, distinto de! pueblo de Chimbosacate" (HI. Nunsacate son "todos de la parcialidad y apellido de Nunsacat". Ambos se encuentran
i a media legua uno de otro ,57í.
De igual manera,Miguel Mocas, cacique de Cochanhen, se refiere al pueblo de
Siquima: En el valle de Cantapas ya mencionado, los pueblos de Mantalahalon,
Huluman,
Atanhenen y Punanquinahalo, que reconocen ser "del apellido de Cantapas", se
i "En estepueblo de Siquima obo tres caciques que fueron y encuentran unos de otros a medio día de marcha: frente a estos, los de Cantapas
son Sarbachuctavi y Toletusan, cuyo hijo es Ibacsiton; y no reconocen relación alguna de parentesco ,MI.
asimismo ubo otro cacique llamado Nobon.. y que esta
i parsialidad se llamava Chicunin y que en la lengua de los Losmismosconquistadores ibéricoshacenmencióna los límites territoriales de
¡ sanabirones le llaman Chicumacat, pero todos tres caziques una
un sistema parental indígena, cuando para demostrar la independencia de
¡ con el dicho Nobon son del pueblo de Siquima y lo ,59).
f fueron parcialidad, insisten en que ésta se encuentra "en valle propio"
siempre, porque sus padres y sus agüelos antiguos siempre
i
estuvieron en el dicho pueblo de Siquima consus casas y en un A pesar de la movilidad espacial de la que continuamente hace gala la
t
\
serco y nunca conosieron ni tubieron otro pueblo" 1551 población indígena, la extensión por la que se desplaza la comunidad tiene límites
definidos
En los pleitos por la posesión de pueblos indígenas de la región norte de las i
sierras, las probanzas buscan además confirmar la pertenencia a un
apellido u Cuando se produce la conquista española, en el actual Valle de Punilia dos
otro, según el acceso a los jagüeyes ,5Í).
grupos territoriales comparten la región. Diego Suchonagan, cacique del pueblo
de Olaen, informa que la divisoria entre ambos corre desde el cerro Cuianpacaya
hacia el cerro llamadoCaracheorco;y de allí hacia otro cerro de la siena de Saldán
llamado Antatica en su lengua, y Antaorco "en la lengua general". Agrega que los
53) AHPQ escr 1,leg 4, exp. 11; y leg 1, exp 4
54)
indios de Punilia no pasan nunca esos linderos, y que "esto lo sabe porque los indios
AHPQ esa 1, leg 2, exp. 2.
55) AHPQescr 1, leg 6, exp 1 Por otra parte, la Relación j de Cosquin son sus parientes".,
de 1573, refiere que; "cada pueblo de estos no
esmasde una parcialidad o parentela y asiestacados uno porsl tienen los pueblos
puestos en redondo
y cercados con cardanes y otras arboledas espinosas que sirven de fuerza y esto por las guerras
que MartínHamiltocto añade que él vio cuando niñoque "si los unos o los otros salían
entre ellos tienen, viven en cada casa a cuatro y a cinco indios casados y algunos a más"
(op. dt ) a casar, no pasaban de los dichos limites y mojones...si yvan siguiendo alguna cosa y
56) Sobre este tema, las fuentes atan varios
ejemplos Recordemos el jagüey próximo a Toco Toco,
adonde acuden los pueblos cuando les falta agua; o bien la aguada de Qiochoconahal adonde se
dirigen ¡os pueblos comarcanos a Tulian
En 1598,elescribano Juan Nieto, relatando averiguadones que hizo, indica que los pueblos de Oíalo
están a 5 leguas de la aguada de Qtochoconahal "y tienen sus aguadas por sí" (AHPQ esa, 1,leg
9,
exp 11) En la encomienda hecha a Francisco Lopez Correa en 10/10/1592,se le entrega el pueblo y 57) AHPQ esa. 1,leg.2, exp 2
pardalidad de Chacdma, con los cadques Yacnavan y Chapanavan y "el jagüey de que beben se 58} AHPQ esa, 1,leg 3, exp 9
llama Cuaquim y están mas aDa de Quisquiqacat,oon a las Salinas" (AHPC, esa 1, ¡eg 6, exp 1) 59) AHPQ esa l,¡eg. 2, exp. 2

52 53
asertava a pasar de dichos linderos, la dejavan porque si la seguían pasando adelante abia En el territorio del ya mencionado Tululunaure, el cacique Cusanbich es
guerras entre los dichos yndios" m, obedecido por todos los caciques e indios "por ser gran cacique". Su fama llega hasta
los enemigos del pueblo de Halón, quienes al mencionar la consideración en que
Los grupos de parentesco se amplían mediante las alianzas matrimoniales; y se lo tiene, advierten que "entrelos naturales es costumbre en todos los pueblos aver un
éstas contribuyen a conformar articulaciones parentales que abarcan a varias caqique a quien respetan los demos caqiques del dicho pueblo y obedeqen sus mandados"
comunidades agrícolas.
Esos caciques principales son conceptuados como personas que tienen unnexo
Asi lo expresa el cacique Felipe Milamatcanan, cuando señala en relación al significativo con el territorio; a tal punto que a veces el nombre de los pueblos se
valle de Salsacate: "...como es costumbre entre los naturales emparentarse casándose con deriva de uno de los caciques sobresalientes
yndias de otros pueblos, asi se tratavan de cuñados..." los indios de Quisquisacate con
los de Tululunaure, aunque estaban muy apartados y cada uno en su pueblo ,s". Coloopan, cacique de Atanhenen, refiere una situación de tal tipo:
En el Valle de Purúlla, los linderos entre los dos grupos territoriales que lo "Antiguamente al cazique principal deste asiento de
habitan se tornan difusos cuando intervienen las relaciones matrimoniales Fran¬ Antanhenen se llamava Atanhenen e después que este dicho
cisco Matala, que tiene algunas pendencias con sus parientes del Valle de Punilla, cazique Atanhenen murió,los naturales de la comarca llama¬
se va al arroyo Culanpacaya "a favoreserse de los parientes de su mujer",
quienes le ron este asiento Atanhenen y ansi se le quedo este nombre,
señalan aquel sitio para su asistencia; en él reside durante un año, hasta que recoge pero que el propio nonbre del pueblo es Holomanohalo, e que
el maíz que ha sembrado, y luego retorna a su territorio de origen ,62). lo sabe como cazique que es de este asien lo de Atanhenen " ,HI.
Aún cuando la fragmentación en aldeas relativamente autónomas sea la
Ya se trate de caciques principales o secundarios, para ¡os miembros de un
respuesta para reducir los efectos de la escasez de alimentos, los nexos entre los
nuevos poblados que surgen se mantieneny se expresan a través de las relaciones grupo de parentesco, el prestigio y las cualidades personales son la base del
que establecen los lazos parentales. reconocimiento de esa función

En los poblados que comparten "un mismo apellido", y donde cada uno posee su modalidad es de origen anterior a la llegada de los sanavirones, según se desprende de las
propio cacique, es frecuente encontrar el reconocimiento a uno de ellos como declaraciones del cadque Miguel Mocas, atadas anteriormente
Sobre este tema, ataremos otros ejemplos: refiriéndose a los pueblos de Atanhenen y Cantapas, el
"cacique principal" (ü| arique Coloolis, sujeto al pueblo de Punanquinahalo, india: "son todos uno yse juntan a sus bailes
y fiestas e obedezenai azique Chabalanaguan señor de estepueblo de Punanquinahalo yse ayudan
en sus guerras" (AHPC, esa l,leg 3, exp. 9) EnellitigioentreFranriscoPerezdeAragonyAntonio
Suarez Mejía, por la posesión de indígenas que fueron de la encomienda de Juan Gomez de
Oaña,
60) AHPC, esa 1, leg 72, exp 2. Una situación Nachuctavi y
semejante se da en Saidán: hacia 1586, en un pleito por se indica para el año 1594 la existenda do dos ariques en el pueblo de Gtonhcn:
esas tierras, los caciques reconocen con facilidad el territorio del cacique Lícharava, sefialando
van desde una loma "que tiene al remate unas peñas coloradas", a tres o cuatro tiros de arcabuz
que Citonnagua, que son hermanos (AHPC, esa l,leg 8, exp 6)
arroyo arriba Agregan que licharava tiene más tierras que nunca ha sembrado, "pero que le 64) AHPC, esa. 1, leg, 3, exp 9 El encomendero Pedro de Olmedo, refiriéndose a los habitantes de "La
pertenecen" (AHPC, ese 1, leg l,exp 10) otra banda de la cordillera", a diez o doce leguas del Valie de Calamuchita, afirma queel nombredel
61) AHPC, esa 1, leg 4, exp 11 En el mismo documento, se indica pueblo de Gualabira se derivó por el apellido de un arique, pero que ese pueblo se llama por otro
que el padre del mendonado nombre Biiiaquira, por ser esto "muy acostumbrado entre les naturales desta probmqia, toman el
Tululunaure se muda al pueblo de Tamalach con todos sus Indios, donde establece sus casas y
chaaas, porque ha casado a su hija con los indígenas de esa región
apellido del pueblo por el nombre del aqique principal, a quien dan los demás ariques del dicho
pueblo la sujegon" (AHPC, esa 1, leg 19, exp 10).
62) AHPC, esa 1, leg 72, exp 2
Otro encomendero, Bartolomé Jaimes, insiste en que "tienen costumbre los yndios de llamarse de
63) Los documentos hispánicos definen a las situadones do este
tipo con tas designadones "pueblo" y diferentes maneras, unas vezas por ios nombres de los caiques otras por los pastos e aguadas"
"pardaíidad" La primera, implica la exislenda de un cadque principa! y varios secundarios nu- (AHPC, esa 1, leg 6, exp 5)
deados en un territorio; en tanto que la segunda hace referenda a una parte del "pueblo", regida por Por su parte, el misionero Miguel de Milla, cuando alude ai origen del nombre de! pueblo de
un cadque secundario Cocoyanta, ubiado a 18 ó 20 leguas de la ciudad de Córdoba, hacia el sureste, da las siguientes
Las cédulas de encomienda y las reladones propordonadas por el Archivo de la Provincia de precisiones: Cocoyanta era un arique que vivía en una quebrada que llaman Chíla; él y su hijo son
Córdoba, nos hablande la existenda de numerosos pueblos aborígenes con más de un cadque Esta de Chiquinaloloba, que es el apellido de esos indios, y el otro apellido es Quiniquiza; el nombre de

54 55
4
No obstante, los detalles sobre sucesión en los cacicazgos indican que otro Las rivalidades entre grupos que habitan en una misma región geográfica son
elemento juega unpapel importante en ese sentido:la pertenencia del cacique a un
linaje patrilineal dominante.
mencionadas a menudo en los documentos españoles Esas competencias que se —
expresan a través de acciones bélicas-, giran en torno a la obtención de recursos
A fines del siglo XVI, enla zona de Nondolma,los indios del pueblo de Siquima alimenticios.
—el que dicen ser "todos parientes"—, distinguen varios caciques que se suceden en A fines del siglo XVI, los caciques del Valle de Salsacate recuerdan las guerras
cargo Uno de ellos, Sarvachucta vi, por ser "indio belicoso e valiente le eligieron los
entre el cacique Tululunave del pueblo de Tamalach, con los de Halón y sus
naturales por cacique". A su muerte le reemplaza Tole, quien con el antes nombrado,
aliados, los indios del pueblo de Quisquisacate. En sus informes, conservan
son "hermanos de un padre"; ambos son reconocidos como caciques
principales. memoria de que cuando le fal taba comida al pueblodeTamalach, "ibansus caciques
Hacia 1598 el pueblo de Siquima tiene tres caciques: Sarvachuctavi, hijo de a rescatar al pueblo de Quisquisacate y se volvía con su rescate a su pueblo" Í6Ü.
aquel otro de igual nombre;Ybaccsiton, hijo de Tole; y Yalama, sobrino de un viejo
cacique llamado Nobon. En todos los casos, la forma que adopta la guerra es correlativa de la organi¬
zación política y económica que describiéramos en páginas anteriores. Aún
En genera!, pareciera que el liderazgo de los caciques —basado en cualidades cuando lasácciones bélicas tengan como objetivo la obtención de recursos alimen¬
personales y determinado por contextos diferentes—,posee algunos rasgos de ticios, en ningún caso derivan en la conquista permanente de otras tierras. Por otra
naturaleza temporaria En la fecha antes señalada, los informantes indican que parte, las actividades guerreras revisten siempre el carácter de correrías; a tal
Tole "es cacique antiguo de este pueblo de Siquima", que "esta muy viejo y no puede punto que los españoles las denominaron "guaiabaras",haciendo referencia a las
andar"; y "por ser tan viejo, manda a los indios su hijo Ybaccsiton" algaradas de la Reconquista Ibérica.

En efecto, ninguna indicación hay en los documentos sobre grandes y conti¬


Cocoyanta es tomado de una aguad a, y Chiquinaloloba era "elnonbrede losalgarrobales que estaban nuadas batallas En cambio, muchas son las referencias sobre emboscadas, incur¬
junto al pueblo y que en su lengua ynterpretan a algarrobal". Agrega por último qui
"aunque son
siones por sorpresa —especialmente de noche—, el uso de arcos y flechas, y sobre
de unpueblo, tienen muchos pueblos y sitios y ansi tienen muchos nombresde
pueblos, aunques todo la recurrencia de acciones bélicas después de recoger la siembra.
uno" (AHPC, esa 1, leg. 10, exp 6)
Sóbrelas posibilidades que pueden brindar los estudios onomásticos en la Provincia de Córdoba, cfr
el trabajo de Beatriz Bixio (Bixio, 1983) La resistencia indígena a la conquista española asume formas parecidas a las
65) LasiníormarianessobreelpueblodeSiquima,en: AHPQescr l,leg 6, exp 1 ;y en ANB, Expedientes que acabamosde describir. Tristán de Tejeda, miembro de numerosas entradas y
Coloniales, nro 4, año 1600 En este último documento, hay una información que indica que la malocas, relata sobre ellas lo siguiente:
existencia de linajes patrilineales dominantes pueden ser atribuidas a la etnía comechingona En
efecto, el cacique Juan Ibaccsiton señala que los españoles le llaman a su padre T'oleban, y que en su
lengua le llaman Tolenavan; que ahora por ser viejo, se llama Toletusan Agrega que los indios de
"...y andando todas las noches en peso desvaratando las
Quñino, "porque tienen diferente lengua ques la sanabirona", le llaman Toleban a! padre del juntas e designios de los yndios enemigos que se asían para
declarante Por su parte, el encomendero Pedro de Mojia advierte que la desinencia "ban" significa dar en el y sus soldados que eran muy pocos y los dichos
"cacique", y "tusan", significa "viejo" enemigos muchos y cuando descansava un momento era de
Otros ejemplos sobre linajes patrilineales, en: AHPC, escr 1, leg 3, exp. 9, donde se indica que el
cacique Chabalanaguan es reemplazado porsu hermano Chabalachucta vi en el pueblo de Machaha-
dia poniendo por quartos centinelas de a cavallo en que
lon; igualmente en: AHPC, esa 1, leg 2, exp 9, donde se informa que el cacique Citontica es
reemplazado por su hermano Tole; o en: AHPC, escr 1, leg 8, exp 6, donde se detalla que
Tontoleanaguan sucede a su padre, el cacique Guayavenun en el pueblo de Tulian
Por último, sobre este tema, Alonso de Barzana, en su carta de 1594 (op rit ), refiriéndose a la 66) AHPC, esa 1, leg 4, exp 11 Otro expediente sobre la misma zona también hace referencia a
provincia del Tucumán señala: "pero vuelvo al gobierno desta gente, que es, como digo, por sus conflictos bélicos entre pueblos de I3 región; en: AHPC, esa 1,leg 1, exp 4 Esnecesariorecordar
curacas y suceden los hijos a los padres y los hermanos si no tienen hijos, y la obediencia es para la en este tema los informes de los caciques del Valle de Punilla, en cuanto a límites territoriales entre
guerra, en la cual sop capitanes y en la paz, para su gobierno" En cuanto a la naturaleza temporaria comunidadesunidasporlazosdeparentesco (AHPC, esa l,leg 72, exp 2);eneimismodocumento,
de! cargo de cacique, mencionemos que en: AHPC, esa 1, leg. 3, exp, 9, el cacique Coloopn, del los informes del cacique Martin Hamiltocto —ya mencionados—, se completan con los de Don
puéblode Atanhenen, dice que su antiguo cacique Tonguinecho "es bibo, e sabe que está en Cantapas Francisco Calancachicat, quien insiste en el cuidado que losindiosde Punilla y Cosquín poníanpara
muy biejo". no pasar de ciertos límites, porque caso contrario, "peleaban y se mataban"

56 57

1
padeció grandes anbres necesidades y riesgos de la vida y
viniendo la tarde tornava a caminar toda la noche en busca de El tema de las prácticas religiosas indígenas es poco atendido por la documen¬
los dichos enemigos..." tación española No obstante, esas fuentes contr ibuyen a precisar algunas formas
"" generales del conjunto religioso.
Las descripciones hispánicas sobre la vestimenta y adornos utilizados los
por A fines del siglo XVI, Alonso de Barzana señala que en la Provincia del
habitantes de las Sienas de Córdoba, señalan que sus indígenas son hábiles
artesanos textiles. Tucumán no ha encontrado ídolos a quienes rindan culto los aborígenes; pero
advierte que sí tienen muchos hechiceros,y que creen en la inmortalidad del alma
.
La Relación de 1573 ios muestra como gente vestida "con policio, a manera de los Refiriéndose a la jurisdicción de Córdoba, el sacerdote agrega:
guadamecíes de España", Camisetas y mantas presentan sus bordes y aberturas con
guardas primorosas; y completan el atavío con tocados, brazaletes y otros ador¬ "Quefiestas tengan estas naciones y que fiestas tuvieron
nos: otro tiempo, no lo he podido saber; porque como no tenian
guacas ni dioses a quien adorar, tampoco les dedicaron dios
"7raen todos los mas en las ticas de las cabezas y tocados para hacerlos fiestas. "
que de lana hacen por gala, muchas varillas largas de metales
y al cabo de ellas como cucharas y todos los mas con un
cuchillo colgado con un fiador de la mano derecha que se La relación de Pedro Sotelo Narvaez, es coincidente con la información de
proveen los mas de ello y otras cosas que de hierro tienen de Barzana: "esta gente tiene pocos ríelos y casi como los de Santiago", indica el autor; a
rescates continuación, señala la práctica de la utilización de alucinógenos: "toman por las
Las camisetas que traer, vestíaos son hechas de lana y narices el sebil, ques una fruta como vilca; hacenla polvos y bebenla por las narices",
tejidasprimeramenteconchaquiraamanerademallamenuda
de muchas labores en las aberturas v ruedo y bocamangas En los primeros años del dominio colonial, la actividad de los hechiceros será
Crian mucho'ganado de la tierra y dansepor ello por ¡as el segmento deia actitud religiosa prehispánica que más preocupe a ios españoles;
lanas de que se aprovechan" y el cebil será utilizadoen numerosas ocasiones por losconquistadores para atraer
ta buena voluntad de los indígenas.
Las manufacturas textiles, confeccionadas en iana de auquénidos, se originan
en una producción doméstica que se destina para elconsumodel grupo familiar1681 Sea cual fuere la modalidad religiosa aborigen en las Sierras de Córdoba, la
presión evangélica que los colonizadores ejercerán sobre ellos no encontrará en los
Poco después de la conquista, ios españoies asentarán en esos conocimientos años venideros mayores obstáculos. Sobre esto, ia carta de Alonso de Barzana
un renglón importante de la actividad económica de las encomiendas: la elabora¬ subraya:
ción de tejidos bastos, esta vez dirigidos a aoastecer el mercado colonial
"Lo ques cierto desta gente es que no conocieron Dios
verdadero nifalso, y ansí son fáciles de reducir á lafé y no se
67) En: Levilliei, 1926-31:388-389 teme su idolatría, sino su poco entendimiento para penetrar
68) La descripción de la Relación de 1573 es coincidente con la de
Pedro Sotelo Narvaez (op di.), quien
señala que: "Es gente que de su natural se vestia de lana de ganado del Piru, que tienen alguno,
aunque mas pequeño Traen unas camisetas grandes y otros mantas solas con chaquira labradas las
rectangulares, con un agujero en el centro para adherir a los vestidos ¡ejidos (A.R Gonzalez, 1943
zanefas. Traen plumas de cobre y otros metales, brazales y patenas, cobre y otros metales " a) El Valle de Punilla y sus regiones aledañas han dado muestras de esa actividad a través de los
Déla misma forma, la carta de Alonso de Barzana (op dt ), describela vestimenta aborigen: "...pero
restos de torteros, y en algunos casos de fragmentos de cerámica con impresiones de tela; otro tanto
aquellos pañitos que traen las mujeres san muy labrados, llenos todos de chaquira con que hacen sucede en el ValledeCalamuchita Las figuras antropomorfas en arcilla evidencian también el uso
labores muy galanas, y las camisetas que algunos prmdpales traen y algunas mantas también las de "delantales", camisetas, collares, tocados y vinchas (A.R Gonzalez, 1941; Serrano, 1946;
traen llenas de chaquira "
Tabbush, 1943;Magnin, 1937) Deigualmanera,algunaspinturas rupestres, como lasdescriptas por
Los hallazgos arqueológicos indican también la existenda de una importante actividad textil En el Mildades Vigna ti para la región de San Franrisco del Chaña r,son coinddentes en la vestimenta que
paradero indígena de Soto, las excavadones sacan a luz objetos trabajados en concha, dreulares y describen, con los documentos hispánicos antes atados (M Vignati, 1938)

58 59
•••)
Por otra parte, las diferenciaciones regionales específicas que surgen en el
las cosas y misterios de nuestrajé ó elpoder ser engañados de contexto de homogeneidad de los sistemas adaptadvos, son también el resultado
algunos hechiceros" de las continuas relaciones interétnicas con otros grupos vecinos como pampas,
huarpes, diaguitas riojanos y sanavirones ro.
Los intercambios regionales que practican los pueblos serranos entre sí y con
los habitantes de las planicies, es detectado por los conquistadores ibéricos, y
En efecto, la facilidad de las comunicaciones entre las planicies del norte, este
mencionado en numerosas oportunidades en sus documentos.
y sur con las Sierras de Córdoba, convierte a nuestro territorio en una zona donde
La periodicidad de estos intercambios se confirma por la importancia de los se mixturan rasgos culturales de las regiones chaco-santiagueña, litoral, pam¬
sitios de algarrobales como punto de reunión de las poblaciones indígenas, y por peana y patagónica M.
la existencia de antiguas rutas o itinerarios, que en el proceso de conquista son
utilizados por las expediciones españolas en sus entradas al territorio Aún cuando los bordes abruptos de las laderas occidentales de las sienas no
permitan la misma fluidez en las comunicaciones, de igual manera las relaciones
En el siglo XVI, en las laderas occidentales de la Sierra de Achala, existe lo que inter-étnicas con los pueblos huarpes se realizan en forma continua a través de sus
los españoles denominan "el camino de los comechingones": desde Nono hasta el
quebradas w'.
Champaquí, y desde éste hasta Yacanta, une la región sur de las Sierras Grandes
con el Valle de San Javier.

En las sierras del norte se encuentra el "camino de ¡os sanavirones" que desde
Sumampa y Ojo de Agua se interna por las montañas hasta llegar a Quilino Esta 71) Los españoles detectaron esta división natural, determinada por el sistema orográfico y las vías de
ruta es frecuentada por ios juries de los ríos Saladoy Dulce, para los intercambios comunicación Utilizando este criterio, Aníbal Montes propone siete zonas para las Sierras de
que practican con los diaguitas de La Rioja y los huarpes de Cuyo. Tal vez éste sea Córdoba: Norte, Noroeste, Oeste, Suroeste, Sur, Cen tro y Este,
Hacia el Norte y Noroeste, el autor incluye numerosas "provincias" indígenas como Conchuluca,
el itinerario por el que se introduce el cebil, el aiucinógeno mencionado en párrafos
Milangasacat,Nunsacate,Ischilin, Chochoconahal, Tulian-Caviche, Serrezuela y La Punta. Zona de
anteriores. algarrobales y aguadas, se presenta como uncorredornatural para los antiguoshabitantes del oeste
de las Salinas Grandes y los del Río Dulce De allí la influencia diaguita sana virona y yuguita que
Unpoco más al sur, el "camino de los algarrobales" atraviesa longitudinalmente muestra la región
En el oeste, entre las cordilleras de Viarapa y Charaba —hoy llamadas de Achala—, la Sierra de
el valle de Ongamira, para unir el pie oriental de las serranías con sus regiones
Comechingones y la "Tercera Cordillera", se encuentra la "provincia" de los Ideas y la llanura de
occidentales. Su recorrido comunica los espacios de los algarrobales del noroeste Malamala, comunicadas geográficamente por el norte con los llanos de La Rioja
con las actuales zonas de Totoral, Jesús María y Salsipuedes, que en los documen¬ Hada el sur de las sierras. Montes localiza la Zona Suroeste, conformada por el Valle de Concaran
tos del siglo XVI aparecen con los nombres indígenas deCavisacate, Guanusacate y laZona Sur,constituida por la cuenca superior de los ríos Tercero, Cuarto y Quinto En esta última
región, el Valle de Calamuchita recibe la influencia de los indios pampas
y Ministalaló (7W. La Zona Central comprende las cuencas de los ríos Primero y Segundo, donde tuvo su asiento la
fundación de la ciudad de Córdoba.
Por último, la Zona Este, región de llanuras, algarrobales y pantanos, tiene como "provincia" más

destacable la de Ansenuza comarca de comechingones—, en ¡as proximidades de la actual
Laguna de Mar Chiquita (A Montes, 1950-57)
1 72) Las excavaciones arqueológicas, muestran evidencias sobre estos intercambios;los trabajos de A R
69) Cfr Carta de Alonso de Barzana de 1594 (op. dt ) y Reladón de Pedro Sotelo Narvaez de 1582 (op.
di ). En cuanlo a la utilización del cebil (Piptadenia macrocarpa), Felix F Oules señala que se trata
.
'5.
Gonzalez en Villa Rumipal (Gonzalez, 1943) y en el Valle de Soto (Gonzalez, 1943); los de Agustín
NimoenRíoTercero (Nimo,1946);los deJosé Magnin (Magnin, 1937),sobrelasfigurasantropomor-
de un vegetal exdusivo de la formación fitogeográfica subtropical; por lo tanto, su utilizadón por ; fas de arcilla de la región de Punilla; y las de A Serrano (Serrano, 1945),establecen claras relaciones
parte de los aborígenes de Córdoba, estada indicando la existenda de reladones de intercambio con I
$ interétnicas entre los habitantes de los valles cordobeses y los del Litoral, Santiago del Estero,
los grupos étnicos del norte (Outes, 1910-11), Según Pedro Lozano, los iules y matacos conocen y Provincia de Buenos Aires y Patagonia
practican asiduamente el ritual del cebil (Lozano, 1733) ÿI 73) Cfr Canals Frau, 1943 y 1942; AHPC,escr 1,leg 16,exp. 2; y Acta Capitular de 17/12/1597 (AM.,
70) Las vías de acceso a las Sierras de Córdoba, facilitadas por la existenda de rutas naturales que %
11:56-59)
presenta la geografía, son analizadas por Aníbal Montes (Montes, 1958 y 1956), y mendonadas por
Pablo Cabrera (Cabrera, 1931).
61
60

Cí-
'
A partir de la fundación de la ciudad de Córdoba por parte de la hueste de
Jerónimo Luis de Cabrera, la dinámica del sistema colonial que implanten los
conquistadores se verá condicionada por las características de! espacio y de las
poblaciones que se encuentran en su jurisdicción.
Ya sea que a nuestra región se le asigne un valor estratégico como zona de
consolidación de la conquista, o como hito importante en el eje comercia! Buenos
Aires - Potosí, los sistemas adaptativos aborígenes que acabamos de esbozar, se
presentan como un nexo entre el pasado prehispánico y la sociedad que surge a
fines del siglo XVI.

lía. PARTE:

LA CONQUISTA ESPAÑOLA
Y LAS PRIMERAS RELACIONES
INTERETNICAS

62
CAPITULO III
LA FUNDACION ESPAÑOLA
Y EL CONTROL DEL TERRITORIO

1540-1573: La percepción del espacio

El gobierno español en América —a través de la Audiencia de Charcas—,


comienza a partir de 1560 a diseñar una política de conquista para la región de las
Sierras de Córdoba

Hasta ese momento, se habían registrado por lo menos dos "entradas" que
reconocen la zona . La primera de ellas, en 1529, corresponde a un pequeño grupo
de hombres de la expedición de Gaboto, que al mando de Francisco Cesar remonta
ios ríos Carear añá y Tercero, hasta llegar a las sierras de San Luis. La importancia
de este descubrimiento es exagerada por ios españoles de la época, a raíz de la
supuesta existencia de oro y esmeraldas en la región, dando así origen a la leyenda
de L os Césares, Trapalanda, de la Sal, o Yungulo n).

1) El hecho es consignado por dos cronistas:RuiDiaz de Guzman (en: DeAngelis, 1: 77) y Pedro Lozano
(Lozano, 1843-1875, FV: 13-16) Por su parte, Aníbal Montes posee un interesante trabajo sobre la
"noticia de Cesar", con un mapa indicativodel probable recorrido de la expedición (Montes, 1955)

65
La segunda, se registra al finalizar la primera mitad del siglo XVI, cuando el Pedro de Valdivia, en procura de una salida hacia el Atlántico para la Gober¬
gobierno de Lima tiene ya una idea aproximada sobre la región que más adelante nación de Chile —lo que sólo es posible mediante la expansión del territorio a su
recibirá la denominación de Gobernación del Tucumán En efecto, en noviembre .
cargo— encomienda la difícil tarea al teniente de gobernador de La Serena y El
de 1542, el gobernador del Perú, Licenciado Cristoval Vaca de Castro,,informa al
Barco, Francisco de Aguirre. Será éste quien comience a desarrollar una per¬
rey sobre la existencia de una provincia "muy poblada y rica", que se propone hacer
explorar ja a la que los indígenas llaman Tucumán. Los objetivos de la citada cepción del espacio serrano cordobés, al pensar en extender hacia el sur la
expedición, para la que designa al capitán Diego de Rojas "por ser persona zelosa de conquista del Tucumán. En ese sentido, la fundación de Santiago del Estero y la
recorrida por el curso del río Tercero realizadas por él, representan los anticipos
guerras civiles— y abrir un paso desde el Pacificó hacia el Atlántico C).

los servicios de V.M", son "descargar la tierra del Perú" convulsionada por las
fundacionales de la ciudad de Córdoba

Entre 1543 y 1546, los hombres de Diego de Rojas recorren el noroeste argentino Aguirre, fiel a la concepción de Pedrode Valdivia, fija su atención en las llanuras
siguiendo el camjno del Inca, bien provistos de armas y caballos y acompañados
de esclavos Un grupo de la hueste se interna en las Sierras de Córdoba, guiados próximas a las sierras, "por ser tierra muy ancha, bien poblada, llana y apacible", Las
en su itinerario por ios yuguitas del rio Dulce. Ingresan por el norte, siguiendo el poblaciones allí instaladas estarán capadtadas para tener ha tos comerciales con el
"camino de los sanavirones", atraviesan el valle de Calamuchita y salen hacia las Rio de la Plata, en especial una de ellas que puede ser fundada "en la provincia de
llanuras de Santa Fe recorriendo el curso del río Tercero01. los comechingones",donde hay "mucha gente de indios e tierras de grandes comidas ..."
t
®. En 1556, se dirige "a los comechingones", para fundar una ciudad que serviría
Poco después, hacia 1549, las autoridades de Charcas comienzan a concebir el como punto de salida hacia el Atlántico, pero la prisión del conquistador hace
proyecto de asentar poblaciones en el territorio del Tucumán, "donde hay copia de fracasar el objetivo propuesto
naturales y noticias de gruesas minas de oro" Para la Audiencia, la función a cumplir
por la región no sólo consiste en descongestionar desoldados el Perú, sino también Para ese entonces, los españoles poseen una idea más acabada sobre lo que
en asegurar con ciudades la defensa del camino enríe Charcas, Chile y el Rio de la
Plata. Esta secuencia de acciones fundacionales es encargada a Juan Nuñez de pueden encontrar en la región: "en esta tierra no se a descubierto hasta aora oro ni
Prado w plata", dicen los vecinos del Perú en sus informes í6>. A pesar de la carenda de
metales, la existencia de una población indígena numerosa y la abundancia de
Durante el periodo caracterizado por las disputas jurisdiccionales entre la recursos del territorio, logran afirmar la idea de una zona relacionada a las rutas
Gobernación de Chile y la zona asignada al citado Nuñez de Prado, tiene lugar la ya los tráficos; particularmente aquellos que podrían unirá! Perú con el Atlántico
fundación de varias ciudades en el norte de la futura Gobernación del Tucumán
La conquista se extiende hacia el sur recién a partir de Í563, con las "entradas" de
Francisco de Aguirre y Jerónimo Luis de Cabrera a la "provincia de los comechin¬ El20 de setiembre de 1571,el virrey Toledo ex tiende el tituio de Gobernador de
gones". la Provincia del Tucumán a don Jerónimo Luis de Cabrera. Las provisiones
pertinentes le indican la necesidad de detener la conquista en las fronteras
meridionales, a los efectos de garantizar las fundaciones, las rutas al T ucumán y
a Chile, y la seguridad de Potosí.
2) Estas expresiones son vertidas por el Lie Cristobal Vaca de Castro en una carta al rey, fechada en el
Cuzcoel 24/11/1542 (en: Lavilíier, 1921, !:53-75)
3) Las probanzas de servicios de Bartolomé Díaz y de Pedro Gonzales de Prado, miembros de la
expedición, indican el recorrido seguido por los españoles El primero de ellos, relatando la entrada 5) Memorial fechado en 1556, elevado por Sebastián de Santander, en nombre de Francisco de Aguirre
a las Sierras de Córdoba, afirma haber descubierto más de cien leguas de "tierra muy poblada" (en: (en: Levillier, 1919- 20, 1: 461-518)
Levillier, 1919-20, 1: 327-347).
6) InformariónlevantadadeofidoporelConsejoRealdelndias,entrevecinosdelPerú,sobreeldistrito
4) Los proyectosdei Lic.Polo deOndegardo y Alonso Palomino, miembros déla Audiencia de Charcas,
que convendría darles a lasaudiencias del Perú, fechado en agostode 1563 (en: Levillier, 1918, 1: 530-
son informados al rey por el virrey La Gasea en carta fechada el 17/7/ 1549 (en: Levillier, 1920, 1: XII) 571)

66 67
Sin embargo, ios informes de la expedición de Francisco de Aguirre y los
Talavera y San Miguel, muchos de loscuales habían participado en las "entradas"
proyectos fundacionales de éste en tierras de comechingones, así como los planes
del oidor Matienzo, inciden en la decisión de continuar la ruta hacia el sur anteriores al territorio La hueste conquistadora —compuesta ahora por un
centenar de españoles y sus sirvientes indígenas—, sigue elitinerario de Francisco
de Aguirre: Guayascate, Cavisacate, Guanusacate y Ministalaló
Contrariando el mandato del virrey, a comienzos de 1573 Cabrera envía una
expedición a las Sierras de Córdoba. El caudillo de la jornada es Lorenzo Suarez
de Figueroa, caballero hijodalgo que había entrado al Tucumán como alférez
general del gobernador, "poniendo a su costa arnms y caballos", Le acompañan
cincuenta soldados españoles y un sacerdote de la Orden de la Merced, Fray Luis
de Balderrama ®, La fundación en el piedemonte serrano
y las primeras disposiciones organizativas.
Durante su recorrido, los expedicionarios obtienen la información necesaria
sobre la región y sus habitantes: la tierra se presenta buena y fértil para ganados
y sementeras; además, los aborígenes dan "grande noticias... de lo de adelante, ansí de El 6 de julio de 1573,don Jerónimo Luisde Cabrera funda laciudadde Córdoba,
mucha gente como de mucha riqueza , ", De allí que los españoles piensen que la en el asiento que en la lengua de los indígenas de la región se llama Quisquisacate,
ciudad a fundarse podría servir de escala para poblar otras hasta el Estrecho de
Magallanes; y que su ubicación debería estar relacionada a las rutas que comuni¬ por ser elsitio mas conveniente que ha halladopara ello
carían "los reinosde Perúy Chile con las provincias del RíodelaPlatay reinos de España" , y erímejor comarca de los naturales y en tierras baldías donde
ellos no tienen ni han tenido aprovechamiento por no tener
El empadronamiento de pueblos indígenas, es otro de los objetivos del alférez sacadas acequias en ellas por tener mucha abundancia y
general de Cabrera En su recorrido por los valles de Quilino, Soto, Cosquín, mejores tierras y haber en eldicho asiento las cosas necesarias
Quisquisacate —actual lago San Roque— y Suquía, son registrados más de y bastante y suficientes que han de tener las ciudades..." n0)
seiscientos pueblos, algunos de ellos "por noticia" que recibende los aborígenes ®.
Los testigos de la probanza de servicios de Lorenzo Suarez de Figueroa, insisten Sin embargo, el cronista Lozano indica que la ciudad se asienta en una "hoyada"
en todos los casos en la diligencia y cuidado puestos en el trato con los indígenas. que, aunque fácilmente inundable en época de lluvias, es elegida por ser el sitio
Lanecesidad de contar conmano de obra "pacificada" para el futuro asentamiento "mas poblado de indios que habían deservirla" niL
español, es la causa de las advertencias recibidas de no producir agravio a los
naturales. El espacio del nuevo asiento hispánico no se presenta como un elemento
exótico en la percepción del conquistador: sus temples son "como en España". Por
Al regreso de los expedicionarios, don Jerónimo Luis de Cabrera publica la lo tanto, la lógica que había regido la organización espacial en la Península, puede
Jornada de los Comechingones A elia acuden vecinos de Santiago del Estero, servir de guía en los nuevos dominios De allí que la base geográfica y política de
la conquista y colonización del territorio serrano, se localice en una zona del fértil
piedemonte, que a su vez posee quizás el más fácil acceso a los valles serranos
desde las laderas orientales
7) Sobre e! tema de tos proyectos enfrentados del virrey Toledo y la Audiencia de Charcas, referentes
a la planificación de la conquista en la Provincia del Tucumán, la obra de Leviliier {1926-31}, sigue
siendo una de las más completas
10) Acta de fundación de la dudad de Córdoba (en: Leviliier, 1918: 471-473).
8) La información de méritos y servicios de Lorenzo Suares de Figueroa y la Relación de 1573, son los
documentos que describen esta entrada y la impresión obtenida de ella, ambas fuentes citadas 11) La indicadón de Lozano (en: Lozano, 1843-1875, IV: 274), se confirma en la cédula de encomienda
anteriormente. > que beneficia a. juan de Mitre en 21/11/1573; en ella se adara que1los pueblos de Chilisnasacate y
9) ta expresión "por noticia", que veremos aparecer repetidamente en la documentación relativa alas
Cantacarasacate "están fronteros este fuerte en el rio de San juan en medio", y que su encomendero
debe trasladarlos a 3 64 leguas de la dudad (en: AHPC, esa. 1,leg. 6, exp. 5) Por otra parte,la merced
encomiendas, hace referencia al conocimiento que se tiene de la existencia de poblaciones indígenas
de tierras hecha a los indios de Quisquisacate de 24/12/1574, advierte que la concesión es "por las
sólo a través de informes de otros habitantes de la región.
tierras que se le tomaron para esta dicha dudad" (en: L.M :48)

68 69
¡i
La Relación de 1573, anterior a la fundación, preanuncia la organización los timbúes, el gobernador retorna siguiendo el Carcarañá, aguas arriba. A través
espacial de las próximas décadas: del río Caiamuchita —que en esos primeros años los españoles llaman Río de
Nuestra Señora—, penetran a la región sur de las sierras De allí, se dirigen hacia
"Tienen arte y jjarecer de tierra muy sana porque los el norte, hasta los linderos de Santiago del Estero, para regresar después a la
temples son muy buenos y sus tiempos de invierno y verano ciudad de Córdoba. Las actas capitulares donde se fija la jurisdicción de esta
como en España y especial donde paread tendrá buen asiento última, reflejan también el itinerario seguido durante la jornada al Rio de la Plata
la ciudad que se poblare que es al pie de una cordillera de estas cm
entre dos ríos caudales que de ella nacen y descienden co¬
rriendo hacia el oriente al Rio de ¡a Plata y mar del norte, No obstante, las andanzas de los soldados no agotan las inquietudes de los
tierra llana hasta donde se entiende.. " fu turos encomenderos . La expedición sirve también para registrar las poblaciones
indígenas que hallan en el itinerario™. De la misma manera,en octubre de ese año,
El eje de poblamiento y sostén principal de la empresa española en la región, se el gobernador Cabrera da comisión a Hernán Mejia Miraval, para que con
sitúa a partir de 1573 en la recién fundada ciudad de Córdoba. Desde ella se va a cincuenta hombres y trescientos caballos salga a "descubrir hazia la noticia que
dirigir la nueva organización espacial: todas las expediciones, ya sean empadro¬ llaman de Cesar...". Las instrucciones son precisas: le indica la necesidad de visitar
nadoras,de reconocimiento, o punitivas, tendrán como punto de partida elasiento pueblos de indios, descubrir otros, predicar el evangelio, localizar minas de oro,
español. Las diferentes prácticas hispánicas de los primeros años de la conquista, plata y otros metales; pero también empadronar pueblos para que el gobernador
definen a la llanura como el sitio urbano por excelencia y a las montañas como el haga repartimiento de ellos. Además, si fuera menester acometer indios de guerra,
espacio marginal de hábitat disper so En medio de ello, siempre está presente una lo haga con los requerimientos necesarios
preocupación constante: lograr la implantación duradera de la ciudad, rela¬
cionándola a las rutas y a los tráficos hacia el Rio de la Plata y el Atlántico Al mismo tiempo que envía la expedición de Mejia Miraval, Cabrera comienza
a otorgar las primeras cédulas de encomienda a quienes habian participado de su
Las primeras decisiones gubernativas están referidas, como en todos estos hueste y en la fundación de la ciudad . Se localizan en las zonas norte y noroeste de
casos, a señalar la planta de la ciudad con sus solares y edificios principales, así las serranías, las mejor conocidas por los conquistadores hasta el momento.
como las tierras para huertas . Algo más demedio centenar de españoles„de los que
componen la hueste del fundador, deciden afincarse en el territorio n2).

Los últimos meses del año 1573, se ocupan en definir la jurisdicción del nuevo
asentamiento a través de expediciones de reconocimiento y conquista, y en 13) El acia capitular del 21/9, establece los límites hacia el este, has ta labarranca del Río de la Plata Dos
días más tarde, estos son extendidos35 teguas al norte y otras tantas al sur de la desembocadura del
garantizar la provisión de alimentos para sus pobladores. río Salado (en: A C., 1: 58-65) El 29/10, los términos hada el sur son fijados en 50 leguas desde la
dudad de Córdoba, siguiendo la sierra de Charaba. Al dia siguiente se comisiona a Alonso Garda
En setiembre de ese año, don Jerónimo Luis de Cabrera, luego de construir un de Salas y a juan Mejia Miraval, para tomar posesión de esos límites (en: ibíd : 68-70) H 9/12, los
fuerte para defensa de los españoles que quedan a cargo de Lorenzo Suarez de límites del norte son estableados en los pueblos de Ysacate y Quilloamira, encomendados ante¬
riormente en Hernán Mejia Miraval y Alonso de Contreras, desde Santiago del Estero. Por el oeste,
Figueroa, inicia la jornada al Rio de la Plata La búsqueda de un puerto que se debían contar 50 leguas desde la dudad de Córdoba, hada Sos reinos de Chile (en: ibíd :73-74).
comunique con Castilla, los lleva a la demarcación de lo que dieron en llamar "el 14) Pedro Lozano indica cuarenta mil indios empadronados en esta entrada (Lozano, 1874, IV:282-283)
puer to de San Luis",a escasas doce leguas de donde en breve será fundada la ciudad De todas maneras, el número debe haber sido importante, ya que el acta capitular del 29/10,
de Santa Fe. Luego del encuentro con los hombres de Juan de Garay, en la zona de refiriéndose a la región sur, dice: "do ay la mayor cantidad de los repartimientos de yndios que
sirven y an de servir a los vezinos. "
15) Las referenaas sobre esta expedidón se encuentran en la informadón de Heman Mejia Miraval,
sobre los servidosque prestóen laProvinda del'Tucumá n dcsdesu entrada con juan Nuñez de Prado
en 1550 (en: Levillier, 1919-20, 11:20-139) Lasinstrucdones pertinentes, fechadasen 15/10 y 31/10/
12) Carlos Luque Colombres ha desarrollado el tema de las trazas sucesivas de la ciudad y la propiedad 1573, determinan la ruta a seguir: Camincosquin, Toco Toco, Soto, Segunda Cordillera, y Caia¬
urbana en Córdoba, a¡n amplitud y abundante documentación (Luque Colombres, 1950, 1951 y muchita; llaman particularmente la atenaón, las indicadones sobre la necesidad de hacer memoria
1980) A sus trabajos, debemos agregar el de jorge Emiliani Fozzaiti (Emiliani Fozzatti, 1964) de las costumbres, trajes, tocados, vestidos, metales y ganado de los aborígenes (en: ibíd,II:593-596)

70 71
i

Los primeros meses de 1574, son dedicados a asegurar con partidas guerreras pueblos indígenas, y a las cédulas de encomiendas concedidas, debemos agregar
la sumisión de la población indígena dela jurisdicción. Al iniciarse el año, Lorenzo los repartos de mercedes de tierras. Entre diciembre de 1573 y marzo de 1574, don
Suarez de Figueroa sale con un grupo de españoles a la "provincia" de Chocan- Jerónimo Luis de Cabrera concede" terrenos para chacras y sementeras y para
charagua —hoy Río Cuarto—, donde los aborígenes no ofrecen resistencia. Otras extracción de leña Casi todos se encuentran junto al río Suquía' —que los
regiones requierenel envío de partidas de castigo,por la oposición que ofrecen sus españoles denominan de San Juan—, en los alrededores de la ciudad. De esta
habitantes. Tal el caso de los indígenas de Ongamira y Canunbasacate, quienes manera, el asentamiento español se perfila como eje y punto de referencia del sis¬
habían dado muerte a su encomendero Blas deRosales. Allí es enviada una partida tema espacial que se inaugura con la conquista.
al mandode Anton Berru, quien ios desbarata en las alturas del cerro Charalqueta,
donde se habían fortificado Otro tanto sucede con los habitantes de Toahen, cuya Por otra parte, hechos extemos a la jurisdicción, condicionan significativa¬
pacificación es encomendada al capitán Tristán de Tejeda na. mente la función de la ciudad de Córdoba en la estructura colonial, La fundación
de Santa Fe por Juan de Caray, en noviembre de 1573, y el señalamiento de sus
Por esa época, el contacto compulsivo entre españoles e indígenas ha modifi¬ términos territoriales, privan a los vecinos de la tan ansiada salida al Atlántico La
cado el tono pacífico de los primeros tiempos. Desde entonces y durante varios pérdida de un puerto propio sobre el Río de la Plata, en buena medida hará
años, las actas capitulares reflejarán la permanente inquietud de los habitantes depender la vida económica de la ciudad de las decisiones administrativas de los
hispánicos —recluidos en un fuerte próximo al lugar donde se ha fijado la traza de gobernantes del litoral.
la ciudad—, para garantizar la defensa de la misma. A la citada intranquilidad,
contribuyen las continuas salidas en procura de alimentos para el sustento de los
conquistadores,

Las probanzas de los fundadores relatan en forma especial estas acciones. Una La extensión hacia el sur.
situación común, por otra parte, a la historia de la conquista de otras latitudes,
particularmente la del Perú, donde estos soldados habían hecho sus experiencias
anteriores. Al mismo tiempo que don Jerónimo Luis de Cabrera prepara la expedición de
i Mejia Miraval al valle de Soto, el virrey del Perú firma las provisiones para el
Lorenzo Suarez de Figueroa,relatando sus servicios mientras estuvo a cargo de i nuevo gobernador del Tucumán, don Gonzalo de Abreu n8>. Aunque éstas son una
la ciudad de Córdoba, dice que sus principales esfuerzos estuvieron dirigidos a reiteración de las otorgadas en 1571a Cabrera, entre 1574 y 1580 los pobladores de
evitar el despoblamiento, ya que se vieron "en mucho aprieto con nescesidadde gente Córdoba ven extender hacia el sur el radio de acción efectivo de la ciudad,
y de comida y con guerra que nos hazia los naturales". Heman Mejia Miraval también ! impulsados por la búsqueda de la Trapalanda, A mediados de marzo de 1574,
hace gala en sus informes de haber conseguido sustento para ios moradores, i Anton Berru r—siguiendo órdenes de Abreu—, pone en prisión a don Jerónimo
saliendo repetidas veces con gente de guerra, por orden del gobernador, y Luis de Cabrera, que es trasladado a Santiago del Estero y asesinado unos meses
1
juntando "fres mil fanegas de maiz, frijoles y zapallos". Con las provisiones que después.
sustraen en esas incursiones a los poblados indígenas, "se mantenía la ciudad" a7>.
Los tres primeros años del período gubernativo de Abreu, significan para los
Los últimos meses del gobierno de Cabrera, han servido para delinear la vecinos españoles de Córdoba una época de vicisitudes y de amenazas continuas
infraestructura sobre la que se asentará la organización de los nuevos dormñios.'A de despoblamiento, peligros que son compartidos por las otras poblaciones de la
las expediciones en búsqueda de una salida al Atlántico y para empadronar / Provincia del Tucumán.

16) Cfr. Levilüer, 1919-20, 1: 555-582; y Lozano, 1874, IV: 284-286.


17) Cfr. Informe deméritos y serviciosde LorenzoSuarezde Figueroa y deHernan Mejta Miraval, citados 18) Provisión del virrey Toledo para el gobernador Gonzalo de Abreu, fechada en La Plata, en 27/10/
anteriormente 1573 (en: Levülte, 1920, II: 4-5)

72 7.3

li ta- i
r En diciembre de 1574 se registra la primera señalde marcar ganado; estos serán
En junio del574, Lorenzo Suarez de Figueroa, nombrado teniente de goberna¬ los comienzos de la expansión del pastoreo de los próximos años, probablemente
dor, solicita al cabildo que no se otorgue licencia a ningún vecino ni soldado para facilitado por las ventajas que la propiedad semoviente ofrece en condiciones de
salir de la ciudad, "porquanto está la tierra de guerra". Los caminos se han vuelto inseguridad militar.
peligrosos y resultan difíciles las salidas a los poblados indígenas en búsqueda de
sustento. « Por otra parte, entre los años 1574 y 1579, se registra un sugestivo movimiento
en torno a las propiedades inmueblesdelosconquis tadores, en especial si tenemos
El estado de zozobra se agrava por el abandono que muchos de sus habitantes en cuenta el escaso número de habitantes con que cuenta el asiento hispánico.
hacen de la ciudad Los pedidos de ayuda al gobernador en armas, gente y
comidas, se reiteran durante todo 1575 El 12 de febrero de ese año, el yanacona En efecto, el abandono definitivo de la ciudad por parte de muchos miembros
Francisco pregona en la plaza la decisión del cabildo de prohibir la salida del de la hueste de Cabrera, conduce a la venta de tierras obtenidas en merced, y al
asiento español sin licencia de la justicia, y la exigencia de tener caballos y armas otorgamiento de numerosos poderes

La escasa población española concentrada en el fuerte y la decisión de cambiar


En enero de 1576, Gonzalo de Abreu, al parecer despreocupado de la situación la primera traza urbana hecha por Jerónimo Luis de Cabrera, limita la venta de
de la ciudad, manda a sus vecinos a emprender "el descubrimiento del camino de solares ubicados en ella. En cambio, el abandono del asiento por parte de un sector
Cuyo". Ante los aprestos en tal sentido por parte del teniente de gobernador, dos de los primeros conquistadores, se refleja en el alto número dechacras vendidas.
de los encomenderos más conocedores de la jurisdicción reclaman contra la La ubicación de éstas en las zonas de llanuras próximas al rio de la ciudad,
decisión; y en la reunión capi fular del primlero de febrero, describen la situación de preanuncia el desarrollo de la agricultura comercial en esos terrenos —espe¬
los conquistadoresespañoles recluidos en el fuerte, señalando que los vecinos que cialmente del trigo—,cuya expansión se acelerará con la apertura del puerto de
quedan son pocos, solamente viejos, enfermos y muchachos sin armas c0). Buenos Aires

Sin embargo, la preocupación por la seguridad militar de los nuevos terri torios, A mediados de 1574, los españoles de Córdoba, preocupados porque no hay
no imposibilita el desarrollo de lasactividades económicas de los conquistadores. "moneda con que contratar", solicitan al gobernador Abreu señale la moneda que ha
Tanto es así, que algunos de ellos prefieren dejar sus cargos en elcabildo local, para i de correr en la tierra , En efecto, durante el primer lustrode actividad notarial,ante
"entender en sus haziendas", el escribano sólo se asientan seis operaciones comerciales pagadas en pesos; la
adquisición de bienes, particularmente inmuebles, se abona en ropa de algodón y
A sólo un año de fundada la ciudad, los vecinos poseen ganados y sementeras en ganado No obstante, la actividad mercantil debe haber sido mucho más
en los alrededores; el cabildo comienza a llevar cuenta de los "hierros y señales", e importante que la que señalan las cartas de venta en esos años. Los testamentos y
impone multas a aquellos cuyas vacas, ovejas y caballos dañan las sementeras CI!,

22) Con el gobierno deGonzalode Abreu, en marzo de 1574, se inicia el registro délas escrituras públicas
19) Actas en la ciudad de Córdoba La información que se deriva de esos protocolos notariales, refleja las al¬
capitulares del 19/6/1574 y del 12/2/1575 (en: A C, 1: 137-138 y 168-170) En el pregón
aludido, se incluíanlas penas monetarias para los queno cumplieran con laorden: los que se alejaran ternativas de la vida cotidiana de sus habitantes y provee datos para la historia social y económica
del período Por ello, noes casual que entre los años 1574 a 1579, la venta de inmuebles y los poderes,
una legua arriba, 4 pesos; y 6 pesospara los que se fueran dos leguas arriba Para los que decidieran
irse a los pueblos de indios, la pena ascendía a 20 pesos; en tanto que los que salieran fuera de la ocupen un lugar prominente en los registros
jurisdicción de la dudad, debían pagar 100 pesas y además se les "suspenderían los indios". Veamos cómo se reflejan estas actividades mercantiles y jurídicas en los protocolos de esos años. En
1574, sobre un total de ca torce escri turas, ocho corresponden a ventas de solares y cuatro a poderes
20),Ac¡a capitular del 1/2/1576 (en: AC., 1: 217-223) 'También las actas capitulares de octubre de ese
generales En 1575, sobre un total de 37 escrituras, diecisiete están referidas a ventas de inmuebles-
año, indican redames por el riesgo en que se encuentra la dudad, en sendas cartas al gobernador, a
y nueve a poderes generales o especiales En 1576, sobre un total de 34 actas notariales, dieciséis
la audienda y ai virrey: allí se afirma que en Córdoba sólo quedan 25 viejos desarmados, por lo que corresponden a ventas de inmuebles y doce a poderes generales o especiales. Entre los años 1574 y
no pueden salir a hacer sus chacras ni a guardar los ganados en el campo (en: Ibfd.: 240-242) 1578, los protocolos notariales contienen 54 operaciones de venta de inmuebles; la mayor parte
21) Cfr actas capitulares del 30/12/1574 y de! 10/2/1575 (en: A C, !: 156 y 167) (70,37%), están referidas a chacras próximas al fuerte, o "rio abajo de San Juan".

74 75
dotes de la época indican en unos casos deudas en ganado, en ropa de algodón o i la jornada de Abreu a las sierras del sur de la jurisdicción permite a los españoles
en fanegas de maíz; y en otros un intenso movimiento de bienes extender el espacio control ado, abrir una vía de comunicación con Chile y obtener
un mayor aporte de mano de obra indígena <2S>.
En setiembre de 1578,Juan Martín,cirujano de Venecia y afincado en la ciudad,
otorga su testamento. En él advierte que tiene 270 pesos en deudas a pagar a Las cédulas de encomiendas de esta etapa, también señalan los avatares del
distintas personas. Asimismo indica a los albaceas, que ha dado para su venta diez 4 proceso de conquista. La mayor parte de los repartimientos de indios otorgados
piezas de ropa, una cadena de oro, seis varas de rúan, una espada y unos botines, (
por Abreu, han pertenecido a los acompañantes de Cabrera; muchosde los cuales
algunas de ellas a un vecino de Estero. Esta último debe haber sido una práctica dejaron vacas sus encomiendas al retirarse de la jurisdicción. Además, las nuevas
acostumbrada de muchos españoles, puesto que elcabildo seve en la necesidad de cédulas concedidas indican una ampliación del dominio territorial, al extenderse
prohibir la salida de caballos, herrajes y arcabuces a Santiago del Estero, "que hacia regiones como Calamuchita, Tras la Siena, o el río Quinto
algunos lo han enviado para comprar golosinas para comer" ®>.
í ÿ: En los años siguientes a la "Jornada de los Cesares", el trabajo del guerrero
necesario para aquello de "ir a Indias a valer más"—, va dejando un espacio cada vez

En 1578, el gobernador Abreu decide hacer la "jornada a los Cesares y Trapa-
lando". Nuevamente los vecinosde Córdoba —instalados desdemediados del año mayor a las tareas del encomendero. Las actividades bélicas, propias de un
anterior en la traza definitiva de la ciudad—, son llamados a integrar la hueste. La proceso de conquista, y la resistencia indígena qué provocan, no son obstáculo
necesidad de socorrer a San Miguel de Tucumán, asediada por los junes, retrasa para que se dicten disposiciones sobre el tratamiento dela mano de obra indígena.
la partida hasta el año siguiente A pesar de ello, una pequeña expedición de Las Ordenanzasde Abreu —de las que nos ocuparemos más adelante > muestran
las inquietudes de las autoridades locales en el sentido de organizar el usufructo

catorce hombres al mando de Anton Berra, explora el territorio entre Córdoba y
la Cordillera Nevada. de esa fuerza laboral, al ser el único acceso ai enriquecimiento que permite la
región,
En 1579, ante los insistentes reclamos de los vecinos por el desamparo en que
queda la ciudad, Abreu promete apaciguar la jurisdicción en el recorrido de la
"Jornada a los Cesares". La expedición discurre por los ríos Cuarto y Quinto, costea
las laderas orientales de la Sierra de Comechingones, pasa por el Tambo y el
sudoeste del cerro Intihuasi. Luego de varios meses, la falta de alimentos obliga a i
sus integrantes a retornar a Córdoba ai). El control del territorio (1580-1586).
\
Si bien la posibilidad del descubrimiento de "Los Cesares" continuará formando
parte dela imaginación de los conquistadores por un tiempo bastante prolongado, En noviembre de 1579, el virrey Toledo entrega las instrucciones al nuevo
gobernador de la provincia del Tucumán, Hernando de Lerma, en donde se
empieza a notar la preocupación de las autoridades coloniales por el descenso de
23) Testamento de Juan Martin (en: AHPC, esa. 1,leg. 1, exp. 9) y acta capitular de 22/1/1577 (en: A C,
la población indígena. Sin embargo, la acción de Lerma se dirige principalmente
L 260-265) a la fundación dela ciudad de Salta y a dirimir sus largas disputas con las órdenes
24) L.os reclamos delos vecinos, en:acia capitular de25/5/1579(en:AC, 1:301-304) Enla respuesta del religiosas y vastos sectores de encomenderos Q6)
gobernador, de fecha 28/5, se aclara que quedan en la ciudad veintevecinos y quince soldados, "que
son los cuarenta que siempre tuvo" Por otra parte, en la información levantada por el procurador
del cabildo de Santiago del Estero, para demostrar los servidos prestados por esa dudad en la
conquista del Tucumán,se indica que Abreu llevó "mas decincuenta hombresde 5anfiago del Estero
25) En los años siguientes, otras tenta üvas se sucederán en la búsqueda de Los Cesares: en 1581 (Juan de
al descubrimiento del Estrecho" (en: lavillier, 1918: 114-252), Ins alternativas de la expedición de
Abreu, son relatada? por el aonista Pedro Lozano (Lozano, op. dt., ÍV: 345), y figuran en las Garay, suegro de Hernandariasde Saavedra), en 1604 (Hernandarías de Saavedra conjuntamente
con Jerónimo Luis de Cabrera, nieto del fundador), y en 1622 (nuevamente Jerónimo Luis de
probanzas de Tristón de Tejeda (en: Leviltier, 1926, 111:387). Por otra parle, la cédula de encomienda Cabrera)
que se otorga aJuandeMitreenl2/7/1579, hace referencia al descubrimiento del "quinto río" (en:
AHPC, esa 1,leg. 24, exp 4) 26) Las instrucciones al gobernador Lerma, en: Leviilier, 1926-31, III: 259-265.

76 77

Cs-
Por otra parte, el conjunto de prácticas españolas de esos años, hace de la
En la jurisdicción de Córdoba, los vecinos han comenzado a transformar las ciudad el eje de la organización económica, social y política de la jurisdicción. De
expediciones militares de descubrimiento y conquista en pequeñas partidas o allí que el asiento hispánico se convierta en un polo de atracción y por lo tanto en
"malocas". Su objetivo fundamental es obtener la mano de obra que les había sido mercado de la producción rural de las encomiendas.
otorgada en encomienda Las probanzasdeTristándeTejeda,unode los capitanes
que más ha recorrido la región, dan detalles de estas salidas continuas: afirma A comienzosdela década del ochenta, no todoslos vecinos —ni tampoco todos
haber participado en "muchas entradas que se hicieron", especialmente a la "provin¬ los encomenderos—,tienen indios de servicio que les garanticen la provisión de
cia de los algarrobales", en las que él iba como capitán y caudillo de la gente que alimentos. Los españoles poseen el control del territorio, pero los continuos actos
llevaba a su cargo; estos "no eran mas de catorce bien amados y aderezados y otras veces de resistencia indígena y la escasa presencia española, los privan de un dominio
no se allava mas de con doce, a causa de aver poca gente en la dicha dudad". El mismo efectivo sobre el suelo. Es por ello que a menudo el cabildo debe poner un precio
cabildo solicita en reiteradas oportunidades al gobernador Lerma el envío de moderado a la comida que entra de las encomiendas a la ciudad para su venta,
herrajes y clavos, "para poder salir a correr la tierra para su asiento y paáficación" a7). particularmente en momentos o en años de escasez

Al comenzar el decenio de 1581, el asiento cuenta con un puñado de hombres: En 1581, la institución local siente la necesidad de nombrar un fiel ejecutor,
25 vecinos y 15 soldados. Las salidas permanentes a "correr la tierra", hace encargado de tener cuenta con los vecinos y moradores que venden comida o
disminuir el número de españoles en condiciones de defenderlo en caso de un lienzo en la ciudad, en especial cuidandola corrección de las medidas que usan en
alzamiento indígena. Sin embargo, el dominiodel territorio se va afirmando y una los tratos mí.
sensación de seguridad va ganando a ios vecinos Q8).
La producción de maíz y trigo de los pueblos de encomienda, ha comenzado a
Las tierras del monte que rodean a la ciudad, son concedidas en merced para llegar al asiento hispánico. El cabildo y los encomenderos se preocupan por
rancherías, ejidos y servicio de ella. El 10 de junio de 1579, los españoles se dirigen organizar la moliendade los granos y la construción de la acequia para proveer de
a tomar posesión de otras mercedes —otorgadas anteriormente por Lorenzo agua al molino En efecto, ya en 1579 la institución había tratado con Juan de
Suarez de Figueroa-,ubicadas donde terminan los solares y ronda de la ciudad, Espinoza Negrete para que éste construyera un molino en un "herido " que poseía
Bajo la observación del escribano del cabildo, quien da fe del hecho, dan hachazos junto al rio. Con ese mismo fin, en marzo de 1584 el cabildo le hace merced a
en un árbol de algarrobo, arrancan del suelo unas ma tas de paja, y arrojan piedras Gonzalo Martel de Cabrera de un pedazo de calle junto a sus tierras, en los
a una parte y a otra de las tierras, en señal de dominio Q5>. alrededores de la planta urbana Además, le fija los precios de la molienda: la
maquila se pagará en lanade ovejas de Castilla y trigo; una fanega de trigo costará
Los tratos y contratos de la ciudad se van afirmando, por lo que el formalismo dos tomines y no más, porque los vecinos han dado cuatro carretadas de piedra
español comienza a requerir una mayor legalidad en ios actos. En enero de 1581, tosca y peones indígenas para la construcción del molino 02).
el procurador Juan de las Casas solicita que los regidores y alcaldes sean hombres
que sepan leery escribir, pues como muchasveces falta escribano "no hay quién sepa Hacia 1580, se configura una tendencia económica que caracterizará a la
lo que se escribe" m. jurisdicción de Córdoba en las décadas siguientes: su estrecha ligazón con el
corredor comercial que unirá los mercados del Potosí y de Buenos Aires. Desde
La ubicación de la ciudad en la ruta que une Santiago del Estero con Santa Fe, entonces, su valor estratégico como frontera sur del Virreinato, dejará lugar a
produce una continua entrada y salida de viajeros,algunos de ellos comerciantes, consideraciones menos bélicas y más mercantiles.
con lo que se acentúan las actividades mercantiles a partir de 1579.

27) A manara de ejemplo, cfr. acia capitular de 6/8/1580 (en: A C ,1: 381-382) 31) Sobre el precio que se impone a las comidas que entran en la ciudad, cfr. actas
capitulares de 10/1/
28) Las dirás sobre la cantidad de habitantes hispánicos del asiento de Córdoba, figuran en el acta 1581 y de6/l/I585 (en: A.C., 1:399 y 529-530 respectivamente). En cuantoa lasmedidas quesedcben
capitular de 28 /5/1579 (en: AC., 1:303-304) usar en los tratos comerciales, cfr acta capitular de3/3/1581 (en: AC., 1: 403)
29) Cfr. actas capitulares de 4/5/1579 y de 10/6/1579 (en: A C., 1: 296 y 361).. 32) Cfr actas capitulares de 20/10/1579 y de 2/3/1584 (en: A C, 1: 323 y 502,
respectivamente).
30) Ada capitular de 2/1/1581 (en: A C, 1: 394)

79
78
El proyecto de Francisco de Aguirre y Jerónimo Luisde Cabrera, relacionado disposiciones para defender los intereses de sus representados. En base a la
con la búsqueda de un puerto hacia el Atlántico para dar salida a los productos del premisa de ser cada vez más encomenderos y menos soldados, los vecinos
Tucumán y del Perú,continúa planteándosecomo una necesidad para lasciudades organizan fundamentalmente la acbvidad económica de sus propias encomien¬
déla gobernación, a lo que noson ajenos losvecinos de Córdoba .Es así como, unos das, casbgan los hurtosde caballos perpetrados por los indígenas, acuden con sus
meses antes de la fundación definitiva de Buenos Aires, el cabildo escribe al rey y indios de reparbmiento para construir la acequia de la ciudad y protestan ante el
al Consejo de Indias, informándoles: Córdoba está situada a 250 leguas de Potosí, gobernador por la saca de aborígenes a Chile C5S).
a 70 de Chile y a 50 de la mar del norte; el camino es llano y todo él puede ser
transitado por carretas; por aquí podrían tratar los reinos del Perú con los de La inserción delosvecinosde Córdoba en los trábeos comerciales que se inician
España 031, en el decenio de 1580, depende en gran medida de las formas que adquiere la
apropiación del suelo y de la mano de obra indígena. La agricultura comercial, la
La fundación de Buenos Aires, en 1580, transformará a Córdoba en la puerta ganadería,y la renta de los tributos de encomienda, se consbhiyen en elbasamento
de! Tucumán para los intercambios entre el puerto y las zonas mineras de la organización socio-económica de la región durante los primeros cincuenta
años del período colonial.
Hacia 1852, la provincia cuenta con sólo cinco ciudades en su amplio territorio:
Santiago del Estero, San Miguel de Tucumán, Nuestra Señora de Talavera, Salta y
Córdoba, y ninguna de ellas excede el medio centenar de vecinos

Pedro Sotelo Narvaez escribe en ese año una relación sobre el Tucumán al
Licenciado Cepeda, presidente de la Real Audiencia de Charcas, en la que
puntualiza las características salientes de la Córdoba de entonces Señala que la
ciudad bene cuarenta vecinos encomenderos, a quienes sirven más de seis mil
indios; y que aunque la berra se va "conquistando poco a poco", los españoles han
puesto viñas y se cosecha trigo, maíz,cebada y legumbres de la península "Añade
que las ciudades de Santa Fe, Córdoba, Sanbago y Talavera benen batos comer¬
ciales enríe ellas, y que a tal efecto las carretas recorren las rutas que las unencon
el Río de la Plata y el puerto de Buenos Aires. Agrega finalmente que los vecinos
adoptan la determinación de abrir tratos con Brasil, pero "el licenciada Lerna, que
está en él gobierno de aquellas provincias de Tucumán, ¡es ha desbaratado e imposibilitado
para ello" w>.

Sin embargo, un gobernador poco solícito a los intereses mercanbles de los


encomenderos locales, no significa un freno para que se cimente la estructura
colonial. Durante los años 1580 a 1586, el cabildo de Córdoba toma una serie de

33) Acta capitular de 8/3/ 1580 (en: A.C., 1: 34 1-342) Sobre este tema, vale la pena recordar que, durante
algunas décadas, de todas las fundaciones realizadas en la Provincia del Tucumán, sólo subsistirán 5
aquéllas que se encuentran en la ruta Buenos Aires- Potosí.
34) Pedro Sotelo Narvaez, autor de la relación dtacja, es vecino y encomendero de Santiago del Estero.
Llega alTucumán durantcelgobiemodeAbreu,enl574,y accede a] cargodetenientede gobernador 35) Actas capitulares de 7/7/1580, 11/4/1582 y 7/8/1585 (en: AC, 1: 373-374, 442 y 556-557, respecti¬
de Santiago del Estero durante la gobernación de Ramirez de Velazoo. vamente).

80 81
CAPITULO IV
LA APROPIACION DE LA FUERZA DE TRABAJO:
LAS ENCOMIENDAS

La encomienda se establece en los dominios hispanoamericanos en el trans¬


curso del siglo XVI como una merced real, consistente en el derecho a percibir los
tributos indígenas y otorgada en recompensa a conquistadores y pobladores.

Como contraprestación de ese beneficio, los encomenderos están obligados a


residir en la jurisdicción —teniendo "casa poblada"—, a mantener caballo y armas
para la defensa del territorio, y al adoctrinamiento y enseñanza de los aborígenes.
Una amplia legislación está dirigida a fijar los limites de estas concesiones
—prohibiendo su enajenación o estableciendo en dos vidas el derecho sucesorio
sobre ellas—, aunque o tras normas conceden privilegios especiales a sus beneficia¬
rios.

La mentalidadseñorial de la España del medioevo, se manifiesta no sólo en las


ceremonias de toma de posesión de las encomiendas, sino también en el estilo de
vida de los encomenderos y en las relaciones que estos establecen con sus
encomendados- Los documentoslocales de la época, designan a unos y otros como
"indios de repartimiento" y "vecinos feudatarios".

Las formas organizativas de las poblaciones prehispánicas y las condiciones de


desarrollo de los distintos espacios coloniales americanos, originan diferentes
características regionales en la institución. En ese sentido, los rasgos fundamen¬
tales del sistema de encomiendas en la jurisdicción de la ciudad de Córdoba,

83
consistenen elservicio personalcomo tributo del indígena encomendado,y en que En casi todos los casos, los gobernadores que se suceden en la Provincia del
su época de auge transcurre sin que lasautoridades del Virreinato tengan una idea
clara del volumen demográfico de cada merced.

Tucumán, son quienes conceden en nombre del rey— ,las cédulas de encomien¬
das 07)-

Alejados de los centros virreinales, recompensados largamente por los gastos En los primeros quince años, sus beneficiarios son los conquistadores y
y fatigas de la conquista, y provistos de una alta dosis de iniciativa individual, los primeros pobladores de la ciudad; muchos de los cuales habían participado
beneficiarios usufructúan las encomiendas de indios al margen de las reglas también en otras expedicioneay fundaciones poniendo dinero y armasa su costa,
dictadas por la Corona - tal como lo indicanlos encabezamientos de los títulos respectivos, donde habitual-
mente se hace una reseña de los servicios prestados a! rey por el encomendero.
Al ser fuente de mano de obra, el repartimiento se convierte en la llave de las
actividades económicas iniciales de los españoles y en la puerta de acceso seguro Casi todas las cédulas enumeran los pueblos y caciques ineluídos en la merced,
al poder político. Por ello, las prácticas locales en torno a esta institución, 1 con una indicación sobre la ubicación de los asentamientos Sin embargo, a veces
determinan en buena medida las relaciones que se establecen entre españoles e estas referencias resultan vagas; en otros casos, la falta de un registro completo de
indígenas y la estructura social y económica de la región. los pueblos indígenas de la región y la inexistencia de un dominio efectivo sobre
el territorio al momento de su otorgamiento, hace que muchas encomiendas sean
concedidas "por noticia" Las imprecisiones son salvadas con una fórmula colo¬
cada a continuación de los nombres de pueblos y caciques, en la que se aclara que
son concedidos "por ¡os dichos nombres, por los que mas tuvieren, a doquiera que
La concesión y el usufructo de las encomiendas. estuvieren y residieren, con sus parcialidades, aguadas, rancherías y cazaderos. "

Pocos son los casos en que el título de la encomienda determina el número de


Numerosas copias de cédulas de encomienda del siglo XVI, indican en sus indígenas tributarios que abarca. Al parecer, fue esta una modalidad iniciada por
textos la existencia de un libro de registro de encomiendas, deposi tado en Santiago el fundador Jerónimo Luis de Cabrera, y abandonada a los pocos años; tal vez por
del Estero, cabecera de la Gobernación. Su desaparición —tal vez en el siglo los inconvenientes que se suscitan en su aplicación.
pasado—, nos impide conocer la totalidad de repartimientos indígenas otorgados
para nuestra región. No obstante, la gran cantidad de pleitos por la posesión de Tal es el caso de Miguelde Mojica,quien a fines de 1573,obtiene en encomienda
pueblos de encomienda en el período, permiten acceder a cédulas originales o a al pueblo de Tolibanescad "en el rio de Conchuluca", con "gen yndios de bisitapon y
traslados, y a veces determinar la existencia de otros repartimientos, mediante no losaviendoquesecumplandelosyndiosquemassercanos al dichopuebloubiere.." Esta
simples menciones en los legajos judiciales o en los protocolos notariales 0fl. cláusula origina unlargopleito,dirimido finalmente ante laAudiencia deCharcas;
la proximidad de los distintos pueblos indígenas entre sí, su pertenencia a
diferentes encomenderos y la vaguedad de las referencias geográficas, deja a los
sucesores de Mojica sin esos indígenas tributarios, en tanto que el otro litigante es
36) Corroborando ia existencia de un libro de registro de encomiendas, el escribano mayor de gober¬
nación, Alonso de Tula Cerbin, dioe refiriéndose a las cédulas otorgadas a Diego Hernandez
Maldonado: " .hize sacar el traslado de suso contenido del registro de merrpdes de yndiosoriginal,
que en él se haze mension. " (en: ANB, serie Expediente Coloniales, año 1600, nro. 2, f. 5).
A pesar de la desaparición de ese libro de registro, otras fuentes documentales, permitieron reunir
un total de 128 cédulas de encomienda, En esa tarea heurística fueron de gran valor los papeles
manuscritosdePabloCabrera (Fondo Documental delEA), los trabajosdeAníbalMontesya citados, 37) Delascédulasdeencomiendas!ocaiizadas,sólocincoemanandelosteniente5degobemadoros Dos
las investigaciones de la Dra. Beatriz Solveira, y las publicaciones sobre el tema del Dr Gaston G. deeBas,otorgadaspor tarenzoSuarezdeFigueroa, tuvieron comobenefiriariosaPedrodeludueña
Doucet (Doucet, 1980 a y b) Por otra parte, a lo largo de estas páginas hemosconsultado permanen¬ yaAntonioRonson(en:AHPC,reg 1,protocolo de 2/11/1576y de24/7/l 577 respectivamente) Las
temente los trabajos de Silvio Zavala, en especial el tra tado referido a la institución de la encomienda otras tres, fueron concedidas porjuandeBurgosa BartoloméJaimes en 12/6/1584,30/6/1584 y 15/
(Zavala, 1973) 2/1586 (en: AHPC., esa 1, leg 6, exp. 5).

84 85
amparado en los pueblos y caciques de su encomienda, aún cuando la cédula de Aún antes de la fundación de la ciudad de Córdoba, la encomienda se instituye
este último es de fecha posterior™.
en la Provincia del Tucumán> como la única recompensa rentable para conquista¬
dores y pobladores. Por ello no es casual que las relaciones políticas o de
Los títulos de las mercedes de indios, contienen otra fórmula que refleja las
parentesco con el gobernador de turno, favorezcan a algunos vecinos con el
características del tributo indígena en la región Por ella se señala que los pueblos usufructo de nuevas encomiendas. De lamisma manera,lasenemistades implican
y caciques allí mencionados, servirán al encomendero "en sus haciendas y granjerias". a menudo la pérdida de este beneficio.
En todos los casos, se agrega que hasta tanto las autoridades coloniales efectúen
la tasa correspondiente, los beneficiarios obtendrán de los indígenas de su repar¬ En este último caso, las quejas de los peijudicados llegan hasta el vimey, quien
timiento sólo lo que "buenametüe y sin vejación" Ies pudieren dar. en 1571 ordena levantar una información sobre la costumbre de los gobernadores
tucumanos de quitar los repartimientos de indios que sus antecesores concedie¬
Sin embargo, la falta de instituciones prehispánicas que pudieran ser utilizadas ron De allí que entre las provisiones del virrey Toledo a don Jerónimo Luis de
por el español para la extracción de excedentes, la distribución espacial de las Cabrera, se incluya la orden de averiguar todo lo sucedido sobre el tema en el
poblaciones aborigénes y la carencia de metales en la región, hacen que el tributo territorio a su cargo Noobstante, en los años siguientes ala fundación de Córdoba,
del indígena encomendado se exprese a través del sistema del servicio personal esta situación se mantuvo invariable
(40)

La guerra de conquista se convierte asi en expediciones cuyo objetivo es la


En cuanto a las cédulas de encomiendas otorgadas por el fundador, podemos
obtención de mano de obra. De esta manera, la fuerza de trabajo indígena — decir que la mayoría de los componentes de su hueste obtienen ese beneficio. Casi
energía fundamental en los primeros años de la economía colonial—, no sólo todas se hallanubicadas en las zonas norte y noroeste de las sierras, siendo la más
soluciona los problemas básicos del asiento español, sino que también contribuye meridional la correspondiente a J uan de Mitre, próxima a la actual ciudad de Alta
al despegue inicial del nuevo sistema económico
Gracia
Algunos años después de la fundación de la ciudad, el cabildo expresa con Las instrucciones de 1573 a Gonzalo de Abreu —sucesor de Cabrera en la
claridad la situación de los indios de repartimiento: Gobernación—, ordenan dar por nulos los repartimientos de indios que hicieron
sus antecesores. En los considerandos, se expresa que se han encomendado
" . esta governacion y la del Rio de la Plata caresccn de •
algunos pueblos "por noticia",y muchos de ellos sin estar reducidos y pacificados,
todo genero demynas de oro y de plata y otros metales,porque lo que origina pieltos y diferencias al momento de su posesión.Noobs tan te, Abreu
asta agora no ¡as a ávido ny se an descubierto, a cuya causa confirma la mayoría de las cédulas otorgadas por don Jerónimo Luis de Cabrera
y estar ¡os yndios por conquistar la mayor parte della, no en la jurisdicción de Córdoba. Al mismo tiempo, concede otros títulos a nuevos
tienen los véanos encomenderos mas de tan solamente el encomenderos sobre pueblos de indios que ya habían sido repartidos por su
servicio personal de los naturales, exercitandolos en labores antecesor en razón de que sus antiguos dueños habían retornado a Santiago del
de la tierra, crianzas deganado y algún lienzo dealgodort con Estero, o bien habían buscado otros derroteros, dejando vacas las encomiendas.
que se sustentan muy moderadamente..." ™. Indiquemos ai respecto, que los intentos exploratorios de este gobernador a la
región de Los Césares, dan como resultante las nuevas encomiendas de las zonas
de Calamuchita, Tras la Sierra y Río Quinto.

