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Los caminos del valle bajo del Chillon: reflexiones a partir del Camino Prehispanico de Oquendo Marco Valderrama Rivera’, Gregorio Astovilca Huamani? y Moisés Linares Grados* Introduccién El presente articulo es fruto de las discusiones y plantea- mientos que surgieron en el marco de la temporada de ‘campo 2020 del Proyecto de Investigacién Arqueologica Segmento Norte del Paisaje Cultural Arqueolégico Caminos Oquendo, Sector 1~Callao-Lima, Algunas de estas ideas fueron expuestas en el VII Congreso Nacional de Arqueologia, a partir del estudio de la tecnologia cons- tructiva del camino prehispanico de Oquendo. En estas. lineas discutimos tres aspectos de las construcciones denominadas caminas, murallas, caminos epimurales o paisajes culturales arqueol6gicos —ubicadas en la seccién baja del rio Chillén— con el objetivo de abrir el debate en toro a la explicacién vigente sobre los caminos prehispa- riicos en Chuguitanta, Oquendo y Marquez, desarrollando nuestros planteamientos a partir de tres aspectos centrales: + La metodologia empleada en las Investigaciones & intervenciones en los caminos prehispanicos, Su aplicacién permite entender en buena medida las interpretaciones y los materiales asociados. + Latecnologia constructiva, partiendo de lainterrogante si fue construido en una sola fase constructiva o en varias, lo cual nos levard a entenderla arquitectura de los cami- nos en esta parte del valle durante los periodos tardios, + La funcionalidad y temporalidad de los caminos pre- hispanicos, lo que a su vez conduce a preguntamos " Arqueéloge del PIA-Oquendo, e-mai mvalderramats&@gmal.com 2 Conservador del PIA-Oquendo, e-mail: gregorioastovlea@gmallcom 2 Director del PIA-Oquendo, e-mail: arqueacare@gmai.com sobre la situacién actual de los caminos del valle bajo de Chillén en comparacién a otras expresiones similares en 61 registro arqueolégico. El area de estudio La seccién del valle bajo de Chillén esta ubicada a 80 metros sobre el nivel del mar, con un suelo fértil gracias a los bancos de tierra arcillosa, os canales de irrigacin, los ojos de agua y ls lagunas visibles hasta mediados de la década de 1980; destacando en olla la cadena de cerros Las Animas-Oquendo y el cerro La Regla (Figur) Fgura + Mopa de la margen iqulerda del vale bao de Chilén,ubl- cando os sitios ycaminas etadas, Elaborado por Rodrigo Padi, 529 Figure 2. Camino de Oquendo, Sector 1, segmento suresto Los caminos prehispénicos reportados a partir de las fotos ‘aéreas de 1944 en la seccion baja de la margen izquerda del valle de Chilén# corresponden a una serie de estructuras de diferentes caractristicas y periodos, lo que condo diversas inlerpetaciones y confusiones enlas primeras descripciones. En esta seccién del valle se ha registrado varios segmen- tos del camino prehispénico y los sitios arqueolégicos Cerro Respiro, Cerro Pro, el Palacio de Oquendo y las Huacas de Oquendo, entre otros; todos ellos perte- necientes a los periodos tardios (Agurto, 1983, 1984; Holmberg, 1989; Silva, 1991; Ayala, 2008; Pazos, 2009; Campos, 2010; More, 2014; Raymondi y Mejia, 2014). Finalmente, desde el 2019 y la temporada de campo 2020 se exploré la tecnologia constructiva del camino prehispénico a partir de las excavaciones de un seg- ‘mento ubicado al interior de un cementerio privado en el istrto del Callao, provincia constitucional de Callao, en ‘un drea que formé parte del ex Fundo Oquendo (Figura 2), La metodologia de investigacién Una revisién de las investigaciones sobre os caminos revela ue la melodologia aplicada se ha centrado en el registro de 10s distintos tipos en las regiones de los Andes, generando ‘manuales y fichas (Vitry, 2004; Ministerio de Cultura, 2013, Figura3. Secuoncia de bloques de tapla asociados en el Sector 1, sogmento suesto 2016, 2019) dedicados al registro y mapeo de los caminos ‘9 segmentos construdos por el Estado Inca, asi como sus remodelaciones y reusos asociados al aparato econémico, Police y simbdlco inca, Dichas guias de registro explican de forma didéctica cémo se construyé y cules son sus compo- rnentes, entre