Universidad Nacional Autónoma de Honduras

Facultad de ciencias económicas, administrativas y Contables

Departamento de comercio Internacional

DIREC.ESTRATEGICA P.MERC.INTER

Sección:
1100

III Periodo Académico 2022

Licenciado
Marlon Humberto Galindo

Presentado por
Alejandra Lizeth Sevilla Espinal

Cuenta
20201004036
Ciudad Universitaria, Tegucigalpa
 Análisis estratégico de la película de MONEYBALL (El juego de la
Fortuna)

Es una película que usa rebeldes, sobre personas que no parecen ser buenas
en eso, y los coloca en posiciones de liderazgo y respeto que el equipo nunca
antes había tenido. Pero para un economista obsesionado con la estrategia
empresarial, esa no es la esencia de la película. Moneyball tiene otros
componentes que lo hacen real y maravilloso para ser visto como un referente
en las escuelas: uno estadística, dos negociaciones y tres comunicación, estas
son estrategias de gestión. Pensemos en un deporte (puedes sustituir un
deporte por una empresa o una industria) que tiene grandes tradiciones que
mucha gente ama y tiene gustos y disgustos por los jugadores. Hay fans,
espectadores, seguidores, todo está lleno de misterio y pasión (emoción).

De la misma manera, hay equipos ricos y equipos pobres. El sueño del equipo
es fichar a los "mejores", pero también es el equipo que "más gasta". Sin
noticias hasta el momento, a más demanda, mayor precio. Ahora bien, ¿el
equipo con más dinero siempre obtiene el mejor jugador? ¿Cómo defines
"mejor"? ¿Tener más dinero no significa poder comprar más talento y, con ello,
crear el mejor equipo y ganar? Obviamente, la respuesta es no, puedes
comprar talento, pero no puedes ganar. Pero para demostrarlo, solemos utilizar
el siguiente tipo de argumentos: "así es el fútbol", "es cuestión de suerte", "todo
el mundo tiene una mala tarde", pero no basta con lo mejor, hay que actuar
como a Los equipos trabajan bien y canalizan sus talentos.

De hecho, estas son buenas razones por las que el mejor equipo de béisbol,
fútbol o baloncesto o lo que queramos no es necesariamente el mejor pagado.
Hay muchos factores humanos impredecibles y difíciles de explicar que pueden
afectar los resultados de un equipo deportivo (nuevamente, puede poner aquí
la palabra empresa). Una noche no duermes bien, deja que ese portero se
cuele, o tal bateador tampoco da, y con eso basta. Por eso es muy típico en
esta situación escuchar voces que te dicen “esta es la manera de hacer las
cosas aquí” o, mejor aún, la única manera de hacer las cosas. ¿Cuál era la
única forma de hacer las cosas en el béisbol hace décadas? Moneyball relata
esa época, centrándose en el papel de "exploradores". Expertos que han visto
miles de partidos y jugadores saben por intuición y olfato quién es bueno y
quién es malo. ¿Necesitan medir algo? Verás, qué sabes por experiencia, esta
es la reacción típica. Los grandes jugadores tienen cualidades de liderazgo y
se destacan en el campo como pepitas de oro. Todos confían en ellos, los
adoran, además de una buena comprensión de la tecnología y un montón de
otros factores en los que piensan los exploradores. Estos líderes son parte
integral del mercado de transferencias millonarias.

Por otro lado, ¿qué hacemos si no tienes dinero para pagar 11 estrellas por un
equipo de fútbol? Tal es el caso del entrenador interpretado por Brad Pitt, quien
casi se tropieza con un adicto a los libros apasionado por el béisbol y
obsesionado con medir cada detalle de cada jugador. Estudió en una de las
mejores universidades de Estados Unidos y trabajó en un equipo que
recopilaba datos, aunque nadie le prestaba atención. Medida, ¿para qué? Pero
Brad Pitt comenzó a construir algún tipo de relación con él y a documentarlo.
¿Podemos crear un equipo "perfecto" simulándolo en una computadora con el
dinero que tenemos?

Dónde está la gracia? ¿Por qué los datos ayudan tanto o más que los
analistas? Los analistas son personas que tienen predisposición, gusto e
intuición porque la guía única puede fallar, por ejemplo, pagando de más por un
jugador cuya función puede ser replicada por otros jugadores de bajo costo. De
hecho, lo que demuestra el chico con sus estadísticas es que hay jugadores
que nadie quiere por una estética inapropiada (por ejemplo, un tiro "raro"), pero
por otro lado cumplen a la perfección su papel (Muy bien lanzados, incluso
mejor que algunas "estrellas"). Si no tiene el presupuesto, la clave es encontrar
y fichar a estos "renegados" que, por varias razones, no cumplen con los
estándares de exploración, pero en realidad tienen buenas estadísticas, por lo
que pueden cumplir con el objetivo: ganar juegos. .
Otro de los problemas que podemos enfrentar es poder diferenciarse en un
mercado mediante algo que se puede ser copiado con rapidez por los
competidores, como es el uso de una técnica, una máquina o un sistema
logístico. La diferencia dura el tiempo necesario hasta que te pueden copiar. En
el caso del béisbol incluso emergieron empresas de consultoría, programas de
software y expertos que te permitían tener acceso a esas técnicas novedosas
de forma rápida y, cada vez, a menor precio.

Por lo tanto, la lección, es que cuando logras hacer las cosas de primero, esto
te permitirá hacer la diferencia respecto a los demás, pero esas diferencias no
serán eternas. Algunas empresas no aceptan esto, y piensan que por el hecho
de haber creado diferencias en el pasado éstas van a durar toda la vida. Para
crear de forma continua una diferencia se necesita ser muy adaptable, tener
una gran orientación hacia el cambio y una experimentación constante en la
frontera todavía no explorada por otros.

De la misma manera, otra gran lección es que una vez que estas novedades ya
están en el mercado, no puedes dejar de implementarlas o, al menos, sacarles
el mismo provecho que tu competencia. No te hará mejor, pero, al menos, no te
desbancará del mercado.