38) La encomienda de Miguel de Mojica, en; ANB, serie expedientes coloniales, año 1600, nro. 4 Otras
cédulas de encomienda donde se indica el número de indígenas tributarios que debe abarcar ¡a
40) Cfr. informadón hecha en el Cuzco, acerca de las quejas de varios vecinos del Tucumán (en: IEA,nro
merced, son las pertenecientes a Heman Martin y Jorge de Colmenares, ambas de 2/12/1573 (en:
AHPC, esa 1, leg *2, cxp. 6); la de Diego Hernandez Maldonado de 7/3/1574 (en: ANB, serie 12.737, copia del original del AGI, leg 2-2-6/11 R64)
expedientes coloniales, año 1600, nro 2); y la de Juan de Mitre, concedida el 12/7/1579 (en: AHPC, La continuidad de la práctica a la que hacemos referenda en este párrafo, se confirma con una
esa I,leg 24, exp. 4) presentadón hecha ante el gobernador por Tristán de Tejeda, en setiembre de 1586; en ella, el
39) Acta capitular de 24/11/1597 (en: A M, 111: 38-41)
encomendero expresa que los indios del pueblo de Nunsacate, le fueron quitados "por el odio que
el gobernador Lenna tenía a su suegro Hernán Mejia Miravai" (en: AHPC, esa 1, leg 2, exp. 2)

86 87
Al finalizar el gobierno de Abreu, dos asuntos comienzan a preocupar a los nurión de la población conquistada, provocada por ia falta de tasa, el tributo
encomenderos en relación a sus repartimientos: los conflictos con las jurisdic¬ excesivo y el servicio personal. A pesar de ello, la historia social de la época marca
ciones vecinas por la posesión de la fuerza de trabajo indígena y ¡a perpetuidad de una constante: los permanentes esfuerzos de losencomenderoslocales por librarse
las encomiendas. En cuanto a lo primero,la inquietudse sustenta en las numerosas de las reglamentaciones sobre empleo de mano de obra indígena.
malocas que los vecinos de Santiago del Estero organizan sobre la jurisdicción de
Córdoba; mientras que también desde el Río de la Plata, se repartían indígenas de
esta ciudad B,). En cuanto a la preocupación por obtener la perpetuidad de las
encomiendas, o bien su "alargamiento hasta la tercera vida", ella se expresa en forma
permanente en casi toda la documentación de la administración local. Como
El otorgamiento de una cédula de encomienda, no implica su usufructo
veremos más adelante, las solicitudes en ese sentido están relacionadas a los inmediato. Durante las dos primeras décadas de la fundación de la ciudad, el acto
requerimientos comerciales del momento: en especial la buena renta económica jurídico de la toma de posesión guarda una estrecha relación con las expediciones
que significa la producción de harina de trigo para e! puerto de Buenos Aires. de conquista y las malocas, que tienen por objeto el traslado compulsivo de
algunos caciques e indígenas al asiento español,
La autoridad virreinal, por su parte, responde a estas inquietudes con actos
Ante el teniente de gobernador y el escribano público, el encomendero toma
administrativos que implican una intromisión de la Corona en la regulación de la
fuerza de trabajo indígena ejercida por los encomenderos. posesión —en algunos casos— a través de un solo indio o cacique, quien repre¬
senta en el acto a todos los pueblos encomendados en él <43). Al decir de uno de los
Aún cuando deberán pasar algunos años para su aplicación en la Provinciadel
conquistadores de la región, esta práctica se origina "a causa deaber muchos pueblos
icaciques y mui pequeños y de tan pocos indios ..." ÍW).
Tucumán, las instrucciones del virrey Toledo al gobernador Hernandode Lerma
de noviembre de 1579, señalan la preocupación por el manejo indiscriminado de
Los rituales de posesión recuerdan los viejos juramentos de vasallaje y fideli¬
los beneficios de las encomiendas. Expresan además la necesidad de realizar una
dad hispánicos. El 22 de setiembre de 1584,Francisco Rodríguez solicita al teniente
visita y tasación en la provincia, teniendo en cuenta que los tributos deben ser
de gobernador Juan de Burgos, le dé posesión de los indígenas contenidos en la
moderadosy en las cosas que los indígenas tienen y crían en sus tierras. El servicio cédula de encomienda de su padre, merced que le corresponde por ser sucesor en
personal debe ser quitado y los aborígenes reducidos a pueblos en lugares debuen
segunda vida. El teniente de gobernador, luego de leer el auto respectivo y de
temple, cera de sus asientos antiguos. Agregan las instrucciones, que de los confirmar con el escribano su validez, ordena a Rogriguez que traiga unos indios,
tributos se descontará el sustento y salario de los sacerdotes doctrineros. Por
último, en cada ciudad habrá mita y servicio de plaza cada semana, y los indígenas para que sobre ellos le dé la posesión que solicita. El encomendero trae a un
que participen en ella, procederán de los repartimientos más cercanos recibiendo cacique,quien por intepretación de Pedro, muchachodel serviciode Juan de Soria
un jornal por su trabajo (42). — que conocía la lengua del cacique y la general del Perú—, dice llamarse Iveci y
ser señor del pueblo de Nunsacate, uno de los contenidos en la cédula. Ante esta
última comprobación, el teniente de gobernador toma al cacique por las manos y
Las comunicaciones del virrey, se encargan de aclarar las causas de este
ordenamiento legal en la regulación de ia fuerza de trabajo indígena: la dismi-

43) Anotemos algunas excepciones en tomo a esta práctia de tomar posesión de las encomiendas en el
asiento déla ciudad de Córdoba En octubre de 1575,Abreu otorga un repartimiento de indios, desde
41) En el acta capitular de 20/1/1575, se asienta una carta enviada por el cabildo a Gonzalo de Abreu,
Santiago del Estero, a Antonio Pereyra; unos días después, éste toma posesión de su encomienda en
donde se expresan las quejas de algunos indígenas porque gente de Santiago del Estero les Ecvan
Santiagodel Estero,a íravésdedosmuchachosdelpueblodeEscobasacate, la única regióndelasque
hijos y mujeres a servir en esa ciudad (en: A.C, 1: 166- 167). La situadón continúa en 1586, según
india otro redamo asentado en el acta capitular de 8/12 de ese año (ibíd : 260) En cuanto a los
comprendía su encomienda, que se halla para esa fecha bajo control español en la jurisdicción (en:
AHPC, escr 1, leg 3, exp 10) En noviembre de 1579, Francisco Blasquez toma posesión de dos
problemas con los españoles del Río de la Plata, estos se midan en fecha temprana (Cfr. A.C, 1: 100- encomiendasen la "provincia deSaIsacate",regiónqueen esa fecha recórrela expedicióndeGonzalo
106), y continuarán unos años después, particularmente con los indígenas repartidos en la zona de
de Abreu en la Jomada de ¡os Césares (en: AHPC, escr 1, leg. 3, exp 3)
llanura
44) Presentación de Tristán de Tejeda en el juido contra Jerónimo de Bustamante, por ios indios de
42) Instrucdones del viney Toledo al gobernador Hernando de Lenna, de 21/11/1579 (en: Levillier,
Citonsaate (en: AHPC, esa 1, leg. 4, exp. 1).
1926-31,111:259-265)

89
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se lo entrega al encomendero, diciéndole que a través de él le daba la posesión


actual, real, corporal" de todoslos demás caciques y parcialidades que comprendía
la cédula. El escribano se preocupa en aclarar que la ceremonia se lleva a cabo en
Las pequeñas y cambiantes encomiendas de Córdoba
la plaza pública de la ciudad, en "día claro, con so! alto, quieta y pacificamente, sin
contradicha de persona alguna", y ante testigos que firman el acta (45).
En ios primeros veinte años del sistema colonial, todo contribuye para el
Tanto esmero en demostrar la limpieza del acto notarial respectivo, halla su desmembramiento y permanente cambio de dueño de lasencomiendas de Córdoba
causa enque la sustanciación de numerosos y prolongados pleitos se fundamentan La importancia del control sobre la mano de obra indígena como única fuente de
en algunas irregularidades en la ceremonia formal de la posesión.
riqueza, la falta de homogeneidad geográfica de los repartimientos y las formas
organizativas dela poblaciónaborigen, hacen que la disgregación y el traspaso de
En ocasiones, un solo episodio jurídico es utilizado para incluir la posesión de ¡as encomiendas se produzcan no sólo a nivel de parcialidades y pueblos, sino
varias cédulas de encomienda en un mismo beneficiario, aun cuando sus pueblos también a través de grupos de individuos
se hallen en regiones distantes unos de otros. Estos casos se dan en los primeros
años de la fundación de la ciudad, cuando la jurisdicción no se encontraba aún Al proveer mano de obra, las encomiendas se convierten en el motor inicial de
"pacificada". Sin embargo, a medida que los españoles extienden su dominio a la economía y en la base de la riqueza y el poder politico de muchos feudatarios
territorios más amplios, se suceden varias tomas de posesión, referidas a una locales. Todas las actividades cotidianas del asentamiento hispánico, están facili¬
misma cédula de encomienda. tadas por el trabajo indígena: provisión de comidas, agua y leña, cuidado de
sementeras y ganados, construcción de casas y acequias, para citar algunas Los
En estos primeros decenios de la conquista hispánica, la administración de ios
documentos de la época insisten en que "la tierra sin indios no se puede sustentar'
pueblos de encomienda está casi siempre en marros de sus propios beneficiarios,
auxiliados por los yanaconas que trajeron con ellos desde Santiago del Estero. Aún Indudablemente, la posesión de un repartimiento prepara el camino hacia la
con un territorio no controlado en su totalidad, los "aprovechamientos" que pro¬
empresa comercial: las actividades del encomendero se sostienen con los
ducen los indígenas de servicio representan una parte considerable de la renta
aprovechamientos y tributos de sus indígenas.. De allí que no sólo las disputas
hispánica: guarda de ganados, siembra dé trigo, maíz y frijoles, recolección de políticas y judiciales surgen en torno a los puebíos de repartimiento; también lared
miel, elaboración de textiles, aparejos y sogas, etc. No es casual entonces que la
de relaciones sociales y económicas entre los conquistadores, se estructura en
guerra de conquista que se libra en otras regiones de la Provincia del Tucumán, buena medida sobre la base del traspaso de las encomiendas.
haga elevar las voces de protesta de los encomenderos locales; en especial cuando
a causa de ella los gobernadores requieran su presencia en zonas alejadas de los
Sin embargo, estamos lejos de encontrar en la jurisdicción de Córdoba las
repartimientos. grandes encomiendas novohipanas o peruanas del siglo XVI. La organización
política y el patrón de asentamiento indígena —caracterizados por pequeños
Los vecinos feudatarios que se ausentan temporalmente de la jurisdicción,
fragmentos poblacionales—,y el complicado relieve montañoso, hacen que a
acostumbran dejar sus pueblos de indios en manos de otros encomenderos, a menudo un mismo beneficiario posea varios repartimientos esparcidos en la
quienes a través de actas notariales,se ¡os faculta para administrarlos y percibir de geografía serrana
ellos los "tributos y aprovechamientos". Sólo a partir de la última década del siglo
XVI, cuando la actividad mercantil de los vecinos de Córdoba haya comenzado a Entre los años 1573 y 1575, Diego Hernandez Maldonado es favorecido con el
desarrollarse firmemente, veremos aparecer a los mayordomos como grupo otorgamiento de cuatro cédulas de encomienda. La dispersión de los pueblos
español no encomendero, gestando su piopio espacio en la estructura social indígenas comprendidos en ellas, unidoa la falta de un control militar efectivo del
colonial. territorio, le impiden tomar posesión de sus encomendados, ya que sus reparti¬
mientos se encuentran en los cuatro puntos cardinales de la jurisdicción: en el río
de San Juan y en el de Navidad, en Conchuluca y en la sierra de Calamuchita
45) AHPC,escr 1, leg 2,exp 2
Cuando en 1590,su hijoy sucesor Juan Nuñez Galvez quiere tomar posesión de los

90 91
pueblos,ésta es contradicha por otros encomenderos de la región,entre quienes se diez años y después murió". Más adelante es concedida a Juan de Chavez, quien no
habían repartido los indígenas que pertenecieran a su padre Diego Hernandez toma posesión de ella; y en años siguientes Antonio SuarezMejia y Adrian Cornejo
Maldonado m reciben sendos títulos sobre esos pueblos, lo que origina un pleito que se sustancia
a fines del siglo XVI (48).
Una de las cédulas de encomienda citada en el párrafo anterior, indica el
número de indígenas tributarios que debe comprender: "doscientosindios de visita"
en el río de San Juan. Ningún título posee datos exactos sobre el volumen de¬
mográfico de los repartimientos. Los pleitos que se suscitan entre los vecinos
feudatarios, indican que ellos mismos carecen de precisiones a! respecto, particu¬
DEJACIONES DE LAS ENCOMIENDAS
(según los protocolos notariales)*
larmente en las primeras décadas del sistema colonial. En ese sentido, los niveles
tecnológicos y los patrones de asentamiento prehispánicos, corroboran las pala¬
TIPO DE DEJACION CAUSAS DETA DEJACION
bras de Tristán de Tejeda, citadas en páginas anteriores: los pueblos de en¬ A
comienda son "mui pequeños y de tan pocos indios.. Ñ por por
déla de de por por
0 no obtención
encomienda algunos individuos indica de otra
incompati¬ dote donación TOTA!
s completa pueblos o grupos bilidades
En años posteriores, la dispersión geográfica y los bajos niveles poblacionales encomienda
legales
indígenas —que provocan tantos inconvenientes en la administración de las
encomiendas—, serán subsanados en favor de los conquistadores por el sistema 1573 1 — _ _ 1 - - - 1
de la reducción en pueblos 1576 - i - 1 - - - - 1
1577 - 2 - 2 - - - - 2
El continuo cambio de dueño de las encomiendas, es otro rasgo característico 1585 1 - - - - 1 - - 1
de la institución en la jurisdicción de Córdoba. Traspasos y desmembramientos 1587 - 1 - - - - - 1 1
tienen como causas la ausencia o muerte de los beneficiarios, así como promesas I58B - 1 - 1 . - - - - 1
de dotes y negocios. 1591 1 - - - 1 - - - 1
1594 - 1 - t
- - 1 - 1
En los primeros años de la fundación, varios repartimientos son declarados 1598 - 1 - - - - 1 - 1
vacos, o bien sus encomenderos hacen dejación de ellos, Casi siempre se trata de - - - -
miembros de la hueste de Cabrera, que dejan la ciudad en forma definitiva <17)~ En
1599 - 3 2" 1
- - - -
ese sentido,un modeloabarca tivoesel déla encomienda de Juan Gomez deOcaña,
1600
1601
-
- _- 1
1
1
1 - - - -
1
1
otorgada en 1575 y que comprende los pueblos ubicados entre Calamuchita y 1602 1 - - - - 1 - 1
Salsacate y junto a Machascat; según las referencias documentales, en octubre de 1604 - 3 - 1 - 1 - 1
1583 el repartimiento está vaco "porque su dueño se ausentó de la ciudad y no volvió en 1605 - 3 19 16 - 2 2 2 22
1607 - 1 - 1 - - - - 1
1608 - - 1 1 - - - - 1
46} Pieito entablado por Francisca Nuñez, contra Juan Nieto, Juan de Mitre y Pedro de Olmedo, por la 1609 1 - 1 1 - - - 1 1
sucesión de las encomiendas de Diego HernandezMaldonado (en: ANB, serie expedientes colonia¬
les, año 1600, nro. 2)
* Sobre los años que no figuran en ¡a columna respectiva, no se poseen datos
47} Tales son los ejemplos de Heman Martín y Jorge de Colmenares, quienes hacen dejación de sus
encomiendas en Santiago del Estero, el 29/10/1575 y en Córdoba el 2/3/1574 respectivamente;
ambas son otorgadas a Luis de Abreu el 29/10/1575 desde Santiago del Estero (en: AHPC, esa 1,
leg 2,exp,6) IJn caá) similar ese! deMateo lxipez.de Sosa, quien el 4/ 12/ 1573 recibe en encomienda
48) En: AHPC, esa 1, leg. 8, exp 6. Es de advertir que, aún cuando la mayor parte de las dejadones de
los pueblosde Chimbosacate; estos pasarán a formar parteunos meses después déla encomienda de
Alonso de Cardenas, junto a otros pueblos ubicados en el Río de Navidad; en 1578, estos últimos encomiendas llegan a nuestro conocimiento a través de los protocolos notariales de los escribanos
serán concedidos a Tristán de Tejeda (en: AHPC, esa. 1, leg. 2, exp. 2). de Córdoba; otras dejaciones que no figuran en ellos, están mentíonadas en algunos pleitos
i* judidales Es de suponer que estas últimas fueron hechas en la cabecera de la Gobcmadón
92 93
Una parte importante de los traspasos se debe a concreciones de promesas de •I numerosas, particularmente las referidas a grupos de individuos encomendados,
dotes Enjunio de 1587, Martinde Salvatierra se presenta ante el notario para hacer o a piezas sueltas 621.
dejación de los indios de Anisacate; en el mismo acto jurídico, Salvatierra dona el
pueblo en cuestión a su suegro, aclarando que es en razón del repartimiento que La discontinuidad de las encomiendas a través desucesivos desmembramien¬
recibió en dote por su casamiento con Maria Pereyra, hija natural de Antonio tos, es otro rasgo característico de las prácticas locales en torno a la institución.
Pereyra14". i Estas disgregaciones se concretan en las primeras décadas de la conquista ibérica,
mediante los arreglos y transacciones que generan los pleitos por pueblos de
Otras transferencias por dote muestran, por parte de las autoridades, un encomienda
manejo más discrecional del uso y destino de las encomiendas En el pleito entre
LuisdeAbreu y Juan de Espinoza Negrete por el pueblo de Yalchimbo, el primero Las causas de los litigios son numerosas. Entre ellas, destaquemos la falta de
de los nombrados hace una presentación, historiando los traspasos ilegales de un precisión en las cédulas, ¡a superposición de beneficiarios, y el hecho de que
repartimiento local: la encomienda que el gobernador Gonzalode Abreu concedió muchas fueron otorgadas "por noticia".. Esta confusión —de la que se aprovechan
a Juan de Villegas estaba mal hecha, ya que éste tema un delito por asesinato los vecinos de Córdoba para apoderarse de la mano de obra indígena mediante
pendiente en Perú; poco tiempo después, cuando su beneficiario es muerto en San subterfugios legales— también encuentra su origen en algunas características de
Miguel de Tucumán, el repartimiento pasa a manos de Juan Barragán, padre de los pobladores prehispánicos: carencia de una delimitación geográfica clara,
Villegas, quien se ve en esto favorecido por su amistad con el gobernador Abreu. ; movilidad territorial de sus habitantes, el cambio de nombre de los caciques por
Cuando más adelante Barragán concierta casar su hija con Juan de Espinoza edad o función, y la dificultosa traducción y transcripción de los nombres
Negrete, hace dejación de la encomienda, que es concedida entonces a su yerno, indígenas.
aún cuando éste no reúne los requisitos de residencia en la ciudad de Córdoba (30).
Los continuos reclamos del cabildo de Córdoba por la superposición de
La transferencia de las encomiendas como consecuencia de alguna actividad mercedes de indios, originan en 1590 un auto del gobernador Juan Ramirez de
mercantil, siempre resulta difícil de probar a través de la documentación, dada la Velazco, por el que se ordena respetar las primeras encomiendas dadas por el
prohibición que figura sobre ello en la legislación indiana Sin embargo, podemos fundador, "según consta en ei registro de encomiendas". En los considerandos del
decir que la venta de repartimientos de indios por sus beneficiarios —hechos a los mismo, se incluyen muchas de las causas de los pleitos:
que no serían ajenos los gobernadores—, parece haber sido una práctica conocida
en la época. en la qiudad de Cordova y en las otras desla Gover-
nacion a ávido e ay pleitos e diferencias sobre pueblos caqic¡ues
En 1591, Melchor Ramirez Camacho acusa a Antonio Pereyra de haber com¬ eytidios deparqialidades,asien propiedades corno enposesion
prado su encomienda a Luis de Luna; Pereyra se defiende diciendo que hace 17 en tre unos véanos con otros.../ y (¡ue elfundador/ repar tió los
años, estando él en Santiago del Estero, el gobernador Abreu le encomendó los naturales déla tierra a los vezinos conquistadores e pobladores,,y
pueblos de Luis de Luna, quien había hecho dejación de ellos por estar viejo y muchos de los tales vezinos...no han adquirido posesión por
enfermo y por lo tanto impedido de venir a la conquista de los indígenas de no haber estado la tierra asentada y sujeta como ahora; y
Córdoba.. Más adelante, Pereyra aclara que lo que si compró a Luisde Luna, fueron viendo esto, otros vecinos adquieren cédulas de encomienda
las casas y solares que poseía en el asiento español G1). de los gobernadores sobre los mismos indios poniéndoles

Otras transferencias por venta pueden ser inferidas de los protocolos notaria¬
les, en especial de las dejaciones allí asentadas. A partir del siglo XVII se hacen más 52) Sobre el traspaso de encomiendas, permítasenos un último ejemplo que llama nuestra atención por
las circunstancias que rodean a dos cédulas otorgadas por un teniente de gobernador En 1576 ejerce
ese cargo lorenzo Suarez de Figueroa, quien el mismo día hace dejación de algunos pueblos de su
repartimiento y los otorga a Pedrode Ludueña (en: AHPC, Reg. 1, protocolo de 2 /II /1576) Un año
49) En: AHPC, Reg 1, protocolo de 10/6/1557 después, Pedro de Ludueña y Jerónimo de Bustamante, hacen a su vez dejación de algunos pueblos
50) En: AHPC, esa 1, leg 2, exp: 6 de sus respectivas encomiendas, que son otorgados a Antonio Ronsonpor el teniente de gobernador
51) En: AHPC, esa 1, leg 3, exp 10 Lorenzo Suarez de Figueroa (en: AHPC, Reg 1, protocolo de 13/6/1577, 22/7/1577 y 24/7/1577)

94 95
nonbres diferentes y luego piden ser amparados por la ley de das. Al menos,esa es la acusación que Alonso déla Camara lanza a FranciscoPerez
Malinas y otros por ser gente pobre no continua los pleitos de Aragón, en el pleito por la posesión de la encomienda de Juan Gomez de Ocaña
para defender sus derechos.. " e3> 6Í)

La movilidad territorial de los habitantes indígenas, es otro elemento más que El alto costo de los pleitos, particularmente cuando estos salen de la jurisdic¬
debemos agregar en las vagas localizaciones que figuran en las cédulas de ción de la ciudad, provoca el reclamo de los vecinos y favorece los arreglos entre
encomienda En 1586, Juan de Espinoza Negrete inicia demanda contra varios las partes litigantes C7). A partir de 1585, se suceden en las actas notariales los
encomenderos Al parecer, el demandante confunde pueblos de la "provincia" de denominados "conciertos", "transacciones" o "apartamientos depleitos". En todos los
Conchuluca, con los de la "provincia" de Ischilin. De la respuesta de los deman¬ casos, el resultado es el desmembramiento de las encomiendas y en muchos de
dados, surge la aclaración: esas parcialidades fueron empadronadas en enero de ellos la división de las poblaciones indígenas. Veamos algunos ejemplos
1573, en época de la cosecha de la algarroba, cuando las poblaciones indígenas se
movilizan a territorios diferentes a los de sus asentamientos Los litigios indican En abril de 1585, Juan de Mitre y Juan de las Casas arreglan el pleito por la
también que la costumbre prehispánica de cambiar nombres según la edad o la posesión de los caciques Quilis y Cositonos, que ambos tienen señalados en sus
función de los caciques, colaboran en estas confusiones &t) cédulas de encomienda. El primero de los nombrados se queda con el cacique
Quilis y Juan de las Casas con el cacique Cositonos. A causa del compromiso que
En la cédula de encomienda que el teniente de gobernador Juan de Burgos se establece en 1587entre Baltasar Gallegos y Juan de Espinoza Negrete, el pueblo
otorga a Bartolomé Jaimes, se aclara que los pueblos y caciques que contiene de íscasa es dividido en dos partes iguales -—una para cada encomendero—, ya
fueron ya encomendados en el mismo beneficiario por Gonzalo de Abreu, pero que en ambas cédulas figuran parcialidades de ese pueblo. En 1589, el pueblo de
que por falta de lengua que interpretase, "no fueron declarados los dichos pueblos y Tunun se reparte entre Baltasar Gallegos y Blas de Peralta; el arreglo establece
caciques ni parcialidades por sus perfectos nonbres y agora se declaran por sus perfetos algunas condiciones: cada uno de ellos se queda con dos caciques y cuatro indios;
nonbres y se hazen minqion de las parcialidades" 63). pero si el pueblo tuviera cinco caciques, Peralta se quedará con tres de ellos; la
transacción será anulada si se comprueba que el pueblo de Tunun se llama
¿Problemas por falta de intérpretes? Tal vez. Sin embargo, no parece ajeno a los Bilisacate, en cuyo caso pasará a manos de Blas de Peralta e8).
españoles de la época, enmendar y agregar nombres en sus cédulas de encomien-
La más notable de las transacciones, es la que se realiza entre Alonso de la
Camara y Diego de Funes. Por la misma, ambos se conciertan para que "cuando
llegue la ocasión deiracorrery conquistarla tierra", en el pueblo de Mojigasta partirán
53) En 1579, cuando el gobernador Gonzalo de Abreu llega a la ciudad de Córdoba, con el objetivo de ir por partes iguales los caciques e indios que hubieren e5).
"al descubrimiento de L.os Cesares", dicta un conjunto deOrdenanzas fecha das el 3de mayo de ese
año, en lasqueseincluyen disposidones sobre los criterios a seguir en losliligios sobreencomiendas Mencionemos por último que, tal como sucede en otras regiones del Virreinato,
En lineas generales, el gobernador indica la obligación de respetar la cédula de encomienda más
antigua, aún cuando no se haya tomado posesión de la misma (en: A.C, 1: 298-301)
los vecinos feudatarios de Córdoba se muestran proclives a perpetuar las en-
El 8/3/1580, el cabildo da poder e instrucdoncs a Juan de Rivadeneira, Alonso de la Camara y
Lorenzo Suarez de Figueroa, para solicitar ante el rey y el Real Consejo, que en caso de pleitos se
cumpla sólo la primera merceddeindios que se haya otorgado (en: A C ,1: 339-340} El 6/8 del mismo
año, una solicitud similar es enviada al gobernador Lerma, en el sentido de no confirmar las cédulas
de encomiendas concedidas por Abreu, ya que muchos repartimientos fueron dados nuevamente a
otras personas (en: A.C ,!:381-382) . H auto del gobernador Ramirez de Velazco, en: AHPC, esa . 1, 56) En: AHPC, esa 1, leg. 9, exp 11
leg. 4, exp . 1 57) En 1586, el cabildo da instrucciones a Domingo Ramirez de Velazco, para que comparezca ante las
54) E juicio que inida Juan de Espinoza Negrete en: AHPC, escr 1, leg. 2, exp 6 Ejemplos sobre la autoridades de España y solicite, entre otras cosas, que ese tipo de pleitos concluyan en la Audiencia
confusión que acarrea la práctica prehispánica de cambios de nombres de los cadques por edad o Real, porque "no pueden seguir las causas en España" (en: A M ,11: 117-118)
fundón, en: AHPC, escr. 1,leg 9, exp 11 y leg 6, exp 1 58) Cfr en: AHPC, Reg 1, protocolos de 6/4/1585, 30/6/1587 y 3/4/1589
55) En: AHPC, esa 1,leg 6, exp. 5 59) En: AHPC, Reg. 1, protocolo de 12/10/1591

96 97
contiendas entre parientes y amigos. Los inmediatos casamientos de las viudas de ,S
encomenderos, el traspaso de los repartimientos a través de las cartas de dote y
aún la apropiación de ellos por parte de tutores de menores, señalan una amplia
gama de prácticas dirigidas a ese objetivo (éol Estas permiten, sobre todo a partir
del último decenio del siglo XVI, que los españoles recién llegados accedan
también a la mano de obra indígena.

CAPITULO V
LA APROPIACION DEL SUELO:
LAS MERCEDES DE TIERRAS

Al momento de fundarse la ciudad de Córdoba, cada miembro de la hueste de


Cabrera recibe un solar, así como cuadras y chacras en el territorio circundantedel
asiento hispánico . Las "mercedes de tierras", como les llaman,se van anotando en un
libro especialmente destinado para ello, aplicando una práctica administrativa y
repobladora que había sido utilizada ampliamente desde el siglo XII en la España
medieval K1!.

En ese sentido, la Reconquista de la Península había sido un movimiento de


frontera caracterizado por la ocupación de territorios considerados como desha¬
bitados Luego de la victoria militar, se efectuaba el reparto de tierras alodiales
entre los conquistadores, no como un botín de guerra, sino originando derechos
permanentes a ellas.De allí, la confección habitual de un "Libro del Repartimiento",
donde se inscribían las mercedes de tierras otorgadas m.

61) EJ 7/12/1573, el primer escribano de Córdoba, Francisco deTorres, comienza a asentar lasmercedes
detierrasotargadasporgobemadoresytonicntesdegobernadoresdeladudad.-eiLibrodeMercedes
de Tierras —titulo con el que conocemos actualmente a esa serie documental—, condene las
otorgadas hasta el año 1588 y dos correspondientes a 1600 En 1958, el Instituto de Estudios
Americanistas de la UniversidadNadonal de Córdoba, publica su transaipdón completa
62) Cfr.sobre estos temas, las investigadones de Charles! Bishko y Salvador DeMoxó (Bishko, 1965: 291;
60) Cfr en: AHPC, esa 1, leg 25, exp iy leg. 8, exp 6 De Moxó, 1979, passim).

98 99
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Sin embargo, la apropiación del suelo en América adquiere matices diferentes,


! asiento. Son pocas las mercedes concedidas por Cabrera más allá de los alre¬
particularmente en sus aspectos socio-económicos. Los espacios americanos difícil¬ dedores de la ciudad: en la Lagunilla -entre el río de SanJuan y el de Navidad-,en
mente pueden ser considerados como deshabitados, en especial aquellos más
el nacimiento del río de San Juan y otras a legua y media del poblado español
aptos para la agricultura y la ganadería. A ello debemos agregar la permanente
necesidad de mano de obra indígena —regulada en los primeros decenios por la Uno de los primeros actos de su sucesor, Gonzalo de Abreu, fue confirmar el
encomienda—, para cubrir las variadas actividades económicas que comienzan a 15 de marzo de 1574 las mercedeshechas por Cabrera. Desde entonces y hasta fines
desarrollar los conquistadores. de ese año, el teniente de gobernador Lorenzo Suarez de Figueroa dispone una
cantidad importante de chacras junto al río de la ciudad AI mismo tiempo, la
La mencionada situación conduce a la elaboración por parte de la Corona y de apropiación del suelo comienza a extenderse a través de otras mercedes, hacia las
las autoridades hispánicas en América, de reglamentaciones específicas que fijan zonas del valle de Punilla, Guanusacate, Cantamala y el río de Calamuchita.
los límites déla apropiación del suelo, cuando entra en conflicto con los territorios
utilizados por las comunidades indígenas; o bien diferenciando las mercedes de De todas ellas, una llama nuestra atención por ser la primera —y una de las
tierras de las encomiendas, en lo referente a la propiedad inmueble. pocas— concedidas a indígenas El 24 de diciembre, los indios de Quisquisacate
j encomendados a Tomás de Irobi, son beneficiados con "las tierras dondeal presente
están poblados, ques en la junta destos rios una legua en redondo para sus sementeras, la
En la jurisdicción de la ciudad de Córdoba, la estrecha relación entre en¬
comienda y apropiación del suelo indica unapartamiento de las normas oficiales, qual se le hace merqed por ¡as tierras que se le tomaron para esta dicha ciudad La qual
facilitado por las particulares características de la organización espacial prehis- merced se le haze para que en las dichas tierras pueblen y sean sus pueblos para siempre
pánica, la reducción en pueblos de los aborígenes encomendados y su descenso jamas". Las cédulas concedidas a Tomás de Irobi indican que se trata de pobla¬
ciones en cuyo territorio se fundó la ciudad de Córdoba, y que habían sido
demográfico
trasladadas al sitio de su actual asentamiento ,63).
:
La ruptura de las autonomías de las poblaciones indígenas, se manifiesta en Sin embargo, la merced que nos ocupa carece en su título de una fórmula
otro de sus rasgos fundamentales, a través de la atribución social del espado común a las otras otorgadas a españoles: aquella por la cual el beneficiario y sus
puesta en práctica por los españoles herederos la pueden "vender, trocar y enagenar como cosa suya avida por justo título".
A! parecer, más que de una merced de tierras, se trata aquí de un amparo sobre
La organización de la sociedad que comienza a estructurarse con la conquista, tierras habitadas por indígenas, en compensación por el territorio que se les había
incluye a la propiedad del suelo en un orden diferente al del mundo prehispánico j sacado con la fundación de Córdoba
j
No sólo por su inserción en la economía mercantil del período, sino también por
los diferentes derechos de propiedad que surgen, según sus poseedores perte¬ Esto parece confirmarse en el textode otra cédula, otorgada el 1ro.de marzo de
nezcan a la población española o a la indígena. 1586 a Juan de Mitre, encomendero a cuyo cargo también se encontraban parte de
los indígenas de Quisquisacate. A estos últimos les fueron dadas tierras, en
recompensa por habérseles tomado las suyas para la fundación del asiento
A pocos meses de fundada la dudad, don Jerónimo Luis de Cabrera comienza
hispánico Unos años después, muchos deesos aborígenes hanfallecido, por lo que
a otorgar tierras en dos ancones, por encima y debajo del fuerte, en la margen son otorgadas a Juan de Mitre "como su encomendero, dejando a los yndios que aya
izquierda del río de San Juan. La referencia es un mojón colocado al pie de la tierras suficientes para sus sementeras.. " (M).
barranca; cada lote tiene como frente o "cabezada" al río, y su largo corre hada el
monte o "sabana". En cuanto al tamaño, la mayoría dé ellas tiene 700 pies de frente
Indiquemos por último que los protocolos notariales no ofrecen ningún ejem-
y 2 000 de largo, "hacia el llano". Están destinadas al sustento de los vecinos: pío sobre compra o venta de bienes raíces realizados por indígenas de la jurisdic-
huertas, sementeras, viñas y arboledas "para los edificios".
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Unos meses después, el gobernador señala" a los véanos y moradores las 11 63) La merced de tierras a los indios de Quisquisacate, en: L,M. :47-48 Las cédulas de encomiendas de
cuadras que han de servir también para huertas, a partir délos últimos solares del Tomás de Irobi, de 19/11/1573 y de 9/3/1574, en: AHPC, escr. 1, leg 4,exp. 11
í 64) En: LM.: 136-157

100 101

i Qu
ción.Por el contrario, las fuentes abundan en datos sobre apropiación de las tierras hecha el 15 de marzo de 1578 a Pedro de Villalba en el río de San Juan, "una legua
aborígenes por parte de los conquistadores, particularmente cuando sus habitan¬ mas aca del pueblo de Bilibiscate, encomendado en el dicho Pedro de Villalba, ques desde
tes han sido reducidos en otr os sitios, o cuando su número ha disminuido. Sobre una punta de un monte questdjunto dél un pueblo despoblado, que se dize Cipcaya pueblo
este tema volveremos más adelante. de Soyasacat de yndios de su encomienda, con todas las tierras que! dicho pueblo despoblado
tenia y tiene , " Conviene aclarar que, casi sin excepción, las tierras así concedi¬
Las mercedes de tierras de 1575, reflejan el estado de zozobra de la población das se ubican en ambas márgenes de los arroyos, o bien alrededor de lagunas.
española, y el escaso territorio en el que los conquistadores se habían afirmado:
En 1579 y coincidiendo con la expedición en busca de Los Césares, la apropia¬
Guanusacate —próximo a Jesús María, en el camino a Santiago del Estero—, el río
de Navidad y el valle de Punilía. ción del suelo se extiende hacia el sur, junto a los ríos Tercero y Cuarto. Algunas
de las mercedes de este período son hechas "en el asiento del rio Quarto, qerca de
Socosoco", y son otorgadas a Tristan de Tejeda, uno de ios capitanes de la partida.
Los últimos días de ese año, parte de las tierras de Ongamira cuyos — La "pacificación" de la jurisdicción se refleja en estos documentos, puesto que
habitantes indígenas habían sido objeto de una "expedición de castigo" al mando de
vemos extender el radio de las mercedes a zonas como Ansenuza, Olahen,

Anton Berru ,fueron otorgadas a Lucía Gonzalez, hija de BartoloméJaimes, uno
Salsacate, Ríe Tercero y Valle de Calamuchita<67).
de los más importantes encomenderos de la jurisdicción, para "estancia y semen¬
teras y heredamientos", en cantidad de 30 hanegadas de sementeras de maíz, junto
a] arroyo de Gualunba.

En 1576, a pesar de los encendidos reclamos del cabildo ante el gobernador, en


Con la consolidación del dominio español en la región, las mercedesde tierras
el sentido del estado de indefensión en que se encuentra la ciudad, los encomen¬
se entrelazan cada vez más con las cédulas de encomienda. Las concesiones
deros logran una serie de mercedes para sementeras en el alejado valle de
ubicadas a más de dos leguas de la ciudad, en especial las de los años 1576, 1584
Cavisacate, donde trece deellos "tienen indios comarcanos ", "porque está sin perjuicio
de indios, que al presente no se siembra ni se ha sembrado " Agreguemos a ello, otras y 1585, se otorgan alrededor de pueblos antes repartidos a sus beneficiarios,
mercedes en el camino que conduce a la cabecera de la gobernación: Ministalaló, figurando algunos de ellos como despoblados, Por ser de especial interés para
nuestro tema, nos detendremos en este último aspecto de las mercedes de tierras
Ascochinga, Guanusacate y algunas más sobre el rio de Navidad.
El sistema jurídico colonial beneficia ampliamente las reivindicaciones de los
Desde 1576 a 1585,lasconcesiones de tierras comienzan a marcar una tendencia
definida: la apropiación del suelo próximo a las encomiendas de indios. Veamos españoles a las tierras indígenas. Si bien la jurisdicción de Córdoba carece de la
institución dela composición de tierras —con la actuación formal de un visitador
algunas de ellas El 13 de setiembre de 1577, el hospital de la ciudad recibe una
de la Corona atribuyendo los terrenos indígenas "excedentes" a los españoles que
parcela entre los pueblos de Saldan y Citon, "para su estanqla de ganado menor", los reclaman—,los gobernadores, y en ocasiones ios tenientes de gobernadores,
donde trece vecinos tienen sus indios encomendados. El 19 del mismo mes,
otorgan ese tipo de merced, ante pedidos concretos de los encomenderos locales.
Baltasar Gallegos obtiene a dos leguas de la ciudad, un pedazo de tierra próxima En esos casos, dos motivos son esgrimidos en forma constante por los conquista¬
al pueblo del cacique Cavacharaba de su encomienda; la parcela comienza 6.000 dores: la existencia de tierras no aprovechadas por los indígenas de encomienda
pies arriba de ese pueblo y abarca 40 hanegadas de maíz de sembradura, a utilizar para su subsistencia, y la reducción en pueblos puesta en práctica por los vecinos
como estancia de ovejas y sementeras. En la misma merced se le otorgan también
feudatarios de Córdoba w.
otras 50 hanegadas, en una cañada ubicada entre los pueblos de los caciques
Canisoy y Anibia de su encomienda <6S).
66} En: L M :95-96
En este período también apar ecen con mayor profusión concesiones de tierras
67) En: LM : 101-104
en antiguos poblados indígenas, ahora "despoblados": 'Tal el caso de la merced
63) Por Real Cédula de 1/11/1591, se faculta a las autoridades virreinales para repartir las Sienas que
no han sido ocupadas, o cuyos títulos no son legítimos, mediante ¡a "composición" La misma, fue
pregonada en La Plata, el 5/12/.1S92 (en: ANB, serie R,C„ tiro 426)
65) Las mercedes mencionadas en los últimos párrafos, en: L M :62, 72-73, 91-92, y 92-93

103
102
I

La forma de utilización prehispánica del suelo con territorios destinados
estadonalmente para la agricultura, la caza y la recolección—, favorece los Ante estas presentaciones, el teniente de gobernador ordena hacer una averi¬
requerimientos españoles sobre las zonas más aptas para cultivos. Por otra parte, guación entre losindios comarcanos. Donjuán Oya, Francisco Talaloy don Miguel
la concentración compulsiva de la población indígena de una misma encomienda, Sibi tacan, coinciden en sus declaraciones: las tierras que siembra JuandeSoriason
y su descenso demográfico, desemboca habitualmente en la apropiación por parte de un cacique de Saldán llamado L icharava, encomendado en Blasde Peralta;hace
del encomendero, o simplemente de un vecino español, de las tierras utilizadas varios años queesos indios dejaron de sembrar allí, porque Peralta los mudó a otro
hasta ese momento por los aborígenes. sitio; actualmente bicharava y losindios a él sujetos son cinco en total, con hijos y
primos, porque "los otros han muerto" ,M).
El apartamiento de las normas oficiales en este tema, no indica en ningún caso
el desconocimientodelasmismas. Al contrario, varias veces ios litigantes hispáni¬ Desconocemos el desenlace final del pleito, ya que se encuentra inconcluso. Sin
cos las invocan en sus pleitos, o bien acusan a la parte contraria de haberlas embargo, toda la documentación de la época indica un marcado movimiento de
transgredido. En otras oportunidades, recurren a los derechos que sus encomen¬ reivindicación española sobre las tierras de los indígenas encomendados; y en
dados poseen sobre las tierras, para impedir la intromisión en ellas de otro ningún caso las acciones legales pertinentes benefician a estos últimos con el
español. Para ejemplificarlo, seguiremos determinados aspectos de uno de los derecho a la propiedad del suelo que detentan los conquistadores hispánicos
primerospleitos que se entablan en la jurisdicción, en torno atierrasqueper tenecie-
ron a indígenas encomendados. La reducción en pueblos y el descenso demográfico aborigen, hacen que ai
finalizar el siglo XVI esta tendencia se vaya acentuando. En 1601, dos vecinos
En mayo de 1579, el gobernador Gonzalo de Abreu concede a Blas de Peralta encomenderos se presentan ante el escribano público para dejar asentado un
laencomienda delos pueblos de Saidán, ubicados a tres leguas de laciudad Pocos trueque, Por el mismo, Alonso de la Camara entrega una chacra a tres leguas río
años después, Peralta obtendrá en merced —esta vez por parte del teniente de abajo de la ciudad, A cambio de ello, Juan de Burgos, como administrador de los
gobernador—, todas las tierras vacas "que tienen los yndios de Saldan de su en¬ bienes de su hijo Diego Celis de Quiroga, cede los derechos y acciones que éste
comienda, de la una parte y de la otra del rio, hasta los limites que tienen señalados ¡os tiene sobre las tierras de Guanusacate, "como encomendero de los yndios de su
dichos yndios de Saldan con los yndios comarcanos al dicho pueblo" El documento encomienda; y el derecho y aqion que los dichos yndios tienen e pueden tener a las dichas
aclara que no debe entrar en esa concesión la merced que tienehecha Juan de Soria, tierras en cualquier manera" (70).
y que debe dejar a los pueblos de Saldan "tierras que sean suficientes para sus
sementeras".

En agosto de 1586, Blas de Peralta, en nombre de los indígenas de su en¬


comienda, le inicia pleito a Juan de Soria, contradiciendo la estancia de ganados y El sistema de propiedad del suelo que surge con la conquista, nose caracteriza
sementeras que este último había iniciado en la zona. Alega que esas tierras en esta etapa de la organización colonial por la existencia de glandes dominios
pertenecen a sus encomendados, ya que las poseen "de sus antepasados ";que si bien territoriales. La mayoría de los conquistadores posee tierras —obtenidas en
ahora no las benefician, es porque al no poseer regadío, necesitan buscar tierras en mercedes o por compra a otros españoles—, distribuidas en distintas regiones
diferentes partes según "como van los años", para poder recoger comidas. aptas para la agricultura y la ganadería.

L a respuesta de Juan de Soria a esta demanda se transforma en una acusación,


indicativa de las prácticas acostumbradas en la época: las tierras que él posee en
69) En: IEA, nro. 11.399; LM.: 129-130; y AHPC, esa 1, leg. 1, exp 10
merced están despobladas; y son sin perjuicio de ios indios de Saldán, que están
— —
a una legua de su estancia. Sin embargo agrega Soria ,quien ha despojado a los 70) El trueque mencionado,en: AHPC, Reg. l,protocolode26/2/1601 El LibrodeMcrcedesde Tierras,
numerosos pleitos del Archivo Histórico de la Provincia y los protocolos notariales, proveen
indios es su encomendero Blas de Peralta, ya que éste les tomó las mejores tierras material para el siempre renovado debate sobre la reladón entre encomienda y hadenda Aquí
y en ellas "recoge mucha comida"; sus sementeras y ganados están en medio de los hemos mostrado sólo algunos elementos que inducen a pensar en una conexión real entre ambas,
terrenos que pertenecen a los indígenas, desconociendo de esta manera las para el aso de la jurisdiedón de Córdoba .En la lila, parte del presente trabajo, volveremos a tratar
este tema en profundidad
disposiciones reales al respecto
104 105

< Cs. *
--
11
Los testamentos de la época, gracias al formalismo y la minuciosidad con que Las violentas y largas disputas por la posesión delos pueblos de repartimiento,
fueren redactados, advierten sobre la posesión de numerosas chacras, cuadras de o por tierras próximas a ellos, contrastan con la casi inexistencia de pleitos por el
riego, solares y aún estancias de ganados diseminadas en el territorio. dominio de chacras o solares. Esto es así, particularmente en el período que se
extiende hasta 1610, durante el auge del sistema de encomiendas En estos
En 1579, Nicolao de Dios, uno de los primeros pobladores de la región, otorga primeros años dela colonia, el poder económico —y por lo tanto el político—,está
su testamento antes de partir a la jornada de Los Césares. Luego de dar las determinado fundamentalmente por el usufructo del tributo de los repartimientos
indicaciones pertinentes sobre las honras fúnebres que sus albaceas deben efec¬ de indios,
tuar, y de señalar las deudas que ha contraído, dice poseer cinco chacras, una
cuadra de riego, tres solares y dos estancias Las chacras están ubicadas río abajo
de San Juan, en el ancón de Blas de Rosales y en el camino a Santiago del Estero
Una de las estancias con ganado se encuentra a 4 leguas de Sumampa y otra está
cercana a la capital de la gobernación m.

De la misma forma que Nicolao de Dios, el resto de los conquistadoresdispersa


sus propiedades acorde a los beneficios que le pueden ofrecer los recursos de
mano de obra indígena, la cercanía de las rutas comerciales y la aptitud de los
tenenos, Por ello, en los dos primeros decenios del periodo colonial, la apropia¬
ción del suelo gira en torno a los territorios de los pueblos de encomienda, el
camino de Santiago del Estero y las tierras fértiles de las márgenes de los ríos de
San Juan y Navidad

Al igual que otros bienes obtenidos en el curso de la conquista, la propiedad del


suelo también se inserta en el sistema mercantil, Al respecto, mencionamos en
páginas anteriores las numerosas transacciones comerciales efectuadas sobre
inmuebles, en los primeros años del sistema colonial.

Las tierras otorgadas en mercedsirven en uncomienzo para obtener —a través


de su venta—,otros bienes de difícil acceso, dadas las condiciones de inseguridad
militar de la época. Junto a la ropa de algodón, también aparecen como elemento
de pago las herraduras, los caballos, la ropa de Castilla y las especies

No pocas veces los protocolos notariales registran la venta de una chacra por
el precio de un caballo. Si bien la guerra de conquista asigna un alto valor a los
rocines, no es menos cierto que la importancia de la propiedad del suelo está en
relación directa con el acceso a la mano de obra indígena oa.

71} En: AHPC, Reg 1, protocolo de 2/7/1579


72) A manera de ejemplo, tomemos dos escrituras de ventas correspondientes a los primeros años del
asiento español En 1575, una chacra es vendida por el precio de seis ovejas de vientre (en: AHPC,
Rcg t, protocolo de 13/5/1575); al año siguiente, otra chaca ubicada a legua y media déla ciudad,
es vendida por un rodn valuado en 22 pesos (en: AHPC, Reg 1, protocolo de 6/2 de ese año)

107
CAPITULO VI
LAS RELACIONES INTERETNICAS INICIALES

Las relaciones de fuerza y las alianzas.

Las actas capitulares de los primeros años de vida de la ciudad de Córdoba,


refieren la constante ausencia de autoridades y vecinos, fundamentalmente ocu¬
pados en la tarea de salir a "correr h tierra"

Desde el fuerte construido por el fundador, verdadera base de ¡as operaciones


militares, partidas compuestas de diez a quince hombres incursionan reiterada¬
mente más allá de los territorios aledañosalasiento. Lasacciones —que recuerdan
las algaras y correduras de la Reconquista—, consisten en rápidas irrupciones
sobre las poblaciones indígenas para obtener prisioneros y botín. Las continuas
solicitudes al gobernador para que envíe arcabuces, herrajes y pólvora, indican
que la "necesidad de salir a correr la tierra" insume a los conquistadores buena parte
de esos r ecursos 1731 .

73) El 12/1/1574, el gobernador Cabrera sobresee a los alcaldes ordinarios y a los regidores de la
obligación de hacer cabildo dos veces por semana, porque "al presente andan ocupados ,.en bisitar
parte de la tierra y entender en benéfico de sementeras y en hazer sacar una azequia principal . "
(Ada capitular de la fecha, en: AC, 1: 92-93)
En cuanto a los requerimientos de elementos para la guerra,cfr. actas capitulares de 12/7/1574, 17/
2/1575, 12/3/1575 y 6/8/1580 (en ibíd :142-143, 170-171, 172-173, y 382-383 respectivamente)

109
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Los documentos permiten observar algunos detalles interesantes sobre estos el pueblo de Yscasa, su encomendero Baltasar' Gallegos se apresura a aclarar que ÿ
primeros avances hacia el territorio indígena. El encomendero Pedro de Olmedo, él se está sirviendo desde hace más de once años de "algunaspiezas de muchachos que
en una presentación judicial, menciona el "fuertey pucará que en la fundaqion de esta
qiudad eslava hecho para la conquista de los naturales, de donde se les hazia la guerra
me an traído los hespañoles que an andado en la guerra; todas las piezas que tomavan de * - ¡j
los dichos pueblos de Yscasa me los trayan como coza mya propia asi noticiada en toda la
Otros vecinos, como el cirujano Juan Martín o el feudatario Mechor Ramirez tierra de que heran myos y me servia de dichos...". En otra oportunidad, el mismo
Camacho, señalan que mediante esas salidas, hacen traer caciques e indios al informante indica que habiendo salido a "correr la tierra" con Gaspar de Medina,
fuerte para su servicio™. y próximo al paraje llamado La Punta, dan con unos indios de Tristán de Tejeda,
"que lo conocieron por amo y hasta aora acuden a esta ciudad y a Soto a servirle de mita"
Por otra parte, los urgentes requerimientos de herrajes, se explicitan en una (76)

ordendada en 1574 a Miguel de Mojica por el teniente de gobernador, Mojica debe


sacar de los bienesdel difunto Blasde Rosales, una plancha de hierro "para hazer
prizionespara esta dicha qiudad, para prizionar a los delinquentes que se traen de ¡aguerra,

Estas malocas como las denominan los testimonios de la época—, sirven
también para aclarar o dirimir algunas disputas sobre pueblos de encomienda,
que por falta dellas se an huido algunos. .. " (7S) . particularmente cuando las cédulas han sido concedidas "por noticia". Por' ejem¬
plo, el escribano públicoJuan Nieto,participa en unas averiguaciones que se hacen
1iempo después, ya instalados los españoles en la traza definitiva de la ciudad, "en ¡ajornada que el capitán Tristan de Tejeda hizosiendo teniente degovernador, de unos
y con los valles cercanos "pacificados", las partidas guerreras se convierten en una pueblos que le estovan sirviendo.."; como a esos pueblos también los pretende
práctica común de la relación inicial entre el encomendero y los indios de su Francisco Perez de Aragón, la ocasión militar es propicia para hacer partición de
repartimiento. Ellas permiten obtener mano de obra en los pueblos ubicados en ellos y solucionar allí las diferencias m.
"provincias" indígenas más alejadas, comola deLos Algarrobales, Tulian-Caviche,
oSalsacate Para comprender la importancia de este tipo de relaciones de fuerza como
sustento de! orden colonial, es necesario referirnos al prestigio y reconocimiento
Algunos vecinos se tornan expertos en este tipo de incursiones, oficiando como social que se brinda a los capitanes y caudillos de las malocas.
capitanes y caudillos de la hueste. Es asi como Tristande Tejeda, Nicolao de Dios,
Gaspar de Medina y Antonio Pereyra,son nombres que se repiten en la documen¬ Unju icio por cobro de pesos, nos revela claramente las prerrogatí vas de las que
tación en referencia a esas expediciones. gozan esos personajes,así como la legalidad que adquierenlaspartidas bélicas. En
1590, un vecino feudatario de Córdoba, Antonio Pereyra, es ejecutado en sus
Las partidas se integran habitualmente con feudatarios que tienen sus repar¬ bienes por una deuda contraída con el mayordomo de la iglesia local; la suma no
timientos en las zonas que se ha dispuesto recorrer. Provistos de sus cédulas de es despreciable para la época: 1.063 pesos de oro de contrato, fundido y marcado.
encomienda y acompañados del escribano público, sacan indios de los pueblos de En el transcurso del juicio, Pereyra se esmera en demostrar más que la impro¬
sus repartimientos para llevarlos a la ciudad; o bien litígan y hacenpartición de los cedencia de la deuda, su participación en la conquista y "pacificación " de la juris¬
mismos, cuando los títulos respectivos son poco claros dicción de Córdoba, como fundamento para evitar las sanciones que le correspon-
Muchos encomenderos demuestran la antigüedad en la posesión de deter¬
minado pueblo o cacique, en base al hecho de haberlos traído a su servicio a partir
76) H¡ redamo de Juan de Espinoza Negrete, en; AHPC, esa, 1, leg 2, exp 6; y la información del
de alguna incursión bélica. Es así que, cuando Juan de Espinoza Negrete reclama mendonado encomendero, en: AHPC, esa 1, leg. 9, exp 11. La misma expedidón sirve para que
AntonioSuarezMej(a"traigadepaz"alospueblosdeQtonyCasnaguandesu encomienda, "porque
hasta entonces no habían visto españoles" (en: AHPC, esa 1, leg 8, exp 6).
77) Las "averiguadones" en las que partidpa Juan Nieto,son menaonadasen: AHPC, esa 1, leg 9, exp
74) La presentación justicial de Pedro de Olmedo, en; ANB, serie expedientes coloniales, año 1600, nro
2 La información brindada por Juan Martin y Melchor Ramirez Camacho, en; AHPC, esa I,leg 3, 11 Cuando éstas se realizan dura nte las par tidas militares, a veces son induldas en los pleitos como
exp 1 prueba presentada por alguna de las partes. Tal es el caso de una declaraaón hecha en el transcurso
de una maloca, en 1591, por indios del pueblo de Vanbichi ante Gaspar de Medina, antes men-
75) Orden del tenien le de gobernador Lorenzo Suarez de Figueroa, de 11/ 5/1574, (en: AHPC, esa 1,leg donada. Otro ejemplo es la realizada por Juan de Burgos, s/d (en: AHPC, esa 1,leg 8, exp 6,f 296
2, exp s/n, ( 185r ) r)

110 111
í den. Para ello, se ampara en una provisión real —fechada en Lima en octubre de

1570 ,por lacual se prohibe la prisión de conquistadores y pobladores,así como
la ejecución de sus bienes en razón de deudas incumplidas.
cumplimiento, el caudillo que fuere a la guerra, hará un registro de los indígenas
que se obtengan
La maloca se instituye así, como hemos señalado, en una de las vías para que
A tal efecto, Antonio Pereyra presenta el testimonio de otros vecinos, que la franja social española integrada por vecinos y residentes no encomenderos —
certifican sus recorridas bélicas por el territorio, y las heridas recibidas en su que a partir de 1590 aumenta considerablemente su número en la jurisdicción de
transcurso. No contento con eso, adjunta también seis órdenes escritas —celosa¬ Córdoba—, acceda también a la mano de obra indígena.
mente guardadas hasta ese momento—, en las que los tenientes de gobernadores
lo nombran caudillo y capitán de campo de diferentes malocas. Elcontenido de los En 1601, el teniente de gobernador Luis de Abreu, niega una licencia para
mandatos, señala objetivos y estilos de las expediciones que se realizan entre 1582 "maloquear" al herrero Pedro Gomez. La negativa se fundamenta en que la
y 1586: salir a pacificar indios encomendados "que no quieren venir a servir", buscar comarca hacia donde se dirigen se encuentra lejos y sus indios aún no están
hechiceros y otros delincuentes, "sin que en ello ynteroenga tinta nipapel ni otro auto pacificados, porque ya han muerto algunos españoles que entraron; de allí que
judicial". Como se ve, los argumentos están más fundados en sus méritos militares, para conceder el permiso, deben informar cuántos hombres van y con qué armas
que en la razón que le pudiere corresponder™. No obstante, Pedro Gomez y un grupo de soldados marcha hacia el pueblo de
Gatuna para sacar algunos indios El asunto termina con una orden de prisión
En los primeros años, y como consecuencia directa de la escasa presencia sobre el herrero y sus acompañantes, por no haber cumplido con los requisitos
española en la región, lasmalocas se constituyen en la obligada forma de relación para efectuar la maloca !501.
inicial entre el encomendero y sus indígenas, a los efectos de poder garantizar la
A fines del siglo XVI y comienzos del XVII, los vecinos de Córdoba continúan
obtención de su fuerza de trabajo. A medida que la conquista de la jurisdicción se
va consolidando, lasacciones bélicas amplían su objetivo en beneficio del resto de
utilizando a estas incursiones como una vía segura y expeditiva para traer a su
los residentes hispánicos. servicio a la población indígena. Es por eso que en 1605, el encomendero Juan de
Mitre fundamenta la dejación de una encomienda heredada de su padre, en el
A fines del decenio de 1580, el gobernador de la Provincia del Tucumán, es hecho de que sus indios no están aún asentados, ni le sirven, y él se encuentra
enterado por el procurador de la ciudad de Córdoba de las dificultades que "ynpedido y tullido para no podellos maloquear ni reduzir" ®",
padecen algunos de sus habitantes, en relación a la carencia de servicio indígena.
Luis de Abreu le informa que habitualmente losvecinos delaciudadsalen a "correr
¡a comarca" para la conquista de los indios; y añade que de las piezas
que así toman No obstante, las acciones de fuerza de los conquistadores no son suficientes
en ia guerra se sirven en sus casas, chacras y estancias de ganado, "como piezas de
para garantizar el mantenimiento de las relaciones socio-económicas que se
servicio y yanaconas" Sin embargo, al morir los encomenderos y quedar vacos sus imponen a la población indígena. Ante la escasa presencia española en el territorio
repartimientos,losgobernadores losvuelven a encomendar en otros beneficiarios; de la jurisdicción —25 a 40 vecinos en condiciones de tomar las armas en los
a raíz de lo cual, los parientes del difunto quedan sin quién los sirva y sustente
primeros años—, el aparato colonial requiere necesariamente de otros mecanis¬
mos menos brutales y más sutiles, destinados fundamentalmente a generar
En respuesta a la presentación hecha por el procurador, Juan Ramirez de aliados leales y colaboradores.
Velazco libra un mandamiento en diciembre de 1588,por el que ordena que de los
indios e indias que losvecinosde Córdoba traigan de la guerra, se sirvan "como de
yanaconas" y no se los despoje cuando el repartimiento quede vacante. Para su 79) El mandamiento del gobernador Juan Ramirez de Velazco, de fecha 26/12/1588, está incluido en:
AHPC, esa l,teg.4,exp 4 Al parecer,esta legalización deles malocas inquieta a varios vecinos en¬
comenderos déla jurisdicción, ya que a partir de esa fecha se suceden los reclamos por despojos y los
pedidos de amparo. Tomemos un ejemplo: en enero de 1590, Antonio Suarez Mejia hace una
presentación,protestando porque Adrian Cornejo, con violencia, fuea sus chacras y lesacó un indio
78) En: AHPC, esa l,ieg.3,cxp 10 Las órdenes mencionadas corresponden a los años) 582, 1583,1584 vaquero; además, le está inquietando un am3 que cría un niño de él, que está amamantando (ibfd ).
y 1586,otorgadaspor lostanientesde gobernadores An ion Berro,Juan deMolina Navarrete, Juan de 80) En: AHPC, Reg 1, tomo 16, protocolo de 13/7/1601
Burgos y Gaspar de Medina 81) En: AHPC, esa 1, leg 24, exp 4

112 113
r
Las características de la poblaciónaborigen limitan en ese
opcionessentido las E n indudable que la proximidad geográfica y lasrelaciones prehispánicas entre
hispánicas,o porlomenos impidenque losconquistadores apliquenenesta
algunos recursos tácticos utilizados ampliamente en la zona andina. región sanavirones y comechingones, convierte a los primeros en aliados imprescindibles
Es asi como para obtener la información que los españoles requieren sobre los nuevos territo¬
la gestación de negociaciones y alianzas con los
caciques locales se torna irrele¬ rios.
vante para los españoles, frente a la falta de una cohesión
orgánica permanente y
de una verdadera autoridad decisoria en el seno de la
comunidad indígena Como Los sirvientes indígenas procedentes de otras regiones del Virreinato y los
elemento sustitutivo, aborígenes de confianza procedentes de otras
provincias del comienzos de la acción evangélica en la ciudad, introducen la utilización de la
Virreinato y de la jurisdicción de Córdoba, cumplen el papel de
entr e los encomenderos y sus indios de repartimiento.
intermediadores "lengua general del Peru" entre los indios de servicio del distrito de Córdoba.

Algunos años después de la fundación, los documentos señalan la existencia de


El grupo de sirvientes hispanizados que acompañan a
los intérpretes surgidos de los pueblos de encomienda. Casi todos sirven "puertas
hueste de Cabrera en su entrada a las Sierras de Córdoba, miembros de la adentro" de las casas de los vecinos feudatarios, y han incorporado la lengua
documentos cumpliendo diferentes funciones, Tal vez una de lasaparecen en los
primeras y más quichua como parte de su proceso de hispanización.
permanentes, sea la de su actividad como intérpretes o
lenguas,
Los actos formales y jurídicos de la administración española, registran en¬
Los varios dialectos prehispánicos hablados en la jurisdicción, tonces una forma curiosa de comunicación entre el encomendero y sus indios de
resultan des¬
conocidos para los conquistadores. Aún veinte años después de la
fundación de la repartimiento: el mensaje hispánico es transmitido en quichua por el escribano o
ciudad, el sacerdote Alonso de Bárzana se lamenta
distrito de ¡os indios de Córdoba, no heñios sabido hasta
porque "para enseñanza del algún vecino, y los lenguaraces locales se encargan de traducirlo a alguno de los
agora con que lengua podran ser dialectos autóctonos
ayudados
Losnombres de varios de esos intérpretes,se repiten con cierta asiduidad en los
Si bien en pocas ocasiones los documentos mencionan litigios judiciales y en las cédulas de encomienda: Elvira, del servicio de Pedro de
la pr ocedencia étnica de
los primeros intérpretes, algunos testimonios indican la Soria; Lorenzo Chimbo, dela encomienda de T ristande Tejeda; Anton, de! servicio
incidencia de los sanavi-
rones en esta tarea. Las cédulas de encomienda, con el de Luis de Abreu, y tantos otros más. Ellos son, indudablemente, los elementos
uso casi permanente de las
desinencias "sacat" y "charaba", muestran la presencia de individuos que se muestran más proclives a los valores hispánicos.
de esa etnia
oficiando como tales.
i
Al admiti r con mayor facilid adlas prácticascoloniales,ese grupo de aborígenes
En reiteradas oportunidades, la versión sanavirona de la colaboradores, no limita su tarea a la de ser simples intérpretes. Los documentos
, toponimia autóctona
produce confusiones que se ventilan en los pleitos. Un de la época los designan con elnombre genérico de "yanaconas", en clara referencia
vecino feudatario de
Córdoba, al afirmar que el pueblo de Siquima se encuentra en la a su condición de indígenas de confianza delos españoles, ya que sus vínculos con
"provincia" de los
Algarrobales y no en la de Conchuluca como algunos sostienen, el encomendero predominan por sobre los que tienen con su comunidad de origen
señala que este
último nombre "es ordinario en la lengua sanavirona, que le an (S3)
puesto aquel nonbre
diziendo con eso los quebrahachas y luca el agua, de
forma que concholuca quiere dezir en
lengua española la aguada o jagüey que está entre arboles y asi es aquel distrito conoqido 83) La institución del yanaconazgo ha sido abordada en diferentes épocas y desde distintos puntos de
por este nombre y con él se an hecho en aquella parte muchas
encomiendas..." m. vista por tratadistas e investigador® Es as! como, a fines del siglo XVI, el oidor Juan de Matienzo le
dedica una parte de su obra (Matienzo, 1967, parte I, cap VIII); en tanto que Juan de Solorzano
Pereyra, en la primera mitad del siglo siguiente, busca el marco jurídico y la génesis del yanaconazgo
(Solorzano Pereyra, 1930, Libro II,cap. IV,VI y VII) En años más recientes, varios trabajos realizan
importan les aportesal tema; citaremos aqui sólo aigunosde ellos, comolosde Silvio Zavala (Zavala,
1978), Marie Helmer (Helmer, 1959), John Hemming (Hemming, 1970), Josep Bamadas (Barnadas,
82) En: ANB, serie expedientes coloniales, año 1600, nro. 4 1973) y NathanWachtel (Wachtel, 1973) Puesto que el yanaconazgopresenta variacionesregionales,
En cuanto a la utilización del quichua en
nuestra jurisdicción, uno de los pocos trabajos una mención especial para nuestro tema merece la investigacióndeGastonG Doucet (Doucet, 1982),
dedicados a! tema es el de Beatriz Bixio, referido a la
zona occidental déla provincia (Bixio, 1985) sobre esa institución en el Tucumán, en ia que la abundante documentación manejada por el autor,
fundamenta la existencia de una relación estrecha entre encomienda y yanaconaje
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115

t
1 mendero El testimonio del cacique Tomas Luchin descubre las dimensiones del
poder de los yanaconas, al referir la situación del pueblo de Siquima. Allí, los hijos
W-í
*
obra nativa al asiento urbano; y por sobre todo, garantizando el aporte de los
tributos de las encomiendas al dirigir la producción de la población rural. del cacique Nobon "sirven deyndios", porque fueron reemplazados en el cacicazgo
por el indígena Yalama, a quien "un anacona de LuisdeAbreulea mandado sea caqique,
Los yanaconas se presentan como una pieza fundamental en los mecanismos siendo yndio..." m„
utilizados por los españoles para obtener la fuerza de trabajo indígena. Prácticamente
todos los testimonios que se elevan ante la justicia para demostrar la antigüedad Ya se trate de indígenas forasteros u originarios de la jurisdicción, los yana¬
en la posesión de un repartimiento, mencionanla intervenciónde estos personajes conas presentan una cierta "especialización" en el trabajo: su actividad se de¬
senvuelve preferentemente en el ámbito rural, El inventario y sucesión de los
En 1585,con motivo de una disputa por los indios de Salsacate, elencomendero bienes de Gonzalo, indio natural de Chile, nos ilustra sobre las actividades de uno
Diego Diaz recuerda la manera en que fueron "traídos a servicio" los indígenas de de estos servidores en los pueblos y chacras de la campaña.
la región. Regresando con otros vecinos de un viaje a San Juan de la Frontera,
llegan a un pueblo al pie de la sierra de Viarapa; de allí, Antonio Pereyra trae En diciembre de 1584,el alcalde ordinario y juez de bienes de difuntos, otorga
algunos aborígenes a! asiento español "y deja otros yndios apercibidos de ese pueblo mandamiento y poder a! alguacil mayor Luis de Abreu, para que vaya al pueblo
para que viniesen a la ciudad, y con ellos deja un yanacona llamado Martin, delservicio de de Omarasacate de la encomienda de Manuel Rodríguez Guerrero —lugar de
Juan de Mitre". Referencias similares son dadas por los indígenas de otras regiones —
residencia del difunto indio Gonzalo ,y haga inventariode ios bienes que dejó
de la jurisdicción. Tal es el caso de Lorenzo Yumba, del pueblo de Nondolma, El mismo día L uis de Abreu se dirige al pueblo en cuestión. En el camino encuentra
quien informa que un yanacona de Francisco Lopez Correa, fue al pueblo de la carreta que Gonzalo llevaba a Córdoba y realiza el asiento de los bienes que
Siquima y "se llevó al caqique Ybacsiton y algunos yndios para Cordoba" m. —
contiene. Junto a algunos objetos de uso personal como una hamaca de algodón
del Paraguay,o una frazada blanca dela tierra—, hay herramientas propias de los
A menudo los encomenderos piden amparo al gobernador, para que los trabajadores rurales: tijeras, cuchillos, limas y sillas jinetas El inventario revela
yanaconas de otros repartimientos "no le vengan a perturbar sus yndios". Tal es el que el yanacona Gonzalo poseía también algunas armas: un arcabuz con su llave
recurso que presenta el feudatario Francisco Perez de Aragón, cuando envía a y caja y una lanza con su hierro.
llamar a algunos caciques e indígenas de su encomienda y ve interferido su
accionan "dize el yanacona que passando por un pueblo de la encomienda de Tristan de t La actuación de Luis de Abreu continúa en las chacras próximas al pueblo de
Tejeda, vezino de esta qiudad, salió un yanacona con yndios del dicho Tristan de Tejeda Omarasacate y en otras cercanas a Córdoba, donde el difunto desarrollaba sus
diziendo que se volviese y no passase adelante porque lo flecharían y matarían ..." (8S). actividades. El inventario correspondiente, incluye ahora algunos productos
rurales: tipas de frijoles, cestos de maíz, cueros de vaca medio sobados, vellones
En las poblaciones más alejadas del asiento hispánico, estos colaboradores de lana de Castilla y algún ganado (67>.
indígenas se convierten en verdaderas prolongaciones de la autoridad del enco-
El juicio sucesorio de Gonzalo, no indica solamente las actividades de los
yanaconas en las zonas rurales;advierte también sobre los favores y beneficios que
84) El pleito por los indios de Salseóte, en: AHPC, escr 1, leg. 1, exp 4. La información de Lorenzo
estos aliados reciben de ios señores feudatarios, ya que su patrimonio supera
Yumba, en: AHPC, escr 1, leg. 6, exp. 1.
85) El recurso de Francisco Perez de Aragón, en: AHPC, escr. 1, leg. 3, exp. 3- Variados testimonios
incluso el de algunos españoles no encomenderos de la región.
muestran a ¡os yanaconas como brazo ejecutor del encomendero. Antonio Suarez Mejía dice que a
sus caciques e indios del pueblo de Mayahen, no los ha dejado volver a su asiento "el anacona del Sin embargo, la benevolencia de los conquistadores no se expresa de la misma
dicho alcalde Tristan de Tejeda llamado Chimbo" (en: AHPQ esa. 1, leg. 4, exp 6) El cacique „ manera, o con igual intensidad, en todo el grupo de colaboradores indios En ese
Chabalanaguan del pueblo de Punanquinahalo relata así el cambio de encomendero en su pueblo:
" . y estando ansi en esta servidumbre, Francisco Perez de Aragón enbio un anacona suyo llamado
don Juan, quatro o ginco ve<;es; y este testigo se esaisósienpre erigiendo que no quena yr sinautoridad
de jusíi<¿a y finalmente a las <pnco v<s;es que le vinieron a llamar fue este testigo con otros caiques
deste valle e que desde entonces an servido y sirven a Francisco Perez de Aragón" (en: AHPC, esa 86) En: AHPC, esa 1, ¡eg. 6, exp 1
1, leg 3, exp 9). 87) En: AHCP, esa 1, leg 2, exp 10

116 117

i O. to. 1 to-
sentido, las diferencias en el trato que se observan, según los aliados sean
relación con los indígenas de la encomienda y la acentuada adopción de las
indígenas forasteros u originarios de la jurisdicción, subrayan la complejidad de
las relaciones interétnicas costumbres hispánicas
En noviembre de 1579,estando en su lecho de enfermo, Uzcoliodeclara ante el
El sector de indígenas forasteros que acompañan a los pobladores españoles,
escribano Juan Nieto su última voluntad, disponiendo de los bienes y asuntos que
proceden de diferentes regiones del Virreinato — particularmente Perú, Chile y le atañen para después de su muerte Es casado con Constanza Onoc, de la cual
Santiago del Estero—, donde los miembros de la hueste habían desplegado sus tiene dos hijos, Lorenzo e Isabel, y se había desempeñado hasta entonces en el
actividades con anterioridad servicio de Miguel de Mojica, como su "criado" e intérprete,
Las recompensas que obtienen de los conquistadores, dan a entender antiguas Las primeras indicaciones están referidas a las honras fúnebres. Salvo en la
relaciones de colaboración. El ejemplo de Pedro Bilanquibilan, yanacona de la cantidad de celebraciones, los funerales de Baltasar Uzcolio no se diferencian en
provincia de Chile y de su esposa Isabel, natural de Valle Vicioso en la "provincia nada con las que usualmente disponen sus amos hispánicos: deberá ser enterrado
de los diaguilas", es explícito. Hacia 1583,ambos han vendido un solar en la ciudad en el cuerpo de la iglesia de San Francisco -sepultura habitual de los españoles-;
de La Serena en 80 pesos en oro. Para cobrar ese monto, otorgan un poder desde el día de su muerte se rezará una misa, y ios frailes de esa iglesia dirán otras diez
Córdoba, en el que indican que la propiedad Ies había sido donada por "su amo" más por el descanso de su alma
Bartolomé Jaimes, quien antes de establecerse en esta ciudad, había servido al rey
en Perú y Chile (88>, Cortfiesa poseer diversos bienes, entre los que se cuentan un solar en la traza de
la ciudad, dos caballos y tres yeguas, seis vacas con sus crias, ocho ovejas, diez
Algunos de estos yanaconas forasteros, aparecen en la documentación como carneros de la tierra y algunos puercos y cabras; agregando que parte de ese
propietarios de chacras en los terrenos próximos a la ciudad; y en otras ocasiones, ganado lo atienden los indios del pueblo de Localino
se los menciona participando en pequeñas transacciones comerciales. Sin em¬
bargo, aún cuando los datosdenotan un nivel de vida más holgado que el del resto Tener un caballo significa en esos tiempos de conquista unascenso en la escala
de los indígenas locales, estos "personajes" están lejos de obtener la cantidad de
social y la segura participación en las malocas, de las que Uzcolio debe haber
privilegios y bienes de sus pares peruanos (8,).
formado parte y no sólo como intérprete. El resto del ganado que posee, lo
El testamento de Baltasar Uzcolio, natural del Perú, revela no sólo las ac¬ equipara a esa franja de españoles no encomenderos, a quienes los vecinos
feudatarios devuelven con pequeñas mercedes los servicios prestados
tividades delos yanaconas forasteros, sino también los beneficios que obtienen, su
Junto a un listado de herramientas y ropa, el testamento incluye también un
88) El poder de Pedro Bilanquibilan y su esposa Isabel, en: AHPC, Reg. 1,protocolo de 10/10/1578y de detalle de los deudores: el yanacona de Nicolao de Dios le debe doce ovejas de
26/3/1583 Un caso similares elde Alonso Quispe, quien en 1577 redbe en donación una chacra de Castilla por un escoplo que le vendió; Miguel, yanacona de Baltasar Gallegos, le
LorenzoSuarez de Figueroa; este últimojustifica la recompensa diciendo que ha recibido de Quispe debe una yegua; Francisco, natural de Chile y "criado" de Pedro de Villalva, le
"muy buenasobras y servicio". El indio es residente de laciudad de Santiago del Estero (en: AHPC, adeuda un carnero de Castilla;e Inés,india del Perú, debe entr egarle dos piezas de
Reg 1, protocolo de 14/8/1577)
89) Elcaso de PedroCoro y de su esposa Elvira Carava Chumbe, ambosindiosdel ropa.
Perú, sirven a manera
de ejemplo de los yanaconas forasteros que son propietarios de chacras. En 1580, ambos venden a
Juan Bautista Noble una chacra de riego en la acequia de Santa Olalla de la dudad de Córdoba, por Cuando Baltasar Uzcolio dispone el reparto de sus bienes, no se olvida de "los
el precio de un caballo castaño (en: AHPC, Reg 1, protocolo de 8/12/1580 y del/6/1581) indios de la sierra", quienes recibirán las ovejas de su hato Inclusive muestra hacia
Las pequeñas transaedones comerdales en las que participan los yanaconas forasteros, aparecen en
los testamentos de los españoles como deudas que deben pagar sus herederos, y en muy pocas ellos un rasgo de confianza: la mitad de las vacas les serán entregadas en guarda,
oportunidades son registradas en las actas notariales bajo la forma de deudas u obligadones. En el con la condición de que cuando su hijo varón tenga edad suficiente, pasarán a sus
siglo XVI, sólo un caso se induye enlos protocolos:es elde Ana, india natural de 5antiago del Estero, manos "con lo c¡ue se haya multiplicado"
pertenedente al servido de Antón Berro, quien otorga poder para cobrar a Bartolomé Maldonado
unos vestidos de algodón y lana, unos topos de plata y "otras menudendas" (en: AHPC, Reg 1,
protocolo de 8/2/ /1580) El testamento contiene asimismo algunas recomendaciones y requisitos, que
indican que Uzcolio piensa en el futuro de sus hijos dentrode losvalores de la
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ET'

1
sociedadespañola: que a su hijoLorenzo "lo ponganen buenas obras y en escuelaysepa í Con frecuencia las alianzas se aseguran mediante regalos. Pedro Vanbichi,
leer", y que el solar de la ciudad que queda para su hija Isabel, "si se casara o cacique del pueblo de Tocomi, quien fue asignado por encomienda a Melchor
anduviere bellaca", se lo den a Lorenzo Por último, deja a la familia bajo el amparo Ramirez, dice que éste le mandó llamar cuando aún los españoles estaban en el
de su amo Miguel de Mojica, a quien además nombra albacea, y por lo tanto fuerte "y le envió cebil". En el valle de Purtilla, Francisco Perez de Aragón utiliza
encargado de cumplir con el testamento m. , tácticas semejantes para consolidar sus repartimientos frente a otros feudatarios.
f El cacique Ciquihalquilan lo explica así: "eansimismo les dijo que él dava muchozebil
A diferencia de los yanaconas forasteros, los aliados locales no aparecen y lana, que le sirviesen bien, e que Francisco Blazquez no les dava nada sino un puñadilo
directamente involucrados en la documentación. Ningúnacto jurídico o comercial de zebil, eque sipor ventura fuesen a poder deJuan Alvarez no les daría ni trataría tan bien
es promovido por alguno de ellos, ya se trate de poderes, obligaciones, ventas o | como el./', Esto debe haber incomodado al mencionado Juan Alvarez, quien
testamentos, que son losque habitualmente registran los protocolos notariales.En ¡ también posee repartimientos en la zona, ya que presenta sus reclamos contra
cambio, las huellas de su actuación se descubren a través de las dádivas que logran i Francisco Perez de Aragón, porque le alborota los indios "enbiando por ellos desde
de sus encomenderos, en especial al cotejarlos con el anonimato en el que queda \ la Punilla con dadivas y versos..." (92).
el restó de los indios de repartimiento
Sin embargo, todo parece indicar que a los ojos de los vecinos españoles, los
En ese sentido, los testamentos de los españoles presentan una constante: colaboradores locales ofrecen menos garantías que los yanaconas forasteros. No
prácticamente todos incluyen cláusulas con donaciones a aquellos indígenas de sólo porque las recompensasque consiguen son de menor cuantía que las de estos
servicio de su vivienda considerados como más valiosos. Esto es así, porque en la últimos,sino también porque las utilidades que producen las tendencias mercan¬
mayoría de los casos, el grupo de colaboradores locales surge de los aborígenes tiles del sistema colonial, no los cuentanentre sus beneficiarios. En efecto, ningún
que sirven "puertas adentro" delas casas de los encomenderos, ya que sobre ellos documento de la época los señala como propietarios individuales de chacras o
recae todo el peso de lascoerciones y exigencias del sistema colonial solares, o bien realizando alguna transacción comercial.

Los legados consisten casi siempre en ovejas, puercos y vacas animales — Por otra parte, las desobediencias a las normas e instituciones hispánicas son
nuevos introducidos por la conquista—, o bien en vestidos; los caballos, en castigadas con particular rigor, cuando los transgresores son antiguos colabora¬
cambio, figuran sólo en raras ocasiones dores locales. La continuidad de las relaciones coloniales exige el uso de la
violenciay su permanente ostentación frente a losindiosde servicio, comomanera
En otras circunstancias, los conflictos internos inherentes a todo grupo social, de definir a cada paso en qué grupo étnico reside la autoridad. En julio del año
hacen que algunos individuos de los poblados aborígenes muestren su adhesión 1600, el escribano notifica al indio Cristobal Oganpalo, a través de un intérprete,
individuales,
a los conquistadores. El resultado es la obtención de ciertas ventajas la sentencia dictada contra él por andar huido con "cimarrones" y ser ladrón. El
como la adquisición debienes y poder político en el seno de su comunidad. Así lo
tex to de la decisión judicial ordena: "que de la carzel donde está sea sacado enforma de
reconocenlos indios del servicio de Diego Diaz, al explicar el origen del cacique del
a esa justicia desnudo de la g'ntura para riba y sea traído con bos de pregonero por las calles
pueblo de Yactatuspi. Señalan que antes que los conquistadores entraran
públicas manifestando su delito y le sean dados cien azotes y cortados los cabellos y ansi
tierra, Cositonos "era indio" y su cacique principal era Chicanhongolo; pero mismo le sea cortado el pie derecho por el empeyneycon esto sea entregado a suamo ..." P3).
después que entraron los españoles, los indios nombran por cacique a Cositonos
"por ser buen yndio y de buen pecho y rico de ganado" y porque un yanacona de Juan En realidad, toda la vida cotidiana de los habitantes de la jurisdicción está
de Mitre "le sacó para que mandase y fuese cacique" m- impregnada de manifestaciones de fuerza, muchas veces a través del ejercicio de
prácticas prohibidas por la legislación.
se
90) HJ testamento de Baltasar Uzcollo, en: AHPC, Reg. 1, protocolo de 9/11/1579 El solar que
Uzcollo), como
menciona en el testamento, figura en 1577 (dos años antes de la muerte de
Monforte En los años siguientes aparece
perteneciente a María Bejarana, esposa de Lorenzo Martin Coiombres, 1980: 99,
como baldío, hasta que en 1675 es señalado como tierra realenga (Cfr Luque
165, 226 y 292) 92) En: AHPC, esa 1,leg. 3, exp 3 y leg 3, exp. 9
91) En: AHPC, esa 1, leg l,exp 4 93) En: IEA, año 1600,uro. 3.913.

120 121

I
Un juicio criminal por la muerte de un indiode serado,que se ventila en 1594, En el transcurso de las averiguaciones, sale a luz un hecho de similares
pone de manifiesto el ejercicio diario de la violencia en las relaciones interétnicas; características, que corrobora los niveles de violencia de la sociedad colonial. En
ensu transcurso, las partes interesadas y los testigos expresan diferentes interpre¬ efecto, el juez de comisión es advertido de que encasa de Alonso de la Camara hay
taciones de la realidd, según sea la función que cumplen en la sociedad colonial indios presos en colleras desde mucho tiempo antes, asunto del que están
enteradas las autoridades locales.
El suicidio por ahorcamientode unmuchachoindio que sirve en la vivienda del
encomendero Juan de Burgos, promueve en enero de ese año una serie de La acusación se confirma mediante un procedimiento hecho con el escribano
averiguaciones que son ordenadas por el gobernador Alonso deVera y Zarate. En publico. Los indígenas pertenecen al pueblo de Tonomantuspi, del repartimiento
cumplimiento del mandato, el juez de comisión que entiende en la causa toma de Juan de Aguilar, yerno de Alonso de la Camara; se habían huido a la sietTa, de
declaración a varios de sus moradores. donde por orden de su encomendero, un cacique los trae prisioneros y son puestos
en colleras. En esas condiciones trabajan limpiando trigo, hilando mantas y
Al igual que otros feudatarios de la jurisdicción, la casa alberga no sólo a la haciendo tapias
familia de Burgos, sino también a varios indígenas de servicio y por lo menos a un
huésped español más o menos estable. En sus exposiciones ante el juez, todos Al igual que en el caso anterior, las averiguaciones con los indiosde servicio de
coinciden en ei relato central: Nicolás Carrizo, que se hospeda en la vivienda, la morada agregan algunas impresiones personales al sumario: los servidores
acusa a un indio del servicio de haber robado una bolsa de cuero en la que insisten en que sus amos no "trasquilan o hacen malos tratos a ¡os indios", y que
guardaba algunas cosas de su arcabuz. Burgos interroga al indígena, y ante su "cuando huyen o dan ocasión, les azotan pero no con crueldad". También sostienen que
negativa loencierra en la despensa, donde poco después es encontrado colgado de en la casa hubo antes una corma donde por oden de su ama ponían a las indias que
una viga, ya muerto Avisado el teniente de gobernador, sin más trámites manda huian, y que ahora sólo hay colleras "y algunas cadenas". Conviene aclarar que el
que saquen el cadáver fuera del poblado y lo quemen. ama de r eferencia, es una mestiza de nombre Ana Mejia, esposa de Alonso de la
Camara e hija de una india de Santiago del Estero (,4).
Sin embargo, las declaraciones de cada urro de los testigos contienen otros
elementos que muestran sus impresiones o intereses personales. Una india des¬ El testimonio de los prisioneros, marca una diferencia con ios indígenas que
pensera, originaria de la jurisdicción, informa que Juan de Burgos había ame¬ sirven puertas adentro de la vivienda española. Explican que han huido de su
nazado con azotes al supuesto ladrón. Agrega que en una sala de la casa el pueblo "demiedo a los azotes" que les daba un yanacona poblero, aduciendo que no
encomendero poseía un cepo, aunque no trata mal a su servicio y no había visto trabajaban como debían en la construcción de una acequia para las sementeras
poner a nadie en él. Otra indígena, natural de Santiago del Estero, pone una
distancia clara entre ella y el resto del servicio local,cuando manifiesta que su amo Por su lado, Alonso de la Camara alega que los indios son delincuentes y
"no los trata mal ni los azota", y que el cepo es para "poner indios hechiceros,que otros cimarrones y que dos de ellos están condenados a muerte por delitos; por una
traen de fuera". En resguardo de su amo, añade que esto lo sabe la justicia, porque orden verbal del tenientede gobernador, él los tiene en su casa en custodia, porque
cuando Juan de Burgos era alcalde tuvo un indígena metido en él no hay cárcel en la ciudad. En cuanto a las cadenas y colleras, señala que fueron
traídas por un yerno suyo con unos esclavos de Guinea; en ellas ha tenido presos
El acusado Juan de Burgos niega haber amenazado al indígena con azotes y a los indios, "tratándolos muy bien", y los trabajos que realizan es el que acostum¬
sostiene que lo que le dijo fue "con amor". Aclara que el cepo que tiene "fue por or¬ bran a hacer los otros indios de servicio.
den de Pedro de Cabrera", quien el año anterior estuvo haciendo averiguaciones
sobre indios hechiceros: v como no hay cárcel en la ciudad, le mandó tenerlo a él Vistas estas actuaciones, en junio de ese año, el fiscal y defensor de naturales
en su función de alcalde ordinario, y que luego no lo devolvió "por descuido". acusa formalmente a Juan de Burgos de haber dado "azotes y puntillazos" a un
Manifiesta además no ser culpable, porque los indios de esta tierra "los mas son
grandes ladrones" y que no había causa para que el indígena se ahorque Como
testigos de su descargo, figuran el cura vicar iode la ciudad y otros encomenderos
locales 94) 5e conoce como "corma", a una especie de prisión compuesla de dos pedazos de madera, que se
adaplan al pie del hombre o del animal para impedir que ande libremente

122 123
Desde el comienzo del establecimiento español en el piedemonte serrano, las
indio, quien se mata desesperado por el rigor de los castigos. Alonso de la Camara poblaciones de losvalles experimentan los nuevos modos y estilos de los intrusos
es acusado a su vez por tomar más jurisdicción y dominio del que se les concede Las salidas a "correr la tierra" -que mencionáramos en páginas anteriores—> el
a ¡os encomenderos, porque los trata como a esclavos al tenerlos en colleras y saqueo de la producción agrícola indígena y la obtención de prisioneros, originan
prisión puertas adentro de su casa y por hacerlos trabajar sin darles de comer, rápidamente los actos iniciales de resistencia. Ongamira y Toahen —regiones
"azotándolos rigurosamente"-Pide que ambos sean puestos presos y se les quiten los habitadas por comechingones—,son los nombres que mencionan los documentos
indios. españoles cuando relatan las rebeldías indígenas de esos años. En todos los casos,
se trata de acciones aisladas, sin una continuidad territorial mayor que la que
Sin embargo, la función positiva del defensor de naturales tiene un margen abarca el poblado respectivo.
muy estrecho en la jurisdicción de Córdoba El fallo, dictado pocos meses después
por el teniente de gobernador Gaspar de Medina —el mismo que tiempo antes y Poco después que Hernán Mejia Miraval hubo "traído de paz" a los habitantes
sin averiguar lascircunstancias del suicidio del indígena, había mandado quemar de Salsacate, se produce el primer incidente en la región cercana de Ongamira,
su cadáver—, condena a ambos vecinos feudatarios a pagar 20 pesos cada uno. donde los indígenas dan muerte al encomendero Blas de Rosales y a otros
Parte de esos montos deberán ser abonados en trabajos a realizar para el edificio españoles. La partida enviada para castigarlos logra su objetivo y desbarata a los
de la cárcel de la ciudad. Una condena simbólica, indudablemente, ya que las aborígenes que se habían fortificado en las alturas de un ceno. Pese al rigor
labores son efectuadas en todos los casos por los indios de servicio ps. de la represión-que merece un párrafo especial por parte del cronista Pedro
Lozano-, el alzamiento queda circunscripto al pueblo de Ongamira y no halla eco
en otras poblaciones vecinas.

Por la misma época, se produce ¡a rebelión de los indios de Toahen de la


encomienda de Anton Berru, próximos al asiento español. Una expedición al
Las formas de resistencia, mando de Tristán de Tejeda, da muerte a dos indígenas principales y los obliga a
admitir "la paz con que se les convidaba

Los primeros actos de resistencia indígena, señalan los límites de las pobla¬ El conflicto adquiere entonces sentido dentro del sistema de relaciones de
ciones aborígenes para enfrentar con un cierto éxito las relaciones coloniales Las parentesco que une a los habitantes de Toahen; y la reacción surge de parte del

acciones que aparecen dispersas y sin organización—, responden a una lógica cacique Citon, familiar de una de las víctimas. Convencido que de la guerra no
interna de las sociedades prehispánicas. enfrenta a hombres indeterminados, Citon "envía cierto indio de su pueblo, preciado
de valiente", para buscar a Tejeda y vengar en el jefe enemigo la muerte delos suyos .
De la misma manera que las alianzas con el español se establecen a partir de El intento fracasa y los españoles regresan a Toahen para reprimir la nueva
individuos o de pequeños grupos indígenas, el rechazo a la conquista tiene "rebelión".. Poco después, la muerte en combatedel cacique Citon provoca la huida
habitualmente un carácter esporádico y desorganizado; ya que nuevamente la de algunos de sus hombres y la "pacificación de otros" m.
falta de una continuidad territorial y de una verdadera cohesión de la comunidad
doméstica, son los elementos que determinan las formas de reacción frente a los En los años siguientes a losalzamientos de los pueblos de Ongamira y Toahen,
españoles. Dispersión geográfica, evasiones, negativas a servir al encomendero, se gestan otros intentos de resistencia que abarcan pequeñas comarcas; pero son
hurtos de animales, asesinato de yanaconas, son las prácticas de rebeldía y malogrados por el control ejercido sobre las zonas rurales por los yanaconas y
desobediencia más frecuentes.

