Nombre: Kevin Steeven Vera Loor

Curso: Introducción a la gestión ambiental

Paralelo: 12
Fecha: 3 de agosto del 2016
Profesor: Ing. Holguín
Prevención de emisiones de co2 considerando el transporte,
combustible y vehículo
La necesidad de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de CO2 hoy en
día ha llevado al sector industrial a desarrollar vehículos o combustibles que de alguna
manera ayuden a reducir este impacto.
Para prevenir las emisiones de Co2, considerando los tres parámetros anteriores será
necesario describir a cada uno para tener una idea, de cuál será la mejor opción
Por transporte, tenemos marino, terrestre y aéreo, de los cuales el avión es el más
contaminante teniendo que por 1km libera 180 g de CO2, seguido del automóvil
convencional con 150 gramos de CO2, luego el tren con 35 gramos de CO2 y luego el
autobús con 30 gramos de CO2, el menos contaminante es el barco
Por combustible tenemos, que la mejor manera de prevenir las emisiones de CO2 es
usar combustibles alternativos, que tengan un bajo porcentaje de combustible fósil,
tales como biocombustibles que contribuyen a reducir el efecto invernadero y pueden
ser biodiesel, bioetanol
A cerca del tipo de vehículo este puede ser eléctrico, hibrido o también el
convencional, ya delimitando a la parte más usada que es la terrestre, ahora se
considera que el más apropiado con el ambiente es el eléctrico, siempre y cuando la
manera en que se obtenga esa electricidad, sea amigable con el entorno, pero este
tiene ciertas limitaciones en cuanto a su eficiencia, por otra parte el hibrido el cual es en
cierta parte favorable y con una eficiencia mayor que el eléctrico; este es el más
recomendado si se quiere un carro eficiente y a la vez amigable con el planeta.
Asi pues podemos decir que si queremos reducir nuestra huella de carbono eta serie
de recomendaciones anteriores se debe seguir, si se quiere transportar a mayor
rapidez, el apropiado es el hibrido, o al menos el eléctrico, aunque la compra de
aquellos vehículos, pueda ser un poco elevada, aunque para efectos prácticos siempre
existe el transporte urbano el cual como se sabe es económico y las emisiones de CO2
son bajas comparadas con la del vehículo convencional. Y si ya se desea transportarse
a distancias más cortas, siempre habrá la bicicleta que no emana CO2, tan solo que no
es tan veloz como los anteriores.