ser mujer

Muchos de los problemas que tenemos en nuestras relaciones provienen de la falta

de comprensión, en otras palabras, no tenemos idea de por qué los hombres actúan

de la forma en que lo hacen. De hecho, a menudo no saben por qué actúan de la

forma en que lo hacen, por lo que no sorprende que tengamos problemas para

descifrar sus respuestas.

Sin embargo, antes de comenzar a explorar estas diferencias fundamentales, vale la

pena dar un paso atrás y mirarnos en el espejo porque si no aprendemos a aceptar
finalmente quiénes y qué somos, nunca seremos capaces de hacer los cambios
necesarios. convertirse en la mujer que los hombres adoran. El mayor problema que
tenemos ahora mismo es nuestra percepción de nosotros mismos. La liberación de la
mujer se ha llevado a un nivel completamente nuevo y de simplemente significar que
las mujeres deben tener los mismos derechos que los hombres en la sociedad, ha
pasado a significar que las mujeres no deben ser mujeres y deben actuar más como
hombres.

La razón de esto es bastante simple. Los hombres son competitivos por naturaleza,
las mujeres no. Por ello, para triunfar en el ámbito laboral, cada vez más mujeres han
tenido que volverse tan competitivas como los hombres y en muchos casos más
porque parten con un hándicap a ojos de la competencia. Ellas son mujeres. Sin
embargo, desafortunadamente, muchas mujeres han llevado esta competencia a un
nivel completamente nuevo y su impulso por triunfar las ha convencido de que ser
mujer significa ser débil, por lo que deben cerrar sus sentimientos y actuar más como
los hombres con los que trabajan.
Lamentablemente, las mujeres estamos muy equivocadas porque nuestra feminidad no

es de ninguna manera una debilidad, sino una fortaleza, ya que es lo único que nos

permite influir en los hombres de manera mucho más efectiva que cualquier discusión o
competencia. Los hombres están desarmados por la dulzura de una mujer simplemente

porque los hombres fueron diseñados para pelear y las mujeres fueron diseñadas para

cuidar.

Cómo convertirte en la chica que adoran los hombre