96) H relato de la rebelión del arique Citon, en: Lozano, 1874, ÍV: 284-287. En 1590, habiendo pasado
el repartimiento a manos de Alonso de la Camara, se produce otro alzamiento en el pueblo de
Toahen, que es reprimido nuevamente por Tristan de Tejeda (en: AHPC, esa 1, leg 9, exp. 11.)
95) Las actuaciones judiciales que venimos de mencionar, en: AHPC, esa. 1, leg. 4, exp. 9

125
124
r~
aliados locales, junto a las exhibiciones permanentes de fuerza y autoridad que
significan las malocas. serios inconvenientes para el aprovechamiento de su producción agrícola por
parte de los encomenderos, y se constituye en una suerte de resistencia El mismo
Tristan de Tejeda dice en sus probanzas que durante las malocas a veces se
Enhe ios años 1574 y 1581 —etapa en la que se va organizando el dominio
sustentaba con raices silvestres, "por causa de que ¡os naturales de la tierra no
hispánico del territorio—, las actas capitulares refieren las inquietudes de los
vecinos españoles "por quanta está latierra deguerra". Enalgunas oportunidades, las
sembraron muchos años por ¡¡echar della a los españoles". También en 1581, el cabildo
informa al gobernador que los repartimientos ubicados a cinco o seis leguas de la
menciones son más explícitas: una carta al gobernador Abreu de 1576, advierte
ciudad están alzados, y "aunque se a ydo a correr la tierra no an querido venir a servir".
que los indios no vienen a servir a sus encomenderos "y han concertado que cuando
estén las comidas maduras caerán sobre ¡a ciudad" La misma preocupación se repite
en 1581, por lo que el cabildo ordena cercarlos solares de la plaza Poco después Dos herramientas fundamentales del aparato coactivo español, se convierten
en el objetivo de muchas de estas acciones de resistencia indígena: los caballos y
informa al gobernador Lerma que "el servicio está ya la n ladino que de todo lo que pasa
dan aviso a toda la tierra", y aunque han tenido noticia de que los naturales "tratan los yanaconas que sirven en las zonas rurales, En una reunión del cabildo, Miguel
de hacer junta de gente", no lo han logrado porque los españoles hicieron algunas de Mojica expresa que los indios están "tan yndomitos que an venido abrá ocho días a
' las chocaras desta dicha ciudad a matar los anaconas y quemados quen ellas tienen ¡os
"malocas y castigos" m.
vecinos, como lo an hecho y quemado y llevan los cavados a matar y los matan. ..." . En otra
Otros aspectos del rechazo indígena a la intromisiónespañola tienen a mal traer oportunidad, Francisco Rodríguez de Ruescas avisa a las autoridades que "tiene
a los vecinos de la ciudad Los viejos usos de la sociedad doméstica prehispánica, necesidad de salir a hacer castigo en los yndios del rio tercero donde an muerto tres
anaconas" m
de responder con la dispersión geográfica frente a acontecimientos imprevisibles
que ponen en peligro su estabilidad, se repiten ante la llegada de los europeos. El
En la medida en que representa un desafio a la autoridad colonial, el robo de
cacique del pueblo de Cochan, asegura que unos indígenas cercanos "an desampa¬ ganado forma parte también de las manifestaciones de rebeldía. A fines de 1580,
rado el pueblo por temor de los españoles y se an ydo los caciques e yndios del dicho pueblo
el cabildo se ve obligado a ordenar al mayordomo del hospital de la ciudad la venta
a hacer sus ranchos en los montes junto a sus chocaras.. " El encomendero Francisco
de carneros que posee esa institución, porque se pierden "a causa de hurtarlo ¡os
Rodriguez también recuerda que losindios de Nunsacate, en el norte de lassierras indios". Asimismo otras disposiciones más enérgicas son ensayadas para poner un
de Córdoba, estaban "dentro de unpueblo" y que "después de la encomiendade mipadre
freno a esas acciones: los castigos habituales que recaen sobre los indígenas
se apartaron unos a una parley otros a otra por algunas causas que a ellos les parecieron..."
acusados de robo, consisten en condenarlos a la pena de muerte, "dexarxetandolos
En ¡as circunstancias extremas que plantea la conquista española, las condi¬ y cortándoles narices, pies, manos, dedos. .. ", junto a los azotes y el corte de pelo n(m
ciones que a veces mantienen a los indígenas dentro de su poblado son muy
Sin embargo, las manifestaciones de resistencia más habituales son de tipo
precarias; de allí que frente a la posibilidad de que e! teniente de gobernador
individual Nos referimos a las fugas de indios de servicio que se producen en
ordene a Francisco Rodriguez quitarle sus indios de Simsacate, Tristan de Tejeda
forma continua y durante varias décadas No sólo las memorias escritas de las
le ad vierte: "que será alborotarme los yndios y que se hayan al monte, que son mios, y que
visitas hechas por las autoridades hispánicas advierten sobre estas huidas. Los
los maten y se pierdan como ya poco a lo estubieron otra vez y yo /os apacigüé y truje de
escribanos públicos registran invariablemente poderes especiales que conceden
paz" » los encomenderos, "para cobrar piezas de indios que se han ausentado". En algunas
Esa dispersión geográfica de los miembros de un poblado indígena, causa

99) Las expresiones de Miguel de Mojica, en: acta capitular de 1/2/1576 (A.C, 1: 217-223); otras
97) Actascap¡tularesdel9/6/1574, 10/1/1581,20/11/1581 y22/11/1581 (en: A 0,1:137-138,240-242,
399, 419 y 422423, respectivamente) informaciones en esesentidose encuentran en las actascapitularesde23/12/1575yde4/l/1576(en:
98) La información del qscique dei pueblo de Cochan, en: AHPC, escr 1, leg 6, exp 1 Igual referenda
A.C., 1: 202-203 y 2 i7-221). La manifestación de Francisco Rodriguez de Ruescas, en: AHPC, esa . 1,
da Luis de Abreu cuando declara que esos indios están "divididos en sus chacaras por la guerra que leg 2, exp. 2.
los españoles les an dado ." (ibíd ) En cuanto a la referenda sobre los indios de Nunsacale y 100) Cfr. actas capitulares de 26/11 y 27/11 de 1585 (en: A C, 1:578-579);acta capitular de7/7/1580 (en:
Simsacate, en: AHPC, esa 1, leg. 2, exp. 2 AC, 1: 373-374), e instrucciones del gobernador Abreu a Hernán Mejía Miraval de 25/10/1576 (en:
Levillier, 1919-20: 140-219)

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'
ocasiones, elinteresado indica además la jurisdicción en la que supone se encuen¬
tran losevadidos: estos últimos casos se producen especialmente a par tir de 1590, pecto, la habitual dispersión geográfica a la que se ven obligados los habitantes de
cuando los indígenas de servicio son ocupados en los fletes que organizan los la región durante los meses de invierno, para obtener el alimento necesario
feudatarios locales {10I>. mediante la caza y la recolección.

Al carecer los pueblos de repartimiento de "hacienda propia" según la —


expresión española de la época—, difícilmente los feudatarios locales pueden
conformarse con cobrar el tributo en las cosas que los indígenas "tienen o crían o
La adaptación y la organización de la fuerza laboral indígena. nacen en sus tierras y comarcas" a<0>.

El tributo que percibe el encomendero consiste entonces en el servicio personal


En las regiones nucleares andinas, el sistema colonial se establece sobre de sus indios; entendiendo por tal, la utilización del trabajo aborigen en el sentido
sociedades indígenas con excedentes de producción, y con una organización y según los fines que se propone el feudatario. En los hechos significó un tipo de
política caracterizada por la existencia de un verdadero poder gestionarlo repre¬ trabajo compulsivo sin retribución de jornales, bajo la forma de diferentes y
sentado en la persona de los kuraka variadas prestaciones de servicios,

Para obtener las rentas en productos o en mano de obra, la economía españo¬ La presentación judicial de un vecino expone con franqueza las condiciones del
la depende entonces estrechamente de las instituciones y costumbres autócto¬ servicio personal. Luego de señalar que en toda la Gobernación del Tucumán,
nas; vale dedr, de las aptitudesy disposiciones de los kuraka y de la conservación desde que se descubrió, ningún indígena de encomienda ha tenido hacienda,
-dentro del sistema colonial-, de los antiguos derechos y prerrogativas de la tierras, o ganado, agrega:
comunidad indígena ,
"...parquea los yndios no se les haze mercedde tierras, ny
tienen capasidad para ello, ny ellos venden ny compran
El interés de la administración española por averiguar la estructura tributaria
tierras, ny tienen otra cosa, ny tienen todos hazienda para
del anterior estado inca y las formas particulares que había adquirido en cada una
comprar una obeja ni una hanega de mayz, ny son mas que
de sus regiones, se verifica mediante numerosas "visitas a ia tierra". De ellas surge
unos yndios encomendados de servicio personal, que el tri-
el conocimientode las capacidades productivas andinas, y la posterior confección
buto que dan es sembrar para sus personas en lo que sus amos
de un tasa del tributo que los encomenderos deben percibir de sus indígenas, lo
les manda, en hazer lienqo y sayales, carretas y domar bueyes,
que equivale a una regulación oficial del mismo ll02).
sembrar chucaras y guardar ganados y trajines de carretas, y
hazer casas y molinos,plantar viñas y guertas y en los demás
En la jurisdicción de Córdoba, en cambio, los productos y la mano de obra
autóctona que pueden componer el tributo, se originan en poblaciones conmenor servidos que les mandan . A los encomenderos, vezinos y
otras personaspobladores se les hazemerced comose a echo de
arraigo agrícola y por lo tanto escasamente excedentarias Recordemos al res-
las tierras que tienen pobladas, en que fundan sus estancias,
chaceras, huertas y viñas y molinos y demos heredades;ally
traen yndios de los pueblos de donde son naturales para que
101) Como ejemplo abarcativo, citemos ei caso de Bartolomé Gaytan, quien en 8/8/1595 otorga poder lo benefiqien, siembren y cojan cultiben y edifiquen para sus
a Antonio de Aguijar Vellida para que en Córdoba y Santiago de! Estero, pueda cobrar piezas de encomenderos ..." D04'.
indios y yanaconas de su servido que tiene por encomienda, y que se le han huido (en: AHPC, Reg,
1, protocolo de la fecha)
102) Son numerosos los trabajos que la historiografía colonial andina ofrece a los estudiosos sobre este
tema Puesto que serla tedioso y hasta innecesario indicarlos aquf, sólo haremos referenda a la 103) Las expresiones entre comillas del presente párrafo, corresponden a la Real Cédula de Valladolid,
investigadón de Steve Stern, que nos ha servido de guía en diferentes etapas de la presente de 19/7/1536 (en: Zavala, 1978, 1: 5)
investigación (Stem, 1986). 104) Presentación hecha por Juan Bernal de Mercado, ai el pleito por las tierras indígenas de Guayascate
(en: AHPC, 1, leg. 25, exp 4, f 177v -178r).
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ocasiones, el interesado indica además la jurisdicción en la que supone se encuen- r
han los evadidos: estos últimos casos se producenespecialmente a partir de 1590, pecto, la habitual dispersión geográfica a la que se ven obligados los habitantes de
cuando los indígenas de servicio son ocupados en los fletes que organizan los la región durante los meses de invierno, para obtener el alimento necesario
feudatarios locales QOn. mediante la caza y la recolección.

Al carecer los pueblos de repartimiento de hacienda propia" según la —


expresión española de la época—, difícilmente los feudatarios locales pueden
conformarse con cobrar el tributo en las cosas que ios indígenas "tienen o crían o
La adaptación y la organización de la fuerza laboral indígena. nacen en sus tierras y comarcas" n03).

El tributo que percibe el encomendero consiste entonces en el servicio personal


En las regiones nucleares andinas, el sistema colonial se establece sobre de sus indios; entendiendo por tai, la utilización del trabajo aborigen en el sentido
sociedades indígenas con excedentes de producción, y con una organización y según ios fines que se propone el feudatario En los hechos significó un tipo de
política caracterizada por la existencia de un verdadero poder gestionario repre¬ trabajo compulsivo sin retribución de jornales, bajo la forma de diferentes y
sentado en la persona de los kuraka variadas prestaciones de servicios

Para obtener las rentas en productos o en mano de obra, la economía españo¬ La presentación judicial de un vecino expone con franqueza ias condicionesdel
la depende entonces estrechamente de las instituciones y costumbres autócto¬ servicio personal. Luego de señalar que en toda la Gobernación del Tucumán,
nas; vale decir, de las aptitudes y disposiciones de los kuraka y de la conservación desde que se descubrió, ningún indígena de encomienda ha tenido hacienda,
-dentro del sistema colonial-, de los antiguos derechos y prerrogativas de la tierras, o ganado, agrega:
comunidad indígena. " porquea los yndios no se les haze mercedde tierras, ny
tienen capasidad para ello, ny ellos venden ny compran
El interés de la administración española por averiguar' la estructura tributaria tierras, ny tienen otra cosa, ny tienen todos hazienda para
del anterior estado inca y las formas particulares que había adquirido en cada una
comprar una obeja ni una hanega de mayz, ny son mas que
de sus regiones, se verifica mediante numerosas "visitas a la tierra". De ellas surge
unos yndios encomendados de serviqio personal, que el tri¬
el conocimiento delas capacidades productivas andinas, y la posterior confección buto que dan es sembrar para sus personas en lo que susamos
de un tasa del tributo que los encomenderos deben percibir de sus indígenas, lo
les manda, en hazer lienqo y yuyales, carretas y domar bueyes,
que equivale a una regulación oficial del mismo (í02). sembrar chacaras y guardar ganados y trajines de carretas, y
hazer casas y molinos, plantar viñasyguer tas y en los demás
En la jurisdicción de Córdoba, en cambio, los productos y la mano de obra
serviqios que les mandan . A los encomenderos, vezinos y
autóctona que pueden componer el tributo, se originan en poblaciones con menor
otras personas pobladores se leshazemerced como sea echo de
arraigo agricola y por lo tanto escasamente excedentarias. Recordemos a! res¬ las tierras que tienen pobladas, en que fundan sus estancias,
chacaras, huertas y viñas y molinos y demás heredades;ally
traen yndios de los pueblos de donde son naturales para que
idí) Como ejemplo abarcativo, citemos el caso de Bartolomé Gaytan, quien en 8/8/1595 otorga poder lo beneficien, siembren y cojan cultiben y edifiquen para sus
a Antonio de Aguilar Vellida para que en Córdoba y Santiago de! Estero, pueda cobrar piezas de encomenderos..." aw
indios y yanaconas de su servido que tiene por encomienda, y que se le hanhuido (en: AHPC, Reg.
1, protocolo de la fecha)
102) Son numerosos los tfabajos que la historiografía colonial andina ofrece a ios estudiosos sobre este
tema Puesto que seria tedioso y hasta innecesario indicarlos aquí, sólo haremos referenda a la 103) Las expresiones entre comillas del presente párrafo, corresponden a la Real Cédula de Valladolid,
investigadón de Steve Stem, que nos ha servido de gula en diferentes etapas de la presente de 19/7/1536 (en: Zavala, 1: 5)
investigación (Stem, 1986) 104) Presentación hecha por Juan Bemalde Mercado, en el pleito por las berras indígenas de Guayascate
(en: AHPC, 1, leg. 25, exp 4, f 177v -176r )
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Al no existir —como en el caso andino , una dependencia de las formas
productivas prehispánicas, el reordenamiento de la sociedad autóctona bajo el
Otros acuerdos indican la importancia de la producción textil en las zonas
rurales. En 1583,el feudatario Manuel Rodriguez Guerrero conviene con Diego de
sistema colonial se produce en forma rápida y definitiva, En lo económico, la Loria y Felipe de Vega —ambos vecinos de la ciudad—, que estos se encargarán
acelerada "hispanización" de la producciónque señalanlosdocumentos, expresa la de hacer labrar las sementeras y de traer en servidumbre a les indios de su
adaptación de los grupos étnicos a los nuevos cultígenos y especies animales encomienda, a cambio de la mitad de la ropa que los indígenas produzcan. Por la
domesticables que introducen los conquistadores. misma época,Juan delas Casas concierta con el residente español Rodrigo Alonso,
para que éste le administre por un año al servicio "de su estancia"; el pago se
En reemplazo de ia intermediación de los kuraka, losmecanismos que movili¬ efectuará en los productos deella: un cuarto del multiplico del ganado de yeguas,
zan a la mano de obra autóctona en la jurisdicción de Córdoba, se organizan sobre ovejas, cabras y puercos; el mismo porcentaje de las cosechas de maíz y trigo y de
la base de la fuerza compulsiva de las acciones bélicas y la autoridad de los la lana que se obtuviere; asimismo recibirá un potro, doce varas de sayal, un
yanaconas rurales. sombrero, un cordován, alpargatas y calcetas y otro cuarto más de la ropa que
mandará a hacer
La "pacificación" de un territorio, implica el inmediato usufructo de los tributos
de los pueblos de encomienda que comprende. A menudo la misma partida Además de la renta en productos elaborados directamente por los campesinos
guerrera que ha recorridola región, retorna al asiento español con algunos indios indígenas, o cosechado en sus chacras, el feudatario extrae de sus indios de
de servicio —que serán utilizados en diferentes tareas urbanas—; en tanto que en repartimiento otro tipo de beneficios. El sistema del servicio personal incluye una
el área rural, se dejan yanaconas como encargados de dirigir al grueso de los serie de trabajos y prestaciones que constituyen el sostén de otras empresas del
indígenas en la tareas del campo. encomendero, y que a menudo no implican el respeto por la inscripción terri torial
En general, los documentos de ia administración española de estos primeros de los pueblos de la encomienda. Veamos algunos ejemplos.
años, dan poca cuenta délos pormenores de la vida cotidiana en las zonas rurales. El vecino Juan de Soria se compromete por un año a poner guardias de indios
El campesinado aborigen permanece como una masa anónima que pocas veces yanaconas en las yeguas que están a cargo de Melchor Ramirez y que son del
irrumpe con nombre propio en los papeles hispánicos. Sin embargo, la intensidad menor Anton Berru; a cambio recibirá la mitad del ganado que herrare y del que
de su actividad laboral se puede seguir a través de las transacciones mercantiles
se multiplicare, más tres yeguas de vientre. Al parecer, este concierto trae sus
de sus encomenderos; y su incidencia en la economía colonial, se deduce por los beneficios al encomendero, porque un año más tarde acuerda su renovación.
beneficios que reporta el tributo a los vecinos de Córdoba.
En ocasiones, los encomenderos reciben ganado de otros vecinos para guar¬
El desarrollo de una actividad económica básica fue posible aún con un darlo en sus pueblos de repartimiento. Tal es el caso de un convenio que se firma
territorio no totalmente "pacificado", Es así como, entre 1574 y 1586,los escribanos entre Pablo de Guzman y Rafael Antonio de Palencia. Por el mismo, el primero
registran obligaciones y deudas por lana que se recibe desde Santiago del Estero, entrega diez bueyes y cinco caballos paraque losindiosde Palencia loscuiden: este
algunas de las cuales figuran en los testamentos; además de gran cantidad de último cobrará medio peso mensual por cada cabeza de ganado
pagos en ropa de algodón, lo que hace suponer a buena parte del servicio indígena
dedicado a las manufacturas textiles.
Operaciones similares son realizadas en la agricultura, utilizando la mano de
No obstante, los "conciertos" sobre administración de lasencomiendas son los obra indígena. En 1582, Diego Diaz y Gonzalo de Peralta deciden obtener benefi¬
documentos más explícitos en ese sentido, A comienzos de 1581, Juan de Burgos cios de una cosecha de maíz; para ello, el primero arrienda una chacra y Peralta se
firma un convenio con el mulato Juan Mendez, para que éste administre por dos encarga de trabajarla poniendo bueyes y yanaconas a su costa m.
años los pueblos de su repartimiento. En pago de los servicios, el mayordomo
recibirá un quinto,de lo que produzcan los indios. Según la discriminación que
figura en el contrato, Burgos recibe el tributo de esos pueblos en trigo, maíz y 105) S convenio de Juan de Burgos, en: AHPC, Reg. 1,prolocolo de 7/4/ 1581;el de Manuel Rodríguez
frijoles de las chacras, así como en lana, miel, sogas, aparejos y textiles. Pero Guerrero, en: ibíd., prolocolo de 24/3/1583; el de Juan de las Casas, en: ibíd,, prolocolo de 30/9/
además, losindioscuidandel ganado de vacas, ovejas, cabras y puercosque tienen 1583; el de Juan de Soria, en: ibid , prolocolo de 15/11/1583; el de Pablo de Guzman, en: ibíd ,
en el campo. prolocolo de 31/1/1590; y el de Diego Diaz, en: ibíd ,protocolo de 16/8/1582

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una intensificación y diversificación de la producción indígena, a pesar de que las
Noson muchaslas circunstancias en las que el maíz aparece como unproducto técnicas de cultivo no sufren una ruptura en profundidad en relación a las del
comercializable. En realidad, está destinado a ser el alimento de la mano de obra periodo prehispánico Sólo a fines del siglo XVI los documentos comienzan a
indígena de la encomienda; y como tal, es sembrado y consumido en los mismos señalar la introducción de los bueyes "de arada" en las tareas rurales, o bien la
pueblos del repartimiento construcción de algunas acequias para las sementeras.
En cambio, la ciudad de Córdoba se constituye rápidamente en un mercado en Aún cuando los productos indígenas constituyen una renta para el encomen¬
el que los feudatarios colocan otros productos, como el trigo o el ganado vacuno, dero, las prácticas hispánicas no se dirigen a invertir parte de las ganancias en el
por ser artículos de consumo normal de los vecinos españoles. Periódicamente, mejoramiento de las labores agrícolas Durante algunos años, la población rural
algunos indios de los repartimientos, o los mismos yanaconas rurales, acuden a la aborigen sostiene —sin mayores inconvenientes para los europeos—, las necesi¬
ciudad cargados con las comidas y otros tr ibutos de los pueblos de la campaña dades de consumo y las mercantiles de los vecinos de la jurisdicción.

Las pautas diversificadas de la tenencia de la tierra y la amplia variedad de


labores realizadas por el campesino indígena, ofrecen importantes oportunidades Los indígenas que son llevados a la ciudad para servicio de la morada del
mercantiles a los encomenderos que se benefician consu tributo. En ello colabora encomendero, presentan como grupo características diferentes a las de la pobla¬
también la ubicación de la ciudad en las rutas que se empiezan a organizar. ción rural No sólo porque su número es menor, sino también porque las tareas
comprenden una diversificación mayor
Por lo menos hasta 1590, el monetario figura muy escasamente como forma de
pago de los vecinos en las transacciones comerciales. Su lugar es ocupado Por otra parte, frente al anonimato del campesino indio, sus nombres aparecen
principalmente por los tributos indígenas, que se constituyen de esta maneraen la repetidamente en la documentación, oficiando de intérpretes y testigos En esos
"moneda de la tierra". Esos productos son adquiridos en la ciudad no sólo por sus primeros años del sistema colonial, la hispanización se expresa además en que sólo
moradores, sino también por los mercaderes que han comenzado a llegar provis¬ este sector indígena recepta la penetración de la evangelización
tos de efectos que no se consiguen en la jurisdicción, tales como ropa de Castilla,
vinos de Cuyo, azúcar del Paraguay y otros géneros. Las labores urbanas abarcan la atención y abastecimiento de la vivienda
europea, habitada comúnmente por la familia cercana del feudatario, y por otros
En abril de 1585, el cabildo adopta algunas decisiones para regular los tratos parientes y huéspedes Los indios varones cuidande los caballos, de la provisión
mercantiles. Designa como moneda de la tierra a la lana, al sebo, lascabras y las de agua y leña y de las huertas y chacras próximas a la ciudad; en tanto que las
ovejas, fijando sus respectivos precios: la arroba de lana de oveja de Castilla a 2 mujeres, a quienes se denominan "chinas deservido", son ocupadas en la cocina, la
pesos; la oveja, la cabra y el carnero a un peso. Dispone que el pañoy labayeta que despensa, el cuidado y confección de la ropa; aún las hay quienes son encargadas
se traiga a la ciudad o se hiciere en ella, "se mida por el lomo". En cuanto a lacomida de amamantar y criar a los hijos pequeños del español.
que se recoja, "se sacará a cada vecino lo quefuerejusticia", para venderla a los precios
que fijó la autoridad local. A los efectos de regular las transacciones, establece que Al igual que en otras regiones de América, las esposas de los encomenderos
el que comprare en Córdoba cualquier mercadería para volverla a vender, está tienen en sus manos la enseñanza de los nuevos oficios a las indígenas de servicio.
obligado a manifestarla en el cabildo, para que de ella se tome la tercera parte que Al finalizar el siglo, dos religiosos que visitan la ciudad, afirman que "las indias,
será repartida entre los vecinos;asimismo, el que traiga mercadería está obligado enseñadas de las españolas, son grandes labranderas; y asi tiene cada española treinta y
a abrir tienda durante tres días en la ciudad, para que sus residentes puedan cuarenta muchachas indias, que las ocupan en labrar y amasar y coánar y lavar y sirvense
comprar n041. de ellas con solo la comida y vestido que les dan" (107).

En las primeras décadas de! sistema colonial, los artículos del tributo y las
cantidades que figurdn en los pagos comercialesdelosencomenderos, evidencian
107) Relato de ir. Diego de Ocaña y fr Arturo Alvarez, en: "Un viaje fascinante por la América hispana
del siglo XVI" (en: Junta Provincial de Historia, 1973: 3S-34)
106) En: acta capitular de 11/4/1585 (A..C, 1: 439-440)
133
132
.

La ciudad emplea además la fuerza de trabajo indígena en construcciones de la movimiento económico, es de suponer que también los indígenas de su jurisdic¬
infraestructura urbana,a cuyo efecto el cabildo regula el aporte de cada uno de los ción son llevados a otras regiones del Virreinato y repartidos luego en lashacien¬
encomenderos Así, en 1574 establece que durante dos meses los indios que das de otras vecindades.
vengan a servir a las casas de los vecinos estén ocupados en la construcción de la
acequia; sus encomenderos tendrán la obligación de darles de comer y sólo podrán En 1587, el mismo gobernador envía al cabildo de Córdoba una provisión por
dejar para su servicio un cuarto o un tercio de los aborígenes que traigan En los la que designa como "alcalde de sacas" a Juan de Burgos. El nombramiento seacom¬
años siguientes se repiten estos tipos de prestaciones, que a veces se amplían a paña de lasordenanzas que reglamentan tal actividad.Por las mismas, se prohibe
otras tareas, como la edificación de molinos 008). llevar indígenas a las provincias del Perú o al valle de Salta sin licencia del gober¬
nador;para obtener el permiso, los aborígenes deben ser registrados ante el nuevo
No sólo el encomendero recibe los beneficios del servicio personal de los funcionario y los encomenderos deberán abonar fianzas para garantizar el regreso
indígenas; a menudo, los feudatarios favorecen con la utilización de la mano de de los indios en el plazo de un año nn>.
obra aborigen a parientes y amigos A veces, algunos actos de reconocimiento
quedan plasmados en los documentos: en 1590, Pedrode Olmedo dona a Migue!
de Ardiles un solar cercado y edificado, porque este último "leayudó mucho con sus
indios para construir su casa". En otras oportunidades, el testamento es una buena A partir de la segunda mitad del siglo XVI, el estado colonial acentúa su ac¬
ocasión para recordar ios favores recibidos; es por ello que el portugués Simón cionar normativo, reglamentando las relaciones irúerétnicas en sus nuevos domi¬
Fernandez deja 300 pesos a los indios de Alonso de la Camara; y a Rodrigo, nios. En el caso del Virreinato del Perú, las disposiciones surgen tanto de las auto¬
yanacona también de Alonso de la Camara,y a su esposa Inés,40 ovejas de Castilla ridades peninsulares, como de los mismos virreyes mJ)
"porque mean servido" fi09>,
En consonancia con este espíritu regulador, el gobernador Abreu es el primero
A comienzos déla década de 1580,se inicia una práctica que se desarrollará con —y el único durante algunas décadas—, que dispone en la Provinciade! I ucumán
amplitud en los años posteriores:la venta y el alquiler de los indígenas de servicio, un conjunto de preceptos relativos al trabajo de los indígenas, su doc trina y formas
que son llevados a otras jurisdicciones. Por esa fecha, los cabildantes de Córdoba de asentamiento.
acusan al secretario del gobernador Lerma, de haber llevado en varias opor¬
tunidades indígenasde su repartimientoy de otros encomenderos a Chile, para su Las Ordenanzas de Abreu, fechadas en Santiago del Estero el 10 de abril de
venta posterior. Aún cuando la documentación no señala muchos casos de este 1576, exponen en sus considerandos las causas de estas resoluciones: por estar
tipo, la "saca de indios" a otras regiones del Virreinato debe haber constituido una gran parte de los indios en guerra y por conquistar, porque son de "poca obedien¬
costumbre si no habitual, por lo menos bastante frecuente ni0). cia" y buscan andar por los montes y algarrobales "matándose y robándose unos a
otros", comiendo raíces y hierbas y porque no quieren sembrar comidas; por sus
Durante la gobernación de Juan Ramirez de Velazco, éste toma una serie de borracheras, idolatrías y hechicerías, en las que "no respetan hijas ni hermanas"; y
recaudos a efectos de evitar el desorden que ha habido en el territorio a su cargo paraque se Ies adoctrine y se remedienlosmalos tratos de algunos encomenderos
sobre la saca de indios a Perú y a Chile y que luego no son regresados a su asiento que no han obedecido la tasa y moderación que hizo pregonar el gobernador.
natural. En sus cartas al rey, advierte que esto sucede a instancias del comercio
interregional, particularmente el relacionado con el ganado, la cera y los cordova-
nes. Teniendo en cuenta que a partir de 15801a ciudad de Córdoba participa de ese 111) Acta capitular de 26/1/1587 (en: A.C, 1: 638-641)
112) En lo que hace al servicio personal, la Real Cédula de Monzon de Aragón, de 1563, dirigida a las
audiencias de lima, Is. Plata y Quito, reitera el mandato de una anterior; en ella se indica que los
indígenas de servido personal, deben servir a los españoles de su propia voluntad y cobrando un
salario 1.a necesidad de eliminar este sistema de trabajo, se repite en las insírucriones que la corona
108) Acias capitulares de 26/2/1574; 4/5/1577; 11/4/1582 y- 2/3/1584 (en: A..C, 1: 99, 268, 442 y 502 entrega al virrey Toledo en noviembre de 1568 Durantecinco años, este fiindonario recorre gran
respectivamente) ' parte de su distrito, "visitando la tierra"; en su transcurso comienza a dictar ordenanzas sobre el
109) En: AHPC, Reg. 1, protocolo de 19/2/1590; y lomo 14, s/d., f 303v 308r tema, que culminan con las del 6 de noviembre de 1575, tituladas "Ordenanzas para los Indios de
110) En: Acta capitular de 7/8/1585 (A.C, 1: 556-557). todos los repartimientos y pueblos de este reino del Perú" (Cfr Zavala, 1978, 1: cap Iy IV)

134 135
r
í

La primera disposición está referida al orden que deben tener los asentamien¬
tos indígenas. Indica que losencomenderos deben exigir a los indios quesereúnan Chile o Rio de la Plata;o cuando deban traer indios a la ciudad para emplearlos en
en un pueblo o dos, según su número, construyendo en el medio una iglesia con las edificaciones. Por otra parte, se les prohibe poner a trabajar a las mujeres e hijos
altares e imágenes, y cuidando de mantenerlas en buen estado. legítimos de los caciques principales de su repartimiento, y tener a sus propios
lujos en los pueblos de encomienda.
En cuanto a la organización del trabajo, los feudatarios obligarán a los indios a
sembrar cebada, trigo, maíz y algodonales para vestirse; así como a tener chacras Algunas disposiciones de estas Ordenanzas se refieren especialmente a los
en comunidad para sustentar a viudas y huérfanos del repartimiento, y para los indiosde Córd oba; como por ejemplo la de la cosecha del algarrobo, que en ese dis¬
años estériles . Se llevarán de mita a la ciudad a la décima parte de los indios varo¬ trito se realiza más temprano que en ocres partes E! precioso alimento es im¬
nes de 15 a 50 años —siempre que no exceda el número de 30— ,que se podrán prescindible para los indios de mita, caballos y puercos, ya que ei trigo y maíz no
ocupar en traer leña,yerba, ganado, cuidar los cultivos y para el servicio de casas son suficientes para el sustento de españoles e indígenas, por lo que ordena que
y granjerias . Habiendo sacado la mita ordinaria de cada encomienda, se usarán la cuando sea el tiempo de su cosecha y la justicia lo indique, vengan a Córdoba los
mitad de los indios una semana y la oria mitad a la semana siguiente, para que el indios viejos, mujeres y muchachos de los repartimientos para trabajar ocho días
tiempo que no trabajen para el encomendero se ocupen en sus propias granjerias er. recogery acarrear las vainas hasta la casa de sus encomenderos, o bien en hacer
En cuanto a la extracción de miel y cera, se hará sólo durante los meses de febrero, chacras tard fas. Agrega que, puesto que los aborígenes que quedar: en los p .i:los •

marzo y abril. api ovechan esa ocasión para robar la algarroba de los ausentes, se prohibe ese
despojo "aun cuando sea por orden delencomendero". Otro de ios articules indica que
Las indias mujeres entre 10 y 50 años, y que no estuvieren impedidas, servirán las cosas que los indios traen de las encomiendas a la ciudad de Córdoba-como
a su amo cuatro días por semana, salvo durante los meses de diciembre y enero. trigo, maiz, cebada, zapallos, melones y sandias-, se lo transporte er, cañ etas, "y
Al salir el sol se juntarán en la plaza del pueblo, al pie de la cruz, para rezar ora¬ que ¡os indios las acarren hasta las pirguas y casas, sien¡preque no estén a más dedos legues
ciones y escuchar la doctrina; y serán ocupadas en hilar y tejer hasta media hora y sea en su tiempo o semana de trabajo", ya que por cargar en sus hombroslian muerte
antes de ponerse el sol. y enfermado muchos de ellos. Por úitimo, ordena que ningún encomendero saque
indios de sus pueblos para servirse de ellos en Córdoba o para ciarlos a otra
Losmuchachosde 10 a 15 años que no vayan a la mita servirán en hacer calceta, persona sin licencia del gobernador nl3).
recoger grana, pez y algodón. Y los viejos y viejas de 50 a 70 años se encargarán de
la guarda de los algodonales, de las chacras de trigo, maiz y cebada, del cuidado En sus lineas generales, las Ordenanzas de Abreu recuerdan A asrfrüu de las
de cabras y ovejas, criar aves y hacer lozas y esteras. normas dictadas por el virrey Toledo en 1575; aunque ia ímamc de L rispos,-
dones del gobernador del Tucumáu. permiten a ios feudatarios una importante
Las actividades de administradores y pobleros —a estos últimos se los designa -
independencia de acción para extraeré! tributo de sus repartir: .lent ' i Aú ari las
como "sayapayas"—, se encuentran también reglamentadas en las Ordenanzas, Ordenanzas se convirtieron en la práctica en letra muerta
porque "son mozos montañeses que dan mal ejemplo y maltratan a los indios Su nom¬
bramiento debe ser autorizado por el gobernador; y se les prohibe algunas Hacia 1586, una sola disposición de su articulación comienza a ser aplicada en
actividades como comprar, vender o rescatar entre los indios, pedirles chaquiras, la jurisdicción de Córdoba: la referida a la reducción en pueblos de ios indígenas
cobre u otras joyas; así como tener más de dos rocines o perros de caza. Además, Sin embargo, este movimiento adquirirá verdadera fuerza recién a partir de 1590,
no podrán ocupar a los indios para cazar o para que les traigan cueros o hacerse cuando ia ciudad entre de lleno en los tratos mercantiles que se organizan con el
servir por ellos, salvo que lo indique el juez visitador. AI igual que los encomen¬ Río de la Plata.
deros, los pobleros no podrán tener sus ganados en ios pueblos de indios, porque
les comen sus sembrados. Ningún documento emanado de la justicia o de las autoridades capitulares,
P
puntualiza la aplicación de las Ordenanzas Sólo al comenzar el siglo XVII, el
En cuanto a la relación entre el feudatario y sus indiosde repartimiento, Abreu
establece que el encomendero y su familia sólo podrán ir a los pueblos con autori¬
zación del gobernador. El mismo requisito se les exige para enviar indios al Perú, 113) Las Ordenanzas de Abreu, en: Leviliier, 1920, II: 32-45

136
137
i
gobernador Pedro de Mercado de Peñaloza emite un mandamiento —posterior a r
i

su "visita" de 1598-, donde señala: que viendo "la poca posibilidad que los dichos
yndios tenían, porque generalmente son tan pobres que no tienen ninguna cosa propia, ni
ningún trato nigrangeria, niganados, niminas de ningunos metales; de manera que per¬
sonalmente la tasa que los dichos yndios pueden pagar se a de reducir a trabajo", los
encomenderos de Córdoba llevarán como tributo y servicio "aquello quepor ¡a tasa
del dicho gobernador Gonsalo de Abreu está permitido" ni4).

Illa. PARTE:

LA ENCOMIENDA CORDOBESA:
BASE DE UNA EMPRESA ESPAÑOLA PROSPERA
(1586-1610)

114) Mandamiento de 13/1/1600 (en: Acta capitular de 9/2/1600, A M., III: 15c- 60)

138
i"í" "ir ii

CAPITULO Vil
CORDOBA ENTRE POTOSI Y BUENOS AIRES

Desde 1570, el centro minero del Potosí se constituye en el principal polo de


desarrollo del Virreinato del Perú y en el motor fundamental de su economía. La
introducción de la técnica de la amalgama y las políticas instrumentadas por el

virrey Toledo orientadas a dotarlo de mano de obra indígena > aceleran el —
ritmo productivo y su crecimiento como asiento urbano

Pocos años después, Potosí ya cuenta con 120.000 habitantes, con lo que la
ciudad, además de ser la principal proveedora de metales, se convierte también en
un centro consumidor de importaciones. Su población debe ser abastecida en las
necesidades cotidianas por regiones agrícolas y ganaderas a veces muy alejadas.

La relación que une a Potosí con Lima, es claramente representativa del sistema
comercial que la Corona impone a las colonias: por el puerto de El Callao sale hacia
Europa la producción de las minas altoperuanas, mientras que el capital comercial
metropolitano introduce los artículos de importación. En tanto, en el interior del
espacio, las economías regionales proveen a ambos núcleos poblacionales de los
insumos para las necesidades cotidianas de sus habitantes, la actividad extractiva,
y los fletes que requiere la circulación de mercancías m.

1) Cfr Lewis Hanke(Hanke, 1956:1); Peter J Bakewell (Bakcwelí, 1975, passim); y Luis Miguel Glave
(Clave, 1983, passim). Indudablemente al referimos ai tema del espacio económico que genera el
Potosí dentro del Virreinato Peruano, as! como sus implicancias en el mercado interno colonial y en
la creación d e los trificos interregionales, no podemos dejar de citar la obra de Carlos S. Assadourian
(Assadourian, 1983)

141
En 1580, el establecimiento del puerto de Buenos Aires sobre el Atlántico, En realidad,la llegada del comercio atlántico encuentra a los asientos españoles
produce cambios fundamentales en la organización espacial del Virreinato, A con los recursos imprescindibles para el sustento de la ruta. Desde años antes,
partir de ese momento dos ejes comerciales confluyen en el centro minero Santiago del Estero, Asunción, Santa Fe, Córdoba y Mendoza, venían man¬
altoperuano Por una parte, la ruta Potosí-Lima y sus circuitos mercantiles teniendo conexiones comerciales permanentes que lasenlazaban con el Potosí: por
conexos, por el que discurre el comercio legal de importaciones y exportaciones; los trayectos que las unían, se desplazaban los productos regionales, en tanto que
por la otra, la ruta Potosí-Buenos Aires que, a diferencia de la anterior, engloba los artículos de importación eran introducidos por el Reino de Chile.
buena parte del comercio semiclandestino ®.
De allí que, cuando comienza lamarcha delos trajines desdeel puerto al centro
La fundación del puerto ha abierto para ios comerciantes del Atlántico minero, algunas ciudades pueden contar con una economía rural incipiente y con
-particularmente portugueses-, el camino hacia el Potosí. L,os mercaderes acuden los medios necesarios para participar y beneficiarse con el comercio a gran
ai Río de la Plata con productos de Europa,Africa y Brasil;y merced a un complejo distancia. En ese sentido, tal vez el ejemplo más claro lo constituye la ciudad de
sistema de tratos comerciales, entre 1600 y 1620, el veinte por ciento de la plata Córdoba.
altoperuana se evade por Buenos Aires

La ruta que se inicia en el puerto margina el Río Tercero por un largo trecho,
para dirigirse luego a la ciudad de Córdoba . Allí los caminos se bifurcan, ya sea a A fines del siglo XVI, la ciudad adquiere una preponderancia creciente, y se
Cuyo y Chile; o bienal norte, hacia la cabecera de la Gobernación. Desde Santiago convierte en "la puerta del Tucumán" para los tratos mercantiles.,
del Estero la travesía continúa a San Miguel de Tucumán, Salta y Jujuy, donde las
carretas son cambiadas por tropas de muías, único medio de transporte para Asentada en el piedemonte oriental de las sierras, su ubicación le permite
continuar camino al Potosí. comunicarse fácil mente a tí a vés de lasllanuras con el puerto deBuenos Aires y con
la cabecera déla Gobernación;y en sus cercanías se bifurcan los caminos que desde
Parala Gobernación del T ucumán, esta ruta se constituye en el principal sostén el Atlántico se dirigen hacia Cuyo o el Potosí.
de su movimiento comercial y le asegura la inserción en los tráficos mercantiles
ultramarinos Por otra parte, con los tributos de las encomiendas los vecinos participan en el
comercio interregional, organizan fletes e intervienen en los tratos a gran distan¬
Los artículos importados y los esclavos que entran por Buenos Aires se cia.
distribuyen a lo largo dela ruta al Potosí. En torno a ese camino se forman circuitos
comerciales más complejos, donde los productos locales se encadenan con el Lugar de paso obligado en la travesía que conduce al cerro minero,y provista
comer cio a gr an distancia Telillas, frazadas, sayales, sebos, cordobanes, bizcochos de los recursos esenciales, la ciudad aprovecha la coyuntura favorable que se le
y harinas del Tucumán, son vendidos en el puerto de Buenos Aires y en la costa presenta a partir de 1595, cuando se inicia el período de auge del eje comercial
brasilera . A cambio, los europeos de la Gobernación obtienen mercaderías impor¬ Buenos Aires-Potosí 0>.
tadas: paños y sedas de Europa, esclavos africanos, hierros, azúcar y conservas.
Ya en 1597 los beneficios de la ruta se observan en la prosperidad de los
Es indudable que el movimiento de la ruta comercial sustenta el crecimiento europeos de la región
económico de la región. También es cierto que un camino de tan largo recorrido —
más de 500 leguas desde Buenos Aires al Potosí—, requiere de una importante En ese año, las telas y ropas importadas que entran por el Atlántico, son en
infraestructura de animales de carga, víveres y mano de obra. Las pequeñas buena parte compradas por los vecinos de la jurisdicción, ya sea para uso común
ciudades diseminadas en él, son las encargadas de proveer lo necesario para él
mantenimiento del circuito mercantil.
3) La expresión 'Ta puerta del Tucumán", referida a Córdoba, es tomada deCannabrava (op. dt ).Sobre
la función de Córdoba en la ruta, dr.: Cannabrava (op. dt :73-74), fray Reginaldo de Lizanaga
2) Cfr Alice P Cannabrava (Cannabrava, 1944, passim); y Zacarías Moutoukias (Moutoukias, 1988: 1 (Lizarraga, 1909: 237-239), y caria al Rey de Gerónimo de Bustamante de 9/6/1586 (en: levillier,
y2> 1920,11:218-223).

142 143
i
de sus habitantes, o para ser revendidas en las tiendas de la ciudad o en otras negociantes y residentes del Potosí, que establecen sólidos lazos mercantiles en la
regiones. Como ejemplo de lo señalado, no falta quien, como Pedro de Mojica, región,a través de la compra de productos dela tierra, o bien de importaciones que
compre una vajilla de plata para su casa; y hasta el mismo convento de San enhan por Buenos Aires ®.
Francisco se beneficia con el auge económico, adquiriendo en España ornamentos
y libros para la Iglesia Sin embargo, las relaciones económicas que reflejan los documentos de esos
años indican claramente cuáles son los circuitos comerciales que son manejados
Ese mismo año, la fábrica de jabón del escribano y encomendero Juan Nieto por los vecinos de Córdoba: los tratos mercantiles que sus habitantes disponen y
comienza a vender sus productos en Santa Fe; Pedro Luis de Cabrera pone los administran en forma directa, se orientan hacia el puerto atlántico,
indios y materiales necesarios para la instalación de una carpintería; Tristán de
Tejeda forma una compañía con Alonso Bueso para fundar su obraje de paños en No es casual entonces que, desde 1585 y hasta 1608, elcabildo— representando
la zona de Soto; y el comerciante portugués Lope Vasquez Pestaña decide los intereses comerciales de los encomenderos—, envíe numerosos procuradores
afincarse como vecino de la jurisdicción, para que soliciten al rey la obtención de licencia para comerciar en esa dirección
En todos los casos, la propuesta es utilizar a Córdoba como centro de contratación
Reflejando cabalmente los intereses de la región en el año citado, otro enco¬ con ultramar y como lugar de paso hacía Chile y Charcas
mendero, Gabriel García, compra el navio Nuestra Señora de Ayuda, que se
encuentra en Buenos Aires cargado con 200 hanegas de harinas de trigo cernidas Como el virrey ha ordenado que por la ciudad no debe pasar metálico hacia
y encostaladas; y pocos dias después organiza una compañía de flete con el España o e! Brasil,las peticiones del cabildo insisten en que por el puerto de Buenos
feudatario Rodriguez de Ruescas Este, como capitán del navio, se compromete a Aires, se permita "comunicar los frutos de la tierra con el Brasil y Angola y traer en
ir a Brasil y Angola, o "a donde convenga", con 1.500 hanegas de harina para retorno ropas y esclavos". Algunas instrucciones son más precisas: sus portadores
trocarlas por mercaderías, que luego serán beneficiadas en RtiGrios Aires y en deben informar al rey sobre los daños que reciben los vecinos con la entrada de
Córdoba H>. mercaderías por el Perú, debido a los altos precios en que se venden; y que Buenos
Aires, al carecer de comida y sustento, debe valerse del Reino de Portugal, En
El auge de la r»£ nada el Potosí hace que el trato mercantil se transforme en cambio, si el rey permitiera entrar por ese puerto 50.000 ducados por año en
ülf?. p ¡acuca cotidiana, de la que participan vecinos y transeúntes de nuestra mercaderías para gastar y consumir solamente dentro de las Gobernaciones del
ciudad. La actividad de los notar ios es permanente, registrando arreglos comer¬ Tucumán y del Paraguay, éstas podrían ser pagadas en mantenimientos de la
ciales y poderes, y dando fe de relaciones económicas que involucran a habitantes tierra, "que hay muchos y carecen de ellos los reinos del Brasil,,",
de todo el Virreinato
Los tratos comerciales dela ciudad con la costa atlántica, indican que los frutos
La preocupación constante de los europeos de la jurisdicción, es asegurar la de la tierra a que hacen referencia las instrucciones son harinas de trigo y
continuidad de la salida al Atlántico, Las razones que provocan tales inquietudes bizcochos, a los que se agregan otros bastimentos como sebos y cecinas, que son
no son difíciles de suponer: mientras la política del Estado colonial garantiza la cambiados por esclavos negros de Angola, ropa de Castilla, hierro, acero y aceite
(ó)
permanencia del Potosi como centro consumidor de impor taciones, la apertura
permanente del puerto de Buenos Aires es materia de discusión y debate por parte
de las instituciones coloniales, ya se trate de la Casa de Contratación, o de los
Consulados de Sevilla y Lima,
5) Los comerciantes potosinos aparecen en los protocolos notariales, especialmente a partii de 1590
Esa presencia se hace más notabledurantelos años 1595, 1604 y 1609,en losque se registran nombres
Ciertamente, en ese movimiento económico, uno de los polos geográficos del armo el de Ballesteros Narvaez, ensayador mayor del Potosí
eje comercial está fuertemente representado en las actas de los escribanos: son los 6) Cír, Probanzas de servicios de los vecinos de Córdoba, e Instrucciones para solicitar al rey (en:
Revista déla Biblioteca Pública de Buenos Aires, tomo III, 1881);yactas capitulares de 2/3/1592 (en:
A M ,II:281-282), 24 /11/1597 (en: A M ,ffl: 38- 40); 9/1/1598 (en:ibíd ,70-71),27/2/1604 (en: A.M.,
4) Losejemplosreferidosalañol597,en: AHPC,Reg l,protoco!osde4/10,9/4, 13/8,22/8. l/4yl6/ IV: 69-72 y 72-73); 25/2/1606 (en: ibid ,205-207); 23/4/1607 (en: ibíd :381); y 17/5/1608 (en: ibíd.:
6 de 1597 467-470)

1
144 145
¥
Si nos dejamos conducir por esos permanentes redamos de las autoridades
locales, en el sentido de obtener permisos y licencias para comerciar por Buenos

En ese marco, los encomenderos locales dueños de las zonas productivas y
de la mano de obra indígena—, aparecen como el sector más activo. Al menos
Aires, paredera que desde Córdoba el movimiento mercantil perfilara una reo¬
hasta 1610, la obtención de un repartimiento conlleva siempre la posibilidad de
rientación de los tráficos hacia el Atlántico, en desmedro de la ruta al Potosí. No
inversiones en las empresas mercantiles. Las actas notariales y los pleitos de la
obstante, la observadón atenta de los drcuitos por los que se desplazan las
época, muestran a los feudatarios como socios de los grandes comerciantes, en
producdones regionales y los artículos de importation, y la red económica que
origina la circulación de mercantías, muestran daramente los efectos de un
cuyas compañías participan aportando la producción de sus repartimientos.
eslabonamiento cuyos polos geográficos son Buenos Aires y el Potosí. En ese Los "productos de la tierra", que permiten a los vecinos la obtención de otras
eslabonamiento, cada región busca combinar su rentabilidad, de acuerdo a los
beneficios y a los ritmos del eje comercial.
mercancías y de metálico, pertenecen en todos los casos a los rubros que se
incluyen como tributos de los pueblos de encomienda. A ello debe agregarse que,
La rentabilidad de Córdoba, asentada en los excedentes rurales de sus en¬ mediante el sistema del servicio personal, el feudatario utiliza la fuerza laboral
comiendas y en su participación en los tráficos comerciales, depende de su ligazón indígena, obteniendo importantes benefidos al evitar esos gastos de production.
con Buenos Aires. Para los vecinos, la llave de "la puerta del Tucumán", está
depositada en el puerto atlántico. Aún cuando no encontremos en Córdoba las grandes encomiendas peruanas
del siglo XVI, los vecinos españoles reconocen insistentemente las utilidades que
De allí que la persistencia del movimientomercantil que se establece a partir de deja la posesión de una encomienda local
¡a fundación del puerto —al margen de las licencias circunstanciales, o de las
prohibiciones y "permisiones" reales sobre la introducción de productos importa¬ Por ello, desde sus cargos en el cabildo, los feudatarios envían continuas
dos—, hace que la voluntad y losintereses económicos de los vecinos de Córdoba, súplicas a la autoridad real para que alargue una Vida más las encomiendas,
se dirijan a asegurar y mantener la ruta del Atlántico (7). porque—argumentan—,"son depoca consideración" y "loshijosy nietos defundadores
quedan muy pobres". Es de hacer notar que tal tipo de reclamo, va siempre unido a
las diligencias para poder comerciar los rentables frutos de la tierra por el puerto
de Buenos Aires ®

El sector social más activo: los encomenderos. Este interés "oficial", se suma a otras inidativas particulares de los encomen¬
deros, tendientes a conservar e incluso a aumentar esas mercedes reales Durante
los años de auge del comercio atlántico, son particularmente numerosos los
La búsqueda de las relaciones mercantiles que son controladas directamente poderes que firman ante el escribano, para que otro vecino "recoja" los indios de
por los habitantes de la región, nos descubre la paulatina formación de una su servido, pida restitución de los mismos ante el gobernador, o bien contradiga
sodedad compleja, que no se sintetiza en la sola explicación del incentivo del cualquier posesión que se pretenda sobre sus encomendados w.
Potosí.
En otros casos, los interesados suelen comprometerse a pagar sumas de dinero
La forma y el dinamismo con que el distrito partidpa en el movimiento por una gestión exitosa ante la Corte. Abogados, clérigos y viajeros que se dirigen
económico regional,nos obliga a prestar atendón a su estructura interna, en lo que hacia Madrid, son los encargados de diligenciar las mercedes Entre los solicitan-
ésta tiene de específico

7) Sobre la permanencia de los tráficos comerciales a través del puerlode Buenos Aires en este período,
cfr Cannabrava (op rit :57-59 y 83-85); Jorge Gelman {Gelman, 1980: cap, 2); y Raúl Molina (Molina, 8) Las solicitudes en ese sentido, son numerosas; la mayoría de ellas figuran en las actas capitulares,
j : 1966, passim) Ya se trate de comercio de contrabando ode comcrdo legal, las actividades mercan¬ como por ejemplo: las de6/5/1589 (en: A.M., II:117-118);5/12/1589 (en: ibíd :151-152); 13/3/1604
tilesque se desarrollan en Córdoba,no dejan entrever ninguna diferencia sustancial entre ambas. L.os (en: AM, IV: 72-73) y 17/5/1607 (en: ibíd :467- 470).
tratos y contratos que secanciertan reflejan siempre la misma tranquilidad, tal como lopresenta para
el puerto de Buenos Aires la investigación de ¿carias Moutoukias (Moutoutóas, 1988: cap. IV)
.
9) Cfr AHPC,Reg, 1, protocolos notariales de 28/11/1594, 2/9/1600 (tomo 13), 18/3/1601 (tomo 14)
y 15/9/1605 (tomo 18)

i 146 147
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' ' 4S», Cs- «
r
I tes figuran nosólo encomenderos, sino también comerciantes como Lope Vasquez
Asi sucede con Miguel de Ardiles, cuando recibe en donación dos chacras por
Pestaña y sacerdotes como el Obispo Fray Femando de Trejo.
parte de Pedro de Olmedo, quien reconoce que lo hace por favores que aquél le
otorgara; entre o tros, haberle dado "lodos los peones deindios e indias para los edificios

En 1607 cuando la declinación de la población indígena deldistrito comienza .
de mi casa " fl2).
a evidenciarse en el rendimiento decreciente de los tributos de los repartimien¬
tos—, el feudatario Pablo de Guzmán se obliga a pagar al abogado Diego de Los funcionarios tampoco escapan a la tentación de manejar con discrecionali-
Lasartey Molina, la suma de 2,000 ducados de a once r eales —para lo cual hipoteca dad a los indígenas de otros repartimientos. El mismo gobernador Francisco de
las casas de su morada—, si obtiene para él alguna merced. Guzmán esgrime para Barrasa y Cardenas, es acusadode haber quitado los indios a un encomendero n3).
ello, el haber sido hijo de un gobernador de Popayán, Tierra Firme y Cartago En el año de 1600, el feudatario Juan de Burgos efectúa cargos al teniente de
gobernador Antonio de Aguilar Vellida, por haberlo despojado de los indios del
Poco después, otro encomendero, Alonso de la Camara, se dirige a España con pueblo de Cocoyanta, cuando éste los entregó a Diego Rodriguez de Ruescas en
el encargo del cabildo de conseguir para todos los vecinos y pobladores de retribución por haberlo hospedado en su casa n4).
Córdoba, el beneficio de alargar a tres vidas las mercedes de indios. Aún cuando
no obtenga ese privilegio para toda la ciudad, recibirá 2.500 pesos si logra una en¬
comienda para su pariente Tristán de Tejeda no).
A comienzos de 1607, el gobernador del Tucumán, Alonso de Rivera, informa
Los vecinos saben que su reciente prosperidad se basa en el usufructo de los al rey:
repartimientos Esa percepción se manifiesta en el celo queponen en los conflictos
que surgen con los europeos de otros distritos, poi la posesión de la mano de obra "...La ciudad de Córdoba, por la misma orden, tiene 60
indígena. vecinos con 4.II3 indios, uno con 500, y tres de a 200, y cinco
dea 100;y losdemos que hayparaabajo,y algunos dea veinte,
Las rivalidades son más habituales en tomo a los pueblos de indios próximos veinticuatro, veinticinco y mas y menos.. " GSl
a La Rioja y San Luis. La estrecha relación étnica de los indígenas de esas
jurisdicciones con los de la zona occidental de Córdoba, y la práctica hispánica de Por entonces, de los sesenta vednos que menciona el fundonario, alrededor de
las malocas, contribuyen a agudizar y a complicar las disputas (11) veinte conforman el sector de los viejos conquistadores y encomenderos de los
primeros años. Sus nombres se repiten constantemente en los cargos del cabildo y
T al como ocurre en otr as regiones del Virreinato, mientras persiste la rentabili¬ en los actos comerciales: Tristán de Tejeda, Alonso de la Camara, Baltasar
dad de la fuerza de trabajo indígena, todos los sectores sociales coinciden en el Ferreyra,Pablo de Guzmán, Miguel de Ardiles, los Mojica, los Soria, y Juan Nieto,
interés de acceder a su usufructo Encomenderos y funcionarios obtienen adhe¬
siones y contrapresíadones, medianteel traspaso permanente o temporario de los
servicios laborales de los indios de repartimiento.
12) AHPC, Reg 1,protocolo notarial de 19/2/1590
13) AHPC, Reg 1,protocolo de 10/6/1606. La acusación corre por cuenta de Leonor Ponce, redamando
10) AHPC, Reg 1, protocolos notariales de 28/2/1601 (tomo 14), 26/2/1601 (tomo 14), febrero 1601 los indios de su primer marido, Pedro Mendez de Sosa
(tomo 14), 20/2/1607 (tomo 19) y 24/4/1609 (tomo 21) 14) AHPC, escr. 1,leg 10,exp 6. Pocos años después, otro teniente de gobernador, Abreu de Albornoz,
11) Los conflictos derivados de las malocas de los vecinos de Santa Fe son de vieja data (Cfr acta deposita en Ludano de Figueroa siete indios forasteros, "para que se sirva de ellos" (en: AHPC, Reg
capitular de 21/8/1588, en: AM,!1: 51-52). Lo mismo sucede con los de Santiago del Estero (en: 1, protocolo de 29/5/1607)
AHPC, Reg 1, protocolonotarialde9/ll/1600, tomo 13). Defecha más próxima,son las rivalidades Dela misma manera, enun pleito que Diego de Loria Carrasco entabla contra PedroLuis de Cabrera,
con los habitantes de la recién fundada ciudad de La Rioja (en: AHPC, Reg, 1, protocolos notariales redama porque no se atienden sus solidtudcs, ya que el demandado es teniente de gobernador de
del0/7/1594,ll/10/1599y28/l/16G4) Encuantoalospleitoscon5anLuis,losveánosdeCórdoba la dudad, y el alcalde Gaspar de Medina es "uña y carne" con Cabrera (en: AHPC, esa. 1,leg 5, exp.
reclaman porque desde esa jurisdicción se llevan indígenas a Chile para sacar oro y venderlos (en: 1) Estas prácticas son analizadas también por Steve Stern para el actual territorio del Perú (Stem,
acta capitular de 17/12/1597,A.M ,11: 56-59); Real Provisión de la Audiencia de La Piata de 14/1/ 1986: 161)
1604(en:!EA,nro 3318); AHPC, Reg l,protocolonotarialde5/10/1604;yAHPC,escr,l,leg 16,exp 15) Carta del gobernador del Tucumán Alonso de Rivera al rey, de 19/3/1607 (en: Segreti, comp ,1973:
1n
38-40)

148 149
entre otros Todos han constituido diversas empresas comerciales cuyas bases se un matrimonio aborigen, nos señala los mecanismos y las normas que benefician
asientan en tierras para ganadería, chacras de cultivo, talleres artesanales, tributos al grupo no encomendero, para acceder a esa mano de obra.
de sus repartimientos, y cargos administrativos en el gobierno local.
En él, Andres de Contreras reclama al feudatario Juan de Belmonte la resti¬
El resto de los vecinos son encomenderos nuevos, que no participaron de los tución de la india Catalina, "tomada en 1a guerra". En su presentación, se considera
desvelos de la conquista del territorio; entre los que se cuentan los hijos de los a sí mismo un "soldado sin feudo", porque "es uso y costumbre que el servicio que tienen
viejos feudatarios, sucesores en segunda vida de las encomiendas de sus padres, los soldados son lodos adquiridos con Ja conquista y paqificagion de los naturales en
ÿ

quienes a veces también logran otras cédulas de mercedes de indios. tanto que "las encomiendas quesehazen en nombre de Su Magestad, con señalamiento de
pueblo y cagique, son los que se yntitulan vezinos encomenderos",
Este grupo nuevo está consÜtuído ensu mayoría por el sector social surgido del
flujo de europeos llegados a fines del siglo XVI. El mecanismode redistribución de Merece destacarse que, cuando Contreras utiliza el término "soldado", no está
¡os servicios laborales indígenas y de las tierras del distrito, se ha efectuado haciendo referencia a un militar profesional. En la jerga de la época, se designa de
fundamentalmente a través del matrimonio con viudas e hijas de encomenderos esa manera a todos aquellos que habiendo participado en los afanes de la
06}
conquista, "quedaron sin premio". Son los nietos o parientes cercanos de los
europeos sin derechos sobre los repartimientos de sus familiares, los artesanos y
Estos feudatarios, ayudados por una mejor coyuntura económica, emprenden los oficiales, quienes carecen de los bienes habituales que poseen los vecinos
con rapidez las acciones necesarias para poner en movimiento los beneficios y reconocidos: tierras y mano de obra indígena
tributos de sus encomiendas. Tal es el caso de Pedro García quien, por su
casamiento con Ana Bautista, obtiene losindiosde Calamuchita que antes pertene¬
cieran a su suegro Juan Bautista Noble; o el de Gaspar de Quevedo, quien accede En general, casi todos los gobernantes del Tucumán se preocupan por la
por iguales mediosalos indígenas que antes fueran deAntoniode Aguijar Vellicia; situación de estos "soldados sinfeudo", para quienes "elservicio deindios eraadquirido
o el de Juan Franco, que en los primeros años del siglo XVII se introduce en el con mucho trabajo "El mismo Gonzalo de Abreu provee una ordenanza en su favor,
comercio interregional,gracias a la encomienda que le liega a través de su esposa, indicando que cuando lasindias de serviciodelossoldades se casencon indígenas
viuda del conquistador Pedro de Candia n7). de encomienda, el matrimonio debe pasar a residir con el amo de la mujer .Unos
años después, el gobernador Ramirez de Velazco dicta otro mandamiento, por el
Hasta aquí hemos mencionado al grupo de vecinos encomenderos, integrado que hace merced a losvecinos y moradores de la ciudad de los indios que trajeren
por aquellos que participaron en la conquista del distrito en la primera década de de la guerra, en calidad de yanaconas; y manda que ninguna justicia ordinaria los
la fundación de la ciudad; por sus hijos, herederos en segunda vida; y por los pueda despojar de ellos a título de repartimiento vaco
nuevos feudatarios que adquieren ta! condición a través de alianzas matrimonia¬
les Basado en esas normativas, Andres de Contreras requiere la devolución de la
india Catalina y de su esposo, aún cuando ambos pertenezcan a un pueblo de la
Sin embargo, los privilegios de ese sector no implican para el resto de la encomienda de Juan de Belmonte,
sociedad hispánica la privación absoluta del acceso a los servicios laborales
indígenas. A comienzos del siglo XVII, un litigio judicial en torno a la posesión de Cuando el territorio se encontraba aún en vías de pacificarse, Contreras había
estado al servicio de Gonzalo de Abreu en las guerras y conquistas Pero, como
tantos otros, pasó a formar parte del grupo de los que "quedaron sin premio"; es
decir, sin una cédula de encomienda "con señalamiento de pueblo y cacique"
16) El mismo cabildo se preocupa por enviar una caria al rey, agradeciendo la designación de Mercado
de Peñaloza como gobernador, pues "de seis repartimientos que en esta tierra han vacado en su Posteriormente,su participación en las malocas le haceobtener el reconocimiento
tiempo, se han encomendado con mucha acetacion, pues ha sacado de las personas en quien los del gobernador Pedro de Mercado de Peñaloza De esta forma, a través de una
i encomendó mas de diez mil pesos oro, con que ha casado huérfanas de conquistadores allegados a encomienda de yanaconas, Contreras adquiere legalmente la posesión de seis
} parentesco de los vacantes" (en: acta capitular de 9/1/1598, A M„ III: 72) . muchachos indios conseguidos en esas incursiones, entre los que se encuentra la

iI 17} AHPC, Reg 1, protocolos de 11/n /1600, 21/7 y 19/12/1603, y 2/9/ 1602

150
india Catalina.

151
i:
í

Amparado en lascitadas Ordenanzas de Abreu, Contreras reclama también al


esposo de la indígena, de nombre Juan Calpíchilin; quien aunque pertenece a la Igual celo demuestran ante los gobernadores, cuando estos disponen el orden
encomienda de Belmonte, debe pasar a residir con su mujer, por ser ésta del que se ha de tener en la sucesión en segunda vida de los feudos. Ante esto, los
servicio de un "soldado sin feudo". Como lasordenanzas son claras en este sentido, vecinos peticionan para que se guarde la costumbre local,en el sentido de que sean
el teniente de gobernador manda traeral matrimonio indígena para ser entregado los tenientes de gobernadores quienes pongan en posesión a los herederos, ya que
a Andres de Contreras no'. "los tributos de las encomiendas es guardar ganados y hacer sementeras, por lo que al
cambiar de dueño se perderían y dejarían en necesidad a los sucesores" Q0).
Esindudable que los habitantes europeos de Córdoba reconocenuna jerarquía,
según sea el tipo de encomienda y la forma de obtenerla. Por una parte,los vecinos Entre los años 1586 y 1610, proliferan ¡as dejaciones de encomiendas ante el
feudatarios, poseedores de cédulas "con señalamiento de pueblo y caciijue"; por la escribano público La mayor parte de ellas corresponden a losconveniosde dotes
otra, los "soldados que quedaron sin premio", peroque han podido recibir en merced Habitualmente, el padre de la esposa es quien renuncia a la posesión de un pueblo
a los indios obtenidos en las malocas en calidad de yanaconas. o de grupos de individuos, que inmediatamente, y a través de una nueva cédula
otorgada por el gobernador, pasan a manos del yerno. La importancia económica
En la estructura interna de la sociedad, son los nombrados en primer término que se le asigna a ese bien productivo, se manifiesta en las obligaciones que
—los vecinos feudatarios—, quienes se encuentran en mejores condiciones para contraen los donantes, en caso de no poder efectivizarse la nueva merced. Por
participar activamente en la expansión mercantil de la época. ejemplo, T ristán de Tejeda y su hijo mayor hacen dejación del pueblo de Macha,
para ser encomendado al general Manuel deFonseca Contreras por su casamiento
Constituyen un sector interrelacionado por los matrimonios y los acuerdos con Leonor de Tejeda; y en la misma acta notarial se consigna que, en caso de no
comerciales; y durante la época de auge del sistema de encomiendas, en el interior-
poder obtener la encomienda, Contreras recibirá la suma de 4.000 pesos de plata
del grupo circula el bien productivo más apreciado: la mano de obra indígena.
corriente G1).
Los mecanismos utilizados para la distribución de esos servicio laborales son
fundamentalmente dos: los arreglos que acuerdan entre las partes litigantes Muchasde esas dejaciones ocultan un acto comercial. En 1601,Antonio Pereyra
cuando se trata de pleitos por encomiendas, y las dotes matrimoniales. r econoce haber concertado con su yerno Mar tin de Salvatierra el traspaso de su
encomienda, como dote para su hija; mientras Salvatierra se obligaba a "dar y
En el caso de las disputas judiciales sobre repartimientos de indios, los vecinos pagar" 1.500 pesos 021.
feudatarios de Córdoba toman numerosas iniciativas para que el poder de
decisión quede en el ámbito de la jurisdicción. Es así como reclaman que los Al margen de laestricta normativa, los vecinos feudatariosencuentransiempre
gobernadores no concedan mandamientos sobre posesión de encomiendas sin las vías necesarias para retener en sus manos el poder de decisión sobre la
citar a las partes; o bien solicitan que el teniente de gobernador tenga facultad de distribución de la fuerza laboral indígena Como en esas prácticas noson ajenas las
conocer en dichos pleitos hasta concluirlos . De hecho,las numerosas transacciones autoridades de la región, en 1608 una Real Cédula ordena a la Audiencia de La
que se pactan sobre los litigios, depositan la decisión final de los juicios en manos Plata que informe sobre los traspasos de indios hechos por los gobernadores del
de los mismos encomenderos n9). Tucumán, en contra de lo que el rey tiene proveído. Varios años después, la
Audiencia responde al Consejo de Indias que "los casos son muy pocos" y que fueron
entregados al visitador Francisco de Alfaro, para que junto con la visita a esa
18) Sobre el uso del término "soldado", cfr Lockhart, 1982, 178 y ss. El pleito de referencia, en: AHPC, provincia, averiguase e hiciese justicia
escr 1, leg 12,exp 6,delañol601 LasOrdenanzasmencionadas,sondefcchal2/12/1579, incluidas
en ese pleito; y el mandamientodel gobernador Ramirez de Velazco, en: acta capitular de 14/1/1588
{en: AM, II: 18-19}
19) Presentación hecha ante el gobernador Ramirez de Velazco, por el procurador de la ciudad, de 13/ 20) Mandamiento del gobernador Hernandode Zarate, de 28/5/1593, y pedido del cabildo para rever
8/1586 (en: ANB, Expedientes Coloniales, 1600, nro 2); y comisión del mismo gobernador de 18/8 / el mandamiento, de 11/1/1594, en: acta capitular de 4/1/1594 (en: A M ,II: 339-344)
1588 (en: A M ,II: 53-54)
21) AHPC, Reg 1, protocolo de 6/1/1598
En cuanto a las transacciones sobre pleitos de indios, los protocolos notariales registran un total de
35 entre los años 1586 y 1610 22) AHPC, esa 1, leg 12, exp 4

152 1.53
p
Tal vez, a manos de la Real Audiencia no había llegado la información de que Al parecer, los viejos entusiasmos delos conquistadores, sólo se despiertan con
sólo en el año de 1605, en la jurisdicción de Córdoba, se habían efectuado veintidós la certeza de una "noticia" que les puede asegurar metales preciosos y mayor
dejaciones, que implicaban otros tantos traspasos de encomiendas03'. abundancia de servicios laborales indígenas. Es evidente que en esta nueva
coyuntura, los vecinos de Córdoba se sienten más cómodos en su papel de
En el único aspecto en el que los vecinos encomenderos han perdido algo de su encomenderos comerciantes, que en el de soldados. Ese interés colectivo por
independencia, es en lo relativo a la autoridad del gobernador de la Provincia. acceder y disponer deindios de repartimiento,los lleva más de una vez a soportar
situaciones incómodas.
A partir de 1586, con la asunción de Juan Ramirez de Velazco, la ingerencia de
estos funcionarios comienza a hacerse notar a través de disposiciones, nombra¬ A comienzos del siglo XVII, vive en la recién fundada ciudad de La Rioja Doña
mientos en el cabildo local y visitas personales que realizanal distrito de Córdoba. Juana Bazán de Pedraza, viuda del capitán Baltasar Dávila Barrionuevo, quien
había estado en la conquista y población de la ciudad, llegando a ser teniente de
Ya en 1588 se produce la primera escaramuza entre los encomenderos y el gobernador de esa jurisdicción.
gobernador, cuando aquellos —desde sus cargos capitulares— ,se niegana recibir
a Gerónimo de Bustamente como Tesorero de la Real Hacienda. La autoridad de
Ramirez de Velazco no se hace esperar, y los alcaldes del cabildo son conducidos Doña Juana ha heredado de su esposo una encomienda situada en Valle
en prisión hacia Santiago del Estero Q4). Vicioso. Y aunque en vida de su marido era "corona y espejo de mujeres en honra y
suerte", sus bienes han atraído al comerciante portugués Gomez de Acosta, con
A partir de entonces, las osadías de los feudatarios se circunscriben a oponerse quien vive "públicamente amancebada", con gran nota y escándalo de la sociedad
a toda medida que implique distraerlos de la atención de sus repartimientos, o a riojana.
recortar el poder de decisión sobre la distribución de la mano de obra indígena.
Por entonces, en laciudad de Córdoba, el Alférez Agustín Ruiz de Castelblanco
De esta manera, cuando el gobernador Ramirez de Velazco ordena levantar también acaba de enviudar. Durante años ha sido tutor delos hijos de Catalina de
una información sobre "la noticia del Valle de Talan y Curaca", el cabildo solicita al Cabrera —su esposa fallecida—, y por lo tanto ha manejado la rica encomienda de
rey que permita al funcionario realizar los aprestos para ir a este descubrimiento. Guamacha, que fuera del difunto Blas de Peralta. La muerte de Catalina de
El valle estaría ubicado a 70 u 80 leguas de la ciudad de Córdoba, hacia el Estrecho, Cabrera deja a Ruiz de Castelblanco sin el repartimiento de indios,cuyos herederos
"tierra muy poblada de indios y de mucha riqueza", y como "se ha renovado la noticia en segunda vida son los hijos del mencionado Peralta. Tal vez sea por eso que el
grande que tenemos de los Cesares -Ios soldados de esta ciudad y de la Gobernación están Alférez -quien posee experiencia en esos asuntos—, fija su atención en la viuda
animados a ir a descubrirla" c®.
Juana Bazán de Pedraza.
En cambio, cuando poco después el mismo gobernador pide al cabildo de
Córdoba el envío de 10 vecinos y 10 soldados con aviamentos, armas y pertrechos Se inician entonces las trata tivas matrimoniales;y en demostración de su buena
para la conquista y población de La Rioja, los feudatarios solicitan que suspenda voluntad, Ruiz de Castelblanco paga 1.500 pesos de deudas que ha contraído la
el apercibimiento, ya que muchos de los soldados están ocupados fuera de la encomendera riojana, y hace otros gastos de su propia hacienda. Sin embargo,
ciudad en el servicio de las haciendas de los encomenderos Q6). cuando llega a La Rioja con intención de casarse, un amigo lo entera sobre cómo
Gomez de Acosta "tenía difamada la casa"; y hasta el mismo portugués se encarga
de dar muestras "de su entrada" en la vivienda de Doña Juana.
23) Copia de carta de ia Real Audiencia a! Consejo de Indias, de 20/2/1613 (en: ANB, Expedientes
Coloniales, 1613, ruro 1181) Las dejaciones mencionadas, son las que se registraron en ese año en los
protocolos notariales Los resultados son desastrosos para Agustín Ruiz de Castelblanco: no sólo
24) Acta capitular de 28/6/1588 (en: AM, II: 31-35) pierde los 1.500 pesos que había desembolsado para pagar deudas ajenas, sino que
25) Información de serviíios del capitán Mejla Miraval, de 17/8/1591 (op cit.); y carta ai rey de 26/11/ también su lance es conocido en las otras ciudades de ¡a Gobernación y ios ecos
1589 del cabildo (en: A M ,II: 146-148) llegan hasta la Real Audiencia de La Plata m.
26) Adas capitulares de 12/6/1591 y 26/1/1592 (en: A.M., II: 232-235 y 263-269).

154 155
V

A pesar de esta circulación de las esposasy de las dotes, no todo son requiebr os de los excedentes que son dirigidos hacia la costa atlántica. Desde Guanusacate
en la vida de las encomenderas viudas. El tercer esposo de Ana Cavallero, quien hacia el norte, las tierras poseen ganado, trigo, y otros mantenimientos; y otro
al momento de su matrimonio "no tenia bienes ninguno", marchó hacia el Perú tanto sucede en los valles del oeste.
llevando más de 7.000 pesos de la feudataria en ganado, carretas, sobrecamas y
sayal , Tiempo después, y al momento de hacer su testamento, la encomendera aún Estos cambios en la distribución del hombre y de su actividad productiva son
recuerda que desde entonces "elfulano" no había regresado a "hacer vida conmigo", el resultado del dominio efectivo que los españoles tienen sobre el territor io y de
y tampoco había tenido noticias de sus bienes. Como es de suponer, el documento las características de la estructura colonial en la región En ese marco, ias formas
no hace referencias a las virtudes estéticas de Doña Ana c5l que adquiere la tenencia de la berra en las zonas rurales, tiene una importancia
fundamental.
Visto desde la "república de indios", ese interés colectivo por acceder a la mano
de obra indígena, aparece como una vasta red de solidaridades hispánicas, en la La atribución social del espacio que los conquistadores pusieron en prácbca
que participan funcionarios, encomenderos, artesanos, comerciantes, soldados y desde los años iniciales de ia fundación de la ciudad, no ha variado en sus líneas
hasta la misma Iglesia. generales La mayor parte de los habitantes europeos posee —en merced o por
compra— solares en la ciudad, cuadras de riego próximas al emplazamiento
No obstante, en el interior del grupo feudatario, buena parte de los conflictos uibano, y chacras junto al río de San Juan. Esas posesiones fueron trazadas,
gira en torno a los servicios laborales indios . Esto es así porque los vecinos de la amojonadas y otorgadas por los primeros tenientes de gobernadores de Córdoba
jurisdicción de Córdoba que pueden adaptarse mejor a las fluctuaciones y a los
ritmos de la expansión del eje Buenos Aires-Potosí, son los queposeen el usufructo Dentro del sector europeo, los feudatarios disfrutan además de la tenencia y el
de los pueblos de encomienda más importantes c,). usufructo de las cierras de sus repartimientos. Casi sin excepción, cada punto
productivo del distrito está asociado a una encomienda. Sus beneficiarios se han
convertido en prósperos empresarios, que orientan el trabajo de la mano de obra
indígena e indican la utilidad que deben dar las berras que alguna vez fueron de
los aborígenes contenidos en sus cédulas de encomienda

A fines del siglo XVI, la propensión de los feudatarios a establecer haciendas


La tenencia de la tierra. dentro de ios límites geográficos de sus repartimientos, se acentúa y amplia. Cada
vez más, la encomienda es una via segura para obtener las zonas más aptas para
ia agricultura y la ganadería aC).
Hacia fines del siglo XVI, la geografía económica de la jurisdicción de Córdoba
ha variado en sus rasgos esenciales; en especial, si la comparamos con la de dos
décadas atrás. 30) Los investigadores han abordado ias relaciones entre encomiendas y propiedad del suelo, poniendo
el acento en diferentes enfoques sobre el tema
En el decenio que se inicia en 1940, los trabajos de Silvio Zavala y Lesley B Simpson, definieron la
Las zonas agrícolas se han extendido a los llanos del piedemonte oriental; allí, distinción institucional entre encomiendas y mercedes de tierras. Este énfasis colocado en los
las sementeras de los ríos de San Juan, Segundo y Tercero, pr oveen la mayor parte aspectos legales y administrativos, permitió demostrar que la encomienda como tal no implicaba la
propiedad de las tierras indígenas, ya que sólo consistía en una concesión de los tributos indios,
otorgada por la corona a conquistadores y pobladores (Zavala, 1940; Simpson, 1939-40)
james Lockhart propone, en 1969, una asociación más estrecha entre los sistemas de propiedad de]
suelo y el análisis de las diferentes modalidades historias de la organización de la fuerza bboral
indígena Para el autor, encomiendas y hadendas se presentan como el nexo que une la dudad y el
27) AHPC, esa l,teg.lO,exp 1; y leg 18,exp 1; ANB, Expedientes Coloniales, 1613, rtro 16.
ampo en el mundo ooionial, y que además utilizan las mismas formas de trabajo (Lockhart. 1969)
28) AHPC, esa. 1, leg 24, exp 2 El debate es continuado por Robert Keit, al sugerir que en tanto que la encomienda necesita de la
29) De los expedientes judiciales que se conservan, pertenecientes al período 1587-1610, el veinte por sobrevivenaa de la pobladón indígena, la hadenda requiere que ia organizaaón de la sodedad
ciento está relacionado a conflictos sobre pueblos de enaomicnda, el treinta y nueve por ciento a actos aborigen sea destruida y sus miembros convertidos en proletariado agrícola (Keith, 1971)
comerciales, el veinticinco por ciento a sucesorios y afines; y el resto a temas varios A través de estudios de asos, otros investigadores dirigieron su atendón hacia las conexiones

156 157
En efecto, toda la documentación de la época indica que esa institución provee él por el precio de 24 pesos; además, hace muchos años que los indios de Chulume
el método más sencillo para la tenencia de la tierra. La forma de utilización fueron desviados a más de 4 leguas de las fierras en litigio, son poca gente y no
prehispánica del suelo —con territorios destinados estacionalmente para la agri¬ tienen necesidad de ellas; y —
finalmente—, acusa a Manuel de Fonseca de
cultura, la caza y la recolección—, la concentración compulsiva de la población quererlas para su usufructo.
indígena a través de la reducción en pueblos, y su descenso demográfico, favore¬
cen la tendencia hispánica al usufructoy apropiación posterior delas tierras de sus Poco tiempo después, la sentencia del gobernador Pedro de Mercado de
encomendados 0,). I: Peñaloza declara nula la venta hecha a Zurita, porque en la merced de fierras que
se le hizo a Pedro de Villalva, figura su nombre "solo en el margen de la hoja". Por
Esa estrecha afinidad entre encomienda y apropiación del suelo, se expresa en último, y tal como lo solicitara su encomendero, ampara a los indígenas en la
dos litigios por tierras de repartimientos La resolución judicial de ambos conflic¬ posesión delos terrenos de Chulume. Deallí en más,ManueldeFonseca Contreras
tos, señala la precedencia de los derechos del feudatario, frente a los títulos de continuará con la tenencia y usufructo de las fierras de su repartimiento, sin ia
propiedad que puedan poseer otros vecinos españoles Q2), interferencia de otros vecinos de la jurisdicción G3).

En 1598, Manuel de Fonseca Contreras tiene la encomienda de los indios de Otro pleito que se sustancia ante la justicia local durante más de diez años,
Calamuchita, de cuyo tributo obtiene una buena cantidad de harina de trigo que descubre la situación privilegiada desde la que los feudatarios reclaman lastierras
comercializa en el puerto de Buenos Aires. de su encomienda, o el usufructo de ellas.

Enterado que junto al arroyoChulume —próximo a su repartimiento-,Alonso A fines del siglo XVI, Bartolomé García hereda laencomienda delos pueblos de
Martin de Zurita pretende instalar terrenos de labranza, recurre al defensor de Guayascate,Ischilín,Yacampis y Mocacax,ubicados en la zona norte delassierras.
menores para que en nombre de los caciques e indios de su encomienda, reclame En el primero de los asientos nombrados, su padre había reducido a los indígenas
ante ai gobernador por la intromisión de Zurita en tierras que son del pueblo de los otros pueblos; y con el tributo en trabajo que recibía de su repartimiento,
antiguo de sus encomendados. había plantado viñas, obtenía buenas cosechas anuales de las sementeras y hasta
pudo construir un molino en la región. Por ese entonces, el encomendero logra
Frente a los testigos indígenas, que insisten en que los terrenos les pertenecen) también en merced "todas las tierras de Guayascate, yndios encomendados en él, con una
Alonso Martin de Zurita esgrime títulos y explicaciones: las tierras de Chulume legua en redondo, conque deje a losdichos yndios tierras suficientes para sus sementeras"
fueron otorgadas en merced a Pedro de Villalva; su hija y sucesora se las vende a
I En 1601, Bartolomé García ha muerto, por lo que su madre y hermano, en
calidad de herederos, piden amparo sobre la posesión de esas tierras. El cabildo de
Córdoba se expide sobre la solicitud, recomendando al gobernador que confirme
sociales y económicas ende encomiendas y apropiación del suelo Sin deshechar la validez de la en la posesión a Francisca Nuñez, madre del difunto, para que tenga con qué
distinción institucional antes referida, el análisis de algunas regiones coloniales fuemostrando una alimentar a los otros hijos, dejando a los indios las tierras necesarias para su
correspondencia entre la propiedad rural y las encomiendas Los estudios de Jean Borde y Mario
Gongora en Chile (Borde y Gongora, 1956; y Gongora, 1970); los de Charles Gibson en Mexico
sustento. En los considerandos, el cabildo señala que de los Indiosde Guayascate
(Gibson, 1964);y iosdelmismoSilvio Zavala en Guatemala (Zavala,1945),indicaron queia posesión sólo han quedado "uno o dos", y que los pueblos ¡indígenas que fueron reducidos
de una encomienda facilitaba el acceso a ¡a propiedad de la tierra en ese lugar tienen fierras en cantidad en sus asientos originarios, por lo que al ser
Por último, corresponde hacer mención al trabajode JoséM Mariluz Urquijo,referido al régimen de advenedizos no tienen derechos sobre las de Guayascate, que fueron dadas en
la tierra en el derecho indiano, como marco indispensable para todo estudio sobre el tema que nos
ocupa (Mariluz Urquijo, 1978) merced a Bartolomé García.
31) 5i bien una situación semejante se da en Guatemala (Zavala, 1945), en nuestro aso el tributo en
servicio personal de los indígenas, facilita la creación de unidades de producción diversificadas en i
La encomienda, en tanto, tuvo un desfino diferente. Al quedar vaca por muerte
manos de los feudatarios La encomienda del pueblo de Quilpo, estudiada por Gaston G Doucet,es del encomendero, Juan de Torreblanca —segundo esposo de Francisca Nuñez y
ilustrativa al respecto (Doucet, 1986)
32) La precedencia de los derechos de los encomenderos a las tierras de sus repartimientos, es demos¬
trada por Jean Borde y Mario Gongora para el valle de! Fuangue (op. cit.) Algo similar plantea para
el valle de Mexico, Charles Gibson (op cit.) ,33) AHPC, esa. 1, leg 7, exp. 10; y L.M.: 107-108.

158 159
r tutor de sus hijos menores—,valiéndose de influencias ante el gobernador, hace
que éste conceda el repartimiento de los pueblos de Guayascate y Mocacax a un —por entonces encomendero de Guayascate—, "en los bienes que poseen" y a los
miembro de su propia descendencia indios de ese asiento, "en las tierras que necesiten" 04).

