En lo que respecta a los fenómenos cuantitativos, la observación debe
centrarse en si la empresa está en expansión o si por el contrario sus medios patrimoniales están en escasa evolución o en franca contracción (Cardoso, 2001). Al considerar el equilibrio patrimonial en dos tiempos podremos escribir: Momento 0: A0 = P0 + N0 Momento 1: A1 = P1 + N1 Si llamamos al Activo como Inversión (A = I) y al Pasivo mas Patrimonio Neto como Financiación (P + N = F), al obtener en el momento 1 una mayor diferencia entre la inversión y la financiación que la obtenida en el momento 0 (DI>D0), ello es indicativo de que la empresa se halla en expansión. La expansión se produce en forma natural mientras el rendimiento de la inversión sea positivo. La permanencia de esta expansión es explicable según alguna de las siguientes causas: Por la capitalización de los beneficios obtenidos, integrados al capital social, las reservas o las utilidades. Por el aumento del capital social con motivo de nuevos aportes sociales de los socios o propietarios Por el aumento de las obligaciones con proveedores, cuentas corrientes comerciales y otros terceros Por la recepción de donaciones, subsidios y ayudas oficiales Por la contratación de financiaciones onerosas a costos inferiores a la del rendimiento del circulante o corriente. Si por el contrario, la diferencia entre inversión y financiación del momento 1 fuese menor que la anterior (DI<D0) está en contracción. Las causas de la contracción pueden ser las siguientes: Pérdidas del ejercicio pendientes de amortizar Reducción del capital social o distribución de reservas por excesivo neto consolidado y capital improductivo Reducción del capital por pérdidas acumuladas Disminución forzosa del crédito de terceros por pérdida de confianza sobre su manejo Restricciones del crédito financiero por incumplimientos en los plazos contratados
Si se conserva igual en el momento 1 y el anterior, no hay evolución y se trata