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El oso Jucumari

El oso Jucumari, conocido también como oso andino, es la única especie de osos (de los ocho
que existe en el mundo) que habita en Sudamérica, desde la Cordillera de los Andes, Venezuela
y Argentina, pero está catalogada como “vulnerable” según la Lista Roja de Especies
Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
El hábitat del oso Jucumari, es variado, habita en bosques montañosos, bosques húmedos,
desiertos costeros y páramos.
En Bolivia podemos encontrar a este animalito a lo largo de la Cordillera Oriental, en los
bosques de ceja de montaña, páramos húmedos y bosques montañosos, de La Paz, Beni,
Cochabamba, Santa Cruz, Chuquisaca y Tarija. En parques y áreas protegidas del del Madidi,
Apolobamba, Cotapata, Pilón Lajas, Isidoro Sécure, Carrasco, Amboró, El Palmar, Tariquia y
Aguarague y los parques de Altamachi y Tunari.
Este oso se diferencia de los demás por tener pelaje negro y manchas blancas o amarillentas
alrededor de los ojos es por eso que recibe también el nombre de “oso de anteojos”, además de
que es un oso terrestre también es un trepador lo que le permite alcanzar y alimentarse de
bromelias epifitas, bulbos de orquídeas y construir nidos dónde puede descansar, puede
alimentarse en ocasiones de roedores, aves, insectos, pero su alimento básico son las plantas
fibrosas y duras.
La bióloga Ximena Vélez Liendo, explica que el Oso Jucumari tiene la capacidad de dispersar
semillas a través de sus excretas, esto permite que los bosques se mantengan saludables,
también indica que su presencia beneficia a plantas y distintos animales, al ser usados por otros
animalitos como una especie de paragua.
La presencia del cambio climático hace que los bosques, dónde habitan los osos Jucurari, no
produzcan suficiente alimento, esto provoca la migración de los osos a comunidades cercanas a
los bosques, con áreas de cultivo y ganado, dónde atacan al ganado y por defensa los
comunarios acaban con la vida de estos osos.
Lo mencionado es uno de los peligros a los que se enfrentan los osos Jucurami, otra de las
causas para la extinción de los osos de anteojos, es la disminución y pérdida del hábitat a causa
de la tala y quema de árboles; la caza ilegal, así mismo el aumento de efectos del cambio
climático, que provoca que la cantidad y calidad de los alimentos se reduzca en los bosques,
esto afecta sobre todo a las hembras quienes requieren un hábitat de calidad para criar a sus
crías.
En Bolivia se estima que existen alrededor de 3.000 osos adultos, equivalente al 33% de los
12.000 osos Jucumaris que existen en Sudamérica. Se estima que Bolivia y Perú tienen las
poblaciones más altas de esta especie de osos.
Vélez indicó que, si no se reduce la caza ilegal, disminución de su habitad, así mismo los
efectos del cambio climático, en 20 años podría perderse un tercio de la población y
desaparecer.
Es por estos antecedentes que la Fundación Gaia Pacha, en conjunto con otras instituciones y
empresas, lanza el Programa Jucumari – acción, conservación, para contribuir en la
conservación del hábitat del Oso Jucumari, en las diferentes zonas que habita en nuestro país.
Trayendo nos solo beneficios a esta especie sino también a todo el conjunto del ecosistema con
el que se interrelaciona.

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