Aunque jurídicamente un título de encomienda no implica el derecho a la


A partir de aquí, los interesesde los antiguos feudatarios de Guayascate —que tierra, desde fines del siglo XVI las prácticas sobre su apropiación tornan incierta
ahora sólo poseen las tierras del pueblo indígena-, entrarán en conflicto con los
la distinción legal entre encomienda y propiedad del suelo
nuevos encomenderos del repartimiento,quienes pueden usufructuar la mano de
obra, pero no las tierras de cultivo. Toda par ece indicar que la encomienda otorga primacía para la posesión de las
tierras de los poblados indios, aún cuando la letra de la legislación no lo exprese
El litigio se plantea entonces entre Juan Bemal deMercado como apoderadode Estos "derechos" de los encomenderos locales, se manifiestan a menudo en las
los herederosde Bartolomé Garcia, y el defensor de menores, en representación de donaciones oventas de inmuebles ruralesrealizadas ante el escribaño público. Asi
los indígenas de Guayascate a fines de 1584, cuando Pedro de Villalva registra la donación que hace de unas
tierras próximas a Chamasacate, aclara que son tierras de los indios de la
En 1608, indios y caciques del repartimiento, inducidos por Juan de Torre- encomienda que le otorgara Lorenzo Suarez de Figueroa 0S). Basado tal vez en los
blanca, protestan por la merced de tierras otorgada a los sucesores de García. Aún mismos "derechos", unos años después otro encomendero, Rafael Antonio de
cuando el teniente de gobernador ordena que se suspenda el mandamiento de
Falencia, vende las tierras de Mismisco, junto a los pueblos de Ascochinga de su
posesión cuestionado, unos años después los indios son despojados violen¬
repartimiento, que comprenden hasta 40 hanegas de sementeras C6).
tamente de las tierras, donde ellos tenían desde tiempos inmemoriales sus casas y
sementeras En 1601,dos vecinos encomenderos se presentan ante el escribano público para
dejar asentado un trueque. Por el mismo, Alonso de la Camara entrega una chacr a
Juan Bernal de Mercado alega que el cacique y sus indios jamás han tenido a tres leguas rio abajo de la ciudad. A cambio de ello, Juan de Burgos —como
posesión de esas tierras, puesto que "solo han sido indios de servicio"; y como tales administrador de los bienesde su hijo Diego Celis de Quiroga—,cede iosderechos
asistían en el beneficio del molino, viñas, guardas de ganados y sementeras; en y acciones que éste tienesobre las tierras de Guanusacate, "como encomendero de los
tanto que su antiguo encomendero ios sustentaba haciéndoles sembrar, "sin ¡jue yndios de su encomienda y el derecho y aqion que los dichos yndios tienen e pueden tener
dello,ny de una masorcasean señores para venderlo ny darlo, sino para solo comer y no para a las dichas tierras en qualquier manera" m
otra cosa, y esto lo siembran y hazen con bueies y aperos del encomendero como los
yanaconas del Piru..." La ampliación de la producción mercantil de las encomiendas, trae aparejado
un movimiento de reivindicación española sobre las tierras indígenas.
El defensor de menores, en cambio, se muestra preocupado por los intereses
del actual feudatario y alega que al permitírsele a la contraparte estaren las tierras Por una parte —lo hemos visto en los párrafos anteriores—, la posesión de una
de Guayascate, los indios del feudo de Juan de Torreblanca se huirán a los montes encomienda permite el acceso a la tenencia y usufructo de la tierra, que se expresa
por los malos tratos que reciban en el establecimiento de haciendas del feudatario dentro de los limites del
repartimiento. Por la otra, la reducción en pueblos y el descenso de la población
Al igual que en otros juicios similares, el desenlace del pleito descubre la indígena, favorece una marcada tendencia a la apropiación de las tierras aborígenes,
precedencia de los derechos de los encomenderos sobre las tierras de sus reparti¬ mediante la obtención de mercedes que benefician a los encomenderos.
mientos, por encima de sus circunstanciales oponentes, aún cuando estos exhiban
títulos de merced sobre las mismas
34) Merceddetíerrasde6/4/1585(en:LM:143);AHPC,escr 1, leg 25,exp 4;protocolosdel8/3/1602,
En efecto, en 1611, en base a un auto de amparo del teniente de gobernador, se 7/10/1604, 4/5/1605 y 25/5/1611 {en: AHPC, Reg 1, tomos 15, 17, 18 y 23 respectivamente)
les da posesiónde las tiernas a quince indios del pueblo de Guayascate. Unos meses 35) AHPC, Reg 1, protocolo de 8/11/1584
36) AHPC, Reg 1, protocolo de9/3/1590 B mismo encomendero habla realizado una venta similar en
después, el oidor Francisco de Alfaro interviene en el litigio, en su calidad de
19/12/1589
VisitadorGeneral, mandando amparar a los descendientes de Juan de Torreblanca 37) AHPC, Reg 1, protocolo de 26/2/1601

160
161
sr
Ei apartamiento de las normas oficiales, no significa en ningún caso el descono-
cimiento de las mismas Al contrario, varias veces los litigantes hispánicos las
.
invocan en sus pleitos, o bien acusan al adversario de haberlas trasgredido. En
otras oportunidades, recurren a los antiguos derechos de sus encomendados, para
impedir la intromisión de otro español en sus tierras
En 16.39, cuando los antiguos territorios de los pueblos indígenas han pasado
a manos de los conquistadores —quienes han legalizado la posesión a través dela
obtención de mercedes de tierras—, dos españoles se disputan una heredad en el
valle de Punilla.Unode ellos, Gerónimo de Nis, alega que su título es cuatro años
más antiguo que el de su oponente, basándose en una encomienda y posterior
merced de tierras hecha por Hernando de Lerma. En tanto que el otro litigante,
Juan de Heredia, aduce que la merced que posee lo beneficia con todas las tierras
¡
CAPITULO VIII
de losindios de la Punilla; por lo cual, "basándose en los derechos más antiguos de sus
indios", su cédula es anterior a la de Gerónimo de Nis. ! LAS ACTIVIDADES ECONOMICAS DE LAS ENCOMIENDAS
Al igual que en otros pleitos de! mismo tenor, para determinar los límites de
ambas heredades la justicia local recurre a la información que pueden otorgar los
indígenas del valle. En todos los casos, las preguntas están dirigidas a definir los
mojones y linderos que las poblaciones nativas tenían al momento de la irrupción
española. En el año de 1592 muere Blas de Peralta, dejando en manos de su esposa,
Catalina de Cabrera, el manejo de la encomienda de Guamacha y Saldán
Esevidente que la administrarión local comparte elcriterio que unos años antes
expresara la encomendera de! valle de Punilla: "...porque los españoles que ayer En el testamento señala con claridad el patrimonio que ha adquirido durante
vinieron a la tierra no pueden tener la noticia ni tradition antigua que los yndios, que la los años en que desarrolló su actividad como conquistador y feudatario de
ban heredando de sus padres y abuelos" 06). Córdoba. Aunque deja sentado que su cónyuge trajo en dote la suma de 3 000
pesos ensayados, advierte que él le reconoció en arras otros 5 000 pesos, cuando
Sin embargo, en los hechos, ese proceso de acumulación hispánica, contrasta "no tenía más bienes que los indios de su encomienda".
con la total ausencia de reconocimientos a la propiedad o al usufructo de la tierra
por parte de los indígenas. i Sin embargo, al momento de su muerte posee varias propiedades. Además de
En una sociedad en que el prestigio lo da la encomienda y el éxito militar, la la casa en que vive, tiene ocho solares, una cuadra de riego, una chacra en el ancón
de Blas de Rosales, un pedazo de tierra río arriba y otra chacra en Cavisacate.
posesión de las tierras de los repartimientos es también una reafirmación del
dominio del encomendero G9). Incluye también dentro de sus posesiones a las tierras de Guamacha: tanto a las
tierras vacas de los indios de su encomienda, como a otra merced que llega hasta
la zona de Saldán.
36) AHPC, escr 1, ieg 72, exp 2 El ganado que le pertenece es numeroso: 500 vacas, 1.700 ovejas, 190 cabras, 20
39) Una carta de Jerónimo Luis de Cabrera —nieto del fundador de !a ciudad—, dirigida al "Defensor yuntas de bueyes v cinco caballos, de los cuales tres son de plaza y dos de carga.
de ta hasienda deSan Juan de Dios",lo expresa con claridad: "Señor Mateo de Matos: abiendo llegado
a Costasaca te para pasar mañaana al Rio Quarto a baser la dilijenria que tengo dicho, e sabido de una
merced que piden los padres de Santo Domingo en tierras de mi padre; y asi suplico a Vuestra —
Además de ropas y paños estos últimos le costaron 500 pesos , posee
hachas y herramientas, y las infaltables "espada y daga".

Merced, como quign tiene mi poder, lo contradiga, que hallando los títulos de dicha merced, sebera
ser dicho sitio de mi padre, porquesus tierras llegan asta la juridision de La Punta. Yasi, amigo,haga
en esto como tai, y como quien tiene mi poder, esperando rcsebirlo como de / ..?/ Lagurúiia, agosto Como los negocios que ha emprendido con ios frutos de su repartimiento
26 de 606 años. Don Gerónimo Luis de Cabrera" (en: 1EA, nro. 7220) , llegaron a feliz término, BlasdePeralta ha obtenido varios objetos de plata: unjaez
|
:
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i

i
con su bozal y campanillas, once platos de a dos marcos, dos fuentes, dos jarros, Hasta aqui el balance que Doña Catalina presenta al juez de menores. Sin
dos bacinicas, dos candeleras, una taza y un salero. embargo, es de presumir que las cuentas no fueron tan deficitarias para la
encomendera, como no lo habían sido antes para su difunto esposo.
El encomendero es hombre lector y piadoso, y entre sus bienes se cuentan diez
libros —la mayoria de fray Luis de Granada—, relativos a asuntos religiosos. En realidad, la viuda ha utilizado una práctica reiteradamente aplicada por
todos los tutores de menores de la jurisdicción: cuando llega el momento de dar
razón de los frutos y aprovechamientos que les han sido encargados, no hacen
Tal vez sea por ello que en su testamento no se olvida de incluir a los nativos
mención a los numerosos emprendimientos comerciales que han realizado con
de Saldán y Guamacha, a quienes obsequia con cuarenta ovejas para cada
ellos, y sólo se limitan a consignar el precio de los tributos. Mucho menos figuran
indígena; y tampoco a los indios más pobres de Las Salinas, que son beneficiados
en esas rendiciones, los beneficios obtenidos con el empleo directo de la mano de
con veinte pesos de lana, en retribución por haberles tomado maiz, algarroba "y
algunas menudencias", durante las salidas que ha hecho en la guerra. obra del repartimiento: ya se trate del alquiler' de indígenas, su utilización en la
guarda de ganado y en el trajín de carretas, los ingresos que dan los indios
especialistas en algún oficio, o la venta de la producción de las chacras.
Blas de Peralta deja como herederos a sus hijos legitimos: dos varones y cuatro
mujeres; y como todos son menores de edad, queda a cargo del manejo de bienes En el año de 1596, Catalina de Cabrera arregla un nuevo casamiento, esta vez
y hacienda la viuda Catalina de Cabrera con el alférez Agustín Ruizde Castelblanco, Enterado del asunto el Tesorero dela
Real Hacienda, aconseja al futuro esposo "que mirase lo que hazia, porque tornava
Cuatro años después, y ante una solicitud de rendición de cuentas del juez de mucha carga a su cargo, en razón de tener la dicha doña Catalina muchas hijas", Es
menores, la encomendera presenta un libro en el que consta el fruto que han dado evidente que la preocupación gira en tomo a las futuras dotes delas jóvenes, y no
los indios del repartimiento; y los gastos que ha tenido que cubrir', relativos al a las cuentas de la encomendera de Guamacha
entierro de su esposo, a deudas, y al mantenimiento de sus hijos y hacienda.
El alférez en un hombre avezado en los negocios. Hace algún tiempo que
Según sus cálculos, ha recogido alrededor de 1.100 pesos en costales, enjalmas recorre las rutas del sur del Virreinato, organizando fletes en carretas de su
consus cabestros y jáquimas, botijas de miel,sobrecamas, piezas de ropa,varas de propiedady mercadeando lienzo, vino, diacitrón y confituras;además, haenviado
lienzo de algodón, aparejos, calcetas de lana, varas de sayal y cumbes; todo ello, dinero a Angola con el comerciante Lope Vasquez Pestaña, para obtener algunos
tributo de sus indígenas de encomienda en los cuatro años pasados . esclavos consu procedido. Locierto es que el alférez llega al matrimonio con 2.900
pesos en bienes, y con mucha disposición para continuar con su5 negocios,
mientras se encarga de las haciendas que fueron de Blas de Peralta.
La viuda agrega a los frutos obtenidos 400 arrobas de lana y el multiplico del
ganado vacuno. Pero lo que omite incluir, son los aprovechamientos de indios y Er. junio de 1597 —matrimonio mediante—, Agustín Ruiz de Castelblanco es
carretas —que ei juez de menores estimará más adelante en 1.500 pesos— , y e!
designado tutor de los menores, En los años siguientes acude numerosas veces
productode las sementeras de trigo, maizv cebada que se cosechar; en abundancia ante el escribano público para dejar asentados ventas, contratos y obligaciones,
en el pueblo de Guamacha
que permanentemente involucran a los tributos y a la mano de obra de los
indígenas de la encomienda
Siempre según ellibrodela encomendera, los gastos que ha tenido enesos años
son sensiblemente mayores que los frutos. De acuerdo a sus cuentas, ha debido En efecto, varasde lienzo de algodón, ganadosy harinasde trigo, son vendidos
emplear más de 3 .300 pesos en el en tierra de su esposo, doctrina para los indios de a vecinos de otras jurisdicciones, Pero también el alférez se dedica con especial
su encomienda, deudas, ropa para su familia, gastos de pleitos y escribano, y dote cuidado a los fletes, en los que emplea buena parte de los beneficios del reparti¬
para una de sus hijas. A esto se agregan los gastos de vecindad — alrededor de 360 miento Las ganancias obtenidas con esa actividad mercantil, son dirigidas a la

pesos , que consistieron en pagar un estipendio a otros vecinos del distrito adquisición de esclavos de Angola para su posterior reventa; es así como sola¬
quienes, en reemplazo de su hijo menor, fueron a siete malocas que se organizaron mente en dos años, Ruiz de Castelblanco puede dedicar más de 8.600 pesos en ese
durante esos años. rubro,,

164 165
Ai igual que su esposa, debe rendir cuentas ante el juez de menores por la Es innegable que el alférez Agustín Ruizde Castelblanco se ha beneficiado con
tutoría. De loscargos y descargos pertinentes, se desprenden losdistintos tipos de el usufructo del repartimiento Tal vez por eso, a la muerte de Catalina de Cabrera,
prestaciones, con que los indígenas de la encomienda han favorecido al alférez intenta aquel matrimonio fallido con la encomendera riojana.
desde 1597 y hasta 1603
Este es unejemplo ilustrativo,que nos sirve para extraer que la posesión de una
Los pueblos de Guamacha, Saldán,Cantacalo, T ulián y Ulayon, han entregado encomienda permite obtener ganancias sin grandes costos; y que los pocos gastos
tres veces por año variados tributos en espedes, recibiendo cada una de esas de producción que deben enfrentar los empresarios-encomenderos, sólo en raras
ocasiones la denominación de "rafa". Ellascomprenderuquintalesdebrea para las ocasiones se pagan en dinero.
carretas; costales, aparejos, jáquimas y guascas para los fletes que organiza el
encomendero; varas de lienzo de algodón y de sayal, calcetas, grana para teñir las La mercantilización del tributo indígena —ya se trate de productos manufac¬
telas, sobrecamas de lana y de algodón, y piezas de ropa de indios;además de cera turados, agrícola-ganaderos, o de la utilización directa de la mano de obra en
y miel trajines y otras labores—, conduce al enriquecimiento de los feudatarios.
Otro tipo de prestación está referido a la producción agrícola: las hanegas de Apoyados en el sistema del servicio personal como expresión del tributo
trigo y de maíz —especialmente de Guamacha— figuran también en la rendición indígena, y empapados del espíritu mercantil de la época, los vecinos del distrito
de cuentas; pero el tutor se encarga deaclarar que han sido empleadas en comida dirigen el trabajo de sus encomendados, diversificando las prestaciones y la
para los indios del repartimiento, al igual que el multiplico del ganado comercialización de ios tributos
Por último, el juez de menores reclama al alférez el reconocimiento de otras En ese sentido, la encomienda que tuvo a su cargo el alférez Agustín Ruiz de
formas de prestaciones indígenas, de las que ha usufructuado el tutor: 550 jornales Castelblanco, es abarcativa de las cuatro actividades fundamentales que los
de una "mita" dediez indios, que ocupó para tapiar sus solares; el alquiler de once feudatarios organizan en tomo a sus encomiendas: la ganadería, la agricultura
indios que viajaron a Buenos Aires; el haber dado la mitad delos indiosdel pueblo comercial, la producción de manufacturas textiles y los fletes.
de Cosopan a Alonso de Coria Bohorques; el haberse servido en su casa, guarda
de ganados y trajín de carretas, de más de "cincuenta piezas deindios por día, y aveces
de más de ochenta y cien"; de servirse de tres carpinteros indígenas en aderezar sus
carretas y puertas; de haber sacado con el ganado que llevó al Perú más de treinta
y ocho indios que permanecieron allá durante dos años, de los cuales algunos La Ganadería.
murieron y otros no han vuelto; v por último, de haber ocupado mano de obra
indígena por dos años en hacer acequias para sus molinos, llevando conti¬
nuamente veinticinco, treinta y a veces hasta cuarenta y sesenta indios <4®.
De todos los sectores económicos que coexisten en el interior del espacio
cordobés, el ganadero es el único que presenta, desde sus inicios, un crecimiento
sostenido que se prolonga más allá del período colonial temprano.

40) Los documentos relativos a la encomienda de Guamacha, son los siguientes: encomienda a Blas de
Peralta, otorgada por Conzalo de Abreu en 8/5/1579 (en: iEA, nro 11,399); sucesión de Blas de
Peralta, del año 1600 (en: AHPC, esa 1, leg 10, exp 1); Agustín Ruiz de Castelblanco produce
información para justificar los bienes que introdujo al matrimonio, en 1606 (en: AHPC, esa 1, leg de la fe", "Segunda parte de la dibujen", "De oración y meditación", "Guia de pecadores", y
19, exp 22). En cuanto a los protocolos notariales en los que constan los negocios de Castelblanco, "Memorial de la vida cristiana", en dos volúmenes)
pertenecen a los años 1599 a 1606, comprendiendo en total un monto de 9 055 pesos recibidos por el B origen de los dos expedientes sobre rendiciones de cuentas por tutorías, se encuentra en un man¬
alférez en diverjas transacciones. damiento de! gobernador Pedro de Mercado de Peñaloza, de fecha 15/11/1597; por el mismo, se
los libros a que hace referencia el inventario de los bienes de Blas de Peralta, comprenden tres sin
indica que por cuanto en la Gobernación hay muchos menores cuyos bienes y haciendas están en
indicación de autor ("Pedraza ", "Unidad del mundo" y "Primera parte de ¡a vanidad del mundo"); poder de sus tutores y curadores, quienes no han dado cuenta ninguna, designa al Lie Antonio
uno perteneciente a B Toledano ("Flor Santorum"), y el resto a fray Luis de Granada ("El simbolo
Rosillo como defensor de menores españoles y naturales

166 167
Si bien el incentivo fundamental para su desarrollo es la existenciadelmercado habitualmente en las mandas testamentarias para ser donadas a los indígenas de
consumidor del Potosí, no son menos importantes las condiciones geográficas de servicio HI>.
la región, y las coyunturas internas por las que atraviesa la sociedad colonial.
A partir de la última década del siglo XVI, el ganado vacuno y el caballar
En efecto, mientras las otras actividades económicas de las encomiendas comienzan a aparecer en mayor cantidad en las cartas dótales y en los testamentos
decaen al ritmo del descenso de la población indígena, la ganadería se presenta (°
Es asi como, en 1604, Diego de Sotomayor, que se considera a sí mismo como
como una alternativa válida, en la medida en que sus requerimientos de mano de un "hombrepobre",tiene en el pueblo de Nuñosacate300 cabras y ovejas y 270 vacas
obra son sensiblemente menores. De la misma manera, cuando el hijo de Juan de Burgos va a entrar de sacerdote, su
padre le hace donación de la estancia de Sanumbasacate, a doce leguas de
A diferencia de las regiones andinas, donde después de la conquista española Córdoba, con 300 vacas, 1000 ovejas y cuatro yanaconas (43)
la cría de auquénidos continúa en las zonas de Puna, en nuestra jurisdicción las
llamas y las alpacas son rápidamente reemplazadas por el ganado europeo. Las regiones ganaderas más importantes son Guayascate, Calamuchita, el Rio
Tercero, Chibaja, Ascochinga y La Punilla Los encomenderos de esas regiones son
Elespacio de la ganadería, es el de lastierras de la encomienda. En ellas se crian los encargados de proveer la mayor parte de las 900 vacas que la ciudad entrega,
distintos tipos de ganado: ovejuno, vacuno, caballar, caprino, y porcino, Acorde en 1605, para el avío del tercio español que se dirige a Chile (W).
con los usos dela economía diversificada de los repartimientos, lautilidadque dan
es variada: alimento para la población local, medio de transporte para los fletes, Aún cuando algunas zonas posean estancias para yeguas, el distrito no se
materia prima para las manufacturas, y producto de exportación. caracteriza por la cría de ganado caballar: a veces, el cabildo debe poner estanco
sobre e! mismo, para r eservar la dotación necesaria en la ciudad (4S>. Sin embargo,
En todos los casos, el origen déla ganadería colonial se remonta a loscomienzos los precios altos de los primeros años de la conquista, van descendiendo a medida
de la conquista del territorio, siendo las primeras importaciones procedentes de que los vecinos promueven su cria y se proveen de potros originarios de las
Santiago del Estero y Chile. llanuras de Buenos Aires'46'.

La escasez y los altos precios de los primeros años, son sustituidos por una Por lo menos hasta 1610, la cría de muías tiene aún menos incidencia en la
abundante dotación de ganado que se reproduce fácilmente, y cuyos valores se ganadería iocal. Las primeras transacciones aparecen en 1601, aunque sobre
toman accesibles a medida que se aproxima el siglo XVII.
41 ) Cfr carta de dote de Isabel de Rosales (en: AHPC, Reg. 1, protocolo de30/4/l 578), y testamento de
Alonso Martínez, de 12/8/1582 (en: AHPC, esa 1, leg 3, exp 7)
42) A manera de ejemplo: la dotede ganado de María Martínez, comprende 110 vacas chicas, 400 ovejas,
100 carneros, 30 cabras y 12 puercos (en: AHPC, Reg 1, protocolo de 7/11/1599) En el recono¬
cimiento de dote de Gerónima de Abreu y Albornoz, figuran 1.000ovejas y 300 vacunos (en: AHPC,
Favorecidos por la dispersión territorial de sus repartimientos y mercedes de Reg 1, tomo 14, protocolo de 2/2/1601); el testamento de Fabian Maidonado, señala que posee en
su estancia de Cantamala 60 bueyes carreteros, 100 yeguas, 800 ovejas, vacas, y 115 puercos (en:
tierras, los feudatarios zonifican las actividades rurales en lugares de sementeras AHPC, Reg. 1, tomo 16, protocolo de 18/8/1603)
y en estancias de ganados. De esta manera, mientras perdura el auge del sistema 43) Testamento de Diego de Sotomayor de 26/11/1604 (en: AHPC, Reg 1, tomo 16, protocolo de la
de encomiendas, la ganadería no provoca conflictos ni antagonismos con el sector fecha); y donación de Juan de Burgos de 15/1/1598, (en; AHPC, Reg 1, protocolo de la fecha)
agrícola. 4-1) Actas capitulares de 23/2 y 3/5 de 1605 (en: A M ,[V: 126-130 y 140-143)
45) Acta capitular de 26/1/1587 (en: A C, 1: 636-642)

A través de los testamentos, las dotes y las donaciones de los europeos de la 46) No obstante ello, ios predos varían según el servido que presta el caballo. Vgr.: un caballo "de
jurisdicción, podemos conocer la evolución y la proporción de los distintos tipos regodjo" puesto en Córdoba, equivale a 7 potros de Buenos Aires (en: AHPC, Reg 1, protocolo de
23/10/1592) y un caballo de carrera vale lo que 15 potros de Buenos Aires de dos años de edad (en:
de ganado. Ellos 'ños indican que, hasta 1590, los hatos de ovejas y cabras AHPC, Reg 1, protocolo de3/10/1592). En general, los caballosde carrera tienen un preao alto: 190
predominanampliamente por sobre los vacunos. Las primeras, son las que figuran pesos es lo que paga un vecino de Santiago del Estero en 1593 (en: AHPC, Reg. 1, protocolo de 21/
6/ 1593) En igual fecha, un caballo "de guerra" cuesta 50 pesos y uno de carga 15 pesos

168 169
r~ cantidades insignificantes'4". En cambio, los bueyes carreteros son el transporte de Al finalizar el siglo XVI, los encomenderos encuentran una buena fuente de
carga fundamental que se usa en la jurisdicción: a la ciudad acuden los comercian¬ recursos en el ganado bovino que se cría en las tierras de sus repartimientos. Para
tes ligados al tráfico entre Buenos Aires y Potosí, que pagan a veinticinco y treinta su cuidado contratan a otros europeos, quienes se condertan por un porcentaje del
pesos la yunta de bueyes procedentes de las haciendas cordobesas. multiplicode losanimales. El incumplimiento de uno de esos convenios, señala las
ganancias que se pueden obtener: Luisa Martel de Los Ríos,viuda del fundador de

Casi todos los vecinos aún los más pobres—,poseen cerca de sus viviendas la ciudad, concierta con Juan de Molina Navarrete para que éste se ocupe de los
pequeños hatos de ganado ovejuno, caprino y porcino, para alimento del grupo vacunos de los Cabrera; al cumplirse al plazo convenido, la omisión o el descuido
doméstico. De allí que las autoridades deben intervenir para que no dañen las deMolinaNavarrete,lo compromete a pagar 300 pesosy treinta reses dmarronas,
chacras y sementeras de los alrededores, obligando a sus dueños a tener el ganado mediante undocumentoque debe firmar ante el escribano público para resarcir las
alejado de la ronda de la ciudad (48'. pérdidas sufridas por los Cabrera en.
Delas nuevas especies domesticables que la conquista introduce en la jurisdic¬ Tal como sucede con los textiles, desde los comienzos de la fundación, el
ción, sólo las ovejas son a veces derivadas hada la dieta de los indígenas de ganado sirve para efectuar los pagos de muchas transacdones. Destacados enco¬
servicio; en tanto que los bovinos están reservados para los europeos. El mismo menderos y comerciantes que desarrollan una continua actividad mercantil por
cabildo se encarga de regular la venta por menor de la carne vacuna para abasto esos años, venden a menudo ganado de sus estancias, pero también reciben en
de los habitantes, fijando los precios por arroba y las fechas de la carnicería <49). pago yuntas de bueyes y caballos eB.

El crecimiento sostenido de la ganadería de ovinos y vacunos, va delineando La bondad de las tierras para la actividad ganadera, permite que las haciendas
poco a poco una especialización regional, que se acentuará con el descenso de la sirvan también como lugar de invernada. Algunas compañías que se forman entre
pobiadón indígena. Ya desde 1590, ambos tipos de ganado predominan clara¬ vecinos del distrito, tienen como finalidad vender ropa de Castilla y de China
mente en las haciendas. L os fletes, las manufacturaslocales y el mercado potosino, —que llega por el puerto de Buenos Aires— en Santa Fe; allí redben a cambio
incentivan su desarrollo como productos de exportation. vacas y yeguas que, previo paso por los pastizales cordobeses, son revendidas en
el Perú S3).
El ganado ovejuno muy rara vez es vendido en pie fuera de la jurisdicción; y
cuando esto sucede, los compradores son vecinos de la redén fundada ciudad de Paralos vecinos y encomenderos que poseen tierras y mano de obra indígena,
La Rioja G®. En realidad, los grandes hatos de los encomenderos locales están la guarda de ganado es otro negocio rentable que no implica inversiones en dinero,
destinados a proveer materia prima para las manufacturas textiles, que como Generalmente, el beneficio consiste en un porcentaje de las crías nacidas durante
industria de transformación, salen hada loscircuitos mercantiles interregionales. el tiempo del convenio; o en un pago mensual por cada cabeza de ganado 641.

El aumento acelerado de los rebaños de ovejas se logra sin reinversiones de


capital, Sus cuidados requieren poca mano de obra, y ésta se encuentra en el
servicio indígena del feudatario. De todoslos tipos deganadoque tiene el distrito,
el ovejuno es el único donde se puede establecer un claro origen étnico de los
pastores.
51) AHPC, Reg. 1, protocolode 11/9/1588.
52) AHPC, Reg. 1,protocolo de 1/5/1591 y de 1/9/1591.
47) Unode los primeros documeníos sobrela cría de ganado mular, es de 1605, en el que Juan de Avila
53) El ejemplo más claro, es la compañía que se forma entre Fabian Maldonado del Espino y Juan de
yZaraievendc50mu!asymachosccnero5a35pesoscadauno{en:AHPC,Reg, 1,tomo 18,protocolo Mitre, con un capital de 2.611 pesos (en: AHPC, Reg 1, tomo 17, protocolo de 3/9/1604)
de 21/1/1605)
54) Cfr AHPC, Reg, 1,protocolo de 15/1/1594, concierto entre Hernandode Toledo y Pimentel y Pedro
48) Actas capitulares de 14/8/1587 y de 4/11/1602 (en: AC., 1: 660-661 y A.M., III:326-327).
Sanchez, por el que el segundo se obliga a guardar en su estancia 100 yeguas, a cambio de 1/3 del
49) Cfr Actas Capitulares de 27/3/1589 y 13/12/1597 (en: A.M., II: 113 y A M„ III: 54-56).
multiplico y 200 ovejas. El pago mensual por cabeza de ganado, se ejemplifica en: AHPC, Reg. 1,
50) Cfr AHPC,Reg 1, tomo 19, protocolodell/5/1607;y tomo 20, protocolode 11/8/1608. protocolos de 18/1/1590 y de 31/1/1590.

170 171
i r

Sin embargo, las mejores ganancias surgen de la exportación de sebos, cueros El flete de vacunos es otra actividad que emprenden los vecinos del distrito; y
y cecinas al Brasil; y sobre todo, con la venta del excedente de vacunos en pie con algunos de ellos adquieren una fuerte especialización en ese tipo de trabajo. Tal es
destino al Potosí, el caso de Pedro de Mojica, quien durante esos años recorre incansablemente la
ruta hacia el norte. Los tratos de este encomendero, en cada uno de sus viajes,
Particularmente en la última década del siglo XVI, el sebo tiene en Bahia y engloban una amplia gama de posibilidades comerciales. Veamos uno de ellos. En
Pernambuco un buen mercado, donde es usado para hacer velas y jabones,. Los 1599 se dirige hacia Salta llevando una buena cantidad de ganado: una parte es el
beneficios que así se obtienen son importantes,y muchos moradores de Córdoba producto de compras que ha realizado en haciendas locales; conduce también
van a Santa Fe, sin orden ni licencia, a matar vacas cimarronas para elaborar la treinta novillosde arada para entregar en Tucumán, por lo que recibirá 247 pesos;
grasa sólida e5>. y otras 400 cabezas hasta Salta, por lo que cobra 800 pesos de flete. Pero además,
el arreo se compone de otras 1.000 cabezas pertenecientes a un comerciante
Todo el ganado vacuno que se exporta en pie, se dirige hacia el norte del peruano; en este caso, Mojica se ha encargado de cobrarlas, ponerlas en un corral
distrito: Santiago del Estero, Tucumán, Salta, Jujuy y el Potosí e6> Entre los años y marcarlas para después entregarlas en Calcha, recibiendo dos pesos y dos
159óy 1600, siete mil cabezas de las haciendas locales son fletadas hacia el centro tomines por cada animal entregado. Sin contar lo que puede producir la venta de
minero su propio ganado, Pedro de Mojica obtiene con este flete la suma de 3.297 pesos,
de lo que sólo debedescontar los gastos de comida, ya que el servicio indígena que
Al ser el sector exportador que requiere menos costos e inversiones de dinero,
lo acompaña pr ocede de su encomienda m,
el ganado se saca con un cierto desorden fuera de la jurisdicción; de allí que el
gobernador Mercado de Peñaloza se ve obligado a emitir un mandamiento, por el
que los encomenderos, moradores o mercaderes, pueden enviar fuera de los El espacio jujeño es la zona de invernada para los vacunos cordobeses cuyo
j términos sólo novillos y bueyes, pero no hembras vacunas 67), destino final es el Potosí Allí, loshatos se reponen de su largo viaje, a la espere de
la llegada de los comerciantes altoperuanos A veces, su compra ha sido pactada
Hacia 1596, el excedente es importante y los vecinos realizan ventas significa¬ en la misma ciudad de Córdoba; en otras ocasiones, la venta se realiza en las
tivas destinadas a Santiago del Estero y Tucumán. Las modalidades que adquieren estancias jujeñas (í".
las transacciones son variadas. En ese año, Juan de Mitre entrega novillos "en lo de

Torreblanca" pueblo de Guayascate, a veinte leguas hacia el norte—, a un tal
A medida que avanza la primera década del siglo XVII, la cría de vacunos con
Diego Graneros;és te pagará dos meses después en Tucumán, a 3 pesos y dos reales
por cabeza, en lienzo de algodón o en carretas, Mitre le entrega también tres miras a su venta en el centro altoperuano es una actividad que va creciendo,
indígenas "para que vayan sirviendo con los novillos", sin que haya obligación de debido a los bajos costos y a las buenas ganancias. Vecinos de Jujuy y Talavera
devolverlos a su encomendero 66). llegan a Córdoba paracomprar ganado, o para formar compañías comerciales con
los europeos de la región. En 1605, Domingo Juarez, que tiene una estancia en
Otros conciertos muestran a los mercaderes portugueses cobrando en bueyes Madrid de las Juntas, hace tratos con Diego Lopez de Lisboa para criar vacunos
de las haciendas cordobesas la mercancía importada que venden en la ciudad; el por cinco años; Lopez de Lisboa pone 1.000 vacas de cría y otras 1,000 vacas y
ganado es luego renegociado en el Potosí E9). temeros de hierra; Juarez se compromete a colocar yanaconas, un mayordomo

55) A manera de ejemplo cír AHPC, Reg 1, protocolo de 13/3/1591 yActacapitu!arde5/10/1599(en:


AM, III: 145-146)
5ó) En muy pocas ocasiones se organizan fletes de vacunos hacia Buenos Aires, y en pequeñas 60) AHPC, Reg 1, protocolo de 2/11 y 10/12 de 1598
cantidades; como en e! aña 1605, cuando se envían un total de 300 cabezas (en: AHPC, Reg 1, tomo 61) Veamos dos ejemplos del año 1600 Agustín Ruiz de Casteiblanco tiene en Jujuy 1 000 vacas, 60
18, protocolos de 8/1 v 10/1/1605).
caballos y 30 yeguas que son vendidas con aparejos, herraduras y costales a Rodrigo Nuñezde Leon,.
57) La cifra citada de exportación de ganado, pertenece a Assadourian (1983: 33) H mandamiento es de
por la suma de 3 000 pesos (en: AH PC, Reg 1,protocolo de25/ll/1600).Porsuparte, Luisde Abreu,
24/10/1598 (en: Acta capitular de la fecha, en: A M, III: 107-108) desdePolosl, otorga poderparaqueunaparttdadevacunosquedejóen Jujuy, le sea enviada al centro
58) AHPC, Reg 1, protocolo de 5/9/1596 minero con ios indios necesarios para su aviamiento (en: ANB, serie Expedientes Coloniales, añc
59) Cfr AHPC, Reg 1, protocolo de 23/8/1597 1600, nro. i,f. 69)

172 173
español y todo lo necesario para, al cabo de tres años, llevar 1.000 cabezas al Perú más aptas ecológicamente, sino también las que concentran la mayor parte de la
(62)
población indígena. Salsacate, Los Quiscales, Ischilín, Quilino, Saldán, son las
zonas de los piedemontes y de los valles donde se diseminan las chacras más
De todas las actividades económicas que se originan en el interior de las tierras productivas. Desde fines del siglo XVI, los documentos agregan los nombres de
de encomienda, la ganadería es la que requiere menores costos y muy pocas otras regiones —esta vez localizadas junto a los ríos de San Juan, Navidad y
inversiones en dinero. A diferencia de las manufacturas textiles, el descenso de la Tercero—, más próximas al puerto de Buenos Aires.
población indígena no la afecta, ya que las necesidades de mano de obra para la
cría y el arreo son mínimas. Es indudable que las coyunturas internas de la En los primeros años de la conquista, la producción de las chacras que los
jurisdicción, hacen que ésta se adapte con facilidad al estímulo del mercado españoles habían demarcado en sitios próximos a la ciudad -y que se habían
consumidor del Potosí., De allí que la expansión de este sector exportador —que atribuido en merced-, satisface sólo al consumo de la casa del feudatario; aunque
se repite en el Río de la Plata y en otras zonas de la Gobernación del Tucumán-, en algunas ocasiones, la existencia de un excedente permite su venta a otros
preanuncian la especialización regional de los años venideros. moradores.

Por entonces, el servicio indígena de la vivienda española encargado de la


molienda, usa el viejo sistema prehispánico de los morteros de mano, El goberna¬
La producción de harinas de trigo. dor Juan Ramirez de Velazco, en uno de sus informes al rey, indica que la ciudad
de Córdoba "..aunque ha diez y seis años q ue está poblada, no tiene molino niacequias.- y
pasaban grandísimo trabajo los indios en moler lo que han de comer sus amos. " (631.
De loscereales introducidos por la conquista europea en la sierras de Córdoba,
Sin embargo, a mediados de la década de 1580, con el dominio hispánico ya
el trigo ocupa el lugar más significativo en los primeros decenios del sistema
consolidado en la región, algunos vecinos comienzan a encarar la producción de
colonial.
trigo y su molienda en una escala mayor. Aún cuando no se posean grandes
Su importancia se expresa no sólo en los beneficios que de él obtienen los extensiones de tierras aptas para el cultivo, la tenencia de mano de obra indígena
encomenderos locales —a través de la comercialización de harinas en el puerto de facilita la empresa agrícola. Por ello, los protocolos notariales comienzan a
Buenos Aires—, sino también por las consecuencias que acarrea su producción consignar contratos de arriendos de chacras entre españoles para utilizarlas en
sobre Ja población indígena. sembraduras de maíz y trigo, en los que el precio se estipula en hanegas de grano
pagadas anualmente (64).
La relación estrecha entre encomienda y mercedesde tierras se manifiesta con
claridad en tomo a ese sector de la economía, ya queel reemplazo de los cultígenos
prehispánicos por el cereal europeo sigue, en todos los casos, el ritmo de la La instalación de molinos, en cambio, se presenta más compleja. Estos re¬
apropiación del suelo y de la mano de obra indígena. quieren de terrenos próximos al río para su emplazamiento y de la pertinente
licencia del cabildo, quien ejerce el control del uso de las aguas para garantizarla
A partir dela conquista, las zonas de siembra de los poblados indios,dedicados distribución prioritaria en las chacras de la ciudad (®,
hasta entonces a los cultivos aborígenes de maíz, zapallos y frijoles, comienzan a
ser utilizadas por los encomenderos para la siembra de trigo. De allí que las
regiones por las que se expanden las sementeras del nuevo cereal, no sólo son las 63) Carta de Juan Ramírez de Velazco al rey, de 1/1/1590 (en: Levillier, 1920: 274-276)
64) AHPC, Reg 1, protocolo de 14/6/1586.
65) E problema de la provisión de agua en los molinos cercanos a la ciudad, particularmente durante
los meses de abril a diciembre, en que el rio de San Juan disminuye su caudal, hace que algunas
62) AHPC, Reg. 1, tomo 18, protocolo de 17/8/1605 Otros ejemplos contemporáneos muestran a empresas que se inician para la instalación de molinos próximos al asiento hispánico, tengan corta
Manuel de Fonseca Contreras vendiendo 1.000 cabezas a un vecino de Jujuy, o a Miguel Gonzalez duración Tai es el caso delmolino de Gonzalo Martelde Cabrera, hijo del fundador y propietario de
Jaimes conduciendo grandes hatos de vacunos hadad norte (en: AHPC, Reg 1,tomo 17,protocolos tierras juntoa! rio,quien en 1585 forma compañía con Juan Lopez de Reina para beneficiar su molino,
de 26/4/1604; y tomo 20, protocolo de 13/9/1607) por un plazo de dos años (en: AHPC, Reg. 1,protocolo de 29/1/1585).

; 174 175
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En realidad, durante todo el decenio de 1580, el asiento español cuenta con un y Sanabria, quien adquiere de Pedro de Soria uno de sus molinos molientes y
solo molino,perteneciente al encomendero Pedro de Soria El Mozo. Puesto que es corrientes, por el elevado precio de 1570 pesos'7".
la única instalación de su género en la zona, sus precios se tornan a veces excesivos
y el cabildo debe intervenir para poner orden en la molienda. Cuando C'ristoval
Chatavinavan y su esposa —indiosmolinerosnaturales del pueblo de Quilpo, del
repartimiento de Soria—, son llamados a declarar, testimonian que el molino no
deja de trabajar, tanto de día como de noche, por lo que ellos nunca duermen, ya En el período que va desde 1590 a 1610, la siembra y cosecha del trigo se
que allí se lleva la cosecha de trigo de importantes encomiendas locales <6é>, convierten en uno de los rubros importantes del tributo de los pueblos de
encomienda. Los contra tos que los feudatarios establecen con los administradores
A fines del siglo XVI, el tráfico regular que se organiza entre las ciudades del de sus repartimientos, fijan a menudo como obligación de estos últimos el "recoger
Tucumán y el Brasil a través del puerto de Buenos Aires, hace que la producción los indios y ocuparlos en las sementeras".
local de harina de trigo encuentre un cauce seguro para su comercialización en la
costa atlántica. De allí que comience a multiplicarse la instalación de molinos, en
Los beneficioseconómicosque produce la comercialización de lasharinas en la
cuyo usufructo se interesan los encomenderos. costa atlántica, provoca un movimiento de apropiación de tierras a fines del siglo
XVI, a cuya cabeza se encuentran los encomenderos locales El descenso de la
Unode ellos, Tristán de Tejeda, obtiene del cabildo una merced para molino en población indígena y la reducción en pueblos de los repartimientos, facilita la
la ronda de la ciudad; y posee además otra instalación similar cerca del límite de tendencia a obtener en merced las mejores tierras de cultivo de los repartimientos
la jurisdicción de Buenos Aires, en el rio Las Conchas'671, También Pedro de Soria
amplia su actividad con otras dos mercedes para heridos de molino, que se suman
al que ya posee desde años anteriores En la zona de Guanusacate, Alonso de En efecto, la mayor parte de los encomenderos concentra la mano de obra
la Camara emplaza un molino en sus tierras de labranza m y Agustin Ruiz de indígena de sus pueblos, en los asientos que ofrecen por su geografía mejores
Castelblanco, en sociedad con Baltasar Ferreira, hacen lo propio a una legua de la posibilidades agrícolas.
ciudad (70).
En 1605, Leonor Ponce—viuda del feudatario Baltasar Gallegos—, afirma que
El negocio de la molienda de granos atrae además a otros personajes que durante muchos años se ocupó del pueblo de Saldán, donde su esposo había
invierten en él sumas impor tantes. Tal es el caso del obispo fray HernandodeTrejo reducidoalosindiosde Cantacaio, que eran casi cien personas. Allí poseía "muchas
sementeras de trigo", y cuando su hijo le quita los indios, pierde más de 500 hanegas
del cereal, por no tener aborígenes para la siega m.

66) Luego de varios días de debates entre Pedro de Soria y el cabildo, se acuerda que el precio de la A comienzos del siglo XVII, otro repartimiento —esta vez localizado en la
molienda se fije en dos tomines por hanega, más un almud (en: Actas capitulares de 4/5, 9/5 y 10/ región norte de las sienas—, produce alrededor de 1.500 hanegas de harina de
5 de 1588; A.M., II: 24-31).
trigo que se venden en Santiago de! Estero (73).
67) Acta capitular de6/9/1595(en: AM, II:411-412); AHPC, protocolodel/l0/l596ydel4/l0/1609
Ya en 1598,elcabildo consigna que se manda harina a Brasil,molida en elmolinode Tristán deTejeda
(en: Acta capitular de 3/2/1598, A M , III: 75- 76)
68) Acta Capitular de 20/2/1597 (en: A M , III: 16-17) En 1602, el cabildo ordena quitar la clavija del
molino de Pedro de Soria para que no muela, puesto que la muerte del propietario provocó la
inactividad de la instalación, lo cual resulta dañino porque quita el agua de la ciudad (en: Acta
capitularde4/ll,en: A.M, 111:326-327). En 1609,el molinoylascasassemi-destruídas, son vendidos
por los herederos en .100 pesos (en: AHPC, Reg. 1, protocolo de 31/10/1609). 71) AHPC, Reg I,tomo 13, protocolo de 6/6/1600
69) AHPC, Reg. 1, tomo 19, protocolos de 12/6 y 19/6 de 1606. 72) AHPC, Esa 1, leg 17, exp 9
70) Acta capitular de 30/3/1599 (en: A M., III: 132-133) y AHPC, Reg 1, tomo 14, protocolo de 17/3/ 73) AHPC, Esa 1,leg 16,exp 4 Esta cifra esreclamada porlosherederosdeBartolamáGarda, al tutor
1601 Juan de Toneblanca, como administrador de los bienes

176 177
I
'

Hacia el sur, en tierras del Río Tercero, otros encomenderos poseen también embargo, tampoco demandan un proceso permanente de reinversiones conside¬
chacras del cereal; y algunos de ellos venden la producción directamente en el rables ™.
puerto de Buenos Aires gi).
Por o tra parte,el empleo de la fuerza de trabajo indígena en ¡as chacrasde trigo,
Elmovimiento de apropiación antes mencionado,se extiende también hacialas no excluye su ocupación en otras actividades productivas. Las labranzas comien¬
chacrasquebañan los ríos de la llanura orientaldelas sierras. Hacia 1598,un grupo zanen el mes de junio —el "tiempo de iniciarla siembra"—, y finalizan con la cosecha
de vecinos solicita que se amojonen las tierras que tienen en merced sobre el Río de enero. Si bien en ambas tareas se utiliza una parte importante delos pueblos de
Segundo, al que antes denominaban "Río de Navidad". Todos ellos aducen la encomienda, no sucede lo mismo con el escardado de las chacras, que se realiza
necesidad que tienen de iniciar allí sus sementeras. Ante el escribano público se entre ambas fechas P7).
miden las mercedes, cuidandode dejar tierra suficiente para los quince indios del
pueblo de Nabosacate, y se confecciona un mapa de la zona, que luego es Los molinos hidráulicos necesitan poca mano de obra, generalmente uno o dos
i incorporado a las actuaciones indios permanentes, sobre los que recae todo el trabajo Veinte años después del
testimonio de aquel Cristoval Chatavinavan —que no dormía ni de día ni de
noche, porque el molino nunca dejaba de trabajar—, el cabildo debe nuevamente
Al parecer, las tierras resultan fértiles, puesto que un año después, otro vecino poner orden en las instalaciones de Pedro de Soria. Al parecer, las personas que
de la jurisdicción intenta ocupar y sembrar las chacras que quedaron para los acuden a sus molinos quitan la molienda a otros y maltratan al indígena encar¬
indígenas de Nabosacate Su encomendero reclama por la intromisión, y obtiene gado, por lo que debe ordenar que "ni le den de palos ni bofetones" al molinero ™
un auto del teniente de gobernador, por el que éste ordena al intruso cesar con la
labor de las sementeras, hasta que el gobernador determine en la causa (7S).

La agricultura comercial del trigo requiere pocos gastos de producciónpara los Entre los años 1585 a 1608, los protocolos notariales poseen numerosos regis¬
encomenderos locales. El sistema de apropiación de tierras y el servicio personal tros de operaciones efectuadas en torno a la comercialización de las harinas.
de los indios de repartimiento, ponen al alcance de sus manos los dos factores Además de los asientos que indican la venta del producto, los europeos recurren
productivos fundamentales: tierra y trabajo. al escribano público para manifestar el arriendo de chacras para cultivar el cereal,
para firmar obligaciones de pago que se harán efectivas en harina de trigo, obien
El arado, la tracción animal, el hierro en los instrumentos agrícolas y los para la formación de compañías cuyo objeto es beneficiar molinos o fletar el
producto a la costa atlántica P5).
molinos hidráulicos, son las nuevas técnicas introducidas por la conquista. Sin
¡
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74) AHPC, Reg. 1, tomo 20, protocolos de 20/8/1607 y tomo 14, protocolo de 22/6/1601 tas llanuras
76) En las rendiciones de cuentas por tutorías —documentos fundamentales para conocer el funciona¬
orientales que unen la jurisdicción de Córdoba con el puerto, son de fácil reoorrido y ayudan a
acentuar la ligazón de este sector de la economía con el comercio atlántico En ese sentido, los
miento de las encomiendas locales—, ios gastos que implica la producción triguera es un rubro casi
inexistente En cambio, en los documentos en que los europeos necesitan fundamentar la posesión
feudatarios más beneficiados por la situadón geográfica de sus encomiendas, resultan ser aquellos
de tierras o encomiendas, suelen aparecer las herramientas nuevas introducidas por ellos. (Cfr
que tienen sus pueblos de repartimiento en la región del Río Tercero, oomo es el caso de Pedro Luis
de Cabrera . En 1591, el cabildo solidta al gobernador una licenda para aquellos vecinos que "tienen AHPC, Esa 1, leg 15, exp. 12, f 313)
necesidad de despachar desde sus hadendas al puerto", para que no estén obligados a acudir a la 77) Acta capitular de 6/6/1589 (en: A M II: 120; y AHPC, esa. 1, leg. 15, exp 12,f. 251; y esa. 1, leg 12,
dudad a obtener el permiso pertinente (en: Acta capitular de 14/1/1591, A M II:209-211) Algunos exp, 2 testimonio de Anton Chinavi)
años después, en 1607,se reribela presentadón de un vecino, para que el cabildo envíe a alguien a! 78) Acta capitular de 16/5/1600 (en: A M ,111:167-168)
Río Tercero, a fin de que no saquen harina, ni maíz, ni bizcocho para Buenos Aires, ya que ta sequía 79) Notodas las operaciones sobre ventas de harinas son registradas ante el notario, sino sólo aquéllas
hace que esos produdos escaseen en la dudad de Córdoba (en: Acta capitular de 21/2/1607, A M, en las que es necesario dejar asentado un compromiso de pago o de entrega de la mercanda. Sin
IV: 360-362) embargo, la serie Protocolos Notariales, si bien no es totalmente representativa de este tipo de
75) AHPC, Esa. 1,leg. 9, exp. 5. movimiento comerdal, india las tendenrias generales y las aracterístias más sobresalientes En

178 179
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La producción triguera delos pueblos de encomienda sirve también como pago mm <*
para adquirirotros bienes: ganado,mercaderías de importación,carretasy tierras LAS VENTAS DE HARINAS DE TRIGO (1597-1608)
En otras ocasiones, los vecinos satisfacen con harina las fianzas y deudas con¬ (según protocolos notariales) \ O'
traídas

A CANT IDAD DE HANEGAS VENDIDAS MONTO EN PESOS


No obstante, las sementeras de trigo de las encomiendas conforman un sector N Puestas
productivo local fundamentalmente ligado al comercio atlán tico. Como tal, ayuda O
Puestas
en en
Puestas
en
Pagadas Otros
(en mercaderías,
a definir el conjunto de circuitos comerciales, que no siempre se orientanhacia el S Buenos Córdoba Sgo. del
TOTAL en
ganado, tejidos de la
TOTAL
Moneda
centro minero potosino. Aires Estero tiena)

A diferencia de los otros frutos de la tierra, que se bifurcan hacia distintas 1597 1238 80 - 1318 4 000 2.370 6370

regiones del espacio virreinal, la producción de harinas sigue invariablemente la 1598 410 - - 410 925 1125 2.050
ruta que lleva al Atlántico Por el camino real que va a Buenos Aires, las cañetas
cargadas con los productos de la jurisdicción, y en especial con harinas de trigo,
1599 485 - - 485 1825 575 2400
son conducidas al puerto, o bien embarcadas para Brasil o Angola, "a cambio de 1600 605 100 - 705 780 2 545 3325
reales o de esclavos" m.
1601 808 100 - 908 3,000 1.040 4 040

Entre 1579 y 1601 —años que muestran un mayor volumen en las ventas del 1602 282 - 9-1 376 960 780 1740

producto ,las harinas destinadas al puerto aportan a los encomenderos locales 1603 54 - - 54 - 270 270
una,suma importante en metálico: sobre un total de 18,185 pesos que indican los
registros notariales, 10.530 pesos son cobrados en moneda. 1604 250 - - 250
_ 1.824 1.824
1605 140 - - 140 700 - 700
1606 20 - - 20 - 97 97
1607 100 - - 100 - 500 500
1608 220 - - 220 -- 1 100 1100

No son casuales entonces las expectativas que crea el comercio atlántico en los
feudatarios, así como en la clerecía y en otros sectores profesionales <81), De allí
también que la casi totalidad de la producción comercializable de trigo, esté
este caso, hay que tener en cuenta también, que muchos encomenderos envían la producción
directamente desde sus pueblos de repartimientos
destinada a Buenos Aires.
Es interesante hacer notar que, a diferencia de los protocolos notariales, las rendiciones de cuentas
. por tutorías, soslayan la producción de las sementeras; sin embargo, en los cargos que hace el juez Hasta 1608 —año en que se registran para este periodo las últimas operaciones
de menores, se redama siempre por la falta de informadón al respecto con harinas—, su precio no sufre variación La hanega vendida en el puerto se
i
80) El traslado de las harinas, habitualmenle queda en manos de los administradores de las encomien¬ cobra a cinco pesosy a dos pesos y medio la puesta en Córdoba. En el primero de
das En 1605, Pedro Casero, mayordomo de! feudatario Pablo de Guzmán, manifiesta ante el
escribano público trece canelas que lleva hada Buenos Aires: diezde ellas pertenecen a Guzmán y
tres son suyas; doce van con harinas, delascualesdiez son para entregar a Antonio d e Avila y el resto
para vender (en: AHPC, Reg 1, tomo 18, protocolo de 25/2/1605) 81) Cfr AHPC, Reg 1, protocolos de 9/1/1598, 14/4/1598 y de
12/7/1599

180 181
j

i
r
los casos, el transporte del producto corre por cuenta del vendedor, quien dispone orden: un mandamiento suyo dispone que toda persona que venda o saque
de carretas, bueyes e indios para el flete, gastos que son incluidos en el precio de cualquier partida fuera de la ciudad lo manifieste ante el lugarteniente, para que
la hanega. por cada 100 hanegas que lleve, manifieste otras 25 de trigo en grano ante el
escribano m.
.. Desde 1597, los encomenderos venden con algunos meses de anticipación la
producción de trigo de los pueblos de su repartimiento. Para ello firman cartas de Sin embargo, la incidencia del cabildo local se hace sentir sólo para asegurar la
obligación, por las que se comprometen a entregar determinada cantidad de provisión del cereal a los habitantes de la ciudad, y para apuntalar su comerciali¬
hanegas de harina cernidas y encostaladas, puestas por su cuenta y riesgo en zación en el puerto. En cambio, el proceso de siembra y cosecha, en manos de los
Buenos Aires. Sus compradores suelen ser comerciantes —generalmente portu¬ encomenderos, está sujeto a las prácticas sobre la utilización de la mano de obra
guesesÿ-, que pagan con productos manufacturados de importación, o en metálico. indígena y sobre apropiación y usufructo de ias fierras del repartimiento,que fijan
los propios feudatarios. Sóio ante situaciones de excepción el cabildointerviene en
Sin embargo, el éxito comercial de las harinas en la costa atlántica —más de el destino comercial que los encomenderos fijan para la producción agrícola, o
6.000 pesos fueron registrados ante los escribanos como resultado de su venta en para establecer prioridades productivas dentro de los repartimientos
el año 1597—,hace que algunos feudatarios locales inicien por su cuenta la venta
del producto en el Brasil. A veces se organizan en compañías comerciales, como la Es así como, en 1588, ante la falta de comidas que sufren en el asiento español,
de Pedro García Redondo y Bartolomé Jimenez, cuyo objetivo es embarcar hacia la institución local manda un regidor para que haga un escrutinio en las tr ojes de
esas regiones harina de trigo, sayales, sebos y cecinas8®. En otras oportunidades, algunos feudatarios y tome la mitad del excedente para ser vendido en la ciudad
conceden poderes especiales para despachar harinas en Buenos Aires y el Brasil, de Córdoba í87).
a encomenderos que ya manejan por su cuenta ese circuito comercial í83).
Otras situaciones de excepción revelan la capacidad productiva de los pueblos
de encomienda, y la reticencia de los vecinos a derivar hacia otros cauces las
Esos logros económicos movilizan numerosos intereses dentro del grupo
harinas de trigo que dejan tantos beneficios En 1601, el anuncio de la llegada del
hispánico local. El cabildo se preocupa en garantizar la calidad del producto que
losvecinos tienen vendido a losmercaderes que van a la costa del Brasil y designa gobernador Martinez de Lava con 500 soldados para auxiliar al reino de Chile,
a una persona para que registre las harinas en Costasacate, lugar donde se juntan promueve un acuerdo del cabildo, por el que se obliga a los vecinos a tener
las carretas que van al puerto W). En otras ocasiones, peticiona ante las máximas elaborado 131quintales de bizcocho en el plazo de ocho días, para mantenimiento
de la tropa; la cantidad está repartida entre cuarenta y ocho feudatarios m.
autoridades coloniales, para que permitan enviar al Brasil y a Angola harinas,
bizcochos, cordovanes, sebos y otros productos de la tierra íaS).
Unos años después, en 1605, otros ejércitos llegan para socorro de Chile y
acampan en el Río Tercero Son más de mil soldados al mando de Antonio de
Desde fines del siglo XVI, el incremento de este tipo de actividad deja a menudo
Mosquera. Durante los siete meses que han de esperar para cruzar 3a cordillera, la
sin harinas a loshabitantesde la ciudad de Córdoba. Por entonces, el gobernador
ciudad de Córdoba debe sustentarlos con carretas, ganado vacuno y bizcochos
del Tucumán, don Pedro de Mercado de Peñaloza, debe intervenir poniendo Ante la amenaza del gobernador, de hacer entrar en la ciudad a los soldados si no
se los provee de los bastimentos necesarios, el cabildo hace una derrama entre
cincuenta v cuatro vecinos, que deberán dar 860 quintales de bizcocho puestos en
82) AHPC, Reg 1, protocolo de 31/II /1597.
la ciudad de Mendoza, a donde se dirige el tercio español.
Unos años antes, se registra otra compañía formada por
Francisco Nuñez y Baltasar Gallegos; Nuñez llevará al Brasil y a Buenos Aires catorce costales de
harinasde trigo, sebo, queso y jáquimas, todas mercaderías pertenecientes a Gallegos;las ganancias Tres meses más tarde, los encomenderos no han cumplido aún con la entrega
se repartirán por mitades {en: AHPC Reg 1,protocolo de 17/1/1594). total, porque "ios sementeras de los vecinos están a veinte y véinteyseis 1eguas,y el trigo
83) Luis de Abreu y Frandsoo de Barrios se destacan particularmente en esa actividad. Cfr. AHPC, Reg.
1, protocolo de 27/40/1598
84) Ada capitular de 3/2/1598 (en: A.M., III: 78-78) 86) Mandamiento de 2/12/1597 (en: A M ,III: 52-53)
85) Actas capitulares de 26/6/1598 (en:AM., Ill:88-89);de28/12/1598 (en: AM ,III:114-115) y de 13/ 87) Acta capitular de 14/11/1588 (en: A M ,II: 63)
3/ 1604 (en: A.M., IV: 72-73). ,
88) Acta capitular de 6/3/1601 (en: A M III: 198-200)

182 183

6. . ÿ
se puede traer sólo en carretas,y carretas no hay porque se las ¡levaron a Mendoza con el
avío del tercio español; y las que han vuelto están muy destrozadas y con bueyes y Ese eslabonamiento de las actividades económicas, está representado en el
yanaconas muertos". cuaderno de prueba de un pleito que se inicia a comienzos del siglo XVII. Enel año
de 1600, Diego Nuñez de Sentaren y Pedro Martínez de Tejada, comerciantes
Sin embargo, en setiembre, ios feudatarios más comprometidos en el comercio ajenos a la jurisdicción, celebran un contrato de compañía Por el mismo, el
delasharinas de trigo tienen aún sus trojes llenas;y elcabildodebe obligarlos a que primero de los nombrados entrega reales y hanegas de harina de trigo a Martinez
entreguen un tercio del trigo y maíz que tienen guardados, para mantenimiento de de T ejada, quien debe embarcar hacia Angola en el navio Nuestra Señora de la
la ciudad de Córdoba Concepción; llegado éste a Africa, las harinas serían vendidas "como lo hicieron los
dueños y maestres de otros navios que aquel año llegaron a Angola".

Al parecer, Martinez de Tejada actuó en el negocio con cierto descuido, ya que


Desde fines del siglo XVI, las actas capitulares reflejan los desvelos de los por la dilación que tuvo en vender las harinas éstas se dañaron. Es por ello que en
vecinos por mantener libre de todo impedimento el comercio de harinas y otros 1603, Diego Nuñez de Santaren acude a la Real Audiencia de La Plata, para
frutos de la tierra en el Atlántico, reclamar a sus socios por las pérdidas sufridas, El tribunal ordena que el deman¬
dante presente los testigos y el interrogatorio pertinente. Ei comerciante recurre
Ya en 1598, el cabildo solicita al virrey y a la Audiencia que, "como Córdoba está entonces a cuatro vecinos de la jurisdicción de Córdoba, para que con sus
tan lejos de Potosí y sus naturales se van acabando", se de licencia para el aprovechamiento conocimientos en ese tipo de negocios declaren a su favor.
de harinas, bizcochos, cordovanes, sebos, tocinos, cueros, etc., para vender en
Brasil a trueque de las cosas necesarias; y reclama por la prioridad que el El cuaderno de prueba que recoge la justicia local señala los modos del tráfico
gobernador del Paraguay ha otorgado a lasharinas y carretas de esa Gobernación, atlántico, las ganancias de los comerciantes, y por sobre todas las cosas, la
sobre las de Córdoba m. inserción de los vecinos encomenderos en el eslabonamiento de los circuitos
comerciales.
A partir de 1602, los conflictos se agudizan: la política de Hernandarias de
Saavedra al frente de la Gobernación del Paraguay, afecta particularmente los Diego Nuñezde Santaren había entregado a su socio 4.310 pesos en reales y 233
intereses de Córdoba, En el camino real que va a Buenos Aires, muchas carretas hanegas de harinas de trigo; como éstas podían venderse en el reino de Angola a
cargadasde harinas son incautadas por el gobernador. Elcabildo protesta,porque veintidós pesos la hanega, el monto total délo entregado podía llegar a la suma de
"jamas se ha visto que a los vasallos de un mismo rey se les prohiba entrar a tratar y 9 447 pesos, con lo que se podrían haber comprado 170 esclavos en Africa. Al
contratar unos con otros", y porque es costumbre enviar harinas y frutos de la tierra, menos así reclama el interesado en su demanda.
y "traer negros a trueco de ellas y otras cosas..." m.
Cuando Pedro Martinez de Tejada llega con el cargamento al Rio de Enero
Para los vecinos de Córdoba, la venta del cereal es el punto de partida de una —de esta manera figura Riode Janeiro en el documento—, tiene un ofrecimiento
serie de tratos mercantiles. El servicio personal de los indígenas en las sementeras para comprar la harina a nueve pesos la hanega; pero se niega a venderla Como
de trigo, permite la venta de harinas en Buenos Aires, Brasil, o Angola; las si esto fuera poco, en vez de dirigirse hacia Angola, recala en la isla de Santa Elena
ganancias retornan en forma de metálico o de esclavos; y estos hallan su mejor donde encuentra unas "naos de la India"; el comerciante se entusiasma con las
precio en el centro minero. nuevas posibilidades y emplea allí e! dinero, retornando después a la costa del
Brasil

En el interrogatorio que Diego Nuñez de Santaren presenta para sus testigos,


89) Actas capitulares de 23/2/ 7/4 8/4.13/4,18/7 y2/<M»«CS ,IV; 126-135; 147-149 y 153-
154)
se queja amargamente de las pérdidas sufridas: los 170 esclavos que se podrían
>
"0) Acia capitular de 28/8/1598 (en: AM, III: 93-94)
haber obtenido con las harinas y los reales que llevaba su socio, hubieran costado
91) Actas capitulares de 7/5 y 21/5 de 1603 (en: A.M., IV: 12-13) y Molina, (1966: 108-110)
en Buenos Aires 20,000 pesos, quitadas muertes,costas y derechos; y esa ganancia
del 200% se hubiera duplicado con la venta de la mercancía en Potosí,
184
185
Esas manufacturas de producción local contribuyen —junto con las de otras
Pedro García Redondo, Manuel de Fonseca Contreras, Pedro de Chaves y regiones de la Provincia del Tucumán—, a proveer el amplio mercado de telas
Pantaleon Marques Correa, vecinos de la ciudad de Córdoba—y los dos nombra¬ bastas del Potosí.
dos en primer término, importantes encomenderosr—,agregan varias informa¬
ciones sobre el tema, que demuestran su amplio conocimiento y participación en La situación periférica del distrito dentro del Virreinato, la estrecha relación
el comercio ultramarino de harinas y esclavos. que mantiene con el comercio atlántico, y el sistema del servicio personal que se
impone a los indígenas de encomienda, generan características específicas en la
Además de señalar con detalle las vicisitudes del viaje de Pedro Martinez de organización y en la dinámica de la producción textil.
Tejada, informan que la harina que se embarca habitualmente en Buenos Aires es
buena y va bien acondicionada, ya que de lo contrario, los maestres de navios no Señalemos en primer lugar, que estesector manufacturero se encuentra sólo en
la reciben en sus barcos; hace dos años, el precio de la hanega en el Río de Enero manos de particulares europeos; quienes, a través de la institución de la en¬
era de diez pesos; por otra parte, la harina que queda muchos días en la costa del comienda, cuentan con la mano de obra indígena que elabora los géneros De esta
Brasil se daña y no sirve para su venta; advierten que ir a laisla de Santa Elena para manera, los feudatarios orientan el trabajo de una parte de sus indios de servicio
luego dirigirse a Angola es un viaje riesgoso, ya que los vientos son escasos y sólo hacia la confección de sayal, lienzo, calcetas, sobrecamas y sombreros
se puede llegar a Santo Tomé. Por último, agregan que en los años 1601y 1602, con
esa cantidad de dinero, se podían comprar hasta 120 esclavos02. A diferencia de otras regiones delVirreina to, el único marco legal al que a veces
recurrenlas a utoridades locales en relación a la labor textil, es el de las Ordenanzas
de Abreu de 1576, refer idas de manera genérica a las formas que debe asumir el
trabajo compulsivo del servicio personal En efecto, hasta 1610 ninguna otra
La producción de manufacturas textiles, norma especial es invocada por autoridades o vecinos

Es importante destacar que, aún antes de que los encomenderos tomen


A mediados de la década de 1580, comienza a desarrollarse en la jurisdicción posesión efectiva de sus repartimientos, y comiencen a dirigir el trabajo de sus
de Córdoba la producción de manufacturas textiles. A partir de entonces, el indígenas hacía la confección de tejidos bastos, los géneros producidos en otras
paulatino incremento en la elaboración localde tejidos bastos,se ve favorecido por regiones virreinales circulan en Córdoba como una mercancía que produce un eco
la existencia de mano de obra indígena, la expansión de los rebaños de ovejas, y el significativo en la economía de la jurisdicción.
surgimiento del mercado minero potosino (93í.
De allí que, aún cuando en 1574 el cabildo fija como especies monetizadas a las
herraduras y a las cabras, los registros notariales indican que losvecinos europeos
92) AHPC,Esct l,leg,17,exp 4 Otros documentos notariales ratifican esta práctica comercial en la que
recurrena la ropa de algodón —que por entonces noes de producción local—,para
los encomenderos locales se introducen, aportando un capital inicial conformado por la produdón efectivizar los pagos.
agrícola de sus pueblos de repartimiento Tal es ci caso de Antonio de Salvatierra, cuando entrega
a Francisco Garda de Frías harinas, tocinos y cecinas, para llevar a Brasil y Angola, con el objeto de A diferencia de las harinas de trigo, cuya comercialización tiene una dirección
banefidarlos y obtener esclavos (en: AHPC, Reg, 1, tomo 17 protocolo de 22/6/1604)
clara y convergente hacia el puerto de Buenos Aires; los textiles toman distintos
93) Esas condidones generales, son compartidas por otras regiones manufactureras del espado virrei¬
nal. En Nueva España y en las zonas nudeares del Virreinato del Perú, la confecdón de géneros
caminos, entre ellos el mercado consumidor de Potosí.
bastos asume distintas formas organizativas:obrajes de comunidad, de particulares, con asignaaón
compulsiva o voluntaria de mano de obra indígena, etc En ambos casos, la monetizadón de les Si bien el centro minero es el principal polo de atracción de este tipo de
tributos de las encomiendas, actúa como estímulo sobre ia producción textil de la comunidad manufacturas,parte de la producción local se dirige a otras regiones. Durante esos
indígena De allí tjue ese sedor de la economía, se constituya en una fuente de recursos tributarios
importantes para los ingresos fiscales
años, un buen conocedor de los tráficos interregionales —el encomendero Pedro
En el planolegal, su consecuencia inmediata es la permanente preocupadón del estado colonial por de Soria—, entrega a un mercader itinerante lienzo de algodón, jergueta colorada
reglamentar el funcionamiento de la actividad manufacturera. Las Ordenanzas de Toledo y las de y cordellate, para llevar a vender en el Río de la Plata y en Paraguay. Otros
Luisde Velazco, son un claro ejemplo de lo señalado Cfr :Manuel Miño Grijalva (1986), Fernando
Silva Santistevan (1964), Robson Tyrer (1976) y Assadourian (1983)
187
186
conciertos semejantes, señalan que Asunción y Santa Fe también son mercados Hasta fines del siglo XVI, es corriente encontrar en la documentación la compra
para los textiles, donde son cambiados por vino, azúcar y demás productos de la de paño pardo de Chile, así como muchasdeudas pagadas conesas manufacturas.
tierra Pero esas telas desaparecen lentamente a partir de 1599, cuando el levantarraento
indigena destruye a los obrajes laneros del sur del Reino de Chile.
En realidad, el uso de esas manufacturas está generalizado en estas provincias
virreinales. Ante los altos precios que tienen las telas importadas, los europeos El gran movimiento de géneros bastos procedentes de distintas regiones del
recurren a menudoalos géneros bastos para confeccionar ropa de cama, manteles, Virreinato, y las diferentes direcciones que toma su comercialización a partir de la
y hasta vestidos para los miembros de su familia. A ello debemos agregar la ciudad de Córdoba, reflejan dos aspectos constitutivosde la organización colonial
necesidad de vestir' a los indios de servicio, en especial a los que residen en la del distrito en este período. Por una parte, su inserción en el espacio virreinal, al
vivienda de la ciudad y a los que acompañan los viajes de los trajines, reproducir como zona marginal la importancia que tiene el sector manufacturero
en el conjunto déla economía colonial. Porotra, la función déla ciudad comonudo
Cuando elcomercio de esclavos que penetra por BuenosAiresalcanza unritmo de los intercambios que genera el eje comercial Buenos Aires-Potosí™.
sostenido, las manufacturas textiles adquieren una nueva utilidad, como ves¬
timenta de los negros que llegan en losbarcos e inicianla travesía hacia el Potosí.

En genera!, las fuentes registran en la jurisdicción de Córdoba un gran movi¬


miento de telas bastas procedentes de otras regiones del Virreinato <S5). La conquista española encuentra una población prelúspánica en la que las
tareas textiles descansan en el trabajo doméstico, y cuya elaboración está desti¬
En algunas ocasiones, aún cuando no esté indicado expresamente, el origen
nada al consumo del grupo familiar.
foráneo de las manufacturas se puede inferir con facilidad. Tal es el caso de los
tejidos de algodón, que son utilizados poreuropeos ajenos a la ciudad como forma
Frente a la falta de excedentes en la población indigena,la apropiación europea
de pago de sus tratos comerciales. No es arriesgado señalar como procedencia de
de la mano de obra es un aspecto central para el inicio de la confección de géneros
esas telas a Santiago del Estero y Talavera, donde el cultivo del algodón estaba
extendido m. bastos con fines comerciales. De allí que sean los encomenderos los impulsores de
esta actividad en la jurisdicción. En ese sentido, y al igual que en otros rubros de
Varios convenios entre vecinos de nuestra ciudad y mercaderes, establecen la la producción, ios vecinos feudatarios organizan la fuerza de trabajo indigena ya
obligación de estos últimos de traer a Córdoba géneros de Iqs obrajes san- sea en sus pueblos de encomienda, en su vivienda de la ciudad, o en obrajes
textiles,
tiagueños, especialmente de Pitanbala. Sayales, bayetas de colores, cordellates,
frazadas, sombreros, cordobanes, caparazones bordados y lienzo de algodón,
llegan a Córdoba, para luego ser vendidos en Cuyo o Paraguay m. En las zonas rurales, los administradores de los repartimientos son los encar¬
gados de dirigir parte del tiempo de frabajo de la mano de obra indígena hacia la
Aunque en menor medida, los vecinos de Santa Fe también aparecen en los elaboración de tejidos. En todos los casos los géneros son variados: bayetas,
tratos comerciales pagando en lienzode algodón; incluso a vecesse indica que los lienzos, sobrecamas, ropa de indios,calcetas, pabellones, jerguetas, frazadas, etc,
géneros han sido producidos en esa región m, confeccionados en lana de oveja o en algodón.

94) AHPC, Reg. 1, protocolos de 25/1 y 15/4/1599.


99) Como ejemplo del movimiento de géneros elaborados en diferentes regiones y que circulan en la
95) La coexistencia déla producción textil local y la foránea, impide organizar una matriz de datos que jurisdicción de Córdoba, e¡ testamento de juan de Soria de 10/8/1588, es ejemplificador En el
fije el volumen y el crecimiento de las manufacturas de Córdoba, ya que en muchas ocasiones la mismo, e! comerciante indica que iieva para vender en Chile, a trueque de oro, alguna mercadería
documentación no indica su procedencia dei encomendero Francisco Lopez Correa: 300 varas de lienzo, 50 pares de calcetas de algodón, 2
96) Btaafirmaaón párececonfinriarse,cuandoet valar delasrnanuíacturassefija"alpredode5antiago piezas de ropa listada de algodón, 3 piezas de ropa, 6 varas de telilla ajedrezada de algodón, 12 varas
del Estero", Cfr AHPC, Reg 1,protocolo de 16/5/1588 y media de telilla ojo de perdiz y3sobrecamas Con igual destino, lleva "lienzo délos juries", y otras
97) AHPC, Reg, 1, protocolo de 1/4/1592, 22/9/1592 y 27/8/1602 200 varas también de lienzo, pertenecientes a su hermano Pedro de Soria (en: AHPC, esa. 1, leg.. 11,
98) AHPC, Reg 1, protocolo de 20/9/1596. exp 2)

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n
Los conciertos que los mayordomos establecen con los feudatarios, fijan a A finesdel sigioXVI,algunos feudatarioscuya producción textil es importante,
menudola obligación de los primeros de ocupar a los aborígenes en el beneficio de colocan directamente sus tejidos bastos en el centro minero del Potosí nra. Otros,
la lana y el algodón. Especialmente a partir de la última década del siglo XVI, las utilizan las telas que se pueden confeccionar en sus encomiendas, para participar
remuneracionesde los administradores incluyen—además de otros productos de en ios buenos negocios que brinda el comercio de esclavos.
i los pueblos—, una parte de la "ropa que labren los indios".
En 1597, Pablo de Guzman, y el factor general de los esclavos, capitán Vasco
Encuanto a la materia prima, recordemos que el ganado ovejuno es unrenglón Pinto, se conciertan de la siguiente manera: Guzman se obliga a colocar en Buenos
importante en la economía de las encomiendas, y sirve fundamentalmente para su Aires y durante varios años, doce carretas con bueyes e indios para la época de
obtención En muy pocas ocasiones los vecinos de la ciudad deben comprar Navidad; Vasco Pinto pone en cada carreta diez esclavos con destino al Potosí,
arrobas de lana fuera de la jurisdicción Guzman toma sobre sí el flete desde Buenos Aires hasta Jujuy, donde se descar¬
garán las carretas, corriendo por su cuenta la comida y la provisión de 480 varas
El mismo Hospital de Santa Olalla posee un numeroso hato de ovejas, que a de sayal para vestir a los esclavos- En igual fecha, Vasco Pinto firma otro concierto
veces llega hastalas 2.000 cabezas. Año a año, un vecino encomendero se concierta con Tristán de Tejeda cuyas condiciones son iguales, saivo que ahora son 1.000
con la institución para cuidar el rebaño, quien ocupa parte de su mano de obra varas de sayal que el encomendero de Córdoba debe entregar n03).
indígena en la fabricación de géneros a00).
La confección de géneros bastos se realiza también en la zona urbana. Allí, el
i El algodón, en cambio, es cosechado en pocas regiones del distrito, entre ellas ser vicio de la vivienda del feudatario es ocupado a menudo en la elaboración de
Quilino. Sin embargo, disponiendo dela mano de obra, lamateria prima para esos textiles Aún cuando esos indígenas son una prolongación de la encomienda, en
géneros no es difícil de obtener. A fines de 1597,un vecino deTalavera, Martín de estos casos la dirección del trabajo corre por cuenta de la esposa del feudatario.
A valos, se concierta con cinco encomenderos de Córdoba, para que estos elaboren
en sus pueblos de repartimiento 1911 varas de lienzo de algodón con las 273 En efecto, las treinta o cuarenta muchachas indias que suelen servir en la
arrobas de materia prima que Avalos se compromete a entregar. De acuerdo al vivienda española, son ocupadas en distintos menesteres como lavar, cocinar,
rendimiento en varas de cada arroba, las ganancias de los vecinos resultan amasar;o bien tejer bayetas angostas, ropas de indios hechas en lana,y sobrecamas
(IN)
interesantes: algo más de 3.500 varas de lienzo quedan en sus manos, como pago
por el trabajo de los indios de sus encomiendas n01).
Parte de esas manufacturas es utilizada para vestir a los indígenas del servicio,
Buena parte de los géneros que los grandes encomenderos hacen elaborar en o para las necesidades cotidianas de la familia. En ocasiones, también son em¬
sus pueblos de repartimiento, tienen como destino mercados alejados de la pleadas para adquirir otros bienes. Tal es el caso de Baltasar Gallegos, cuando
jurisdicción. compra veinticinco marcos y media onza de plata labrada; y se obliga a pagar —
en el plazo de cuatro meses—, con una pieza de ropa de mujer y veinte y siete
sobrecamas "de las que se hacen en su casa" 003>.

Otra parté del tributo en manufacturas textiles, es orientado hacia las tiendas
100)AHPC, Escr 1,leg. 3, exp.3,f. 112r yREg 1, protocolo de 1/4/1593 locales; en especial cuando sus beneficiarios son encomenderos que no están
relacionados con el comercio interregional.
101) AHPQ Reg. 1,prolocolode 10/10/1597 Si calculamos a razón de20 varas de lienzo dealgodón por
cada arroba —los documentos de la época señalan un rendimiento de 20 a 25 varas—, tenemos un
total de 5.460 varas tejidas con las 273 arrobas de algodón
Por otra parte, entre los años 1600 y 1605, losescribanos registran numerosas compras a vecinos de
102) Tal es el aso deManuel de Fonseca Confieras, quien olorga poderpara cobrar 1 000 varas de lienzo
Santiago del Estero y Talavera, en las que se fija a 4 pesos el precio de la arroba de algodón. En 1594,

el encomendero Pedro de Candía quien está preso por un crimen—, informa al juez que con las
madejas de hilo de algodón que había traído en sociedad con Juan Alvarez de Astudillo, los indios
a los representantes del Lie Godoy, en La Plata (en: AHPC, Reg 1, protocolo de 29/10/1598)
103) AHPC, Reg 1,protocolo de 22/4/1597.
de éste último habían tejido manufacturas de lienzo, que luego fueron vendidas por ambos 104) En: Segretl (comp.), 1973:33-34
feudatarios, repartiéndose las ganancias por mitades (AHPC, Esa 1, leg. 5, exp 2, f 34r 35r). 105) AHPC, Reg 1, protocolo de 4/5/1594

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Alli, los tenderos reciben lienzo de algodón, bayetas y sobrecamas, en pago de
Hasta 1610 aparecen en la documentación sólo tres obrajes: el de Las Peñas, de
mercaderías importadas como herraduras, telasde Europa y China, papel,agujas,
etc En esos casos, los montos de las compras no son altos —no suelen
Alonso de Coria Bohorques y su esposa María Osorio; uno pequeño, instalado en
exceder los la ciudad, y dedicado a la elaboración de sombreros; y el de Tristán de Tejeda,
150 pesos—, y el pago se efectúa varios meses después de la operación. Acumula¬
dos de esta manera, ios tejidos locales son utilizados por los mercaderes para ubicado en Soto.Sólo el mencionadoen últimotérmino está representadoprofusa¬
mente en la documentación; y a estar por sus actividades comerciales, es el único
comprar en Buenos Aires los productos que llegan de Brasil y Angola. Por su parte,
los negociantes fuertes de la época que introducen las importaciones, colocan sus que produce buenosdividendos a su propietario.
mercaderías en Córdoba a cambio de géneros bastos, que luego son revendidos
en Potosí m\ Cuando Tristán de Tejeda funda su obraje de paños, ya ha logrado un capital
suficiente como para correr los riesgos de una actividad especializada y para
El peso de los textiles en la tributación de cada encomienda varia año a año, ya realizar las inversiones necesarias Paradigma del conquistador de éxito, ha
que depende de los intereses del encomendero, y dela dirección que éste le asigne recorrido ampliamente la jurisdicción, colaborando como "capitán de guerra" en
al trabajo de sus pueblos de repartimiento todas las expediciones y malocas que se organizaron para el control militar del
territorio. A fines del siglo XVI, posee varias encomiendas que le fueron otorgadas
Aún en aquellos casos en que el feudatario decide destinar en forma perma¬ por distintos gobernadores: están a su cargo ios pueblos y parcialidades de
nente una parte de sus indios de servicio a las tareas textiles, las manufacturas de
Chimbosacate, Nunsacate, y otros del Valle de Soto n08). Las relaciones de paren¬
géneros bastos, constituyen siempre sólo una de las actividades económicas que tesco que ha establecido, lovinculan a otros encomenderos prósperos del distrito;
ios vecinos emprenden con sus encomiendas. y sus negocios lo enlazan con el comercio atlántico.

Ya en 1579, Tristán de Tejeda había solicitado y obtenido en merced del


gobernador Gonzalo de Abreu, un "herido" de molino y otro de batán, ubicados a
una legua y media rio arriba de la ciudad de Cór doba, con el uso de toda el agua
Incentivados por las ganancias que se obtienen con la comercialización de esas
manufacturas, a fines del siglo XVI algunos europeos conforman, dentro de sus que para ello fuese necesaria durante los meses de diciembre a abril <m. La
repartimientos, una unidad productiva dedicada específicamente a la elaboración solicitud advierte que la intención de elaborar tejidos bastos con la mano de obra
de tejidos en unos casos, o de sombreros y lienzo en otro. Los documentos de la de sus repartimientos, era una vieja idea del encomendero, siempre atento a los
época los denominan "obrajes". negocios rentables.
t

Ayudados por el sistema de reducción en pueblos, los feudatarios emplean el Sin embargo, en los años siguientes, los pueblos de sus encomiendas producen
método de concentrar un sector de la fuerza de trabajo indígena de sus reparti¬ una buena cantidad de géneros, aunque nada indica la utilización del "herido" de
mientos, para asegurar un mayor rendimiento y control efectivo sobre las tareas batán concedido.
textiles
En 1597, Tristán de Tejeda encuentra el momento oportuno para llevar a la
Una empresa de tal tipo, requiere de una mediana inversión en elementos práctica su proyecto. Las operaciones comerciales de los últimos años con
técnicos; y sobre todo, del riesgo que significa dedicar parte de sus indios de esclavos y harinas de trigo, lo han provisto de un buen capital; muchos de sus
encomienda a una sola actividad especializada nm. indios encomendados han sido reducidos en pueblos, y un sector de esa mano de

106) A) IPC, Reg 1, protocolos de


13/3/1600 y de 21/1/1598.
107) Es indudableque la mayar inversión que se realiza en la 108) Cfr. Cédulas de encomienda concedidas a Tristán de Tejeda de 11/3/1574 (en: AHPC, Esa 1,leg
producción textil, reside en la mano de obra
indígena que se deriva a esa tarea. Las inversiones en equipo técnico, no son especialmente 4,exp.l),del4/l/1578(en:AHPC,Escr.l,leg 2,exp,2),del6/2/1579(en:AHPC,Escr l,leg.2,exp
significativas y mucfio menos lo empleado en renovación del material Cfr Assadourian (1983: 28- 2) y de 15/10/1586 (en: AHPC, Esa. 1, leg 4, exp 10)
29) y Doucet (1986: 89-90)
109) L M : 102; merced de 16/7/1579

192 193
r
obra está dedicada a las tareas textiles. Por si esto fuera poco, en el Valle de Soto,
el río que riega la región se ajusta a los requerimientos de un batán; ya que a negocios de Tejeda marchan con fortuna, y le permiten cancelar la deuda un año
diferencia de aquel otro obtenido en merced, puede ser utilizado todo el año antes de lo previsto m3).

