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Universidad de Zaragoza

Facultad de Filosofía y Letras

LOS NFT, ¿EL ARTE DE INVERTIR?

Trabajo para la asignatura Mercado de arte, catalogación y gestión


de colecciones
Práctica bloque I. Mercado del arte

Diego Pérez Vicioso

ZARAGOZA
2022
Los famosos NFT, un tema que sin duda ha marcado y marcará un antes y
después en el mercado del arte. Por ello creo conveniente dedicar un breve ensayo a
este tema, no solo desde el punto de vista económico y comercial, sino que gracias a la
ayuda de un programador de Blockchain, con quien pude tener una entrevista, intentare
dar a conocer un poco mas sobre el criptoarte, la parte más artística dentro de la
inmensa denominación de NFT. Para ello realizaré similitudes con las diferentes
características o elementos propios del mercado del arte que la mayoría del mundo
conoce, y que, aunque lo parezca, no es tan diferente a este criptomercado.
En primer lugar y antes de comenzar con el desarrollo del ensayo debemos de
definir la palabra que tanto choca y llama la atención la primera vez que la escuchamos
“NFT”. Este término son las siglas de No Fungible Token, para definirlo debemos de
tener en cuenta sus cinco características principales: es único, indivisible, a prueba de
fraude, fácil de transferir y ownweship (propiedad de alguien). Los NFT son no fungibles
ya que no se pueden dividir, es decir, no puedes comprar la mitad de un cuadro de
Goya, sino que has de comprar toda la obra, por ello los NFT no son fungibles, ya que
no puedes adquirir parte de la obra ya que no es divisible o fungible.
El concepto de lo que es único en la Blockchain sale ya que esta te permite crear
algo exclusivo, es decir, cuando subimos algo aquí, estamos realizando lo que se
conoce como mint1. Por ello, cuando algo se sube (mintea) pasa a tener tres elementos
principales: la huella digital (hash), algo que es único y que proporciona la Blockchain,
siendo estadísticamente imposible que haya dos hash iguales, de ahí su denominación
de único, los tokens name y los tokens simbol.
Una vez introducido el termino de blockchain o cadena de bloques, debemos de
definirlo como una combinación de tecnologías que permite registros digitales y
descentralizados2. Dos ejemplos serían Bitcoin y Ethereum, pese a que Bitcoin sea el
mas conocido por su gran popularidad, en el ámbito de los NFT y el criptoarte nos
interesa mas el termino de Ethereum. Mientras que BTC es solo una moneda, con una
cantidad máxima de monedas (21 millones de monedas), Ethereum, es una moneda
que te permite construir sobre la moneda, con ello nos referimos a la idea de crear una
Blockchain que permite principalmente dos elementos: NFT (No Fungible Tokens) y FT
(Fungible Tokens). El lenguaje técnico de Ethereum y la Blockchain permite crear lo que
se conoce como Smart contract o contratos inteligentes, donde se registra una sucesión
de transacciones que no se pueden modificar. Por ello, gracias a este lenguaje de
Ethereum permite hablar de propiedad, vender y comprar objetos digitales definidos en
un código otorgando así al comprador su propiedad, y por tanto otorgándole el valor de
único propietario a quien posee el código de dicha obra o NFT.
En el mundo de los NFT debemos por tanto distinguir tres personajes principales,
que conforman y hacen posible la compra y venta de estos objetos digitales. El artista,
quien realiza la obra digital y que a diferencia del mercado de arte que todos conocemos,
suele ser él mismo quien ponga a la venta sus obras en los diferentes Marketplace,
aunque no es siempre así, ya que poco a poco vamos viendo galerías que apuestan por
el criptoarte o artistas digitales como es el caso de la Galería Carmen Terreros Andréu.
El siguiente personaje sería el comprador, ya que como es el obvio y en cualquier
mercado, no solo el artístico, una de las figuras más importantes, además del proveedor
o el artista en el caso del mercado artístico es aquella persona que compra el objeto. Y
por último tendríamos como personaje clave, el programador de blockchain, quien suele

