INDICE TEMATICO

ANTECEDENES HISTORICOS CONSIDERACIONES DINAMICAS

Teoría de la seducció n Confusió n de lengua entre los adultos y el niñ o Complejo de Casandra y
pseudología fantá stica.

SENTIDO ETIMOLOGICO CLASIFICACÍON PERFIL PSICOLOGICO DEL ABUSADOR TIPOS

PSICOLOGO

ANTECEDENES HISTORICOS
 En la Antigü edad se consideraba natural tomar a los niñ os como objetos sexuales  En la Roma
Imperial primero se castraba a los pequeñ os varones "en la cuna" y luego se los llevaba a
lupanares para que los hombres abusaran de ellos sodomizá ndolos

En la Edad Media, se creía que los niñ os ignoraban toda noció n de placer y dolor, creencia que
aú n perdura. Segú n Lloyd deMause, la idea de que los niñ os son, desde su inocencia, inmunes a la
corrupció n, es un argumento defensivo utilizado con frecuencia por quienes abusan de ellos para
no reconocer que con sus actos les hacen dañ o.

Mientras que en el Renacimiento comenzó a reprobarse la manipulació n infantil con fines

sexuales, en el siglo XVIII empezó a castigarse a los niñ os que se masturbaban. Los má s severos
castigos consistían en la circuncisió n, la infibulació n y la cliridectomía. Actualmente también esas
prá cticas persisten, disfrazadas de rituales sociales y religiosos o aduciendo razones de higiene.

El niñ o-a es castigado arbitrariamente por el adulto. Con su peligroso imaginario, él invade
violentamente el cuerpo y el alma del niñ o-a, sin reconocerle ni privacidad ni identidad propia y
diferente.

Podemos comprobar có mo las ideas que en otros tiempos se consideraban naturales y no se

cuestionaban, aú n siguen presentes en la mentalidad de los abusadores y de los que, al
minimizar la gravedad de esa terrible invasió n al cuerpo y al alma del niñ o, se transforman en
có mplices. Pero, mientras que los castigos corporales todavía son justificados por muchos padres
y educadores como necesarios para la educació n infantil , siempre que el abusador sexual
violenta al niñ o con su conducta lo hace en secreto, a escondidas y a sabiendas de que se trata de
un acto delictivo.
Ambroise Tardieu, médico forense, escribió en 1860 un Estudio médico-legal de la crueldad y
malos tratos infligidos a los niñ os en donde se refiere a 32 casos de niñ os y niñ as brutalmente
golpeados, la mayoría por sus progenitores y de una niñ a que, ademá s, fue sexualmente abusada
por su padre. Refiriéndose a los padres que abusan de sus hijas, decía en 1878: "Lo que
entristece aú n má s es ver que los lazos de sangre, en lugar de constituir una barrera para esas
tendencias imperdonables, con harta frecuencia só lo sirven para favorecerlas: los padres abusan
de sus hijas, los hermanos de sus hermanas".

Teoría de la seducció n.

CONSIDERACIONES DINAMICAS

Segú n la cual el recuerdo de los abusos sexuales padecidos en la infancia por parte de adultos
provoca neurosis. Los abusos sexuales, afirmaba Freud, eran cometidos a veces por adultos
extrañ os a las criaturas sin el consentimiento de ellas y con una secuela de terror inmediata a la
vivencia. Otras veces, la persona adulta era cuidadora del niñ o. "Niñ era, aya, maestro, y por
desdicha también, un pariente pró ximo".

Expertos en patología de la vida sexual, se mostraron escépticos e incrédulos Krafft-Ebing - el

famoso sexó logo austríaco - , refiriéndose a la teoría de la seducció n, dijo: ‘Suena como un cuento
de hadas científico".  el creador del psicoaná lisis se sintió marginado y muy preocupado por no
recibir nuevos pacientes. En septiembre de 1897, expresa que no puede seguir sustentando la
teoría de la seducció n. "Ya no creo má s en mi neuró tica", escribe, y fundamenta su descreimiento
en la "imposibilidad de acusar al padre de perverso", inclusive al suyo, y en que considera poco
probable que la perversió n contra los niñ os esté tan difundida.

