Cinnie es de otro lado

Había una vez una niña que vivía en Brasil y se mudó a México pues su papá había
conseguido un buen trabajo ahí, su nombre es Cinnie. La niña entró a una escuela
pensando que podía irle bien como en su anterior escuela, al entrar en su primer
día, muchos la miraban raro tanto que la hacían sentir incómoda, llegó al aula que le
indicaron para su primera clase pero al entrar el ambiente era muy tenso para ella.

Cuando la maestra empezó a dar clases ella no entendía muy bien el lenguaje latino
y todos en la clase se burlaban por que no sabía qué pasaba, pero un compañero
se acercó y trató de ayudarla aún sabiendo que no entendía el lenguaje que ella
habla, su nombre era Jhonatan, encontró una manera de aprender a comunicarse
con Cinnie, empezó a ayudarla y la maestra lo felicitó, unas horas después Cinnie y
Jhonatan salieron a receso, Cinnie no traía almuerzo para la hora de comer y
Jhonatan le convidó de su almuerzo aunque era muy poco, de la nada se acercó
una niña llamada Juliana quien les compartió a ambos de su almuerzo diciéndoles
que era demasiado para que ella sola lo pudiera terminar, platicó con ellos sin
hacerlos sentir incómodos, le dijo a Cinnie que siempre ha querido tener un amigo o
amiga de otro País, Cinnie no entendía lo que decía pero por su sonrisa sincera que
mostraba Juliana le agradó mucho. Cuando Cinnie fue al sanitario Jhonatan le
preguntó a Juliana.

–¿No te sientes incómoda al estar con nosotros, aún sabiendo que hablan mal de
nosotros? – Claro que no, por qué he de sentirme así, me gusta estar con ustedes,
me siento mal por los demás por qué en lugar de observarnos feo, y hablar mal de
nosotros, deberían respetar y ser solidarios y demostrar que todos somos iguales
sin importar la nacionalidad, religión o género, por eso es que no podemos avanzar
y cambiar, nosotros como mexicanos debemos demostrar que no todos somos
malos como se dice, podemos cambiar solo falta tomar la iniciativa.- le respondió
Juliana.