A lo largo del bloque tocamos temas delicados, donde reflexionamos la
ve es que el estado fallo a su ciudadanía, siendo que tristemente vivimos en un país “libre y con democracia” se condenó a las personas que intentaron buscar la verdad y el bien común. Es en cierta parte que es fácil culpar al estado o los gobernantes, pero analizando los hechos de los casos, poniendo como ejemplo el genocidio de Colosio, donde el era un gobernante que prometía grandes cosas para su ciudadanía en su próximo gobierno, y se presume que fue el mismo presidente el que estaba incomforme pues cambiaría todo el comfort que de tenía en la manera corrupta de gobernar. Actualmente vemos como el estado sigue buscando maneras de silenciar a la ciudadanía cuando esta se vuelve “incómoda” de escuchar, vivimos muchos movimientos sociales que por más que le exigimos al gobierno, no se tiene respuesta. La violencia genera más violencia, hablando en cualquier aspecto, pero se escuda a la hora de ejercer fuerza hacia las personas que claman justicia. Se transgreden en gran cantidad los derechos humanos, no se les da relevancia y no tenemos idea de hasta cuándo será diferente. Personalmente aún creo que es posible que todos estos actos de odio, violencia e intolerancia como los casos que vimos se pueden disminuir o en el mejor de los casos. Como estudiante de derecho, tengo la fuerte creencia que nuestra generación basándonos en los derechos fundamentales, podemos ser el presente y el futuro para un mejor entorno. Reformando políticas sociales, respetando y sobre todo tolerando, no dejándonos llevar por el sentimiento de egoísmo y poder, si no más bien por el bien comun y el vivir en una sociedad plena, donde verdaderamente rijan los principios de libertad, democracia y justicia.