Piensa ahora que el relato de sus pacientes se apoya en un falso recuerdo, producto de sus
fantasías. Poco tiempo después, elabora la teoría del complejo de Edipo, en la cual el seductor
pasa a ser el niñ o. Uno de los padres es objeto de amor y el otro, el rival, objeto del odio infantil
en el conocido y popular triá ngulo edípico. Los celos y el sentimiento de exclusió n dominan la
escena
Es innegable que en Freud se sumaba su propia resistencia, que también queda al descubierto en
la misma teoría de la seducció n, por la cual lo traumá tico no es el abuso sufrido durante la niñ ez
sino su recuerdo durante la adolescencia, idea que minimiza la gravedad del abuso como una
situació n traumá tica. Situació n traumá tica que marca al psiquismo infantil en el mismo
momento en que ocurre

Confusió n de lengua entre los adultos y el niñ o

Ferenczi dice: "Nunca se insistirá bastante sobre la importancia del traumatismo y en particular
del traumatismo sexual como factor pató geno. Incluso los niñ os de familias honorables de
tradició n puritana son víctimas de violencias y violaciones mucho má s a menudo de lo que se
cree. Bien son los padres que buscan un sustituto a sus insatisfacciones de forma patoló gica, o
bien son personas de confianza de la familia (tíos, abuelos), o bien los maestros o el personal
doméstico quienes abusan de la ignorancia y la inocencia de los niñ os".
Má s adelante, Ferenczi afirma que esos adultos con predisposiciones patoló gicas confunden los
juegos y conductas de los niñ os con los deseos de una persona sexualmente adulta, confusió n
que los lleva a abusar sexualmente de las criaturas. El niñ o puede intentar protestar, pero a la
larga es vencido por la fuerza y la autoridad aplastante del adulto. Llevado por el temor y la
indefensió n, la criatura se doblega a la voluntad del agresor y lo introyecta, para poder seguir
sosteniendo con él un vínculo de ternura. A este mecanismo de defensa mental lo llamará
"identificació n con el agresor".

Complejo de Casandra y pseudología fantá stica.

La psicoanalista junguiana Laurie Shapira compara a la histérica con Casandra. "primero
obedecía y después renegaba". Las criaturas abusadas denuncian, de una u otra manera, que los
adultos les asesinan la infancia y que, como ellas no pueden confiar en los encargados de
cuidarlas, el mundo se les derrumba. En los casos má s leves desarrollará n una neurosis o
síntomas psicosomá ticos; en los má s graves una psicosis. Cuando, ya adultas, concurran a
consultar con especialistas en salud mental, algunos les hablará n de fantasías de seducció n o de
"pseudología fantá stica", sufriendo así una nueva victimizacion.
Muchas veces el analista de niñ os ni siquiera reconoce que, detrá s de los síntomas que su
pequeñ o paciente presenta, se esconde el abuso. Y éste persistirá , porque no hay ni oyente ni
interlocutor vá lido que lo detecte. El niñ o siempre denuncia el abuso, aunque no necesariamente
con palabras ya que, a veces, por ser demasiado pequeñ o, todavía ni siquiera sabe pronunciarlas.
Su silencio, su juego, sus síntomas son su manera de hablar. Sabe que los encargados de cuidarlo
no pueden cumplir con esa funció n y, ademá s, suelen asustarlo con amenazas diversas. Otras
veces, denuncia hablando pero, o no se le cree, como a Casandra, o se le considera responsable
del abuso

SENTIDO ETIMOLOGICO
Paidofilia está compuesta por dos raíces griegas: "paido", que significa niñ o y "phileo" que se
traduce como afició n, amor. El término pederasta se origina en el griego "paiderastés",
compuesto a su vez de las raíces "paidó s", niñ o, y "eratés", amante y sirve para definir tanto al
hombre que comete abuso deshonesto con un niñ o como al invertido o sodomita. "Pederastia"
figura también como: "Homosexualidad practicada con los niñ os y, por extensió n,
homosexualidad masculina". Sodomía señ ala una relació n libidinosa entre dos personas,
contraria a la naturaleza, y tiene como sinó nimo la perversió n sexual. También significa coito
anal.

Los diccionarios no hacen má s que reflejar el significado que las palabras tienen en un
determinado idioma y son influidos por los usos, las costumbres y la ideología social. se hace un
paralelismo entre el amor por los niñ os y el abuso sexual, de allí el uso de "paidofilia" y
"pederastia". La segunda trampa consiste en confundir el amor o la relació n sexual entre dos
personas del mismo sexo con el abuso sexual hacia niñ os del mismo o del otro sexo. En otras
palabras, el abusador no ama a los niñ os, sino que, haciendo abuso de su poder, los utiliza
sexualmente. Es indistinto que el ofensor cometa abuso contra una criatura de su mismo sexo o
del otro. Lo que marca su particular subjetividad violenta y delictiva es que es un abusador.
El que comete abuso contra una criatura no lo mueve Eros sino el deseo de poder.

