Tango Pasión

Margareta Webstergard

Aquí comenzó una etapa dura en mi carrera tanguera. La mayoría de asistentes al grupo de
principiantes eran menores que yo.
“ se quedaba parada revoleando los ojos cuando yo no recordaba las secuencias
“cuatro tangos de la misma orquesta” una tanda
Entre tanda y tanda la cortina
No más de tres tandas con la misma pareja: “antiguamente cuando el tango se bailaba en
los cabarets, las mujeres eran propiedad de la casa debían alternar con los clientes y no
mostrar preferencias. Hoy se sigue la comedia Sonia Abadi El bazar de los abrazos
El hombre propone el tipo de abrazo
Durante el baile no se habla ni se saluda a los amigos fuera de la pista. Uno debe estar
concentrado en la música y en la pareja
Taxi dancers , una pareja de baile contratada

Encontrar consuelo en el abrazo

Sonia Abadi
“Cada Tango le pone imágenes y palabras a los diferentes dolores, cada abrazo les ofrece
alivio y consuelo”
Bailando tango todo está bien

Sonia Abadi
Como un hilo invisible, la envidia enhebra a los bailarines alrededor de la pista. Pecado
capital del que nadie se salva. Los del fondo envidian a los de la primera fila. Los que están
en pareja a los solos y los solos a los que van de a dos. Los jóvenes la experiencia y los
mayores la frescura. Los que trabajan temprano a los que pueden quedarse hasta cualquier
hora, los desocupados a los que tienen trabajo. Los extranjeros a los porteños y los locales
a los que vienen a robar chicas o milongueros

En la milonga cada uno aspira a pasar de envidioso a envidiado. Aunque está los que no
tienen remedio “Como con bronca y junando” espían rencorosos las riqueza del vecino.
Otros terminan por entender que la envidia bien entendida es el primer paso para aprender
y se la bancan