Es así como, en mayo de 1597, Tristán de Tejeda forma una compañía con La receptividad del mercado interregional a los géneros de Soto, hace que el
Alonso Bueso, un conocedor de las tareas textiles, que ya había desarrollado esa encomendero decida ampliar la inversión original. Para ello, necesita aumentar la
actividad en Santiago de Chile. Elencomendero se compromete a dar y a alimentar fuerza de trabajo, que su repartimiento no está en condiciones decubrir sin correr
durante diez años cienindios y cincuenta indias de su repartimiento;pone además el riesgo de abandonar las otras actividades productivas Recurre entonces a un
sitio y casas para el obraje, batán, telares, torno, lanas, herramientas y tintas procedimiento simple: en 1602 se hace cargo de las deudas de una encomienda
Alonso Bueso se encargará de construir el batán y de que funcionen los telares, y vecina al Valle de Soto, por un monto de 2.001 pesos y 5 tomines. Juan Alvarez de
de otras tareas propias de los obrajes de géneros La paga de Bueso consistirá en Astudillo y su esposa Lucía de Grados -tales son los feudatarios en dificultades-
la cuarta parte de lo producido,debiendoresidir en elpueblo de Soto, donde estará deben pagar su deuda haciendo beneficiar con los indios de su repartimiento la
ubicado el obraje El concier to establece también los tipos de efectos textiles que se lana y el algodón que provea Tejeda. En el compromiso se fija la arroba de lana a
producirán: paños, frazadas, cordellates, bayetas y sayales"101. medio peso, y la de algodón a como la comprare Tejeda; y se establece que, del
lienzoy sayal que se hiciere,dos tercios serán para el acreedor,acordando el precio
a medio peso la vara. Por su parte, Astudillo se compromete a hacer hilar sólo lo
Al año siguiente, la empresa así fundada comienza a vender los géneros que se
elaboran en Soto. Las perspectivas aparecen promisorias,y Alonso Bueso se atreve que Tejeda le de, aunque si hiciera hilar más, también le entregará dos tercios""'.
a hacer otra inversión: se concierta con el comerciante Lope Vasquez Pestaña,
quien traerá desde Buenos Aires, y hasta el sitio del obraje, una pieza de artillería; Dos años más tarde, cuando aún no ha cubierto la obligación contraída, Juan
en Soto, Bueso se encargará de fundirla para hacer con ella campanas y almireces Alvarez de Astudillo está preso por otra deuda. Nuevamente Tejeda acude para
hacersecargo del compromiso;sólo que esta vez lascondiciones para el cobro son
aún más favorables para el dueño del obraje de Soto.
Hacia 1600,el obraje está funcionando a pleno.Los vecinos deldistrito contraen
obligaciones a pagar en géneros "de los ¡juesehacen en Soto"; el mismo Alonso Bueso Enefecto, Astudillo le da poder a Tristán de Tejeda para administrar los indios
aparece en los protocolos notariales vendiendo los textiles por valores poco de su encomienda, hasta tanto se cobre 1.851 pesos y un tomin, total de lo
acostumbrados en la época: 1.32.3 pesos durante ese año "ia. Otro tanto sucede con adeudado. Con el sayal, lienzo, costales y carretas que se produzcan en el
Tristán de Tejeda, quien ha incorporado la producción de jabón a las tareas que se repartimiento,Tejeda cubrirá los gastos del poblero, de la lana y el algodón que se
realizan en Soto. compre para beneficiar, así como la doctrina y ¡as medicinas para los indios. Por
último, el concierto fija una cláusula que resulta interesante por lo que implica en
En ese año, el encomendero compra en la ciudad un solar con casas y tiendas, relación al manejo de la mano de obra indígena: hasta tanto la deuda sea cobrada,
por precio de 4.220 pesos. La forma de pago se establece sobre las rentas que dan Astudillo no podrá "entrar ni salir" del repartimiento "15).
la empresa degéneros, las tierrasy lostributosdesus indios deencomienda: 1000
pesos en reales, 1.000 pesos en hanegas de harina puestas en Buenos Aires para
Navidad de 1601, y el resto en ropas. Sin embargo, la producción del obraje y los
113) AHPC, Reg. 1,protocolo de24/3/1600.Losgénerosconlos que se efectúaráel pago señalan los tipos
de efectos textiles quese producen en el obraje, y sus pedos habituales: 80 frazadas a 10pesos cada
una, 200 varas de bayetas de colores a 2 pesos la vara, 100 varas de cordellate a 2 pesos la vara, 44
110) AHPC, Reg 1, protocolo de 30/5/1579. La actividad anterior de Alonso Bueso, es constatada
por varasde paño a 8 pesos la vara, 300 varas desayal abatanado a 1peso la vara, 10cordovanes a 4 pesos
Assadourian (1983:25). Para la producción textil de la encomienda de Tristón de Tejeda, cfr. AHPC, cada uno, 14 sombreros de 28 pesos, y 100 pesos en 2 quintales de jabón
Reg 1, protocolo de 3/10/1595. 114) Lucía de Grados posee varias cédulas de encomienda, heredadas en segunda vida de su esposo
111) AHPC, Reg 1, protocolos de 29/8 y 29/12/1598 l .os almireces servían como morteros pequeíios y Frandsco Blasquer de 19/12/1573,de 18/10/1578 y de 6/5/1579 (en: AHPC, Escr 1,leg. 3, exp 3);
portátiles, para machacar o moler las tinturas. todas ellas de puebloscácanos alValle do Soto. La obligación por ladeuda contraída, en AHPC, Reg
112) Cfr. AHPC, Reg I,protocolosde3/10y6/10del año 1600 1, protocolo de 14/6/1602
115) AHPC, Reg. 1, tomo 16, protocolo de 14/5/1604
194
195
te. i te. 1 < Cx-
Entre los años 1600a 1605,Tristán de Tejeda figura en los protocolos notariales
realizando operaciones por un monto de 10 294 pesos, obtenido sólo con la venta Los fletes,
de textiles de su obraje. Esa suma, corresponde a siete transacciones comerciales,
pagadas todas en metálico por europeos que no residen en la jurisdicción.
La organizacióndemediosde transporte, es inherente al sistema de encomien¬
No hay ningún otro vecino de Córdoba que se aproxime al monto antes das De ellos depende el flujo de los excedentes rurales hacia los mercados: tanto
mencionado. En realidad, el grueso del dinero que se obtiene con la producción el urbano local, como los regionales.
textil local queda en manos de Tejeda, de su pariente y también encomendero
Alonso de la Cámara, y de! encargado del obraje de Soto, Alonso Bueso fll6), Elresto Imbuidos del espíritu de la expansión mercantil europea, los vecinos se
de las transacciones con géneros locales son de poca monta, y proceden en su preocupan por asegurar el movimiento de esos excedentes. Esasí como,a fines del
mayoría de los tributos de las encomiendas. siglo XVI, la región comienza a desarrollar una infraestructura destinada a los
trajines Dirigida en un comienzo a dar salida a los productos locales, su crecimiento
se estimula por la amplia circulación de mercancías a través del eje Buenos Aires-
Del obraje de sombreros y paños ubicado en Las Peñas perteneciente a


Alonso de Coria Bohorques , la documentación no ofrece mayores datos. Sí
sabemos que en 1607 la situación de la empresa es difícil, ya que su dueño debe
Potosí.

entregar durante ocho meses los indios del repartimiento y el obraje de sombreros En efecto, a partir de la fundación del puerto atlántico, la ciudad de Córdoba,
a Pantaleón Márquez Correa; también en este caso, por una deuda impaga ni7). por su situación geográfica, pone en contacto regiones de un amplio espacio Las
zonas productivas y la mano de obra indígena con que cuenta la jurisdicción,
Las pocas inversiones técnicas, y el escaso aprovechamiento de las ganancias contribuyen a su vinculación con las rutas mercantiles. Y puesto que esas condi¬
por parte del resto del grupo europeo, muestran al obraje como una modalidad ciones previas se encuentran en el tributo de los repartimientos,la organización de
productiva que no tiene consecuencias notables en el conjunto de vecinos y fletes se convierte en otra de las actividades importantes de los encomenderos
moradores del distrito. Por otra parte, y a pesar délas buenas ganancias obtenidas
por el encomendero Tristán de Tejeda, el descenso demográfico de la población El transporte de mercaderías es un buen negocio para los feudatarios. De allí
indígena impidió la expansión de esta forma organizativa ni8), que, desprovistos hasta la segunda década del siglo XVII de una producción local
de muías,recurrena otro tipo de recursos para los fletes. Nuevamente la población
Ya se tia te de manufacturas elaboradas en los pueblos de repartimiento, en la indígena de los repartimientospone los mediosnecesarios: construccióny aderezo
vivienda urbana, o a tr avés de obrajes, el punto de partida de la producción textil de las carretas, cría de animales de tiro, producción de comida en las tierras de las
loca! es la misma: el servicio personal de los indios de encomienda. Esta forma de encomiendas, guascas, costales, y —
especialmente—, mano de obra para los
tributo, permite que el encomendero oriente la mano de obra indígena hacia la viajes.
confección de textiles con distinta intensidad según los casos. Es evidente que la
diferencia entre las tres modalidades de trabajo, es sólo de grado. Desde épocas tempranas, los feudatarios cuentan con losavíos necesarios para
el movimiento interregional de los productos. Los conciertos que firman con sus
administradores,obligan a estos últimos a acompañarlos en los trajines hacia otras
ciudades de la Gobernación

119) Los primeros conciertos entre vecinos encomenderos y moradores del asiento para la administra¬
ción de las encomiendas, en ios que figura la obligación de trabajar en los trajines, en: AHPC, Reg
116) Durante esos años, Alonso de la Camara realiza operaciones por un monto
que liega a los 2 000 1, protocolo de 28/6/1585 y 7/8/1586. Por las mismas fechas, aparecen en los asientos notariales la
pesos;y Alonso Buáso a los 1700 pesos. venta de carretas y yuntas de bueyes (en: AHPC, Reg 1, protocolos de 1/9/1585 y 6/5/1587) Los
U7) AHPC, Reg. 1, tomo 20, protocolo de 16/8/1607. A diferencia del arreglo anterior primeros fletamientos son anteriores: uno de ellos está relacionado al aneo de ganado vacuno y
entre Tristán de
Tejeda y Alvarez de Astudillo, Correa loma para st todo lo que se haga en el pueblo caballar desde Santiago del Estero a Córdoba ;y el otro es realizado para el envío de mercancías a la
118) Esta observación es fundamentada por Assadourian (1983: 28-29). cabecera de la Gobernación (en: AHPC, Reg 1, protocolos de 26/8/1583, 3/7/1584 y 20/10/1584)

197
196
No es un hecho fortuito el que Francisco de Vittoria —pionero de las impor¬
taciones por Buenos Aires—, concierte en 1587 un flete con encomenderos cordo¬
i. la franja social no encomendera son contratados para el trabajo de los trajines, y a
menudo el aviamiento del viaje se obtiene en las tiendas locales n23).
beses para transportar carretas con ropa desde el puerto a Mendoza;o que, un año
después, el comerciante Cristobal Lianez alquile carretas, bueyes e indios en Sea cual fuere la travesía, cada carreta necesita de dos yuntas de bueyes, un
Córdoba, para llevar mercaderías desde Buenos Aires a Santiago del Estero a20). indígena para su cuidado, sebos, yugos, coyundas y cueros. Habitualmente, el
Al despuntar la últimadécada de ese siglo, algunos vecinos están dedicados de grupo de carretas pertenecientes a un mismo fletante, se acompaña de un indio
carpintero para arreglar los desperfectos que sufren durante el trayecto; y cuando

lleno a los tráficos comerciales que en un piimer momento—, relacionan a
nuestra ciudad con la cabecera de ia Gobernación Tienen para ello una pequeña
infraestructura conformada por carretas y bueyes de tiro;poseen también caballos
de carga en los que conducen ropa, hierro y otros productos al Potosí 02I).
1 se trata del transporte de esclavos, la provisión de alimento para el viaje se
convierte en un rubro fundamental.

El crecimiento del movimiento comercial a partir de 1590, sorprende a los


vecinossin la dotación necesaria de carretas para cubrirlasdemandas de los fletes;
Por otr a parte, la provisión de comidas y la mano de obra indígena del distrito
de Córdoba atraen a los grandes comerciantes importadores, que acuden a la
¡
pero las ganancias que se logran, justifican las inversiones en metálico para su
compra. Se desarrolla entonces un afanoso comercio de transportes y de animales
región para completar la organización de los fletes. Veamos un ejemplo. En 1591, de tiro. Es así como Juan Lopez de Cervantes da poder a un residentede Santiago
el portugués Lope Vasquez Pestaña pone doce carretas y doce yuntas; Tejeda
delEstero para adquirir500 pesos en carretas y Juan de Burgos se atreve a destinar
contribuye con los indios y la comida necesaria, además de un indígena que 1.500 pesos en nueve carretas del Tucumán, cincuenta bueyesde tiro, diez caballos
aderece los transportes y otras doce yuntas . Entre ambos pagarán una persona
j de carga y una muía ensillada y enfrenada n24).
"que ande con las canelas", quien se encargará de llevarlas a Buenos Aires y
alquilarlas a los mercaderes que desembarquen; también las utilizarán para Por su parte, otros encomenderos-comerciantes, encaran la construcción de
conducir mercaderías propias y buscar vino en Mendoza. En los años siguientes, transportes concertando con carpinteros para que trabajen en sus repartimientos
el mismo comerciante continúa acudiendo a Córdoba para alquilar los indios Hacia 1605, el pueblo de Saldan de la encomienda de Leonor Ponce, es un sitio
indispensables en sus trajines y para concertar con otros vecinos nuevas com¬ habitualadondeacudenlosvecinos para comprar bueyes carreteros; con la ideade
pañías de fletes n22). ampliar sus ingresos, ese año ia encomendera contrata a un oficial carpintero,
Los trajines generan actividades complementarias, que son aprovechadas por
quien ayudado por veinte indios del repartimiento, construirá carretas, puertas,
ventanas y cujas a25>.
otros sectores internos de la sociedad. La ruta de los productos importados por
Buenos Aires, y las de los circuitos comerciales interregionales, tienen su paso
obligado por la ciudad de Córdoba; aquí se efectúa el recambio de los fletes, se
compran y se venden carretas, bueyes, herraduras y clavos.Muchos miembros de
123) Sobre la compra de arretas y bueyes, cfr AHPC, Reg. l,protocolosde28/1, 2/3 y 9/6/1593. Como
i ejemplo de los poderes de los encomenderos para losfletes, AHPC, Reg 1,protocolo de30/10/1593.
En cuanto al precio de las herraduras y los clavos, en 1593 doscientas herraduras cuestan sesenta y
cinco pesos y quinientos clavos valen diez pesos Sobre la provisión en las tiendas, cfr, AHPC, Reg
120) a concierto de flete de Francisco de Vittoria, se realiza con los encomenderos Bartolomé Jaimes, 1, protocolo de 28/2/1598
Pedrode Soria, Pedro de Mojica y Ana de Rosales; comprende el traslado de 25 carretas (en; AHPC, 124) AHPQ Reg 1, protocolos de 15/10/1593, 2/9/1594 y 2/12/1591 En 1588, el abildo ordena que
Reg l,protocolodel2/7/1587) BfletamientodeCristobalLianez,essobresietecarretas(en;AHPC, ningún vecino de la ciudad pueda alquilar más de 4 arretas para ir a Buenos Aires, Chile o Santiago;
Reg 1,protocolos de 12, 14 y 16/5/1588) si alquila otras, que pague 50 pesos por ada carreta de más; no habiendo vecinos en la ciudad que
121) Los caballos de carga sirven como moneda para efectuar algunos pagos (en: AHPC, Reg, 1, tengan arretas para alquilar para el aviamientodelos mercaderes pasajeros, puedan alquilarlas los
protocolos de 3/8 y 30/8/1589) Un contrato tipo de flete, es aquél en el que Pedro de Soria lleva que tuvieren licencia de la justicia mayor. Que ningún vecino tenga carretas en guarda y custodia
mercaderías en ochenta caballos de carga desde Santiago del Estero al Potosí, cobrando cuaren ta y fuera de la ciudad para alquilarlas.
dnco pesos por cadq carga de ocho arrobas (en: AHPC, Reg 1, protocolo de 12/3/1591) Deestaforma,seponeestancoalaspersonasquenosondeestaciudadyquealquílanarretasporque
122) La compañía entre Vasquez Pestaña y Tristón deTejeda, en AHPC, Reg 1,protocolo de4/12/!591
los vecinos de Córdoba reciben notorio daño en elfo ya que "no podran sustentarse al no poder
En 1594, el portugués da poder a Martín de Salvatierra para comprar bueyes y alquilar a cncomen- alquilar sus propias arretas" (Acta apiíuiar de 19/12/1588;AM., II: 80-81)
125) AHPC, Reg. 1, tomo 16, protocolo de 11/5/1605 y Esa. 1, leg 17, exp. 3.. Otros encomendaos
deros!ocales,diezindiosa treinta pesoscada uno;alosindioslesdarádecoroer,ademásdeunpellejo
de nutria o una manta de lana (en: AHPC, Reg. 1, protocolo de 2/7/1594) dediados a los trajines, toman iniciativas semejantes; tal el aso de Pedro Luis de Cabrera (en:
h AHPC, Reg 1, protocolo de 2/12/1591
198 199
El caso de Leonor Ponce no es el único. Ya se trate de emprendimientos en agregar que, aún varios años después de esta rendición de cuentas, los registros
pequeña o en gran escala, la población indígena de las encomiendas es la que notariales siguen asentando la venta de cañetas construidas en el repartimiento
subsidia la infraestructura local de los trajines. que fuera de Martin de Salvatierra n26).

Tal vez el ejemplo más explícito en ese sentido, sea el del pueblo de Escoba.
Ubicado a diez leguas delaciudadde Córdoba, cerca del Valle deToco Toco, había
Por su especialización en el tr abajo de los fletes, el pueblo de Escoba es un caso
pertenecido al conquistador An tonio Pereyra; y a fines del siglo XVI pasa a manos
de su yerno, Martin de Salvatierra.
particular en la jurisdicción. Sin embar go, desdela fundación del puerto de Buenos
Aires y hasta 1610, una parte de la actividad que se despliega en las otras
encomiendas locales, también está dirigida a producir los bienes necesarios para
Durante muchos años, Salvatierra se dedica a los fletes, para lo cual el
el movimiento de los trajines. En ese periodo, los nombres de los fletantes que
repartimiento de Escoba proporciona los medios necesarios: indígenas para
aparecen en los registros notariales, son los de los feudatarios-comerciantes del
conducir las carretas, costales y guascas para el transporte de mercaderías, pez y
distrito La producción de una infraestructura para la circulación de las mer¬
brea para calafatear y pintar las maderas y cubrir los fardos y bañiles, entre o tros
cancías, no sólo les permite garantizar el movimiento de sus propios excedentes
tributos. Además, algunos de los indios han adquirido una cierta especialización rurales, sino además —y a través de la participación activa en los circuitos
en trabajos de carpintería

mercantiles ,obtener beneficios en metálico
En uno de sus viajes desde Buenos Aires hacia Córdoba, —mientras conducía
En los últimos años del siglo XVI, la intensificación del comercio de esclavos,
barriles con herraduras, clavos, herramientas y azúcar— , Martín de Salvatierra
fallece Al poco tiempo, el pueblo de Escoba pasa a ser administrado por el nuevo
hace que los fletes que organizan los encomenderos extiendan su radio de acción
hasta el Potosí, donde los pagos son efectuados en moneda.
esposo de la viuda —de nombre Miguel de Vidaure, vecino de La Rioja—,en su
calidad de tutor de los hijos menores
En ese sentido, el dinámico tráfico que se genera desde Buenos Aires hacia el
interior del espacio virreina!, presta la coyuntura necesaria para que el negocio de
Como en años anteriores, las utilidades, frutos y provechos que Vidaure
obtiene del pueblo, están dirigidos a la actividad delos trajines . Desde 1597 a 1601, —
los trajines —al producir para el servicio de los fletes ,hagadesplegar al máximo
los recursos de las encomiendas.
los mayores réditos de la encomienda se logran del alquiler de indios, carretas y
bueyes y de la utilización de la mano de obra indígena especializada en trabajos de
El trajín de los esclavos requiere —además de los avíos habituales que men¬
carpintería.
cionáramos en párrafos anteriores—,una abundante provisión de comidas para el
viaje y tejidos bastos para su vestimenta. El fletamento que a comienzos del siglo
Por esos años, vecinos y comerciantes acuden ante Miguel de Vidaure para XVI conciertanPedro Luisde Cabrera y e! vecino del Potosí,Juan de Mendia, nos
alquilar a los indígenas de Escoba, hábiles en las labores delos trajines. El mismo señala la práctica más frecuente en esos contratos,
tutor había enviadoa algunosdeellosaTucumán, de donde regresaron "enseñados
en hacer carretas". Las ganancias que se obtienen van a manos de Vidaure; y en la
En efecto, con unos meses de anticipación, Mendia se ocupa en asegurar las
rendición de cuentas de la tutoría, los indios carpinteros señalan que no saben lo
condiciones del traslado de los esclavos que llegarán a Buenos Aires en enero de
que han ganado con su trabajo, "mas de que siempre han hecho obras por orden de 1605 . Como aún no ha determinado el destino final de los mismos, el convenio que
Vidaure". firma co n el encomenderode Córdoba es tab lece que se rán llevados "hasta Taíavera
o Mendoza", según su venta se realice a vecinos de Potosí o de Chile. Para el viaje
La especialización del pueblo en proveer a la infraestructura local de Sos fletes,
se manifiesta en los testimonios de sus aborígenes, cuando relatan que en sus
chacras no recogen comida, por lo que sus amos han tenido que comprarla. El
mismo defensor de menores advierte sobre la gran cantidad de obras de carpin¬
tería realizadas por ellos, "por ser muy buenos oficiales". Y nosotros podemos 12ó)AHPC,Reg 1,protocolos de S/2/1595 y 4/12/1597 y Esa 1,leg 3,exp.l0 La rendición de cuentas
de la tutoría, en Esa 1,leg 17,exp 12
200 201
p

I
I A comienzos del siglo XVII, Manuel de Fonseca Contreras desarrolla parte de
Cabrera pone seis carretas de madera entoldadas con cuatro bueyes cada una,
indios carpinteros y demás avío necesario; se compromete también a entregar en su actividad como encomendero en las tareas de los trajines. Para ello ha contra¬
Buenos Aires 350 varas de sayal, cuatro novillos y harina de trigo y maíz para tado los servicios del español Juan Gonzalez, quien reside en su casa. Como en
comida de los negros. Cuando el flete llegue a doce leguas de Córdoba —donde se otras oportunidades, en agosto de 1602 organiza un viaje a Cuyo para beneficiar
desvía el camino a Mendoza—, el fletante cambiará los bueyes y le dará gallinas, mercaderías, y de su producido comprar vino en caldo y frutas secas para vender
novillos gordos y otra cantidad de cereales. El precio total del trajín llega a casi en Córdoba. En las carretas y bueyes de Fonseca Contreras, Gonzalez conduce
1000 pesos y será pagado ocho días después que los esclavos arriben a su destino telas de Europa,clavo, pimienta y canela que han entrado por el puerto deBuenos
final. Ya sea en Potosí o en Arica, Pedro Luis de Cabrera cuenta con una red de Aires, azúcar del Paraguay, además de lienzo de algodón, cordellate, pez y sebo
comerciantes que poseen poderes suyos para cobrar el flete0275. que produce la encomienda.

Aún cuando el trajín de esclavos aparece como el trazo más fuerte en la trama Los afanes del trajín necesitan de la mano de obra indígena durante el viaje. Y
de los intercambios mercantiles del período —por las ganancias en metálico que junto con las mercancías se desplazanalgunos indiosdel repartimiento.Respetuo¬
produce y por los recursos que moviliza-; no son menos importantes 1os fletes que so de los requisitos formales, Manuel de Fonseca Contreras realiza ante el
ocasiona el comercio de las producciones interregionales, escribano y con la presencia del alcalde de sacas—,el registro de once indiosdel

pueblo de Calamuchita de su encomienda, que viajarán a Cuyo con las carretas. Sin
Las carretas que van a Buenos Aires cargadas con las harinas de trigo del embargo, y al igual que otros feudatarios, busca la manera de evitar el pago que
distrito, retornan con artículos de importación, que a veces pertenecen a los por mandamiento del gobernador Ramirez de Velazco, debe efectuar a los
encomenderos dueños del flete, o bienson enviadas por los grandes comerciantes encomendados que acompañan en el trajín; por ello indica en el registro que las
portugueses o potosinos. Desde Córdoba, las telas y las especies son distribuidas piezas de ropa que debe abonar las dará en el pueblo de Calamuchita, lugar de
a Cuyo, La Rioja, Santiago del Estero y Talavera; el regreso del trajín implica el donde saldrán las carretas. Al regreso del viaje, Fonseca Contreras también omite
transporte de otras mercaderías regionales. A esos circuitos, debemos agregar la traerlos ante el alcalde de sacas, y el retomo se consigna recién en octubre de 1609
(128)
ruta de los arreos de animales en pie con destino al norte de la Gobernación, y el
que une Santa Fe con Santiago del Estero, servicios que también son cubiertos por
la infraestructura local En 1587,el gobernador Ramirez de Velazco intenta poner orden en la salida de
indios dela jurisdicción, los que empleados en los trajines, en muchas ocasiones no
retoman a su distrito;y a través de lasOrdenanzas deAlcalde de Sacas,reglamenta
la utilización de la mano de obra de las encomiendas en la actividad de los fletes.
Por lasmismas se prohibe a los vecinos, mercaderes, pasajeros o viandantes, llevar
Puesto que los recursos que movilizan los encomenderos en el trabajo de los
trajines, se generan en sus pueblos de repartimiento, el sistema de fletes de la al Perú o al Valle de Salta ningún indígena sin expresa licencia del Gobernador.
jurisdicción se presenta como una prolongacióndelas encomiendas;y su rentabili¬ Para salir deldistrito deben ser registrados ante el alcalde de sacas, quien asentará
dad se apoya en las escasas inversiones monetarias que se necesitan para su nombres, edades, señas particulares, de dónde son naturales y quiénes son sus
mantenimiento. Esto se evidencia particularmente en la mano de obra indígena encomenderos; estos deberán poner fianza de que al año los retornarán, dando
que acompaña en los viajes. testimonio de los muertos durante el viaje Las Ordenanzas establecen también el
pago:en presencia del alcalde, el indígena recibirá cinco pesos por cada cincuenta
leguas "de ida y vuelta", y quien lo registre se obliga además a darle de comer n2S).

127) AHPC, Reg Momo 17, protocolo de 15/11/1604. Oíros conciertos semejantes en ibid., protocolos 128) AHPC, Reg 1,tomo 15, protocolo de 26 y 27/8/1602
de 23/3/1604, 1/5/1597 y 17/4/1597 129) Mandamiento del gobernador Ramírez de Velazco, de 19/10/1586 (en: A.C I: 636-642) Pese al
Por lo menos hasta 1610, los precios del trajín de esclavos son estables: 75 pesos por llevar dos
mandamiento, sólo a partir de 1601 se hace un registro más o menos constante de los indígenas que
esclavos en carreta hasta Salta y de allí a caballo hasta el Potosí; 55 pesospor cada carga de carreta
desde Córdoba a Mendoza y desde allí a caballo hasta Chile La variación en los precios,depende en acompañan en los trajines.
todos los casos del aviamiento que se estipula en el concierto de flete
202 203
Puesto que la mano de obra de lasencomiendas se desplaza con las mercancías,
las actas notariales que manifiestan la salida de los indígenas en los trajines, nos FRECUENCIA ESTACIONAL DELOS FLETES (1601-1610)
resultan un material precioso para conocer el destino y la frecuencia estacional de (según los registros de indios)
los viajes

M E S E S

Septimbr Octubre Noviembr Dicembr


DESTINO DE LOS FLETES

Febr o Marzo Abril Mayo Junio Julio Agost


0
(según los registros de indios) u
0
c

a BUENOS AIRES 12 56 25 13 6 2 1 2 3 4 14 26

A a CUYO 8 4 7 2 2 9 18 14 12 13 6 7
Ñ Buenos Santa San San No roí AL
O Aire Fe Mendora Cuyo
Juan Luis indica por
s año

Desde 1601 y hasta 1610,sobre un total de 277 registros,el 57,40% de los fletes
_ se dir igen hacia Buenos Aires. Entre los meses de noviembre y abril de cada año,
1601 12 1 6 - 1 20 la sucesión y repetición delos viajes al puerto son un e fecto de las cosechasde trigo
1602 36 3 15 2 1 1 - 58 de los pueblos de repartimiento del distrito, y de la llegada de los barcos con
esclavosy productos importados. Entre tanto, la zona de Cuyo concentra el 37,90%
1603 12 1 12 1 - - - 26 de los trajines, agrupados en su mayoría desde julio a octubre.
1604 28 3 7 9 - - - 47
1605 16 - 6 4 -
_ 1 27
La ausencia casi total de Santiago del Estero como destino final de los viajes,
tiene su explicación en un mandamientodel año 1597, que prohibea los vecinos de
1606 2 - 8 - - - 1 11 Córdoba dirigirse con los fletes más allá de la cabecera de la Gobernación, bajo
pena de pérdida de las carretas y fletamientos. Los motivos de la disposición,
1607 28 - 6 4 - 5 - 43 señalan que los habitantes del distrito tienen costumbre de enviar carretas y
servicios de indios a Buenos Aires y llevar fletados esclavos a Santiago del Estero,
1608 13 2 3 4 - - - 22
y que pretenden extenderse hasta las ciudades de Salta yjujuy, "que son mas de 400
1609 1 - 1 4 - - - 6 leguas, lo cual sería en perjuicio de los naturales..,". Sin embargo, —ya lo indicamos
antes—, los feudatarios continúan organizando sus fletes hacia el Potosí, aún
1610 11 - 3 3 - - - 17
cuando estos no figuren en los registros de salidas de indios t130'.

% 57,40 3,61 24,18 11,19 0,36 2,16 1,08 100


Los fletes se configuran como una extensión en el espacio de la actividad de los
pueblos de repartimiento: mano de obra indígena que se desplaza con las mer¬
cancías, orientación de la producción para obtener comidas,brea, guascas, costales
y construir carretas. Todos ellos son recursos necesarios para ios largos viajes

130) Mandamiento del gobernador Mercado de Pefialoza. de 28/5/1397 (en: A.M., III: -So—19).

!
204
205
Aún cuando la organización de los trajines en la jurisdicción de Córdoba, es En todos los casos, el curso favorable delos negocios se inicia con la comerciali¬
parte de un conjunto más vasto inmerso en la expansión mercantil europea y zación del tributo indígena. A partir de allí, y apoyados en la red de conexiones
depende del polo de desarrollo minero, es evidente que, desde 1580 a 1610, el personales que han establecido, organizan un eslabonamiento de actividades
distrito participa activamente en elcircuito comercial Potosí-Buenos Aires, debido mercantiles
á los recursos humanos y tributarios con que cuentan las encomiendas locales.
En ese sentido, la historia del feudatario Luis de Abreu, es ilustrativa de
las prácticas de ese sector social que —durante la época de auge de las encomien¬
das-, se muestra más aventajado por su rápido enriquecimiento Como ejemplo
comprensivo, seguiremos las líneas fundamentales de su actividad.
I
Los emprendimientos comerciales Luis de Abreu de Albornoz forma parte de la hueste de Jerónimo Luis de
Cabrera; y como tal, asiste a la fundación de la ciudad de Córdoba. Al igual que
y la prosperidad de los encomenderos. otros conquistadores, obtiene varias mercedes 03U.

Una de ellas, en las fuentes del río de San Juan, a nueve leguas de la ciudad,
Veinte años después de la fundación de la ciudad de Córdoba, la jurisdicción comprende un pedazo de tierra de media legua de frente sobre el curso de agua y
cuenta con una economía con excedentes exportables La ganadería, las harinas de una legua de ancho. Otras mercedes lo benefician con una cuadra para huertas y
trigo, las manufacturas textiles y la organización de fletes, son los sectores con chacras. Como no puede ser de otra manera, también se le otorga en el año de
productivos que permiten a los vecinos insertarse en los tráficos mercantiles. 1575, una encomienda en la zona de Ischiiín con 220 indios "de visita".
Al ampliar la posibilidad de una vinculación estrecha entre encomienda y Años después logra otra merced de tierras, esta vez en el Valle de Camin
mercado interregional, la apertura de la ruta Buenos Aires-Potosí, se presenta Cosquin, "que llaman Buena Vista"; además de unanueva encomienda. Esta última
j como una coyuntura favorable para el distrito.
comprende pueblos indígenas próximos a Las Salinas, y en las comarcas de
Salsacate y Olaen 032
La expansión de la economía beneficia al sector de los feudatarios. Estos,
mediante el manejo de los dos factores productivos fundamentales: el trabajo y la Tantos favores reales tienen su origen en los numerosos servicios prestados a
tierra, orientanlas actividades de sus repartimientos para adaptarse a las exigen¬ la Corona en la Provincia del Tucumán; ya que Luis de Abreu no sólo asiste a la
cias del mercado. fundación de Córdoba y a la "-pacificación" de su territorio, sino que también
participa —junto al gobernador Gonzalo de Abreu—, en la conquista del valle de
Es indudable que la encomienda está en la base de una empresa española Calchaquí y Salta; así como a las instalaciones de San Clemente y de la ciudad de
próspera. El registro de los nombres de aquellos habitantes del distrito que Lerma.
despliegan una acción sostenida en los intercambios mercantiles, nos conduce
invariablemente al conjunto de feudatarios más notables de la región. Pedro Luis
de Cabrera, Tristán de Tejeda, Luis de Abreu, Diego Celiz de Quiroga, Gerónimo
de Bustamante, Alonso de la Camara, Baltasar Gallegos —entre otros—> son
í sinónimos de empresarios florecientes, 131) Para la época de la fundación dela dudad, Luisde Abreu tenía alrededor de 14 añosdecdad. Había
naddohada 1559 en la villa de Huelva del Condado de Niebla; y junto a sus padres pasa al Perú y
Como en otros lugares de la América Hispana, la fórmula del éxito es inva¬ al Tucumán, donde la familia se establece en la dudad de Santiago del Estero (Cfr Doucet, 1986: 71
riable:el acceso a la mano de obra indígena se complementa con la adquisición del y t uque Colombres, 1980: 46)
132) Mercedes de tierras concedidas a Luis de Abreu en 12/3/1574 (en: LM: 18, 21 y 23); encomienda
usufructo o de la propiedad sobre las tierras rurales, Otro de los puntos de apoyo,
otorgada por Gonzalo de Abreu en 29/10/1575 (en: AHPC, escr. 1, leg 2, exp. 6 y leg 6, exp. 1);
es el establecimiento de vínculos políticos y de relaciones de parentesco merced de 25/6/1585 (en: LM :147-148);y encomienda otorgada por Juan Ramirez de Velazco, en
29/5/1587 (en: AHPC, esa. 1, leg. 6, exp 1y en: ANB, Expedientes Coloniales, año 1600, nro. 4).

206 207
¡i
i
a.
Mientras recorre el territorio de la jurisdicción, interviniendo en malocas
y la Coba,para que atienda los ganados y sementeras del pueblode Buena Vista.
al cuidado y En
"averiguaciones de indios", nuestro encomendero también se dedica ambos casos Luisde Abreu se compromete a pagar a losdos servidores en "moneda
aumento de sus posesiones. de la tierra": ya sea en lienzo y telilla de Santiago, o bien en un porcentaje del
dé multiplico del ganado, del higo, de la lana, de los quesos y de la comida que
Hasta 1586,se presenta varias veces ante el escribano público, para que éste produzcan los indios del repartimiento <I3S)
fe de la compra de dos solares y de unas chacras próximas al asiento dela ciudad.
Por esos años, recurre a un vecino entendido en arreos de ganado el
desde
encomen¬
Santiago del
— A partir de 1586, los polos geográficos de la actividad económica de Luis de
dero Juan de Mojica—,y concierta con él para que le traiga, Abreu se extienden a Buenos Aires y Jujuy, Es evidente que sus negocios comien¬
Estero, 300 vacas y 30 yeguas 033). zan a encontrar un curso favorable. En ese año, vende al portugués Anton de
Lisboa ganado vacuno y ovino por el precio de 155 pesos, que cobrará en moneda
la hueste
Luisde Abreu comparte con los otros conquistadores que llegaron en metálica. Hasta 1597, y en varias oportunidades, fleta cañetas, yuntas de bueyes
no posee dinero en
de Cabrera, la escasez de monedas de oro y plata Puesto que e indios de su encomienda, a comerciantes y vecinos que
participan de loscircuitos
metálico, las compras que realiza son pagadas en "producios de la tierra "; es decir,
mercantiles n36).
n34).
en piezas de ropa de algodón y en animales
Los emprendimientos económicos de Luis de Abreu, señalan que con las
antes
Aún cuando los montos que invierte no son grandes, las transacciones mercedesde tierras y de indios que le hansido otorgadas, el feudatario ha creado
mencionadas le permiten ir consolidando su futuro en el distrito. En las chacras unidades de producción diversificadas; en ellas ha introducido —con fines
indios de
próximas a la dudad, Luis de Abreu empleará la mano de obra de sus de ex¬ mercantiles—, el mundo de la ganadería, de la agr icultura, délas manufacturas de
encomienda para obtener los mantenimientos necesarios, e incluso algomanda género bastos y de la tracción animal.
cedente para comerciar con otros vecinos. Elganado de vacasy yeguas que
traer de Santiago del Estero, será criado en las tieiTas ubicadas
en las fuentes del Su repartimiento cuenta con la capacidad suficiente de transporte como
de repartimiento; esos rebaños para
ríode San Juan, y en los territorios de sus indígenas trasladar el tributo hacia el mercado urbano y el interregional; y además, puede
constituirán la base de los negodos de fletes que emprenderá en poco tiempo.
prestarelservicio de fletes a otros vecinos y comerciantes. Conesta infraestructura
Abreu logra vincular los excedentes rurales de sus encomiendas, con la ruta
Cuando la apertura del puerto de Buenos Aires señala el comienzo de
una
mercantil que une Buenos Aires con el Potosí.
con
corriente comercial estable, nuestro encomendero se dispone a participar
con la producción de sus
energía en el movimiento mercantil. Para ello cuenta Durante esos años, Luis de Abreu acude a algunas prácticas comerciales que
indios de repartimiento. son comunes a otros vecinos de la jurisdicción La mayor parte de sus
tratos
mercantiles —ya sea por servicios de fletes que presta, o por la venta de la
de su en¬
Como otros feudatarios de la región, encarga la administración producción de sus repartimientos—, son cobrados algunos meses
después de
de la mano de obra indígena—
comienda —es decir, la tarea de dirigir el trabajo efectivizar la operación
a otros europeos o criollos. En una ocasión, concierta con Pedro Sanchez
para que
éste trabaje "ai su casa y hacienda"; en otra oportunidad contrata a JuanJuarez de Estos pagos diferidos —cuya cancelación varía entre los tres y los ocho
meses—, tal vez constituyan una de las razones por las que los comerciantes
acuden con asiduidad a los encomenderos cordobeses para cenar tratos mercan¬
tiles.
j
584. Hada 1577, LuisdeAbreu
133)AHPC,Reg 1,protocolos notarialesde3/8/ 1576,26/8/1583,25/8/1
obtenido en merced un solar en la dudad, donde más adelante edificaría las casas de
j tambiéirhabía
su morada (Luque Colombres, 1980: 46)
134) Laspropiedadesinmueblesson pagadas en 13piezas deropa
de algodóny 55 pesostambién enropa 135) AHPC, Reg 1, protocolos notariales de
20 vacas y 3 yeguas. Es de suponer que tanto la ropa de 28/6/1585 y 2/11/1592
[ de algodón Elarreo de ganado se paga con 136) AHPC, Reg. 1,protocolos notarialesde21/7/1586,
como el ganado, formaban parte desús bienes, o delosde sufamilia en Santiago del Estero 16/5/1588,14/12/1590,10/1/1597, 18/4/1597
algodón y 2/12/1597

208 209
Hacia fines del siglo XVI, el poder y el prestigio de Luis de Abreu de Albornoz le permite, con ocasión de un pleito,reconvenir a un encomenderode Santiago del
se han acrecentadoconsiderablemente.Poruña parte,desde 1583 viene ocupando Estero, porque "no ha corrido la tierra, y no sabe lo que dice" a40>.
varios cargos públicos en el cabildo local, hasta que en 1601 es designado teniente
de gobernador de la jurisdicción de Córdoba n37). Esa influencia política se conjuga Por otra parte, Luis de Abreu ha comprado propiedadés inmuebles, ha ob¬
además con una complicada red de parentesco, que contribuye a su éxito como tenido en premio mercedes de tierra y dispone de la mano de obra indígena de
vecino encomendero, al facilitar en numerosas oportunidades sus actividades varios pueblos del distrito. Aún cuando en algunas ocasiones se ha visto envuelto
comerciales. en pleitos por la posesión de sus encomiendas, ha salido airoso de casi todas ellas
Además, durante cuatro años y hasta 1599,se desempeña como administrador
En 1595 fallece la esposa de Luis de Abreu, Catalina Príncipe; y a los pocos del repartimiento de los hijos menores de Juan de Soria.
meses, nuestro encomendero contrae nuevas nupcias con una viuda del distrito. Luis de Abreu se ha transformado así en un empresario floreciente. Las
Demostrando igual habilidad que el alférez Agustín Ruiz de Castelblanco al que — ganancias obtenidas con la mercantilización del tributo de sus encomiendas, le
nos refiriéramos en páginas anteriores—, Abreu elige ahora a Catalina de Bustos permiten financiar otras inversiones comerciales.
Esta última, a la muerte de su esposo Juan de Soria, ha quedado como administra¬
dora de los bienes de sus hijos huérfanos, entre cuyas heredades se cuenta el Desde comienzos del siglo XVíl, los polos de la acción geográfica de nuestro
repartimiento de Quilpo n38L En los años siguientes, Luis de Abreu se muestra encomendero se han ampliado: Brasil, Cuyo, Chile,Potosí y hasta Lima, figuran en
diligente al organizar los arreglos matrimoniales de los hijos de su nueva esposa sus transacciones
y los de su propia descendencia n3,). A través deellas participa en la distribución de las producciones regionales,de
artículos importados y de esclavos. Durante varios años lo veremos despachar
No podemos negar que nuestro personaje ha tenido numerosas oportunidades harinas a Buenos Aires y Brasil, adquirir arrobas de vino de San Juan, comprar
de promoción social. El joven que participara en ia fundación de la ciudad de varas de lienzo de algodón y sayal, vender vacunos en pié; o bien comerciar con
Córdoba, ha llegado a adquirir una cierta fama en el distrito. A tal punto que ésta
terciopelos, tafetanes, rasos y guantes "de Castilla", y paño de Quito No obstante,
es de hacer notar que los montos más altos que figuran en sus transacciones, están
relacionados al comercio de esclavos.
137) Los cargosea elcabildolocalabarcaron una amplia gama de funciones tales como: procurador (1583 Aún cuando Luis de Abreu no es un mercader a tiempo completo, sino un
y 1587), alcalde (1584), regidor (1586, 1587 y 1597), procurador de bienes de dirimios (1589), fiel encomendero fuertemente dedicado al comercio de la época, organiza con habili¬
ejecutor (1589), dad sus actividades económicas- Cuando comienza el siglo XVII ha establecido
138) En su trabajo "Los réditos de Quilpo " (1986), Gaston G. Doucet se ha ocupado con detenimiento una compañía comercial con Pantaleón Márquez Correa, y poco después ambos
sobre el fundonamientode esta encomienda cordobesa durante los años 1595 a 1598,que perteneae- instalan una tienda en la ciudad de Córdoba au>.
ra a juan de Soria, primer esposo de Catalina de Bustos,
139) De esta manen, Felipe de Soria —heredero de laencomienda de Quilpo—, casa con Luisa de Abreu
de Albornoz, hija de nuestro feudatario; mientras que un sobrino de este último, contrae nupcias con
Sabina de Soria Las redes de parentesco de Luis deAbreu nose agotan en sus familiares inmediatos:
su hermana Gerónima de Abreu de Albornoz, realiza tres casamientos sucesivos con feudatarios 140) AHPC, esa 1, leg 2, exp, 6.
notables del distrito (Gerónimo de Bustamaníe, Juan DiazCaballero y Diego Celiz de Quiroga) Por 141) En 1586 Juan de Espinoza le pone demanda por el arique Yalchimbo, de la región de Ischilín (en:
lo menos hasta 1610, numerosos tratos comerciales de Luis de Abreu involucran a esos parientes AHPC, esa 1, leg. 2, exp . 6); en 1598 inicia pleito a Francisco Lopez Correa por el arique Ibacriton
políticos. Además, en 1597, el casamiento de una hija natural de Gerónimo de Bustamaníe con (en: AHPC, esa. 1, leg, 6, exp. 1);y en el año de 1600 Pedro Luis de Cabrera le redama la posesión
Pantaleón Marques Correa, lo aproxima a quien poco después será su socio en el negocio de la trata del arique Samba (en: AHPC, esa 1, leg 10, exp. 7).
de esclavos, 142) Resulta prácticamente imposible obtener cifras fehacientes sobre el volumen del dinero invertido
En las redes de parentesco de Luis de Abreu, debemos agregar el casamiento de Sebastián de y las frecuencias da estas actividades comerciales Las prácticas de la époa, hacen que sólo se
Albornoz —hijo de su primer ma trimonlo- con Isabel de Quiroga, hija de Diego Celiz de Quiroga; registren ante el esaibano aquellos trate» cuyos pagos, o entrega de la meranda, se realizan en
asi mismo, el de Micaela de Soria —hija de Catalina de Bustos y Juan de Soria—, con Luciano de forma diferida. Por otra parte, y según se infiere de los poderes, un porcentaje importante de la
Figueroa. actividad mercantil se eíectúa fuera del ámbito de nuestro distrito
Por otra parte,otro hijo de nuestro encomendero, Diego Arballode Albornoz, es vecino de laciudad 143) Los detalles de la compañía comercia! que establece Luisde Abreu con Pantaleón Márquez Correa,
de Mendoza, donde se dedica al comercio y organiza una compañía con Marques Correa
figuran en el testamento de este último (en: AHPC, Reg. 1, tomo 25, protocolo de 12/10/1612). La

210 211

i fe
Por entonces, el sector más dinámico del eje comercial Buenos Aires-Potosí, EL COMERCIO DE ESCLAVOS EN CORDOBA (1588-1610)
está relacionado al comercio de esclavos. Las cantidades de dinero que moviliza (según los registros notariales)
y las actividades conexas que promueve, atraen el interés de los europeos del
Virreinato, Artesanos, profesionales, autoridades coloniales y encomenderos,
invierten en la compra-venta de esclavos. Losencomenderos son sinduda quienes Iotalde Número de Monto total Monto de las Monto de las
están en condiciones de colocar en ese rubro las sumas más importantes; la transacciones piezas délas ventas de ios compras do
AÑO vendidas transacriones vecinos de los vecinos
mercantilización del tributo indígena ios ha provisto de los recursos necesarios (En pesos) Córdoba de Córdoba
a-M) (En pesos) (Enpesos)

Los habitantes europeos de la jurisdicción no escapan a esa tónica general, ya


que se encuentran en una situación privilegiada, al ser la ciudad una plaza de 1588 1 2 1.000 - -
distribución de los esclavos que entran por Buenos Aires. Los escribanos locales 1589 - - - - -
registran permanentemente las transacciones de ese tipo que se conciertan en 1590 1 2 1000 - -
Córdoba. Esas operaciones comerciales están asentandas en el cuadro de la página
1591 6 14 2.404 624 1.752
siguiente 04S).
1592 - - - - -
1593 3 4 570 - -
1594 3 10 3.809 - -
1595 3 101 19.200 700 -
1596 12 31 7.185 1.575 -
1597 32 58 15.467 3 000 600

1598 15 19 5321 3703 1009

1599 24 42 12.495 2965 3350

1600 12 18 4 728 2.980 210

1601 19 50 12.121 3.171 8 090


1602 12 50 12.880 3.850 -
1603 6 7 1,740 270 1250
posesión de ia tienda, se infiere por transacciones oomerdaies que se realizan ante escribano (en:
AHPC, Reg. 1, tomo 17, protocolos de 31/5/1604 y de 15/6/1604) 1604 23 56 15936 6.992 1,124
144) El comercio de esclavos en Hispano-américa, las formas que adquieren las rutas, los mercados y los
precios, son estudiados por Rolando Mellafe (Mellafe, 1984) El tráfico de esclavos en Córdoba, 1605 12 38 10.670 415 6300
durante el período 1588-1610, es analizado por Carlos S. Assadourian (Assadourian, 1965). A los
1606 15 41 12.871 5100 7.641
efectos denuestro tema, conviene recordar queei período al quehacemos referenciaen estaspáginas,
conesponde al momento en que Buenos Aires reemplaza a Chile como centro de distribución de la 1607 11 24 6.896 2.756 4 896
trata; y al inicio de los asientos para la introducción de esclavos, siendo el portugués Pedro Gomez
Reynai quien los inaugura 1608 12 24 8.135 5.100 4.600
145) El cuadro que sigue, registra las operaciones comerciales sobre piezas de esclavos, que son
1609 11 18 6468 4.196 2 974
asentadas ante los escríbanos de Córdoba. En el caso de los vecinos de nuestr a ciudad, es de suponer
que realizaran más operaciones que las allí consignadas, y que son registradas en otras ciudades del
Virreinato. Esde hacer notar que ta totalidad de las tra nsaccjanes son pagadas al con tado y en dinero
1610 1 1 350 - -
metálico

212 213
En varias ocasiones Luis de Abreu interviene en el comercio de la trata:
para realizar tareas productivas. El interés de los vecinos por ia introducción de
conduce dinero de otros habitantesde la Gobernación para ser empleado en Brasil esclavos, consiste en las ganancias que obtienen con su reventa en Potosí y en
en la compra de esclavos; traspasa licencias de esclavos a autoridades locales; o Chile.
bien se encarga de recibir en Buenos Aires y trasladar a Córdoba, las piezas de
negros que otros vecinos han adquirido. Cuando en 1604 la Audiencia de Charcas designa un juez comisionado, para
que investigue el cumplimiento de las restricciones al comercio atlántico, Luis de
En 1602 Abreu emprende una importante operación comercial. Bajo la licencia Abreu considera inadmisible que "a vasallos de un mismo rey, se ¡es prohiba contratar
del asientode Pedro Gomez Peynal, su socio Márquez Correa trae de Angola 118 unos con otros" n47l
piezas de esclavos. Luis de Abreu losrecibe en Buenos Aires y luego los conduce
hacia Córdoba. Aunque la primera intención es comercializarlos en Potosí, se Los "vasallos de un mismo rey" a los que se refiere el encomendero, son los
informan que el mejor negocio consiste en llevarlos desde Córdoba a Chile, y portugueses que dominan las rutas del Atlántico sur y que, establecidos en el
desde allí a Lima por vía marítima, ya que en la capital virreinal el precio de las Brasil, atraen continuamente el interés de los habitantes de Córdoba, por las
piezas es mayor, la ruta requiere menos costos y se evitan muchos riesgos de ganancias que obtienen comerciando con ellos.
muerte de los esclavos.
La expansión económica europea del siglo XV, requiere oro y plata para su
Con el producto de la venta, Abreu y Márquez Correa compran ropa;y como circulación en forma demoneda.A partir de entonces, los portugueses recorrenlas
un negodo siempre se encadena con otro, la envían a Angola, donde sirve para rutas marítimas que conducen hacia los metales preciosos; y a fines de la centuria
pagar un nuevo lote de esdavos que el capitán portugués Vento Barbosa traerá a siguiente,manejan el comercio de contrabando de plata que fluye desde el Potosí.
estas tierras para su comercializadón a4í).
Las naves lusitanas cruzan el Atlántico sur, conduciendo esclavos africanos y
Apartirde entonces, LuisdeAbreu y su socio se convierten en los comerciantes mercaderías europeas. Su venta en el cerro minero les procura los pesos de plata,
fuertes de la región. Sus relaciones con el tráfico que se introduce desde el que utilizan como instrumento de cambio y como mercancía de exportación °4®.
Atlántico son estrechas; a tal punto que poco después el encomendero aparece
como propietario de un navio que recorre la ruta desde Buenos Aires al Brasil, en Desde Europa al Potosí el itinerario más corto pasapor Buenos Aires, donde se
el que envía harinas, bizcochos y cecinas y trae de regreso piezas de esclavos. inicia la travesía terrestre, En las ciudades que jalonan la ruta, los mercaderes
portugueses establecen amplias redes comerciales, que incluyen a los encomen¬
deros locales como socios de variados emprendimientos económicos. La escasez
de metálico en la Gobernación del T ucumán,estimula elcomercio en esas regiones;
Las actividades de Luis de Abreu y de Pantaleón Márquez Correa no son y sus habitantes participan activamente en la corriente mercantil que puede
simples hechos individuales,ya que ambos comparten con el grupo europeo local proveerlos de monedas de plata.
los mismos intereses.
En efecto, las buenas ganancias que logran los feudatarios al tomar parte en el
Desde 1591, el cabildo de Córdoba no se cansa de reclamar para que las comerciode la ruta Buenos Aires-Potosí, consisten no sólo en la multiplicación de
autoridades reales permitan enviar productos de la tierra a los puertos del Brasil. la inversión original, sino también en la obtención de metálico.
Esascontinuas solicitudes mencionansiempre la necesidad deintroduciresclavos
por Buenos Aires. Aunque en esos casos el pedido se fundamenta siempre en la
disminución de la mano de obra indígena, podemos afirmar que hastala segunda
década del siglo XVII la fuerza de trabajo africana no es utilizada en la jurisdicción 147) Cfr.: Molina, 1966: 108-110
148) Cit Céspedes del Castillo, 1985: 123 yss ;yCannabrava,op.dt 78-83 Por otra parte, la Real Cédula
de 2/6/1604, advierte que se saca plata de contrabando en las harinas que se llevan de Córdoba a
146) Losdatos sobre esta operación, en: AHPC, Reg. 1, tomo 15,protocolos de 12/8/1602 y 21/8/1602, Buenos Aires (citada por Cannabrava, op cit.); y en 8/2/1605, una Provisión del virrey, dirigida al
y en el testamento de Pantaleón Márquez Correa (op cit ) gobernador del Río de la Plata, Buenos Aires y el Paraguay, leindica que no debe consentir que se
embarquen partidas de oro y plata, quepasanpor la Provincia delTucumin (en: AM., IV: 149- 150).

214 215
Chile, su reventa les permite acceder al metálico que tanto escasea en la Gober¬
Cuando en 1585, juan de Torreblanca se casaba con la encomendera viuda nación. Agreguemos al respecto que losservicios que losmercaderes portugueses
Francisca Nuñez, no tenía en su haber más "de su capa y espada". Veinte años deben contratar para el traslado de los negros durante el largo itinerario terrestre,
después, el ahora feudatario maneja sus hatos y contratos pagando y cobrando en también es cancelado en monedas de plata.
pesos de plata. Otro tanto ha sucedido con Gabriel García, quien conjuntamente
con su hermano Francisco Garda de Frías —residente en el Potosí—, participa Las innumerables gestiones del cabildo de Córdoba para "comunicar los frutos
continuamente en la corriente comercial que procede del Atlántico y se dirige de la tierra con el Brasil y Angola, y traer en retorno ropas y esclavos", se entienden
hada el cerro minero claramente en el marco de la expansión mercantil europea, y en la coyuntura
favorable por la que atraviesa la ruta comercial que, desde Buenos Aires, se dirige
En general, desde 1590 en adelante, los protocolos notariales de la dudad de hacia el ceno minero
Córdoba registran un aumento sostenido de operaciones mercantiles, cuyo pago
se efectúa en metálico flS0). En 1607, el gobernador Alonso de Rivera informa al rey que con los excedentes
rurales de las encomiendas, que son "la moneda de esta tierra", los habitantes de la
No obstante, es de hacer notar que de todos los rubros comerciales que se Gobernación "hacen dellos moneda brevemente, con cjue hacen sus negocios..." tl31).
ac ti vanen la ruta Buenos Aires-Potosí, indudablemente es el de la trata deesclavos
el más buscado por los encomenderos locales. Una buena parte de la producción
de sus encomiendas —en especial la de harina de trigo—, es adquirida por
comerciantes portugueses que pagan en piezas de esclavos; y en el Potosí, o en La mercantilización del tributo de las encomiendas, ha generado la prosperi¬
dad de los feudatarios; en tanto, la ciudad fundada por Jerónimo Luisde Cabrera
también ve aumentar su población,y experimenta loscambioshacia una sociedad
149) La expresión referida a juan de Torreblanca, en la presentación que hace Pedro Garda, corno más compleja ,

apoderado de Juan Bernal de Mercado, solidtando se entregue la parte materna y paterna de la


herenda (en: AHPC, esa. 1,leg 16, exp 4) A manera de ejmplo de las actividades de Gabrid García
y su hermano, cfr.: AHPC, Reg. 1, tomos 16 y 18.
Los protocolos notariales de la dudad de Córdoba, ofrecen innumerables ejemplos sobre el interés
de los vecinos de la dudad, por partidpar en el comerdo a tlántíco En 1604 Pedro Garda Redondo cen con claridad en las calías de obligación. Se bata de una información seaela, hecha de oficio por
—casado con Luisa Martel délos Ríos,viuda dd fundador-, otorga poder a dosresidentesdel Potosí el gobernador del Tucumán, conira el comerdanle portugués Gomez de Acosta, afincado en la
para que vendan enesa dudad tres esdavos negros de Guinea,que había hecho traera BuenosAires mencionada ciudad de La Rioja (en: AND, serie Expedientes Coloniales, nro 16, año 1613)
en la caravela Muestra Señota de Guía; en d poder adata que las piezas deben ser vendidas al
contado. Un año más tarde, García Redondo vuelve a otorgar otro poder,para adquirir un navio para

En el expediente, varios veamos de esa jurisdicción, declaran contra el portugués a quien entre
abas cosas—, se lo acusa de practicar la usura Al parecer, Gomez de Acosta es el primer mercader
viajar a Angola (en: AHPC, Reg 1, tomo 16, protocolo de 19/5/1604 y tomo 18, protocolo de 5/2/ que enba en La Rioja, llevando 1 000 pesos en ropa; con el pretexto de que la fía a largo plazo, cobra
1605) a precio excesivo la mercadería, añadiendo a cada vara de lienzo, un real de ganancia Tal sucede
150) Conjuntamente con el ritmo aedente de la actividad económica y el establecimiento de redes cuando el portugués toma a su cargo las deudas de Melchor de Vega, vecino de San Juan de La Paz,
comerciales que abarcan la capital virreinal, Potosí, y Chile; los protocolos notariales registran el pagandopor él en lienzo;eldeudorse obliga a devolverle a razón decinco realesla vara, cuando en
surgimiento de un conjunto de prácticas mercantiles, que hasta entonces se desconocían en la realidad su costo es de cuabo reales la vara
jurisdicaón Nos referimos especialmente a las cesiones de cabro de deudas, y a los préstamos de El testimonio de Nicolás Carrizo, señala que hace ocho años él le debía a Gomez de Acosta la suma
dinero. Si bien un análisis más detallado de ambos temas, contribuiría al conocimiento de la de 4.000 pesos; pero como se alzaronlosindios de Valle Vidoso de su encomienda, no pudo cubrir
complejidad del mundo comercial del período, por ahora nos remitiremos a señalar algunas la deuda; ante esto, el feudatario se compromete a dar al portugués 600 pesos "muertos" más de los
características generales que le debe, por esperarlo un año; para ello, otorga escritura ante escribano, donde declara que la
Por una parte, indiquemos que a través de la forma notarial del poder aquellos encomenderos de suma "era por obos tantos quelehabía dado" Esta última, es una fórmula habitual en aquellas cartas
Córdoba que participan deamplias redes comerciales, delegan elcobro desumas queseles adeudan de obligadón que se firman ante los notarios de Córdoba, a las que hacíamos referenda como
en comerciantes que recorren las rutas virreinales. En la mayoría de loscasos lasdeudas son saldadas "préstamos de dinero"
en la Villa de Potosí, o en Talavera, y siempre en monedas de plata Indiquemos por último, que el mendonado Gomez de Acosta es aquel portugués que con gran
Por otra parte, los encomenderos más prósperos de la reglón aparecen a menudo en los protocolos escándalo de la pobladón riojana, vivía amancebado con la encomendera juana Bazan de Pedraza
notariales, realizando préstamos en dinero, o como beneficiarios de cartas de obligación que serán 151) Carta ai rey del gobernador del Tucumán Alonso de Rivera, representándolos inconvenientes de
cobradas al cabo de varios meses. comprender en la jurisdicaón de la Audiencia de Chile a las Provincias de Tucumán y Paraguay,
Aunque referido a la vedna jurisdicción de La Rioja, un expediente del año 1613 que es elevado a la fechada en Santiago dd Estero, en 21/3/1607 (en: Trelles, 1881: 110-114).
Real Audiencia, descubre algunos detalles sobre esas prácticas comerciales, que no siempre apare-

216 217
En efecto, la pequeña aldea hispánica que años antes se preocupaba por la Franco, Diego de Vega y Lopez Vasquez Pestaña, todos relacionados con la trata
exigua cantidad de vecinos en condiciones de defenderla, ve incrementar el de esclavos en el Atlántico sur. Su residencia, a veces temporaria, está deter¬
número de sus habitantes permanentes A este hecho se agrega el ir y venir de minada por la ruta al norte y la posibilidad de obtener a través de sus múltiples
comerciantes y tratantes, que periódicamente se instalan en la ciudad para negocios, los metales preciosos del Potosí n55).
concretar sus negocios.
El "golpe de gente" de fines del siglo XVI, incluye también a profesionales como
Cuando el cabildo en 1581,se quejaba ante el gobernador porque "sólo hay doce abogados, escribanos, sacerdotes y conocedores del arte de curar. En su mayor
hombres que puedan defenderla", lejos estaba de imaginar que pocos años después parte los vemos aparecer como residentes temporarios, realizando continuos
podía contar con cuarenta y ocho vecinos para cubrir una derrama de 700 pesos 053 viajes con fines comerciales, y formando parte de la red de correspondencias
mercantiles. Entre ellos, algunos licenciados en leyes se instalan definitivamente
En 1603, en pleno auge del comercio atlántico, la ciudad cuenta ya con un en la ciudad, y se integran a las familias encomenderas, merced a los lazos
centenar de familias permanentes; y cuando el cabildo necesita recurrir a con¬ matrimoniales que establecen. Tales son los casos de José de Fuensalida Meneses,
tribuciones extraordinarias, acude no sólo a vecinos encomenderos, sino también casado con una hija del feudatario Francisco Lopez Correa; o el de Luis del Peso,
a artesanos y oficiales que se han instalado en ella, así como a pobleros de los yerno de Tristán de Tejeda y luego encomendero de los indios de Ascochinga y
repartimientos.La derrama de ese año, es una señalclara de que la prosperidad ha Amanaes.
alcanzado a sashes, zapateros, herreros, albañiles, cirujanos y mayordomos de
haciendas fi53). También se dan cita en la ciudad vecinos y sacerdotes de otras jurisdiccciones,
especialmente de Santa Fe, Cuyo, y La Rioja. Sus tratos y contratos contribuyen
la consolidación de una corriente comercial estable, y la ubicación geográfica
asimismo a movilizar las producciones regionales y los artículos de importación
de Córdoba en relación a los tráficos mercantiles, ha generado la llegada de otros Los estantes o moradores —como los designan los documentos de la épo¬
europeos que se instalan en la ciudad. ca—, forman a menudo compañías comerciales con los encomenderos locales; en
los correspondientes contratos, estos últimos aportan los tributos de sus reparti¬
Son los antiguos tratantes que viajaban de un lugar a otro del Virreinato, y que mientos,expresados en harinas de trigo, manufacturas textiles, fletes y ganados;
ahora encuentran en el asientode Córdoba un punto importante para su actividad. mientras que en aquellos casos en que los socios son ios grandes negociantes
Losrecién llegados arriendan a losvecinos casas y aposentos con puertas a la calle, portugueses, los dos polos geográficos de la acción están referidos siempre a
por sumas que —comparadas con los precios de venta de los inmuebles—, Buenos Aires y el Potosí.
resultan altas. En las tiendas y pulperías que establecen, se venden artículos
importados que entran por el puerto de Buenos Aires, los productos de la tierra y La participación de los vecinos de Córdoba en esos tratos es evidente. Los
los que ingresan por el comercio interregional aS4). beneficios que obtienen, son el resultadode los servicios que prestan a los nuevos
habitantes, y fundamentalmente la consecuencia de su inserción directa en el
Además de estos pequeños negociantes, la ciudad recibe a los grandes comer¬ movimiento mercantil m.
ciantes portugueses de la época: Antonio Fernandez Barrios, Juan Dolez, Gaspar

155) Una mendón espeda!, debemos hacer del comerdante portugués Diego Lopezde Lisboa—abuelo
152) Adas capitulares de 22/11/1581 (en: AC, 1: 422-423), 23/8/1587 (en: AC, 1: 662) y 27/7/1588 (en: de Antonio de León Pínelo-, quien como sodo y administrador de Diego de Vega, aparece en
AM, 11:39-40). numerosas ocasiones en los protocolos notariales; durante varios años, es el encargado deconducir
los esclavos al interior del Virreinato (Cfr. AHPC, Reg 1, tomo 14, protocolo de 25/5/1603)
153) Derrama hecha para la construcción de la Iglesia Mayor, en Acta capitular de 12/7/1603 (en: A.M.,
Otro aso interesante, es el del portugués Lope Vasquez Pestaña, quien en 1594 se establece como
IV:22-26)
vecino de la dudad de Córdoba; protegido del gobernador Hernando de Ziraie, se destaa en el
154) Cfr. arriendos de 15/9/1597 y de 24/3/1600 de los comerciantes Francisco Rodríguez de Porras y
comerdo intemadonal que se genera a lo largo de la ruta Buenos Aires-Potosí.
Francisco Duarte respetivamente (en: AHPC, Reg 1, tomo 13, protocolos de la fecha).
156) La partidpaaón de los vecinos de Córdoba en esos tratos mercantiles, se refleja en los protocolos
Por otra parte, las actas notariales revelan el establedmiento en la dudad de los tratantes a que se
hace referenda,en lasfianzasyarriendospara las tiendas y pulperías. Cfr :AHPC, Reg. 1,protocolos notariales. Tomemos tres años como ejemplo: en 1595, de un total de 33 transaedones, 19 fueron
realizadas con o entre vecinos de la jurisdiedón; en 1596, lafeladón es de 22 sobre un total de 34; y
de 15/9/1597,29/5/1598, 18/11/1603 (lomo 16), y de 5/1/1605 y 20/8/1605 (tomo 18}
en 1597, 90 transaedones sobre 132 (en: AHPC, Reg 1, protocolos de ¡os años 1595, 1596 y 1597)

218 219
La prosperidad de los encomenderos amplía la franja soda! europea, en ese habitantes cortan maderas y llevan leña "sin dejar horca y pendón como están
segmento que los documentos denominan "servidores" de los españoles. En obligados" n60)
muchos casos, se trata de artesanos y oficiales recién llegados a la ciudad, que
conciertandiversas tareas con los feudatarios, por elcobro de un salario en dinero Las obras públicas sienten también el estimulo de esos años A los habituales
o en mercancías, y durante un tiempo que no suele exceder al año Se trata de
conciertos con distintos especialistas para construir definitivamente ei canal
albañiles, carpinteros, criados y mayordomos de las viviendas de la ciudad; en principal de la ciudad, se agregan las casas del cabildo y la Iglesia Mayor; estas
tanto que en otras ocasiones, se encargan de las carretas, bueyes y mercaderías de últimas, con mejor suerte que la interminable acequia
sus amos en las travesías comerdales "S7), Para los edificios del cabildo, la ciudad acude a los europeos con condenas
En estrecha relación con el crecimiento de la actividad mercantil, algunos

judiciales que por entonces también han aumentado su número—, quienes a
cambio de las penas, debencontribuir con vigas, puertas, varas y dinero Un oficial
artesanos instalan pequeños talleres de sastrería y herrería; las telas europeas y el
carpintero, Migue! Bidaure, es el encargado de enmaderar los cuartos de la
hierro que ingresan por el puerto de Buenos Aires, son sus materias primas. En construcción que da sobre la plaza pública; en tanto que el material y los indios
tanto que el acceso a los metales del Potosí, da lugar a la instalación de otro tipo necesarios, son puestos por los vecinos. Uno de ellos, Baltasar Gallegos, entrega
deartesano:hacia 1602,la ciudad cuenta además con un oficial platero Todos ellos madeia de algarrobo para tirantes y tablas en el pueblo de Cabichc de su
conciertan a menudo con aprendices españoles la enseñanza del oficio, y en no encomienda, donde es seleccionada por un carpintero de su servicio"6".
pocas oportunidades se los ve participar de las transacciones comerciales y en la
compra y venta de esclavos n58) En cuanto a la Iglesia Mayor, un oficial cantero residente en la ciudad es el
encargado de hacer el arco toral; y otro especialista en el mismo ramo se ocupa de
Acompañando al incremento poblacional, y a la ampliación de la actividad la fabricación del ladrillonecesario. Hacia 1601,las tijeras y tirantes del techo están
económica, la ciudad se va transformando en su aspecto edilicio. Muchos de los colocados y ei cabildo contrata a Hernán Alvarez para hacer 30 000 tejas"6".
nuevos moradores comienzan a levantar sus viviendas en la otra banda de la
acequia; y como en otras oportunidades, el cabildo debe intervenir para que esta El trajinar de mercaderes v otros transeúntes que se dan cita en la ciudad, crea
extensión de la urbanización se haga en orden. Para ello se desmonta el espacio nuevas necesidades de servicios, que hasta entonces eran cubiertas con los
entre la acequia y las cercas de las últimas casas, y nose permite construir sin haber recursos domésticos delos vecinos, De allí que ei cabildo otorga a Luisde Arguello
medido cuadras y solares "5". una licencia para instalar un meson donde los pasajeros puedan "agasajarse". F.i
edifido tendrá aposentos con puertas, llaves,barbacoasy corral para las cabalgaduras
065)
Casi todas lasviviendas tienen su huerta cercada y su gallinero;y los techos son
construidos con vigas y tablas delgadas sobre las que se aseguran las tejas. El tejar
de ManueldeFonseca Contreras, ubicado en los alrededores, provee los materia¬ Pero el movimiento del que hace gala la ciudad, trae también otras consecuen¬
les necesarios; y los montes que rodean a! asiento se van extinguiendo, porque ¡os ciastal vez menos deseables. Una de ellas es la práctica dedistintos juegos, ya sean
de habilidad o de azar, en los que se apuestan sumas importantes de dinero.

157) A manera de ejemplos, cfr.: AHPC, Reg I,protocolos de 7/8/1586, 2/12/1591, 4/7/1595 y 27/2/ 160) Actascapitulares dc25/2/1602 (en: A M ,III:241-243) y de26/6/1603 (en A M ,IV: 20-21);
1600 (tomo 13), de 17/3/1601 (tomo 14), y de 11/5/1604 (tomo 16) y AHPC,
Reg 1, tomo 18, protocolo de enero de 1602, referido a escritura de la vivienda de Miguel Gonzalez
158) Cfr :AHPC, Reg 1, protocolos de 5/7/1592, 6/9/1604 (tomo 17) y 3/10/1602 (tomo 15) En 1598, Jaimes
la instalación de artesanos y oficiales en la ciudad de Córdoba, se ve incentivada por un ÿ.anda¬ 161) Actas apitulares de 7/6/1586 (en: AC, 1: 611-612), 2/6/1589 (en: A M , 18-122),
miento del gobernador Pedro de Mercado de Peñaloza, que obliga a registrar ante ei escribano II: 1 2/9/1589 (en:
A M., II: 127), 19/8/1588 (en: AM ,II: 50-51), 23/4/1607 (en: A M ,IV: 378-379) y
público, y a trabajar por un año en la ciudad, a los oficiales zapateros, carpinteros, herreros, tejeros, 12/2/1607 (en:
AM, IV: 334-335)
vidrieros, olleros, botijeros, sastres, sederos y sombrereros que entran por Buenos Aires para ir al
162) AHPC, Reg 1,protocolos notarialesde29/10/1598y acta capitular
Perú (en: Acta capitular de 14/10/1598, A M III: 101-104) Unos años después, el cabildo ordena de26/7/!601 (en: AM, III:214-
215)
examinar a sastres, herreros, espaderos y barberos que ejercen sus oficios, o bien que exhiban ante
escribano las artas de examen que tienen (en: Acta capitular de 19/3/1603, A M , IV: 9) 163) La licencia se otorga por ocho años, y el abildo establece las tarifas en
dos reales por día y medio
159) Acta capitular de 13/6/1603 (A M ,IV: 14-15) real por cabalgadura (en: Acta capitular de 27/2/1604), AM , IV: 68-69)

220 221
A comienzos del siglo XVII, en unas casas ubicadas en la esquina de la plaza, La prosperidad de los encomenderos y el crecimiento de la ciudad, no sólo se
Manuel de Fonseca Contreras tiene una mesa de trucos con su paño azul, bolas y
explican con el incentivo del auge comercial del período , El aprovechamiento de
tacos, que atrae a transeúntes y habitantes,
esa coyuntura externa favorable, es posible también por las características internas
de la estructura colonial de la jurisdicción
Los dadosy naipes tienen también adherentesentusiastas. A veces loscapitales
que arriesgan —o pierden—, llevan a los vecinos a formalizar ante el escribano Elanálisis que acabamos de realizar, nos indica quela encomienda es ia basede
vehementes promesas; y así, frente al notario, Miguel de Ardiles empeña su
empresas españolas prósperas. Los feudatarios manejan dos factores productivos
palabra de no jugar dados ni naipes por dos años; y José de Fuensalida Meneses se fundamentales: la tierra y el trabajo indígena.
coloca a sí mismo una pena de 3.000 pesos —a pagar a la Cámara de Su Magestad,
a la Santa Inquisición,ya quien lo denunciare—, si enun plazo de dos años vuelve
En cuanto a la tierra, hemos señalado una afinidad estrecha entre encomienda
a jugar al comején. Tampoco falta quien solicite al gobernador que arbitre los
y apropiación del suelo. Esa tendencia a atribuirse la tierra de sus repartimientos
medios para cobrar cien pesos que ha ganado en el juego del palmo<1M). no está fundamentada en el valor económico de la propiedad rual;ya que ésta sólo
adquiere importancia cuando la complementa la mano de obra indígena.
Por su parte, mercaderes y tratantes suelen engañar a aquellos que adquieren
ropa en nuestra ciudad, y que debe ser entregada en Potosí o en Lima, cobrando En lo que respecta a la fuerza de trabajo aborigen, se encuentra implícita en
precios que no corresponden con la calidad de la mercadería. Fraudessemejantes todas y en cada una de las actividades económicas que conducen a la prosperidad
son practicados por pulperos y taberneros que venden vino al por menor;y para de los encomenderos, así como al crecimiento de la ciudad de Córdoba,
ello tienen varias botijas abiertas de distintas calidades. Constantemente el cabildo
debe intervenir fijando normas y precios; en unos casos, obligando a los comer¬ La forma en que los feudatarios utilizan el trabajo de los indios de sus
ciantes a tener ensus tiendas lasmuestrasde pañosy rajas, "para que se vea qué paños repartimientos,ayudará a definir las características estructuralesdel período enlo
son y dónde son hechos"; en otros, ordenando que en las tabernas "no haya mas de un
que éstas tienen de específicas A este tema nos referiremos en el capítulo
barril abierto", y prohibiendo la venta de vino a indios y a negros 0fS)
siguiente.
Desde la apertura del puerto de Buenos Aires, y durantela primera década del
siglo XVII, los encomenderos conforman el sector social más activo de la jurisdic¬
ción de Córdoba, ya que a través del movimiento económico que se genera en
tomo a la ruta comercial que lleva al Potosí, se conducen con soltura; y en el origen
de la larga cadena de sus tratos y contratos, siempre está presente la mercantili-
zación del tributo de sus repartimientos.

164) AHPC, Reg 1,protocolos dell/11/1602 (tomo 15), de 3/11/1611 (tomo 23), y de 6/9/1611 (tomo
22); y AHPC, esa. 1, leg. 6, exp. 5 (folio 223 v ,hoja incluida y anulada en ese expediente)
165) Acta capitular de 24/5/1600 (en: A M ,III: 168-173) En el aüo de 1600, un arancel que se fija al
pulpero Juan Vicente, sóbrelas mercaderías que posee en su tienda, perfila la variedad de productos
que entran a la ciudad por los circuitos mercantiles En él se establecen las siguientes mercaderías y
precios: vino del Paraguay, 4 reales el cuartillo; vino de Chile, 2 reales el cuartillo; pasas, un real y
medio ia libra;higos, un real y medio la libra;jabón de la tierra, 4 reales la libra; candelas de sebo de
media vara de largo, Í4 por un peso; camuesas, un realia libra;diadtron y confitura, 6rcales la libra;
queso, un real y mediola libra; vino de Castilla, 6 reales el cuartillo; azúcar en pan, 4 reales la libra;
azúcar del Brasil, 2 realesla libra;tocino, 4 pesos; conserva del Paraguay, 4 reales la libra; conserva
en pan, 2 reales ¡a libra; carne de membrillo, 4 reales la libra (en: AHPC, escr 1, leg. 18, folio 1v.).

222 223
CAPITULO IX
LA PRESION COLONIAL SOBRE LA POBLACION INDIGENA

Concluida la conquista del territorio, en la que las iniciativas individuales de


los jefes españoles fijaban las líneas de acción, se inicia una etapa de consolidación
de los dominios adquiridos y de afianzamiento de la or ganización colonial

En ese sentido, corresponde al gobernador del Tucumán, Juan Ramirez de


Velazco, comenzar la afirmación de una red administrativa estatal y de la norma¬
tiva que debe regir las relaciones interétnicas.

En diciembre de 1586, a pocos meses de hacerse cargo de sus funciones,


Ramirez de Velazco envía una carta al rey, refiriendo el estado en que encontró la
Gobernación, y las medidas que ha tomado para atenuar los excesos que se
cometen con los indígenas de encomienda

Según informa el funcionario, en lascincociudades del Tucumán -Santiago del


Estero, San Miguel, Talavera, Cordoba y Salta—, se reparten 200 encomenderos,
"lodos pobres y humildes". Algunos de ellos son conquistadores, y la mayoría
procede del Perú, donde en su momento tuvieron repartimientos que ahora
vacaron.

El territorio bajo su jurisdicción carece de oro y plata, y sólo posee labranzas y


!
algún algodón; cuando un repartimiento queda un mes sin dueño, los indios se
í
: ausentan. A esose agrega que en los últimos cuatro años, los indígenas han pasado

225
grandes hambres y trabajos a causa de la sequía; muchos se han ido a los montes garantizar las extracciones de loscolonizadores europeos,así como a establecer las
y se han hecho salteadores, saliendo a los caminos con sus archos y flechas para normas que deben regir las relaciones interétnicas.
robar a los viandantes. Por ello ha debido nombrar en todas las ciudades alcaldes
de la Hermandad encargados de poner orden en las zonas rurales A medida que finaliza el siglo XVI, la población aborigen va adquiriendo un
estatuto legal. Ordenanzas, mandamientos, y reglamentaciones emanadas de las
El gobernador observa que nuncase ha realizado una visita general;y "como no autoridades provinciales, consolidan el lugar del indígena en la sociedad, y fijan
hay tasa, no hay orden", por lo que losindios pasan excesivos trabajos. Muchos son los límites de sus funciones dentro de la estructura colonial. Casi sin excepción,
alquilados hasta Potosí y Chile "como muías", de a diez o de a veinte, sin pagarles toda la normativa responde al viejo adagio de los primeros conquistadores: la
ni darles alpargatas para el camino; de allí que un mandamiento suyo indica que tierra sin indios, no se puede sustentar".
para esos viajes, losencomenderos deben presentar a los indígenas ante el juez de
registro, quien les tomará nombres y señas de cada uno y controlará que se les El mismo Juan Ramirez de Velazco lo expresa con claridad al rey;
pague un real por día y se les de comida para el trayecto.
"..aquí no puede sustentar casa sino quien tiene yndios,
Los españoles pobres de las ciudades —es decir, aquellos que no poseen porque como no ay oro, ni plata, ni reales, ni genero de
encomiendas—, no tienen forma de acceder a la mano de obra indígena; pero esto moneda, no puede aver plaza; e asi, quien a de sustentar casa
se ha remediado, ordenando que cada vecino feudatario lleve a la ciudad un indio a de sembrar y criar ¡o que a de comer..."
deservicio todos los lunes,para que pueda ser alquilado. Esta mita de plaza,refleja
una normativa que ya había sido puesta en práctica en años anteriores en las zonas Y refiriéndose a la fuerza laboral indígena, finaliza diciendo: ".. aquí no ay otra
centrales del Virreinato. cosa de que echar mano" n67).

Preocupado por la moral y las faltas religiosas, Ramirez de Velazco informa


también que ha encontrado muchos españoles amancebados y algunos europeos
e indígenas "culpados en el pecado nefando". Por otra parte, como en la mayoría de En la perspectiva de precisar la función del indígena en la sociedad colonial, la
los pueblos de indios hay hechiceros, ha nombrado un juez para que levante estimación del tributo que el indio de encomienda debe entregar al feudatario se
información y traiga a los acusados; los que confiesan el delito —casi todos son presenta como un tema esencial
ancianos entre 60 y 80 años de edad—,son quemados.
Unos años atrás, el virrey Toledo había llevado a cabo una visita general en las
Como es de esperar, la falta de doctrina preocupa también al gobernador, ya zonas centrales del Virreinato del Perú; los informes recogidos determinaron la
que su territorio carece del número suficiente de sacerdotes. Puesto que la tierra tasa —es decir, el tipo y el monto— del tributo de cada uno de los grupos étnicos
es muy pobre,fija como estipendio para el cura doctrinerola suma de cuatro reales abarcados Cuando en la Provincia del Tucumán se hace necesario determinar de
y medio por cada indígena de más de catorce años que sea enseñado en los asuntos manera definitiva la forma en que su población indígena debe ser integrada a la
religiosos n66), estructura colonial, esa experiencia es citada por losdistintos sectores interesados,
ya sea para afirmarla o rechazarla
Aún cuando el "trabajo excesivo" y el desorden en la utilización de la mano de
obra indígena, es el motivo que aparece en todas las disposiciones referidas a la Para aquellos que se oponen alsistema delservicio personal, la tasa del tributo
organización de esa fuerza laboral; lo cierto es que todas ellas están dirigidas a indígena representa un límite al "cautiverio". En 1586, el administrador y vicario
general del Obispado del Tucumán, advierte al rey que:

166) Carla al rey del gobernador Juan Ramírez de Velazco, de 10/12/ 1586 (en: levillier,1920,1:177-194) .
La acción organizadora de esle gobernador de! Tucumán, es analizada por RobertoLevillier (Levi-
llier, 1926-1931, III); y por Ricardo Jaimes Freyre (Jaimes Freyres, 1914). 167) Carta al rey del gobernador Ramirez de Velazco, de 10/10/1587 (en: Levillier, 1920, 1: 219-226).

226 227

fe- r
' Cj- ÿ
".../os agravios que los pobres naturales de aquella tierra
reciben de los encomenderos, son para asombrar vuestros distrito de Córdoba, a las Ordenanzas de Abreu de 1576, sobre las que nos hemos
cristianos oydos; por amor de Dios, Vuestra Alteza mande se referido en capítulos anteriores
quite el servicio personal y se tase la tierra... nM).
En el año de 1600, luego de una visita a la ciudad de Córdoba, el gobernador
Otro sacerdote, Francisco de Angulo, señala la diferencia que, a su entender, Mercado de Peñaloza indica a través de un mandamiento que " Ja tasa que los
existe entre el servicio personal establecido para los indígenas de estas regiones, dichos yndios pueden pagar, se a de reducir a trabajo". Y otro gobernador, Alonso de
y la tasa de tributo que se había ordenado en las zonas centrales del Perú: Rivera, nombrará más adelante a ejecutores de las Ordenanzas de Abreu, con
títulos de lugartenientes
"...y los espartóles y encomenderos tan apoderados y
enseñoreados dellos que no ay esclavitud ni captiverio ni El control de la aplicación de las Ordenanzas de Abreu, exige el conocimiento
del volumen demográfico de cada encomienda y una visita general de la tierra. De
berveria nien galeras de turcos de mas subicios;porque desde
allí que entre las filas de los feudatarios, surja la oposición más cerrada a un acto
que nacen hasta que mueren padres y hijos, hombres y
rnugeres, chicos y grandes sirven personalmente en grangerias administrativo de este tipo, que permitiría establecer una estimación o medida del
esquisitissimas de sus amos, sin alcanzar los pobres yndíos tributo indígena de cada repartimiento n70).
una camiseta que se vestir, ni a vezes un puñado de mat que
comer;y asi sevan rnuriendo a grande priesa y acabando y sin Hasta 1611, en que se produce la visita del oidor Francisco de Alfaro, ios
conocerá Dios.. Saquen esta miseragente deste captiverio tan
encomenderos de Córdoba perciben el tributode sus repartimientos bajo la forma
estrecho quitándoles el servicio personal tan riguroso que de prestaciones laborales, es decir, con el sistema del servicio personal; pero en la
tienen y tasándolos, para que solamente paguen lo que práctica, su medida o tasa no se rige por los tiempos de trabajo y los modos que
buenamente pudieren conforme a la pobresa de la tierra..." fijaron las Ordenanzas de 1576.
(169)

El resto de las disposiciones de las autoridades provinciales, legislan sobre


Para los encomenderos del Tucumán, los afanes organizativos del virrey problemas específicos y puntuales que se suscitan en el ámbito de la jurisdicción
Toledo difícilmente podían ser llevados a la práctica en ¡a Provincia. En las Tales son los mandamientos relativos a la posesión de matrimonios indígenas,
regiones centrales del Virreina to, el tributo había sido fijado en los productos que cuyos cónyuges pertenecen a diferentes encomiendas; o bienlos que reglamentan
los indígenas sembraban y criaban en sus tierras; pero en una región carente de la saca de aborígenes fuera del distrito, sobre los que volveremos más adelante.
minerales y con una población nativa sin excedentes productivos, una con¬
tribución de tal tipo se tornaba irrelevante, La preocupación normativa de Ramírez de Velazco y sus sucesores, se va a
enfrentar con la oposición de los encomenderos En ese sentido, los esfuerzos
Mientras dura el periodo de auge delsistema de encomiendas, las autoridades permanentes de los feudatarios por librarse de las reglamentaciones sobre el
del Tucumán sostienen como régimen jurídico básico del estatuto indígena en el empleo de la mano de obra nativa, es una de las constantes del periodo

168) Carta al rey de fray Francisco Vazquez, administrador y vicario general del Obispadodel Tucumán,
de 31/12/1586 (en: IEA,nro 12.787,copia del original del AGI, estante 75, cajón 6, legajo 1) Cuand o
.
en 1588 el autor vuelve a insistir sobre el lema, reclama que " no mande Vuestra Majestad se me
responda a ningúna de estas, que corren por acá riesgo las cartas y no quiero ser dado por autor de 170) De esta corriente de opinión participan también los gobernadores de la Provincia deTucumán Para
estas cosas" (Carta al jey de 1/5//1588, en: IEA, nro 12.785, copia del origina] del AGI, estante 75, cubrir el estipendio de sus funciones, los gobernadores tenían asignadas las encomiendas de
cajón 6, legajo 2) Soconcho y Manogasta, en la jurisdicción de Santiago del Estero. En 1586, un vecino de Córdoba
169) Carta del sacerdote Franciscode Angulo al Arzobispado de Los Reyes, de 30/8/1592 (en: IEA, nro escribe al rey advirtiéndole que: "mientras los gobernadores posean las encomiendas de Soconcho
12.777, copia del original del AGI, estante 74, cajón 4, legajo 28) y Manogasta, no tasarán h tierra" (en: IEA, nro 12 743, copia del original del AGI, estante 74, cajón
4, legajo 27)

228
229
Como los pueblos están dispersos, se solicitará al gobernador que obligue a los
La acción evangelizados. encomenderos a reducirlos en lugares más cómodos para la evangelizadón

Los religiosos recorrerán el distrito desde comienzos de cada cuaresma reali¬


Cuando se inicia la actividad evangelizadora en lajurisdicciónde Córdoba,tres zando confesiones, establedendo penitencias,y controlando si falta algúnindígena
concilios reunidos en la capital virreinal han definido las líneas de acción a seguir de los contenidos en su padrón
en la conversión de los indígenas n71).
En cada uno de los pueblos un aborigen casado, "de buen ejemplo" y mayor de
Lasdecisiones que se adoptan en el Tercer Concilio Limense, son de particular 40 años, será el encargado de reunir a los nativos para la doctrina y mantener en
importancia. Realizado en el año de 1583, sus integrantes aprueban un "Cathe- orden y limpieza la iglesia del lugar. Sobre estos indios "fiscales", no tendrán
cismo breve para los rudos y ocupados" —-esdecir, para los nativos—,y establecen autoridad los encomenderos y pobleros
un contr ol del clero secular sobre la acción misional que llevana cabo los religiosos
de las órdenes n7A Las normas morales en la vida indígena merecen una atención especial del
sínodo Los misioneros deberán evitar sus borracheras, "que son origen de ydolatria
A fines del siglo XVI, el obispo del Tucumán fray Femando de Trejoy Sanabria, y orribles yncestos, principalmente en el tiempo que cogen algarroba, en el cual suelen
matarse y herirse muchos..".
convoca a un sínodo para precisar las pautas de la evangelizadón de la Provincia.
En 1597, la Junta Diocesana reunida en Santiago del Estero, aprueba las consti¬ Para impedir los amancebamientos, los muchachos y muchachas indias no
tuciones que se aplicarán en la Gobernación. Sus resoluciones siguen las líneas deben ir juntos a buscar agua y hierbas;y con elmismo objeto, los curas doctrineros
fijadas por los concilios limenses. procurarán que los feudatarios obliguen a los nativos casados a llevar vida
matrimonial.
La enseñanza de la doctrina y el catecismo a los indígenas se hará en la lengua
general del Perú, porque "casi todos batí siendo ladinos en dicha lengua". Además del Las declaraciones del sínod o advierten que hay personas —sobre todo mujeres
quichua, los sacerdotes doctrinantes deben aprender otros idiomas nativos para españolas—, que castigan severamente a laschinas de servicio, por lo que muchas
confesar, o al menos poder hacer tres o cuatro preguntas sobre los vicios más buscan la muerte ahogándose, o "con bebedizos"; y como también suelen "trasqui¬
usados entre los indios lar" a lasindias casadas, sus maridos pierden el amor por ellas, ya que esta acción
es considerada una gran afrenta para el aborigen
La religión debe ser impartida todos los domingos, y los curas doctrineros
deberán velar paraque los indígenas nosean obligados a trabaja r los días de fiesta En las pautas que se imparten, los doctrineros son prevenidos contra algunas
Asimismo, garantizarán el viático y la extremaunción a los moribundos formas que han adquirido las relaciones interétnicas: deberán cuidar que los
pobleros españoles vivan con sus propias mujeres, y que no se sirvan de india
moza —casada o soltera—, nilas llamen a sucasa de noche;y vigilarán además que
ningún colonizador se apropie de los bienes de los indígenas difuntos.
171) t a iglesia de la Provincia d el Tucumán depende ensus comienzos del Obispado de Charcas, creado
en 1552, A partir de 1570, erigida la Provincia en Obispado, pasa a depender de Lima, hasta el año
De estas normas no se exceptúa ni a los mismos religiosos: estos tampoco
de 1609, en que Charcas se eleva como Arquidiócesís, comprendiendo nuevamente en su territorio podránservirse deindias mozas—casadas o solteras—,quienes no deberán entrar
a la Provincia del Tucumán (Cfr Levillier, 1919) a las casas de los sacerdotes ni tan siquiera para barrer, regar, o llevarles agua.
172) En este periodo se realizan en Lima canco concilios En el primero de ellos, del año 1552, se expiden Tampoco les está permitido jugar a los naipes en la casa del encomendero o
las Constituciones para indios,donde se establecen las reglas para predicar y enseñar la religión, as! poblero.
como el orden que se debe seguir en el servicio del culto (Zavala, 1978, 1: 19)
HTercer Concilio, al que hacemos referenda en este párrafo, es en realidadel único cuyas acciones
son aprobadas y confirma das por el rey Q modelo de catecismo que autoriza, está incluido en laobra
La comisión de excesos durante el proceso de conquista, es reconocida por la
de Levillier ya diada (levillier, 1919: 190-192) junta diocesana. Cuando vecinos feudatarios, caudillos de malocas, conquista-

230 231
r

dores, pobladores o mercaderes hubieren incurrido en ellos, su confesión será i Por una parte,las doctrinas de indígenas de Córdoba pertenecen a las regiones
considerada como asunto reservado para sacerdotes con licencia especial, En los pobres o marginales del Virreinato, que no logran atraer la atención de clérigos y
excesos que se mencionan, figuran impedir matrimonios de indios, casarlos por sacerdotes. Las quejas permanentes de obispos y gobernadores del Tucumán, lo
fuerza, casar indias para sacárselas a quienes las tienen en depósito, consultar expresan con claridad
hechiceros o practicar hechicerías, tener- ayuntamientos con infieles, y cometer el
pecado nefando o el incesto, Por la otra, debemos señalar que a la debilidad del proceso evangelizador de
este período, contribuyen con no menos fuerza las numerosas evasivas de los
Otro de los temas del sínodo está referido al estipendio de la doctrina; y sobre encomenderos para sostener, con la pr oducción de sus repartimientos, ios gastos
esto, los vecinos de Córdoba se sienten obligados a dar una opinión, de la doctrina indigena.