CLASIFICACÍON
El abusador en general no consulta. Algunos especialistas en el tema afirman que no se
rehabilita. Aunque muchas veces no presenta una patología evidente, sin duda la tiene. El DSM IV
describe dos cuadros que pueden adecuarse: trastorno antisocial de la personalidad y paidofilia.
El hecho de considerar que el abusador está enfermo no debe ser utilizado como un argumento
para desculpabilizarlo. En primer lugar, porque él sabe lo que está haciendo. En segundo lugar,
porque cada uno es responsable de sí mismo, aú n de su enfermedad y de sus síntomas. En tercer
lugar porque el abusador es peligroso, en tanto puede repetir el abuso. É l cosifica a su víctima.
No la considera un ser humano. Como la criatura abusada no es para él su semejante, no siente
empatía hacia ella. Sabemos que frecuentemente ellos también fueron víctimas de abuso.

PERFIL PSICOLOGICO DEL ABUSADOR

La mayoría de los agresores sexuales son hombres Las conductas mas frecuentes son caricias,
tocamientos genitales o masturbació n, siendo cada vez mas frecuente la penetració n y la
violació n. Por lo general es conocido de la victima, cuanto mas familiaridad entre el abusador y la
victima mayor la gravedad sexual del delito La edad promedio ronda los 35 añ os otros estudios
consideran que 40 añ os, los abusadores de mayor edad 50 añ os prefieren a los niñ os menores de
10 añ os y los mas jó venes adolescentes de 12 a 15 añ os. Son de todas las clases sociales, los que
tienen mas recursos econó micos acceden a los menores en redes de prostitucíon infantil o
mediante viajes a países donde se practica el turismo sexual.

Suelen estar adaptados socialmente y es infrecuente encontrar otras psicopatologías diferentes a

su desviació n sexual. Cuando existen las má s usuales son los deterioros cerebrales, las
deficiencias intelectuales y el alcoholismo. Muchos tienen otras conductas sexuales; así, está n
casados o tienen algú n tipo de pareja sexual, no siendo raro que se casen con el objetivo de
acceder a los hijos menores de edad. Raramente hieren o dañ an físicamente al niñ o y utilizan en
la mayoría de los casos una actitud seductora. Se encuentra déficit de asertividad y de la
capacidad para expresar a otros las propias emociones y deseos. Se han encontrado evidencias
de ansiedad heterosexual, miedo a la evaluació n negativa e ineptitud en sus interacciones con
mujeres

Los pedó filos presentan los siguientes características de personalidad: introversió n, timidez y
sensibilidad, tratá ndose de personas solitarias, depresivas y con poco sentido del humor. 40 por
100 de los pedó filos heterosexuales reconocen el inicio de sus impulsos sexuales pedó filos a una
edad temprana, alrededor de los 21 añ os 50 por 100 de los pedó filos homosexuales lo reconocen
alrededor de los 16 añ os. En general no tienen antecedentes por otros delitos Generalmente han
sido abusados en la infancia y refieren experiencias sexuales con compañ eros de su
edad ,vivenciadas como merecedoras de castigo, experiencias traumá ticas con mujeres adultas y
suele haber recibido una educació n rígida donde la sexualidad es internalizada como represiva

Los agresores incestuosos por lo general son padres, en segundo lugar tíos y excepcionalmente
madres. Está n sometidos a características familiares como: Relació n marital deteriorada, familia
numerosa,aislamiento social, comunicació n familiar disfuncional,etc. Y Personales:conducta
violenta,autoconcepto disminuido,autoritarismo,etc. Los abusadores sexuales intrafamiliares no
son pedó filos, es decir no tienen preferencia sexual por los niñ os, el padre incestuoso
generalmente pasa mas tiempo con la victima que con los otros hijos, y le da mas afecto, llegando
a prohibir a la victima el tener amigos o novio-a

TIPOS
Inmaduros o Fijados en la Pedó filia:Estado temprano de desarrollo psicosexual,desde la
adolescencia,varones,son inmaduros, pasivos y dependientes; solteros y poca actividad social
con personas de su edad; su estrategia es seductora y gradual. Regresivos:Problemas de
autoconcepto,sentimientos de masculinidad inadecuada,casados con pareja estable, vida normal;
no es pedó filo,abuso determinado por factores situacionales, busca niñ as desconocidas
Agresivos:Desea herir,matar;la motivació n es sexual y agresiva, conecta impulso sexual y
violencia,busca niñ os desconocidos,secuestra,es planeado y ritual para realizar sus fantasías
sá dicas rasgos psicopá ticos. Pseudopedó filos:problemas psicopatoló gicos, no entiende la
naturaleza del acto, caricias y tocamientos.