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Introducción

En el presente trabajo nos adentraremos sobre cómo se originaron los enfoques


neoclásicos y estructuralistas, después veremos como la teoría neoclásica de la
administración tiene como objetivo mostrar el eclecticismo y practicidad de la teoría
neoclásica y el énfasis en los objetivos, después encontraremos como pretende dar
a conocer las funciones del administrador que conforman el proceso administrativo.
Además, descubriremos cuales son los principios básicos que define de la
organización, así como también entender el dilema centralización versus
descentralización, el objetivo de la departamentalización y sus tipos y por último
explorar los tipos de organización que existen. Posteriormente en el enfoque
estructuralista vamos a descubrir lo que es la sociedad de organizaciones y exponer
sus tipologías, también encontraremos una idea de lo que son los objetivos y
conflictos organizacionales y para finalizar, ofrecer una apreciación crítica del
estructuralismo en la administración.
Ensayo sobre el enfoque neoclásico y estructuralista

El enfoque neoclásico sólo es una redefinición de la teoría clásica debidamente


actualizada y redimensionada para enfrentar los problemas administrativos vigentes
y al tamaño de las organizaciones de su época, ya que retoma los conceptos
clásicos, pero dándoles una reestructuración más amplia y flexible.

La teoría neoclásica posee un fuerte énfasis en la práctica de la administración


debido al pragmatismo, ya que tiene la finalidad de buscar resultados que sean más
concretos y palpables. Esta teoría hace énfasis en los objetivos y los resultados
debido a que las organizaciones existen y dependen de estos, ya que su
organización depende del tipo de metas que se hayan planeado a alcanzar. Cabe
destacar que, aunque la teoría neoclásica se basa en los principios y conceptos de
la teoría clásica, esta mantiene cierto eclecticismo y busca complementarse con el
contenido de otras teorías administrativas.

La teoría neoclásica define dentro del proceso administrativo las funciones del
administrador como planear, organizar, dirigir y controlar. La planeación tiene como
finalidad establecer objetivos ordenados dependiendo de su relevancia, así como
también los cursos de acción necesarios y los medios para alcanzarlos. Después
esta la organización que se basa en la división del trabajo y la especialización de
los órganos y las personas en determinadas áreas. Posteriormente encontramos a
la dirección que es la encargada de hacer que las cosas funcionen en la
organización, guiando y motivando a las personas para alcanzar los resultados
esperados. Por último, el control es donde se definen, monitorean y comparan los
estándares de desempeños y toman las medidas necesarias para alcanzar los
objetivos.

Esta teoría retoma los principios de la teoría clásica para lograr la eficiencia y los
adapta como principios fundamentales para alcanzar los objetivos de la
organización formal. Estos principios comienzan con la división del trabajo, es decir,
la delegación o proceso de transferir autoridad y responsabilidad de las tareas a
otras personas, pero como consecuencia de esto surge la especialización que
consistía en que las personas estuvieran capacitadas para desempeñar las tareas.
También como consecuencia de la división del trabajo surge la jerarquía que divide
a la organización empresarial en 3 niveles para organizar sus operaciones. Después
en la jerárquica aparece la autoridad que es la encargada de dirigir y controlar a las
organizaciones y que esta a su vez está estrechamente relacionada con la
responsabilidad, ya que dependiendo del grado de autoridad le corresponde el
grado de responsabilidad. Por último, está el principio de descentralización donde
desplaza la autoridad desde la cúpula administrativa hasta los niveles más bajos de
la organización, que es lo contrario al de centralización donde tiene la autoridad
concentrada en la cúpula administrativa.

Posteriormente surge la departamentalización con la intención de obtener


homogeneidad en las tareas de cada órgano y así obtener una mayor eficiencia y
eficacia en la organización. Existen varios tipos de departamentalización: el primero
es por funciones, que consiste en agrupar las tareas de acuerdo con las principales
funciones de la empresa; la segunda es por productos o servicios, que involucra la
diferenciación y el agrupamiento de las actividades de acuerdo con el resultado de
la organización; la tercera es por ubicación geográfica, ya que estudia la ubicación
donde será desempeñado el trabajo; la quinta es por cliente y es donde identifican
el mercado para quien se ejecuta el trabajo; la sexta es por procesos donde se
encargan de obtener el producto a ofrecer; la séptima es por proyectos donde
realizan las actividades planeadas por las empresas.

