¿Qué es el dolor?

El dolor puede verse de diferentes formas. Una de ellas, es la sensación que genera
molestia en el cuerpo por causas interiores o exteriores. Por otro lado, es una etapa
inevitable que atraviesa cada persona en diferentes momentos de la vida y suele estar
acompañada por sentimientos de profundo sufrimiento que podrían ser causadas por
pérdidas físicas, materiales, familiares, etc.
Por este motivo, el dolor se experimenta de manera propia y su intensidad no es la misma
en todas las personas. Puede generarse al padecer de un dolor físico, el cual tiene
componentes sensoriales que permiten localizar sobre qué parte del cuerpo exactamente
está el dolor, su intensidad y características de tiempo y duración. Pero esta sensación de
dolor suele acompañarse también por un componente afectivo – emocional en el que se
genera ansiedad, miedo, preocupación, depresión y demás sentimientos de zozobra e
incertidumbre que suelen ser características ineludibles de situaciones difíciles.
El dolor no puede ser definido de una única manera, pues precisamente la percepción y
definición que se tiene sobre esta palabra la da cada persona a partir a las diferentes
situaciones que atraviese en el camino. Además, en la actualidad existen tantas injusticias
sociales que también causan un profundo dolor y sentimientos de importancia frente a la
inequidad que surge así el derecho a sentir y expresar esos sentimientos de aflicción.
Pero, el dolor trae consigo muchas lecciones de aprendizaje. Cuando se trata de un dolor
físico, por ejemplo, nos enseña y reprende sobre la importancia de tener un mayor
cuidado sobre la salud de uno mismo y de los demás. Cuando ocurre el dolor por
diferentes pérdidas se aprende sobre el valor de compañía, de disfrutar los momentos, de
querer y amar sin límites, de vivir enfocados en el presente y de continuar avanzando en
el camino por más difícil que pueda ser. El dolor nos permite fortalecernos y aunque al
experimentarlo suelen haber situaciones negativas de por medio, es importante entender
que es una etapa irremediable y que en algún momento atravesaremos, pero lo más
importante es tener la fortaleza de aceptarla y saber cómo sobreponernos a ella.