1El proceso de coger un activo digital (una obra de arte, por ejemplo) y subirlo a la Blockchain.
2https://www.revistaanfibia.com/criptoarte-cuanto-vale-arte-digital/ (fecha de consulta: 28-III-
2022)
pasar desapercibido, y que es una figura muy importante, ya que es el encargado de
llevar a cabo el smart contract o contrato inteligente que permite la compra del NFT, y
que por tanto sin este no se podría llevar a cabo la relación entre el artista y comprador,
es quien une y permite la evolución de la compra en el mercado de los NFT y criptoarte.
La figura del programador de blockchain y los Smart contract es tan importante
ya que permite que la obra digital tenga una vida escrita, es decir, todos los movimientos
y propietarios de la obra se van añadiendo a la vida de obra, siendo reflejados en todo
momento y lo mas importante, visibles por todo el mundo que aunque no tenga NFT
pueda observar quien es el propietario actual de la obra, quien es el artista de la obra y
quienes han sido todos los propietarios, el precio de cada venta e incluso fecha; algo
que sin duda es un gran avance para la historia del arte y la conservación del criptoarte.
Con ello y siguiendo con las ventajas del criptoarte debemos de hablar de los
Royalties, en estrecha relación con la característica principal que hemos nombrado
anteriormente, ownership, y que haría referencia a los intereses perpetuos, algo que es
imposible en la vida real, en el mercado artístico físico y que se da gracias una vez más
a estos smart contract, que además de permitir conocer la historia y vida de la obra
digital permite que el artista o creador de las diferentes obras gane un ingreso cada vez
que su obra se venda, generando de forma perpetua un ingreso si esta obra se
encuentra en continuo movimiento de compra y venta. Una ventaja que sin duda
favorece al artista.
En la conocida como comunidad cripto (compra y venta de NFT y criptoarte) se
distinguen tres tipos de compradores: Flipeador es aquella persona que compra y vende
de forma continua y que por tanto mueve una gran cantidad de obra, justificando así un
interés puramente económico por la obra digital y no estético o de coleccionismo.
Holdeador es aquella persona que “aguanta” o mantiene la obra en su posesión para
que adquiera un mayor valor y posteriormente venderla, una evolución un poco más allá
de lo puramente económico, y quizás con un mayor trasfondo estético. Y por último
tenemos al coleccionista, quien compra por gusto estético normalmente, pese a que en
ocasiones lo haga por el prestigio que le otorga tener una obra exclusiva en su
propiedad.
En relación con los tipos de obras debemos de diferenciar aquellas denominadas
como coleccionables, que son series compuestas de un gran numero de obras digitales,
con una temática en común pero diferentes cada una de ellas, y cuya compra suele ir
relacionada con la idea del prestigio o exclusividad. Además, suelen ser obras de una
mayor simpleza técnica, ya que tal y como he expuesto salen en conjunto un gran
numero de objetos digitales en la misma serie. Ejemplo de esto serían los criptopanks,
las Weird Whales o los Bored Apes. El otro tipo de obra serian aquellas mas artísticas,
con un mayor peso estético, siendo reconocidas en su conjunto como criptoarte, y en
cuanto a la técnica, vemos un mayor desarrollo y evolución siendo mas importante que
en los conocidos como coleccionables. Ejemplo de ello sería el artista argentino
conocido como Frenetik Void, del que hablare a posteriori.
Tomando como ejemplo una colección, las Weird Whales, un conjunto de 3.350
ballenas, con elementos diferentes como gorros, pipas de fumar, o diferentes colores de
fondo y piel que hace cada una de ellas únicas, y que fueron creadas por Benjamin
Ahmed, un joven de 12 años durante un verano, permite incorporar al ensayo la gran
pregunta que aborda a cualquier historiador del arte y mas aun con la aparición del
mundo cripto, o los NFT: ¿Qué es arte?, y en este caso, ¿Qué es criptoarte? ¿Dónde
están los limites para reconocer algo como criptoarte o simplemente un objeto digital
coleccionable?
Por ello he querido comparar este objeto de colección NFT que sigue generando
ingresos al joven que creó hace 1 año las conocidas como Weird Whales, solo por la
continua compra y venta por diferentes personas o inversores que indirectamente y de
forma pasiva, al constar de un número tan grande como es 3.350 ejemplares en posible
movimiento permite al creador una gran facturación continua. Algo que, en ocasiones, y
tal y como hemos dicho es una ventaja para el artista, pero surge la duda de si estas
compras son con justificación artística o estética o simplemente son inversiones
económicas de personas que buscan generar ingresos con la compra y venta de estos
objetos digitales. La otra cara de la moneda seria la de un artista, reconocido como tal,
Frenetik Void, quien es conocido en la comunidad del criptoarte argentino como el Dalí
del criptoarte. Con una producción artística totalmente diferente a la del joven de 12
años, y que justifica en cierta forma la compra y venta de sus obras no solo por una
razón puramente económica, sino que también se acompaña por el valor estético y/o
artístico.