Tal como sucede en otras regiones de América, las di ".posiciones de la Iglesia


En efecto, la legislación indiana hace responsables a los encomenderos de la
en la Provincia de Tucumán, dejan en manos del cler o regular la acción evangeii-
enseñanza religiosa que se debe impartir a ios aborígenes; esa obligación implica
zadora.
un deber de conciencia cristiana, así como el compromiso de acudir a los gastos de
la doctrina. Sin embargo, en el distrito de Córdoba es esporádica la presencia de religiosos
que específicamente impartan la doctrina a los indígenas
Por lo tanto, el cabildo de la ciudad envía como procurador al portugués Lope
Vasquez Pestaña,con instrucciones precisas sobre los montos y las formas de pago En efecto, durante las primeras décadas del dominio colonial cuatro órdenes
que se deben aprobar para los religiosos encargados de la evangelización. En ese religiosas se establecen en la ciudad de Córdoba: mercedarios, franciscanos,
sentido, solicitan ante el sínodo una retribución de medio peso por cada indígena, dominicos y jesuítas. De todos ellos, sólo los nombrados en último término
a abonar en vacas y ovejas. realizan una tarea evangelizadora más o menos sostenida.

Sin embargo, la resolución final fija en un peso el monto de la doctrina a cada La Orden de la Merced traslada a América una vieja práctica de los tiempos de
nativo; y sugiere que cada año se acuerde entre el sacerdote y el encomendero, el la Reconquista:su actuación como capellanes de los ejércitos cristianos. De allí que
número de indígenas que fueron enseñados en los asuntos de la fe. las expediciones españolas que recorren la Provincia del Tucumán, cuenten entre
sus filas a sacerdotes mercedarios.
Por último, el sínodo decide aplicar la pena de la excomunión a aquellos
vecinos que, mediante subterfugios, se niegan a pagar ios diezmos n73>. Estos son los primeros en fundar una casa en Santiago del Estero; y un fraile de
esa orden hace el camino con la expedición que en 1573 dirige Lorenzo Suarez de
Figueroa a la región donde poco después se fundará el asiento de Córdoba.
No obstante, sólo a comienzos del siglo XVII la orden se instala definitivamente
A pesar de las líneas de acción que fijan concilios y sínodos, en el proceso
en la ciudad; y debido allimitado número de religiosos mercedarios en el distrito,
evangelizador de la jurisdicción, convergen dos factores fundamentales —ambos
su presencia en la evangelización indígena es limitada a73).
inherentes a la inser ción de los miembros delclero en la economía colonial ,que
no siempre son tenidos en cuenta por las normas eclesiásticas.

174) Sobro el tema de la importancia económica de las doctrinas de indígenas en el Virreinato, el trabajo
de Bernard Lavallé aporta un Interesante análisis que es utilizado aquí como marco de referencia,
173) "Declaraciones y constituaonesaprobadasen el PrimerSlnodo del Tucumán", fechadas en
además de una abundante documentación (Lavallé, 1962)
Santiago De la misma manera, y también referido a las zonas centrales del Virreinato, el estudio de Antonio
del Estero, en octubre de 1597 (en: Leviliier, 1926: 9-46) Acosta Rodriguezsobre la intervención de los clérigos doctrineros en la economía colonial, señala la
Las instrucciones del cabildode Córdoba al procurador Lope Vasquez Pestaña, señalan que éste lleva
participación de la iglesia en la distribución del tributo indígena (Acosta Rodriguez, 1982)
un memorial délos indios que han declarado tener los vecinos y encomenderos, ya que el padrón que
175) Sobre la historia de la Orden déla Merced en la República Argentina hay dosobras centrales, cuyos
presenta el padre Miguel de Milla, "contiene muchos que se han muerto" (en: Acta capitular de 7/
8/1597, A.M., III: 34-36) autores manejan copiosa documentación (Cfr Palacio, 1971; y Brunei, 1973) Pablo Cabrera posee

232 233
Otro tanto sucede con los franciscanos, quienes en 1575 comienzan a edificar campaña, el jesuíta Manuel Ortega descubre que los indígenas "por falta de
una iglesia en la cuadra que les había sido otorgada en merced. Sus labores están instrucción nada tenían de cristianos, excepción hecha del nombre" n79>.
dirigidas fundamentalmente a loshabitantes urbanos—en especial a los feligreses

europeos ;y en muy pocas ocasiones se registran salidas a las zonas rurales, con En el último año del siglo XVI, la Compañía de Jesús funda su casa en la ciudad
el fin de predicar en los pueblos de repartimiento a76). de Córdoba. Desde ese momento, los tres religiosos que quedan a su cargo
explican la doctrina a más de500 indios que sirvenenla ciudad;y durante dos años
En cuanto a la Orden de Santo Domingo, señalemos que recién en la primera recorren la campaña, ayudando en la "pacificación" de los nativos oso>.
década del siglo XVH comienzala construcción de unconvento en la ciudad. Hasta
entonces, la presencia de los dominicos como curas doctrineros, es prácticamente Desde 1608, la actividad catequizadora de los jesuítas se vuelve más perma¬
inexistente en el distrito nente. La fundación de un noviciado convoca a sacerdotes, hermanos y novicios,
que periódicamente realizan salidas a los pueblos rurales.
A comienzos de 1587 ingresan los primeros jesuítas, traídos por el obispo
Vitoria. En esa oportunidad, los sacerdotes Francisco de Angulo y Alonso de Al poco tiempo, un conflicto con los encomenderos dificulta la labor iniciada.
Barzana, tienen ocasión de predicar entre los nativos que viven en laciudad y sus Respondiendo a una decisión tomada por las autoridades déla orden,el provincial
alrededores Diego de Torres deja en libertad a los indígenas de servicio del noviciado, y se
concierta con ellos pagando el trabajo que realizan.
Enlos años siguientes, miembros déla Compañía deJesús recorrenel territorio,
al menos en dos oportunidades. Puesto que todavía no están establecidos en forma Como si esto no fuera suficiente, unen la palabra a ¡a acción, y desde el púlpito
definitiva en la región, sus misiones consisten en trasladarse de una parte a otra, de la iglesia de la Compañía comienzan a predicar contra el servicio personal a81>
impartiendo los sacramentos, e intentando ganar las voluntades de los caciques
principales n78>-

A pesar de lo señalado, la falta decontinuidad en la catequización, hace que las


converciones a la nueva religión sean engañosas En 1593,durante una salida a la
179) La tarea evangelizadora no es simple, y el cronista de la orden la sintetiza de esta manera: " para
doctrinarlos era indispensable buscarlos como conejos; una vez hallados oolmarlos de regalos a fin
de que se dignasen escuchar, y después hablarles por medio de intérpretes, a causa de los distintos
también un estudio sobreel tema, referidoalTucumán (Cabrera, 1918} Además, las actas capitulares idiomas que usaban.,. ." (Del Techo, 1897, 1: 145-146)
de Córdoba registran e! paso por la ciudad de algunos religiosos mercedarios; y en 1601 el cabildo 180) En este sen tido, la crónica de la orden señala la colaboración que los misioneros jesuítas prestan en
otorga la licencia para fundar un convento de la orden en Córdoba (en: A M., Ill:200-202) la organización colonial deldistrito: "/losindios quedan/aunmismotiemporecondliados con Dios
176) La solicitud para fundaruna casa déla orden franciscana en Córdoba, esdefecha 1/7/1575 (en: AC, y con el español, cuya amistad iban abrazando, si no con entero gusto, a lo menos sin tanta
1: 190-191); en los años siguientes, otras actas capitulares registran la presencia casi permanente de repugnancia, porque los apostólicos misioneros les borraban de sus ánimos las malignas impre¬
un fraile en el convento. Por otra parte, los testamentos de los europeos señalan invariablemen te la siones que los tenian hostigados, y les inspiraban dictámenes pacíficos para hacerles rendir a la
voluntad de ser enterrados en esa iglesia, y que sus oficios fúnebres sean realizados por los sujeción.. " (Lozano, 1754-55, tomo I,cap XVI)
franciscanos. En cuantoala decisión de fundar una asa en Córdoba, Lozanola explica de esta manera: " porque
sise miraba a la población española, era entoncesy lo hasidosiempre,deiasmasilustresynumerosas
177) Una Real Cédula de 1579, ordena al virrey Toledo hacer ingresar a ta Compañía de Jesús en el
de esta Provincia de! Tucumán (. ); si se atendia a los indios, ofrecía aun mayor comodidad para
Tucumán y Río de la Plata; en 1586, el gobernador del Tucumán inicia una información de oficio,
nuestros ministerios,asi dentro de la dudad, en que vivían muchossirviendo a los españoles, como
sobre los clérigos y frailes que residen en la Gobernación Para esta época, esa preocupación por la fuera por toda su amplisima jurisdiction" (ibíd.)
falta de doctrineros en la Provincia, es compartida también por la Audiencia de Charcas (C£r:
El acta apitular de 20/3/1599, anota la llegada de los religiosos de la Compañía de Jesús a Córdoba;
Lozano, 1754-55, tomo I, cap. II;Levillier, 1919: 361-387; y Fastelis, 1912: 25, respectivamente)
para la fundación de su casa, los cabildantesles señalan una cuadra que an tes estaba destinada para
Sobre lahistoria de la Compañía de Jesús en Córdoba, ellibro de Joaquín Grada resume los aportes
de los cronistas quemenrionamos sobre este tema (Grada, 1940)
recogimiento de monjas y doncellas, dondeen ese momentoestánlasermitasdeTiburdo y Valeriano
(en: A.M., Ill: 124-131)

178) El cronista Lozano siguiéndolas cartas anuas del Perú-, señala que Alonso de Barzana, en su
primer recorrido por el distrito, realiza 200 casamientos y 500 bautismos entre los na tivos (Lozano,
181) Según el conista de la orden, las razones que fundamentan esta posidón están reladonadas a las
dificultades que el servido personal opone a la enseñanza de la religión: "...el abuso del servido
op dt-, cap V)
personal delosindios,que gravaba no poco lascontiendas de los españoles que le usaban, e impedia

234 235
Por otra parte, la inserción del clero en la economía, tiene también sus
La reacción es inmediata La justicia mayor y el escribano de ia ciudad se niegan
consecuencias en la actividad evangelizadora. Hacia 1590, Ramirez de Velazco
a dejar constancia en un instrumento público de los conciertos de trabajo; y los
informa que el distrito de Córdoba carece de sacerdotes que instruyan a los
vecinos no sólo no asisten a losservicios religiosos de los jesuítas, sino que además
les niegan las limosnas con las que estos cubren su sustento083
indígenas en las cuestiones de la fe; y considera que "como es tierra pobre y que no
tiene oro ni plata ni algodón, ninguno quiere ir allá,.," m.

Tal como sucede en toda América Hispana,el clero participa activamente en la


Desdelosprimeros años dela fundación de ia ciudad,se señala constantemente economía; pero durante las primeras décadas del dominio colonia!, esa inter¬
la necesidad de contar con sacerdotes que atiendan a españoles y nativos. Cuando vención se observa especialmente en la esfera de la mercantilización del tributo
la carencia afecta al sector europeo, las solicitudes expresan un cierto tono de indígena.
impaciencia; tal como lo refleja la carta en que el cabildo suplica al gobernador que
les envie un sacerdote, "aunque sea de prestado", para que los confiese y luego se A través de los diezmos y del estipendio de las doctrinas de las encomiendas,
vuelva m\ el clero obtiene una parte de la producción de los pueblos de repartimiento. En
ambos casos, las controversias con los feudatarios surgen de manera inevitable,
La situación no es diferente en la evangelización de los nativos Los informes referidas a los montos y a las formas de pago.
que Juan Ramirez deVelazco envía al rey,indican la falta de curas doctrineros. En
el año de 1586, en toda la Provincia hay siete religiosos de la orden de los El financiamiento de la Iglesia de Indias tiene su fuente en los diezmos que la
mercedarios, seis franciscanos viven en el convento de Santiago del Estero, y tres Corona española le ha cedido. Esos recursos se dirigen a sostener a las iglesias y
jesuítas han llegado recientemente m' al clero de las ciudades. Además, los sacerdotes que atienden a los feligreses
europeos, están facultados para cobrar estipendios por misas, entierros y casa¬
Además de la escasa presencia de religiosos en la Gobernación, la institución mientos.
eclesiástica está sujeta a los vaivenes de la política local. Durante el período del
gobernador Hernando de Lerma, sus continuos enfrentamientos con el clero, Habitualmente, el cabildo es el encargado de convenir con el vicario de la
provocan la salida de los sacerdotes de toda la Provincia del TucumánU85). ciudad la forma de pagar la administración de los sacramentos; y aduciendo que
el único tributo que los vecinos reciben de sus indígenas es el servicio personal,
logra que las retribuciones se establezcan en ganado, lana, o sebo n37).
mucho la conversion de los infieles, y aun a los indios christianos les era ocaslon de su ruina
espiritual, cayendo en el crimen de apostasia, por huir el cuerpo a esta carga intolerable" (Lozano,
1754-55, tomo II, cap VI) La carta anua de 1610, relata también este conflicto (en: Leonhardt, 1927-
29, XIX: 41-82). 186) Carta al rey del gobernador Ramirez de Velazco, de 1/1/1590; en bs quejas que eleva, está
132) Aunque el conflicto se extiende durante algún tiempo, en su transcurso la dureza de la posición de involucradoel obispo Francisco de Vittoria, quien luego de inaugurar los viajes comerciales al Brasil,
¡os vecinos comienza a debilitarse En realidad, los criterios de la Compañía de está dedicado de lleno a bs actividades mercantiles: "...y no como don fray Franciscode Vitoria que
Jesús nosonun hecho
aislado en el Virreinato: al finalizar la primera década del siglo XVÍ1, son muchas las voces que ha oerca de tres años que dejo desamparada esta Gobernación y sacó consu hadendala mayor parte
coindden en censurar elsistema del servicio personal délos indígenas;y en pocos meses más, iavisita de los sacerdotes que había y se está en Potosi tratando negodos bien diferentes a su dignidad y
del oidor Francisco de Aifaro tendrá como resultado la supresión de esa forma del tributo. dando grande nota de su vida; y aquí tiene un fraile por administrador que en todo sigue sus pisadas
183) Las actas capitulares incluyen en forma permanente este tipo de reclamos: cfr. actas de 12/6/1574, porque nosirve sino devengar pasiones y ponerme cada dia en condition de echarle " (en: Leviliier,
20/1/1575, 12/3/1575 y 7/10/1577 (en: AC, i: 137, 165-167, 173-174 y 200, respectivamente). 1920: 274-276).
184)Cartaalreydelgobernador]uanRamirezdeVelazoo,de 10/12/1586 (en: Leviliier, 1920,1:177-194) 187) Varias actas capitulares reflejan bsdiscusiones entre el vicario de la dudad y el cabildo, en torno
Un año después, el gobernador informa que en Córdoba hay un sacerdote, el vicario de la dudad, y a este tema. En 1590, losvecinos hacen comparecer al provisor Miguel de Milb, y lesolidtan que fije
un fraile en el convento de San Franasco (ibld : 227- 232) el estipendio de los en Berros en dos pesos y en peso y medio el casa miento. S dérígo responde que
185)Cfr Lozano, 1754-55, tomo !,cap V En una carta dirigidaalreyporelobispodeTucumán, Franasco no puede alterar el orden que ha fijado el obispo, pero que por ser tierra pobre cobrará los derechos
en caballos buenos de carga, que no sean tuertos y que tengan hasta siete años, y no en potros y
de Villoría, y fechada en Lima, en 4/6/1584, éste relata las vejadones sufridas por el dero de su
caballos viejos, y los redbirá en 20 pesos; los bueyesdeberán tener entre cuatro y siete años, y cuando
distrito a causa del gobernador Lenna; adjunta la renunda a su obispado, y señala que para ese
sean carreteros se fijará en 30 pesos la yunta (en: AM., II: 190-191). Al año siguiente, el cabildo
entonces hay 100 000 almas en 300 leguas de territorio, y sólo cinco dérigos para su atendón (en:
PasteUs, 1912, 1: 25) acuerda con el cura vicario Martin Fernandez, que éste cobrará sus derechos en bueyes buenos a 30

237
236
nativos para bautizarlos; y hacen pago de su propia mano en los pueblos y
En cambio, la doctrina de los indígenas es sostenida íntegramente por sus 0B9).
encomenderos, quienes tienen la obligación de atenderá todaslas necesidades del estancias, desconociendo la autoridad de los encomenderos
culto y al estipendio del clerode indios. Además, la evangelización de los nativos
los
es una actividad que se desarrolla habitualmente en las zonas rurales. Son las grandes encomiendas de la jurisdicción, las que acostumbran pagar
servidos de uncura doctrinero; pero la asistencia religiosa no implica la residenda
Como es de suponer, también en este ámbito surgen controversias entre ios permanente del sacerdote en los pueblos del repartimiento,
vecinos y los curas doctrineros.
El ejemplo más evidente es el del clérigo Miguel de Milla, quien en la última
En 1598,el procurador de laciudad presenta una serie de quejas contra los tres década del siglo XVI, divide su atención en el "adoctrinamiento" de varias en¬
sacerdotes que evangelizan en la jurisdicción. Según el funcionario, estos han comiendas. Para esto, recorre las zonas rurales realizando bautismos y casamien¬
pedido al vicario que obligue a losvecinos a pagar los honorarios que debendelas tos, y empadronando la tierra. En varias oportunidades, junto a los encomenderos
que lo han contratado, también participa en malocas y en "averiguaciones"
de
doctrinas a un precio mayor que el acostumbrado, y pretenden que sea en reales
o en lienzo;y el vicario ha excomulgado a los encomenderos por las deudas. Fuera indios 090>.
deeso,el empadronamiento que los curas doctrineros tienen de cada encomienda,
incluye un número mayor de indígenas de los que realmente hay en cada Los feudatarios menores descargan la responsabilidad de la evangelización en
repartimiento. Por último, hace cargos a los doctrinantes de pretender tener en pobleros y administradores quienes, en el concierto de trabajo que firman, se
cada pueblo un muchacho indígena para su servicio, para llevarlos a la ciudad comprometen a impartir la doctrina a los indígenas de la encomienda.
contra la voluntad de los feudatarios n88>.
Aún cuando la justificación religiosa de la conquista no se expresa en el celo
Unos años después, ante la próxima reunión de un sínodo en Santiago del puesto en la evangelización indígena, otras prácticas permiten a los conquista¬
Estero, el cabildo eleva otros reclamos sobre los curas doctrineros. Al parecer, dores aligerar el peso de su conciencia.
estos se ausentan de sus curatos; y a menudo se niegan a casar a los
indígenas de En efecto, muchos de ellos señalan en su testamento la voluntad de restituir
las encomiendas, por lo que estos van a la ciudad donde el vicario cobra nuevos
derechos para administrar el sacramento. Asimismo, suelen pedir ofrendas a los algunos bienes tomados a los nativos —siguiendo una moda que se había ex¬
tendido por los dominios hispanoamericanos, como efecto de la prédica lasca-
siana—,o bien encargan misas por la conversión de las almas de sus encomen¬
dados09»
pesos,los caballosde carga a 20 pesos,y las sobrecamas "de las deMojica" a 12pesos (ibíd :236- 237) .
En lo referen le a los diezmosde lajurisdicción, las fuentesnosonpródigasen este tipodedatos.
Hasta
el año de 1610, sólo hemoslocalizado ocho actas notariales referidas a remate de
diezmos Por otra
parte, en el Primer Sínodo del Tucumán, se advierte que es costumbre de los :1
encomenderos no
sembrar en su nombre, sino hacer cultivar a los indios y luego tomar las cosechas,
diezmos.
para no pagar los ¡ 189)Actacapitularde20/8/1607(en:AM.,IV:405-407) En esta ocasión, el cabildovuelvea solicitar que
Por lo tanto, la exigua cantidad de documentos sobre el tema, y la inexactitud delos el estipendio de los doctrineros se pague en los productos dela tierra; y que se fije en cuatro reales
mismos como la doctrina de cada indígena Finalmente, el Tercer Sínodo de Santiago del Estero lo fija en un peso,
referencia déla producciónen el distrito,nosha llevado a noincluirlos como fuente documental
evaluar la producción agrícola. para y ordena que en Córdoba sea pagado en lienzo y sayal (en: Levillier, 1926, 1: 64-78)
Señalemos por último, que toda disposición que implique una distribución de la renta de 190) En 1591, el dérigo Migue! de Milla adoctrina a los pueblos de Alonso de la Cámara, y comienza a
las en¬ realizar el empadronamiento dela tierra, al que están obligados los doctrineros (en: AHPC, esa 1,
comiendas, provoca la reacción de los vecinos. En 1562 el cabildo da poder a Manuel
Guerrero para contradecir la posible venida al Tucumán del obispo Vittoria; una de las
esta oposición, tiene su origen en que Vittoria ha propuesto al condiio de Lima
Rodriguez
razones de
que se cobren los •'
_[
.
leg. 9, exp. 11) . En los años siguientes, Miguel de Milla se encarga de la doctrina de las encomiendas
de Blas de Peralta, juan Alvarez de Astudillo y Juan de Burgos (en: IEA, nro 3 230, 3 229, 3.232;
AHPC, escr 1, leg. 11, exp . 1y ese 1, leg. 10, exp. 6)..
diezmos sobrelas cosas silvestres de la Gobernación, y no solamente sobre la producción
ganadera como lo eraÿasta entonces (en: A C, 1: 472)
agrícola y Condidones semejantes en el adoctrinamiento—particularmente en lo que hace a la poca profun¬
188) Enbasca esas quejas, el procurador solí cita al didad del mismo—, son señaladas por Lockhart para las 2onas centrales del Virreinato (Lockhart,
vicarioquesefije en cuatro tominesymediola doctrina 1982: 68 y ss.).
de cada indígena, y que levante la excomunión Unos días despuis, el cabildo eleva
una peüdón en 191) Cir, Lohmann Villena, 1966.
igual sentido a la RealAudienda y al virrey (en: A M.,Ill:99-100 y 110)
I
238 239
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43-
f
De esa manera, Francisco Rodriguez deja indicaciones para que digan dos
misas por la conversión de los indios de T intin, por una hanega de maíz y "cuatro El trabajo en las zonas rurales.
o cinco tupas " que les tomó, y "para descargar su conciencia"; asimismo encarga otra
misa para la conversión de ios indígenas de La Punta, por algunas tipas y "otras
cosillas" que sus yanaconas pudieron haber tomado. A fines del siglo XVI, el encomendero Juan Alvarez de Astudillo se presenta
ante el teniente de gobernador, solicitando se le conceda licencia para trasladar en
La postura testimonial del encomendero Bartolomé Jaimes queda también forma definitiva hacia el asiento de Macatine, a seis pueblos de su repartimiento.
expresada en su testamento, al dejar una tercera parte de sus ovejas a los indios de Los pueblos en cuestión, están ubicados en el amplio Valle de La Campana, y en
La Punilla; aún cuando en un codicilo que redacta dos años después revoca la
las sierras de sus alrededores en las vertientes del rio de Soto.
donación, porque a esas ovejas "ya no las tiene, y está muy pobre"
Las razones que expone el feudatario son por demás atendibles para las
Es probable que un acto de conciencia semejante, haya guiado la mano del autoridades coloniales,sobre todo si tenemos en cuenta las responsabilidades que
escribano Juan Diaz de Ocaña, cuando dispone ensu testamento que su cuerpo sea asumen los beneficiarios de una cédula de encomienda; esto es, el adoctrinamiento
arrastrado desde su casa hasta la iglesia, "por haber sido traidora Dios" n92). y enseñanza de los aborígenes que les son entregados
Todo indica que durante eí periodo de auge del sistema de encomiendas en la Según el peticionante,el pueblo deMacatine tiene agua y tierra en abundancia,
jurisdicción, la difusión de la doctrina católica entre los indígenas es superficial. La ysu sitio es "sano y acomodado"; en cambio, los pueblos que desea trasladar, están
escasez de clérigos doctrineros y la falta de continuidad en la acción apostólica, distantes unos de otros y carecen de tierras para sus sementeras; y "por ser gente
convierten en actos formales losbautismosy casamientos que refieren las crónicas, barbara e yncapaz", padecen grandes hambres y necesidades. Además, estando
Si bien los nativos que sirven en la zona urbana, están sujetos a un ejercicio más divididos y apartados unos de otros, no se los puede adoctrinar.
cotidiano de las nuevas formas religiosas; en los pueblos de repartimiento, las
normas establecidas por la iglesia para el adoctrinamiento, se transforman en letra Sin embargo —indica el encomendero—, si se accede a su solicitud, esto se
muerta puede remediar haciéndoles cultivar trigo, maíz y legumbres, con los bueyes y
arados que él ha puesto en Macatine. Para confirmar sus razones, Alvarez de
Astudillo presenta como testigo al sacerdote Miguel de Milla, quien ha tenido en
administración de doctrina a los pueblos contenidos en la petición.
El sacerdote, haciéndose eco del escrito presentado por el feudatario, informa
que se ha visto obligado a dejar esa doctrina, por ser tierra áspera y de poca gente.
Además, los indígenas no poseen comida para ellos, ni para el doctrinero; a tal
punto que se ha visto precisado a darles el alimento que llevaba para su propio
sustento, Por otra parte, Miguel de Milla advierte que, al vivir en las sierras, esos
nativos inquietan a los demás pueblos que están sirviendo a los españoles "yansi
causan afeamientos, muertes, e son resebtaculo y amparo de los yndios delincuentes..."

Viendo estas informacionesy las de otros testigos presentados por el encomen¬


dero,el tenientede gobernadorotor ga licenciaa Alvarez de Astudillo, para qu' ios
indios de Suluhenen, Luluhenen, Eyemelan,1ulianhenen, Atahenen y Cantabuca,
sean reducidos en el pueblo de Macatine'1531.
192) El testamento de Francisco Rodriguez, en: AHPC, Reg. 1, protocolo de 9/9/1590; el de Bartolomé
jaimes, consu codidio,en: ib!d., protocolos de 14/11/1603y 17/8/1605;y el do Juan DíazdeOcaña,
en: ibld ,protocolo de 11/I/1608 193) AHPC, esa 1, leg. 11, exp. 1

240 241
Es indudable que el patrón de asentamiento indígena —caracterizado por margen dela normativa,y sin licencia delaautoridad local. En realidad,el destino
pequeños núcleos poblacionales dispersos en los valles—, lejos de facilitar la geográfico de muchos poblados indígenas, depende más de los requerimientos
extracción colonial del tributo en servicio personal, representa un problema para económicos individuales de sus feudatarios, que de las disposiciones que esta¬
el feudatario. Agreguemos a esto que cada encomendero habitualmente posee blecen las normas.
repartimientos que están esparcidos en la geografía del distrito. Frente a tal
situación, la concentración de la población nativa se torna una necesidad para los A comienzos del siglo XVI, den indios de Cataealo, que habían permanecido
vecinos de Córdoba, en la medida en que simplifica el control de la fuerza laboral durante 26 años reduddos en el pueblo de Saldán, son trasladados nuevamente
de los indígenas encomendados y su adoctrinamiento. por su encomendero, esta vez hacia el asiento de Guamacha y sin orden de la
justicia
Ya en 1576, las Ordenanzas de Abreu facultaban a los encomenderos para
reunir a los indios de sus repartimientos en un pueblo o dos, según su número- Otro feudatario, Juan de Barrientes, reduce a los indios de su repartimiento en
Unos años después, las autoridades localesreclaman ante el gobernador para que una merced de tierras próxima a Chamasacate; la justida así lo autoriza, en razón
éste permita a los feudatarios proceder a las reducciones en pueblos, porque los de estar este último sitio más cerca de la dudad y para que fuesen adoctrinados.
indios del distrito están "derramados y apartados", no hacen chacras y se sustentan Sin embargo, 25 años más tarde, otro vecino que le disputa la propiedad de esas
con raíces nwí. tierras, manda "derribar los bullios" y echa a los indígenas que allí labran y cultivan
<19í)k
En realidad, la práctica de trasladar pueblos indígenas se inicia con la misma
fundación de la ciudad de Córdoba. Los textos de las mercedes de tierras —en Por otra parte, el sistema de reduedón en pueblos —inaugurado por el virrey
especial cuando éstas son concedidas a más de dos leguas de la ciudad—, Toledo en las regiones centrales del Virreinato, y formalizado en la Provincia del
recuerdan a menudo la existencia de antiguos pueblos indígenas, "ahora despobla¬ Tucumán con las Ordenanzas de Abreu y las disposiciones administrativas de
dos"™. Ramirezde Velazco—,es también utilizado para legalizarla posesión de mano de
obra indígena de otras jurisdiedones. La justida del distrito de Córdoba, recibe en
El reordenamiento del patrón de asentamiento indígena, se acelera a medida varias oportunidades la queja de los vecinos de Buenos Aires y San Luis, que
que las actividadesde las encomiendas se orientanhacia el mercado interregional. redaman por las malocas que se practican en su territorio n,7).
En buena parte de los casos, el traslado compulsivo de la población se hace al
Aún cuando el sistema de reducción en pueblos facilita a los encomenderos la
organization de la fuerza laboral indígena, y garantiza la prestación del servicio
194) Los documentos mencionados cm este párrafo, en: Acta capitular de 14/8/1587 y mandamientodel
personal, no son pocos los inconvenientes que acarrean las prácticas que se
gobernador de 23 /8/1587 (en: AC, 1: 686-668) derivan de él A fines del siglo XVI, un mandamiento de Mercado de Peñaloza lo
En las zonas centrales del Virreinato del Perú, el sistema de reducción en pueblos es iniciado por el reconoce explícitamente. Según el gobernador, en las ciudades del Tucumán hay
virrey Toledoen 1570;sobre ellohabia recibido instrucdanes por Real Cédulade28/I2/1568.Laau-
torización del gobernador, referida a la jurisdicción de Córdoba, es refrendada en el año de 1600 por
una Real Cédula, en la que se indica que la población nativa de toda la Provincia del Tucumán, se
debe "juntar en pueblos"; para lo cual, si fuere necesario, se debe quitar tierras a los españoles, re¬ 196) AHPC, esa 1,leg. 17, exp 9; y leg 19, exp. 9,
compensándolos luego con otras tierras (Real Cédula de 9/3/1600 dirigida al gobernador Francisco 197) En 1611,María del Castillo, viuda de un encomendero de Buenos Aires, anisa a Alonso Caballero,
Martínez de Leiva, en: AHPC, esa 1, leg 25, exp 4, f 189rj
quien como "hombre poderoso" entró con gente armada y tomó indios de su encomienda para
195) Los pleitos judiciales también hacen referencia a estos traslados en épocas tempranas, Asf, en 1585, llevarlos cera de La Rioja; los indígenas en cuestión, eran "de nación caguanero" (en: AHPC, esa.
se indica quehacecuatroodnco años Juan de Mitre trajo indígenas déla zona de Riquihene al pueblo 1, leg 24, exp. 5) De la misma manera, cuando Adrián Cornejo expone los derechos que le asisten
de Achalasacate (en: AHPC, esa 1, leg. 1, exp, 4) sobre el cacique Camchuieta y sus indios —que son reclamados por un vecino de San Luis de
Por otra parte, íio es de descartar que la prolongada sequía que se abate sobre la jurisdicción de Loyola—, se ampara en los fundamentos doctrinarios delsistema de reduedón en pueblos. Según el
Córdoba en la década de 1580, contribuya a acentuar el proceso de reducción en pueblos. La encomendero, esos indígenas se han pasado al valle deToronabira —a diez o doce leguas de su viejo
necesidad de los encomenderos de concentrar la producción agrícola en las zonas más húmedas de asiento, hada Córdoba—, por su propia voluntad, ya que en su pueblo de origen no tenían agua ni
aquellos valles con cursos de agua permanentes, obliga al traslado de poblaciones nativas que, en tierras para sementeras, y se sustentaban sólo con algarroba;ensu nuevosido, se han reduadojunto
otras condiciones climáticas, podrían trabajar para el feudatario en chacras más alejadas a otros indios, y allí son doctrinados (en: AHPC, esa. 1, leg. 16, exp, 2)
i

242
muchos pleitos "porque algunos indios se han mudado de unos pueblos a otros"; por lo En general, su función consiste en realizar todas las tareas necesarias para
tanto, se debe cumplir la ordenanza del virrey Toledo, Es decir, que los indios e recaudar el tributo. Para esto, deben residir en los poblados indígenas; y de alli la
indias que por espacio de diez años residan en un pueblo, aunque no sean denominación de "pobleros", con que se los designa en los documentos de la época.
originarios de él, serán considerados como naturales de tal pueblo e incluidos en
esas encomiendas; y no se admitirán demandas ni pleitos sobre ellos (!53) Casi todos losencomenderos importantes,y con una activa participación en los
circuitos mercantiles, suelen acudir ante el escribano público para dejar asentados
Por otra parte, es indudable que en el seno de la población india, las reduc¬ ios contratos de servicios de sus pobleros. En esos actos notariales, estos se
ciones reordenan compulsivamente las relaciones sociales de sus miembros. Su comprometen a realizar una serie de tareas en los pueblos del repartimiento, por
incidencia en el descenso demográfico de los aborígenes es admitido por el mismo las que recibirán un estipendio en dinero o en especies, o bien un porcentaje de la
Ramirez de Velazco, cuando informa al rey sobre las consecuencias demudar a los producción de la encomienda G01).
indios de sus lugares por el riesgo que tienen demorirsey ser gente que la ymagimcion
de pensar que los sacan de su tierra les malaria. . ." n99). Las labores asignadas indican que los pobleros actúan en las zonas rurales
como verdaderos sustitutos de los encomenderos Son los encargados de traer en
servidumbre a los indios del repartimiento, adoctrinarlos, ocuparlos en hacer
sementeras y cuidar el ganado, además de hacerlos hilar, tejer, o sacar miel

Un ejemploesel dePedroLuis de Cabrera, quien en 1597firma un conciertocon


Aún cuando el problema de la dispersión geográfica de los asientos indígenas,
es solucionado por el sistema de reducción en pueblos, la tarea que implica
Antonio de Ochoa Sibori, por el que este último se compromete a servirlo durante
dos años en su encomienda del Rio Cuarto En ese tiempo, el poblero deberá
reorganizar la fuerza de trabajo aborigen resulta abrumadora para ios encomen¬
deros. Sin duda, son muchoslos quehaceres que esto encierra, particularmente en recoger a los indios, ocuparlos en sementeras, guarda de ganados, labores textiles
poblaciones tradicionalmente no excedentarias, a las que hay que "orientar" hacia y en sacar miel. Su estipendio consistirá en un cuarto de los beneficios que se
la producción para los mercados. obtengan en lienzo, algodón, ropa de la tierra, costales, aparejos, sogas, miel, cera,
sayal y ganados
En efecto, por una parte debemos recordar que los productos de las encomien¬ Unaño antes, Juan de Soria había firmado un concierto semejante con Marcos
das que se mercantilizan, proceden casi en su totalidad de las zonas rurales; y que Hernandez;pero en este caso, el poblero desarropará su actividad durante un año,
otro tanto sucede con la mano de obra de los indios de repartimiento que genera solamente en el pueblo de Chibaja Allí se encargará de cuidar los ganados,
una renta para el feudatario. mandar a los indígenas a construir tapias, hacer quesos, y domar potros; además,
deberá sembrar dos almudes de sementeras. Por sus tareas, recibirá la suma de
Es por eso que desde los comienzos de la irrupción española en la jurisdicción doscientos pesos ara).
de Córdoba, es habitual que los encomenderos confíen en otras personas la
dirección de las actividades de sus feudos; ya sea en yanaconas indios, o en
pobleros europeos. Cuando la coyuntura económica contribuye a la ampliación de estos pobleros son "mozos montañeses que dan mal ejemplo", y maltratan a los indios, deben
la producción mercantilde las encomiendas, estos intermediarios entre los feuda¬ presentarse ante el gobernador p3ra que éste autorice su nombramiento Además, no podrán
comprar, vender orescatarentre los indios, ni pedirles chaquiras, cobreu otras joyas; nopodrán tener
tarios y sus pueblos de repartimiento, adquieren unespacio propio en la estructura más de dos rocines, se les prohibe la tenenda de perros de caza, ni ocupar a los indios para que les
colonia! de la región C00). traigan cueros; lampeo podrán poseer ganado en los pueblos de indios, sementeras u otras
granjerias, salvo las necesarias para cubrir su salario (en: Levillier, 1920: 32-45)
201) Entre ios años 1575 y 1610, los protocolos notariales de la dudad contienen un total de veinticuatro
condertos acordados enrió feudatarios y pobleros En tres de esos casos, los pobleros son "mulatos"
196) Mandamiento de 30/9/1597 (en: AM, III: 49-50)
o "morenos"
199) Carta at rey de Ramirez de Velazco, de 10/4/1590 (en: Levillier, 1920, 1: 280-287)
202) El ennderto de Pedro Luis de Cabrera, en: protocolo notarial de 10/3/1597 (AHPC, Reg 1); y el
200) Las Ordenanzas de Abreu fechadas en Santiago del Estero en 10/4/1576, contienen una serie de conderto de Juan de Soria, en protocolo notarial de 21/4/1593 (AHPC, Reg 1) Otro conderto
disposiciones relativas a las formas que deben tener las prácticas de estos pobleros o administra¬ interesante, pr estar referido a una encomienda importante, es el que firman Luis de Abreuy Pedro
dores, quienes son designados con el nombre quichua de "sayapayas" Allí se indica que, puesto que de Lastur en 14/11/1598 (en: AHPC, Reg 1, atado pr Doucet, 1986).

244 245
En iguales circunstancias, cuando el feudatario Bernardino de Meneses le da
En el año de 1603, el cabildo contabiliza cuarenta pobleros en su jurisdicción;
poder al mercader Pedro Gonzalez para administrar su repartimiento, aclara que
algunos encomenderos poseen dos o tres de ellos, repartidos en distintos pueblos no posee otros recursos, y que los acreedores "lo molestaban mucho" aos>.
C03I

La autoridad de pobleros y yanaconas, deriva de los encomenderos a quienes


Los ejemplos citados están referidos a los mayordomos de las grandes en¬ sirven; e indudablemente, estos prestan su consentimiento y conformidad a las
comiendas. Sin embargo, durante todo este período otros feudos menores, y los prácticas utilizadas para la extracción del tributo.
pueblos ubicados en zonas alejadas, tienen como pobleros a aquellos indígenas
que viéramos actuar durante la época de afianzamiento del poder colonial, y a Hasta fines de la primera década del siglo XVH, solamente un caso es denun¬
quienes se continúa designando con el nombre de "yanaconas" CM). ciado ante la justicia local, en el que un poblero se ve involucrado en reiterados
hechos delictivos En el año de 1600, el cacique don Pedro, del pueblo de
Pobleros y yanaconas tienen como tarea fundamental convertir el trabajo Quisquisacate, se presenta ante el alcalde de la Santa Hermandad, para quejarse
indígena en productos comercializables. En tal condición, ejercen en forma directa criminalmente de su poblero Sebastián de la Raygada, Elcacique lo acusa de haber
el control colonial sobre la zona rural; y frente al campesinado aborigen, confor¬ matado a su hija Angelina, mediante azotes y "coces". Otros testigos, como el
man un grupo de poder con amplias prerrogativas. cacique donjuán Aymi, y los indios Gonzalo Tocca y Nicolás Cayanme, confirman
los hechos y agregan otros datos; al parecer, el poblero no sólo ha dado muerte a
Angelina, sino que también asesinó a Leonor, "porque no tejía presto una sobrecama".
En los casos en que obtienen un porcentaje de los tributos de la encomienda Diego Rodriguez de Ruescas, alcalde de la Santa Hermandad y encomendero de
como pago por sus servicios, la coacción que ese sector social ejerce sobre la esos indígenas, ordena apresar el poblero y secuestrar sus bienes m).
población indígena se torna más agresiva. La razón de esto es simple: mientras son
mayores las prestaciones que logran, los beneficios que alcanzan son más impor¬ Para los ojos de los encomenderos, la producción de sus repartimientos que se
tantes. mercantiliza en los circuitos comerciales, únicamente muestra los logros de los
pobleros y yanaconas en el control de la mano de obra indígena.
Las situaciones más extremas están representadas por aquellas encomiendas
de la jurisdicción que son traspasadas temporariamente a mercaderesresidentes.
Sus feudatarios han adquirido deudas que sólo pueden pagar mediante la cesión 205) El poder de Diego de las Casas en: protocolo de 9/10/1602; y el de Bernardino de Meneses, en:
delos tributos y aprovechamientos de sus repartimientos . De esta manera, Diego protocolo de 19/12/1603 (en: AHPC, Reg 1, tomo 16) En el ano de 1605, un poblero de Bernardino
de Las Casas otorga poder al comerciante Rui de Sosa para administrar el pueblo deMeneses, denombre Felipe de San An ton, muere sin testar; el inventario de sus bienes, figuran en:
AHPC, esa 1, leg 18, exp. 3
de Chabascate; además de adoctrinar a los indígenas, les hará hacer sementeras y
206) Proceso contra Sebastian de la Raygada, en: AHPC, esa 1, leg. 10, exp 5. Aún cuando los agravios
ropa,y podrá alquilarlos en Córdoba .La cesióndurará hasta que Rui de Sosa cobre que se ventilan en este juicio, sean como "para asombrar vuestros cristianos oydos" —tal como lo
de esos frutos y aprovechamientos la suma de 1.397 pesos,que había pagado por advertía elvicario general del Obispadoal rey—,incluímos aquí algunosdetalles délas acusaciones
el encomendero. sobre Sebastián dela Raygada H cacique don Pedro informa al alcalde que su hijaAngelina "estaba
ÿ

enferma de sus vergüenzas", y que temerosa del dolor no se dejó curar; por ello el poblero la azota
y luego ella huye al monte. De la Raygada la manda buscar, y entonces íeabrió las piernas con las
suyas y porque no quería estar queda le dio muchas coces; y de ellas y de la fuerza que hizo para
abrirle las piernas", se murió a los cuatro días Por su parte, el testigo Gonzalo Toan refiere así la
203) Acta capitular de 12/7/1602 (en: AM ,IV: 22-26). .
muerte de su esposa Leonor: ". porque después de atarla y azotarla le dio coces y con un palo hasta
que lehizo echar sangre por la boca"; la madre de Leonor se la llevó al algarrobal, y a los pocos días
204) En 1604, c! indio Alonso Zavala, del pueblo de Soconcho en Santiago del Estero, dice haber sido
murió.
poblero hacediezo doce años, del pueblo de Lasta Caucara, en nuestra jurisdicción (en: AHPC, esa Los excesos cometidos por ¡os pobleros ya habían sido advertidos unos años atrás por el procurador
I,leg. 15, exp . 12) En el año de 1590, Tristón de Tejeda tenia por poblero en el pueblo de Chalo, a un de la ciudad, quien en 1595 pide al gobernador que ponga remedio en los castigos excesivos que se
yanacona llamado Chimbo (en: AHPC, esa 1, leg 9, exp ll).5obreelteniadelosinayordoniosde hacen en los indígenas, "porque hay mucho desorden de parte de los pobleros y vecinos"; y solicita
encomienda, la obra de Lockhart consigna las características centrales de ese grupo en el Virreinato que ordene queningún poblero uotra persona haga castigo por su propia autoridad (en:A M., II:394-
del Perú {Lockhart, 1982: 32 y ss.); en tanto que la investigación de Carlos Mayo, puntualiza 401, acta capitular de 30/1/1595)
características específicas para la Gobernación del Tucumán (Mayo, 1978),

246 247

< «a- < fa.


Sólo cuando la población nativa ha decrecido en forma alarmante, las autori¬ funcionarios. El encomendero Lucianode Figueroa se desempeñará en el "partido
dades coloniales comienzan a preocuparse por las prácticas que este sector social de los ríos", que abarca la falda de la sierra y los ríos de San Juan, Segundo, T ercero,
utiliza para la obtención del tributo. Recién a fines de la primera década del siglo y Cuarto Francisco de Avellaneda será el teniente del "partido de Soto", que
XVII, hallan un eco las denuncias originadas por algunos funcionarios sobre los comprende el valle del mismo nombre hasta los términos de La Rioja Por último,
excesos cometidos.
Juan de Betanzos tendrá a su cargo el "partido de El Totoral y Quilino".
La protesta de los encomenderos no se hace esperar: a través de procuradores
designados por el cabildo, objetan esos nombramientos ante la Audiencia. En sus
Cuando Alonso de Rivera se hace cargo de la Gobernación del Tucumán, las argumentos, señalan que el gobernador no puede poner más tenientes "ni otras
formas que ha adoptado la extracción colonial han generado una alarmante justicias" que las que sus antecesor es han acostumbrado; que es incompatible que
disminución de la población nativa. en la ciudad haya un teniente de gobernador, y en su jurisdicción otros tres o
cuatro Además, el de la ciudad no tiene salario, en tanto que los recientemente
El nuevo funcionario toma conocimiento de la situación; y expresa su preocu¬ designados por Alonso de Rivera cobrarán 600 pesos de sueldo por año.
pación sobre el tema, al afirmar que de los maltratos y trabajos excesivos que
imponen los feudatarios y pobleros, ha resultado que "el dia de oy no ha quedado la Por otra parte, los feudatarios insisten sobre la pobreza de la tierra y la
decima parte" de los indígenas que poblaban la Gobernación. incapacidad de los indios: argumentan que muchos vecinos tienen pocos indíge¬
nas, que se ocupan en la guarda de ganados y en hacer algunas sementeras para
A mediados del año 1606, los vecinos encomenderos de la ciudad de Córdoba comer ellos y sus encomenderos; y advierten que el aborigen "es gente tan bestial,
se inquietan por rumores procedentes de Santiago del Estero. Al parecer, Alonso que ni tiene sujeción de caciques, ni Ies obedece, ni se gobiernan por ellos como se hace en
de Rivera tiene intención de introducir innovaciones en la tasa que establecen las el Perú" m.
Ordenanzas de Abreu. Según loscriterios de los feudatarios, si esto sucediera "se
perderá ¡a tiara", porque los aborígenes sin encomenderos, no harán sementeras ni A pesar de tantas objeciones, en los meses siguientes los nuevos funcionarios
haciendas. recorren sus dishitos. Acompañados por escribanos, visitan los pueblos de
enconúenda verificando el cumplimiento de las Ordenanzas de Abreu. En su
Locierto es que el gobernador ha manifestado su propósito deiniciar una visita
transcurso levantan padrones de los indígenas de repartimiento, recogen las
general a la tierra, para que de la información que se derive de ella, se pueda
establecer una tasa de tributo moderada para los indígenas de encomienda, Sin quejas de los aborígenes, los instruyen sobre las disposiciones que establecen las
Ordenanzas, e inicianlosjuicios civiles y criminales que corresponden en cada uno
embargo, dos provisiones de la Real Audiencia de La Plata, y una carta de su de los casos. De todas sus diligencias y de los testimonios que reúnen informan a
presidente, ordenan al gobernador suspender la misma, hasta tanto el rey señale
la forma en que se debe realizar.
Alonso de Rivera

La determinación de laAudiencia demora por unos años el proyecto deAlonso En mayo de 1607, el gobernador eleva al rey una relación sobre los excesos que
de Rivera. No obstante, el gobernador encuentra otros mecanismos que le per¬ se cometen en la Provincia del Tucumán, y las correcciones que van imponiendo
miten intervenir en el poder que los feuda tarios poseen sobre el manejo de la mano los ejecutores de las Ordenanzas de Abreu Su memoria incluye las comunica¬
de obra indígena. En ese año de 1606, designa un nuevo tipo de funcionario en las ciones que ha recibido de los tenientes de Santiago del Estero, de los ríos Dulce y
distintas jurisdicciones que componen la Provincia del Tucumán. Con el titulo de Salado, del Valle de Londres, de La Rioja, y de Córdoba.
Lugarteniente, Justicia Mayor y Ejecutor de las Ordenanzas de Abreu ,cada uno de
ellos se encargará de administrar la justicia civil y crimina] en los distritos que se
les asignan en sus nombramientos. 207) Actas capitulares de 18/7/1606, 29/12/1606, 30/12/1606, 25/1/1607 y 16/3/1607 (en: A M,rV:
>
237-239, 267-274, 292-295, 312-329 y 366-371, respectivamente) La designación de Ejecutores de las
En el caso de la jurisdicción de Córdoba,desdediciembre de 1606 y hasta marzo Ordenanzas de Abreu en la Provincia del I'ucumán, es informada ai rey por el gobernador Alonso
del año siguiente, ios cabildantes son notificados de la designación de tres de esos de Rivera en carta fechada en 14/5/1607, en Santiago del Estero (en: IEA, nro. 12 767, copia del
original del AGI); la orden de suspender la visita proyectada, es de 10/12/1606 (en: ibtd ant ).

248 249
En general, los informes indican que las transgresiones a las Ordenanzas se general se sirven de todos los indígenas, sin reservar muchachos ni viejos La
repiten en todo el terri torio Los indígenas de encomienda trabajan todos los días expresión de uno de ios tenientes designados por Alonso de Rivera, resume la
del año, incluyendo sábados, domingos y feriados; y no se respetan lasexenciones condición en que ha hallado a los nativos: "bienes de comunidad en todo midistrito no
laborales por edad, función, o enfermedad. los ay, sino de proveqa y desnudez .
Por otra parte, la excesiva cantidad de artículos elaborados que los indios de
repartimiento deben entregar periódicamente, les impiden ocuparse de sus se¬ En el partido de Soto —caracterizado por su actividad textil—, los indios
menteras. A ello se agrega que no tienen tierras propias, "porque todas las que lo son, trabajan desdelos seis años recogí endo en los montesají y grana;o bien devanando
les tienen tomadas sus encomenderos "; los feudatarios les quitan sus animales y haciendoovillos y canillas para los telares Como los pobleros utilizan pesas que
domésticos y venden toda la comida que se recoge en los pueblos. La consecuencia noson exactas, las indias hilan cuatro o cinco onzas por semana, que es más de lo
inmediata de estas prácticas, es que los "yndios quedan con grandissima necesidad y que fijan lasOrdenanzas Otros indígenas están obligadosa entregarchaguar, brea
anbre", ya que no tienen "cosa propia en que poderse ocupar, porque no tengan ocasión y miel;y puesto que las normasno indicannada sobre este tipo de tributo, muchos
por ningún camino a dejar de acer ¡a hazienda del encomendero", deben trabajar sin descanso para cumplir las exigencias del encomendero.

En toda la Provincia del Tucumán, la población nativa va "en disminución Los caciques realizan servicios personales, casi siempre como carreteros o
luego de haber sacado las mitas que corresponden por Ordenanzas, los vecinos vaqueros; y se da el caso de que cuando se distribuye alguna ración para los
emplean el resto de los pueblos de repartimiento en otras ocupaciones, como indígenas, se les manda que cocinen para ellos El teniente del partido de Soto
arreos de ganados, fletes, o en las construcciones de sus viviendas en la ciudad; a observa que de esta manera, "mal podían tenerles ovediencia a los caciques los yndios,
menudo las mujeres indígenas deben salir de sus pueblos a buscar comidas, y en viendo como los mandavan como a mitayos".
muchas ocasiones las consiguen "por prezio de sus cuerpos"; los encomenderos
entregan muchachos aborígenes a personas que salen fuera de la Provincia . Esos A pesar de que en la jurisdicción de Córdoba el incumplimiento de las
malos tratos y trabajos excesivos, provocan la huida de muchos nativos hacia el Ordenanzas de Abreu presenta las mismas características que en el resto de la
Perú. Provincia del Tucumán, los tenientes designados en su distrito dan cuenta con
insistencia de una particularidad local: la forma ilimitada con que los encomen¬
El gobernador informa también sobre los pobleros, e indica que los vecinos deros sacan el servicio indígena de sus repartimientos
buscan para esta tarea a "hombre crueles porque con estos sacan mas fruto". En
general, pobleros, mulatos, mestizos y "otros vagamundos" que actúan en las zonas Los funcionarios encuentran que ésta es la causa principal por la cual los
rurales, cometen innumerablesdelitos contra los indígenas, les quitan las mujeres pueblos están "disipados y destruidos"; y señalan que ha habido vecinos que "a
y se amanceban con ellas, lo que también es causa para que muchos varones carretadas socavan el servicio, y en estando enfermos los volvían al pueblo y socavan otros
nativos anden "fuera de su natural". por no curallos ni pagar tres pesos de entierro al cura...".
Alonso de Rivera señala que los encomenderos poseen en la práctica amplias Además de hacer un relevamiento sobre la situación de los aborígenes en sus
prerrogativas: a tal punto que los gobernadores y tenientes no tienen jurisdicción distritos, los tenientes también proceden a reservar —vale decir a exceptuar del
para sacar indios de los pueblos y emplearlos en las obras públicas, porque "están servicio personal—, a los ancianos y a los niños; exigen a los encomenderos que en
los vezinos tan señoreados y hechosdueños". De esto resulta que los que quieren pedir los pueblos tengan medicinas; obligan a los pobleros a cumplir con las Ordenan¬
justicia ante las autoridades por los castigos exorbitantes que reciben, son entre¬ zas; y en ocasiones informan a los indígenas sobre los límites de sus obligaciones
tenidos "sin dalles lugar a que se vengan a quexar". Frente al poder de los encomen¬ tributarias C08).
deros, el gobernador señala la conveniencia de que los funcionarios que se ocupen
de estos temas deban ser "forasteros desinteresados", ya que los alcaldes ordinarios
y los de la Hermandad, "como son interesados se ayudan, y antes impiden la justicia".
208) Relación del gobernador Alonso de Rivera, fechada en Santiago del Estero en 14/5/1607, sobre los
La situación en los tres partidos de la jurisdicción de Córdoba no es diferente excesos que iban reparando los Ejecutores de las Ordenanzas de Abreu (en: IEA, nro. 12 771, copia
a la del resto de la Provincia: los encomenderos no guardan orden ni tasa, y en del original del AGI) Esta memoria no incluye, por no haberlas recibido, las informaciones de los

250 251
1 ***ÿ
c*.
Los informes de los ejecutores de las Ordenanzas de Abreu, demuestran a cada La mano de obra indígena de las zonas rurales, también está sujeta a otro tipo
paso que la mediatización de las normas ha desembocado en un amplio dominio de "mita", En las Ordenanzas de Abreu de 1576, el gobernador autoriza a los
de los feudatarios sobre el recurso fundamenta! de la jurisdicción: la mano de obra encomenderos a traer a la ciudad la décima parte de los indios varones de sus
indígena. De allí que los encomenderos sienten que sus intereses son afectados pol¬ repartimientos. Esta "mita ordinaria" de cada feudatario, debía comprender a los
la actividad que despliegan estos funcionarios; y en forma constante intentan aborígenes entre 15 y 50 años de edad, para ser utilizados en traer leña, hierbas,
neutralizar los alcances de su acción administrativa. ganado, y en el servicio de la vivienda urbana.

Reclamos ante la audiencia, presentaciones ante el gobernador, negativa del Las Ordenanzas establecen también la forma de la prestación: el encomendero
cabildo a recibir a los nuevos tenientes, son algunos de los procedimientos utilizará la mitad de losindios una semana, y la otra mitad a la semana siguiente;
empleados por los vecinos de Córdoba, para oponerse a la intromisión de los el tiempo que no trabajen para él, los indígenas deberán ser ocupados en sus
ejecutores nombrados por Alonso de Rivera. propias sementeras Cil).

Al parecer, tampoco resulta sencillo para algunos de estos funcionarios el Sin embargo, como en otros aspectos de la normativa, las prácticas convierten
desempeño en sus tareas "Estos señores vecinos dicen que sobre ios excesos pasados no en letra muerta estas disposiciones de Abreu. Los fletes que organizan los
somos jueces, señala Francisco de Avellaneda, teniente del partido de Soto. Y el feudatarios, el alquiler de indios, y otros servicios que los vecinos acostumbran
escribano de comisión que lo acompaña en la recorrida por el distrito, debe prestar con sus encomiendas, ocupan una mano de obra indigena que excede con
reclamar ante el gobernador porque los encomenderos a cuyos indios empadronó, creces la "mita ordinaria" de cada encomendero.
se niegan a pagarle los aranceles que corresponden am.
Desde épocas tempranas, los gobernadores del 1ucumán están enterados que
un número importante de aborígenes de toda la Provincia han sido apartados de
En lo que puede considerarse como un intento por imitar a sus pares andinos,
sus pueblos y se encuentran en las haciendas de los vecinos de Potosí y Charcas;
los encomenderos locales hacen referencia a menudo a las "mitas" que les propor¬
y una Real Cédula de 1588, dirigida a la Audiencia le ordena averiguar sobre ios
cionan los indígenas de sus pueblos. En especial en las rendicionesde cuentas por
indígenas del Tucumán que se han sacado "con mercaderías de ganados, caballos, qera
tutorías, recibe tal denominación cada una de las remesas de la producción de las
ycordovanes" CI2).
encomiendas que los pobleros conducen periódicamente a la ciudad C10).

Los artículos que componen esta parte del tributo indígena, son aquellos a los b palabra "mita" y la idea de rotación que implica, significó un mecanismo fundamental de la
que nos hemos referido con amplitud en capítulos anteriores, y cuyo destino final extracción colonial
es su comercialización en los mercados. Las características de la mita como institución prehispánica son referidas por numerosos aonistas,
entre ellos Cieza de Leon (Geza de Leon, 1985: cap XVIII); en épocas recientes, las investigaciones
de John Murra, han aportado interesantes elementos para su análisis (Murra, 1975 y 1983)
Ial como se desprende de la la parte de este trabajo, la población prehispánica de la jurisdicción de
Córdoba no contó entre sus sistemas organizativos a la institución de b mita Y aún en el período
tenientes de Esteco, Salta, Las Juntas y San Miguel de Tucumán. hispánico, las "mitas" que propordonan las encomiendas, difieren mucho de bs utilizadas en el
En el Archivo Nadonalde Bolivia seconserva el informe de FranciscodeBetarizos, teniente delValle Perú.
de Catamarca, fechado en 7 /2/ 1607. Su relación muestra para esta región una situación semejante 211) Las actas capitulares hacen también referenda a bs "mitas extraordinarias"; estas significan la
a la del resto de la Provincia del Tucumín (en: ANB, Expedientes Coloniales nro. 1.035) obligadón délos encomenderos de derivar determinada cantidad demano de obra indígena desús
209) Se trata del portugués residente Diego Nudez, a quien un grupo de importantes encomenderos de pueblos de repartimiento para las construcdones que dispone el cabildo, tales como la acequia déla
la zona, niegan el pago de los aranceles que le corresponden por padrones y copias de las dudad, o edifiaos públicos
Ordenanzas. Según la presentación judidal, los pueblos que empadronó fueron: Puniila, Escoba, 212) En enero de 1586 una carta al rey del gobernador Ramirezde Vebzco, fija en 4 000 los indígenas del
Nondolma,Quilpo,Soto,Colocn, Iocotoco, Macatine, Caviche,Tulian,Olahen, Ayanpitin, Cantapas Tucumán que se encuentran en b Provincia de Charcas; y unmes después el gobernador indica que
yNilama (en: AHPC, esa 1, leg 20, exp 4) el número es de más de 8.000, de los cuales sólo una cuarb parte ha regresado (en: Leviilier, 1920,
210) En el mundo andino, el término "mita" define un oonjunto de obligaaones comunales cuyos i: 143- 145 y 146-149, respectivamente).
orígenes son anteriores a] Tawantinsuyu. HEstadolncaico habla adoptado la práctica déla mita, bajo La Real Cédula de 1588 (en: ANB, serie Reales Cédulas, nro. 344), es respondida por b Audienaa de
la forma de prestadones laborales de la unidad doméstica censal, dirigidas a realizar tareas Charcas, que señala la inconvenienda de envbr al Tucumán un oidor que investigue el tema (en:
especificas y por un tiempo determinado Másadelante,duianteoi período déla conquista hispánica, Leviilier, 1920, III: 40-74)

252 253
«.ÿ •» .i.
ao
o
En la jurisdicción de Córdoba, buena parte de la emigración forzada de indios
se origina en el movimiento de los trajines. Las Ordenanzas de alcalde de sacas, LA "SACA DE INDIOS" SEGUN LOS REGISTROS NOTARIALES
i w
que en 1586 dicta Juan Ramirez de Velazco, reglamentan las formas y los trámites Total ÿU.
En fletes de
que deben observar vecinos, comerciantes y pasajeros para llevar indígenas fuera sus Alquilados por
AÑO
del distrito; y establecen el pago que los aborígenes deben recibir cuando salen en encomenderos año
los viajes c,3>.

Lasbuenas ganancias que los encomenderosobtienen en los trajines, dependen 1593 - 6 6

de las escasas inversiones monetarias que se hagan en ellos; y el esfuerzo para 1594 5 - 5
mantener los fletes locales recae sobre la población nativa de la zona rural. Por lo
tanto, los feudatarios no dudan en reclamar para que se levante la orden de
1600 - 2 2

94 22 116
registrar a los indígenas que van en el servicio de las carretas, o para que se modere 1601
elsalario que debenrecibir los aborígenes; y cuando lasautoridades amenazan con 369 33 402
1602
un control más estricto, solicitan que "en eso de que ¡os indios se Míen donde sus amos 118 33 151
1603
¡os envían o ¡¡even, que no se proceda con rigor por ¡a costumbre que tienen de huir" CI4).
1604 271 36 307

A pesar de toda la normativa, recién a partir de 1601 los protocolos muestran 1605 188 29 217
un registro más o menos constante de nativos que son utilizados en los trajines; y 1606 78 10 88
aún efectuando dicho registro, las transgresiones son permanentes C1S). 263
1607 206 57

78 11 89
1608
1609 34 11 45

1610 66 45 111
213) Las Ordenanzas de alcalde de sacas, han sido detalladas en el capitulo VI (in fine) y en el capítulo
VIH (apartado "Los fletes"), del presente trabajo Las continuas transgresiones en la saca de indios,
obligan al gobernador Mercado de Peñaloza a ratificar las Ordenanzas mencionadas, en 29/11/ 1594 TOTALES 1507 295 1.802
(en: AM., II:382-387)
214) La solicitud para suspender los registros de indios, es acordada por el cabildo el 11/8/1593 (en:
A M ,11: 321) Unos años antes, la institución había gestionado ante el gobernador que se modere lo
quesedebía pagara los indígenas por tales servicios, "y quesea en ovejas" (en:AM., II:83). En cuanto Desde 1593 y hasta fines de 1610, sobre un total de 1802 indígenas registrados
al último reclamo que se menciona en el párrafo, corresponde al acta capitular de 19/12/1588 (en: ante notario, el 8.3.62% sale en viajes organizados por sus encomenderos; pero no
AM.., 11:82-83) siempre estos vuelven ante el escribano para notificar el regreso de sus indios, y a
veces sólo asientan el retorno de algunos de ellos En otras ocasiones, losvecinos
215) Habitualmenle, estos registros dejan constancia de número de indígenas que acompañan a las
carretas y sus nombres, pueblo de origen, edad, estado dvii, encomendero al que pertenecen, tugar
al que se dirigen, tiempo que tardarán en el viaje, y dueño de las carretas Al regreso del trajín, el suelen prestar indígenas "para ayudar a satisfacer otro registro", y el gobernador se
notario incluye al margen de la hoja los indígenas que regresaron, los muertos, y la paga ve en la obligación de penar esta astucia con la suspensión de la encomienda por
Debemosseñalarqueno todoslosaños están bienrepresenladosen losprotocolos. La matrizdedatos un período de cuatro años®61.
que exponemos a continuación, es significativa sólo para algunos años, comoel de 1602;en tanto que
otros poseen datos incompletos, como el de 1609.
No han sido incluidos en el cuadro, los aborígenes de otras jurisdicciones que aparecen en los
registros, ya que su número es exiguo; en tanto que en el ítem "alquilados", están comprendidos los 216) En octubre de 1609,se haoe una investigación general en muchos protocolos, sobre el regreso de los
que son consignados como tales en los documentos.
indígenas registrados: algunos de ellos partieron en trajines durante el año 1601,y hasta la fecha en
En la mayor parte dejos casos, los registros indican que el trajín estará a cargo de su encomendero,
de un familiar de éste, o bien del mayordomo del repartimiento. Sólo en pocas oportunidades el flete que se inicia la investigación sus encomenderos no hablan dado cuenta del retorno.
es conducido por un "mulato", a quien no se le asigna una función específica (como ejemplo, cfr
En 1612,por ordendeloidor Francisco de Al/aro, se vueiveahacer otra indagaciónsobreel tema (Cfr.:
AHPC, Reg.. 1,tomo21, f- 371v, 372r.) En cuanto al fallecimiento de indígenas durante los trajines,
AHPC, Reg. 1, tomo 15, protocolo de 28/2/1602)
los registros sólo anotan un total de 19 asos desde 1601 a 1610.

254 255
En cuanto a la obligación del salario por el trabajo del trajín, señalemos que De la variada gama de servicios personales con que tributan los indígenas de
hasta 1607 los registros indican que losencomenderos sólo proveen a los indios de encomienda, aquellos que implican tareas fuera de los pueblos de repartimiento,
varas de sayal o de ropa para su vestimenta. A partir de esa fecha, y por el control conforman uno de los mecanismos de presión colonial que incide con mayor
que ejercen los ejecutores de las Ordenanzas de Abreu, al regreso del viaje los fuerza en la disminución de la población nativa,
notarios dan fe de la recepción de salarios en moneda, tal como lo fijan las normas.
Está muy extendida la modalidad de alquilar indios a comerciantes y pasajeros En el caso de los trajines y del alquiler de indios, ambos implican privar a la
que viajan fuera del distrito. En forma permanente losencomenderos menores de comunidad familiar indígena de individuos cuya ausencia deriva en una dismi¬
edad piden cuentas a sus tutores sobre ese tipo de rentas. nución de la fecundidad del grupo.
Por otra parte, la gran cantidad de poderes que los vecinos otorgan a viajeros
Las autoridades coloniales perciben los peligros de estas prácticas, e intentan
que salen de la jurisdicción, para "recoger" o "cobrar piezas de indios", señalan que
muchos europeos son remisos a devolver la mano de obra obtenida en alquiler CI7), —aunque tardíamente—, aplicar las reglamentaciones que pueden paliar sus
efectos
El incumplimiento en la "mita ordinaria" no se expresa solamente en lacantidad
de indígenas que acompañan en los trajines, o en la tardanza de los viajes, o en la Aún cuando los registros no reflejan cabalmente el volumen de nativos
falta de retomo de muchos de ellos También recae sobre la población rural la involucrados en la "saca de indios", aportan un testimonio importante: la mayoría
costumbre tan extendida de asistir a familiares y amigos con el "préstamo" de indígenas que salen en los viajes son individuos casados, con edades que
temporal de indios de encomienda, oscilan entre los 25 y los 35 años El informe del teniente del partido de Soto,
advierte sobre esto:
En 1594,el alcalde ordinario recibe información de los servicios que ha debido
prestar el cacique Yasanda y sus indios: además de las prestaciones habituales, en "El aver sacado yndios para carretear no a sido la menor
no menos de tres oportunidades debieron acudir a la es tancia de Pedro Sanchez
yerno de su encomendera—, para desyerbar y cosechar maiz y trigo; y desde allí,
— causa de yr a menos ¡os yndios sino ¡a mayor, ijue aunque
parece no averse quedado muchos yndios, el mucho travajo
algunos tuvieron que acudir a la vivienda de la ciudad, para ser ocupados en otros que an tenido y los frios que an padezido en las llanadas de
menesteres.Otro tanto sucede con algunos indígenas del pueblo de Tuiiban, que
Buenos Ayr es enferman y se mueren,y como no acen vida con
hacia 1599 se encuentran trabajando en Jujuy para un hermano de Luis de Abreu
ciai
sus mugeres por la tardanqa y llegados del puertoaceles pasar
como lo acianasta Esteco y Las Juntas.,.".

En otras palabras, el grupo de edad delos indígenas que acompañan los trajines
217) En 1598, los menores de Bartolomé Mejía le redaman a su tutor la suma de 300 pesos que obtuvo la
y tardanza de los viajes, disminuyen las oportunidades que toda comunidd
duran te nueve años, alquilando los indios dela encomienda en viajes a Buenos Aires y Santiago de! doméstica tiene para ejercer su capacidad biológica de reproducción
Estero (en: AHPC, esa 1, leg 7, exp 3).
La carta de finiquito de la tutoría de Agustín Ruiz de Castelblanco, señala una situación semejante
referida a indígenas que salen hada Potosí conduciendo gar.ado (en: AHPC, Reg 1, tomo 18,
protocolos de 26/3/1605 y 29/3/1605)
En cuanto a los poderes para "recoger" o "cobrar piezas de indios",podemos indicar quea partir del
año 1600,estos abundan en los protocolos notariales; y a veces hasta seda el aso de un encomendero
deobn jurisdicáón queredama indígenas quehan sido traídos a Córdoba (en: AHPC, esa. 1,leg 20,
exp. 5) Cuando la coyuntura económica impone un aumento en la productividad de
En todos los casos, la documentadón india que ios registros de indios no reflejan el número real de las encomiendas, lascomunidades indígenas deben acudir a es te requerimiento en
mano de obra indígena alquilada que sale fuera de la jurisdicción
condiciones desfavorables. Ellas son: la ausencia —en muchos casos perma¬
218) En: AHPC, esa 1, l§g 12, exp 2; y ANB, Expedientes Coloniales, año 1600, nro 4.. Tal vez un aso
extremo sea el que se produce en 1610, cuando el gobernador de Dueños Aires, Hernandarias de
nente— de varios de sus miembros; y el tener que enfr entar el reordenamientode
Saavedra, secuestra harinas y arretas procedentes de Córdoba, y ocupa a los indios en hacer asas las relaciones intensas y los cambios de localización geográfica que genera el
y ediíidos en el puerto (en: acta apitular de 19/4/1610, A M., V: 136-137) sistema de reducción en pueblos

256 257
El aumento de la productividad no trae aparejada la constitución de reservas I índole del cargo se va desdibujando. En las zonas rurales, el reemplazo de los
encomendero,
alimenticias indígenas; razón por la cual, los riegos de los fenómenos naturales caciques por yanaconas que actúan como agentes locales del
recaen particularmente sobre la población nativa. representa a cabalidad la nueva estructura de poder.
En 1609,el informe del sacerdote jesui ta Diego de Tornes reitera los testimonios
elevados por los ejecutores delas Ordenanzas deAbreu: losindios deencomienda
no tienen "cosa propia", sus encomenderos les dan algunas tierras para que hagan
sementeras, pero les conceden poco tiempo para cultivarlas; reciben limitadas Los trabajos urbanos.
raciones de maíz o trigo y raras veces carne o "un miserable vestido". En este
contexto, los fenómenos naturales se tornan sociales en sus incidencias C1". En el año de 1598, el gobernador del Tucumán don Pedro de Mercado de
Peñaloza, se traslada por algunos meses a la ciudad de Córdoba. Durante su
Durante el período de ampliación de la actividad mercantil de las encomien¬ estadía, se pone al corriente de los problemas que dificultan la buena marcha de
das, la presión colonial sobre la población nativa de las zonas rurales se expresa la jurisdicción, al tiempo que se ocupa de numerosos asuntos relacionados con la
también en el acentuamiento del control político justicia y el gobierno.
i:

Desde la misma conquista del territorio, los españoles insisten en que los Una de estas diligencias consiste en recorrer los pueblos de encomienda. En el
pueblos aborígenes "viven en behetrías"; expresión con la que hacen referencia a j viaje al interior del distrito, toma conocimiento del desorden con que los enco-
aquellos campesinos de la Península Ibérica que desde el siglo XI tienen recono¬
I menderos sacan indígenas de los pueblos de repartimiento. Para poner remedio a
cido su derecho a cambiar de señor. esta situación, ordena un acto administrativo de control, que ya había sido
j utilizado en diferentes ocasiones por el gobierno colonial en otras regiones de
Partiendo de esta percepción, ignoran las funciones prehispánicas de los j América: la realización de una visita a losindios deservicio que poseen losvecinos
caciques, salvo en los casos en que son requeridos para testimoniar en los juicios, de Córdoba 02l).
o cuando se relata alguna actividad de resistencia. En la práctica, no están
reservados del tributo en servicio personal; y en ese sentido, la observación del
teniente del partido de Soto adquiere toda su dimensión: "mal podían tenerles I
ovediencia a los caciques los yndios, viendo como los mandavan como a mitayos" °2®. 221) La visita como institución jurídica, existe en época de los Reyes Católicos; y las autoridades del
Virreinato del Perúcomienzan a aplicarla desde épocas tempranas La fecha déla primera visita, que
En la documentación española, la autoridad de los jefes indígenas no aparece es ordenada por Francisco de Pizarro, corresponde al año 1532; y su objetivo es obtener referencias
y testimonios sobre loshabitantes y el territorio de su jurisdicción
claramente precisada, y a medida que se afianza la administración colonial la Los fundonarios encargados de realizar este acto de control, recibenel nombre de "Visitadores" o
"Jueces Visitadores"; acompañados de escribien tes y otros auxiliares, recorren la región recabando
| los datos que un interrogatorio les indica
Habitualmente, las informaciones que se obtienen a través de una visita, se convierten en funda¬
219) Carta anua del P. Diegode lories,de fecha 17/5/1609 (en: Leonhardt 1923,XIX: 41-82). A menudo, mento de adaptaciones del ordenamiento tributario, o bien de reformas a los limites de distritos y
lasadas capitulares dan cuenta de este tipode situadones;en 20/11/1539, ios miembros del cabildo basede la legislación colonial. H estudio deGuillermo Céspedes del Castillo,defínelas característi¬
dejan asentado que "por la necesidad de lluvias,los indios menoscaban" (en: A M., II: 147) De igual cas jurídicas de esta institución en España y en América (Céspedes del Castillo, 1946: 984-1025)
manera, los encomenderos refieren continuamente condiciones de escasez en sus poblados; tal el Lavisita como documento histórico, ha permitido a ioshistoriadoresdel período colonial temprano
caso de Gaspar de Quevedo, quien indica que "por averse faltado los algarrobales" los indios del enlos Andes, modificar la visión delas poblaciones prehispánicas y comprender su participación en
pueblo de Cahma se han desparramado (en: AHPC, esa. 1, leg. 13, exp 3); o el de Juan de Mitre, la vida colonial En 1951, Marie Helmer inaugura la utilización de este tipo de fuente, en su estudio
cuando refiriéndose a su repartimiento de las vertientes del río de San Juan, dice que no se sirve de sobre los Lupaqa de Chucuito, basándose en la copiosa información contenida en la visita realizada
esos cadques "porque no tiene comida para darles, ni ellos la tienen" (en: AHPC, esa 1,leg l,exp ¡.*) por Gara Diez de San Migue] en 1567 (Helmer, 1951). Posteriormente, otros investigadores,
4) r" aprovechando los datos provistos por las visitas, responden a preguntas que abarcan tanto la etapa
220) En el caso de Córdoba, la administración hispánica no considera a los caciques como
mediadores de formación del Tawantinsuyu, como la organización del sistema colonial en los Andes (Cfr los
entrcelpoder coloniaíyla población indígena Esto marcauna diferencia con la zona nuclear andina, j trabajos de Franklin Pease de 1978).
donde el prestigio étnico de los kurakas se mantiene a lo largo del período colonial (Cfr . Pease, 1988, , En cuanto a otras actuaciones puntuales del gobernador Mercado de Peñaloza en su recorrida por
passim). Las mismas cédulas de encomiendas muestran a menudo esa falta de determinación, la jurisdicción de Córdoba -mencionadas en este párrafo-,podemosdar como ejemplo suactuadón
cuando para hacer referencia al nombre de un cacique, recurren a la utilización del topónimo en un pleito entre vecinos encomenderos (en: ANB, Expedientes Coloniales, año 1600, nro 4)
r
258 i 259
Don Pedro de Mercado de Peñaloza comisiona para esta tarea al capitán
Antonio de Aguiiar Vellida, teniente de gobernador de la ciudad En las instruc- presentes en el momento del empadronamiento de sus indios; y varias señoras
dones pertinentes, le indica la necesidad de incluir el servicio de los vecinos
españolas no puedenjurar sobre la veracidad de los datos que brindanalvisi tador,
"por estas preñadas".
encomenderos, y el de "otras cualescjuier personas, estantes y evitantes en ella".

El censo deberá comprender los aborígenes que sirven en la morada de la


ciudad, así como los delaschacras y estandas. El visitador deberá entrar a las casas
SEXO, ESTADO CIVIL Y LOCALIZACION DE LOS INDIGENAS
de los vecinos, hará comparecer ante si a los indígenas y averiguará cuántos son,
MAYORES DE 12 AÑOS, EMPADRONADOS EN LA VISITA DE 1598
el pueblo de origen, y a qué encomendero pertenecen; preguntará además sobre la
edad, el estado y el oficio ola ocupación asignada por susamos. También indagará
el tiempo transcurrido desde que Sos llevaron de sus pueblos, si son bien tratados,
si les dan de comer y vestir, si les curan en sus enfermedades y si los adoctrinan.
SERVICIO EN SERVICIO SERVICIO SIN
LA MORADA EN CHACRAS ESPECIFICAR in
Por último,la comisión deserviciosle indica que deberá iniciar la visita ellunes DE LA CIUDAD Y ESTANCIAS LOCALIZACION TJ
5 de octubre; y advierte que en caso que los vecinos no acudan al llamado, se C
o
nombrará otro visitador con días y salario m. 13
fl
IX

Sub-Totel
a o £
A pesar de las instrucciones, entre el 6 y el 9 de ese mes de 1598 — fecha que /sexo a

solter casdo viudos


a

viudos i solter s viudos


o
abarca la visita—,se empadronan los indígenas de servicio de sólo 17 encomen¬
SCJ 0
a
0
*T5
0
É
¿ 3
CQ
a a
deros; y Antonio de Aguiiar Vellicia recorre solamente las moradas de la ciudad 0
a
a
u en
3
en £
Por lo tanto, comparecen ante él únicamente los aborígenes cuyas actividades se
desarrollan en la zona urbana; mientras que la enumeración de aquellos dedicados
a las tareas rurales es hecha por los propios encomenderos, por sus familiares, o
MASCULINO 45 90 8 143 61 67 7 135 25 39 - 64 342
bien por sus administradores <m.
FEMENINO 46 90 7 143 9 66 1 76 16 39 2 57 276
Eljuez visitad or que realizael censo de los indiosde servicio, no sólo no es ajeno
a la jurisdicción, sino que además ha establecido en la región sólidas relaciones
personales con los encomenderos No obstante, son pocos los vecinos que están TOTAL 91 180 15 286 70 133 8 211 41 70 2 121 618

222) La comisión de servicios y la relación de la visita, se encuentran en: AHPC, escr 1,leg8,exp 2 En
el presente trabajo, nos guiaremos por la transcripción que ha sido publicada en: Historiografía y
Matrimonios e individuos solteros de ambos sexos, conforman el personal
Bibliografía Americanistas (Piaña de Cuestas, 1987) indígena que los encomenderos poseen en la moradade la ciudad; algunos de ellos
223) Algunos de los encomenderos empadronados son poseedores de repartimientosimportantes: tales cuentan entre doce y quince años. Sin embargo, prácticamente no hay matrimo¬
los casos de Ludade Grados, Antonio SuarezMejia, Miguel de Ardiles, Pedro Luis de Cabrera, Juan nios nativos que tengan hijos pequeños; y los "muchachos" censados, casi nunca
de Mitre,Adrián Cornejo y Lucrecia de Villalva Es de haoer notar que nose encuentran incluidos en guardan lazos de parentesco directo con los otros miembros del servicio G2Í).
la visita feudatarios como Tristón de Tejeda, Luis de Abreu, Juan de Espinoza NegTCte, Alonso de la
Camara, Juan de Soria, o Gerónimo de Bustamente, que por esa época se destacan por su inserdón
en el comerdo interregional
En cuanto a los indígenas empadronados, comprenden un total de 618 hombres y mujeres mayores
de 12 años; una cifra que nos indica que el documento no abarca a la pobiadón total encomendada 224) Sólo catorce de los diecisiete encomenderos visitados, tienen discriminado
Este documento administrativo es un primer recuento burdo, oon datos dispersos y discontinuos, el servicio según su
localización sea en la morada de la ciudad, o en las chacras y estancias.
realizado además por un funáonario que no es ajeno a! distrito A pesar de esto, la fuente es Antoniode Aguiiar Vellicia incluye en losdatos de los empadronados, además de nombre y apellido,
representativa del sector indígena que presta servido en la vivienda urbana de los europeos,y en ese aquellos relativos a su estado dvil, particularmente cuando se trata de casados o viudos; en el
sentido es utilizada en el texto. primero de los casos, agrega habitualmente e! nombre del oónyuge. En cambio, la edad es indicada

260
261
En el conjunto de indígenas que trabajan en la ciudad, están representados casi deras y costureras. Como también en la morada se suelen realizar tareas textiles,
todos los pueblos de la jurisdicción; aunque justo es reconocer que la mayoría algunos vecinos tienen indígenas "labranderas" y "bolilleros".
procede de las encomiendas de las zonas norte y central de las sierras. Por otra
parte —aunque en número muy pequeño—, algunos feudatarios poseen aborígenes A menudo el visitador anota ¡a presencia de "chinas del hijo del encomendero".
de distritos como Mendoza, Santiago del Estero, o Paraguay m. Son las encargadas de criar y amamantar a los vástagos pequeños del feudatario .
Aún cuando en las instrucciones del gobernador se señala la necesidad de En varias ocasiones, los funcionarios coloniales se muestran preocupados por
averiguar cuánto tiempo llevan estos indígenas residiendo fuera de sus pueblos, estas mujeres que prestan servicio en la vivienda urbana. En las instrucciones para
sólo en dos ocasiones el visitador se acuerda de incluir la pregunta correspon¬ realizar la visita, el gobernador Mercadode Peñaloza señala que la disminución de
diente en su inquisitoria;y en ambas se le responde que están sirviendo en esa casa la población nativa es una consecuencia del desorden con el que se saca indígenas
"desde que los encomendaron". Enrealidad, ningún detalle de la visita permite inferir de las aldeas, y subraya: "y mas las yniias y chinas".
la observancia de los tiempos de trabajo que establecen las Ordenanzas para las
mitas ordinarias de los feudatarios. Algunos años después, el ejecu tor de las Ordenanzas de Abreu en el partido de
Soto, informa al respecto:
Cada vivienda dispone habitualmentede unnúmero importante decriados. En
la morada de Pedro Luis de Cabrera, el visitador llega a censar a más de 60 "Ansimismo si algunos socavan amas avian de dejar ¡os
aborígenes, y 45 en la de Antonio Suarez Mejia. Ambos son feudatarios que hijos dellas para criar los suyos porque no les quitase la ¡eche;
participan en el comercio interregional, por lo que varios de los empadronados se y save Dios quantas criaturas se an muerto por esta ocasión;
hallana menudo fuera de la ciudad ocupados en "carretear". Elresto delos vecinos, y enacavando de criallesus hijos las dejavan en su casa y no
contabiliza cada uno más de diez o veinte indígenas en su vivienda. volvían a sus pueblos

El "servicio de casa" está compuesto por un considerable grupo de mujeres Tal como sucede con los indígenas dedicados a los trajines, las "yndias y chinas"
nativas, a quienes los europeos denominan genéricamente "chinas". Dedicadas al conforman otro sector joven en edad fértil, que es separado de la comunidad
quehacer cotidiano de la vivienda, hay entre ellas cocineras, lavanderas, pana- doméstica .La ausencia casi total de hijos pequeños en los matrimoniosnativosdel
servicio urbano, señala la disminución en el ritmode reproduccióndéla población
aborigen, a la vez que justifica la preocupación que en ese sentido expresan
algunos funcionarios.
sólo en aquellos casos en que las Ordenanzas de Abreu reglamentan en forma particular el tipo de
trabajo que pueden realizar; razón por la cual, bene cuidado en radicar la existencia de cuatro
indígenas menores de 12 años. Demanera genérica, con la designación de "muchachos" comprende
La hispanización de las indígenas está en manos de las esposas de los encom¬
a los miembros de ambos sexos que cuentan entre 12 y 15 años; en tanto que con el término "viejo" enderos. Ellas son las encargadas de industriarlas "en mucha limpieza y enseñándo¬
designa a los mayores de 50 años. les a coser y labrar,guisar y otros oficios.."; también se ocupan de hacerles rezar "las
Delos 618 individuos empadronados, 48 de ellos tienen entre 12 y 15 años, de los cuales sólo tres cuatro oraciones" de la noche, y de enviarlas a misa los domingos y días de fiesta.
pertenecen al sexo femenino; fuera de esa cifra total, figuran cuatro menores de 12 años.
Sobre un total de 196matrimonios censados, sólo el 1638% tienen hijos, conun promedio de 1,2hijos
por matrimonio; en tanto que en la vivienda de la ciudad, sólo 13 cónyuges nativos tienen hijos La zona urbana es otro terreno donde losvecinos compiten para obtener mano
pequeños. de obra. En este caso, las disputas se dan en torno a las indígenas del servicio de
225) En las instrucciones recibidas por el teniente de gobernador, se le indica la necesidad de señalar el casa que se muestran más laboriosas.
pueblo de origen de los indios censados y la encomienda a la cual pertenecen Sin embargo, la
procedencia noeslá indicada en todosloscasos:un 11.40% de los varones, y un33.69% delas mujeres,
carecen de este dato En cuanto a las mujeres, podríamos inferir que tal omisión se debe a que su Desde 1597, el lugar de residencia de cónyuges que pertenecen a distintas
pueblo de origen'es el mismo que elde su esposo, ya quecasisiempre su estadocivil es el de casadas encomiendas es fijado en unas ordenanzas del gobernador Abreu; en ellas se
Los 476 indígenas que tienen señalado su lugar de origen, pertenecen a 82 pueblos distintos; esto indica que las mujeres nativas deben servir en el repartimiento del marido. A
refleja la dispersión geográfica délos asentamientos prehispánicos. Señalemos por último,que sólo partir de entonces, muchos vecinos inducen a sus indios para que mediante
figuran diez aborígenes procedentes de otras jurisdicciones.

