Geografía y cultura

Desde la antigüedad el ser humano ha sentido curiosidad por saber Cómo inicio todo,
el universo con sus constelaciones, galaxias, planetas y lo que más le causa interés, la
vida. Para llenar ese vacío hemos recurrido a cualquier definición sin importar las
evidencias empíricas. Cada sociedad le ha dado respuesta de diferentes maneras y
cada grupo social se encuentra dividido geográficamente, y por lo tanto la división
provocará que las civilizaciones sean diferentes tanto desde el punto tecnológico,
ideológico como cultural.
Las culturas mayas y aztecas no se encontraban muy alejadas, sin embargo,
representaron dos culturas totalmente diferentes. Los mayas se establecieron en el
sureste de México, mientras que los Aztecas abarcaron lo que hoy en día es el golfo de
México, llegando al centro de México. Estas dos culturas antiguas, aun encontrándose
relativamente cerca, tenían dos tipos de culturas totalmente diferentes, incluyendo sus
lenguas. Si compramos sus lenguas seria como el alemán y español. Entonces ¿qué
pudo haber pasado con esas civilizaciones que se encontraban a mayor distancia como
es el caso de Australia y lo que hoy día es Perú? ¿Tenían las mismas tradiciones,
ideologías y avances tecnológicos?
Cada uno de estos asentamientos de personas tuvieron grandes avances. Es increíble
que los mayas crearon un calendario, teniendo en cuenta en la etapa en la que se
encontraban. Pero por mas avances que tuvieron los antiguos habitantes del planeta
todos tenían una visión diferente de las leyes que rigen el universo. No les pasaba por
la mente pensar en el origen de la vida.
Cada una de estas civilizaciones les dio respuesta a los fenómenos naturales de
maneras diferente, pero todos si conocía los fenómenos porque los veían cuando
sucedían, pero ¿Por qué le atribuían un dios a cada uno de estos hechos naturales?
Nuestro continente a la hora de ser descubierto contaba con un sinnúmero de dioses.
Cada uno de ellos representaba en su mayoría algún fenómeno o cosas que no podían
ser explicadas en el momento. Por ejemplo, las mayas contaban con el cuculcan, la
serpiente emplumad. Por otro lado, las aztecas o mexicas tenían a Huitzilopochtli, el
dios de la guerra. Este era su deidad principal.
 La realidad que percibimos y la que hemos creado

Platón situaba la realidad en dos mundos. El mundo de lo real y el mundo de lo

aparente. El primer mundo lo identifica como el mundo de las ideas, del conocimiento,
de la razón, mientras que el mundo de lo aparente es el mundo de que lo que
podemos percibir a través de los sentidos. Platón decía que solo podemos acceder al
mundo de las ideas a través del estudio.
Solo adquiriendo conocimiento podíamos ser capaces de entender el mundo de las
ideas. En ese tiempo solo los filósofos eran los que podía entrar a ese mundo por
medio del estudio. Para mejor explicación platón propuso el mito de las cavernas
donde se ponía en escena la diferencia entre ambos mundos. Para poder conocer la
verdad a través de la razón es necesario salir del mundo de lo aparente y entrar al
mundo de las ideas, de la razón a través del estudio.
Cuando una persona conoce los dos mundos se da cuenta de las grandes diferencias
que los dividen. Mientras el que vive solo en el mundo de lo aparente es fácilmente
dominado y usado a la merced de las personas que lo mantiene dócil, el que descubre
el mundo de las ideas, de la razón ve todo con claridad y se escapa del mundo de
engaños.
Ahora bien. Según platón si este que sale del mundo de lo aparente al mundo de las
ideas intenta decirles a los otros que están siendo engañados, y que lo que han estado
viendo no es la realidad, estos lo verán como un loco y es poco probable que le hagan
caso, ya que lo que ellos han tenido como realidad es el mundo de lo aparente, el
mundo de las ideas, de la esencia no existe para ellos.
Para poder entender el mundo de lo aparente hay que conocer el mundo de las ideas.
Esto solo es posible a través del estudio, del conocimiento. El mundo de lo aparente
puede ser representado como las sombras y figuras que veían las personas de la cueva,
las cuales emanaban del exterior, pero manipuladas de una manera de que los que se
encontraban dentro lo veían como real. El mundo de las ideas es la diferencia de estar
dentro de las cuevas viendo sombras y figuras parar y salir al mundo exterior y ver que
lo que veías dentro de la cueva eran solo sombras proyectadas al pasar por figuras que
otros colocaban para que los de dentro las vean.