otros aspectos. Sin embargo, esta metodologia de investigacién es una mirada lineal y en muchos casos sincrénica de una construccién, generaimente aplicada alos valles medio y alto, donde predominan las construcciones de piedra, En el caso de los caminos costeros, las seccio- nes reportadas generalmente son alineaciones de piedras ‘bases de muros, pero no se ha profundizado en el registro de.un camino de tapi. ‘Surge asi esta pregunta: {Un camino de tapia como aquellos de la costa peruana debe intervenitse como si fuera una estructura de cuatro paredes? La interrogante se debe a que al registrar un patio o bloque de tapia en un ambiente se busca identificar el piso asociado y el inicio del muro para definir arquitecténicamente el ambiente y luego conocer sus posibles remodelaciones, las activida- des que se desarrollaron en ély finalmente su abandono ‘y Cubrimiento con escombros, En el caso de un camino, la colocacién de un bloque de tapia esta relacionado 'y supeditado estructuralmente a los otros bloques que conformaran el segmento a edificar. Es decir, mientras ‘CET area de estudio abarca desde ol cervo Pro hacia el noreste, para luego seguir la actual avenida Canta Calla hasta el aeropuero Jorge Chavez, en un area aproximada de 3 hectéreas. 530 que un adosamiento en un ambiente induce al arqueé- logo a suponer una separacién de tiempo y uso entre ‘ambos bloques, denominando al primero momento 1 y a la remodelacién momento 2, en la concepcién de los constructores de caminos un adosamiento forma parte de una misma obra, es decir solo un descanso hasta el secado del barro para luego continuar con el adosa~ miento de otro bloque (Figura). Con ello no se pretende considerar a un camino como una obra realizada en un ‘solo momento. Las evidencias en Oquendo revelan cam- bios en determinados niveles de la estructura debido a refacciones estructurales y de uso para afiadir, clausurar o reforzar determinadas secciones del camino. Cro aspecto a tener en cuenta on 6! registro es la dinamica que tuvo durante su funcionamiento y posterior uso con la llegada de los esparoles, debido a que un camino es un lugar de tito continuo y no de estadia, azén porla cual los hallazgos 0 evidencias de actividades se encuentran en lugares especificos como esquinas, bifurcaciones y en los ingresos a los puntos de control. Luego, dichos caminos se rmantuvieron en uso, incluso hasta laactualidad, con grandes ‘modifcaciones. En el caso de Oquendo, algunas secciones fueron modiicadas para transportar agua paralas dreas de cultivo, convirtiendo las bases de los muros en canales de regacio, lavando lteralmente toda evidencia prehispénica, otras secciones fueron reutiizadas para el énsito otras fueron impiadas con maquinaria pesada (Valderrama, 2020). La tecnologia constructiva Desde los primeros registros, la tecnologia constructiva ha sido una de las interrogantes. Agurto Calvo (1984) describié con detalle la posible técnica para construir semejante obra, Esta fue desarrollada y analizada con pruebas de laboratorio para el caso de los Caminos de Pando (Vargas et al, 2015). Con estos precedents y el anaisis efectuado en tas temporadas de campo 2019 y 2020, se revisé nuevamente la informacién disponible sobre el tema y se efectué un andlisis en la seccién mejor conservada (Segmento sureste), lo que nos permitié plan- tear lo siguiente: Un camino formal esté compuesto basicamente por dos muros que lo delimitan y una caizada, Para su construc- cién es necesario una planificacién previa y marcado en ‘el terreno, En este sentido, las evidencias en Oquendo y Chucuitantaindican que primero se nivel elterreno. Luego,, ‘como un caso particular, en la bifurcacién del camino al Palacio de Oquendo y hacia el mar se identicé secciones ‘de muros doble cara de 1.20 a 1.40 metros de ancho, debajo delos grandes bloques de tapia. Esto induce a pensar en un primer camino con muros delgados de 4 metros de ancho interno como maximo, con algunas estructuras menores hacia su lado este, De esta configuracién inical solo se ‘conserva algunas secciones no cubiertas por las remode: laciones posteriores (Clares