262 263
casamiento obtengan alguna de esas indígenas industriosas, "y a veces quebrantan
Otros están dedicados a tareas específicas como pajes, caballerizos, mayordo¬
las casas y entran por las tapias y corrales a sacarlas " Para evitar tales astucias, ios
mos, carreteros; y hasta hay quienes desarrollan algún oficio, como el de sastre,
encomenderos recurren a otro ardid: cuando todavía son menores de edad, casan
zapatero, cordovanero, curtidor, o carpintero C21!í,
a sus indias con muchachos del mismo repartimiento.
En cada una de las viviendas visitadas, el teniente de gobernador Antonio de
Frente a tanto dislate, el gobernador Mercado de Peñaloza se propone que las Aguilar Vellida cumple con la formalidad ordenada en las instruedones: frente al
personas que hubieren adoctrinado y enseñado a servir a las indígenas, nose vean encomendero, o a su esposa, los indígenas del servido responden sobre los tratos
perjudicadas después de los empeños y molestias demostrados. Mediante un que reciben de sus amos
nuevo mandamiento establece que para el servicio de casa, el lugar de residencia
del matrimonio nativo sea el de la encomienda a la que per tenece la esposa G26). En todos los casos manifiestan que son bien tratados, que no ios hacen trabajar
de noche, y que les curan en sus enfermedades, No obstante a veces se deslizan
Claro está que no todo es abnegación y sacrificio para las esposas de los algunos pormenores de su vida en la ciudad: los sirvientes de Antonio Suarez
feudatarios, y así lo comprende el gobernador Mercado de Peñaloza,En 1595,ante Mejia dicen que cuando "no hazen alguna cosa de los que es razón ..y esto pocas vezes,
una solicitud presentada por el procurador de la ciudad, debe prohibir que las les aqota algunos seis o siete aqotes"; los de Juan de Mitre señalan que su amo "no les
dava debestir y que ellos loprocuravan y en el mismosentido se expresan loscriados
señoras "salgan en silla fuera de la ciudad en hombros de indios", porque "es en darlo de
de Frandsco de Loza, cuando señalan que "ni tienen que se bestir mas de las camisetas
los naturales" m.
biejas que tienen puestas".
El servicio de casa también es realizado por indígenas varones. La mayoría Además del servicio de casa, los feudatarios ocupan a sus indios de reparti¬
tiene a su cargo tareas no especializadas; y en estos casos, el visitador los anota miento en otras tareas urbanas Continuamente elcabildosolicita de los vecinos el
como "yanaconas". aporte de mano de obra para los trabajos públicos, ya sea abrir las cabezadas de la
acequia, reparar el aguaducho que está en la cañada del convento de San Francisco,
o construir las casas del ayuntamiento. Asimismo, el Hospital de Santa Olalla —
donde se atienden los pobres—, cuenta con indígenas para su mantenimiento y
226) Las Ordenanzas deAbreu aquí citadas, son dictadas en laciudad de Córdoba en 23/5/1579, y están con "chinas" que se encargan de lavar la ropa c229).
dirigidas a fijar los crilerios a seguir por la justicia ¡ocal en los litigios sobre encomiendas (en: A C,
1:298-301).
Los ardides para obtener indígenas de servidos, son relatados en los considerandos de un manda¬
miento de Mercado de Peñaloza, de fecha 2/5/1595; para poner remedio a esas siíuadones, el
gobernador ordena que los vecinos de Córdoba y de todas las dudadesde la Gobernadón, "acudan
a que sus indias casadas traigan a sus casas a sus maridos de otros encomenderos"; esto se debe La ciudad es el lugar de residencia permanente de los habitantes europeos del
entender sólo con el servido de casa (en: A. M., 11: 408411) distrito, y el centro geográfico del poder colonial en la región.
Por otro mandamiento posterior, de 1/12/1597, el gobernador especifica: esa ordenanza se ha de
aplicar sólo a las chinas del servido y casa delas personas que las hubieren adoctrinado y enseñado
a servir, y no con las indias "chontales" de los pueblos (en: A M., Ill: 43-54)
Sin embargo, al año siguiente el gobernador se informa que muchosindios están amancebados con
indiasde otros vecinos, por temor de que si se casan han de ir a servir al amo de su mujer;por locual
ordena que de aquí en adelante los indios y yanaconas que se casaren lleven consigo a sus mujeres, 228) No lodos los individuos empadronados en la visita tienen especificada su actividad. El 36,88% de
y el amo de ee indio se sirva de la india aunque sea labrandera, china o cocinera de otro los que viven en la ciudad; el 84,83% de los que habitan en la zona rural; y el 46,15% de los que no
(mandamiento de 13/8/1598, en: AM., Ill: 103-104) tienen indicado el lugar donde desarrollan sus tareas, carecen del dato pertinente.. Las actividades
Es probable que cjebido a este último mandamiento, la visita de 1598 registra la presencia de 12 rurales se hallanpoco detalladas en el padrón . Gañanes, ovejeros y chacareros, son lasdesignaciones
indígenas que en ese momento están tributando a encomenderos que no son los que les correspon¬ comunes para el servido de la campaña
den por cédula de repartimiento. 229) Actas capitulares de 7/12/1591, 18/1/1592,10/11/1603,13/5/1604,29/3/1606, 19/5/1609 y 12/
227) Mandamientos del gobernador Mercado de Peñaloza, en acta capitular de 30/1/1595 (en: AM,11: 3/1607 (en: AM, II: 242-243, 262-263; III: 4042; IV: 78-79, 223-224, 364-365; y V: 18-20).
394401)

265
264
En su estructura poblacional, los nativos conforman el grupo étnico más encomendero Pedro de Chavez tratan de intervenir, son agredidos por el citado
numeroso; pero su migración a la zona urbana ha sido compulsiva, y la calidad de indio.
indios de servicio los coloca en situación margina!,
La justicia del teniente de gobernador es rápida. En pocos días interroga a
Desdela perspectiva indígena,lavida en la ciudad no es fácil, ya que el ejercicio testigos y acusados, y dicta su fallo El pulpero Domingo de Aleguisamo debe
del control colonial es más estrecho y permanente que en las zonas rurales. pagar 100 pesos de multa por haber vendido el vino de la borrachera. Francisco,
Adentro de la vivienda española, integran e! escalón inferior de una organización de la encomienda de Diego Celis de Burgos, es puesto en la argolla del palo dela
que pretende ser señorial; mientras que en lascalles del vecindario, están someti¬ plaza y condenado a recibir 50 azotes en las espaldas desnudas, por ser este "indio
dos a una serie de prohibiciones, y son percibidos como peligrosos por los trompeta" el encargado de comprar el vino. Por último, Benito es sentenciado a un
europeos. destierro de cuatro años; con la advertencia de que si esto no lo cumpliera, se le
darán 200 azotes y le quitarán el cabello ®,).
No es una exageración sostener que la mirada de los españoles está siempre
atenta sobre ellos. Cuando en una de sus recorridas, Francisco Gutierrez de Como en toda sociedad colonial, los procedimientos de la justicia y las
Escobar, alguacil mayor de la ciudad, encuentra a dos indígenas que llevan una sanciones a las transgresiones difieren según sea el grupo étnico al que van
botijuela de las que usan para la miel, desconfía de su contenido. Una rápida dirigidos. Para los indios que sirven en la morada del encomendero, las acciones
inspección indica que allí se transporta un cuartillo y medio de vino. Domingo y judiciales son rápidas, y los castigos siempre adquieren las características de un
Anton —nativos del pueblo de Chinsacate de la encomienda de Miguel de espectáculo público C3Z>.
Ardiles—, pagaron por su compra tres reales en moneda.
i Sin embargo, es necesario señalar que los archivos judiciales del período no
La venta de vino a negros e indios,es reiteradamente prohibida por or denanzas registran ningún caso en el que losnativos de la jurisdicción que residen en la zona
del cabildo y mandamientos de los gobernadores. De allí que Juan Vicente, el urbana cometan delitos criminales. La estructura del poder colonial en la ciudad,
pulpero italiano de quien obtuvieron la bebida, es obligado a devolver el dinero, y lo ejemplar de las sanciones, son demasiado fuertes como para desafiarlas con
recibir el vino que les vendió y pagar una multa de 20 pesos, a pesar de que el ese tipo de transgresiones.
i
comerciante insiste en que no recuerda haber hecho esa transacción <BW.
En cambio, no sucede lo mismo con los indígenas forasteros. Su integración en
Cuando estas normas se quebrantan y la transgresión va asociada a hechosde la estructura social es más débil que la de los nativos de la jurisdicción. Al
violencia, las sanciones sobre los indígenas son ejemplares, aislamiento derivado de su condición de forasteros, debemos agregar que las
relaciones que establecen son siempre precarias. Por otra parte,el haber servido en
En el año de 1608, la pulpería de Domingo de Aleguisamo que está en la Calle distintos lugares a diferentes amos, losinclina a copiar con facilidad las estrategias
delos Mercaderes, resulta ser el escenario de una gresca. Uno de sus protagonistas del sector dominante. Es por esto que las tensiones propias de la población
es Benito, originario de Chile, sin oficio; indio ladino que sirve al deán Tomé de indígena de servido, se manifiestan con mayor franqueza en este sector.
Salinas, y que hace 5 ó 6 años que reside en la ciudad.

En compañía de otros tres indígenas, Benito se emborracha e intenta apuñalar


a uno de ellos con una almarada. Cuando un clérigo de órdenes menores y el 231) AHPC, esa l,leg 19, exp. 7.
232) Es necesario señalar que para los europeos la ley es habitualmente lenta y cargada de recursos y
formalismos. Los archivos judiciales del distrito, conservan varios juicios iniciados contra coloni¬
zadores por acciones criminales; ninguno de ellos derivó en la aplicación de castigos corporales o
230) AHPC, esa 1,leg. 13, exp. 4. Ese mismo día, el alguacil encuentra a otros dos indígenas en medio pena de muerte. Como contrapartida, este tipo de sandón sf es aplicada para otros grupos étnicos;
de una riña; ambos sirven a Francisco de Salcedo, tesorero de la Catedral En sus averiguaciones, ) tal el caso de Agpstin Mejía, de color negro y natural de Trujillo en España, quien es condenado a
descubreque hanbebido y que el vino que tienen escondido en una olla adentrodel Hospitai, hasido muerte por el asesinato de Luis Lopez Dacosta Su ¡estamento, resulta un documento predoso que
comprado también en la pulpería de juan Vicente Como en la situación anterior, el pulpero dice que retrata la biografía de un exponente de ios sectores marginales de la soaedad colonial (en: AHPC,
no se acuerda de haba hecho esa venta (ibld.). Reg. 1, tomo 18, protocolo de 22/2/1605).

266 267
Procedentes de Chile, de Perú, de Asunción, o de otras ciudades de la Cuando el alcalde va a prender a uno de los acusados, Diego está presente e
Gobernación, su residencia en la zorra urbana se origina en un conciertode trabajo intenta huir. Ensu testimonio niega haber participado en el crimen y dice que "avia
convenido con algún europeo. Habitualmente, estos contratos definen un tipo de huydo de miedo porque era pobre y forastero y no tenia en esta giudad quien bolviese por su
relación privada que se r egistra ante el escribano público, y con la presencia del causa"; y pide "que le ahorcasen de una vez y que no le diesen tormento . ".
protector de naturales y otra autoridad. En el acto notarial el indígena se com¬
promete a servir a un determinado patrón,por un tiempo que no suele exceder los
dos años; y su nuevo amo adquiere obligaciones tales como doctrina, manuten¬ En las actuaciones, el alguacil mayor detiene a otros indios forasteros que se
ción, y curación en las enfermedades, además de un pago que se estipula en encuentran en la pulpería bebiendo vino; y puesto que carecen de encomendero
especies o en dinero Muchos de ellos tienen el oficio de sastre, sillero, o barbero; que se ocupe de ellos, nombra para su defensa a un curador "ad litem" ,A pesar de
esto, el alcalde ordinario dicta un auto de sentencia de tormento para obtener la
pero también hay otros que se conciertan "para servir en lo que le mande" m.
confesión.
A pesar de que es tos indígenas forasteros conforman un grupo numéricamente
escaso en la ciudad de Córdoba, suelen aparecer complicados con asiduidad en Las sospechas recaen también sobre dos indígenas de repartimientos locales;
hechos delictivos. pero a diferencia de los anteriores, sus encomenderos se preocupan por efectuar
presentaciones en su favor; y cuando la justicia condena a uno de ellos al ingenio
En 1609, un crimen que involucra a aborígenes de concierto y de encomienda, y potro de los tormentos para que confiese el delito, hay un escribano que toma
nota exacta de todas las actuaciones.
deja al descubierto conflictos e inseguridades; y muestra los recursos que se
emplean cuando los acusados pertenecen al grupo étnico dominado. El hallazgo
del cadáver de un indio sillero de Chile, con la cara desollada, desata órdenes de En efecto, en primer lugar se informa al acusado —en la lengua general del Perú
prisión, interrogatorios y sentencias de tormentos para obtener confesiones "que comunmente se habla en esta tierra"—, sobre los procedimientos que se uti¬
lizarán para que diga la verdad sobre el crimen Cuando le ponen los cordeles en
En la declaración de uno de los sospechosos se desliza la situación de inseguri¬ brazos, muñecas y piernas, el alcalde le sugiere que confiese, "porque si se muriese,
dad delos indígenas forasteros. Diego es nativode Santiago del Estero,y pertenece o mancase, o le viniese flujo de sangre", será por su culpa. A pesar de la insistencia del
a la encomienda r eal Hace 21 años que llegó a Córdoba en compañía de un español indígena negando su participación, se manda dar varias vueltas a los cordeles,
que se dirigía a Chile, pero él prefirió quedarse en la ciudad Desde entonces ha mientras se le hechan cuatro cuartillos de agua por la boca, a través de una "toca
estado concertando sus servicios con distintos europeos, ya que su oficio es el de de bengala".
zapatero.
Unos días después, su encomendero solicita al alcalde que suelten a su
indígena, porque está muy enfermo "y puede quedar manco". No obstante, los
tormentos se repiten en otras dos oportunidades, con el mismo resultado.
233) Barchivonotarial registra en el año 1579 e! primer asiento de trabajo; desde esa fecha y hasta 1610,
hemos localizado un total de 14 conciertos. Aunque muchos de los contratos pueden haber sido
realizados en otras jurisdicciones, es indudable que en Córdoba no hay para esta época un número En realidad, ninguno de losacusados confiesa su participación en el crimen; y
importante de mano de obra indígena "voluntaria", tal como sucede en las zonas nucleares andinas; los jueces no tienen más remedio que absolverlos y dar por cenado el caso <B4>.
es probable que a esto contribuya la disponibilidad de indios de encomienda
La forma de pago de estos servicios es variable, dependiendo en todos los casos del grado de espe-
cialización que tenga el indígena En este sentido, podemos señalar dos ejemplos extremos.
En 1598, el comercian te Juan de Duysa Benavente firma un concierto con el indioFrancisco Tilonque,
de Coquimbo, para que le sirva durante un año en las carretas; por el trabajo le pagará 70 pesos en
lienzo de algodón y ropa de la tierra, y un vestido más si tuviera que ir a Potosí (en: AHPC, Reg 1,
tomo 11, protocolo de 15/10/1598) En 1606, el indígena Alonso, de Talayera, se concierta con 234) AHPC, esa 1, leg. 21, exp 1. Como dato curioso, podemos señalar que durante estas actuaciones
Francisco Bernardino de Jijón, drujando residente, por un año y medio; redbe en pago comida, judiciales, uno de los detenidos es Francisco, aquel "indio trompeta" de la encomienda de Diego
doctrina y curadón en lasenfermeda des, ademásde2 piezasde ropapor año (en: AHPC, Reg 1, tomo Celis de Burgos que un año antes habfa sido condenado a 50 azotes, por estar involucrado en una
19, protocolo de 16/8/1606) borrachera En medio del juicio, este indígena muere misteriosamente envenenado en la cárcel

268 269
En este sentido, un ejemplo interesante es el de la descendencia de Hernán
Mejía Miraval; ya que tres de los encomenderos más importantes tienen por
cónyuges legítimas a sus hijas mestizas Son ellos: Tristán de Tejeda, casado con
Mestizos y cimarrones. Leonor Mejía; Alonso de la Camara, casado con Ana Mejia; y Juan Rodriguez
Cardero, casado con Isabel de Vega.

l¿s historias individuales que los documentos permiten reconstruir, señalan Es indudable que en la incorporación de estas mestizas al grupo de los
continuamente la presencia de mestizos en la sociedad colonial de la jurisdicción. conquistadores, colabora la disposición dela madre nativa, cuya asimilación a los
Sin embargo, en esas historias los actores participan plenamente de una de lasdos valores hispánicos se manifiesta en su testamento. En efecto, éste no guarda
grandes categorías que reconoce el tejido social: conquistadores y nativos. ninguna diferencia con los de las españolas de la época; y por los bienes que
dispone, se puede inferir que su condición de concubina le ha otorgado ciertas
Por el momento, la estratificación socio-étnica no tiene en cuenta el mestizaje ventajas,
biológico. El vocabulario de la época —y en particular la conciencia subjetiva de
los conquistadores—, no considera a losindividuosde ascendencia mixta como un En el año de 1600, María Mejía —tal es el nombre de la indígena-, reside en la
tercer sector de la jerarquía social
casa de su yemo Tristán de Tejeda;y sintiéndose enferma, se dispone a testar. Ante
el escribano Juan Nieto, señala que es india del pueblo de Mancho.
Los primeros contingentes hispánicos que llegan a las Sierras de Córdoba, En su última voluntad, expresa el deseo de ser entenada en la Iglesia de San
cuentan entre sus miembros a mestizos nacidos en el Perú Tales son los casos de
Francisco con el hábito de la orden; sus exequias deben ser acompañadas con una
Juan BautistaNoble y Pedro de Candia, integrantes de la hueste de Jerónimo Luis misa cantada de cuerpo presente, oficiada por el cura y sacristán de la Iglesia
de Cabrera. El primero de los nombrados entra en la Provincia del Tucumán
Mayor. Dispone también otras misas para personas de su familia: por Andrés, su
alrededor de 1565, reside por un tiempo en Santiago del Estero, y luego participa marido difunto;por sus hijos fallecidos; y por HernánMejía Miraval, "suamo". De
en la fundación de Córdoba con armas y caballos. En su testamento, declara ser
igual manera, dona libras de cera para algunas confradías, entre ellas la del Niño
hijo bastardo del veneciano Juan Martín y de Elvira,india del Cuzco En cuanto a Jesús, de la que es miembro. Señala que posee deudas a cobrar; y que en las
Pedrode Candia, también es hijo ilegítimo de una nativa del Cuzco.Su padre, un estancias de sus yernos tiene animales, tales como ovejas de Castilla, bueyes, una
artillerogriego deigual nombre,había intervertí do en la conquistay guerrasciviles yegua y un potro. Cuenta también con un vestido de raja azul con pasamano de
del Perú tB5), seda; y además todo lo que Tristán de Tejeda, Alonso de Camara y Manuel de
Fonseca "declararen bajojuramento tener en su poder"- Por otra parte,unos días antes
En la medida en que Juan Bautista Noble y Pedro de Candia están asimilados María Mejía había prometido 300 pesos en moneda de la tierra, como dote para su
al grupo paterno, sus orígenes mestizos no son tenidos en cuenta, De allí que en nieta Leonor. Durante el tiempo en que la indígena compartió la vida de los
ambas historias, los protagonistas se convier tan en encomenderos del distrito. conquistadores, también se vio favorecida con algunas de las costumbres colonia¬
les, tales como tener nativos para su servicio. En las mandas testamentarias,
Por otra parte, muchos de los europeos de la hueste de Cabrera poseen hijas dispone para cada uno de ellos la donación de piezas de ropa, camisetas de lana
mestizas, habidas en indígenas de Santiago del Estero o Chile, Educadas como o sayal, y unas pocas ovejas®6'
jóvenes españolas, la mayoría de ellas contrae nupcias con vecinos de la jurisdic¬
ción
236) Testamento de María Mejía, de 23/9/1600 (en: AHPC, Reg. 1, protocolo de la fecha); y promesa de
dote de 4/9/1600 (en: ¡bíd.)
No todas las indígenas que fueron concubinas de los conquistadores se vieron igualmente benefi¬
ciadas: en 1614,el testamento de Elena,madrede tres hijos mestizos, registra una situación diferente.
235) Testamento de Juan Bautista Noble, de 13/7/1589 (en: AHPC, Reg 1, protocolo de la fecha) En
E1 padre de uno de sus hijos había sido un soldado residente en Santa Fe, quien le habría dejado
cuanto a Pedro de Gandía, di Lockhart 1986, I: 142 Olios casos semejantes figuran en los
"alguna hacienda"; cuando el hijo muere, su madre indígena queda como heredera; pero hasta el
testamentos, como el de Juan Lopez Cervantes, natural de Los Reyes y vecino de Córdoba, casado en
momento de testar, Elena no ha logrado cobrar la supuesta herencia (en: AHPC, Reg 1,protocolo de
primeras nupcias con la hija de una india palia (en: AHPC, Reg 1, protocolo de 4/2/1595) 10/3/1614).

270 271
Las historias que venimos de reseñar se desarrollan en los primeros años de la Al igual que en otras regiones de América, el régimen colonial va acompañado
fundación de la ciudad.Por entonces, el sistema de premios y beneficios concedi¬ de la apropiación de mujeres indígenas. Este tipo de conducta se intensifica en las
dos a expedicionarios y pobladores, produce una fuerte movilidad social en el zonas rurales, creando a veces situaciones concretas de poligamia. De allí que, aún
sector europeo; y ésta se convierte en una coyuntura favorable para la inlegración cuando rara vez se menciona la existencia de mestizos, podemos afirmar que su
de muchos hijos de uniones mixtas. presencia en el distrito comienza desde la misma fundación de la ciudad. Su
magnitud debe ser más importante que la que muestr a la documentación, ya que
En todos los casos, los mestizosasimilados a la progenie paterna despliegan los ésta sólo se ocupa de los que han definido su pertenencia dentro del grupo
mismos valores y conductas que el resto del grupo conquistador, y participan de europeo En tanto que aquéllos que permanecen como miembros del sector
sus prácticas hegemónicas frente a los nativos.
indígena, forman parte de los habitantes casi siempre anónimos de los pueblos
rurales.
La primera generación de mestizos nacidos en el distrito, surge delconcubinato
y de relaciones sexuales casuales Los documentos de la época no registran la Por el momento, el mestizaje biológico se diluye en las posibilidades de
existencia de matrimonios mixtos; y es evidente que —cuando se tr ata de uniones asimilación al grupo paterno o materno; y en la medida en que el mestizo noes un
legales—, las preferencias de los españoles se inclinan siempre hacia las mujeres hombre marginal y desarraigado, no representa una amenaza.- para el orden
que pertenecen a su mismo sector socio-étnico t237). colonial.

Nuevamente debemos recurrir a los testamentos para encontrar referencias


sobre estos hijos ilegítimos; ya que sólo en esa ocasión, los españoles suelen En realidad, la preocupación de los europeos está dirigida hacia aquellos
reconocer oficialmente la descendencia habida con mujeres nativas Aunque es de nativos que no se someten a las funciones que la sociedad colonial determina para
suponer que siempre se trata de casos de concubinatos, y no de uniones ocasio¬ la población aborigen,
nales.
Son los que "se hanalzado e ido al monte", los "salteadores de caminos", los "indios
El ejemplo del feudatario Bartolomé Jaimes, es preciso. Casado dos veces con que están revelados"; a quienes se los designa habitualmente como "cimarrones", en
europeas y padre de tres hijos legítimos, reconoce además a otros tr es como a sus clara oposición a aquellos indígenas que están "juntos en servidumbre, quietos y
hijos naturales, habidos en diferentes mujeres indígenas. Sugestivamente, y en el pacíficos",
mismo testamento, Bartolomé Jaimes indica que ha tenido en su servicio a una
india de su encomienda de La Punilla, llamada Juana; ésta posee en el pueblo 15 En el origen del cimarronaje, se encuentra la habitual reacción atomizante de
ovejasdela tierray HOovejasdeCastilla, 'Wisir propia seña/". Insiste en que "tiene los aborígenes frente a las amenazas externas. En años anteriores, los encomen¬
mucha obligación" con la india Juana, la cual es madre de un hijo mestizo llamado deros se lamentaban porque sus indios estaban "derramados y apartados" unos de
Francisco; y aunque no se atribuye la paternidad, encarga a uno de los herederos otros, por que se refugiaban en quebradas de "dos en dos y de uno en uno", no hacían
que recoja, alberguey sustente a ese niño, hasta que tenga edad de "buscar su bída", chacras y se sustentaban con raíces
Por último, recomienda a los albaceas que entreguen al pequeño Francisco una Las referencias a los "indios que están rebelados" y a los "salteadores de caminos",
silla brida m8). se inician en la última década del siglo XVI. En varias oportunidades el cabildo
provee caudillos y capitanes para que "sin informar por escrito", procedan a
castigarlos y pacificarlos Q4m

237) En añosanteriores, la Corona había promovido el matrünoniomixto en América, dirigidoa desposar


239) Acia Capitular de 14/8/1587 (en: A C, I: 666-668) H término "cimarrón" que utilizamos en las
a las hijas de los jefep étnicos. Su objetivo era lograr que, a través de la herencia, los bienes de los
páginas siguientes, para referimos a los indígenas rebeldes que huyen al monte, surge de las fuentes
cacicazgos pasaran a manos españolas. A pesar de la intención, esos casamientos fueron escasos
déla época Valga la aclaración en la medida en que, en otras regiones del Virreina to, ese término está
238) Testamento de Fabián Maldonado, de 18/8/1603 (en: AHPC, Reg 1, tomo 16,protocolo dela fecha); habitualmente reservado a los esclavos negros
y testamento de Bartolomé Jaimes, de 14/11/1603 (en: ibíd , protocolo déla fecha) 240) Cfr, Actas capitulares de 11/8/ 1593 y de 17/2/1595 (en: A M ,ii:321 y 394-401, respectivamente)

272 273
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¡
I
La ampliación de la producción mercantil de las encomiendas, requiere de En el año de 1596, el indígena sufre el atropello del poder de los pobleros
mecanismos eficaces para asegurar y sujetar la mano de obra indígena Esto se Manuel de Olivera,aprovechando su ausencia del pueblo, se apodera de su mujer.
logra con el sistema de reducción en pueblos y lascontinuas malocas. Es entonces Andres Cachimchilin, acompañado de padre y hermanos, "se atreve a ir de mano
cuando aparecen en algunos individuos de la población indígena, conductas armada" alrancho donde se encuentra Manuel de Olivera con la esposa robada; "y
desafiantes y provocadoras ante el grupo hegemónico, que no son más que una como yndio atrevido le desafió diziendole que saliese fuera del aposento...porque le abia de
forma de lucha por la sobrevivencia. matar".
Algunos de estos actos de rebeldía inquietan fuertemente a los colonizadores. Andres es tomado preso por los indios de! alcalde; y el poblero advierte a la
En 1596, el encomendero Diego de Funes reduce a los pueblos de Mojigasta, Tan-
tihene y Calmahen en el sitio de Chagane, ubicado en Los Algarrobales. En el justicia que la actituddel indígena hadado lugar para que "otros yndios deudos suyos
anden con el por los qerros hurtando y agiendo otros daños".
nuevo asiento, su cuñado Gaspar Gonzalez queda como poblero; y el sacerdote
Miguel de Milla se hace presente en una oportunidad, para bautizar y casar a los La condena que se le aplica es la que se suele dar a los cimarrones, en la que
nativos. Poco después, Diego de Funes y su cuñadosalen a seis o siete leguas tierra
habitualmente se incluyen mutilaciones en los miembros inferiores Andres debe
adentro, para reducir a otros aborígenes y traerlos al pueblo Duranteel viaje son
ser sacado de la prisión con las manos atadas; un pregonero manifestará sus
muertos por los indios llamados "chega".
delitos, mientras es llevado al rolloy picota que está fuera de la traza de la ciudad,
El cabildo alista gente y armas para enviar una expedición de castigo. El pueblo Allí le será cortadoel pie derecho entre losdedos y clavado en elrollo. Además de
rebelde consta de cuarenta o cincuenta indios, que nunca han estado juntos en desterrarlo por diez años de su pueblo,se le prohibe subir a caballo, muía o yegua;
servicio, mientras que sus vecinos están "quietos y pacíficos", y se le advierte que si vuelve a hurtar, caerá sobre él la pena de muerte por
asaetamiento.
La actitud de desafío nose extiende. Por esos días, Diego Rodríguez de Ruescás
sale con catorce hombres a "hacer corredurías", entra a pueblos de indios encomen¬ Dos años después, Andres Cachimchilin es nuevamente procesado. A pesar del
dados —de los que sus dueños aún no han tomado posesión—,y sin problemas —
castigo anterior —que le havalido tener un pie desjarretado ,se ha convertido en
"trae la paz a más de seiscientos indios" 041). "ladrón y salteador de los caminos reales", y es caudillo de una banda de cimarrones.

La historia de Andres Cachimchilin, "indio atrevido y gran cimarrón", ayuda a Todo su accionar representa una forma de lucha por la sobrevivencia, Como
comprender el contenido y los límites de estos actos de rebeldía. indios huidos, Andres y sus seguidores son elementos marginales a la estructura
social dela colonia .A pesar de su origen étnico, nose sienten incluidos en el sector
Andrés pertenece al pueblo de Nuñosacate, de la encomienda de Diego de indígena que está sujeto a encomienda; y deben enfrentar en condiciones de infe¬
Castañeda . Siendo muchacho,comete la insolencia de sacar un sombrero de lasala rioridad al poder hegemónico de los europeos.
de su amo, para regalarlo al cacique donPedro. El alcaldede la Santa Hermandad
está también anoficiado que ha hurtado caballos en el campo. En la lista de cargos que se le hacen en esta nueva cabeza de proceso, figuran
transgresiones tales como haberrobado diez ovejas de La Lagunilla para llevarlas
a la sierra y comer de ellas; hurtar dos caballos de Tristán de Tejeda para luego
abandonarlos cansados en una quebrada;quitarle el maíz que conducía un indio
de Juan Nieto; destruir huertas y sementeras y apoderarse de las mantas de un
yanacona.
241) IEA, nro. 3317, año 1600; y acta capitular de 10/8/1596 (en: A.M., II:427-431) En 1599, se produce
una situación semejante: un vecino de Todos los Santos de ¡a Nueva Rioja, denuncia que los indios
del pueblo de Colina, "sin miedo ni temor de Dios nuestro señor", llegaron al pueblo de Amana de Además, los objetivos de la acción de Andres y sus seguidores — siete en
su encomienda, distanteocho leguas de su asiento natural Allí, los de Cotina caen de mano armada
total—, se dirigen también hacia los indígenas que en oportunidades anteriores
sobre losde Amana, "dieron denodiesobre ellos y mataron unindio y flecharon una india y un niño
y hizieron otros daños como otras veces lo an hechos" (en: AHPC, escr 1,leg. 9, hoja suelta entre los fueron los encargados de apresarlo, y a otros representantes nativos del poder
expedientes 3 y 4) colonial en las zonas rurales. Entre sus delitos se incluyen la muerte de un

274 275
yanacona y el intento de asesinato de otro. Por temor a Andres, los indios de
encomienda de la región, "no osan dormir en las chacras donde tienen las comidas". f Sea cual fuere el grado de preocupación de los vecinos, en ningún caso el
indígena logra forjar unaidentidadcolectiva para enfreniar las relaciones asimétri¬
Preso nuevamente por un grupo de yanaconas, el cimarrón confiesa todas sus cas del poder Como actos de rebeldía, el cimarronaje sólo representa desafíos
acciones contra la ley hispánica, y reconoce que a pesar del castigo recibido, "no a individuales, que suelen encontrar una solidaridad étnica limitada a la estructura
querido escarmentar con todo esto". A petición del protector de naturales,la sentencia de parentesco.
resulta másleve que laanterior:sólo se locondena a servir todos los días de su vida
en la Iglesia Mayor,con prisiones "para su seguridad", y se le prohibe salir a ningún
pueblo o estancia.

Sin embargo, lasandanzas de Andres no acaban en el servicio perpetuo de la Desde los comienzos de la gobernación de Juan Ramirez de Velazco en la
iglesia Dos meses después hurta un frontal del altar y huye a la sierra. En el Provincia del Tucumán, el territorio de la jurisdicción de Córdoba entra en un
camino, roba a una india para que lo acompañe en su refugio, e intenta matar a la período de afianzamiento de la organización colonial
hija del yanacona que lo había metido preso,
En las líneas de acción política que se fijan los gobernantes, figuran la afirma¬
Detenido por tercera vez, Andres Cachimchilin confiesa que ha huido por los ción de una red administrativa estatal y el desarrollo de una normativa para regir
maltratos del sacristán de la iglesia; pero niega haber hurtado el frontal, sólo lasrelaciones interétnicas. En estesentido, las autoridades provinciales confirman
"barrió un pedazo de lienzo labrado, pensando que era basura". a las prestaciones laborales como forma del tributo de los indígenas de en¬
comienda; y a las Ordenanzas de Abi eu de 1576, como marco legal que define los
Elmismo día, fuera de la ronda de la ciudad,es ahorcadobajo unalgarrobo, por tiempos y el modo del servicio personal.
orden de la justicia colonial (M).
Sin embargo, el período se caracteriza también por los permanentes esfuerzos
En los años siguientes, los vecinos se quejan en reiteradas oportunidades por de los encomenderos locales para librarse de las reglamentaciones sobre empleo
el accionar de los cimarrones, que al promediar la primera década del siglo XVII de la mano de obra indígena. El control fallido que intenta el gobernador Alonso
de Rivera, es una muestra cabal de los obstáculos que oponen los feudatarios.
producen "daños, muertes y robos". Cuando en 1609, el gobernador Alonso de
Rivera solicita hombres y armas para la jornada de Calchaquí, los vecinos no La consecuencia inevitable de la ampliación de la producción mercantil de las
acuden al llamado por "los ynconbenientes que lo impiden de muerte; da espanto las encomiendas, es el acentuamiento de la presión colonial sobre la población
sucedidas en sus términos de poco tiempo a esta par te y cantidad de amarrones que andan indígena. La reducción en pueblos, la apropiación de las tierras aborígenes, las
ynjestando las estancias dellos y salteando en los caminos y haziendo otros insultos y dando fomias que adopta la administración de los repartimientos, y la preocupación
en los yndios desta tierra., " CU). española por castigar al indio cimarrón, son algunas de las formas en que se
expresa la coacción hispánica. En la realidad cotidiana, todas ellas señalan que las
relaciones informales entre europeos e indígenas, son más importantes que las que
establecen las normas.
242) AHPC, esa 1, leg 6, exp 3. Otro expediente referido a indios amarrones, señala
actitudes iguales Ya se trate de nativos que viven en las zonas rurales, o de aquellos que prestan
a las que venimos de narrar, aunque esta vez la acción se desarrolla en la región de Salsacate.
Conviene señalar que este expediente, perteneciente al AHPC, y signado como esa. 1, leg, 10, exp. servicio en la vivienda urbana, sus destinos muestran siempre el lulo y la trama de
2, se encuentra incompleto en ese repositorio; sin embargo, la sentencia correspondiente está un tejido social que define con claridad su ubicación en el escenario de la época
depositada en 1EA bajo el número 3.913; habiendosido ésta última citada en el presente trabajo, en —
Cada una de esas historias —individuales o colectivas ,indican que las prácticas
nota nro 93 de la lia parte coloniales han cerrado loscaminos para su incorporación a los valores europeos
243) Acta capitular de 12/6/1609 (en: A M,V;20-21). Al año siguiente, el cabildoorganiza
una "jornada
de castigo", porque los indios de las pampas han atacado a las carretas que van por el camino real
al puerto de Buenos Aires, matando a algunos españoles (acta capitular de 17/3/1610, en: A M,V:
En lo económico, el sistema del servicio personal no les permite tener "cosa
129-131) propia en quepoderse ocupar por lo tanto, la economía mercantil no ios cuenta entre
sus beneficiarios. Cuarenta años después de la fundación dela ciudad, el indígena

277
no ha adoptado aún el lenguaje de tos conquistadores, y su comunicación con el
español continúa haciéndose a través de intérpretes. En el aspecto religioso la
situación es semejante: aún cuando muchos aborígenes tienen nombres cristianos,
esto sólo indica que alguna vez fueron bautizados.

Lashistorias que surgen de tos documentos hispánicos, señalan también que—


a diferencia delo que sucede en o tras regiones delVirreina to—,el impacto colonial
más que provocarla transformación interna de la comunidad doméstica aborigen,
ha generado la continua fragmentación de su trama social

La conquista ha producido la pérdida de la antigua base territorial y de la


población necesaria para la reproducción biológica Además, la función y autori¬
dad de tos caciques se ha ido desdibujando; y en su reemplazo, indígenas IVa. PARTE:
forasteros orientan las actividades de la comunidad

En 1610,el gobernador del Río de la Plata, Diego MarínNegrón,advierte sobre


el resultado del desorden en la utilización de la mano de obra indígena en la
jurisdicción de Córdoba; e indica al rey que introducir esclavos negros es el
remedio más eficaz para que no se acaben tos indios, " ..-porque es e! trabajo que UNA REMISION TARDIA
padecen tan grande que si no se reparaporatguncamino tengopor sin duda queseacabaran
en breve . " m>

244) Caria del gobernador del Río de la Plata, Diego Marín Negrón, al rey, de fecha 15/6/1610 (en:
Segretti, 1973: 4649)

278
CAPITULO X

LAS ORDENANZAS DE ALFARO Y LOS EFECTOS


DEL SERVICIO PERSONAL

Las Ordenanzas de indios del oidor Alfaro.

A fines de 1610, ia Audiencia de Charcas encarga a] oidor Francisco de Alfaro,


la realización de una visita general a las Gobernaciones del Tucumán y del
Paraguay y Rio de La Plata Con ella se inician las diligencias positivas para
incorporar a la Provincia del Tucumán a la reorganización toledana n>.
A diferencia del Perú, donde ¡a resistencia nativa y la crisis económica habían
mostrado la necesidad de las reformas; en estas regiones meridionales, el llamado

1) La visita del oidor Alfaro tiene como antecedente directo una Cédula Real del año 1605 En esa
ocasión, se comisionaba ai Licenciado Alonso Maidonado de Torres, presidente de la Audiencia.
para efectuar una visita general, cuyo objeto era desagraviar a los indios, establecer una tasa justa
del tributo, y ocuparse de asuntos de gobierno, administración de jusíida, hacienda, etc. Sin
embargo, ésta no se concretó.
Los antecedentes y prolegómenos de la visita de Francisco de Alfaro, han sido objeto de undetallado
esaadio por parle de Gastón G Doucet, en los que se acompaña una exhaustiva bibliografía sobre
el tema (Doucet, 1986 a) Otros trabajos del mismo autor, están también dirigidos a! análisis de esta
visita (Doucet 1978, 1980 c, y 1986 b), y han sido ampliamente consultados en el presente trabajo
Para tribulación de los investigadores, se desconocen los autos de ¡a visita de Alfaro, con las des¬
cripciones que habitualmenle se recogen sobre el territorio. No obstante, la correspondencia del
oidor y las Ordenanzas que elabora para el Tucumán, hacen posible obtener un cuadro de la
experiencia que va acumulando ensu transcurso. Estas posibilidades que brinda la correspondencia
de los visitadores generales, son señaladas por Ismael Sandiez Bella para tedas las visitas que se
realizaron a ios dominios hispánicos (Sanchez Bella, 1972:81)

281
de atención es el sostenido descenso demográfico indígena, y la demorada
Pocos días después de su designación, Francisco de Alfaro inicia el viaje en
obligación en hacer cumplir "la reformación y asiento de ¡as cosas de esas provincias".
direccióna la Gobernación del Tucumán. Buena partede ese año de 1611,ladedica
a recorrer su territorio, recogiendo información, controlando la aplicación de las
El 10 de diciembre de 1610, la Audiencia extiende la Real Provisión con la órdenes reales, y disponiendo sobre diversos temas de gobierno y bato dado a los
designación de Alfaro y lascomisiones pertinentes En éstas, se indica al oidor los naturales.
temas que interesan a las autoridades coloniales Enlíneas generales, comprenden
todo lo relativo a la real hacienda, justicia y regimiento; como así también al En el mes de mayo el oidor se encuentra en el distrito de Córdoba; y el cabildo
desempeño de encomenderos, pobleros y comerciantes. Para cumplir su come¬ —
anota en sus actas un mandamiento suyo que luego pasará a conformar el
tido, se le encarga visitar todas las ciudades, villas y lugares de las dos Gober¬ cuerpo de las Ordenanzas—, r eferido a los indígenas que marchan con los trajines
naciones comprendidas en el mandato
Siguiendo las instrucciones del virrey, va "pisando despacio la tierra", obser¬
Por otra parte, en marzo de 1611,el virrey Montesclaros envía instrucciones,en vando con atención los excesos que pudieran cometer encomenderos, pobleros y
las que precisa con más detalle los asuntos en los que Alfaro debe fijar su atención. alcaldes de la Hermandad.

Enlalistade "advertimientos necesarios",figura en primer término lafaltadeuna Enlas zonas rurales,examina la forma en que se ha procedido para la reducción
tasación del tributo indígena y el servicio personal, como causas de la "gran delosnativos en pueblos. Preocupado por las continuas mudanzas de indios que
disminución" de los naturales; y sugiere que, para evitar el daño que estos reciben, hacen los encomenderos, deja escritos autos especiales sobre los sidos en que
se podría disponer la presencia de corregidores como en el Perú.Señala además la deben quedar asentados; y en su trayecto por el Río Tercero, va ordenando la
preocupaciónpor algunas encomiendas que, en forma injustificada,podrían haber forma en que se deben reducir los indios de las pampas®,
concedidolos gobernadores Francisco de Barrasa y Cárdenas y Alonso de Rivera.
En diciembre de 1611 —luego de viajar a la Asunción—, está instalado en
Santiago del Estero Allí convoca a varias personalidades, para recabar opinión
En la misiva, el virrey muestra también su inquietud por algunos asuntos
sobre las Ordenanzas de indios que ha redactado para la Provincia del Tucumán.
tocantes a la hacienda, tales como conocer el estado de las cajas reales y el destino
dado a fondos que se enviaron. Solicita que se ponga remedio a la gran cantidad
de contrabando en mercaderías y esclavos que entran por Buenos Aires; así como Entre los consultados figuran el ex-gobemador Alonso de Rivera y su sucesor
Luis de Quiñones Osorio, los procuradores de las ciudades de la Provincia, el
al establecimiento de portugueses enesas regiones, sobrelos que se sospecha que
obispo del T ucumán, fray Fernando de Trejo y Sanabria, religiosos de la Orden de
"faltan en cosas de nuestra santa fee católica". San Francisco, y el provincial de la Compañía de Jesús, Diego de Torres®.
Por último,el virrey recuerda que "es menester manosear y pisar despacio la tierra", La experiencia que Francisco de Alfaro ha recogido sobre la situación de los
para que las reformas que se introduzcan "queden desta vez con la perpetuidad nativos,queda expresada en sus informes: aunque enla Gobernación del Paraguay
necesaria" ®. los indios reciben agravios, "no es de consideración respecto deTucumán", porque "es
de espantar la disimulación de excesos desta tierra...".

3) El mandamiento del oidor ALfaro sobre los indígenas que salen en los trajines, en: acta capitular de
2) La Real Provisión de la Audienda de Charcas, de 10/12/1610,en: Doucet, 1986 a; y lasinstrucciones 9/5/1611 (en: AM., V: 214-215)
del virrey Montesclaros, en: Doucet,1980. En AHPC, Reg. 1,protocolos de 21/5 y 26/8 de 1611, constan dos fianzas a favor de detenidos por
Además de estas instrucciones, el oidor tiene en su poder copias de Reales Cédulas referidas a la Francisco de Alfaro debido a excesos eneltratodadoaios indígenas
Gobernación del Tycumán, tales como la despachada en 1602, ordenando una tasación del tributo La actividad desarrollada por el oidor en eldistrito de Córdoba, en torno al tema de la reducción de
y la supresión del servicio persona!; o como lade 1608, dondese manda a la Audiencia que informe indios pampas, queda plasmada en un expediente judicial ¡nidada por Ana Gomez contra Juan de
sobre los traspasos de indios hechos por los gobernadores "contra lo que el rey tiene proveído" (en: Avila y Zarate (en: AHPC, esa 1, leg 24, exp. 4)
AN B., serie Expedientes Coloniales, Nro, 1181), 4) Cfr. Pedro Lozano, 1754-1755, 0: 302-303.

282 283
Enla carta que el oidor eleva al rey, acompañando un traslado delas Ordenan¬ De igual manera,las estancias de chacras y ganados de Córdoba,donderesiden
zas, subraya la causa principal de los agravios: pueblos enterosdeindios que han sidosacadosdesu sitio original,quedaráncomo
lugares de reducción; y sobre el particular vuelve a insistir en que sus encomen¬
"con diqir que ay serbiqio personal esta dicho a mipareqer deros no los podrán mudar,y tampoco podrán ser considerados como yanaconas.
todo lo posible, pues cualesquier ynconvenientes que se con¬
sideren se hallara a la segunda consequenciaqueprocedan del Con los nativos de las sierras deldistrito de Córdoba advierte que se debe tener
serbicqio personal, y asi trabaxo demasiado de los yndios, particular cuidado, procurando colocarlos en "parajes cómodos", y nunca sacarlos
sacarlos de sus naturales, castigos y crueldades, malocas de la sierra, "que es su natural";además, "son gente mas sin razón y son pocos,de suerte
ynjustas, muertes, ventas dellos, no darles doctrina, impe¬ que no hay numero suficiente para doctrinas
dirles los matrimonios, quitalles sus mugeres, quitados los
hijos, todo proqede del seruiqio personal; y asi se ve claro que El oidor considera que es conveniente que en las ciudades haya indígenas que
donde mas ay de serbiqio persona!, menos ay de vidas de sean oficiales y sirvan en lo que "an menester los españoles". Por lo tanto, ordena el
yndios ni de su multiplico..,"®. procedimiento que se debe seguir para las zonas urbanas: los aborígenes descendien¬
tes de les del Perú que entraron con los primeros conquistadores, y los que "an
perdido la memoria de su natural" poique hace mucho tiempo que residen en las
Acor de con este diagnóstico, el cuerpo de las Ordenanzas converge hacia dos ciudades, deberán escoger el vivir en ellas, a las que han de "tener por reducción"
reformas estrechamente relacionadas entre sí: quitar el servicio personal de los A tales efectos, los cabildos señalarán sitio y traza donde ubicar una ranchería, y
indígenas y fijar una tasa del tributo. las viviendas serán construidas por los propios indígenas.

Los principios delas Ordenanzas de Alfaro reproducenlas ideas directrices del Otros procedimientos distintos ordena Francisco de Alfaro con los indígenas
ordenamiento toledano, aunque adaptadas a las particularidades de la Provincia no "pacificados" que aún existen en la Gobernación En primer lugar,establece que
,

del Tucumán, La reglamentación gira en tomo a tres temas centrales: la reducción los gobernadores no podrán hacer nuevas entradas sin orden del virrey; tampoco
en pueblos, la tasación de! tributo, y la mita indígena. se podrá enviar gente armada contra los indios, ya sea para reducirlos o para
traerlos de mita Las malocas sólo serán permitidas para castigar a los indígenas
Al igual que en el resto del Virreinato, la reducción en poblados tiene como que hagan daño a españoles o a otros nativos que estén "pacificados
finalidad general fijar a la población indígena en espacios delimitados para un
mejor control colonial. Sin embargo, el conjunto de disposiciones que sobre ese Los aborígenes que en adelante se redujeran, durante diez años no serán
asunto elabora el oidor deja entrever también otros objetivos, dirigidos a corregir encomendados, ni pagarán tasa; y al cabo de cinco años de reducidos se los irá
algunos excesos de los encomenderos. "atrayendo" para que trabajen por jornales, La justicia y los doctrinantes los harán
sembrar y criar ganados; y es importante que "no conoscan cudiqia en ¡os sacerdotes".
Francisco de Alfaro observa que las mudanzas de indios hechas por estos
últimos, han causado gran daño a los aborígenes; y aún aquellos que fueron Un párrafo especial merecen los indios de las pampas del distrito de Córdoba.
sacados contra su voluntad, encaso de volver a su asiento origina!, encuendan el Estos, "no hantenido pueblo asentado y son la gentemas sinorden que ert esta Gobernación
inconveniente que su número ha disminuido y sus jagüeyes están perdidos. Por lo hay"; y a menudo hacen daño a los pasajeros que van al puerto. Por lo tanto, el
tanto, ordena que losindios sean considerados naturalesdel pueblo donde losha oidor autoriza a las personas que sobre ellos tienen encomienda, para que puedan
visitado, y ningún encomendero ni otra persona podrá mudarlos de los lugares r educirlos en los ríos Segundo y Tercero; y puesto que esos repartimientos fueron
que se les ha asignado mediante autos especiales. otorgados "por noticia", el indígena que estuviere tres años en una reducción será
considerado como perteneciente a ese pueblo,

Aunque todas estas disposiciones sobre la reducción en poblados no implican


5) Lanouy, A., 1923, 1: 31-35. La carta al rey con el traslado de las Ordenanzas, de fecha 23/ 1/1612, en: ninguna administración colonial centralista para su aplicación, ni la existencia de
Levillier, 1915-1918, II: 287-338.

284 285
jueces reducidores como en el Perú, en buena medida muestran la intención del
oidor de recortar el manejo ilimitado que los encomenderos tienen sobre la mano Demarcados de esta forma los pueblos indígenas,y perfectamente definidos en
de obra indígena el espacio que abarcan y en los miembros que los componen, el visitador genera]
dispone ¡a manera en que se ha de llevar el gobierno interno de cada una de estas
De los tres tipos citados de reducciones que se proponen en las Ordenanzas, la "repúblicas de indios".
primera —aquélla que Alfaro ha efectivizado a través de autos especiales—, es la
que abarca al grueso de la población nativa de la jurisdicción de Córdoba; y La conducción estará a cargo de alcaldes y regidores nativos, cuya forma de
significará que en adelante losencomenderos no podrán mudar de un sitio a otro elección será igual que en loscabildos españoles. En cada pueblo o reducción habrá
a los indios de su repartimiento un alcalde indígena, y en caso de haber más de 80 casas, serán dos los alcaldes y
dos los regidores
Las Ordenanzas establecen que en cada reducción o pueblo de indios habrá un
ejido de media legua, para que los naturales tengan sus ganados, incluidos Sus funciones estarán dirigidas a cuidar que no haya desórdenes entre los
caballos. De igualmanera tendrán chacras; pero nopodrán sembrar para su propio nativos. Asimismo, deberán estar presentes cuando sea el tiempo de arar, sembrar
beneficio fuera de la reducción. o cosechar; y especialmente al recoger ia algarroba, "que es quando hay mayores
borracheras". Los alcaldes tendrán jurisdicción para poner en prisión al indígena
EnlasOrdenanzas también se presta atención a los problemas que suelensurgir
que falte a la mita, a la doctrina, o que se emborrache; pero si el delito es mayor,
en torno a laresidencia: los hijos legítimos de indígenas vivirán en la reducción de su obligación será entregarlo a la justicia colonial.
su padre, y los de indias solteras en el pueblo de la madre; la india casada vivirá
en la reducción del marido,aunque éste ande huido;y laviuda podrá escoger entre
su pueblo o el de su esposo. En los pueblos de españoles el cabildo nombrará un indígena como alcalde, a
cuyo cargo estará el gobierno de los indios de mita que lleguen a la ciudad; ese
En los pueblos de indios no podrán residir español, negro, mestizo o mulato; funcionario colonial no pagará tasa ni prestará servicios.
los encomenderos sólo podránentrar en tiempos de sembrar,desherbar, cosechar,
recoger la algarroba y cobrar la tasa. Tampoco habrá en los poblados administra¬ Francisco de Alfaro declara "injusto contra todo derecho" al servicio personal,
dor,mayordomo,sayapaya o poblero;y sobre esto, el oidor afirma que,aunque no cuyo fundamento legal se encontraba en las Ordenanzas de 1576. Al mismo
existieran cédulas reales en tal sentido, "una muy pequeña parte de mi visita bastava tiempo, declara libres a los indios que hansido vendidos como esclavos, y anula
para testificar esta prohivicion". las encomiendas de yanaconas hechas por los gobernadores.

En la medida en que el territorio delasreducciones son "tierrade los yndios", los Los pueblos de reducción —lugar obligado de residencia de los nativos—,
encomenderos no podrán tener en ellos casa, bohío, bodega, obraje, ni otro deben aportar a la "república de españoles" productos agrícolas, prestaciones
aposento a título de propiedad. En cambio, quedarán dentro del poblado la casa laborales y otras utilidades,
de telares para que los indígenas trabajen, una despensa para las especies que
beneficien, y podrá haber una casa que el encomendero utilizará para guardar sus La forma de extracción colonial y la distribución de los servicios indígenas que
cosechas. establece el oidor, difieren delas que habían fijado las Ordenanzas de Abreu. Por
una parte, la tasación del tribu to busca remediar los excesos que has ta entonces se
A los efectos de proteger las "haciendas" de los indígenas, ¡as chacras de los habían cometido; en tanto que el sistema de mitas, se dirige a evitar el manejo
españoles se ubicarán media legua más allá de los pueblos; y las estancias de monopólico de la mano de obra indígena por parte de los encomenderos.
ganado mayor a tres leguas de las chacras de indios.
Todos los varones de 18 a 50 años que viven ordinariamente en los poblados
Los feudatariosÿ encargarán que en las reducciones haya remediostales como
indios, estarán obligados a pagaruna tasa a su feudatario; sólo quedan exceptua¬
piedra de los lipes, oro, zarzaparrilla, o aceite; y no permitirán que entre vino en dos los enfermos, los caciques principales, los alcaldes, sacristanes y cantores,
los poblados indios.
además de los casados menores de 18 años.

286
287
La tasa del tributo indígena se establece por cabeza, y no por pueblos como en Periódicamente,cada pueblo debe enviar una sexta parte de los indios varones
el Perú. Los repartimientos de estos territorios son de muy pocos indios, y el oidor de tasa hada la ciudad de su jurisdicción, quedando en manos de los caciques el
considera incorrecto que la disminución de su número resulte en una mayor carga reparto de las mitas y su cumplimiento . Puesto que los indígenas "no han de mudar
para los miembros del poblado . de temple", los que por esta razón no conviniere que fueran a las ciudades,
prestarán servidos en las chacras y haciendas próximas a su poblado En la zona
El tributo que el indígena debe entregar a su encomendero se compone de dos urbana, loscabildos harán construir bohios para estos mitayos, de tal manera que
rubros. En primer lugar, una tasa fija de cinco pesosque,para "menos molestia" de no tengan necesidad de aposentarse en la casa de sus encomenderos, o en la de
los indígenas y "mas utilidad de ¡os españoles", será pagada en especies. Ese monto o bos indígenas
de cinco pesos, comenzará a ser aplicado desde el momento en que cada en¬
comienda quede vaca y pase a unnuevo beneficiario; hasta tanto,los indiosde tasa Cada lunes, un alcalde y un regidor- repartirán a la mitad de los indigenas que
pagarán diez pesos corrientes. así fueren de mita a la ciudad entre las personas que les pareciere; mientras que la
otra mitad se alquilará con quienes los mismos indios decidan..
Teniendo en cuenta que el género que más se vende en la Provincia del
T ucumán es el lienzo de algodón, los encomenderos podrán obligar a los tributa¬
rios de su repartimiento a cubrir por lo menos la mitad de los cinco pesos en el Estos servicios laborales forzosos estarán dirigidos solamente a guardar gana¬
mencionado lienzo. El resto podrá ser pagado en otras especies como algodón dos, chacras, construcción de casas y edificios y actividades domésticas. Su forma
hilado o por hilar, guascas, chaguar, alpargatas, pabilo, miel, cera, trigo, maíz, de rotación dependerá del tipo de trabajo: los de chacras y edificios cada mes, los
cebada, gallinas y carneros. Para cada una de ellas, el visitador establece en sus de servicio de casa cada tres meses, y los de estancias cada seis meses.
Ordenanzas los precios correspondientes.

Además de la tasa de monto fijo que acabamos de mencionar, el encomendero Uno de los aspectos que diferencia la mita de las Ordenanzas de Alfaro del
recibirá de los indios de su repartimiento otro tributo procedente de los cultivos. servicio personal que establecieron las Ordenanzas de 1576, reside en la fijación de
Para esto, cada poblado sembrará en sus chacras de comunidad un tercio de salarios como retribución del trabajo compulsivo. Después de las consultas que el
hanega de trigo o de maíz por cada indígena de tasa. La mitadde lo que se coseche oidor realiza en Santiago del Estero, estos quedan determinados de la siguiente
de ellas será entregada al feudatario, quien estará obligado a poner bueyes, rejas manera: un real de plata para los jornaleros que trabajen en edificios, ocho pesos
y apero, en tanto que los indios pondrán su tierra y su trabajo. para los que se ocupen en estancias de ganado mayor, seis pesos para la guarda de
ganado menor, y cuatro pesos por el servicio de casa durante tres meses. En todos
Viendoque "¡a capasidad de los yndios espoca",y que probablemente los de Salta los casos se les dará de comer el tiempo que estuvieren ocupados; y excep¬ —
tuando a los jornaleros que trabajan en edificios—,al salario se debe agregar la tasa
y los de la sierra de Córdoba no quieran pagar tales tributos, las Ordenanzas
permiten que en esos distritos la tasa pueda ser cumplida sirviendo ciento veinte que corresponda al período que sirvieran
dias, o bien con cuarenta dias cuando queden vacantes las encomiendas
En cuanto a las formas de pago, el oidor dispone que el jornal se ha de pagar
En cada una de las ciudades de la Gobernación, la justicia mayor saldrá todos cada semana en reales y no en especies, a los indios del servicio de casa cada mes
los años después de la cosecha, para hacer una visita y padrón de los indios. Esto y medio, y a los de estancias cada seis meses.
servirá para saber quiénes entran y salen de tasa en razón de edad o función. En
todos los casos, la justicia deberá tener a la vista el padrón anterior, comenzando Varias de las Ordenanzas están dirigidas a señalar aquellos trabajos en los que
por el que ha confeccionado el visitador Alfaro "los yndios tío han de poder ser competidos" dentro de la prestación de la mita. Sin
embargo, el oidor también establece que por su propia voluntad el mitayo podrá
Conjuntamente con el tributo al encomendero, los poblados indígenas deben servir durante un tiempo mayor, o concertarse para otras ocupaciones; y en este
prestar otros servidos en forma rotativa y obligatoria, fuera del ámbito de su último caso, "no se les pone limite en lo que han de llevar por su trabaxo". Es probable
repartimiento Al igual que en otras regiones del Virreinato, este tipo de trabajo que al momento de escribir estas palabras, Francisco de Alfaro no sospechara la
forzoso recibe en las Ordenanzas el nombre de "mita". puerta que dejaba abierta a los subterfugios de los encomenderos.

288 289
I Por otra parte, cuando por su propia voluntad los nativos quieran alquilarse
fuera de sus pueblos, los encomenderos no podrán poner obstáculos. Según los
í A diferencia de la reorganización toledana, Francisco
creación de instituciones coloniales nuevas para asegurar
de Alfaro no propone la
el cumplimiento de las
de españoles". Tampoco las
criterios del oidor, esto servirá "-para que las repúblicas sean ayudas y los yndios se relaciones entre la "república de indios" y la "república colonial del tributo y de
aficionen a ganar plata" Ordenanzas fijan mecanismos coactivos para la extracciónrecortar el poder de los
la mita; en tanto que los controles que se disponen para de Córdoba.
í
De esta manera, se introduce en las Ordenanzas la posibilidad de otro tipo de encomenderos son de fácil transgresión, al menos en la jurisdicción
trabajo para el indígena, de característicasno compulsivas,y al que en la documen¬ a cargo de la justicia
La ejecución de la mita y la cobranza de las tasas quedan
tación de la época se denominará "concierto de indios". visitarán anualmente los
mayor o de un alcalde ordinario, quienes a tales efectos
pueblos del distrito.
Mientras que para el trabajo forzozo de la mita, se regulan cuidadosamente
sobre los
salarios y condiciones laborales, para los conciertos las disposiciones son más El alcalde ordinario y los de la Hermandad tendrán jurisdicción lo cual
o hurtos, para
laxas:los indiospodránalquilarse fuera de sus pueblos,siempre que sea dentro de indígenas sólo en casos de muerte, agresiones, robos
la jurisdicción; los que vivan a diez leguas a la redonda del pueblo de españoles y castigar a los indios que traigan consigo cuchi¬
observarán particular cuidado en
el destierro fuera de la
los que tienen su reducción en la ciudad, podrán concertarse para trabajar en la llos y otras armas Se prohibe que el castigo implique
dela ciudad
zona urbana haciendo edificios,o como oficiales;losconciertos deberán ser hechos y antes de sentenciarlos deberán conducirlos a la cárcel
jurisdicción,
ante la justicia ordinaria, y no podrán exceder el año de obligación.
de su reparti¬
Referente a la autoridad de los encomenderos sobre los indios
los castigos
miento, las Ordenanzas de Alfaro prestan atención a otros dos
temas:
En un solo caso las Ordenanzas regulan condiciones laborales y salarios para nativos.
el alquiler de indios. Es en el referido a los fletes de cañetas y ganados, por cuya directos sobre los indígenas, y la ingerencia en los matrimonios
causa "están los pueblos destruidos". Para estos trabajos, los indígenas se podrán absoluta,en relacióna las
alquilar sólo hasta el primer pueblo de españoles; y recibirán como salario cuatro Mientrassobre los castigos establece una prohibición
a ávido mas desorden a
1 pesos por cada mes que anden carreteando, además de la comida. uniones maritales señala que "de las cosas en que en esta tierra
sido el ympedir los matrimonios y for car los contrayentes,de suerte que
hasido menester
lo tanto, para que los casamientos sean
El orden que se dispone para la doctrina, guarda relación con las formas retificar muchos y deshazer otros. ".aPor a dezir que se
laborales que hemos señalado. Cada pueblo o reducción, chacra o estancia de libres, el cura sólo podrá desposar los indios,cuando "ellos vinieren
consideración, deberá tener una iglesia o capilla. Su construcción correrá a cargo quieren casar sin que los traiga su amo ni otra persona sospechosa".
de losvecinos encomenderos o delos propietarios de las chacras, quienes deberán todos los
Una Real Cédula de 14 de diciembre de 1606, había ordenado que
pagar también los jornales de los indios que intervengan en la construcción. En indios que hubieran sido desmembrados de sus encomiendas desde seis años
cuanto al estipendio de los curas doctrineros, el oidor deja en manos del obispo y Tiempo después, el
antes de esa fecha, debían ser restituidos a sus repartimientos.
el gobernador la fijación de su monto. Ordenanzas de 1612: "una de
incumplimiento de ese mandato es registrado en las de esta
las causas principales que entiendo a ávido en la disminución de los yndios
Alfaro incluye en las
Encada poblado,el doctrinero tendrá para su servicio uno o dos muchachos de Govemacion,a sido la divicion délas encomiendas ..:".De allí que
advierte que
7 a 14 años, unindio mitayo para el cuidado de las muías, y una indiacocinera "que disposiciones, la prohibición de partir o dividir los repartimientos; visita, son
y
no sea casada ni pase de quarenta años". El vestido y la comida de estos indígenas los desmembramientos que no le hubieren sido informados durante su
estará a cargo del cura doctrinero, quien no podrá abarcar en su atención religiosa declarados nulos
a más de dos pueblos, o a un número mayor de 300 indios. i

encomiendas, porque
En el mismo sentido declara ilegales a las dejaciones de
de ellas "han resultado los fraudes que contra cédulas reales se han fecho en esta
Como asistentes {leí doctrinero estarán los fiscales y sacristanes, que deberán
ser elegidos entre losindios reservadosde tasa por su edad;y enaquellos poblados Govemacion"; y si tal cosa sucediera, la encomienda quedará en cabeza de Su
que pasen de 100 nativos, se elegirán además cuatro cantores. Majestad.
291
290
También preocupa al oidor la existencia de muchos repartimientos que com¬
prenden un número escaso de indígenas. Serán entonces los gobernadores los En cuanto a las formas de extracción colonial, éstas ya estaban esbozadas en las
encargados de que, en la medida que fueren vacando, se vayan anexando unos a Ordenanzas de 1576 No obstante, la novedad que introduce Alfaro consiste en la
otros, según la antigua pertenencia a pueblos y su proximidad geográfica. Puesto fijación de una tasa del tributo, que en sus características se aproxima más a la
que no conviene que las encomiendas sean pequeñas, se procurará que las de toledana, en la intención de romper el monopolio del encomendero sobre la mano
Santiago del Estero y Córdoba, no tengan menos de cien indios de tasa de obra indígena a través de la mita, y en la obligación de una retribución, tanto
para el trabajo compulsivo como para el que concierta el indígena "por su propia
Hasta aquí las pr opuestas centrales de las Ordenanzas de Francisco de Alfaro voluntad".
Enenero de 1612,las personalidades que el oidor había consultado en Santiago del
Estero dan su aprobación al conjunto de disposiciones®. En ese marco general, el visitador acepta variaciones regionales. Es así como,
en la jurisdicción de Córdoba, permite que el tributo en especies sea reemplazado
Los autos de la visita y las mismas Ordenanzas son enviados a las autoridades por días de trabajo; y en sus zonas rurales, la reducción en poblados consiste en
coloniales. Vistas por el virrey Montesclaros,éste las considera confusas y se pone fijar a la población indígena, legalizando las mudanzas y desmembr amientos de
a la tarea de redactar otr as, que nunca entraron en vigencia. La Audiencia de pueblos que hablan efectuado los encomenderos
Charcas, ante las numerosas solidtudes para su revocación, lasremiteal Consejo
de Indias;y ordena que hasta que éste dedda sobre el asunto, se deben respetar Ias Enrealidad, las Ordenanzas de Alfaro están dirigidas solamente a remediar los
normas dispuestas por Alfaro. No obstante, sus conocidas Ordenanzas de in¬ excesos del sistema de encomiendas. En sus pautas no se propone la creación de
dios para la Gobernación del Tucumán, nunca llegaron a ser confirmadas por la ninguna institucióncolonial nueva para el territorio déla Gobernación. Nisiquiera
Corona la de los corregidores, que había sido sugerida por el virrey Montesclaros.

Además, puesto que "la capacidad de ¡os indios es poca", tampoco las Ordenanzas
pretenden orientar excedentes hacia las arcas fiscales, o establecer cajas de
Cuando Francisco de Alfaro da comienzo a su visita general a las gober¬ comunidad como en el Perú
naciones del Tucumán y del Paraguay, las instrucciones de Montesclaros le
indican la necesidad de colocar a esos territorios dentro del estado y orden que En 1633,Francisco de Alfaro resume en una carta los objetivos que había tenido
presenta el resto del Virreinato su visita:

En la Provincia del Tucumán, para cumplir ese objetivo, suprime el servido "Como mi visita se ordenó principalmente a quitar el
personal de los indios; precisa el espacio de los aborígenes a través de las servicio personal de aquellas provincias, execu tandoloqueel
reducdones;y establece tres mecanismos para la extracción colonial: el tributo que Consejo deseaba y había mandado en diferentes cédulas y
redbe el encomendero, la mita, y el alquiler de la mano de obra indígena.. tiempos; y al quitar elservicio personalse sigue precisamente
tasar los indios., " (8)
En el nuevo ordenamiento que proponen sus Ordenanzas, los indios se
induyen dentro de una sola categoría legal.Por lo tanto, se anulanlas encomiendas
de yanaconas y se da por terminado el ciclo de las malocas. Cuarenta años antes, Francisco de Toledo habia propuesto para las zonas
centrales del Virreinato un proyecto económico que tenía como eje un Estado
poderoso, capaz de garantizar importantes beneficios para las arcas fiscales, los
6) Enestas páginas hemos glosado el contenido de tas Oí denanzas, cuyo ordenamiento original resulta
a menudo confuso y cpmplicado para su comprensión Asimismo, en varias ocasiones
hemos
suprimido detalles de los preceptos, que podrían hacer excesivamente pesado el texto y distraer la
atención de los lineamienios fundamentales que propone Francisco de Alfaro.
7) Cfr : Doucet, 1978 y 1986 b 8) Cartas de Francisco de Alfaro a Fernando Ruiz de Con tretas, de fecha 1/2/1633 (en: Doucet, 1978:
+15)
292
293
encomenderos y los empresarios. Las élites coloniales acataron de buen grado las encomenderos sobre la mano de obra indígena, se obtiene por la sostenida crisis
del servicio
reformas, en la medida que aseguraban su prosperidad 0>. demográfica aborigen, y no por un control estatal, o por la anulación

En cambio, las Ordenanzas de Alfaro no tienen el mismo significado en la


Gobernación del Tucumán; y durante largos años, los encomenderos de Córdoba
y varias autoridades de la Provincia elevan sus quejas ante el rey y el Consejo de
Indias.

El motivo de las protestas es que se ha prohibido la actividad de pobleros, El punto de inflexión en las actividades económicas.
mayordomos y administradores en los pueblos de indios; pero en su reemplazo,
las Ordenanzas tampoco proponen la creación de otros mecanismos coercitivos,
La visita general del oidor Francisco de Alfaro, coindde con un punto de
El obispo del Tucumán,fray Fernando de Trejoy Sanabria,que en diciembre de inflexión en la historia colonial del distrito de Córdoba.
1611había apoyado lasmedidas del oidor, dos meses después lamenta la excesiva
libertad que las Ordenanzas habían otorgado a los indios. En sendas cartas a la Hasta ese momento, la prosperidad de los vecinos encomenderos se había
Corona, informa que estos se encuentran "alborotados" después de la visita; y apoyado fundamentalmente en la combinación de dos factores: el usufructo de la
aclara que en aquella ocasión nose había opuesto al trabajo de los indígenas en las fuerza laboral delosaborígenes,y la coyuntura favorable del eje comercial Buenos
estancias, sino al "imperio y dominio" absolutos que los encomenderos tenían sobre Aires-Potosí.
los aborígenes
Sin embargo, al comenzar el segundo decenio del siglo XVII, empiezan a
En otra misiva al rey, el gobernador Luisde Quiñones Osorio, aludiendo a la notarse los efectos acumulativos de la caída demográfica indígena; a lo que se
"demasiadasoltara '' con que quedaron los indios, da cuenta que sehavisto obligado suma el afianzamiento de los intereses del litoral riopiatense, que afecta la
a salir en persona a visitarla tierra, para hacerlos sembrar y sacarlos de los montes actividad económica de Córdoba. Las nuevas condiciones estimulan algunos
"donde estaban muchos de ellos hechos salvajes..." rasgos de la conformación social, que ya se delineaban en los años anteriores; y
i generan una especialización en las actividades productivas que se desarrollan en
Esgrimiendo iguales razones, el cabildo de Córdoba envía procuradores ante la jurisdicción.
la corte, solicitando la revocaciónde las Ordenanzas de Alfaro, "por la gran libertad
en que han quedado / los indios / ,solos en sus pueblos sin español que los administre.- " Aunque la encomienda ha sido un elemento básico en el proceso de consti¬
CIO)
tución de la élite colonial, hacia 1610 sólo un grupo de feudatarios puede mostrar
el mismo grado de prosperidad, o de continuidad en la concreción de sus
En los años siguientes, los gobernadores y la misma Audiencia, continuarán aspiraciones señoriales.
permitiendo la "disimulación deexcesos" que tanto había escandalizado al visitador
Alfaro. Por una parte, muchas encomiendas han reducidosus ingresos a proporciones
modestas. En estos casos, a la disminución acelerada de los indios del reparti¬
Enrealidad,la intención de frenar los "desórdenes" sólo a través de un conjunto miento, se agregan como causas las prácticas incorrectas en la administración de
de normas, se convierte en un simple enunciado;y la pérdida delmonopoliode los ese patrimonio. A menudo, sus beneficiarios han contraído deudas por montos
„ elevados que difícilmente pueden ser cubiertos; y en los años que siguen, se los ve
aparecer con peca asiduidad en las operaciones mercantiles.
9) Cfr Steve Stern, 1986; 134 y ss
10) Cartas del obispo del T ucumán, de 11
/2 y 13/2de 1612 (en: Leviliier, 1926,1: 95-96 y 97-98); carta del En cambio, un pequeño grupo de encomenderos logra mantener las condi¬
gobernador Quiñónes Osoriode24/12/1613(en:Lanouy, 1923,1:38-42),ÿinstrucciones del cabildo ciones de prosperidad anteriores- Aunque la perpetuidad de laencomienda no se
de Córdoba a Hernando Quintana de los Llanos, de 12/4/1613 (en: A M., V: 313-315)
i

294 295
ha obtenido en ningún caso, los efectos del descenso demográfico indígena han En mayo de 1611, ante un requerimiento de Alfaro, el cabildo de Córdoba le
sido atenuados mediante una política de apropiación de los restos de ohas informa en qué consisten sus solicitudes para exportar a Brasil y Angola: con¬
encomiendas, y la inversión acertada de las rentas de sus repartimientos. duciendo hacia esas regiones harina, cebo, came de vaca y puerco, lana y cueros,
ia ciudad podría tr aer de retorno esclavos, herramientasde hierro, papel, herrajes,
frenos para caballos y muías, aceite y paños ™
Junto a ellos se encuendan los comerciantes de trato grueso —en su mayoría

portugueses •, que continúan teniendo a la ciudad de Córdoba como su lugar de
Un mes después, mientras el oidor se encuentra en el puerto, firma las
residencia o como base de las operaciones mercantiles.
Ordenanzas sobrela forma de proceder en los permisos comerciales que ia Corona
ha concedido a Buenos Aires. En ellas se establece que los navios en los que salen
Los nombres de unos y otros, son los mismos que viéramos intervenir en los las exportaciones, deben pertenecer a vecinos de Buenos Aires y ser conducidos
años anteriores a 1610; y en algunos casos se suelen agregar los de sus descen¬ por maestres de esa ciudad; y se prohibe la venta o el trueque de los permisos
dientes directos: Pedro Luis de Cabrera, Tristán de Tejeda, Gabriel Garcia, otorgados.
Francisco Nuñez, Pablo de Guzmán,Juan de Burgos y Alonso de la Cámara entre
ios encomenderos; Rui de Sosa, Simón Duarte y Diego Lopez de Lisboa entre los Ratificando un bando anterior, eloidor fija a Córdoba como escala final para los
comerciantes. Estos dos sectores, habitualmente asociados en sus operaciones indígenas que, procedentes de otras ciudades del Tucumán, acompañan los fletes
mercantiles, por los montos que movilizan muestran una notable diferencia con el de las carretas:
resto de los habitantes europeos.
"Porque al venir con las carretas algunos indios de la
Por otra parte, en ese segundo decenio del siglo XVII, dos instituciones Gobernación del lucuman se quedan y pierden algunas
religiosas locales comienzan a perfilarse en las actividades económicas: el con¬ hordenanzas, que ninguna persona tenga ni consienta en su
vento de Santa Catalina y la Compañía de Jesús. Sus bienes iniciales se conforman casa ningún indio della que viniere de aqui adelante con las
medíante donaciones testamentarias, y las dotes que reciben por el ingreso de los dichas carretas, si no fuere durante el tiempo que estuvieren
en esta ciudad las carretas, con que viniere el dicho indio y
miembros de algunas familias poderosas.
estando de su voluntad.,.".

Estos sectores dominantes no mantienen intereses antagónicos entre sí. Su Años más tarde, haciéndose eco de las instrucciones del virrey Montesclaros,
preocupación está dirigida al fu turode los tratos mercantiles con la zona atlántica. el visitador señala que los excesos que se producían a través del puerto rioplatense
Los temores no son infundados. Durante esa década, se acentúa la política del no eran sólo en materia comercial; y en ese sentido, afirma:
gobernador rioplatense Hernandarias de Saavedra, denunciando el contrabando
que se practica por el puerto, e intentando controlar las relaciones comerciales que "La puerta falsa que tal llamoal puerto de Buenos Aires,
laProvincia del Tucumán mantiene a través deBuenosAires. La lineade acción de como es perjudicial para otras cosas, también lo ha sido por
Hernandarias se afirma con la visita de Alfaro. entrada de judeizantes" 03

Las instrucciones del virrey Montesclaros habían señalado al oidor la necesi¬


dad de averiguar sobre los abusos en "las mercadurías y negras que meten los
portugueses por ese puerto de Buenos Aires"; y considerando que el establecimiento de II) Acta capitular de 13/5/1611 (en: AM, V: 218-219)

comerciantes de ese prigen, en "tierra tan a trasmano" podría resultar peligroso, le 12) Las Ordenanzas del visitador Alfaro, de 25/6/1611, en: Biedma, 1907: 367-375; la opinión del oidor
sobre el puerto de Buenos Aires, corresponde a un informe suyo que eleva al Consejo de Indias,
solicita que luego de consultar las cédulas que se han expedido sobre el tema, fechado en Madrid en 27/4/1633 (en: Doucet, 1978: 45-1). Sobre el comercio atlántico y el inter¬
ponga r emedio "para atajar lo uno y lo otro". regional, referimos nuevamente a los trabajos de Alice P Cannabrava y Zacarías Moutouidas,
mencionados en notas anteriores

296 297
A pesar de esas disposiciones, el cabildo de Córdoba continúa insistiendo en Hacia 1611, algunos encomenderos importantes, como Pedro Luis de Cabrera
sus solicitudes, enviando procuradores ante la corte, y quejándose porque el y Tristán de Tejeda, poseen en sus estancias una buena cantidad de mulares como
gobernador Hernandarias de Saavedra ha prohibido que vayan a BuenosAires las para iniciar su comercialización.
carretas que conducen los frutos de la tierra n3).
Asociados a iosmercaderes portugueses, otros feudatarios organizan este tipo
Sin embargo, las autoridades virreinales y las de la Península, persisten en de empresa, apoyados en losbienes que han adquirido en su condición de vecinos
sostener la política de Hernandarias y del visitador Alfaro. En el año de 1622, la encomenderos Tal es el caso de Gabriel García de Frías, quien forma una
misma se consolida con la creación de una Aduana Seca en la jurisdicción de compañía con Duarte Juan Moreyra. El encomendero aporta su estancia de La
Córdoba, encargada de controlar la circulación de plata, esclavos, mercaderías y Punilla, los garañones y el servicio necesario de indígenas; mientras que el
pasajeros que transitan por el puerto de Buenos Aires a,|). comerciante coloca 140 yeguas en la empresa. Ambos acuerdan pagar por par tes
iguales el salario del "estanciero" que se encargará del ganado y de los indígenas;
y al cabo de cuatro años, el multiplico también será dividido en partes iguales por
los dos socios oa.
Ese punto de inflexión que mencionáramos en párrafos anteriores, está repre¬
sentado en la actividad productiva por una clara orientación del distrito hacia la Enforma acelerada, los establecimientos más grandes del distrito van haciendo
ganadería de vacunos y mulares;y en los tratos mercantiles, por un incremento en de la cría de mulares una de sus actividades principales; y las tierras del Río
los montos que se registran en el comercio de esclavos 09 . Tercero, La Punilla,Olahen, Saldán y Cantamala, proveen la mayoría de las muías
—chucaras o domadas—,que se comercializan en la región.
El impulso que la ganadería adquiere en este período es una respuesta a
factores extemos. Alejada del mercado atlántico -especialmente del brasilero—, Siempre atentos a loscircuitos comerciales y a los productos más rentables que
por el afianzamiento de los intereses rioplatenses y limeños, el distrito concentra se mueven en ellos, vecinos y comerciantes dirigen hacia ese rubro no sólo sus
su atención hacia las exportaciones para el mercado minero En ese sentido, el propiedad rurales, sino también una parte importante de los capitales —grandes
Potosí se presenta como una plaza segura por su demanda de insumos alimenti¬ —
o pequeños ,que han obtenido en tiempos anteriores.
cios y para el transporte.
Otro tanto sucede con ar tesanos, profesionales,y miembrosdela Iglesia,como
En el orden interno, el descenso demográfico indígena ha facilitado la utili¬ el vicario Antonio Rosillo, o ios integrantes del convento de Santa Catalina. Los
zación de los espacios para la ganadería extensiva; y los requerimientos de mano registros notariales señalan asimismo la presencia de europeos de otras ciudades
de obra, son cubiertos sin inconvenientes por los recursos humanos con que aún de la Gobernación, y aún de residentes del Potosí y de La Plata, que adquieren los
cuenta el distrito mulares criados en los valles de la jurisdicción de Córdoba 07),

Indudablementela ganadería mular es la que presenta mayores incentivos por El ganado vacuno y el ovejuno también encuentran en el Potosí un mercado
su rentabilidad y mercados. Por lo tanto, en esas empresas participan grandes, seguro; y los establecimientos rurales incluyen entre sus hatos vacas y carneros
medianos y pequeños productores. para la exportación. Especialmente el primero de ambos rubros implica pocos
costos de inversión, puesto que para esta época, el ganado cimarrón ya se ha
extendido por el distrito.
13) Acta capitular de 15/7/1615 (en: AM ,V: 382-384)
14) Las Ordenanzas de la Rea!Aduana de Córdoba, han sido publicadas en: Galvan de Somoza, 1982: 16) La compañía que organiza Gabriel Garda, en: AHPC, Reg, 1, tomo 25, protocolo de 14/7/1612
509-524. 17) Entrelos años 1611 a 1616 indusive, se registran en los protocolos un total de39transacdones sobre
15) El sector ganadero exportador, ha sido estudiado por Carlos 5. Assadourian, en un trabajo ya citado ventas de mulares,sin induir enellas lasrelativas a animales quese fletan hada el norte para su venta
en estas páginas Aunque el análisis del autor abarca hasta los oomienzos del siglo XVüI, sus posterior. De ese total, 25 son operaaones a crédito, y 33 tienen el pago fijado en reales. El prcdo de
afirmaciones en tomo al tema se ajustan a las características que hemos observado en estos años una muía chúcara oscila alrededor de ios 16 pesos, y suele alcanzar 40 pesos o más cuando se trata
inidales que van desde 1610 a 1620 (Assadourian, 1983:31 y ss.) de un animal domado

298 299
Ya se trate de mulares, vacunos, u ovejas, invariablemente el destino final del •, Aunque en los montos totales de las transacciones se ha acrecentado la
ganado en pie se dirige hacia el norte, Mientras tanto, las ventas de cueros y cebos participación de los habitantes europeos del distrito, esto no significa una inter¬
—-siempre de mucha menor cuantía que las anteriores—, todavía hallan una salida vención colectiva
en el puerto de Buenos Aires ns).
En realidad, el mayor número de tratos son realizados por un conjunto
En este segundo decenio del siglo XVII, el comercio de esclavos negros que se reducido de individuos. Entre los encomenderos figuran nombres ya conocidos:
registra ante los escribanos de Córdoba, también muestra algunas diferencias con Pablo de Guzmán, Alonso de la Cámara, Tristán de Tejeda, Francisco Nuñez y
el de años anteriores (19). Pedro Luis de Cabrera; a quienes se agregan los de los comerciantes portugueses
que se han avecindado en la ciudad, como Duarte Juan Moreyra, Rui de Sosa, o
Diego Lopez de Lisboa . Interviniendo con montos mucho menoresen este negocio
de la trata, también aparecen sacerdotes, artesanos y algunos profesionales,
EL COMERCIO DE ESCLAVOS EN CORDOBA (1611-1616)
(según los registros notariales) Por otra parte, a diferencia de años anteriores, las cartas de venta de esclavos
establecen con bastante asiduidad el pago a crédito y en especies, como mulares
o tejidos bastos, Al parecer; es el tráfico de muías y vacunos hacia el Potosí el que
ofrece ahora las mejores oportunidades para obtener dinero metálico.
Monto de las Montode las
Número de Monto total ventas de loscompras de ios Si bienmuchos esclavos son revendidos en Chile o en Perú —y a tales efectos
AÑO Total de
transacdones
piezas
vendidas
délas
transacdones
europeos europeos
residentes en residentes en —
se conforman varias compañías ,una parte delas piezas adquiridas son incorpo¬
radas a la actividad productiva de la región, ya sea en tareas urbanas o rurales.Los
(en pesos) Córdoba Córdoba
(en pesos) (en pesos) testamentos, las cartas de dotes y los juicios sucesorios, han empezado a incluir a
los esclavos dentro de la lista de bienes Q0).

1611 3 23 9 035 700 700 El servicio de los trajines en el distrito sigue siendo una tarea casi exclusiva de
los encomenderos, aunque el número de vecinos que despliegan esta actividad ha
1612 17 38 13 519 1.904 5169
disminuido considerablemente.
1613 17 19 7,705 3705 5 630

1614 21 5! 16 655 12720 9.210 El destino de la mayoría de los trajines que se asientan ante los notarios de
Córdoba, es el puerto de Buenos Aires; y los nombres de aquellos que prestan el
1615 45 99 33 979 10 485 22.957
servido son los mismos que aparecen continuamente en el negociode la trata. Por
1616 18 34 12155 3130 7.405 lo tanto, los registros de indios que acompañan en los viajes, y los contratos de
fletes de carretas, se relacionancon el tráfico deesclavos con mayor intensidad que
en años anteriores.

18) En el año de 1614, un aulo del gobernador Luis de Quiñones Osorio prohibe durante tres años ia
matanza de ganado vacuno para hacer cueros y sebo, aunque sea cimarrón; y en ci año de 1616, las 20) Cfr testamento de Francisco de Molina Navarrete, de 4/2/1614 (en: AHPC, Reg 1, tomo 26,
actas del cabildo registran que en la ciudad de Córdoba falta carnede vaca porque se ha impuesto
protocolo de la fecha); promesas de dote de Petronila de Aguilar, de 28/1/1613 (en: AHPC, Reg. 1,
la sisa (Actas capitulares de 13/12/1614 y 15/5/1616, en: A M, V: 366-369 y 432) tomo 24,protocolo déla fecha), y deMenda de Barrientosde 16/8/1614 (en: AHPC, Reg 1, tomo 26,
19) Hemos tomado los años de 1611 a 1615 inclusive como ejemplos demostrativos, puesto qua son los protocolo de la fecha); y AHPC, esa. l,leg. 47, exp 1,sobre remate de las casas del finado Tristán de
que están representados en forma más completa en los registros notariales. Tejeda

300 301
DIRECCION DE LOS VIAJES EN LOS REGISTROS DE INDIOS (1611-1616) Tal vez tenga directa reladón con dicho "comercio", el hecho de que en 1616,el
(según protocolos notariales) portugués Diego Lopez de Lisboa esté preso en Buenos Aires, acusado de
contrabando. Como su libertad demanda una fianza de 3 000 pesos, dos vecinos
encomenderos de Córdoba, Juan de Molina Navarrete y Pedro Luis de Cabrera,
acuden con prontitud y diligencia ante el notario para depositar sus garandas
SANTIA¬ . SANTA
Total de BUENOS.
AÑO CUYO GO DEL FE LARÍOJA JÜJUY
registros AIRES El grupo de encomenderos y mercaderes que a través de esos negocios ha
ESTERO
muí tiplicado su capital, orienta parte de las inversiones hacia los préstamos a altos
intereses y la adquisición de propiedades inmuebles.
1611 13 9 4
_ - -
1612 21 14 7 - - - - La ubicación de Córdoba como nudo de las rutas mercantiles, y las ventas a
plazo que muchas veces crean deudas difíciles de pagar, han acentuado la
1613 28 16 3 6 3 - - necesidad de firmar "obligaciones" ante el escribano. En esos documentos, a veces
1614 12 8 3 1 - - - no se indica la causa del compromiso; o bien se señala que es "por un préstamo",
1615 24 21 - 2 - 1 - pero se omite la suma que lo originó.
1616 5 2 2 - - — 1
Los nombres de losacreedores de estascartas de obligación sontos mismos que
hemos citado en páginas anteriores, entre los que sobresalen especialmente
Tristán de Tejeda, Pantaleón Márquez Correa y Diego Lopez de Lisboa En
i cambio, la lista de deudores incluye a residentes de todas las ciudades de la ruta
Loshabitantes europeos del distrito, hanmodificado su forma de participación comercial ®>.
en el eje comercial Buenos Aires-Potosí.
Los préstamos en dinero adquieren también la forma de censos. A través de
Por una parte, han hecho de la exportación de ganado en pie hacia el centro ellos circulan fondos públicos, como el del Hospital de Santa Olalla; y fondos
minero uno de sus rubros más rentables, incorporando el arreo de mulares. religiosos, como el del Convento de Santa Catalina. En la medida en que a través
Además, han invertido fuertes sumas en el comercio de esclavos que desde el de los censos se hipotecan propiedades inmuebles, estos préstamos son recibidos
puerto se distribuye hada Chile y el Perú. solamente por residentes permanentes de la ciudad de Córdoba®'.