Debido a que la teoría neoclásica hace énfasis en la estructura organizacional a


establecido los siguientes tipos de organización: organización lineal, funcional y
línea-staff. En la primera existen líneas directas y únicas de autoridad y
responsabilidad entre superior y subordinados. En la segunda aplica el principio
funcional que establece líneas directas de comunicación entre supervisores y
operarios de la industria. La última es la combinación de las 2 anteriores, la lineal y
funcional.
Posteriormente surge la teoría estructuralista que significa un desdoblamiento de la
teoría de la burocracia, y una ligera aproximación a la teoría de las relaciones
humanas. Esta teoría inicia los estudios ambientales, partiendo del concepto de que
las organizaciones son sistemas abiertos en constante interacción con su medio
ambiente. Surge debido a la oposición entre la teoría clásica y la teoría de las
relaciones humanas, ya que pretendía conseguir una posición más amplia y así
integrar los aspectos de ambas teorías.

Las organizaciones son la manifestación de una sociedad altamente especializada


e interdependiente, que se caracteriza por un creciente patrón de vida, aunque cada
una está limitada por recursos escasos siempre buscan tener la mayor eficiencia
para obtener el mejor resultado.

Los estructuralistas dividen a la organización en 2 tipologías: tipología de Etzioni y


tipología de Blau y Scott. La primera define a las organizaciones como unidades
sociales deliberadamente construidas o reconstruidas para alcanzar fines
específicos y la segunda define que las organizaciones existen para proporcionar
beneficios o resultados a la comunidad.

Un objetivo organizacional es una situación deseada que la organización intenta


alcanzar. Por ejemplo, un objetivo de supervivencia es cuando la organización
busca solamente subsistir, mientras que un objetivo de eficiencia busca no solo
subsistir, sino que también consigue buenos estándares de crecimiento y
competitividad.

Un conflicto existe cuando las ideas, sentimientos, actitudes o intereses son


opuestos entre los miembros de una organización. Por ejemplo, la autoridad del
especialista es la que posee el conocimiento y busca aplicarlo para los fines de la
organización, pero sin socavar en la autoridad administrativa y eso llega a causar
tensiones y conflictos.

La teoría estructuralista se enfoca en el hombre organizacional porque puede


desempeñar diferentes puestos en distintas organizaciones dentro de una sociedad
moderna e industrializada, ya que esta teoría estimuló el estudio en organizaciones
no industriales y no lucrativas también. La teoría estructuralista busca encontrar un
equilibrio entre los elementos racionales y no racionales del comportamiento
humano y encontrar la manera más eficiente de motivar a las personas.
Conclusión
En relación con lo expuesto con anterioridad podemos concluir que el enfoque
neoclásico es la actualización de la teoría clásica, pero haciéndola más amplia y
flexible, ya que busca resultados más concretos y palpables, y que busca
complementarse con otras teorías administrativas. Expone que para alcanzar esto
hay que hacer uso de las 4 funciones dentro del proceso administrativo, que son la
planeación, organización, dirección y control, para poder alcanzar los objetivos.
También menciona la división del trabajo de la teoría clásica y va exponiendo varios
principios derivados del mismo para conseguir una mayor eficiencia y eficacia. Otro
factor que es esencial es la departamentalización para conseguir una
homogeneidad en la realización de las tareas.

Adicionalmente podemos concluir que el enfoque estructuralista surge


principalmente de la oposición entre la teoría clásica y la de las relaciones humanas,
ya que busca complementarlas. Este enfoque se centró en el hombre
organizacional, debido a que este puede ser capar de desempeñar diversos puestos
en las organizaciones y aunque las sociedades sean cada vez más
interdependientes y especializadas, esto puede ayudar a tener una visión más
amplia para poder alcanzar los objetivos organizacionales y tratar de evitar los
conflictos.

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