y Valderrama, 2019). En los otros casos, luego de la nivelacién del terreno se colocé una base compacta, presentando en algunos segmentos un nucleo con piedras pequefias 0 cantos rodados unidos con la argamasa de barro, Sobre esta base se inicié la mega obra que recorre los valles de Chillin y Rimac; para ello se construyé por secciones altermadas una serie de conjuntos de bloques de tapia de forma cénica, Cada conjunto se levanté a partir de tna sucesién escalonada® de forma trapezoidal de blo- ‘ques de tapia, con lo cual se generaron desniveles entre ‘cada bloque para construir los superiores, previo secado del bloque inferior (Figura 4), En la mayoria de casos, cada bloque esta compuesto por capas horizontales de tuna masa de barro con inclusiones de cantos pequefios, Figura 4 Secuencia de bloques de tapia pare forma un conjunt, ¥ Esta técnica permite un amarre y ajuste natural evtenda su desplazamiento. 531 Figura. Vista on detalle de una cafa transversal en ef muro, 532 grava, fragmentos de cerémica y moluscos. Dichos blo- ues presentan a cierta distancia cafias transversales (Figura 5, Figura 6) que indicarian el uso de sujetadores externos (telas), tal como lo reports Bernabé Cobo en el valle del Rimac (1956) y Pedro Espinoza en Maranga (2009). Culminado cada conjunto de bloques de tapia, los espa- cios vacios entre cada conjunto se completaron. En algunos casos se siguié la misma técnica realizada en los conjuntos (bloques escalonados), en otros se cons- truyeron muros de contencién a ambos lados con un niicleo de terrones, cantos rodados 0 piedras canteadas de los certos (Figura). Ademas, se agregaron escaleras auxillares a cierta distancia, En las secciones mejor conservadas se puede observar refacciones en la cima, reforzamientos en determina dos puntos, desmontaje de una seccién de bloques para construir otros, clausura de vanos, entre otros. Estas acciones forman parte del mantenimiento del camino luego de cierto tiempo de funcionamiento o luego de un evento de sismo u otro que afecté la estructura, La funcionalidad y temporalidad Finalmente, el debate més recurrente entre los integran- tes del Proyecto Caminos Oquendo estuvo referido a la funcionalidad y la temporalidad de los caminos, puesto que no se contaba con andlisis de laboratorio, andlisis microscépicos o fechados que puedan ayudar a su defi- nicién y datacién, Con respecto a la funcionalidad, es interesante el aporte de John Hyslop (2014, p. 388), quien indica que los cami- nos deben tener una finalidad mas alld de ser una via de comunicacién. Asimismo, sefiala que un camino 0 tuna red de caminos cumple con los siguientes objetivos: + Adguisicién de productos de determinados lugares, canteras, zonas estratégicas, etc. + Gestién entre los diferentes centros poblados + Movimiento de personas, bienes y animales + Proteccién de la fuerza de trabajo ire 7 Nilo dl muro de contoncién Proponemos incluir dos aspectos mas: El primero planteado por Christian Vitry (2004) y el Proyecto Qhapag flan del Ministerio de Cultura (2016) refe- rido a la asociacién y contextualizacién de los asentamientos cercanos o a los cuales se conecta; un ejemplo claro es el trabajo de Gil Ayala para la parte baja de! Chillén (2008). E1 segundo aspecto se refiere al andlisis estratigrafico o constructivo de un camino, un ejemplo a citar es el estudio de Guido Casaverde (2017) para un tramo del Camino Inca cerca al Pariacaca, donde regis- tra variantes al camino, permitiendo ampliar sus indicadores relacionados a la funcionalidad y tem- poralidad de un segmento del camino distante a un sitio arqueolégico. Con respecto a nuestra érea de investigacién, si partimos de norte a sur, el camino se conecta desde el sitio Cerro Respiro con ocupacién desde el Periodo Intermedio Tardio y Horizonte Tardio, pasando por e| Puente Inca hasta legar a un punto y tomar dos rumbos, hacia el este y hacia el sur. El camino oeste en direccién al mar pasa por el cerro Las Animas, donde gira hacia el sur hasta llegar a un punto de control y bifurcarse en dos variantes: el que va al sureste hacia el Palacio de ‘Oquendo y el que se va en direccién