No obstante, no han abandonado los tratos con otros productos de la tierra, Las inversiones en propiedades urbanas y rurales, reflejan las distancias socio¬
¡ como harinas o tejidos bastos En esta última actividad, es el obraje de Tristán de económicas que se han ido gestando dentro del sector europeo.
Tejeda el que provee sayales, lienzos, bayetas y cordellates;en tanto que de los
frutos que suministranlas otras regiones que recorren las carretas con esclavos, es
En la ciudad, tos terrenos para cuadras, las casas y las tiendas de mayor valor,
el vino dela zona de Cuyo el artículo que aparece constantemente en el quehacer
son adquiridas por aquellos que en tos últimos años se han destacado en el
comerdal de la jurisdicdón,

Por otra parte, los esfuerzos de Hemandarias. de Saavedra y del visitador


Alfaro, nohan logrado detener los "excesos" en el ingreso de artículos importados, 21) AHPQ Reg. 1, tomo 30, protocolode 26/11/1616.
como tampoco fe salida de la plata potosina. Las tiendas de la ciudad de Córdoba 22) Cfr cartas de obligación de23/9/1615,30/10/1615, 29/2/1616 (en: AHPQ Reg I,lomo29,28y30
continúan vendiendo paños de Castilla, rúan, pimienta, herrajes y vainas de respectivamente, protocolos notariales de la fecha)
cuchillos, que ingresan por el puerto atlántica 23) Cfr oensosde22/10/l611 y27/9/1614(en:AHPC,Reg 1, tomo 23 y 26 respectivamente), a manera
de ejemplos
I

302 303
I »
fe. « «w
comercio de ganados y esclavos; a los que se agrega invariablemente las compras
ladrillos y adobes en un sitio que se conoce como "el tejar de las monjas", ya que su
de inmuebles que efectúa la Compañía de Jesús G41. ai)
propietario es el convento de Santa Catalina de Sena
En las zonas rurales el proceso es semejante. A menudo, encomenderos Visto en su conjunto, se puede afirmar que la jurisdicción se ha ajustado con
empobrecidos cubren sus deudas con la venta de ias tierras que han obtenido en celeridad a las condiciones internas y externas que habían comenzado a esbozarse
merced; en tanto que los precios varían ostensiblemente según se trate de terrenos a poco de iniciado el siglo XVII.
yermos y despoblados, o de propiedades que cuentan con un buen apero.
Hasta entonces, los encomenderos habían prosperado sólo durante el curso de
En el espectro de los negocios inmobiliarios que se concretan en este periodo, la vida de cada uno de ellos, A difer encia de las regiones centrales del Virreinato,
se destacan las inversiones que realiza la Compañía de Jesús . En 1618, Gaspar de en eldistrito no existió un sector empresario no-encomendero que necesitara dela
Quevedo vende a la orden religiosa las tierras de Guanusacate que por entonces distribución general de la mano de obra indígena;y los comerciantes llegados del
poseen un molino, 20.000 cepas de viña, tapias, tinajas, barriles, podaderas, Atlántico habían podido multiplicar su capital, asociados en emprendimientos
azadones, 250 vacas, 800 ovejas, 200 cabras, 30 puercos, 25 bueyes y chacras de económicos con los feudatarios,
trigo y maíz; el precio convenido es de 8,000 pesos. Una compra posterior
realizada por oteo vecino en tierras próximas a las de la Compañía, indica que ésta Sin embargo, en este punto de inflexión de la historia colonial del distrito, se
es la única zona del distrito que posee un sistema de riego organizado, que se pone de manifiesto que los cambios que se han ido gestando no han beneficiado a
distribuye entre distintos propietarios C5). todos los habitantes europeos.

A partir de 1610, difícilmente podamos encontrar a algún nuevo feudatario que


Hacía 1617, la jurisdicción de Córdoba cuenta con cerca de medio centenar de —afirmado en las rentas de su repartimiento—,obtenga en el transcurso de su
"estancias", cuya actividad principal es la ganadería Algunas de ellas se han vida la misma prosperidad que sus precedesores. Las actividades productivas y
constituido como explotaciones mixtas, especialmente en las cercanías de Guanu¬ mercantiles, señalan que las distancias socio-económicas se han ampliado dentro
sacate, donde además del establecimiento adquirido por la Compañia de Jesús y del grupo encomendero; y la movilidad social que lo caracterizaba en años
otras propiedades dedicadas a la agricultura, se ha erigido la carpintería de anteriores se ha detenido.
Cabinda
En pocos años fueron quedando en el camino repartimientos disipados y
En Costasacate, Nabosacate y Soto, tres obrajes producen la mayor parte de los aspiraciones señoriales malogradas. La encomienda fue consumiendo su propia
tejidos bastos del distrito vitalidad, al ritmo acelerado del descenso demográfico indígena.

Mientras tanto, en las proximidades de la ciudad, y sobre la costa del Río


Segundo, se distribuyen chacras de maíz y trigo; y a media legua se fabrican tejas,

24) En 1613, Pedro Luis de Cabrera compra media cuadra a su hermano Migue! Gerónimo —avecindado
en el Cuzco—, por el precio de 2.000 pesos; más adelante, en 1618, adquiere en 2.500 pesos las casas
que fueron de Gaspar de Quevedo. En 1615, el comerciante Diego Lopez de Lisboa adquiere su
vivienda en 2 400 pesos La Compañía de Jesús, en tanto, adquiere las casas de Miguel Gerónimo
Maldonado con siete tiendas, en 600 pesos; otras dos tiendas que pertenecieron a Juan de Ludueña;
y unas casas con dos solares en 2.000 pesos (en: AHPC, Reg. 1, protocolos notariales de 9/5/1613,
tomo 24; 29/1/1618, tomo31;29/10/1615, tomo 28, 10/7/1613, tomo24;2/10/1615, tomo 26; y 2/
10/1616, tomo 29, respectivamente) 26) EstosdatossonexbaJdosdedasexpedientessobrelosquevolveremosdetaliadamentemásadelante
25) Cfr. protocolos notariales de: 21/4/1613, 16/11/1616, 1/12/1616, 15/1/1618 y 23/4/1618 (en: AHPC, escr.1, leg 53,exp.2yleg 47,exp 1 Q término "estancias"', que usamos en estos párrafos,
AHPC, Reg 1, tomos 24, 30, 31 y 32 respectivamente) es la denominatión que se emplea continuamente en el expedientó atado en primer término

304 305
Si Quiñones Osorio se muestra reticente en el control de la aplicación de las
nuevas Ordenanzas, los vecinos no lo son menos.
La reiteración en la "disimulación de excesos".
En abril de 1616, el teniente de gobernador de Córdoba, firma los autos en los
que ordena que desde el 2 de mayo y durante seis días, los vecinos se presenten
Para controlar el cumplimiento de las Ordenanzas de indios, el oidor Aliara ante el escribano para que se visiten y empadronen los indios e indias que tengan
había establecido que todos los años, después de la cosecha, el teniente de en el servicio de sus casas, y los que están en chacras, estancias y puebios a menos
gobernador de cada ciudad debía salir a hacer visita y padrón de los indígenas de cuatro leguas de la ciudad. Un negro del capitán Tristán de Tejeda pregona el
auto en alta voz en las dos esquinas de la plaza, y se nombra como intérprete a
j Bartolomé Ley ton
Teniendo a la vista el registro anterior, el funcionario señalaría aquellos
aborígenes que —en razón de sus edades—, deberían comenzar a pagar tasa o Unos días después, Quiñones Osorio confirma la decisión del teniente de
entrar en la categoría de "reservados", es decir exentos de la misma Por lo tanto, el
padrón tendría que incluir no sólo a los varones mayores de 18 años, sino a todos
gobernador; y al delimitar los objetivos del acto administrativo, alude a la falta de
los indígenas de sexo masculino por sus edades y a las indias mujeres que confirmación de las Ordenanzas de 1612 Esos objetivos consistirán solamente en
observar el cumplimiento de la tasa y de la supresión delservicio personal, porque
prestaran servicios laborales.
"al no saverse que hordenangas quiso añadireldicho señor birrcy", la ejecución del resto
de la normativa de Alfaro resulta dudosa.
Los gastos de este acto administrativo quedaban a cargo de los encomenderos,
quienes abonarían un real por cada indígena empadronado De esta manera, se inician las gestiones de una visita al distrito que desde sus
comienzos se verá demorada por apelaciones, reclamos y hasta por cambio de
Sin embargo, don Luisde Quiñones Osorio —gobernador del Tucumán desde autoridades as)
1611 a 1619—,no se muestra excesivamente celoso en el cumplimiento de esta
disposición. Según sus conceptos, los indígenas habían quedado con "demasiada A fines de ese mes de mayo, cuando sólo cinco vecinos y el mayordomo del
soltura" después de las Ordenanzas de Alfaro. Por lo tanto, si bien en 1614 realiza "tejar de las monjas" han acudido con sus indígenas ante el teniente de gobernador,
la primera visita al distrito de Córdoba enacatamiento a la nueva normativa,al año éste decide otorgar cuarenta días más de plazo, para que obtengan una copia de
los padrones anteriores que se encuentran en Santiago del Estero No obstante, las
siguiente ordena una diligencia extravagante en su reemplazo.
actuaciones quedan suspendidas.

En efecto, dispone que se aperciba a los indígenas tres veces, en días feriados En diciembre de 1616, el protector general de naturales, Alonso de la Cámara,
y frente a la puerta de la Iglesia Mayor, para que se les informe que ante la justicia solicita a la justicia local que mande comparecer a los indígenas concertados para
local pueden solicitar lo que se les adeuda en salarios, o reclamar por posibles averiguar lo que se les debe Pide también que se ordene al escribano que muestre
agravios. Nada en especial establece el gobernador para los nativos de las zonas los testamentos y codicilos que están en su poder, para ver si se ha cumplido con
rurales,que no tienen por costumbre concurrir los días feriados a las puertas de la las mandas. En sus razones, señala que a los indígenas del distrito:
Iglesia Mayor para enterarse de las novedades C7).
"selesdeve mucha suma depesos,aside consiertos que sus
amos han hecho con ellos, como de funerales y mandas que se

27) Los autos de la visita tie 1614 no se encuentran en los fondos


documentales; y es probable que su
original, llevado a Santiago del Estero,se haya perdido jun to a tantos otros papeles de la época En
la visita de 1616-1617, el escribano informa que muchos encomenderos exhiben una copia de los 28) Los autos de esta visita, en: AHPC, escr 1,leg. 53, exp 2, f. 43 a 279 La transcripción in extenso de
padrones de 1614 correspondientes a sus repartimientos. la misma, se encuentra en prensa.

306 307
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¡es han hecho -por testamentos y codillos, y de tratos Hechas las cuentas, el intérprete las transmite a los indígenas presentes, quienes
que an
tenido con los dichos indios; que no les an pagado cosa deben prestar o nosu conformidad, también sobre los cálculos que se hacensobre
ninguna, y como miserables yndefensos no lo piden y padesqen". los ausentes. Efectuado el pago, o en su defecto fijada una fecha para hacerlo
efectivo, se concierta ante el escribano la situación laboral de los indígenas en el
El teniente de gobernador accede a lo solicitado, y ordena reiniciar la visita el
próximo año.
19 de diciembre de ese año de 1616.
Por otra parte, la visita no abarca a todo el territorio de la jurisdicción. Luego
de haber receptado las presentaciones que se hacen en la ciudad de Córdoba, el
El procurador objeta la medida. En su alegato, advierte que la visita dentro de teniente de gobernador se dirige a fines de febrero hacia la zona de Guanusacate;
la ciudad noes necesaria, porque a los indios se les paga conforme a sus conciertos, en marzo recorre el Río Segundo y Saldán, y en setiembre el Rio Tercero. Para la
y que cuando alguno de ellos se siente agraviado acude ante la justicia "y se les paga región del Rio Cuarto, donde se encuentran lasestancias de don Jerónimo Luis de
sin estrepito de juy~io y sin azer costas ;indica además que si cada año los vecinos Cabrera, comisiona a Alonso Lopez de Valdez. Por lo tanto, no incluye a los
fueran fastidiados de esta manera "sería un tributo y pecho yntolerable" ,Recuerda indígenas del oeste de las Sierras de Córdoba; y entre las omisiones se destaca el
también que, cuando el gobernador Quiñones Osorio reemplazó a la visita por obraje de Soto, perteneciente al capitán T ristán de Tejeda.
aquellos apercibimientos frente a las puertas de la Iglesia Mayor, era su voluntad
que los vasallos no fueran cada dia molestados con nuebos derechos y ynpusyciones Dado el objetivo que tiene la visita, la mayor parte de los datos que recoge el
quéson bedadas por entramos derechos dibino y umano", escribano se concentra en los indígenas varones. Según las Ordenanzas de Alfaro,
sobre ellos recae el peso del tributo que la "república de indios" debe prestar al
El teniente de gobernador rechaza la objeción, afirmandoquecuandoQuiñones sistema colonial; en cambio, las nativas sólo aparecen en su condición de esposas
Osorio ordenó esa disposición, lohizo por "sinyestra relación " quehicieron alcaldes de los tributarios, o bien cuando prestan servicio en la vivienda urbana®1.
y procuradores de Córdoba.
De las cifras que surgen del empadronamiento de 1616-1617, la referida a la
En los últimos días del ano llega a la ciudad José de Euensalida Ivleneses dinámica poblacional es la que reclama nuestra atención. Sólo el 58.3% de los
designado nuevamente como tenientede gobernador. Entre las comisiones que
lehan encargado, figura lademorada visita y padrón de los indígenas. Por fin, ésta
sé matrimonios tienen hijos; y las parejas de cónyuges que se incluyen en este
porcentaje, tienen un promedio de 1.7 hijos por matrimonio.
se reinicia el 10 de enero de 1617, no sin antes mediar nuevas protestas y
presentaciones.

Desde el 19 de abril de 1616, y hasta el 30 de octubre de 1617, el teniente de


gobernador, acompañado por el escribano y el intérprete, controla el cumpli¬
miento de la tasa y los salarios de los indígenas que empadronan 74 vecinos y
residentes de la jurisdicción, y de los nativos que trabajan para el convento de
29) De acuerdo a lo que venimos de señalar, la matriz de datos que incorporamos a continuación, no
Santa Catalina de Sena en el "tejar de las monjas". representa a todoslos indígenas queen 1616-1617prestanservicioen el distrito. Sin embargo, a pesar
de su información fragmentaria, este documento es uno de los padrones más completos que han
Llegado a nuestras manos para el período; y a! menos en algunos porcentajes, tales como en
Ciertamente, el procedimiento que se utiliza deja un amplio margen para que "matrimonios sin hijos", es coincidente con aquella otra visita del año 1598
los vecinos puedan evitar tantos "derechos e imposiciones"; en efecto cada uno de En el título "varones", hemos incluido todos los nativos de sexo masculino que tributan, incluso los
ellos se presenta ante la autoridad conduciendo un grupo de sus aborígenes; reservados y los que no son originarios de la jurisdicción, aunque estos últimos son muy pocos
teniendo a la vista el padrón anterior, se determina los que deben entrar y salir de Siguiendo el criterio del escribano, en el título "hijos", están comprendidos habitualmente los
vastagos menores de 8 años, si bien es necesario señalar que no siempre se ha incluido el dato de la
tasa, y el europeo informa sobre el tiempo trabajado y los salarios que se adeudan edad para estos indígenas menores

308 309
I VISITA DE 1616-1617 En cumplimiento de una de las cláusulas testamentarias de Tristán de Tejeda,
DATOS VITALES DE LOS INDIGENAS EMPADRONADOS fallecido en agosto de 1617, el expediente da cuenta de la repartición de un quinto
de los bienes entre los indios de su encomienda. En la medida en que las mandas
VARONES MATRIMONIOS HIJOS establecen una suma fija dentro del patrimonio del feudatario, no hay razón para
DB sospechar un interés particular en alterar los datos que se registran sobre los

CAT UNIDAESVITDA Sub-lota solter casdo viudos MUJERS Sub-lota


TIPO

Sub-toal VARONES MUJERS


aborígenes del repartimiento
DE
ACTIVIDAD
hijos 5
m

con £
"S
En agosto de 1619, en el asiento y obraje de Soto, los indígenas del pueblo
reciben el legado de su encomendero consistente en ropa, frazadas, cordellate,
Servido sayal y sombreros Una persona nombrada por el teniente de gobernador efectúa
de Casa 28 89 18 66 5 71 65 32 33 51 26 29 la distribución ante los albaceas y dos religiosos Como los beneficios abarcan a
Chaaas y niños, jóvenes y adultos, el comisionado va anotando algunos datos vitales de los
Estandas 55 674 230 410 34 407 414 247 167 430 257 173 nativos.

Pueblos y De esta manera, el documentoseñala que en el pueblo de Soto están asentados


Reducdones 7 236 49 173 14 167 173 105 68 183 106 77 239 hombres y 259 mujeres, de las cuales 63 son viudas; y que en el último año se
Tejar y han registrado 39 defunciones de personas mayores de 12 años. Además, sobre un
Obrajes 3 91 54 34 3 32 34 16 18 23 14 9 total de 183 matrimonios, sólo el 43.7% tiene hijos. Los matrimonios abarcados en
este porcentaje, presentan un promedio de 1.8 hijos por pareja de cónyuges.
TOTALES 1090 351 683 56 677 686 400 286 691 403 288
Aún con datos incompletos para nuestras expectativas, tanto la visita de 1616,
como el padrón de indios del pueblo de Soto, son coincidentes en demostrar una
fuerte crisis demográfica, cuyascifras son concurrentes a su vez, con las de aquella
De no haberse registrado cambios en las condiciones de fecundidad, el con¬ otra visita de 1598.
junto humano abarcado en la visita no presenta los requisitos necesarios para
garantizar su propio reemplazo. Los objetivos centrales del oidor Alfaro, estaban dirigidos a establecer una tasa
del tributo que los indígenas debían prestar a su encomendero y a derogar el
Teniendo en cuenta el posible interés de los vecinos en no empadronar a todos sistema del servicio personal. Por lo tanto, la mayor parte de las 119 ordenanzas
sus indígenas —debido a las costas y salarios a que están obligados—, y que el queredactaparala Provincia del Tucumán convergen sobre esos dos temas, ya sea
procedimiento usado deja un amplio margen para los subterfugios, se podría fijando las formas en que se debe organizar la "república de indios", o bien
aducir la debilidad del documento para sostener una inferencia como la que determinando los tipos de prestaciones laborales de los indígenas.
acabamos de realizar.
A pesar de esa abundancia normativa, una de las ordenanzas deja el camino
Sin embargo, un expediente judicial contemporáneo,referido al pueblo de Soto despejado para que los encomenderos del distrito de Córdoba, no modifiquen
—omitido en la visita—, coincide en señalar cifras semejantes en la evolución substancialmente las formas de extracción colonial que habían practicado hasta
decreciente de la población nativa G0). entonces.

En efecto, luego de establecer todos aquellos trabajos que los indígenas no


f
podían ser obligados a realizar, el oidor Alfaro disponía en la Ordenanza 54: "los
30) El documento está referido al remate délas casas del finado Tristán de Teieda (en: AHPC, esa. 1,leg.
yndios podran de su voluntad concertarse para otros servicios como sea de su voluntad, y
47, exp. 1) en este caso no se les pone límite en lo que han de llevar por su trabajo",

310 311

O-
Sin embargo, para los feudatarios de Córdoba todavía queda un obstáculo por
La deuda que los vecinos reconocen tener con sus indígenas, es pagada en
apartar: el referido a la delimitación en las prestaciones laborales que significa la
tasa del tributo indígena
manufacturas textiles como sayal, cordellate, sombreros, o "ropa de indios", a los
precios en que esos productos se comercializan en la ciudad. Muy raramente los
nativos reciben su paga en reales; y cuando esto sucede, se trata generalmente de
Conjugando el acatamiento a las Ordenanzas con una extraordinaria habilidad
para que las reformas no se concreten, los vecinos "-perdonan la tasa" que sus indios montos pequeños.
están obligados a entregarles, y obtienen las prestaciones laborales a través de
La forma en que losvecinos aplican las nuevas Ordenartzas, ha convertido a los
"conáerlos" en los que nunca se fijan los tiempos y modos de trabajo 0I).
"jornales" de los indígenas en salarios simbólicos. Por una parte, los ocho pesos
En la visita de 1616-1617, los vecinos dan cuenta ante el teniente de gobernador anuales que la mayoría de los conciertos fija como estipendio cubren escasamente
sobre las labores realizadas por los nativos a su cargo, los jornales pagados y los las necesidades de vestimen ta .Mientras tanto, para el español, el monto y la forma
de pago es equivalente a la obligación que fijaban las viejas Ordenanzas de 1576,
que se adeudan. Las cuentas abarcan los últimos dos años y medio, vale decir
desde la visita anterior. Invariablementehacen referencia a que en aquella ocasión cuando establecían que los encomenderos debían proveer anualmentea sus indios
a los indígenas se les había perdonado la tasa, y a la forma en que quedaron
de servicio de la ropa necesaria a2).
concertados con su encomendero. Además, en el monto de los jómales, descuen¬
tan el tiempo en que sus indios han andado huidos, o durante el que han estado
Ajusfando de esta manera su conducta a la normativa de Alfaro, no hay razón
enfermos. para que los vecinos del distrito de Córdoba recurran a la imposición de deudas
excesivas sobre sus indios, como sucede en las zonas centrales del Virreinato. El
"perdón" de la tasa y la aplicación generalizada de la Ordenanza 64, son suficien¬
VISITA DE 1616-1617 tes para que los encomenderos continúen controlando la mano de obra indígena,
SITUACION LABORAL DE LOS INDIGENAS y evitando las inversiones de dinero en las prestaciones laborales
CANTIDAD CONDICION
DE LABORAL La visita a cada uno de los vecinos y residentes concluye con el concierto de
INDÍGENAS AL MOMENTO ¿0 01 oí
trabajo que regirá en el próximo año. En general, estos convenios son pobres en
QUE DELA 0 en 01 C
c detalles relativos a los tipos de labores que realizarán los aborígenes; y habi-
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tualmente fijan un salario de ocho pesos para cada indígena, y la obligación del
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En relación a los años anteriores, el número de nativos que presta servicio en
las viviendas urbanas ha disminuido considerablemente, en especial el de las
En la vivienda "chinas" solteras. Sólo ocho varones recibirán un salario de diez pesos, mientrasel
urbana 89 63 - 79 73 205,5 37,7 4 15 1 resto cobrará los usualesocho pesos; en tanto que las mujeres se conciertan por un
vestido de algodón.
En chacras y estañe 674 - 9 636 29 2841,2 118,3 16 55 62
Cabe señalar aquí que el trabajo en la vivienda urbana es el único que las
En obrajes 75 - 4 71 - 354 59,4 3 4 1
Ordenanzas permiten a las indias; de tal manera que la visita no las incluye en las
En el tejar 16 - - 16 - 188 - - - - ohas actividades, ya sea en las zonas rurales o en los obrajes.

31) Generalmente, ambos aótos se registran ante el teniente de gobernador, en


ocasión de la visita que 32) El acta capitular de 19/8/1617, da cuenta que los sayales que se venden en la ciudad son "laaos y
controla el cumplimiento de las Ordenanzas de Alfaro Los protocolos notariales no incluyen este
tipode conciertos "colectivos" queseestablecen entree! encomendero y sus indios de repartimiento sin torces y muy angostos" y a precio excesivo;y queen esto los indios son los que reciben más daño,
porque son quienes más ios usan (en: A M, V: 508)
312 313
\]

En las chacras y estancias, los conciertos no son muy diferentes. Ocasio¬ i


nalmente figuran unos pocos nativos cuyos salarios se elevan a los diez pesos; y VISITA DE 1616-1617:
sólo en la carpintería de Cabinda, los 24 indígenas que allí trabajan recibirán doce
pesos anuales- Otro tanto sucede en el "tejar de las monjas" y en los dos obrajes,
srruACION LABORAL en pueblos y reducciones
donde el salario generalizado es de ocho pesos.

Como es de suponer, la visita no da cuenta de una presencia significativa de


indígenas especializados. Mientras en la vivienda urbana sólo se registra unindio CONDICION
zapatero; en las chacras y estanciaslos vecinos declaran once indígenas dedicados
LABORAL
AL MOMENTO 3§ W
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a tareas especiales, entre los que se cuentan un barbero, un capataz, unherrero, un aoz DE LA VISITA
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molinero y un "melero". § oS 8
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Acatadas de esta forma las Ordenanzas de Alfaro, difícilmente podríamos
encontrar en el distrito un mercado laboral urbano; o considerar a las chacras,
estancias y obrajes como centros de trabajo asalariado. Aún el "tejar de las monjas"
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del convento de Santa Catalina de Sena, donde trabajan los indígenas del reparti¬
miento del difunto Manuel de Fonseca Contreras, emplea las mismas prácticas CAMINAGUA 28 28 - - 42 10 2 4 -
(T de BalmacedayP
laborales: perdonar la tasa de los nativos, y concertarse con ellos por un "jornal" Belmonte)
de ocho pesos anuales
CHAVASCATE 42 - 42 - 37 - _ 2 8
Eneste contexto,la intención de Francisco de Alfaro, consistente en que a través (Diego de las Casas)
del alquiler de indios estos "se aficionen a ganar plata", se convierte en una utopía. 22 17 3 2 9 2 3
CHAPISACATE
(Miguel Cornejo,
Lavisita de 1616-1617, incluye la información sobre siete pueblos o reducciones difunto)
de! distrito. Las prestaciones laborales que se detallan dentro de ese conjunto, 5 2
NOGOLMA 44 44 " 1 100
muestran variaciones en cada uno de los casos. (Ver cuadro de página .317) (Pedro González
Carriazo)

SAN MATEO 37 — 37 — 81,1 7,4 3 2 2


(Juan de Molina
L.os indígenas de tres de esos asientos, han pagado tasa a su encomendero; pero Navarrete)
ésta se ha cumplimentado de maneras diferentes. Losde Caminagua la abonaron
en plata y jornales, para lo cual "se alquilaron", y dividieron con su encomendero SAN ANTONIO
(Alonso Diaz
37 — " " 1
el trigo y maíz que sembraron en sus chacras Los de Chapisacate entregaron
Cavallera)
cuatro telasdesayal—a pesardeque "noylansusmugeres"—, diez hanegasde trigo
y una de maíz. SAN ESTEBAN DE 26 26
BOLON
(Jerónimo luis de
La situación más desoladora es la delos indígenas de Nogolma,originarios del Cabrera)
oeste de la sierra de Calamuchita, y ahora asentados en el Río Segundo. En dos
años y mediohan entregado 16 telas de sayal de 70 varas cada una, han trabajado
en el molino,limpiado la acequia, y cuidado el ganado. Sin embargo, el teniente de
gobernador dictamina que deben a su encomendero "mucha mas tasa de lo que an

314 315
«tu » ÿ
dado", y advierte que cada uno de ellos todavía adeuda 25 pesos en concepto de Sin embargo, las rentas deben ser más provechosas que las que se detallan ante
tasa de la visita anterior, Felizmente, el feudatario Pedro Gonzalez Carriazo, el teniente de gobernador. En 1611, Baltasar y Juan Gallegos se obligan a pagar
dando muestras de una delicada caridad cristiana, condona las deudas presentes 1565 pesos a Pablo de Guzmán, sacados de los frutos que danlos indios del pueblo
Por
de Cabiche;dos años después, Guzmán ha r ecibido 1246 pesos y dos tomines.
y pasadas, "por amor de Dios", Duarte arrienda los tributos del pueblo de
esa época, el comerciante Francisco
Nabosacate de Diego Celis de Quiroga por 300 pesos anuales.
Diego de las Casas, encomendero del pueblo de Chavascate, se da por satis¬
fecho con un tributo de diez hanegas de trigo por año; y sus voluntariosos indios
solicitan que en el próximo concierto se fijen 30 hanegas de trigo para su amo, y Todavía podemos agregar un ejemplo más: en 1616, el convento de Santa
de
cinco de maíz que partirán por partes iguales. Los "yeguarizos" y ovejeros que Catalina de Sena le da a Hernando de Tejeda el usufructo de los pueblos
Calamuchita, Macha, Guamacha y el tejar, a condición de que Tejeda entregue
cuidan el ganado, y los cuatro indígenas carpinteros recibirán ocho pesos anuales, varas de
y a todos se les perdona la tasa. anualmente al convento 100 hanegas de harina de trigo, 80 de maíz y 100
031.
cordellate
Mientras tanto, los del pueblo de San Mateo del repartimiento de Juan de
Molina Navarrete, informan al teniente de gobernador que durante un año han Durante la visita que estamos analizando, el teniente de gobernador constata
los
hilado cuatro telas de sayal para su encomendero, y el restante año y medio han a través de su interrogatorio, que tanto en las chacras y estancias como en
los encomenderos habían
trabajado bajo concierto con una paga de ocho pesos anuales El feudatario, "por pueblos de indios no hay pobleros. Sin embargo,
no anidar en (¡uentas", les perdona las deudas que podrían tener con él, y renueva el encontrado la forma de burlar la prohibición que sobre este asunto había esta¬
blecido el oidor Alfaro; y el gobernador Quiñones Osorio había concedido
concierto anterior eximiéndolos de la tasa, su
patrocinio.
En los ríos Tercero y Cuarto, dos pueblos tienen asentados a indios de las
llanuras que se han comenzado a reducir. En 1614, ante una peticiónde Pedro Luisde Cabrera, Miguel de Ardiles y Juan
de Torreblanca, en el sentido de que había necesidadde alguien que administrara
En la reducción de San Antonio, perteneciente a Alonso Diaz Cavallero, están
los indios de sus pueblos y repartimientos, el gobernador nombra a Alonso
instalados "indios pampas" desde hace seis años, y allí fueron visitados por el oidor
Gordillo como "juez administrador de los indios" de las encomiendas de los peti¬
Alfaro. Tal como loestablecen las Ordenanzas no pagan pagan tasa, su encomen¬ cionantes, "conforme a las nuevas Ordenanzas Dentro de sus funciones, le encarga
dero les provee cordella te, sayal, sombreros y camisetas, y su trabajo ha consistido
ocuparse de que esos indígenas acudan a pagar la tasa que deben a sus encomen¬
en que a veces "an salido a coxer yeguas zimarronas y potros para su encomendero" . Por
deros, evite sus borracheras, vicios e idolatrías, traiga a los cimarrones a sus
ser recientemente reducidos, el teniente de gobernador decide no cambiar su
pueblos,a los que delinquieran les podrá darhasta diez o doce azotes,y si el delito
situación, y los ampara en las tierras donde están asentados fuera más grave los prenderá para conducir los ante la justicia mayor.
En el Río Cuarto, los indígenas de la encomienda de don Jerónimo Luis de
En 1620, el teniente de gobernador firma una orden de detención sobre Alonso
Cabrera están concertados por ocho pesosanualesy sin obligación de pagar la tasa,
La visita da cuenta que junto a ellos, el feudatario ha instalado a tres caciques Gordillo que, "contra las nuevas Ordenanzas", está como poblero en Quilino,
sirviendo en la encomienda de Pedro Luisde Cabrera
pampas con 39 indios sujetos, todos infieles recién reducidos

Tal como sucede en las rendiciones de cuentas por tutorías, si nos guiamos por Gordillo es natural de Chile, y hace 13 años que reside en el distrito; los
las informaciones que los vecinos dan al teniente de gobernador sobre las pres¬ primeros ocho meses estuvo trabajando para Tristán de Tejeda, y luego pasó al
taciones laborales que reciben, pareciera que en el distrito de Córdoba el papel de pueblo de Quilino como oficial zurrador y luego como poblero,
encomenderos es una carga difícil de llevar.. A los salarios que fijan los conciertos,
se agrega la obligación de dar comida y atender a las enfermedades de los indios
del repartimiento; y esto, a veces sólo por unas pocas telas de sayal y algo de trigo 30)
33) En: AHPC,Reg 1, protocolos de 2/6/1611 (tomo 22), 20/2/1612 (tomo 25) y 22/8/1616 (tomo
y maíz, cuyo monto en dinero no alcanza a cubrir los gastos de la encomienda.

317
316
-- 1 i

El protector de naturales formula su acusación: Alonso Gordillo "con animo jV se prestara más atención a los trabajos en la Iglesia Catedral, en las obras públicas,
diabólico y atrebido" ha sido poblero durante diez años, violando las Ordenanzas i y en los conventos.
de Alfaro; y entre otras cosas, lo acusa de hacer trabajar a las indias, de "estorbar í
3

un casamiento", de incestos y amancebamientos con dos hermanas y de amance¬ En 1615, el cabildo está preocupado por la necesidad de contar con una buena
bamiento por fuerza 04). acequia que provea de agua a las viviendas y a las huertas que rodean a la ciudad
J En sus reflexiones, losmiembros capitulares aducen que "en todas las mas enferme¬
dades son necesarias legumbres, c¡ue faltan faltando el agua"; y que como en todas
En el expediente judicial, algunos testimonios indígenas señalan al alcalde
indio del pueblo de Quilino como colaborador estrecho del poblero Alonso partes, la mala salud es consecuencia de la poca higiene "por no estar sus casas y
Gordillo, y lo muestran participando activamente en castigos e imposiciones moradas con la limpieza nezecesaria..".
laborales. El resto de la documentación del período, omite todo tipo de informa¬ I
ción sobre estos funcionarios nativos de las zonas rurales, que habían surgido de I
las Ordenanzas de Alfaro- Por lo tanto, el cabildo procede a ordenar que se exija la mita de los pueblos de
repartimiento para asistir a la obra de la acequia. Algunos vecinos, como el
En cambio, podemos acercarnos al perfil de los alcaldes de indios que en la
encomendero Tristán de Tejeda, prefieren pagar 25 pesos por cada indio que
deben traer de mita, reteniendo de esta manera esa manodeobra en sus reparti-
ciudad están encargados de la vigilancia de los aborígenes de mita. Indudable¬
1 mientos.
mente, ninguno de ellos tiene la jerarquía de los peruanos,que se constituyeron en
una verdadera élite indígena. ÿt

En los años que siguen, los inconvenientes se suceden en torno a esta mita de
En el distrito de Córdoba, los alcaldes de indios de la zona urbana, se limitan plaza. El cabildo deja asentado en sus actas que los vecinos tratan de evadir la
a cumplir el rol de elementos individuales de confianza de aquellos europeos que J obligación; y en 1619 decidemandar a buscar los autos originales de las Ordenan¬
en ese momento disfrutan de un mayor poder político en el cabildo local G5). zas de Alfaro, para que el gobernador señale cómo se debe proceder sobre la mita
de indios que deben traer de los pueblos.
í
La habilidad de los encomenderos y la connivencia de los gobernadores del
Tucumán, han hecho que las reformas de Alfaro se manifiesten sólo a través de i Poco después, la autoridad local debe revocar una orden que obliga a los
formalidades administrativas. Las prácticas coloniales no han variado en su vecinos a contribuir con un indio cada uno para limpiar la acequia, porque "reciben
esencia, y los vecinos encomenderos siguen teniendo el monopolio dela mano de molestias de dar un indio". Probablemente, estas resistencias a desviar temporalmente
obra indígena. Mediante el ardid de los conciertos, ocupan los servicios laborales indígenas de sus encomiendas hacia otras tareas, sea unindiciode que la mano de
de sus indios en forma ininterrumpida; y como en años anteriores, dificultan el obra nativa se ha convertido en un factor que reclama más cuidado que antes,
cumplimiento de cualquier disposición que pretenda derivar el trabajo indígena ,j debido a su descenso demográfico e6)-
hacia otras actividades, aunque sea temporalmente. \ i.

I La escasa oferta de mano de obra queel monopolio de los feudatarios permite


Tal sucede con la mita de indios que debían ser enviados a la ciudad para que filtrar hacia los sectores europeos no encomenderos, se manifiesta en los concier¬
se alquilaran en labores de sementeras, edificios y guardas de ganado. A táes tos de indios que se firman ante los escribanos,
efectos, las Ordenanzas de Alfaro habían destinado la sexta parte delostributarios
decadaencomienda,yel oidorhabía recomendadoque al momento de repartirlos,

|
í _ _
34) AHPQ escr. 1,leg. SO, exp. 2.
35) Cfr actas capitulares de2/l/1616, l/l/1617,2/l/161By 2/1/1619 (en: AM., V: 417, 482, 550 y 591
36) Actascapitu]aresde31/8/1615, 9/9/1615,5/10/1615,13/10/1615,20/2/1618,31/5/1619y22/8/
respectivamente). 1619 (en: AM, V: 392-393, 403,404, 410, 556-557; y Vk 4041, y 59, respectivamente)

318 319
CONCIERTOS DE INDIOS: 1611-1616
(según protocolos notariales) "En lo temporal no se guarda ordenanza ninguna de las
c¡ue dejó don Francisco de Alfaro en nombrede S.M. para el
buen gobierno de ella; los indios trabajan mas que los israeli¬
tas en Egipto, y más eso, andan desnudos y mueren de

INDGEAS CONERTADS CANT INDGEAS FORNES CONERTADS CANTID INDOS ESPCIALT ONERADS
DE DE DE

CANTID CONIERTS
A DE hambre, y asi les luce a sus encomenderos que quiere Dios
Ñ
0 TOAL i
esten tan miserables como ellos..." oa),

1611 —
1612 2 2 1 -
1613 4 6 3 -
1614 24 28 21 i
1615 15 17 9 -
1616 22 32 22 -

Tal como se desprende del cuadro anterior, el reducido mercado laboral


urbano de Córdoba, ofrece más ocasiones de contratar a un indígena de otra |
jurisdicción, que a los nativos del distrito. Además, los indios especialistas son los
constantes ausentes en los conciertos de trabajo 07l

Hacia 1620, la "disimulación de excesos" que tanto había asombrado al oidor


Francisco de Alfaro, aún se mantiene en eldistritode Córdoba. Esta vez, el engaño
se asienta en la Ordenanza 54 y en la remisión de la tasa.

En enero de 1621, el obispo del Tucumán Dr.Julián de Cortázar, refiriéndose I


!
a su diócesis, le informa al rey:

37) La mano de obra especializada en artesanías y oficios varios, es cubierta por europeos que se
conciertan con losvecinos Cfr., a manera de ejemplos: AHPC, Reg. 1, protocolos notariales de 13/
7/1618 (tomo 32), 9/3/1617 (tomo 31) y 22/5/1611 (tomo 22),
38) arta del obispo del Tucumín fechada en 26/1/1621 (en: LevÜiier, 1926, 1: 194-228)
320
321
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CONCLUSION

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CAPITULO XI

Córdoba, una jurisdicción marginal del Virreinato del Perú

Cuarenta años después de la ruptura histórica que significó la conquista, el


sistema colonial en la jurisdicción de Córdoba demuestra haber seguido procesos
y caminos singulares.

Los europeos que en 1573 irrumpieron en la región y se asentaron en las tierras


de comechingones y sanavirones, tenían en común experiencias semejantes G9).

39) En cuanto a los orígenes sociales de los primeros pobladores, y según los datos que suelen aparecer
en sus testamentos y cédulas de encomienda, la mayoría puede ser incluida en la categoría de
"hidalgos marginales y plebeyoscabales", que establece James Lockhari para el grupo de Cajamarca
(LocLhart, 1986, II: cap X!) En algunos aspectos, el fundador Jerónimo Luis de Cabrera constituye
una excepción en el grupo de la hueste que llega a Córdoba Nacido en Sevilla e hijo de un
comendador, se encuentra emparentado por itnea paterna con la Casa de Francia Cuando su
hermano Pedro Luis de Cabrera es deportado a España en el año de 1556 por su conducía revoltosa
en el Perú, entrega podar para administr ar su pa trimonio a Jerónimo Luisde Cabrera; poco después
Pedro L uis se queja ante el Consejo de Indus porque su apoderado había "efectuado varias ventas
fingidas y otros manejos dolosos" Jerónimo Luis de Cabrera había llegado al Cuzco después de la
gran rebelión, y el virrey Conde de Nieva le encarga la fundación de la, realizada en 1563; ocupa
luego el cargo de Justicia Mayor de Potosí, y en 1571 el virrey Toledo lo nombra gobernador del
Tuciunán Casado con Luisa Martel de los Ríos, viuda de Gardlazo de la Vega y madrastra del ta
historiador, había recibido en 1563 una renta anual de 4.000 pesos en ios indios de Macha, can
j obligación de residir en La Plata (Del Busto, 1986: 291 y 293)

325
Ninguno de ellos era un recién llegado a las Indias Aunque procedían en su maderas para las construcciones urbanas; y los rebaños de llamas y guanacos
mayoría de las zonas centrales del Virreinato, no habían participado en los auguraban las posibilidades de la ganadería.
repartos y premios de Cajamarca y el Cuzco Algunos habían actuado en las
guerras civiles del Perú,y otros se habían fogueado en regiones marginales como Las expediciones iniciales originaron una "certidumbre de gran suma de indios";
Chile o Santiago del Estero. y en los primeros años, los europeos anotaron en las relaciones y crónicas
estimaciones gruesas, en cifras que oscilaban entre 30.000 y 40.000 indígenas en
Los miembrosde la hueste de Cabrera, y los que se afincaron poco después de condiciones de tributar.
fundada la ciudad de Córdoba, perseguían idénticas metas individuales: la
Sin embargo, losnaturales habían desarrollado formas organizativas particu¬
búsqueda de tierras ricas en oro y plata. Guiados por ese objetivo, cuando se
lares; y a los efectos de obtener mejores beneficios del único "premio" que ofrecía
publicó la jornada de los Comechingones, abandonaron sus encomiendas en
la región, los conquistadores debieron adaptar —casi siempre al margen de la
Santiago delEstero—siempre de menor cuantía que las del Perú—,paraparticipar
en la nueva aventura; y en los años siguientes a la fundación, adhirieron con
legislación—, algunas de las instituciones que el sistema colonial aplicaba en otras
latitudes.
entusiasmo a las expediciones que porfiaban en localizar el mitode Los Césares o
En efecto, la población nativa se asentaba en aldeas y caseríos dispersos en el
Trapalanda. fondo delos valles, donde también poseían sementeras de maíz,quinoa y zapallo.
En cambio, las autoridades virreinales, menos quiméricas y más pragmáticas, Eran pequeñas comunidades agrícolas, que funcionaban como células producti¬
consideraban otros fines para las expediciones que se organizaban hacia estas vas autónomas.
regiones; en lo inmediato, "descargar la tierra del Perú", poblada de tanto elemento
levantisco; y a largo plazo, organizar un espacio relacionado a las rutas y a los Para reducir los efectos de la baja tecnología, accedían estacionalmente a zonas
tráficos, pensando siempre en la salida al Atlántico. de diferentes recursos. Así, durante los mesés de diciembre y enero, las pobla¬
ciones se movilizaban hacia los algarrobales; y cuando en el invierno se agotaban
En poco tiempo, el proyecto de las autoridades virreinales se mostró como el los alimentos que proveían los sembrados, en las pampas altas recogían semillas
único posible; y la realidad puso ante un verdadero desafío a los fundadores y y raíces, y cazaban ciervos y otros animales pequeños. Esas estrategias de
primeros pobladores dela ciudad de Córdoba. Carentes de oro y plata, las nuevas dispersión, también fueron utilizadas frente a la conquista europea. Para el
tierras sólo ofrecieron como premio para los desasosiegos y esfuerzos de los español, el nativo era "gentefácil de moverse de una parte a otra".
conquistadores, la mano de obra de la población indígena del distrito; y ésta
revestía características muy diferenciadas de las que poseían las ricas encomien¬ A diferencia de las regiones andinas centrales, la población indígena de las
das peruanas. sierras carecía de estratificaciones sociales y de sistemas políticos centralizados.
I os vínculos de parentesco entre un poblado y otro, originaban sólo relaciones de
El sitio que se eligió para la fundación hispánica,conjugó las expectativas de las adhesión más o menos transitorias. Por otra parte, aunque las aldeas estaban
autoridades virreinales y las posibilidades de recompensar a los componentes de lideradas por caciques principales y secundarios, ninguno de ellos poseía un
la hueste. Desde el piedemonte, la llanura comunicaba fácilmente con el Río de la verdadero poder gestiortario en el seno de su comunidad.
Plata y el Mar del Norte, y existía buen acceso a los valles serranos, donde se
encontraban las aldeas indígenas Además, era el lugar más poblado de indios En el aspecto lingüístico, la variedad de dialectos locales reflejaba el frac¬
"para servirla". cionamiento político. Al menos durante los primeros cincuenta años del dominio
colonial, esas formas dialectales no fueron utilizadas por el europeo para su
La geografía acudió en ayuda de los recién llegados. Aunque el relieve comunicación con el mundo indígena.
complicado de las Sierras de Córdoba no tenía la grandiosidad de los Andes, al
decir de los conquistadores "sus temples son como en España".Los valles fértiles eran En la memoria cultural de las dos etnías que compartían el territorio, no se
tierras de "buenas comidas", y se convirtieron en caminos naturales para las registraba ninguna situación de conquista militar con apropiación de hombres y
expediciones de reconocimiento y las partidas guerreras; la vegetación ofrecía tierras, como la que se produjo a partir de 1573. El movimiento migratorio

326 327
sanaviron hacia el sur no había generado guerras de conquista; y aunque los
comechingones se mostraron más belicosos ante el dominio hispánico, sus ac¬ y hasta por algún arreglo comercial. En todos
los casos, los
tividades se redujeron a "guasábaras" nocturnas. sabiendas que los gobernadores del Tucumán siempre los conciertos se hacían a
refrendaban
Es indudable que la condición y el carácter adquirido por la población nativa Los sistemas organizativos de la población nativa
no garantizaban por sí
del distrito, difería de las que conformaban las encomiendas peruanas. mismos la prestación de ningún tributo. Sin "hacienda
dispersión territorial, y desconodendo la obediencia propia", acostumbrados a la
que se debe prestar a todo
conquistador, los pueblos encomendados sólo podían
Por lo tanto, las formas de usufructuar de la mano de obra indígena también da constante de los vecinos feudatarios, dar utilidad con la presen-
siguieron caminos diferentes, aunque siempre bajo el sistema de la encomienda y las permanentes manifestadones de
fuerza,

La permanencia del asiento hispánico dependió de la voluntad de un puñado La relación inidal entre el encomendero
de hombres, cuvo único incentivo fue el aprovechamiento que pudieran obtener y los indios de su repartimiento, se
establedó mediante partidas gueneras. Esas malocas,
del trabajo de la población nativa. Asi lo comprendieron los gobernadores del utilizadaspara obtener provisiones, se continuaron que al comienzo fueron
Tucumán y la Audiencia de Charcas De allí que ambas autoridades consintieron empleando para concretar las
encomiendas, y para que la franja sodal de europeos no
la distanda entre las prácticas locales de losencomenderos y lasnormas fijadas por también algunos indígenas de servido En 1588,un encomenderos obtuviera
el Estado español; los primeros, refrendando hechos consumados; y la segunda, del Tucumán autorizó a los soldados sin feudo a mandamiento del gobernador
demorando actos administrativos de control, tan habituales en otras latitudes de servirse de esos nativos "como de
yanaconas", y los tenientes de gobernadores fueron
su territorio los encargados de otorgar las
licendas para maloquear.
La mayoría de las mercedes de indios se originaron en las primeras expedi- La necesidad de la presencia permanente
dones que recorrieron el territorio El empadronamiento "por noticia" y la movili¬ del feudatario para garantizar la
prestaciónde servicios, fue también una delas
dad territorial de los pueblos indígenas, llevaron a induir en las cédulas de razones por lasque en el distrito de
Córdoba no hubo encomiendas bajo el dominio directo
encomienda referencias vagas sobre la ubicadón geográfica de los poblados, La de la Corona;y cuando un
repartimiento quedaba vaco, los gobernadores se
misma imprerisión se empleó al anotar los nombres de los caciques apresuraban a depositarlos en
algún vecino.

En ningún caso se determinaba el número de indios tributarios que abarcaba Pedro Sotelo Narvaez señalaba que en 1582, en la jurisdicción
cada pueblo; y una fórmula dejaba librada a la voluntad del vecino feudatario el de 6,000 indios sirviendo a cuarenta vecinos se contaban más
tributo que éste recogería: "hasta tanto lasautoridades tasen a los indios, los encomen¬ debían moverse en medio de una población encomenderos. Esos pocos europeos
nativa cuyas formas organizativas,
deros percibirán lo que los indígenas buenamente y sin vejación les pudieren dar", por sí mismas, no podían dar una respuesta
colonia] requería. favorable a la sujeción que el orden
En las décadas siguientes, ninguna de esas impredsiones fue corregida. Las
cédulas de encomienda sobre repartimientos vacos se remitieron a copiar o a Exteriorizandola percepciónde su época, los
mendonar la cédula del antecesor; y la tasa del tributo tuvo un destino semejante , conquistadores señalaban en sus
documentos: "es gente tan bestial, que nitiene sujeción de
gobiernan por ellos como se hace en el Peni". De allí caciques, niles obedecen, nise
El control efectivo de los encomenderos sobre la distribución de la población de las aldeas indígenas, la escasa cohesión
que, frente a la falta de excedentes
orgánica permanente, y sobre todo la
indígena, se manifestó en los cambíosque introdujeron sobre el reparto que habían ausencia de una autoridad gestionaría en el
estableado las primeras encomiendas. En el caso de los litigios judidales, adudendo interior de cada poblado, los enco¬
menderos utilizaron a aborígenes de confianza, procedentes
la "pobreza de la tierra" y losaltoscostos del trámite en la cabecera de la Gobernación Virreinato. de otras regiones del
o en la Audiencia de Charcas, los vecinos convenían arreglos en los que partian y
repartían a los poblados indios Agreguemos al respecto los traspasos por dotes, En el lenguaje cotidiano de la época, los
"yanaconas". Su aptitud para desempeñarse denominaban genéricamente como
como pobleros en las encomiendas, se
328
329
derivaba de la experiencia que habían adquirido durante largos años de servir a siguiera en el Tucumán un camino diferente al de las zonas centrales del Virrei¬
los españoles en expediciones o en heredades. Esos sirvientes hispanizados que nato,
entraron a la región acompañando a la hueste, oficiaban en ocasiones como
intérpretes; en especial cuando, por su origen sanaviron, podían comprender los Las reformas toledanas tuvieron como objetivo extender el poder del Estado y
dialectos locales, establecer un sistema fiscal que dirigiera parte de losexcedentes hacia la Corona.
El punto de partida fueron los informes económicos y de población, recogidos
Instalados en las aldeas, fueron los encargados de asegurar la afluencia de durante la visita general que se inició en 1570. Estos permitieron fijar el tipo y el
manode obrahacia la zona urbana,y de dirigir la producciónrural que garantizara monto del tributo de cada uno de los grupos étnicos abarcados. Conjuntamente,
el tributo. Facultados para llevar armas, actuaron como verdaderas prolonga¬ se ordenaba la reducción en pueblos de las comunidades indígenas, y su organi¬
ciones de la autoridad de los feudatarios En ese sentido, cumplieron algunas de zación en repartimientos dirigidos por un kuraka
las funcionesque enlaszonas centrales delVirreinato recayeronsobreloskurakas
El sistema se articulaba en el corregidor de indios, encargado de percibir el
Con el transcurso de los años, y en tanto la población nativa se adaptaba a los
tributo que periódicamente los señores étnicos de su distrito acercaban a la
requerimientos delorden colonial, fueron reemplazados por pobleros o mayordo¬
mos españoles, particularmente en aquellas encomiendas cuya producción se cabecera del Corregimiento,
asociaba al comercio interregional. Luego de cubrir costos administrativos —tales como los que insumían la
doctrina, la Iglesia, los funcionarios estatales y los kurakas principales—, y de
prever fondos para obras de beneficencia y cajas de comunidad, el resto de la
Aunque no hallaron ni metales como en Cajamarca, ni encomiendas rentables recaudación tributaria era dirigida hacia la Corona y el encomendero.
como las del Cuzco; y a pesar de que el mito deLos Césares o Trapalanda se había
desdibujado; a la vuelta de cuarenta años, los españoles del distrito prosperaron La aplicación de las reformas toledanas, exigía una relación estrecha entre
En una sola vida, el sector social de los encomenderos logró afirmarse
tributo y población indígena.De allí que los corregidores fueron los encargados de
económicamente. llevar un padrón de su distrito, y los kurakas podían solicitar una retasa de las
comunidades a su cargo. Esto derivó en la acumulación de una amplia documen¬
La clave de su éxito consistió en colocar en labase de esa prosperidad al trabajo tación burocrática, compuesta por informaciones administrativas y en una buena
indígena. Para ello generaron un reordenamiento de la población nativa: reduc¬ cantidad de procesos judiciales iniciados por los ayllus para reivindicar sus
ciones en pueblos,introducción de nuevos cultígenos y de desconocidas especies derechos W0).
animales domesücables; y tuvieron como eje del ordenamiento colonial el trabajo
compulsivo del indígena,sin retribucióndejornales, y bajodiferentes prestaciones Las reformas separaron a los indios de su encomendero. Este último, conver¬
de servicios.
tido en un rentista o en un pensionado del Estado colonial, recibía una parte
importante de la tasa de su repartimiento en monedas metálicas o en productos
comercializables.

En 1576,las Ordenanzas del gobernador Abreu establecieron el marco legal del El sistema de la mita toledana contribuyó a esa separación de los indígenas y
tributo de encomiendas para toda la Provincia del Tucumán. su encomendero. A través de ella, una parte de lostributarios de cada comunidad
era reclutada por el Estado para ser empleada en diferentes empresas coloniales.
Elmismo Estado se encargaba de destinar los cupos de mano deobra y de fijar sus
Esas normas, que no se alteraron hasta 1612, autorizaron a los feudatarios a salarios,
obtener losbeneficios de sus repartimientos a través del servicio personal.A pesar
de que en sus b'neas generales recordaban el espíritu de las Ordenanzas del virrey
Toledo, la normativa de Abreu posibilitó que la institución de la encomienda 40) Pease, 1978:46 y ss.

330 331
Í7

trabajo a otros europeos,y nunca


miembrosnonecesitaron vender sus productosy "No tienen cosa propia en
En cuanto a la población indígena, aunque sometida a fuertes presiones
tributarias, logró mantener por un tiempo la autonomía económica de las
participaron en forma directa de la economía mercantil.
ningún camino a dejar de hacer ¡a
comunidades, ingresando en el mundo mercantil, y a veces acumulando exceden¬ que poderse ocupar, porque no tengan ocasión por
hacienda del encomendero" <4a.
tes nada desdeñables. En su seno se fue dibujando un sector de kurakas y
otras diferencias con
funcionarios indios, que formaron parte de las élites coloniales locales (41). La ausencia de una tasa en dinero y productos, estableció eltributo indígena
en
lasencomiendas peruanas .Por una parte,las modificaciones
fijaba a sus indios de
Contemporáneas a las Ordenanzas de Toledo, las Ordenanzas de Abreu dependieron de la orientación productiva que el feudatario A ello debemos
propusieron otros mecanismos para el tributo de las encomiendas, y contribu¬ servicio, y no de una tasación de las autoridades administrativas de indios
el número
yeron para que los principales actores de la trama social, desarrollaran caracteres agregar que,cuando eldescenso demográfico hacía disminuir
j diferentes a los de las zonas centrales del Virreinato. de servicio, los vecinos recurrían a las malocas
sobre los pueblos que aún no
i
• J estaban "pacificados".
,| A pesar de ser coincidentes en el tiempo, lascircunstancias históricas de ambas
mantuvo un poder
reglamentaciones fueron distintas. Ninguna visita general precedió a la normativa Lejos de ser un pensionado de la Corona, el encomendero ejerció su control
manera
de Abreu: el territorio de la Gobernación no estaba aún pacificado como para un de decisión directo sobre su repartimiento; de igual
en 1607, el gobernador Alonso
acto administr ativo de tal envergadura Por otra parte, sus disposicionesparecie¬ sobre mayordomos,pobleros y yanaconas. Cuando una tasa y co¬
ron surgir de un acomodamiento entre lasdirectivas emanadas del virrey Toledo, de Rivera pretendió introducir modificaciones —posiblemente la tierra",
"se perderá
y las posibilidades concretas en los modos de extracción colonial. rregidores—, los vecinos objetaron sus intenciones porque ni haciendas <43).
alegando que los indios sin encomenderos no harían sementeras
En efecto, mediante un tributo como el del Perú, lasencomiendas del Tucumán en las Ordenanzas
no podían ser rentables para la Corona y para el encomendero. Sólo estos últimos Los tiempos y losmodos delservicio personal establecidos
Esas inobservancias contribu¬
podían obtener beneficios a través de la explotación directa de la mano de obra de Abreu, nose acataron en el distrito de Córdoba.
nativa,en relaciónal de las
indígena: "no tienen los vecinos encomenderos más de tan solamente elservicio persona! yeron a diversificar aún más el destino de su población
de los naturales". De allí también la ausenda en las Ordenanzas de Abreu, de comunidades étnicas de las zonas centrales del Virreinato.
disposiciones que orientaron posibles excedentes hacia las arcas fiscales del debía utilizar en forma
Estado español Las normas de Abreu disponían que el feudatario
su repartimiento, a lo que
rotativa la fuerza de trabajo indígena de los pueblos de
j manera que su analogía con
Las Ordenanzas para el Tucumán se limitaron a fijar los tiempos y el modo de se denominaba "mita ordinaria del encomendero". De tal de rotación que
la mita toledana, residía sólo en el nombre y en el mecanismo en la saca de
trabajo de los indios de encomienda. Los feudatarios —y varios gobernador es
insistieron en llamarlas "la tasa del gobernador Abreu".
— "desorden
implicaba. Además, su continuo incumplimiento —el demográfico de los
indios"—, fue una de las causas más visibles del descenso
sobre las que todos
poblados; y por lo tanto, también las únicas contravenciones
j Enel caso dela jurisdiction de Córdoba, los frutos que el encomendero obtenía w onhomaHnrps del Tucumán coincidieron en dirigir sus denuncias.
de sus indígenas, dependían de las prestaciones laborales que exigiera. De esta
manera, elservicio personal ligó estrechamente a los indios del repartimiento con
su feudatario; y la comunidad doméstica nativa no tuvo ni siquiera una relativa
autonomía. El dinero no sustituyó al tr ibuto en servicio personal, por lo que sus
en el distrito de Córdoba y en
42) A los efectos de comparar los rasgosdiferenciales de la encomienda

If
el valle del Jaquetepeque; en especial,
el Perú, resulta de interés el estudio de Manuel Burga sobre
la rentabilidad de la encomienda de San Pedro de Lioc (Burga, 1976: 71 y ss.)
su análisis sobre
43) Ese control directo sobre el repartimiento, se evidencia en la
ausencia de juicios contra los mayordo¬
41} Sieve Stem, en su estudio sobre los pueblos indígenas de Huaxnanga, dedica un capítulo al análisis el manejo de Sashadendasdel encomendero.
moso pobleros, basados en posibles irregularidades en
detallado de ate tema (Stem, 1986: cap 4)
333
Por su parte, la "mita de -plaza", ordenada por Ramirez de Velazco para que los
continuaron demostrando la propiedad a través de las viejas mercedes, asignadas
no encomenderos pudieran acceder a los servicios laborales indígenas en la
en muchos casos por los tenientes de gobernadores (t4).
ciudad, nunca originó una oferta de mano de obra abundante. Al mismo tiempo,
los jornales de los indios alquilados mediante ese procedimiento,pasaban direc¬ Evidentemente,las prácticas y el conjunto de ordenanzas y mandamientos que
tamente a engrosar los beneficios de sus feudatarios.
se debían aplicar en la jurisdicción de Córdoba, generaron rasgos diferentes a los
de las zonas centrales del Virreinato, En ese contexto, la institución de la en¬
Mientras tanto, los miembros de las aldeas indígenas presenciaban la desva¬ comienda y el destino déla población nativa, también siguieron caminos diversos.
lorización de las funciones de sus caciques. Aunque las Ordenanzas de 1576 los
habían eximido de las prestaciones laborales, en la práctica la prohibición no fue En los hechos, se podría afirmar que en el distrito se habían encomendado
respetada. En el esquema tributario que introdujo la conquista, la figura de los indígenas y no caciques "con los indios a él sujetos", como señalaban las cédulas; y
caciques se iba desdibujando para dar paso a yanaconas y pobleros. en cuanto a las relaciones interétnicas dentro del ordenamiento colonial, difícil¬
mente se hubiera logrado diferenciar la existencia de una "república de indios" y una
Ta] vez la única disposición de las Ordenanzas deAbreu que fue aplicada en la
"república de españoles ",como lo pretendieronlas Ordenanzas de Toledo en elPerú
(45),
jurisdicción de Córdoba, es la referida a la reducción en pueblos; un mecanismo
que permitió solucionar el problema de la dispersión de los asentamientos Tanto las prácticas como las normas, contribuyeron a afianzar la prosperidad
indígenas pertenecientes a un mismo encomendero. y el poder de los vecinos feudatarios. Durante esos primeros cuarenta años, la
encomienda fue la base de una empresa española floreciente, que se iniciaba con
Sin embargo, las reducciones locales carecieron de las "tierras de comunidad", la comercialización del tributo indígena y continuaba con un largo y complicado
que en el Perú estaban destinadas a producir para el tributo colonial. eslabonamiento de actividades mercantiles

Acorde con la forma de extracción que se utilizaba en el distrito, el encomen¬ A través del servido personal,los encomenderos pudieron dirigir el trabajo de
dero distribuía terri torialmente sus haciendas, sin preocuparse porlos límites que sus indígenas según las exigencias del mercado; y cuando se abre la ruta Buenos
pudieran oponer supuestos derechos indígenas a las tierras., A partir de esta Aires-Potosí, los vecinos que obtuvieron mayores ganancias con esa expansión
premisa, la distinción legal entre encomienda y propiedad del suelo fue siempre comercial, fueron los que poseían las encomiendas más importantes
incierta,
En todo el período, la rentabilidad del distrito se asentó en los excedentes
La tendencia de los feudatarios a apropiarse de las mejores heredades para ruralesde sus repartimientosy en su participación en los tráficos comerciales. Por
cultivos y pastoreo, se vio favorecida por el sistema de reducción en pueblos y el lo tanto, el sector social más activo fue el de los encomenderos, en cuyas manos
descenso demográfico indígena; mientras que la merced de tierras era el instru¬ estaban las zonas productivas y el trabajo indígena.
mento para llegar a la propiedad legal.
Al finalizar la primera década del siglo XVII, losencomenderosde Córdoba se
habían constituido en un poder local, que aparentemente no se subordinaba a las
Como contrapartida, los indígenas no obtuvieron el dominio privado de
tierras. En el mejor de los casos, sólo lograron un "amparo" para permanecer en el
sitio en el que estaban asentados, en mérito a los beneficios del encomendero. 44) De igual manera, tampoco es aplicada la Real Cédula de 1/11/1591, que originara una visita y
composición general de tierras en el Perú Esta fuerecibida por la Audiencia de Charas y pregonada
Hastala jurisdicción de Córdoba no llegó la aplicación de la Real Cédula de 10 el 5/12/1592 (en: A.N B., serie Reales Cédulas, nro. 426)
45) Una lectura de la investigación de Efraín Treiles sobre la encomienda de Lucas Martínez Vegazo,
de enero de 1589, por la que se confería sólo al gobierno central la facultad de
clarifica las características que diferenciaban a las encomiendas peruanas, en elsentidoseñalado en
conceder tierras, y se anulaban las otorgadas por los cabildos. Durante el siglo este párrafo: en lamedida en que en Perú se encomendaban caciques y no indígenas, el autor puede
XVn, y aún en el transcurso del XVm, los litigantes en los juicios por tierras fundamentar sus inferencias sobre la composición étnica de losvalles deAzapa y Lluta,y la amplitud
de regiones que los kurakas controlaban (Treiles, 1982: 158 y ss ).

334 335
ni
disposiciones emanadas de los centros administrativos coloniales .Por entonces, el un debilitamiento de su poder, lo que se evidencia es una demora en iniciar las
gobernador Alonso de Rivera se lamentaba porque "están los vecinos tan enseñoreados acciones pertinentes para incorporar estos territorios a la reorganización colonial
y hechos dueños..." que se había lanzado en 1572.
La situación de toda la Provincia del Tucumán era bien conocida por la Enese sen tido, dada la condición debienes relictos en la que quedaba elsistema
Audiencia de Charcas y aún por las autoridades peninsular es. A partir de los de servicio personal del indígena, y la ausencia de una tasa del tributo en estos
informes del gobernador Ramirez de Velazco -quien entre otras cosas, señalaba territorios, resulta incierta la voluntad de la Audiencia de poner a derecho a la
que "como no hay tasa no hay orden"-, numerosas cartas habian sido elevadas Provincia del Tucumán, y por lo tanto a la jurisdicción de Córdoba .
advirtiendo sobre la necesidad de un control más estrecho.
Hacia 1610, un balancede lo obtenido hasta entonces, mostraba que los rasgos
Ni guerras civiles, ni rebeliones indígenas habian obstaculizado —como en particulares del desarrollo colonial en la región, habían permitido dar cumpli¬
Perú—,una visita general y una tasa del tributo En cambio, constantemente se miento a los objetivos planteados por la Audiencia: la organización de un espacio
mencionaba como impedimento para realizarlas la "pobreza de la tierra" y la relacionado con las rutas y los tráficos atlánticos.
distancia geográfica que separaba a estas regiones de los centr os administrativos
Además, y a pesar de la "pobreza de la tierra", los conquistadores y pobladores
Cuarenta años después de la reorganización colonial iniciada por el virrey habían prosperado y adquirido una posición prominente. Un recorte en la recom¬
Toledo en 1572, la Provincia del Tucumán ostenta dos bienesrelictossobresalien¬ pensaque obtenía el sector social más activo —es decir, la aplicación estrictade las
tes reformas toledanas—, hubiera dificultado la continuidad de la permanencia
hispánica en estas zonas marginales.
Por una parte, el servicio personal de los indígenas que había sido quitado en
el Perú desde la visita general del mencionado virrey; y que, sin embargo, fue Las formas utilizadas para obtener beneficios de la mano de obra indígena en
mantenido en la Provincia del Tucumán, porque "aquí no hay otra cosa de que echar la Provincia del Tucumán, se presentaban como un anacronismo en el contexto
mano". general del Virreinato. Por las razones expuestas, durante cuarenta años se
consintieron esos procesos y el tránsito de caminos singulares. Lascondiciones de
Al mismo tiempo, estaba la ausencia de una tasa del tributo de encomiendas la población nativa eran diferentes a las del Perú; así lo comprendieron las
Si bien los vecinos se esmeraron en asignar tal nombre a las Ordenanzas de Abreu, autoridades coloniales.
su incumplimiento las alejaba aún más de las formas de extracción colonial que se
habian fijado para las otras regiones del Virreinato. Como si esto no fuera suficiente, cuando se intenta una remisióntardía a través
de las Ordenanzas de Francisco de Alfaro, éstas no tuvieron lasconsecuencias que
Ciertamente, los encomenderos se opusieron en forma permanente a toda en su aplicación esperaba el oidor de la Audiencia de Charcas.
intromisión que pudiera recortar su manejo sobre la mano de obra indígena. No
obstante, esta actitud no puede ser enmarcada dentro de la erosión del poder del
Estado, o de la corrupción e incompetencia que por entonces se insinuaba en las
zonas centrales del Perú (46),
En la medida en que el afianzamiento del orden colonial quedó en manos de la Los efectos del "desorden" y los "excesos":
iniciativa de los vecinos encomenderos, el Estado español no tuvo hasta principios más rupturas que permanencias.
del siglo XVII un poder efectivo directo sobre la región. Por lo tanto, más que de
Como sucedió en el resto de la América Hispana, las fuerzas de cambio que
introdujo la conquista española tuvieron sobre la población nativa los efectos de
46) Cír Kenneth Andrien, 1986. una ruptura histórica.

336 337
T f

La magnitud de sus consecuencias en el tejido social indígena, se observa a t\ administración española no tuvo necesidad de hacer cálculos más precisos, tales
través de una constatación significativa: el descenso demográfico. como los que generaron las tasas y retasas del Perú.
Sin embargo, aunque la crisis poblacional es un hecho innegable, los datos A veces, losinformesque losgobernadores del Tucumán elevaban alrey,solían
cuantitativos constituyen unodelossilencios documentales que más lamentamos. contener algunas cifras globales. Así, en 1590, Ramirez de Velazco calculaba en
más de 12.000 losindiosde encomienda de! distrito; y al acabar el siglo XVI, otro
En efecto, el aparato estatal español extendió su acción fiscalizadora particu¬ gobernador, Mercado de Peñaloza, señalaba que "¡os indios se van acabando a
larmente sobre aquellas regiones que tenían un interés especial para la Real priesa", y que era una buena encomienda la que llegaba al número de 100
Hacienda. Es por eso que en el Perú, a través de las visitas, la Corona obtuvo las tributarios
evidencias estadísticas necesarias para asegurar el tributo y la mano de obra que
requería la producción minera. En 1607, Alonso de Rivera apuntaba una cifra definida: 4.114 indígenas
repartidos entre sesenta vecinos. Agregaba además que "al día de hoy no ha quedado
En cambio, el distrito de Córdoba no subsidió a las arcas reales. Sus reparti¬ la décima parte" de los indios que poblaban la Gobernación. Seguramente, esos
mientos no podían sostener a los señores feudatarios, y a la vez derivar rentas datos surgieron de las inspecciones realizadas por aquellos ejecutores de las
hacia la Corona. Tampoco hubo encomiendas reales, porque la producción de ex¬ Ordenanzas de Abreu.
cedentes sólo se garantizaba con la presencia constante del encomendero.
Por otra parte, comparadas con las del Perú, las dos visitas que hemos
El estado colonial tuvo pocos motivos para fijar su atención sobre una región | analizado en páginas anteriores, tuvieron objetivos más limitados y su informa¬
que no estaba en condiciones de orientar parte de sus rentas hacia la Real ción demográfica fue más imprecisa,
Hacienda. S En 1598, la finalidad era controlar los "excesos" de los encomenderos, que
Sobre el volumen demográfico indígena en el momento de la conquista,no hay conducían a la disminución de la mano de obra indígena; y en 1616, el propósito
fuentes que den una respuesta precisa. Lorenzo Suarez de Figueroa sugería "más consistió en verificar el cumplimiento de algunas de las Ordenanzas de Alfaro-
de veinte mil indios en veinte y treinta leguas de distrito"; la Relación de 1573 Además, las características de los funcionarios que llevaron a cabo ambas visitas,
mencionaba "más de seiscientos pueblos", con casi "treinta mil indios" en losvalles y y los procedimientos utilizados para confeccionar las listas, motivanla certeza de
serranías; y el cronista PedroLozanoseñalaba "más de cuarenta mil" indígenas. En que en los dos casos se omitieron indígenas de las encomiendas empadronadas,
todos los casos, la falta de precisiónse extiende también al territorio que realmente
es abarcado en cada una de esas estimaciones globales í47>. A pesar de esas falencias, los datos conservan su importancia;ya que permiten
observarlos síntomas del descenso déla poblaciónnativa,así como la disminución
Para el período inmediato a la fundación de la ciudad, las fuentes no son más de su fecundidad.
estrictas. Las cédulas de encomienda nunca incluyeron el número de tributarios;
y al no existir una relación estrecha entre tributo y volumen demográfico, la Como ejemplo, mencionemos que en la visita de 1598, el teniente de goberna¬
dor empadronó a 227 indígenas que prestaban servicio en la vivienda urbana de
17encomenderos; y en 1616-1617,el número descendió a 152 nativos que desarro¬
llaban iguales actividades, esta vez repartidos entre 28 vecinos.
47) Aún con mayor abundancia documenial para el tema, los cálculos sobre la población global en
América Hispana almomen¡odeiaconquista,siguensiendoaproximadosy varían según losautores
(cfr Cook y Borah, 1960; y Rosenblat, 1945) '

'
'
'

En cuanto al descenso demográfico que sigue a la irrupción española, los diferentes autores
discrepan sólo en el grado de la crisis, A manera de ejemplo, señalemos que para las zonas centrales
del Virreinato del Perú,Noble D. Cook ha calculado lasasde despoblamiento de más del 50 % para
el período 1520-1620 (Cook, 1981). El mismo autor, en otro de sus artículos, señala las dificultades e 48) Pan el año 1586, Jorge Comadrón Ruiz calcula en 3.000 los indígenas encomendados en Córdoba
imprecisiones de las fuentes para este tema (Cook, 1982) (Comadrón Ruiz, 1969:31).

338 339
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Por otra parte, el sistema de encomiendas de la jurisdicción no se asentó sobre /


Felipe de Soria, o Blas de Peralta.La mismavisita de 1616-1617,registrópara cada
la reproducciónbiológica de la comunidad aborigen. En ese sentido, las prácticas uno de ellos sólo un número pequeño de indígenas, que a veces no excedía los 25
que hemos reseñado conducían necesariamente a la disminución de la fecundidad tributarios.
de los indios de repartimiento. Las dos visitas analizadas, coinciden en destacar
losalcances de la crisis demográfica: ni el conjunto empadronado en 1598, ni el de Cuando eneldistrito habíantranscurrido sólo cuarenta años desde la irrupción
1616-1617, podian garantizar su propio reemplazo. española, se hada evidente el agotamiento de buena parte del sector encomen¬
'
r. "
dero. Sus causas no estaban en los límitesque las Ordenanzas de Alfaro pretendie¬
En la segunda década del siglo XVH, difícilmente se hubieran podido repro¬ ron imponer sobre el monopolio de la mano de obra nativa, sino en el sostenido
ducir las mismas condiciones que generaron la prosperidad de ios encomenderos descenso de los indios de repartimiento.
era el
en las décadas anteriores La disminución de los indios de repartimiento
obstáculo principal. Por lo tanto, esa crisis demográfica indígena tuvo una reladón estrecha con la
dedinación del régimende encomiendas como institutiondominante;y esuna de
Entre 1610y 1620,eran pocos los feudatarios que aún podían exhibir encomien¬ las variables que concurrieron al cambio en la orientación productiva del distrito
das rentables. El mismoTristán de Tejeda, unodelos más acaudalados, reunía casi m
500 indígenas adultos en su obraje de Soto; pero en ese número estaban com¬
prendidos los nativos de seis pueblos que fueron reducidos en el lugar, y una
cantidad no determinada de indígenas que pertenecieron a la encomienda de Dentro de las causas que motivaronel descenso inicial de la población nativa
Lucía de Grados y Juan Alvarez de Astudillo. Aún así, la fecundidad de los en las Sierras de Córdoba, no se incluyeron guerras de
conquista como en Chile,
matrimonios que tenían hijos —menos del 50 % de las parejas—, señalaba o de sucesión y civiles como en el Perú,o el trabajo en las minas
como en las zonas
claramente que en los años venideros, el volumen demográfico de Soto decaería nucleares del Virreinato.
peligrosamente m.
En cambio, su explicación se encuentra en el nexo que se estableció entre el
Jerónimo Luis de Cabrera —descendiente del fundador—, y Alonso aDíaz sistemadelservicio personal,lashambrunasy lasepidemias, que en algunos casos
Cavallero, eran otros de los encomenderos prósperos. Aunque sin llegar las se acentuó debido a fenómenos climáticos.
cifras de Tristán de Tejeda, ambos podían ostentar todavía un buen número de
aborigénes de repartimiento, al haber incorporado en sus reducciones a indígenas Entre 1583 a 1586, una prolongada sequía abarcó buena parte de la Provincia
"de las pampas". La ubicación de sus estancias, en las llanurasde los ríos Tercero y del Tucumán; y el gobernador Ramirez de Velazco informaba al rey que, debido
Cuarto, había facilitado la apropiación de esa mano de obra. a la hambruna, "los indígenas se han ido a los montes y saltean
los caminos". En
Córdoba, a estos infortunios se agregaron sucesivas plagas de langosta durante
Encambio, no sucedía lomismo con la mayoría delas encomiendas deldistrito cinco años.
Si bien en los primeros años sus beneficiarios pudieron paliar los efectos de la
disminución de los indígenas, agregando otros obtenidos en las malocas, hacia
1610 este recurso se había agotado en la zona serrana
50) Tanto la Escuela de Berkeley, a tía vés de
Woodrow Borah, como Charles Gibson, han relacionado
estrechamente el descenso demográfico indígena en Nueva España, con modificaciones
Por esa época, las transacciones comerciales con productos de la tierra, no estructura colonial de ese Virreinato. El primero, señalando una
en la
depresión secular de origen
incluían los nombres de encomenderos que antes fueron poderosos, tales como los demográfico; y el segundo colocando a las epidemias como generadoras en sus
consecuencias, de
de Francisco Lopez Correa,Juan de Mitre, Francisco Mejía, Alonso de Salvatierra, esas modificaciones (Borah, 1951; y Gibson, 1964)
Es necesario señalar que al menos entre 16KM620, en la jurisdicción de
Córdoba no se encuentran
los síntomas de una depresión económica, sino un cambio en la orientación
va acompañado por una diferenciación social más evidentedentro
productiva;este cambio
del sector europeo, resultado de
49) Nicolás Sanchez Albornoz parece imputar este descenso en la fertilidad, a un "desgano vital"; y la declinación del grupo encomendero En ese punto de inflexión
concurren muchas variables, y no
citando trabajos de otros autores, refiere una situación igual en Nueva Granada y Santo Domingo sólo el descenso de la población indígena Los futuros estudios
sobre el siglo XVII en el distrito,
(Sanchez Albornoz, 1977: 74 y ss.) permitirán conocer con mayor seguridad las características de esta
etapa colonial en la región.

340 341
El sistema de servicio personal colocó en situación precaria a la economía de población nativa "va en disminución" y envió a los ejecutores de las Ordenanzas de
subsistencia de lascomunidades indígenas. En 1585 Juan de Mitre informaba que Abreu, quienes encontraron a los pueblos "disipados y destruidos Una situación
sus indios de las vertientes del río de San Juan andaban fuera de los pueblos que el distrito de Córdoba compartía con el resto de la Provincia del Tucumán, y
porque estaban necesitados de comida. El cacique Cachanaacan de la zona de que era resumida de esta manera por el oidor Alfaro: "asíse ve claro que donde más
Salsacate, daba cuenta que sus indios "se han dividido por hambre", y que algunos hay de servicio personal, menos hay de vidas de indios ni de su multiplico".
murieron; añadía que el cacique Ambulonagua había perecido de hambre junto
con sus indios, y otro tanto sucedió con el cacique Pagamishoypana, de cuyo ¡ A las hambrunas y agresiones epidémicas—particularmente fuertes en las dos
pueblo sólo quedaban cinco indígenas. En 1587, los sacerdotes jesuítas Barzana y primeras décadas—, y a las secuelas delsistema de servicio personal que señalara
Ortega, encontraron a los nativos de las sierras rebeladosy "afligidos por elhambre" Alfaro, debemos agregar las prácticas locales que describiéramos en capítulos
anteriores, especialmente las referidas a la "saca" de indios.

En ese mismo año, Ramirez de Velazco informaba sobre una epidemia que Los reclamos de gobernadores como Pedro Mercado de Peñaloza, Alonso de
mató "a la décima parte" de los indígenas. Desde entonces, las actas capitulares de
Rivera, y hasta las del mismo oidor, recaían con insistencia sobre las levas de
Córdoba comenzaron a señalar continuas enfermedades que acometían simul¬
indígenas para realizar trabajos fuera de sus pueblos. En ese sentido, las "chinas"
táneamente a gran número de nativos: en 1590, "de cámaras desangre"; en 1592, de
empleadas en la vivienda urbana, los varones aplicados al servicio delos trajines,
viruelas y tabardete que "despobló a los indios A estas se agregaban pulmonías
y aún la venta demuchosde ellos en Potosí oen Charcas, eran mencionados como
infecciosas recurrentes entre los meses de julio y octubre ea.
la causa fundamental de un descenso demográfico sostenido.
El tributo en servicio personal, destruyó la capacidad de la comunidad nativa
para cubrir sus necesidades alimenticias. En los hechos, sus miembros eran i Durante todo el período de la ampliación de la producción mercantil de las
campesinos indios produciendo en tierras españolas, según las directivas de los encomiendas, el uso masivo de la fuerza de trabajo indígena evitó a los españoles
encomenderos. los gastos en dinero y fue el sostén de su prosperidad. Pero el sistema llevaba
también implícito el deterioro acelerado de la reproducción biológica de la
Al no tener control sobre el excedente, en épocas de escasez debían recurrir a comunidad nativa.
la dispersión, o depender de la buena voluntad del feudatario. Así lo sugiere en i.
1592 Juan de Ludueña, cuando señalaba que no podía presentar sus indios de Sin embargo, los efectos de la conquista española sobre las comunidades
Ciquigasta ante el teniente de gobernador, porque estaban "desparramados" bus¬ indígenas, fueron más intensos que lo que puedan señalar las cifras de la crisis
cando sustento; además, el yanacona que había enviado a recogerlos, sólo encon¬ demográfica.
tró a dos o tres de ellos, que huyeron ante su presencia ®>.
En la estructura colonial de la jurisdicción, no hubo margen para la reproduc-
1
Las denuncias sobre el descenso demográfico indígena, eran elevadas conti¬ ciónde lasformas económicas, sociales y políticasdelos pueblos indios,nisiquiera
nuamente por autoridades civiles y religiosas. "Se van muriendo a grande priesa", bajo un régimen de relativa autonomía.
advertía el sacerdote Francisco de Angulo. Alonso de Rivera constataba que la
La pérdida de labase territorial de las aldeas, nose expresó sólo a través de las
m mercedesde tierras que se otorgaban a algún vedno europeo. Pretextando aplicar
51) Carta al rey del gobernador Ramirez de Velazco, de 10/12/1586 (op at );AHPQ esa- 1, leg. 1,exp.
.: el sistema de reducción en pueblos, los encomenderos dispusieron migradones
4; Pedro Lozano, 1754-1755,1: 29, Los datos climáticos y su relación corrías epidemias, en: Apéndice }¿ compulsivas, tales como las que proveyeron mano de obra a la agricultura
al final de esta obra. Sobre el complejo trabajo—dieta— epidemia, cfr. Mellafe, 1965. j comerdal que se desarrolló en las llanuras occidentales.
52) Adas capitulares de 1/10/1590,3/12/1590 y 2/3/1592 (op. dt). Sobre este tema aún sigue vigente
el trabajo de Félix Garzón Maceda sobre la historia de la medicina en Córdoba (Garzón Maceda,
1917).
Por otra parte, las encomiendas, las dejadones, los arreglos de pleitos, y hasta
los traslados colectivos, no respetaron la pertenenda de los individuos a sus
53) AHPQescr 1,leg. 4, exp. 2.
i
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grupos étnicos. Su secuela fue el derrumbe de las estructuras sociales de paren¬ Además, frente a la abundancia de litigios promovidos por las comunidades
tesco, que envolvían los principios de la organización social y política. indias en las zonas centrales del Perú, asombra la omisión casi total de reivindica¬
ciones formales hechas por los nativos de la jurisdicción de Córdoba Dada la
Fragmentados, debilitados en el númerode sus miembros,y habiendo "mudado cantidad de "excesos", no pareciera que la ausencia de demandantes indígenas
de temple", sus actividades agrícolas debieron desarrollarse en tomo a especies tuviera como causa la falta de motivos para reclamar'.
vegetales y animales desconocidas hasta entonces. Desde la irrupción españolaría
siembra del maiz ocupó un lugar secundario, y el espacio de llamas y guanacos fue Por último, señalemos que el problema de la lengua actuó como un multiplica¬
empleado en la ganadería de ovinos y vacunos. dor en esas condiciones de marginalidad. Por lo menos hasta 1620, el idioma
español permaneció desconocido para el conjunto de indios de encomienda; en
La producción excedentaria de las empresas coloniales, exigió a los indígenas tanto que los europeos, en su comunicación con la "república de indios", no
de encomienda un tiempo de trabajo más intenso y dilatado que el de la antigua recurrieron a ninguno de los dialectos locales Todavía por entonces se practicaba
economía de subsistencia; peroel aumento en la productividad de la región no los aquella curiosa forma de transmisión de mensajes, en la que intervenían los
benefició. yanaconas intérpretes,y el vehículoerala "lenguageneral del Perú", introducida por
la conquista.
Los conquistadores ignoraron las funciones de los jefes étnicos. Recordemos
como ejemplo: en las cédulas de encomienda, la imprecisión en losnombresde los Rota la comunicación con el pasado, y limitada la información necesaria para
caciques; en las zonas rurales, el emplazamiento de indígenas forasteros —los poder participar activamente en el presente, las consecuencias de la conquista no
podian ser otras que el abatimiento de las fuerzas vitales de la población nativa.

yanaconas ,ocupando su lugar; y en el tributo, la igualdad de obligaciones con
los otros indios de servicio.
Para los indígenas de las Sierras de Córdoba, los efectos de las prácticas
La irrupción española rompió la continuidad del mundo prehispánico en lo coloniales parecieron sumar sus magnitudes en un corto lapso de cuarenta años;
económico, en lo territorial, y en lo étnico. y el descenso demográfico, adquirió la dimensión de un despoblamiento.

La comunicación con el pasado, no corrió una suerte diferente. Como en toda


sociedad ágrafa, en las comunidades indígenas de las sierras la información
cultural era común, y una parte importante estaba en manos de los caciques.
La memoria que aseguraba la reproducción de las formas sociales, fue decre¬ ,o?i* V P,
ciendo en cada uno de los grupos junto con el número de hombres; y el desdi- O , o* .t,- %
bujamiento de las funciones de los jefes étnicos, hizo el resto. H: ?

ü
La población nativa tampoco pudo elaborar sistemas adaptativos solidos
dentro del mundo colonial. Su experiencia no registraba una situación de con¬
quista como la que se produjo a partir de 1573; y los mecanismos de dominio O"
hispánico impidieron que la información sobre las posibilidades de una partici¬ U VV
pación más activa en la nueva etapa, se transmitiera al conjunto de indígenas,

Por una parte, el sistema de servicio personal no dio ocasión para que los
nativos aprovecharan las recientes tendencias económicas; y a pesar de las
intenciones de Alfaro, sus Ordenanzas tampoco lograron que obtuvieran recursos
mediante el alquiler de su fuerza de trabajo.

344 345
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CUADRO N2 1
INFORMACIONES CLIMATICAS PARA LA JURISDICCION DE CORDOBA

AÑO Sequías Inundaciones Plagas Epidemias Hambrunas

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1615
1616 X
1617 ,X X
1618
* Mapa realizado por Gladys E, Sala, Dirección General de Medios Audiovisuales
1619 X X X
1620 (Central) de la Universidad Nacional de Córdoba.

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