Weird Whales, Benjamin Ahmed, 2021 Torture of the jealous, Frenetik Void

Además, antes de centrarnos en el criptoarte, hemos de hablar de un último


punto en relación con los coleccionables y este nuevo mercado artístico, un valor de
suma importancia, que no es exclusivo de este criptomercado; el prestigio, que otorga
tener en posesión una obra digital o física, siendo en numerosas ocasiones el porqué
de una compra. En el mercado artístico que todos conocemos nos referimos a prestigio
cuando decimos que tengo en mi colección un cuadro de Dalí, Picasso o Velázquez,
artistas de gran importancia, que otorgan de exclusividad y prestigio a aquellas personas
que poseen sus obras. Pero en el caso de los NFT y sobre todo en los coleccionables
esta idea de comprar por prestigio o reputación va un paso mas allá, ya que hay
colecciones que dan al comprador ventajas en la vida real, siendo el caso mas conocido
los Bored Apes, una serie de ilustraciones digitales de monos, cada uno de diferente del
otro, y cuya compra permite al cliente introducirse en su comunidad, la Yatch Club,
otorgándole beneficios en la vida real, y por tanto incitando a la comunidad NFT a
comprar estas obras digitales para así obtener estos privilegios y por tanto prestigios.
Por ultimo y para terminar comparando una vez mas el mundo cripto o NFT con
el mercado artístico que ya conocemos, debemos de hablar de las paginas web
especializadas en la compra de criptoarte; una especie de galerías virtuales, donde
cualquier persona puede entrar para ver obra de arte digital e incluso comprar, siendo
transparente en todo momento la vida de la obra tal y como hemos comentado
anteriormente. Los dos sitios web especializados en la parte más artística de los NFT
serían: Superrare y Rarible.
BIBLIOGRAFÍA
LENARDUZZI V., SAMELA G., MONTES R., “Criptoarte, aura y autenticidad de la
(re)producción digital”, XXIII REDCOM Comunicación y derechos en pandemia, Paraná,
28-30 octubre 2021, Facultad de Ciencias de la Educación (UNER), pp. 2-13.
WEBGRAFÍA
https://www.elmundo.es/como/2022/03/10/6229eb5c21efa072618b4578.html (fecha de
consulta: 28-III-2022)
https://www.legaltoday.com/legaltech/novedades-legaltech/el-criptoarte-2021-05-24/
(fecha de consulta: 28-III-2022)
https://observatorioblockchain.com/metaverso/los-nft-de-bored-ape-yacht-club-
senalan-como-sera-el-consumo-en-los-metaversos/ (fecha de consulta: 28-III-2022)
https://rarible.com/how-it-works/getting-started/what-is-an-nft (fecha de consulta: 28-III-
2022)
https://www.revistaanfibia.com/criptoarte-cuanto-vale-arte-digital/ (fecha de consulta:
28-III-2022)
https://superrare.com/frenetikvoid/creations (fecha de consulta: 28-III-2022)

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