al mar para luego ir en paralelo ala linea de playa y legar a la altura del certo La Regla donde se unié con el otro ramal que salid de Puente Inca. En todo este recorrido descrito es evi- dente que: + El camino conecta asentamientos de! Periodo Intermedio Tardio y con mayor claridad del Horizonte Tardio, tal como se aprecia en la conexién con el vano norte del Palacio de Oquendo. Por ello, el co- mercio y el intercambio de bienes se realizé de forma dinamica y activa. Es decir, fueron caminos que co- nectaron a centros administrativos o residencias de lite como Cerro Respiro. De igual forma el camino cumplié funciones administrativas. Asimismo, al tener un espacio delimitado buscaron la proteccién de las personas, animales y bienes que circularon. + Con especto al andlisis estratigrafico y estructural del ‘camino en Oquendo se puede infer tres diserios o planificaciones arquitecténicas. El primero, atin poco ‘conocido, corresponde a un segmento de un camino conformiado por muros rectos y de baja altura, lo que indicaria un primer intento de delimitar un espacio de transito en la zona de Oquendo, Por su ubicacién es- tratigrafica y los fragmentos de cerémica asociada corresponderia al Periodo Intermedio Tardio. Luego, una segunda planificacién que perteneceria ala gran infraestructura del camino que conecté y demarcé el territorio, construido también durante el Periodo Intermedio Tardio. Finalmente, una tercera planificar cién que debe ser entendida como un aprovechamiento de la arquitectura existonte para refaccionar, corregire implantar el sello inca a esta mega construccién. En al- {gunos tramos se refaccioné casi la mitad de los bloques debido a eventos aparentemente sismicos. Mientras ‘que on otras secciones solo se anexé muros secunda- rios: escaleras, sel 0 pestafias en la cima, ‘Asi también, no se puede pasar por alto la incesante y ‘casi abrumadora recurrencia de la fuente etnohistorica ‘como guia para luego tratar de encajar el dato arqueo- l6gico en ella. Lo mismo ocurre con ell uso de un solo material contextual (cerdmica) para buscar y explicar ‘grupos sociales abordados por la etnohistoria. En nues- tro caso se parti y se sigue aun en ese camino desde un analisis contextual del sitio (camino), donde la cerdmica y 533 la fuente etnohistérica son una referencia para un corpus mayor, Dicho eso, consideramos que la edificacién de ‘esta mega obra debié darse luego de una serie de con- ‘sensos y acuerdos con objetivos en comin entre los grupos locales que tenian una intensa relacién econé- mica, politica y simbélica®, donde debié prevalecer los intereses para disponer de rutas bien definidas en un territorio provisto de canales de irrigacién, suelos férti- les, bancos de arcilla para la elaboracién de vasijas, etc, Por ello consideramos que los caminos en el valle bajo de Chillén corresponden a una expresién estratégica de ‘cooperacién entre varios grupos locales, con un fuerte intercambio de bienes, conocimientos y lazos con los valles vecinos y las zonas del valle medio y alto. Con|a llegada de los incas, sea cual fuera el mecanismo de control aplicado sobre los grupos locales, al parecer los caminos preexistentes fueron incluidos en su orga- nizacién de manera coercitiva, no solamente aquellos. visibles en Chuquitanta, Oquendo y Marquez, sino tam= bién los que conectaron a los asentamientos del valle bajo, de los cuales todavia quedan algunos edificios ilblicos dispersos en los actuales distritos de Comas, Los Olivos, San Martin y el Callao. El trazo de las ave- nidas Pativilca—Las Torres-Central, Naranjal, Alisos, Carlos Izaguirre, Bertelo y Oquendo dan idea de las vias de comunicacién existentes en la época prehispdnica. Un aspecto que también se debe tomar en cuenta es la cercanta al mar del camino que va en paralelo ala linea de playa (Sector 2 del Camino de Oquendo), lo cual hace notar una fuerte inversién en su construccién y en su mantenimiento en una zona tan propensa a su destruccién por su cercania al mar. En términos econé- micos, un camino hasta este punto confirma una fuerte

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